Shallis Palomino R.
©Shallis Palomino Rodríguez, 2017 ©Editorial Alfaguara, 2017 ©Shallis Palomino Rodríguez, por las ilustraciones ISBN 9711051210 Reservados todos los derechos. No se permite la reproducción total o parcial de esta obra, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otros) sin autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de dichos derechos puede constituir un delito contra la propiedad intelectual. Impreso por Imprecomercial ©Editorial Alfaguara 2017 Diseño y composición: Shallis Palomino Rodríguez Ilustraci on de cubierta: Shallis Palomino Rodríguez Coordinación de la colección: Shallis Palomino Rodríguez Corrección: Norma Esparza C. Tipografías utilizadas: Antic Diodone, Janda Apple Cobert.
Shallis Palomino R.
En un tempestuoso día de lluvia, Alegra observa desde la ventana de su casa la lluvia caer. Se encuentra un poco triste, pues en los días de lluvia los niños no pueden salir a jugar – o por lo menos, eso dice su madre -. De repente, una idea salta en su cabeza y ella se aleja corriendo por el pasillo.
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Aparece con su traje de lluvia puesto: botas amarilla, impermeable amarillo y un paraguas. AsĂ, sale a la calle y se aventura a saltar de charco en charco. La calle estĂĄ completamente sola y mientras ella se divierte va salpicando todo a su alrededor.
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De un momento a otro, ella cae en uno de los charcos. Alegra lucha en vano por ascender pues se va hundiendo muy rรกpidamente, siente que le falta el aire.
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Luego de unos minutos, aterriza en tierra y con evidente preocupaciรณn intenta nadar hasta la superficie nuevamente, lo cual es prรกcticamente imposible, pues sus pies estรกn sujetos al suelo. Con sorpresa descubre un mundo extraordinario. Todo estรก lleno de vida, hay plantas de colores y pececitos que danzan al compรกs de la corriente.
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Los pequeños animalitos se acercan donde esta Alegra danzando a su alrededor para animarla y ella decide unirse al juego. Comienzan a nadar van de aquí para allá persiguiéndose entre sí. Alegra se está divirtiendo mucho, puesto que, nunca había visto un lugar tan maravilloso. Su cuerpo se siente ligero y puede moverse libremente por el agua.
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Después de jugar un buen rato, Alegra se sienta en una roca a descansar un poco. Piensa que todo en este mundo es divertido; sin embargo ella recuerda a su mamá que debe estar esperándola en casa preocupada, desearía haberle hecho caso. Su deseo por volver es tan grande que comienza a llorar y unas lágrimas escapan de sus ojos. Los peces al ver a la niña tan triste deciden que entre todos deben ayudarla a subir. Así estos pequeños animalitos se alejan para buscar ayuda. Cuando regresan, ya no están solos, una gigante ballena los sigue detrás.
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La ballena mira a Alegra y, muy gentilmente hace que de su orificio se forme una enorme burbuja donde la pequeĂąa queda atrapada. Inmediatamente la burbuja comienza a subir a la superficie con Alegra en su interior. Aunque este mundo es magnĂfico, ella sabe que ya es hora de regresar a casa. Por esto, se despide de los nuevos amigos que ha hecho con una sonrisa en su rostro y agitando sus manos con alegrĂa.
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Alegra se despierta tirada en la acera de la calle y siente la lluvia caer en su rostro. Se sienta despacio y posa sus manos en la cabeza que le duele un poco. Al levantarse del suelo no puede entender lo que ha ocurrido, toda su ropa estĂĄ llena de barro. Ella se levanta aĂşn confundida por el golpe que se ha dado en la cabeza. Ahora ella entiende las palabras de su madre, hay que tener cuidado en los dĂas de lluvia.
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~FIN~
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