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IDENTIDAD GRÁFICA VENEZOLANA EL LIBRO VOL. 1
Iconos Venezolanos Samuel Schoenberger Caracas - Venezuela Octubre 2017 Corrección Marucha Piñero Diseño Gráfico Javier Alvarado Samuel Schoenberger Impresión y encuadernación Kenco Tiraje 50 ejemplares Derechos Reservados Samuel Schoenberger, 2017 @iconosvenezolanos iconosvenezolanos.com iconosvenezolanos@gmail.com Impreso en Venezuela
Todo el contenido de este ejemplar pertenece a sus respectivos autores, acreditados junto a cada una de sus piezas. Queda advertido y prohibido, salvo excepciones previamente autorizadas, la reproducción electrónica, química, mecánica, digital -de grabación o de fotocopia-, distribución, comunicación pública y transformación de cualquier parte de esta publicación, incluido el diseño de la portada, sin la previa autorización escrita del titular de la propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual. Los iconos y otros signos distintivos que se incluyen dentro de este libro han sido suministradas por sus titulares y/o terceros debidamente autorizados. Los iconos plasmados en este libro son utilizados con fines educativos e informativos y con propósitos comerciales en sí mismos. Iconos Venezolanos es una marca registrada
Agradecimientos Especiales Mary Quintana - Robert Veiga - Erika Dieguez - Karen Cortés - José José Villamizar - Jesús Cedeño - Kensy Rondón Colaboradores Marcelo Volpe - Manuel Lara - Manuel “Sombi” Guevara - Alejandro O’Connor - Luis Gerardo Torres - Carlos Spitia - Gregori Mujica - Giovanni Cabibbo – Ramón Marcano Organizaciones Kenco - La Guía de Caracas - Kocars - Schoenberger Group “Gracias totales” A quienes creen profundamente en este proyecto
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Por lo que pasรณ y lo que pudo ser. Por lo que estรก pasando y no vemos. Por lo que vendrรก y pudiera pasar.
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Somos un proyecto de comunicación visual que busca representar la identidad gráfica venezolana mediante un lenguaje universal para otras culturas. Como son iconos, nos permiten transmitir el mensaje más allá de la barrera del idioma. El proyecto Iconos Venezolanos nace desde el laboratorio de la calle, en el día a día, por la necesidad de expresar la cultura. Nos referimos a una visual comprimida en simples bloques de colores y líneas que nos conectan con cualquier elemento que nos identifique con nuestra tierra. Nos mantenemos al margen de cualquier movimiento político, religioso o de género. Creemos profundamente que todos somos iguales, sin importar nuestros gustos, colores u orígenes. Debemos sentirnos orgullosos de lo que tenemos, de lo que somos y de donde venimos.
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Con estos ideales emprendemos un proyecto, una marca y una familia, en medio de circunstancias diversas que nos motivan a hacer más de la cuenta. Confiamos profundamente en lo hecho en casa y en que el sabor de las raíces nada lo iguala; por ende, seguiremos inventando y creando, levantándonos tras cada tropiezo para lograr nuestro objetivo. A lo largo de nuestro crecimiento como comunicadores nos hemos topado con diversos personajes que respetamos, admiramos y estimamos por su trabajo - que va de la mano de su filosofía de vida-, a quienes, bajo una lupa muy exigente, hemos invitado a unirse a esta familia, con una participación única de su visión de la esencia criolla. A lo largo de este proyecto encontramos diferentes colaboraciones de varios artistas, diseñadores y comunicadores que hoy conforman una gran familia, una red de diseño venezolano y latinoamericano. Universalmente el arte es interpretado como el medio por el cual los seres vivos expresamos nuestra forma de ver el mundo; con esto reforzamos que mientras tengamos fuerzas e ideas para crear, seguiremos viviendo para amar lo que hacemos y hacer lo que amamos.
“Todo es pasión, todo es diseño” Samuel Schoenberger.
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Prólogo Inspiración + pasión para y por la ciudad son los puntos que unen a @iconosvenezolanos, @kencoestudio y @laguiadecaracas. Venezuela es más que lo conocido; ella nos sorprende con rincones, gastronomía, arte e historia que seguimos descubriendo; pero lo que realmente representa a esta maravillosa tierra del caribe es su gente, aquella que desde el trabajo y persiguiendo sin descanso sus
sueños logra apreciar la belleza en medio del caos. Entre líneas, Iconos Venezolanos nos recuerda aquellos instantes, sensaciones y objetos que están en nuestra esencia, desde una síntesis gráfica y de emociones. ¡Definitivamente en la unión esta la fuerza y esto apenas comienza! Robert Veiga Director de La Guia de Caracas 5
La Avenida Libertador de Caracas está intervenida por una obra extraordinaria del arte cinético mundial: Módulo Cromático. Al transitarla, se aprecian vibraciones ópticas creadas con ingenio y sabiduría por el maestro Juvenal Ravelo, nacido el 23 de enero de 1934 en el pueblo de Caripito, estado Monagas, quien luego de formarse en Venezuela partió a París para unirse al movimiento del cinetismo, donde cosechó grandes éxitos y proyección. Dejó su taller en la capital francesa y volvió a Venezuela para traer una fiesta de color a su barrio natal, pintando con sus viejos vecinos las casitas que lo vieron crecer, generando así la participación directa de la gente en el arte, un arte distinto, que, en palabras del escritor argentino Julio Cortázar reivindica a los vecinos olvidados en los rincones alejados de los grandes centros de cultura del mundo, devolviéndoles la felicidad y desarrollando su sensibilidad estética, porque no se puede ver la luz con ojos preñados de sombras. _ Icono de Juvenal Revelo
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Diseñados por Carlos Raúl Villanueva en dirección del Taller de arquitectura del Banco Obrero “TABO” en compañía del arquitecto Guido Bermúdez. Donde la policromía utilizada en el conjunto residencial fue a mano del maestro Mateo Manaure y basados en el modelo de Unité d’Habitation de Marsella del arquitecto suizo Le Corbusier, los bloques del 23 de enero - que inicialmente se llamaría Urbanización 2 de diciembre-, son una postal arquitectónica de Caracas en el auge de su modernización en la década de los 50. _ Icono de Los Bloques del 23 de Enero
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El único de todos los helados que deseas terminar pronto, porque al final hay un regalo sorpresa que ya conocemos, pero que siempre será la razón de la expectativa con cada saboreo. Tina y barquilla en uno solo y que no se derrama… ¿Qué más se puede pedir?, si hasta el color es de los favoritos. ¡Vacílatelo! _ Icono del Helado Bati Bati
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Un momento histórico que marcó un punto de no retorno en la historia de nuestro país: El reventón del Barroso 2 la madrugada del 14 de diciembre de 1922, en el caserío La Rosa del municipio Cabimas en la Costa Oriental del Lago de Maracaibo. Un estruendo que parecía anunciar un terremoto disparó piedras de la tierra y, como un cañón subterráneo, expulsó petróleo en una columna que se erigió a 100 metros de altura y una lluvia de oro negro que no cesó en ningún instante durante nueve días. Con este hecho Venezuela revelaba su potencial petrolero, ocupando las portadas de los diarios de todo el mundo. _ Icono del Reventón Barroso 2
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Ella es la invitada de honor en nuestras reuniones; con su temperatura fría de invierno y sus besos cálidos del caribe, entregada a las manos que la acarician, bendice sin distinción la salud por los deseos. Anatomía con curvas, ergonómica al agarre, propulsora de risas y santa patrona de los cuadres, la negra es la que promulga la eterna ley del beneficio del trago. Con sorbos de sinceridad absoluta es la testigo de las sonrisas que alumbran las mesitas, barras, pistas y donde sea que decidas compartir con ella. La única e inigualable y, sobre todo, la nuestra: la polarcita. _ Icono de la Polarcita
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“Arte, arquitectura y academia” es el significado de los tres soportes entrelazados de la base del reloj universitario formado por tres discos que reposan en un prisma virtual, cuya estructura superó su función original de soporte de un mecanismo que marca el tiempo para convertirse en símbolo de la universidad moderna. Juan Otaola Paván, quien fuera la dupla de Carlos Raúl Villanueva en la concepción de esta obra, que como parte de la Universidad Central de Venezuela es patrimonio de la humanidad, deja una interesante anécdota para la sazón de nuestro conocimiento:
Cogí su plano, un escalímetro, una regla de cálculo, tres lápices y les saqué punta por ambos lados. - ¿Qué vas a hacer?, preguntó Villanueva. Cogí dos cartones, medí la escala en el plano, tomé la regla de cálculo y obtuve los tres puntos de un triángulo equilátero. Colocando este cálculo sobre los dos cartones, tome un compás de punta seca y puyé los cartones sobre los tres puntos del triángulo. Tomando un cartón inserté los tres lápices y luego tomé el otro cartón para hacer lo mismo hacia el otro extremo de los lápices y le pregunté:
En el diseño del reloj de la Ciudad Universitaria de Caracas, yo respeté el volumen diseñado por Villanueva. Era el mismo reloj, con la diferencia en las piernas, que eran tres. Yo no cambié nada de lo que él quería. Vi el dibujo y le dije: - Tigre, yo lo veo bien, pero a mí me parece una tontería hacer eso así. Esto hay que hacerlo más puro. - ¿Y qué llamas tú más puro?, respondió Villanueva.
- -
Tigre, ¿Cómo te suena? ¡Carajo, si esto es lo que yo quiero!
_ Icono del Reloj de la UCV
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Su nombre es José Bestilleiro, original de La Coruña; llegó a Venezuela a los 25 años de edad y decidió que este sería su país. Ahora tiene 84 años y desde hace más de una década se convirtió en una atracción de La Candelaria con su medio bigote y un hula-hula con el que hace malabares con destreza propia del fullerismo criollo. Echa’o pa’lante, el humo le dañó los pulmones y el hula-hula se convirtió en su arte y oficio. Vacila en vivo al señor José cada día, entre las 3 y las 6 de la tarde, en la Av. Urdaneta con Av. Norte 13, a escasos pasos de la plaza La Candelaria.
_ Icono del Sr. José - Malabarista de la Candelaria
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Con amor se hacen, formadas con manos de ternura, caricias, apretones y sigilos que bordean las curvas, calentándolas con pasión y fuego. Aroma de hogar, de madre, de mesa servida. El bocado entre un “buen provecho” y un “gracias a Dios” que se celebra con gusto, se come con las manos. _ Icono de la arepa con jamón y queso de mi mamá
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La Plaza Altamira, construida por el empresario y urbanista Luis Roche, se inauguró con dicho nombre el 11 de agosto de 1945. Posteriormente, en 1967, se oficializó el cambio de nombre por Plaza Francia, luego de un convenio entre las ciudades de Caracas y París para tener una Plaza Francia en Caracas y una Plaza Venezuela en París. Roche tenía en su visión que la obra contara con un elemento emblemático, por lo que contrató a los hermanos Julián y Luis Martin para la construcción del Obelisco de la plaza, con la intención de que fuera “más alto que la Catedral de Caracas”. De ésta manera el esbelto Obelisco se convirtió en el primer proyecto de esa naturaleza diseñado para el área metropolitana.
_ Icono del Obelisco de la Plaza Francia
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Lo más cercano al último refresco del desierto, el remedio pa’l calor más fullero que se pueda conseguir. Como buen venezolano, son varios los nombres que se le ponen: cepilla’o, raspa’o, snowball; lo cierto es que su consistencia se obtiene de raspar una panela de hielo con un instrumento hueco de metal llamado cepillo. Luego el “cepillaero” hace su magia aplicando la esencia que le pidas: colita, limón, naranja, tamarindo, piña y casi cualquier fruta; y en el tope no puede faltar la leche condensada, porque sin dulce no hay paraíso. _ Icono del Cepillao’
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Cuenta la leyenda que el Cacique Yaracuy tenía una hija
muerto, la joven huyó del lugar a la montaña de Sorte y
de nombre Yara y ésta, por tener ojos verdes, estuvo a
nunca más volvió a ser vista.
punto de ser sacrificada por su propio padre para evitar
Desde entonces fue conocida como “María la de la Onza”
los males que ese verdor auguraba.
y con el paso del tiempo pasó a ser “María Lionza”. Mu-
El consejero principal del Cacique, el indio Manaure, le
chos venezolanos la veneran hasta el día de hoy y rinden
pidió llevársela y ,desde ese entonces, la niña vivió en
tributos a la que consideran “Gran Madre”, subiendo a la
la montaña de Sorte. Al llegar las filas españolas a con-
montaña en donde desapareció.
quistar el territorio, Yara aconsejaba a los indígenas y
Su nombre forma parte del imaginario espiritual vene-
apoyaba “la lucha contra el invasor”.
zolano y su figura, esculpida por Alejandro Colina, acom-
Los españoles lograron contactarla usando a la Iglesia
paña a los caraqueños que transitan por la autopista
como intermediaria. El día que Yara se reunió con una
Francisco Fajardo.
monja que le sugurió decir que su nombre era “María” y cubrir su cuerpo desnudo, las filas ibéricas tomaron con-
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trol de la zona y mataron a su padre, el Cacique Yaracuy.
Icono del Monumento a la Reina Maria Lionza
Antes de enterarse de la masacre, Yara fue aconsejada por otros aborígenes a llegar montada en una danta, también llamada Onza, para enaltecer su entrada al amurallado español. Cuando se percató de su padre 27
EEl Museo de los Niños es un sueño que tomó casi diez
personajes de tiras cómicas con el cual los niños se
años en hacerse realidad. En ese periodo de tiempo la
identificaran. Un niño simpático, curioso y juguetón:
señora Alicia Pietri de Caldera, quien concibiera la idea
Museito. La combinación de Museito jugando con el ar-
desde inicios de los años setenta, dedicó sus esfuerzos a
coíris simboliza la oportunidad que se da a los niños de
la búsqueda de apoyo, alianzas y amplia investigación,
divertirse mientras aprenden”.
para darle forma a la idea de que los niños tuvieran un
Jorge fue contratado como Director de Arte del museo
espacio increíble para aprender jugando acerca del arte,
y ocupó el cargo durante 18 años, creando escenas ge-
la ciencia y la tecnología, con la máxima fundamental
niales que muchos niños, hoy adultos, aún recordamos.
de “Prohibido no tocar”. Cuando todo esto se estaba gestando, el museo requería de un símbolo que lo identificara, entonces abrió un concurso en el que el artista Jorge Blanco resultó
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ganador con una propuesta basada en la combinación
Icono del Museito. Tributo al diseño original de Jorge
de dos aspectos: el mundo de la ciencia y los niños.
Blanco para el Museo de los Niños
En sus propias palabras: “Pensé en el arcoíris porque representa la luz, algo básico en el universo. Además, es algo mágico, que fascina a los niños. Busqué una representación que tuviera tanta fuerza como algunos 29
Ese sonido que hacía música a las sonrisas de la niñez. La alegría dibujada y compartida en un diálogo entre el señor polero y nosotros del pasado. La efe de felicidad fue protagonista de momentos que con facilidad quedan grabados. Todo eso y más significan un carrito de helados, en todas las épocas. _ Icono del Carrito de helados Motorizado EFE
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Muchas veces son el primer asiento que tomamos al iniciar el dĂa y, cuando no es asĂ, es porque vamos de pie. Sus cuatro ruedas y espacios colectivos no fallan para ser el medio que usamos para llegar a las clases, a la chamba, a las diligencias y para regresar a casa. Las arterias de la ciudad son la pista y ellas ponen las letras y letreros que nos indican a donde llegar. _ Icono de la camionetica por puesto
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Desde lecturas hasta adrenalina, cuentos con atmósfera de vagón y pilas puestas con sonrisa chill. Contacto visual de coqueteo con las capitalinas que acarician con sus miradas y tumba’o el espacio que compartimos. Sobre rieles y a velocidad caraqueña, subterráneo a la sucursal del cielo, el Metro es escenario de miles de historias todos los días, desde antes del amanecer hasta casi la medianoche. Fue inaugurado el 2 de enero de 1983 y su conceptualización gráfica inicial fue abordada por BMPT (Bermegui, Menéndez, Posani y Tabito) y en el desarrollo de dicho concepto trabajaron el arquitecto Max Pedemonte y el artista plástico Erling Oloe. El diseño del mapa original del metro corrió por cuenta del maestro Santiago Pol.
_ Icono del Metro de Caracas
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Si el amor entra por el paladar, la conquista absoluta es con un golfeado. Estos pancitos enrollados como un caracol son la especialidad de la panadería donde los busques. El secreto de la receta está en el cariño con que se preparan. Relleno de papelón rallado, aromatizado con anís en especie y una porción de quesito ‘e mano encima, es, en definitiva, la merienda más venezolana, romántica y sabrosa. _ Icono del Golfeado
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La esfera de Soto o esfera de Caracas es una de las obras maestras del artista venezolano Jesús Soto. Instalada en diciembre de 1996 en el marco del programa “Un cariño para mi ciudad”, la obra está compuesta por 1800 láminas de aluminio de color anaranjado que construyen, en conjunto, la esfera y la hacen visualmente inseparable del observador, ya que es la ilusión percibida por la mente lo que completa el resultado de la observación, y si ésta se hace desde un carro o moto en movimiento, el espectáculo es inigualable. _ Icono de la Esfera de Soto
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La anatomĂa de la naturaleza contemplada y perpetua, como pechos mĂsticos y empinados a los ojos de la tierra que observa con vestiduras de concreto. Elevados somos en sus pulmones de vida, maravillados por su magia en lo alto de la sucursal de ĂŠste y otros cielos. _ Icono del Waraira Repano - Cerro el Ă vila
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“El médico de los pobres” trataba el cuerpo y el alma con trato cálido y lleno de cariño, indagando en los problemas y el ánimo de los enfermos, concluyendo que las causas del malestar no eran estrictamente físicas sino también emocionales. Como si el aura leyera y el plano de la ciencia trascendiera, el doctor José Gregorio Hernández hacía milagros que curaban y la fe depositada en él, aún hoy, es la creencia de la salvación de muchos en Venezuela y más allá. Nació en el pueblo de Isnotú, en el estado Trujillo, el 26 de octubre de 1864. Murió de forma trágica al golpearse la cabeza con el borde de una acera en consecuencia del impacto con un automóvil en la esquina de Amadores, La Pastora, Caracas. La fe de quienes lo veneran lo han hecho inmortal, un guardián milagroso, cuyos restos reposan en la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria, en pleno centro de Caracas. _ Icono del Dr. José Gregorio Hernández
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El levantón andino es una peculiar bebida famosa por sus propiedades curativas y afrodisíacas que se consigue en los mercados municipales de Mérida. Comentan que los ingredientes son: melón, lechosa, piña, mora, fresa, nestum, leche en polvo, leche líquida, huevos de codorniz, huevas de pescado, huevos criollos, ojos de buey, chuchuguaza, brandy, miche andino, vino sansón, miche callejonero, ron, dos licores secretos, cerveza y el secreto de las manos que lo preparen. El resultado es una merengada rosada con la certeza de un sabor fenomenal y una energía de puro nivel. _ Icono del Levantón Andino
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DEL CARIBE CON AMOR.
Índice Icono de Juvenal Ravelo por Marcelo Volpe Pág. 06 Icono de los Bloques del 23 de Enero por Manuel Lara Pág. 08 Icono del Bati Bati Pág. 10 Icono del Reventón del Barroso 2 por Carlos Spitia Pág. 12 Icono de la Polarcita por Manuel “Sombi” Guevara Pág. 14 Icono del Reloj de la UCV Pág. 16 Icono del Sr. José de la Candelaria Pág. 18
Icono del Monumento a María Lionza por Gregori Mujica Pág. 26 Icono del Museito tributo al diseño original de Jorge Blanco para el Museo de los Niños Pág. 28 Icono del Carro motorizado de Helados EFE por Luis Gerardo Torres Pág. 30 Icono de la Camionetica por puesto Pág. 32 Icono del Metro de Caracas Pág. 34 Icono del Golfeado por Manuel “Sombi” Guevara Pág. 36 Icono de la Esfera de Soto por Giovanni Cabibbo Pág. 38
Icono de la Arepa con Jamón y Queso Pág. 20
Icono del Waraira Repano / Cerro el Ávila por Alejandro O’Connor Pág. 40
Icono del Obelisco de Altamira Pág. 22
Icono del Dr. José Gregorio Hernández por Marcelo Volpe Pág. 42
Icono del Cepilla’o Pág. 24
Icono de El levantón andino Pág. 44
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Referencias Reloj Universidad Central de Venezuela Entrevista realizada por Silvia Hernández de Lasala al Ingeniero Juan Otaola, el 27 de enero de 1993, Caracas. Disponible en el Centro de Documentación de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Central de Venezuela. Monumento a la Reina María Lionza Texto de Francis Peña, publicado en el portal www.laguiadecaracas.net Museito www.maravillosarealidad.com 54
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