Me encargaron (alrededor de 1988) una publicidad para un congreso médico sobre el corazón. No querían repetir en esta publicidad los consejos conocidos por todos sobre el cuidado del corazón etc... y además lo querían dirigir a los participantes del congreso. Me puse a ello y les presenté el cuaderno de ocho páginas “Lo siento cuando ando”. No se publicó.
Rubén Garrido