3 de junio de 1770 - 20 de junio de 1820
El día 20 de junio se celebra el Día de la Bandera Nacional, aunque en verdad no se trate del aniversario de su creación (fue un 27 de febrero) sino como homenaje a su creador, el General Manuel Belgrano, en conmemoración del día de su fallecimiento.
Belgrano fue uno de los jóvenes más brillantes de su época (1770-1820) y uno de los hombres más íntegros y trabajadores que dio nuestra Nación. Estudioso, culto y polifacético hombre público, murió a los 50 años en absoluta pobreza, coronando así una vida ejemplar de servicio a la Patria.
Tenía una profunda vocación religiosa, demostrada en varios momentos de su vida: Pidió ser sepultado con los hábitos de la orden de los dominicos. Cuando su ejército llegaba a un pueblo llevaba a sus soldados a oír Misa.
Al ser derrotado en Ayohuma hizo un alto en el camino con la tropa para
rezar el Rosario, sin importarle la proximidad del enemigo del que se oía el galope de sus caballos. Hizo erigir una cruz sobre la fosa común de los patriotas y realistas muertos en la batalla de Salta, porque para él se trataba de una lucha entre hermanos americanos. Como la batalla de Tucumán fue el 24 de septiembre, día de Nuestra Señora de las Mercedes, le dedicó el triunfo y la nombró "generala" de su ejército.
Para Belgrano, un maestro debe inspirar en sus alumnos "amor a la virtud y a las ciencias, horror al vicio, inclinación al trabajo, desapego al interés, desprecio de todo lo que diga profusión y lujo en el comer, vestir y demás necesidades de la vida, y un espíritu nacional."
"Que no se oiga ya que los ricos devoran a los pobres, y que la justicia es sólo para aquellos." "Estos miserables ranchos donde ve uno la multitud de criaturas que llegan a la edad de la pubertad sin haber ejercido otra cosa que la ociosidad, deben ser atendidos hasta el último punto." "Me glorío de no haber engañado jamás a ningún hombre y de haber procedido constantemente por el sendero de la razón y de la justicia, a pesar de haber conocido la ingratitud." "No busco glorias, sino la unión de los americanos y la prosperidad de la Patria."
"Sirvo a la Patria sin otro objeto que el de verla constituida, ése es el premio al que aspiro. Para el bien de la Patria, ni para el buen servicio mío, hallo conveniente el honorífico título de Capitán General, y no veo en él sino más trabas para el trato social, mayores gastos y un aparato que nada importa sino para la vista vulgar, por cuyas razones V.E. me permitirá, haciéndome una gracia, que no lo use, contentándome únicamente con las facultades que me revisten por el cargo que ejerzo”. "Ofrezco la mitad del sueldo que me corresponde, siéndome sensible no poder hacer demostración mayor, pues mis facultades son ningunas y mi subsistencia pende de aquél, pero en todo evento sabré también reducirme a la ración del soldado, si es necesario, para salvar la justa causa que con tanto honor sostiene V.E." (Carta al Primer Triunvirato cuando es nombrado Comandante del Regimiento de Patricios)
"No busco glorias, sino la unión de los americanos y la prosperidad de la Patria."
El origen de los colores de la bandera nacional tiene un
antecedente religioso para algunos e histórico para otros:
Hay quienes consideran que Belgrano se inspiró en los colores
del manto de la Virgen en su advocación de la Inmaculada Concepción. Esta advocación era la Patrona del Consulado en donde Belgrano era la máxima autoridad. Además, esa
institución contaba con una bandera de color celeste y blanco. Otros sostienen que Belgrano tomó como referencia los colores
de la escarapela nacional, que el Triunvirato había aprobado, y
que eran a su vez los colores que usaban los miembros de la Sociedad Patriótica que se reunían en el Café de Marco.
El Ejército del Norte juró obediencia a la Asamblea del Año XIII con una bandera blanca y celeste. Y esta enseña recién se enarboló en el mástil del Fuerte en 1815. Hasta entonces, allí flameaba la bandera española. El Congreso de Tucumán, en 1816, adoptó la bandera celeste, blanca y celeste como símbolo nacional. La presencia del sol en el centro de la bandera la adoptó el Congreso, reunido en Buenos Aires, en 1818. Este sol es el mismo que aparecía en la primera moneda nacional acuñada por la Asamblea del Año XIII y luce 32 rayos flamígeros.
La bandera con el sol es la "bandera mayor" de la Naci贸n, y s贸lo pueden lucirla los edificios p煤blicos y el Ej茅rcito. Los particulares exponen la bandera sin el sol en el centro.