El maíz es el cereal de los
pueblos y culturas del continente
americano. Las más antiguas
civilizaciones de América –desde
los olmecas y teotihuacanos en
Mesoamérica, hasta los incas
y quechuas en la región andina
de Sudamérica– estuvieron
acompañadas en su desarrollo
por esta planta. Esta asociación
entre cultura y agricultura del
maíz ha motivado a científicos y
humanistas a preguntarse: ¿cuál
es el origen de este cereal? ¿cómo
fue su evolución, una vez que
los diferentes grupos humanos
lo adoptaron y cultivaron para
su provecho? Estas preguntas
los han llevado a explorar el
pasado y en la actualidad, junto al
desarrollo científico y tecnológico,
han podido descifrar varios
de los enigmas que rodean la
domesticación de este cultivo.