NOTA: Este texto es propiedad intelectual del autor. Se permite citarlo mencionando la fuente.
LUNES DEL CERRO, TRADICIÓN O NEGOCIO Por Antonio A. Morales Sánchez
En julio de 2015 publiqué un artículo que rememoraba las fiestas de los Lunes del Cerro en la Ciudad de Oaxaca y que denominé En Defensa del Daninayaaloani como protesta al crimen ecológico que se pretendió hacer a este nuestro Cerro del Fortín y que es parte de la cordillera que le brinda vida a Oaxaca como lo es el Cerro de San Felipe, situado al norte de nuestra ciudad en su parte alta, lugar en donde se regula el clima y a la vez convergen los tres lobulos del Valle de Oaxaca, el cual tiene un significado simbólico para nuestra ciudad, ya que es el fondo natural del paisaje que es inspiración de todo oaxaqueño o visitante de ésta nuestra Verde Antequera. Patrimonio natural, cultural e histórico de la Ciudad de Oaxaca, decretado como parque nacional “Benito Juárez” por el C. Gral. Lázaro Cardenas del Río, Presidente de la República Mexicana el 30 de diciembre de 1937, cubriendo una superficie de 2,737 hectareas y del que está pendiente la realización de un ”Analisis tridimensional geológico con su respectiva evaluación de impacto ambiental por tener en este momento en sus cuatro puntos cardinales afectaciones negativas y severas de diversas indoles”. Testigo histórico, escenario, pulmón citadino… eso y más hace que el Cerro del Fortín sea fundamental para la Ciudad de Oaxaca y sus alrededores, pero no ha bastado para que lo tratemos bien: El desordenado crecimiento urbano y diversas obras públicas y privadas lo han afectado severamente. La lista es larga, se trata de afrentas a nuestro patrimonio natural y cultural que se aprecian muy bien desde el aire, el Cerro del Fortín es fragil y de gran importancia ecológica, histórica y cultural, la simple velaria del auditorio, rompe yá con la de por sí afectada armonía paisajistica, arquitectónica y cultural de la zona, al grado de poner en riesgo la declaratoria de sitio de Patrimonio Mundial del Centro Histórico de la Ciudad de Oaxaca porque no se ha cumplido con la ley, porque todo se ha hecho improvisado, opaco y tramposamente,
contraviniendo una ley estatal: El Plan de Ordenamiento de la Zona Conurbada de la Ciudad de Oaxaca, publicada en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado el 12 de noviembre de 1994, amen de que existe un decreto vigente de area natural protegida federal (mencionado al principio de ésta participación), así como el programa del manejo del Parque Estatal Cerro del Fortín (publicado en el Periódico Oficial del Estado el 8 de mayo de 2010). No obstante lo anterior el Municipio de Oaxaca de Juárez, otorgó permisos de construcción y derribo de arbolado, violando con ésta ilegalidad las disposiciones del Plan Parcial de Desarrollo vigente desde 1997 y el Reglamento del Centro Histórico (en al menos 17 artículos), para construír un estacionamiento en lo que fuera el Parque de la Amistad, infringiendo disposiciones diversas de la reglamentación estatal y federal de obra pública y transparencia. Ahora bien, dejemos el preámbulo y vayamos a la tradición, a los Lunes del Cerro, a la fiesta de la unidad con trascendencia, a ese escenario ubicado en tierra sagrada en el que desde 1974, este recinto recibe a la gran fiesta oaxaqueña, en la que año con año miles de personas disfrutan los bailes, danzas, sones y jarabes de las ocho regiones del estado. No es casualidad que el auditorio se halla ubicado en este espacio, la diferencia que existe en lo que se hacía antes y ahora es de lo sagrado a lo comercial. Nuestros antepasados descubrieron que en una de las faldas del Cerro del Fortín se congregaban los Cuatro Vientos que provenían del norte, sur, este y oeste, por lo que establecieron en este lugar sus rituales con que rendían tributo a sus dioses. Con éste origen filosófico podemos decir que los zapotecas del valle descubrieron que las montañas tiene “Conciencia del Ser” y que poseen un potencial energético en sus salientes montañosas de la cordillera. En lengua náhuatl, Huaxyacac metafóricamente significa “Cerro nariz de la sierra poblada por huajes”, toda vez que el cerro se desprende de la sierra y se adentra en el valle. Yaca, significa nariz, es por esto que el Cerro del Fortín es la nariz energética de la sierra norte, el lugar de mayor potencial energético de la sierra que entra en contacto con los seres humanos. Por este motivo el Cerro del Fortín es un lugar sagrado y de contacto entre lo humano y lo divino a través de la energía de la madre tierra. Esta es la razón por la que siglos antes de la llegada de los mexicas, los pueblos del valle veneraban este cerro tutelar que los protegía, en su caso era doble su veneración por ser la “nariz de la sierra” y por ser el lugar del culto milenario a Tepeihuitl (señor de la lluvia y las montañas) que se festejaba en el décimo tercer mes de su calendario ritual. El agua y las montañas están totalmente asociadas a las manifestaciones de lo inconmensurable, como lo llamaban nuestros antepasados “aquel por quien vivímos”.
Razón por la cual en la parte baja del Cerro del Fortín existía un lugar sagrado muy venerado por todos los habitantes de los valles, era una pequeña cueva que en su interior tenía una enorme roca de la cual manaba agua cristalina que utilizaban para el rito y para beber. Los castellanos mandaron destruir el sagrado teocalli para construir una capilla a la Virgen de la Soledad “causalmente” patrona de la ciudad de Oaxaca. Más tarde en el siglo XVII se construyó su templo y que hoy conocemos como la basílica, pero “curiosamente” se respetó la piedra sagrada que le da origen y que se encuentra en el costado derecho de la entrada principal. Durante la colonia a travez del sincretismo cultural el pueblo indígena y mestizo mantuvo la tradición de “subir al cerro” y realizar una “agazapada” visita al señor Tepeihuitl a travez de la Virgen del Monte Carmelo para pedir su protección y agua para sus cosechas. Por estas razones históricas, el Cerro del Fortín y la Basílica de la Soledad forman una unidad cultural de enorme dimensión sagrada que representa los cimientos más antiguos y profundos de nuestra memoria histórica y de identidad cultural del pueblo oaxaqueño. Un trasunto de antaño nos habla de las festividades de los Lunes del Cerro, remembranza de la “Gran Fiesta de los Señores” de nuestros antepasadosen una expresión espontanea de costumbres ancestrales que se manifiestan en la antigua “Rotonda de la Azucena” (hoy majestuoso estadio) por grupos autóctonos que portan su autentica y tradicional vestimenta, tan variada como nuestro folklore y que vienen a ofrendarnos en sus bailes el sentimiento hondo y profundo de sus pueblos, significándose en Guelaguetza. Trasunto de solemnidades de antaño y valiosas reminiscencias históricas que son nuestro legado y por el que sabemos y podemos inferir de ellas las ceremonias, regocijos y esplendorosas fiestas religiosas dedicadas a Pitao Cozobi (Dios zapoteco de la agricultura, las mieses y del maíz), que nos dicen: Que en los años de 1501 y 1502, el Rey Azteca Ahuizotl extendió su poderío hasta tierras zapotecas, donde uno de tantos destacamentos acampó en las faldas de una eminencia al norte de la ciudad a la que los zapotecas llamaban Tani Lao Daninayaaloani (Cerro de la Bella Vista) en el que decidieron los guerreros aztecas formar un centro de población y el que por estar densamente cubierto de huajes, dio origen al nombre de Huaxyacac, siendo así como se convirtió en residencia mexica. Cosijoeza, rey zapoteca con asiento en Zaachila, ofreció la mayor resistencia a la política imperialista del señor de Anahuac. Su bodacon la princesa azteca Coyolicatzin, hija de Moctezuma II, dio fin a las hostilidades. A partir de esa época las deidades de la mitología azteca, fueron veneradas en tierras en las que se honraba a Cocijo (Dios de la lluvia), PitaoCozobi (Dios de la agricultura, las mieses y del maíz), Gochicha, CoquiPezelao y otros más de la mitología zapoteca.
El alimento principal de los naturales era y sigue siendo el maíz y ante el temor de verse privados de tan necesario grano, dedicaron dos diosas más a las que llamaron Centeotlcihuatl y Xilonen, protegiendo la primera el cultivo y la segunda amparaba las primicias de las milpas, era la deidad del maíz tierno, ambas advocaciones de Centeotl. Vemos pues que al igual que los pueblos zapotecos, el mexica también honraba a una deidad, Centeotl, a quien tributaban grandes fiestas durante el octavo y noveno mes de su calendario, que computadas estas fiestas, coinciden dentro de las fechas de nuestro actual calendario del 29 de junio al 20 de juliopara las fiestas de la Diosa Centeotl y Xilonen, correspondiendo al tiempo en que actualmente se celebran nuestros Lunes del Cerro, fiesta que se amalgama de los mexicanos a la de los zapotecas y mixtecos, haciendo permanecer vivas sus costumbres y tributos a sus númenes. Nos dicen las crónicas que veinte días antes del mes Hueytecuihuitl, que quiere decir la “Gran Fiesta de los Señores”, dedicada a la diosa del maíz tierno, Xilonen, que no era sino otro nombre o advocación de Chicomecoatl (Diosa de los mantenimientos) y de Cihuacoatl (Diosa de la tierra), cuya fiesta también corresponde al mes Hueytecuihuitl en que escogían una esclava, hermosa doncella que presidiría estas fiestas religiosas representando a la diosa bajo otra advocación a la que llamaban Centeotlcihuatl, la cual era ataviada con los arreos blancos de Cihuacoatl (Diosa de la Tierra) y ricas mantas azules simbolizando el agua, labradas con diversos colores, imitando a las flores y mazorcas de maíz como símbolo de la agricultura. De esta manera se colocaba en unas andas, la cual era cargada por cuatro mancebos que traíanle de boda en boda y de festín en festín, procurando que estuviera siempre alegre, dándole a beber pulque y ciertas bebidas místicas. Cuatro días antes de las fiestas religiosas, los sacerdotes habían alimentado el fuego divino con madera de encino, de modo que llegando el día fijado el bracero estuviera encendido y caliente como una hornaza. Un día antes llevaban a la esclava que había de morir a honra de la Diosa Xilonen, colocándola en medio de la gran plaza delante de la puerta principal en donde las mujeres sacerdotisas que servían en el Cu, que se llamaban Cihuatlamacaz que hacían areito en el patio mismo del Cu verificando danzas y cantando loores con tanta reverencia como si fuese la diosa misma. Para esto estaban ya separados cuatro prisioneros de guerra, cuatro sacerdotes tomaban a uno de aquellos por manos y pies, levantándolo en peso, cuatro veces le daban sus enviones en el aire para aventarlo al bracero, sacándolo antes de que se acabase de morir y sacrificándolo por el método ordinario, tendiendo el cuerpo delante de la esclava representante de la diosa,
haciendo lo mismo con los otros tres prisioneros, tendiendo los cuerpos juntos, unidos a lo que llamaban “estrado de prisioneros”. Así, cantando y bailando velaban toda la noche que precede al día en que debía ser sacrificada y amaneciendo, todos los nobles y hombres de guerra en igual forma hacían areito en el mismo patio y con ellos bailaba también quien debía morir y con otras mujeres aderezadas como ella. Los hombres iban por delante y las mujeres detrás de ellos. Después todos así bailando llegaban al Cu, subían por las gradas y llegando a la cúspide tomabanle uno a cuestas, espalda con espalda y estando así tendida degollabanle recogiendo su sangre en un lebrillo, sacándole después el corazón que lo ofrecían al sol que aparecía en el oriente en esos momentos. Todavía agrega Chavero, que concluida la ceremonia de los sacerdotes, seguía la de los guerreros, quienes salían muy aderezados con galones de flores en las manos, cuello y cabeza y justamente con ellos sus mujeres y mancebos, con el cabello suelto y cortado por delante y encima de los oídos y sobre él guirnaldas de flor amarilla llamada cempaxuchitl, vestidos lujosamente, los brazos cubiertos de vistosas plumas con zarcillas de oro y flores en sus manos. Y así bailaban todo el día entretegidos con los guerreros con gran concierto y mesura. Acabado el baile tomaban ellas sus guirnaldas y los collares de los hombres y subían a ofrecerlas todas al Dios Huitzilopochtli, llamando a esta ceremonia Xochipaina o Xachicaloquia (ofrecimiento de flores). “…entonces los mancebos del Calmecac (colegio de nobles) se lanzaban a porfía a escalar el templo para tomar las flores y con esta contienda y regocijo concluía la fiesta, proclamándose vencedores a los cuatro primeros que tomaban estas” Aquí en Oaxaca se afirma que todos los residentes mexicas y los pueblos aledaños, se reunían el Trece Tecpal del Hueytecuihuitl, día correspondiente al 16 de julio de nuestro calendario para presenciar la elección de la doncella que sería sacrificada diez días después en aras de Centeotl. La doncella era escogida durante la tarde y una vez hecha la elección, los nobles y guerreros principales volvían al Cu que estaba ubicado en el mismo sitio en que hoy se levanta el templo del Carmen Alto, para hacer la oblación del xilotl a la deidad del maíz. Centeotlcihuatl era venerada por los aztecas en esta “Gran Fiesta de los Señores” en que los ricos compartían sus viandas con los pobres según testimonio de los historiadores. Se dice que esos ritos se practicaban en la gran Tenochtitlan, pero no existe prueba en contrario que demuestren que esos ceremoniales no se hayan efectuado en tierras zapotecas por los mexicas residentes en ellas, puesto que llevaron su religión, su lengua y costumbres como manifestaciones de cultura a los lugares a los que se asentaron.
Así pues, es probable que el cerro de Chapultepec fuera sustituido por el Tani Lao Daninayaaloani (hoy Cerro del Fortín) y el templo de Tezcatlipoca por el teocalli que más tarde fue derruido por los misioneros católicos para eregir en su lugar en 1679, la Hermita de la Santa Vera Cruz y que después se convertiría en el Templo del Carmen Alto y en ocasión de la erección de éste, creyeron oportuno organizar una mascarada en la que la “Tarasca”fuera representada por el pueblo, siendo así como la muchedumbre despues de haber practicado la liturgia cristiana en honor de la Virgen del Carmen el día 16 de julio, salían de la casa cristiana y se dirigía hacia el “Petatillo”con estruendoso júbilo. Desde entonces la mascarada de la tarasca y las procesiones dedicadas a la Virgen del Carmen, comenzaron a ser una fiesta importante a la cual asistía el pueblo de Oaxaca. Por los años de 1740 -1741 los destinos eclesiasticos de Oaxaca estaban en manos del Obispo Tomás Montaño y Aragón, personaje al que había causado repulsión la extraordinaria mascarada que exhibía el pueblo en aquellos días. Sobre este asunto nos indica un manuscrito inédito que: “…no cuadrando esta práctica al Señor Obispo Tomás Montaño y Aragón, al espanto lo sustituyó con unas esculturas de tamaños descomunales que representaban varias razas humanas a las que se les dio el nombre de “Gigantes”…”. El pueblo de Oaxaca venía disfrutando, aunque ya transformada de aquella preciosa y antiquísima costumbre iniciada primeramente por nuestros pueblos mixtecos y zapotecos y posteriormente por los mexicas, para más tarde amalgamarlas con las procesiones y mascaradas traídas por los castellanos; hasta que en 1882 quedaron suprimidos los gigantes, último reducto de aquella sorprendente mascarada. No obstante a ello, la costumbre de ir al Cerro del Fortín desde el primer lunes, despues de haber conmemorado la festividad religiosa de la Virgen del Carmen y despues de celebrar su “octava” siguieron verificandose estas fiestas ya que estaban muy arraigadas dentro del pueblo, a partir de esa fecha empezaron a designarlas como los Lunes del Cerro. Los paseantes se concretaban por la mañana, a llevar platillos típicos para almorzar y comer y por la tarde, disfrutaban de las esquisitas nieves de limón, tuna y la de “sorbete”, así como de las golosinas: Gollorías, mostachones, gendarmes, charamuscas, mamones y otros dulces de aquella época. No podían faltar los puestos improvisados de frutas que los expendedores ofrecían a gritos. Fue por los años de 1928 – 1930 cuando se intentaron algunos proyectos con el propósito de recordar aquellas fiestas a Xilonen que año con año fueran celebradas entre los pueblos precolombinos de Oaxaca, lo mejor de aquel intento fue la representación de la Danza de la Pluma, que con sus pasos y movimientos y el fingir de la música, hacían dentro de una solemnidad ritual, la gesta de la conquista, representando el atavismo de aquellas ceremonias idolatras.
Estos intentos fueron aprovechados en 1932 cuando por aquellos días se conmemoraba en Oaxaca el Cuarto Centenario de su elevación a rango de Ciudad que le había concedido el Emperador Carlos V, para tal efecto se convocaron a personas conocedoras de los asuntos folklóricos de nuestros pueblos, con el objeto de elaborar un programa especial en el cual se rindiese homenaje a nuestra Ciudad, representando en este a las diferentes Regiones del Estado. Este homenaje racial fue celebrado en el Cerro del Fortín en el que desfilaron como en épocas pretéritas las vírgenes impúberes, cuyos movimientos rítmicos en su andar y al compás de las estrindentes chirimías y tambores, las hacían imponentes junto a la escolta de los guerreros de Cosijoeza y Ahuizotl. En el decurso del tiempo a las fiestas de los Lunes del Cerro se le adicionaron unos números muy atractivos a su programa, tales como los llamados “Palos Encebados” y la exhibición de bailes y danzas que se practican dentro de nuestros pueblos oaxaqueños. Y así, hasta el presente, todo el pueblo de Oaxaca acude a ese lugar de gran tradición en las fechas que actualmente llamamos Lunes del Cerro y su Octava, donde tiene especial realce el espectáculo conocido como La Guelaguetza. Sin embargo, este cerro, al cual nuestros ancestros llamaron DANINAYAALOANI (Cerro de la Bella Vista) y que ha sido escenario durante tantos años de estas tradicionales fiestas, había venido presentando serios problemas para su atención y recepción del pueblo oaxaqueño y de los visitantes que llegan para esas fechas a este Nueva Antequera, por lo que compenetrado de la necesidad de que Oaxaca contara con un Auditorio eminentemente funcional y digno de su señorío, el señor Presidente de la República Lic. Luis Echeverría Álvarez dio instrucciones inmediatas para que se construyera un Auditorio que siguiendo los trazos generales del Teatro Griego y se pudiera en la tradicional”Rotonda de la Azucena”mantener y preservar esta gran fiesta oaxaqueña y al mismo tiempo dotar al pueblo de Oaxaca de un sitio de reunión popular. Al verse atendida de inmediato la solicitud que ante el propio Presidente de la República realizara por promoción del Gobierno del Estado el Secretario de Educación Pública Ingeniero Víctor Bravo Ahúja,empezandose a construir este inmenso recinto que domina la Ciudad de Oaxaca, con una panorámica extraordinaria y que alberga un total de 11,212 espectadores comodamente sentados, con un escenario de usos múltiples y una zona de estacionamiento estrictamente funcional. Siendo inaugurado este Auditorio el día 23 de noviembre de 1974, lugar en donde la música y la danza siguen siendo la tónica del alma de nuestros pueblos que se deposita en forma de Guelaguetza, ofreciendola al pueblo de Oaxaca, receptáculo por excelencia de nuestra herencia folklórica.
¿COSTO Ó BENEFICIO?
En los Lunes del Cerro el espectáculo de la Guelaguetza cada vez es más costoso y pese a ello, se agotan los boletos de acceso a la misma. La respuesta es de que esto es detonante de crecimiento económico para la ciudad. Este verano de 2016 Oaxaca recibirá a miles de visitantes internacionales y nacionales y se tendrá también una audiencia televisiva de miles de personas. Por lo que se estima un impacto económico positivo que es por arriba del real, este evento pone a nuestra ciudad, estado y país en el mapa y la explicación del éxito de las festividades de julio en Oaxaca se debe a que es una (gema oculta) por ser Oaxaca un lugar altamente atractivo para los turistas nacionales y extranjeros. La Secretaría de Turismo y Desarrollo Económico, a través de su Dirección de Promoción Turística tres meses antes de las festividades de los Lunes del Cerro presenta su proyecto del evento en sus respectivas fechas al Comité Organizador de estas festividades en el cual el Gobernador y el Presidente Municipal son los Presidentes Honorarios, el Presidente Ejecutivo es el Secretario General del Despacho, Coordinador General el Director de Desarrollo Económico, Secretario Ejecutivo el Director de Promoción Turística y el Tesorero el Secretario de Finanzas,existiendo asesores como el Oficial Mayor del Gobierno del Estado, el Director de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, el Director de Cultura, el Director de Comunicación Social, el Director de Seguridad Pública y Transito, el Director de la Casa de la Cultura y otras personalidades ligadas a este evento, así como tambien la creación de varias comisiones con funciones específicas. Este proyecto incluye los programas del primer y segundo Lunes del Cerro, presupuesto de los mismos, así como de los eventos especiales. Las invitaciones a las distintas delegaciones se hacen de conformidad con el Comité Técnico a efecto deformalizarsuparticipación, este se encarga en términos generales de las reglas a seguir por las Delegaciones. La Comisión Técnica de Supervisión Artística tiene como finalidad la de concurrir personalmente o mediante enviados especiales a los lugares de origen de las delegaciones para autentificar sus bailes y sus integrantes. Así como considerar bajo los anteriores conceptos a otras delegaciones a efecto de integrarlas a cualquiera de las guelaguetzas que se presentan. Estos deberán entregar a la Secretaría
Ejecutiva su proposición de delegaciones, a quienes se debe invitar o confirmar su participación. La Comisión de Evaluación y Control del Programa tiene como finalidad ordenar la participación de las delegaciones bajo un criterio artístico, costumbrista y con carácter de espectáculo, determinar el tiempo y forma de actuación de cada grupo o delegación, aportar las indicaciones, opiniones e ideas para mejorar el evento, incluyendo sus instalaciones y presentar proposiciones si existieran. La transportación de las delegaciones foránea y urbana, número de vehículos es responsabilidad de la Dirección de Transito quienes transportan a las delegaciones de su lugar de origen a la Ciudad de Oaxaca, a sus hoteles y viceversa, la transportación urbana en la conducción de las delegaciones dentro de la ciudad a ensayos, presentaciones, etc. Los jefes de de las delegaciones , son generalmente los Presidentes Municipales o personas que presiden los grupos folklóricos y son responsables de ellos. Su nombramiento es suscrito por el Secretario General del Despacho y el Presidente del Comité Organizador. Los Jefes de Atención y Recepción son designados por la ComisiónTécnica de Supervisión Artística, son personas que por tradición atienden perfectamente a la delegación que les corresponde. El hospedaje y la alimentación de las delegaciones es para más de 900 personas en promedio durante tres días, estancia promedio en hoteles de la ciudad o en casa de paisanos a solicitud de la autoridad municipal, proporcionandoles el correspondiente apoyo economico. De un total de 2,399 espacios del Palco “A” se ponen a la venta 1,799 boletos con un costo de $ 1,050.00 cada uno, generando un ingreso de $ 1´888,950.00, siendo sin costo 630 que se destinan a las delegaciones asistentes en las Secciones 1 y 8. En el Palco “B” son 2,693 asientos que se venden a $ 850.00 por persona, la diferencia de 380 corresponden a la sección cuatro para nuestras autoridades e invitados especiales, generando ingresos de $1´966,050 los 2,313 restantes. Los Palcos “C” y “D” tienen una capacidad de 6,193 personas y son sin costo alguno, que sumados a los 1,010 espacios de las delegaciones y de los invitados especiales hacen un total de 7,203 lugares sin costo. Por lo anterior los ingresos del primer lunes serán de$ 3´855,000.00 en la presentación matutina y un costo similar por la vespertina, generando un ingreso de $7´710,000.00 el primer Lunes del Cerro que sumados a los ingresos de la “Octava”el segundo lunes, la captación por éste evento sería de $ 15´420,000.00 en esta 84 edición de la Guelaguetza o Fiestas de Julio en Oaxaca como también le llaman. Sin embargo esto no alcanza para cubrir
los costos de estas fiestas, aun cuando la Sectur presenta un presupuesto, éste siempre se rebasa. Anteriormente en el segundo Lunes del Cerro, únicamente se vendía el 60% del aforo total del auditorio. Hoy las expectativas para 2016 en sus dos presentaciones son excelentes, ya que al iniciarse la venta de boletos, solamente el primer día fueron vendidos 3,500 espacios. La venta de boletos y control de ingresos y egresos está a cargo de la Secretaría de Finanzas quien lleva el control de los depósitos bancarios y gastos que se tramitan con la autorización de la Secretaría de Turismo quien también maneja un fondo exclusivo para el inicio de las festividades en calidad de préstamo. En este renglón la Secretaría de Turismo remite con antelación información sobre fechas, lugares, eventos y costos a las direcciones de turismo de los estados, coordinaciones de la secretaría del mismo ramo, asociaciones de hoteles y moteles de la República Mexicana, representaciones del Consejo Nacional de Turismo en México y en el Extranjero, agencias de viajes locales y foraneas, teniendo siempre el contacto con la Secretaría de Turismo Nacional para la obtención del poster institucional que proporciona y que es distribuido por la misma secretaría a todas sus oficinas de coordinación en la República Mexicana y el extranjero. Concesiones y considerandos… Con la finalidad de que el turismo que nos visita en esta temporada permanezca más tiempo con el consiguiente beneficio económico para la ciudad, existen eventos programados por dependencias de gobierno y que deben coordinar con la Secretaría de Finanzas, Desarrollo Económico, Cultura y otros. Estos eventos eminentemente culturales, deportivos y folklóricos se realizan con cargo al presupuesto de cada dependencia organizadora o bien con presupuesto especial. Con los programas parciales de cada dependencia se integra uno general que tiene amplia difusión en diarios y revistas, radio y televisón, murales e información turística. Existen eventos especiales como los “convites” folklóricos que son con la participación de las delegaciones de los Valles Centrales que se realizan los viernes y sabados previos al espectáculo de la Guelaguetza, mientras que los desfiles de las ocho delegaciones regionales que participan en este evento son los sabados tambien previos a la festividad. Otros de acceso libre, tales como el Concurso de la Diosa Centeotl, este concurso regional consiste en que las delegaciones que asisten a los Lunes del Cerro y su Guelaguetza inscriban a una candidata seleccionada dentro de las integrantes de su región y delegación, quien previamente es preparada por sus autoridades para responder verazmente a las preguntas
del Jurado Calificador sobre su vestuario, baile o danza que represente, costumbres, leyendas, tradiciones y aspectos generales de su lugar de origen. Este evento se lleva a cabo el domingo previo al primer Lunes del Cerro y el fallo del jurado se da a conocer el mismo día, al término del evento. Otro es el Concierto de Bandas Regionales que acompañan a las delegaciones en su presentación a la Guelaguetza tienen a su cargo las audiciones los domingos previos al evento. Se acostumbra esta intervención en reconocimiento a la calidad artística de las bandas musicales del interior del estado, con lo que se aligera el trabajo de la Banda de Música del Estado, quien deberá hacerse cargo de los ensayos con las delegaciones que lo requieran. A estas audiciones se les da la mayor difusión posible en los diferentes medios y con programas de mano donde se hace una breve historia de la banda en cuestión y del programa a desarrollar. Un evento que ya no se presenta es Bani Stui Gulal, este espectáculo se ofrecía gratuitamente en la Plaza de la Danza el domingo previo a las guelaguetzas, representaba la historia del Lunes del Cerro atravez del tiempo en sus cuatro épocas: La prehispánica, bailes y danzas anteriores a la conquista, que culminaba con un sacrificio humano, la colonial: Donde presentaban las fiestas pagano-religiosas, la del México independiente: Donde presentaban una fiesta familiar en el cerro y la contemporanea: En la que se hacía un canto a Oaxaca, era un espectáculo de luz y sonido. Al finalizar este evento se quemaban fuegos artificiales. Por su parte la Coordinación de Turismo Municipal en estas fechas y dentro del marco de estas festividades presenta Donají…la Leyenda, un espectáculo de luz y sonido escenificado por el Ballet Folklórico de Oaxaca y de cuya historia emana el escudo oficial que ostenta orgullosamente la Ciudad de Oaxaca. En estos eventos de los Lunes del Cerro, las dependencias oficiales colaboran en los trabajos del Gobierno Estatal ya que estos deben ser de una labor conjunta para poder realizar todas las acciones que se requieran para estas festividades. A groso modo y en forma muy panorámica a manera de ejemplo enumero las actividades y necesidades de la Secretaría de Seguridad Pública quien debe proporcionar los servicios de seguridad en todos los eventos de los Lunes del Cerro, fechas en que observamos desde temprana hora, fuertes contingentes policiacos distribuidos estratégicamente en diferentes puntos del Cerro del Fortín y sus alrededores y es que para tal evento y el desarrollo del espectáculo de la Guelaguetza al que asisten en promedio 15,000 personas, se realiza un operativo conjunto preventivo por la policía estatal y demás corporaciones en base a un expediente técnico para su realización, el cual en su contenido registra antecedentes, marco
jurídico, justificación, objetivos generales y específicos, realizándose un informe al término del mismo. El “Operativo Guelaguetza” se realiza en tres fases: Seguridad interior del Auditorio, seguridad exterior del mismo y seguridad periférica con puestos de bloqueo, así como la ubicación de puestos de control en la Carretera Internacional, Calle de Venus, éste para resguardo de las inclemencias del tiempo a los elementos policiales, un módulo en las escalinatas de la Calle de Crespo, dos módulos grandes en el estacionamiento a un costado del Hotel Victoria, servicio médico y un modulo más para el puesto de mando. Para todo ello existen requerimientos por diferentes conceptos, tales como baños ecológicos, material eléctrico, papelería, medicamentos, arcos detectores de metales, alimentación, viáticos y diversos para los elementos del operativo, cuyos importes están previamente calendarizados para su correcto desarrollo. Esta fuente de financiamiento proviene del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública, Programa (Operativos Conjuntos) por entidad, municipio, Proyecto (Operativos Policiacos), Acción (Operativos Preventivos). Esta inversión aprobada es estatal únicamente y en base al Eje de Alineación a las Capacidades del Estado Mexicano en Contra la Delincuencia. El Estado de Fuerza es en promedio de 722 elementos de la Policía Estatal, 221 de la PABIC 159 de Transito del Estado que hacen un total de 1102 elementos entre tropa y mandos, así como de 25 unidades (Patrullas). Previo a esto se realizó un Operativo de Investigación y se suscribe un Convenio de Coordinación entre la S.S.P.F. y el Gobierno del Estado para coordinar políticas, estrategias y acciones legales y administrativas necesarias para su eficaz desarrollo. Así como esta, otras dependencias que tambien intervienen y colaboran son: Dirección de Desarrollo Urbano y Obras Públicas H. Cuerpo de Bomberos Cruz Roja Mexicana H. Ayuntamiento de la Ciudad Secretaría de Finanzas (Recaudación de Rentas) Dirección de Comunicación Social En términos generales las demás dependencias del Gobierno del Estado, deberán dar las facilidades para la realización de los diferentes eventos organizados por el comité de estas festividades.
El autor es miembro del Seminario de Cultura Mexicana, Corresponsalía “Ing. Alberto Bustamante Vasconcelos” Oaxaca.
BIBLIOGRAFÍA
HISTORIA DE LAS COSAS DE NUEVA ESPAÑA Fray Bernardino de Sahagún FIESTAS Y COSTUMBRES AZTECAS Profr. Gregorio Torres Quintero LAS FIESTAS DE LOS LUNES EN TANI LAO NAYALOANI Sociedad Folklórica de Oaxaca LEYENDA DE LAS FIESTAS DEL LUNES DEL CERRO Lic. D. Pedro Camacho OAXACA EN LA TRADICIÓN José María Bradomín LOS LUNES DEL CERRO Dr. Javier Castro Mantecón MEMORIA 1982 – 1984 Asociación Folklórica Oaxaqueña MÉXICO A TRAVÉZ DE LOS SIGLOS Alfredo Chavero EL LUNES DEL CERRO Alfredo Martínez Barroso TANI LAO NAYALOANI Lic. Raúl Bolaños Cacho (Artículo Periodístico) LAS FIESTAS DE LOS LUNES DEL CERRO Y SUS TRANSFORMACIONES Profr. Fidel López Carrasco (Artículo Periodístico) LAS FIESTAS DE LOS LUNES DEL CERRO Y SU ORIGEN Y EVOLUCIÓN Profr. Fidel López Carrasco LAS FIESTAS TRADICIONALES (Crónicas del Oaxaca de Hace 50 años) José María Bradomín GUELAGUETZA Lic. Rogelio Barriga Rivas
LUNES DEL CERRO (Retablo 13 del libro Cariño a Oaxaca) Jacobo Dalevuelta COMUNICADO A LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA MEXICANA Dr. Jaime Larumbe Seminario de Cultura Mexicana, Marzo 21 de 2005. IMPARABLE LA INVASIÓN EN EL CERRO DEL FORTÍN Andrés Carrera Pineda Diario El Imparcial, Mayo 8 de 2015. FORTÍN, PULMÓN EN PELIGRO Ismael García Morales Diario El Imparcial, Mayo 2 de 2015. LUNES DEL CERRO, UNIDAD CON TRASCENDENCIA Azahar Mabeth Bolaños Diario El Imparcial, Julio 15 de 2015. PORQUE NO SE DEBE MONTAR EL CENTRO DE CONVENCIONES EN EL CERRO DEL FORTÍN Redacción Diario El Imparcial, Julio 13 de 2015. UN ESCENARIO UBICADO EN TIERRA SAGRADA Andrés Carrera Pineda Diario El Imparcial, Julio 19 de 2015. LUNES DEL CERRO (En defensa del Daninayaaloani) Antonio A. Morales Sánchez Diario El Imparcial, Julio de 2015. HISTORIA DEL CERRO DEL FORTÍN (Origen Filosófico) Guillermo Marín Diario El Imparcial, Julio de 2015. LA FIESTA DEL CERRO Y SU TRASCENDENCIA SOCIAL Profr. Adolfo Velásco 2ª. Edición Oaxaca 1949. Otros…