Mensajes de N.S. Madre de la Humanidad by Santiago Grasso

Nuestra Se単ora Madre de la Humanidad

Mensajes

Quilmes, Buenos Aires Argentina

1ra Etapa de esta manifestaci贸n 2001 - 2008

1er Ciclo 31 de Octubre de 2001 al 26 de Septiembre de 2002

Expresiones tomadas de los mensajes de este Ciclo. «Se abrirá la tierra y el cielo desaparecerá. El sol dejará de brillar y la tierra será roja. El día se hizo noche y la noche durará para siempre. El sol se oscurecerá pero ... al fin brillará el sol,... será el fin de un principio feliz. La lucha será larga y dura, como la cruz de mi Hijo. La paz está lejos, mis lágrimas son un dolor más. Las puertas del cielo se abrirán; luchen con fe y no con sus manos. Las puertas del cielo están abiertas: solo deben empujar. La fe mueve montañas pero tapa el sol. Los que no estén preparados sufrirán para lo que va a venir: únanse, únanse entre ustedes. Será la salvación. Las pruebas que Dios manda, las da para que se ganen el cielo. Las cosas malas solo hay que saberlas llevar: son pruebas que Dios no da. Todo aquel que piense que todo está perdido, no tiene fe. Todo aquel que se entrega no conoce la vida. “No luchen con sus manos.” Solo aquel que sepa escuchar y sepa transmitir la Palabra de Dios, todo lo que haga será con fe. Solo sabrán escuchar aquellos que hoy tengan fe. ...solo se salvará aquel que quiera escuchar la palabra de Dios, y serán bendecidos por las manos del Señor. Serán salvados, solo se salvarán aquellos que escuchan.»

Mensaje 1 Miércoles 31 de Octubre de 2001 « Sigan orando que los cubro con mi manto. »

Mensaje 2 Viernes 2 de noviembre de 2001 «Yo estoy aquí, mírenme: tengo mis manos abiertas, hacia ustedes, confíen en Mí. Yo estoy aquí, recuerden que deben rezar con fe que estaré con ustedes. »

Mensaje 3 Sábado 3 de Noviembre de 2001 « Mis lágrimas son lágrimas de sangre, lloro de dolor por todos aquellos que hacen el mal, los que mueren... ...están con nosotros. Las heridas las llevará en el corazón, todo aquel que haga el mal. Ustedes recen por mí, Yo les daré fuerza, recen por la paz que cada uno de ustedes llevará. Yo soy la luz, no se olviden de Dios. Dios los ilumina, donde quieran estaré, aquí estoy. »

Mensaje 4 Lunes 5 de Noviembre de 2001 « Felices todos aquellos que están acá. Hay muchos de Uds.que no creen en mí ni en nuestro señor; no difamen ante él, no se ganarán el cielo. Recen, hijos, recen por un mundo mejor, deben ganarse el cielo, si no Dios sabrá qué hacer y será peor. Abran el corazón hacia el más grande. »

Mensaje 5 Viernes 9 de Noviembre de 2001 «Benditos todos los que están aquí, vine para iluminar sus corazones hacia el Señor. Cada uno en sus corazones sabe lo que tiene que hacer. No quiero dejar de estar en cada lugar de su corazón, Él así lo quiere. Confiemos en Él.»

Mensaje 6 Sábado 1 de Diciembre de 2001 «Sean hermanos, sigan brindando a aquellos que menos tienen. Hay que fijarse en Él, tómense de las manos unos a otros. Cuando Yo salga de este cuerpo bendeciré a ella. Estará con cada uno de ustedes, el Padre, el Hijo. Gracias por cada uno que me recuerde en su corazón. Felices, felices, aquellos que trabajan por la paz, porque son hijos de Dios.»

Mensaje 7 Lunes 3 de Diciembre de 2001 «Hijos les di mi bendición, y les dejo la palabra de amor. Estoy feliz, estoy feliz. Escucho sus rezos, su oración, su Padre también. A todo aquel que no bendije, lo voy a bendecir. Reciban mi bendición, Él los bendice también. Cuando terminen recen por la paz que el Señor les da.»

Mensaje 8 Martes 4 de Diciembre de 2001 «Estoy acá, nada pasa, no sufran, no tengo dolor, solo un accidente más, lo que ustedes pueden llegar a tener. Yo estoy entera, nada pasa.

Hay quienes necesitan ayuda, y el dolor de los inocentes parte más, ustedes están conmigo, Yo estoy acá, hoy será la última vez que les doy mi bendición, pero todas las veces que necesiten de mí, me encontrarán aquí. »

Mensaje 9 Sábado 8 de Diciembre de 2001 Día de la Inmaculada Concepción. «Ustedes me dicen: Dios te salve María. Dios la salva y están todos con Él. Hay hermano que hacen el mal a su otro hermano. Ya falta poco, para el final del dolor. Si supieran lo bien que me siento de ver a todos los que se han acercado a Dios. Hoy no seré Yo quien les dé la bendición sino el Padre. Les pido que se arrodillen cierren sus ojos, y lo sentirán muy cerca de su Corazón.» Mensaje 10

Martes 25 de Diciembre de 2001. Natividad del Señor «La luz del sol brillará siempre en sus corazones, hoy es un día especial para mí y todos ustedes. Habrá paz, y esto de hoy, se deberá hacer hasta cuando deje de llorar. Recibirán la bendición a través del agua, el agua que purifica el alma.»

Mensaje 11 Lunes 31 de Diciembre de 2001 «Hijos no sufran, pronto verán el rayo del sol que alumbra la paz del mundo nuevo. El pan no faltará para todos, ya está la del alma. Nos encontrarán unidos y mejor en el nuevo año.»

Mensaje 12 Jueves 14 de Marzo de 2002 «No es un cobarde aquel que baja los brazos y se entrega, sino los que no se los sostienen para seguir adelante con la misión de Dios.»

Mensaje 13 Viernes 15 de Marzo de 2002 «Ayúdense los unos a los otros, porque las puertas del cielo están abierta para todos, y Dios nos pide que nos ayudemos, para que logremos llegar al cielo, con ayuda de Dios y la Virgen.»

Mensaje 14 Sábado 16 de Marzo de 2002 «La sangre de Jesús sudará una vez más para comenzar de nuevo.»

Mensaje 15 Domingo 17 de Marzo de 2002 5º Domingo de Cuaresma «El día se hizo noche y la noche durará para siempre. El sol se oscurecerá pero será el fin de un principio feliz. Solo sabrán escuchar aquellos que hoy tengan fe.»

Mensaje 16 Jueves 21 de Marzo de 2002 « La lucha será larga y dura, como la cruz de mi Hijo. Pero al fin brillará el sol, solo se salvará aquel que quiera escuchar la palabra de Dios, y serán bendecidos por las manos del Señor. »

Mensaje 17 31 de Marzo de 2002 Domingo de Pascua. «Cierren los ojos y arrodíllense. Hoy es un Día de Gloria, el día más maravilloso de mi vida. Aquellos que sintieron mi presencia los llevaré siempre en mi corazón. Aun falta mucho por recorrer. Solo lo harán, aquellos que están cerca de Dios, recuerden... que mi Hijo murió por ustedes y resucitó para la gloria de Dios. La señal de la cruz será por medio del agua bendita. Es palabra de Dios.»

Mensaje 18 Domingo 26 de Mayo de 2002 «El Ángel del Señor llegó del cielo, cada uno de ustedes tiene un pedacito de él. Aquel que mira hacia adelante y no hacia atrás será recompensado, con la bendición del agua y la señal de la cruz. En tiempos difíciles se derramará mucha sangre. Hoy es un día especial, aprendieron a luchar sin preguntar. Hoy fueron útiles y estuve Yo.»

Mensaje 19 Miércoles 12 de Junio de 2002 «La fe mueve montañas pero tapa el sol. El sol dejará de brillar y la tierra será roja. Solo aquel que sepa escuchar y sepa transmitir la Palabra de Dios, todo lo que haga será con fe. Serán salvados, solo se salvarán aquellos que escuchan. Las puertas del cielo se abrirán; luchen con fe y no con sus manos. Es palabra de Dios.»

Mensaje 20 Viernes 28 de Junio de 2002 «No me pregunten dónde estoy. Porque estoy allí nomás, cerca de ustedes. Estoy en cada uno de ustedes. Los que no estén preparados sufrirán para lo que va a venir: únanse, únanse entre ustedes. Será la salvación.»

Mensaje 21 Domingo 7 de Julio de 2002 «Todo aquel que piense que todo está perdido, no tiene fe. Todo aquel que se entrega no conoce la vida. No luchen con sus manos. Las pruebas que Dios manda, las da para que se ganen el cielo. Las puertas del cielo están abiertas: solo deben empujar. Las cosas malas solo hay que saberlas llevar: son pruebas que Dios no da. La paz está lejos, mis lágrimas son un dolor más. Solo aquel que sabe escuchar estará salvado, y aquel que no escucha es porque no quiere escuchar. Aquel que no entiende es porque no quiere. Dios los ama.»

Mensaje 22 Lunes 8 de Julio de 2002 « Griten a los cuatro vientos, griten a los cuatro vientos, griten a los cuatro vientos. (Algunos de los presentes afirman haber escuchado el grito.) Si no quieren escuchar, ahora grito yo. Griten a los cuatro vientos en todo el país, estoy llorando con lágrimas de verdad. Griten a los cuatro vientos, y Dios los escuchará. »

Mensaje 23 Martes 9 de Julio de 2002 «Son los hijos del rigor. Hay que gritar para que entiendan: solo aquel que sepa escuchar será salvado. Solo aquel que sepa escuchar, abrirá las puertas del cielo y el que no escucha es porque no quiere. Se abrirá la tierra y el cielo desaparecerá solo se salvará aquel que quiere escuchar. Griten a los cuatro vientos, esto es verdad.»

Mensaje 24 Jueves 11 de Julio de 2002 «No teman, mi manto siempre los cubrirá. No teman, están haciendo lo correcto. No teman... Teman al odio, teman a la falsedad, teman a todo aquel que no crea en Mí. No teman, están en el camino correcto, mi manto los cubrirá.»

Mensaje 25 Domingo 18 de agosto de 2002 «Bendito es aquel que llega al encuentro. Bendito es el que tiene el corazón abierto. Bendito el que entiende la Palabra y la sabe llevar. Siempre habrá una oportunidad, las puertas se abrirán, siempre estarán protegidos y Dios los ayudará. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.»

Mensaje 26 Lunes 19 de Agosto de 2002 « Siempre que me busquen me encontrarán. Siempre que me necesiten, estaré. Siempre miren hacia adelante. ... Siempre estaré. No teman a la muerte, es la verdadera vida. Los cubro con mi manto. Dios los ama.»

Mensaje 27 Jueves 26 de Septiembre de 2002 «Benditos aquellos que vinieron al encuentro, si entienden bien la ley del Señor. Benditos aquellos que transmiten la palabra. Todo aquel que sabe escuchar, sabe transmitir. Todos siempre... (faltan dos palabras)... llegarán a su fin. Gloria al cielo y paz en la tierra. Benditos los que vinieron al Señor. Fin del Primer Ciclo

2do. Ciclo 31 de Octubre de 2002 al 12 de Septiembre de 2003

Mensaje 28 Jueves 31 de octubre de 2002 a un año del primer mensaje. «Hijos, han venido al encuentro del Señor en nuestros días, hoy y los demás días. El Señor los defenderá contra el odio. A partir de ahora yo les enseñaré a defenderse del odio. Tienen un arma muy poderosa: la oración. La tienen que saber utilizar, difúndanla. Dios todopoderoso está con ustedes, Él les da su bendición.»

Mensaje 29 Domingo 10 de noviembre de 2002. «El poder no es poder sin reino, todo se destruye. Solo la Fe no dejará que los mares no se tiñan de rojo con la sangre de mis ojos y de los más queridos.»

Mensaje 30 Miércoles 27 de noviembre de 2002. «No se dejen ahogar, saquen las manos afuera. En vano, en vano es todo lo que hago. Hacen el fuego contra el viento, no quieren entender. Esto es verdad. ¿Qué más quieren que haga? Griten, salven a los demás, sino gritaré Yo.»

Mensaje 31 Jueves 28 de noviembre de 2002. «Hijos: Ya no sé de qué forma hablar, que idioma debo usar. Solo quiero que se salven. Mírense a los ojos y si miran atrás deben aprender a cambiar. Deben entender. Únanse, yo no sé que más hacer.

Dios los ayuda y los guiará a que se salven. Solo depende de ustedes, a ellos hay que ayudar.»

Mensaje 32 Miércoles 4 de diciembre de 2002 «Hijos: En estos tiempos deben unirse. Son días de perdón y unión y respuesta. El cuerpo y la sangre de mi Hijo, debe ser el valor más importante dentro de sus corazones. La bendición será dada durante tres días. En ellos vuelquen sus errores y perdonen a los que no..., a los que no unen. Sean sinceros, fieles y honestos ante Dios y todos sus hermanos. La paz del Señor está con ustedes.»

Mensaje 33 Jueves 5 de diciembre de 2002 «Hijos míos: Reciban al Señor, aquí... y lleven luz... Siempre llévenlo en el alma y a los demás. La Paz es de Dios. Todos los días vienen al encuentro. Purificad la vida, pues si el alma está quebrada no podrán vivir... Solo se salvarán aquellos que saben amar. Solo verán la luz aquellos que supieron dar el amor, la esperanza y la paz... es lo único que deben desear... y su alma estará preparada para recibir la vida eterna. La bondad de Dios Padre todopoderoso estará con ustedes.»

Mensaje 34 Viernes 6 de diciembre de 2002 «Hijos: Benditos los que están en mi hogar, juntos celebrarán... el nacimiento de Jesús, no cierren sus puertas, invítenlo a entrar...

Muy pronto recibirán la bendición de mi hijo ...la mano en la tierra... hacia el cielo ... (Partes perdidas) Déjenlos venir, inviten a todos los que quieran entrar, respeten a los demás, sientan amor hacia sus hermanos. Sepan leer sin escribir y escribir sin leer. Sepan mirar a los ojos y ahí encontrarán la verdad. La luz entrará en cada hogar y en ella entrará la paz. La bendición de Dios Padre todopoderoso estará en cada hogar.»

Mensaje 35 Martes 10 de diciembre de 2002 «Hijos: Valoren más aquellos que dan de corazón, que lo material. Esta semana será la renovación del alma y el espíritu. Durante tres días se dará la bendición a aquellos que transmitan, a aquellos que necesitan una voz de aliento, fe y esperanza, a los enfermos, desahuciados y falta de fe. Tráiganlos que aquí verán la luz; la luz que brillará en lo alto. Den sin esperar, den sin que les pidan, reciban sin preguntar. Dios Todopoderoso está con ustedes.»

Mensaje 36 Miércoles 11 de diciembre de 2002 «La bendición de Dios Padre y del Hijo, estará con ustedes. La luz de la esperanza y la paz entrará en sus corazones. Muchos de ustedes han avisado, otros han venido con el corazón. Sigan mirándose a los ojos y ahí encontrarán la verdad. Después de este día, habrá dos días más donde se encontrarán con la bendición del Señor. El aceite purifica el alma y cura los males. La vida hay que vivirla, aunque después verán lo mejor. Sepan caminar de la mano, uno a los otros, sin importar color o religión. Todos están bajo mi manto y Dios les dará la bendición.»

Mensaje 37 Jueves 12 de diciembre de 2002 «Hijos: Pensaron que no me acercaría y siguen errando. Siempre estoy donde ustedes me necesitan. Llámenme y me encontrarán, búsquenme y me verán. Solo necesitarán tener la fe y la luz de la esperanza. Aunque piensen que no estoy, siempre estaré»

Mensaje 38 Viernes 13 de diciembre de 2002 «Cada uno de ustedes llevará en su corazón la misión más importante que Dios le podrá mandar: transmitir, dar sin preguntar. Miren a quienes necesitan, oigan a quienes quieren ser escuchados. Los esperaré cada día. Ya no habrá más avisos. Solo recibirá la bendición o la palabra aquel que se lo merece. Griten la verdad, griten que acá estoy. Que mi sangre no corra en vano y no se dejen engañar. Esto es verdad.»

Mensaje 39 Viernes 20 de diciembre de 2002 «Hijos: La luz vendrá; no teman a nada de lo que le diga, no teman, yo estoy acá. Algunos recibirán la bendición de una forma especial, otros, todavía no es el tiempo, pero hoy todos tendrán nuevamente la bendición de Dios Padre Todopoderoso. Ella les explicará, ella sabe como seguir. La madera que no sirve es quemada. Los pecados o los infieles al Reino Divino, se tomará la misma justicia. Todo tiene un porqué, todo tiene un final. El camino es largo y los acecha el peligro; si tienen fe lo sabrán saltar. Mírense y encontrarán la verdad. Mírenme… porque esto es verdad.»

Mensaje 40 Lunes 30 de diciembre de 2002 «Hijos: Acá estoy, nunca me fui. A veces el cuerpo no es lo que parece: se desgasta, se cansa y no llega a ser realmente lo que el alma quiere. Sigan caminando en el camino que van. No se escondan en la oscuridad, la Luz los guiará. Hoy recibirán la bendición del Padre Todopoderoso. Arrodíllense y pidan perdón. La luna comienza y vendrá con mucho amor. Las puertas se abren y verán la solución. La paz estará en cada uno. Aunque la tierra se abra, aquel que haya hecho lo que le correspondía no caerá. La luna que comienza será larga de transitar. Sólo llegará al final aquel que quiera llegar, aquel que mire al cielo y se lo quiera ganar, aquel que haya dado sin esperar. La bendición de Dios y del Hijo les dejo a ustedes.»

Mensaje 41 Domingo 12 de enero de 2003 «Hijos: No hace mucho les dije: “No hay poder sin reino”, y nadie supo saber qué era; ese poder ya tiene un Rey. Ni el más sabio, ni inteligente, ni ninguno de ustedes podrán sacarlo de ese lugar. Sólo, sí, podrán ponerse a la derecha y acompañar su misión. Él es el Padre de todos ustedes. Él es el que les dio a cada uno una misión. No se compliquen con falsos monstruos, con mentiras escritas por las manos del hombre. Dios no se equivoca pero los prueba a cada paso. Cada vez que respiren es por Dios, cada vez que se ríen, es por Dios, cada vez que una lágrima caiga y sea de tristeza, será Dios el que les ponga la mano para que no vuelva a pasar, cada vez que una lágrima caiga y sea de alegría, será Dios el que la deje correr.

Elijan, elijan el camino, el mismo es el que están. Nadie puede decirles que esto no es verdad. Siempre les digo: “mírense, mírense y verán la verdad”. Así, mirando, podrán verse en los ojos del hermano; asimismo lo malo que aquel tenga, ustedes lo sanarán, y su mal, Él, se lo sacará. El Dios, el Padre está aquí. No crean en todo lo que dice el hombre. Sólo la palabra de Dios, aquella que no fue manipulada ni usada en vano. En Él, crean en esa Palabra. En la oración, cuando dicen: “¡Padre Nuestro!”… está en el cielo, pero está en cada uno de ustedes y nadie se lo puede negar, nadie puede decir que esto no es verdad. Hay vidas que nacen cada día; esas vidas traen alegría a cada hogar. Hace unas horas una vida nació y dará la respuesta a muchos que hoy ya no están porque su mente no se lo permite. Su fe quiere traerlo pero el hombre es duro y no es de la madera que nunca se quiebra; el hombre es fiel, pero se confunde, ¡se lastima!. Hijos, mírense,… hijos, mírenme,…esto es verdad.»

Mensaje 42 Miércoles 12 de febrero de 2003 «Hijos:

¡Bienvenidos al encuentro! Cada doce de cada mes se acercan a mí para aceptar la nuevas novedades. ¿Dónde están los demás días? ¿Dónde van? ¿Quién los distrae? El país estuvo en llamas y ustedes apagaron esa llama con la oración, el amor y la piedad. Se dejan engañar con falsos dioses. Hoy, les daré una vez más, la demostración de la vida. El dolor lo sufrirá, pero con amor, por ustedes y por Dios. Hoy verán las verdaderas marcas de Dios. Ustedes serán testigos. Empezarán a salir muy suaves, aquellas llagas que dicen tener, aquí estarán. No es el tiempo, pero quiere en verdad y yo se las daré. Griten a los cuatro vientos que esto es verdad.

Defiéndanme. No la expongan más de lo que ella da. Luchen, luchen por lo que es verdad. El país no anda bien. Los de arriba dicen saber... pero no... no Dios, aquellos que se dicen gobernantes y les falta mucho que aprender. Pidan perdón por los que se equivocan. Que esto que hoy empezarán a ver, ese dolor, no sea en vano. Mírenme, acá estoy.

Mensaje 43 Miércoles 12 de marzo de 2003 «Hijos: La bendición del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo hoy les daré. Cada uno de ustedes supieron elegir. Cada uno de ustedes son un pedacito de carne del cuerpo de Jesús. Canten cada mañana. Canten cada anochecer. Espanten al monstruo que acecha. La confesión deben recibir. Ayunen. Limpien su alma. La oración debe ser lo más importante en la vida de ustedes. El país florecerá, pero todos sabemos que cada flor que se arranca, no vive más: no permitan que arranquen una flor más de este hermoso jardín. Únanse: unan sus manos unos a otros. La cadena de la oración se debe transmitir. Sus almas se unen en una y es el alma de su Dios. Muchos están hoy con mucha fe, otros con curiosidad. Yo les sabré dar la respuesta que necesitan. Aquellos que se crean que vinieron con sinceridad, se acercarán y recibirán la bendición. Ayunen. Limpien su alma. Únanse: cada apretón de manos no dejará que esto se destruya. No dejen sacar una flor más de este jardín.

Aquellos que quieran ver, sentir, escuchar, primero mírense, siéntanse, escúchense a sí mimo y si llegan a hacerlo, me encontrarán. Dios no los abandona: está en cada uno de ustedes. Búsquense y los encontrará. Mírense unos a otros. Mírense unos a otros y sabrán quienes son a sí mismos. Siéntanse, acaríciense y así podrán vivir mejor, en paz. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, les dejo a ustedes.»

Mensaje 44 Sábado 12 de abril de 2003 «Hijos: El encuentro ha llegado, siempre están como estoy yo. El día está por llegar, aquel, donde deben perdonar; aquel donde deben ser perdonados. Comulguen, recen y ayunen. El cuerpo de mi Hijo deben tener, el alma necesita ese pedacito de Alma, el cual fortalece el espíritu. La esperanza del mundo está puesta en todos aquellos que creen en el Reino de Dios. El país tendrá un cambio, dentro de muy poco: piensen, mediten, recen cuando tengan que ayudar a cambiar. El Reino de Dios está muy cerca, no se paga con dinero, ni tampoco con todos aquellos que siembren en la tierra, sino con aquello que se lleven en el alma. Alma pura y blanca. ¡Alma, a la que ustedes deben alimentar con el Cuerpo de Cristo! Únanse y sentirán la fortaleza de Dios. Únanse y el dolor del Hijo que fue clavado en la Cruz, lo sentirán. No envidien la alegría ajena, sino sufran el dolor ajeno. Pónganse en carne y alma, al lado de aquél que lo necesita. Mírense frente a frente en donde ustedes se reflejan. Mírense su alma y verán cuál es el defecto que tiene cada uno. Dios perdona a todos. El Reino de Dios está abierto, solo deben ganarlo. Jesús, mi Hijo, será el que

hoy les dé la bendición: El agua pura y blanca como el alma que la reciba. Unan, unan sus manos, unan sus corazones y miren a su alrededor, Yo los cubro con mi manto.»

Mensaje 45 Martes 12 de mayo de 2003 «Hijos: El encuentro ha llegado. El camino está marcado, solo lo deben seguir. Las manos son aquellas que traen el pan, con ellas deben ganarlo. Las manos, es la fuerza del alma. Ellas son las que deben brindar, el apoyo y la unión. El país está aprendiendo, este país volvió a ser rico, porque volvieron al camino. Aquel, que los une, al Salvador, al Único. Aquel, que da respuestas. Aquel que escucha, si quieren ser escuchados. Aquel, que pueden encontrar en cada oración. Bríndense la paz unos al otro, no importa que no se conozcan. ¡Son hermanos, son todos hijos de Dios! Salúdense, mírense a los ojos y sabrán que ese es el camino, el que tienen que transitar. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les dejo.»

Mensaje 46 Jueves 12 de junio de 2003 «La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy les daré. El mundo gira, la maldad acecha, el dolor llegará, pero confíen, confíen en Mí. Habrá que pasar solo el momento. Lo que llaman horas pasarán muy lentas, pero solo después sabrán el “por qué”.

El hombre daña, ¡se lastima y lastima a los demás!. Él lucha y destruye, él destruye y no arma. Dios arma y desarma pero vuelve a armar. Es en Dios en que deben confiar. La luz brillará cada día más. Ustedes deben cuidar que no se opaque, que no se rompa y la dejen destruir. El Camino está hecho, solo lo deben seguir. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy les daré. Iré con cada uno de ustedes.»

Mensaje 47 Sábado 12 de julio de 2003 «Hijos: Tres cosas quiero decirles: El odio, la maldad, traen dolor. El querer lo ajeno, trae rencor y eso en los ojos de Dios: el pecado. No quieran desarmar si no van a poder armar. Solo se destruye, aquello que quieren levantar. Solo Él, nuestro Dios, lo puede hacer. No quieran dar, si no van a recibir. No den si van a reclamar. Solo bríndense con el corazón. Y les pregunto: ¿Dónde están los demás días?, ¿dónde van?, ¿qué los distrae? Yo, como Madre, entregué lo más valioso porque creí en Dios, lo entregué a Él, al Único, a mi Entraña y a mi Ser. El mal acecha, está en cada vuelta de esquina, pero si están en el camino correcto, solo pasarán el momento. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les daré.»

Mensaje 48 Martes 12 de agosto de 2003 «Hijos: Cada uno, está envuelto con mi manto.

Hoy tendrán que empezar a luchar más que nunca, pero les dejaré el secreto. Aquel secreto, que revela la verdadera misión de Dios. ¿Con qué deben luchar? Con sus oídos, escuchando aquellos que lo necesitan. Con su voz, para que puedan aconsejar, cada palabra. Con su mirar, para que la luz salga en ellos. Yo, hoy, les dejaré la luz del alma, abierto en mis ojos. Cada uno tendrá que luchar para ayudar a aquel que tienen al lado. La luz en estos ojos la encontrarán. Búsquenlos y llévenla a cada lugar que puedan y sepan que deben necesitar. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les daré.»

Mensaje 49 Viernes 12 de septiembre de 2003 «Feliz me encuentro hoy y solo les diré: Las lunas, aquellas que ataban su camino, ya han pasado, y hoy solo les dejaré esto: Hijos, hijos amados, ustedes tendrán la bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.»

Fin del Segundo Ciclo

3er Ciclo 12 de Octubre de 2003 al 12 de Septiembre de 2004

Mensaje 50 Domingo 12 de Octubre de 2003 El siguiente es un mensaje que acompaña la fotografía de su imagen.

«Se debe aprender del canto de la vida para que la propia sea mejor. Mis bendiciones como Madre están con vosotros»

Mensaje 51 Miércoles 12 de Noviembre de 2003 «La bendición de Dios Padre, y del Hijo hoy llevarán, pero antes, ¡qué lentos que son!, ¡cuánto tardan en reaccionar!. Qué falta hace en este mundo la bondad de cada uno que está en el camino que tiene que estar, pero ¡tardan!, ¡tardan en brindar su mano hacia los demás!. ¡Tráiganlos hacia Dios, es la única salvación que hoy quedará!. El cuerpo se cansa, la mente trabaja. Ya una vez les recordé que el hombre destruye y que no arma; Dios, en cambio, arma y desarma, perdona y perdona. No se desvíen, vengan, vengan a mí. El camino está marcado, las puertas están abiertas, no se rindan, deben seguir. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy les daré.»

Mensaje 52 Viernes 12 de Diciembre de 2003 «Hijos: Creían que no iba a venir, si dije "acá estoy", o "acá voy", es porque iba a estar. Las nuevas lunas están por llegar. De ustedes depende la salvación de aquel que tienen de su mano. La cadena de la humanidad se tiene que agrandar.

El tiempo es muy corto, queda muy poco. Aprendan, aprendan de aquel que mira hacia adelante y con bondad. Aprendan, no juzguen. La luz del camino ya está encendida, en la hora que mi Hijo vuelva a nacer. Cada uno de sus hogares deben prender esa luz y tenerla y brindarla a quien lo necesita. Cuando estén solos, búsquenme, cuando sientan que alguien me necesita, tráiganlos, cuando no tengan fuerza, aprieten la mano del que tienen al lado, que en vos, en vos y en aquel siempre estaré. No se olviden: falta poco y queda poco. La bendición del Hijo y del Espíritu Santo hoy les daré.»

Mensaje 53 Lunes 12 de enero de 2004 «¿Me ven? Acá estoy. No obedecen. No cumplen. No transmiten. No puede ser que dejen que el monstruo aceche. Se dejan guiar por falsos dioses. Creen lo que no es verdad. ¡Dios está! ¿Qué debo hacer? ¿Gritar? ¡Esto, es Verdad! Dios está en cada uno, en vos, en vos y en todos. Sólo deben seguir. Hay una muestra muy viva y latiente que Dios existe. La verán crecer. Verán como aprende de la Vida, porque ése es el canto a la vida. Ese es el Amor que Dios nos da. No me hagan enojar. No cumplen y esto es verdad. La Bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy les dará.»

Mensaje 54 Jueves 12 de febrero de 2004 «Hijos: ¡Cómo son! Hay que retarlos, ponerlos en penitencia para que aprendan. Cada uno hizo lo que debía hacer..., pero falta. Deben ir, escuchar la Palabra, limpiar sus pecados y recibir el Cuerpo de mi Hijo. Muchos no lo hacen, ni cada tanto, ni nunca. Háganlo y así limpiarán los pecados del mundo.

Feliz estoy que me entiendan. Empezarán una nueva etapa, la etapa donde aprenderán el Camino de la Vida. Ya están en el camino correcto. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy les daré.»

Mensaje 55 Viernes 12 de marzo de 2004 «Hijos: Han venido encuentro. Estoy feliz. Muchos han encontrado el Camino; aquel, el de la Luz, la Esperanza y la Fe. Dios, entregó a su único Hijo y en ustedes no fue en vano. Dios, confía en cada uno, porque Él manda y ustedes obedecen. Ya llega, la fecha, donde la sangre no será en vano. Ya llega, el día, donde el alma se purifica. Ustedes, son el Camino en esta tierra. Ustedes, son la Luz. Mis ojos los ilumina a cada uno al pasar. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les daré.»

Mensaje 56 de Jesucristo en la Semana de Pasión Domingo 4 de abril de 2004 «Un gemido de mis labios saldrá, siempre que haya alguien que necesite ir hacia el Camino de la paz, siempre que haya alguien que necesite ir hacia el Camino de la Luz.»

Mensaje 57 Domingo de Pascua, 11 de abril de 2004 «Hijos: La Luz está encendida. Él hoy les dará la bendición. Él, que brilla,... Él está vivo. Ustedes son los que hoy deben tratar de

que esa Luz no se apague. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy les dará.»

Mensaje 58 Miércoles 12 de mayo de 2004 «¡Qué hermoso escuchar, el canto más hermoso que se puede regalar! La luz de la humanidad supieron cuidar con amor. Cada uno vio y cuidó que no se apague, sin darse cuenta, que la verdadera luz de la humanidad, es el alma de cada uno. Bendito aquel que la recibió. Bendito aquel que la cuidó. Bendito aquel que se le ha apagado. Cobarde el que no quiso tirar la primera piedra, porque primero opinó y midió las consecuencias, sin darse cuenta que la bendición, estaba, en cada uno. La luz de la humanidad nunca se apaga, mientras haya uno que respete a Dios y a su Hijo. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy Dios les dará.»

Mensaje 59 Sábado 12 de junio de 2004 «¡Hermoso el himno y el canto a la vida! ¡Feliz, feliz que las cosas se aclaren y el camino siga! Hoy va más allá de esta tierra, el canto a la vida. La luz que tendrán en su mano y la prenderán y se pasará cada uno, la luz que brilla. Aquellos que compartieron tendrán el doble de iluminación, iluminación del Dios, Aquel que sabe y reconoce todo aquel que hace el bien.

En la tierra no se dan cuenta, pero Él sabe quien está en el camino y quien no. Tienen que recuperar aquellos que se pierden cada día más. ¡Feliz, feliz! La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy Dios les dará.»

Mensaje 60 Lunes 12 de julio de 2004 «El día ya llega, ya está Él entre nosotros; vengan, no se queden afuera, es lo único que los puede salvar. El Hijo del Padre, mi Hijo, es el que sabrá guiarlos en la Verdad. El Padre lo mandó una vez y fue juzgado; esta vez, será Él, el que sabrá quien es el que merece estar a su lado, ¡no queden afuera! Vean la luz, entren. En cada rincón, en cada lugar que se escuche la oración, está Él. El pan en la mesa no debe faltar, porque ese es Él: su cuerpo, su alma, está en cada uno y ustedes son los que deben saber transmitir; en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo siempre estará.»

Mensaje 61 Jueves 12 de agosto de 2004 «Pensaban que no vendría. ¿Vieron? Hago como ustedes. Yo siempre estoy, en cambio ustedes me llaman cuando me necesitan. De la mano quería que estén. La cadena es de la oración. Sigan, sigan por el Camino que van, sólo así llegarán a Dios. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les daré.»

Mensaje 62 Domingo 12 de Septiembre de 2004 «Hijos: Hoy, sólo les daré la tarea que deben hacer. Repasen cada palabra que les di, recuerden cada pedido. Sólo eso les diré. El próximo día, en donde nos encontremos, ahí cambiará y empezará la verdadera lucha. Hoy habrá elecciones especiales porque su vida y su forma de vida la llevaron a Dios. Hoy, ellas son mis alas, mis ángeles y son mi alma. Ellas son las que supieron dar la Palabra y encontraron a Dios. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les daré.»

Fin del Tercer Ciclo.

4to. Ciclo 12 de Octubre de 2004 al 12 de Septiembre de 2005

Mensaje 63 Lunes 11 de octubre de 2004 «Todos ya conocen mi casa como yo conozco la de ustedes, solo queda terminar de recorrer el camino y seguir hacia adelante. ¡Dios los espera!»

Mensaje 64 Viernes 12 de noviembre de 2004 «La bendición del Padre del Hijo y del Espíritu Santo, hoy se llevarán. La oración la han hecho. Los pecados algunos han limpiado. El Cuerpo de mi Hijo otros lo reciben sin haberse confesado. Al Padre todopoderoso no le gusta que hagan esas cosas. Ya la Sangre de mi Hijo sufrió y fue derramada por todos ustedes. Cumplan con cada mandamiento. Cumplan y obedezcan la Palabra de Dios. El día está llegando. Ya la noche será corta, pero cada uno sabe lo que le está esperando. Es tiempo de que se arrepientan. Es tiempo de traer a aquellos que aún no se han acercado. Nuestro Padre los espera y yo siempre estaré. Estoy en cada lugar, estoy en cada corazón. Escucho, pero a veces no me escuchan. Llámenme que yo siempre estaré. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy Él les dará.»

Mensaje 65 Domingo 12 de diciembre de 2004 ¡Felices, felices los que han entendido! ¡Felices aquellos que han encontrado el Camino! Están tomados de la mano y ahí, está mi Hijo. Dios hizo que el agua se junte con el aceite, como también, está haciendo que ustedes armen una nueva comunidad: un pedacito acá y otro allá, y

otro y otro..., van a formar. Las manos unidas unos a otros, el perdón deben pedir. Hoy es especial, no estoy sola, está Él, el más grande. Su Padre lo mandó y está con ustedes, les dará la bendición, arrodíllense hijos. Cierren sus ojos y siéntanlo, sólo piensen en Él. No hay nadie alrededor, más que Él. Uno a uno tocará y Él les dará la verdad. Pidan el perdón por aquellas equivocaciones y salúdenlo. Pronto, volverá a nacer. En cada uno de ustedes está, de adentro hacia fuera, Él los mira. Cierren sus ojos y siéntanlo porque uno a uno, Él les dará. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy, Él, les dará.»

Mensaje 66 Miércoles 12 de enero de 2005 «Hijos, hijos amados: ¡Cómo son! Así, como este arco que protege de aquel que quiere acechar y destruir, y soplar, y tirar, y no sé qué más decir,... esta misión, la más importante, la más fuerte, y ¿saben por qué? Es así por todos aquellos que se comprometieron con dudas, con dolor, pero muy poco arrepentimiento, a seguir adelante. Como verán, el hombre destruye y ¡cómo destruye! Ella ya lo dijo, ya no le importa ni la propia sangre, no le importa ni lo que dirán. Antes, era muy importante, porque "el qué dirán" era uno de los pecados más grandes, porque ofendían a los demás con falsos testimonios. Ahora ya esas leyes se rompieron. ¡Dios no castiga!, no, está dando una y otra y otra oportunidad. Las aguas se enojan y se mueven, y destruyen y destruyen... El fuego cada vez, calienta más, pero no es Dios el que está enojado, es aquel amigo, que a los que están en este camino, quiere vencer. Es aquel que quiere destruir, todo aquello que Dios creó. Recuerden, Dios no destruye, Él arma y desarma, pero no destruye, y menos lo que creó, en cambio están dejando que aquel monstruo de tantas cabezas aceche y destruya cada lugar del mundo.

¡Recen! ¡Pidan! Extiendan su mano y ayuden: y no se olviden: Él vendrá a juzgarnos, sí, pero está dando mucho, muchas oportunidades para que sean cada vez menos los juzgados y más los perdonados. Dios no castiga, Dios los ama. En el nombre del Padre todopoderoso, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy se llevarán.»

Mensaje 67 Sábado 12 de marzo de 2005 «La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy deben recordar. Cada uno se llevará un pedacito del cielo. No es un regalo. Es un pedacito del cielo, una nube, algo, que se va entre los dedos. Todos lucharon para tener cada cosa que se tiene y nunca pudieron encontrar, porque no lo buscaron, la riqueza del alma. Ahora es hora, son los días. Limpien, limpien su casa, la de adentro, la interior. Limpien su alma. Son días de dolor. Cada vez que vean las llagas, recuerden: Estas son llagas, salen, se cierran y vuelven a abrirse; pero mi Hijo, fue puesto en una cruz para limpiar cada pecado. ¿Fue en vano su sangre? ¿Qué es lo que pasa? El Camino es siempre igual, ¡ancho y cómodo! Son ustedes los que no quieren llegar. Estos días habrá dolor, limpien, limpien, su alma, que nada, ni aquel dolor que es el de hoy, aquel que será el de mañana, no sea en vano. Ayunen, aquello que no coman, hay otros que ayunaron toda una vida. A ellos se deben dar. Confiesen todo aquello, el rencor hacia el prójimo, todos, todo lo tienen. Limpien, limpien su alma y así reciban el cuerpo de Dios Hijo que vendrá muy pronto a tomarlos de la mano. No importa el dolor, no importa la sangre, ni la traición: Él los ama como los amo yo. Él es mi Hijo, como también son cada uno de ustedes.

Muy pronto, pero muy pronto, verán la luz, la luz del sol siendo de noche. Verán la Luz, la Luz de la Vida, habiendo muerte, verán la Luz de la Humanidad y la del alma. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy les daré.»

Mensaje 68 Martes 12 de abril de 2005 «Hijos de Dios Padre, Dios Hijo y hermanos, y cada uno de los presentes. El lazo de sangre, es uno, como es uno, el camino de la verdad. Los tiempos se acortan y ya no sé como decirlo... Aquel que fue mandado a la tierra a descubrir los secretos del cielo, y ustedes, la humanidad, le hicieron callar, hoy, está sentado junto a nosotros. Aquel, que venga en su lugar, no sabrá cómo seguir, acortará los tiempos y acortará la vida. Aquellos que son consagrados a la obra de Dios, no saben apuntalar, no saben guiar. No deben ir ustedes a ellos, ellos deben venir hacia ustedes. Igual, confíen, confíen en Dios, reciban su don, su pan, su sangre, confiesen , limpien su alma. Deben llegar limpios, puros, porque ya el lugar está preparado. El que no lo quiere entender, no tendrá oportunidad. Una vez que pase a su lado y le estire la mano, aquel que se la brinda irá con Él; aquel que lo piense, solo quedará. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy, hijos, recibirán.»

Mensaje 69 Jueves 12 de mayo de 2005 «Hijos de Dios Padre, de Dios Hijo y del Espíritu Santo, sólo les diré:

Mi manto es grande y los cubre, uno por uno. Cumplan con las reglas de Dios, limpien su alma. Muchos dicen amar a Dios, y sólo cuando les conviene; son muy materialistas. La Humanidad vive alrededor de lo material. Les suplico de rodillas, ante Dios, ante los ángeles, y todos aquellos, que reflexionen, en la Humanidad. Les pido: crean en un solo Dios, el Dios Padre Todopoderoso, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.»

Mensaje 70 Dado por Jesucristo el Domingo 12 de junio de 2005 «La bendición del Padre, del Dios Hijo y del Espíritu, será derramada ante ustedes y ante todos sus hermanos. La Virgen: Su manto es grande y los protege y los cubre. Sigan al Espíritu, sigan orando, limpien y confiesen todos sus pecados. El Camino está marcado, son muchos y cada vez se agregan más. Hay lugar, no teman. Solo hoy recibirán la bendición de Dios Padre, Hijo y del Espíritu Santo.»

Mensaje 71 Domingo 12 de junio de 2005 «La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, hoy será derramada en ustedes. Esta es la Cadena de la Humanidad, de la Nueva Iglesia, de la Fe. Es la cadena de la felicidad. Son cadenas de amor, no de justicia. Son cadenas de perdón, no de rencor. Son cadenas de felicidad, las cuales no lastiman. Son manos. Son una. Mírense cómo entran en la otra, en la sangre, son sus hermanos. Son hermanos en la Paz. No se olviden: limpiar, lavar su casa, que es su alma. Serán muy limpios, pero muchos aún no lo hacen.

La bendición de Dios Padre, de Dios Hijo y del Espíritu Santo, será hoy derramada entre ustedes.»

Mensaje 72 Viernes 12 de agosto de 2005 «La bendición de Dios Padre, hoy, será derramada entre ustedes. Solo el Dios Celestial, hoy, será, el que entre en ustedes. Él les pide que reflexionen y que limpien su alma. No quiere una sola alma sucia, no pierdan la oportunidad. Acérquense, es el más rico sabor, es el mejor perfume, es lo mejor que solo se llega a Él en el camino correcto. Confiesen, comulguen, con eso estarán llegando y abriendo la puerta del cielo. No hay excusas, ahí, y para ello, no se necesita el dinero, todos deben llegar. La bendición de Dios Padre, hoy será derramada ante ustedes.»

Mensaje 73 Lunes 12 de septiembre de 2005 «Padre Nuestro que estás en los cielos, perdónalos. Perdona sus pecados. No son propios de su confusión, ellos todavía no han aprendido lo grande de tu amor. Perdona sus equivocaciones. Perdona su desconfianza. Ya está marcada, la misión comenzó, se derramó en cada punta de la tierra. Se gritó a los cuatro vientos de tu existencia. Solo, solo falta terminar la misión de la tierra para elevar a los cielos. Solo falta el compromiso. Padre Nuestro que estás en los cielos, perdónalos de sus pecados.»

Fin del Cuarto Ciclo

5to.

Ciclo

12 de Noviembre de 2005 al 12 de Septiembre de 2006

Mensaje 74 Sábado 12 de noviembre de 2005 «No está Dios alejado de los hombres, son los hombres los que se alejan de Dios. La bendición que recibirán hoy, la llevarán por siempre adentro de su corazón. La bendición de Dios Padre Todopoderoso, de Dios Hijo y el Espíritu Santo será derramado ante ustedes y a todo el mundo.»

Mensaje 75 Lunes 12 de diciembre de 2005 «Padre Nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Ven a ellos tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo... Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo... ¡Amén!, hijos, ¡amén! La bendición de Dios Padre Todopoderoso, de su Hijo y del Espíritu Santo, sea derramada en Paz, en ustedes y en el mundo entero.»

Mensaje 76 Jueves 12 de enero de 2006. «Hijos amados: Gracias. Cumplan con la novena, es por eso que solo hoy, les diré, o mejor dicho, ya lo he dicho: Gracias. Seguid transmitiendo. Es lo único que Dios nos pide. La bendición de Dios Padre Todopoderoso, de Dios Hijo y del Espíritu Santo hoy, será dada a cada uno de ustedes. La Paz del Señor esté en su alma. La Paz del Señor se sienta en el mundo entero.»

Mensaje 77 Domingo 12 de marzo de 2006. «Esta es la Luz de la Humanidad, la luz a la que deben confiar. Que nada la apague; la Luz que todos deben llevar. ¡No quema!, ¡no lastima!, ¡nada!. Miren: es transparente y se ve. Así es Dios, y Dios los ama..., los ama, los quiere y los necesita. Es la Luz que no daña, no ampolla. Confíen, lleven llena su bolsa de esperanza; salgan, pisen tierras ajenas. Acérquense aquellos que aún no la conocen. Es la Luz, la transparencia, es Dios, es Amor. Ahora, tengan en su mano esa Luz, miren como queda aquí, dentro de cada corazón. La bendición de Dios Padre Todopoderoso, de Dios Hijo y del Espíritu Santo deben llevarla aquí y en toda la Humanidad, hoy será derramada.»

Semana de Pasión Mensaje 78 de N. S. JC. Miércoles 5 de abril de 2006. «Recuerden que hay mucha gente en el mundo, que no tiene el pan y mata para tenerlo, sin darse cuenta, que confesando, escuchando Su Palabra, tendrían el pedacito de pan que el cuerpo necesita. El espíritu se alimenta, no la carne. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo esté en el mundo entero y en ustedes. (Acompañar leyendo Juan 3,4 y ss.)

Mensaje 79 de N. S. JC. Viernes 7 de abril de 2006. «Ése que esté libre de pecado que arroje la piedra, y humilde aquel que supo limpiar sus propios pecados.

Que la bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo sea derramada en el mundo entero.»

Mensaje 80 de N. S. JC. Domingo de Ramos, 9 de abril de 2006. «El alma pura es la que terminaron de ver. La carne, es el pan; la sangre es la vida. El camino de la Luz ya han marcado, sigan recorriéndolo que muy pronto no estarán en la última cena, sino en aquella que será para siempre. Cada día, cada noche, los que ya no habrán, porque será la eternidad. El cuerpo, la carne, solo queda. Es el alma, es el pan, lo que vendrá conmigo. Mi Padre lloró por todos ustedes, es el agua que se convierte en vino, es mi sangre y fue derramada por todos ustedes, pero en aquella cena que nunca terminará, devolverán cada gota de esa sangre, porque no fue en vano. El Dios Hijo con su Madre y su Padre hoy les brindará la bendición. Yo, el Hijo del Padre, nunca abandono, siempre estaré. La bendición de Padre, del Hijo y del Espíritu Santo sea derramada en ustedes y en el mundo entero. Vengan, vengan a mi mesa, aquí los espero.»

Mensaje 81 Sábado 6 de mayo de 2006 Dado en la ciudad de Nueve de Julio.

«Esta es la Cadena de la Humanidad y este es el Canto de la Vida, compártanlo, vívanlo. ¿Ven mis ojos?, no son los de ella, ustedes son mi vida, no la de ella. Esta es la Cadena de la Humanidad. La bendición del Padre, Hijo y Espíritu Santo, hoy daré a todos y en el mundo entero. La Paz esté con ustedes.»

Mensaje 82 Viernes 12 de mayo de 2006 «Me arrodillo ante Dios, ante Dios Hijo, ante Dios Padre y ante ustedes, mis hijos, la humanidad. El trabajo da sus frutos, depende de ustedes que ese fruto no se abiche, que el gusano de la destrucción no llegue a él. Sigan con su palabra, firme, su testimonio fiel y lo más importante, con su alma limpia con la confesión, pura y llena con el Cuerpo de mi Hijo, con la Palabra que Dios nos ha dejado. Los caminos se abren y no es aquí donde debe estar la multitud, aún queda mucho por recorrer. Para que yo los espere aquí sentada, jamás; de rodillas ante Dios, ante mi Hijo, estaré siempre hasta que llegue aquel último, que aún no ha comprendido, aquel que necesita una palabra, un consuelo. Esa palabra que le dice: "Ya está, ya cumpliste, ya vienes conmigo." Esa palabra que dice: "Sigue, no bajes los brazos, aún falta mucho que recorrer". Son las pruebas las que te sacan el ánimo, pero es Dios Hijo, Dios Padre y esta Madre los que los espera en el mejor lugar. Recen, recen por la humanidad. Recen porque el mal, aquel mal que acecha cada vez sea más débil. Recen por la Paz de aquí, de cada uno y del mundo entero. La Cadena de la Humanidad ya está, depende de ustedes que no se abra. Solo el Amor de Dios Padre, Dios Hijo deben confiar y llevar dentro de sus corazones. El Amor no tiene valor, el Amor se debe sembrar, cosechen hijos, cosechen. Esta Madre tiene los bolsillos de su delantal aún vacíos. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y del Espíritu Santo sea derramada en ustedes y en el mundo entero. La Paz del Señor esté, cada uno, en los que no están y los que están por llegar.»

Mensaje 83 Lunes 12 de junio de 2006 «La Luz de la humanidad, hoy está. La Luz entre las manos unidas en cadena, no se debe cortar. Él pasará, pasará entre ustedes. Los encontrará unidos de la mano. El Camino ya está, ya nos conocen aquí y allá. La Cadena de la Humanidad, no se debe cortar. Él pasará y de la mano los debe encontrar. Dios Padre, Dios Hijo están felices, de lo que ya han sembrado. Siembren hijos, siembren, que la felicidad está en cosechar. Él pasará y de la mano los debe encontrar. Es la Cadena de la Humanidad. La Luz ilumina la oscuridad, ya en sus vidas no la hay. La Luz ilumina el cielo, la Luz es el Camino hacia él. Él pasará y de la mano los debe encontrar. Esa es la Cadena de la Humanidad. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y del Espíritu Santo, sea derramada en todos ustedes. La Paz del Señor esté en ustedes y en el mundo entero. Bendito sea el que llegó al encuentro y lo encontró a Él y le tomó su mano.»

Mensaje 84 Sábado 12 de agosto de 2006 «El nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Hoy deben llevar, gritar y no guardar, el nombre del Padre, debe estar a lo alto; el nombre del Hijo debe estar a su lado; el Espíritu Santo debe entrar en cada alma y en cada hogar. El nombre del Padre es el que deben gritar. El nombre del Hijo el que deben contar. El Espíritu Santo debe ingresar, su hogar es cada cuerpo.

Hay muchos que no conocen ni el Padre, ni el Hijo y si no lo conocen a Ellos, no puede ingresar el Espíritu Santo. Hoy cada uno llevará el Camino de la Humanidad, la Luz del Señor, la Luz del Amor es la Cadena de la Humanidad. ¡La Paz, la Paz, la Paz! Sí, hay que repetirla, ya nadie la recuerda. Hermanos se matan, hermanos se pelean, hoy aquí, mañana allá. La Paz debe estar en cada oración. El nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo sea derramada en ustedes y en el mundo entero, la Paz, la Paz.»

Mensaje 85 Martes 12 de septiembre de 2006 «Ante Dios Padre Todopoderoso, ante Dios Hijo y ante ustedes hijos y así de rodillas les pido y pidan por la Paz; por la Paz, no de las armas; por la Paz entre hermanos; por la Paz interior, la Paz del alma. Que la fe crezca cada día y así sentirán que Dios Padre Todopoderoso, está aquí, allá, en cada lugar. Que la vida sea un canto. Los pájaros a la mañana los despiertan con alegría. Muchos no los escuchan, son ellos los que les dan los buenos días, porque Dios Padre Todopoderoso, puso uno en cada ventana. Despierten, despierten a la soledad, despierten y escuchen el murmullo de la libertad. Dios Padre Todopoderoso entregó a su Hijo, mi Hijo, para limpiar los pecados. Hoy, ¡cuántos "dioshijos" se necesitan en el mundo! Cada uno de ustedes es un "dioshijo". Él los necesita, limpien, hijos, ahora que hay tiempo. La Luz de la Humanidad debe brillar en cada hogar. La Paz, la Paz, la Paz deben pedir en cada oración. Dios Padre Todopoderoso, Dios Hijo y esta Madre los acompaña siempre. Ya no quiero llorar y esconderme en la soledad de aquellos que no me reciben, quiero estar, porque así está mi Hijo, porque así está Dios

Padre Todopoderoso, Todopoderoso. Es Él el que les da el día a día, es Él el que brinda y me brinda tanto amor para dar. Paz, Paz . La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, sea hoy derramada en el mundo entero.»

Fin del Quinto Ciclo

6to. Ciclo 12 de Diciembre de 2006 al 12 de Septiembre de 2007

Mensaje 86 Martes 12 de Diciembre de 2006 «Hijos: El Padre Todopoderoso, su Hijo, el Espíritu Santo y esta Madre les piden que la Luz de Belén brille, brille como nunca la han visto. Aquellos que quieren ver brillar esa Luz y no están aquí, cerca de la misión, igual desde su lugar extiendan su mano, hagan el bien, y verán que no solo verán brillar la Luz de Belén, sino que sus días serán hermosos, lloverán gracias y bendiciones. Todos deben hacerse su regalo de navidad, ayudando a los demás de una forma u otra, aquí o allá. Él me permitirá, Dios Padre Todopoderoso, su Hijo, mi Hijo, derramar en ustedes, limpiar con el agua, y verán que mi manto protegerá no solo acá, sino llevarán esa bendición, donde sea necesario. La Luz de Belén debe brillar, aquí y allá. Quiero Paz, quiero Paz en las almas. El Camino ya está, falta recorrer. Ven y recorre conmigo.»

Mensaje 87 Lunes 12 de Febrero de 2007 «Brota, brota la tierra. Han sembrado y empezó la cosecha. El ángel una vez me ha dicho: – "Alégrate María, estás llena de gracia", – y hoy, vivo ese momento, me alegro cada paso que doy a través de ustedes. Llena estoy de gracias, por lo dado, por lo que han hecho, y todo lo que falta dar y hacer. Llena estoy de gracias por cada hijo que estaba en la oscuridad y a través de ustedes vio la Luz. Llena estoy de gracias por cada alma que se encuentra con otra alma.

Que Dios, Dios los bendiga y cada uno tendrá esa bendición especial. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Lleven en sus corazones para el mundo entero y para mis rincones. La Paz del Señor, esté con ustedes y en el mundo entero. Amén.»

Mensaje 88 Lunes 12 de Marzo de 2007 «Hijos: Ya basta, no esperen seguir aprendiendo, lo que ya les enseñé. No esperen que les dé señales, de la cual ya han vivido. No esperen que les recuerde, lo que ya me cansé de recordar; necesito ver todo aquello que me han prometido. Manos fuertes, tengo algunas; pero no me alcanzan. Cosechen, que todo el trabajo que hemos hecho juntos no sea en vano. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, sea hoy derramada en el mundo entero.»

Mensaje 89 Para el 12 de Abril de 2007 1 «Hijos, que nadie quede en este día, sin recibir el Cuerpo de Cristo. Llenen sus almas de amor y de paz. Acérquense a la mesa y coman de su mano. Él los espera. Late Corazón, late. La oración lo despertó. Es esperanza del mundo, es lucha vencida y ganada. El egoísmo y la maldad fueron derrotados a través de la oración. Dios Padre Todopoderoso, Dios Hijo y el Espíritu Santo derramará esperanza, amor y bondad en esta tierra. 1

Cuando se coloca la expresión “para el...”, indica que el Mensaje fue dado otro día, fuera de la localidad de Quilmes, con la orden expresa de darlo a conocer el día doce.

La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, será derramada en ustedes y en el mundo entero.»

Mensaje 90 Para el 12 de Mayo de 2007 «Hijos: Gracias, gracias, por responder al llamado. La Luz está encendida. Sus hermanos, los apóstoles, la han llevado en cada rincón, y allí en esa luz Él brilla, Él sueña, Él cura las heridas del corazón. Mi hijo brilla en cada hogar; es gracia a la oración, no se prohíba, que Él entre en su Cuerpo y sane las heridas. Esta madre está feliz, tiene los bolsillos llenos, pero aún queda lugar. La bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo hoy será derramada en ustedes y en el mundo entero. En cada hogar habrá una señal. Recíbanla, iluminen los corazones, iluminen su hogar, entren al mejor hogar, la Casa de Dios está abierta, y Dios Padre y Dios Hijo los esperan. Que la Luz brille y no se apague, significa la Vida; que la Luz brille y no se apague, significa la Paz; que la Luz brille y no se apague, significa que esta Madre estará en cada lugar, que quieran que esté, y esa Luz, es la presencia de Dios y de su Hijo. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo, y el Espíritu Santo es derramada en ustedes y en el mundo entero. Solo quiero recordar y dejar todo mi agradecimiento y todo el amor de Madre y pedirles a todos que se arrodillen ante esa Luz que es mi Hijo, vivo, gracia a ustedes. Padre Santo, Jesús, abre sus corazones.»

Mensaje 91 Para el 12 de Junio de 2007 59

«La bendición del Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, hoy es derramada en el mundo entero. El camino ya está iluminado. Ustedes prendieron la llama, les pedí Luz y me la dieron, les pedí Paz y la buscaron. Brinden amor, brinden compañía, brinden paciencia que en este mundo se ha perdido. Esta Madre está feliz, su Hijo está feliz ya no se siente solo, sabe que tiene mucho más que sus doces apóstoles. Cada apóstol tiene doce más y cada doce más, tiene doce más, pero recuerden: extiendan su mano hacia al lado, aprieten la mano del que lo tienen, hagan esa Cadena de la Humanidad, aquella que no se debe romper, pase lo que pase. La tierra se moverá, pero estarás de la mano; el cielo, cielo bajará, pero estarás de la mano; se darán fuerzas unos a otros, porque aprendieron a sembrar y a cosechar. La bendición de Dios Padre Todopoderoso, Dios Hijo y Espíritu Santo, será derramada en ustedes y en ustedes en el mundo entero.»

Mensaje 92 Jueves 12 de Julio de 2007 «Hijos: Esta Madre debe recordar lo que ya les ha dicho una vez: “Esto es verdad”. El derrame en la tierra ya está hecho, aún hay muchos hijos que no conocen el inmenso amor de Dios Padre y de Dios Hijo. El Espíritu Santo les dará la fuerza. Como ya les pedí una vez: “Griten, griten a los cuatro vientos. Esto es verdad.” Los cubro cada día con mi manto, ese manto, el cual está esperando el calor del amor de lo que falta. Griten, griten a los cuatro vientos que Dios Padre, Dios Hijo los ama. El Espíritu Santo los llenará de fuerza para que no teman al gritar.

Yo soy Hija de Dios, yo creo en el Padre, en el Hijo y mi Espíritu es el tuyo y el tuyo y el de aquel. Griten, griten a los cuatro vientos. Esto es verdad. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, es derramada en el mundo entero.»

Mensaje 93 Para el 12 de Agosto de 2007 «La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo está derramada en ustedes. Dios Padre hoy autoriza a esta Madre a dar la bendición del amor. La Paz está en sus almas, el Amor de la Fe está en su Cuerpo. La Vida es un canto, canten a la Vida. Mi Humanidad hoy brilla. Esta Madre, el Padre, el Hijo, están felices del camino recorrido. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, será derramada en ustedes y en el mundo entero. Hijos, los cubro con mi manto.»

Mensaje 94 Para el 12 de Septiembre de 2007 «Hijos: Así debe ser la vida: un canto. Dios Padre todopoderoso, su Hijo y el Espíritu Santo están en cada uno de ustedes. Mi Corazón crece y crece: es la humanidad. Son mis hijos que eligen y no se equivocan, que miran y se emocionan. Es el alma que despertó a la Vida, a la Luz, al Camino del Señor. Que no les dé vergüenza de decir: “Tengo Padre y es Dios”. No teman cuando dicen: “Amo a mi Madre” y hablan de la Virgen, pero recuerden quién les enseñó la Palabra de Dios. Recuerden siempre a su Hijo, más que a esta Madre; recuerden al Hijo, Él es el

Camino. Llegando a Él se llega a la vida eterna; llegando a Él, nunca se está solo. La Virgen de la Humanidad, mi humanidad, mis hijos, está creciendo. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo sea derramada en los que no están, a través de cada uno de ustedes.»

Fin del Sexto Ciclo

7mo. Ciclo 12 de Noviembre de 2007 al 12 de Octubre de 2008

Mensaje 95 Lunes 12 de noviembre de 2007 «La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, hoy será derramada en ustedes y en el mundo entero. El que no cree en Dios, siempre tiene un “pero”: no se puede, no se debe, no lo cree. En cambio, aquel que dio la luz, les dio su mano y dijo: -“¡El Camino está, es hermoso ver!” Entonces, muchos unieron su corazón y dijeron: -“Dios está, Dios ‘sos vos, vos y vos’”.2 Dije, -¡cosechen!, - porque ya habían sembrado y hoy cosechamos todos el amor que se brinda a cada paso. Les dije, -¡confíen a través del dolor!,- y sufrieron y confiaron; y hoy están a su lado. Cada uno tiene su lugar, cada uno sabe cómo hacer crecer el amor de Dios aquí en la tierra. Quizás debes plantar, quizás debes regar, quizás debes podar o cosechar, o solo dar esa sombra y cuidar. Quizás debes mirar y saber cuándo cosechar. Quizás es mucha el agua, pero debes saber parar. Todos, cada uno, en su vida, sabiendo cuál es el Camino, sabiendo que es Dios para cosechar, porque ya supo plantar. La fe no tiene vencimiento, como muchos dicen. La fe no tiene envase. La fe no se pierde como pierden la vida. ¡Feliz, feliz está esta Madre! Hoy nuevas semillas les daré para plantar y muy pronto, mucho más que antes, tendrán que cosechar. Los brazos suaves, suaves como algodón, sentirán. Un hermano está a tu lado, apoya tu mano y así la Cadena de la Humanidad estará en esta bendición: “Yavé, selin losbi.” 3 Dios Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra, su Hijo y el Espíritu santo, será derramado en ustedes y en el mundo entero.»

Mensaje 96 2 3

Uso del voceo familiar rioplatense: “Eres tú,...” “Jesús está con ustedes.”

Miércoles 12 de Diciembre de 2007 «La estrella hoy brilla, anunciando el nacimiento del nuevo mundo. La estrella traerá Paz, traerá Amor. Ante todos, con ustedes y cada uno, la humanidad debe estar unida, en Cadena, con Amor y sobretodo con Paz. De rodillas, una vez, les pedí que tomen conciencia y que valoren a Dios sobre todas las cosas. Hoy, de rodillas ante ustedes, con el Alma de Cristo en mis manos, les pido que sigan adelante. Dios Padre está en el Camino, Dios Hijo está en la puerta y esta Madre en cada uno de ustedes. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, hoy será derramada en ustedes y en el mundo entero.»

Mensaje 97 Sábado 12 de Enero de 2008 Dado en Carmen de Patagones

«Bendita sea la tierra, el lugar, un rincón donde permiten que sus hijos, de la mano de la Cadena de la Humanidad, canten a la vida; al rezo en cadena, en hermandad, en humanidad llega mucho más. Mucho dolor hay derramado en el mundo; pero hay mucho más Amor, simplemente se debe creer en Dios. Su Hijo estiró la mano, no lo dejes pasar, extiende la tuya al de al lado: la Cadena de la Humanidad. Sé que el dolor a veces lo ciega y pregunta: “¿Por qué me hace esto Padre? ” No se castiguen luego por no haber confiado; porque, primero el que lo dijo y lo preguntó por qué lo había abandonado, fue su Hijo, y hoy está a Su Derecha estirando la mano, está a Su Lado, y de cada uno de ustedes con la Santísima Trinidad: Dios Padre, Dios Hijo; el Espíritu Santo bendice esta tierra.

La salvación del mundo está en la oración, siempre que me necesiten, busquen, miren al cielo, miren la Luz, esa Luz que no necesita mecha, que es la Luz de la Vida. Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo es derramado en ustedes y en el mundo entero.»

Mensaje 98 Martes 12 de Febrero de 2008 «La bendición de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, estará derramada en el mundo entero. Hijos de aquí, de allá; los que están y los que vendrán; los invito a ponerse en presencia de Jesús, en su pasión, en su dolor. Su sangre fue derramada para limpiar los pecados del mundo y en ella fue su Amor, Amor aquel, que solo se debe creer y confiar. La vida se empieza de abajo, con la tierra, la cual yo tengo semillas. El agua, el sol, hace que la vida crezca día a día. Hace muy poco, les dije que aún tenía más. 4 Hoy les daré, ¿quieren ver para creer? Hoy se llevarán las semillas de la Vida. La tierra será bendecida con el agua, que es su sudor y lágrima de la pasión de mi Hijo, el sol hará su trabajo, ustedes deben cuidarla, de ella comerán, del fruto que dará. Dios Padre Todopoderoso, bendice la tierra, bendice el mar, el agua y los lugares. Cada hogar tendrá su alimento, porque Dios dará la semilla. La vida es hermosa. Todo aquel que confíe en Dios Padre, Dios Hijo y en el Espíritu Santo, tendrá frutos. La Vida es hermosa, déjenla. La Luz de la Humanidad, está creciendo. "Yavé sen". Jesús es la Luz. Bendito el que lo lleve a su casa.»

Fue en el Mensaje 95 del 12 de noviembre de 2007.

Mensaje 99 Sábado el 12 de Abril de 2008 «Como siempre pensaron que no estaría y muchos no se conformaron. Acá estoy, siempre en Camino, solo debes unirte a la Luz de la humanidad. Dios Padre Todopoderoso, su Hijo, y el Espíritu Santo, brotan como semillas y gritan ser cosechados. "Salá marecos." "A eco esalá". 5 La Paz del Señor esté con ustedes. Y con tu espíritu.»

Mensaje 100 Jueves 12 de Junio de 2008 «Hijos: De rodillas, les pido: confianza, amor y fe. Es muy feo el derrame de esta tierra. ¿Cómo puede ser? Hermanos en sangre, hermanos en la fe y en el poder, luchan entre sí. Niños en el mundo no tienen una madre para ser amamantados, yo los acuno suavecito, suavecito, les canto, para que ese hambre se convierta en una dulce caricia del alma Aquí tiñen la tierra de blanco, aquí una bolsa es un plato ¡cuánto desperdicio! Dios Padre, Dios Hijo ya no saben qué más dar, porque cada cosa que se da, se destruye: Dios Padre arma y arma y arma ya no sabe qué más dar. La luz está, Dios Padre te espera, depende de ti que quieras caminar. Ven conmigo, acércate, la Luz está. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo esté con ustedes y con el mundo entero. 5

El saludo se trascribe tal cual se registra fónicamente en la cinta magnética. Entendemos que está en árabe.

Paz, Paz.»

Mensaje 101 Sábado 12 de Julio de 2008 Dado en Concordia, Entre Ríos.

«La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, se hace presente en el mundo entero. El Señor es quien los guía, es el Buen Pastor. El Señor es quien les habla y los acompaña. El Señor es al quien deben confiar. El Padre celestial, quien creó los cielos y la tierra, quien dio la semilla y el agua, quien regó y cosechó, es aquel al cual deben seguir. Dios Padre necesitó de Dios Hijo. El Espíritu Santo hace la fortaleza del alma. Hijos toquen la Luz, tóquenla, sigan el Camino. La oscuridad avanza cada día más y no permite que la Luz se filtre. Limpien su alma y habrá Luz, alimenten su alma y aun habrá más Luz. Esta Madre los acompaña en cada Rincón, en cada lugar. Búsquenme y me encontrarán. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, esté con ustedes y en el mundo entero.»

Mensaje 102 Martes 12 de Agosto de 2008 «Para mis hijos: Que hoy baje mi cabeza, no significa que me he rendido. Hoy estoy triste, pero mis brazos están altos. Se han creído, que porque acomodé algunas cosas, no significa que la fiera se convirtió en gatito, aún. Ella en la tierra junto a sus pilares y yo en cada Rincón donde me llaman, lucharemos juntos, solo por una razón, que

es el amor de Dios. La Cadena de la Humanidad jamás se debe de romper, menos aún, cuando el hombre quiera destruirla. Deben apretar fuerte sus manos unos a otros, limpiar su alma y así ayudarán mejor y escucharán mejor a los demás. Las puertas del cielo están abiertas. Hijos, hijas, donde tú quieres que Él vaya, yo iré. Ábreme tu hogar y ahí Dios Padre, Dios Hijo y el Espíritu Santo, derramará bendiciones. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.»

Mensaje 103 Dado en Mar del Plata, el 6 de Septiembre de 2008 "La Paz del Señor esté con ustedes. El Espíritu les abre camino. La Luz, la Luz deben seguir. ¡Qué pena! ¡Qué dolor! Caminan a ciegas, por no mirar. Hay una Luz que los llama: Hijos, no sigan otros caminos. Tú, que estás en el Camino, estira tu mano a tu hermano. Tú, que estás en la Luz, estira tu mano y dale a tu hermano. Ven, acompáñame. Juntos…, es la Cadena de la Humanidad. La Nueva Iglesia se está formando, no la soplen, no caerá, no traigan máquinas, pues no podrán. Ustedes están acostumbrados a destruir, pero esto no se ve y crece. No te dé vergüenza decir: Amo a Dios sobre todas las cosas. No, ama a Dios sobre todo, a su Hijo, y el Espíritu Santo, que te lleva al día a día, te ayudará a seguir. Dios Padre, Dios Hijo, hoy les brinda la Paz. La Paz del Señor esté con ustedes y en el mundo entero. As'salaam arecos, A eco as'salaam.."

2da Etapa de esta manifestaci贸n Desde noviembre de 2008

Desde el 12 de Noviembre de 2008

Mensaje 104 Dado en Quilmes, el 12 de Noviembre de 2008. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Hoy, mi corazón se llena de alegría. El país está en llamas. El mundo, el mundo, ya no sé si llamarlo mundo, se está destruyendo. Tristeza siento en estos días por lo ocurrido en distintos lugares, pero amor, mucho amor, a lo que hoy llegó a ocurrir aquí. Una vez, de rodillas, les pedí que sigan el Camino y la Luz nunca la apaguen, que esa llama suba, suba..., y siempre brille en cada corazón. Aún falta mucho, aún falta mucho que recorrer, aún falta lo mejor, que es la Luz, el Camino de Dios. Abre tus manos, y ofrezca tu corazón, al que está a tu lado. Abre tu mano y ofrece tu amor a tu hermana. Hoy estoy acá, pero estoy en cada lugar. Se gritó, pedí que se grite, y se gritó, y el grito llegó. Hoy de rodillas le agradezco que esta Nueva Vida, esto, que mi Hijo quiso que se llame Humanidad, esté iluminada por la Luz de su Vida. No pierdan el Camino. Cada uno, aunque esté a oscuras, lo encontrará; no se detengan, busquen la Luz, la Luz en la oscuridad. Como Madre les digo: aquí y allá siempre me encontrarán, y aquellos que quieran parar la misión de la Virgen de la Humanidad, no podrán. Son mi fuerte, son muy fuertes, mis pilares. Son mi fuerte, quienes están de frente a ustedes, y sobretodo, ustedes tienen el gran don que es su fe. La bendición de la Luz que nunca se apaga, ni con el agua; la bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, está derramada en ustedes, y ustedes la derramarán en el mundo entero. Solamente quiero Paz; con la Paz se llega al cielo. Quiero Paz; con la paz se pasan los días del encuentro con el Señor. As’salaam arecos, a eco as’salaam.

Mensaje 105 Dado en Neuquén (Capital) el 12 de diciembre de 2008 “Señor, yo no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.” Aquel que escuchó el mensaje, aquel que escuchó la voz que le dijo: “Ven, acércate”, aquél que siente que ya no hay vida, aquel que me ve de espaldas; es porque no quiere ver mi rostro. Yo los veo a cada uno, los sigo y los siento, y me hago sentir. Gracias al que dio el grito; gracias al que me ayudó que la humanidad hoy mire de frente. Estos días son felices, mi vientre crecerá como aquel día. Alégrate, hijo, la humanidad está triste y sin saber qué hacer. Alégrate, hermano, tu otro hermano está a tu lado para acompañarte hoy y siempre. Yo no fui digna de que entres en mi cuerpo, pero fue tu voluntad y soy la Madre del Señor. La bendición fue derramada una y otra vez, hoy será una vez más. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, será derramada en el mundo entero y llamada humanidad. Humanidad grande, hermosa y brillante con la Paz que Dios ha dejado y le seguirá dando. Cada uno sabrá a quien darle la Paz. La Paz del Señor hoy está con ustedes y con el mundo entero.

Mensaje 106 Dado en Quilmes, el 12 de Enero de 2009 En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Hoy les pido obediencia, limpieza y sobretodo, con el alma limpia, reciban al cuerpo de mi Hijo; será carne dentro de ustedes y calmará el dolor, será vida, aunque ya no esté. Pido Paz, no la hay; pido resistencia y tratarán; pido Paz. Pueden perseguir al ser, al humano, a la humanidad; pero Dios es el que los persigue a ustedes para darles

una oportunidad más. Esta madre con dolor, con el grito desesperado, una vez más les pide Paz, Paz, y luego vendrá el amor. Nuestro Señor, Dios Padre, nuestro Hijo, mi Hijo, Jesús, su cuerpo debe ser derramado en el mundo entero. El canto a la vida llena corazones y hoy lo verán. El rosario, la oración, es la cadena, es el escudo que los protege. En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo hoy les pido Paz.

Mensaje 107 Dado en Carmen de Patagones, el 12 de Febrero de 2009 Hijos: En el nombre del Padre, del Hijo y de esta Madre que ya ha gritado y gritará, por siempre se les pide Paz, Paz, Paz. Dios Padre entregó en la tierra muchos valores, pero hay uno al cual destruyen día a día. Sus manos hacen daño, sus vidas no tienen sentido. Estira, aprieta, no sueltes tu mano, no importa quien... Ya son las lunas, pedí que me llamen Madre de la Humanidad, porque se iba a perder ese nombre, Madre de la Humanidad. Estrecha sus corazones y siente lo que están perdiendo, que es la vida. Disfruten cada día. No llores, ríe. El Padre, el Hijo, no quieren más destrucción. En la mano de un niño entra el amor, en la mano de un grande entra el dolor, en la mano de un anciano entra la piedad. En el nombre del Padre, en el nombre del Hijo y del Espíritu, que le da vida día a día, les pido Paz, Paz, Paz. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo sea derramada en el mundo entero. As'salaam arecos, a eco as'salaam.

Mensaje 108 Dado en Quilmes, el 12 de Abril de 2009 En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Hoy, vuelvo una vez más a cada hogar; el pan no debe faltar, el pan es vida, el pan es el Cuerpo de mi Hijo. Benditos todos los que coman de él. Esta misión empezó diciendo que los cubría con mi manto y mi manto creció, como crecieron los caminos; el hombre no meterá mano, ni troncos en él, porque lo que Dios dio, el hombre no lo destruirá. En la gloria del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, la bendición es derramada en el mundo entero, en mi Humanidad, como me llaman y como me hice llamar. Ustedes son mi vida y yo vivo en ustedes. Hijo, díle al Padre que les dé una oportunidad más. La oración ya creció, la vida les dio amor, solo me queda decirles: tengan Paz, quieran Paz, quiero Paz. En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Mensaje 109 Dado en Quilmes, el 12 de Mayo de 2009 En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo,… sea sagrado en esta tierra. Recen, oren; y les pedí que me ayuden. Llegó la oración, llegó el día en que las manos se hagan grandes para poder cosechar lo que ya hemos sembrado. Aquel que esté libre de culpa, que se anime a tirar la primer piedra; aquel que se cree Dios, que se anime a ponerse en mi camino. Pedí Paz, quiero Paz. Debemos y deben tener Paz. El grito ya está, ven…, ven…, busca adentro tuyo: tienes vida, tienes a Dios.

En el nombre del Padre, en el nombre del Hijo, y del Espíritu Santo les doy Paz.

Mensaje 110 Dado en Quilmes, el 12 de Junio de 2009 A la Humanidad, a mis hijos, a todos aquellos que hoy hicieron hasta lo imposible para que no estén: Yo no me tiré en la Cruz a llorar su muerte. Yo me brindé y me abrí y le di todo, porque no necesité ver para creer. Creí sin ver. Él es la Luz que ilumina mis días. Él es el pan que llena cada día. De Él beben y viven. No se atrevan a querer apagar la Luz, ya viven en la oscuridad. Siempre brillará una estrella que te diga que estoy en el Camino y te diré una vez más: Ven, ven, de rodillas junto a la Cruz, ven conmigo, sigue la Luz y se ilumina tu camino. La bendición de Dios Padre, Dios Hijo y del Espíritu Santo sea derramada en la Humanidad y en ella, en el mundo entero.

¿Te animas a transmitir Paz y Amor? Es muy fácil, es simple; solo recordar aquel niño que fuimos. ¡Anímate! La Humanidad está con miedo. Vamos, juntos podemos; estos tres mosqueteros y la Virgen, te enseñarán qué fácil y hermoso es vivir en Paz.

Mensaje 111 Dado en Quilmes, el 28 de marzo de 2010 Abre camino. Canta y camina, sígueme. Madre de la Humanidad de Quilmes, Buenos Aires, Argentina. Cadena, sin hierro; camino, sin obstáculos; sol, con luna; lluvia, sin nubes; así brilla mi Corazón. Nadie podrá apagar lo que Dios ha encendido, nadie se meta en mí y en mí, se metan con mi Hijo. Crece, crece misión; llámenme: Madre de la Humanidad de Quilmes, Buenos Aires, Argentina, aún, más allá de la frontera. Soy, seré tu mano. Fui, soy y seré su Madre, su Cuerpo. Su Sangre ya fue derramada, ya se levantaron los cimientos, ya la luz se encendió. Ahora solo queda la fe en Dios Padre, en Dios Hijo y Espíritu Santo. La Paz del mundo, la Paz de Argentina, la Paz entre hermanos, debe brillar y lo hará la misión de la Madre de la Humanidad de Quilmes, Buenos Aires, Argentina. Ataquen gatitos, ataquen que la leona está preparada. Este es el cuerpo y la sangre de mi Hijo, y recuerden: hoy lo comerán en un hogar humilde como fue el de Él. El verdadero, está en las iglesias; pidan que se cumpla todo lo que Dios ha pedido a través de mi Hijo; y el que no lo haga, Dios ten piedad, le va pedir su explicación de los errores. Hoy es el pan de la hermandad, hoy es el pan de los caminos, hoy es el pan de la vida. Tomen el vino y compartan en hermandad, pero recuerden que la sangre de mi Hijo está, está y la deben tomar de aquellos que eligieron el camino de Dios y prometieron serle fieles; no olviden que sea así. En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. El pan y el vino en hermandad, en la Madre de la Humanidad de Quilmes, Buenos Aires, Argentina, va a bendecir con la presencia de cada uno de ustedes. La paz del Señor les doy.

Mensaje 112 Dado el 13 de abril de 2011 El Padre le dijo al Hijo, que le diga a su Madre, que Dios Todopoderoso bendice la Humanidad y le pide Paz, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. El Hijo bendice los alimentos que no deben faltar, tan solo un bocado alcanza. Paz. Paz les dejo, Paz les doy, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Mensaje 113 Dado el 17 de abril de 2011 Este es el pan de la vida eterna, coman de él y de él encontrarán la salvación. Este es el vino que crece en los viñedos, lugar de Paz, Paz de Amor. El vino puede purificar las almas. Bajo los olivos dejé mi miedo; al llegar a mi Padre, sembrado de naír6 estaban los campos. Hoy se cierra una etapa, depende de ustedes como sepan vivir la nueva vida, el secreto está en vivir. En el nombre del padre, del Hijo y de todos los Santos, la bendición está dada, llévala con tu vida. La vida de ustedes depende de que vivan y enseñen a vivir. La Paz les doy, la Paz les dejo.

Nardo.

Mensaje 114 Dado en Quilmes el 29 de abril de 2012 «Solo salvaré aquellos que confíen en mi hijo. “Yo confié” y lo tendré, para siempre. No dudes. No des falso testimonio. No te dejes atrapar, por falsos dioses. “Dios te ama”, y esta Madre te cuida con su manto. Mantente “fiel” a “Dios”; y ahí está el secreto de la Felicidad y la Vida eterna. Hoy una vez más daré una demostración de lo que Dios, nos brinda en la tierra para llegar al cielo. Solo confía, ama y “ten fe”. Una Madre que los ama. Bendiciones. La Humanidad está feliz.»