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¡Elegir un juguete no es un juego! Ravensburger lo sabe bien y garantiza productos no sólo de calidad, sino seguros bajo todos los puntos de vista. De hecho están desarrollados con el máximo cuidado y periódicamente sometidos a rígidos controles, tanto por parte de la casa madre como por parte de un instituto independiente – la “LGA”- considerado uno de los más exigentes del mundo. Todos nuestros productos, desde los puzzles a los juegos educativos , desde los creativos a los puzzlesball, están confeccionados en Ravensburger Spieleverlag y se adecuan a las normas europeas EN 71/1 -9 sobre la seguridad de los juguetes, al Certificado EMC (o bien de compatibilidad electromagnética) según las normas VDE y a la norma DIN 50088 (sobre la seguridad eléctrica). Ravensburger realiza internamente (en sus instalaciones de Alemania y República Checa) más del 85 % de sus propios productos, mientras que solamente el 10% viene de proveedores chinos de comprobada fiabilidad, que respetan los estándares de seguridad establecidos por la ICTI (International Council of Toy Industries). En especial por lo que se refiere al suministro exterior, los estándares del Código ICTI garantizan la calidad de los productos y también un ambiente de trabajo sano y seguro para los trabajadores. Para dar una idea de la atención que prestamos en la realización de nuestros juegos, se puede poner el ejemplo de los colores de impresión utilizados para cualquier tipología de puzzles, sea el destinado a niños o a adultos: se trata de hecho de costosísimos colores alimentarios, certificados para evitar cualquier riesgo de contaminación de sustancias potencialmente perjudiciales. De la misma manera están tratados también todos los detalles de cada juego, como los dados y las fichas, realizados preferiblemente en madera u otros materiales naturales y donde el PVC ha sido retirado ya desde hace décadas, incluso de la película de celofán que envuelve los productos. En definitiva, ¡para Ravensburger es fundamental la seguridad de vuestra diversión!


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