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Entrevista SANDRINE PRESSIAT

SANDRINE PRESSIAT DIRECTORA EN RICHARD ORLINSKI

En 2002 se gradúa de la escuela de arte y diseño “Ecole presqu’ile” en Lyon, como diseñadora de interiores. Comienza su carrera profesional en Francia, desarrollando diversos proyectos de construcción, interiorismo y remodelaciones de edificios en la agencia de arquitectura francesa “By Boucharlat”, lugar en donde estuvo 2 años y medio. Los siguientes años estuvo ejerciendo como arquitecta de interiores en diversas empresas francesas y desarrollando distintos proyectos en zonas turísticas; de la misma forma tuvo oportunidad de participar en el desarrollo de residenciales en India y Dubai. Fue en 2008 que descubre México mientras trabaja en un despacho de arquitectura en el área de residencial de lujo, y nace su empresa “Nina Sand”, dedicada 100% al interiorismo, decoración y amueblado. Su empresa es un resultado satisfactorio gracias a su pasión por la arquitectura, el diseño de interiores, el arte y los viajes; un logro y esfuerzos constantes que Sandrine ha puesto durante 12 años hasta hoy. En junio de 2019, acepta el reto de ser directora de la primera galería del artista francés Richard Orlinski en America

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Latina y se establece en la Cuidad de México.

SL: ¿Qué recuerdas fue lo que te motivo a seguir una carrera en el arte y el diseño? Siempre tuve desde niña una sensibilidad al arte y dibujo, desde mis 10 años. Mi padre era muralista y mi abuelo hizo Bellas Artes. Pero la revelación de lo que quería hacer fue en una tarde lluviosa de invierno en Francia.

Tenía como 15 años y estaba paseando con mi cuñada en Montmartre, en Paris. Mi cuñada quería cosas para su casa y entramos en una tienda de arte y decoración. Fue un golpe inmediato: la luz tenue y acogedora de las lámparas, las cortinas de las ventanas de un interior típico parisino Hausmaniano cayendo en una cascada de telas sobre el piso, los sofás y los cojines enormes y suaves, el ruido de la madera vieja del parquet cuando camina, el calor contrastando con el frío de afuera. Ahí

mismo entendí que quería dedicar mi vida en crear hogares y en seguir dibujando.

SL: ¿Cuáles son algunos de los artistas que admiras?

En cada etapa de mi vida me descubro alguien nuevo a admirar. Considero también la arquitectura como arte, asimismo, tengo adoración para Axel Vervoordt, Tadao Ando, Carlo Scarpa. Los muralistas me fascinan porque es una expresión artística un poco salvaje, directa, fuera de proporciones. Me gusta lo torturado y provocante de Egon Schiele. Da Vinci por su obsesión en detallar sus pinturas, aún si fue para nunca terminar muchas de ellas, y muchos más. Hablando de Richard Orlinski, admiro su valor para lanzar una segunda carrera a los 37 años, aún con todos contra él. Se aferró a su pasión y no lo soltó hasta llegar a donde quería, tenía su mensaje artístico claro.

SL: ¿Cómo fue tu llegada a México y que te hizo desarrollar Nina Sand aquí? Llegué por primera vez a México en 2007 y fue un choque inmediato. La cultura Mexicana es un mundo de contrastes a todos los niveles y es extremadamente compleja y rica. Tras unos primeros años de vivir aquí y en Brasil creé Nina Sand porque sentí que había acumulado experiencias muy diversas y quería proponer este melting-pot a mis clientes, justamente entre varios países, arte, arquitectura y diseño. México es una pasión para mi, aunque para ser sincera, vivir en la CDMX luego me hace sentir entre amor y odio.

SL: ¿Cómo comienza tu relación laboral con Richard Orlinski?

¡Con un reclutamiento! Pero el proceso de abrir la galería y hablar de él y de su arte hace que uno se una a su mundo y causa. Mi reto era lanzar la galería y que la gente en México lo conozca. Tarea que me tomé muy a pecho ya que cada día me metía cada vez más en su universo.

SL: ¿Cuáles fueron los retos que enfrentaste para inaugurar la galería de arte de Richard Orlinski en Ciudad de México?

Fue implantar lo que no se había hecho en ningún otro país de LATAM. Con una galería en Masaryk y su fachada de cristal de 6 metros de altura y un gorila rojo de 2 metros rompiendo el cristal! Hubo que trabajar mucho la cartera de clientes, aliados comerciales, etc. Crear esta red de gente que iban a valorar y hablar de la galería. El éxito no se hace solo y estando solo, hay que crear su pequeña “armada” de gente. Además, el público Mexicano recibió el arte de Richard Orlinski con los brazos abiertos y eso fue fantástico verlo evolucionar.

SL: ¿Por qué elegir un Gorila para esta colección, que se busca transmitir? El gorila es la figura emblemática del trabajo de Richard Orlinski, dice que su gorila es el hombre perfecto pero sin pelos: es fuerte, poderoso, masculino pero también con gran corazón, sensibilidad y noción de protección a la familia. Richard Orlinski tiene 4 hijos y esta noción de familia es importante. Su gorila es su animal, pero por supuesto que cada uno de nosotros nos vamos a identificar más con un

animal de su colección que con otro, eso será la historia de cada uno con las piezas. SL: ¿Como definirías el estilo artístico de Richard Orlinski?

Es atrevido y poderoso, lleno de dualidad, colorido, impone, aún sus piezas más chicas. Se ve que es una propuesta artística muy aterrizada y que el pasó una gran parte de su vida en trabajarla. Se siente su determinación, su grito al mundo. Por eso todas sus esculturas gritan, de hecho. Me gusta decir a nuestros clientes y visitantes que, una vez dentro de la galería, es un espacio libre de expresión, cada uno puede ser libremente quien es por naturaleza, cómo las esculturas de Richard Orlinski.

SL: ¿Qué planes tienen para la galería en 2021?

Trabajar más duro, más acertado, más eficiente. Este primer año y medio de actividad fue una gran aventura. Estamos viviendo tiempos que retan así que habrá que adaptarse a esta “nueva” realidad. La galería merece que la gente la siga descubriendo y, para los que la conocen, seguir leyendo los nuevos capítulos. Porque conociendo a Richard Orlinski, si habrán nuevas historias

que contar.

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