Newsletter El fundador del Ejército de Salvación en su última participación pública declaro: ¡Mientras las mujeres lloran como lo hacen ahora, lucharé ; mientras los hombres entran y salen de la prisión como lo hacen ahora, lucharé; mientras haya un borracho abandonado, mientras haya una niña pobre y extraviada en las calles, mientras quede una sola alma en tinieblas y sin la luz de Dios, lucharé . ¡Lucharé hasta el fin!” Despúes de 150 años de vida, el Ejército de Salvación mantiene viva esta lucha, en esta edición queremos compartir algunos pensamientos de la razón de esta lucha, que tristemente no ha terminado.
¡Lucharé por las mujeres! “Mientras las mujeres lloran como lo hacen ahora, lucharé…” Así inicia la célebre frase de William Booth, el fundador del Ejército de Salvación, donde se menciona varias injusticias sociales contra las cuales él estaba dispuesto a luchar hasta el fin, y de hecho lo hizo. En 1885 logró reunir un listado de firmas con centenas de millares de nombres apoyando la elevación de la edad de la mayoridad femenina. Esa lista le sirvió como instrumento para presionar de tal manera a los parlamentarios británicos, hasta que finalmente el parlamento aprobó una ley elevando la mayoridad femenina de 13 para 16 años. Desafortunadamente, las injusticias contras las mujeres continúan y el llanto femenino no puede ser ignorado, principalmente por aquellos que como nosotros se dicen herederos de William Booth y aún más seguidores de Jesús.
Una de las más grandes injusticias que sufren las damas es el Machismo que, con su triste creencia en la supremacía masculina, aún prevalece en nuestras comunidades, alimentado por una interpretación bíblica miope que descontextualiza la enseñanza paulina y desconsidera el panorama bíblico completo. Una lectura honesta, fiel e integral de las escrituras sagradas nos lleva a entender que el proyecto divino para los seres humanos siempre fue y es la equidad de género.
Interesante que uno de los antónimos de la palabra equidad es iniquidad, un término negativo ampliamente usado en la Biblia y que contiene un significado de fuerte reproche por Dios. Pero, “iniquidad de género” es una expresión que bien describe la opresión a que son sometidas las mujeres cuando se distorsiona la enseñanza bíblica.
En la “Creación” fuimos formados equitativos “…Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a la imagen de Dios. Hombre y mujer los creó…” (Génesis 1:27 – NVI) ambos recibieron la imagen de Dios y de Él la responsabilidad de gobernar sobre la tierra. Fue el pecado en la “Caída” que deturpó esa realidad introduciendo el servilismo femenino (Génesis 3:16). Pero en la “Redención”, Jesucristo a través de su sacrificio en la cruz, posibilitó reconciliación con el Padre Celestial y los unos con los otros (2 Corintios 5:19).
Si logramos extirpar de nuestro medio el Machismo, que es un fomentador de varias otras formas de explotación femenina, estaremos dando un gigantesco paso para abandonar la iniquidad de género y seguir rumbo a la equidad. Mientras las mujeres lloran como lo hacen ahora, yo también lucharé y te invito a hacer lo mismo. Comisionado Torben Eliasen Jefe Territorial
Mientras haya una niña pobre y extraviada en las calles, yo lucharé Hace algún tiempo el Señor tocó mi corazón mientras hablábamos sobre el tráfico y la trata de personas. En algún momento cuando la expositora hablaba sobre los diferentes tipos de trata y tráfico que existen a nuestro alrededor y como este índice cada día va en aumento. Recordé que mientras estábamos en una residencial de estudiantes vino un hombre en busca de alojamiento para su hija, cuando le pregunté la edad de su hija me respondió tiene 12 años. Le expliqué que era una residencial para señoritas estudiantes de nivel superior a lo que él me refirió y usted no necesita una persona que trabaje en su casa, mi hija aprende rápido, puede trabajar en su casa y usted le paga los estudios y le da comida.En ese momento quizás no reaccioné, porque esta situación era muy común y “culturalmente aceptable”, muchas niñas vienen del campo, de la sierra y trabajan en los hogares, cuidan bebés que apenas pueden cargarlos. Pero ese día que el Señor me habló medité la diferencia entre lo “culturalmente aceptable” y lo que Dios me llama a hacer y dije “yo lucharé... Existe un alto índice de niños que trabajan en la calle, los padres no priorizan la educación de sus hijos, anteponen la supervivencia, ya que para poder sobrevivir deben trabajar cada miembro de la familia, muchos de ellos son víctimas de explotación. Detrás de estos niños está el negocio de un adulto, que muchas veces se queda con todo el dinero.Niños que limpian autos, hacen malabares, venden dulces, cantan, etc., en el tiempo en que deberían estar en la escuela, es algo tan común que la sociedad parece ya haberse acostumbrado a verlo, pero ¡¡¡NO!!!, esto no es la voluntad de Dios. Para erradicar el trabajo infantil debemos unirnos. La primera estrategia es no adquirir los productos y servicios que ofrecen los menores esto solo ayuda a mantener la problemática, porque si el trabajo infantil no tiene rentabilidad, desaparecerá. Usted y yo podemos luchar, para que esto no siga sucediendo frente a nuestros ojos. Debemos luchar para que estudien, para que tengan las mismas oportunidades que otros niños, luchemos para erradicar este flagelo social, para que cada niño disfrute su etapa infantil, para que no sigan en peligro. Proverbios 31:8 nos dice: “Abre tu boca, juzga con justicia, y defiende la causa del pobre y del menesteroso…” Mayora Carolina M. Márquez.
Mientras los hombres entran y salen de la prisión como lo hacen ahora, lucharé… “Con un mundo tan decidido a destruirse, no me parece tan horrible que alguien quiera contribuir a reconstruirlo” (Desmond Doss)Con esta frase un joven soldado norteamericano en plena guerra mundial decide no hacerse parte de la destrucción y lo más importante no hacer aquello que era normal ser indiferente a la vida y matar. Hoy la indiferencia hacia el otro, es una brecha que cada día se agranda, sin embargo por el siglo 18 un valiente hombre en Londres levantó su voz y exclamó “Mientras los hombres entran y salen de la prisión como hacen ahora, lucharé, mientas haya un borracho abandonado lucharé”, Hoy día el entrar y salir de la cárcel para algunos es un estilo de vida, una forma de caminar en su diario vivir, es por eso que hoy seguimos luchando por provocar cambios en los estilos de vida mediante la palabra de Dios, e impulsando a las familias a cambiar de vida al igual que aquel soldado en medio de una horrenda matanza su pensamiento era el hombre que estaba a su lado, uno más!! Ese era el pensar el sentir salvar a uno más solo uno. El lema de Alcohólicos ánimos es por hoy no beberé. Estamos en tiempos complejos no solo por la pandemia que nos ataca sino por una despreocupación por los demás , El mensaje revolucionario de Jesús de hace dos mil años atrás crea y genera cambios reales, al igual que nuestro fundador William Booth por el año 1800 exclamo el cambio es posible; En el evangelio de Juan capítulo 3 versículo 3 el maestro invita a un anciano a nacer de nuevo, tener un cambio de pensar y un cambio de actitud para vivir el amor. El soldado Doss salvó 75 vidas, el Ejército de Salvación en sus más de 150 años ha tocado miles de vidas a través de sus hogares, colegios y templos alrededor del mundo con un solo objetivo y un lema Jabón, sopa y salvación, al igual que el buen samaritano, apoyamos a nuestros hermanos a lavar sus heridas, alimentamos sus cuerpos para fortalecerles y llevamos a sus corazones un mensaje fresco, vivo de un Dios que siempre está dispuesto a aceptar y perdonar. Lucharemos contra la indiferencia, lucharemos contra la injusticia, lucharemos contra un mundo egoísta e incapaz de amar sin esperar algo a cambio. Mayor Manuel Márquez.