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FESTIVAL DE LAS VENTAS
LAS VENTAS El Juli, en maestro y Victoriano del Río, notas positivas del Festival
© Alejandro Sánchez
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ALEJANDRO SÁNCHEZ
Nuestra vuelta será grande. ¿Se acuerdan de ese eslogan de Plaza 1? Lo de hoy sí que ha sido una vuelta grande, pero hay que recapacitar. Las ganas de dar toros y que la gente acuda son claras. El lleno dentro del aforo permitido lo demuestra, y que las 6.000 almas, que se comportaron de 10 (la mayoría, luego habrá tiempo para hablar del resto), tienen ganas de volver el domingo que viene. Con el festejo que sea. Lo necesita la tauromaquia, lo necesita el mundo del toro y lo necesita el aficionado en este bello reencuentro que se ha vivido en los tendidos. El festival ha dado de qué hablar. De eso no hay duda. La presentación de los toros, dentro de que es un festival, fue correcta. Otra cosa fue ya la invalidez manifiesta de algunos ejemplares que se lidiaron. La mansedumbre, las fuerzas muy justas y con poca casta. Hasta dos veces se asomó el pañuelo verde, en el que hacía de segundo. Dos veces salieron Juanpedros, y los dos no pasaron del tercio de varas, con las fuerzas muy justas. Del resto, de comportamiento similar, excepto el de Victoriano del Río, que destacó por encima del resto, con casta. Diego Ventura abrió la tarde, en la línea de Ventura, frente a un toro de El Capea
Muy valiente estuvo Manzanares con el encastado toro de Victoriano del Río.
Soberbio El Juli, con un poderío inmenso.
Una imagen que teníamos ganas de ver, los tendidos de la Monumental llenos. distraído. La cuadra del de Puebla del Río puede ser de las mejores, si no la mejor, del escalafón de rejoneadores. Su compromiso con Las Ventas se nota tarde tras tarde. Frente a Montecillo, nos acordaremos de su nombre al ser el primero que se lidia en Las Ventas en año y pico, tuvo bellos pasajes a lomos de caballos preparadísimos, cuidando siempre al toro para que aguantase hasta el final. Dos orejas de ley. En el apartado de toreo a pie comenzó la tarde con el segundo tris, ya que los dos de Juan Pedro Domecq que salieron fueron directamente a toriles, sin pasar por banderillas. Salió Florito y su parada de bueyes a hacer su trabajo, y los mansos siguen como siempre, listos. Le echaron un toro bajito de hechuras, y el de rejones como sobrero. Faena sin transmisión, frente a un toro justo de fuerzas, que la espada atragantó y la labor de Ponce fue silenciada. Julián López ‘El Juli’ y Garcigrande. Garcigrande y ‘El Juli’. Un idilio. Julián tuvo compromiso y firmeza ante su oponente, que le faltó un poco de Picante para llegar a ser un buen toro. La faena rotunda de la tarde. El animal tuvo la clase característica que tiene esta ganadería, pero sin riesgo, no hay emoción. El torero hizo todo, hasta tirar en las últimas tandas del toro. Un clásico estoconazo fuera de la suerte (Julipie, entendámonos) dio paso a dos orejas. José María Manzanares lidió en suerte al mejor toro de la tarde. Un toro con casta y bravura este Jabaleño. Empujó con ganas las dos veces en el caballo, achuchó en banderillas y tuvo clase en la embestida, tanto hasta faltar una pizca para que la faena fuera rotunda. Una buena estocada de Manzanares y un toro bravo aguantando cara a cara a la muerte dieron paso a la petición, que se quedó en una oreja. Miguel Ángel Perera le echó ganas, al igual que el resto, pero el toro de Fuente Ymbro quiso y no pudo, especialmente en las últimas partes de la faena. Una vez puso en suerte el toro en varas y solicitó el cambio. El segundo fue un simple trámite de una suerte cada vez más menospreciada. Comenzó de rodillas en el centro, llenando de emoción a los tendidos. Con el paso de las tandas, el ánimo se vino abajo. Tanto del toro como de la gente. Tras un intento, a la segunda consiguió la estocada. Oreja. Paco Ureña comenzó un buen recibo capotero. El astado de Vegahermosa desde el principio dio muestras de que no tenía condiciones. Faena en la que Ureña tuvo que poner todo frente a un toro a
menos, sin apenas emoción y que dejó algún que otro detalle de calidad. Dejó un pinchazo y estocada casi entera, para después recibir algunas palmas, sin salir al tercio a saludar. Las ganas de Guillermo García quedó patente desde el principio. Inclusive a todos aquellos que abandonaron el tendido antes de tiempo. Con dos largas cambiadas de rodillas dio comienzo el saludo capotero, disposición absoluta del novillero con picadores. El novillo de El Parralejo, parado, tampoco ayudaba. Los arrimones de García se sucedían, con valor él se quedaba. Y en dos ocasiones fue prendido sin mayor importancia. Una oreja y un subidón de ánimo para continuar este duro camino. No fue el regreso esperado en cuanto al ganado, pero sí en cuanto a ganas de toros. Con una salvedaz, y es que los ‘Vivas’ y gritos eran un constante, algo pesado, más que las tres horas y cuarto de función que tuvo este eterno regreso en el que el gran triunfador fue el público que llenó la Monumental dentro del aforo permitido. Ahora bien, veremos a ver cuál es el siguiente festejo y qué nos tienen preparado. Ganas se ha demostrado que hay de que la gente acuda a los tendidos. Y, contra todo pronóstico, llena de gente joven. ¡Bienvenido el regreso de los toros a la Comunidad de Madrid!•
Hasta 6.000 personas llenaron el coso de Las Ventas en un largo festejo que se alargó más allá de las tres horas • El juego del ganado no fue el esperado, destacó el toro de Victoriano del Río, que no puso las cosas fáciles a José María Manzanares
Dos orejas cortó Ventura en el toro del regreso de los festejos a la C. de Madrid.
A la izquierda, imagen de los tendidos con el aforo permitido. Excelente organización por parte de la empresa. Debajo de estas líneas, Paco Ureña toreando al de Vegahermosa.
02 de mayo de 2021. Toros de El Capea, Juan Pedro Domecq, Garcigrande, Victoriano del Río, Fuente Ymbro, Vegahermosa y El