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Navidades para descubrir VENEZUELA. “CÓMO NO QUIERES QUE SUEÑE CON EL SOL DE LOS VENADOS”.....!?
El trabajo de renovación de la carretera que sube desde la zona de San José en la ciudad de Caracas hasta el rincón de Los Venados , ha permitido que cada vez mas personas tengan acceso a la mansión de montaña que perteneció al Marqués del Toro, quien fuera también dueño de la Quinta Anauco en San Bernardino. Ambas estructuras son en la actualidad sendos atractivos turísticos que permiten disfrutar de la arquitectura
Arriba: Los patios de secado de café y cacao de la mansión en Los Venados. Abajo, el cafetín con servicios al visitante.
colonial, Sin embargo, el paseo a Los Venados permite el formidable contacto natural, lo bien organizado del lugar ofrece facilidades para disfrutar de un cafetín donde puede degustar deliciosas Fresas con Crema, de instalaciones para hacer fiestas y parrillas ó simplemente, lo que quizás sea el mayor atractivo, disfrutar del fresco clima y de impactantes vistas sobre la ciudad de Caracas. Si usted es mas arriesgado y tiene un buen vehículo puede llegar hasta el litoral central en una vía en muy buenas condiciones.
A LA COLONIA TOVAR POR LA VICTORIA.
Arriba: En perfecto estado de conservación se encuentra la mansión principal. Abajo: Instalaciones para fiestas y parrillas.
Arriba: Vista de un sector de la Colonia Tovar. Abajo: Vista del mercado y la iglesia principal.
Esta vía de montaña experimenta también un mantenimiento que dicen es el primero en su historia. Para accesarla hay buen señalamiento por el centro de La Victoria, en el Estado Aragua. El ascenso por la cordillera central requiere que su vehículo se encuentre en buen estado ya que las subidas son prominentes y con muchas curvas. Si es una persona nerviosa, le recomendamos la subida por la vía de El junquito pero si por el contrario es arriesgado su espíritu aventurero
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Textos y Fotos: Lic.. Rodolfo E. Martínez R. C.N.P. 4105 - P.N.I 1319 se verá recompensado con las sobrecogedoras visuales que se pierden en el infinito. Una vez llegado a la cima y a La Colonia, su delicioso clima y pintorescos escenarios lo recompesarán. El misterioso Pico Codazzi con mediodías nublados y oscura neblina lo acercarán a ese clima de montaña que bien sabemos disfrutar los venezolanos. La vísita a esta población de orígen alemán es una paseo cercano y muy variado, para los habitantes de la costa central del país quienes podrán experimentar un gran cambio en su estado de ánimo, dejando atrás el calor y disfrutando de este encanto montañés que está tan cercano.
Arriba: Vistas desde la carretera a la Colonia desde la Victoria. Abajo: mediodía en el Pico Codazzi.
A TODA COMODIDAD EN EL WARAIRA REPANO.
El sistema de teleférico en Caracas funciona a la perfección y dá la bienvenida a los visitantes con una exhibición de los distintos tipos de teleféricos que han funcionado en Venezuela, incluyendo las nuevas cabinas que se están instalando en el de Mérida. Una vez en la cima de la montaña se puede disfrutar de variadas ofertas de comida que provienen en su mayoría de la cercana población de Galipán. Este enclave de cultura originaria española ha permanecido
Arriba: El Hotel humboldt, una atracción que está siendo rescatada. Abajo: Flores de Galipán.
con una amplia poroducción de productos vegetales, flores, dulces y artesanía de gran calidad. Es una visita opcional que se puede realizar con jeeps acondicionados para tal fín. La pista de patinaje sobre hielo funciona en su horario habitual y ha sido repotenciada con nuevos equipos que permiten la sana diversión y el esparcimiento. Es este un destino ideal para los habitantes del centro del país quienes podrán también admirar las bellezas de este parque nacional y las vistas en el norte hacia el azul del mar Caribe.
Arriba: La pista de patinaje sobre hielo en la estación del teleférico. Abajo: Vista de El Picacho desde el Hotel Humboldt.
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Notas del Editor. NAVIDADES PARA LA REFLEXIÓN. Un nuevo año ha transcurrido y el tiempo nos ha colocado de vuelta a la celebración navideña. Somos protagonistas de tiempos caracterizados por las mayores dificultades, tanto en el ámbito económico que arrasa en todo el planeta con grandes estructuras financieras; en el ámbito moral, cuando a diario nos enfrentamos con lo que parece ser la pérdida de los valores a los que habíamos sido acostumbrados por nuestros padres y antecesores y que nos han servido como brujula para el alcance de la dirección adecuada hacia el modo de vida que queremos. No podemos obviar el ámbito espiritual, especialmente en medio de estos momentos de dificultad, pareciera que nos
alejamos de esa comunión con el espíritu que ha sido nuestro refugio para lograr el equilibrio y la paz interior. Ante todas estas premisas es importante considerar que el apego hacia nuestra moralidad y espiritualidad son cruciales para poder desarrollar de forma equilibrada y exitosa nuestra producción económica. Es precisamente en época de crisis cuando nos podemos impulsar con mas fuerza hacia los grandes logros. Es en nosotros donde radica la voluntad de avanzar hacia lo que consideramos lo mas importante, que son precisamente estos valores. Es momento de reflexión para iniciar el nuevo año con todo el positivismo y optimismo que siempre nos guió hasta este momento.
INDICE NAVIDADES PARA DISFRUTAR VENEZUELA..................................................................4 y5 - Indice y Notas del Ediitor.....................................6 - Ana Caonna y la Raza Cautiva 2a. Parte...........8 - Crónicas de Puerto Cabello........................10 y 11 - Mentiras de la Historia........................................12 - Luces de la Ciudad - Tips de Salud.....................................................14 - Programación Canal You Tube.......................... 16
- Arte en el Puerto.......................18
Lic. Rodolfo E. Martínez R. C.N.P 4105; P.N.I 1319
NUESTRA PORTADA. Las fotografías de REM, Editores y Sistemas, creadas para nuestra publicación de forma exclusiva, son una invitación a tomar ventaja estas navidades y disfrutar de la dicha de recorrer el hermoso país que tenemos y que está lleno de encantos que esperan por nosotros para que los descubramos!.
Estamos también:
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FIRMA EDITORA. R.M. ADVENTURE TOURS; Director: Lic. Rodolfo E. Martinez R. C.N.P. 4105. FOTOGRAFÍAS: Javier Porras, Carlos García.( Invitado ), Gerardo Araque (invitado). REM, Editores y Sistemas. CORRESPONSAL EN CARACAS: Juan Carlos Incoronato. COLABORADORES: Lic. Nestor Rivera. CNP 3902, FUDENA, Luis Guevara “GUICO”, Prof Nallibir Rivero, Sigfredo Romero, Xiomara Malenche, Antonio Perez.Nelson Vielma. Asdrúbal González. DISEÑO, CONTENIDO, DIAGRAMACION Y DISEÑO, VENTAS PUBLICITARIAS : R.M. Adventure Tours: Tlfs: 0412 5383685 - 0426 8448061. DISTRIBUCIÓN; En Puerto Cabello, Morón y Tucacas: REDIVICA, Valencia: DCP, Caracas: R.M. Dist. REVISTA TRIMESTRAL FUNDADA EN PUERTO CABELLO, VENEZUELA , el 1o de Junio de 1994. Depósito Legal: PP34-0137. LA DIFUSIÓN INTERNACIONAL DE PUERTO CABELLO CINCO ESTRELLAS ES A TRAVÉS DE LA WWW.GUIAPUERTOCABELLO.COM. E_mail: ediciondigital@guiapuertocabello.com. “ Puerto Cabello Cinco Estrellas es una publicación pluralista que no se solidariza con las opiniones de sus entrevistados y/o colaboradores. Funcionamos como medio de expresión y comunicación. PUERTO CABELLO CINCO ESTRELLAS, es una publicación de R.M. ADVENTURE TOURS. Bahía de Patanemo . Estado Carabobo. Telf: 0412 5383685 - 0242 4217145
Anacaona y la raza cautiva (2ª parte) Continuemos con la historia de esta valiente mujer, que ha sido mitificada por
ser una de las principales figuras de la sociedad taina, en el momento en que se dio el célebre encuentro de las razas amerindia y española. La mayoría de los textos históricos resaltan el atractivo físico de la que llego a ser cacica de los Jaragua y de los Maguana, dos de los cinco cacicazgos en los que estaba dividida la isla de Haití, así como también destacan la inteligencia y agilidad mental con la que se manejaba. Por. NELSON VIELMA.
Las sospechas de Nicolás y el recibimiento de Anacaona
Es posible que alguno de los hombres de Roldan que odiaban a Anacaona, le dijera falsamente a Nicolás de Ovando, que los indios Jaragua conspiraban para expulsar a los españoles de sus tierras y Ovando decidió tomar acciones para “domesticar” a este infeliz pueblo, fraguando una de las mayores matanzas que se registraron en la historia de la conquista. Ovando inmediatamente marchó a la hermosa provincia Jaragua, con trescientos infantes armados con espadas, ballestas y arcabuces, más setenta jinetes armados con lanzas, escudos y corazas. El conquistador alegaba que su viaje era para visitar a su amiga la cacica Anacaona y arreglar el pago del tributo. La cacica al recibir la noticia les hizo un gran recibimiento, donde reunió a todos sus caciques subalternos y a sus principales súbditos. Al llegar Ovando con su ejército, Anacaona lo recibió con una numerosa comitiva que entono areitos en honor de los visitantes, mientras muchas jóvenes aparecieron bailando totalmente desnudas, con ramas de palma en la mano, del mismo modo que en la primera visita española. El cronista Pedro Mártir, describió este singular y erótico recibimiento con estas palabras: “…cuando los nuestros vieron salir de los bosques a aquellas jóvenes vírgenes de color moreno claro y agradable, de suave y delicado cutis, de bellísimas proporciones, con el cabello suelto, una redecilla en la cabeza y completamente desnudas, se imaginaron estar ante una aparición de las dríadas o de las hadas y ninfas que celebraban los poetas clásicos”. La cacica Anacaona con su acostumbrada cordialidad, alojó a Ovando en el mejor bohío de la tribu y a los soldados en las bohíos inmediatos, también les dio a sus huéspedes los mejores manjares y a petición de los visitantes se repitieron muchas veces los bailes, juegos y areitos.
La falsedad española
Si Nicolás de Ovando, temía algo de los indios, debió seguir el ejemplo de Cristóbal y Bartolomé Colón, que retuvieron en su poder a los caciques, como garantía de su vida. Pero por desgracia, los instintos inhumanos de Ovando, transformaron sus sospechas en convicción y su mente criminal solo pensó abortar la supuesta conjuración. Ovando fingió corresponder al recibimiento y a los obsequios de Anacaona, organizando un banquete para celebrar su nombramiento de gobernador y con esta excusa invitó a Anacaona y a ochenta caciques. A nuestros aborígenes, que eran nobles por naturaleza, les dijeron que esta celebración era para los españoles demostrar sus habilidades en los juegos y que estos serian ejecutados por sus soldados, uno de ellos sería el de las cañas. Los Jaraguas muy emocionados veían a uno de los soldados de Ovando, que había enseñado a su caballo a corvetear al compás de un violín.
La celebración de la maldad
La celebración se realizo una tarde de domingo en la plaza, frente al bohío que ocupaba Ovando, quien le había ordenado a sus hombres que cuando asistiesen a los juegos, no llevasen picas despuntadas, ni cañas, sino que fuesen bien armados. Una gran cantidad de tainos esperaban impacientes en la plaza, atraídos por el espectáculo, mientras el despiadado Ovando disimulaba sus intenciones. Después de comer, Ovando se puso a jugar herrón con sus principales capitanes, mientras los nobles e ingenuos caciques, impacientes por ver la destreza de los españoles en los juegos de la nación taina, le rogaban que diera inicio al tan esperado espectáculo ritual. La presencia de la caballería, siempre era algo muy impresionante para nuestros aborígenes en la época de conquista y allí estaban setenta jinetes, con sus corazas de metal y sus extrañas y mortíferas armas. En medio de la conmoción emocional que en ese momento vivían los tainos, Ovando ordeno suspender los juegos y se colocó en un sitio donde podía ver el movimiento de sus soldados y cuando lo creyó oportuno, hizo la señal convenida entre ellos. En el acto se escucho el agudo sonido de la trompeta y los capitanes Diego Velázquez y Rodrigo Mejiatrillo, ordenaron a sus tropas rodear el caney donde estaban Anacaona y los demás caciques.
La falsas Confesiones
Los soldados españoles, penetraron al bohío y los hicieron prisioneros a todos. Sin escuchar las suplicas de los sorprendidos caciques, fueron atando a los desdichados en las vigas del techo y se llevaron a la hermosa Anacaona, mientras le aplicaban crueles torturas a los caciques tainos, logrando por este bárbaro martirio, que el dolor les arrancara a algunos la falsa confesión, de haber entrado con su reina en la imaginada conspiración, ya que los tainos nunca pensaron hacer mal a los conquistadores.
La gran masacre de los tainos
Cuando los españoles creyeron haber conseguido bastantes confesiones, sin entrar en nuevas investigaciones, incendiaron el bohío con todos los caciques en su interior, quemándolos vivos en medio de desgarradores lamentos. Mientras esto ocurría con el cacicazgo, a la señal de sus capitanes los jinetes acometieron con lanzas y espadas a la indefensa muchedumbre, estaban realizando una de las más horribles carnicerías de la bárbara historia de la conquista. Los sanguinarios españoles no respetaron sexo ni edad. Si alguno de aquellos hombres, movido por la misericordia intentaba salvar a algún niño estrechándolo entre sus brazos, otro de sus compañeros se lo arrebataba y lo hacía pedazos. En ese tiempo residía en la isla Fray Bartolomé de las Casas y describió con detalles esa sangrienta tragedia y no exagero, porque él estuvo relacionado con los actores de esta matanza y también porque su relato concuerda con muchos otros, incluyendo el de Nicolás de Ovando, que visitó algunos años después esta comarca y repitió varias de las circunstancias de este crimen, tales como haber jugado al herrón minutos antes de la catástrofe y el haber quemado a mas de cuarenta caciques.
Resultado de la masacre
Diego Méndez, que vivía en Jaragua y que probablemente fuera testigo presencial de la carnicería, consigno en su testamento que ochenta y cuatro caciques murieron quemados o ahorcados y Las Casas fijo en ochenta el número de los que entraron con Anacaona en la casa que incendiaron. Las víctimas causadas en la multitud por el ataque de la caballería fueron muchísimas, entre los sobrevivientes de este atropello se encontraron la pequeña princesa Guarocuya, quién posteriormente fue entregada a Fray Bartolomé de las Casas, para que velara por ella. Higuemota, la hija de Anacaona, Mencia la nieta de Anacaona y el gran guapotori Hatuey, quién posteriormente escapó a Cuba. Una vez en Cuba Hatuey, organizó la resistencia, pero fue capturado en batalla, torturado y posteriormente asesinado. Varios indios que pudieron huir en sus canoas se refugiaron en la isla de Guanabo, a unas ocho leguas de distancia, pero fueron perseguidos, aprisionados y reducidos a la esclavitud. Mientras que la hermosa Anacaona cargada de cadenas, fue llevada a Santo Domingo.
Destrucción de una raza cautiva
Nicolás de Ovando, no contento con la aniquilación, se percató que faltaba Anacaona por ser asesinada y sometiéndola a un proceso, en el que no hubo más pruebas que las declaraciones prestadas en el tormento por sus súbditos, ni otros testigos más que los españoles, la condenó a muerte y fue ahorcada a la vista de todo su pueblo a quien tanto había amado y protegido. Así pagaron los españoles la deuda de gratitud que tenían con una princesa de la que solo habían recibido favores y que les había perdonado la muerte de su esposo, que no quiso tomar venganza durante muchos años, aun pudiendo hacerlo y donde numerosos europeos podían vivir tranquilos en su cacicazgo. Los españoles continuaron la devastación, con el pretexto de acallar la tuberculosis, por espacio de seis meses. Al cacique Guaora, sobrino de Anacaona, lo cazaron como una fiera en las montañas donde buscó refugio, para llevarlo a la horca. Era una constante la matanza de los habitantes de la isla. Buscaban a los aborígenes en los lugares más ocultos y retirados en oscuras grutas o en lo más erizados de las montañas y allí los degollaban, diciendo que se habían reunido y armado para provocar la rebelión. Los que sobrevivieron quedaron en la mayor miseria y cuando la sumisión se convirtió en esclavitud, se declaró restablecido al orden. Nicolás de Ovando, fundó una ciudad a la que llamó “Santa María de la Verdadera Paz”.
CRONICAS PUERTOCABELLANAS
LA LEYENDA MENTIROSA
Como sucedió con el nombre
de Patanemo, sucedió con el nombre de Puerto Cabello. Una leyenda le atribuye el nombre a la quietud de sus aguas, ya que supuestamente un barco podía atarse con un cabello. Esta leyenda parece tener su origen en un libro escrito por el valenciano José Luís Cisneros, que fue publicado en España en 1764, donde expresa textualmente lo siguiente: “Es tan hermoso este puerto que su denominación manifiesta su quietud y por antonomasia se dice Puerto de Cabello, pues con un pelo se puede atar el más grande barco”. A pesar de que veinticinco años antes, en 1739, el francés Anselme Michel De Gisors, quien vivió en este puerto durante siete meses, había escrito que su nombre se le debía: “… a un español llamado Cabello, quien fue el primero en establecerse en esta plaza en la época de la conquista”. La controversia llego a tal extremo, que se vio involucrado
en esta diatriba el sabio alemán Alejandro de Humboldt, cuando en Febrero de 1800, escribe: “Discuten en Puerto Cabello si el nombre de este puerto se debe a la tranquilidad de sus aguas, que no removerían un cabello, o bien, como es más probable, si ese nombre se deriva de Antonio Cabello, uno de los pescadores con quienes los contrabandistas de Curazao, habían ajustado íntimos compromisos en la época en que se iba formando el primer villorrio en aquella plaza media desierta”. Pero la falsa leyenda le ganaría a la realidad ante la opinión de los puertocabéllanos, cuando en 1881, la francesa Jenny de Tallenay, escribió: “El nombre de Puerto Cabello se resiente un poco de la exageración castellana. Le ha sido dado, según se dice, porque su puerto es tan tranquilo y seguro, que bastaría un cabello para amarrar un barco en cualquier estación”. Así a pesar de los esfuerzos por difundir la verdad, se le quito ante la opinión pública el aporte del nombre de Alonso Cabello para la ciudad.
POR. NELSON VIELMA. LOS LECHEROS C omenzando el siglo XX y hasta que comenzó la industria láctea, en Puerto Cabelló hubo lecheros ambulantes, que muy cordiales llevaban la leche desde los corrales de Goaigoaza, Borburata y La Salina, hasta las propias casas de los puertocabellanos. Los cántaros repletos de leche, eran transportados en carros de mulas con rústicas enjalmas. Los vecinos cancelaban cada semana, quincena o mes, de acuerdo con sus posibilidades, siempre con reclamos de los vecinos por la baja densidad de la leche, y reclamos de los lecheros por la desaparición de los recipientes, en épocas de navidad y misas de aguinaldos o serenateros. Estos lecheros acostumbraban
complementar la cantidad de leche con agua de los ríos cercanos, cuando se les pasaba la mano y la densidad bajaba a límites intolerables, agregaban maizena o polvo de arroz para mantener el límite exigido por Sanidad, que los controlaba a través de funcionarios equipados con lactodensímetros. A los infractores los citaban y sancionaban. Circularon muchos rumores de romances entre lecheros y solteronas que los esperaban en las madrugadas. Las habladurías achacaban a muchos de ser hijos del lechero, aludiendo que su madre había tenido amores con Hinojosa, Romero, el catire Alberto, Santanita, el Gavilán o el Isleño (nombres de los lecheros porteños).
EL CURA MELITON
En la calle Valencia, vivió un solitario sacerdote que había perdido la razón; el pobre hombre, abandonado, sin familiares, ni amigos, sólo contaba con su refugio, aislado de la sociedad, con la permanente compañía de un gato y un perro sarnoso que en las noches pregonaba su hambre, ladrándole a las sombras. El infeliz orate era conocido como el Cura Melitón, de nacionalidad española, supuestamente venido a nuestras tierras formando parte de grupos de religiosos enviados por España para reforzar las Iglesias Católicas de América, parece que se enfermo en la travesía y fue abandonado a su suerte en nuestros muelles. Personas piadosas le brindaron asilo en aquel lugar de paredes mohosas, donde hizo un círculo de piedras para colocar un antiguo crucifijo. En las noches, la débil luz de velas iluminaba al Cristo, mientras el padre Melitón rezaba en perfecto latín, los vecinos se asomaban por las hendiduras de la destartalada vivienda, autenticando la condición religiosa del viejo loco de la
calle Valencia. La duda surgía cuando aquel hombre, hacia algunas prácticas de raros exorcismos, acompañados de diabólicas gesticulaciones con impresionantes ademanes, finalizadas al agotarse totalmente su esquelético cuerpo, quedando extenuado sobre el sucio piso, donde las partículas de alimentos se confundían con ratones, cucarachas y otras alimañas. Algunas personas asociaban a este personaje con el diablo y otros espíritus malignos, sobre todo, cuando el gato maullaba y el perro ladraba al filo de la media noche. Ignoraban que el pobre hombre se alimentaba junto con los animales, de las sobras que dos caritativas ancianas les suministraban diariamente, creyendo muchos vecinos que la subsistencia del presunto sacerdote, se debía a pactos secretos con el diablo. Al sentirse el ladrido lastimero del perro y el aullido agorero del gato, las beatas exclamaban mirando al cielo: “Ya Melitón está invocando al diablo, Dios Sacramentado” y sacaban sus rosarios para ahuyentar a Satanás.
NELSON VIELMA es un joven artista porteño que ha entregado su vida a desarrollar la pasión por el arte. Sorprende Nelson, por la intensidad que imprime al escudriñar la historia, de
LA PRIMERA BORBURATA
El 24 de Febrero de 1548, el Capitán Juan de Villegas, luego
de llegar a un acuerdo con el Cacique Patanemo, funda una población entre áridos cardonales y resecas quebradas, a la que colocara un nombre de origen caribe; Nuestra Señora de la Concepción de Borburata. Llegaba Villegas a través de la serranía, luego de tomar posesión del lago de Tacarigua, hoy llamado de Valencia. Este poblado fue fundado cerca de la desembocadura del rió Gayángos, a dos kilómetros de su puerto ubicado en playa Quizandal.
LOS PREDIOS DE PATANEMO Los puertocabéllanos, son muy dados a dar explicaciones a lo que desconocen, con una autoridad tan convincente, que transcendiendo el tiempo termina haciéndose realidad para muchos. Este es el caso del origen del nombre de Patanemo, atribuido a una supuesta frase de Bolívar: “Paz tenemos”. Cuando en los tiempos en que estuvo aquí nuestro Libertador, nunca tuvo paz ni sosiego. Afortunadamente gracias a una
fidedigna documentación y al espíritu escrutador del Dr. Asdrúbal González, quedo suficientemente comprobada la existencia del cacique Patanemo, quien enseñoreo estas costas, desde Yapascua y todo el sector que abarca el Golfo Triste, hasta las montañas donde encontramos el pico Hilaria, donde comenzaban los territorios de los Caciques Don Diego y Naguanagua. Con esta leyenda mentirosa, estábamos desapareciendo al ultimo cacique kariña que enseñoreo nuestras tierras
su ciudad y también de su país, plasmándola en interesantes textos. Es Vielma en la actualidad, uno de los más prolíficos escritores locales cuyo trabajo nos honra contribuir a perpetuar. Los indígenas pasaron a ser regidos por los nuevos pobladores y Patanemo se traslado con algunos súbditos hacia la zona de Vigirima, donde su nombre también bautizara un hato de Alonso Díaz Moreno. Sin embargo, Borburata estaba predestinada a desaparecer en poco tiempo. Las frecuentes incursiones de piratas y corsarios, obligaban a sus habitantes desde 1555, a abandonarla e instalarse en la vecina Valencia. Por lo tanto, a excepción del nombre, despues de mas de 180 años de distancia entre una y otra, no hay ninguna relación con la Borburata actual
MENTIRAS DE LA HISTORIA. Por: Asdrúbal González. ( Cronista de Puerto Cabello )
GUAIGUAZA NO ES GOAIGOAZA. También las palabras pueden ser objeto de mentiras históricas.
Sucedió en el tiempo que desde la Amazonía, en el corazón del Continente, pueblos de raza Caribe se desplazaron en oleadas sucesivas hacia la zona que hoy ocupa nuestra Venezuela y el mar que la circunda. Grandes navegantes, a través de ríos continentales salieron a la mar que hoy nominan, poblando islas hasta más allá de las grandes Antillas. Las huellas de sus pasos quedaron en las piedras grabadas y en un radical “UA” de palabras usadas para nominar lugares, frutos, árboles, personalidades. No es cuestión de un decir: dos sabios continentales, el venezolano Lisandro Alvarado y el cubano Antonio Núñez Jiménez ( quien nos honrara con su amistad ) estudiaron el “UA” como diferencial de los pueblos Caribe. El primero de los nombrados convivió con el resto de tribus caribeñas de la región oriental del país; y el segundo navegó en canoa desde el Perú por el Amazonas y el Orinoco, hasta salir al Atlántico y navegar después hasta el archipiélago donde Cristobal Colón concluyera su primer viaje en el mes de Octubre del año mil cuatrocientos noventa y dos. Quedó así determinada la presencia Caribe en muchas manifestaciones venezolanas. Digamos por ejemplo un lugar: Guacara; un fruto: aguacate; un árbol: araguaney; un personaje: el cacique Naguanagua. Debe regresarse el topónimo Guaiguaza a su esencia de verdad. El momento actual es propicio; hay un interés manifiesto por reivindicar las etnias aborígenes, conservar sus culturas, sus lenguas, sus costumbres. Por primera vez en la historia oficial están representadas en el Parlamento. Es tiempo de rescatar y conservar lo que quedó del etnocidio. En la región porteña tres topónimos recuerdan lo caribeño: BORBURUATA, que con el tiempo perdió la “U”; PITIGUAO, en la bajada del Portachuelo al valle de San Esteban; y este que ahora nos ocupa, desde el Siglo XVI nombre de una zona y un poblado. GUAIGUAZA y no Goaigoaza. Recuperar para el nombre radical “UA”, y sentirnos orgullosos de haber sido caribes.
TOCAR TAMBOR NO ESTABA PERMITIDO. A veces las mentiras se fundamentan sobre creencias, especialmente si se relacionan con el pasado. La vida de los esclavos negros se ha querido representar como una situación idílica, donde la obligación de trabajar era lo diferente. Ha contribuido en mucho la cinematografía, que presenta las fiestas de esclavos como algo cotidiano, donde se hacían vibrar los cuerpos interminablemente. Para la mejor comprensión del tema tratado, podemos preguntarnos: ¿qué era un esclavo y qué significado tenía en la estructura productiva de las haciendas interioranas? Y decimos; un medio y a la vez, instrumento de producción. No era persona sino cosa, carente de derechos y sujetos a deberes. En el régimen de producción esclavista tenía el significado y valor de una simple propiedad, comparable o vendible como cualquier otro instrumento; un arado, una bestia de carga o de silla. El cúmulo de prohibiciones que hoy pudieran parecer absurdas, eran sin embargo comunes en la estructura de la sociedad colonial. Las Leyes de Indias prohibían a los esclavos poseer bienes de fortuna; disposiciones menores no les aceptaban tener “ espada, ni puñal, ni daga”. A los agricultores solo se les permitía el uso de un “cuchillo de un palmo sin punta”, y si era peón vaquero, una pequeña lanza para dejarretar ganado. En el funcionamiento obreríl de los trapiches, existía la prohibición de mezclar indios con negros. Solo podían casarse entre ellos mismos, y los hijos nacían esclavos. Se les vetaba montar a caballo. Incluidos junto a los indios, mulatos, negros libres y zambos, entre las “castas inferiores”, les era vedado andar de noche por las calles. No podían pasar de una hacienda a otra, y mucho menos pernoctar fuera de su hábitat. Se les impuso en santo blanco (San Juan) y se les prohibía tocar tambor. Apreciaban los amos del tam-tam de los cueros como una música ritual en la adoración de deidades africanas. Se pensaba que podía usarse también como un correo sonoro ( a semejanza de los de la tribu Bandar, en la comiquita de El Fantasma), para comunicar las rebeldías. Era el tambor un elemento subversivo, demasiado peligroso. Y así quedó por mucho tiempo. En
algún periódico del año 1831 gobernaba el general José Antonio Páez), se señalaba como vagos a los tocadores de tambor, y en consecuencia, se les perseguía. Hasta en el año 1945 (gobernaba el general Isaías Medina Angarita), para realizar una fiesta de tambor, en el barrio Rancho Chico de Puerto Cabello, debía solicitarse licencia o autorización o la primera autoridad civil. El mundo del tambor durante el período colonial hispano, tuvo su ámbito entre los esclavos fugados o cimarrones. Pero en los cumbes o palenques o cimarroneras debía trabajarse duro para sobrevivir; y permanecer siempre alertas para defender la vida ante el ataque armado de los esclavistas; situaciones éstas poco propicias para tocar tambor. Las mentiras y verdades deben colocarse cada una en sus lugares, para así contribuir a conocer mejor el pasado.
BOLIVAR NO MALDIJO LA URBE.
Simón Bolívar estuvo en Puerto Cabello en dos oportunidades: la primera
de ellas, entre el 4 de Mayo y el 5 de Julio de 1812, cuando se desempeñó Comandante Político y Militar de la plaza. Ostentaba entonces el grado de Coronel, y tenía veintiocho años cumplidos. La principal plaza fuerte de la República en armas se perdió entre sus manos. El alzamiento de las guarniciones del castillo San Felipe y de la Vigía Baja en el mediodía del 30 de Junio, lo llevaron al abandono de la ciudad cinco días después. Combatió con porfía el joven Coronel. Puerto Cabello se grabará entonces en su memoria con un sello de fuego, La Relación, que remite a su jefe, el Generalísimo Francisco de Miranda algunos días después, marca el ritmo de los acontecimientos con una precisión desoladora; el 2 de julio habían desaparecido todos los habitantes de la ciudad; el día 4 solo quedaban para la defensa ciento cuarenta y un efectivos; el día 5 de Julio; ¡cuarenta soldados! Vendrán después años de ausencia pero no de olvido, de este ámbito de fuego donde sufrió su primera derrota militar. Operará en su ánimo, en su conciencia, lo que hemos dado en denominar “Argumento Puerto Cabello”. Ante el avance del caudillo realista José Tomas Boves (Febrero de 1814) sobre Caracas, ordena el ajusticiamiento de más de mil prisioneros españoles de las bóvedas de La Guaira. ¿La justificación del más horrendo asesinato colectivo de la Guerra a Muerte?, la pérdida de Puerto Cabello, por no haber fusilado oportunamente los prisioneros que luego tomarían las fortalezas por la traición del teniente Francisco Fernández Vinoni. Así lo diría al mundo en una Manifiesto bilingüe publicado en 24 de Febrero de 1814. Así lo repetiría muchas veces; ¿Qué debía yo hacer sin guarnición en La Guaira y con cerca de 1000 españoles en las bóvedas y castillos? ¿Esperaría yo la misma suerte infausta del Castillo de Puerto Cabello, que destruyó a mi patria y me quito el honor? A Puerto Cabello regresaría por última vez entre el 25 de Diciembre de 1826 y el día 4 del Enero siguiente. En circunstancias siempre difíciles, firmaría aquí el decreto que amnistiaba a José Antonio Páez y sus cosiateros. Su proclama del 3 de Enero refleja angustia, indica decepciones. La lenidad era el comienzo del fin de Colombia. Puerto Cabello regresaba su sentir con signo lacerante. (Quien esto escribe ha leído varias veces las más de cuatro mil cartas, decretos y proclamas, y otros escritos del Libertador. En ningún lugar se encuentra una frase despectiva contra Puerto Cabello. Pensamos, por el contrario, que la ciudad que signara su vida, debió ser recordada con respeto. Tampoco nunca la alabó, como si hiciera muchas veces con su Caracas natal). Concluimos esta crónica con lo escrito por Simón Bolívar a José Antonio Páez el 23 de Diciembre de 1826 frases no exentas de admiración: “Puerto Cabello es un gran monumento de su gloria. ¡Ojalá que allí se alce tanto, que pase la mía!
Las Luces de la Ciudad.
+ De Salud y vives… A TODO TERRENO. Por José Garrido
Sin STRESS
Está Demostrado que el stress aumenta la catecolaminas (grupo de sustancias que incluyen a la adrenalina, la Noradrenalina y la dopamina), lo que contribuye al deterioro cardiovascular y a la posibilidad de infartos porque eleva: • La frecuencia cardiaca • La presión sanguínea • La activación y agregación paquetería • El consumo de oxigeno del corazón Paralelamente las personas sometidas a exceso de stress suelen aumentar el consumo de alcohol y de tabaco sustancias tóxicas que a su vez inciden en la salud cardiovascular. De allí la importancia de combatir el stress con hábitos saludables, como ejercitarse regularmente incorporar a las rutinas diarias actividades placenteras, aprender a relajarse, afrontar con tranquilidad las dificultades laborales, económicas y familiares, evitar el consumo de tabaco y excesivo alcohol, entre otros.
A B C DE LA SALUD CARDIOVASCULAR La alegría de la navidad se pone de manifiesto con la intensidad y el cariño que podamos imprimir a las decoraciones que alegran plazas, parques y por supuesto, nuestros hogares.
En los últimos años, Puerto Cabello se ha destacado por sus bellas ilimunaciones navideñas
que la han promovido como un importante atractivo turístico en la región.
A: ACTIVIDAD FISICA como caminar, bailar, montar bicicleta o trotar 5 veces a la semana al menos media hora cada dia esto fortalece el corazón y baja la frecuencia cardiaca. B: BUENA ALIMENTACION tener una dieta balanceada rica en frutas, verduras y vegetales, debe ser baja en sal, en grasas saturadas, azúcar refinadas la que hay en las golosinas, refrescos tortas etc. C: CONTROL PERIODICO debe medirse la presión arterial dos veces al año ( cuando se mantiene dentro de los valores normales ) y la glucosa y el perfil lipidico siempre que este igualmente en los valores normales . D DEPRESIÓN: es un claro factor de riesgo cardiaco, la tristeza la melancolía cuando son serias afectan al sistema inmune y pueden desembocar problemas cardiovasculares P PRESIÓN ARTERIAL: medirla una vez al año y vigilar que no sobrepase de 140 milímetros (la Sistólica) y 85 la diastólica O OBESIDAD ABDOMINAL: el perímetro de la cintura es el mejor baremo para determinar el riesgo cardiovascular. No debe ser mayor de 83 centímetros las mujeres y 105 en los hombres. Para cualquier comentario escribir al siguiente correo atodoterreno2010@ gmail.com
PRESENTAMOS EN NUESTRO CANAL!
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ARTE EN EL PUERTO
PRODUCCIONES ORIGINALES.
COMEDIA
EVENTOS.
MUSICALES.
DOCUMENTALES
Arte en el Puerto.
En Puerto Cabello.
Ana Lucía. PRESENTÓ SU
EL ARTE INMORTAL DE José Gregorio Mijares. “ EL NIÑO BONITO DE PATANEMO” “ PLAYA CARIBEÑA” (arriba) y “FIESTA EN LOS CANEYES”, (abajo) son los títulos de los trabajos que JOSÉ GREGORIO MIJARES, obsequiara a nuestra sede ubicada en su pueblo natal
TALENTO MUSICAL.
con el fín de promocionarlas. Hoy, impregnados con un aire de infinita nostalgia, seguimos cumpliendo este objetivo, iluminando nuestras páginas con un trabajo original y autóctono que trasciende.
Y PRODUCCIONES DISCOGRÁFICAS.
Recientemente, ANA LUCÍA, joven concertista venezolana e intérprete magistrál del violín, vino a Puerto Cabello a compartir escenarios con nuestra guitarrista estelar, CARLINA FLORES SABRIÁN. Presentaron estas dos nóbeles artistas un espectáculo en el que hicieron gala de sus enormes condiciones como intérpretes musicales, poseedoras de un gran potencial que les augura un prominente futuro en los escenarios. Por su parte, ANA LUCÍA, introdujo dos producciones discográficas con las que además destaca
como productora musical. “ Boleros” y “Sublime”, son los titulos de estas piezas musicales con temas clásicos de la música popular venezolana estilizada y de los boleros más destacados. Una muestra de estilo y sentimiento y tal como lo expresa la intérprete: “....mi deseo es presentar un repertorio variado por medio del violín como instrumento solista. Mi contribución ha sido la de ejecutar obras instrumentales interpretadas de manera sublime, invitando al deleite........”. Y en efecto, ANA LUCÍA lo logró con estos bellísimos cd.
César Rivas. PUNTILLISMO ALAMBRADO. CESAR RIVAS, llega a nuestra sección evocando con su trabajo el arte de figurear con alambre e hilos dorados, que
alcanzó gran popularidad en los años ochenta y que el mantiene vivo con sugestivas escenas artísticas.