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Comandante
MAGOYA
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Gobierno del Distrito Capital. Secretaría de Identidad Caraqueña. Fundación para La Identidad. Caraqueña Esquina Principal. Teatro Principal. Piso 3. Parroquia. Catedral. Caracas 1010. revistaidentidadcaraquena@gmail.com
@IdentidadCcs @prensacapital Texto: Álvaro Arismendi Referencias Bibliográficas :Vargas Medina Humberto “Remembranzas de un Guerrillero de los sesenta” Fundación Juan Vives Suriá 2013. Abreu Hernán “Memorias del Frente Guerrillero José Antonio Páez” Fondo Editorial IPASME 2011. Linares Pedro Pablo “Magoya el Comandante Guerrillero Campesino de los años 60 en Venezuela Academia.Edu 2010. ______________ “La Lucha Armada en Venezuela” Librero Online 2006. http://www.avn.info.ve Magoya, el líder guerrillero campesino que se convirtió en 2016. http://www.cubadebate.cu Murió el mítico Comandante Magoya de la guerrilla venezolana 2016. https://www.aporrea.org Entrevista 2 de José Gregorio González Márquez al Comandante Magoya 2002.
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Comandante Magoya COMANDANTE MAGOYA EL NACIMIENTO DE UNA LEYENDA
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i hiciéramos el ejercicio de preguntar a un venezolano común con cierto nivel de cultura política, si ha oído hablar de Ramón Helegído Sibada probablemente te respondería que no, pero si hiciéramos el mismo ejercicio preguntándole si conoce o ha oído hablar del Comandante Magoya el nivel de respuestas afirmativas seguramente aumentaría considerablemente. Tanto para unos como para los otros debemos contarles que se trata de la misma persona, con la única diferencia que el primero nació el 13 de mayo de 1946 en la Sierra falconiana de Pueblo Nuevo, mientras que Magoya la leyenda nace el 23 de agosto de 1963 en las montañas de esa misma Sierra cuando Ramón aquel joven campesino de 17 años, decidió unirse a los guerrilleros que ese día tomaron su pueblo adoptando el seudónimo de Magoya. Cuenta el legendario comandante en entrevista recogida por la Agencia Venezolana de Noticias que “camino a la montaña de Iracara, para sumarse a la guerrilla, sacó del bolsillo de su pantalón su partida de nacimiento y la rompió en pedacitos. Y dije: no bajo más hasta que no triunfemos. Esa era la mentalidad. No sabía el camorrón en el que me SEAMOS COMO agosto 2017 / Año 1 / Número 6
iba a meter, pero tenía conciencia de clase, a pesar de que no teníamos ninguna ideología política.” Ese día nació el Comandante Magoya, líder guerrillero campesino, que de trabajador en los trapiches falconianos de Pueblo Nuevo pasó a convertirse en un referente de lucha popular, cuyo ejemplo trasciende a su muerte física, ocurrida el 19 de febrero de 2016. ¿POR QUÉ MAGOYA? Los compañeros de Pueblo Nuevo, que subieron con él a la montaña, recordaban cuando Ramón Helégido le decía a su abuela Gregoria: “Magoya, una locha”. De allí salió el nombre del jefe guerrillero. “A veces, en los combates y en los caminos, yo gritaba ‘Magoya, una locha’, para ponerle sabor a los muchachos” contaba con esa gracia que caracteriza a los revolucionarios el legendario combatiente. En la lucha guerrillera de los años 60, el Comandante Magoya comenzó a forjarse como leyenda. Se decía en las montañas que al joven le acompañaba un protector espíritu brujo, que le permitía salir ileso de los numerosos combates y emboscadas. “Decían que era brujo, que me convertía en piedra, que me convertía en zorro, que no me entraban balas. Yo presentía los peligros”, narraba Magoya sobre su 3
intuición campesina, en el documental de Vive TV “Magoya, el último guerrillero que bajó de la montaña”, realizado en el año 2010.
Prometimos el poder por la vía de las armas, pero no pudimos. Y ahorita que estamos en el gobierno, tenemos una responsabilidad histórica, política, un compromiso moral
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DESERTOR JAMÁS GUERRILLERO POR SIEMPRE Cuenta el combatiente guerrillero Humberto Vargas Medina en su libro Remembranzas de un guerrillero de los años sesenta, que “En la noche, ya de madrugada, sentí un ruído debajo de mi hamaca que me despertó. Vi al Gatico. — ¿Qué pasa?—, le dije. —Que quiero que me prestes tu FAL para hacer mi guardia. Él tenía una metralleta. —Haz tu guardia con tu arma—, le dije, coloqué mi FAL conmigo en la hamaca y dormí con él. En la mañana cuando nos despertamos, algo raro notamos en el campamento, faltaba gente. Había mucho silencio. Todos observábamos la situación, pero nadie pronunciaba palabra. Y comenzamos a notar la ausencia de combatientes que, hasta anoche, estaban con nosotros. Siete combatientes, casi una escuadra completa al mando de Magoya, se había ido sin decirnos nada, separándose definitivamente del grupo guerrillero. Con él se fue el Gocho Gustavo, Choropo, el Gatico, Tenorio, Zapata, de un grupo de siete guerrilleros, nos abandonaban, dejando un gran vacío entre nosotros. El campamento estaba mudo. Luben y Miranda, los jefes de la guerrilla, convocaron inmediatamente a una asamblea. Todos nos fuimos colocando en un plancito bien sabroso en el que cabíamos regados, unos sentados en el suelo, otros parados, pero atentos a lo que iban a decir estos dos miembros de la comandancia. Miranda tomó la palabra haciendo un recuento de la situación: —Para nadie es un secreto que estamos en serias dificultades. Hemos tenido información de los golpes que nos han dado en Cojedes, en Portuguesa y en Caracas.Víctor Vega ha traicionado, está colaborando con el SEAMOS COMO agosto 2017 / Año 1 / Número 6
ejército y están golpeando a nuestra base social, hay algunos campesinos presos y otros se han ido de los caseríos. Matías ha abandonado definitivamente. A la mañana siguiente continuamos la marcha. Luben estaba al lado de Miranda. Recorría con la vista a cada uno de los combatientes reunidos allí. Con su figura huesuda y desgarbada y su AK siempre terciado, se acomodó el bigote entorchándole la punta como solía hacerlo con frecuencia, tomó aire y se dirigió al colectivo que lo oía con atención: —Lo que ha pasado es sumamente grave. Los compañeros han desertado y eso significa traición y yo ordeno que sea quien sea el que los encuentre debe aplicarle la pena máxima por desertores. Si hay otros que no se sientan bien aquí y quieran abandonar la guerrilla, tienen plazo hasta las seis de la tarde para que pidan la baja, el SEAMOS COMO agosto 2017 / Año 1 / Número 6
que se pase de ese tiempo y la pida será fusilado inmediatamente. El grupo de jóvenes guerrilleros comandados por Magoya rompió el cerco y avanzó desde el estado Trujillo donde se produjo la separación, con rumbo a su tierra, la del zambo José Leonardo, la que años atrás le había permitido la entrada al movimiento guerrillero de Miguel Noguera y Baltasar Ojeda. Allí llegarían a Falcón. No iban pacificados, no, iban a seguir combatiendo al ejército y a seguir construyendo sueños, como aquel pequeño ejército loco que en otras tierras americanas luchó por la soberanía y un mundo nuevo y mejor. Tenían que combatir para demostrar la vigencia de la lucha armada que no eran desertores como había afirmado Luben. Ahí estaban con las armas en la mano y combatiendo. En la zona de la que conocían cada rincón, con la gente que los vio 5
crecer y los conocía desde niños, como decía aquel guerrero, líder de la Revolución China, como pez en el agua. El ejército movía sus tropas. Los camiones llenos de soldados estaban allí y circulaban por las carreteras. El mandado estaba hecho, solo había que esperarlos. La planificación para ese grupo que conocía como la palma de la mano el terreno, era como beber agua. — ¡Muchachos, vamos a pelear pues!—, les dijo Magoya. Y le echaron varios vistazos a la carretera, escogieron la curva donde esperarían el paso de los camiones. Se colocaron. En las emboscadas, a veces la espera se hace muy larga, y en ocasiones los camiones no pasan y la espera puede durar varios días. Los oídos escucharon el ruido del motor de los camiones —¡Ahí vienen! Y se acomodó cada quien en su sitio. Las armas las tenían ellos y había que quitárselas. El cuerpo tenso, la mirada puesta en la mira en dirección al objetivo y el dedo en el gatillo. Era el 8 de junio del 68, en la vía de Pueblo Nuevo. Dos camiones del ejército se acercaban. El grupo guerrillero esperó a que se acercaran más y las armas empezaron a vomitar las balas. Los soldados saltaban a la carretera tratando de salvarse, los camiones humeantes quedaban a un lado de la carretera. La sorpresa, factor fundamental en la guerra, los aturdió y daba sus resultados. El grupo de asalto se lanzó a la conquista de las armas mientras los grupos de contención los protegían. Un teniente y cuatro soldados resultaban muertos y unas cuantas armas pasaban a las manos de la guerrilla. Nuevos comba6
tientes las empuñarían. Se retiraron con el sabor de la victoria. Con estas acciones Magoya demostró que no era un desertor, sino que su decisión formaba parte de una nueva táctica que lo llevaría a poner su nombre en lo más alto de las cumbres guerrilleras. Así las operaciones de Magoya y su pequeño grupo guerrillero aliviaban la ofensiva contra los guerrilleros golpeados con bajas muy sensibles en Sabana Larga. Mientras que la prensa titulaba la presencia en Falcón de guerrillas comandadas por Magoya, El Catire Larralde junto a Alí Rodríguez, sale en comisión ordenada por la dirección del PRV a las montañas de Falcón a buscar a Magoya. Después de mucho buscar lo encuentran y lo nombran Primer Comandante del Frente Guerrillero José Leonardo Chirinos”. CHÁVEZ Y MAGOYA EL ENCUENTRO DE DOS SUBVERSIVOS A continuación reseñamos una conversación del Comandante Hugo Chávez y el Comandante Magoya durante el Aló Presidente número 312 desde la Planta trituradora de piedras “Chema Saher” ubicada en la parroquia Gúzman Guillermo, del estado Falcón: Presidente Chávez: Vamos a oír al comandante Magoya chico, dale un café a Magoya ahí, menos mal que no te conseguí cuando yo te buscaba porque nos hubieran… yo me hubiera ido pa’ la guerrilla, yo te andaba buscando era pa’ pásame pa’ la guerrilla, menos mal que no te conseguí SEAMOS COMO agosto 2017 / Año 1 / Número 6
¡claro! Esa era mi… un plan loco que yo tenía Magoya ¿dónde estabas tú el año 70 por ejemplo? 77 por ahí. “Comandante Magoya” En el 77 creo que estaba en la zona de Yaracuy y Portuguesa, presidente. PRESIDENTE CHÁVEZ YO ANDABA ERA POR ALLÁ POR ORIENTE “Comandante Magoya” Estábamos lejos entonces para conseguirnos, menos mal que no nos conseguimos Presidente. En verdad, esas montañas fueron una escuela para muchos muchachos que nos incorporamos en los años 60 a esa gran gesta revolucionaria y nos sentimos orgullosos Presidente de que nosotros hoy somos parte de esta revolución bolivariana que es la continuidad de lo que iniciamos nosotros en los años 60, Chema Saher, Miguel Noguera, Cayo Martínez, mucha gente quedó en esa montaña, a muchos les salieron los dientes y a muchos se les cayeron en esa montaña. PRESIDENTE CHÁVEZ NICOLÁS HURTADO “Comandante Magoya” Nicolás Hurtado también, el teniente Tulio Martínez y muchos militares que participaron junto A nosotros en esa rebelión de los años 60 y en verdad casi éramos una guerrilla continental porque aquí murió también mucha gente de varios países, colombianos, ecuatorianos, bolivianos y peruanos, y estaba la unión cívico militar con los camaradas revolucionarios que se alzaron en la época junto con nosotros. Presidente Chávez mira, Magoya te voy a preguntar una cosa alguna vez tu que estuviste varios años en la montaña, verdad ¿cuántos años? SEAMOS COMO agosto 2017 / Año 1 / Número 6
Fíjate que antes guerrilleros y militares no podíamos vernos, éramos enemigos. Hoy existe otra conciencia en los militares
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Los agentes extranjeros y los apátridas que viven aquí sueñan con una invasión norteamericana
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“Comandante Magoya” Estuve alrededor de 10 a 12 años y 37 clandestino. Presidente Chávez Diez a 12 años, después de la guerrilla, en esos años fue casi nos topamos en unas reuniones pero por fin no ocurrió nunca, después nos conocimos. Mira Magoya, ¿alguna vez tú secuestraste una mujer, por ejemplo, para llevársela para la montaña? “Comandante Magoya” La mía, la mía que me llevé casi al otro día. Presidente Chávez [risas] Bueno, para ser feliz verdad, bueno para hacerla feliz y ella a ti por supuesto. “Comandante Magoya” Claro, todavía la tengo, se portó tan bien, me he portado tan bien yo que la tengo todavía. Esa la formé yo para mí y para el movimiento revolucionario, es una campesina igual a mí. Presidente Chávez Vamos a darle un saludo, y madre de tus hijos seguramente. “Comandante Magoya” Claro, tenemos seis hijos, se llama Tarcia Morillo, de la tierra de Yaracuy, toda la familia esta con este proceso. Presidente Chávez Desde aquí un saludo, ahora fíjate, un saludo a tu mujer y a tus hijos (…) Elegido Sibada (Comandante Magoya), Hugo Chávez, soldado, yo de la Academia Militar, tú de la academia del monte, ve, guerrillero, guerrillero del pueblo, campesino, yo campesino y me hice soldado, somos subversivos los dos. LA VIGENCIA DEL PENSAMIENTO DE MAGOYA EN LA ACTUALIDAD En entrevista concedida a José Gregorio González Márquez, el Comandante Magoya nos deja de forma clara la vigencia de su pensamiento en la actualidad. SEAMOS COMO agosto 2017 / Año 1 / Número 6
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Usted habla de las milicias. ¿Se hace necesaria la formación de un cuerpo de milicias en Venezuela? Las milicias se hacen necesarias para defender el proceso revolucionario bolivariano. Estamos trabajando en la conformación de las milicias, ya hemos conversado con algunos jefes militares. Tenemos que prepararnos para la defensa del pueblo pues el proceso aún está en peligro. Los agentes extranjeros y los apátridas que viven aquí sueñan con una invasión norteamericana. Fíjese que en la Asamblea la derecha se está oponiendo a que se repatríe el oro entregado por los gobiernos anteriores a los bancos extranjeros. En Venezuela hay un plan desestabilizador y todos estamos obligados a prepararnos para hacerle frente. Las milicias son el pueblo organizado. Estamos hablando de un plan desestabilizador ¿Quienes participan? Aquí está metida la CIA con todos los hierros. Asimismo, existe una campaña mediática en la que participan numerosos medios de comunicación. Incluso hemos detectado la presencia de paramilitares que trabajan junto a los apartidas. Por eso, si nos descuidamos podemos perder la revolución.
migos. Hoy existe otra conciencia en los militares. Antes se formaba a los militares para perseguir a los revolucionarios, para masacrarlos pues nosotros éramos los comunistas, los comegentes. Sin embargo, es bueno señalar que muchos militares se incorporaron con nosotros en los años sesenta a la lucha armada. Se hace necesaria una profundización ideológica en el país. ¿Cree usted que pueda lograrse en Venezuela? Si es muy importante la formación ideológica. El compromiso es de todos los revolucionarios. Crear una nueva conciencia social se hace necesario. Nosotros estamos obligados a impulsar el verdadero sentido de la revolución. No ha sido fácil emprender un proceso revolucionario como este. Aquí hay muchos apátridas que les gustaría traer a los norteamericanos para sacar a Chávez. Si esto ocurriera tomaríamos de nuevo las armas para defender al pueblo.
Camarada ¿Considera usted que en la actualidad existe un proyecto cívico militar? Estamos unidos a los militares revolucionarios. Gracias al presidente Chávez tenemos una unión cívico-militar que lucha por el bienestar del pueblo. Nosotros estamos participando con ellos en los trabajos que se hacen diariamente en toda la geografía nacional. Fíjate que antes guerrilleros y militares no podíamos vernos, éramos ene10
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Estamos dispuestos a luchar porque la revolución nos pertenece hace muchos años. Tenemos un compromiso histórico con todos los camaradas que se quedaron en el camino, los que fueron asesinados y los desaparecidos
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