Se Evita la Tragedia

Sesenta y nueve indocumentados son rescatados por la Guardia Nacional de una caja de tráiler abandonada

Por Héctor Calderon Hallal

El pasado 20 de junio, en el kilómetro 134 de la carretera federal 70, a la altura del municipio de Villa de Zaragoza, en el estado de San Luis Potosí,16 mujeres, 2 niñas y 51 hombres, migrantes, fueron rescatados según los primeros conteos, de no morir asfixiados al interior de una caja de tráiler con doble fondo, dada la irresponsabilidad de un par de conductores que, debido a una supuesta falla mecánica, abandonaron criminalmente la unidad y a los 69 migrantes que transportaban, en condiciones infrahumanas.

Según informes de la autoridad de San Luis Potosí, fueron elementos de la División de Caminos de la Policía estatal, en coordinación con la Guardia Nacional (GN), quienes se percataron del tracto-camión color azul, estacionado en ese punto de la carretera federal que conduce a Río Verde, S. L. P., desde donde provenían los gritos de los migrantes encerrados, quienes pedían auxilio, por lo que procedieron de inmediato a su 'liberación'.

Aún retumba en la memoria de los mexicanos y en la conciencia de las autoridades de los Estados Unidos, la trágica muerte por asfixia de 53 migrantes en la caja de un remolque que circulaba ya en territorio estadounidense, concretamente en San Antonio, Texas, el 28 de junio del año pasado.

Cabe señalar que San Luis Potosí, es un Estado vanguardista en términos de prevención policial, pues ha instaurado la Policía División Caminos, para trabajar en forma coordinada con la Guardia Nacional el tema migratorio, en carreteras y caminos de la entidad. El gobierno ha adoptado esta estrategia a raíz de los deplorables hechos –también recientes- ocurridos en el municipio de Matehuala, donde se presentaron secuestros masivos de personas migrantes.

Para Frank de Ávila, reconocido activista y defensor de los derechos humanos y cívicos de la población migrante en Estados Unidos, específicamente de los mexicanos originarios del Estado de San Luis Potosí en Illinois, Estados Unidos, el fenómeno migratorio en la región ha rebasado los límites de la normalidad y entrado en el terreno de la tragedia en muchos sentidos.

“El solo hecho de que existan seres humanos que admitan –por imperiosa necesidad- ser trasladados en condiciones infrahumanas, de peligro extremo y ser, en muchos de los casos, sujetos de una cadena delictiva por parte de coyotes, violadores, tratantes de personas, entre otros tipos de criminales…, es algo que nos preocupa a quienes hemos trabajado por más de 40 años en la defensa de los seres humanos, sean originarios de donde sea”, señaló quien es también uno de los principales fundadores de la 'Asociación de Clubes y Organizaciones Potosinas en Illinois' (ACOPIL).

Frank De Ávila nació en el poblado de Cerritos, San Luis Potosí, México, pero llegó a la Unión Americana como un niño, al igual que sus hermanos que fueron llevados a aquella nación por sus padres y, por tanto, se considera un migrante por su experiencia de vida personal.

No obstante reconoce que nunca como ahora se había visto el fenómeno migratorio con tanta incertidumbre por el nivel de riesgo que presenta en los últimos días: “La gente piensa por una parte, que esos desalmados coyotes que enganchan a decenas de personas con necesidad y los reclutan para la delincuencia organizada, han crecido y se han fortalecido por la poca acción del Gobierno de México al aplicar la ley… y por otra parte, hay ciudadanos que dudan -razonablemente- de que sean solo bandas de delincuencia organizada las únicas que actúan tan mezquinamente contra los contingentes de migrantes…” .

De Ávila coincide con la mayor parte del sentir nacional: “Queremos que la fortaleza en el combate a la migración esté del lado de la legalidad, del gobierno que la representa… y no de los delincuentes”.

Cabe destacar que la Universidad del Norte de Tamaulipas, (UNT) tiene programado entregar en días próximos a Frank de Ávila el Doctorado Honoris Causa 2023, por su larga trayectoria al servicio de la comunidad migrante.

La voz de Martha Olvera, otra destacada activista en la defensa de los Derechos Humanos de la población migrante en el Estado de Texas, también se deja escuchar de forma fuerte y clara a propósito de esta tragedia potencial, que afortunadamente fue evitada.

Martha es fundadora e integrante, junto con su esposo, de la Asociación 'Pro-Justicia Serafín Olvera', formada a la memoria de su cuñado Serafín Olvera, hermano de su esposo y quien fuera asesinado a golpes por elementos de la Patrulla Fronteriza.

Gracias a la lucha pertinaz y disciplinada de Martha Olvera, apegada a los valores cívicos de la convivencia en un país de leyes como es la Unión Americana y, concretamente, en una entidad extremadamente conservadora como lo es Texas, se han logrado conseguir sentencias inéditas para casos extremadamente agraviantes para la comunidad migrante, como la condena a prisión dada a los policías de Migración que asesinaron a golpes a su cuñado, situación que no contemplaba la ley estadounidense anteriormente.

Se logró también dice, gracias a su lucha, que se hiciera justicia en uno de los más deplorables hechos donde han muerto migrantes por asfixia en transportes clandestinos, el sucedido el 14 de mayo de 2003, en Victoria, Texas, donde perecieron 19 individuos en condición migrante, entre ellos 15 mexicanos, 2 hondureños, 1 guatemalteco y 1 dominicano. De tal manera, se consiguió la cadena perpetua para el chófer del camión donde viajaban las víctimas y que se desarticulara una peligrosa 'banda de coyotes', algunos de cuyos miembros eran integrantes de la legendaria 'Banda Los Texas'.

Sobre la tragedia de San Antonio, Texas, donde perecieron 53 migrantes también asfixiados en la caja de un tráiler, el 28 de junio de 2022, refiere la activista que tiene muy presente el número de víctimas, porque fue su marido –precisamente- quien fabricó las cruces para las tumbas de los fallecidos.

Martha Olvera propone que al interior del Congreso y del Gobierno Federal mexicanos, los partidos “se pongan de acuerdo para cambiar las leyes en beneficio de los fines humanitarios que se requieren para la población migrante…” Esto será importante para evitar que sigan dándose más casos como lo recientemente ocurrido en San Luis Potosí, donde los migrantes son abandonados a su suerte, con el riesgo de morir asfixiados al estar hacinados y encerrados dentro del camión que los transporta.

*Héctor Calderón Hallal es un abogado mexicano, con experiencia en el servicio público en las áreas de seguridad pública y los derechos humanos. Con experiencia en el litigio en las materias familiar y penal. Actualmente practica el periodismo en diferentes portales noticiosos electrónicos. Cursa la Maestría en Derechos Humanos por la Universidad Iberoamericana, Campus Ciudad de México.