3 minute read

FILIPINAS RECUPERA POCO A POCO SU PRODUCCIÓN TRAS LA PESTE PORCINA AFRICANA

La entrada de la PPA y la llegada del COVID-19 supusieron un fuerte impacto sobre el sector porcino del país, que representa más del 50% de la actividad ganadera filipina.

producción propia, lo cual hubiera propiciado mayores importaciones de no haber sido por los estrictos controles que impuso el gobierno filipino. Todo ello también supuso un importante cambio en la estructura de autoabastecimiento del porcino en Filipinas, algo que se ha empezado a revertir en 2022. Actualmente, el sector porcino filipino se centra en atender las necesidades de carne fresca del mercado, y solo el 15% de la producción se destina al sector de la transformación, por lo que la carne de cerdo importada se destina principalmente al sector transformador, y no a la venta directa.

Advertisement

Filipinas cuenta con una larga tradición en cuanto a la producción y al consumo de carne de cerdo. Su industria porcina supone un importante negocio dentro del sector agropecuario del país, y representa el 55% del total de la industria ganadera. Aunque en 2019 el sector porcino del país sufrió el impacto de la peste porcina africana (PPA) y redujo notablemente su producción doméstica, en el año 2022 se llegaron a producir más de un millón de toneladas de carne de cerdo, iniciándose entonces un proceso de recuperación del sector.

Situaci N Actual

En 2021, Filipinas contaba con un censo porcino de 9,87 millones de cabezas, un 12,4% menos que en el mismo período del año anterior (11,27 millones de cabezas). La población porcina, tanto en granjas de traspatio como en granjas comerciales, disminuyó un 8,2% y un 21,8%, respectivamente. Esta caída en la producción es una de las consecuencias de los brotes de PPA que han afectado al país. Sin embargo, en 2022 el país inició una recuperación de su cabaña porcina y, a finales de ese año, ya contaba con algo más de 10 millones de cabezas. De estas, el 21% pertenecía a granjas comerciales profesionales, mientras que el 79% correspondía a pequeñas granjas familiares de traspatio.

Por otro lado, hasta el año 2020, Filipinas producía alrededor del 85% de su consumo interior de carne porcina, mientras que el resto era importada. Sin embargo, la reducción del consumo que trajo la pandemia del COVID-19, con la consecuente reducción de las importaciones, y el impacto de la PPA, que se instaló en el país en 2019, provocó en 2020 un fuerte retroceso en la

Consumo

La carne de cerdo es un alimento muy popular entre la población filipina y representa la principal fuente de ingesta de proteína en el país, por encima de la carne de pollo y de vacuno.

Desde el año 2010 y hasta 2019, el consumo per cápita de carne de cerdo en Filipinas estuvo creciendo continuamente pero, a raíz de la propagación de la PPA por todo el país y su consecuente impacto en el precio del porcino, el consumo se redujo notablemente, y pasó a situarse en los 11 kg por habitante y año, aproximadamente, durante 2020 y 2021. No obstante, la recuperación del censo y la producción iniciada en 2022 también se vio reflejada en el consumo, que alcanzó los 15,5 quilos per cápita.

Importaciones

El gobierno filipino mantiene una posición muy proteccionista en cuanto a la llegada de carne porcina a su país, con fuertes restricciones en la regulación de las importaciones y ciertas barreras a la importación como, por ejemplo, la existencia de cuotas máximas de importación. Sin embargo, esta postura se suavizó en 2019 por la difícil situación en cuanto al aprovisionamiento de carne que causó la PPA y el COVID-19. En 2021, el gobierno introdujo un sistema de aranceles reducidos a las importaciones de carne de cerdo fresca, congelada y refrigerada. Por el momento (mayo 2023), se mantienen esos aranceles reducidos. En 2022, Filipinas importó 755.470 toneladas de carne y elaborados de porcino por un valor de 947,92 millones de euros. Las importaciones filipinas se basan principalmente en carne congelada de porcino (53,83% del total de las importaciones en volumen), despojos de porcino congelados (34,75%), tocino y manteca (9,06%), y conservas y preparaciones de cerdo y de embutidos curados y cocidos (2,36%). Por otra parte, en lo que al mercado de la carne de cerdo se refiere, Filipinas mantiene una relación comercial con España desde 2013. Desde entonces, nuestro país está acreditado para la exportación de carne porcina y sus derivados, y las autoridades filipinas reconocen el sistema de control e inspección español. Así pues, España se ha consolidado como el primer proveedor de carne de Filipinas, superando a proveedores tradicionales como Estados Unidos, Canadá, Francia y Países Bajos.

En los últimos cinco años, las exportaciones españolas de carne porcina a Filipinas han crecido de forma notable. Así pues, si en 2017 se exportaron 68.202 toneladas, en 2022 aportó a este mercado 209.367 toneladas, por un valor de 409,39 millones de euros. De esta forma, las exportaciones españolas representaron el 30,42% de las importaciones de porcino que Filipinas realizó durante el 2022.

Futuro

Con más de 103 millones de habitantes, Filipinas cuenta con una economía en crecimiento, por lo que nos encontramos ante un mercado con una gran envergadura y un indudable potencial de crecimiento futuro. Para afrontar este crecimiento, el porcino filipino debe hacer frente al gran reto de mantener a raya la amenaza de la PPA y prolongar el crecimiento de su producción porcina, como ha venido haciendo durante el último año.

This article is from: