EJERCITO DE SALVACION Territorio Oeste de Sudamérica Avda. España 46 – Teléfono 26957005 – Santiago de Chile (Circulo de la Amistad – www.ejercitodesalvacion.cl)
Octubre 2016
Queridas amigas, El pasado mes de Agosto, Dios tuvo a bien llamar a su presencia a quien por muchos años tuvo la responsabilidad de llevar este ministerio de la carta del ‘Circulo de la Amistad’ de los Ministerios Femeninos, nuestra querida Mary Salvany. Durante el pasado año, cada vez más frecuentemente, me manifestaba su ansiedad por lo que iba a pasar con su carta cuando ella ya no estuviera presente. Y muchas veces me sugería que ‘tal vez’ pudiera ser una posibilidad de que la reemplazara en este quehacer, a lo que siempre le respondía que sería muy difícil suplir o siquiera aspirar a hacerlo. Pero aquí estamos, con mucha humildad, tratando de ocupar ‘sus zapatos’, confiando en la promesa siempre fiel de nuestro Señor que siempre sostiene, capacita e instruye.
En varios de nuestros países, en Octubre recordamos de manera especial a los integrantes de nuestra sociedad que han alcanzado la Tercera Edad… En el tiempo actual, no se ama la vejez ni se quiere llegar a viejo, sin embargo desde otro punto de vista nunca se ha ocupado el mundo más de ellos que hoy en día. Incluso ha aparecido una especialidad médica dedicada al tema, la geriatría, la que se ocupa de todo lo concerniente a la vejez. Vivimos inmersos en una civilización de jóvenes que teme a la ancianidad, evitando sus apariencias. No obstante el número de ancianos no deja de aumentar y la proporción de jóvenes sigue disminuyendo. Y estamos llenos de contradicciones: nos quejamos que se ha perdido el respeto al viejo, pero por otro lado se les separa de la vida, aislándolos o dejándolos solos. Cuántas cosas podemos aprender de cada uno de ellos, muchos podemos beneficiarnos de su sabiduría, de su experiencia y de su comprensión de los verdaderos valores de la vida. Valoremos a nuestros ‘Viejitos’, mientras les tenemos, tienen tanto que enseñarnos.’
Pensamientos: La edad es un estado de ánimo. Si conservas joven tu mente y tu corazón, eres joven. Un corazón lleno de amor nunca envejece