Edición 21 Aniversario Quinto Día. Miradas a la inseguridad en Venezuela. by Semanario Quinto Día

EDITORIAL

EDICiÓn aniversaria

Quinto Día

Con esta edición que hoy entregamos a nuestros consecuentes lectores, celebramos 21 años de Quinto Día. DIRECTORIO COORDINACIÓN GENERAL Carlos Eduardo Croes H. Jaime Garvett GERENTE DE COMERCIALIZACIÓN Y MERCADEO Yoselyn Paredes GERENTE DE PROYECTOS DIGITALES Niurfreilis Bolívar PERIODISTAS María Castaños Sayaireth Castillo Oswin Barrios Ana G. Díaz Yubreiler Andreina Sotomayor

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SEGURIDAD RESIDENCIAL

SEGURIDAD RESIDENCIAL EN VENEZUELA

La organización vecinal es fundamental para evitar robos y hurtos En Caracas, las zonas de Sucre-CATIa encabezan la lista de la incidencia delictiva, seguidas por El Recreo, San Juan, La Vega y San Pedro

SAYAIRETH CASTILLO sayaireth@gmail.com

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Los venezolanos viven a diario el crecimiento acelerado de los niveles de inseguridad. El robo y el hurto son una constante entre los delitos, y las viviendas se han convertido en un blanco fácil para los delincuentes. En la actualidad ha existido un repunte noticioso que refleja el incremento de robos organizados a residencias, no solo en Caracas, sino en otros estados del país. La delincuencia ha ido evolucionando y perfeccionándose, de una manera más acelerada que las leyes y el sistema judicial. Asimismo, con el paso del tiempo, el hampa modifica y perfecciona la manera en la que penetra las viviendas, logrando cada vez mayor alcance. Un importante número de hurtos y robos residenciales no son denunciados por miedo a posibles rencillas, ya que las víctimas se sienten expuestas y vulnerables. Este hecho punible se castiga con prisión de 1 a 5 años, pero la impunidad prevalece por la falta de denuncias en los casos.

Especialistas en el tema aseguran que el hurto es un delito de oportunidad, y destreza del delincuente. El Hatillo, municipio perteneciente al estado Miranda, es una zona sensible para el hurto residencial, sobre todo durante el año 2016, donde la cifra de incidencias se elevó. En cifras La última Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de Seguridad Ciudadana, elaborada en 2009 por el Instituto Nacional de Estadística (INE), arrojó que en Venezuela se cometen anualmente cerca de un millón de robos, y más de 400 mil hurtos residenciales. Estos dos tipos penales suman, en conjunto, cerca del 80% de los delitos que se ejecutan en Venezuela. La encuesta del INE también señaló que los venezolanos no acostumbran a denunciar estos delitos contra la propiedad, por lo tanto existe una gran cifra negra. En el caso del robo, 68.27% no acudieron ante la autoridad

competente, a los fines de notificar haber sido víctima de este hecho punible. En el hurto, este número se elevó a un gigantesco 77.82%. La mayoría de los encuestados indicó que no realizaba la denuncia, ya que las instituciones “no harán nada con la misma”. Según el criminólogo Javier Gorriño, “el Estado venezolano no cumple hoy con la obligación constitucional de resguardar la integridad física y los bienes de los ciudadanos. La proliferación de los robos y hurtos constituye un gran ejemplo de ello. Los cuerpos de seguridad no cuentan con los recursos necesarios para atender el incremento de actos delictivos en el país, pese a que el gobierno constantemente anuncia la aprobación de recursos para ello”. El Observatorio Venezolano de la Seguridad (OVS), reflejó que se contabilizaron 853 hurtos en el Distrito Capital durante las primeras seis semanas del año. De las 22 parroquias caraqueñas, la zona de Sucre-Catia encabeza

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la lista de la incidencia delictiva, seguida por El Recreo, San Juan, La Vega y San Pedro. La División Contra Robos y Hurtos del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), señaló que registra al menos 15 robos y hurtos en viviendas cada semana, lo que se traduce en al menos tres de estos delitos diarios. Esta división también maneja el dato de que las bandas que se dedican al robo de viviendas en la capital de Venezuela no están integradas por caraqueños, sino que provienen del interior del país. Maracay, Valencia e incluso San Cristóbal son las ciudades de origen de los delincuentes. Un funcionario del Cicpc, que prefirió reservar su identidad, reveló que en la mayoría de los casos de hurto residencial, “el delincuente busca entrar y salir sin ninguna complicación, pero hay casos en los que la situación se sale de control y puede ocurrir que un hurto simple se convierta en robo o en secuestro, y en ocasiones, el victimario se puede convertir en la víctima”. Las bandas organizadas buscan principalmente moneda extranjera, electrodomésticos, laptops, celulares, tablets, joyas y objetos de valor. La

HURTOS SIN DENUNCIAS

853

hurtos se contabilizaron en el Distrito Capital durante las dos primeras semanas del año; lo que se traduce en 15 cada semana, y al menos 3 diarios, según el OVS.

400

mil delitos que se ejecutan en Venezuela, cerca del 80% son hurtos residenciales. Esto según la última encuesta oficial del INE, elaborada en 2009.

77.82%

de los hurtos no son denunciados, según el INE.

fuente explica que los ladrones buscan poder vender “el botín”, de manera fácil en el mercado negro. Mientras más fácil, mejor El experto en seguridad, Javier Gorriño, señaló que actualmente el delincuente busca el facilismo, y que la manera en la que buscan introducirse a una vivienda tiene que ser sin complicaciones, “es por eso que actúan en el momento en el que las víctimas no se encuentran en la vivienda, y en zonas residenciales con poco tránsito de personas, en donde no hay patrullaje policial, ni alumbrado”. Los objetos buscados en estos casos son aquellos que puedan ser manipulados sin mayor esfuerzo y trasladados sin problemas; la moneda extranjera es la más buscada actualmente en los hogares. Debido a la inseguridad, la casa se ha vuelto la caja fuerte de las personas, y el lugar de resguardo para nuestros objetos de valor y montos en moneda nacional o extranjera, ya que en la actualidad las personas prefieren guardar el efectivo en sus casas, para no tener complicaciones al momento de necesitarlo. Esto convierte a las residencias en uno de los blancos más deseados por los delincuentes.

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Prevención “En esta época, la tecnología es una herramienta efectiva, utilizada por los vecinos en las residencias, para aumentar la seguridad. Con la creación de grupos de Whatsapp por medio de celulares inteligentes, se ha evitado la consumación de algunos hechos delictivos”, agregó Gorriño. Hay edificios en donde esta herramienta ha resultado efectiva. Los vecinos incluyen al vigilante, de ser el caso, y por esa vía se mantienen en contacto para informar cualquier situación irregular, o actitud sospechosa de una persona desconocida. Lo importante es mantener el propósito del grupo y evitar mensajes que no tengan que ver con la seguridad, para evitar que los integrantes pierdan el interés y le resten importancia. El especialista refiere acerca de la importancia de simular la presencia de personas en la vivienda, ya que esto podría evitar que se introduzcan a esa residencia. La organización vecinal también es fundamental, así como armar cuadrillas y hacer guardias, de manera que los ladrones se den cuenta que los residentes están alerta, y desistan de la idea de cometer el delito.

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JAV I E R G O R R I Ñ O : “ E L H U RTO ES EL DELITO MENOS DENUNCIADO”

Residencias: un blanco fácil SAYAIRETH CASTILLO sayaireth@gmail.com

El delincuente busca todo aquello que represente un botín fácil y sin riesgo, lo que convierte a la vivienda en un gran objetivo

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Las residencias son también el hogar de nuestros más preciados bienes. Allí acumulamos y almacenamos lo que más valoramos. Hoy en cualquier vivienda se encuentran nuestros bienes de mayor valor: televisores, laptops, tabletas, celulares, joyas, dinero en efectivo, electrodomésticos y en algunos casos, hasta armas y municiones. Todo esto representa un gran botín para la delincuencia. Muy posiblemente en una vivienda de clase media se consigan hoy más valores que en una agencia bancaria, y con muchísimo menos riesgo para el delincuente. Por tanto, la recomendación es que proteja su vivienda, su familia y sus bienes. Recuerde que lo que tiene usted en su casa es insustituible. El experto en seguridad, abogado y criminólogo Javier Gorriño, señaló durante una entrevista para Quinto Día que “el hurto es el delito menos denunciado. La gente denuncia el robo; por ejemplo, si alguien se mete a su casa y se lleva el vehículo, lo que la persona denuncia es el robo del vehículo”. Según Gorriño, desde el punto de vista policial el delito más difícil de investigar es el hurto, ya que “policialmente se ha dicho siempre que el hurto solamente sale ‘por un dedo’. Explicado de una manera técnica, esto lo que quiere decir es que sale por un rastro dactilar que encuentren de uno de los autores del hecho dentro de la casa, producto de una muy buena inspección técnica, y la otra porque alguien le ‘eche el dedo’, como se dice comúnmente en el mundo del hampa y señale quiénes son los autores del hecho”, explicó. El experto asegura que investigar este tipo de delitos no es como investigar un homicidio, en donde hay mucha evidencia física, o con cualquier otro delito, como el robo. “El hurto es quizá uno de los delitos más difíciles, desde el punto de vista de investigación criminal. Hay una ventaja en todo esto: si logras capturar a una de las bandas que se

Biografía dedican a este tipo de actividades, esclareces 10 o 20 hurtos. Aunado a esto, normalmente hay otras pesquisas, utilizan los mismos modus operandi, en fin, hay una serie de elementos que ayudan a la pesquisa para tratar de individualizar varios delitos, que es la ventaja que tiene la investigación en el caso del hurto. Al capturar una banda, de inmediato se cierran 10 o 20 casos, porque son bandas dedicadas a eso”, agregó. “El hurto, desde hace mucho tiempo en Venezuela, ha sido un gran dolor de cabeza”, asegura el criminólogo, quien señala que la gente hoy en día denuncia menos, porque se ha corrido el rumor que se va a perder el tiempo y la policía no va a esclarecer el caso. “Yo recuerdo que hace bastantes años, trabajando en una comisaría, en hurto, hasta casos no denunciados se sacaron. Recuperamos el anillo de graduación de una muchacha, de un colegio muy conocido de monjas. Fuimos al colegio. Por las iniciales identificamos a la muchacha, la localizamos y fuimos a la casa de la muchacha y, efectivamente, no había puesto la denuncia y aclaramos un caso por un objeto no denunciado. Así pasa en muchos casos”, puntualizó. La actuación de los cuerpos de seguridad Para Gorriño lo primero que se debe hacer es una inspección técnica. “En los delitos, sobre todo en el de hurto, es de extrema importancia la inspección técnica, porque es donde se aplican los dispositivos de criminalística en el sitio del suceso, que se llama criminalística de campo. Esto ayuda a la búsqueda de rastros dactilares. Todas las superficies, excepto el agua y el aire, dejan impresiones dactilares y esto ayuda a la captura del delincuente; se hace un descarte con los miembros de la familia, porque evidentemente ellos tienen contacto con los objetos de la casa”, explica. El Cicpc es el encargado de investigar los casos de hurto, específicamente el departamento de inspecciones técnicas. En el caso del robo, el

Javier Gorriño es abogado, criminólogo y miembro de la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Mesa de la Unidad Democrática. Experto en seguridad. Perteneció al Cuerpo Técnico de Policía Judicial (CTPJ), y es docente del Iupolc. Es coautor del libro El Secuestro y la Toma de Rehenes y autor del estudio “Diagnóstico y Breve Análisis de la Policía Preventiva de Caracas”. Durante su carrera como investigador policial, obtuvo “Cangrejo de Oro” por la resolución del caso del triple homicidio de Mamera (1982), entre otros premios.

procedimiento viene acompañado de un retrato hablado; si la víctima ha visto a la persona y la puede identificar, o una descripción de los hechos para esclarecer el caso, logrando así una evidencia clara. Desde el punto de vista investigativo, este delito puede tener una respuesta eficaz. “Cuando tú esclareces un hurto, normalmente tienes 4, 5, 10, 15 expedientes listos, porque son bandas dedicadas a ese delito y por lo general, de una vez se logran resolver varios casos” acotó. Gorriño explica, además, que “los muchachos del Cicpc conocen de criminalística, porque el apoyo en estos casos es básicamente una inspección técnica. Lamentablemente no se cuenta con lo necesario para realizar la investigación: negro humo, polvo de esparcimiento, entre otras cosas. Estos materiales son muy costosos y se pagan en dólares, pero si tú vas sin reactivos a hacer una inspección técnica, solo vas a tomar fotos y no tienes ni la más remota posibilidad de esclarecer el hurto. Si no tienes el apoyo criminalístico, por más que tengas el conocimiento, es difícil resolver un caso. Esta situación produce impunidad, y como consecuencia, que las personas no denuncien”, finalizó.

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Cómo prevenir un atraco SAYAIRETH CASTILLO sayaireth@gmail.com

En el 90% de los casos de hurto hay una persona del entorno de la víctima involucrada en el hecho, y al menos la mitad se relacionan con las redes sociales

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Las bandas que operan dentro de los conjuntos residenciales estudian a las posibles víctimas, identificando sus movimientos, y determinan los horarios para cometer el delito. Es por ello que surge la necesidad de aplicar medidas básicas de seguridad en el hogar, para evitar ser víctimas de la delincuencia. No dejar artículos visibles que puedan ser objeto del deseo para cualquier amigo de lo ajeno, cerrar las ventanas y puertas, no dejar llaves colgadas que estén al alcance y asegurarnos que los balcones estén bien cerrados, son pequeñas acciones que ponen a resguardo nuestros bienes. Siempre es necesaria la presencia policial de manera recurrente en las zonas residenciales, patrullaje o alcabalas móviles, para lograr disminuir el acecho de “campaneros” por la zona y evitar delitos de hurto. Los especialistas en seguridad ciudadana señalan que todos somos posibles víctimas de la delincuencia. Nadie está exento de sufrir un hurto o un robo, por lo que es importante usar todos los mecanismos de defensa posible. En cuanto a la seguridad se refiere, nada está de más. Agudizar la prevención Su seguridad también es su responsabilidad, por eso debemos tomar en cuenta algunas recomendaciones: -No se debe caer en la rutina. Hay que ser precavido; al momento de entrar o salir de casa acostúmbrese a observar su entorno. -No suministre información acerca de las posesiones de su vivienda. -Evite brindar información a personas sospechosas, ellas pueden distraerle para que otros cometan el hurto. -Esté atento a las personas que se encuentren a las afueras de su residencia, los delincuentes suelen aprovechar la salida o entrada de los residentes para ingresar. -La presencia de vehículos extraños a las afueras de la zona en donde reside pueden ser motivo de alarma. -No suministre información acerca de sus horarios y las actividades que realiza. -Identifique plenamente a funcionarios

públicos, o cualquier entidad prestadora de servicio que se presente en su vivienda, sobre todo si la visita no está programada. -Al momento de extraviar alguna llave es mejor cambiar la cerradura. -Guarde sus objetos de valor en un lugar seguro, que solo usted conozca.

-Si observa alguna persona sospechosa o algún ruido inusual, alerte a los vecinos, o a las autoridades, de ser necesario. -La comunicación y buena relación con los vecinos es importante.

¿Qué se debe hacer si es víctima de hurto o robo?

De la misma manera, los expertos en seguridad y funcionarios policiales coinciden en una recomendación final, y es que las personas no deben exhibirse en las redes sociales con objetos costosos, tanto de uso personal como en su residencia. Cualquier persona de su entorno puede proporcionar información personal para que lo seleccionen como víctima de un delito. Estos casos se han incrementado con el paso del tiempo, según información policial. Funcionarios del Cicpc señalan que en el 90% de los casos de hurto hay una persona del entorno de la víctima involucrada en el hecho, y al menos la mitad de estos casos tienen relación con las redes sociales, ya sea porque algún conocido esté involucrado, o porque un stalker (observadores silenciosos o fantasmas) vigila o espía sus redes sociales.

Al momento de ser víctima de hurto o robo lo primero que se debe hacer es dar parte a las autoridades, ya que denunciar el hecho es esencial. Si tiene conocimiento de los objetos sustraídos realice un inventario, esto ayudará a las autoridades. Informe a sus vecinos, familiares y amigos acerca del hecho y la modalidad de la cual fue víctima, para alertar y evitar nuevos casos. Si pudo visualizar a su victimario informe a las autoridades la descripción física de los delincuentes, género, edad aproximada, señas particulares, estatura, forma de vestir y cualquier dato que se pueda aportar.

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Evolución de la delincuencia residencial SAYAIRETH CASTILLO sayaireth@gmail.com

El modus operandi más común es en el cual el delincuente va 'campaneando' la casa que a él le parece de más fácil acceso; el 'campanero' es el que le monta guardia a una casa, y ve los accesos

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Existen diferentes modalidades para llevar a cabo un hurto, siendo el denominador común el delincuente que aprovecha el descuido de la víctima, sea accidental, o provocado por el autor del delito para consumarlo. Las bandas organizadas que se dedican exclusivamente al hurto residencial operan según diferentes modalidades. Según las autoridades, el hampa maneja nuevos modus operandi, cada vez con mayor alcance, evolución e innovación en la manera en la que se introduce en los hogares, lo que les dificulta el trabajo. Lamentablemente en estos casos las familias no denuncian el hurto o robo, por más pequeño que este sea, y se debe a que, según las víctimas, las autoridades en la mayoría de los casos no dan respuesta. Javier Gorriño, criminólogo, explica que en la actualidad, es común que mientras las personas estén durmiendo, alguien ingrese a su vivienda; esto de igual manera es un delito de hurto, porque normalmente el delincuente no quiere que haya gente dentro de la casa, ya que lo que buscan es la forma más fácil de obtener lo que quieren. “El ladrón busca en las casas las cosas de valor que ya la gente no lleva a la calle”, aseguró. Según el especialista, “en las bandas de hurto muchas veces están implicados menores de edad, y son muy comunes los hurtos ‘dateados’, donde la información viene de adentro. Esto pasa cuando la doméstica, el conductor y el jardinero, posiblemente sin ninguna intención

maliciosa, revela información del sitio en donde laboran y alguien externo capta algo que le llama la atención. Entonces campanean la casa, evalúan el acceso posible que puedan tener, incluso si hay alarmas, perros y lo más importante, que no haya nadie dentro. El problema ocurre si mientras que se está efectuando el hurto llega el dueño de la casa, porque rápidamente se convierte en un robo -que es lo que sucede muchas veces-, y esto se torna mucho más peligroso”, señaló. “El modus operandi más común podría ser el delincuente que va campaneando la casa que a él le parece de más fácil acceso. El 'campanero' es el que le monta guardia a una casa y ve los accesos: ve los carros que hay en el estacionamiento, las posibles maneras de acceso, si hay o no dispositivos de seguridad”, agrega Gorriño. Cómo operan las bandas Uno de los métodos que se utiliza con más frecuencia es el de introducirse a las viviendas con uniformes de trabajadores de empresas de telefonía, u otros servicios. Se han visto casos de delincuentes vestidos de paramédicos, como también los llamados 'hombre-araña', que son los que trepan por los edificios, introduciéndose por ventanas y balcones abiertos. La “llamada millonaria” es una modalidad en donde el delincuente realiza una llamada a la residencia de la víctima, asumiendo el rol de un abogado o alguna autoridad, judicial o policial, para convencer al receptor de

la llamada. En estos casos, los victimarios fingen alguna situación de emergencia con uno de sus familiares o con el patrono (en caso de que exista domestica), y realizan la petición al receptor de la llamada, de sacar algún objeto de valor que será entregado afuera de la propiedad. Otra modalidad es la violación de la cerradura de la vivienda: esto se logra mediante la utilización de objetos contundentes, o palancas, y en ocasiones equipos que permiten cortar las láminas de metal, que componen las puertas y la cerradura. Una modalidad que se ha usado a lo largo del tiempo y con la que algunos delincuentes operan en la actualidad es la de la llave maestra. Para emplear esta técnica hay que tener un buen entrenamiento en el funcionamiento de cerraduras, y en algunos casos son cerrajeros que deciden delinquir y diseñan llaves especiales, que le permitan abrir las cerraduras convencionales sin mayor esfuerzo, y acceder con facilidad al interior del inmueble. El hurto por ventanas es una modalidad de las más usadas por los “malhechores” al momento de ingresar a las residencias. Consiste en perforar abrir o dañar puertas, ventanas y paredes para ingresar y sacar las cosas pequeñas de valor, -lo que quepa en un morral- de manera que le permita salir por el mismo hueco. Esta es una de las modalidades más usadas por los delincuentes. Además, de esta manera pueden introducirse a locales y negocios sin ser vistos.

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“NUNCA PENSÉ QUE ESO ME IBA A PASAR” Beatriz Hurtado vivió una pesadilla el día que fue víctima de robo en su residencia. Ella y sus dos hijos dormían, cuando comenzó a escuchar ruidos extraños que la alarmaron. Beatriz se levantó, y lo último que esperaba era ver a un hombre en la sala de su casa. “Cuando me percaté de que había alguien en la casa, grité. En eso, el ladrón salió por la ventana. Luego me di cuenta que por ahí fue por donde entró. Había, de alguna manera, levantado la reja ‘pecho de paloma’ hacia arriba. Yo vivo en planta baja, así que entró por el jardín trasero del edificio. Nunca pensé que eso me iba a pasar; desde ese día no duermo tranquila. No se llevó mayor cosa, pero me di cuenta que tenía rato dentro de mi casa: comió de la fruta que había en la mesa, se llevó carne del congelador y no sé qué más habrá agarrado. El hecho de pensar en lo que pudo pasar fue lo que me marcó. Pudo matar a mis hijos, aunque sé que no iba para eso”, explicó la víctima.

"Ya han pasado meses de aquel suceso, y todavía no me recupero del todo. No me gustan los animales, pero adopté un perro y ahora duerme en la puerta de mi habitación; eso

me da un poco de calma. Sé que si ve a alguien o escucha algo, ladrará y me pondrá alerta". Explica que su mayor temor es que sus hijos se vean afectados, o alguien los lastime. "La situación de inseguridad en la zona es alarmante, y me sorprende que en un edificio en donde viven tantas personas, nadie se haya dado cuenta, aunque en realidad no se escuchó mucho ruido. Solo el vecino de arriba dice haber escuchado una especie de ‘tac, tac, tac’ pero no se imaginó que algo así estuviese pasando. Creo que todos nos sentimos tan seguros en nuestros hogares que no pensamos que alguien pueda entrar, y más que robar, violente nuestra intimidad". "Mis hijos están bien, a ellos no les causó ningún trauma, pero yo ya no quiero estar sola en la casa. Cualquier ruido me despierta. Solo me tranquiliza el hecho de saber que ‘Varón’, mi perro, está ahí para avisarme lo que esté sucediendo".

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“Mi casa no es segura” SAYAIRETH CASTILLO sayaireth@gmail.com

“Yo conozco a uno de los muchachos que entró a mi casa, él sabía que yo estaba sola; reconocí su voz de inmediato, siempre me pedía que le marcara el ascensor”

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‘Carmen’ es el nombre que usamos para identificar la víctima de un robo en su residencia; pidió no revelar su identidad por miedo a represalias en su contra, ya que los ladrones se llevaron su documentación y por razones obvias, conocen la dirección de su domicilio. Ella narró para Quinto Día la “terrible” experiencia que vivió y que marcó su vida. La señora ‘Carmen’, de 68 años cuenta que ese día fue como cualquier otro: se levantó alrededor de las 5 de la mañana, montó el café y fue a levantar a José, su hijo, para que no se le hiciera tarde para el trabajo. Lo despidió como a eso de las 6:30 de la mañana y se puso a escoger unos granos que iba a cocinar. La mañana transcurría normal. Escuchó un ruido, pero le pareció que venía del apartamento de arriba. En ese momento estaba en el cuarto, viendo televisión. “No pensé más en el ruido y seguí viendo la televisión. Ni se me ocurrió que se podían meter a la casa. Hay un momento que se me borró; no sé qué pasó, solo sé que escuché una voz y ya no supe más nada. Creo que me desmayé”, señaló. “Yo conozco a uno de los muchachos que entró a mi casa, él sabía que yo estaba sola; reconocí su voz de inmediato, pues siempre me pedía que le marcara el ascensor”, explicó. ‘Carmen’ recuerda que cuando se despertó, faltaban muchas cosas de valor, la computadora de su hijo no estaba en su lugar, “se llevaron el teléfono de la sala, que era inalámbrico. No tenía cómo llamar a mi hijo”. Para sorpresa de ‘Carmen’, una vecina se dio cuenta del movimiento extraño que había en su casa, escuchó ruidos y llamó a José, quien estaba cerca y no tardaba mucho en regresar. “Cuando recibí la llamada pensé de inmediato que algo estaba mal con mi mamá, pues mi vecina nunca me llama. No dudé en montarme en un mototaxi para llegar rápido, tenía la mente nublada. No pensaba”, aseguró. El sector en donde José vive con su madre es el lugar en donde se crio. Conoce a todo

el mundo, o eso piensa. “Nunca pensé que nos podía pasar algo así”, explicó confuso el hombre. Cuando José llegó a su casa, lo primero que hizo fue asegurarse que su mamá estaba bien. Algunos vecinos, ya al tanto de lo sucedido, la acompañaban. Hubo que hacerle un té para calmarla, estaba muy nerviosa y confundida, no entendía lo que había pasado. “Al parecer la drogaron”, aseguró una de las residentes. “Mamá, ¿estás bien? ¿Qué fue lo que pasó? ¿Viste a alguien? ¿Escuchaste algo?”, preguntó José a ‘Carmen’, quien aún estaba en shock. Por temor a que su hijo hiciera algo y empeorara las cosas, al momento no le dijo que reconoció una voz, solo le dijo “estoy bien hijo, estoy bien”, mientras temblaba y tenía la mirada perdida. El hijo de la víctima revisó la casa para hacer un inventario de lo que faltaba. Asegura que solo se llevaron su laptop, el teléfono inalámbrico y un dinero que le dejaba en un vaso de la cocina a su mamá, para cualquier compra o necesidad del día. Pero al revisar a detalle se dio cuenta que no estaban los dólares que tenía ahorrados. Su hermana vive en el exterior y los manda, para ayudar con los gastos de la madre de ambos. José de inmediato recordó que había comentado con un amigo de la infancia que tenía unos dólares guardados, pero cuando habló de ello había más gente alrededor, y no se percató del peligro al que exponía a su madre. Por miedo a represalias, no denunciaron el robo, pues ‘Carmen’ luego le contó a su hijo que había reconocido una voz y si era alguien cercano, temían que le hicieran daño a la sexagenaria mientras estuviese sola. “Mi mamá ya no quiere salir sola, tampoco se quiere quedar en la casa”, manifestó José. Relata que tuvo que traerse a una prima para que acompañe a su mamá, porque “la atacan los nervios y me llama al trabajo, para que me vaya a la casa”. La vida de ‘Carmen’ cambió luego de este episodio. A pesar que no sufrió violencia alguna, ya no se siente segura en su casa. No concluyó su relato porque su mente ha bloqueado parte de lo que vivió. Asegura que, para ella, su casa ya no es segura.

Habla la especialista

La psicóloga social Isaura Rondón explicó que las situaciones de miedo afectan el comportamiento habitual de las personas. Una persona que pierde la seguridad en el ambiente en el que se desenvuelve, adquiere una inestabilidad emocional importante. Luego de vivir una situación de violencia física o mental, hay temor de que esta se repita. “Las víctimas que enfrentan tales situaciones presentan síntomas de ansiedad o angustia; lo inmediato que se percibe es la vulnerabilidad en la que se sumerge la persona. Hay quienes sin haber vivido un robo sienten temor, aun cuando se encuentran dentro de su vivienda. Hay que tener en cuenta que cada individuo reacciona de manera particular”, señala la especialista. Según la psicóloga, las personas que sufren estrés postraumático como consecuencia de los momentos desagradables, se aíslan y padecen fobias, insomnio o ataques de pánico. "Todo depende de la estructura sobre la que se apoya la personalidad de los individuos. Hay quienes superan con facilidad estos hechos, y otros deben recurrir a la ayuda de profesionales", afirma Rondón. Las alteraciones mentales que sufren los individuos repercuten en el bienestar físico. El aspecto psíquico está totalmente integrado a lo biológico. "A corto o a largo plazo, un estado de angustia puede bajar las defensas y se pueden desarrollar enfermedades psicosomáticas", explicó. Señaló que vivir con personas que padecen un problema psíquico rompe con el equilibrio y la armonía del hogar y en ocasiones, afecta las relaciones familiares. Los más afectados son los que pasan mayor tiempo dentro de la vivienda, por lo que es importante considerar el apoyo terapéutico en estos casos.

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Va l e l a p e n a i n v e rt i r e n s e g u r i da d

Sistemas para resguardar vidas y bienes SAYAIRETH CASTILLO sayaireth@gmail.com

Recomendaciones para la seguridad residencial 1. Es importante realizar reuniones de seguridad entre vecinos, en las que se puedan llegar a acuerdos en cuanto a las acciones que vayan a tomar, en caso de presentarse una situación de peligro. 2. Conozca e identifique a todos sus vecinos. Lo ideal sería por sus nombres, y número de apartamento o casa. Observe los vehículos que normalmente están en el estacionamiento, de tal manera que un vehículo distinto o una persona no común será un motivo de sospecha para alertar a otros vecinos, o por lo menos retardar el momento de entrar a su hogar.

Los dispositivos van desde los más simples hasta los más complejos, y desde el más económico pero poco eficiente, hasta el más costoso y efectivo

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La importancia de invertir en un buen sistema de seguridad va más allá de los bienes materiales, ya que el resguardo del hogar debe ser la suma de la familia, los objetos de valor sentimental y la estabilidad emocional, al no sentir que es violentada la intimidad. Si solo se piensa en un sistema de seguridad para resguardar las pertenencias de valor económico, quizá no se vea la necesidad de una gran inversión. Pero cuando lo que se busca es resguardar la vida, valdrá la pena cualquier gasto. Los sistemas de seguridad van desde los más simples, hasta los más complejos, y la misma regla se cumple en el rango de precios, desde el más económico pero poco eficiente, hasta el más costoso y efectivo, aunque en ocasiones lo más costoso no es lo mejor. Recomendaciones del experto El experto en seguridad, Javier Gorriño explica que “mucha gente piensa que el único sistema de seguridad en una residencia son las rejas, y las rejas con una ‘pata de cabra’ las abren, no son tan seguras, además que te encarcelas con ellas. Hay dispositivos que no son muy caros, como las alarmas. Una alarma sonora alerta a toda la comunidad; hay diez mil maneras de activarlas. Si quieres algo un poco más seguro, hay dispositivos de seguridad que interconectan tu casa a un cuerpo de seguridad, y hay compañías de seguridad que hacen el servicio de

prestar asistencia al activarse tu alarma”, comenta. Gorriño agrega que existen otros dispositivos para mayor control, “como el circuito cerrado de televisión, que hoy por hoy se puede adquirir fácilmente, sin golpear tanto el presupuesto. Para las personas que puedan tener perros, estos siempre serán una buena opción”, a la vez que añade que “mientras más inviertas en la seguridad de tu casa, vas a estar más seguro y más tranquilo, porque una de las cosas que busca la seguridad es precisamente la tranquilidad”, detalló. Claves para la organización vecinal Gorriño indica que hay algo muy importante en la actualidad, y es el apoyo tecnológico. “En las urbanizaciones los grupos de Whatsapp son una herramienta efectiva. Es importante la seriedad en estos grupos de seguridad para evitar que se pierda el objetivo. La organización vecinal ha dado mucho éxito en lo que es el aviso a tiempo de algún hecho delictivo”, argumentó. El especialista explica que “hay grupos de vecinos organizados que utilizan pitos y otras herramientas para dar avisos a los demás vecinos, y en ocasiones montan guardia, en caso de que no haya vigilancia privada”. Asimismo especifica que las zonas más vulnerables son las más solas, con menos visibilidad nocturna, menos iluminación y zonas con menos patrullaje, por lo que es importante aclarar esos puntos.

3. Coordinen acciones que les permitan contacto directo con el cuerpo de seguridad de la zona, mediante un número de contacto directo con un ente de respuesta inmediata, que inclusive sepa identificar si usted está en una situación de peligro. Son ideales los radios vecinales, los grupos de Whatsapp para seguridad residencial y las alarmas de pánico, que llamarán la atención del resto de los vecinos. 4. No oponga resistencia. Desprenderse mentalmente de lo material es un ejercicio diario a practicar, eso evitará que al llegar al momento no trate de aferrarse a lo material. En ese momento preservar la vida y la integridad física es lo más trascendente. 5.-No ofrezca información sobre sus salidas, vacaciones, bienes o espacios donde esconda sus objetos de valor. Toda información sobre ese particular debe ser manejada con la mayor discreción, a la vez que encontrar un espacio seguro y no visible que sirva para esconderlos. 6.-Es importante no solo dar parte a las autoridades policiales luego que culmine el hecho, sino además difundir información a través de las redes sociales, que permita que otros vecinos en zonas cercanas estén alerta y tengan documentación suficiente para identificar estos grupos.

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L U I S C E D E Ñ O, D I R E CTO R D E L A AS O C I AC I Ó N C I V I L PA Z ACT I VA

“Venezuela se encuentra entre los 3 primeros países con mayor índice de violencia” El 88.8% de los hombres son más propensos a relacionarse con actos delictivos, cifras similares a las reportadas por países latinoamericanos

MARÍA CASTAÑOS mariivi_casta19@hotmail.com

Quinto Día

El incremento de la delincuencia en los últimos años ha sido alarmante y significativo en el país. Aunque Latinoamérica presenta la tasa homicida más alta del mundo, “Venezuela se encuentra entre los 3 primeros lugares, dejando a un lado a países como Colombia y México, considerados tradicionalmente violentos”, tal como lo señaló Luis Cedeño, sociólogo y director de la asociación civil Paz Activa. Cedeño explicó que en Venezuela uno de los lugares donde las personas son victimizadas con mayor frecuencia es al momento de abordar un transporte público. “Las encuestas de victimización nos permiten tener un acercamiento más fiable al número verdadero de los robos y hurtos que se cometen en el país. Pudimos determinar que el objeto más deseado por los delincuentes es el teléfono celular”. El especialista añadió que estadísticamente, un millón 700 mil hurtos y robos no son reportados por las personas afectadas.

“Las compañías de celulares llegaron a decir que hay más de 30 millones de celulares activados en el país, y es posible que se robaran 100 mil de ellos al mes. Sumando, aproximadamente 1 millón 200 mil, del total de esa cifra son por robos y hurtos”, agrega el vocero de Paz Activa. Cedeño manifestó que en esta actividad estaban involucradas varias personas. Estas cuentan con una estructura determinada para la distribución de los equipos móviles a mercados internacionales. “Los ‘pegadores’ son las personas que se encargan de efectuar el robo, seguidamente entregan el móvil a otra persona, denominada ‘aguantador’, y luego pasan a los ‘procesadores’, quienes son los que deciden a dónde van los celulares. En oportunidades pasan a mercados internacionales en las zonas fronterizas del país, donde se han detectado camiones 350 llenos de smartphones y Iphones”. Así mismo, expresó que anteriormente el

centro del deseo de los delincuentes eran objetos más pequeños y que concentraban mucho valor, tales como: “cadenas o anillos de oro, relojes, así como zapatos deportivos, ya que su costo era inaccesible para algunos ciudadanos de la población”. Ciudades delincuenciales De acuerdo con el informe realizado por el Observatorio del Delito Organizado, durante el primer trimestre del año 2017, hubo un incremento en actos delictivos del 25% con respecto al 2016, a nivel nacional. Sin embargo, en el mes de abril hubo un descenso en el número de delitos registrados. La caída en los reportes computados puede explicarse como una consecuencia directa a la jornada de protestas, que se efectuaron en el territorio nacional; de la misma manera, “se pudo observar un aumento importante en los casos de extorsión y sicariato”. Con respecto a los reportes por entidades

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federales, Zulia se destaca como la primera ciudad de Venezuela donde se comenten mayor cantidad de delitos organizados. “Con 163 delitos reportados, Zulia agrupa el 30.8% del total de reportes computados durante los primeros 6 meses del año, además esto experimenta un incremento del 262% con respecto al mismo período del año 2016”. Por su parte, Miranda, con 13.2% de los reportes “se posicionó como el segundo en la lista de entidades federales, mientras que Lara presenta el 7.9% de los casos; Aragua, 6.6%; Distrito Capital, 6.2%; Carabobo, 5.3%; Anzoátegui, 4.9%; Táchira, 4.9%; Vargas, 3.4%; Bolívar, 3.4%; Falcón, 3%; Mérida, 1.7%; Guárico 1.5% y Portuguesa 1.1%”. Sobre los municipios, el informe revela que “con respecto al estado Zulia, la mayor parte de los delitos fueron registrados en la subregión Central, con 38.8% y en la Costa Oriental del Lago, con 31.9%”. Por su parte, fueron los municipios pertenecientes a la subregión de los Valles del Tuy, con 25.1% y Distrito Capital, con 20.5%, los que registran hasta 45.8% en el estado Miranda, llegando al 58.8%, si se añade el eje de Guarenas-Guatire a las dos subregiones mencionadas”. Involucrados en delitos organizados Con respecto al género de personas involucradas en delitos organizados, “el

Continúa en ascenso

88.8% de los hombres son más propensos a relacionarse con actos delictivos.

68.6%

de las mujeres se relacionan en crímenes como extorsiones, tráfico de drogas y secuestros.

66 %

de las personas con edades comprendidas entre los 25 y 34 años son los que mayormente efectúan delitos organizados.

88.8% de los hombres son más propensos a relacionarse con actos delictivos, mientras que el 11.2% eran mujeres”, siendo esta

cifra similar a las reportadas por países latinoamericanos, donde los hombres presentan una tasa de criminalidad 10 veces mayor a la de las mujeres. Asimismo, el 68.6% de las mujeres presuntamente implicadas en crímenes organizados se vieron involucradas solo en tres tipos de delito: extorsiones, tráfico de drogas y secuestros, mientras la mayor proporción de féminas se observará en los delitos informáticos y financieros. A partir de los datos válidos, se determinó que “el rango de edad de los victimarios abarca desde un mínimo de 14 años, hasta un máximo de 69, donde la mayoría de los implicados en delitos organizados se concentró, durante el primer semestre de 2017, entre los 20 y los 35 años de edad”. La actividad delictiva es un fenómeno protagonizado principalmente por individuos adultos–jóvenes, cuyas edades oscilan entre los 18 y los 34 años de edad, agrupando un rango del 66%, mientras que las personas con edades comprendidas entre los 25 y 34 años agruparon el 43.8%, y el 22.2% personas con 18 y 24 años de edad. A partir de los 45 años se observó una disminución significativa en el número de involucrados en delitos organizados, agrupando el rango compuesto por personas mayores de 55 años, apenas el 4.4% de la muestra.

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ENTRE EL DÍA Y LA NOCHE Por reportes según día y hora de ocurrencia, se determinó que “durante los días de semana se registran mayor incidencia de delitos con el 74.4%, mientras que los delitos ocurridos y/o denunciados durante los fines de semana agruparon el 25.6% de los casos, con información sobre el día del suceso”. Es decir, en el periodo comprendido entre las 6:01 pm y las 12:00 am, es cuando se produjeron el 39% de los crímenes. Por su parte, durante la mañana, entre las 6:01 am y las 12:00 pm, se registraron el 29.2% de los casos. Asimismo, “durante los días de semana se registra la mayor parte de los delitos durante la mañana y la noche, y los fines de semana se registraron mayor número de delitos, que durante la tarde-noche”.

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La evolución de la violencia en Venezuela Biografía

MARÍA CASTAÑOS mariivi_casta19@hotmail.com

“En los años 60 y 70 había un contexto de país, diferente al que hubo en los años 80 y 90; las personas respetaban más las leyes que actualmente”, señaló el coordinador del Observatorio Venezolano de la Violencia

Quinto Día

La inseguridad es un escenario recurrente para el día a día de los venezolanos, ya que la ciudadanía se encuentra cada vez más desprotegida y a merced del hampa. Es por ello que el criminólogo y coordinador del Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV), Freddy Crespo, dijo que “la violencia, más que un entramado de consecuencias directas y fenómenos estructurales, es el resultado del proceso socioestructural que ha estado viviendo Venezuela durante los últimos años. Hoy en día los delincuentes primero te asesinan y después te roban; esto como consecuencia de un proceso acumulado generacionalmente, de deformación y contextualización de la sociedad y los individuos”. Según el especialista, a medida que se ha avanzado históricamente, las personas se relacionaron e hicieron frente a diferentes impactos culturales y sociales. “En los años 60 y 70 había un contexto de país diferente al que hubo en los años 80 y 90; es decir, las personas respetaban más las leyes que actualmente”. Para Crespo, el deterioro institucional tiene un papel preponderante, al agudizar los problemas sociales del país. “Llegamos a finales de los años 80 con ‘El Caracazo’, y a principios de los 90 con dos golpes de Estado; el problema bancario en el 93 y 94 y la destitución de un Presidente, entre otras cosas; entonces tienes un contexto institucional y social, que es un reflejo en la conducta de los individuos”. Es por ello que actualmente, “los niños se están relacionando en un panorama social más deteriorado, debido a que cada vez son más los involucrados en la violencia, porque es un patrón legítimo para actuar y visto como necesario, tanto para los individuos, como para las instituciones”, según lo explicó el criminólogo. Entre cambios y modalidades A medida que pasa el tiempo, el modus operandi de los actos delictivos en Venezuela ha ido evolucionando. Para el especialista en Criminología, las modalidades en años anteriores estuvieron relacionadas con hurtos, robos y pocas incidencias

en homicidio. Sin embargo, el fenómeno de la impunidad ha ganado un espacio importante dentro de la conducta del venezolano. Hoy en día, los delitos en el país están más cargados de violencia que hace 20 años. “En este momento, no hay una interacción o una consideración del delincuente hacia la víctima; por eso lesionan, hieren o matan, sin ningún tipo de remordimiento ni culpa”, explicó Crespo. Asimismo, Crespo advirtió que la frecuencia con la que un individuo cometa un robo no va a depender de dónde se encuentre la víctima, es decir, sea en un autobús, una carretera o un aeropuerto, ya que “actualmente no existe un modelo establecido que pueda determinar el espacio, o zona donde el delincuente actúe”. Determinó que los hurtos en centros comerciales van a ser distintos a los efectuados en unidades de transporte, ya que en esos casos los delincuentes van a actuar con mayor agresividad, utilizando armas de fuego. Pero, efectivamente, estos actos se seguirán llevando a cabo mientras el antisocial vea en una persona un objeto que sea de su interés, sobre todo si el lugar donde se va a cometer el delito no cuenta con una seguridad adecuada, “por ejemplo, en Mérida, en el primer trimestre de este año, se registraron un 80% en incidencias de robos y homicidios”, señaló Crespo. Irregularidades dentro del sistema de justicia Crespo considera que mientras el sistema de justicia se mantenga como está, no habrá una medida preventiva eficiente. “Se puede cambiar la estructura social, como lo hicieron otras ciudades del mundo; pero son los políticos los que pueden suministrar a los ciudadanos, elementos que les ayuden a sentirse más seguros”, señaló. En otras palabras, “las instituciones policiales no se perciben con normalidad dentro de la sociedad, porque existe una preponderancia de la violencia, ya que en los sitios de reclusión, la violencia es una conducta válida, aceptable y legítima para relacionarse como individuos”, declaró el especialista.

Freddy Crespo. Criminólogo y Abogado (ULA-Venezuela). Magister en Ciencias Políticas, egresado del Centro de Estudios Políticos y Sociales de América Latina (Cepsal). Doctor en Ciencias Sociales por la Universidad Central de Venezuela (UCV). Especialista en diseño de políticas públicas. Actualmente trabaja como profesor y coordinador del Observatorio Venezolano de la Violencia, sede Mérida.

Para el criminólogo, si en el país no se toman medidas inmediatas y efectivas para atacar la problemática de la inseguridad y los actos delictivos, no habrá una reducción de la violencia: “Lo que estamos viviendo en este momento no tiene solución a corto plazo. Esto es un problema que venimos arrastrando de años anteriores; nunca ha existido una política criminal para terminar con esta situación, y las que han creado no han funcionado”. Crespo enfatizó que con los planes sociales realizados durante los años 80 no se obtuvieron resultados positivos. “La ley de ‘vagos y maleantes’ hizo explotar los homicidios en los 90, y en los últimos 6 años las políticas creadas solo implican mayor represión. Una clara muestra de ello es la Operación de Liberación del Pueblo (OLP). ¿Cómo piensas que va a reaccionar el nuevo delincuente ante este organismo de seguridad?”, explicó el especialista. Es tajante al admitir que una justicia efectiva debe partir del Estado. “¿Qué te podría funcionar? Una vigilancia efectiva, que sea percibida como algo eficiente. Pero en un país donde el delincuente piensa que si es detenido va a salir fácilmente pagándole a una Fiscal o un Juez, sencillamente no podrás tener buenos resultados”, explicó. El especialista advirtió que la violenta acción policial ha generado una reacción mayor por parte de los antisociales, de la misma manera que “la nueva generación que los sustituirá será mucho más violenta para atacar a los cuerpos de seguridad, eso es lo que realmente ha estado ocurriendo en los últimos años en el país”.

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Lo s r o b o s y h u rto s e stá n a l a o r d e n d e l d í a e n l a v i da d e lo s v e n e zo l a n o s

Sobreviví a un atraco MARÍA CASTAÑOS mariivi_casta19@hotmail.com

“Después de las 7 de la noche es imposible transitar por los alrededores de la Plaza Miranda de Caracas, ya que la oscuridad de esas zonas hacen que cualquier persona sea vulnerable a un atraco”

Quinto Día

"Yo salgo muy temprano a trabajar en el centro de Valencia. Mi angustia comienza desde el momento que salgo de mi casa, pues no sé qué me puede suceder mientras me movilizo hacia mi trabajo. Una vez estaba llegando a la zapatería donde trabajo, y un grupo de jóvenes se me acercó, con pistola en mano, y tuve que entregar todas mis pertenencias. Lo material se recupera. La vida no”, recuerda Carmen Carreño, una señora que vive en Valencia y que siente que la situación es cada vez más complicada. Esta misma situación la relataron algunos transportistas del terminal La Bandera, en Caracas, quienes fueron consultados, como Andy Pineda, que trabaja desde hace 7 años en la ruta de Guanare – Portuguesa. Para este conductor, el año 2017 ha transcurrido al margen de la inseguridad, pues el índice delictivo ha aumentado paulatinamente. Señaló que en lo que va de año, semanalmente son robadas y secuestradas dos de cada diez unidades. “A esta empresa ya le han robado dos unidades en lo que va de semana; a una la secuestraron, y a otra la robaron viniendo de Barinas a Caracas. Gracias a Dios no pasó de un susto”. Por su parte, Segundo González, quien también es transportista de este terminal, explicó que aunque existen puntos de control en las rutas que ellos realizan, algunos funcionarios no cuentan con los mecanismos necesarios para garantizar la seguridad de los pasajeros. Asimismo afirmó que “los organismos de seguridad del Estado deberían reforzar las medidas, para poder garantizar el libre desenvolvimiento de pasajeros a otras regiones”. Entre carreteras y robos La violencia en las autopistas y carreteras del país, ha dejado huellas imborrables en la vida de las personas que por allí transitan, ya sea por los siniestros que en ellas ocurren, o por el modus operandi que efectúan los delincuentes para abordar las unidades de transporte. “La última vez que fui víctima del hampa fue hace dos meses. Íbamos desde Puerto La Cruz hacia Portuguesa, cuando algo que se encontraba en la carretera espichó los cauchos de la unidad. Nos tuvimos que detener, y fue en ese momento cuando ingresaron 6 muchachitos, que no llegarían ni a 15 años. Atracaron a los pasajeros, pero como eran personas sin experiencia, a uno se le escapó un tiro y se lo pegó en su mismo pie”, dijo González.

El mayor temor de este conductor era que junto a él, se encontraba viajando su sobrina de un año y medio de edad. “Estos chamos apuntaron a mi sobrina con una pistola; no te imaginas el temor que sentí en ese momento”. Del mismo modo, Pineda señaló que “una vez casi robaron mi unidad de transporte. Se montaron dos sujetos armados, pero como vieron que había muy pocos pasajeros, no hicieron nada. Supongo que fue porque pensaron que si robaban, no se llevarían casi nada; ese episodio me sucedió una vez que viajaba en la carretera vieja Guanare – Boconoíto”, explicó. De igual manera, Pineda reconoció que existen puntos de control en las carreteras, donde la Guardia Nacional Bolivariana tiene la oportunidad de ingresar a las unidades, para verificar que los pasajeros no estén armados. “La Guardia Nacional Bolivariana, cuando nos detiene en una alcabala, lo que hace es radiar las cédulas, pero al pasajero no lo revisan para saber si está armado o no”. El ‘Capitolio’ de los delitos El centro de Caracas es el lugar preferido de los antisociales para cometer actos delictivos en la ciudad. Las personas que regularmente toman esa ruta para asistir a su sitio de trabajo o como vía regular para llegar a sus hogares, afirmaron que existen circunstancias y características de la zona que facilitan que los antisociales puedan cometer los delitos y quedar impunes. Lenis Quintero, quien trabaja como vendedora informal, expresó que “después de las 7 de la noche es imposible transitar por los alrededores de la Plaza Bolívar, Plaza Caracas, Plaza Miranda y el centro comercial Metrocenter, ya que la oscuridad de esas zonas hace que cualquier persona sea vulnerable a un atraco. Además, existen bandas organizadas para el hurto de las pertenencias”, expresó.

El hampa y los menores

La participación de niños y adolescentes es cada vez más habitual cuando de actos delictivos se trata. Según lo informado por los Centros Comunitarios de Aprendizaje (Cecodap), para el año 2014 la cifra de los infantes implicados en actos delictivos fue de 238 casos, mientras que para el año 2016 las cifras aumentaron significativamente a 1.012 casos. Se espera que para el año 2018, estos porcentajes sigan aumentando.

Del mismo modo, explicó que los actos delictivos en la zona no solamente son perpetuados por hombres, sino que existe “una banda de mujeres. Hasta una embarazada se presta para eso. Una es la que hace el robo, y se lo da a la embarazada para que lo guarde. Todo pasa en cuestión de minutos. Cuando te das cuenta, ya te han quitado todo”, señaló. Karen Maza, estudiante de la Universidad Católica Santa Rosa (Ucsar), relata que asistir a clase se ha vuelto una odisea. “Una vez, cuando me encontraba en camino hacia el metro de Capitolio, un antisocial me arrebató los zarcillos. Solo sentí el jalón en la oreja, y ya. Traté de buscar ayuda, pero no encontré ningún efectivo de seguridad cerca”, explicó. Maza cree que los estudiantes de dicha universidad siempre están propensos a ser víctimas del hampa, ya que “la parada del transporte de la universidad se encuentra en toda la Plaza Caracas. Allí nunca hay policías. Cuando es de noche, la situación es peor, ya que no hay iluminación en las adyacencias. Cuando el transporte no llega y logramos abordar una camioneta, tenemos que estar pendiente de los bolsos, ya que existen personas que aprovechan las ‘horas pico’ para abrirlos, sin que te des cuenta que robaron tus pertenencias”, comentó.

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La delincuencia viaja en transporte público MARÍA CASTAÑOS mariivi_casta19@hotmail.com

En el tipo de armas utilizadas a la hora de cometer los robos a las unidades, “prevalece el uso de armas blancas y de fuego”, según estableció el estudio efectuado por el Observatorio Venezolano de Violencia

Quinto Día

Actualmente los venezolanos que utilizan los diferentes medios de transporte se ven afectados por el oleaje de inseguridad que sacude al país. Es por ello que el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), efectuó un estudio en el año 2016, desde sus cinco sedes regionales, ubicadas en Ciudad Bolívar, Lara, Sucre, Táchira y Distrito Capital, para determinar cuáles son los principales problemas de inseguridad y violencia que enfrentan tanto los conductores como los usuarios; siendo este el único informe que reseña la realidad que viven los ciudadanos, a la hora de movilizarse dentro del territorio nacional. Del mismo modo, como una alternativa para combatir la criminalidad dentro del país, Ven 911 desarrolló un sistema de seguridad ciudadana para disminuir el índice delictivo. “Nosotros contamos con un sistema de cámaras ubicadas en diferentes puntos de cada ciudad del país, donde a través de su funcionamiento ayudamos a reducir y prevenir los robos y hurtos, tanto en las ciudades capitales como en las carreteras”, aseguró Brimaria Pacheco, responsable del área de articulación social de Ven 911 a Quinto Día. Asimismo, Pacheco explicó que actualmente se encuentran trabajando varios organismos del Estado, como la Oficina Nacional Antidrogas (ONA), para efectuar pruebas toxicológicas a los choferes, y así prevenir que alguno se encuentre consumiendo sustancias estupefacientes, que podrían poner en riesgo la vida de los usuarios. Según Pacheco, “a través de esas pruebas toxicológicas se ha podido disminuir los robos y hurtos que se cometen, no sólo en las carreteras, sino en las calles del territorio nacional”. Acecho a las unidades En el Distrito Capital, los municipios Sucre y Libertador fueron escogidos por los especialistas

del OVV para estudiar el problema de la inseguridad en el transporte público. Para ello fueron consultadas en el Este de Caracas, las líneas de conductores del terminal ‘Julián Blanco’, ubicado en la estación de metro Palo Verde, y el Terminal Suburbano de La Urbina. Del mismo modo, en el oeste de la capital, fueron escogidas las líneas de San José y Las Delicias, en Carapita. El estudio determinó que “en la zona de Petare Norte, específicamente las rutas que cubren desde la estación de Palo Verde hasta los barrios ‘José Félix Ribas’ y ‘Julián Blanco’, los delitos que más se comenten son los robos y cobro de peaje a mano armada”. De la misma manera, en el barrio Julián Blanco hasta el Terminal Suburbano de La Urbina, “los robos y secuestros a las unidades, para trasladar ciudadanos a entierros con armas de fuego” están a la orden del día. Por su parte, Antímano, otra zona de la ciudad capital se ve afectada por “robos a las unidades de trasporte y secuestros de unidades (jeeps) con armas de fuego, frecuentemente en horas de la noche”. En el estado Bolívar, el estudio se centró en el municipio Caroní, el cual concentra el 50% de la población de ese estado del sur del país. Los grupos focales se realizaron con dos líneas de transporte público: Puerto Ordaz, que recorre la ruta Toro Muerto-Los Olivos-Altavista; y la segunda línea, que hace el recorrido desde Puerto Ordaz, pasando por Altavista-Avenida Guayana -Avenida Centurión, para llegar a San Félix, por La Económica. En estas zonas, los delitos son cometidos, según el Estudio de Violencia en Carreteras, en los horarios de “12 pm y la 1pm”, siendo los más frecuentes, “robos, hurtos y secuestros con armas blancas y de fuego, con la participación de dos o tres individuos”.

Del mismo modo, en el estado Lara, específicamente en Cabudare, las rutas y sectores más afectados por la delincuencia son las rutas que cubren desde la Av. Intercomunal Barquisimeto – Cabudare, hasta la redoma de Santa Ana – Yacural, “donde los robos a usuarios y choferes son frecuentes, además de los secuestros a las unidades y violación, con armas blancas y de fuego”. Finalmente, en el estado Táchira, específicamente en su ciudad capital, San Cristóbal, “las rutas más afectadas por la delincuencia que afecta el país, son las que llevan desde el sector Madre Juana, Pozo Azul, Marginal del Torbes, Barrio ‘Las Margaritas’ y el ‘8 de Diciembre’, donde los delincuentes roban con armas de fuego y objetos punzo-pullantes”. En cuanto al estado Sucre, los conductores de las líneas Cooperativa de Cumaná, señalaron al OVV, que a la hora de cubrir las rutas de transporte, existen cinco puntos donde se cometen mayor cantidad de delitos, tales “como la urbanización Cascajal, sector Escalafón, el terminal de pasajeros, sector Las Palomas, Parcelamiento Miranda, avenida Andrés Bello, Caigüire, sector El Pozo – Roquiven y Caigüire, sector Makro – La Matica, avenida El Pemón”. En cuanto al tipo de armas que se utilizan a la hora de cometer los robos a las unidades, “prevalece el uso de armas blancas y de fuego”, según estableció el estudio antes señalado. Asimismo, el horario más frecuente en que se llevan a cabo los actos delictivos es entre las 5 y las 6 pm. Esta misma incidencia se presentó en otras rutas de transporte de esta localidad, como la línea Gran Mariscal, La Llanada, Los Cocos y Miranda, que cubren buena parte de la cuidad mencionada.

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Último informe de seguridad vial De acuerdo con el último informe presentado por el Observatorio de Seguridad Vial (OSV), para el año 2015 se evidenció que la mayoría de los siniestros viales se produjeron en las autopistas y carreteras del país, agrupando ambas un porcentaje el 68% de todos los reportes computados. uno de los factores de riesgo que se manejó para estas cifras fue que algunos conductores violan la velocidad permitida y alcanzada por los vehículos en su recorrido, dado que en esos dos tipos de vías las condiciones permiten ser superiores a los 50 km/h. Por otra parte, los accidentes en avenidas ocuparon el tercer lugar en la lista de los siniestros, con un total del 15.5%. Aunque la problemática de los accidentes en avenidas no es distinta a los que ocurren en las carreteras, el flujo continuo de tráfico, e incluso la variedad de transporte público que por ellas circula, hace que los peatones sean más vulnerables, así como los ciclistas y transeúntes. Mientras que, en el caso de las calles el porcentaje fue de 6.3%, en puentes el 1.1% y distribuidores de 0.2%. El total de las cifras recolectadas

fueron resultados del congestionamientos en el espacio que presentan estas vías. Asimismo, el fenómeno de la siniestralidad vial siempre ha estado caracterizado por la multiplicidad de variables implicadas, es por ello que no se pueden descartar factores asociados a la infraestructura, tales como la iluminación y el estado de las vías; además de los factores institucionales, como la inexistencia de señales de indicación y/o prevención a los conductores, o la falta de supervisión y control por parte de autoridades viales; y finalmente, factores asociados al volumen del parque automotor, sobre todo en las vías de circulación rápida en las ciudades de nuestro país. En cuando a día de ocurrencia de los accidentes viales de acuerdo con el informe publicado por el OSV, se pudo conocer que “durante los días de semana, se contabilizaron el 62.6% de los reportes, mientras que el resto, (37.4%) sucedieron durante los fines de semana”. En cuanto al tipo de siniestro se pudo constatar que “el 33,7% se trataron de casos

de colisiones entre dos vehículos, mientras que los accidentes de un solo vehículo sin colisión agruparon el 25.6% de la muestra”. En cuanto a colisiones entre tres o más vehículos, el porcentaje fue de 14.1%, mientras que las colisiones con obstáculo fijo fueron 13.1%; colisiones con un peatón, 8.5%; con vehículos estacionados 0.6%; colisiones con obstáculo no fijo o con algún animal, 0.4% y el 3.7% fueron otro tipo de accidentes. Finalmente, en cuanto al sexo de las personas involucradas en siniestros viales el informe reveló que “el 63% de los hombres estuvieron involucrados en accidentes viales”. Mientras que “solo el 37% de los casos fueron protagonizados por mujeres”. Del mismo modo, los rangos de edad de personas involucradas en estos hechos osciló entre los 45 y 64 años, agrupando el 18.9% las personas entre 35 y 44 años; 17.9% individuos de entre 5 y 14 años de edad; 7.4% infantes menores de 4 años; 2.6% personas entre 65 y 74 años el 2%, y, posteriormente, las personas mayores de 75 años, que se vieron involucradas en el 1% de los casos.

SEGURIDAD URBANA

Siniestros automovilísticos

62.6% de los accidentes vehiculares se produjeron durante los días de semana, y el 37.4% los fines de semana.

63%

de los hombres estuvieron involucrados en accidentes viales, mientras que solo el 37% de los casos fueron protagonizados por mujeres.

18.9% de las personas involucradas en siniestros fueron individuos de 45 y 64 años.

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L a s o c i e da d v e n e zo l a n a h a a d o p ta d o pat r o n e s d e l i n c u e n c i a l e s e n to d o e l pa í s

Atracos sin escala: modalidades de un delito MARÍA CASTAÑOS mariivi_casta19@hotmail.com

“El delincuente es una persona que no tiene sentimientos y por eso agrede a la víctima, pues considera que es la única responsable de su condición de pobreza”, explicó Juan Carlos Thula, abogado y criminólogo

Quinto Día

Las modalidades de atraco han evolucionado de manera exponencial a través del tiempo, sobretodo en el matiz de violencia, que en años anteriores no era recurrente. Sin embargo existían algunos casos puntuales, en los cuales los delincuentes accionan con mayor agresividad. Actualmente nos encontramos con robos, agravados con un índice de violencia que se ha vuelto frecuente, donde los usuarios que se desplazan en transportes públicos, como taxis y autobuses, entre otros, pueden ser vulnerables a que los delincuentes los despojen de sus bienes materiales, e incluso la vida, tal como lo señaló Juan Carlos Thula, abogado y criminalista. Asimismo explicó que la sociedad venezolana ha adoptado patrones delincuenciales de otros países, tales como los atracos en alta mar, relacionados con la ‘piratería’, que ha traído como consecuencia que los pescadores no puedan tener sus botes afuera, ni salir a zonas turísticas determinadas, por temor a que alguien pueda robar sus pertenencias. Esto se ha agudizado debido a un componente social, ya que “el delincuente es una persona que no tiene sentimientos, y por eso agrede a la víctima, pues considera que es la única responsable de su condición de pobreza”, dice Thula. Además que con la manera como se efectúe un delito o se asesine a un ciudadano, el antisocial da un mensaje a sus ‘causas’, o compañeros del crimen, de fortaleza y determinación para implantar respeto con otras bandas delincuenciales. Del mismo modo, Thula explicó que hace 20 o 30 años atrás, el delincuente no robaba en su misma comunidad, ya que más bien era el protector del barrio. Mientras que “hoy por hoy, el primer lugar donde el delincuente comete un delito es su comunidad: roba a sus vecinos, a la bodega de la zona, al camión que sube las bolsas del CLAP, o al camión que sube el gas”, esto se debe a una gran pérdida de valores. Según el especialista, antes los delincuentes manejaban códigos donde no se permitían dañar a las personas de su comunidad, pero eso quedó en el pasado como “consecuencia de la degradación social que está viviendo el país, aunque esto no sólo lo está viviendo un delincuente como tal, sino toda la sociedad en general, sin distinción de estratos sociales”. La degradación social que actualmente presenta el país, según Thula, “ha llevado a la conformación

controlar la situación, pero realmente esto no ha traído ninguna consecuencia para bajar los niveles de criminalidad y robos en el país”.

de una cantidad de bandas criminales, que tampoco teníamos en este país”. Thula hizo énfasis en que todo esto es una consecuencia de varios componentes sociales que está viviendo el país actualmente, tales como: “la situación país, el entorno familiar, la convivencia en la sociedad como individuo, la educación, las oportunidades laborales. Todo ese cúmulo ha llevado a que vaya en aumento la creación de más bandas delincuenciales”, indicó. Robos a mano armada Caracas es la ciudad más violenta de Venezuela, y una de las más peligrosas del mundo. Esta siempre va a estar a la vanguardia en los delitos, ya que existe un mayor número de habitantes vulnerables, y por ende, mayor delincuencia. Asimismo, para Thula la demanda en el poder adquisitivo hace que para un “antisocial sea de mayor beneficio cometer estos delitos en la ciudad capital”. En cuanto a las modalidades de atracos, siempre van a ser frecuentes los hurtos a mano armada, sobre todo con la ayuda de motorizados en la ciudad capital y otros estados del país. Sin embargo, para Thula existen épocas del año donde los delincuentes están más propensos a cometer delitos, tales como “las temporadas navideñas, es por ello que el gobierno siempre implementa unos operativos navideños, donde sacan una cantidad de funcionarios para

Un futuro ‘incierto’ El criminólogo expresó que Venezuela presenta un futuro incierto en relación a los índices de violencia, ya que “en estos últimos 20 años el delito no ha mermado ni ha bajado. El delito siempre ha estado en constante crecimiento, pero hay situaciones coyunturales que han generado que el delito se estanque”. Para Thula, la ciudadanía ha tenido que adecuarse a vivir entre la delincuencia cotidiana, "por eso se ven mayores medidas de seguridad en viviendas, como los cercos eléctricos o cámaras de seguridad”. Finalmente el especialista afirmó que todos estos cambios en la cultura delincuencial del país, hacen referencia a un cambio político, donde hubo una pérdida de valores sociales, producto de los dirigentes políticos: "Hemos tenido discursos políticos donde los funcionarios encargados de llevar las riendas del país han manifestado que ‘robar es bueno’ y por eso la ciudadanía los toma como ejemplo, y los lleva a la práctica".

Segundo en violencia

En el año 2015, Venezuela ocupó el segundo lugar de los países con mayor violencia letal en el mundo, con una tasa de 91.8 muertes violentas por cada 100 mil habitantes. En primer lugar, al igual que en el 2015, repite El Salvador, con una tasa de alrededor de 100 homicidios por 100 mil habitantes (durante 2015 fue de 103); en tercer lugar se sitúa Honduras, con una tasa cercana a los 60 homicidios por 100 mil habitantes.

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SEGURIDAD URBANA

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Opciones a la violencia MARÍA CASTAÑOS mariivi_casta19@hotmail.com

“En el 40% de los homicidios registrados en Caracas, el principal agresor fueron las políticas realizadas por el Estado venezolano, con la creación de la OLP”, manifestó Leandro Buzón

Quinto Día

Como una alternativa para atacar los problemas de inseguridad que actualmente presenta el país y en específico la ciudad capital, nace Caracas Mi Convive, un movimiento social capaz de empoderar a víctimas de la violencia, con el fin de buscar posibles soluciones a las comunidades más afectadas por esta problemática. Su misión principal es promover la confianza y la organización comunitaria, para prevenir los actos delictivos y construir una mejor convivencia en las parroquias caraqueñas. Es por ello que Leandro Buzón, sociólogo y activista social, quien trabaja en Caracas Mi Convive, explicó que fue en la parroquia La Vega donde comenzó el proyecto. “Fue allí donde implementamos los cuatro proyectos bandera que tenemos. En primer lugar, talleres para identificar los puntos calientes y jóvenes en situación de riesgo; ¿para qué? Para que en conjunto nosotros podamos coordinar hacer actividades deportivas y recreativas en la comunidad, para así poder documentar, e informar a través de la página web, el lugar donde se están cometiendo estos homicidios, y así finalmente poder exigirles a las autoridades del Estado que hagan su trabajo”. Desde esta organización manejan la teoría de que la gran mayoría de los homicidios cometidos en la entidad caraqueña con armas de fuego son efectuados por jóvenes entre 15 y 30 años, que son los que están muriendo por este flagelo. El tercer proyecto que desde allí manejan es una red de atención a las víctimas, donde las madres, hijos y familiares que fueron víctimas de la violencia se aglutinan en un acompañamiento psicológico y legal, para que esto se traduzca en una actividad de optimismo en defensa por la vida. Buzón señaló que actualmente se encuentran efectuando una campaña para reducir los homicidios en América Latina, llamada 'Instinto Vida', donde participan los 9 países más violentos de la región, tales como: Colombia, Brasil, Honduras, El Salvador, Guatemala, México, y por supuesto, Venezuela. “Lamentablemente Caracas aparece luego de San Pedro Sula como la segunda ciudad más peligrosa, es decir que estamos llegando a 92 homicidios por cada 100 mil habitantes, donde las autoridades del Estado tienen el 90% de responsabilidad, ya que las armas de fuego que utilizan los delincuentes, en su momento fueron legales”, expresó. Finalmente Buzón manifestó que “gracias a las alianzas que efectuaron con algunos medios de comunicación pudieron impulsar su proyecto, Monitor de Víctimas, con el que pudieron conocer que desde el mes de mayo hasta la actualidad en el 40% de los homicidios registrados, el principal

en viviendas, el 3.16% en establecimientos comerciales y solo el 0.63% en lugares de trabajo”.

agresor fueron las políticas realizadas por el Estado venezolano, con la creación de la Operación para la Liberación del Pueblo (OLP)”. De la realidad a las estadísticas Durante el mes de julio de 2017 el monitor de víctimas señaló “que en cinco municipios que conforman el Área Metropolitana de Caracas, tales como: Baruta, Chacao, El Hatillo, Libertador y Sucre, fue donde se cometieron la mayor cantidad de homicidios”, con un 69.9% ocurriendo en el Municipio Libertador, mientras que el 29.2% se efectuaron en el Municipio Sucre, y solo el 0.62% en Baruta y Chacao. Pero al tomar en cuenta la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes, Sucre fue el municipio más violento, con una tasa mensual de 6.57% en comparación a Libertador, cuya tasa fue de 5.33%. En cuanto a la parroquia donde se suscitaron mayor cantidad de homicidios destaca Petare, seguido por las parroquias Sucre, El Valle, Coche y La Dolorita. “En estas 5 parroquias se concentró el 43.5% de todos los homicidios en la ciudad Capital, solo en el mes de julio”. Sin embargo, al calcular la tasa mensual de homicidios por cada 100 mil habitantes, el monitoreo pudo evidenciar que “las parroquias más violentas para ese mes fueron Filas de Mariche (17.23%); El Junquito (17.11%); Macarao (16.84%); Coche (16.53%); La Dolorita (14.36%); y Santa Teresa (14.63%), mientras que en la parroquia La Vega el porcentaje fue de 7.2%; en El Valle 7.46%; en San Juan de 7.28%, y San Agustín 7.12%, siendo estas las parroquias de la ciudad capital donde se registraron menor cantidad de homicidios”. Asimismo se determinó que “el 74.84% de los sucesos ocurrieron en vías públicas, el 21.29%

Perfil de una víctima El informe también reveló que “el 96.9% de las víctimas en el mes de julio fueron hombres, principalmente jóvenes mayores de los 30 años”. El 10.6% de todas las víctimas fueron menores de edad, el 32.6% de las víctimas presentaban entre 18 y 34 años, el 24.2% entre 25 y 30 años. Asimismo el 3.16% fueron mujeres, todas mayores de 41 años, con tres víctimas que habrían sido asesinadas por civiles independientes y una asesinada por bandas organizadas. En cuanto al móvil del asesinato, el informe reveló que “unas fueron por robo, venganza familiar y conflictos del pasado”. Por otra parte, el 55% de todas las víctimas poseían educación media, el 30.83% educación primaria; el 12.50% educación universitaria. En solo el 1.67%, las víctimas no presentaban ningún tipo de estudio. Finalmente el estudio pudo determinar que el móvil de los asesinatos fueron robos, resistencia al robo, ajuste de cuentas, ajusticiamiento, arrollamiento, riñas o peleas, violencia política, enfrentamientos, secuestros y linchamientos”.

Modalidad de atraco

Con respecto al tipo de arma utilizada en las modalidad delincuencial, “el 83.7% de los homicidios se efectuaron con armas de fuego, el 11.15% con armas blancas, donde el 50% de los casos recibieron un disparo, el 25% dos disparos y el otro 25% fueron asesinados con tres o más disparos; el 2.96% con la implementación de la fuerza física o estrangulamiento, y el 2.22% con granadas”. En último lugar, el “81.2% de los homicidios las víctimas se pudo determinar si portaban armas de fuego o no, donde el 17.11% sí portaba este tipo de armamento cuando sucedió el asesinato”.

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L I L I A CA M E J O, D I R E CTO R A E J E C U T I VA D E L A O N G J U ST I C I A V E N E ZO L A N A

“El Estado tiene que proteger

a los ciudadanos, no reprimirlos” Para la especialista “no importa que ellos oculten las cifras, diferentes ONG las muestran; Un 7 0 14% de funcionarios incursos en delitos es un número muy alto”

YUBREILER SOTOMAYOR sotomayoryandreina@gmail.com

Quinto Día

Los cuerpos de seguridad del Estado han evolucionado en muchos ámbitos con el pasar del tiempo. Tanto en la formación de sus funcionarios en sus distintas ramas, a saber policías preventivas, (como la PNB), cuerpos de inteligencia (Cicpc, Dgcim) y sus consabidas variantes (Fuerza Armada Nacional). Pero también ha crecido la desinformación acerca de la actuación irregular de estos cuerpos de seguridad. Esto ha creado una situación de difícil manejo con respecto a la percepción de los mismos, especialmente en la opinión pública. Según el informe publicado sobre el año 2016 por parte del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), “el deterioro del sistema de justicia penal ha llevado a una desconfianza notable de la población en sus componentes. Los varios estudios de percepción de la seguridad que hemos realizado en las universidades, señalan que menos del 10% de la población considera como buenos o confiables la policía, los tribunales o las penitenciarias”. Al ser consultada sobre la desinformación por parte del Ministerio de Interior, Justicia

y Paz, la abogada y directora ejecutiva de la ONG Justicia Venezolana, Lilia Camejo, asegura que no hay realmente planes que hayan dado resultados positivos al Estado. “En estos momentos hemos visto que más o menos un 14% de estos funcionarios están incursos en hechos delictivos, porque no están tomando en cuenta la trayectoria de la persona. Tenemos muchos funcionarios de la PNB con antecedentes penales y sin embargo con esto les han permitido que ingresen al cuerpo de seguridad. Ha habido un incremento en todo lo que se refiere a robo, asaltos a mano armada y una excesiva violencia”, acotó. Según el mismo informe de la OVV, la cifra de defunciones por resistencia a la autoridad en el 2016 fue de 5 mil 281 fallecidos, lo que registra un incremento de al menos 80%, lo que reporta una respuesta violenta por parte de los organismos de seguridad. Funciones del Estado Con respecto a esta problemática, Camejo explica que “el Estado tiene que proteger a los ciudadanos, no reprimirlos”, y destaca que

“entonces se puede afirmar que no ha habido políticas de prevención. La PNB es una policía de prevención, pero no ha dado los resultados que se querían. Los cuerpos represivos son las policías políticas del país, como el Servicio Bolivariano de Inteligencia, la Dirección General de Contrainteligencia Militar y la GNB, en determinadas ocasiones”. Camejo va un poco más allá al aclarar que “aquí no hay que sacar más resoluciones, leyes o decretos. Todo está escrito y la Constitución Nacional vigente establece todo lo referente a políticas de seguridad del Estado. ¿Qué es lo que pasa? Que no hay planes coherentes entre los diferentes cuerpos de seguridad. Estas deben ser engranadas, mancomunadas entre el Ministerio de Interior y Justicia, cuerpos de seguridad, policías preventivas y la comunidad. Todo esto es una cadena, no es un problema aparte. La seguridad es un problema social para el país, y hay que combatirlo”. La ‘Ley Desarme’ y las OLP Para la especialista, la ‘Ley Desarme’ no ha funcionado: “¿Cómo va a servir si aquí

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C a r a c a s , 15 d e d i c i e m b r e 2 017 hay zonas de diferentes ciudades donde ni siquiera los cuerpos de seguridad del Estado pueden entrar? Esas zonas, mal llamadas de paz, como por ejemplo la Cota 905, son sitios donde no puede entrar el Estado”. Afirma que no sabe “qué objetivo tuvo el Estado con la creación de las OLP. Lo que sí sé es que hay una gran violación de los Derechos Humanos, porque si la idea del Estado fue desarticular bandas, con las OLP tampoco se logró porque no ha sido eficiente”, y que es necesario instaurar políticas de inteligencia, y no se ha querido hacer, porque tiene un alto costo político, y esta es la razón por la cual el gobierno no lo hace. De la misma manera, añade que “ha habido matanzas de personas inocentes, detenidos que no tienen nada que ver”, y explica además que “se han llevado a gente humilde, inocente. Entonces toda esta gente buena y sana, que hay en los barrios –porque sí los hay- han sido las mayores víctimas de las OLP”. “La PNB es un error” Camejo afirma que uno de los errores del Estado en materia judicial ha sido la creación de la PNB, ya que “el éxito no está en si la PNB es centralizada o no. Hay que reconocer que la Policía Metropolitana y sus

10% de la población considera como buenos o confiables la policía, los tribunales o las penitenciarias.

7 a 14%

de los funcionarios de cuerpos de seguridad, está involucrado en actos delictivos.

80% Es la cifra de fallecidos por resistencia a la autoridad, en el 2016.

funcionarios estaban capacitados, y que tuvieron una muy buena formación. Muchos funcionarios de la Policía Metropolitana estaban formados en el extranjero, y tuvieron buena preparación aquí en el país. ¿Qué

hicieron las policías nacionales? Graduaron a un montón de muchachos, entre 18 y 23 años, con un curso de 6 meses y salieron de una vez con un arma”. Finaliza la idea diciendo que “controlar la seguridad del Estado y de la población no es cualquier cosa, uno tiene que prepararse para eso, como en todas las áreas, y en eso fracasaron. No importa que ellos oculten las cifras, diferentes ONG las muestran. Un 7 o 14% de funcionarios incursos en delitos es un número muy alto”. Justicia politizada Camejo advierte que existe una parcialización política en el sistema judicial, y explica a su vez que “sobre todo en las policías políticas hay bastante parcialidad, porque si no engranas las policías nacionales, o los programas nacionales con policías municipales, solo porque los alcaldes o gobernadores sean de oposición, eso no va a funcionar”. De la misma manera, señala con énfasis que no cree que exista un Estado paralelo, sino “una violación a la Constitución. El gobierno tiene que reconocer que estamos en un Estado represor, y los cuerpos de seguridad del Estado han actuado de manera abusiva y excesiva, porque están absolutamente politizados, y eso no es el

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deber ser. Hay que depurar los cuerpos de seguridad del Estado, y hacer cumplir el engranaje: cuerpos de seguridad, políticas de seguridad y comunidad. Tiene que haber una reforma concientizada”. Para Camejo, la independencia de los poderes públicos es fundamental para garantizar un mejor funcionamiento, en pro de la ciudadanía. “Tenemos cuerpos de seguridad, medios de justicia y la Fiscalía, que es un órgano independiente, a la cabeza de la investigación penal, politizados. Estos organismos o entes del gobierno deben ser independientes de los poderes. La Fiscalía es independiente y está reportando casos al Ejecutivo nacional, y ese es el primer error. Mientras exista politización no puede haber un cambio”. Asegura, de la misma manera, que “la comunidad juega un papel fundamental en esto; así como los consejos comunales y las asociaciones de vecinos. Esto tiene que ir relacionado para que si se comete algún delito haya una interconexión con los cuerpos de seguridad, y se pueda denunciar a la persona. No es que van a tomar la justicia con sus propias manos, porque los índices delictivos van a aumentar, y tú como cuerpo de seguridad vas a empezar a matar gente, o a golpear a las personas. Eso generaría otro problema, que es la violación de los Derechos Humanos”, sentenció.

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LUIS GODOY:

“Hay que hacer una modificación del sistema policial en Venezuela” Biografía YUBREILER SOTOMAYOR sotomayoryandreina@gmail.com

“Todo es un tema de irnos al cumplimiento de la norma, de manera estricta, con cero impunidad”, aseguró el ex comisario del Cicpc

Quinto Día

Los índices de criminalidad están experimentando su tasa más alta desde hace veinte años, y aunado a la fuerte crisis económica y la precaria situación de varios cuerpos de seguridad, hace que sea difícil mantener a raya los actos delictuales en el país. Para Luis Godoy, comisario retirado del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), el tema de la criminalidad va de la mano con la impunidad, “porque quienes conocemos del tema, sabemos que para eliminar la delincuencia o bajar los índices a niveles normales, yo no tengo que agarrar a 800 funcionarios. El tema de la criminalidad es un tema social. Si la sociedad se une y hace unas leyes y reglamentos y las cumple, la sociedad misma dice cuáles son las sanciones que se van a cumplir. Pero esto es un objetivo a largo plazo. Si no arrancamos con eso a nivel social, no vamos a bajar la delincuencia”. Para el experto, aparte de una profunda reforma social, hay que comenzar también por revisar los lineamientos de la justicia venezolana, para garantizar un cumplimiento oportuno de las normas, además de resolver el problema penitenciario. “En Venezuela hay muchas leyes, pero ¿funcionan? No. Está el problema penitenciario, que es muy grave y que hay que resolverlo, primero desde el hacinamiento. También hay que empezar a rescatar espacios: iluminación, canchas, espacios de recreación. Todo es un tema de irnos al cumplimiento de la norma, de manera estricta, con cero impunidad”, detalló. Policía en crisis De la misma forma, Godoy señala que “hay que hacer una modificación del sistema policial en Venezuela, totalmente desorganizado, mal preparado y mal dotado”, especificando que debido a esta problemática, el país posee los niveles más altos de impunidad en la región latinoamericana, “y posiblemente del mundo”. Especifica también que “no existe ningún organismo policial preventivo. Hay unos menos malos que otros, pero las policías uniformadas no son preventivas, y ese concepto lo entiende mal

la gente. Para eso existe el Ministerio de Interior y Justicia y el Departamento de Prevención al Delito. Porque es un tema criminológico, que se fundamenta en la atención a la víctima, a la sociedad, y por qué la sociedad está cometiendo este delito, para encontrar un medio preventivo”, señaló. Godoy no desvincula el recurso económico, al que considera de vital importancia, y que está, según su perspectiva, estrechamente vinculado con el recurso humano. Para el funcionario, “para tener un buen policía, que tiene que venir a Caracas, hay que ofrecerles los recursos necesarios. Los mejores funcionarios de cuerpo policial están en la empresa privada, porque el nivel más alto que pueda ofrecer una policía municipal puede estar en 400 mil bolívares, y un vigilante privado gana 600 mil”, asegurando que “la alta arremetida de la delincuencia contra los uniformados para quitarles las armas, también influye. Acá se perdió el respeto a los funcionarios. También tiene que ver mucho la corrupción que presentan algunos organismos”, explicó a este medio. Funcionario enemigo De la misma manera, el especialista señala que la gran corrupción que existe en los cuerpos policiales ha hecho que la ciudadanía les tema, y desconfíe de su protección. “La gran cantidad de funcionarios, sea de civil o uniformados, involucrados en bandas delictuales o cometiendo delitos, lleva a que la gente no denuncie, porque dicen ‘¿para qué voy a denunciar yo a los ladrones, si sé que ahí están?’. Y el porcentaje que cree que el policía no es ladrón, pero que no va a resolver su problema, también es exponencial. Esto crea un círculo vicioso que lleva a subir los índices delictuales. Esa visión, sea cierta o no, lleva a que la ciudadanía no denuncie”, acotó. Godoy asegura que al contrario de la opinión popular, “los canales regulares sí funcionan. ¿Qué podemos hacer como sociedad? Primero, denunciar. Existen los organismos policiales, que están siendo supervisados por el ente rector, que es el Ministerio de Interior y Justicia, a su vez por el Ministerio Público,

Luis Godoy fue Comisario Jefe de la Policía Técnica Judicial (PTJ), jefe de Homicidios por 3 años. Es licenciado en Ciencias Policiales, mención Investigación Criminal y posee cursos en Seguridad Pública en los Estados Unidos. Fue director de las policías municipales de Chacao y Baruta, con más de 25 años de experiencia en seguridad privada. Actualmente se desempeña como Secretario de Seguridad del municipio Chacao.

y a su vez, tenemos la Defensoría del Pueblo. Habrá algunos inconvenientes, pero no en todos es así. Tenemos que denunciar, y tenemos los mecanismos ciudadanos para que esa cadena, que significa el Poder Judicial, que es la investigación y los policías preventivos, funcione”, expresó. Contra la ideología Para el ex comisario, un buen policía es ante todo un servidor público, por lo que descarta completamente una preparación ideológica, ya que “las ideologías como ciencia, y como camino recto a seguir no puede prevalecer en un funcionario. El tema es que no puede ponerse al funcionario bajo un concepto de adoctrinamiento político o militancia política. El gobierno nacional está ideologizando a funcionarios de sus áreas, porque le interesa como partido político. ¿Cuál es el problema? Si a mí me meten en la cabeza o me adoctrinan hacia un bando, y mañana a quien yo le debo respeto y consideración y a quien está vinculado mi jefe incumplió la ley, no puede ir preso. Eso es impunidad, fomenta el delito y no está contenido en la Constitución”. De acuerdo a esto, el ex comisario explica que el bajo nivel educativo que puedan tener influye no solo en qué tan manipulables sean. También influye en el nivel de agresividad con el que van a llegar a la sociedad. “En un ente del Estado nacional, municipal, y más si eres funcionario policial, más aun si tienes una chapa y una pistola, no debes insistir en que eso te da poder, cuando debería ser al revés: eres un servidor público, acabas de perder el poder y te debes a un ciudadano”, acotó.

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A h o r a e l p r o c e s o d e f o r m ac i ó n e stá e n m a r ca d o e n l a l e ga l i da d

Formación de los Cuerpos Policiales YUBREILER SOTOMAYOR sotomayoryandreina@gmail.com

“Antes de crearse la UNES solo existían en el país dos institutos universitarios de formación policial; uno era el IUPM y otro el Iupol”, explica un funcionario

Quinto Día

La formación policial sienta un precedente importante con la entrada en vigencia de la Ley del Estatuto de la Función Policial, ya que se implementa a nivel de educación superior y pasa a contemplarse como carrera universitaria. Rubén Mena, funcionario de Polichacao e instructor de la academia de dicho organismo especifica que desde entonces, “las academias de policías, estatales o municipales, deben estar acreditadas por la UNES para poder formar a los funcionarios. Ya tenemos varios años bajo esta figura, y por eso a nivel nacional, estatal y municipal todos los policías tienen una sola doctrina de formación, que es la que establece la Universidad de la Seguridad”. Para el funcionario, uno de los principales beneficios es que ahora el proceso de formación está enmarcado dentro de un proceso legal, y especifica que “anteriormente había mucha diversidad en la formación de los cuerpos de seguridad que conformaban al país. Al tener un esquema único de formación, esto le permite a todos los funcionarios prestar el mismo servicio, si deben migrar de una policía a otra”. “Antes de crearse la UNES solo existían en el país dos institutos universitarios de formación policial; uno era el IUPM y otro el Iupol, que formaba a la policía científica y que fueron absorbidos por la Universidad Experimental de la Seguridad. Si bien es cierto que era una formación exigente, no tenían un respaldo universitario”, señaló. De la misma forma, Mena explicó que para iniciar el proceso de captación lo primero que se hace es solicitar a la sede principal de la UNES el permiso. “La primera evaluación que se aplica es una prueba psicotécnica, acompañada de una prueba psicológica. Después hay una entrevista, una serie de exámenes de laboratorio; de esos resultados se va a la evaluación físico-médica y cada evaluación es eliminatoria. Después viene la evaluación física, y por último un panel de entrevistadores, en lo que ya es la fase final. Te hablo de lo rígido que es porque las pruebas que aplicamos es buscando tener un talento que podamos explotar afuera”. La unificación curricular, al juicio de Mena, tuvo como ventaja que “tenemos una serie de unidades curriculares, establecidas por la UNES, donde hacemos un taller inicial, que es una especie de propedéutico, que consta de 160 horas y una vez que finalizan con este propedéutico, comienzan con su primer trimestre de formación. También gozamos de un margen curricular acreditable, que queda a cargo de la policía como institución, y que

El pensum de un funcionario policial

generalmente se enfoca en Derechos Humanos y resolución de conflictos”, señaló. Los valores del funcionario Rubén Mena destaca que dentro del proceso de formación los funcionarios encargados de enseñar “tratan de reforzar el principal valor, que es la honestidad. Me aboco más a la honradez y a la honestidad, ya que siempre la ven asociada a que si no hay un criterio adecuado de lo que es la honestidad, se pueden incurrir en ser deshonrados o deshonestos, porque para nadie es un secreto que cuando se maneja la autoridad, o perteneces a algún organismo, policial o militar, las tentaciones están allí, en el camino. ¿Qué te va a permitir apartarte de las tentaciones? Tener unos buenos valores éticos y morales, como la honestidad”, señaló. Retos de la preparación Mena explica que uno de los mayores logros de la policía, en especial la de Chacao, ha sido formar un funcionario “enfocado en ser un profesional respetuoso, lo que ayuda a que el ciudadano vea al policía como un amigo, y no como un ente represor. Esa es la función principal de la policía, más allá del proceso de formación establecido”, señalando que “habrá cosas que mejorar, pero lo ideal es que el policía siempre tenga la imagen de nuestra prioridad, que es que somos servidores públicos, y nos formamos para servir a la comunidad”. Explica que es muy importante la participación y el contacto con los ciudadanos para consolidar

Dentro de las asignaturas del Técnico Superior de Seguridad Ciudadana, avalado por la UNES, se comprenden las siguientes cátedras: Plan de Desarrollo Nacional; Historia de la Seguridad; Habilidades de comunicación Oral y Escrita; Tecnología de la Comunicación; Información y Comunicación; Lógica y Matemática, Orden y Desplazamiento –comúnmente conocido como “orden cerrado”-; Educación Física, Deportes y Recreación, en su formación inicial, que consta de 360 horas. Al finalizar este proceso, inician el primer trimestre, donde incluyen la formación sociopolítica, en la que se incluyen las cátedras de Sociedad y Democracia Socialista; Ética y Derechos Humanos; Atención a la víctima y en materia policial incluye además Seguridad y servicio policial, Patrullaje y servicio comunal, Uso progresivo y diferenciado de la fuerza; Uso de la fuerza potencialmente mortal, Técnicas básicas de operaciones policiales, finalizando con las prácticas profesionales. La carrera puede ampliarse con la Licenciatura en Seguridad Ciudadana, una vez culmina su formación técnica.

su formación, ya que “nuestro reto más grande es vencer la corrupción en distintos organismos de seguridad ciudadana, policial y militar” y explica que “para que exista corrupción tienen que haber dos actores: el que pide y el que da, por lo que es muy importante el incentivo en la formación, e incentivar el respeto a las instituciones, lo que pasa es que normalmente estas acciones no se denuncian. Y aunque no justifican la acción del funcionario, deberían existir principios y valores para que el mismo funcionario lo rechace. Y eso es lo que queremos rescatar, y debemos de formar”.

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E S P E C I A L I S TA A S E G U R A QUE ES NECESARIO “RECUPERAR LOS CONTROLES INTERNOS”

El lado oscuro de los cuerpos de seguridad Biografía

YUBREILER SOTOMAYOR sotomayoryandreina@gmail.com

De acuerdo al comisario general del Cicpc, Luis Rodríguez Vieira, la propensión a delinquir ha incrementado en los últimos años, por la falta de control a nivel interno en los distintos cuerpos policiales

Quinto Día

El oficio de los cuerpos de seguridad ha cambiado radicalmente con el transcurrir del tiempo, y con el mismo, la manera en que los oficiales son percibidos por la población. Si bien existen ciudadanos que respetan y confían en los cuerpos de seguridad, un porcentaje importante percibe en el policía a un funcionario que se aprovecha de su autoridad, para fomentar la corrupción y la impunidad. De acuerdo al comisario general del Cicpc, Luis Rodríguez Vieira, la propensión a delinquir ha incrementado en los últimos años por la falta de control a nivel interno en los distintos cuerpos policiales, y especifica que “la dirección de investigaciones internas y la comisión de disciplina, así como lo que tiene que ver con la Contraloría están debilitados. No han sido reforzados, no hay las sedes propias, no hay la cantidad de funcionarios preparados que requieren las instituciones para atacar este problema, generando una sensación de impunidad y de anarquía, que favorece estas conductas desviadas”. El Informe Según el Informe de Delito Organizado, suministrado por la asociación civil Paz Activa, durante el primer semestre del año 2017, la presunta vinculación de implicados con organismos oficiales, mostró que un 11% de los casos, a saber, 59 reportes, “refirieron vinculación de los criminales con organismos oficiales, hayan sido éstos organismos públicos o cuerpos de seguridad, lo que supone, en relación con los datos registrados durante el primer semestre del año anterior, una disminución del 23.4% de este tipo de vinculaciones”. De la misma manera, el mismo informe

señala que “dichos casos, se distribuyeron a su vez, entre un 41% de delitos con vinculación de los perpetradores con cuerpos policiales – principalmente con el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y el Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CPNB), y un 18% de delitos, en los cuales participaron funcionarios de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), predominantemente de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB); quedando como saldo, en consecuencia, por lo menos 100 funcionarios de organismos de seguridad de la nación implicados, detenidos y/o imputados por delitos organizados”. Para el comisario Vieira, esta incidencia delictual tiene que ver con la formación, “e indudablemente con la situación-país que estamos viviendo, ya que en otras partes del mundo el policía es valorado y acá es disminuido, ya que es un ciudadano de cuarta categoría. Este fenómeno tiene como consecuencia que nadie quiere ser policía, y si lo eres, es por extrema necesidad, haciendo que se pierda la vocación de servicio”, señaló. Perfil ético del funcionario Para el especialista, todo civil que aspire formar parte de los cuerpos de seguridad del Estado debe comenzar por ser un ciudadano digno. “La mayoría de los policías viven en barrios. Si tú vas a pertenecer a la policía y vas a estar investido de autoridad, el que debe ceder hacia el ciudadano eres tú”, explicando también que eso significa que en estos momentos la cantidad de delitos de corrupción o peculado de uso ha sufrido un incremento, porque “el funcionario no entiende que el usar una patrulla para fines particulares, o una motocicleta, es un

Luis Rodríguez Vieira es Comisario General del Cicpc (J) con 28 años de servicio. Licenciado en Ciencias Policiales, con una especialidad en Gerencia y Administración de Policía. También fue Director Fundador del CPNB.

delito y ellos lo toman como algo normal. ¿Por qué lo hacen? Porque el dinero no les alcanza; porque necesita ‘resolver’ para poder cubrir la demanda y eso hace que los organismos se contaminen de corrupción, ya que el Estado no les brinda los beneficios socioeconómicos que merecen”, advierte. Vieira explica, además, que si bien existen mecanismos de regulación que realizan los controles correspondientes, con el transcurrir del tiempo eso perdura, y no existe una respuesta inmediata para atacar este problema. “Si solamente existe a nivel policial un déficit de 30 mil funcionarios, imagínese la cuota entre Fiscalía y Tribunales. Hay que estar compaginados, y esto disminuye la capacidad de respuesta”, por lo que es necesario, según el especialista, rescatar una preparación más óptima. También explica que “la desventaja de trabajar allí es que ya generas un rechazo por la población policial. Ya eres mal visto, existen referencias muy despectivas hacia el compañero, porque los investigas a ellos. ¿Por qué? Pues porque estás enlodando la reputación e imagen de la policía. Además de eso, el consejo disciplinario debe estar en funcionamiento para atender cualquier cantidad de casos. Pero cuando hablas con los funcionarios, estos se ven disminuidos. No tienen capacidad de respuesta porque no hay supervisión”, acotó.

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Policía delictual El fortalecimiento de la impunidad ha tenido muchas aristas, entre ellas lo que, según el propio Vieira establece, “el ascenso del delincuente empoderado, por cuanto el aparataje judicial no funciona. Con esto me refiero a la activación policial, la Fiscalía y los Tribunales. Esto no está funcionando a plenitud por el déficit tan grave, primero de personal, y luego, de recursos que no permite la facilidad del debido proceso. Esto es lo que ha permitido a los delincuentes empoderarse, ya que la policía, en vez de hacer labores preventivas, pierde una gran cantidad de horas ‘hombre’, primero para trabajar un caso y para custodiar detenidos. Es decir, se perdió todo el norte”, acotó. Vieira explica además que la detención es la excepción cuando los delitos cometidos son muy graves, sin que eso signifique que no exista un procedimiento disciplinario o una amonestación directa, argumentando además que “el Código Orgánico Procesal Penal desplazó al Código

CUERPOS POLICIALES

“ES NECESARIO CONTROLAR LAS FUNCIONES DE CADA ORGANISMO”

Penal, que era el proceso adquisitivo y acusatorio; entonces ese acusatorio es para que goces de una libertad en el proceso”. Señala que “si se revisa la Conarepol, que se hizo en el 2006 de la mano del entonces ministro, Jesse Chacón, los vicios que señalaban en el 2006 y que existían en las policías,

ahora están a la enésima potencia, porque además se ha incrementado el uso de escoltas para fines particulares, además de la custodia de propiedades privadas y establecimientos con fines lucrativos ilícitos. Entonces la cantidad de vicios que se señaló, creció exponencialmente, de manera alarmante”, explicó.

El comisario explica que en los últimos años una de las irregularidades que más ha proliferado es la usurpación de funciones de la inteligencia militar en organismos de carácter civil, explicando que es necesario “establecer controles en cada organismo, para denunciar estas irregularidades ante las entidades pertinentes”. De la misma manera explica que fomentar la impunidad ante este tipo de conductas, principalmente a nivel policial, ha traído como consecuencia “mucha incomodidad, porque en las policías conseguimos funcionarios con mucha vocación de servicio, y a veces conseguimos funcionarios que enlodan y manchan la reputación de la policía. Lamentándolo mucho, estas conductas han venido in crescendo, por lo que si no se fortalece la columna vertebral de todas las organizaciones, así como de contraloría y registro de evaluación, y no existen sanciones apropiadas, se genera molestia e impunidad. Es por eso que es importante adaptar y rescatar las policías municipales, estatales y nacionales, para que entiendan que estos organismos de regulación competente, tienen una responsabilidad directa”, finalizó.

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Hablan los jefes policiales YUBREILER SOTOMAYOR sotomayoryandreina@gmail.com

“El que es policía ahorita es policía por vocación, porque la parte económica afecta mucho; Lamentablemente el respeto a la autoridad policial ha mermado, ya que las condiciones sociales no son las más idóneas”, señaló un funcionario de Polisucre

Quinto Día

Ejercer como funcionario de un cuerpo de seguridad es una tarea ardua, y debido a los altos índices de criminalidad, la baja remuneración y el défict de personal hacen cada vez más difícil llevar a cabo una labor que anteriormente fuera motivo de orgullo. Hugo López, funcionario de la Policía de Chacao señala que uno de los mayores retos a los que se enfrenta la policía en la actualidad, es a un índice de criminalidad que crece exponencialmente. “El policía, después que tiene ciertos años en la institución no va a perder sus servicios, o va a irse a otro lugar. Pero el que está llegando no lo está viendo como una oferta de trabajo; no lo está viendo como algo que le va a llevar a tener un futuro dentro de la organización policial y este es uno de los retos que estamos trabajando dentro de la policía”, señaló. Einer Giulliani, jefe de Seguridad Ciudadana en el municipio El Hatillo acota que la problemática que existe en todos los organismos de seguridad ciudadana en este momento es enfrentarse a problemas difíciles de solucionar por el alto índice delictivo, debido a que los organismos de seguridad se encuentran en clara desventaja. “Acá tenemos secuestros en los que los delincuentes tienen su ametralladora, fusiles de alto calibre y la policía solamente pistolas o escopetas”. Guilliani especifica que la regulación en el armamento viene dada por la Ley para el Control de Desarme y Armas que aún está vigente y que regula el armamento, ya que la misma establece sanciones muy altas. “Lamentablemente tenemos un nivel de inseguridad muy alto y existen muchas de esas armas que se comercializan casi por las redes sociales. Y aunque hayan aprehendido a personas que están en ese comercio ilegal de porte de armas, siguen llegando por las fronteras munición suficiente para mantenerlos bien dotados”. Una mirada a los cuerpos policiales Los cuerpos policiales de Venezuela, según este especialista, se enfrentan a un déficit de atención y a ciudadanos que gracias a la mala política que se ha generado, se dedican a menospreciar o a llevar a los funcionarios policiales a un menor nivel de estatus del que debería tener ante la sociedad. Cano Power, comisionado agregado de Polisucre, dice que lo más difícil de esta profesión se presenta en cuanto al reto económico y califica al mismo de “eje transversal”, ya que es una cuestión que afecta a todos los ciudadanos, en un nivel laboral, personal y familiar: “En los 22 años que tengo de carrera, el que es policía ahorita es policía por vocación, porque la parte económica afecta mucho. Lamentablemente el respeto a la autoridad policial ha mermado, ya

que las condiciones sociales no son las más idóneas”. Power señala además que esto ha influido en el descenso en los procesos de captación, ya que no resulta en una oferta atractiva para los interesados. “Aunque existe una serie de regulaciones que establecen cuánto va a ganar un funcionario policial, no todo se cumple porque los recursos no llegan a tiempo, o no son suficientes. Con la devaluación que tenemos, lo que fue aprobado hace seis meses no es lo mismo que fue aprobado ahorita, entonces cuando llega el recurso, acá está depreciado completamente”. De la misma manera, este especialista establece que esto induce a una falta de respeto hacia la autoridad, lo que lleva a procesos sociales bastante difíciles. Giulliani, de la Policía de El Hatillo, establece que lo grave del problema económico influye en gran medida en los actos de corrupción que pueden darse dentro de los cuerpos policiales, ya que en algunas ocasiones la percepción salarial ni siquiera llega a sueldo mínimo, ni siquiera con cestatickets. “Yo creo que los niveles podrían incrementar si no establecemos una política efectiva que ayude o de beneficios económicos a los policías estadales, entonces cuando tú ves el nivel de inflación tan grande que tenemos en materia económica, muchos son tentados a caer en actos de corrupción”, asegurando que “si nosotros no mejoramos los niveles económicos y socioeconómicos de nuestros funcionarios policiales, y de los beneficios sociales que ellos reciben, lamentablemente las policías van a ir a cierre técnico dentro de poco”. Cambio en la criminalidad Para Hugo López, uno de los mayores retos laborales a los que se enfrentan los jefes

policiales es el de mantener el orden, alegando también que “cada tiempo tiene su etapa; estamos viviendo una etapa diferente. Tal vez en los años 50, 60 o 70 no se veían las armas que se están viendo hoy en día, desde el punto de vista de la organización criminal”. Sin embargo, según López, mantener la presencia en las calles, “la comunicación con el ciudadano y actualizar la información de cómo operan los delincuentes para nosotros es un arma esencial, porque nos ayuda con la prevención del delito. También te puedo decir la contraparte: no es la violencia o el intercambio de disparos, es ganar los espacios para que el delincuente no pueda ocuparlos”, señaló. Giulliani explicó a este semanario que "la problemática de la dotación de los equipos a funcionarios e instituciones va más allá de una normativa que se creó, que en mi particular corresponde más a un modelo ideal donde nada ocurra, válido solo en países de Europa, como Francia y España, pero no en el día a día del país donde los delincuentes están mejor armados”.

¿Cuánto gana un policía?

En una nota publicada por el portal web Notitotal, el 25 de febrero del 2017, señalan que el dirigente opositor del estado Monagas, Luis Eduardo Martínez, publicó en su cuenta de Twitter un recibo de salario devengado por la policía del estado, que para el momento ascendía a 43.738 bolívares mensuales, a lo que se le sumaba 11 mil bolívares de prima y 63 mil aproximadamente por concepto de bono de alimentación. Durante el mes de julio de este año, el Ejecutivo decretó un aumento de 85% en las tablas salariales de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), aprobando 178 millardos para el primer cuerpo de seguridad, y 83 millardos para el segundo. Según el comisionado Einer Giulliani, al momento de elaborar esta nota, el monto mínimo de un funcionario policial es de 69 mil bolívares mensuales, más 128 mil de cestaticket.

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SECUESTROS Y ESTAFAS

EL SECUESTRO CONVENCIONAL SIGUE EN AUMENTO

Venezuela: el país

con mayor tasa de mortalidad durante los secuestros “Se estima que un 10% de los secuestros terminan con la víctima asesinada y en el caso de Venezuela, ese índice está entre el 13 y el 15%”, afirma el especialista Marcos Tarre Briceño ANA GABRIELA DÍAZ H. @AnaGDiazH / anagdiazh02@gmail.com

Quinto Día

Para el año 2016, Venezuela era el país con el índice de secuestros más alto de Latinoamérica. Para el primer semestre del 2016, el incremento había sido del 170% en comparación con el año 2015. Aún y cuando el gobierno no había revelado cifras oficiales, se pudo conocer que Caracas era la ciudad con mayor reporte de secuestros en el país. En el año 2017, el número de secuestros disminuyó significativamente, pues durante los meses de protestas, era casi imposible realizar un secuestro de manera exitosa. Desplazar a una persona por la ciudad sin ser percibidos era una tarea casi imposible, pues las calles se encontraban trancadas por manifestantes. Según el informe de Paz Activa, el número máximo de secuestros registrados durante este año fueron ejecutados en el mes de enero con una cifra de 21, disminuyendo significativamente hasta el mes de junio, cuando se contabilizó en 11.

Luego que terminaron las protestas, el secuestro repuntó nuevamente, según el analista de seguridad Marcos Tarre Briceño. “Aunque hay ausencia de cifras oficiales, está la percepción y la información extraoficial; a partir de los meses de julio-agosto ha habido un repunte en materia de secuestro”. Tipos y status del secuestro en 2017 En Venezuela existen tres modalidades de secuestros. La primera es el secuestro convencional, que consiste en retener a la víctima por más de 24 horas. A estos le siguen el secuestro breve o secuestro exprés, y el autosecuestro, que es en el que la víctima finge su propio plagio. El informe de Paz Activa refleja que para el primer semestre de este año, el porcentaje de secuestros frustrados se encontraba en 45.6%, con 41 casos. En el secuestro convencional se presentaron 28 casos, superando al secuestro breve, que alcanzó a

presentar 20 casos, ubicándose en un 8.9%. Para este año solo se reportó un caso de autosecuestro. “Durante el primer semestre de 2017 se registró un descenso del 44% en la cantidad de secuestros convencionales, y de 16.6% en la cantidad de secuestros breves, lo que, aunado al aumento exponencial de delitos como la extorsión y el sicariato, parece concordar con la opinión expresada por expertos en temas de criminalidad y seguridad ciudadana, como el director de la asociación civil Paz Activa, Luis Cedeño y el analista Marco Tarre Briceño, quienes han asegurado que el secuestro convencional, dado sus problemas logísticos y económicos, ha mutado hacia formas mucho más rápidas y económicamente más rentables, tales como el secuestro exprés, los secuestros virtuales y algunas modalidades de extorsión”, refleja el informe de Paz Activa. Tarre Briceño recalca que “el más frecuente ahora es un secuestro tradicional, pero no de

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larga duración. Es un secuestro que se resuelve en máximo dos semanas, y la víctima está en sitios, junto a otros secuestrados. Las bandas han acondicionado estos sitios para tener a estas personas por ese tiempo, sin caer en lo que eran los secuestros largos, que conocimos en el pasado y que eran muy comunes en la guerrilla colombiana”. Asimismo el analista informó que las cifras de mortalidad durante los secuestros en Venezuela son bastante alarmantes. “Hay un nuevo sistema: utilizar a delincuentes que no necesariamente son miembros de la banda para que suministren víctimas, y eso hace que la mortalidad en secuestros de Venezuela sea quizás la más alta del mundo, porque normalmente se estima que un 10% de los secuestros terminan con la víctima asesinada, y en el caso de Venezuela, ese índice está entre el 13 y el 15%”. Víctimas del secuestro Según los estudios realizados, del 100% de los casos de secuestro que

MÁS TIEMPO, MENOS PROBABILIDADES

pudieron computarse en el primer semestre de 2017, el 88% de las víctimas fueron liberadas. El 12% restante reflejan que 7% casi terminaron con la muerte del secuestrado y 4% de los reportes quedaron en desconocimiento del estado de la víctima. Paz Activa informó que 8 de cada Durante el primer semestre de 2017, 10 secuestrados eran hombres, y que según el informe de Paz Activa, se pudo los mismos fueron capturados durante evidenciar que la suerte de la víctima las horas que se desplazaban a sus empeoró según el tiempo de cautividad trabajos, o cuando retornaban a sus al que se mantuvo expuesta. hogares. Los principales lugares de peligro para que suceda el rapto son los garajes y puertas de edificios, casas o conjuntos residenciales. de las víctimas fueron liberadas en los Sin embargo, el analista Tarre Brisecuestros que fueron frustrados. ceño hace énfasis en que actualmente las personas potenciales para ser secuestradas son los jóvenes. “Nuestras bandas han aprendido que, por ejemplo, si se llevan a una cabeza de las víctimas fueron liberadas de los de familia, aquellos que manejan las secuestros exprés. cuentas, los negocios y los bienes; están imposibilitando prácticamente que la familia pueda reunir el dinero y hacer los movimientos financieros que requieran. Por esta razón están de las víctimas fueron liberadas en los casos de secuestro convencional. escogiendo a muchachos jóvenes,

98% 90% 79%

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para que los padres estén en libertad y en condiciones de reunir la recompensa que ellos están pidiendo”. De igual manera, el estudio refleja que la gran mayoría de los secuestros son presenciados, al menos por algún vecino o transeúnte, que da información inmediata a las autoridades competentes. Es importante resaltar que los venezolanos pueden acudir por ayuda a las policías municipales, policías estadales, Cicpc, CPNB, Sebin, GNB o Conas; siendo este último el Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro, creado para conducir operaciones policiales como órgano de investigaciones penales en el combate de la extorsión, el secuestro y los delitos conexos. Ejecutar operaciones de búsqueda y procesamiento de información delictual, realizar operaciones de rescate de personas en áreas rurales y urbanas y brindar asesoramiento y seguridad a las personas potencialmente secuestrables, a la familia de los plagiados y a las personas sometidas a delitos de extorsión.

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FERMÍN MÁRMOL GARCÍA ASEGURA

“Venezuela se encuentra dentro de los 10 países con más secuestros con fines económicos del mundo” ANA GABRIELA DÍAZ H. @AnaGDiazH / anagdiazh02@gmail.com

“El secuestro es uno de esos delitos que afecta a pocos, pero que daña muchísimo” “Desde el año 2004 no existen cifras oficiales de crimen y violencia en Venezuela”

Quinto Día

El secuestro en Venezuela es una de las prácticas delictivas más comunes. Al respecto, Fermín Mármol García explica que “a partir del 2007 el secuestro vive un acelerante con el nacimiento del secuestro exprés. Este llega, se desarrolla y se mantiene hasta el día de hoy, con un gran agravante, de los 100 secuestros que se pueden materializar en Venezuela. A grosso modo y siendo muy generoso, solo vamos a tener registro, tal vez del 25% de los secuestros, y sobretodo de los que duran más de 24 horas”, expresa. Según el especialista, durante los 18 años que se ha mantenido el gobierno, han pasado 16 ministros y 25 planes de seguridad. “Para el 2016 se computaron 458 secuestros con 604 víctimas. Ese consolidado es sin meter al Ministerio Público. Esto en el mejor de los casos es solo el 26% de lo que pasó en el 2016. Venezuela debe ser un país, según nuestros estudios, que debe estar cerca de unos 3 mil secuestros al año. Esto es muy conservador. Para ser un país de 30 millones de habitantes, es una tasa no despreciable del 10%. Tú dices 3 mil secuestros, que posiblemente afectaron a unas 7 mil personas, comparado con el homicidio o el robo, no es nada. El tema del secuestro es otro: hace que la gente invierta en carros blindados, en escoltas, que saque a los hijos de aquí. El secuestro es uno de esos delitos que afecta a pocos, pero que daña muchísimo. Es un delito que tiene poco impacto directo, pero un impacto indirecto bestial”, afirmó el especialista. García aseguró que actualmente el país es considerado uno de los más peligrosos, según la empresa de medición de riesgos Control Risk. “Venezuela sin duda está dentro del club de los 10 países con más secuestros del planeta y cuando hablamos del planeta, estamos hablando de una estructura de 193 países; y que digan que Venezuela está dentro de los 10 es muy grave. Son cifras que responden a percepción de empresas, que siguen el riesgo especial a nivel mundial.

Biografía Control Risk mide algo que se llama Riesgos Especiales y dentro de ellos está el secuestro, que no es otra cosa que ver qué tan riesgoso es un país para mandar a ejecutivos y a familias de diplomáticos y de corporaciones”. Asimismo, García explicó cuáles eran las ciudades del país más propensas al secuestro, y recalcó que actualmente la extorsión ha ganado un mayor terreno, pues los venezolanos están dispuestos a pagar, con tal de sentir protección. “La Región Central sigue siendo, por supuesto, el epicentro más importante; Distrito Capital con sus cinco municipios, que sería parte del Municipio Libertador y parte del estado Miranda. Como segundo, ponemos a Valencia, dentro del estado Carabobo. Como tercer punto, ponemos a Barquisimeto, dentro del estado Lara”, explicó. García especifica que, “como dato 2017, es que el secuestro ha perdido la incidencia de aumento, porque inevitablemente ha crecido la extorsión; es decir, las bandas criminales han encontrado en la extorsión un pago seguro y permanente, constante y de menor riesgo que el secuestro”. De igual manera, el abogado criminalista enfatizó que los venezolanos tienen varias razones por las cuáles no denuncian, pero la principal es la falta de políticas de Estado, existentes en el país. “No se ha conquistado la denuncia ciudadana; no se ha informado a la ciudadanía. La percepción de la ciudadanía es que parte del problema del secuestro corresponde a los policías que están involucrados en ellos; entonces esa percepción hay que desmontarla. Se puede desmontar con casuística, del conjunto de casos que logra la policía desmantelar, en cuántos están involucrados policías activos; de ahí se pueden desmontar mitos”. De igual manera, destaca que “en el secuestro exprés, la familia queda atada a un tema temporal y siente que no puede hacer otra cosa, sino negociar; eso se debe, por supuesto, a una falta de orientación de políticas públicas, de qué hacer

Fermín Mármol García. Abogado Criminalista, profesor universitario y Jefe de Cátedra de la Universidad Santa María. Asesor de Riesgos, con amplia experiencia en materia de delitos de extorsión y secuestro.

y cómo hacerlo para llevar en conjunto varias actividades. Y por último, es que se debe reformar la ley vigente, que casi obliga al ciudadano a darle la espalda a la institucionalidad”, señaló. García explica que la desconfianza de la población venezolana con respecto a los cuerpos de seguridad del Estado va en aumento, y el gobierno no ha tomado cartas en el asunto. “El único que se ha atrevido a decir el porcentaje de policías implicados en actividades delictivas fue Tareck El Aissami, cuando fue ministro de Interior y Justicia, que dijo que el 20% de las fuerzas policiales estaba incurso en algún tipo de delito. Desde el año 2004, es decir, desde hace 13 años, no existen cifras oficiales de crimen y violencia en Venezuela”, explicó. Por último, García informó acerca de los procedimientos que deben realizar los familiares de una persona que ha sido secuestrada. “A nivel urbano, el Cicpc tiene la unidad Antiextorsión y Secuestro; es allí donde debe acudir la gran familia venezolana a interponer la denuncia, y en aquellos estados donde no esté presente la unidad Antiextorsión y Secuestro, acude ante la delegación del Cicpc. Hay un teléfono de emergencia, que es el 0800-CICPC24. La segunda institución que tiene este trabajo de antiextorsión y secuestro es el Conas, de la Guardia Nacional. La tercera es la Fiscalía del Ministerio Público, que tiene fiscales antiextorsión y secuestro y uno va a la unidad de atención a la víctima, interpone la denuncia en tiempo real las 24 horas, e inmediatamente se va a enlazar con alguna de estas dos instituciones”.

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Va l e r i a Sa r av i a f u e s e c u e st r a da e n e l 2 015

“Las heridas que causaron en mí no se pueden sanar con terapias” ANA GABRIELA DÍAZ H. @AnaGDiazH / anagdiazh02@gmail.com

Los secuestros en Venezuela han sido una de las formas más comunes que han utilizado las bandas criminales para conseguir grandes sumas de dinero, de manera fácil y rápida. A pesar de que la mayoría de los secuestros son breves, o denominados “exprés”, algunos suelen extenderse hasta que los delincuentes consiguen la cantidad exacta o más cercana a la que piden, para liberar o mantener con vida a una persona. Este es el caso de Valeria Saravia, una joven de 25 años que vivió la terrible experiencia de estar en cautiverio. Su secuestro fue realizado en el año 2015 y desde ese momento se ha convertido en una persona solitaria, miedosa y con traumas que parecen perseguirla. Su historia comenzó cuando una noche se disponía a salir de fiesta; una reunión en la que se reencontraría con sus amigos del colegio. La ilusión de aquella noche se transformó en pesadilla, para una venezolana que solo intentaba disfrutar de su juventud. Las lágrimas en sus ojos se asoman cada vez que intenta reconstruir ese fin de semana. “Iba a estrenar un vestido que me había comprado, y tenía una semana practicando con los tacones que me pondría, para poder soportarlos toda la noche”. Su mamá nunca había puesto ‘peros’ a sus salidas, aunque esa noche le comentó a Valeria que tenía un mal presentimiento y que pensara bien si estaba segura de asistir a esa reunión. “El sábado iba con normalidad, ya estaba preparada para salir, cuando mi mamá me dice que tenía un mal presentimiento, que sentía un nudo en el pecho y que si estaba segura de querer salir de la casa esa noche. No respondí, simplemente le di un beso y me fui”. Saravia fue secuestrada pasadas las 9 de la noche en un local de Los Palos Grandes, en Caracas, en el que se detuvo para comprar cigarrillos y avisarle a su mejor amiga que en pocos minutos pasaría por ella. “Me arrepiento mil veces de no haber escuchado esa noche a mi mamá y haberme quedado en mi casa. Después de trancar el teléfono me abordaron dos hombres encapuchados, que sólo decían ‘súbete en el carro y no abras la boca’”.

La desesperación empieza a manifestarse en su manera de describir lo que sintió, cuando por fin pudo entender que se trataba de un secuestro. Los antisociales le hicieron saber que llamarían a su familia; que estaban seguros de que sus padres pagarían lo que fuera por volver a tener con ellos a su única hija. Según el abogado criminalista Fermín Mármol García, “el 94% de los secuestros en Venezuela ocurren al azar” y este, no parecía ser el caso. “Me advirtieron que solo podía hablar cuando me dieran permiso y que de lo contrario, empezarían a demostrarme quiénes eran los que mandaban. Decían muchas cosas que no entendía, pero lo que jamás olvidaré fue una frase que me dijo el que manejaba el carro: ‘Lo que más me gusta de tener a sifrinitos como tú, es que podemos verlos de la misma manera que ustedes ven a los pobres. Esta es la única manera de que ustedes tengan cara de gente, y no de dioses’. En ese momento, entendí que el problema no era personal y que sería complicado salir de esas. El resentimiento y el disfrute por tenerme en su poder era evidente, y mis ganas de salir del carro, también”. A la familia Saravia le pidieron 20 mil dólares para liberar a Valeria. Recibieron cerca de 6 llamadas por parte de los captores, y el secuestro pasó de ser breve

a prolongado. La joven de 25 años hizo el intento de escapar de sus secuestradores la misma noche, pero su intento fallido hizo que las cosas empeoraran. “Intenté abrir una de las puertas cuando el carro estaba en marcha, no logré salir y por el contrario, solo conseguí que se pusieran agresivos conmigo. Ese fue el único momento que supe dónde estaba (salida de la avenida Baralt, por la Boyacá). Pararon el carro y me cubrieron la cara, me amarraron las manos y me obligaron a acostarme en el asiento trasero. Sentí que mi vida estaba pasando por mi cabeza, como una película que no conseguía pausar, ni detener. Solo pensaba en las palabras de mi mamá antes de salir de la casa, y repetía en mi mente el padrenuestro y el ángel de la guarda”. Valeria asegura que la encerraron en un clóset, pues no podía estirar sus piernas, y en ningún momento pudo ver dónde se encontraba; no le soltaron las manos y tampoco le quitaron la tela que cubría su cabeza. “Traté de mantener la calma y escuchar todo lo que sucedía afuera. Intenté escuchar lo que pasaba, pero solo existía silencio”. “Al día siguiente me cambiaron de sitio, supongo que fue dentro de la misma casa. Estaban dos hombres ‘cuidando de mí’, dos hombres que intentaron abusar de mí, no sé si fue por tanto que hablé y le reproché a Dios, pero que no lo hicieran estoy convencida de que fue un milagro”.

Según García, “el porcentaje de violaciones durante los secuestros en el país es cercando al 5% de las víctimas, incluyendo lesiones personales o actos lascivos”. Saravia estuvo en cautiverio hasta la madrugada del martes. Durante su secuestro, optó por mantener silencio, y no consumir ningún tipo de alimento que le ofrecieran. Por suerte, los captores no utilizaron la fuerza bruta con ella. “En mi mente buscaba la manera de consolarme. Comencé a recordar todas las cosas que había vivido con mi familia, pensé en Carla y si alguien le avisaría que yo estaba secuestrada. Pensé en mis estudios, y en cuánto tiempo pasaría sin volver a ver a los que amo. Mis pensamientos se interrumpieron por otra voz que penetró en el cuarto. En mi vida podré olvidar la sensación que recorrió mi cuerpo, luego de escucharlo decir: ‘los pures pagaron’”. Fue liberada a las 2 de la mañana en la Plaza Catia, ubicada al Oeste de la ciudad. “Me dejaron en una plaza que desconocía para ese momento. Después me enteré que era la Plaza Catia. Eran las 2 de la mañana, y aunque era de madrugada, aún había personas que caminaban por allí. Le pedí ayuda a un señor, que después me enteré que se llama José. Para mí, fue un ángel que apareció en mi camino. Me ayudó a llamar a mis papás para que me fueran a buscar y 15 minutos después, volví a ver a los amores más grandes de mi vida. No podía creer que estuvieran allí, no podía parar de llorar, de agradecer y de pedirles perdón”. Los familiares no quisieron denunciar, pues aseguraban que sus secuestradores los conocían mejor de lo que cualquiera podía pensar, y que el hecho de denunciarlos podría traer represalias contra la familia. Según el criminalista, es importante resaltar que “en el país, menos del 25% de las familias que viven los secuestros denuncian, pues en su mayoría no entienden la importancia de la misma”. García recomienda denunciar paralelamente a las negociaciones con los captores, pues es sencillo entender cómo empieza el secuestro, pero es incierto conocer cómo termina.

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Secuelas de un secuestro “Yo no puedo culparla a ella, sus cuadros de ansiedad y depresión se mantienen en control mientras tenga el tratamiento, pero en este país conseguir los medicamentos ha hecho que esta desgracia sea aún más traumática” asegura el señor Herrera, esposo de una víctima de secuestro

ANA GABRIELA DÍAZ H. @AnaGDiazH / anagdiazh02@gmail.com

El secuestro es uno de los delitos más comunes en el país, y actualmente las cifras siguen en aumento. Las víctimas son las principales afectadas, pero existen secuelas del secuestro que se reflejan en las familias que han tenido que pasar por esta experiencia traumática. El psiquiatra Robert Lespinasse, expresidente de la Sociedad Venezolana de Psiquiatría, asegura que “el secuestro es uno de los delitos más atroces que existen, porque cercena la libertad de una persona, al mismo tiempo que la somete a la amenaza de causarle lesiones, la muerte, o a veces la muerte de seres queridos, lo que hace que en ese momento la persona sufra inmensamente y el tormento sea indescriptible. Y no solamente es eso, no es un hecho puntual y momentáneo, sino que a veces se prolonga en el tiempo, y a veces en semanas y hasta años”.

tenga el tratamiento, pero en este país conseguir los medicamentos ha hecho que esta desgracia sea aún más traumática”. Su esposa fue secuestrada al salir de su trabajo, y aunque fue un secuestro exprés, las amenazas de los antisociales quedaron grabadas en la memoria de la señora, una mujer joven a la que le cambió la vida en tan solo cuatro horas. Según Lespinasse, “el sexo femenino tiene más riesgos de padecer de estrés postraumático, a pesar de que se exponen menos, porque generalmente los hombres están más propensos a ser secuestrados por las características de su desenvolvimiento. También puede producirse lo que se conoce como estrés crónico, en que muchas veces las lesiones después de un secuestro, a los dos años no se han superado y esto ocurre en la mitad de las personas que son secuestradas”.

Habla la familia Por razones de seguridad se mantendrá en anonimato el verdadero apellido de la familia, a la cual se le llamará Herrera. Aunque posiblemente sus secuestradores se olvidaron de su existencia, la marca que dejaron en cada uno de sus miembros ha tardado en cicatrizar. Hace más de un año que sucedió, y ellos aseguran que sienten como si hubiera sido ayer. El señor Herrera, padre de la familia, explicó que desde que su esposa fue secuestrada, no han tenido un solo día en el que pudieran dormir en paz: “Yo no puedo culparla a ella, sus cuadros de ansiedad y depresión se mantienen en control mientras

Trastornos inmediatos Aunque la mayoría de los traumas se ven reflejados al ser liberadas las víctimas, al momento del rapto también suelen aparecer ciertos síntomas, fobias o traumas que son comunes y generalizados. El doctor Lespinasse explica que “el estrés agudo es el que se produce inmediatamente que ocurre el hecho; es decir, se refleja en un estado de angustia inmenso, que se produce en la persona que es víctima de un secuestro. También puede presentar miedo, sensación de vulnerabilidad y se siente a merced de una persona totalmente desconocida; que no tiene escrúpulos, que no tiene frenos y que no sabe qué busca

de él. Se presenta una gran desesperación, crisis de llanto, sensación de falta de aire, de ahogo, taquicardia, temblor en el cuerpo, sudoración fría; todos estos síntomas son de un cuadro angustioso por un percance en un momento dado; también la tristeza y ganas de llorar”. Según el señor Herrera, su esposa comenzó a padecer de claustrofobia y taquicardia luego de haber sido secuestrada. “Ella era una persona sana, llena de vida y cuando la secuestraron se convirtió en una persona ansiosa, comenzó a temerle a los espacios cerrados y al principio tenía miedo de que en cualquier momento le diera un infarto. La taquicardia ahora es parte de su día a día”. El postrauma La mayoría de las personas cree que el estrés postraumático aparece de manera inmediata; es decir, luego de la liberación de la víctima, pero realmente se manifiestan pasado un mes del acontecimiento. El señor Herrera aseguró que en el caso de su esposa, el cambio comenzó desde el primer momento. “A ella la liberaron el mismo día y aunque muchas personas no puedan creerlo, a los delincuentes que la secuestraron solo les bastó cuatro horas para marcar su vida y la nuestra para siempre”. El psiquiatra Robert Lespinasse señaló que “el estrés postraumático suele aparecer un mes o más tarde de haber ocurrido el hecho; este se caracteriza porque la persona al oír un ruido, al sentir un olor o algo que le recuerde su reclusión o alguna situación que lo vincule con el sitio donde se encontraba o

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con las personas que lo tenían; al oír una voz, una orden o una situación parecida, la persona va a vivir con inmensa intensidad el hecho, como si estuviera pasando en ese momento. Esa es la característica del estrés postraumático. Esto se puede prolongar por años, incluso 15 años después la persona puede estar sintiendo síntomas, que van desde sudoración fría, temblor en el cuerpo, taquicardia, sensación de desvanecimiento, náuseas y vómitos, hasta despertar bruscamente de un sueño”. Tratamientos y escasez “La familia debe dejar que la persona drene, ese es uno de los factores más importantes: la parte catártica; es decir, dejar que la persona relate, si siente el deseo. Muchas veces se inhibe o tiene temor de hacerlo; el hecho mismo de contarlo o de expresarlo y decir lo que siente o lo que sufre lo va ayudando poco a poco a superar la situación”, dice Lespinasse, quien sugiere que el tratamiento sea farmacológico, “con medicamentos que le quiten los síntomas que tiene de ansiedad, de angustia, de desesperación y al mismo tiempo si la persona se siente depresiva o tiene antecedentes de depresión; porque los que más se afectan son los que han tenido otros trastornos anteriormente, como depresión, fobia social, ansiedad, trastornos de personalidad o trastornos disociativos”. La situación actual del país no hace las cosas sencillas. La escasez de medicamentos afecta a los que, como la señora Herrera, necesitan mantenerse medicados. Su esposo asegura que a veces tienen que pedir colaboración de familiares y amigos cercanos para poder conseguir el tratamiento: “Los medicamentos que le recetaron a mi esposa se consiguen una vez a la cuaresma; a veces la desesperación se apodera de uno y luego de hacer catarsis recuerdas, que aunque quieras, no puedes tirar la toalla. Sé que ella me necesita, a mí y a sus hijos y dejarla sola sería un delito”. Recomendaciones Para finalizar, el psiquiatra Lespinasse recomienda no descuidar a las personas, pues en muchos casos se pueden refugiar en flagelos que no ayudan en la recuperación. “Esta situación puede llevar a la persona al consumo de alcohol en exceso o consumir drogas, tratando de olvidar o de alejar de su mente lo ocurrido. Aunado a eso está la parte psicoterapéutica, que es muy importante. A veces se presentan situaciones en las que la persona no vuelve a salir de su casa por un tiempo prolongado y si lo hace, es con alguien que represente una gran seguridad”. De igual manera el especialista aseguró que una de las razones por las que los venezolanos se van del país es para huir de la mala experiencia que viven cuando son secuestradas, o algún familiar cercano ha vivido el secuestro. “Hay que tratar tanto a las personas que fueron secuestradas como a los familiares, y esto es parte del éxodo que tenemos en el país. Muchos de ellos han sido víctimas de secuestro, y la única alternativa que han visto es huir y desaparecer rápidamente del sitio para no volver a correr algún riesgo similar. Eso hace que la persona, aún sin pensarlo dos veces, arranque y se vaya del país, aún en las situaciones más perversas que tenga que sufrir, pero prefiere morirse de hambre en cualquier parte o tener que hacer trabajos de todo tipo a tener que volver a vivir una situación similar. Es muy duro, y todos estamos expuestos a vivir una situación de esta naturalidad”.

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SECUESTROS Y ESTAFAS

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Situación del país aumenta índices de estafa y extorsión ANA GABRIELA DÍAZ H. @AnaGDiazH / anagdiazh02@gmail.com

Zulia, Lara, Miranda y Carabobo son los estados con mayor cantidad de extorsiones y estafas durante el primer semestre del año

Quinto Día

La extorsión y la estafa son delitos que han tenido auge en el país desde principios del siglo XXI, y desde ese momento hasta la actualidad no solo ha ascendido el número de casos, también se ha perfeccionado el modus operandi por parte de los antisociales. Sergio González, quien fuera Comandante General del Cicpc, hoy jubilado, explicó las razones por las que estos delitos se mantienen, y las principales causas y consecuencias de que el gobierno nacional no haga nada para disminuir, o eliminar los casos de extorsión y estafa en Venezuela. “La extorsión tuvo y seguirá teniendo un incremento, en la medida que el gobierno continúe de brazos cruzados y no implemente los correctivos necesarios en las diferentes cárceles del país, pues es allí donde se generan todos los focos de extorsión; dentro de estos centros penitenciarios se planifican y ejecutan. El gobierno, con solo una medida que implemente, como es la colocación de bloqueadores para llamadas de celulares en centros de reclusión, disminuiría en todo el país en un 85% las extorsiones”, expresó González. Asimismo el especialista indicó: “Referente a las estafas, están teniendo un gran repunte en todo el país y nuevamente este acto delincuencial es atribuible al gobierno, por no dotar a los cuerpos policiales de los más sofisticados y modernos equipos de tecnología, ya que esta modalidad delictiva es realizada en su gran mayoría a través del internet; a través de un rastreo tecnológico o experticias técnicas es fácil poder llegar al servidor de origen, pero para ello se requiere, aparte del personal especializado, contar con una tecnología de punta”. De igual manera, González aseguró que la escasez del país hace que los casos de estafa sigan en ascenso. “En los últimos meses las estafas han aumentado, por un lado debido a las

necesidades del venezolano en la consecución de medicamentos, por poner un solo ejemplo y por otro lado a la insensatez de personas inescrupulosas, que se valen de esa necesidad para adjudicar u ofrecer un medicamento, un repuesto para vehículos o dólares, que al final terminan siendo una gran estafa”. Estados con mayor número de extorsiones y estafas Según el Informe de Delito Organizado del primer semestre de 2017 publicado por Paz Activa, ambos delitos se registraron en 17 de los 24 estados del país, pero el 72.8% de los casos se concentran solo en 5 de ellos. El estado Zulia encabeza la lista, con 23 casos computados; seguido por el estado Lara con 18, Miranda con 17, Aragua con 15 y finalmente Carabobo, con 10 casos de extorsión y estafa. El informe resalta que en el primer semestre del año se registraron cerca de 114 casos; 16 de los casos registrados refirieron vinculación de los perpetradores del crimen con organismos oficiales, específicamente de cuerpos de seguridad, dejado un saldo de funcionarios detenidos y/o imputados igual a 57. El general jubilado Sergio González asegura que actualmente repunta Distrito Capital con ambos delitos, seguido por Aragua, Táchira y Barinas. “Conocer con precisión es tarea bastante difícil, sobretodo porque el gobierno nacional desde hace años no aporta estadísticas, ni sobre este tipo de delitos, ni de ningún otro. Nosotros, y quienes nos dedicamos a estas actividades, nos valemos de algunos contactos internos que tenemos en cuerpos policiales, así como referencias periodísticas que vamos obteniendo, y por ello hemos podido establecer que en este sentido, el Distrito Capital puntea con el delito de extorsión, secuestro y estafa, entendiendo que Distrito Capital es lo que conocemos como la Gran Caracas, seguido por el estado Aragua, Táchira y Barinas; en este mismo orden”.

Claves y recomendaciones sobre la extorsión y la estafa

• No detenerse por mucho tiempo dentro de un vehículo; procurar que las despedidas se hagan en camino al lugar, y no cuando llegan al destino. • No detenerse en las adyacencias de las universidades para socializar. • No exhibir nuestras pertenencias en centros comerciales, restaurantes o lugares nocturnos. • Evitar tener vehículos lujosos o de gran opulencia. • No hacer alarde de la posición económica que se tiene. • Tratar de movilizarse en taxis, cuando se deba asistir a reuniones sociales nocturnas. • Evaluar el entorno, tanto de salida como de ingreso a nuestras residencias o lugares de trabajo y estudio. • No permanecer en los sitios de trabajo hasta altas horas de la noche. • Colocar vidrios polarizados en los vehículos. El Comandante General jubilado del Cicpc, Sergio González, recomendó: “Ante la extorsión y la estafa, lo que deben cuidar es la sensatez de las personas para no sucumbir ante las exigencias de los extorsionadores, ni ante las pretensiones de los estafadores; ambos casos se pueden evitar, ya que no existe un riesgo real hacia la víctima; pero sí es recomendable interponer la respectiva denuncia ante un cuerpo policial, para que se realice una investigación que permita determinar el foco, desde donde partió, dónde se está iniciando y así la víctima pueda recibir una correcta asesoría de cómo manejar el caso”.

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CIBERSEGURIDAD

L A V U L N E R A B I L I DA D C I B E R N É T I CA E N E L PA Í S

Convivir con el cracker “Entre 25 mil y 30 mil computadores están inseguros, y cualquier ciberdelincuente puede acceder a ellos; en esas cifras se encuentran empresas privadas, e instituciones del Estado”, explica el especialista Carlos Tudares OSWIN J. BARRIOS @oswinjoses

Quinto Día

8 mil 400 millones de dispositivos estarán conectados a internet para finales de 2017. Significa que una gran cantidad de datos se intercambiarán en el mundo a la velocidad de un chasquido de dedos, eso incluye información confidencial y privada (fotos, vídeos, estadísticas) al alcance de un click para los crackers, que ven en estas cifras una posibilidad de monetizar la revelación de este tipo de contenidos. Desde el momento en que el uso de internet se masificó, la cantidad de ciberdelitos se encuentra en ascenso. Sin embargo, los gobiernos tratan de blindarse para evitar ser blanco de los ciberdelincuentes o crackers, capaces de introducirse sin autorización en sistemas ajenos, con el fin de manipularlos, y quienes en un 95% de los casos se esconden en la deep web (internet profunda), donde es muy difícil que las autoridades puedan interceptarles. En Venezuela, el día lunes 31 de julio, luego de la elección a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), se perpetró un ataque informático a la página web del Consejo Nacional Electoral (CNE); el portal fue vulnerado por el grupo The Binary Guardians, afectando a otros sitios en la red con el dominio “.ve”, tanto gubernamentales como de instituciones privadas.

Según Carlos Tudares, director del Observatorio Venezolano de Delitos Informáticos (Ovedi), “la vulnerabilidad cibernética del país se debe a que la gran mayoría de las entidades del gobierno no trabajan con software original. A pesar de que a las instituciones del Estado se les recomendó trabajar con software libre, el 90% gestiona con versiones de Windows, por ejemplo XP, que está desactualizado. Incluso Microsoft no ofrece ningún tipo de soporte, ni apoyo para fragilidades de este tipo, porque está caduco”, reveló a Quinto Día. Con relación a las inversiones para robustecer la ciberseguridad, Tudares aseguró que “las cifras son un secreto, porque las instituciones del Estado no proveen esa información”; no obstante, afirmó que en Venezuela “son mínimas, y respecto al 2016 hasta la fecha se incrementaron los ataques entre un 12% y un 15%, pero no es oficial”. Para el director de la Red Venezolana de Derecho Informático (RVDI), “la forma más eficaz de advertir sobre estos ciberataques es financiar la instrucción de profesionales. Por ejemplo, el Observatorio Español de Delitos Informáticos (OEDI), al igual que Ovedi, prepara personal en el país donde opera, con la diferencia de que ellos sí trabajan conjuntamente con el Estado”.

El experto informó que en el Ovedi tienen un software capaz de verificar a diario el movimiento de vulnerabilidades en Venezuela, “y arrojó como resultado que un aproximado de entre 25 mil y 30 mil computadores están inseguros, y cualquier cracker puede acceder a ellos. En esas cifras se encuentran empresas privadas, e instituciones del Estado”. Según el Informe de Delito Organizado realizado por la asociación civil Paz Activa, “durante el primer trimestre del 2017 se reportaron cinco (5) delitos informáticos, alcanzando el número máximo de reportes en junio, mes en el que se registraron dos casos”. En el informe, tres de estos incidentes “se computaron por fraude electrónico y dos reportes por acceso indebido, o sabotaje a sistemas protegidos”. En cuanto al desglose de dichos sucesos, según el tipo de institución afectada, “todos aquellos casos de fraude electrónico se realizaron a través de portales web de instituciones bancarias privadas, mientras que los casos de acceso indebido o sabotaje a sistemas protegidos, se realizarían a través del sistema del Servicio Autónomo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime)”.

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De acuerdo al documento, “dos de los cinco reportes de delito informático refirieron vinculación de los implicados con organismos oficiales, siendo ambos perpetrados por funcionarios del Saime, acusados del otorgamiento de forma ilegal, a través del sistema electrónico de la institución, de documentos de identidad venezolanos a ciudadanos de nacionalidad siria y cubana. Valga destacar que dichos funcionarios serían imputados igualmente por corrupción, casos reseñados debidamente en el presente informe”, reza el documento. "Ddos" el más frecuente De acuerdo con Edgar Rincón, especialista en tecnología, el ataque más común en Venezuela es el "Ddos" (Denegación de Servicio Distribuida) y explica que para realizarlo “se necesita colocar miles de páginas con servidores robots a atacar un mismo sitio web, hacerle consultas, abrir y cerrarle continuamente, produciendo un gran flujo de información desde varios puntos de conexión hacia un solo destino, causando la caída del servicio en estas páginas”, detalló. Respecto a la banca electrónica, Rincón afirmó que el país cuenta con una de las más seguras del mundo, “lo cual reduce las probabilidades de usurpación de identidad, otorgándole al propio usuario

SE INCREMENTAN LOS RIESGOS

De 12% a 15% se incrementan los ataques digitales en Venezuela, respecto al 2016.

1999

año desde el cual no se actualiza la Ley Especial Contra Delitos Informáticos.

la responsabilidad de su seguridad, el cual, entre otras medidas de protección, debe tener un antivirus actualizado en el teléfono y computadora”, señaló. Delitos sin tipificar Para julio del 2001, el Estado venezolano promulgó la Ley Especial Contra Delitos Informáticos. En ese momento, Venezuela

era el único país de la región que tenía una legislación contra este tipo de crímenes. Para entonces no se tenía conocimiento de lo que implicaban esas infracciones porque recién, cuando se aprobó y entró en vigencia la Constitución de 1999, comenzó a generalizarse el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), por tanto, eran muy pocos los que tenían acceso. Pese a ello, “esta ley quedó antigua, porque actualmente existen delitos que no están tipificados en ella, además de tener errores jurídicos. Necesita una reformulación”, apuntó Tudares. En ese sentido, el artículo 24 de la referida ley establece que “toda persona que por cualquier medio involucre el uso de tecnologías de información, utilice a la persona o imagen de un niño, niña o adolescente con fines exhibicionistas o pornográficos, será penada con prisión de cuatro a ocho años y multa de cuatrocientas a ochocientas unidades tributarias”, pero no se menciona al que elabora el material, denuncia Tudares, al señalar que “la ley queda ambigua al no sancionar a las personas que con las cámaras filman, o toman estas fotografías”. A juicio de Tudares, “existen casos donde a las personas se les acusa de diversos delitos informáticos, cuando en realidad son inocentes. Por ejemplo, tienes wifi en tu casa

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y todo el mundo puede acceder, porque la red está abierta; yo soy tu vecino y me conecto a tu red para cometer delitos informáticos. ¿Por qué tienes que responder penalmente por eso?”, alertó el especialista. Recomendaciones de los expertos De acuerdo a los técnicos, “las empresas deben establecer controles internos, debido a que pueden vulnerar la seguridad de la compañía y ser blanco fácil de una intrusión, por no delimitar el uso de internet a su personal. Además se recomienda bloquear los puertos USB, para evitar que a través del pendrive se contamine la red, al igual que mantener auditoría constante, donde determine cuáles intrusos ingresan al computador. Si se tiene wifi, blindarlo con contraseñas hexadecimales (números y letras), además de integrar mayúsculas y minúsculas”. En caso de que las personas tengan niños y adolescentes, se aconseja activar la aplicación control parental, que evita el acceso a páginas de dudosa reputación. En referencia a los correos electrónicos, “se advierte no abrir mensajes de procedencia desconocida. Cabe destacar que las entidades bancarias no envían correos solicitando información personal”, aseguraron.

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LUIS CARLOS DÍAZ:

“Hay que exigir cuentas a los estados sobre nuestra data” OSWIN J. BARRIOS @oswinjoses

En cuanto al internet de las cosas, “habrá que tener más cuidado sobre más aparatos, porque en la medida que se tengan más artefactos conectados, habrá muchos frentes vulnerables; más rutas para violar la seguridad de la gente”, reveló el especialista

Quinto Día

Hoy por hoy cada interacción en internet, ya sea usando el teclado o al hacer clicks, genera un tráfico importante de riqueza digital, que cae en las manos de cinco grandes compañías: Google, Apple, Facebook, Amazon y Microsoft. La preocupación está cuando se corrobora lo que estas empresas saben de los usuarios: desde su destino de vacaciones, hasta su flamante embarazo, algo a lo que Luis Carlos Díaz, ciberactivista, no le da mucha importancia: “Dudaría mucho más de los Estados que de una empresa que ofrece un servicio, y a cambio le doy información, además la que yo quiera”. “Por ejemplo, el Estado venezolano tiene acceso a todo: tu dirección, cuáles beneficios recibes, cuantos familiares tienes, cuál es tu salario, por una bolsa de comida”, con relación a la data que recibe el gobierno sobre la población a través del Carnet de la Patria, “y que no rinde cuenta para qué la utilizan”, afirma. Díaz explicó que vería de forma distinta la data que se levanta a partir de servicios a la de comportamientos, “es decir, la gente no paga nada por usar Facebook, por lo tanto el producto eres tú, quien le genera plata a la compañía porque vende esa información cuando elabora patrones del usuario, etc., pero esa es la contraparte. Si no te gustan las condiciones, no lo uses más y listo. Esta datificación es distinta porque tú la escogiste. ¿Dónde están mis alertas? Cuando esa data la levantan de forma pasiva a través del rastro que vas dejando de tu comportamiento sin consultarte, por ejemplo, un organismo de inteligencia estatal puede que escuche tus llamadas, elabore patrones basados en tus registros, espíe cuáles son

los datos que consumes, sabe en qué estás gastando el dinero, porque tiene acceso al Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), puntos de venta, etc., todo esto sin que lo sepas. Eso no debería suceder”, alertó. En ese sentido, desestimó que en el contexto venezolano la gente sea más propensa a ser secuestrada, por publicar en sus redes sociales que estuvo en determinado lugar. “Lo descarto. En Venezuela secuestran a la gente porque es fácil, porque son funcionarios del Estado los que se encuentran en la industria del secuestro, y son ellos los que garantizan impunidad a quienes los cometen, no porque publicaste estar en un sitio específico”. Por otro lado, el especialista indicó que los secuestros derivados del seguimiento mediante las redes sociales, “se cometen a partir de la elaboración de patrones de usuarios. El hecho de que ponga ‘estoy en la radio’, no me vulnera porque es público que estoy allí, no es culpa de Facebook ni de Twitter, es el entorno, la manera en cómo está el mundo. Lo que ocurre es que la gente sí puede poner en peligro su seguridad si revela donde está en tiempo real, pero ¿cuánto vales tú para hacerte ese tipo de seguimiento? Al final, la gente no es tan atractiva en ese aspecto. Los que sí deberían de cuidarse son los empresarios y ministros, aquellos con un perfil más de riesgo”. Sobre la llegada del internet of things o internet de las cosas –las nuevas conexiones de internet a través de la cual los objetos se comunican entre sí–, Luis Carlos Díaz reveló que “habrá que tener más cuidado sobre más

aparatos, porque en la medida que se tengan más artefactos conectados, habrá muchos frentes vulnerables; más rutas para violar la seguridad de la gente. Significa entonces que junto al internet de las cosas deberán tener una capa de seguridad mucho más robusta, y a su vez, cada persona se convertirá en un usuario que va a generar mucha más data, mucho más contenido y la gran pregunta es, ¿quién va a procesar esos datos y qué se va hacer con eso? Al final se puede creer que puede ser irrelevante que alguien sepa a qué hora enciendo o apago un bombillo, pero si soy una autoridad que está tomando decisiones sobre consumo eléctrico puedo, sobre la base del comportamiento de la gente, planificar mejores políticas”. El experto aconsejó a los usuarios a utilizar las redes sociales “entendiendo lo que ocurre al usarlas, es decir, tener conciencia de lo que la herramienta hace contigo. Facebook es un sistema operativo de relaciones sociales, donde puedo entrar en contacto con todos mis amigos. Esto implica que tiene acceso a todas mis redes y a todo mi comportamiento con esas personas: ver el perfil de determinadas usuarios, etc. Tenemos que saber que la herramienta está al tanto de lo hacemos en ella. En ese orden de ideas, la gente debe estar consciente que Facebook vende tu perfil de usuario como un potencial público para publicidad, y no es malo que lo use para eso. Si la gente es consciente de lo que la herramienta hace con sus consumidores, puede tomar la decisión que quiera. Decisiones informadas” detalló.

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Virus "WannaCry": la punta del iceberg OSWIN J. BARRIOS @oswinjoses

“Una de cada dos empresas de la región ha sido objeto de malware en el último año, lo que ubica a los códigos maliciosos como la principal causa de incidentes en Latinoamérica”, se lee en el informe de ESET Latinoamérica

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Cuando un ciberataque llama

La seguridad informática cada vez toma más fuerza en un mundo conectado a nuestra información personal, esa que almacenamos en las aplicaciones o dispositivos móviles, y que nos ponen ojo avizor cuando se pasa revista a los ataques informáticos perpetrados en 2017, pues en el papel “ha seguido la progresión que venimos observando desde hace ya un tiempo, con un mayor número de amenazas y ataques detectados con respecto a años anteriores”, dice Josep Albors, responsable de investigación y concienciación de ESET España. El viernes 12 de mayo se registró un enorme ciberataque bautizado como "Wannacry" por sus creadores, que se expandió con una velocidad y una profusión pocas veces antes vista, dejando 200 mil víctimas en más de 150 países. “Se trató de un virus de tipo ransomware —que secuestra los datos almacenados en los sistemas y pide un rescate para liberar la información—, esto permitió que un tercero, en el entorno Windows, ejecutara remotamente un código y así tener control sobre el equipo”, explicó el embajador de seguridad y coordinador en jefe de Eleven Paths, Guayaquil, Ecuador, Carlos Ávila. De acuerdo con expertos, los ciberdelincuentes utilizaron herramientas robadas en agosto de 2016 a la NSA, la agencia de inteligencia encargada de la ciberdefensa en Estados Unidos. Este ataque informático penetró las conexiones y puertos abiertos, donde se comparten ficheros. Un ataque modelo para golpear a redes de ordenadores conectados entre sí, como compañías y oficinas gubernamentales. A falta de creatividad… "Wannacry" Pese a que el virus informático especializado en propagarse por la web (un gusano) fue diseñado por la misma NSA, la segunda parte de "Wannacry" carece de complejidad, pues solo contiene un programa básico que encripta los datos del ordenador, “una variante poco elaborada”, según los especialistas. Con base a las cifras que dispone Albors,

se expresa que “la mayoría de ataques son muy básicos y consisten en variedades de ransomware poco elaborados, y muchos casos de phishing o suplantación de identidad”. Sin embargo, es un hecho que el virus "Wannacry" afectó a los equipos de la sede de Telefónica en Madrid, España; al sistema de salud británico, entre otras empresas como: Beiersdorf AG, encargada de producir la crema Nivea. Estas registraron pérdidas entre los $41 millones y $117 millones, respectivamente. Las compañías argumentaron que el déficit de actividad productiva que tuvieron fue gracias a la inhabilitación de sus servidores, y de su maquinaria. “No obstante, tras 'Wannacry' llegó 'Notpetya' y después 'Bad Rabbit', con lo que se demuestra la necesidad de las empresas de estar bien preparadas para luchar contra estos ciberataques masivos”, expresó Josep Albors, quien cree que los ataques digitales han llegado para quedarse. En el otro extremo, los responsables de "Wannacry" se hicieron con la suma de 140 mil dólares, esto debido a la extorsión a la que el ransomware somete a sus víctimas y a cambio de la liberación piden un pago en bitcoins, comprendido en un rango equivalente entre los $300 y $600. "Notpetya" y "Bad Rabbit" actúan de forma similar, con la diferencia de que el primero no cifra archivos PNG, y con "Bad Rabbit" se necesita que el usuario descargue una versión infectada de Adobe Flash. Presente en Latinoamérica Según el informe dado a conocer por ESET Latinoamérica a Quinto Día, “una de cada dos empresas de la región ha sido objeto de malware en el último año, lo que ubica a los códigos maliciosos como la principal causa de incidentes en Latinoamérica. Mientras que 69% de empresas sufrieron algún tipo de incidente relacionado con seguridad informática y de manera específica, el 49% padeció algún caso de software malicioso”.

La mañana del 12 de mayo pintaba para ser tranquila, como las otras veraniegas que caracterizaban en esa época del año a la ciudad de Madrid, España. De pronto el vértigo se apoderó de la oficina: “Los teléfonos no dejaban de sonar, el gobierno nos preguntaba qué estaba pasando, las empresas afectadas nos pedían ayuda. Ese día pusimos a trabajar hasta a los que estaban de vacaciones”. Declaró a El País Luis Jiménez Muñoz, subdirector general del Centro Criptológico Nacional (CCN), organismo adscrito al Centro Nacional de Inteligencia (CNI), institución dedicada a la ciberdefensa, en España. Ese día, cuando varias empresas españolas padecieron el rigor de un ciberataque, el CCN vivió una maratoniana jornada para evitar que el virus dejara incomunicada a España. Que es lo que pudo haber ocurrido de no contar con un sistema de ciberdefensa como el que dirige Jiménez. “Pusimos a funcionar toda la capacidad”. El reporte se basó en datos obtenidos de una encuesta realizada a más de 4 mil profesionales de distintas organizaciones. En el caso específico de Venezuela, el 46.1% de las empresas resultaron infectadas con malware. El dato invita a la pregunta: ¿qué están haciendo los gobiernos para robustecer su seguridad digital? Sobre este tópico, Ávila fue tajante, “en ciertas regiones poco y en otras muy poco, los que están a la vanguardia son: Europa, Estados Unidos y Asia. En Latinoamérica nos falta más apoyo” En esa línea se expresó Josep Albors desde España, y que a su juico “depende mucho del gobierno que se analice, pero en líneas generales se está fomentando la colaboración público-privada para obtener nuevas fuentes de inteligencia, que permita una mayor detección de amenazas”. La hoja de ruta parece estar clara. Si no adoptamos las medidas necesarias, los ataques digitales no dejarán de aumentar, afectando nuestra vida diaria y a las empresas, que terminaran convirtiéndose en presa fácil de los ciberdelincuentes, a menos que se haga algo realmente efectivo a mediano plazo.

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