CARTILLA PARA EL TRABAJADOR 1: HABILIDADES PREVENTIVAS PARENTALES ¿Qué son? “Son todas aquellas capacidades prácticas y recursos que tiene un adulto que cumple un rol parental que consiste en proteger y educar a los hijos”. (Barudy y Dantagnan, 2007). Se pueden desarrollar a través de la práctica y el ejercicio en la vida cotidiana. Algunas de éstas son: La comunicación asertiva. La solución y el manejo de conflictos familiares. El manejo de normas y límites.
Qué entendemos por: Comunicación asertiva: Se refiere a la expresión directa, honesta y en el momento oportuno de las ideas, sentimientos, necesidades o derechos. Favorece las relaciones entre los miembros de la familia y se refleja en saber interpretar efectivamente la intención del otro (¿qué me quiso decir?) y saber expresar de manera clara y oportuna los propios sentimientos e ideas hacia el otro (¿cómo me siento yo con lo que me acaban de decir?). Resolución de conflictos: Es la capacidad para enfrentar situaciones problemáticas al interior de la familia y analizarlas para buscar nuevas soluciones. Permite a las personas conocer la importancia de saber abordar eficazmente los problemas o situaciones conflictivas surgidas en el ambiente familiar. Normas y límites: Son las pautas de comportamiento y convivencia al interior de la familia. Deben ser flexibles e ir cambiando según las distintas edades, para facilitar la relación en la familia y apoyar a los hijos en su desarrollo. Se refieren a aquellos acuerdos que son evidentes y conocidos por todos, además de aquellos que se dan por entendido (aunque no se digan o no se estén recordando constantemente). Estos acuerdos nos señalan qué está permitido y qué no, y cuáles son los límites que se van a tolerar para que se cumplan las normas del hogar.
¿Por qué son importantes para la prevención del consumo de drogas y alcohol? Fortalecer las habilidades parentales contribuye a que los hijos tengan mayor seguridad en si mismos y sean capaces de tomar sus propias decisiones de una manera responsable y saludable. Permite que los hijos sientan mayor seguridad, sabiendo lo que se espera de ellos. Ayudan a afrontar eficazmente los problemas surgidos en el ambiente familiar. En este mismo sentido, es importante que todos los miembros de la familia puedan ser capaces de resolver situaciones problemáticas. La comunicación asertiva es útil como modelo para que los hijos aprendan a decir "no" en forma oportuna en situaciones que le ofrezcan consumir drogas o alcohol. Otra manera de colaborar en la prevención del consumo de drogas y alcohol es manteniendo ciertos límites y cumpliendo las normas establecidas por la familia. Esto debe ser complementado con una posición familiar clara hacia el no consumo de drogas y alcohol, lo que permite fortalecer la identidad familiar, aportando al establecimiento de expectativas claras y coherentes sobre lo que se espera de la conducta de los hijos.