Cervantes: el nitrógeno

JORGE CERVANTES

Nitrógeno

Los macronutrientes son los elementos que las plantas utilizan más, y deben estar presentes en todo momento para que el crecimiento se desarrolle bien. La mayoría de fertilizantes suelen incluir los porcentajes de nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K) como N-P-K con números grandes en la parte frontal del envase. Siempre se muestran en el mismo orden N-P-K. Estos nutrientes han de encontrarse siempre de forma disponible (soluble), para proporcionar al cannabis los elementos básicos para el crecimiento rápido. El nitrógeno es el nutriente que suele faltar con más frecuencia.

Nitrógeno (N)—móvil (esencial)

Se necesitan niveles altos de nitrógeno durante el crecimiento vegetativo, pero se requieren niveles más bajos durante las fases plantular, de clonación y de floración. Reducir los niveles de nitrógeno causa una floración más temprana y un aumento de los niveles de ácido abscísico (hormona).

El nitrógeno regula la capacidad de la planta de cannabis para producir proteínas esenciales para el nuevo protoplasma de las células, y otras muchas funciones. Principalmente, es responsable del crecimiento de las

hojas y los tallos, así como del tamaño y el vigor en general. El nitrógeno es más activo en los cogollos jóvenes, los brotes y las hojas. El cannabis Los bordes de las hojas pueden decolorarse. Las hojas continúan amarilleando, y pueden doblarse, desarrollar manchas marrones y empezar a caer a medida que la deficiencia progresa. El crecimiento se ralentiza en plantas más bajas de lo normal, las cuales tienen hojas más pequeñas y tallos más finos. El amarilleamiento de las hojas avanza hacia arriba en las plantas. Aparecen señales prematuras de floración en plantas con aspecto enfermizo. El rendimiento disminuye sustancialmente.

Causa: El nitrógeno es altamente soluble y se expulsa fácilmente de los medios de cultivo con el riego. Debe ser repuesto con regularidad, especialmente durante el crecimiento vegetativo. La materia orgánica en descomposición y los microorganismos del suelo pueden consumir el nitrógeno disponible en la tierra y agotarlo más deprisa que las raíces.

El nitrógeno se consume a gran velocidad durante el crecimiento rápido, y podría darse una deficiencia ligera; aunque esté disponible, es posible que las raíces no sean capaces de suministrar nitrógeno a un ritmo lo bastante rápido. Los niveles de nutrientes en el interior de las plantas dan abasto cuando el crecimiento se

ralentiza. La causa podría ser una cantidad inadecuada de nitrógeno en el programa de abonado, o el uso de un medio de cultivo con una baja CIC (capacidad de intercambio de cationes), que no está pensado para el uso de la fórmula de nutrientes. Las enfermedades como Fusarium y Pythium pueden cortar el flujo de fluidos y el aporte de nitrógeno, pero tienen síntomas específicos aparte de la falta de nitrógeno.

Confusión con: Deficiencia de potasio. La coloración rojiza que causa la deficiencia de potasio en los tallos y en el envés de las hojas puede ser malinterpretada en variedades de cannabis que tienen tallos y peciolos de color morado rojizo de manera natural.

Solución: Haz que drene el medio de cultivo con una solución nutriente algo más concentrada. Abona con un fertilizante soluble apropiado, que sea rico en nitrógeno y tenga la proporción adecuada de amonio (NH4+) y nitrato (NO3-); el nitrato, para el medio de cultivo. Las fuentes orgánicas ricas en nitrógeno soluble incluyen la harina de sangre, el guano de aves marinas, la emulsión de pescado, los tés de compost y otros abonos. Comprueba y corrige el pH en la zona de las raíces. Las hojas deberían reverdecer en un plazo de 3 a 5 días. Puede que las hojas muy afectadas no se recuperen, y deberían ser eliminadas. Para obtener resultados más rápidos

en el follaje, abona por vía foliar con un fertilizante soluble y rico en nitrógeno bien diluido. La aplicación en tierra sigue siendo necesaria

absorbe la mayoría del nitrógeno en forma de amonio (NH4+), el cual se asimila con mucha rapidez en forma de aminoácidos principalmente; y el nitrato (NO3-) se asimila más despacio en forma de casi todo lo demás. Las moléculas orgánicas pequeñas también suministran nitrógeno. Ten cuidado cuando utilices amonio, ya que demasiada cantidad puede quemar las plantas. Los fertilizantes hidropónicos incluyen un nitrato de acción más lenta mezclado con amonio. El equilibrio adecuado mantiene más estable el pH de la rizosfera, y los niveles altos de amonio influyen en el sabor de la cosecha.

Deficiencia: La carencia de nitrógeno es la deficiencia de nutrientes más común en el cannabis, ya sea en invernadero, en interior o al aire libre. Los niveles bajos de deficiencia de nitrógeno suelen pasar desapercibidos. Las deficiencias progresan de la siguiente manera:

Primero, el color se aclara y se produce una tonalidad ligeramente amarilla en las hojas maduras más viejas, seguido de la marchitez o caída de la hoja. Las hojas pierden su lustre, volviéndose ligeramente pálidas. También puede observarse que el crecimiento se detiene donde

ha habido una ligera deficiencia durante cierto tiempo. Una deficiencia aguda da como resultado una menor floración.

Hoja con deficiencia de nitrógeno Esta foto de hojas de ‘Pakistani’ muestra la progresión de la deficiencia de nitrógeno (desde la esquina superior izquierda en el sentido de las agujas del reloj). (MF)

cuando se abona por vía foliar, ya que las aplicaciones foliares no se translocalizan. Aunque el nitrógeno es un elemento móvil, permanece en las hojas cuando las plantas se abonan por vía foliar.

Exceso: Primero, las hojas bajas adquieren un color verde oscuro y exuberante, y se vuelven más flexibles. A medida que la sobredosis avanza, las hojas medias y la punta de la planta se ven afectadas. El follaje se debilita y es más susceptible al estrés de temperatura y humedad, así como a los ataques de plagas y enfermedades. Los tallos se doblan y debilitan si se permite que el estrés continúe. A medida que el exceso evoluciona, el sistema de transporte de agua queda restringido y el follaje se vuelve de color marrón cobrizo. Las hojas se vuelven más gruesas y quebradizas, ya que el exceso de NH4 provoca deficiencia de Ca. Los niveles excesivos de nitrógeno en las plantas cosechadas hacen que el cannabis seco tenga sabor “a verde” y su combustión sea pobre al fumar.

Causa: La sobredosis de nitrógeno rara vez es un problema a menos que la tierra esté cargada de este nutriente o se aplique demasiada cantidad mediante la mezcla de abonos. nada a menos que las quemaduras ocasionadas por sales sean un problema. Hay quienes lo relacionan con infecciones virales.

Solución: Drena el medio de cultivo con una solución diluida de fertilizante. Los problemas severos requieren un lavado a fondo para eliminar todos los elementos tóxicos. Añade un fertilizante completo diluido. Reduce la dosis de nitrógeno si la planta se mantiene excesivamente verde. Los resultados deberían poder observarse en un plazo de 3 a 5 días; puede que antes en jardines hidropónicos.

No elimines el nitrógeno en los abonados siguientes al lavado o durante la floración. La cantidad de nitrógeno en la mezcla debe ser reducida, pero no eliminada. El principal problema para el cultivo de cannabis es que el nivel de NH4 sea demasiado alto. Cuando se aplica demasiado N, especialmente en forma de NH4, el nutriente se traslada a la vacuola de las células y se convierte en nitrito o nitrosaminas, y ambas sustancias

provocan cáncer. Hay “expertos” que afirman que la proporción de nitrógeno tiene que ser 1:1, pero los expertos en los que confío piensan que una proporción más reducida, 1:4, es mucho mejor y más segura. Esto proporciona un equilibrio para que la proporción de nitrógeno no se desvíe y se convierta rápidamente en NH4.