El Estado de los monopolios está frenando el potencial de nuestra sociedad, e impone límites propios a una sociedad cuyo único interés es la ganancia. Una Revolución podrá liberar las fuerzas del Hombre, organizado por miles de años para producir, e imponer un sistema socialista que se adecue a las aspiraciones más profundas de la sociedad humana. De la profundidad que adquiera la lucha de clases en ésta etapa y del papel que juegue el partido revolucionario para encaminarse a la lucha por el poder, depende en gran medida el futuro de las próximas generaciones.
la revolución está en marcha
XV° CONGRESO Partido Revolucionario de los Trabajadores 1965 - 2013