Después de un año tan retante, por fin llegan las Navidades. Es el momento en que celebramos el compartir y celebrar con nuestros amigos y familiares. Esa fuerza que proviene del amor y resplandece con la Luz del desprendimiento, para dar sin esperar nada a cambio. Celebremos la llegada de aquel Niño Luz que nació en Belén. De esa misma forma, y siguiendo su ejemplo, debemos hacer nacer en nosotros esa bendita Luz con infinitos destellos de nobleza, humildad y amor. Dirigidos por esa infinita fuerza y unidos en ella, podemos crear familias felices y levantar un pueblo con esperanza. Que esta Navidad nos una en amor y, aunque manteniendo el distanciamiento social, podamos unirnos como familia y como pueblo en un solo espíritu y una misma Luz, para juntos brillar. ¡Feliz Navidad!