Apoyo a la Asistencia TĂŠcnica
San Salvador, septiembre 2008
Apoyo a la Asistencia TĂŠcnica
Queridos Miembros de la Comunidad Educativa:
Una de las prioridades del Plan Nacional de Educación 2021 es lograr la efectividad de la Educación Básica y Media en los centros educativos, por medio del fomento de prácticas pedagógicas efectivas que propicien la mejora de los aprendizajes de los estudiantes. Los centros educativos de El Salvador tienen la importante responsabilidad de formar a los niños, las niñas y los jóvenes del país, preparándolos para una mejor calidad de vida por medio del conocimiento y de la integración social. Para lograr este fin son muchas las acciones que el Ministerio de Educación está desarrollando, entre ellas está “¿Qué Ruta Tomamos?”, que es una estrategia para mejorar nuestro centro educativo y ayuda a que los miembros de la comunidad educativa puedan encontrar por si mismos el camino hacia la enseñanza efectiva. La estrategia consta de tres componentes: revisión de indicadores, el desarrollo de la evaluación interna y asistencia técnica (interna o externa). Este documento “APOYO A LA ASISTENCIA TÉCNICA” pretende ser un apoyo al componente de asistencia técnica interna, es decir a aquellas acciones de mejora que pueden realizarse en el centro educativo con el apoyo de las directoras y los directores (la dirección), los docentes, los padres de familia y los líderes comunales, entre otros. Por lo que invitamos a las directoras y los directores a revisar cada una de las ideas, actividades o estrategias propuestas, para buscar la mejora de los aprendizajes de sus estudiantes. Les deseamos el mejor de los éxitos y esperamos que este documento forme parte del quehacer diario en su centro educativo y contribuya a promover entre los docentes un pensamiento creativo, que potencie el desarrollo educativo de los estudiantes y mejore de manera significativa sus aprendizajes.
Darlyn Xiomara Meza Lara Ministra de Educación
José Luís Guzmán Martell Vice Ministro de Educación
Contenido
Presentación
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Procesos pedagógicos divertidos
07 07
Procesos de gestión escolar efectiva
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Procesos de evaluación al servicio del aprendizaje
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Bibliografía
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Presentación
El documento “Apoyo a la Asistencia Técnica”, en línea con el Plan Nacional de Educación 2021 es una perspectiva, precisamente de la estrategia ¿Qué ruta tomamos? donde nos propone un camino a seguir para lograr una mejora de los centros educativos de nuestro país, cómo principal objetivo despertar escuelas proactivas, dispuestas al cambio y a la mejora continua. Esto se alcanza por medio de la concientización de la comunidad misma sobre el estado en el que se encuentra. A su vez, esta concientización debe conducir a la reflexión y a la toma de decisiones para la mejora continua. Invitamos a todos los centros educativos a que utilicen este documento ya que brinda orientaciones concretas y de corto y mediano plazo para que las instituciones educativas alcancen un nivel educativo mejorado. El documento presenta tres capítulos: El primer capítulo, “Procesos pedagógicos divertidos”, brinda al docente orientaciones para planificar y organizar un ambiente propicio para aprender y alcanzar mayor efectividad. De igual forma, se brindan orientaciones para organizar y utilizar recursos didácticos, como las bibliotecas escolares y de aula, así como consejos para la organización de los espacios de recreación y la ambientación del aula. El segundo capítulo, “Procesos de gestión escolar efectiva”, está referido a los procesos de gestión que permiten fortalecer el rol del director como líder, la importancia de la organización del centro escolar y el trabajo con base en normas y procedimientos. El tercer capítulo,“El proceso de evaluación al servicio del aprendizaje” aborda la importancia de desarrollar progresivamente una cultura de evaluación de los aprendizajes. Se brindan a los docentes ideas sobre actividades vinculadas a dichos procesos, como diagnóstico de necesidades, entrega de notas y análisis de los resultados de aprendizaje. Es necesario aclarar que este material complementa las orientaciones que ofrecen otros documentos de apoyo a la gestión escolar, como:“Currículo al Servicio del aprendizaje”,“¿Qué Ruta Tomamos?”, la colección de “Gestión escolar efectiva al servicio del aprendizaje”, “Orientaciones para elaborar el Plan Educativo Institucional (PEI) y el Plan Escolar Anual (PEA)” y “Evaluación al Servicio del aprendizaje”, entre otros.
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I.
Procesos pedagógicos divertidos
Los procesos pedagógicos se organizan alrededor de tres aspectos: el ambiente de la institución educativa, las prácticas pedagógicas de los docentes en la aula y el currículo que orienta el aprendizaje. Este apartado busca despertar la creatividad de las docentes y los docentes para que implementen acciones de mejora en los procesos pedagógicos. Dichas acciones tendrán como base la información y los objetivos propuestos en el PEI y en otros instrumentos de planificación escolar. Identificar aquellas áreas en las que se requiere apoyo para lograr mejores resultados de aprendizaje en los estudiantes y una clase más divertida es clave, pues de esa manera también se establecen las necesidades de fortalecimiento de los procesos pedagógicos y, en muchos casos, áreas de asistencia técnica, que puede ser brindada por otro docente, por el director o por los equipos de seguimiento. Se espera que este documento proporcione puntos de apoyo para emprender procesos pedagógicos capaces de romper esquemas y motivar al docente a innovar y dejarse orientar con entusiasmo y alegría.
1. Organiza el ambiente escolar El ambiente físico El cuidado del ambiente de estudios está relacionado con la limpieza, el orden del mobiliario y el ornato. La limpieza y el orden de la escuela y el aula deben ser permanentes. Antes, durante y después de las clases. No es aceptable desarrollar procesos de aprendizaje en ambientes sucios y desordenados. Debe considerarse que una escuela no es limpia únicamente por tener pisos aseados. Todos los espacios (servicios sanitarios, cocina-bodega, dirección, biblioteca, techos, canales, ventanas, muebles, paredes, cunetas, aceras, arriates, etc.) deben cumplir con normas básicas de higiene y de orden. Los espacios evidencian la valoración que sus usuarios sienten por ellos mismos y los que les rodean. Por ello, es importante que dichos espacios
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evidencien un interés legítimo por el cuidado del ambiente y reflejen el interés del docente por inculcar en sus estudiantes hábitos favorables para lograr aprendizajes efectivos. En cuanto al mobiliario, la distribución del mismo en el aula debe estar en relación con los objetivos de aprendizaje o con las actividades planificadas. Dichas actividades deben favorecer la interacción entre maestros y alumnos, así como entre los estudiantes. La maestra o el maestro, de acuerdo a los contenidos a desarrollar, puede organizar los pupitres de diferentes maneras: en grupos, en parejas, en círculo, en “U”, etc. El escritorio del docente debe reflejar orden de los papeles, libros u otros recursos didácticos. Sobre el ornato, el centro escolar siempre debe de lucir un ornato adecuado. Las zonas deben estar debidamente identificadas: aulas, servicios sanitarios, señales para evacuación, biblioteca y otros espacios deben contar con un ambiente agradable y ordenado. Finalmente, respecto al manejo adecuado de la basura, para ello se recomienda separar los desechos orgánicos, papel, latas y plástico. Los depósitos de basura deben estar limpios y colocados en lugares como: corredores, aulas, zonas recreativas, tienda escolar entre otros.
Ambiente social Todos los miembros de la comunidad educativa deberán demostrar dominio en sus relaciones interpersonales, inculcar en los estudiantes valores de respeto, protección, solidaridad, amor al prójimo y a la naturaleza, recordando que no vivimos aislados, sino que somos parte de una sociedad. Las maestras y los maestros deben practicar la crítica constructiva en sus relaciones con los miembros de la comunidad educativa. La relación entre el director y los docentes, el director y la comunidad y el director y los estudiantes debe ser abierta, de respeto y con la mayor disposición de servicio por parte del director. Los estudiantes y la comunidad educativa en general deben percibir un ambiente social de cordialidad. Es de particular importancia crear mecanismos institucionales para la comunicación y la toma de decisiones. Dichos mecanismos deben tener como base el diálogo, el respeto y la identificación de un fin institucional, más que personal. Las maestras y los maestros, conscientes de su importante rol de modelaje para los estudiantes, deberán evitar hacer comentarios negativos de otros docentes de la institución o de otros miembros de la comunidad educativa, incluidos los estudiantes. Otro aspecto importante del ambiente social, es la disciplina en el aula. Para mantenerla podemos solicitar a los alumnos hacer ejercicios de respiración, levantar la mano o ponerse de pie; para guardar silencio, pero jamás gritarles.
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Excelentes resultados de convivencia y de armonía social derivan de incentivar en los estudiantes la reflexión y la práctica de los derechos y deberes ciudadanos. Por ello, como actividad sugerida, la dirección del centro educativo y los docentes pueden realizar una jornada cívica una vez por semana. En dicha jornada, que puede realizarse el día lunes antes de la primera hora de clase, se puede entonar el himno nacional y se elige un valor sobre el cual podrán disertar docentes, estudiantes o padres de familia.
Se puede organizar un lunes en las aulas, otro por ciclo, secciones, nivel o asamblea general de estudiantes
Ambiente psicológico Favorece el ambiente psicológico positivo, idóneo para fomentar el aprendizaje de los estudiantes las siguientes prácticas de cordialidad con los estudiantes: • Trate con respeto y dignidad a los estudiantes. El buen trato físico y verbal del maestro para con los alumnos es fundamental para el autoestima del estudiantes y, por ende, para obtener buenos logros de aprendizaje. El maltrato emocional (humillaciones públicas o castigos públicos “de ejemplo para otros”) o físico (golpes con regla u otros objetos, tirón de orejas, “chicharrones”, etc.) son inaceptables como estrategia para lograr resultados de aprendizaje. • Salude a los estudiantes a diario y hacerles sentir bienvenidos. Si es posible, buscar espacios de acercamiento con los estudiantes y tratar de llamarlos por sus nombres. • Felicite y reconozca los aspectos positivos de los alumnos como el uniforme bien cuidado, la limpieza del cuerpo, el peinado, la limpieza de zapatos, el uso de cincho, etc. • Destaque en el aula cualquier acción positiva, con refuerzo positivo y oportuno. • Comparta con los alumnos el recreo. • Sea firme y coherente al llamar la atención de un estudiante o un grupo de ellos.
Rincones o zonas para el aprendizaje Un rincón o zona de aprendizaje es:
un espacio acondicionado de manera especial con recursos didácticos para lograr ciertos objetivos de aprendizaje. Ocupan un espacio físico y pueden ser permanentes o móviles, dependiendo de las necesidades y posibilidades de la escuela y del aula.
Para implementar rincones o zonas de aprendizaje es una decisión y se recomienda a los docentes: Revisen la relación entre el espacio del aula y el mobiliario. Si existe el espacio suficiente para estructurar los rincones, sin que interfieran el paso de los estudiantes, se podrá pensar en rincones permanentes. Por el contrario, si no cuenta con el espacio físico suficiente se sugiere pensar en rincones móviles de carácter transitorio. Para los rincones con carácter permanente se recomienda utilizar los recursos de bajo costo provenientes del ambiente local, tales como petates sobre los cuales puedan ubicarse los recursos y los estudiantes. Se pueden improvisar mesas, con tablas y latas, y los recursos educativos pueden quedar colocados sobre ellas. Recuerde que la improvisación implica orden, limpieza. De igual forma, considere que un rincón debe garantizar la seguridad y comodidad de los estudiantes.
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En el caso de los rincones móviles, utilice cajas de madera, plásticas, de cartón forradas, las cuales se pueden tener apiladas en el piso o en un estante colocado en la pared. Este material puede utilizarse en el aula o en cualquier otro espacio de la institución.
Biblioteca escolar y de aula La escuela idealmente debe contar con una biblioteca escolar y de aula que sirva como recurso de aprendizaje para las niñas, los niños, los jóvenes y los adultos del centro escolar. La biblioteca, que puede contener no sólo los libros, sino también una ludoteca, un armario didáctico y colecciones de objetos, debe ser un espacio cómodo, bien iluminado y con buena ventilación. Debe contar con documentos de apoyo que orienten a los docentes en su trabajo, libros de cuentos, fábulas, adivinanzas, con ilustraciones amplias y con poca escritura para parvularia y primer ciclo. Se puede incluir, como parte de los recursos de la biblioteca, los libros y láminas que producen los estudiantes. Se pueden establecer criterios para la selección de los trabajos de los estudiantes, los cuales habrá que forrar o empastar. Los trabajos deben llevar el nombre de los autores. Como parte de la biblioteca también se pueden incluir discos compactos (CD) con narraciones, videos recreativos y educativos. La biblioteca debe permanecer abierta para que todos los niños y las niñas de la escuela y la comunidad hagan uso de ella. Los libros deben estar al alcance de ellos. Se sugiere elaborar un carné por cada niño, para que lo utilice en el préstamo de los libros, videos, afiches, revistas, periódicos, etc. Los libros deben estar forrados con plásticos, clasificados y organizados. Cuando los libros se deterioren o dañen deberán ser reparados inmediatamente para que su durabilidad sea mayor. Es recomendable involucrar a los padres en jornadas de recolección de recursos para biblioteca, reparación y forro de libros, promoción de exposiciones, etc.
Ludoteca Una Ludoteca es:
un espacio dentro de la biblioteca a través del cual, por medio de juegos y otros recursos divertidos, se atrae a los estudiantes para fomentar en ellos el interés por la lectura.
Se sugiere organizar, en la biblioteca, un espacio para la Ludoteca. Este recurso permite estimular en los educandos, a través de lecto-juegos, la imaginación, la creatividad y el interés por la lectura. La ludoteca deberá estar equipada con juegos como el domino (con figura y palabras), loterías (ilustraciones con su nombre), abecedario con figuras, dados (uno con palabras y otros con ilustraciones, deben coincidir palabras e ilustraciones), tarjetas con palabras para formar oraciones, narraciones con páginas anexas para ilustrarlas, cajas y objetos pequeños (las cajas se rotulan y el educando introducirá en cada una el objeto correspondiente) y páginas con figuras para que las coloreen.
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Lo importante de la ludoteca es que acerca al niño y niña a la biblioteca, favoreciendo el hábito e interés por la lectura.
El armario didáctico Un armario didáctico es:
es un espacio dentro de la biblioteca en el que los maestros pueden almacenar materiales y recursos didácticos para su uso recurrente. Dicho armario debe estar ordenado y contar con espacios asignados por docente o por materia.
En el armario didáctico se pueden guardar carteles y laminas, colgándolos en ganchos reforzados con cartoncillos en la parte superior. De igual forma, se pueden guardar otros recursos que se consideren útiles y reutilizables. Anualmente será necesario revisar dichos recursos y actualizarlos o mejorarlos. En el caso particular de los carteles, estos son un recurso que puede utilizarse con diversos objetivos en el aprendizaje de los educandos. En la elaboración de estos debe considerarse el uso de colores llamativos, letra grande, de al menos 4 cm. Los carteles deben contener poco texto. Resalte en ellos ideas principales y establezca una metodología para utilizarlos. Si reutiliza un cartel, considere que si este pierde su vistosidad, es mejor desecharlo.
Colecciones de objetos Dentro de la biblioteca, según los contenidos y la metodología a utilizar, es conveniente contar con un espacio para ubicar la colección de objetos como: piedras, hojas, flores, tapones, cajas, semillas, telas, cajuelas, fotos, lápices, reliquias, monedas, billetes, trajes típicos, artesanías, etc. Dichos objetos pueden y deben servir como material de observación, clasificación, asociación y discusión. Permite a que los estudiantes puedan asimilar nociones de forma, textura, dimensión y tiempo.
La ambientación del aula Los maestros y las maestras deben ambientar periódicamente el salón de clases a fin de mantener un espacio agradable de aprendizaje. Los momentos más adecuados para el cambio de ambientación son: el inicio del año escolar, el cambio de unidad didáctica y la celebración de fechas especiales del calendario escolar. Es importante recalcar que ambientar no significa forrar de carteles todo el salón de clases. La ambientación comienza por la limpieza de techos, paredes y pisos. Luego el maestro debe organizar el material de exposición permanente y el material eventual. Como material permanente tenemos: El calendario escolar, horarios de clase y de aseo, normas de convivencia y autocontrol de asistencia. El material eventual dependerá de los aspectos que el maestro quiera destacar durante el desarrollo curricular, como carteles alusivos a temas específicos centrales o de gran importancia en la unidad a desarrollar. Una ambientación recargada de materiales puede ser contraproducente en el aprendizaje de los niños que presentan déficit de atención.
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Los espacios para la recreación Las zonas de recreo y los espacios no construidos de la escuela también deben de ser atendidos, brindándoles el mantenimiento adecuado y, sobre todo, tratando de contribuir al cuidado del medio ambiente, a través de la siembra de árboles, jardines y cultivo de huertos escolares. Evite que los estudiantes jueguen en zonas de construcción. Señalice las áreas de recreo y organícese con los otros docentes para cuidar dichas zonas. De ser posible, organice juegos para que los estudiantes cuenten con una o más actividades orientadas. En cuanto al ornato, recuerde que una escuela con árboles y jardines proporciona un entorno agradable y el cuidado por parte de los estudiantes promueve en ellos la formación de valores, compromiso y responsabilidad con el medio que les rodea.
2.Toma el control de la clase El uso del pizarrón El pizarrón es uno de los recursos más empleados y útiles. A pesar de su difusión, su uso correcto puede ser poco conocido y por lo tanto es mal aprovechado como recurso didáctico. El pizarrón sirve especialmente para: • Presentar información. • Desarrollar problemas y planteamientos teóricos • Elaborar cuadros, ejercicios, resúmenes, gráficos y diagramas, entre otros Para su uso se recomienda: • Al iniciar la clase, cuide que esté totalmente borrado y limpio. • Al escribir o dibujar, párese a un lado del pizarrón, no enfrente del mensaje. • Al escribir, hágalo de izquierda a derecha, moviéndose a lo largo del pizarrón. Esto ayuda a mantener la línea derecha. • Para trazar líneas rectas es aconsejable apoyarse en instrumentos u objetos (cuerdas, reglas, etc.). • Escriba sobre el pizarrón lo estrictamente necesario. • Borre o quite todo material, cuando deje de ser útil. • Borre la superficie de la pizarra en sentido vertical (de arriba hacia abajo.). • Los dibujos complicados hágalos antes de iniciar la clase. • Destaque con colores los aspectos importantes. • Cuide que la letra sea legible desde todos los lugares del aula y que todos los estudiantes vean sin dificultad lo escrito.
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A continuación se presentan dos técnicas para uso del pizarrón en el aula. Comparta con otros docentes estas u otras técnicas que usted o ellos conozcan.
Técnicas para el uso del pizarrón a) Técnica de patrones (dibujos) perforados. Esta técnica ayuda a traspasar al pizarrón la silueta de lo que se desea dibujar. Materiales: - Pliego de papel. - Punzón, lezna o “saca hoyos” tipo “mil usos”. Procedimiento: 1. Copie en el papel en forma ampliada los dibujos o gráficos que se desean dibujar en la pizarra. 2. En el papel recorra el trazo de la silueta haciendo perforaciones con la lezna o saca hoyos cada medio centímetro. 3. Fije el patrón perforado sobre el pizarrón. 4. Con el borrador cargado de yeso espolvoree el trazo de la silueta, presionando la almohadilla sobre los orificios. 5. Retire el patrón perforado. 6. La figura queda insinuada con puntos. Una los puntos y complete el trazo del dibujo.
b) Técnica el pizarrón cubierto (escritura) Esta técnica le permite generar motivación y expectativa en los estudiantes, manteniendo en reserva lo escrito en la pizarra hasta que sea oportuno presentarla. Procedimiento: · Escriba en el pizarrón la información que se necesita presentar. · Cubra la información con tiras de papel, adhiriéndolas en el marco del pizarrón. · Descubra la información en la medida que su planificación lo requiera.
Animación a la lectura La comprensión lectora y el disfrute de la lectura son dos competencias de las más importantes que el estudiante debe alcanzar a lo largo de su proceso de aprendizaje. Es por eso que en todos los grados resulta necesario realizar actividades que contribuyan al logro de las mismas.
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Para promover el desarrollo de las habilidades lectoras utilice estrategias metodológicas como: “Te presto a mi abuelo” y “Mi mamá también me cuenta cuentos”, entre otras. A continuación se presentan algunas actividades y estrategias que los docentes pueden utilizar: • Lea diez minutos todos los días, procurando tener el mismo horario en todo el centro educativo. Seleccione textos de cien palabras y mida la cantidad de palabras leídas por el estudiante en un minuto. Con alumnos más grandes se deben utilizar textos con más palabras. Formule preguntas sobre el texto leído. Iniciar con cinco o diez niños cada día, de manera que al final del mes se haya tomado lectura a todos los estudiantes. Esta práctica no debe hacerse sólo con los de primer ciclo sino con todos los niveles y grados. Para agregar un toque de interés y promover la sana competencia, también se pueden hacer concurso de deletrear palabras. Esta práctica ayuda a mejorar la ortografía y ampliar el vocabulario. Otro de los concurso pueden ser de lectura rápida, siempre y cuando se consideren preguntas de comprensión lectora. • Utilice de manera alterna diferentes técnicas para controlar el desarrollo de las habilidades lectoras en los estudiantes. Haga que los estudiantes lean en voz alta, en silencio, contra reloj, que comenten lo leído en parejas, que elaboren pequeños resúmenes, que adapten parte de lo leído, incorporando vivencias propias, etc.
Cómo relatar cuentos, fábulas y leyendas Los cuentos, fábulas y leyendas constituyen un valioso elemento para motivar diversos temas del programa de estudio. Algunas sugerencias para que las narraciones alcancen los objetivos propuestos son: • Coloque a los niños y las niñas en semicírculo, frente al maestro. Para muchos niños es placentero sentarse en el suelo y esto debe permitirse cuando para ello no se opongan la higiene y la comodidad. • Conozca de manera previa la narración, para que la lectura sea fluida y con todas las pausas y entonaciones respectivas. Recuerde hacer las pausas necesarias, según la puntuación del escrito. • Sienta la historia que relata. Siempre que pueda, imite las voces de los personajes de la historia. Trate de dotar a cada personaje de un acento característico y gesticular o hacer ademanes cuando este personaje habla. Eso genera expectativa y atención en los estudiantes.
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• No interrumpa la narración para llamar la atención o reprender a algún estudiante. Esto hace que los estudiantes pierdan el interés y el entusiasmo.
• Hable de forma moderada. Gesticule y pronuncie con claridad, en un tono en el que todos escuchen. Sin embargo, cuando la trama lo requiera, disminuya o aumente la intensidad del tono de voz. • En la medida de lo posible, utilice bonitas ilustraciones que ayuden a interpretar la historia. De igual forma, procure asociar la historia o la lectura con experiencias de los estudiantes. • Deje que los estudiantes inventen el final del cuento. Esto motiva la creatividad, despierta la imaginación y revela los estados emocionales del niño, así como sus problemas e ideas. Para ayudar a un niño tímido a narrar un cuento, puede presentársele las láminas para que le sirvan de guía. A parte de las sugerencias anteriores, para la animación de la lectura, a continuación se presentan algunas estrategias que pueden ayudarle a captar la atención de los estudiantes y a mejorar su interés por la lectura:
¿Quién dijo? Esta estrategia es apropiada para niños o niñas que han empezado a leer y a escribir. Se lee un cuento breve con varios personajes (el texto debe contar con diálogos entre los personajes). Se distribuye entre las niñas y los niños papeles pequeños, tanto como número de personajes participen en el cuento. Solicite a los estudiantes que escriban el nombre de cada personaje en cada papel y que luego coloquen todos los papelitos delante de ellos, de manera que puedan ver todos los nombres que ellos mismos han escrito. Luego, seleccione fragmentos de diálogos del personaje y pregunte ¿Quién dijo? Lea textualmente como lo dice el cuento. Los niños buscarán el nombre del personaje que dijo la frase y levantarán el papel sin decir nada. Para ellos será divertido ser el primero en levantarlo. Es importante que usted no les permita a los estudiantes decir el nombre del personaje en voz alta.Verifique que los estudiantes realmente levanten el nombre del personaje correcto.
La frase falsa Es una dinámica que se aplica para niños y niñas entre 9 a 10 años. El docente prepara una hoja con una lectura conocida por los niños y las niñas. La lectura debe constar de cinco o más párrafos, dentro de los que se introducirán “frases inventadas o falsas”. Tenga tantas páginas como participantes. Reparta las hojas preparadas y explique a los estudiantes que se trata de encontrar frases falsas. Cree un clima de silencio y pida a los estudiantes que lean el texto y que, cuando encuentren las frases falsas, las subrayen. Al finalizar, comente en grupos por qué consideran que las frases encontradas son falsas.
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Animación a la escritura Este ejercicio puede hacerse en el primero y segundo ciclo. Para el tercer ciclo debe estimular la elaboración de ensayos, no solo en lenguaje sino en todas las asignaturas. Promueva la escritura de textos, todos los días, iniciando con una oración o un párrafo de cinco líneas, diez líneas, veinte líneas hasta completar una hoja. Los estudiantes deben aprender a expresar sus pensamientos o ideas por escrito. Con los estudiantes de primer ciclo se puede hacer uso de los amigos imaginarios para que le escriban a él o lo describan. Pueden iniciar con una oración y finalizar con una composición. Para los grandes pueden hacer poemas de amor, canciones, cuentos.
Matemática concreta y práctica El razonamiento lógico matemático, la comunicación con lenguaje matemático y la aplicación de la matemática al entorno son competencias que permite que el estudiante utilice siempre los descubrimientos que trae consigo la resolución de problemas. En este sentido, el docente debe generar situaciones para explorar, aplicar, argumentar y analizar todos aquellos elementos propios de la Matemática. Es decir, los estudiantes, desde sus contextos, deben desarrollar sus competencias sin olvidar que el lenguaje natural es la base para interpretar el lenguaje matemático. Es muy importante que los docentes planifiquen experiencias en las que se identifican tres etapas en la adquisición de las competencias: 1. La utilización del material concreto (con mayor énfasis en el primer grado). 2. Las representaciones pictóricas o gráficas. 3. La representación simbólica. Estas etapas son acordes al desarrollo del pensamiento de los estudiantes, por lo que habrá un momento en el desarrollo del contenido que ya no se use material concreto ni semi-concreto. Orientaciones generales para el desarrollo de una clase de Matemática: • Repase lo visto en la clase anterior. El repaso de la clase anterior debe hacerse según la necesidad que observe el docente en los y las estudiantes. • Recorra el aula mientras los estudiantes realizan un ejercicio. Esto ayuda a identificar los errores que comenten los estudiantes al desarrollar los ejercicios y orientarles en su corrección.
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• Corrija los ejercicios durante el proceso de desarrollo. Cuando la cantidad de los ejercicios sea grande, no espere a que los estudiantes los resuelvan todos para revisarlos. Corríjalos durante el proceso, para evitar la repetición de los errores.
• Prevea ejercicios adicionales para mantener ocupados a las niñas y los niños que terminan rápido. • Mantenga apertura para brindar orientaciones individuales a estudiantes que lo requieran. La orientación individual es imprescindible en aquellos caso que así lo ameriten (atención a la diversidad) y ésta se puede realizar en otros momentos. • Evite que los niños pierdan el tiempo haciendo cola para la revisión de los ejercicios.
Secuencia didáctica en el desarrollo de una lección Todo docente, antes de iniciar una clase, debe haber hecho una lectura del libro de texto y la guía metodológica, para familiarizarse con la relación entre ambos. Además, debe verificar qué tipo de materiales utilizará y si cuenta con ellos. Finalmente, las competencias y los indicadores de logro deben ser sus “señales de tránsito” durante el desarrollo de su clase.
En Matemática, se consideran dos tipos de clase: De introducción de un nuevo concepto, tema, o conocimiento: • Inicie con una pregunta o un problema que motive a los niños a encontrar la respuesta o solución. • Deje que los niños lo resuelvan, de forma individual o en equipo según sea el caso. Apoyarles con material didáctico y el tiempo suficiente. • Permita que los niños presenten sus ideas, motivándolos a que lo hagan sin temor a los errores, así como a respetarse y escucharse mutuamente. • Una buena manera de motivar el pensamiento es: “¿Alguien tiene otra respuesta?” • Fomente la discusión de las respuestas. • Una vez concluida la discusión, presente la solución el problema a partir de las ideas de los niños. • Evalúe el nivel de comprensión de los ejercicios y fomente la aceptación de la posibilidad de obtener diferentes planteamientos. De fijación de lo aprendido resolviendo ejercicios • Proponga ejercicios que contengan elementos novedosos de tal forma que los niños busquen la forma de resolverlos como en la clase de introducción. • Una vez se haya comprendido la forma de resolver los ejercicios facilite más para su ejercitación de forma individual. • Manténgase pendiente del trabajo de los niños para reducir la cantidad de errores. • Propicie la resolución del problema o ejercicio en el pizarrón enviando de una vez a varios niños, para poder atender al mismo tiempo a la mayor cantidad de ellos. • Revise las respuestas pidiendo las opiniones de los niños y no borrar las equivocadas. Corregirlas con respeto.
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Independientemente del tipo de clase que imparta, evite la clase frontal, en la cual usted habla y expone y los estudiantes escuchan. Procure evitar las respuestas “en coro” utilizando una metodología novedosa o divertida, que les permita alcanzar un aprendizaje significativo.
Los 10 minutos matemáticos Los “10 minutos matemáticos” es una estrategia que permite afianzar el desarrollo de las competencias matemáticas, por medio de dinámicas con las que las niñas y los niños adquieren rapidez, seguridad y gusto por el razonamiento matemático y el cálculo. La estrategia implica el desarrollo de ejercicios diversos, dependiendo de la edad y la competencia que se desea mostrar. En primer ciclo, el estudio más importante en Matemática es el aprendizaje de las cuatro operaciones básicas: suma, resta, multiplicación y división. Por ello, esta estrategia sugiere el desarrollo de un ejercicio llamado “100 cuadrados-cálculo”. Con este ejercicio los estudiantes refuerzan su conocimiento sobre las operaciones, ejercitan la memoria, practican el cálculo y desarrollan agilidad mental.
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Para realizar el ejercicio completo se necesita una matriz o cuadro de 10 filas por 10 columnas. Este tipo de cuadro puede ser dibujado en un cuaderno cuadriculado o en hojas separadas. En este cuadro o matriz escribimos diez números en la fila superior y diez en la columna de la izquierda. La idea es realizar operaciones cruzando los números de la fila superior con los de la columna de la izquierda. Para agregar un elemento adicional interesante para los estudiantes, cada vez que se les pide efectuar una operación, se mide el tiempo, para ver qué tan rápido lo han hecho. Medir el tiempo hace que los alumnos se entusiasmen y deseen autosuperarse o superar a otros compañeros.
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3. Apoya el trabajo del alumno Consideraciones sobre el cuaderno del estudiante El cuaderno es la herramienta de trabajo diaria del estudiante. En él se concreta el pensamiento de las niñas y los niños y se demuestran aprendizajes y valores alcanzados. Es por ello que la revisión del cuaderno es una actividad a la que el docente debe darle importancia en el proceso continuo de evaluación. A continuación se presentan algunas consideraciones para la revisión de los cuadernos: • Limpieza, orden e identificación con su nombre y la asignatura en la primera página. • De preferencia, una ilustración de la unidad en estudio. • Referencia a los puntos importantes del contenido. • Inclusión de comentarios propios. • Corrección de la ortografía y caligrafía. • Cumplimiento de deberes. • Uso de esquemas, mapas conceptuales, resúmenes, subrayados para enfatizar aspectos importantes. • Atención y corrección del estudiante a las observaciones que se le hacen. Es importante revisar por lo menos cinco cuadernos por día, de manera que al finalizar el mes se hayan visto los cuadernos (una o dos asignaturas) de todos los estudiantes.
Orientaciones para el uso del libro de texto y el cuaderno de ejercicios El libro de texto no debe mancharse, pues será utilizado por otros estudiantes en años subsiguientes. Para que el estudiante ejercite, el libro de texto va acompañado de un cuaderno de ejercicios que presenta actividades para escribir, dibujar y colorear. El cuaderno de ejercicios cuenta con elementos gráficos para apoyar la resolución de los mismos, sin necesidad de copiarlos o trazarlos. A parte del libro de texto y del cuaderno de ejercicios, el docente debe orientar el buen uso del cuaderno de apuntes, en el que los estudiantes pueden anotar el desarrollo de algún contenido, aspectos importantes sobre el tema en estudio, las conclusiones de las discusiones, los conceptos, notas y otros ejercicios que el docente considere útiles.
El refuerzo académico En el documento “Evaluación al servicio del aprendizaje” se establece que: “A partir de los resultados de la evaluación diagnóstica, formativa y sumativa se deberán programar y llevar a cabo estrategias de refuerzo académico para
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refortalecer destrezas y debilidades identificadas. La evaluación buscará apoyar la adquisición de los aprendizajes esperados y por consiguiente mejorar los resultados académicos”. El refuerzo académico deberá reflejarse en uno o varios instrumentos que el centro educativo estime funcionales para dicho fin: El Proyecto Curricular de Centro (PCC), la Planificación de Aula o el Plan Escolar Anual (PEA). Si después del refuerzo académico un estudiante no ha superado las dificultades de aprendizaje se deberán gestionar apoyos adicionales. La planificación del refuerzo académico es responsabilidad del docente, del director o directora y del equipo de evaluación. Por lo tanto, deberán involucrarse oportunamente tomando como referencia sus funciones en la organización.
Refuerzo académico en parvularia En el caso de las niñas y los niños que no alcance los resultados esperados, consignados en los indicadores de logro en cualquiera de los ámbitos de experiencia y sus respectivas competencias, se deberá considerar el nivel de desarrollo y ritmo de aprendizaje del estudiante para valorar la pertinencia de ofrecer refuerzo académico. Esto se llevará a cabo durante el desarrollo de la unidad y al finalizarla en cada trimestre.
Refuerzo académico en educación Básica y Media Se deberá proporcionar refuerzo académico a los estudiantes que no hayan logrado los aprendizajes esperados en cada lección y unidad de aprendizaje. Para la modalidad flexible de educación acelerada, el refuerzo académico deberá preverse si es necesario, al finalizar cada proyecto. Este refuerzo debe llevarse a cabo antes y después de registrar los resultados de las evaluaciones trimestrales.
Las tareas Las tareas constituyen una actividad complementaria muy importante en el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Permiten que los estudiantes experimenten el ejercicio personal de la responsabilidad, la independencia y la autosuficiencia. El maestro debe recordar que las tareas no sustituyen la labor en el aula y que estas deben utilizarse principalmente para retroalimentar un contenido, proporcionar oportunidades de investigación, descubrir aplicaciones y desarrollar la creatividad y la imaginación. Las tareas no deben ser utilizadas como castigo. No deberían promover la repetición mecánica de actividades o desarrollar contenidos no trabajados por el maestro.A continuación se presentan algunas sugerencias para la utilización de las tareas:
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• Utilice juegos para la ejercitación de aplicaciones matemáticas. • No repita más de tres líneas sobre una misma idea, para el ejercicio de la caligrafía. • Motive el uso de diferentes técnicas para el desarrollo de la lectoescritura. • Promueva la lectura de libros con historias interesantes o fragmentos de los mismos, relacionados con los contenidos que se están desarrollando, independientemente de la asignatura. • Elabore portafolios en donde el estudiante vaya incorporando trabajos realizados en la escuela y en la casa. • Desarrolle proyectos adecuados al nivel del estudiante, de tal manera que él sea capaz de elaborarlos. • Revise y califique las tareas oportunamente. • Identifique y señale los aciertos y errores cometidos por el estudiante. • Evite el uso de frases o sellos con connotaciones negativas como: “Trabaja como tortuga”. • Revise la ortografía, aunque no se esté en la clase de Lenguaje. Que no se recomienda hacer y, de hecho, se debe evitar: • Improvisar tareas.Tareas con mayor nivel de complejidad como un proyecto o un portafolio no deben dejarse de un día para otro. • Asignar tareas con un nivel de dificultad mayor al que los estudiantes pueden responder efectivamente. Las tareas deben ser adecuadas al nivel de los niños para que no se conviertan en tareas de los padres y de las madres. • Asignar tareas que acaparan todo el tiempo libre del estudiante. Debe calcularse el tiempo prudente para que el estudiante haga sus tareas, ya que no es conveniente que todo su tiempo libre lo utilice en hacerlas. De ser así habrá cansancio en el trabajo de aula. • Coordinar con los docentes de otras materias o áreas la asignación de deberes, de manera que no se sobrecargue al estudiante con tareas.
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II.
Procesos de gestión escolar efectiva
Los procesos de gestión constituyen el marco y apoyo principal para que los procesos pedagógicos se desarrollen efectivamente en el centro escolar. Los indicadores que lo constituyen son: Liderazgo, participación, organización, normas, beneficios y uso del presupuesto escolar. Uno de los pilares de la gestión es el liderazgo, entendido como el conjunto de habilidades y actitudes que hacen a una persona capaz de guiar a un grupo hacia una misma visión y unos mismos objetivos, partiendo de la práctica de valores establecidos y aceptados por todos. Las estrategias que ahora se presentan necesitan mucho del liderazgo de la dirección, la cual debe motivar, dirigir y guiar a su comunidad educativa para alcanzar los objetivos propuestos por la comunidad educativa. Usualmente el liderazgo de la dirección inicia procesos de cambio en la organización y el entorno escolar. El liderazgo positivo redunda en beneficios institucionales, pues fomenta la formación de equipos de trabajo, la definición de normas claras y conocidas por todos, el establecimiento claro de funciones y la definición de una línea de delegación de responsabilidades. De igual forma, permite dar seguimiento y asistencia técnica a los docentes y analizar los factores que están incidiendo o evitando la mejora en el centro escolar. Una aspecto fundamental de un líder efectivo es su capacidad para comunicar e informar oportunamente sobre las actividades a desarrollar, su avance, problemas surgidos durante su desarrollo y posibles alternativas de solución. Será importante para la dirección escolar evidenciar transparencia, a través de sus acciones. La confianza de la comunidad educativa se gana por medio de acciones sistemáticas y coherentes que reflejan un interés legítimo por el bienestar y el aprendizaje de los estudiantes. En este capítulo se orienta al director, a los docentes y a los miembros de los organismos de administración escolar en aspectos relacionados con la función del director, como líder, la importancia de que una institución educativa este organizada, la necesidad de trabajar con procedimientos claros y normas al servicio del aprendizaje.
1. El liderazgo en la dirección escolar
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En todo centro educativo el liderazgo la dirección es determinante para el logro de los objetivos de aprendizaje. Sobre la dirección recae la responsabilidad de administrar los procesos de planificación, organización, dirección, control, seguimiento y evaluación del centro escolar. Es necesario que las directoras y los directores reconozcan la importancia de su gestión como elemento clave en el aprendizaje.
La dirección y la comunidad educativa son responsables de lograr que los diferentes procesos de planificación (PEI, PEA, planificación didáctica) tengan un nivel adecuado de participación y consenso. Será, además, responsable de organizar el centro escolar en sus tres equipos fundamentales: Pedagógico, de gestión y de evaluación. Para la conformación de estos se delegarán responsabilidades y se tomarán decisiones de tal manera que se fortalezca el liderazgo participativo. De igual forma, la dirección escolar promoverá procesos de autoevaluación institucional, de aprendizajes y de desempeño del docente, utilizando herramientas como “¿Qué ruta tomamos?” La dirección escolar debe conocer y ocuparse de los indicadores de repetición, deserción, inasistencia y sobreedad. Será responsable por los avances o retrocesos que dichos indicadores tengan. Además, será responsable de velar por el cumplimiento de la ley, de las normas y procedimientos que lleven al buen funcionamiento de la institución. Esto implica el manejo y control disciplinario de estudiantes y docentes. Finalmente, es responsable de los procesos de rendición de cuentas. (Ver documento “La dirección escolar efectiva”).
2. Organización de la institución educativa La organización de los docentes Como ya se mencionó en el apartado anterior, los docentes, bajo el liderazgo del director, deben organizarse en tres equipos que respondan a los tres procesos fundamentales que se desarrollan en las instituciones educativas: los procesos pedagógicos, los procesos de gestión y los procesos de evaluación. De igual forma, deben organizar un consejo de maestros, ya que hay decisiones en el centro que deben ser tomadas por esta instancia. Tradicionalmente en los centros escolares funcionaban comités. Sin embargo, éstos tienen un accionar muy puntual, con poca visión de conjunto. Siendo la institución un sistema, con partes interconectadas, es preferible la organización por procesos, la cual no invalida a ningún comité. En ejemplo de cuándo funciona un comité y cuándo una organización por procesos es el siguiente: el equipo pedagógico identifica que el entorno del centro escolar está desforestado y no hay tratamiento adecuado de la basura. Como primer paso, es probable que sea necesaria la organización de un comité de cuidado del medio ambiente. Sin embargo, una vez terminada las actividades propuestas para la solución del problema, será el equipo pedagógico el responsable de dar seguimiento o de organizar este proceso.
La organización de las alumnos y los alumnos Los estudiantes también deben estar organizados. La conformación de comités al interior del aula es una buena práctica, que debe ser fomentada. Dichos comités contarán con representantes electos a través de prácticas democráticas y representarán a un grado y a un nivel de la institución. Es igualmente importante y recomendable la conformación de un gobierno estudiantil, que apoye el logro de los objetivos de la institución. Los representantes en dicho gobierno saldrán de los diferentes consejos. Esta organización es recomendable a partir de los doce años de edad.
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La organización de padres y madres de familia Es necesario que los padres y las madres de familia se involucren en la administración escolar, ya que sus ideas contribuyen en la toma de decisiones. Un espacio importante para identificar liderazgos en la comunidad lo constituyen las escuelas de padres y madres. La institución educativa debe organizar por lo menos nueve sesiones de escuela de padres y madres al año. Para ello, el Ministerio de Educación ha dotado a los centros escolares de materiales para apoyar su implementación.Cuando la institución educativa está preparando el PEI, es necesario organizar a los padres y madres para que aporten sus ideas y se comprometan con la visión, misión, y objetivos para la mejora continua de la institución. Los padres de familia también pueden participar en comités para apoyar la solución de problemas específicos, identificados en actividades de autoevaluación con la estrategia “¿Qué ruta tomamos?”
3. Procedimientos claros para lograr mayor efectividad Los procedimientos de mayor interés, sobre los que debe facilitarse información y asistencia a la comunidad son: • Matrícula escolar • Elección del organismo de administración escolar local • Asignación grados a los docentes • Elaboración de planes estratégicos • Elaboración de planes didácticos • Adquisición de bienes y servicios • Registro de bienes • Control de asistencia de maestros y alumnos • Procesos y resultados de la evaluación de los aprendizajes • Emisión de constancias, notas y otros documentos oficiales de la institución • Permisos de los estudiantes y maestros Los procedimientos deben ser claros y sencillos de manera que no compliquen la labor administrativa ni de la dirección, ni de los docentes. En muchos casos, los procedimientos quedarán establecidos en el proyecto de gestión del PEI y en el manual de convivencia. Para apoyar está labor se cuenta además con instrumentos como la normativa y procedimientos para el funcionamiento de los CDE, CECE y ACE.
4. Normas al servicio de los aprendizajes
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Toda institución educativa debe ser respetuosa de las normas y del marco legal vigente. Tanto la dirección del centro escolar como los docentes deben ser conocedores de las principales normativas, a fin de no cometer errores por desconocimiento. Las orientaciones sobre las normas de las instituciones educativas están sobre todo en los siguientes documentos:
• Ley de la carrera docente • Reglamento de la ley de la carrera docente • Ley de asuetos, vacaciones y licencias de los empleados públicos. • Normas de las instituciones educativas • Normativas y procedimientos para el funcionamiento del CDE, ACE Y CECE • Normas de control interno • Manual de convivencia o reglamento interno
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III.
Procesos de evaluación al servicio del aprendizaje
Los procesos de evaluación al servicio del aprendizaje son aquellos en los que de manera continua se revisa el avance de los conocimientos, de las habilidades y de las actitudes positivas de los estudiantes. Esto con el fin de retroalimentar los vacios que permitan a las niñas, los niños y los jóvenes continuar su proceso con normalidad y sin ningún tipo de obstáculos como contenidos no entendidos, aplicaciones no realizadas, análisis incompletos, etc. Los docentes no deben esperar a que el alumno fracase y mucho menos tener bajas expectativas de los resultados de los alumnos.Tienen la responsabilidad de brindar apoyos oportunos, reconociendo que los ritmos y estilos de aprendizaje son diferentes en cada niña, niño, joven o adulto. Cuando un docente se mentaliza para el éxito de sus alumnos y alumnas seguramente lo alcanzará. El Ministerio de Educación ha entregado el documento “Evaluación al servicio del aprendizaje”, el cual constituye la herramienta básica para que los docentes realicen un proceso de evaluación orientado a obtener resultados efectivos en el aprendizaje. A continuación se hacen algunas consideraciones sobre aspectos relacionados con la evaluación:
1. Cómo conocer las necesidades educativas del estudiante Existen tres instrumentos básicos que pueden ayuda a conocer las necesidades educativas de los estudiantes y que le pueden brindar a la dirección y a los docentes información valiosa para desarrollar una relación más efectiva con las niñas, los niños o los jóvenes, así como a conocer cómo abordarles en los diferentes campos para procurar su bienestar. A continuación se presentan tres de estos instrumentos:
Los juegos Son un excelente medio para conocer a las personas y más aun a las niñas y los niños. Lo importante es que la interpretación de la información aportada por el juego se haga siempre en relación con el contexto en el cual se da. En el caso de los juegos espontáneos y libres, lo que prima son los intereses de quienes participan y para los efectos de sus interpretaciones volvemos a reiterar que tras cada interés existe una necesidad. Es difícil para un maestro sacar conclusiones a partir de las observaciones realizadas en un juego. Sin embargo, puede ser un indicio para investigar y profundizar más sobre determinados comportamientos con el apoyo del especialista adecuado, como psicólogos, terapistas, neurólogos, etc.
La autobiografía
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Es uno de los recursos que en cualquier momento se puede elaborar. Lo importante es que quien la elabore este lo suficientemente motivado para
referir con profundidad los diferentes aspectos que conforman su vida. Naturalmente, que su información tiene carácter confidencial.
Los cuestionarios Estos, que pueden versar sobre diferentes aspectos, se presentan en forma oral o escrita. En su elaboración se debe cuidar que el nivel de las preguntas este en armonía con el desarrollo de quién lo administra y del que responde. En algunos casos puede ser conveniente hacerlos anónimos, de manera que se de una mayor apertura del participante. A parte de los tres instrumentos mencionados, que son parte de una batería mucho mayor de elementos utilizados en procesos de investigación, a continuación se presentan algunas dinámicas y juegos que pueden apoyar la labor de la dirección y del docente en el conocimiento de las necesidades e inquietudes de los estudiantes: ¿Qué me gustaría hacer? Esta dinámica se puede elaborar en hojas prensadas donde, en cualquier momento, el estudiante anota un tema que le interesa desarrollar particularmente, agregando su nombre y fecha. Estas hojas deben estar al alcance del estudiante, las hojas deben contener en su parte superior la pregunta ¿Que me gustaría hacer?
El buzón Esta dinámica posibilita la comunicación privada entre los estudiantes y los docentes. Consiste en dar a conocer, por medio del papel, inquietudes personales, de manera abierta y anónima. Puede construirse con una caja de cartón colocada en un lugar visible. Periódicamente el maestro revisará el buzón y dependiendo del mensaje, planificará su acción orientadora. Es fundamental que el docente le indique a los estudiantes que el buzón es un mecanismo importante de trabajo y que, por ello, debe ser utilizado siguiendo siempre un estricto sentido de respeto. Será importante, en esta dinámica, que el docente le muestre a los estudiantes que el anonimato no le permite a una persona ser irrespetuosa, intolerante o abusadora.
Historietas Primero se le muestra al estudiante, a modo de ejemplo, una historieta de no más de ocho escenas, que conste de la presentación de la problemática, un desarrollo y un desenlace, todo a través de dibujos con diálogos. Esta técnica incluso nos sirve para conocer la actitud del alumno ante la problemática y sobre todo, su criterio moral. Para realizarla se necesita un pliego de cartulina , donde se aprecie una historieta y hojas para cada alumno, donde ellos dibujarán y escribirán su historieta.
Fichas Esta dinámica utiliza un set de fichas con enunciados a manera de “temas sugeridos”. Los temas corresponden al área personal, social y comunitaria.A modo de ejemplo del área personal, podría ser: “Cuéntanos un sueño”. Del área social:“Mi mejor amigo”. Del área comunitaria:“Un fin de semana en mi comunidad”.
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Al elaborar el fichero, se recomienda dedicar una ficha por “tema sugerido”, conformando éstas un fichero temático el cual, gradualmente ira acrecentándose con otras temáticas desarrolladas por los estudiantes y que no estaban consideradas inicialmente en el fichero.
2. Preparación de los docentes para la entrega de notas La entrega de notas es una actividad en donde se presenta el resultado de una fase del proceso de aprendizaje, que intenta reflejar de la manera clara los logros de aprendizaje de los estudiantes. A continuación se presentan algunas sugerencias para los docentes: • Socialice individualmente o en grupo los resultados de los estudiantes. Resuelva los exámenes o pruebas con el objeto de analizar los ítems en los cuales han tenido mayor dificultad los estudiantes, con el objeto de buscar las formas más adecuadas para apoyar a las niñas, los niños, los jóvenes y los adultos que presenten resultados bajos o simplemente dificultad en un tópico específico. • Comunique a los padres de familia sobre la existencia de tareas ex - aula, trabajos en grupo y fechas de exámenes. La idea de esta comunicación es que el padre o madre de familia apoye a su hijo en el cumplimiento de estas actividades a través de acciones de mejora , compromisos verbales y escritos. • Tome en cuenta que las calificaciones reflejan muchos factores además de los logros académicos: esfuerzo de los estudiantes, persistencia, conducta en el salón de clases y numerosos aspectos que pueden llevar a evaluaciones subjetivas. Antes de la entrega de notas es recomendable que la dirección, los docente e idealmente los miembros del organismo de administración se reúnan, compartan y analicen los resultados. Aunque esta puede ser una labor relativamente exhausta, la información y el tipo de decisiones que de estas sesiones deriven pueden cambiar la vida de los estudiantes.
3. Análisis de los resultados de las evaluaciones del estudiante desde la perspectiva del docente Al diseñar las actividades de evaluación: • No olvide definir el análisis de resultados de cada uno de sus estudiantes. • Defina junto a sus estudiantes cuáles son aquellos puntos en los cuales tuvieron mayores dificultades, tomando en cuenta los diferentes momentos de evaluación, las pruebas objetivas, tareas, investigaciones, revisión de cuaderno, etc.
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• Pida a los estudiantes que califiquen algunos trabajos en clase, para que exista retroalimentación inmediata. • Deje que los estudiantes comprueben sus propias respuestas, esto permitirá que, por ejemplo las tares ex aula sean una experiencia de aprendizaje y ahorrar tiempo en la calificación de sus trabajos. • Insista en que cada estudiante guarde todos sus trabajos calificados hasta el final del año escolar. • Enseñe a sus estudiantes a editar y revisar sus trabajos antes de regresárselos, esto evita leer repetidamente malas redacciones. • Ayude a los estudiantes a comprender donde se equivocaron y cuál es la causa del error para corregir así, las faltas y errores. • A los estudiantes con resultados bajos se les debe dar un tratamiento individualizado junto al padre de familia o responsable. Se deben buscar las causas del resultado y buscar acuerdos en consenso, donde se refleje el compromiso del estudiante, padre de familia y del mismo docente.
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Bibliografía • Colección Cipotas y Cipotes. Ministerio de Educación, El Salvador 2008. • Currículo al Servicio del Aprendizaje. Aprendizaje por Competencia. Ministerio de Educación. El Salvador, Marzo 2008. • Día a Día en la Escuela. Dirección Nacional de Educación. Departamento de Desarrollo Curricular, Ministerio de Educación. El Salvador, 1997. • Dirección Escolar Efectiva. Documento 4 de la Colección Escolar Efectiva al Servicio del Aprendizaje, Ministerio de Educación. El Salvador, 2008. • Evaluación al Servicio del Aprendizaje. Evaluación por Competencia. Ministerio de Educación. El Salvador, Mayo 2008. • Gestión Escolar Efectiva. Documento 1 de la Colección Escolar Efectiva al Servicio del Aprendizaje, Ministerio de Educación. El Salvador, 2008. • Guía para la elaboración o revisión del Proyecto Educativo Institucional PEI-PEA Plan Escolar Anual. Documento 2 de la Colección Escolar Efectiva al Servicio del Aprendizaje, Ministerio de Educación. El Salvador, Agosto 2008. • Manual de Elaboración de materiales didácticos. Primer Ciclo de Educación Básica. Dirección Nacional de Educación. Departamento de Desarrollo Curricular. Ministerio de Educación. El Salvador, 1997. • Normativa de Funcionamiento Institucional. Documento 5 de la Colección Escolar Efectiva al Servicio del Aprendizaje, Ministerio de Educación. El Salvador, 2008. • Organización Escolar Efectiva. Documento 3 de la Colección Escolar Efectiva al Servicio del Aprendizaje, Ministerio de Educación. El Salvador, 2008.
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