Arte
y
CulturA
de
CoreA
To m o 1 9 , Nº– 4 I n v i e rn o 2 0 1 0
El palacio de Gyeongbokgung ISSN 1225-4606
BELLEZA DE COREA
Gyeyeongbae
E
l gyeyeongbae no es un recipiente para beber ordinario. Su nombre significa “advertencia contra el desbordamiento”. Cuando se llena hasta el 70 por ciento o más de su capacidad, el líquido desaparece como por arte de magia. El secreto de este efecto es una columna central colocada en la base del cuenco que contiene un tubo en forma de ‘U’. Si la vasija no sobrepasa el 70 por ciento de su capacidad, el nivel se mantiene estable. Pero, si se llega hasta la señal marcada, el líquido entonces fluye por ese canal, primero hacia arriba y luego hacia abajo, al área de reserva. Se basa, pues, en el efecto de sifón, basado en la presión hidrostática. El gyeyeongbae fue concebido durante el período de la Dinastía Joseon (1392-1910) por Ha Baek-won, filósofo y científico Silhak. Después, el ceramista U Myeong-ok recuperó la técnica y fabricó el suyo propio. De acuerdo con el Museo de Licores Tradicionales en Jeonju, U Myeong-ok aprendió su artesanía en el Taller de Cerámica de Gwangju, provincia de Gyeonggi-do, que fabricaba piezas para el palacio real. Más tarde, creó el seolbaekjagi , una distintiva porcelana blanca como la nieve que fue tan
aclamada que le trajo fama y riqueza. Pero esto tan sólo le condujo al libertinaje. Más tarde abandonó esa vida y volvió al Taller, donde creó el gyeyeongbae. Tras este recipiente hallamos también a Im Sang-ok, un mercader de la época de Joseon, recordado por haber acumulado riquezas con una existencia frugal, y que tenía el gyeyeongbae siempre a mano. En la actualidad, los coreanos no lo usan para beber. Sirve de símbolo contra los excesos y para practicar la moderación en la vida diaria. Esto se relaciona con una costumbre del periodo de Joseon, por la que un padre le hacía beber del gyeyeongbae a su hijo durante la ceremonia de mayoría de edad para infundirle al joven ese valor. Este gyeyeongbae de porcelana blanca con adornos de flores del melocotonero, fabricado en el Taller de Cerámica de Gwangju el año 2.000, es una recreación del trabajo original que hallamos en el Museo Nacional de Corea. La columna con el tubo en forma de U se halla bajo la decoración floral. Los artistas actuales fabrican muchas piezas como esta, tanto en porcelana blanca como en verdeceladón.
Arte y Cultura de Corea
Tomo 19, Nº– 4 Invierno 2010
Gyeongbokgung fue el principal palacio de la Dinastía Joseon (1392-1910). Debido a su deterioro, se está restaurando para recuperar su antiguo esplendor. © Suh Heun-gang
6
16
34 42
El palacio de Gyeongbokgung 8
Gyeongbokgung y la cultura palaciega de Joseon Jang Jiyeon
46
16 Primera fase de restauración del palacio de Gyeongbokgung: una tarea de 20 años Lee Kwang-Pyo
24 Shin Eung-soo, al frente de la restauración de Gyeongbokgung
70
Jung Chung-sin
30 Una gira por el palacio de Gyeongbokgung Charles La Shure 84
36
FOCO
Las aldeas de Hahoe y Yangdong declaradas Patrimonio de la Humanidad Lee Sang-hae
42
ENTREVISTA
La expresión de esperanza y compasión de la novelista Shin Kyung-sook Choi Jae-bong
46
52
ARTESANO
Lee Keun-bok, maestro techador, acentúa la elegante línea del tejado tradicional | Park Hyun Sook OBRAS mAESTRAS
Un espejo de bronce que refleja la tecnología más avanzada Cho Hyun-jong
56
62
CRÍTICA DE ARTE
“El realismo en el arte asiático” explora la historia de este continente en el siglo XX | Kim Inhye DESCUBRIR COREA
Tras superar su pasado, Corea puede sentirse orgullosa Hosaka Yuji
66
70
EN EL ESCENARIO GLOBAL
La estrella de fútbol Park Ji-Sung optimiza su capacidad física y mental | Jeong Yoonsoo EN EL CAmINO Jejudo
Los caminos olle 78
| Kim Hyungyoon
Una publicación trimestral de la Fundación Corea 2558 Nambusunhwanno, Seocho-gu, Seúl 137-863, República de Corea www.kf.or.kr DIRECTOR Byung-kook Kim EDITOR EJECUTIVO Kim Sung-yup EDITORES José María Areta, Kim Un Kyung CONSEJO EDITORIAL Cho Sung-taek, Han Kyung-koo, Han Myung-hee, Jung Joong-hun, Kim Hwa-young, Kim Moon-hwan, Kim Youngna COMPOSICIÓN Y DISEÑO Kim’s Communication Associates EDITOR ASOCIADO Lim Sun-kun DIRECTOR DE FOTOGRAFÍA Kim Sam DIRECTOR ARTÍSTICO Lee Duk-lim DISEÑADORA Kim Su-hye
SUSCRIPCIÓN ANUAL Corea: 18.000 wones. Asia, correo aéreo: 33$ EEUU. Resto del mundo, correo aéreo: 37$. Precio por ejemplar en Corea: 4.500 wones. Suscripción/Correspondencia Fundación Corea 2558 Nambusunhwanno, Seocho-gu, Seúl 137-863, República de Corea Tel: 82-2-2151-6544 Fax: 82-2-2151-6592 PUbLICIDAD CNC Boom co,. Ltd Towercrystal Building, 1008-1, Daechi 3-dong, Gangnam-gu, Seúl, República de Corea Tel: 82-2-512-8928 Fax: 82-2-512-8676 COMPOSICIÓN Y DISEÑO Kim’s Communication Associates 384-13 Seogyo-dong, Mapo-gu, Seúl, 121-840, República de Corea Tel: 82-2-335-4741 Fax: 82-2-335-4743 www.gegd.co.kr IMPRESO EN INVIERNO DE 2010 POR Samsung Moonwha Printing Co. 274-34, Seongsu-dong, Seongdong-gu, Seúl, República de Corea Tel: 82-2-468-0361/5 Fax: 82-2-461-6798
GASTRONOmÍA Tangpyeongchae
Plato colorido y simbólico | Lee Jong-Im 82
OPINIÓN DESDE LA LEJANÍA
Cuando el diccionario no es suficiente | Ramiro Zúñiga Garibay 84
VIDA
Éxito de los simuladores de golf en Corea | Chung Jewon 87
JORNADAS DE LITERATURA COREANA
Kwon Yeo-sun Autoanálisis estético del comportamiento patológico | Kim Young-chan Los tiempos de la cinta rosada | Traducido por Kim Un Kyung
WEB de Koreana
http://www.koreana.or.kr © Fundación Corea 2010 Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida de ningún modo sin el permiso de la Fundación Corea. Las opiniones expresadas por los autores no representan necesariamente las de los editores de Koreana o de la Fundación Corea.
Koreana , registrada como revista trimestral en el Ministerio de Información (Número de Registro Ba-1003, con fecha del 8 de agosto de 1987), también se publica en inglés, chino, francés, árabe, ruso, japonés y alemán.
El palacio de Gyeongbokgung
6 Koreana | Invierno 2010
Después de 20 años de esfuerzos, la fase inicial del proyecto de restauración del palacio de Gyeongbokgung ha terminado con la reconstrucción de su puerta principal, Gwanghwamun, en su lugar original. Para apreciar la importancia histórica y cultural de este lugar, es necesario entender los numerosos problemas por los que ha pasado este centro de la corte, la edificación más representativa de la arquitectura de Joseon.
Winter 2010 | Koreana 7
Gyeongbokgung y la cultura palaciega de Joseon Aunque hay varios palacios de la Dinastía de Joseon intactos, Gyeongbokgung destaca porque, al ser el principal, es el símbolo más destacado de la autoridad de la corte. El nombre de cada edificio refleja el espíritu en que se basó el gobierno en esa época. Jang Jiyeon Investigadora del Instituto de Estudios de la Universidad de Seúl | Suh Heun-gang Fotógrafo
8 Koreana | Invierno 2010
U
n palacio es el hogar del rey. Pero el concepto de “palacio”, según documentos del periodo de Joseon, es mucho más amplio: donde vivía el monarca, donde había vivido antes de serlo, donde estaba cuando viajaba por el país e incluso el santuario para los antepasados. Hay cinco construcciones oficiales denominadas así donde el rey residía y trabajaba: Gyeongbokgung, Changdeokgung, Changgyeonggung, Gyeonghuigung y Gyeongungung (o Deoksugung), aunque todos ellos sólo coexistieron durante una década. Los tres primeros fueron los principales antes de la invasión nipona (Hideyoshi) en 1592, mientras que Changdeokgung, Changgyeonggung (anexo al primero) y Gyeonghuigung fueron los principales posteriormente. El último no es realmente
un palacio, sino una expansión construida para la proclamación del Imperio de Corea en 1897. Aunque hay varios intactos, Gyeongbokgung destaca porque, al ser el principal, es el símbolo más destacado de la autoridad de la corte. El nombre de cada edificio refleja el espíritu en que se basó el gobierno en esa época. La fundación de la Dinastía Joseon En el verano de 1392, la fundación de Joseon terminó definitivamente con Goryeo, tras una historia de 475 años. La nueva Dinastía se creó por una alianza entre los nuevos eruditos, adheridos al neoconfucianismo, y el oficial del ejército Yi Seong-gye. Entre las decisiones que tomó éste último fue
La puerta de Gwanghwamun es la principal entrada al palacio de Gyeongbokgung. Consta de tres arcos sobre los que se alza una cubierta de dos pisos. Es la mayor y más impresionante de todas las estructuras de este tipo en el país.
Invierno 2010 | Koreana 9
1 1 El trono del rey en Geunjeongjeon, dominado por una pintura tradicional del sol, la luna y cinco picos, que simbolizan la autoridad del monarca.
2 El salón del trono de Geunjeongjeon, un amplio edificio de dos plantas con base de piedra, era donde el rey recibía a los embajadores extranjeros y donde se celebraban otros importantes acontecimientos oficiales.
abandonar la capital del ya desaparecido régimen, Gaegyeong (la Gaesong actual, en Corea del Norte) y hallar un nuevo emplazamiento. Muchos se opusieron a esta idea e incluso los protagonistas de la fundación de la nueva nación no apoyaron una nueva sede. La polémica duró dos años. Al final, el lugar elegido fue Hanyang, que había sido la capital meridional de la antigua monarquía durante el siglo XII. Después de decidir trasladar la ciudad, Yi Seong-gye apresuró el proceso, antes incluso de terminar las instalaciones necesarias. El palacio de Gyeongbokgung, el santuario de la realeza de Jongmyo y el altar nacional de Sajik, fueron terminados en 1395, un año después del traslado. Otras construcciones tardaron más. Debido a esta premura, la apariencia de Hanyang 10 Koreana | Invierno 2010
(o Hanseong, nombre que recibió al año siguiente) se parecía a la de la capital del ya desaparecido reino. Gyeongbokgung fue levantado casi en el mismo lugar que en la capital de Goryeo, delante del monte Baegaksan, aunque algo más al sur. Tradicionalmente, cuando Goryeo y Joseon elegían la capital, tenían especial relevancia las características geográficas: lugares donde las montañas la rodeaban para que la muralla pudiera aprovechar la topografía natural. Por ello, la mayoría de las ciudades coreanas no son simétricas como las de China o Japón (Kyoto), donde las antiguas urbes amuralladas se construían en cuadrícula. En estas poblaciones, los palacios solían estar en el centro o bien ligeramente hacia el norte. Gyeongbokgung fue levantado en el oeste de una villa con forma
Invierno 2010 | Koreana 11
2
La legitimidad de la autoridad de la corona se basaba en la integridad y justicia del monarca, no en el poder que poseía. Por ello, el palacio donde vivía tenía que transmitir dignidad; sin embargo, un palacio demasiado ostentoso no era deseable porque podía sugerir la dominación del pueblo. Para lograr equilibrio, la apariencia de estas construcciones es más comedida si las comparamos con las de otros países de la región, lo cual refleja el espíritu distintivo y el carácter de Joseon.
1
2
1 El rey usaba el salón de Sajeongjeon como oficina y para reunirse con los funcionarios de la corte.
2 Changdeokgung se construyó originalmente como complemento de Gyeongbokgung, pero fue el primero en ser restaurado tras las invasiones niponas de finales del siglo XVI.
3 Gangnyeongjeon es la alcoba del rey. En un edificio anexo vemos figuritas en el caballete, que servían para proteger la construcción contra los espíritus malignos.
irregular, en la base del monte Baegaksan. Fue el resultado del pungsu (feng shui ), un sistema de principios geománticos para identificar los lugares propicios. No obstante, si lo comparamos con otras construcciones similares, fue alzado en un terreno llano, lo cual permitió ordenar las edificaciones del recinto. Importancia de Gyeongbokgung Esta Dinastía adoptó los principios del neoconfucianismo, que creía en la bondad de la humanidad y su correspondencia con los principios éticos de la naturaleza. Este sistema de pensamiento se centraba en asuntos espirituales, como la ética del ser humano, y no tanto en las apariencias. La legitimidad de la autoridad de la corona se basaba en la integridad y justicia del monarca, no en el poder que poseía. Por ello, el palacio donde vivía tenía que transmitir dignidad; sin embargo, un palacio demasiado ostentoso no era deseable porque podía sugerir la dominación del pueblo. Para lograr equilibrio, la apariencia de estas construcciones es más comedida si las comparamos con 12 Koreana | Invierno 2010
las de otros países de la región, lo cual refleja el espíritu distintivo y el carácter de Joseon. Aquí radica la razón de la simpleza de estas edificaciones y el carácter singular de dicha Dinastía. El arquitecto y diseñador de este complejo fue Jeong Do-jeon, un erudito neoconfuciano y funcionario de la corte, que también eligió los nombres de todo el recinto y de cada una de las edificaciones, que expresaban los ideales a los que los gobernantes debían aspirar. Las tres principales son Gangnyeongjeon, la cámara real, Sajeongjeon, el salón del consejo, y Geunjeongjeon, el salón del trono. En cuanto al primero, donde dormía el monarca, el artífice quiso crear una atmósfera que permitiera al rey sentir sosiego. “Gangnyeong” significa precisamente “paz”, y es una de las cinco bendiciones. Por ello, quiso que el soberano lograra esas cinco gracias a través de la honestidad de pensamiento, que engendra un comportamiento virtuoso. Como el regente pasaba la mayor parte del tiempo solo en este lugar, era fácil que se distrajera, por eso era fundamental que el entorno condujera a esa tranquilidad espiritual.
3
La “fidelidad” y “honestidad de pensamiento” son dos de los ocho principios que aparecen en La gran enseñanza , junto con “un estudio profundo de la comprensión de los asuntos mundanos”, “el perfeccionamiento ético”, “la armonía familiar”, “el gobierno adecuado de la nación” y “el fomento de la paz”. Si la cámara real le ayudaba a lograr la fidelidad y honestidad de pensamiento, el regente aplicaba este conocimiento en el salón del consejo, donde se reunía con los funcionarios y asistía a conferencias especiales. Jeong Do-jeon puso a este salón el nombre de Sajeongjeon para que el rey pensara profundamente en los asuntos más difíciles y tomara decisiones según un método de razonamiento sólido. Después de todo, “el pensamiento” es la esencia del gobierno y la educación política. Si cultivaba la fidelidad y la honestidad de pensamiento en Gangnyeongjeon y lo aplicaba en Sajeongjeon, gobernaría de manera digna. Con una ética adecuada, el monarca sería capaz de dirigir la nación adecuadamente y fomentar la paz en el salón del trono. Su nombre, Geunjeongjeon, significa “gobierne
diligentemente”, pero no era una admonición a la corona sobre la forma de reinar. En este caso, el arquitecto creía que tal virtud requería el nombramiento de funcionarios capaces, a los que se pudiera confiar responsabilidades administrativas, así que el máximo dirigente no tuviera que preocuparse de detalles insignificantes. Terribles sucesos en Gyeongbokgung Por último, el constructor eligió para todo el recinto el nombre de Gyeongbokgung como súplica al monarca de que fuera un gobernante honorable y que la línea dinástica no se rompiera. Pero poco después de finalizar las obras, su prestigio quedaría dañado. Tras dos sublevaciones por la sucesión, la capital volvió a Gaegyeong, para regresar más tarde de nuevo a Hanseong. En este tumulto, se construyó un nuevo palacio, Changdeokgung, al este. Aunque el primero siguió siendo la sede oficial, quedó desocupado durante el reinado de Taejong (r. 1400-1418), lo cual socavó su prestigio. Invierno 2010 | Koreana 13
1 En el recinto del palacio, debemos pasar por las puertas de Heungnyemun y Geunjeongmun para llegar al salón del trono, o Geunjeongjeon. La apariencia sobria de todos los edificios refleja los principios de la Dinastía Joseon, que reverenciaba la corrección y rechazaba la extravagancia.
Durante el gobierno de Sejong (r- 1418-1450), existió un duro debate sobre la interpretación de los principios geománticos. En particular, los que afirmaban que en vez del monte Baegaksan, la elevación primaria de la capital debería ser la que está cercana a Changdeokgung. Era una controversia sobre el propio plan de la ciudad ya que aceptar otra montaña primaria alteraría los meridianos que se empleaban en los cálculos iniciales. Planteaba, además, cuestiones sobre si Gyeongbokgung se había levantado en un lugar propicio o no. Aunque el Gobierno suprimió el debate durante el reinado de Sejong, volvió a resurgir tras la invasión nipona de 1592. Este ataque de Hideyoshi, que se inició 200 años después de la fundación de la nueva nación, no tuvo precedentes en tamaño y destrucción. El fuego arrasó todos los palacios de Hansong. ¿Cuál podía ser la razón para tanta destrucción? En ese momento, la gente empezó a preguntarse sobre la controversia geomántica del carácter de monte primario de Baegaksan, y si esto quería decir que Gyeongbokgung estaba en un buen 14 Koreana | Invierno 2010
lugar. ¿Podía este error haber contribuido al enorme daño de la guerra? Después de rechazar a los invasores, se iniciaron las labores de reconstrucción de los palacios durante el reinado de Gwanghaegun (r. 1608-1623). Gyeongbokgung, no obstante, se dejó en ruinas, debido a estas dudas sobre el lugar donde se alzaba. Se cree que el rey quiso rehabilitarlo, pero nunca se iniciaron las obras. Duradero símbolo de Joseon Después de este trágico incidente durante la invasión nipona, Gyeongbokgung siguió derruido durante 200 años hasta que en 1860 comenzó el proyecto de reconstrucción. A pesar del abandono, se realizaron varias ceremonias en su recinto durante el siglo XVIII para que los reyes presentaran sus respetos ante los fundadores de la Dinastía, lo cual sirvió para que el palacio recuperara su estatus de símbolo de la autoridad real. Cuando Gojong ascendió al trono, su padre, el príncipe regente Heungseon Daewongun, puso en marcha un proyecto
2 Una vista nocturna del edificio de Gyeonghoeru, situado en un estanque artificial junto a una isla ajardinada. En esta construcción se realizaban recepciones para las personalidades extranjeras y se celebraban los banquetes de estado.
para restaurar la dignidad y autoridad del trono, que había perdido prestigio durante el siglo XIX. Por ello, durante el mandato de Gojong (r. 1863-1910) se restauró. En general, se respetaron los planos originales, pero el nuevo era más grande e incluía más edificaciones. Antes de la declaración de este monarca en 1870 por la cual fue designado gobernante de la nación (tras el control provisional de su padre hasta que alcanzara la edad suficiente), se había construido ya el complejo de Geoncheonggung detrás del recinto. Pero en 1895, mientras los reyes residían ahí, agentes nipones asesinaron a la reina. Gojong, en medio de una oleada de eventos que cambiaron la dirección política del país, se refugió en la embajada de Rusia y proclamó la creación del Imperio de Corea, dando fin al papel de Gyeongbokgung como palacio de la monarquía de Joseon. Después de que el país fuera colonizado por Japón, las nuevas autoridades produjeron serios daños en la edificación para demostrar su poderío. La mayor de las agresiones llegó en 1920, cuando se levantó el edificio del Gobierno nipón delante
del salón del trono. Al hacerlo, el símbolo de la autoridad de Joseon quedó eclipsado. Desde una perspectiva histórica, sin embargo, Gyeongbokgung nunca ha sido un palacio admirado. Aunque puede compararse a construcciones similares en China y Japón, al contrario de otros de Joseon y Goryeo, su diseño es singular. Parece que a los coreanos nunca les gustó mucho e incluso los visitantes actuales dicen preferir Changdeokgung. Quizá es que el lugar verdaderamente no es propicio. Sin embargo, personifica el espíritu de los fundadores de la Dinastía y, durante 500 años, se ha erguido como símbolo. Desde la independencia de Corea en 1945, hubo voces que pidieron el desmantelamiento del edificio del Gobierno nipón, que servía como doloroso recuerdo del periodo colonial. Pero incluso tras su demolición a principios de los años de 1990, que permitió que se iniciara el proyecto de restauración, la controversia no ha desaparecido. En cualquier caso, nadie disputa el valor de recuperar la gloria pasada y magnificencia de Gyeongbokgung. Invierno 2010 | Koreana 15
Primera fase de restauración del palacio de Gyeongbokgung: una tarea de 20 años La primera fase del proyecto de restauración del palacio de Gyeongbokgung se ha centrado en Gwanghwamun. Esta puerta, recién renovada, es majestuosa y elegante, con un alero curvado ligeramente que nos recuerda a un ave en vuelo. Los tres arcos de entrada en la base son también atractivos. El palacio muestra de nuevo su rostro visto desde estas puertas, de donde podemos ver también Heungnyemun y el monte Bugaksan. Lee Kwang-Pyo Periodista de la sección cultural de The Dong-A Ilbo | Suh Heun-gang Fotógrafo
E
ste año ha marcado el centenario de la anexión de Corea por Japón, por lo que el día de la Independencia (15 de agosto) tuvo un significado particular, acentuado por la inauguración de la recién restaurada Gwanghwamun, la puerta principal de Gyeongbokgung, que se ha levantado en su lugar original. Este trabajo es el punto más destacado del proyecto general de reconstrucción de este monumento, que comenzó en 1990. Estos 20 años son parte de un proceso más largo de rehabilitación general del palacio, el principal de la Dinastía Joseon (1392-1910), para devolverle su esplendor original. Gyeongbokgung fue construido originalmente en 1395, el primero y el principal palacio de dicha Dinastía. La puerta principal estaba en la avenida de Yukjogeori (Sejong-daero, en la actualidad), mientras que detrás podían contemplarse el monte Bugaksan y, hacia un lado, Inwangsan, por lo que el lugar era ideal, según los principios del pungsu (feng shui ) y por su valor paisajístico. Todo el recinto quedó totalmente destruido por el fuego durante la invasión nipona de 1592, y no volvió a reconstruirse hasta que el príncipe regente Heungseon Daewongun puso en marcha un gran proyecto de restauración en 1865, que se completó en 1867. Muchos edificios y características del palacio fueron destruidos durante el periodo colonial japonés. Tras la independencia, los coreanos querían restaurar estas estructuras, pero no era una tarea simple por la ingente cantidad de recursos financieros, humanos y materiales necesarios, aparte del trabajo y el tiempo que habían de emplearse. Edificio general del Gobierno La tarea se inició en los años 90, cuando se puso en marcha el movimiento de la “memoria histórica” para explicar mejor el periodo colonial nipón y potenciar el orgullo nacional. La restauración de este palacio era parte de esta tarea. Las obras que16 Koreana | Invierno 2010
rían devolver a Gyeongbokgung su antigua gloria y fomentar el reconocimiento de la riqueza cultural del patrimonio del país. El recinto había sido deformado por las autoridades japonesas, por lo que se convirtió en la iniciativa más visible y simbólica para rectificar la historia reciente de la nación. El proceso, no obstante, no fue fácil. Qué hacer con el edificio del Gobierno General japonés, que las autoridades coloniales habían construido en el recinto del palacio en 1926, después de derruir la puerta de Heungnyemun. Después, tras quejarse de que Gwanghwamun obstruía la vista de ese edificio, se trasladó la puerta donde hoy se halla el Museo Folclórico Nacional. Tras la independencia, desde 1948 hasta 1984, Corea usó esa antigua sede del Gobierno para oficinas. Después, fue el Museo Nacional. En cuanto a qué hacer con el edificio japonés, había división de opiniones sobre demolerlo o mantenerlo. “Es un vestigio del colonialismo japonés, por lo que debe destruirse”, pen-
saban unos. “A pesar de la dolorosa derrota y desgracia, es una parte importante de nuestra historia, así que debemos trasladarlo y preservarlo”, alegaban otros. Esta controversia se mantuvo hasta que el Gobierno anunció su decisión de derruirlo. El 15 de agosto de 1995, coincidiendo con el 50 aniversario de la independencia de Corea del régimen colonial, se retiró la aguja que estaba en lo más alto de la cúpula, como símbolo del deseo de poner fin a ese amargo capítulo de la historia nacional. En diciembre del año siguiente, se había demolido toda la estructura, que se perdió para siempre. Edificios del palacio La finalidad del proyecto de restauración de Gyeongbokgung es reproducir su apariencia en el momento de su reconstrucción en 1867. La enorme complejidad de ese plan del siglo XIX es evidente en el hecho de que cuando se completó, el recinto contenía más de 500 edificaciones. En 1990, sólo había
Geunjeongmun, la puerta en el lado sur del palacio, está flanqueada por largos corredores.
Invierno 2010 | Koreana 17
1
18 Koreana | Invierno 2010
2
1 Amisan, detrás de Gyeotaejeon, es un espacio verde vital en el área central del recinto palaciego. Este jardín fue creado para la reina, que no salía de este lugar. Las chimeneas hexagonales están decoradas con ideogramas y símbolos propicios.
2 El puente de Yeongjegyo une Heungnyemun con Geunjeongmun. Se creía que las aguas del arroyo Geumcheon, que fluyen bajo él, tenían la capacidad de purificar el corazón del rey y sus asesores.
3 Los cimientos de Jaseondang, la residencia de los príncipes herederos, ya restaurados.
3
La primera fase de la restauración de Gyeongbokgung ha necesitado 14.580 metros cúbicos de madera y 1,5 millones de tejas. Además, han participado muchos menestrales con conocimientos de las técnicas tradicionales. Este proyecto ha sido un esfuerzo colectivo de todos los gremios relacionados con la construcción clásica y las artesanías relacionadas.
36. El trabajo se realiza en fases relacionadas con cinco áreas fundamentales: la cámara real, Donggung (palacio oriental), Heungnyemun, Taewonjeon y Gwanghwamun. Las obras realizadas durante estos últimos veinte años han supuesto un desembolso de 178.900 millones de wones (unos 155 millones de dólares). La restauración de la cámara real, que incluye las habitaciones del rey y la reina, comenzó en 1990 y terminó cinco años después. La del rey, Gangnyeongjeon, y la de la reina, Gyotaejeon, son las estructuras más importantes de esta área. Tras su rehabilitación en 1867, otro incendio volvió a destruirlas en 1876. Fueron levantadas de nuevo en 1888. Después, cuando un fuego destruyó en 1917 porciones de Changdeokgung, varias edificaciones de Gyeongbokgung, como Gangnyeongjeon y Gyotaejeon, fueron desmanteladas para utilizar los materiales en la reconstrucción de las habitaciones reales del primero. Doce edificios que quedaron destruidos durante el periodo colonial, incluyendo las cámaras reales, fueron de nuevo abiertos al público en 1995. El proceso de rehabilitación de Donggung, donde residían los príncipes herederos, se llevó a cabo entre 1994 y 1999. Se remodelaron 18 construcciones, entre las que están Jasondang y Bihyeongak. Durante el periodo de Joseon, el heredero de la corona estudiaba y se adiestraba aquí. Jaseondang, su residencia, desapareció en 1914, cuando las autoridades niponas derruyeron varias edificaciones del palacio para presentar una “Exposición de Productos Coreanos” en el recinto.
El empresario Okura Kihachiro coleccionó los materiales desmantelados de Jaseondang y se los llevó a Tokio en 1915, donde se emplearon para erigir un museo llamado Chosenkan, que quedó destruido durante el gran terremoto de Kanto de 1923, que dejó sólo las piedras de los cimientos. Tras ello, Jaseondang no fue nada que un vago recuerdo. En 1993, el profesor Kim Chung-dong, un especialista en Historia de la Arquitectura de la Universidad de Mokwon, se enteró de que las piedras estaban arrinconadas en el hotel Okura, Tokio. Gracias a sus esfuerzos, fueron recuperadas en 1996. Aunque no fue posible usarlas para los trabajos de restauración del edificio original debido a su deterioro, se guardan en el recinto del palacio. La rehabilitación de Heungnyemun comenzó en 1996 y finalizó en 2001. Esta puerta, situada entre Gwanghwamun y la entrada interior de Geunjeongmun, marca el límite del palacio. Esta edificación y las construcciones cercanas fueron derruidas o trasladadas en 1915 para la Exposición de Productos Coreanos. En 1916, la puerta y los corredores adyacentes fueron demolidos para hacer espacio para el edificio del Gobierno. En 2001, Heungnyemun recuperó su forma original, al igual que los pasillos, que conducen a un arroyo cercano, el puente que lo cruza y los caminos empedrados, lo que ayudó a revivir el esplendor del recinto palaciego. La restauración del conjunto también incluía la del salón del trono, Geunjeongjeon (Tesoro Nacional número 223), el núcleo del palacio. Era el lugar donde se celebraban importantes eventos de estado, como coronaciones, asambleas de funcioInvierno 2010 | Koreana 19
narios civiles y militares y recepciones de emisarios extranjeros. Durante un tiempo, fue la estructura de madera más alta de Corea. En diciembre del año 2000, al desmantelarlo para su reconstrucción, la Oficina (ahora Administración) del Patrimonio Cultural descubrió que había una sección con daños serios: la viga en ángulo del techo, que debía apoyarse completamente en el pilar suroriental, sólo lo hacía en un área de 3-4 cm. Afortunadamente, el descubrimiento y posterior análisis de la zona dañada y las medidas tomadas posibilitaron que los trabajos de rehabilitación prosiguieran normalmente. El área de Taewonjeon fue reparada entre 1997 y 2005, proceso que requirió la reconstrucción de 25 edificios, incluyendo el propio Taewonjeon, donde se había consagrado el retrato del rey Taejo y se celebraban sus ritos funerarios. Esta zona, situada en el rincón noroccidental del palacio, sirvió después como cuartel para las tropas que protegen Chong Wa Dae, la residencia presidencial, durante los recientes regímenes militares de Corea. Las tropas se trasladaron cuando comenzaron las labores de rehabilitación.
Al este de esta área está Geoncheonggung, restaurado entre 2004 y 2007, símbolo de la modernización en 1887, ya que fue el primer edificio que dispuso de iluminación eléctrica. Fue también el escenario de una gran tragedia, ya que aquí fue asesinada la emperatriz Myeongseong por agentes japoneses el 8 de octubre de 1895. Geoncheonggung, un palacio dentro de otro palacio, fue encargado por el emperador Gojong en 1873. Para simbolizar su independencia política de su padre (el príncipe regente Heungseon Daewongun), Gojong hizo que se construyeran estas edificaciones en el rincón más septentrional del palacio. Debido al asesinato de la emperatriz, Gojong temió por su vida, así que abandonó el recinto en 1896 y se refugió en la embajada rusa. Desde entonces, Geoncheonggung quedó deshabitado hasta que fue demolido por las autoridades niponas en 1909. Más tarde, en 1940, el Gobierno colonial construyó un museo aquí. Después de la independencia de Corea, el edificio fue sede el Museo de Artesanías Tradicionales hasta que fue demolido en 1998. Cuando se completó su rehabilitación en 2007, se habían
20 Koreana | Invierno 2010
1
reconstruido 20 edificios, incluyendo la cámara de Gojong, Jangandang, la de Myeongseong, Gonnyeonghap, y Boksudang, un anexo. Todos se caracterizan por no estar pintados, según su apariencia original y el estilo de los eruditos de la época. Shin Eung-su, maestro carpintero, responsable de la obra, afirmó: “Todos los edificios del palacio son espléndidos, pero Geoncheonggung no está pintado, por lo que su aspecto es limpio y simple”. “Me esforcé en destacar el veteado natural de la madera durante el proceso de restauración”, añadió. Primera fase de la rehabilitación El proyecto principal de esta primera fase ha sido la reconstrucción de Gwanghwamun y las áreas circundantes, que se inició en 2001 y ha durado hasta este año. Como es la puerta principal, es normal que se haya prestado mayor atención. Esta entrada fue reconstruida primero en 1865, pero el periodo colonial la perjudicó, ya que fue trasladada para que se viera mejor el edificio del Gobierno. Después, durante la Guerra de Corea, la estructura de madera sobre la base de piedra quedó
totalmente destruida. Fue restaurada de nuevo en 1968, pero 14,5 metros por detrás de su ubicación original y en un ángulo de 3,5 grados en sentido contrario al de las agujas del reloj respecto al eje central del palacio. Además, la estructura de madera se hizo de cemento. Por todo ello, puede decirse que no fue una auténtica obra de rehabilitación. Fue un error reproducir la estructura de madera en cemento, aunque la modificación de la orientación fue inevitable debido a las limitaciones de espacio. Cuando las autoridades niponas demolieron Heungnyemun para levantar el edificio del Gobierno, lo colocaron 3,5 grados desviado del eje central. Gyeongbokgung originalmente estaba frente al monte Gwanaksan, pero los japoneses rompieron esa alineación para que tuviera delante el santuario sintoísta que habían construido en el monte Namsan. Por ello, no era posible orientar de nuevo la puerta porque no estaría alineada con el antiguo edificio del Gobierno. En 2001 se empezó a restaurar la puerta con una estructura de madera y en su situación y orientación originales. En relación con este proceso, se abrió una intensa polémica sobre el
1 Geoncheonggung, otro palacio dentro del recinto de Gyeongbokgung, fue construido por el emperador Gojong justo antes del término de la Dinastía. A diferencia de casi todos los edificios de su clase, su superficie no está decorada.
2 El interior de Gyotaejeon, la alcoba de la reina.
Invierno 2010 | Koreana 21
2
1 Donggung, situado en el palacio interior, era la residencia de los príncipes herederos.
2 En la recién restaurada puerta de Gwanghwamun se celebra ahora una ceremonia de cambio de guardia más auténtica, basada en una extensiva investigación del formato y vestimenta antiguos.
1
letrero del edificio. Algunos pedían que se reemplazara el existente, escrito en el alfabeto coreano, hangeul , por el presidente Park Chung Hee en 1968. Otros pensaban que “tras esa petición había un intento de borrar todo rastro del ex dirigente”. La Oficina del Patrimonio Cultural, siguiendo la recomendación de algunos expertos, decidió hacer uno nuevo, escrito en ideogramas chinos, que estaría en línea con el que había desde la reconstrucción de 1865. Se determinó que la caligrafía había sido creada por Im Tae-yeong, supervisor del proyecto de rehabilitación y oficial del ejército. Se restauró digitalmente el negativo y se empleó la imagen para reproducir los caracteres itálicos de Im. Este estilo, exquisito y de gran fluidez, es ideal para un palacio. El tallado de las letras en la plancha de madera lo realizó Oh Ok-jin, artesano especializado. La restauración de Gwanghwamun incluía la propia puerta, aparte de las construcciones y detalles aledaños, como el camino que llevaba al rey a Heungnyemun y secciones de la plataforma de piedra delante de la puerta, que añadían grandeza a la edificación. La obra se completa con la ampliación de los muros meridionales del recinto hasta la que era originalmente la torreta de vigilancia suroriental, Dongsipjagak, que termina este año. La primera fase de la restauración de Gyeongbokgung ha necesitado 14.580 metros cúbicos de madera y 1,5 millones de tejas. Además, han participado muchos menestrales con conocimientos de las técnicas tradicionales, como Shin Eung-soo, maestro carpintero especializado en arquitectura tradicional, muy respetado como supervisor de proyectos de rehabilitación, Bak Mun-yeol, especialista en obras de latón, y Oh Ok-jin, famoso tallista de caligrafía; a ellos hay que añadir el cantero Im Dong-jo, el pintor de edificios Yang Yongho, el maestro 22 Koreana | Invierno 2010
techador Kim Ji-seung y el carpintero Kim Sun-gi. La mayoría de ellos son “Patrimonio Cultural Intangible”. Este proyecto ha sido un esfuerzo colectivo de todos los gremios relacionados con la construcción clásica y las artesanías relacionadas. Esta primera fase, que ha afectado a 89 edificios, no ha devuelto la forma original al palacio. En la actualidad, hay 125 construcciones en el recinto, sólo el 25 por ciento de las 500 que se rehabilitaron en 1867. Esto debería servirnos para recordarnos la destrucción que ocasionaron las autoridades niponas. La Administración del Patrimonio Cultural planea comenzar la segunda fase, que durará desde el próximo año hasta 2030. Durante este periodo, se restaurarán 253 edificios más, lo que elevará su número a 378, un 76 por ciento de su tamaño en 1867. Bak Yeong-geun, responsable de la Oficina de Promoción del Patrimonio de la Administración recalcó lo siguiente: “Si la primera fase se comparara con construir el esqueleto de Gyeongbokgung, la segunda equivaldría a ponerle los músculos a esa estructura”. La primera fase del proyecto de restauración del palacio de Gyeongbokgung se ha centrado en Gwanghwamun. Esta puerta, recién renovada, es majestuosa y elegante, con un alero curvado ligeramente que nos recuerda a un ave en vuelo. Los tres arcos de entrada en la base son también atractivos. El palacio muestra de nuevo su rostro visto desde estas puertas, de donde podemos ver también Heungnyemun y el monte Bugaksan. Gyeongbokgung es la quintaesencia de la arquitectura tradicional coreana y orgullo de la cultura del país. Por ello, su restauración no es simplemente retornarlo a su forma original. Es revivir 600 años de historia, tradición y dignidad de la nación, que los colonialistas nipones pretendieron socavar.
Invierno 2010 | Koreana 23
2
Shin Eung-soo, al frente de la restauración de Gyeongbokgung El maestro carpintero Shin Eung-soo recibió el encargo de supervisar la primera fase de restauración del palacio de Gyeongbokgung, que ha durado dos décadas de trabajos conjuntos. Tras su finalización, su orgullo es evidente. Shin se refiere a esta tarea como “rehabilitación de la historia de Corea”. Jung Chung-sin Sección cultural de The Munhwa Daily Yi Gyeom, Ahn Hong-beom Fotógrafos
E
l 15 de agosto pasado, en el sexagésimo quinto aniversario de la independencia de Corea del régimen colonial japonés, varias figuras de la cultura y de la política, incluyendo al presidente de la República, Lee Myung-bak, y el alcalde de Seúl, Oh Se-hoon, asistieron a la ceremonia de colocación del letrero en Gwanghwamun, la puerta principal de Gyeongbokgung. Fue un momento histórico, ya que dicha construcción es el rostro del centro de la capital. Además, fue reconstruida en madera, similar a como era en 1865, cuando el palacio fue reedificado por el príncipe regente Heungseon Daewongun (Lee Ha-eung), el padre del emperador Gojong. La ceremonia de este verano era lo más importante de un conjunto de actos de celebración por la finalización de la primera fase de restauración del recinto palaciego, que ha durado 19 años y dos meses, desde que se puso en marcha el 10 de junio de 1991, delante de Geunjeongjeon, el salón del trono, la mayor estructura de madera del país. Hallar el pino ideal Shin, de 68 años, supervisor de todo el proceso de reconstrucción, subió a la torreta de guardia antes de la ceremonia. Desde la ventana miró el palacio al que había dedicado todo: Heungnyemun y Geunjeongjeon, con el monte Bugaksan al fondo. Había pasado casi dos décadas buscando el pino coreano (yuksong ) ideal para usarlo en la viga transversal. Con esa finalidad, ha viajado por todos los picos de la cordillera Taebaek y prácticamente ha vivido ahí. Pero no era sólo para hallar la madera ideal. Su deseo de perfeccionismo y compromiso con la construcción de un palacio que estuviera en pie 1.000 años fueron motivos de fricción constante con otros que trabajaban 24 Koreana | Invierno 2010
en el proyecto. La BBC asignó un equipo de producción para grabar todo el proceso de restauración de Gwanghwamun y esto incluía seguir al maestro carpintero a los bosques en las montañas de Yangyang y Taebaek, en la provincia de Gangwon-do, donde estaban los pinos que había elegido. Todos los trabajadores quedaron impresionados por la dureza de los cámaras de esa empresa de televisión británica, que lograron subir por las escarpadas laderas, algo difícil incluso para los mejores leñadores. Se dice que estos esfuerzos se debían al interés del príncipe Carlos por documentar el patrimonio cultural de todo el mundo. Asimismo, el entusiasmo de la NHK y otras emisoras niponas era comparable al de la BBC, que dio cobertura informativa a la ceremonia de inicio del proyecto. Los esfuerzos para restaurar la riqueza cultural y los lugares de interés histórico del país comenzaron en los años 70. Shin ha desempeñado un papel fundamental en las actividades de restauración y mantenimiento de los palacios reales y la muralla de la ciudad, además de la rehabilitación de templos antiguos y casas típicas. Por ello, sus cuarenta años de trabajo han sido de gran importancia para la recuperación de la arquitectura tradicional. Historia de reconstrucciones Shin Eung-soo fue designado Patrimonio Cultural Intangi-
El maestro carpintero Shin Eung-soo ha dedicado 35 años de su carrera profesional a la restauración de los palacios y otros edificios tradicionales de Corea.
Invierno 2010 | Koreana 25
“Gracias a la popularidad internacional de esa telenovela [Una joya en el palacio (Dae Jang Geum )] cada vez más visitantes al palacio quieren ver Sojubang, la cocina. Existe gran curiosidad sobre la vida diaria aquí, algo que incluye también los baños. Por ello, la planificación de la próxima fase de restauración debe tenerlo en cuenta”.
ble número 74 en 1991 por sus conocimientos en el campo de la carpintería, por lo que se convirtió en el maestro principal de esta artesanía en la arquitectura tradicional. Su dedicación a la cultura tradicional, su insistencia en emplear pinos indígenas de Corea y su perfeccionismo los ha adquirido de sus maestros en este arte. Ha logrado el éxito por su compromiso personal y su espíritu artesano. Nació en Cheongwon-gun, provincia de Chungcheongbuk-do. Como no podía ingresar en la universidad, se mudó a Seúl a los 17 años y empezó de carpintero ayudando a su primo mayor, que construía casas típicas. Su vida cambió cuando trabajaba en Bongwonsa, el templo sede de la orden Taego del budismo coreano, en Sinchon, Seúl, donde estuvo bajo la tutela de Lee Gwang-gyu, que había aprendido la carpintería palaciega tradicional. Su adiestramiento bajo el perfeccionista Lee era duro pero gratificante. Ambos colaboraron en la construcción de Hoamjang, la residencia personal del ya fallecido fundador de Samsung Lee Byung-chul, en Yongin, provincia de Gyeonggi-do. Luego, conocer al maestro de Lee, Cho Won-jae, mientras hacía obras de renovación en el Tesoro Nacional número 1, la puerta de Sungnyemun (Namdaemun), fue otro punto de inflexión en su carrera.
Participó más adelante en la rehabilitación de la residencia del primer ministro en Samcheong-dong, Seúl; de Korea House, en Pil-dong; del estanque Anapji, en Gyeongju; del salón de Josajeon de Guinsa, el templo principal de la orden budista Cheontae, en Danywang, provincia de Chungcheongbuk-do; y del salón de Geungnakjeon del templo de Muryangsa, en Buyeo, provincia de Chungcheongnam-do. Shin ha renovado varios edificios tradicionales importantes, incluyendo la antigua residencia de Lee Byung-chul en Itaewon, Yongsan-gu, Seúl, y el salón de recepciones Sangchundae para invitados extranjeros en Cheongwadae. También ha rehabilitado estructuras prominentes, como los palacios de Changgyeonggung y Changdeokgung. Entre otros proyectos suyos están Hangnokjeongsa, Simwonjeongsa y Damyeongjae (visitado por la reina Isabel II de Inglaterra), en la Aldea Folclórica de Hahoe, Andong, provincia de Gyeongsangbukdo, designada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. “El mayor desafío de toda mi vida son los veinte años que he pasado restaurando Gyeongbokgung”, afirma Shin. “Gracias a la arrebatadora pasión que siento por los palacios y la arqui-
1 Se podría decir que Shin Eung-soo ha vivido en varios palacios de Joseon durante los últimos 35 años, lo que le convierte en el mayor experto en su construcción y arquitectura
2 Durante las obras de reconstrucción de la puerta de Gwanghwamun, estuvo cubierta por una estructura y fachada temporales. 26 Koreana | Invierno 2010
1
2
tectura tradicional en general, cultivada por mis dos maestros, he podido salir airoso de todas las vicisitudes durante ese tiempo. Para un carpintero como yo, luchar con la madera es inevitable, y gracias a esa incesante pelea con ese material, he logrado llegar donde estoy sin demasiados problemas”. Shin declara que esta reforma del palacio es la “rehabilitación de la historia de Corea”. “Hubo muchas críticas en la sociedad cuando el antiguo edificio del Gobierno nipón fue derruido, pero ahora que hemos completado la primera etapa de restauración del palacio, creo que el ex presidente Kim Young-sam tomo la decisión correcta. Fue orden suya que se derribara y que se reconstruyeran la cámara del rey, Gangnyeongjeon, y de la reina, Gyotaejeon. Tras el anuncio, vinieron legiones de turistas japoneses. Era increíble ver tal cola de personas esperando a hacerse una foto delante del edificio que iba a desaparecer. Creo que sentían nostalgia porque se borraba un símbolo colonial suyo. En cuanto al orgullo nacional, la decisión de derruirlo fue la correcta”. Shin ha pasado los últimos 35 años sumergido en una “vida palaciega”, supervisando toda la obra de carpintería desde la restauración de Changgyeonggung en 1985. Más de tres décadas después de vivir casi exclusivamente en las residencias de la realeza de Joseon, incluyendo Deoksugung y Changdeokgung, aparte de los ya mencionados, se ha convertido en una enciclopedia andante. “Después de trabajar en esos lugares durante
tanto tiempo, parece que tengo una viga transversal sobre mis hombros”, dice con cierta vergüenza. “Gyeongbokgung tiene una historia trágica. La mayoría de los palacios de Seúl quedaron reducidos a cenizas durante la invasión nipona de 1592, pero éste fue abandonado hasta 1865, cuando Heungseon Daewongun puso en marcha un gran proyecto de reconstrucción para levantar de nuevo todos los edificios del recinto. Sin embargo, durante el periodo colonial nipón fueron demolidas unas 200 edificaciones. Sólo quedaron una docena, entre los que estaban Gyeonghoeru y Geunjeongjeon. Pero no tuvieron suficiente con construir su edificio del Gobierno justo delante de Geunjeongjeon. Fueron incluso capaces de vender materiales de construcción a distintos individuos, que no dudaron en convertirse en saqueadores culturales y llevarse los mejores objetos a Japón”. La Administración del Patrimonio Cultural comenzará la segunda fase de restauración de Gyeongbokgung en 2011, que terminará en 2030, con un presupuesto de unos 540.000 millones de wones (unos 470 millones de dólares). “Personalmente, el edificio que quiero rehabilitar es la cocina, que aparecía en la serie televisiva Una joya en el palacio (Dae Jang Geum ), que comenzó la “Ola” coreana. Ya se ha hecho la excavación e incluso existen los planos pero se suspendieron las obras. Gracias a la popularidad internacional de esa telenovela, cada vez más visitantes al palacio quieren ver Sojubang, la cocina. Existe gran Invierno 2010 | Koreana 27
1
curiosidad sobre la vida diaria aquí, algo que incluye también los baños. Por ello, la planificación de la próxima fase de restauración debe tenerlo en cuenta. Según él, de todos los edificios rehabilitados, la puerta de entrada es el mejor tanto desde el punto de estética como de técnica arquitectónica. “La más bella de todas las construcciones en las que he trabajado es Gwanghwamun. Gangyeongjeon y Gyotaejeon son más grandes, pero son las habitaciones del rey y la reina. Sus aleros tienen una curva suave, atractiva, pero, en general, no pueden compararse con la majestuosidad de la entrada”. Shin nos recuerda un incidente menor: “Teníamos una fotografía de la parte interior inferior de la puerta. Tallé los dibujos que aparecían en la instantánea, pero luego descubrí que eran del Tesoro número 1, Heuninjimun (Dongdaemun)”, explicó. “Mientras trabajábamos en los dibujos de dentro, se descubrió el libro Documentos ilustrados de lugares históricos 28 Koreana | Invierno 2010
de Corea , compilado por las autoridades coloniales niponas, y fuimos capaces de poner los dibujos correctos, pero casi metemos la pata hasta el fondo”. El grosor de los aleros de la puerta fue aumentado por su insistencia en hacerlos de 21 cm y no de 15, como dicen los documentos nipones del mismo periodo. Gracias a sus esfuerzos, son más resistentes y pueden alzarse más, lo cual añade más dignidad a la edificación. Respeto por los árboles Para los carpinteros de palacios, la madera lo es todo. Buscan los árboles adecuados, los cortan y dan forma al material con un cepillo. Me preguntaba por su “filosofía de la madera”, ya que ha pasado toda la vida buscando los pinos coreanos ideales en las montañas del país. “Uno debe pensar tres veces antes de cortar un árbol o de cepillarlo. Debo considerar, basándome en su grosor y la curvatura del tronco y ramas, si es adecuado para una tarea específica o debe dejarse que madure
y usarlo como viga en el futuro. Cada uno necesita un año para expandirse uno o dos milímetros, pero por un error de juicio, un carpintero puede dar al traste con años de crecimiento que nunca pueden recuperarse. A menudo, vemos a políticos que no se lo piensan dos veces antes de traicionar a sus oponentes o hacer comentarios hirientes, pero cuando cambia el partido en el gobierno, dicen algo totalmente diferente. Si todos fueran como los carpinteros, que han de ser cautos con la madera, no habría tanta palabrería”. “He estado en las montañas tan a menudo que, cuando paso bajo un árbol, agacho la cabeza automáticamente. Es duro cortar un pino viejo”, nos comentó. “Deberíamos pensar que tienen carne y sangre”. Por esto, realiza un rito singular antes de talar uno. “Primero, hago una ofrenda y luego rezo para consolar su espíritu. Después, levanto mi hacha y digo ‘¡es orden del rey!’ tres veces antes de cortarlo. Mientras lo digo, miro su copa. Si uno no lo respeta, pueden ocurrir accidentes durante la construcción. Nunca estoy tranquilo cuando corto uno centenario. Este ritual me lo enseñó el abad de un templo, donde estaba construyendo un anexo. Me dijo que ayudaría a evitar percances”. “Me explicó cómo los árboles son seres vivos y no deberían caer sin una ceremonia que les muestre respeto. La frase de que ‘es orden del rey’ es muy adecuada para mí, ya que soy carpintero y trabajo en palacios”. “Quizá sea por ese ritual, pero no he tenido, afortunadamente, incidentes importantes en Gyeongbokgung. Tampoco en Gwanghwamun ni en otros palacios”, añadió. “Me siento orgulloso de haber conseguido madera durante 20 años sin percances, ya sea en las montañas o en los lugares de construcción”. Actualmente, supervisa la reconstrucción de Sungnyemun, que fue arrasada por un fuego en 2008, y la construcción de un anexo de estilo tradicional al Parlamento, en Yeouido. La ma-
2
dera que usa en el primero se está secando en Gwanghwamun. La restauración se completará a finales de 2012. “El anexo del Parlamento, que terminaremos a finales de este año, será un buen ejemplo de la maravillosa arquitectura tradicional coreana, que podrán ver con sus propios ojos los líderes políticos extranjeros”.
1 Tras la muerte de un rey o reina de Joseon, su cuerpo se colocaba temporalmente en el sepulcro de Taewonjeon hasta que recibía sepultura permanente en una tumba para la realeza.
2 Columnas de madera de los corredores de Geunjeongmun.
3 Nogeumjeong, ejemplo de la arquitectura tradicional coreana, se halla en el recinto de Korea House, un restaurante popular de la capital.
3
Invierno 2010 | Koreana 29
Una gira por el palacio de Gyeongbokgung Tras alejarnos de la plaza donde están las estatuas del almirante Yi Sun-shin y del rey Sejong, pasamos por la puerta de Gwanghwamun y entramos en Gyeongbokgung, momento en el que olvidamos que acabábamos de estar en medio de un bosque de edificios en el centro de la ciudad. Ahora se inicia nuestro viaje en el tiempo, a la Dinastía Joseon. Charles La Shure Profesor de la Escuela de Posgrado de Interpretación y Traducción de la Universidad Hankuk de Estudios Extranjeros Suh Heun-gang, Ahn Hong-beom Fotógrafos
N
uestra ruta comienza en la zona sur de la plaza de Gwanghwamun, en el cruce entre las calles de Sejongdaero y Jongno. Hay formas más rápidas de acceder al palacio, como la salida cinco de la estación de metro de Gyeongbokgung, en la línea número 3, de color naranja, de donde se accede directamente. El autobús turístico de Seúl también tiene parada aquí, pero queríamos dar una vuelta primero por los alrededores. La plaza de Gwanghwamun, entrada al palacio En la zona sur, entre inmensos chorros de agua, está la estatua del almirante Yi Sun-shin. Este militar, uno de los grandes héroes del país, defendió Corea de los ataques de la marina nipona en el siglo XVI. Detrás de este monumento está el acceso a Haechi Madang, una sala subterránea que sirve de entrada al metro. Por aquí hubiéramos salido si nos hubiéramos bajado en la estación de la línea 5, la púrpura, que recibe el nombre de la plaza. En esta área está el centro integrado de información y venta de entradas conocido como Sejong Belt, donde podemos comprar billetes para unos 30 museos y salas de conciertos, como el Museo Nacional de los Palacios y el Museo Folclórico Nacional, ambos situados en el recinto de la antigua residencia real. Más al norte, hallamos la estatua de uno de los principales héroes culturales de la nación: la del rey Sejong el Grande, que aparece sentado plácidamente en su trono con una mano sobre un libro abierto, el texto del 30 Koreana | Invierno 2010
Hunminjeongeum (sonidos adecuados para instruir al pueblo). Este sistema de escritura es la base del moderno alfabeto coreano, el hangeul . Delante de este monumento hay una gran losa donde se ha grabado la introducción del monarca a dicho volumen, junto con una traducción moderna. También podemos ver otras importantes invenciones coreanas: un reloj de sol cóncavo, un pluviómetro y un reloj mundial astronómico. Continuamos hacia el norte, pasamos por un arriate y llegamos al final de la plaza. Al otro lado de la calle está la puerta de Gwanghwamun, la imponente entrada al recinto palaciego. Hay tres arcos en la base, sobre la que se alza una techumbre de madera de dos pisos. A ambos lados, dos estatuas de piedra de haetae , criaturas míticas mitad león y mitad unicornio. Parecen aterradores, pero no suponen ninguna amenaza; están ahí para proteger el monumento contra el fuego, el mayor peligro de los palacios coreanos, construidos con madera. El Palacio Exterior y el asiento del Poder Una vez hemos entrado, nos hallamos en un gran patio con un camino de piedra flanqueado por banderas que nos lleva a un segundo acceso. El tránsito
1 Mojones de piedra delante de Geunjeongjeon para designar el lugar donde se reunían los funcionarios de la corte, según su rango, en las audiencias con el rey.
2 En el centro de la capital, Gwanghwamun 1
ofrece una vía de entrada a un viaje a la época de la Dinastía Joseon.
Invierno 2010 | Koreana 31
2
de los oscuros arcos de Gwanghwamun al resplandor del patio es como salir de un sendero en medio del bosque para hallar un magnífico paisaje; no podemos evitar parar un momento para absorber todo. Aunque la segunda puerta al palacio, Heunghyemun, es más pequeña que la primera, el espacio de la explanada entre ambas y los picos de Bugaksan en la lejanía la agrandan. Mientras nos dirigimos a esta estructura vemos manchas de distintos colores: amarillo, azul y rojo brillantes. Al acercarnos, se convierten en guardias que vigilan la entrada con estandartes y archas. Como toda guardia ceremonial, ya no están a cargo de mantener alejada a la gente, aunque siguen en su puesto, sin importarles qué artilugios modernos puedan apuntarles. Una vez cruzamos Heungnyemun entramos en el recinto del palacio. A la derecha está la taquilla, donde una entrada, que cuesta unos 3.000 wones (unos 2,5 dólares) por adulto, la mitad para visitantes de entre 7 y 18 años y gratis para los niños, nos da derecho a verlo a nuestro ritmo. En este lugar
32 Koreana | Invierno 2010
1
empiezan también las visitas guiadas, que duran una hora. Las realizadas en inglés son a las 11:00, 13:30 y 15:30 todos los días. Lo primero que vemos es que el camino de piedra se divide en tres secciones, dos laterales más bajas para los vasallos y una central más elevada para el rey. Seguimos hacia el norte, para lo que hemos de cruzar un pequeño arroyo conocido como Geumcheon. Estos riachuelos son comunes en los templos y simbolizan el paso de lo mundanal a lo sagrado. También sirven para separar espacios en los palacios, pero más políticos que espirituales: durante las audiencias con el rey, los funcionarios de mayor rango se situaban al norte y los de menor rango al sur. Tras cruzarlo, nos topamos con otra puerta: Geunjeongmun, que nos lleva al patio principal del recinto. Al norte está Geunjeongjeon, el salón del trono, la construcción más imponente. Hay dos hileras de mojones que flanquean la vía central, que marcaban dónde habían de situarse los distintos funcionarios durante las audiencias con el rey, más cerca del monarca
2
3
Hay dos hileras de mojones que flanquean la vía central, que marcaban dónde habían de situarse los distintos funcionarios durante las audiencias con el rey, más cerca del monarca cuanto mayor rango. Uno de los pasatiempos favoritos de los visitantes es tomarse fotos junto a los que marcan las posiciones de los empleados públicos de mayor categoría.
1 La entrada del palacio siempre está repleta de visitantes coreanos y extranjeros deseosos de ver el recinto.
2 Podemos ver una gran estatua del rey Sejong cerca de la puerta de Gwanghwamun.
3 La X Exhibición de Artesanos Patrimonios Culturales se llevó a cabo en Heungnyemun.
cuanto mayor rango. Uno de los pasatiempos favoritos de los visitantes es tomarse fotos junto a los que marcan las posiciones de los empleados públicos de mayor categoría. Esta construcción es un edificio de dos plantas levantado en una base de piedra de dos niveles. De lo alto de las escaleras que ascienden a él, estatuas de piedra de animales del zodiaco nos vigilan desde sus pedestales. Cuando llegamos, vemos que el salón es una sola habitación con un tejado abovedado. El trono domina el espacio. Detrás, un cuadro del sol, la luna y cinco montes. Son todos símbolos de la realeza, por lo que sólo el monarca podía poseer una pintura así. Desde fuera no se puede ver ver, pero si nos inclinamos sobre la barandilla y miramos hacia arriba advertiremos dos dragones dorados en lo más alto del techo. Al igual que el sol y la luna, este animal mítico también es símbolo del soberano. Detrás de este edificio, pasamos por una pequeña puerta y llegamos a un espacio menos intimidatorio, más tranquilo, justo delante de Sajeongjeon. Aquí es donde el monarca despachaba diariamente los asuntos de la nación con sus ministros. El nombre, Geunjeongjeon, significa “Salón del Gobierno Diligente”, un título apropiado para un espacio de tal magnitud. Sajeongjeon, sin embargo, quiere decir “Salón del Gobierno Reflexivo”, nombre que pretende destacar la seriedad del cargo.
Hay dos construcciones: Manchunjeon al este y Cheonchujeon al oeste, ambas equipadas con calefacción por suelo radiante, por lo que probablemente se usaban en los meses más fríos. Antes de dejar el perímetro del palacio, echamos un vistazo alrededor. Uno de los rasgos más distintivos de la arquitectura tradicional coreana son los ondulantes aleros de las cubiertas de semicopete, y aquí podemos verlos de cerca. Algo en los de Sajeongjeon nos atrae: hay una hilera de pequeñas estatuas, algo que podemos ver, de hecho, en todos los edificios del palacio, incluyendo Gwanghwamun. Aquí, sin embargo, podemos verlas más de cerca. Incluso a esta distancia, es difícil distinguirlas, pero son representaciones del monje Tripitaka (o Xuanzang) y su séquito, incluyendo al Rey Mono (o Sun Wukong), del clásico chino Viaje al Oeste . Estas tallas se ponían sólo en los edificios palaciegos como protección contra los espíritus malignos. El Palacio Interior y los jardines traseros Dejamos detrás el Palacio Exterior, conocido así porque era donde el rey interactuaba con el mundo, el de fuera, y entramos en el Interior, donde habitaba la familia real. Al este de Sajeongjeon hay un pequeño recinto conocido como el “Palacio Oriental”, o Donggung. Aquí vivía el príncipe heredero, y está en este lugar por un motivo: al ser el siguiente en la línea sucesoria, representaba el sol naciente del país. Al norte del mismo edificio está Gangnyeongjeon, la residencia del monarca, y detrás Gyotaejeon, la de la reina. Algo interesante que destacar de estas dos construcciones es que son los únicos edificios sin caballetes en los tejados. La palabra coreana para este elemento arquitectónico es yongmaru , que hace referencia al dragón. Algunos dicen que estas edificaciones Invierno 2010 | Koreana 33
carecen de él porque este animal mitológico simboliza al rey. Después de todo, no sería apropiado que dos reyes residieran en la misma vivienda. Es posible, pero nadie sabe el motivo de la diferencia. Damos la vuelta a Gyotaejeon y nos hallamos con el único espacio verde en el centro del palacio. Es el jardín en bancales de Amisan, adornado con matorrales, esculturas y bellas plantas que se tiñen de rosa y blanco en primavera. En la zona más occidental, hay un pino venerable que se inclina sobre el patio. La característica más destacada de este espacio son las chimeneas de ladrillo de color rojo anaranjado alineadas en lo alto. Aparte de su función propia, son obras de arte, con relieves de plantas y animales. Seguimos al norte y dejamos atrás el recinto principal. A 34 Koreana | Invierno 2010
nuestra derecha está la residencia de la matrona de la reina y delante dos edificios destinados a las concubinas del rey. Más allá, en el área más septentrional del palacio, está Geoncheonggung, construida por el rey Gojong como refugio de paz y solitud en tiempo de tribulaciones. Hay un estanque cubierto de lotos en cuyo centro se alza un cenador que realmente es tranquilo. Los visitantes se relajan en los bancos cercanos. Las construcciones de esta área tienen una apariencia distinta a la de la mayoría de los edificios palaciegos. Tienen los mismos tejados ondulados, pero la madera no está pintada con colores brillantes y un rojo intenso como es habitual. No son tan grandiosas, pero poseen un encanto sutil e irresistible. Es difícil de creer que este lugar tan apacible fue escenario de un episodio tan trágico como el asesinato de la emperatriz Myeongseong.
1 Hyangwonjeon, un área idílica para que la familia real disfrutara de un momento de tranquilidad en un bello entorno, fue construida conjuntamente con Geoncheonggung.
2 La balaustrada de Geunjeongjeon está adornada con esculturas de los 12 animales del horóscopo oriental.
1
2
Hacia el este podemos ver la gran pagoda del Museo Folclórico Nacional, pero nos dirigimos al oeste, hacia Jibokjae, un edificio que, junto con sus alrededores, forma uno de los lugares más intrigantes del palacio, ya que tiene elementos arquitectónicos que no se pueden hallar en ningún otro lugar de Gyeongbokgung. Lo primero que nos llama la atención de esta construcción es que los muros son de ladrillo. Tiene dos pisos y escaleras en el interior. Según nos acercamos, podemos divisarlo; es sorprendente ver la puerta redondeada de estilo chino al final del salón principal. Esta entrada conduce a un corredor que se dirige hacia un cenador de dos plantas situado en el oeste y hacia un edificio más tradicional al este. No sólo es interior, sino que, a diferencia de la mayoría de las construcciones tradicionales coreanas, tiene ventanas con cristales. Mientras que el palacio en su conjunto preserva los principios de la arquitectura tradicional, el área de Jibokjae nos indica que se había empezado a aceptar algunas convenciones foráneas y modernas en la edificación. Más al oeste, escondido en el rincón más noroccidental del recinto palaciego, hay un santuario, donde se traía a los miembros de la familia real fallecidos y donde se guardaban sus tablillas funerarias antes de trasladarlas a Jongmyo, y donde se consagraban. Esta área es la región más aislada del palacio y suele ser, naturalmente, la más tranquila. Nos quedamos un rato aquí sumidos en su quietud. Es momento de volver al sur, hacia Gwanghwamun. Nos espera una última atracción: el pabellón “flotante” de Gyeonghoeru, situado en una isla en la orilla oriental del estanque del palacio. Su reflejo puede verse desde las otras tres direcciones. Al oeste hay dos pequeñas islas con elegantes pinos. Muchos visitantes descansan en los bancos que rodean este lago ya que merece la pena pasar un rato relajado disfrutando de la serenidad de este edificio. En la orilla meridional hallamos nuestra última parada: Sujeongjeon. Cuando Gyeongbokgung fue restaurado en 1867, fue reconstruido como residencia, pero el edificio que estaba aquí originalmente era Jiphyeonjeon, o Salón de Ilustres, el lugar de nacimiento del hangeul . Desaparecen las grandes puertas y edificios de este palacio para dar paso a las transitadas calles del centro de Seúl pero, con su recuerdo, podemos ver esta ciudad moderna como una capital con 600 años de rica historia. Invierno 2010 | Koreana 35
FOCO
Las aldeas de Hahoe y Yangdong declaradas Patrimonio de la Humanidad Las aldeas tradicionales de Hahoe y Yangdong, ambas en la provincia de Gyeongsangbuk-do, han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Por ello, se han convertido en recursos culturales que hay que compartir con todo el mundo, lo cual requiere esfuerzos de preservación adicionales por parte de Corea. Lee Sang-hae Profesor del Departamento de Arquitectura de la Universidad Sungkyunkwan y presidente de ICOMOS-Corea Suh Heun-gang Fotógrafo
Una vista panorámica del pueblo de Hahoe, en la orilla del Nakdonggang. El nombre del municipio significa “aldea rodeada por un río”. | Invierno 2010 36 Koreana
E
n su trigésimo cuarta reunión (26 de julio-3 de agosto), el Comité del Patrimonio de la Humanidad aprobó la designación de dos poblaciones en la provincia coreana de Gyeongsangbuk-do: Hahoe, en Andong, y Yangdong, en Gyeongju. La fecha oficial de inclusión en la lista es el 1 de julio de este año, y la entrada dice: “Aldeas históricas de Corea: Hahoe y Yangdong”.
Hahoe y Yangdong La primera está situada en Pungcheon-myeon, Andong, mientras que la segunda se halla en el distrito de Gangdong,
Gyeongju, ambas en la provincia de Gyeongsangbuk-do, en el sureste de Corea. Es de destacar que las dos son representativas de las aldeas de clanes aristocráticos de la Dinastía Joseon (13921910). Hahoe fue fundada a finales del periodo anterior, el de Goryeo (918-1392), y Yangdong a principios de Joseon. Este tipo de población de clan se conoce como jipseongchon (aldea de clan) o dongseongmaeul (aldea del mismo apellido). La primera fue creada por el clan Ryu de Pungsan y la segunda es la del clan Son de Wolseong y el Yi de Yeogang. La formación de un pueblo de estas características dependía de la forma en que el progenitor de la familia, o iphyangjo (ante-
Invierno 2010 | Koreana 37
1
pasado fundador de la aldea) llegó y se asentó en el área. Estaba el tipo pionero, que se iba de un lugar y se establecía en otro, que es el caso de Hahoe. Otro método era por matrimonio: el marido se traslada al pueblo de su familia política, donde reside su descendencia de forma permanente. Yangdong es un ejemplo. El clan Ruy vivía originalmente en Pungsan, en el área de Andong, pero hace unos 600 años Ryu Jong-hye se marchó y se instaló en este lugar, que se denominó Hahoe, porque había quedado muy impresionado por su paisaje y su entorno natural. Sus descendientes han vivido aquí desde entonces. Por otra parte, Yangdong fue fundada por Son So (1433-1484), después de
38 Koreana | Invierno 2010
3
2
casarse con una hija de Ryu Bok-ha, residente de ese lugar, y se trasladó allí en 1457. Era habitual en esa época que los maridos se trasladaran al pueblo de la familia de su esposa. Después, Yi Beon (1463-1500), precursor del clan Yi de Yangdong, se casó con una hija de Son So y se trasladó a esa aldea, donde viven sus descendientes hasta hoy. Los tres clanes lograron pertenecer a la aristocracia por la relevancia que dentro de la Dinastía alcanzaron varios miembros.
Patrimonio de la Humanidad Según la Guía Operativa para la Implementación de la Con-
1 Esta vieja zelkova de 600 años es un punto de referencia de Hahoe. 2 El salón principal de Anrakjeong, en la aldea de Yangdong. 3 Desde su inclusión en la Lista del Patrimonio de la Humanidad, el número de visitantes a Hahoe ha aumentado, lo que exige medidas de preservación más amplias.
4 Una colección de obras del escritor Ryu Seong-ryong (1542-1607, de pseudónimo Seoae). El clan Ryu de Hahoe es famoso porque varios de sus miembros fueron personajes destacados durante la Dinastía Joseon.
4
vención sobre el Patrimonio Mundial de la UNESCO, para que un bien cultural sea incluido en la Lista, debe considerarse que posee un “indiscutible valor universal” y satisfacer criterios específicos relacionados con cualidades como “autenticidad” y/o “integridad”. Con la primera se refiere a un lugar con un valor cultural o natural tan excepcional que merezca traspasar las fronteras nacionales y por eso ha de preservarse para las generaciones presentes y futuras de toda la humanidad. Para que una propiedad o un área sean elegidos, tienen que satisfacer uno o más de los 10 criterios enunciados en la Guía. Hahoe y Yangdong cumplían el tercero (“Aportar un testimonio único o al menos excepcional de una tradición cultural o de una civilización existente o ya desaparecida”) y el cuarto (“Ofrecer un ejemplo eminente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico o tecnológico o paisaje, que ilustre una etapa significativa de la historia humana”). Dependiendo de su tipo y contexto cultural, una propiedad o sitio cumple el requerimiento de “autenticidad” si sus valores culturales se expresan auténtica y creíblemente en una variedad de atributos. El Comité del Patrimonio de la Humanidad define esos atributos como forma y diseño, materiales y substancia, uso y función, tradiciones, técnicas y sistemas de gestión, situación y entorno, idioma y otras formas de valores intangibles, espíritu y sentimiento, y otros factores internos y externos. Hay una evaluación más respecto a los criterios históricos, sociales e intelectuales. La inclusión en la Lista, especialmente para un lugar cultural, depende principalmente de su “autenticidad”. Hahoe y Yangdong cumplieron el criterio de evaluación y fueron incorporados. Hay que hacer notar que los sitios incluidos antes se clasificaban como Patrimonio Cultural o Natural. Hasta finales de 2004, se aplicaban seis criterios para el primero y cuatro para el segundo. Después, se combinaron los diez para la evaluación en ambas. Un bien se considera genéricamente “Patrimonio de la Humanidad” a no ser que se especifique que es de uno u otro tipo. Los dos pueblos coreanos fueron inscritos como culturales. “Integridad” es una cualidad para evaluar si un candidato incluye los componentes necesarios para considerarse de “indis-
cutible valor universal”, además de determinar si sus componentes tienen un significado adecuado para mejorar la importancia del bien y representar sus características y si hay factores que pueden afectar su importancia negativamente. Ambas poblaciones han preservado los cuatro componentes con que una aldea de clanfamilia se relaciona: vida cotidiana; funciones oficiales, que incluyen el santuario para los antepasados, o sadang; salón de conferencias y sala en memoria de los eruditos confucianos, o seowon, y cenadores tradicionales; entorno natural de río y montaña; y arrozales y huertas para el mantenimiento de los habitantes.
Designación de ambas Hahoe y Yangdong han sido incluidas en la Lista porque preservan la herencia representativa del confucianismo en los países del Este de Asia. Ambas fueron fundadas y crecieron influidas por el neoconfucianismo de Joseon, la clase aristocrática (yangban), y el pungsu (feng shui), o principios geománticos. La distribución de las viviendas y elementos destacados son singulares cuando se comparan con otras villas tradicionales de Corea y de Asia. Ambas han sido evaluadas muy positivamente por varios motivos. Aparte de ser las más antiguas de Corea en preservar la singular cultura de la aristocracia de la Dinastía Joseon, son auténticas aldeas de clan con construcciones típicas del país. Un pueblo de estas características tiene una distribución centrada en el rango social. La casa de la familia principal y la de las secundarias están situadas en el centro o en el punto más elevado y están rodeadas por viviendas de los aristócratas, mientras que las de los plebeyos están más alejadas. Esta coexistencia de ambas clases en la misma población no se ve en China o Japón. Los yangban, como élite del pueblo, tenían un santuario para los antepasados como parte de la residencia principal o de una secundaria como señal de respeto. La población también incluye una academia-santuario (seowon ) y una escuela (seodang ) confucianas, instituciones esenciales para que los aristócratas se prepararan para las oposiciones al funcionariado y así mantener su estatus, aparte de un edificio separado y un cenador donde los eruditos se dedicaban a actividades académicas o culturales. Invierno 2010 | Koreana 39
Ambas han sido evaluadas muy positivamente por varios motivos. Aparte de ser las más antiguas de Corea en preservar la singular cultura de la aristocracia de la Dinastía Joseon, son auténticas aldeas de clan con construcciones típicas del país.
1
2 1 En Hahoe, Ryu Un-ryong (1539-1610) se dedicó a la erudición en Binyeonjeongsa, con una buena vista del paisaje de la zona.
2 Se celebran rituales confucianos regularmente para honrar a los eruditos y hombres de estado más distinguidos.
3 Yangdong sigue la distribución por rango social típica de un pueblo de clan, por lo que la casa de la familia principal está situada en el centro o en el punto más alto.
40 Koreana | Invierno 2010
Para aprovechar el entorno natural, los aldeanos, basados en los principios geománticos, identificaban lugares auspiciosos para distintos edificios. Atribuían importancia a distintos accidentes geográficos, como ríos y montañas, y consideraban su influencia en el pueblo. El feng shui chino enfatiza la significación primordial de los cuatro puntos cardinales, además de las direcciones (delante, detrás, derecha e izquierda), que a menudo conduce a la construcción de un estanque o arroyo frente al poblado o en su interior. La versión coreana (pungsujiri), sin embargo, interpreta el entorno natural de forma individual, centrándose en mantener las características geográficas existentes. La residencia del aristócrata se adecua al estilo básico de una casa típica coreana, o hanok, construida típicamente con un suelo normal (maru) para las salas abiertas, y un sistema de calefacción por suelo radiante (ondol ), para las habitaciones interiores. Los distintos edificios que componen una residencia hanok se utilizan para distintas funciones. Hallamos también patios tras los muros exteriores, que sirven de espacio para actividades al aire libre. De este modo, se diferencia de la vivienda china, conocida como sahapwon (siheyuan), que tiene un patio cerrado. Se distingue también de la japonesa, que está compuesta por una sola edificación con distintas habitaciones para las diferentes funciones. La planta de las coreanas tiene la forma de las letras ㄱ, ㄷ o ㅁ. Una aldea coreana normal consiste en distintas residencias y edificios separados y rodeados por muros exteriores e interiores. Los senderos curvos a lo largo de las tapias de las residencias privadas llevan a la entrada del pueblo naturalmente sin el diseño existente en las poblaciones de desarrollo planificado con calles en forma de cuadrícula. En China, tienen una distribución más ordenada de casas y muros a lo largo de caminos rectos. La residencia principal del clan tiene un santuario para los antepasados, con edificios y habitaciones que deben seguir estrictamente el protocolo relacionado con el sexo y la clase social. Estas costumbres reflejan una profunda veneración de los principios confucianos. En Japón, cada hogar tiene un santuario dentro de la casa para presentar respetos a los antepasados, mientras que en China, un edificio comunitario alberga ese espacio para el clan de la aldea. Hahoe y Yangdong han preservado cuidadosamente la anti-
3
gua tradición arquitectónica coreana en las viviendas, cenadores y academias y salas de estudio confucianas. Además, los residentes realizan rituales para venerar a eruditos y políticos distinguidos más frecuentemente que cualquier otra aldea, aparte de mantener una gran colección de obras literarias y distintos objetos antiguos de los antepasados. Se celebran las ceremonias de iniciación tradicionales y varios juegos folclóricos que desempeñaron un papel importante durante la Dinastía, que se basó en los principios confucianos para gobernar el país. Estas dos poblaciones destacan por sus valores históricos, culturales, intelectuales y estéticos. Están situadas en entornos naturales magníficos, junto a un río, en medio de un frondoso valle. Representan, además, los dos métodos de formación de una aldea de este tipo: la del pionero fundador y la creada por matrimonio. Son, así, ejemplos auténticos de aldea de clan.
Tareas futuras Todos los lugares y bienes inscritos en la Lista del Patrimonio de la Humanidad deben ser protegidos por medio de la ley, regulaciones, instituciones y sistemas de gestión para que su destacado valor universal, autenticidad e integridad puedan mantenerse y potenciarse. En este sentido, la nación donde está debe demarcar el área y establecer un límite y una zona parachoques. El área es donde está el bien, mientras que se designa una zona
adyacente para proteger sus recursos. Para hacerlo, se restringe generalmente cualquier tipo de construcción en dicho cordón de seguridad. Hahoe y Yangdong han sido inscritas conjuntamente como lugar combinado con una única entrada. Por ello, se necesita un sistema de gestión combinado para ambas, aunque pertenezcan a distritos administrativos distintos. Para coordinar el proceso, las ciudades de Andong y de Gyeongju, junto con la Administración del Patrimonio Cultural del Estado crearon el Cuerpo Consultivo para la Preservación de Hahoe-Yangdong el 30 de abril pasado. Asimismo, para mantener la autenticidad de las dos hay que desarrollar nuevas ideas que aseguren la calidad de la restauración y el empleo de material. En cuanto a su integridad, se debe prestar atención a mantener el entorno natural. Por ello, el plan de construcción de una presa en el río que fluye entre Hahoe y el precipicio que está delante, conocido como Buyongdae, incluido en el “Proyecto de los Cuatro Ríos” del Gobierno, parece que será suspendido. Una última tarea, pero muy importante, es prepararse para un posible aumento del número de visitantes en un futuro cercano. Los residentes del lugar deben involucrarse en todas las iniciativas oficiales y su puesta en marcha. Los planes para el desarrollo del lugar como centro turístico deben tener en cuenta la privacidad de los habitantes. Invierno 2010 | Koreana 41
ENTREVISTA
La expresión de esperanza y compasión de la novelista Shin Kyung-sook Shik Kyung-sook es una de las escritoras más admiradas de la actualidad. Una obra suya reciente, Eommareul
butakhae (cuida de mamá) fue la más vendida el año pasado. Se ha llegado a acuerdos de publicación con editoriales de 19 países. Saldrá al mercado una traducción al inglés en la editorial Alfred A. Knopf, perteneciente al grupo estadounidense Random House, el 8 de abril del próximo año. Casi simultáneamente, aparecerán traducciones de esta novela a sus respectivos idiomas en Francia, Alemania, España, Italia, Holanda y Noruega. Choi Jae-bong Periodista del Hankyoreh Shinmun
“Sigo escribiendo novelas con la esperanza de que pueda dar aliento y revivir con cariño maternal lo que está muriendo”.
C
on Punggeumi itdeon jari (donde estaba antes el armonio), una colección de relatos publicada en 1993, Shin Kyung-sook hizo una impresionante aparición en el núcleo de la literatura contemporánea coreana. El libro la convirtió en la principal escritora de novelas de estética coreana de los años 90. Además, fue un éxito comercial, algo raro para una antología de cuentos. A partir de entonces, sus obras han sido muy elogiadas y han seguido vendiéndose muy bien, convirtiéndola en la reina de la literatura de esa década.
Evocación emotiva En 1985, comenzó su andadura literaria con un relato publicado en una revista especializada, lo que llevó a la edición de su primera colección de cuentos de ficción, Gyeoul uhwa (fábulas de invierno) en 1990. Su carrera como escritora se había iniciado la década anterior, en medio de las represivas dictaduras militares, que provocaron enardecidas protestas de toda la sociedad en pro de la democracia. Con este telón de fondo, los escritores a menudo buscaron enfatizar la responsabilidad social. Sin embargo, una visión demasiado cerrada de su capacidad para dar forma a la reforma social condujo a la distorsión de su propósito primigenio y su autonomía creativa. Los escritores de las décadas posteriores reflexionaron seriamente sobre esta influencia. Es fácil, pues, imaginar cómo lo deprimente de este periodo influyó en la sensibilidad de nuestra escritora. Como más adelante explicaría en detalle, “pensó en la literatura en términos de su evocación emocional y no en su capacidad para fomentar el cambio social”. De este modo, se distanció de la ideología dominante en la literatura de los años 80. Cuando empezó a publicar sus cuentos en las revistas, que luego compiló en Gyeoul uhwa, los escritores coreanos no tenían una impresión positiva de “su estilo”, que puede entenderse si consideramos los sueños que contempla en su ensayo “Malhaejil su eomneun geotdeul” (lo indescriptible): “Adiós, ya que tu corazón no quiere escuchar a tu cerebro. Tristeza, belleza, cosas que han desaparecido, un mundo más allá de la lógica inaccesible para las mentes científicas, lo indescriptible. Todo ello. El deseo de dar aliento a los que la vida ha aplastado o los seres anónimos de los que nadie se preocupa. La sombra de la muerte, que nos acecha en cualquier lugar. El amor, impotente para superar el tiempo. La preocupación por lo inalcanzable. Anhelar lo que ya no está aquí… El sueño de representar lo indescriptible en mis escritos. El sueño de hacer volver lo que ha desaparecido, conduciéndolo a alcanzar su esencia y sumergiéndolo en la fragancia de la naturaleza. El inalcanzable sueño de enmarcar este momento para la eternidad”. A pesar del uso que hace de términos filosóficos como “representar” y “esencia”, este fragmento debe entenderse en términos de resonancia emocional y no de un enunciado objetivo o un argumento lógico. En sus novelas, Shin quiere expresar su verdad emocional, o interna, opuesta a una presentación lógica o fomentar grandes causas sociales. De este modo, nos revela un profundo interés y empatía por las limitaciones y debilidades de los individuos, impotentes cuando el inexorable paso del tiempo les lleva a enfrentarse a la separación o la muerte. Reconoce que sus historias quizá no resistan los estragos del tiempo, aunque tiene fe y esperanza en que ayudarán a consolar a aquellos en tribulación. Su estilo, palabras y oraciones, organizadas con un cuidado detallista, como las puntadas de un exquisito bordado, revelan adecuadamente la dedicada textura de los seres humanos y su realidad cotidiana. Shin sabe llenar lo trivial de lo mundano con una luminosidad poética.
Éxito temprano La literatura de Corea en la década de 1990, caracterizada por una reflexión crítica del decenio anterior, dio la bienvenida a las obras de Shin. Sus novelas armonizaban con la época. Ganó casi Invierno 2010 | Koreana 43
“El sueño de representar lo indescriptible en mis escritos. El sueño de hacer volver lo que ha desaparecido, conduciéndolo a alcanzar su esencia y sumergiéndolo en la fragancia de la naturaleza. El inalcanzable sueño de enmarcar este momento para la eternidad” (de su ensayo “Malhaejil su eomneun geotdeul” –lo indescriptible-).
Un editor dijo: “Shin generalmente pasa más de tres horas en una firma de libros porque disfruta del contacto personal con sus lectores”.
todos los premios literarios, como el Hankook Ilbo, el Today’s Writer, el Hyundai, el Manhae, el Dong-in y el Isu, todos en un periodo de tres a cuatro años, y antes de que se cumplieran 10 años desde su debut literario. Esto refleja la gran aceptación de sus obras por parte de lectores y críticos. El mundo de las letras del país elogió su narrativa, a pesar de las diferencias ideológicas en la sociedad. Changbi Publishers, Inc., una editorial progresista, la eligió para el premio Manhae por su novela Oettan bang (una habitación separada), donde recuerda sus días como trabajadora en una factoría mientras estudiaba el bachillerato superior. Changbi demostró su apoyo al “estilo de Shin Kyung-sook” al publicar su tercera antología de relatos Orae jeon jibeul tteonal ttae (hace tiempo, cuando me fui de casa), al igual que el reciente éxito Eommareul butakhae (cuida de mamá) Su tercera novela, tras Gipeun seulpeum (profunda amargura) y Oettan bang, es Gichaneun ilgopsie tteonane (el tren sale a las siete), que tiene como telón de fondo los movimientos en pro de la democracia de los años 80. Este tema, sin embargo, no debería considerarse “compensación” por el apoyo de la editorial y el premio Manhae. De hecho, Shin no fue totalmente inmune a las influencias de la lucha por democratizar el país por parte de los estudiantes ni de las reformas sociales de esa década en sus años de universitaria. Y esto también puede verse en Eodiseonga nareul channeun jeonhwaberi ulligo , su última creación. En sus narraciones, sin embargo, los asuntos políticos y sociales se tratan y se subliman por medio de la alquimia de sus recuerdos y heridas personales. “Siempre he hecho visible el entorno temporal por medio de los personajes. Creo que he revelado, de forma personal, la desfavorable realidad que forma la base de mis historias. Espero que la gente que sufre fracasos y angustia sea capaz de seguir adelante con sus vidas leyendo mis obras”, manifestó la escritora. 44 Koreana | Invierno 2010
Tras la prolificidad que mostró en los años 90, siguió con su vena creativa en la década siguiente. Tras la publicación de Ttalgibat (fresal), otra antología de relatos, en 2000, y la novela rescrita Baiolet (violeta) en 2001, dos obras más vieron la luz: Jongsori (el sonido de una campana) y una novela histórica en dos volúmenes, Lee Jin, que completó en 2007.
Eommareul butakhae Después de sus incursiones en el género histórico, regresó con otra narración típica –una historia de familias: Eommareul butakhae, en 2008, que se convirtió en otro gran éxito de ventas Esta novela gira en torno a la desaparición de una anciana, con síntomas de senilidad, y su familia, que se da cuenta tardíamente de lo mucho que la quiere y del importante papel que ha desempeñado en su vida. Se compone de cuatro capítulos y un epílogo, cada uno de ellos contado por un familiar: su hija, su hijo, su marido y ella misma. Es de destacar que al narrador de cada capítulo se refiere como “tú”, “tu hermano”, “tu padre” y “tu madre”. Al adoptar estos cuatro puntos de vista, el flujo narrativo ayuda al lector a entender mejor los personajes y circunstancias desde perspectivas múltiples. En el primer capítulo, la narración en segunda persona de la hija, se compara a ambas, la madre analfabeta y la hija novelista, con gran detalle. Al enterarse de que los libros de su hija se han publicado en braille para los ciegos, la madre dice: “Al menos, ellos pueden leer los libros que tú escribes”. Lo que quiere decir con estas palabras es que se lamenta de su incapacidad para poder hacerlo ella misma, a pesar de ser la madre y tener una buena vista. A causa de la angustia vital que le causa su analfabetismo, animó a su hija a educarse y convertirse en escritora. Esta, ante su repentina desaparición, se ve obligada a emplear su habilidad con las palabras para hallarla, así que escribe avisos para
pedir la ayuda de los vecinos. Mientras está en ello, se pregunta: “¿Ayudará una de tus oraciones a encontrar a tu madre?”. No hay gran necesidad de aplicar su habilidad como narradora a esos folletos, que sólo incluyen una foto reciente de la desaparecida y una lista de datos, como su nombre, edad, apariencia física y el lugar donde se perdió. Por ello, esta introspección puede no ser sólo sobre dicho papel, sino sobre toda la novela, que es un relato de la búsqueda de su madre y la revelación de su auténtico carácter, reconstruido por medio de los pensamientos de otros familiares. Aunque la anciana nunca regresa, el proceso de reflexión sobre los recuerdos que tienen de ella les da la oportunidad de conocerla de nuevo. La familia así descubre que nunca ha intentado conocerla o, inconscientemente, ha rehusado enfrentarse al hecho de que esa altruista abuela era una persona con su mundo singular y complejo, incluso antes de convertirse en madre y esposa abnegada. Esta obra es, pues, una búsqueda del amor y la esperanza provocada por un incidente trágico y la tristeza que causa. La novela más reciente de Shin, la ya citada Eodiseonga , retrata un rito iniciático que la protagonista, llamada Yun, y sus tres amigos (Myeong-seo, Miru y Dan), experimentan cuando, con sus veintitantos años, tienen que tratar con la amistad, el amor, la muerte y la separación. El hecho de que la obra también se conoce como “ocuparse de la juventud” refleja la larga sombra que sobre su obra proyecta el continuo éxito de la autora. Como ocurre con la mayor parte de sus trabajos, esta novela también se desarrolla durante los años 80. Sin embargo, la autora expresa su claro deseo de que se lea como una historia sin un tiempo o un escenario específicos. No obstante, la inclusión de las manifestaciones estudiantiles diarias en el centro de Seúl, junto con las referencias a la catedral de Myeongdong y la plaza del Ayuntamiento, con nubes de gas lacrimógeno en el ambiente, y objetos de uso diario en la época como las máquinas de escribir y los teléfonos públicos, en vez de ordenadores y móviles, ofrecen una imaginería propia de esa década. Mirae, la hermana de Miru, está enamorada de uno de los líderes estudiantiles, que desaparece mientras huye de las autoridades. Después de saber que no regresará vivo, se prende fuego y salta de la azotea de un edificio. Esta muerte hace que su hermana se encierre en su pequeña habitación. Mientras sus amigas Myeong-seo y Yun participan en las manifestaciones, gritando consignas y marchando con otros en protesta, Miru muere de inanición sola en su habitación vacía. El remordimiento de un personaje que deambula por la calle entre los manifestantes mientras su amiga íntima se está muriendo de hambre también lo hallamos en uno de los primeros relatos de Shin, Meolli kkeudeomneun gil wie (lejos en la interminable carretera). El otro amigo, Dan, también muere en un misterioso incidente, considerado un disparo accidental, mientras hace el servicio militar. Esta novela comienza con un prólogo, en el que Myeong-seo, que se ha ido alejando paulatinamente de Yun tras el fallecimiento de sus amigos, la llama por teléfono por primera vez en
ocho años. El título del prólogo, cuya traducción sería “¿puedo ir contigo?”, se relaciona con el epílogo, titulado “voy contigo”, en términos de estructura simétrica; asimismo, la pregunta inicial de Myeong-seo la responde Yun al final. Mientras que Eommareul butakhae es una búsqueda del amor y la esperanza en la tragedia que representa la desaparición de la madre, Eodiseonga alaba la lucha por la comprensión y la comunicación en medio de la muerte y la separación.
Lectores en el extranjero. Desde julio, Shin vive en Nueva York con su marido, Nam Jin-woo, poeta y crítico literario, que disfruta de un año sabático. Trabaja como profesora visitante en la Universidad de Columbia, donde discute sus obras con los alumnos y asiste a las clases que le interesan. “Leyendo libros y aprendiendo en el aula me siento de nuevo como una estudiante. Hay tanta gente de etnias tan diferentes en las calles de esta ciudad que es un microcosmos. Paseo dos o tres horas diariamente y voy a galerías, teatros y salas de música”, nos manifiesta. Desde julio, una versión preliminar de Eommareul butakhae, con el título de Please Look After Mom, ha circulado entre críticos y libreros. Ya puede reservarse en Amazon.com. La autora mencionó que ser testigo del proceso de publicación en aquel país, muy distinto del de Corea, ha sido una experiencia enriquecedora. Shin afirmó: “Estoy extasiada de estar aquí, en los Estados Unidos, para ver cómo los lectores americanos responden a mi libro. El proceso va bien porque Robin Desser, editor sénior de Knopf, está muy interesado en la novela. He intercambiado a menudo correos electrónicos con ella, que parece muy interesada por su atractivo universal y los sentimientos que despierta el personaje de la madre”. La respuesta del mercado de ese país a esta narración puede servir como indicador para evaluar el interés que las novelas coreanas despiertan entre los lectores angloparlantes, con unos gustos bastante exigentes. Por ello, Shin Kyung-sook no está sola en esta espera a que aparezca Please Look After Mom. “He oído que las traducciones sólo representan el 3 o 4 por ciento de todas las obras publicadas en los Estados Unidos. Quizá no sientan que las necesitan porque el inglés domina el mundo. Según un profesor de Columbia, Ted Hughes, la calidad de las versiones inglesas de literatura coreana ha mejorado mucho recientemente. Es algo afortunado para él, ya que puede usar buenas obras como lecturas en sus clases. Me dijo que la Universidad tiene la intención de contratar a siete profesores de estudios coreanos en un año. Creo que la educación superior en este país cada vez integra más a Corea”. Tras la publicación de este libro, Shin planea hacer una gira promocional en abril por Estados Unidos y Canadá. Después, la hará por Europa durante un mes entero. Aunque estos viajes son agotadores, Shin se siente entusiasmada de ver la respuesta de sus lectores a ambos lados del océano. Invierno 2010 | Koreana 45
ARTESANO
Lee Keun-bok, maestro techador,
acentúa la elegante línea del tejado tradicional Lee Keun-bok, que participa actualmente en la reconstrucción de la puerta de Sungnyemun, es un maestro artesano dedicado durante los últimos 40 años a perfeccionar la colocación de tejas en las cubiertas típicas coreanas. Piensa que su trabajo sirve para crear una “línea rítmica en la techumbre que se asemeja al lomo curvo de una ballena gigante jugueteando en el mar”. Park Hyun Sook Colaboradora | Ahn Hong-beom, Kim Young-gwang Fotógrafos
Para el maestro techador Lee Keun-bok, un tejado tradicional es una combinación de funcionalidad Koreana y| Invierno 2010 46 estructural elegancia.
“E
s como si el cielo se cayera” es una expresión que usan los coreanos para describir el sentimiento de desesperanza. Es lo que Lee Keun-bok, de 61 años, techador que trabaja en edificios típicos coreanos, experimentaba siempre que veía un tejado derrumbado de niño. Este recuerdo le ha llevado a convertirse en lo que es hoy. El camino para hacerlo es arduo, pero mientras progresaba, descubrió la esperanza y verdad en otro dicho coreano: “Aunque el cielo se desplome, hay escape”. La arquitectura tradicional de Corea personifica la visión de su gente del universo y su sentimiento estético. En la estructura de una techumbre tradicional hallamos los conceptos fundamentales de la cosmología coreana: los principios relacionados con el gran absoluto (taegeuk), el yin y el yang, los cinco elementos, el cielo circular y la tierra cuadrada, y los tres elementos esenciales, mientras que los materiales usados: madera, tierra, paja y papel, representan un esfuerzo para estar en armonía con la naturaleza. La cubierta de una casa típica (hanok) se hace con paja o tejas. La línea de la primera se compara a la del lomo de un buey, mientras que la segunda se ajusta a los montes de detrás de la construcción, aparte de reflejar la agilidad y belleza de las alas de una grulla antes de posarse. La techumbre de una casa, ya sea a dos vertientes o de faldón, transmite una sensación de estabilidad. Es un componente importante de la belleza de la arquitectura tradicional. Según la filosofía antigua, los tres elementos esenciales (samjae) del universo son el cielo, la tierra y el hombre. Aplicados a la construcción, el cielo está simbolizado por la techumbre y la tierra por los cimientos. El espacio entre medias es, pues, el dominio del ser humano. Como la cubierta enlaza el espacio mundano con el celestial, debería ser el aspecto más atractivo de toda la edificación. Podemos decir que su belleza depende de
la habilidad del artesano que instala las tejas. Lee fue designado Importante Patrimonio Cultural Intangible número 121 por su gran experiencia en esta labor el 21 de octubre de 2008, lo que le convierte en el único con dicho honor.
La duradera elegancia del hanok Hay cosas que sólo se aprenden a través de la experiencia. La verdad no se demuestra con la inteligencia y, ni siquiera, leyendo 10.000 libros, sino a través de vivencias. Aprendió el oficio de su padre, que era albañil, ya que le seguía de obra en obra. En este proceso, se dio cuenta de que la clave de la belleza y durabilidad de un edificio estaba en la colocación adecuada de las tejas. “Las tareas están divididas en la actualidad, pero en el pasado, el albañil tenía que saber de carpintería y otros oficios. Aprendí cómo levantar una casa yo solo. Mi padre era el albañil de Imsil, mi pueblo, en la provincia de Jeollabuk-do. Le ayudé desde niño y aprendí todo sobre su trabajo. Cuando era joven, recuerdo haber visto muchas casas con vigas podridas porque el techo calaba cuando llovía. Una vez empiezan a pudrirse, no se puede hacer nada. La cubierta se derrumbará. No soporto eso. Era como ver caerse el cielo. Levantar una estructura no es fácil. Aprendí la importancia de las tejas y me dije: ‘¡Quiero trabajar como techador!’”. De joven, Lee buscó a los mejores del gremio y empezó a estudiar sus secretos. Se hizo aprendiz del ya fallecido Gi Seongil, del que aprendió la técnica, algo que le llenó de orgullo. No importa lo bonita que pueda parecer una casa típica: si las tejas no están bien colocadas, no durará mucho. A veces, se debilita en sólo dos o tres años si cala la techumbre. Los palacios, templos y las viviendas más lujosas, preservadas como tesoros culturales, se construyen con los mejores materiales. Se usaba
Invierno 2010 | Koreana 47
1 Se usa barro como mortero para que las tejas no se muevan. 2 Una herramienta para cortar siempre es útil al poner las piezas. 3 Cada caballete presenta una dificultad añadida. 4 La teja final de cada caballete está a menudo decorada con símbolos o ideogramas chinos propicios.
5 Lee Keun-bok inspecciona cuidadosamente el armazón y el material de relleno antes de comenzar a colocar las tejas.
1
2
3
4
48 Koreana | Invierno 2010
cal natural, que puede durar mil años, en lugar de cemento, que no pasa de los 100. La madera se elegía cuidadosamente. Pero no importa la atención que se prestaba a los materiales y el proceso de construcción. Si las tejas no se disponían adecuadamente, era como un castillo sobre arena. Desde 1970, Lee viajó por todo el país con su maestro, Gi Seon-gil, y fueron asimilando técnicas durante 10 años. Gi era el más famoso de su tiempo y quienes querían un tejado de buena calidad le contrataban como supervisor, sin importar el precio. Lee decidió seguir los pasos de su maestro, cuyo nombre era sinónimo de un tejado de inmejorable calidad. Este propósito tan claro le inspiró para convertirse en maestro techador y aprender otros aspectos de la construcción de una estructura típica coreana. Siguió ese rumbo durante 40 años, en los que ha renovado o construido numerosas cubiertas de edificios históricos de todo el país, como Sungnyemun (Tesoro Nacional número 1), la puerta sur de la antigua Seúl, cuando estaba rodeada de murallas, y construcciones destacadas de los palacios de Joseon, como el salón de Sejeongjeon y el edificio de Gyeonghoeru, ambos en el palacio de Gyeongbokgung, y la puerta de Donhwamun, la entrada principal al palacio de Changdeokgung, así como otros 200 proyectos, entre los que podemos citar Geuknakjeon, en el templo de Bongjeongsa, y el salón principal del de Beopjusa.
Elegancia funcional
5
“La reconstrucción de la techumbre de Sungnyemun requirió 18.000 tejas cóncavas y otras 7.200 convexas, además de 500 pares de adorno para los bordes. Si la estructura de apoyo no puede aguantar el peso, podría combarse y perderse la elegancia de las líneas de la cubierta. El techador es por ello responsable de la belleza y la función al mismo tiempo”.
No se sabe con certeza cuándo se empezaron a fabricar tejas en Corea, pero distintas excavaciones indican que se usaban rutinariamente durante el periodo de los Tres Reinos (57 a.C.-688 d.C.). Cada una se hace de una pieza curva de arcilla. Después de hornearla a altísimas temperaturas (1.000-1.200 grados centígrados) son muy resistentes, aunque sólo se emplean aquellas sin grietas ni otros defectos. Según los principios del yin y el yang, hay dos tipos, las masculinas (convexas) y las femeninas (cóncavas). Entre las de los bordes exteriores de la techumbre, también hallamos estas dos clases. Las cóncavas se ponen primero, generalmente desde el centro de la cubierta hasta el alero. Tres unidades superpuestas, por lo general, forman una unidad; incluso si dos de ellas se agrietan, el conjunto no deja pasar el agua. Las convexas, que se ponen sobre las primeras con adobe, se colocan en línea recta desde el final de las vigas hasta la parte superior del caballete. Las líneas se rematan con las tejas terminales, que también se unen con adobe para evitar que el resto de la hilera se mueva. Las líneas que forman son la esencia de la elegancia de la cubierta.
“Uno de los rasgos destacados de la arquitectura tradicional coreana es la belleza de las líneas curvas, claras en los tejados. Cuando se ven desde lejos, se distingue el 70 por ciento de las tejas. Las que rematan las esquinas y cubren el caballete principal son las más importantes. Su peso y el mortero para unirlas son importantísimos. Cada una pesa unos 7 kilos. La reconstrucción de la techumbre de Sungnyemun requirió 18.000 tejas cóncavas y otras 7.200 convexas, además de 500 pares de adorno para los bordes. Si la estructura de apoyo no puede aguantar el peso, podría combarse y perderse la elegancia de las líneas de la cubierta. El techador es por ello responsable de la belleza y la función al mismo tiempo”, nos dice Lee. Aunque los carpinteros pueden tardar un año en completar una casa, la labor del techador puede terminarse en 20 días. Para aguantar las piezas, el soporte ha de ser resistente. Sobre las vigas se entretejen tiras de madera o ramas y se rellena con tierra y serrín para dar forma a la pendiente de la cubierta. Cuando se termina, el techador hace las guías de madera para que las piezas curvas ajusten perfectamente. Este elemento es crucial Invierno 2010 | Koreana 49
50 Koreana | Invierno 2010
1
para dar estabilidad y elegancia a toda la techumbre. Para colocar las tejas pequeñas, las mellas son menos profundas y a intervalos más cortos. Para las más grandes, las guías han de ser más gruesas, aparte de requerirse unas puntas especiales conocidas como waejeong para fijarlas. Si el tablero y el relleno de ramas son muy gruesos, el tejado será menos ondulado, y si son finos, las piezas se romperán con más facilidad. Es importante también que el mortero se elabore con una cantidad adecuada de tierra y cal para que la adherencia sea segura y las piezas no se muevan. Como todos los procesos hay que realizarlos con gran precisión, la experiencia y técnica del techador son críticas. “Para la techumbre de Gyeonghoeru, con un área de unos 600 pyeong (unos 1.980 metros cuadrados), 20 techadores tardaron todo un mes. Algunos de los espacios más profundos sobre las vigas se cubrieron con 60 centímetros de arena. Se estudió concienzudamente la cantidad de materiales de relleno para lograr un equilibrio ideal. Pocos trabajos exigen tanta paciencia como poner tejas. En verano, se calientan y pueden alcanzar los 60 o 70 grados centígrados. Es difícil respirar y moverse pero hay que prestar atención a la curva que forman e igualar las líneas. Ahí arriba es como una sauna. En contraste, en invierno somos víctimas de un frío cortante. Además, siempre está el peligro de resbalarse y caer. Las tejas son resbaladizas, lo que provoca dolores de espalda. Pero cuando la tarea está completa, después del duro trabajo, las brillantes tejas forman curvas elegantes. Es algo que me da gran satisfacción”, afirma.
Experiencias Dice que ha aprendido mucho sobre la vida trabajando en las techumbres. Hacer la armazón y rellenar el espacio con tierra y otros materiales antes de colocar las tejas le ha enseñado la
importancia de lo que hay por debajo de la superficie. Asimismo, no importa la técnica de un techador: todo será en vano si no coopera estrechamente con los carpinteros. De todo esto, ha aprendido a ser humilde. Enfatiza que ambos oficios son inseparables: el carpintero debe colocar clavos para que el edificio aguante 1.000 libras y el techador el tejado para que la casa dure 1.000 años. Por eso, sólo puede reconocerse a un artesano auténtico cuando es capaz de hacerse responsable de esas 1.000 libras y 1.000 años. Bajo el intenso calor estival, sin una pizca de sombra, Lee aprendió qué significa la perseverancia, mientras que el frío invernal le enseñó el valor de la paciencia. Hoy enseña lo que ha 4 acumulado en estas experiencias a sus aprendices. Ha creado una escuela con su propio dinero en Susaek, provincia de Gyeonggi-do, donde adiestra a 20 futuros techadores. Incluso en pleno invierno, coloca estructuras para invernaderos e invierte su energía en aplicaciones prácticas. “Quiero enseñar todo lo que sé antes de hacerme viejo”, nos explica. “Creo que merece la pena que un ser humano, que vive menos de cien años, se dedique a crear bellos edificios de madera que duran mil. Cuando veo una “línea rítmica en la techumbre que se asemeja al lomo curvo de una ballena gigante jugueteando en el mar siento una alegría indescifrable”. Lee también pide consejo a los techadores con más experiencia para seguir aprendiendo. Siempre que ve a un artesano mayor, de setenta u ochenta años, le pide: “¡Enséñeme todo lo que sepa!”. Al ver tal pasión, ellos, que han dedicado toda su vida a trabajar, le cuentan sus técnicas. Lee pone en práctica lo que aprende, crea a su vez procesos nuevos y se los enseña a sus aprendices. Su único pesar es que el tiempo es muy corto.
1 Teja de adorno de un caballete con un diseño de dragones gemelos.
2 La colocación de las tejas en un edificio típico coreano es un proceso muy trabajoso sin atajos posibles.
2
Invierno 2010 | Koreana 51
OBRAS mAESTRAS
Un espejo de bronce que refleja la tecnología más avanzada Los principales tipos de espejos que se elaboraban en Corea eran de piedra, de hierro y de bronce. Los más famosos eran los redondos con dos o tres protuberancias, denominados danyugyeong , que alude al número variado de estos salientes. Cho Hyun-jong Conservador Jefe del Museo Nacional de Corea Fotografías Museo Cristiano de Corea, Universidad de Soongsil
J
unto con las dagas y otras armas, los espejos denominados danyugyeong son las principales reliquias de la Edad de Bronce de Corea. Se han hallado objetos similares en el noreste de China y en Kyushu, Japón, y se cree que tienen su origen en los botones de ese metal hallados en la región de Ordos o en los espejos del periodo de Yin-Shang de China. Hay dos tipos con estos agarres: los que tienen tallados burdos y los más refinados. El que presentamos aquí tiene dos protuberancias y un fino diseño de líneas (Tesoro Nacional número 141) y pertenece a la colección del Museo Cristiano de Corea, en la Universidad de Soongsil. Es la principal reliquia de la Edad de Bronce del país. El reverso de esta brillante superficie reflectante está dividido en tres secciones, con un diseño geométrico elegante e intrincado que consiste en una línea aserrada, compuesta de triángulos, y varios círculos concéntricos. Este tipo de espejo era muy frecuente en la región al sur del río Daedonggang (en Corea del Norte) en el segundo y tercer siglos antes de nuestra era. Hasta la fecha, se han hallado 25 objetos, la mayoría dagas, puntas de lanza y campanas de bronce. Este tipo de artilugios se hallaba principalmente en cámaras funerarias de madera con túmulo de piedra, en fosas y en ataúdes en la zona de Daegok-ri, Hwasun, y Chopo-ri, Hampyeong, en la provincia de Jeollanam-do. También se han hallado objetos similares en toda la península de Corea y en la región vecina de Kyushu, Japón.
El espejo más delicado Este espejo es el mayor y más elaborado de todos los de su tipo hallados en Corea. Tiene un diámetro de 21,2 cm, es liso por una cara y decorado en la otra, donde hallamos dos protuberancias. Podemos distinguir tres secciones: la exterior, la intermedia y la interior. La primera presenta triángulos verticales alineados con trazos finos y un par de círculos concéntricos repetidos cuatro veces; esas mismas figuras, sin los círculos, aparecen en la del medio. En la 52 Koreana | Invierno 2010
Espejo de bronce con dos agarres y un delicado diseño de líneas. Edad de Bronce, siglos II-III a.C., diámetro: 21,2 cm, grosor: 1 cm (borde), Tesoro Nacional número 141, Museo Cristiano de Corea, Universidad de Soongsil. Invierno 2010 | Koreana 53
El diseño de este espejo, realizado con 13.000 finas líneas talladas a intervalo de 0,3 milímetros cada una, es un misterio en cuanto a técnica, aparte de ser lo más destacado del objeto. Ningún otro país del mundo poseía una tecnología similar para producir un diseño tan elaborado hace 2.200 o 2.300 años.
tercera vemos cuatro partes, cada una con triángulos también. Hacia el centro es algo más abultado que en el borde. El diseño de este espejo, realizado con 13.000 finas líneas talladas a intervalo de 0,3 milímetros cada una, es un misterio en cuanto a técnica, aparte de ser lo más destacado del objeto. Ningún otro país del mundo poseía una tecnología similar para producir un diseño tan elaborado hace 2.200 o 2.300 años. Algo así requiere de una técnica muy avanzada incluso en la actualidad, por lo que su fabricación es sorprendente. Se sabe que este tipo de piezas se hacía en moldes de escayola, ya que se han hallado algunos en la península. Sin embargo, estas líneas tan finas no podían hacerse así. Incluso para alguien con habilidad ahora sería difícil dividir una banda circular en cuadrados de 1 cm, dividirlos en 2 triángulos y rellenarlos con más de 20 estrías. Todavía más asombroso es la forma en que la sección externa está compuesta por 20 círculos concéntricos en un diámetro de menos de 2 cm. Asimismo, considerando que el espejo es pequeño y de sólo unos cuantos milímetros de grosor, la dificultad para hacerlo en molde sería enorme. Lo que es seguro es que la aleación empleada, ideal para su propósito, es el resultado de unas técnicas de fundición y manufactura muy desarrolladas para su época.
La magia de los espejos En general, los antiguos objetos de bronce chinos estaban decorados con dibujos de la buena suerte y dragones o seres humanos. Los coreanos, sin embargo, se distinguen por los triángulos de finos trazos. Su fabricación se generalizó en el siglo III a.C. Los motivos básicos de los espejos con diseños de líneas son rayos, sierras, estrellas y círculos concéntricos. Los triángulos repetidos rellenos de numerosas estrías paralelas es uno de los dibujos geométricos empleados en todo el mundo. Las estrellas y las sierras se componen de esas figuras geométricas y representan básicamente la aureola del sol. Los de bronce del siglo II-III a.C. pertenecen a este grupo. Las aureolas aserradas potencian el efecto de reflejo de la luz, una de las funciones esenciales de estas piezas. En sí mismas, no sólo representan los rayos, sino la autoridad, semejante a la del astro rey. De ahí que sean considerados una reliquia importante para entender la estructura social de la Edad de Bronce. Por ejemplo, reflejar la mística luz del sol en un punto o la visión de la propia imagen de uno era un fenómeno sorprendente. El destello era casi sobrenatural y seguramente quienes 54 Koreana | Invierno 2010
El reverso presenta una gran decoración y dos pequeñas protuberancias para colgarlo con un cordón. El anverso está pulido para así poder reflejar. Este objeto se envolvía en seda y se guardaba en una caja.
lo veían experimentarían sorpresa, miedo y quizá terror. El dirigente que poseyera un espejo decorado con formas similares quizá lo usara para controlar las emociones de la gente y lograr ciertos objetivos.
Simbolismo Los objetos rituales más importantes de los chamanes, todavía presentes en Corea, son una espada, un espejo y campanas. Su origen puede rastrearse en estos mismos artilugios (cascabeles en vez de campanas) de bronce hallados en una tumba del siglo II-III a.C. que pertenecía a un jefe chamán. En la mitología japonesa aparecen también el espejo y la espada junto con el jade, y la procedencia es la misma. El espejo es un elemento simbólico y mágico, no sólo para los hechiceros coreanos sino también para los de Siberia. Del hecho de que en la Edad de Oro estas piezas de bronce con varias protuberancias se hallan principalmente sobre el pecho de los cadáveres y de que sus diseños están relacionados con el sol, podemos deducir que eran elementos importantes de los chamanes o de los líderes de las tribus en una época en que se creía que el gobernante del estado era una divinidad. En cuanto al significado de los otros objetos, la espada servía para la seguridad individual o del grupo al destruir al mal mientras que los cascabeles se hacían sonar para invocar a los dioses. Eran posesiones de los hechiceros usados en los rituales como medio para unir el cielo y la tierra con su sonido. Estas reliquias extraídas de tumbas antiguas identifican los restos como los de un jefe chamán, que dirigía los rituales con el poder de movilizar a los dioses del sol y a las fuerzas de la naturaleza. Invierno 2010 | Koreana 55
CRÍTICA DE ARTE
“El realismo en el arte asiático”
explora la historia de este continente en el siglo XX La exhibición “El realismo en el arte asiático”, una colaboración entre la Galería Nacional de Arte de Singapur y el Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Corea se presentó primero allí. Está compuesta por 104 pinturas de artistas de diez países de este continente y busca explorar el desarrollo local del arte moderno y cómo expresa la problemática de esta región del mundo desde finales del XIX hasta la década de 1980. Kim Inhye Conservadora del Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Corea Fotografías Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Corea
1 56 Koreana | Invierno 2010
R
ecientemente, hay un mayor interés en el arte asiático, especialmente el contemporáneo desde la década de 1990, cuando las influencias de la globalización podían verse en cualquier lugar. Antes de esa época no había recibido gran atención ni del público ni de los especialistas. Los artistas más destacados de principios de este periodo, que lograron considerable popularidad en sus países de origen, eran poco conocidos en el extranjero. Durante gran parte del siglo pasado, las naciones asiáticas se enfrentaron a unas circunstancias históricas similares, incluyendo la colonización y dos conflictos mundiales. La estructura imperialista del mundo y las guerras sin cuartel forzaron a cada país a desarrollar habilidades para competir globalmente.
Al arte asiático contemporáneo
2
En el arte y la cultura, los temas que plagaban Corea durante su periodo colonial, como conflictos regionales y la lucha entre el arte nacionalista y el proletario, también afectó a Filipinas e Indonesia en la misma ápoca. Tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial, los países comunistas, como China y Vietnam, se embarcaron en un viaje totalmente distinto del de otros países asiáticos, que mantuvieron una relación estrecha con los EE.UU. La mayoría de estas naciones quedaron bajo la influencia del expresionismo abstracto americano de los años 50. Como reacción a ello, los universitarios de distintos países defendieron un nuevo movimiento realista en los años 70 y 80, con tonos claramente políticos. También se produjo un debate dicotómico sobre modernismo frente a realismo. Esta conciencia común y la tendencia de los artistas asiáticos se refleja en sus obras con distinta intensidad. La desaparición de la Guerra Fría y la introducción del nuevo paradigma globalizador permitieron que el pasado de este continente se entendiera desde una perspectiva más objetiva. Por ello, es tiempo de estudiar el reciente interés en
1 Raja Ravi Varma, India, Mujer a la luz de la luna, 1889. 2 Takahashi Yuichi, Japón, Cortesana, 1872. 3 Raden Saleh, Indonesia, El paso de Puncak, 1871. 3 Invierno 2010 | Koreana 57
2
1
La agrupación de las obras en cinco temas ayudó a revelar el proceso de desarrollo de la tradición realista en Asia. Desde el principio, esta corriente fue aceptada como técnica figurativa, pero después de reflexionar sobre la historia de los países del entorno, buscó objetivar la situación peculiar de cada uno y expresar sus sentimientos.
el arte asiático contemporáneo. Proponer una definición clara de “realismo” es difícil. En términos de historia del arte occidental tiende a centrarse en artistas decimonónicos como Gustav Courbet, Honoré Daumier o Jean François Millet, además de la inclusión de las formas artísticas de los años 30: el realismo social de los EE.UU. o el realismo socialista de la Unión Soviética. Por ello, el tema de discusión fundamental sobre este movimiento no es qué lo define, sino qué “aspecto” suyo puede hallarse en una obra concreta. Por ello, a menudo se considera un punto de vista o una actitud más que un estilo específico. De acuerdo con esto, esta exhibición no intentó definirlo ni presentar una genealogía histórica. Se centró en cinco temas para sugerir distintas corrientes y agrupó las 104 obras de artistas de 10 países asiáticos (Corea, China, Japón, India, Singapur, Malasia, Vietnam, Tailandia, Indonesia y Filipinas) según estos temas.
Temas de la exhibición El primer tema fue cómo los artistas de este continente conocieron la tradición pictórica occidental y la aceptaron como técnica figurativa. Cuando fue introducida en Asia, se creyó que era una forma expresiva realista para representar objetos tridimensionales en el lienzo bidimensional. En esta exposición, se presentaron por primera vez al público coreano las obras de los primeros cuadros al óleo, como los de Raja Ravi Varma (India), 58 Koreana | Invierno 2010
1 Nguyen Gia Tri, Vietnam, Paisaje de Vietnam, 1940. 2 Pai Un-Soung, Corea, Una gran familia, 1930-35. 3 Fernando Amorsolo, Filipinas, Plantando arroz, 1924. 4 Shindudarsono Sudjojono, Indonesia, Intérprete de angklung, 1956.
Raden Saleh (Indonesia) y Takahashi Yuichi (Japón). Otros creadores integraron esta técnica foránea con las tradiciones ya existentes en su país. Paisaje de Vietnam, de Nguyen Gia Tri, combina técnicas paisajísticas occidentales con la tradición de pintura con laca vietnamita. En el retrato Una gran familia, de Pai Un-Soung, el autor empleó la técnica local de esbozo (baengmyobeop). El segundo y tercero se centraron en “lo rural” y “el trabajador”, respectivamente. Estos temas, aparentemente relacionados, fueron proyectados como diametralmente opuestos en varios trabajos. Para el primero, los autores mostraron sus interpretaciones del campo, a menudo en un entorno pastoril con imágenes idílicas de la Madre Tierra. El segundo aparecía como la miseria de los obreros y la clase menos privilegiada de la ciudad. En Plantando arroz , el filipino Amorsolo muestra a mujeres que parecen trabajar duro bajo un fuerte sol tropical. El cuadro, no obstante, las muestra como muy atractivas, dedicadas, aparentemente, a danzar elegantemente y no la costosa labor agrícola, por lo que el autor ha sido acusado de distorsionar la dureza de la vida en la época colonial. En contraste, los cuadros de otros pintores describen a pedigüeños, jornaleros y gentes de la clase menos privilegiada en su lucha diaria con la ciudad, representada como fuente de gran energía y como miseria humana. El pintor indonesio Shindudarsono Sudjojono ha cuestionado la tradición en su país de la pintura paisajística idealizada (Mooi Indie): “Los pintores no corren a las montañas en busca de estética, sino que exponen las realidades de la vida urbana. Sus temas son las botellas, cazos
3
4
Invierno 2010 | Koreana 59
y sartenes, zapatos, oficinas, sillas, niños, señoritas, ciudades, puentes dilapidados, zanjas, calles y obreros”. En Asia, el arte proletario fue muy popular en la década de 1920 y la siguiente, como forma de apoyo de las bases al movimiento independentista, y floreció de nuevo tras la Segunda Guerra Mundial.
Conciencia social
1 Lai Foong Moi, Malasia, El trabajador de Sun Sui, 1967. 2 Phan Ke An, Vietnam, El bombardeo de Hanoi en Navidades de 1972, 1985.
El cuarto era “Guerra y realismo”. Durante los conflictos armados, la pintura realista servía como un medio rápido de comunicar temas de importancia y fomentar la propaganda. También se usaba para describir la dolorosa situación en que la mayoría de los países asiáticos se encontraron tras el segundo gran enfrentamiento bélico mundial y su lucha por la independencia. El arte en tiempo de contienda asume inevitablemente una postura política determinada para justificar al atacante, defender a la víctima o buscar a gritos solidaridad. El último tema fue “Comentario y crítica social”, que presentó un nuevo movimiento realista, el coreano minjung (arte del pueblo), que 1 nació en los años 70 tras la prevalencia del expresionismo las dos décadas anteriores. A menudo integrado por grupos de universitarios activistas, esta nueva tendencia defendía la participación basada en la conciencia de la objetividad social. Las obras influidas por esta escuela tienen un sentido surrealista y animan al espectador a mirar directamente a la realidad de los tiempos, casi increíble, pero auténtica. La agrupación de las obras en cinco temas ayudó a revelar el proceso de desarrollo de la tradición realista en Asia. Desde el principio, esta corriente fue aceptada como téc-
2
60 Koreana | Invierno 2010
nica figurativa, pero después de reflexionar sobre la historia de los países del entorno, buscó objetivar la situación peculiar de cada uno y expresar sus sentimientos.
Lucha valiente Hallar la definición de realidad, al igual que la de realismo, es igual de difícil. De hecho, una perspectiva auténticamente objetiva quizá no fuera posible porque estaría matizada por la posición y actitud del individuo. En cualquier caso, esta pregunta nunca ha desaparecido de las mentes de los artistas asiáticos que han vivido esta época de luchas ideológicas, aunque algunos hayan logrado respuestas personales. Juzgar la adecuación o inadecuación de sus inclinaciones es inútil ahora. Es más importante explorar la microhistoria de los artistas de esa época y reconocer la valentía de su lucha personal. Son este coraje y esta lucha los que impregnan sus obras con el poder de provocar la reflexión en los espectadores sobre su punto de vista. Durante el siglo pasado, los países asiáticos sufrieron las mismas dificultades históricas: colonización, dos contiendas mundiales, la lucha por la independencia, el conflicto ideológico, el desarrollo económico y regímenes autocráticos. La exhibición “El realismo en el arte asiático” ilustra cómo los artistas de esos países han percibido e interpretado su realidad nacional. También nos ha ayudado a entender las similitudes y diferencias de las experiencias comunes. Con más de 120.000 visitantes, esta muestra ha sido un gran éxito, aparte de ofrecer una panorámica nueva para la audiencia coreana, cuya perspectiva sobre el mundo ha sido formada sobre influencias occidentales demasiadas veces.
3 3 Shin Hak-chul, Corea, Historia de la Corea moderna 4, 1982. 4 Dede Eri Supria, Indonesia, Clase urbana, 1977.
4 Invierno 2010 | Koreana 61
DESCUBRIR COREA
El profesor Hosaka Yuji, de la Universidad de Sejong, estudió en la de Tokio y se doctoró en Ciencias Políticas en la de Corea. Adquirió la nacionalidad coreana en 2003. Ha publicado varios libros sobre la soberanía de Seúl sobre la isla de Dokdo basándose en mapas y documentos históricos.
M
ientras estudiaba el bachillerato superior, supe por varios medios que muchas de las figuras destacadas del deporte o del mundo del espectáculo japonés eran coreanos que residían en el archipiélago. Después de darme cuenta de que la mayoría de mis atletas, cantantes y actores favoritos eran coreanos-japoneses, comencé a preguntarme si ellos tenían más talento que nosotros en esos campos.
Recuerdos de infancia Rikidozan, el legendario luchador profesional, ídolo japonés en su tiempo, cuyo nombre real era Kim Sin-rak, junto con el maestro del kárate kyokushin, Masutatsu Oyama (Choi Baedal), el jugador de béisbol conocido como la “máquina de batear”, Isao Harimoto (Jang Hun) y el legendario lanzador con 400 victorias Misaichi Kaneda (Kim Kyung-Hong) estaban entre los superhéroes de mi niñez. Los 3.085 batazos imparables de Jang Hun fue el récord en la liga profesional de béisbol japonesa durante 28 años, hasta que Ichiro, que ahora juega en los Seattle Mariners, de la liga profesional de Estados Unidos, lo superó en 2009. Jang era también un bateador potente, con 504 jonrones. Las 400 victorias de Kim Kyung-Hong son todavía récord en Japón, y quizá nunca sea igualado, ya que el lanzador que va segundo sólo tiene 313. Otro jugador de este deporte que está cerca de los mejores coreanos-japoneses es Sadaharu Oh, un taiwanés-japonés (Wang Chen-chu). Sus 868 jonrones quizá tampoco sean posibles de igualar. Los coreanos-japoneses y taiwaneses-japoneses tienen más técnica y potencia que los nipones. El más popular de este deporte es Nagashima Shigeo, entrenador honorario vitalicio de los Yomiuri Giants; sus logros, no obstante, palidecen en comparación con los de Jang Hun y Sadaharu Oh. No sólo ocurre en béisbol, sino en fútbol, balonvolea y otros muchos deportes; a menudo, los coreanos-japoneses están entre los mejores. Con pocas excepciones, esto también se puede aplicar al mundo del espectáculo, dominado durante mis tempranos años por coreanos-japoneses atractivos y con talento, que tenían carreras largas y destacadas. Por ello, mientras crecía, me sentía indignado y furioso al ver cómo los que no eran japoneses eran tratados injustamente en el país. Recuerdo que fui a ver un partido de béisbol en el que hubo una refriega entre los jugadores después de que un bateador fuera alcanzado con la pelota durante un lanzamiento. Algunos de los espectadores gritaban a Jang Hun repetidas veces: “¡Lárgate, josenji”, término peyorativo nipón que se emplea para los coreanos. Al verlo, me enfadé, no sólo porque tenía muchos amigos coreanos-japoneses, sino porque no me gusta ver que la gente insulte o trate
Tras superar su pasado, Corea puede sentirse orgullosa En los Juegos Olímpicos de Invierno de este año en Vancouver, donde Kim Yuna fue coronada reina del patinaje artístico sobre hielo, los patinadores coreanos sorprendieron a todo el mundo al ganar varias medallas en velocidad y pista corta. Los resultados en varias competiciones deportivas indican que Corea se está convirtiendo en una potencia. Hosaka Yuji Profesor de Estudios Japoneses de la Universidad de Sejong | Ahn Hong-beom Fotógrafo
Invierno 2010 | Koreana 63
Recuerdo haber pasado la noche en vela viendo el torneo de golf en el que Pak Se Ri se metió en un obstáculo de agua para golpear una bola. Consiguió el campeonato y abrió el camino a la “Brigada” que lleva su nombre, que ha seguido sus pasos. Si me preguntan a quién apoyo cuando Corea y Japón juegan, intento ser neutral pero, sinceramente, acabo animando al equipo coreano porque tiene jugadores con más talento.
a otros irrespetuosamente. Afortunadamente, otros espectadores reprendieron a los maleducados y les pidieron que se callaran. Sentí alivio al ver que había gente con sentido de la decencia. Pero he sido testigo de innumerables casos en los periódicos. Una vez leí que un jugador de los Yomiuri Giants se refirió a Sadaharu Oh, que era el entrenador, como wangkoro, el equivalente japonés de “hijo de p…”. El diario informaba de que este jugador le achacaba el pobre juego del equipo: “Nuestra lamentable actuación se debe a ese gallito wangkoro ” y “Todo es la culpa de ese wangkoro ”. Estaba atónito. No podía creer que un jugador insultara de ese modo a su propio preparador. ¡y ahora es comentarista de béisbol! No logro entender por qué el conjunto no le penalizó por ese comportamiento. Fue un incidente en que emergió la oculta animosidad de los japoneses hacia personas como Oh. Luego he criticado a la sociedad nipona por sus injustos y discriminatorios ataques a gente de gran talento y personalidad simplemente porque son de grupos étnicos de países que han sido antiguas colonias.
dos que mantienen el interés por lo coreano. En los últimos años, Dong Bang Shin Gi, también conocido como TVXQ (Tong Vfang Xien Qi), un quinteto coreano, y a principios de este año, Girls’ Generation, un grupo de nueve chicas, han creado cierto revuelo y han logrado fascinar a los jóvenes japoneses. Aunque TVXQ se ha separado recientemente, sus canciones siguen siendo populares y ocupan puestos altos en la Oricon Chart, la lista de éxitos pop más fiable de Japón. El segundo conjunto, que debutó en el país vecino este año, también ha cosechado un gran éxito, especialmente entre las adolescentes. Tradicionalmente, los jóvenes aficionados nipones han preferido las mujeres a los hombres en música y el espectáculo en general. Por ello, su atención se centra ahora en Girls’ Generation, un fenómeno semejante al que representó la actriz coreana Jeon Jihyun. Este grupo ha cautivado los corazones de las jóvenes niponas, que adoran a las celebridades. Mientras que los aficionados de la primera “Ola” eran amas de casa de mediana edad, los dos conjuntos mencionados han atraído a una generación de seguidores más joven.
La “Ola” coreana La percepción que tenía durante mi infancia de que los coreanos tenían más talento que los japoneses, en el deporte y el espectáculo, parece bien fundamentado en estos tiempos, según mis numerosas observaciones cuando equipos de ambos países han competido en algún acontecimiento. Además, eso es más evidente ahora que la discriminación en Japón contra etnias foráneas está disminuyendo. La “Ola” coreana, o hallyu , y los campeonatos deportivos entre ambas naciones también confirman esto. La “Ola” comenzó en los escenarios nipones en relación con el cine, las telenovelas y la música pop. Desde 2000, BoA y otros cantantes coreanos, al igual que Bae Yong Joon y otros actores, han sido aclamados como estrellas en el país vecino. Es posible que ahora esa oleada esté remitiendo, hasta el punto de que algunos afirman que ha muerto, pero ha ganado legiones de aficiona64 Koreana | Invierno 2010
Potencia en el deporte Este año, la presencia de Corea también podía sentirse en el mundo del deporte. Tras alcanzar las semifinales del Mundial en 2002, los equipos de fútbol nacionales han seguido manteniendo su gran nivel competitivo internacionalmente. La primera selección alcanzó la segunda ronda en la Copa del Mundo de Sudáfrica de este año, mientras que la femenina sub-20 logró la tercera plaza. El conjunto nacional femenino sub-17 se convirtió en campeona. En comparación, las escuadras japonesas no han logrado ningún éxito en las rondas finales debido a sus propios errores. Creo que hay una explicación. En Corea sólo hay unos 60 institutos de bachillerato superior con equipos de fútbol femenino, frente a los 1.400 en Japón. En el proceso de selección de la escuadra nacional, las japonesas se
Para entender mejor Corea, Hosaka Yuji también estudia su literatura.
agotan para lograr un puesto. La situación es similar para el béisbol en la misma edad. En Corea, hay unos 60 conjuntos de estas características, que compiten en varios torneos, pero en Japón hay más de 4.500, que participan en campeonatos nacionales dos veces al año. Tal infraestructura es un factor positivo, en general, pero los jugadores pueden quedar exhaustos de tanto partido. Los lanzadores, en particular, suelen arruinar sus carreras en estos certámenes tan competitivos. En el World Baseball Classic (WBC), un torneo internacional de béisbol, no hay diferencias aparentes en la habilidad de jugadores coreanos o japoneses. En ciertos aspectos, Corea tiene un entorno más adverso, pero está en mejores condiciones de vencer. La selección de Corea logró la medalla de oro en las Olimpia-
das de 2008, en Pekín, y logró la segunda posición en 2009. Lim Chang-Yong, el mejor lanzador de la liga japonesa, ha sido uno de los más eficaces en los últimos años. Además, en la selección de Japón hay varios coreanos-japoneses nacionalizados. Casi podríamos decir que ciertos partidos entre ambos países son competiciones entre coreanos y coreanos-japoneses. En 2010, Corea también logró podios en varios otros deportes. En los Juegos Olímpicos de Invierno de este año en Vancouver, donde Kim Yuna fue coronada reina del patinaje artístico sobre hielo, los patinadores coreanos sorprendieron a todo el mundo al ganar varias medallas en velocidad y pista corta. Los japoneses no lograron ninguna medalla de oro en ninguna competición. Los resultados indican que Corea se está convirtiendo en una potencia. En golf, los coreanos que hacen el circuito profesional en Japón y los Estados Unidos suelen ser finalistas en las rondas finales. Los golfistas de ambas naciones participan en tour de EE.UU., pero los coreanos dejan mejor impresión. Recuerdo haber pasado la noche en vela viendo el torneo de golf en el que Pak Se Ri se metió en un obstáculo de agua para golpear una bola. Consiguió el campeonato y abrió el camino a la “Brigada” que lleva su nombre, que ha seguido sus pasos. Si me preguntan a quién apoyo cuando Corea y Japón juegan, intento ser neutral pero, sinceramente, acabo animando al equipo coreano porque tiene jugadores con más talento. Corea y Taiwán, dos antiguas colonias niponas, y la isla de Okinawa, ocupada por Japón y que sigue bajo su control, son la cuna de varios individuos de excepcional talento, que superan con creces a los japoneses en Japón. El mundo de hoy, en que el electorado estadounidense ha elegido a su primer presidente de color, muestra signos de abandonar cualquier discriminación racial, algo que debería haber desaparecido ya. Al superar su historia, Corea también ha empezado a ascender a un lugar más elevado en la comunidad internacional. Invierno 2010 | Koreana 65
66 Koreana | Winter 2010
1
EN EL ESCENARIO GLOBAL
La estrella de fútbol Park Ji-Sung optimiza su capacidad física y mental
Park Ji-Sung es ya una leyenda en Asia. Al unirse al Manchester United, ha satisfecho el anhelo de los aficionados coreanos. Ahora todos esperan que este deportista, que ya lleva seis años en la liga inglesa, muestre un estilo de juego más agresivo en la próxima temporada. Por ello, Park quiere demostrar a su entrenador, Sir Alex Ferguson, y a su equipo que es uno de los mejores centrales del mundo. Jeong Yoonsoo Columnista deportivo y profesor del Departamento de Medios y Comunicación de la Universidad de Sungkonghoe
P
ark Ji-Sung es la cara actual del fútbol nacional. Su traspaso desde el PSV Eindhoven holandés al Manchester United en el verano de 2005 creó un dilema para los aficionados coreanos, que querían ver las retransmisiones en directo de sus partidos en Inglaterra. La diferencia horaria entre Asia y Europa significaba que los encuentros se emitirían de madrugada aquí. No obstante, la legión de forofos de este jugador consideraba esto un simple inconveniente. Después de todo, podían descansar más al día siguiente. Además, estaban los rumores infundados de que el equipo inglés le había contratado por su posible valor comercial en el mercado deportivo del Este de Asia. Respecto a esto, los usuarios coreanos de internet hicieron lo posible para combatir esta idea entre los aficionados de otros países.
Evaluación de Ferguson
2
Una de las personas que refutó esta opinión fue el entrenador del conjunto británico. Durante uno de los episodios de “England Premier League Round-up” (resumen de la Premier inglesa) de marzo de este año, se dio a conocer que Euro Sport News, así como Sky Sports, había elegido a Park Ji-Sung como uno de los mejores 11 centrales del país. En la entrevista en ese programa, el preparador, dijo que la decisión de ficharle se había basado sólo en su habilidad y no en la posibilidad de vender más camisetas en Corea. En un artículo de Associated Press tras esa emisión, Ferguson enfatizó el valor comercial del jugador, pero afirmó que no había influido en la decisión de contratarle. Añadió que el equipo estaba impresionado por su habilidad, actitud e inteligencia: “Lo primero que pensé cuando le vi jugar con el PSV Eindhoven en el partido de semifinales de la Liga de Campeones de 2005 era que entendía muy bien el juego”. La opinión de Ferguson no era nueva para los aficionados coreanos, que ya conocían la poten1 Park Ji-Sung intenta superar a John cia de su compatriota. Nació en 1981, y empezó a jugar al fútbol cuando estudiaba en el Colegio Pantsil, del Fulham, en el partido de la segunda ronda de la temporada Seryu, Suwon. En la actualidad, hay una calle con su nombre en esta ciudad, aparte de que se está actual de la liga inglesa. construyendo un centro deportivo también en su honor, con la esperanza de que de aquí salgan las 2 El jugador, que fue nombrado capifuturas estrellas del balompié. Su debut con la selección absoluta fue en 2000, cuando estudiaba tán de la selección nacional coreana en la Universidad de Myongji. La historia de cómo ingresó al equipo es digna de conocerse. En ese para el Mundial de este año, en una momento, todavía no era un jugador maduro, y los equipos profesionales y universidades de presrueda de prensa en el estadio de Nelson Mandela Bay. tigio no le tenían en cuenta. Pero Huh Jung-Moo, entrenador del equipo nacional para las OlimpiaInvierno 2010 | Koreana 67
Huh Jung-Moo, el entrenador que le seleccionó para la escuadra nacional cuando era un jugador desconocido hace diez años, y Alex Ferguson, que le eligió hace cinco para que jugara en el equipo más famoso del mundo, han quedado impresionados por la asombrosa capacidad de Park en convertirse una amenaza para la defensa.
das de Sydney 2000, reconoció su potencial. Aunque su seriedad en el trabajo y competitividad ya eran evidentes, Huh se fijó en su habilidad para romper la defensa, ideal para un central ofensivo.
Cuerpo y mente La gente queda maravillada de la extraordinaria energía de Park, que se atribuye a sus “dos corazones”. Esta expresión se usa para destacar que puede correr sin parar en el campo durante los 90 minutos de partido sin siquiera tomarse un descanso. Una prueba realizada por el Instituto de Ciencia Deportiva de Corea en febrero del año pasado descubrió que tiene 40 pulsaciones por minuto en reposo, comparables sólo a otra estrella del deporte nacional, el corredor de maratón Lee Bong-Ju. La gente ordinaria tiene entre 60 y 80. Park, con un nivel tan bajo, puede correr continuamente a toda velocidad sin agotarse. Además, su capacidad vital (CV) se ha estimado en 5.000 cc, que supera ampliamente la de una persona normal (3.000-4.000 cc). A pesar de ello, el fútbol no es como los 100 metros lisos o una prueba de natación. En este deporte hay muchas variables que considerar y no todas tienen una respuesta física. Por ejemplo, el éxito de un pase básico depende en que llegue a tu compañero y no a la defensa contraria, que siempre intenta lograr una posición ventajosa. Park posee un físico ideal, con una altura de 1,78 metros y 101 cm de pecho, pero el éxito en este deporte requiere buena técnica y una mente muy rápida para elegir una maniobra ofensiva que aproveche la situación de la defensa. Los forofos coreanos no paran de aplaudirle y alabarle siempre que sale al campo con el brazalete de capitán, no sólo por su capacidad física, sino por su excepcional habilidad para romper la defensa contraria, gracias a su visión del juego. Huh Jung-Moo, que le seleccionó para la escuadra nacional cuando era un jugador desconocido hace diez años, y Alex Ferguson, que le eligió hace cinco para que jugara 68 Koreana | Invierno 2010
en el equipo más famoso del mundo, han quedado impresionados por la asombrosa capacidad de Park en convertirse una amenaza para la defensa. Por su juego, fue fichado por un equipo profesional japonés, los Purple Sanga de Kioto, en 2000. Ayudó al conjunto, que estaba en segunda división, a ascender a la primera al año siguiente. Poco después, fue partícipe del júbilo que supuso para la selección coreana alcanzar las semifinales del Mundial de 2002. En esta época, Guus Hiddink, el entrenador de dicha escuadra durante esa hazaña, le persuadió de que fichara por el PSV Eindhoven. La relación entre ambos se había fortalecido durante la tanda de penaltis que determinó el resultado del partido de cuartos, contra España, que llevó al grupo a las semifinales. Antes de los lanzamientos, Park dijo a Hiddink que dudaba si lanzar o no porque no lo había hecho a menudo durante sus días en el colegio. Entonces el preparador le dijo: “Por eso precisamente es por lo que tienes que tirarlo. Si lo metes, tu porcentaje de éxito será del 100 por ciento”. Animado por este desafío, marcó un gol decisivo. La actuación de Park y sus compañeros de equipo durante la Liga de Campeones de 2005 se recuerda como uno de los momentos más memorables en la historia del fútbol holandés. En el partido de ida de semifinales contra el Milán, el Eindhoven fue derrotado por 2-0. Era necesario un milagro en casa para pasar la eliminatoria y alcanzar la final. Antes de este encuentro, Johan Cruyff, el legendario jugador y ahora analista de este deporte, predijo que si existía algún milagro, debía provenir del juego de Park. Durante la primera mitad, demostró que Cruyff tenía un buen instinto. Antes de acabar el verano, Alex Ferguson,
que había visto el encuentro, le había hecho una oferta para que fichara por el Manchester United.
Lanzamiento de Park Ji-Sung, que fue gol, durante el primer partido de la fase inicial del grupo B frente a Grecia en el Mundial de Sudáfrica, disputado en el estadio Nelson Mandela Bay, en la ciudad de Port Elizabeth.
El Manchester United Park Ji-Sung es un jugador extraordinario, famoso por dar todo de sí siempre. Sus manos son suaves y elegantes, como las de una mujer, pero sus pies son tan horribles y están tan deformados que se parecen a los de un obrero de la construcción. Las imágenes de estas extremidades, tomadas por la fotógrafa Jo Seon-hee y publicadas en Elle Korea en noviembre de 2002, muestran que no tiene ninguna uña, y su metatarso no está alineado. Además, están llenas de cicatrices de lesiones, pasadas y recientes, grandes y pequeñas. Aunque la mayoría de los futbolistas profesionales llegan a la misma situación tras años de competición, estas imágenes ayudaron a recordar a todos los coreanos los continuos esfuerzos y el espíritu indomable que ha requerido su éxito. La carrera de Park, de ser un jugador desconocido a convertirse en una pieza clave del Manchester, simboliza la historia moderna de Corea, con los logros del desarrollo económico y la democratización. Su vida recuerda el avance del país, que comenzó con la industria pesada y de la construcción, hasta dominar los sectores de la tecnología de la información y las telecomunicaciones. Rememora también el proceso de democratización del país, que ayudó a toda la sociedad a desarrollar su pleno potencial. Además de ser uno de los jugadores titulares del Manchester,
también es el capitán de la selección coreana. Su habilidad para ahogar a la defensa contraria y su ataque continuo contra la portería han creado una situación curiosa y es que los propios defensores de su equipo rara vez ven su rostro durante el partido. Tras el Mundial de 2002, el número de campos de fútbol de categoría internacional en Corea ha aumentado notablemente. Además, se han creado centros regionales de este deporte en todo el país, mientras que se ha mejorado la gestión de las ligas profesionales y de la selección nacional. Aunque varios jugadores coreanos han elegido fichar por clubes extranjeros para mejorar su carrera (Park Chu-Young en Brasil y Ki Sung-Yong en Australia), hay otros, como Lee Chung-Yong que dejó el bachillerato para dedicarse por completo a su carrera profesional. Recientemente, el equipo nacional femenino Sub-17 ha ganado el Mundial por primera vez. Son las nuevas estrellas de la generación posterior a Park Ji-Sung. Estos deportistas son sus sucesores, hombres y mujeres, que han sabido aprovechar una mejor infraestructura y un sistema más racional, aparte de haber sido inspirados por Park como modelo de conducta. Su positiva influencia se ha extendido a segmentos de la sociedad no relacionados con un campo de fútbol. Invierno 2010 | Koreana 69
EN EL CAmINO
Jejudo Los caminos olle La isla de Jejudo alberga tres lugares de la UNESCO: una reserva de la biosfera, un patrimonio natural y el Geoparque Global, nueve lugares que forman un conjunto, entre los que estรกn el monte Hallasan y Seongsan Ilchulbong (pico del amanecer). En la actualidad, muchos visitan la isla para ver sus atracciones mientras pasean por una red de caminos denominada olle (senda estrecha). Kim Hyungyoon Ensayista | Ahn Hong-beom Fotรณgrafo
70 Koreana | Winter 2010
C
on la llegada del otoño, hice un viaje de tres días a Jejudo para pasear por la isla. Me recibió un cielo de un brillante color azul, signo inequívoco de la llegada de esa estación. Pero el sol era todavía fuerte y las rocas junto a la playa despedían un gran calor. No obstante, esto no impide a la gente pasear por las formaciones, de toda forma y tamaño. El viento que me golpeaba las mejillas era un alivio. El ritmo de las olas al romper con la costa me cautivaba y el cambiante paisaje del mar y el cielo me habían hechizado. El deseo de vagar por ahí era insuperable. Jejudo es la isla más grande de Corea. Todavía sigue siendo un destino turístico popular dentro del país. Situada al sur de la península, este territorio ovalado ofrece gran variedad de lugares y actividades de ocio gracias a su origen volcánico y a un clima que
se está convirtiendo en subtropical. En cada vuelta del camino hay un paisaje distinto y el espíritu de aventura se ve potenciado por los desafíos que pueden surgir en cualquier lugar.
Historia de los caminos olle Desde 2007, una mujer del lugar se ha encargado de planificar las rutas en la costa de la isla. La mayoría siguen caminos viejos de Jejudo, que se conoce como “la isla mística”, pero estaban abandonados y el mar terminaba tragándoselos o la vegetación los cubría. Suh Myung Sook, junto con algunas amigas, buscaban esas sendas olvidadas, conectaban antiguos segmentos y creaban nuevos enlaces para las ya existentes. Se inspiró en el peregrinaje que hizo desde Francia por el Camino de Santiago, España, que le
bajando del monte Songaksan hacia el puerto de Moseulpo, en la ruta número 10 de los caminos olle (fotografía: Jejuolle). Winter 2010 | Koreana 71
72 Koreana | Invierno 2010
1
llenó del olor de la tierra y las brisas de su patria chica. En cuanto regresó, abandonó su trabajo como periodista y comenzó una nueva vida como pionera del senderismo. Dio el nombre de olle a los caminos que descubría. En el dialecto de la isla, significa “senda estrecha” o “callejón”. Junto con sus amigos ayudantes, creó primero 16 kilómetros y otras dos sendas algo después. En total, 46 kilómetros. En los años siguientes, siguió añadiendo senderos. Ahora hay 22, que cubren 357 Km. Estos caminos siguen, principalmente, la costa. A veces, alguno se introduce en pueblos, bosques y montañas, pero acaba donde la tierra se junta con el mar. Mientras la gente pasea, se siente embelesada por el peculiar olor de la brisa del mar y por el ritmo de las olas al romperse en las rocas, acompañado por el sempiterno viento de la isla. El primer día de viaje, recorrí 13 Km de la ruta 7, desde Oedolgae al puerto de Gajeong. Un afloramiento rocoso, resultado de una erupción volcánica hace un millón de años que también dio forma a toda la isla, se yergue en el aire como una columna de apoyo surgiendo del mar. El nombre de esta formación es Oedolgae y también la del área frente a ella, que se alza como testigo silencioso del paso del tiempo. La luz del amanecer, amplificaba el calor que desprendía la costa pero, al igual que mis compañeros de viaje, no estaba dispuesto a abandonar. Mi mirada se per-
1 Un tramo de 2 Km de los caminos olle en la ruta número 8 pasa por un acantilado rocoso desde Jungmun-dong, Seogwipo, hasta Daepo-dong.
2 En la ruta número 7 podemos ver caprichosas formaciones rocosas en la costa, como esta columna de piedra, conocida como Oedolgae (fotografía: Jejuolle).
día en los maravillosos paisajes que me rodeaban.
Visor de cámara Llevaba una cámara. He trabajado desde hace mucho como editor en una revista y admiro las instantáneas bellas, pero nunca pensé que pudiera crearlas yo mismo. Siempre he creído que manejar uno de esos aparatos requería de un toque especial, algo de lo que carecía. Pero cuando la era digital llegó y todos comenzaron a llevar una, sentí que yo también podía hacerlo. Me animó el hecho de que las digitales son más fáciles de usar que las de película. Ver las cosas por el visor hacía que el acto de “mirar” fuera más deliberado. Comencé a fijarme, algo comparable a masticar bien la comida. Mis sentidos y sensibilidades se despertaban ante la influencia de la luz que, al caer sobre lo que me rodeaba, desataba mis emociones. Eso ocurrió cuando no había “luz en la luz”. Era agradable tener todas estas experiencias gracias a una cámara. A lo largo de la costa meridional hay formaciones rocosas que parecen esculturas creadas por las fuerzas de la naturaleza. Estos pilares, conocidos como jusangjeolli , tienen varias formas, desde rectangulares a hexagonales, y son el resultado de erupciones que cubrieron toda esta área con magma volcánico, origen de estas preciosas esculturas y un magnífico acantilado al enfriarse. Si vemos este lugar desde cierta altura, quedamos intrigados por las formas, que me obligaban a tomar continuas instantáneas de lo que veía en el visor. El tiempo pasó mientras me hallaba preocupado en capturar todas las imágenes posibles y me di cuenta de que no había avanzado mucho en el camino. No tenía tiempo para llegar al autocar
Invierno 2010 | Koreana 73
2
1
2
Estos caminos siguen, principalmente, la costa. A veces, alguno se introduce en pueblos, bosques y montañas, pero acaba donde la tierra se junta con el mar. Mientras la gente pasea, se siente embelesada por el peculiar olor de la brisa del mar y por el ritmo de las olas al romperse en las rocas, acompañado por el sempiterno viento de la isla.
que esperaba al final de la ruta, ya que me había deshidratado y no tenía energía para ir más deprisa. Acabé dejando el sendero y acercándome a un pueblo cercano para coger un taxi. Esté uno donde esté en la isla, siempre puede volver a la civilización. En otros lugares, como en el Tíbet o en el Camino de Santiago, no es así. Para cualquier visitante a la isla, es simplemente cuestión de llamar y esperar unos 30 minutos, excepto que uno esté en la ladera del monte Hallasan. Claro está que los aventureros coreanos se mofarán de eso. Pero incluso los senderistas más avezados hallan difícil de resistir los atractivos de esta isla.
El holandés Hamel El segundo día, comencé en la ruta 10. Como el día anterior, iba por la costa meridional, pero esta vez desde la playa de Hwasun hasta el puerto de Moseulpo. Aunque es un sendero costero, también pasa por un área con suaves laderas y llanos. Paré un rato en el área de Yongmeori (cabeza de dragón), un tramo de costa atractivo bajo el monte Sanbangsan. El nombre proviene de la forma del terreno, que parece un dragón con la cabeza erguida, como si fuera a abalanzarse hacia el mar; no pude visualizar ese animal mítico. Mi atención se vio absorbida por el acantilado, a cuyo pie había rocas planas, y la espuma de las olas al romper contra ellas. Hay un barco de vela cerca de este lugar que no navega. Sirve como monumento a la memoria del holandés Hendrik Hamel, cuyo barco, De Sperwer (el gavilán), naufragó en esta costa en su viaje de Taiwán a Nagasaki (Japón) en 1653. De los 64 tripulantes, 35 sobrevivieron y alcanzaron la isla. Todos fueron detenidos y obligados a trabajos forzados. En 1666 escapó a Japón con siete camaradas. Desde Nagasaki, volvió a su país, donde escribió sus peripecias (Diario del desafortunado viaje de El Gavilán) sobre los 13 años de experiencia en Corea. Su relato fue para los europeos 74 Koreana | Invierno 2010
una introducción a un mundo desconocido. A lo largo de estos caminos, hay tiras de cintas azules y naranjas y flechas de los mismos colores que marcan la dirección que seguir. A intervalos, hay letreros cuadrados o rectangulares apoyados en largos soportes de color azul. Este símbolo de las rutas representan, dicen, al caballo indígena de la isla. Esta figura, que se pensaba que parecía un perro, se conoce como ganse, que significa “pereza”.
Sueños de Miramar En mis años de estudiante, tras las clases, iba corriendo a casa para dejar la cartera y salir hacia el valle que estaba detrás de nuestro pueblo. Buscaba cangrejos de río o cualquier otra cosa entre las rocas. En primavera, cogía azaleas y las llevaba a casa. Una mañana, tras un chubasco, hallé una castaña que brillaba al sol. Pero en esos días mis juegos no tenían nada que ver con pasear. Por ello, nunca pienso: “De acuerdo, supongo que iré a dar una vuelta ahora”. Cuando era bastante mayor empecé a pensar en andar como ejercicio y sus beneficios para la salud. Pasear con esos objetivos no deberían considerarse ganse, un acto de vagancia. Este ejercicio, si se hace intencionadamente, lleva a un ritmo acelerado. Hacerlo despacio, “con pereza”, tiene pocos beneficios como gimnasia. Ir más rápido no reduce el placer de la actividad. Si lo hace-
1 Frutas producidas localmente: piña tropical, pitahaya y mandarina. 2 Monumento a la memoria de Hendrik Hamel, el capitán holandés que llegó a estas costas tras el naufragio de su barco en 1653. Después de regresar a su país, publicó un relato que sirvió para presentar Corea a los europeos.
mos mientras nos concentramos en los movimientos del cuerpo y en mover los brazos sin limitaciones, podemos experimentar una sensación agradable. No hay nada de vagancia en todo eso. Hace tiempo leí el libro Tesoros en la arena. El autor, Richard Brode, neoyorkino con una vida ajetreada como editor de un periódico y una revista, se fue a la costa oeste de Estados Unidos. En su libro, nos cuenta que siempre paseaba por la playa en Miramar. Pasaba el día peinando la arena y recogiendo cosas. No una semana o un mes, sino todo el año. Sería, imagino, la cumbre de la vagancia. En Jejudo, a una persona así se la llama ganse dari. Cuando leía su libro soñaba con convertirme yo en uno de ellos, paseando por la arena para recoger conchas. Esta idea me devuelve mi niñez, buscando cangrejos, después de olvidar hacer los deberes. Pero era consciente de que ese sueño no sería fácil de lograr. No obstante, escuchando el ruido del viento y las olas, planeé quedarme en la isla durante un mes para poder vagar por sus playas.
Sierras bajas, valles frondosos Una carretera desde la ruta 8 nos aleja de la costa hasta las colinas donde los caballos pastan, al pie de montes más altos. En el centro de la isla, con un área de 1.850 Km cuadrados, se alza el monte Hallasan, de 1.950 m de altitud, un volcán relativamente joven que todavía seguía activo hace 25.000 años. Durante este periodo, produjo unos 360 conos adventicios que todavía pueden verse por aquí. Un ejemplo prominente es Songaksan, junto al mismo sendero. Sólo tiene 104 metros de altitud, pero el cráter es profundo. Había venido aquí hacía unos meses, pero era temprano y todo estaba envuelto en niebla, lo cual me impidió acercarme al borde. Esta bruma asciende como cenizas de un valle especialmente profundo. Esta vez, el día estaba despejado así que pude subir. La tierra alrededor de la abertura es rojiza. Hay también árboles entre las rocas. A pesar de todo, no tuve valor para acercarme lo suficiente, porque parecía caer en vertical. Durante mi corta estancia en la cima, vi a varios jóvenes.
Un grupo de senderistas se refresca en la playa de Hwasun, el final de la ruta número 9 de los caminos olle (fotografía: Jejuolle).
Invierno 2010 | Koreana 75
3
1 La ruta número 8 nos conduce a áreas altas donde podemos ver los caballos indígenas de esta isla, designados Monumento Natural número 347 para protegerlos.
2 Dolhareubang (“abuelo de roca”), estatuas características de Jejudo, y una de las principales atracciones del parque de Piedra de la isla.
3 La ruta número 10 serpentea por un pintoresco acantilado al pie del monte Songaksan (fotografía Jejuolle).
1
2
Había varios policías locales que patrullaban la costa al pie del monte y algunas forasteras con mochilas de colores brillantes, que parecían diminutas flores silvestres. El sol y la brisa destacaban la belleza de todo. Mientras descendía, vino una racha de viento y las ramas comenzaron a agitarse, al igual que los prados y sus flores rojas y azules. Yo también dejé que me azotara en la dirección que quisiera. La carretera conducía a las planicies de abajo y nos dirigimos al mar tras pasar por un patatar. Allí, tomamos un barco de recreo mientras el sol se ocultaba en el horizonte.
Saryeoni: el bosque sagrado El tercer día, me fui de la costa y me dirigí al interior para conocerlo. Había pasado algún tiempo durante los dos días anteriores con una profesora de bachillerato de Seúl y su hija, de 13 años, que estaban de vacaciones. Me dijeron que tenían planes de visitar el bosque de Saryeoni al día siguiente. Pensé en ambas, cantando mientras paseaban por ese lugar como si fuera una experiencia única y me pareció agradable, así que me uní a ellas. Los tres tomamos un autobús desde la terminal de la capital. Ese autocar, viejo y vacío, pasó por colinas, pueblos y huertas. Me 76 Koreana | Invierno 2010
informaron de que el nombre del lugar significa “bosque sagrado”. Era una zona frondosa virgen a unos 500 metros de altitud, en la ladera del monte Hallasan. La carretera principal, cubierta de escoria volcánica, que ayudaba a suavizar los impactos de los baches, era de cemento pero las que partían de ella eran caminos de tierra ocultos por hojas. Del bosque, compuesto de gran variedad de árboles, como el roble, el carpe, la estirácea (Styrax sp.), el cornejo, el ciprés y el cedro japonés provenía un aroma agradable. Si uno mira al cielo desde la oscuridad de la arboleda, puede marearse. Genera, además, el deseo de sumergirse en las maravillas de la naturaleza. Sólo se pueden ver retazos de cielo entre el laberinto de ramas de cedros japoneses. Cuando salía, tras tres horas de paseo, me pregunté lamentándome si debería haber andado algo más despacio. Pero era tiempo de llenar el buche. Hay varios restaurantes cerca del aparcamiento. Antes de irme, prometí que la próxima vez que regresara, daría un paseo más tranquilo. No les pregunté, pero parecía que tanto la madre como su hija habían tenido la misma idea.
Invierno 2010 | Koreana 77
3
GASTRONOmÍA
78 Koreana | Invierno 2010
Tangpyeongchae Plato colorido y simbólico La variedad de colores y texturas del tangpyeongchae simboliza la armonía que Yeongjo, monarca de la Dinastía Joseon, quiso lograr con su política de imparcialidad (Tangpyeong) en el nombramiento de funcionarios. Lee Jong-Im Directora del Centro de Investigación de la Gastronomía Coreana Ahn Hong-beom Fotógrafo
L
a palabra chae (菜, verdura) es parte del nombre de varios platos coreanos. Aparte del que tratamos aquí, podemos citar el japchae (fideos transparentes salteados con verduras), juksunchae (brotes de bambú aderezados) y gyeojachae (fiambres y verduras frescas con salsa de mostaza). Todos combinan vegetales y carne de vaca, pescado o marisco. El proceso de cortar las hortalizas y frutas en juliana se denomina chaechida, que se aplica a la mayoría de los ingredientes de cualquier plato de estilo chae.
Origen El libro Dongguk sesigi (東國歲時記), escrito durante el periodo de Joseon, incluye información sobre acontecimientos anuales y costumbres sociales además de tradiciones culinarias. El término tangpyeongchae se ha atribuido a la política de imparcialidad (Tangpyeong) que se adoptó a mediados de dicha era. La aplicación de esta directriz, según la cual los funcionarios eran seleccionados por su capacidad y no sus relaciones, se atribuye al monarca Yeongjo, que deseaba fomentar la armonía entre sus asesores, a menudo divididos en facciones. Su sucesor, Jeongjo, también siguió con esta
El cheongpomuk (gelatina de alubia verde) es un ingrediente fundamental del tangpyeongchae, famoso por su variedad de colores y texturas.
Invierno 2010 | Koreana 79
1
2
El tangpyeongchae se distingue por su variedad de colores, texturas y sabores: la suavidad del muk , o gelatina de alubias verdes, el sabor de la carne de vaca, los crujientes brotes de soja, el aroma del apio oriental y el aderezo de la salsa de soja. Una vez tostada la lámina de alga (gim ) y se añaden tiras de yema y clara de huevo (jidan ), es hora de servirlo. Es ideal para los que buscan equilibrio nutricional. Es también un buen aperitivo para tomar con una copa.
práctica. El plato simboliza, con sus distintos sabores y texturas, dicha promulgación del rey.
La gelatina muk Este preparado es singular de Corea. Se cocina con la fécula de distintos ingredientes, que se hierve y luego se deja enfriar hasta que forma una emulsión. El cheongpomuk , de alubia verde, tiene una textura suave, es transparente y suele comerse en primavera. El oksusumuk , de maíz, es sedoso como un fideo y típico del verano. El dotorimuk, que suele consumirse en otoño, es de bellota y tiene sabor amargo. El memilmuk, característico de invierno, se elabora con alforfón y es muy sabroso. Todos pueden cortarse en taquitos y servirse con salsa de soja o pueden combinarse en otros platos. En la actualidad, la gente ya no prepara todo desde el principio, sino que tiene la fécula en polvo y puede hacer la gelatina todo el año. También puede comprarse ya elaborada. Por ello, la
80 Koreana | Invierno 2010
estacionalidad de cada tipo no tiene mucho sentido ahora. En tiendas coreanas de alimentación en el extranjero también puede conseguirse. La receta que se incluye asume que se utiliza este tipo de producto en la preparación del tangpyeongchae.
El cheongpomuk La alubia verde es una legumbre similar a la roja. Es más pequeña de color verdoso y contiene aminoácidos esenciales y ácidos grasos insaturados de gran calidad. Es muy digestiva y está recomendada para personas con hipertensión. También ayuda a recuperarse de una resaca por abuso de bebidas alcohólicas. Para preparar este plato, añada 5 o 6 vasos de agua por cada uno de fécula de estos frijoles en una cazuela y dele un hervor mientras lo mueve con una cuchara de madera. Para conseguir la mejor textura, hay que seguir dándole vueltas a la mezcla cinco minutos después de que la fécula se haya disuelto y la
Tangpyeongchae Ingredientes - 250 g de cheongpomuk, 80 g de carne de cadera de vaca, 80 g de brotes de soja, 100 g de apio oriental, 1 hoja de alga tostada, 1/4 de guindilla roja, 1 huevo, 1 cucharadita de aceite, sal. 3
- Aderezo para el muk: media cucharadita de sal y media de aceite de ajonjolí.
1 Dar un hervor al apio oriental.
- Aderezo para la carne de vaca: dos ter-
2 Saltear la carne aderezada.
cios de cucharadita de salsa de soja,
3 Los ingredientes pueden mezclarse en un cuenco
media de azúcar, una de chalota
antes.
picada, media de ajo picado, media de sal con semillas de ajonjolí, media de ajonjolí, pimienta. - Preparado de salsa de soja: una cucharada de salsa de soja, una de vinagre, una de azúcar y una de sal con semillas de ajonjolí.
Preparación 1 Separar la yema y la clara del huevo, freír ambas por separado en capas finas y cortar
solución sea transparente. Cuando el ya fallecido Michael Jackson visitó Corea hace unos años, elogió el bibimbap (arroz mezclado con verduras). Hoy en día, este saludable plato, que, se identifica con Corea en todo el mundo en algunas regiones se elabora con esta gelatina. El tangpyeongchae se distingue por su variedad de colores, texturas y sabores: la suavidad del muk , o gelatina de alubias verdes (Vigna radiata (L.) R. Wilczek), el sabor de la carne de vaca, los crujientes brotes de soja, el aroma del apio oriental (Oenanthe javanica) y el aderezo de la salsa de soja. Una vez tostada la lámina de alga (gim) y se añaden tiras de yema y clara de huevo (jidan), es hora de servirlo. Se puede sustituir el apio oriental por otras verduras, como pimiento, apio, cebolleta, pepino o calabacín. Es ideal para los que buscan equilibrio nutricional. Es también un buen aperitivo para tomar con una copa.
en juliana. 2 Cortar el cheongpomuk en tacos de 0,5 cm de ancho y 6,7 cm de longitud y darles un hervor. Retirar y untar con el aceite de ajonjolí y la sal. 3 Cortar la carne de vaca en tiras, mezclarla con su aderezo y saltearla con la guindilla roja. 4 Quitar las semillas de los brotes de soja, hervir los tallos en agua con sal durante dos minutos y luego enjuagar. 5 Cortar los tallos del apio oriental en trozos de 5 cm, hervir durante 1 minuto y enjuagar. 6 Trocear la lámina de alga. 7 Poner el cheongpomuk, la carne, los brotes, el apio oriental y las tiras de guindilla en un cuenco con el preparado de salsa de soja. Decorar con el alga y las tiras de huevo. No olvide de poner más salsa de soja con vinagre para usarlo como aderezo adicional.
Invierno 2010 | Koreana 81
OPINIÓN DESDE LA LEJANÍA
Cuando el diccionario no es suficiente Ramiro Zúñiga Garibay Misionero de Guadalupe
A
lo largo de la historia la amistad ha ocupado un lugar privilegiado dentro de las relaciones humanas; mucho se ha escrito sobre este tema en todos los tiempos y culturas. Bien podríamos afirmar que forma parte de la experiencia de vida, si no de todos, sí de la gran mayoría de los seres humanos. Sin embargo, la forma como se vive y expresa en cada cultura es diferente como diferentes son las personas y las culturas donde se convive. Es por eso que los conceptos no son suficientes y se hace necesario conocer la cultura para comprender lo que cada pueblo entiende cuando se habla de ciertas experiencias humanas. No soy lingüista ni tampoco antropólogo pero esto lo he aprendido en mi contacto con la cultura coreana. No creo que sea sólo exigencia del idioma coreano, pero sí es un requisito para quien desea aprenderlo conocer también la cultura que lo ha producido y que sigue influyendo y modificando. Comencé a darme cuenta de esto cuando no pude entender el significado que tenía la palabra chingu (amigo) dentro de esta cultura. No es fácil separarse de aquéllos con quienes se han creado lazos de afecto y cercanía. Se deja la patria y se emigra a otros lugares, los amigos se quedan pero la experiencia de ese encuentro se vuelve parte del equipaje del que va en busca de nuevos horizontes. Así fue como llegué a Corea hace ya algunos años. La casa a la que estaba destinado estaba en construcción, tuve entonces que ir a vivir a una comunidad en la que los extranjeros éramos sólo unos cuantos,
82 Koreana | Invierno 2010
excelente oportunidad para conocer la cultura de donde quería pasar el resto de mi vida. Obviamente no entendía nada del idioma pero amablemente me hablaban en inglés pues las clases de coreano las estaba comenzando. Uno de los primeros días, mientras desayunábamos, uno de nuestros anfitriones me preguntó qué edad tenía y al responderle, otro de ellos que estaba frente a mí se alegró y exclamó: “¡Qué bien, formidable! ¡Entonces podemos ser amigos!”. ¡Qué palabra más agradable cuando se está comenzando a vivir en un país diferente! No pude contener mi alegría e inmediatamente le contesté que me agradaba la idea. Apenas estábamos apretándonos mutuamente las manos cuando otro de los que compartían la mesa con nosotros y quizá -ahora lo entiendo- con más experiencia en el trato con extranjeros, me preguntó en qué año había nacido. Cuando respondí, la sonrisa de mi nuevo amigo desapareció y su mano regresó a retomar los palillos para seguir comiendo. Además, con una voz débil canceló su propuesta diciendo que entonces no podíamos ser amigos. Yo entendía las palabras, pues hablábamos en inglés, pero no entendía lo que estaba pasando hasta que uno de ellos se percató de mi desconcierto y vino a ayudarme explicándome que había habido un error de cálculo, que en la cultura coreana la edad se cuenta desde el momento de la concepción, no del nacimiento. Hasta ahí entendía y me parecía muy lógica y novedosa la manera de calcular la edad pero yo
seguía inquieto por la sonrisa desaparecida del rostro de mi estrenado amigo y la cancelación de su propuesta. En mi ignorancia cultural yo había calculado mal mis años, no teníamos la misma edad sino que yo era un año mayor que él. Sin embargo, yo les decía que eso no era importante, que lo que se requería era que ambos deseábamos ser amigos. Ellos se reían de mi ingenuidad y me explicaban que eso no era posible, que para poder ser amigos era necesario haber nacido en el mismo año. Con mi mentalidad occidental yo trataba de explicarles que la edad no era importante cuando dos personas quieren ser amigas, pero ninguno de mis argumentos convenció a mis interlocutores ni pudo hacer regresar aquella sonrisa, ni pudo volver a extender aquella mano que siguió ocupada comiendo. Unos meses después, en la universidad donde estudiaba coreano, un día mientras hablaba con otros de mis compañeros de clase se acercó uno de los profesores con quien teníamos muy buena relación y se involucró en nuestra conversación. El maestro, un hombre joven, se asombró de lo que hablábamos y nos preguntó si de verdad nosotros teníamos amigas. A nosotros nos sorprendió la pregunta y a una voz contestamos que obviamente teníamos amigas. Entonces él insistía si eran sólo amigas realmente, a lo que nosotros respondíamos afirmativamente. Él sacudía la cabeza y nos decía que cómo eso era posible, que para ser amigos se necesitaba ser de la
misma edad y del mismo sexo. Con el paso del tiempo y viviendo en esta cultura he llegado a entender que hay ocasiones en que el diccionario no alcanza a traducir las experiencias humanas que se viven en diferentes civilizaciones. Pero también por la propia experiencia podemos acercarnos y enriquecernos así como dilatar nuestros horizontes. Ahora comienzo a entender la importancia que tiene la relación entre iguales en Corea. Haber nacido en el mismo año significa identidad y pertenencia que no siempre se da en las relaciones de iguales en el mundo occidental. En la experiencia histórica que ha vivido este país, la pertenencia es parte constitutiva de su ser: ha sido en solidaridad y pertenencia como se han podido enfrentar los retos para sobrevivir infinidad de catástrofes desde las naturales hasta las impuestas por la voluntad humana. Además, el orden aprendido del confucianismo, que ha permitido funcionar y fusionar la diversidad en el respeto a la edad, ha creado una identidad natural dentro del grupo, al cual no se puede penetrar tan sólo por el deseo. Se vive la cercanía y se da el afecto, que hay mucho en las relaciones con el pueblo coreano, pero se expresa de manera diferente como diferentes son los nombres que aparecen en las relaciones interpersonales, según sean las personas que se relacionan: según edad, sexo o incluso responsabilidad dentro del grupo en donde se convive.
Invierno 2010 | Koreana 83
VIDA
ร xito de los simuladores
de golf en Corea Los simuladores de golf son una popular tendencia recreativa en Corea. Debido al enorme coste de jugar en un campo real, aparte de que estรกn siempre repletos, cada vez mรกs gente se dedica a este deporte virtual, que podemos practicar en varias de las canchas mรกs famosas del mundo. Chung Jewon Periodista del JoongAng Daily | Ahn Hong-beom Fotรณgrafo
84 Koreana | Invierno 2010
“¿
Qué le parece una ronda de golf esta tarde, jefe?”. “Perfecto. Podemos ir tras la cena de empresa. ¿Por qué no reservas la sala?”. Esta conversación entre oficinistas es frecuente en la actualidad en Corea. Este fenómeno es el resultado de la enorme popularidad de lo que se denomina “screen golf”, simuladores de este deporte. Mientras que los salones de billar y de tenis de mesa, lugares favoritos no hace mucho para que los varones pasaran el tiempo libre, están disminuyendo, los de golf aumentan rápidamente.
Aplicación de la tecnología Los simuladores permiten que juguemos a este deporte en el mundo de la realidad virtual. Quizá este sea el nombre más adecuado, pero en Corea se conoce como “screen golf” por la forma en que se practica: golpear una bola y dirigirla a una pantalla donde está la imagen del hoyo que se juega. Se introdujo por primera vez a principios de la década de 1990, aplicando la tecnología de simulación/vídeo. Pero no era atractivo para los aficionados porque la experiencia del juego no se asemejaba a la real. Desde 2000, no obstante, los avances en dichas tecnologías han transformado el juego de tal modo que los golfistas afirman que es casi real, lo que ha conducido a una difusión sin precedentes. Shin Yong-hun, empleado de 41 años en una empresa pública, es un entusiasta de esta actividad y juega al menos tres o cuatro rondas al mes. “Lo mejor es su precio: de 20 a 30 dólares los 18 hoyos, que representa la décima parte de lo que cuesta en un campo real. Además, estas salas se encuentran en cualquier sitio, cerca de casa o la oficina, así que no hay que preocuparse por los atascos. Ir para jugar una partida un fin de semana puede durar al menos diez horas, que se reducen a la mitad si es virtual”, nos dice. Shin ha disminuido sus viajes a una cancha real de dos veces al mes a una y, a cambio, juega más en el simulador. Ha organizado reuniones de sus antiguos compañeros de bachillerato en las salas. Lo considera una alternativa más saludable que ir a un bar o restaurante. En estos locales, se puede jugar en grupos sin necesidad de esperar por los que se retrasan. Además, pueden pedir comida china o pollo frito, y cerveza, y comer ahí mismo, algo que, según él, es una forma perfecta de aliviar el estrés. “Hay muchas dificultades para jugar en Corea. El precio en los campos es excesivo y los administradores suelen ser autoritarios, ya que hay muy pocos para el número de aficionados. Jugadores jóvenes como yo no quieren pagar esos precios y luego no sentirse bienvenidos. Estas circunstancias han contribuido a popularizar los simuladores. A diferencia de los campos reales, no es necesario ir en traje o ropa deportiva. Una vez no me dejaron jugar porque llevaba pantalones cortos. Nadie se preocupa de eso en las salas. Y lo mejor de todo es que podemos ir en cualquier momento, temprano por la mañana o después de medianoche, llueva o nieve. Es difícil disfrutar al aire libre un bochornoso día de verano o durante el frío invernal, pero siempre podemos asistir al salón de juego. Por todo esto voy ahí”.
Nuevos hábitos Este fenómeno ha creado hábitos propios entre los golfistas aficionados. Los oficinistas a menudo pasan la hora del almuerzo en estos salones, jugando una partida de seis o nueve hoyos, y el perdedor paga la comida. Las salas cercanas a los edificios de oficinas en el centro de Seúl ofrecen también menús para almorzar y atraer así a más jugadores. Una práctica reciente es que los trabajadores coman en diez minutos algo rápido, como un sándwich o un cuenco de fideos instantáneos, y luego jueguen un rato antes de volver a la oficina. Un menú con bebida y una partida de 6 hoyos cuesta unos 15 dólares. Según Kim Beom-su, oficinista de 37 años: “En el pasado, este deporte era de ricos, pero ahora cualquiera puede disfrutar de él. Una partida de seis hoyos, con el perdedor pagando la comida, no interfiere con el trabajo ni es muy caro”. Pero incluso en estas salas es necesario reserva en ciertas horas. En Yeouido, el distrito financiero de la capital, las siete de la tarde es cuando hay más solicitudes. De hecho, para esa hora, es necesario hacer reserva un día antes. La pasión por esta actividad también se ve en los pisos en régimen de propiedad horizontal y lugares turísticos en otras partes del país. En Haevichi, situado en Pyoseon-myeon, Seoguipo, en la
El simulador, conocido en Corea como “screen golf” (golf en pantalla), es una actividad popular durante el tiempo de almuerzo para los oficinistas. Invierno 2010 | Koreana 85
“Lo mejor es su precio, que representa la décima parte de lo que cuesta en un campo real. Además, estas salas se encuentran en cualquier sitio, cerca de casa o la oficina, así que no hay que preocuparse por los atascos. Ir para jugar una partida un fin de semana puede durar al menos diez horas, que se reducen a la mitad si es virtual”
isla de Jejudo, hay un salón con tres sistemas de simulación que está teniendo mucho éxito. Para jugar el fin de semana, es obligatorio hacer reserva. También se ve recientemente un aumento de salas acondicionadas para mujeres. Aunque la clientela principal está compuesta de jóvenes varones, el número de féminas aumenta también. Como consecuencia, algunos lugares incluyen salones de belleza y de cuidado de uñas. Por ello, algunas damas de 40 y 50 años eligen estos salones en vez de restaurantes para reuniones de ex alumnos y de amigas. Pueden jugar 18 hoyos y luego disfrutar de un masaje en una clínica de fisioterapia en el mismo lugar. Kim Myeong-seon, un ama de casa de 46 años, nos dice: “Después de una ronda, voy a que me hagan las uñas. Disfruto de una actividad barata, me lo paso bien con las amigas y cuido mi apariencia, así que es como matar tres pájaros de un tiro”.
superan los mil millones. Podemos hallar diferencias en cuanto a los usuarios por sexo y edad. Hombres y mujeres representan, respectivamente, el 74 y el 26 por ciento. En cuanto al segundo factor, los más habituales están en la cuarentena (40 por ciento), seguidos por los que tienen treinta (26 por ciento), veinte (16 por ciento) y cincuenta (14 por ciento). Entre los que han empezado a usar este servicio este año, el 58 por ciento registró más de 100 golpes para los 18 hoyos, seguidos por los que necesitaron de 91 a 100 (31 por ciento). Estas cifras indican que la mayoría de los que van a estas salas son nuevos practicantes de golf. Es necesario destacar también el hecho de que los que respondieron la encuesta de Golfzon estaban interesados en jugar tanto los días laborables como los fines de semana. Sólo un 14 por ciento dijo que sólo jugaba sábados, domingos y festivos.
Instalaciones cercanas
El futuro de esta industria
En 2007, había unos 900 de estos salones en Corea, pero ya en 2008 alcanzaron los 3.000 y más de 5.000 el año pasado. Este año, ya se ha llegado a los 6.000. Los especialistas en este tipo de negocios estiman que hay unos 15.000 sistemas de simulación de golf en funcionamiento hoy. ¿Cuánta gente practica esta actividad? Según Gallup Corea, en una encuesta realizada en marzo de este año, hay unos 960.000 usuarios de estas instalaciones. Sin embargo, según un análisis de la empresa Golfzon, líder en este campo, el número es mucho mayor. Afirma que la cifra de Gallup era la de 2008 y que pasó a 1,27 millones el año pasado, lo que representa un crecimiento anual del 32 por cierto. Prevé que a finales de este año, el número sea de 1,72 millones. Además, según sus proyecciones, pronto el uso superará los 20 millones de hombres-día de estas instalaciones, que supera las asistencias a los estadios de los aficionados al béisbol a los partidos de la liga profesional coreana Los ingresos de estas salas de simuladores se estiman en más de 600 millones de dólares, basándose en las tarifas de alquiler. Cuando se incluyen productos de golf y otros gastos, se
Golfzone es el mayor fabricante de simuladores y organiza y patrocina el torneo que lleva su nombre, una competición mensual para los usuarios de estas salas, que se ha convertido en un medio de que los aficionados logren la fama. Esta empresa quiere ampliar esta competición y permitir la participación de profesionales. Creen que si los premios son tan atractivos como los de los torneos regulares, los profesionales se unirán. En otros diez o veinte años, dicen, los tour no sólo serán en campos reales, sino también virtuales, y prevén que los torneos de este último sistema lleguen a ofrecer 1 millón de dólares. Kim Young-chan, presidente de la empresa, que proyecta un volumen de negocio de 20.000 millones de dólares este año, se muestra optimista sobre el futuro de los simuladores de golf: “Por medio del remarcable desarrollo de la tecnología de vídeo, los golfistas pueden disfrutar de su esparcimiento favorito virtualmente como si fuera real. Puede que el golf se originara en Escocia, pero un día Corea será conocida como la cuna de los simuladores. Vamos a continuar fomentando esta actividad en todo el mundo”.
86 Koreana | Invierno 2010
Jornadas de Literatura Coreana
Kwon Yeo-sun Desde 1996, año en que Kwon Yeo-sun (n. 1965) publicó su primera novela, Pureureum teumsae (nicho verde), se la ha conocido por su estilo original de analizar con voz contundente el tormento interior del ser humano y los trastornos de la vida diaria. En sus narraciones, que podrían ser consideradas biografías de mentalidades patológicas, la autora parece exclamar: “¡Vengan a ver el monstruo que hay en mis adentros!”.
Invierno 2010 | Koreana 87
CRÍTICA
Kwon Yeo-sun Autoanálisis estético del comportamiento patológico Kim Youngchan Profesor de la Universidad de Keimyung
K
won Yeo-sun rehúsa los estándares convencionales tanto en la forma como en el contenido. Sus novelas mantienen escenarios psicológicos que nunca antes se habían descrito en la narrativa coreana, lo cual provoca que leer sus obras sea una experiencia poco agradable. Esta disconformidad no está causada tan sólo por sus esfuerzos de romper con la formalidad estética sino también por un sentido del desasosiego derivado de la sustancia de sus novelas y la profundidad de las emociones a que puede dar lugar. La falta de familiaridad se acentúa más por sus protagonistas, que se diferencian en gran medida de la gente ordinaria: son personajes peculiares con realidades psicológicas impredecibles, por lo general desagradables e incluso obscenas. La esencia de sus trabajos se refleja en la pasión desmedida y deseos ardientes por inmiscuirse en los aspectos más ocultos de la vida diaria: desdén y aversión extremos, culpabilidad y ruptura, caos absoluto, éxtasis proveniente del dolor infligido a uno mismo e insistencia en exponer los abismos más profundos. Estas son, entre otras, las características distintivas de sus personajes. Los protagonistas típicos de Kwon son individuos alienados y aislados. Su angustia es autoimpuesta, al igual que la alienación y aislamiento que sienten. Un ejemplo de este estado patológico es Laura, la heroína de “Gaueri omeyeon” (cuando vuelva el otoño), cuya madre esta atormentada por su obsesión con la “elegancia”, lo cual le provoca tan intenso aborrecimiento y pesadumbre que se convierte en un “infierno ardiendo”, abandonándose a sí misma y descargando histéricamente su caprichosa ira. Del mismo modo, los personajes de Kwon se sienten atormentados por su tendencia autodestructiva, como la de ese hombre enfurecido por el regreso de la mujer que no deseaba nunca más volver a ver, pero en cuya “trampa fatal” desea caer irremediablemente, o esa mujer, que tienen un apego narcisista “al perverso fluido del cuerpo que expulsa un veneno espumoso” en el ocaso de su vida, algo que se queda sólo en las formas, sin contenido. En este sentido, las obras de Kwon pueden considerarse biografías de individuos patológicos de la sociedad actual en que vivimos. Kwon muestra la incoherente y destructiva naturaleza de sus personajes por medio de las grietas de sus mentes, ocultas en su existencia cotidiana y ordinaria. Describe escenas estrafalarias con una mezcla caótica de sadismo y masoquismo, depresión e histeria, impulso y obsesión, y culpa y decepción. De esa manera, la mirada de la novelista es increíblemente fría y despreocupada mientras vive en los márgenes de la vida diaria para destacar la obscenidad y la realidad despreciable de todos los seres vivientes que sufren de dicha patología, de forma leve o severa. “Los tiempos de la cinta rosada” (“Bunhong riboneui sijeol”) describe la decepción narcisista de la vida. En este relato, narrado en primera persona, la protagonista se encuentra con un amigo al que conoció en la universidad. Hace amistad también con su mujer debido al interés gastronómico de ambas. Incidente tras incidente va descubriéndose la hipocresía de todos ellos, como podemos ver en el hecho de que la pareja diga que no le gusta la carne pero devoran el plato de solomillo que les prepara la protagonista. En un momento dado, él le presenta a una mujer llamada Kim Surim, a quien ha dejado embarazada. Después de ayudarla económicamente para abortar, la protagonista reflexiona sobre lo que todo esto encubre y se cuestiona el mundo de los tres.
88 Koreana | Invierno 2010
“¿Has llorado alguna vez golpeándote el pecho? ¿Has maldecido alguna vez la vida hasta que los labios palidecen, no por un hombre o por desilusión, sino por lo insignificante que eres, por tu estupidez, por tu irremediable perversidad? ¿Has descendido hasta el fondo y sentido, desesperada, que lo único que te espera es la muerte, el terrible vacío? ¿Has llevado alguna vez la vida de un cadáver y has notado que es un infierno despertarse por la mañana? ¿Has experimentado la noción de una pena tal que no puedes vivir ni morir? Seguro que no”. La narrativa de Kwon es cruel y despiadada en su esfuerzo por mostrar el punto en el que el “yo” se cruza con el sinsentido del mundo, con el mundo de la muerte. En este proceso se muestra como el “yo” (protagonista) y el “ellos” (antagonistas) son, en efecto, entes similares. Este tipo de revelación es también evidente en este cuento cuando la protagonista confiesa sinceramente que no se diferencia de la pareja, que sólo desea conseguir sus ocultos intereses burgueses. “Supe que lo que yo esperaba no era al novio de Mongolia sino una especie de dramática conclusión. Había engañado a su mujer tratándola afectuosamente como “hermana mayor”. Incontables veces había entregado a Ju mi entrepierna. Había despreciado a más no poder, con toda el alma, a Surim, ninfómana, pero también la había envidiado. Había revelado todos los secretos sin percibirlo. Bajo el pretexto del aislamiento, siempre había soñado con una sucia complicidad”. La protagonista confiesa que odia y desprecia a la mujer de su amigo y a su querida, aunque a ambas por razones totalmente diferentes. Afirma además que “a lo mejor no serían más que un par de lenguas que se habían marchitado hacía mucho y que sólo habían dejado un pequeño rastro en la raíz de la mía”. Al final, esta confesión representa la subsecuente declaración de que las dos mujeres son diferentes reflejos de la misma protagonista. Las novelas de Kwon analizan así a los protagonistas y las razones de sus aborrecimientos, como una especie de placer masoquista. Desde este punto de vista, las narraciones de esta autora, sin importar el argumento, son un intenso autoanálisis. A pesar de que los monstruos que atormentan a los personajes asumen diversas identidades y características, sus relatos recalcan a los lectores que el “yo” no sólo forma parte de su mundo sino que también es un participante activo de su desviado comportamiento. No es posible, además, distinguir entre el “yo” y el “ellos”. Esta es su forma de expresar la determinación de revelar los disfraces de la realidad cotidiana, que encubre los demonios que llevamos todos dentro y nos llevan a la decepción y al trastorno. Sus novelas intentan desmantelar el velo que oculta la objetividad del monstruoso mundo en el que el “yo” es uno de los constituyentes. Al enfrentarse a la realidad, la autora saborea fríamente la cruda existencia, sin evitar ningún desagrado u obscenidad. La esencia de las obras de Kwon Yeo-sun es lo que Nietzsche describiría como amor fati (amor al destino).
Invierno 2010 | Koreana 89
Publicaciones de la Fundación Corea
The Korea Foundation Seocho, apartado de correos 227, Center Building, 2558, Nambusunhwanno, Seocho-gu, Seúl 137-863, República de Corea www.kf.or.kr
Suscripciones / Información de compra
Koreana
Koreana, revista trimestral a todo color publicada desde 1987, está dedicada a divulgar el patrimonio cultural de Corea y a ofrecer información sobre las últimas tendencias artísticas y culturales. Cada ejemplar de Koreana ofrece análisis en profundidad de varios aspectos de un tema cultural específico y también presenta a los artesanos tradicionales, los estilos de vida y las atracciones naturales, aparte de otros temas relacionados. Suscripción (incluyendo envío aéreo) Corea Japón, Hong Kong, Taiwán y China Resto del mundo
1 año 18.000 wones 33 $ EE.UU. 37 $
2 años 36.000 wones 60 $ 68 $
3 años 54.000 wones 81 $ 93 $
(Se pueden comprar los ejemplares atrasados a 7 dólares cada uno más los gastos de envío aéreo).
Korea Focus
Korea Focus es una revista en internet (www.koreafocus.or.kr) y una publicación trimestral que presenta comentarios y ensayos sobre política, economía, sociedad y cultura coreana, aparte de temas de relevancia internacional. Desde 1993, esta revista ha sido una fuente fundamental de información sobre Corea, al mismo tiempo que ha contribuido a un mejor entendimiento sobre la sociedad coreana en la comunidad internacional y ha fomentado los estudios coreanos en instituciones extranjeras. Los artículos se slelccionan de los principales periódicos, revistas y revistas especializadas de Corea. Suscripción (incluyendo envío aéreo) Corea Japón, Hong Kong, Taiwán y China Resto del mundo
1 año 18.000 wones 28 $ EE.UU. 32 $
2 años 36.000 wones 52 $ 60 $
3 años 54.000 wones 71 $ 81 $
(Se pueden comprar los ejemplares atrasados a 5 dólares cada uno más los gastos de envío aéreo).
Korean Cultural Heritage
Korean Cultural Heritage, una singular serie de cuatro volúmenes, es una compilación de artículos y fotos de ediciones anteriores de Koreana . Esta obra ofrece una introducción general y sistemática a la cultura coreana con artículos específicos y una gran cantidad de fotos en cuatro volúmenes de lujo (Vol. I Bellas artes. Vol. II Pensamiento y religión. Vol. III Artes escénicas. Vol. IV Estilos de vida tradicionales).
Fragrance of Korea
Fragance of Korea: The Ancient Gilt-Bronze Incense Burner of Baekje (Fragancia de Corea: el antiguo Quemador Dorado de Incienso de Baekje) es un catálogo muy ilustrado en inglés de dicho Quemador. Este antiguo objeto, Tesoro Nacional de Corea número 287, es una consumada obra de arte de Asia del Este por su exquisito detalle y su elegante belleza. Las 110 páginas de este catálogo incluyen fotografías e ilustraciones y tres ensayos: “Historical Significance of the Gilt-Bronze Incense Burner of Baekje”; “Cultural Dynamics and Diversity: From the Taoist Boshanlu to the Buddhist Incense Burner of Baekje”; y “The Site of the Buddhist Temple at Neungsan-ri, Buyeo”.
Precio por volumen: 40 dólares más gastos de envío.
Precio por ejemplar: 25 dólares más gastos de envío.