Más que Vender Postres Capítulo 1 Introducción
¿Por qué molestarse en leer este libro? En este libro, defendemos el argumento de que las asociaciones entre las escuelas, las familias y los grupos de la comunidad no son un lujo, son una necesidad. Con la aprobación del decreto Que Ningún Niño se Quede Rezagado, tanto el Congreso como el presidente prometieron a nuestros niños que todos tendrían la misma oportunidad de obtener una formación de calidad elevada y que se desempeñarían competentemente en un alto nivel académico. Esto significa que todos nuestros niños, sin importar el idioma que hablan, cuánto ganen sus familias, las discapacidades que tengan, al Dios que adoren (si es que adoran a alguno) o los festivos que celebren. Pueda que la educación de alta calidad sea la política nacional o estatal, pero sigue sin ser un derecho civil. Continúan existiendo tremendas diferencias en la provisión de fondos, las instalaciones, y los recursos pedagógicos en nuestros dieciséis mil distritos escolares, y esta desigualdad está tras los pobres resultados que este decreto intenta resolver. En consecuencia, nuestras escuelas públicas necesitan de toda la ayuda que puedan obtener por parte de los padres, los parientes, los vecinos, y de todo aquel que se involucre en el aprendizaje del niño. La demanda de una reforma continúa aumentando. La acción federal y estatal ha creado un movimiento sólido hacia el alcance de normas académicas más elevadas, mayor cantidad de pruebas académicas y sistemas de responsabilidad para que las escuelas den cuentas por los resultados que obtienen sus estudiantes. No obstante, existe mucha oposición al uso de pruebas estandarizadas a las que se les otorga mucho valor para hacer que las escuelas sean responsables por el bajo desempeño y para no permitir que los estudiantes con bajas calificaciones se gradúen. Aunque algunos ven progreso, muchos líderes de corporaciones y corporaciones están impacientes con la velocidad del cambio. Docentes y creadores de políticas discuten sobre si la cantidad de fondos que se otorgan alcanzan para cumplir con todas los nuevos requisitos federales y estatales. Parece estar aumentando el apoyo del público a las exenciones y a la competencia entre el sector privado como herramientas principales de preforma. Pensamos que los padres y los miembros de la comunidad, trabajando en sociedad con los educadores, pueden lograr cambios en el sector público, pero esto requeriría de un nuevo modelo de trabajo en cooperación, uno que haga algo más que vender pasteles. Hay cinco razones por las cuales usted debería leer este libro. 1. Las asociaciones y el rendimiento académico van juntos. Muchos años de investigación demuestran que el involucrar a las familias y los miembros de la comunidad contribuye al éxito académico y social de los niños. La evidencia es consistente, positiva y convincente: Las familias influyen muchísimo en el rendimiento académico de los estudiantes. Cuando las familias, los grupos de la comunidad y las escuelas trabajan en conjunto para respaldar el rendimiento estudiantil,
es más seguro que a los niños les va a ir bien en los estudios, permanecen en la escuela por más tiempo, y disfrutan más de su escolaridad. Esta declaración resume la conclusión del estudio Una Nueva Ola de Evidencias: El Impacto de las Conexiones Entre la Escuela, la Familia, y la Comunidad en el Rendimiento Académico, la revisión más reciente y completa de las investigaciones hechas. A continuación se presentan algunas de las conclusiones principales:
Los estudiantes cuyas familias se involucran en su aprendizaje sacan mejores calificaciones, se matriculan en programas de más alto nivel, cuentan con índices de graduación más elevados, y tienen mayores posibilidades de matricularse en programas de educación superior.
Cuando las familias se interesan activamente en lo que sus hijos están aprendiendo, éstos tienen una mejor actitud sobre la escuela y se portan mejor tanto dentro como fuera de la escuela.
A los niños les va mejor si sus padres desempeñan ciertas funciones en su aprendizaje: ayudándoles en casa, ofreciéndose como voluntarios en la escuela, planeando el futuro de sus hijos, y siendo claves en las decisiones sobre el programa escolar.
Los alumnos de preparatoria e intermedia cuyas familias se mantienen involucradas de esa manera pasan más fácilmente a los siguientes niveles escolares, mantienen la buena calidad de su trabajo escolar, desarrollan planes realistas para el futuro, y muy seguramente no abandonarán la escuela.
A los niños de diversos antecedentes culturales les va mejor cuando las familias y el personal de la escuela unen sus esfuerzos para eliminar la brecha entre el hogar y las culturas en la escuela.
Desde edad temprana y hasta la preparatoria, las familias contribuyen de manera clave al aprendizaje del estudiante. Los programas de mejoría escolar resultan mucho más efectivos cuando las escuelas incluyen a las familias en el proceso. Sin importar su nivel de ingresos o educación formal, todas las familias pueden y de hecho lo hacen respaldar el éxito de sus hijos.
Cuando los padres se involucran en la escuela, tienden a su vez a ser más activos dentro de su comunidad. El aprendizaje familiar bien planeado y las actividades de apoyo a la escuela tienden a aumentar la confianza de los padres en sí mismos, de manera que ellos y otros parientes prosiguen su educación hasta alcanzar el diploma de preparatoria, más capacitación laboral, y una educación superior. El conocimiento es poder. Los padres que están bien informados son socios más efectivos y productivos.
Entre más genuina es la sociedad entre las familias y la escuela, más incrementa el rendimiento académico. Cuando las escuelas involucran a la comunidad de modos enlazados con mejorar el rendimiento académico, más ganancias se ven en los alumnos. Cuando las familias se incluyen de maneras positivas, en lugar de ser etiquetadas como problemáticas, se pueden transformar las escuelas de lugares en los que solo ciertos estudiantes prosperan a lugares en los que a todos los estudiantes les va bien académicamente.
Los grupos comunitarios también hacen aportes importantes. Una diferencia clave entre los estudiantes de alto y bajo rendimiento es la manera en que pasan su tiempo fuera de la escuela, y con quien lo pasan. Las entidades de la zona ofrecen recursos importantes para los niños y las familias, y las escuelas pueden ser un enlace fundamental a dichos recursos.
Sin embargo, tenga en cuenta lo siguiente: los resultados positivos no surgen automáticamente. Es más fácil alcanzarlos cuando la escuela, la familia y los programas en sociedad con la comunidad se planean bien y se llevan a cabo cuidadosamente. Este libro se trata de cómo hacer precisamente eso.
2. Las asociaciones ayudan a edificar y sostener el apoyo del público a las escuelas. En esta era de reformas educativas guiadas por el mercado, incluyendo vales educativos y escuelas autónomas, las instituciones educativas públicas están en busca de mayor sostén. Tradicionalmente la manera de lograrlo ha sido a través de relaciones públicas. Pensamos que hay tres otras estrategias de asociación que ofrecen más beneficios directos tanto a las escuelas como a la comunidad: 1. Llevar a cabo programas activos para incluir al público, con la participación de los padres y las familias. 2. Trabajar con las entidades comunitarias para ayudar a los estudiantes y sus familias a mejorar la calidad de la educación. 3. Fomentar mayor participación cívica en nuestro sistema democrático.
Las escuelas que acogen la idea de la asociación y la lleva a la práctica disfrutan de mayo respeto y confianza de la comunidad, de su personal, y de las familias. Las escuelas en sociedad tienden a contar con docentes más entusiastas, y a que las familias den mayor puntaje a los maestros. Además, reciben más apoyo de las familias, gozan de mejor reputación dentro de la comunidad, e implementan las iniciativas de reforma escolar más exitosamente.
Idea La inclusión del público es una manera de conseguir apoyo a las escuelas públicas y va más allá de relaciones públicas. Agenda Pública, una entidad encuestadora e investigativa sin ánimo de lucro, recalca que:
Extensa información a la comunidad para garantizar que en las actividades se incluye a personas del común, aquellos que no tienen cargos de liderazgo y cuyas voces no se escuchan frecuentemente.
Los debates deben estar dirigidos los ciudadanos promedio, no solos a los expertos.
Un intercambio civilizado de ideas entre los participantes, evitando la actitud ostenciosa y las polémicas.
Tolerancia de aquellos con puntos de vista diferentes.
Los enfoques cooperativos pueden contribuir a fortalecer el fundamento humano, social y económico de los vecindarios. Una de las metas de las iniciativas de colaboración entre la escuela y la comunidad es la de desarrollar la capacidad del vecindario para identificar sus propios problemas y reunir recursos suficientes para resolverlos. Esta clase de capacidad dentro de la comunidad puede contribuir a no solamente mejorar la seguridad y vitalidad económica del sector, sino también, a medida que avanza, aumentar la calidad de la pedagogía y el aprendizaje en las escuelas. 3
También las entidades comunitarias e instituciones de beneficio. Cuando cooperan con las escuelas, pueden llegar más fácilmente a las personas a quienes quieren prestar sus servicios y acceder a los servicios escolares y sus especialidades. En este proceso, pueden aumentar el apoyo del público a su labor, e incluso ahorrarse dinero al eliminar servicios repetitivos. Están en mejor capacidad de hacer uso de otras oportunidades, tales como servicios de consejería, formación complementaria, y capacitación laboral. En muchos estudios se han documentado los beneficios resultantes para las familias y los niños, entre los que se incluyen los siguientes:
Mayor conocimiento de desarrollo infantil
Más confianza en su función como el primer maestro del niño
Asistencia más frecuente a reuniones escolares y un sentido más profundo de responsabilidad por la escolaridad del niño
Mejores destrezas, entre ellas en lectoescritura
Mejor comunicación con las escuelas y los maestros
3. Las familias y la comunidad pueden contribuir a que las escuelas se enfrenten exitosamente a los
desafíos ante sí. Los retos que encaran las escuelas públicas de los Estados Unidos son inmensos y crecientes; y muchas escuelas hacen esfuerzos heroicos para superarlos. Persiste una grave brecha en el rendimiento académico de niños provenientes de familias más acomodadas y aquellos que vienen de familias de bajos ingresos. Además, nuevas olas de inmigrantes de Centroamérica, Asia, África y el Oriente Medio traen a las escuelas más alumnos y familias cuyo dominio del inglés es limitado y que no están familiarizados con nuestro sistema escolar ni nuestra sociedad. En la década de 1.990, entre 14 y 16 millones de personas ingresaron al país, muchas más que en cualquier década en la historia de esta nación. Este ritmo se sostuvo entre 2.000 y 2.004, con una población extranjera que aumentó en más de 1 millón de personas al año. Para el año 2.000 la cantidad de inmigrantes correspondía a 1 de cada 9 residentes de los Estados
Unidos, y sus hijos, constituían 1 de cada 5 jóvenes y niños menores de 18 años. Aunque inicialmente esta población infantil estaba concentrada en las ciudades de ingreso al país, se están dispersando aceleradamente por todo el país.4
A medida que aumenta el índice de pobreza y desaparecen los empleos de fabricación, las familias y las comunidades se enfrentan a muchos problemas sociales y económicos, que afectan directamente a las escuelas. Por ejemplo, la cantidad de familias que se mudan constantemente ha aumentado. De las más de 290 millones de personas en los Estados Unidos, 43 millones se mudan de hogar cada año. En muchas zonas, la falta de vivienda económica ha puesto en la calle a muchas familias. La indigencia afecta la salud de los niños, su equilibrio mental y su desempeño escolar.
Vistazo a la Investigación: Niños en la Pobreza De acuerdo con el Centro Nacional para los Niños en la Pobreza en la Universidad de Columbia, en los Estados Unidos viven más 73 millones de jóvenes y niños (desde recién nacidos a la edad de dieciocho), de los cuales, más del 40 por ciento viven en hogares de bajos ingresos.
El ser catalogado como de bajos ingresos implica no poder suplir las necesidades básicas. La mayoría de las familias de cuatro personas tienen que duplicar el nivel de pobreza dictado por el gobierno federal (US$40.000) antes de poder proveer adecuadamente a sus hijos vivienda, alimento y cuidado de la salud.
Veintinueve millones de niños de este país están creciendo en hogares de bajos ingresos.
Más del 81 por ciento de ellos tienen por lo menos a un padre de familia cuyo ingreso no es el suficiente como para poder suplir las necesidades básicas.
El dieciocho por ciento de los niños 13.5 millones viven en familias que están al nivel de pobreza federal o por debajo de este.
La cantidad de niños que viven en la pobreza ha continuado aumentando desde el año 2.000. 5
Los resultados de un nuevo y riguroso estudio sobre el índice real de deserción escolar entre los grados nuevo y doce se acuñan bajo este título: Perdiendo Nuestro Futuro: Cómo la Minoría de la Juventud se Está Quedando Rezagada por el Índice de Graduación. En distritos urbanos predominantemente compuestos por jóvenes Latinos y AfroNorteamericanos, los índices de graduación están muy por debajo del 50 por ciento.6 ¿A dónde se van los estudiantes que abandonan la escuela? De acuerdo con el Centro Nacional de Estadísticas Educativas, más o menos la mitad de los prisioneros abandonaron la escuela, y de estos una alta proporción han estado matriculados en programas de educación especial.7 Resumen de la Investigación: Los Centros de Padres de Chicago reducen dramáticamente el índice de deserción escolar
Un estudio a largo plazo de los Centros de Padres de Chicago (en los que se dan servicios a las familias con niños entre los tres y nueve años de edad) encontró que la participación de los padres en el programa tuvo un mayor efecto en los resultados sociales y académicos de los estudiantes. Entre más tiempo participaron los padres en el programa, y entre más se involucraban en la escuela, había menos posibilidades de que sus hijos repitieran un año de clases, de que fueran abusados, de que fueran arrestados o de que necesitaran de servicios de educación especial. Por cada año que los padres participaban en el programa, las posibilidades de que sus hijos culminaran la preparatoria aumentaba en un 16 por ciento. Más del 80 por ciento de los estudiantes cuyos padres estaban involucrados durante todos los seis años se graduaron de la por jóvenes Latinos y AfroNorteamericanos, los índices de graduación están muy por debajo del 50 por ciento.6 ¿A dónde se van los estudiantes que abandonan la escuela? De acuerdo con el Centro Nacional de Estadísticas Educativas, más o menos la mitad de los prisioneros abandonaron la escuela, y de estos una alta proporción han estado matriculados en programas de educación especial.7reparatoria, comparado al 38 por ciento de los estudiantes no estaban del todo involucrados.8 Los cambios en los modelos familiares también representan retos a las escuelas. Por ejemplo, el Censo del 2.000 demostró que más de 4 millones de niños viven con sus abuelos, y que un cuarto de esos abuelos llevan toda la responsabilidad de los niños. Casi la mitad de los niños en hogares de bajos ingresos, los que están en el 20 por ciento más bajo, viven solamente con un padre de familia, y casi la mitad de ellos se mudan de hogar cada año.9 Estos cambios en la sociedad y la economía han generado lo que los medios de comunicación llaman las “guerras de culturas”. En muchas comunidades han surgido agudos debates sobre expresión religiosa en las escuelas (incluyendo la oración, clubes religiosos, y la enseñanza de la religión); el trato correspondiente de estudiantes lesbianas, homosexuales, y transexuales, y cómo evitar abusos y acoso sexual. El personal de la escuela está lidiando con los cambios en los papeles sexuales y os valores tradicionales, y con las diferencias culturales que se ven reflejadas en los alimentos, el atuendo, y la música. Las diferencias de idiomas inician debates en cuanto a si la enseñanza para los estudiantes aprendices de Inglés se debe impartir en el idioma que el alumno habla en casa o se debe enfocar estrictamente en inglés. La seguridad dentro y fuera de las escuelas es otro desafío perverso que se intensifica con incidentes violentos reportados bajo titulares amarillistas. Existe gran desacuerdo en cuanto a las soluciones para tales controversias. Los líderes escolares están en la incómoda posición de tener que mediar las disputas y buscar consenso en lo que hacen. Saben que las escuelas por sí mismas pueden abordar efectivamente solo algunos de estos asuntos, o quizá ninguno. Los directores escolares, los maestros y demás personal ya de por sí trabajan durante largas jornadas y ofrecen su tiempo de manera voluntaria durante las vacaciones para trabajar con las familias y coordinar programas. El sentido común sumado a años de experiencia indica que se necesita de un enfoque cooperativo para definir los problemas, debatir productivamente la manera de tratarlos, y diseñar e implementar las posibles soluciones. A través de todo este libro se presentan ideas y ejemplos de cómo lograr precisamente esto.
4. Los maestros pueden sacar provecho de las asociaciones entre los padres y la comunidad. Los maestros expresan que desean más apoyo de los padres y se sienten atribulados por lo que ellos ven como poca participación de los padres y mal comportamiento de los estudiantes. No obstante, no saben
cómo cooperar de manera productiva con las familias. Muchos tienden a sentirse mejor ayudando a las familias a involucrarse más con sus hijos en el hogar que incluyendo a las familias en sus salones de clase e instalaciones escolares. Los líderes escolares pueden ayudar a los docentes y los sindicatos que los representan a entender cómo es que las asociaciones pueden beneficiarles directamente. A menudo, los planes de asociación se desarrollan con poca o ninguna participación de los maestros y a los maestros se les dice simplemente que “lo hagan.” Un estilo gerencial en pirámide en el que las decisiones se toman en la cúspide y se implementan poco a poco en los niveles inferiores de la organización confirma la percepción de los maestros de que a menudo se ignoran sus puntos de vista. Esto puede ensombrecer los esfuerzos del personal desde el mismo inicio. Si más bien, se involucran a los maestros en la planeación desde el principio, pueden sentirse aliados poderosos en la ampliación de las conexiones entre las escuelas, los padres de familia y los miembros de la comunidad. Adicionalmente, los educadores pueden aprender muchísimos de los padres; quienes, juntos con el resto de los miembros de la familia aportan conocimientos y perspectivas de sus hijos, su cultura, sus valores y fortalezas, y la problemática de su comunidad. Resumen de la Investigación: Los programas de asociaciones benefician a los maestros Las familias que se involucran en la educación tienen mayores posibilidades de entender las metas del docente y de la escuela y respaldar más los cambios propuestos. Además tienen a los maestros en más alto concepto. Los maestros que involucran a los padres constantemente de manera positiva a su vez tienden a calificar más positivamente a las familias. También tienen menos estereotipos raciales y de clases sociales que aquellos que no lo hacen. Adicionalmente, los docentes que involucran a los padres y a otros voluntarios informan que les queda más tiempo para dedicarlo a la enseñanza y a dar atención personal a los niños. 5. El decreto Que Ningún Niño Quede Rezagado ofrece oportunidades de asociación que pueden contribuir a que las escuelas cumplan con los requisitos legales. El decreto Que Ningún Niño Quede Rezagado (NCLB, por sus siglas en inglés) hace responsables a las escuelas de impartir a todos los estudiantes una educación de calidad elevada, poniendo a los educadores bajo presión intensa. Los oficiales escolares que ignoran los requisitos de este programa federal se exponen a considerables riesgos fiscales.
Por ejemplo, las familias en las escuelas de Título I (el Título I de NCLB provee fondos a las escuelas que prestan servicios a concentraciones de alumnos de bajos ingresos) pueden transferir a sus hijos a una escuela de mejor desempeño si es que la escuela a la que asisten sus hijos no alcanza un “progreso anual adecuado” durante dos años consecutivos. A los estudiantes que no se transfieren se les tienen que ofrecer servicios complementarios, tales como tutoría fuera del horario escolar o clases de lectura y matemáticas, cuyo costo cubre el distrito escolar. Es sabio dar cuidadosa atención a las obligaciones legales y las oportunidades de participación de los padres, puesto que ofrecen los recursos para progresar cada año adecuadamente. De
acuerdo al informe NCLB y lo que implica para los padres, los padres tienen que estar involucrados en varios aspectos:
1. El contrato entre la escuela y los padres de familia. Toda escuela de Título I tiene que contar con un contrato entre la escuela y los padres, desarrollado con los padres y aprobado por ellos. En el contrato se tiene que describir la manera en que la escuela y los padres se asociarán para aumentar el rendimiento académico.
Ejemplo: Progreso en la cooperación entre el sindicato de maestros y la escuela en California
Los padres y los maestros de la Escuela Primaria Calle 28 en Los Ángeles decidieron en contra de una fábrica de placas de cromo al frente de la escuela. Los gases emitidos por la fábrica estaban contaminando la atmósfera y el terreno de la escuela, haciendo que alumnos y maestros temieran por su salud. La federación de educadores, el Sindicato de Maestros de Los Ángeles, inició el trabajo con la oficina de la localidad de ACORN, un grupo comunitario que había estado organizando a los padres de familia. El trabajo conjunto en esta escuela los a llevado a dar el siguiente paso la planeación de un esfuerzo cooperativo para abordar el desempeño académico en la agrupación de escuelas del sur de Los Ángeles. 11 2. Políticas de la escuela y el distrito. Toda escuela y distrito Título I tienen que poner por escrito una norma de participación de los padres que haya sido en conjunto y acuerdo con los padres de familia. La política del distrito tiene que describir la manera en que participarán los padres en el desarrollo de planes para mejorar las escuelas e incluir a las familias. 3. Boletas de Calificaciones. Cada año, el distrito escolar tiene que distribuir una boleta de calificaciones especificando cómo se está desempeñando cada escuela y el distrito en general. La boleta de calificaciones tanto de la escuela como del distrito tienen que estar escritas en un idioma y formato que los padres puedan entender. 4. La opción de los padres de familia. Si una escuela Título I no ha progresado adecuadamente cada año en la mejoría del desempeño académico de sus estudiantes, se ofrecen dos opciones a los padres. Pueden solicitar una transferencia, o requerir servicios educativos complementarios e involucrarse en el desarrollo de un plan de mejoría 5. Revisión estatal. La entidad estatal encargada de la educación tiene que monitorear los programas de Título I de los distrito para garantizar que pueden cumplir con la
ley. Si el distrito no está involucrando a los padres, tal como la ley lo requiere los padres pueden apelar al estado. 6. Comunicación. Por primera vez, la ley federal define la participación de los padres de
manera constante, de dos vías y significativa en cuanto al aprendizaje de los estudiantes y otras actividades escolares.12 Algunas de las provisiones de NCLB aplican a todas las escuelas públicas, no solo a las escuelas Título I. Cada distrito local o escuela puede optar por desarrollar un programa de asociación, aún si no se requiere de tal acción. Casi todos los capítulos del libro tienen claves, ejemplos, o asesoría en cuanto a cómo usar tales provisiones para su ventaja.
Para seguir leyendo… Los beneficios que hemos expresado anteriormente son reales. Sentimos que se pueden lograr mediante programas efectivos de asociación en cualquier escuela pública, desde preescolar hasta la preparatoria y en toda clase de comunidades. Esperamos que quiera continuar leyendo y descubriendo cómo nuestro libro puede ser de ayuda práctica para usted, su escuela y su comunidad.
Nuestra meta ha sido la de hacer que este libro sea sencillo de leer y fácil de usar. Los capítulos son breves, y están llenos de herramientas, ideas, relatos, resúmenes de la investigación y consejos de colegas. Cada uno termina con una lista sucinta de diseñada para ayudarle a evaluar el estado actual de su escuela, su familia y las asociaciones con la comunidad; identificar las áreas en las que se necesita mejorar, y desarrollar estrategias para fortalecer y mejorar los programas de asociación. Le animamos a que utilice estas listas como temas de conversación en las reuniones de personal, actividades de educación profesional, y en reuniones con miembros de la familia y la comunidad. La mayoría de las ideas de este libro las sacamos de nuestros años de trabajo con las escuelas, maestros y grupos de padres y miembros de la comunidad, organizadores y defensores de la educación pública. Este libro es de veras nuestro libro. Se lo dedicamos a ustedes.
Capítulo 2
¿Cómo Deberían Verse las Asociaciones Entre las Familias y las Escuelas? Tras este libro hay una visión, una idea de lo que queremos transmitir acerca de nuestras escuelas Nuestra visión no es de ninguna manera utópica. De hecho, sabemos que es práctica y alcanzable en todo tipo de comunidades, tanto en las ciudades, como en los campos y en sectores acomodados, de ricas a pobres, y todas las que están en el medio. Lo sabemos porque lo hemos visto. Las ideas expuestas en este libro se arraigan en dos clases de experiencias. La primera es lo que aprendemos de la lectura de cientos de investigaciones. La segunda es lo que hemos visto por muchos años en escuelas reales. El sólido liderazgo de los directores escolares, los docentes y los líderes de los padres y miembros de la comunidad pueden hacer que estas ideas se conviertan en realidades. Han aprendido que las asociaciones bien ejecutadas van mano a mano de la mejoría escapar, sea que sean causadas por su propio deseo de crear una mejor escuela o en el proceso de implementar efectivamente los esfuerzos estatales de mejora escolar y los programas federales, incluyendo en decreto Que Ningún Niño SE Quede Rezagado. Sugerimos que junto con sus colegas, y acompañados de las familias de su escuela reflexionen profundamente en su visión. Al utilizar este libro, tendrán la oportunidad de decidir cómo desean que sea su escuela y cómo usar las estrategias de asociación como herramientas importantes del cambio escolar. Cuatro Versiones de la Asociación ¿En qué está su escuela en términos de asociación con las familias? ¿Se arraiga a actitudes y prácticas que confinan a los padres a funciones limitantes y tradicionalistas? ¿Ya ha definido su escuela el significado de la participación de los padres y la asociación con las familias? ¿Cómo se está conectando la escuela con los recursos de la comunidad? Hágase la siguiente pregunta: ¿Cómo pudiera verse una escuela que ha creado una cultura genuina de asociación entre la escuela, la familia y la comunidad, y que verdaderamente ha progresado hacia el rendimiento social y académico elevado para todos los estudiantes? Quisiéramos ofrecer una planilla o descripción que pone estándares elevados pero realistas de asociación.1 Los cuatro niveles de rendimiento académico son los siguientes:
Escuela de Asociación
Escuela de Puertas Abiertas
Escuela Venga si lo Llamamos
Escuela Fortaleza
Usando esta escala, puede darse una idea general de en que categoría cabe su escuela. Los subtítulos le dirigen a los capítulos siguientes, y las declaraciones descriptivas abajo son indicadores de guía, no criterios definitivos. Al final de cada capítulo aparece una lista detallada que examina más cercanamente las prácticas de su escuela. Lea las descripciones en cada uno de los puntos que siguen a los subtítulos y marque aquellas que mejor representen a su escuela.
ESCUELA DE ASOCIACIÓN Todas las familias y comunidades tienen algo magnífico por aportar hacemos lo que sea con tal de trabajar muy cercanamente para asegurarnos de que cada estudiante es exitoso.
EDIFICACIÓN DE LAS RELACIONES
El Centro de Familias siempre está abierto, está lleno de materiales pedagógicos interesantes que uno puede pedir prestados
Se visita a cada familia en su hogar
Las actividades dan honra a las aportaciones de las familias
La comunidad puede usar las instalaciones escolares y se hacen disponibles servicios sociales a las familias
ENLACE AL APRENDIZAJE
Todas las actividades familiares se relacionan con lo que están aprendiendo los estudiantes
Los padres y maestros examinan juntos el trabajo de los estudiantes y sus puntajes
Los grupos de la comunidad ofrecen servicios de tutoría y programas para hacer las tareas en la escuela
En trabajo de los alumnos se envía a casa cada semana, junto con una guía para entender el puntaje
CÓMO SE ENFRENTAN A LAS DIFERENCIAS
Siempre hay traductores disponibles
Los maestros usan libros y materiales acerca de las culturas de las familias
La asociación de Padres y Maestros (PTA, por sus siglas en inglés) incluye a todas las familias
Los grupos de la localidad ayudan al personal a informar a los padres de familia
APOYO A LAS ACTIVIDADES DE ABOGACÍA
Existe un proceso claro y público para resolver los problemas
Los maestros se comunican con las familias cada mes para hablar acerca del progreso de los estudiantes
Se efectúan entrevistas en cuanto a los estudiantes entre maestros y padres de familia tres veces al año y duran treinta minutos.
CÓMO SE COMPARTE EL PODER
Los padres y los maestros investigan asuntos como encasillamiento y prejuicio
Los grupos de padres se enfocan en mejorar el rendimiento académico
Las familias se involucran en todas las decisiones principales
Los padres pueden utilizar el teléfono, la fotocopiadora y los computadores de la escuela
El personal trabaja en cooperación con las entidades locales para mejorar la escuela y el vecindario.
ESCUELA DE PUERTAS ABIERTAS Los padres se pueden involucrar en nuestra escuela de muchas maneras estamos trabajando arduamente para lograr incluso mayor asistencia a nuestras actividades. Cuando le pedimos a la comunidad que nos ayude, generalmente hay alguien que responde.
EDIFICACIÓN DE LAS RELACIONES
Los maestros se comunican con las familias una vez al año
El coordinador de padres está disponible si las familias tienen preguntas o necesitan ayuda
El personal de la oficina es amigable
El personal se comunica con entidades y organizaciones comunitarias cuando se requiere de asistencia
ENLACE AL APRENDIZAJE
Los maestros explican las calificaciones si alguien se lo pide
De vez en cuando se devuelven al hogar las carpetas con el trabajo de los niños
La escuela celebras noches de currículo tres o cuatro veces al año
El personal comunica a las familias saber de clases fuera del horario escolar en la comunidad
CÓMO SE ENFRENTAN A LAS DIFERENCIAS
El personal de la oficina consigue un traductor si los padres lo solicitan de antemano
Se celebran noches multiculturales una vez al año
Los padres de la “minoría” tienen su propio grupo
APOYO A LAS ACTIVIDADES DE ABOGACÍA
El director se reúne con los padres para hablar de los problemas
Se envía constantemente a los padres informes sobre el progreso de sus estudiantes, pero las estadísticas de las pruebas académicas es difícil de entender
Se efectúan entrevistas de maestros y padres de familia una vez al año
CÓMO SE COMPARTE EL PODER
Los padres pueden presentar inquietudes ante PTA o reunirse con el director
Los grupos de padres establecen su propia agenda y recaudan dinero para la escuela
El centro de recursos para las familias de bajos ingresos está ubicado en un salón portátil al lado de la escuela
Los funcionarios de PTA pueden utilizar la oficina de la escuela
Hay un representante de la comunidad en el consejo escolar del plantel
ESCUELA VENGA SI LE LLAMAMOS Se acoge a los padres cuando los invitamos, pero lo que ellos ofrecen es muy limitado. Lo más importante que pueden hacer es ayudar a sus hijos en el hogar. Sabemos dónde están los recursos de la comunidad si los necesitamos.
EDIFICACIÓN DE LAS RELACIONES
Los padres con más formación académica se involucran más
“Muchos de los padres inmigrantes no tienen el tiempo de venir ni de aportar nada”
El personal es muy selectivo en cuanto a quienes vienen a la escuela
ENLACE AL APRENDIZAJE
A los padres se les informa lo que los niños aprenderán en la noche de exposiciones del otoño
Los padres pueden llamar a la oficina para escuchar informes pregrabados de los maestros sobre las tareas
Se ofrecen talleres sobre la crianza de los hijos
CÓMO SE ENFRENTAN A LAS DIFERENCIAS
“No podemos lidiar con 20 idiomas diferentes”
Los padres pueden traer consigo un intérprete
“La escuela ya no es lo mismo que antes”
APOYO A LAS ACTIVIDADES DE ABOGACÍA
El personal de la escuela llama por teléfono a las familias cuando los estudiantes tienen problemas
Las familias visitan la escuela el día de recibir la boleta de calificaciones, y pueden hablar con el maestro si hacen cita previa
CÓMO SE COMPARTE EL PODER
El director crea la agenda de las reuniones de los padres de familia
PTA publica el mensaje de la escuela
“Los padres no son expertos en educación”
Los grupos de la comunidad pueden hablar con la Junta de Educación si tienen inquietudes
ESCUELA FORTALEZA Los padres deben estar en su casa, no en la escuela. Si a los estudiantes no les va bien, es porque sus familias no les dan suficiente apoyo. Ya estamos haciendo todo lo que podemos hacer. Nuestra escuela es un oasis en esta comunidad llena de problemas, y así la queremos mantener.
EDIFICACIÓN DE LAS RELACIONES
Los padres con más formación académica se involucran más
“Muchos de los padres inmigrantes no tienen el tiempo de venir ni de aportar nada”
El personal es muy selectivo en cuanto a quienes vienen a la escuela
ENLACE AL APRENDIZAJE
A los padres se les informa lo que los niños aprenderán en la noche de exposiciones del otoño
Los padres pueden llamar a la oficina para escuchar informes pregrabados de los maestros sobre las tareas
Se ofrecen talleres sobre la crianza de los hijos
CÓMO SE ENFRENTAN A LAS DIFERENCIAS
“No podemos lidiar con 20 idiomas diferentes”
Los padres pueden traer consigo un intérprete
“La escuela ya no es lo mismo que antes”
APOYO A LAS ACTIVIDADES DE ABOGACÍA
El personal de la escuela llama por teléfono a las familias cuando los estudiantes tienen problemas
Las familias visitan la escuela el día de recibir la boleta de calificaciones, y pueden hablar con el maestro si hacen cita previa
CÓMO SE COMPARTE EL PODER
El director crea la agenda de las reuniones de los padres de familia
PTA publica el mensaje de la escuela
“Los padres no son expertos en educación”
Los grupos de la comunidad pueden hablar con la Junta de Educación si tienen inquietudes
¿Bajo qué Categoría está su Escuela?
Marque los subtítulos en los que hay más declaraciones subrayadas. Solo marque un subtítulo en cada casillero.
•
Si tres o más de las declaraciones subrayadas están bajo las descripciones de Escuela Fortaleza y ninguna bajo Escuela de Puertas Abiertas o Escuela de Asociación es señal de que su escuela tratan de mantener lejos a los padres, en lugar de tratar de trabajar con ellos. Si le diéramos un puntaje sería de por de bajo del nivel básico.
•
Si usted subrayó tres o más declaraciones bajo las descripciones de la Escuela Venga si le Llamamos y ninguna bajo Escuela de Asociación, es posible que su escuela quiera involucrar a los padres solo hasta cierto punto. Si le diéramos un puntaje sería de nivel básico.
•
Si usted subrayó por lo menos cuatro de las descripciones bajo Escuela de Puertas Abiertas o Escuela de Asociación, y ninguna de las descripciones de Escuela Fortaleza, es evidencia de que su escuela acoge a las familias y los apoya para que se involucren de diferentes maneras. Si le diéramos un puntaje sería de competente.
•
Si por lo menos tres de las declaraciones que marcó están en las descripciones de Escuela de Asociación, y el resto en Escuela de Puertas Abiertas, es indicación de que su escuela está dispuesta y disponible para trabajar con todas las familias. Le apostamos a que el rendimiento académico incrementa cada año en su escuela. Si le diéramos un puntaje, seria de Avanzado.
Ahora, imagínese que ha puesto en marcha una asociación en su escuela usando este libro y sus propias ideas. Suponga que un grupo de observadores cuidadosos la vieran e informaran cuando de su escuela. Asumamos también que estas personas están en una Caminata de Bienvenida por la Escuela, un proceso que las escuelas y distritos escolares están adoptando para ayudar a las escuelas a verse a través de los ojos de los demás. (Si desea más información acerca de las Caminatas, diríjase al Capítulo 9, “Cómo Seguir Mejorando”) Cuatro integrantes del equipo visitante son personal de la escuela. Los otros ochos son padres de familia y miembros de la comunidad. Su equipo tal vez se componga de las
siguientes personas: un administrador, un maestro, un trabajador de la cafetería, un consejero, un conductor de autobús, un líder empresarial, un miembro de la Junta de PTA, dos padres de diferentes antecedentes, un estudiante de preparatoria, y un profesor de educación de una universidad de la localidad. Finalmente, hay dos miembros del personal del distrito facilitando la visita. Los integrantes se separan en cuatro grupos para observar diferentes aspectos de su escuela: 1. Enfoque en el rendimiento académico 2. El ambiente de la escuela 3. Comunicación e información 4. Prácticas en toda la escuela y las políticas para incluir a las familias ¿Qué verían los visitantes? ¿Qué les dirían los maestros, padres y alumnos de su escuela? ¿Dirían que usted tiene “lo que debe haber”? Veamos los comentarios que surgieron de una de tales caminatas.
¿Qué dirían sus invitados acerca del Enfoque en el Rendimiento Académico? “Los puntajes de las pruebas de los estudiantes de la escuela están publicados en el tablero de información y los portafolios de los estudiantes están expuestos en todo el edificio. Pudimos notar que la mayoría de los estudiantes se están desempeñando al nivel de competencia en lectoescritura, matemáticas y ciencias. Estos buenos resultados parecen sostenerse entre en todas las razas, etnias, género, e ingresos familiares. Muchos de los maestros acreditan por estos logros a la sólida participación de los padres” (Profesor universitario) “A los padres se les mantiene al día en cuanto a los que están haciendo los niños, o lo que no están haciendo. Los maestros mandan notas a los padres los viernes, y se aseguran de que los niños no simplemente las embutan en sus mochilas. Además veo los paquetes de materiales pedagógicos que los docentes envían a casa. A los padres les encantan los videojuegos, les ayudan a aprender a hablar en inglés” (Conductor de autobús) “La cooperación con la universidad de la localidad de veras me impresiona. Hay muchos pasantes de pedagogía y le ayudan al personal. A su vez, los maestros pueden tomar clases en la universidad a bajo costo. El cuerpo docente viene a ayudar al personal a planear programas nuevos. Los padres pueden tomar aquí cursos universitarios. El
consejo está trabajando en un programa de estudiantes al plantel de manera que puedan empezar a hacer planes para asistir a la universidad.” (Facilitador del distrito) “Me gusta que han hecho más pequeñas las cosas para los padres. Se siente más personalizado como que las exposiciones son de diferente nivel toda la noche. Siempre me he sentido perdido con las cosas grandes. Siempre incluyen algo para los padres, para que ayuden a sus hijos. ¡Ahora hasta servimos más alimentos en las noches de exposiciones!” (Trabajador de la cafetería) “El programa fuera del horario escolar del Club de Niños y Niñas ayuda a los niños con las tareas. Hay muchos niños asistiendo. Mi hijo dice que es hasta divertido.” (Padre de familia AfroNorteamericano) ¿Qué dicen los invitados sobre el ambiente de su escuela? “Yo caminé por todas partes de la escuela y todo estaba limpio y nítido. Había un mapa letreros y un mapa de la escuela en el vestíbulo del frente, y hay instrucciones claras para firma la hoja de visitantes en la oficina del frente. La secretaria y el guardia de seguridad nos saludaron de manera muy profesional. Aquí entienden de buena atención al cliente.” (Líder empresarial) “El director de veras practica lo que predica. Estaba al frente saludando a los padres cuando entramos y hace lo mismo a final del día. ¡Parece que se sabe los nombres de todos los estudiantes! Los maestros dicen que ella es muy clara en cuanto que espera que incluyan a los padres de familia, y también escucha sus ideas. En la escuela se hacen las cosas en asociación.” (Consejero) “A la oficina del frente entra alguien que no habla inglés y la secretaria consiguió un traductor inmediatamente. Contestan el teléfono amablemente; no dicen: “’estamos muy ocupados, llame más tarde’”. Tampoco hay un mostrador tras el cual se puedan esconder” (Facilitador del distrito) “La gente que trabaja en esta escuela es muy amable. Nos tratan como personas. Los volantes no dicen algo como ‘talleres para los padres inmigrantes’ ni ‘noches para las minorías de idiomas’. No nos vemos ni como inmigrantes no como minorías. Somos Latinos, y se toman el tiempo de aprender a pronunciar nuestro nombre.” (Padre bilingüe) “Cuando tengo que ir al baño le pregunto a un estudiante dónde están los baños para adultos, y me llevó sin ningún problema” (Anónimo)
¿Qué dicen los visitantes en cuanto a la Calidad de la Comunicación Escolar y la Información? “Los maestros de veras se interesan por los estudiantes. Vi una maqueta magnífica de una rueda rusa hecha por un estudiante. Incluyen a los estudiantes en las entrevistas, de manera que podemos hablar de cómo nos está yendo. ¡Esto es cheverísimo! (estudiante de preparatoria) “El Centro de Padres es un buen lugar al que ir. Me tomo una taza de café y a veces me veo con la maestra de mi niña. El coordinador de padres también tiene un niño con discapacidades, y reúne a los padres de los niños en educación especial mensualmente para conversar. A veces es difícil, pero ella hace lo que sea por nuestros niños.” (Padre de un estudiante en educación especial) “He visitado la escuela por las noches, se ve con mucha actividad. Es como un centro comunitario tanto adultos como jóvenes toman clases acá, juegan baloncesto, usan el laboratorio de computadores y se capacitan laboralmente. Además también hay grupo percusionista.” (Facilitador del distrito) “Como maestro, he notado que el informativo no está lleno vocabulario educativo solamente, sino que los términos y las siglas se explican claramente. En las fotos aparecen toda clase de estudiantes, no solo los que ganan premios. Los folletos para los padres en los que se explican los programas escolares y los servicios comunitarios est’an traducidos a los idiomas principales. Además, el portal de la escuela en la Internet es fácil de entender para las familias.” (Maestro de ESL) “La sociedad que tenemos con la clínica de la localidad es magnífica. Varios estudiantes han recibido sus lentes y ayudas auditivas.” (Trabajador social) ¿Qué Dicen sus Visitantes sobre las Prácticas y Políticas para Incluir a las Familias y los Miembros de la Comunidad? “Tuvimos algunos problemas de comportamiento con los estudiantes hace un tiempo. Los padres AfroNorteamericanos y latinos me dijeron que sentían que se estaba culpando a sus hijos. Querían que les ayudara a escribir normas claras que se aplicaran a todos los alumnos. Los estudiantes también participaron; querían que se escribieran normas para todos, no solo para ellos. El ser puntual y respetuoso les aplica a todos y eso me incluye a mí. Esto me ayudó a ponerle un tono positivo a la situación” (Director escolar) “La escuela trabaja con un grupo comunitario que se ha dado a la tarea de desarrollar económicamente este sector. Como es año electoral, están organizando un foro con los
candidatos para comprometerlos con un nuevo laboratorio de ciencias, pues esta es la única escuela del distrito que todavía no tiene uno.” (Miembro de la comunidad) “Cuando empezamos nuestro programa de asociación, los maestros estaban preocupados de que los padres se iban a tomar la escuela. PTA trabajó con los educadores para desarrollar directrices sobre los derechos y responsabilidades de los padres de familia, qué es la buena abogacía a favor de los niños y qué es pasarse de la raya. Queríamos salirnos de la mentalidad vender postres solamente” (Miembro de la Junta de PTA) “Entre los miembros de l consejo escolar se cuentan varios líderes comunitarios y empresariales, lo cual les da verdadera influencia política en la ciudad. Cuando se inició el consejo, se encuestó a las familias y demás residentes, y usaron los resultados para determinar las prioridades del consejo.” (Facilitador del Distrito) Un comentario de conclusión En este breve capítulo hemos presentado una visión de la asociación efectiva entre los padres de familia y la escuela a manera de resumen de las ideas y temas principales del libro. Le animamos a que desarrolle una visión de su propia escuela. Esperamos que la lectura de este libro lo estimule a reflexionar. Las ideas y ejemplos han sido tomadas de muchas escuelas que existen en realidad y que al parecer “tienen lo que deben tener.” Por supuesto, no hay una fórmula mágica de asociación que siempre dé buenos resultados. Existen muchas escuelas que tienen éxito cuando la norma es el trabajo en sociedad y vienen en una gran variedad de formas, tamaños y estructuras. Como verá, el libro tiene continuidad. En la primera sección, titulada “Porqué son Importantes las Asociaciones” se concluye con una visión. Explica la razón por la cual la cooperación entre las familias, la escuela y la comunidad valen la pena que usted invierta su tiempo y energías en ella. La segunda sección: “Cómo Empezar: Edifique la Relación” contiene dos capítulos. El Capítulo 3, “¡En sus Marcas, Listos, Fuera!” le ayudará a examinar sus actitudes y hábitos. En realidad, ¿qué tan listo está para seguir adelante? ¿Cómo puede crear un equipo que de veras se comprometa con la asociación? El Capítulo 4, titulado “El Desarrollo de las Relaciones” sienta las bases para el trabajo en unidad aumentando la confianza entre todos. El “proceso de enlace” que se describe puede ayudarle a transformar su escuela en una verdadera comunidad. En la tercera sección “Directrices para Tomar Acción de Acuerdo a los Resultados” tiene cinco capítulos. El Capítulo 5, “Enlace con el Aprendizaje” se trata de aumentar el rendimiento académico. Ofrece consejería práctica y clara en cuanto a cómo enfocarse en
actividades y programas para las familias en cuanto a lo que están haciendo y aprendiendo los estudiantes. En el Capítulo 6, “Cómo Tratar las Diferencias” se explora la manera en que las diferencias culturales, raciales y de clase pueden crear obstáculos muy sólidos a la inclusión de los padres y qué se puede hacer al respecto. El Capítulo 7 “Cómo Apoyar las Actividades de Abogacía” define este tema controversial y explica la manera en que las escuelas pueden trabajar con las familias en la planeación del futuro de sus hijos y guiarlos a través del complicado sistema educativo. En el Capítulo 8 “Cómo Compartir el Poder” se argumenta la aseveración de que las familias deben opinar en cuanto a la gerencia escolar y los asuntos comunitarios. El desarrollo del capital político no es la única manera de demostrar respeto a las familias de diferentes antecedentes, también se hace al hacerlas partes integrales de la comunidad. El Capítulo 9 lleva como título: “Siga Aumentando” se muestra una perspectiva externa del contexto en el que opera la escuela el distrito escolar. Cubre lo que el distrito puede hacer para desarrollar un sistema aplicable a toda la escuela de prácticas y políticas que respalden a las familias para mejoren la experiencia de su niño en la escuela. La cuarta sección, “Herramientas y Recursos” consta de dos capítulos. El décimo, “¡Auxilio!” incluye una lista selecta de materiales útiles, entidades, personas con quién comunicarse, portales en Internet, y lecturas sugeridas agrupados por temas. En el Capítulo 11, “Herramientas” aparece un conjunto de artículos ventajosos, por ejemplo una encuesta sobre el ambiente de la escuela, la descripción laboral del coordinador de participación familiar y una lista de conferencias. En la introducción se sugieren maneras en las que estas herramientas, así como las listas al final de cada capítulo, para evaluar su trabajo y evaluar si están marcando una diferencia. Esperamos que use este manual de diferentes maneras. Los líderes escolares, incluyendo a los miembros del consejo escolar, los grupos de padres, y el equipo de acción de la participación de los padres lo pueden utilizar para diseñar e implementar un programa integral de inclusión de los padres. Los directores escolares pueden encontrar ideas para incitar conversaciones en reuniones y retiros del personal, en reuniones con las familias y con la comunidad, y dentro del consejo del plantel escolar. Los equipos de investigación de padres y maestros pueden utilizar las listas para evaluar las prácticas de la escuela y hacer recomendaciones. Los líderes de las entidades comunitarias pueden reunirse con el director y los grupos de padres para hablar acerca de cómo aumentar los intercambios entre la escuela y la comunidad. Los líderes de los padres y organizaciones tales como PTA y PTO pueden dar ideas y listas para hacer que sus grupos sean más inclusivos y respondan a los padres que se han quedado al margen. Los maestros, consejeros y demás personal pueden obtener ideas de
prácticas específicas para aplicar sus propios intercambios con las familias. El personal de la oficina central las puede utilizar para desarrollar un código de atención al cliente. Al nivel del Distrito, quienes planean los programas pueden usarlas para diseñar un componente de participación de las familias en el programa de reforma escolar, un programa de lectoescritura o de matemáticas, o un programa fuera del horario escolar. El personal a cargo de su desarrollo puede utilizar los ejemplos y actividades sugeridas para planear los talleres y las sesiones de entrenamiento en los planteles escolares. Los evaluadores pueden transformar estas listas en encuestas y herramientas de evaluación para elevar el profesionalismo de las prácticas en todo el distrito. Igualmente, los líderes del distrito pueden derivar ideas para enlazar las estrategias de inclusión de padres y miembros de la comunidad a las iniciativas de mejoría escolar. Esperamos que use este libro en el espíritu en que se ofrece para edificar una comunidad vital, productiva, y digna de confianza compuesta de personas que disfrutan de aprender unos de otros y que pueden superara sus diferencias en el interés de sus niños. Una escuela es un sitio atesorado en la comunidad, al cual acuden en unidad personas de todo tipo de antecedentes y prosperan. Toda escuela puede ser esa clase de sitio, y este libro muestra cómo podemos lograrlo. Capítulo 3
¡En Sus Marcas, Listos, Fuera! ¿Cómo sabe que está listo para asociarse? En la mayoría de las esuelas y distritos del país, los educadores acordarían con que las familias tienen que estar involucradas en la educación de sus hijos y con que las asociaciones entre el hogar y las escuelas son de importancia vital. Con tal rebosante acuerdo, ¿porqué no podemos alcanzar la verdadera asociación en cada escuela? La realidad es que tanto educadores como padres de familia tienen muchas creencias, actitudes y temores los unos de los otros que obstaculizan el que se unan para fomentar la educación de los niños. De manera que la respuesta a ¿son importantes las asociaciones entre las familias y la escuela? tiende a ser… “sí, pero…” Antes de que creemos una asociación efectiva y sólida con las familias, tenemos que creer firmemente no solo en que son importantes, sino también en que se pueden alcanzar
– y que nosotros podemos crearlas. Esto implica que es necesario que el personal de las escuelas tenga ciertas creencias positivas acerca de la inclusión de las familias. A partir de nuestras conversaciones con líderes del distrito, directores, maestros y demás personal escolar, hemos identificado cuatro creencias básicas fundamentales para el trabajo de incluir a las familias. En las escuelas de asociación, estas creencias permean cada aspecto de la escuela. Ilene Carver, una maestra de la escuela Orchard Gardens (de k8) las expresa en los siguientes comentarios: ¿Cómo involucramos a las familias? Lo más importante es nuestra mentalidad. Primero, tenemos que creer absolutamente y con toda nuestra alma que las familias desean apoyar a sus hijos y que este apoyo o esta asociación pueden marcar una diferencia significativa en la experiencia educativa del niño. Segundo, tenemos que darle prioridad a salir a las familias. A menudo esto requiere de llamadas personales y a veces de visitarlas en sus hogares. Muchos miembros de las familias han recibido un trato horrendo en las escuelas, sea como estudiantes, padres o ambos. Cuando los maestros buscan a las familias con la meta de edificar una asociación que se base en el respeto mutuo y el fin común lasa familias responderán positivamente.
Primera Creencia Básica: Todos los Padres de Familias Sueñan con Grandes Cosas para sus Hijos y Desean lo Mejor para Ellos Es esencial que los educadores entiendan que las familias que les mandan sus hijos todos los días lo hacen porque desean que tenga éxito tanto en la escuela como en la vida. Sí, tal vez las familias hagan o digan cosas que nos hagan pensar si de veras ven con respeto la formación académica. Ahora bien, tales acciones y comportamiento a menudo son consecuencia de otros factores estresantes en sus vidas personales. En su libro La Conversación Más Importante, la socióloga Sara Lawrence Lightfoo escribe lo siguiente: “Yo pienso que todos los padres esperan muchas cosas de sus hijos y del papel que juegan las escuelas en las oportunidades que sus hijos tendrán en la vida. Todos atesoran en lo profundo una larga lista de sueños y aspiraciones para sus chicos. A todas las familias les interesa muchísimo la educación de sus hijos y esperan que su descendencia sean más felices, más productivos y más exitosos que los que ellos han sido en su propia vida.” 1
Desafortunadamente, el veredicto “a los padres no le importan la formación de sus hijos” a menudo se dicta a los padres de color, inmigrantes, o a familias en comunidades pobres. Las muchas razones por las cuales se entienden mal los deseos de las familias y sus creencias se exponen en el Capítulo 6 “Cómo Tratar las Diferencias.” Roni Silverstein, un subdirector en el Condado de Montgomery en Maryland, un suburbio de residentes de antecedentes diversos dice lo siguiente: “La creencia de que los padres de las minorías no se interesan no puede estar más lejos de la realidad. Cuando uno habla con ellos se da cuenta de que nuestras escuelas en los Estados Unidos son la respuesta a sus sueños. Lo que tuvieron que pasar para lograr que sus hijos llegaran acá es sobresaliente. En sus corazones albergaban el sueño de los Estados Unidos, si hay algo que es verdad, es que a ellos les importa la educación de sus hijos más de lo que se cree.” ¿Qué hay de aquellos padres que en realidad no quieren estar involucrados? Hay algunos padres de familia que están sobrecargados de problemas y no les queda energía para ocuparse de la educación de sus hijos. En esos casos, recomendamos buscar a otra persona que sea parte de la vida del niño y que pueda hacer las funciones de los padres de familia. Puede ser otro pariente (de hecho, más de 4 millones de niños están siendo criados por sus abuelos), algún miembro cercano de la familia o un vecino. Si no puede encontrar a alguien así, diríjase a una entidad de la comunidad que sea activa en el vecindario de la familia o que proporciones mentores, tales como el Hermano/a Mayor.
Resumen de la Investigación: Todas las familias, aún de antecedentes diversos, sienten que la formación académica es esencial Nos solo muchos padres de familia de color valoran la educación de k12, sino que también sienten que la universidad es vital para sus hijos. En una encuesta a padres Afro Norteamericanos, Latinos y Anglosajones, la entidad Agenda Pública encontró que los padres de color le daban mayor prioridad a la educación superior que los padres Anglosajones2.
Esta primera creencia fundamental es la más importante de las cuatro. El asumir que todas las familias quieren lo mejor para sus hijos es el primer paso al cultivar y mantener asociaciones sólidas. Una manera de cambiar las actitudes es hacer ver las experiencias e información que contradicen dichas actitudes erróneas.
EJEMPLO: Padres y Maestros Conversan El Comité Prichard de Excelencia Académica en Kentucky ha desarrollado un programa que se llama Los Padres y Maestros Conversan, o PT3. Un PT 3 une a los padres y maestros para que hablen acerca de sus esperanzas con sus niños y lo que se necesita para elevar el rendimiento académico. En las sesiones se involucran a máximo 30 personas (15 padres y 15 maestros) y se efectúan en espacios de la localidad tales como centros comunitarios, escuelas, iglesias y hogares privados. Cada sesión duran unas cuatro a cinco horas, incluyendo tiempo para tomar alimentos, y la dirige una facilitador profesional. Primer Paso: Luego de reunirse para escuchar el propósito del PT 3, los padres y maestros se dividen en grupos separados. Cada grupo participa en una lluvia de ideas en
respuesta a dos preguntas: 1. “¿Qué deseamos para nuestros estudiantes? Estos son sueños y deseos. 2. “ ¿Qué tenemos que hacer para conseguir lo que queremos? Estas son acciones. Paso Dos: Todos se reúnen de nuevo en un grupo grande. Luego de ver las listas generadas por los grupos pequeños, los participantes identifican respuestas similares y las agrupan por temas. Luego cada grupo las alista en orden de prioridad votando en cuanto a aquellos puntos que sienten que son los más importantes. Paso Tres: Todo el grupo habla de lo que los padres y docentes pueden hacer para lograr estas cosas. Al trabajar en grupos pequeños desarrollan planes de acción para abordar las prioridades principales. Al final, tanto padres como docentes informan que entienden mejor y aprecian más la perspectiva del otro. En una investigación de seguimiento a esta actividad, el Comité Prichard encontró un aumento en la participación de los padres, mejor comunicación de ambas días, proyectos entre padres y maestros para mejorar el rendimiento académico, y conversaciones continuas. “El PT3 es emocionante. Lo que sucede es que los dos conjuntos de adultos que trabajan directamente con los niños se dan cuenta de los inquietan las mismas cosas y desean lo mismo para los niños. Es conmovedor, y cambia las perspectivas que los unos tienen de los otros,” anota Bev Raimondo, el director del Centro para el Liderazgo de los Padres del Comité Prichard, un facilitador de experiencia del PT3. (Si desea más información en cuanto a los comités Prichard y sus programas, incluyendo PT3, refiérase al capítulo 10).
Pasos para Tomar Acción Con el fin de apoyar los sueños de las familias, los educadores tienen que demostrar su creencia de que los padres pueden ayudar a sus hijos a cumplir con tales sueños. Primero, tenemos que averiguar cuáles son esos sueños y cómo apoyar alas familias a alcanzarlos. Esos sueños pueden ser el tema de conversación entre los padres y maestros en una noche de exposición de trabajos u otro evento de la escuela. Escoja a alguien que facilite y que sea alguien que se ha ganado la confianza de ambas partes. He aquí algunas sugerencias en cuanto a cómo organizar la conversación: 1. En grupos pequeños, pregúntele a los padres (y a los maestros que son padres de familia) acerca de sus sueños y expectativas para el futuro de sus hijos.
2. Pídale a los padres que pongan por escrito o le dicten a alguien esos sueños. Saque dos fotocopias, una para guardar y otra para entregar. 3. Ponga la lista de sueños en el tablero o en un afiche. (Idea: más adelante se pueden incluir en el tablero de información) 4. en grupos pequeños, haga que los padres escojan unos cuantos sueños de la lista y hablen de lo que se necesita para poder cumplirlos. 5. Pregunte a todo el grupo sobre los pasos necesarios para hacer nuestros sueños realidad. Por ejemplo, ¿qué se requiere en lo que toca a la formación académica, programas y clases? ¿Qué actividades son necesarias tanto dentro como fuera del horario escolar? ¿Qué cualidades personales son necesarias? ¿Qué hay de las finanzas? ¿Qué otras cosas son necesarias? 6. Pida a los maestros que respondan comentando en cuanto a cómo el currículo de la escuela se enlaza a los sueños que tienen las familias, y cómo los padres de familia pueden dar apoyo a sus hijos para que adquieran las destrezas que necesitan. (Por ejemplo, porqué son las matemáticas tan necesarias para aquellos estudiantes que desean llegar a ser médicos) 7.
Pida a los padres que hablen sobre estos sueños con sus hijos. ¿Sus hijos comparten los mismos sueños y metas? ¿Cómo se enlazan sus sueños con lo que están aprendiendo en la escuela? ¿Qué más tienen que estar aprendiendo para cumplir con esas metas?
Si se consigue una buena respuesta a esta actividad, considere desarrollar también el programa “Cómo Respaldar Nuestros Sueños”. Anime al personal y los padres de su escuela a hablar sobre cómo se relacionan sus metas con carreras futuras, y cómo tales posibles carreras se relacionan con las destrezas que están aprendiendo en la escuela. Estas conversaciones pueden preceder un taller que:
Demuestre a las familias maneras efectivas en que pueden apoyar efectivamente el aprendizaje de sus hijos en casa
Dé ideas a los padres de cómo hablar con sus hijos en cuanto a sus metas y sueños
Explique los pasos que los niños, en su nivel escolar, tienen que dar para terminar las clases y programas necesarios para alcanzar sus metas. ¿Qué programas hay
disponibles en el siguiente nivel que les darán los conocimientos y destrezas necesarias en la educación postsecundaria o capitación? Se exponen más ideas similares a estas en el resto del libro, específicamente, el Capítulo 5 “Cómo Enlazar el Aprendizaje” y el capítulo 7: “Cómo Apoyar las Actividades de Abogacía” Segunda Creencia Básica: Todos los padres de familia tienen la capacidad de apoyar el aprendizaje de sus hijos Sin importar qué tan poca formación académica han recibido los padres de familia ni el idioma que hablen, todos los padres pueden aportar a la educación de sus hijos. El conocimiento de los padres, sus talentos y experiencias en la vida les dan la capacidad de ayudar a sus hijos en su escolaridad pero el personal de la escuela tiene la capacidad de ayudar a los padres a entender y usar tales habilidades. Todos los padres cuentan “recursos de conocimientos” sobre sus hijos y la comunidad que el personal de la escuela debe respetar y de los cuales pueden echar mano.3 La expresión “los padres son los primeros maestros de sus hijos” se usa tanto que se ha convertido en un simple dicho. Pero es la realidad. Debemos ver y tratar a los padres como los expertos que son. Aún así, muchos padres dejan la impresión de que no se involucran, por lo menos no en la escuela. ¿Qué pasa por la cabeza de los padres cuando contemplan si se involucran o se mantienen al margen? Para empezar, seguramente siente que tiene algo que aportar, y que si vienen se van a sentir acogidos.
Resumen de la Investigación A menudo se subestima el conocimiento de las familias Luis Moll, un experto en alfabetización bilingüe en la Universidad de Arizona, ha estudiando escuelas de barrios en el suroccidente. Anota dos observaciones preocupantes; los maestros imparten lecciones llenas de repasos de datos y reglas que se relacionan muy poco con la vida en el hogar y constantemente subestiman el “fondo intelectual y de conocimientos” de los estudiantes y sus familias. Cuando Moll visitó los hogares de los estudiantes, se dio cuenta de que la mayoría de Latinos que conoció tenían
un “entendimiento formidable” de muchos asuntos, incluyendo agricultura, minería, medicina, religión, bilogía y matemáticas”
En sus importantes estudios, Kathleen HooverDempsey y Howard Sandler encontraron tres conceptos claves que influyen en las opciones que los padres toman al involucrarse en la educación de sus hijos: 1. Cómo desempeñan los padres su descripción laboral de padre de familia. (Los investigadores lo llaman la “edificación de la función.”) Lo que los padres piensan que es lo que se supone que tienen que hacer para ayudar a sus hijos y lo que dice la familia y los amigos sobre lo que es importante y aceptable afecta profundamente los que los padres deciden hacer. ¿Decidirían por ser activos, involucrarse, o ser pasivos y deferentes, o molestarse y criticar? Sus antecedentes culturales y sus alrededores influyen muchísimo en su decisión. 2. Qué tan confiados se sienten los padres en sí mismos y en su propia capacidad para ayudar a sus hijos. (Los investigadores lo llaman “eficacia”). Hay más posibilidades de que los padres se involucren si sienten que: Tienen las destrezas y conocimientos necesarios para ayudar a sus hijos. Sus hijos pueden aprender lo que tienen por enseñar y transmitir. Pueden encontrar otros recursos de destrezas y conocimientos necesarios para ayudar a sus hijos Lo que harán para marcar una diferencia positiva en el aprendizaje de sus hijos
3. Si los padres se sienten invitados… tanto por sus propios hijos como por la escuela. Este “sentimiento de estar invitado” se ve altamente influenciado por las señales que los padres reciben de sus hijos y del personal de la escuela. Tales señales les comunican a los padres lo que sus hijos y los maestros de veras desean y esperan. La edad de sus hijos y qué tan bien que les va en la escuela también afectan.5 En su estudio actual, HovverDempsey anota que de los tres factores es a menudo el más importante.
En otras palabras, sabemos que los padres se motivan más a dar apoyo al aprendizaje de sus hijos cuando reciben invitaciones claras y el apoyo de los maestros y demás personal de la escuela a involucrarse, se sienten más confiados de su propia habilidad para ayudar a sus hijos, y tienen claro lo que tienen que hacer para respaldar el aprendizaje de sus hijos. Es obvio que el personal de la escuela puede causar un gran efecto en estas consideraciones, especialmente en hacer que los padres se sientan invitados y acogidos. En el Capítulo 4 “Cómo Desarrollar las Relaciones” discutimos cómo las escuelas pueden poner el tapete de bienvenida, dar honra a las fortalezas e intereses de las familias, y explicar claramente cómo pueden ayudar a sus hijos. Acciones Sugeridas para Promover la Capacidad de los Padres de Apoyar el Aprendizaje de sus Hijos Exploremos el marco de pensamientos que motiva a los padres a tomar la decisión de involucrarse. ¿De qué maneras ayuda su escuela a que los padres desempeñen las labores de en su descripción laboral como padre de familia participantes? ¿Cómo se asegura de que las familias – todas ellas se sientan acogidas y aceptadas? La lista a continuación le puede ayudar a hacer una evaluación de la creencia que se sostiene en su escuela en cuanto a la capacidad de los padres y el apoyo que se brinda a la misma. Marque las aseveraciones que describen lo que están haciendo el personal y los padres de familia de su escuela. 1. Desarrollo de las “descripción laboral” de un padre de familia participante.
Trabajar anualmente con las familias para desarrollar y aprobar un contrato entre la escuela y la familia que deja bien claro lo que los padres pueden hacer en casa y en la escuela para fomentar el aprendizaje y dejar claro lo que hará el personal de la escuela para apoyar a los padres de familia.
Reclutar padres de familia que puedan dar ejemplo a las familias nuevas. Por ejemplo, un sistema de compañeros para aparejar a los padres con más experiencia con los recién llegados a la escuela, y relatos de experiencias en la crianza de los hijos.
Pedir a las familias de culturas diferentes que cuenten sus valores y tradiciones, y que describan la manera en que le hablan a sus hijos de la importancia de la buena formación. (Si quiere más ideas, vea el Cuestionario de Bienvenida a la Familia del capítulo 11.)
Incluir en el Manual Escolar una lista de las expectativas de la escuela sobre la participación de los padres y explicar su importancia en las noches de exposición de trabajos de los alumnos y demás actividades escolares.
Otra: ___________________________________________________
2. Edificar la confianza que sienten las familias en su propia habilidad para ayudar a sus hijos.
Ofrecer talleres de capacitación y materiales que den a las familias información y destrezas
Enviar a casa paquetes de materiales didácticos, incluyendo juegos y videos, que refuercen lo que los niños están aprendiendo en el salón de clases.
Asegurarse de que las entrevistas entre padres y maestros los maestros dicen que “usted es el primer maestro de su hijo: hábleme de su niño” (Si quiere ver una muestra del formulario de Revisión del Padres, refiérase al Capítulo 11.)
Otras: ___________________________________________________
3. Asegurarse de que todas las familias se sienten acogidas e invitadas por el personal de la escuela y sus niños.
Visitar los hogares para conocer a las familias y cultivar una relación personal. (A la mayoría de los niños les encanta esto. Durante la visita se pudiera llenar el formulario Encuesta de Evaluación de Necesidades en el Capítulo 11.)
Distribución de folletos y volantes de recordatorio de las actividades junto con una llamada telefónica personal a las familias y notas de sus hijos invitándolos a asistir.
Hacer reuniones más pequeñas en el vecindario y la escuela para edificar el sentido de pertenencia a la comunidad, e invitar a toda la familia.
Hacer encuestas a las familias en cuanto a cómo les gustaría participar ofreciendo una gran variedad de oportunidades, tales como ventas de garaje, ferias de ciencias, clubes de lectura, obras de teatro, espectáculos de talentos, y obras musicales.
Otro: ____________________________________________________
Relato: No pensaba que estaban refiriéndose a mí. Un padre AfroNorteamericano estaba asistiendo a su primer evento para los padres en una escuela de Saint Louis en atención a una invitación personal que le había hecho el coordinador. Un maestro preguntó: “ ¿Alguna vez recibiste los volantes que enviamos a casa en cuanto a talleres para los padres de familia?” El padre dijo: “Sí. Recibí los volantes y las cosas de lo que está pasando en la escuela, pero no creí que se referían a mí. Yo no creí que ellos querían que yo viniera.” Tercera Creencia Básica: Los Padres de Familia y el Personal de la Escuela Deben ser Socios Iguales Las relaciones entre el personal de la escuela y los padres comúnmente se desarrollan en medio de una lucha de poderes. A menudo los padres vean al personal de la escuela como los profesionales que tienen el poder de asignar a sus hijos a los maestros, dictar normas disciplinarias, establecer las reglas, y control el acceso a programas deseables. Como resultado, los padres pueden sentir que se supone que deben ayudar a sus hijos en el hogar y venir a la escuela en caso de que se les pida. Parece ser que esto es más posible cuando los padres provengan de diferentes antecedentes raciales, étnicos o de clase social a aquellos del personal de la escuela. Las relaciones de lucha de poder entre los educadores y los padres de familia se desarrollan de diversas maneras. Por ejemplo, los maestros pueden sentir que se espera que den a los padres indicaciones específicas en cuanto a cómo trabajar con sus hijos. El director puede sentir la necesidad de verse como a cargo y no como alguien que cede a los padres. Los padres pueden reacciones al mantenerse al margen o no responder a las solicitudes de la escuela de voluntarios. Sugerimos que se comparta el poder. Toda persona interesada en apoyar el desarrollo de los niños de tener el mismo estatus, valor y responsabilidad. Eso significa surgir a partir de la premisa de que todos tienen algo que ofrecer, y que todos deben sacar algo positivo
de la relación. En contraste las relaciones de poder, Richard Elmore, un profesor de la Escuela de Postgrado de Educación de Harvard sugiere un principio de reciprocidad. Cada aumento de la presión a la escuela para que dé cuentas del rendimiento académico de los estudiantes se debe acompañar con una inversión igualitaria en el aumento del conocimiento y destrezas de los maestros, administradores, estudiantes y sus familias, a favor de aprender a cumplir con estas expectativas.6 Esto implica que la gente no se debería esperar que la gente haga algo bueno, o peor aún, que se les castigue por no hacerlo bien si no han recibido la preparación correspondiente. A una escuela no se le debería de etiquetar como “reprobada” si a los maestros no se les ha ofrecido capacitación profesional de buena calidad. Si a los estudiantes no se les ha enseñado efectivamente o a los padres no se les ha mostrado cómo apoyar el aprendizaje en casa, tampoco se les puede considerar como “reprobando”. En otras palabras, su sentido de responsabilidad aumentará a medida que se fortalece su capacidad. Esta gráfica contrasta lo que el personal de la escuela pudiera decir de diferentes asuntos, dependiendo de si las relaciones de la escuela se basan en la lucha por el poder. Tema
Relaciones Desproporcionadas
Relaciones Mutuas
Apoyo Académico
“Si sus hijos hubieran seguido mis instrucciones en las tareas y otras asignaciones”
“Estas son algunas maneras de monitorear el trabajo de sus hijos y ayudarles a desarrollar destrezas. Díganos qué más hace para ayudar a sus hijos”
Apoyo del Padres de Familia
“Eduque a su hijo para que en todo momento respete y obedezca al personal de la escuela”
“Desarrollemos un Código de Conducta u trabajemos unidos para fomentar el comportamiento adecuado.”
Estatus
“Nosotros somos los profesionales; no cuestione nuestras decisiones”
“Comparta con nuestros estudiantes su conocimiento, sus destrezas y su cultura. Por favor déjenos saber
cuándo pudiera venir al salón de clases” Participación
“Los padres pueden venir a la escuela dentro del horario designado o a eventos”
“¡Lo invitamos a cualquier hora! Por favor díganos de qué quisiera saber más y cuándo puede venir a talleres y otras actividades que le interesen”
Acciones Sugeridas Una manera de determinar si su escuela trata a las familias como socios igualitarios al mejorar el aprendizaje de los estudiantes es hacer una evaluación de qué tan a menudo se consulta a los padres al tomar decisiones importantes. El decreto Que Ningún Niño Quede Rezagado establece varios requisitos de participación de los padres. Medite honestamente en cuanto a si su escuela acata tales directrices federales y con qué frecuencia lo hace. Nuestra escuela: 1. Involucra a las familias en la planeación de las maneras en que quieren participar en la escuela: Sí: _____ No: ______ 2. Consulta con el grupo de representantes de padres, no solo con aquellos que asisten al PTA/PTO Sí: _____ No: _____ 3. Invita a las familias a que observen las actividades de los salones de clase, revisen los libros y materiales y visiten otras escuelas para sacar ideas. Sí: _____ No: ____ 4. Invita a las familias a que asistan a las sesiones de capacitación profesional y a las reuniones con el cuerpo docente. Sí: ______ No: _____ 5. Siguen las sugerencias en cuanto a los temas para los talleres. Sí: ____ No: ____ 6. Involucra a las familias en investigaciones; por ejemplo, en encuestas acerca del ambiente de la escuela, los talleres y actividades que le interesan a las familias, y los mejores medios de comunicación con las familias y los horarios más convenientes para hablar del aprendizaje de los niños. Sí: ____ No: ____
¿Cómo le fue? ¿Hacen falta muchas de estas actividades en su escuela? En la siguiente reunión del cuerpo docente hable de lo que hace falta y desarrollen un plan de acción. El personal de la escuela puede dar apoyo a la capacidad de los padres para ayudar a sus hijos con su escolaridad y con actividades fuera del plantel. (Si desea investigar más de las actitudes del personal y las familias, use el Ejercicio de Autoexamen de Actitudes del capítulo 11) Cuarta Creencia Básica: La responsabilidad de cultivar asociaciones entre la escuela y el hogar recae primordialmente en el personal de la escuela, y en particular sobre el liderazgo del plantel. Para crear un ambiente escolare y una cultura que afirmen la asociación con los padres, es esencial que tanto el director como los maestros sean líderes pujantes. El rector juega un papel crucial, pero los maestros también tienen que dar la talla y abogar a favor de la participación de las familias. El liderazgo que ejerzan ambas partes pone el tono a todo el personal del plantel. La dinámica desproporcionada de poder que acabamos de tratar también desempeña su función. Muchas familias ven las escuelas como instituciones poderosas y amenazantes. Lo Dicta la Ley Toda escuela (que recibe servicios del Programa Título I del decreto Que Ningún Niño Quede Rezagado) deberá desarrollar conjuntamente con los padres de familia de todos los niños a los que se les ofrecen servicios… un contrato entre la escuela y el padres que bosqueje la manera en que los padres, todo el personal escolar, y los estudiantes deberán conllevar la responsabilidad por el aumento del rendimiento académico y los medios por los cuales el plantel y los padres deificarán y desarrollarán una sociedad que ayude a los niños a cumplir con las Normas Académicas del Estado. Sección 1118 (c)(3) de NCLB, Título I
El buscar a los padres resulta más sencillo a los docentes que para los padres llegar a los maestros y al personal. El rector de la escuela y los profesores tienen que dar el primer paso, y en particular porque los padres ya de por sí se sienten intimidados antes el personal de la escuela. Ciertamente ambas partes llevan parte de la responsabilidad, los
padres tienen que continuar comunicándose con los maestros y el resto de los empleados del plantel en nombre de los niños. Todos lo que trabajan en el plantel, y especialmente el director, tienen que poner en práctica lo que predican, y no solo predicar y no aplicar lo que se dice sobre la asociación. Esto significa demostrar verdadero convencimiento por las asociaciones. Por supuesto, el personal de la escuela tiene que sentir la confianza de que ellos pueden ser líderes en el desarrollo de iniciativas de asociación. El estudio de HooverDempsey y Sandler sobre lo que motiva a los padres también aplica a los educadores. Los profesores se sentirán más dispuestos a incluir a las familias si reciben invitaciones claras y apoyo de sus colegas, si confían en su propia habilidad de trabajar con los padres y tienen en claro su responsabilidad de ayudarles a reforzar el aprendizaje de los niños.
“Escogí esta escuela porque evidentemente era la única escuela pública disponible en la que se respeta a los padres y nosotros contamos; y en la que padres, maestros y niños de veras trabajan unidos de manera genuina.” (Padre de familia, Boston)
Por ejemplo, Rick Dufuer, un educador y experto en capacitación profesional, describe una actividad con los profesores, en la que se les piden que den ideas en cuanto a cómo mejorar el rendimiento académico en su plantel. La primera lista que generan incluye cosas como más dinero, menos pruebas académicas, y estudiantes más motivados cosas que se controlan externamente. Él acuña el término “mirar por la ventana” para describir tales actividades. Dufour le dijo al personal que él estaba de acuerdo con la mayoría de esos puntos. Luego sugirió otra lista de puntos para aumentar el rendimiento académico que también quería que consideraran. Él la llama “verse al espejo”. Compare las dos listas: Mirar por la Ventana
Verse al Espejo
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Más apoyo fiscal por parte del estado
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Metas académicas claras y enfocadas ante cada estudiante
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Reducción del tamaño de las clases y más planeación
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Más personal para ayudar a los
Monitoreo cercano y oportuno del aprendizaje de cada estudiante para identificar áreas
estudiantes asistentes docentes, consejeros, trabajadores sociales.
problemáticas •
Ayuda adicional para los estudiantes con dificultades
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Asociaciones más sólidas con los padres que se basen en la frecuente comunicación de ambas partes
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Una cultura de cooperación los profesores trabajan en equipo para ayudarse entre sí a incrementar el rendimiento académico
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Más padres que den apoyo
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Acabar con las pruebas estatales
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Menos dictados por parte de la oficina central
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Aumento de salario y apoyo a los maestros para que asistan a talleres de capacitación o cursos de postgrado
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Estudiantes con más ética y sin la actitud de pensar que algo se le debe
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Tener la expectativa de que todos los estudiantes pueden aprender a niveles elevados
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Más libros de texto y materiales pedagógicos actualizados
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Una escuela segura y ordenada, directrices sobre el comportamiento estudiantil que se aplican consistentemente, y una cultura pujante de respeto mutuo
En la lista, “mirar por la ventana”, se requiere que alguien más tome acción. A diferencia, en la lista “verse al espejo” se necesita de liderazgo interno y de asumir la responsabilidad de hacer lo que sea necesario.7 Actividad Sugerida Trate de hacer esta misma actividad con el personal de su escuela. Inicie pidiéndole al grupo que den ideas en cuanto a cómo mejorarían la participación de los padres y las familias en su escuela. Agrupe las ideas que recargan la responsabilidad en alguien fuera de la escuela en una columna, y las ideas en las que se asume la responsabilidad en otra. No etiquete las columnas, más bien, permita que los lectores las interpreten. He aquí algunas ideas que podrán surgir:
¿Qué mejoraría para participación de las familias? “Mirando por la ventada” •
Familias que hablan inglés y entienden la cultura de los Estados Unidos
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Mayor respeto al valor de la formación académica
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Padres más motivados
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Más dinero para contratar personal que pueda trabajar con las familias
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Más programas de participación de los padres dirigidos por el distrito
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Más disciplina y mejor comportamiento en el hogar
¿Qué mejoraría para participación de las familias? “Viéndose al espejo” •
Instalaciones escolares más acogedoras
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Llamadas telefónicas más positivas al hogar al menos una vez al mes
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Servicio de interpretación disponible en la oficina y en las conferencias y otros medios de comunicación
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Un centro familiar dotado de materiales didácticos que las familias puedan llevarse a casa
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Talleres de lectura y matemáticas
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Más tiempo de planeación para reunirse con las familias
Los líderes de la escuela tienen que proveer los recursos, la energía y la guía para implementar y sostener los programas de asociación. El director, subdirector, y los docentes experimentados pueden crear una cultura de asociación al dar el ejemplo en palabras y en acciones a toda la comunidad escolar. En una reunión del cuerpo docente o del consejo del plantel educativo, sacar tiempo para meditar en cuanto a la persona de la escuela que… •
Se reúne con los padres y los saluda dentro y fuera del horario escuela, tanto en el patio de recreo como en el resto de las instalaciones escolares
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Provee al personal evidencia de la importancia de la cooperación con las familias y capacitación profesional para desarrollar programas y asociaciones
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Estructura el tiempo y las oportunidades en el año lectivo para que los maestros puedan colaborar con las familias en grupos pequeños o a nivel personal
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Hace que el personal rinda cuentas por la comunicación persistente con las familias acerca del progreso de sus hijos
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Ofrece oportunidades constantes para que el personal relate de estrategias que le han resultado para edificar asociaciones con las familias
Conclusión: Obstáculos para alcanzar las creencias ¿Cuáles son los obstáculos para alcanzar estas creencias? Cuando el cuerpo docente y el resto del personal provienen de diferentes antecedentes culturales y sociales a los de los estudiantes y las familias, los sentimientos y temores de la gente pueden evitar que acojan estas creencias: •
Temor a que se le tilde de racista o insensible
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Inquietud en cuanto a perder el poder o el control
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Temor a supervisión descortés o a la microgerencia del salón de clase
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Preocupación por la seguridad personal
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Sentimientos de ineptitud para lidiar con conflictos y controversia
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Poca confianza en el conocimiento de los padres y su buen juicio
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Arraigamiento a los estilos “seguros” de participación tradicional de las familias
Cathy David, quien ha sido maestra, directora y administradora en Alexandria, Virginia, un distrito escolar urbano y diverso, ha acumulado experiencia en estos asuntos. Le aconseja a los rectores que le den a los maestros y demás personal un especio seguro en el que puedan hablar acerca de sus temores e inquietudes, y luego, decisivamente traten cada asunto. David cuenta lo siguiente: “El Comité Consejero de Padres de mi escuela propuso que se abriera el laboratorio de computadores de seis a ocho de la noche una vez por semana. Cuando presenté la idea al cuerpo docente, la reacción fue negativa. ‘Eso no se puede hacer, no resultaría bien. Van a dañar los computadores y arruinar los programas.’ Decidí reunirme con el equipo de líderes para hablar de las objeciones una por una.
Los maestros decían:
Yo dije:
“Entre padres y niños van a dañar los computadores.”
“PTA ha acordado reemplazar cualquier computados que se dañe”
“Van a arruinar los programas”
“En realidad no se puede dañar un programa, además tenemos muchas copias y son gratis.”
“Los niños van a estar por todos los pasillos sin ninguna supervisión”
“Tal vez se roben los equipos o se les dé mal uso”
“De todas maneras tenemos que poner seguro a las puertas cuando nos vamos por la noche.” “Los miembros de PTA y PAC estarán en el salón supervisando que todo se use correctamente.”
“Una vez que las objeciones se superaron, los docentes estuvieron dispuestos a hacer un intento durante tres meses. Todo salió bien.”
Cómo empezar Al seguir leyendo el libro tal vez se pregunte “y, ¿quién va a hacer todo esto?” Le sugerimos que designo un equipo de acción. Es demasiado trabajo para una sola persona, y no se le puede delegar al coordinador de padres. Una iniciativa de asociación tiene que ser vista por todos los socios como la suya propia según lo dice la Dra. Joyce Epstein, fundadora de la Red Nacional para Escuelas de Asociación y directora del Centro Nacional para la Asociación entre la Escuela, la Familia y la Comunidad en la Universidad Johns Hopkins. Una de sus contribuciones principales es el concepto del equipo de acción para establecer la asociación. Epstein nos comentó que: “Nuestros estudios señalan que es importante teniendo un ‘equipo de asociación’ compuesto de maestros, padres de familia y administradores que trabajen unidos para asegurarse de que la asociación entre la escuela, la familia y la comunidad está bien diseñada, bien integrada, y orientada a una meta.” (Si desea más información acerca de estos recursos para apoyar los equipos de acción, incluyendo la guía definitiva de Epstein, vea el capítulo 10.) El equipo de acción es un grupo de trabajo de un consejo escolar o un equipo de mejoría escolar. Tiene la responsabilidad de planear y mejorar continuamente la participación de
la familia y la comunidad. “Esto es lo que marca la diferencia, nuestros estudios lo demuestran, en lo que se hace, cuánta actividad se hace para buscar a los padres, los padres que se involucran (aquellos que de otro modo estarían excluidos), y cómo afecta la participación a los estudiantes.” En el equipo deben haber maestros, administradores, y padres y otros miembros de la familia, y al nivel de secundaria, alumnos. La guía de Epstein, Asociaciones entre la Escuela, la Familia y la Comunidad: Su Manual de Acción es un excelente recurso para los quipos de acción.8 A continuación se presentan algunas cosas que pueden hacer los equipos de acción: 1. Escuchar a las familias, maestros y otro personal, a los miembros de la comunidad al identificar ideas, necesidades y prioridades. El marco que se presenta en el Capítulo 2, La Escuela FortalezaLa Escuela de Asociación, la encuesta del Ambiente Escolar del capítulo 11, y las listas al final de cada capítulo se pueden utilizar para hacer ver las cosas que requieren atención especial. 2. Organizarse en comités, según las prioridades establecidas. Epstein recomienda crear un comité permanente para cada una de las seis clases de participación: la crianza de los hijos, comunicación, servicio voluntario, aprendizaje en casa, y cooperación con la comunidad. 3. Desarrollar un plan de acción a un año que cubra cada área en la que trabajarán, hacer un presupuesto e identificar fuentes de recursos monetarios. 4. Reunirse continuamente (al menos mensualmente) como equipo y establecer metas y directrices para el trabajo en equipo. ¿Cómo se comunicarán? ¿Qué proceso de toma de decisiones seguirán? ¿Cuándo sacarán el tiempo para hablar de asuntos y resolver problemas? 5. Reunir ideas y planear programas y actividades 6. Hacer publicidad a las actividades y reuniones del equipo. Incluir a todas las familias y la comunidad escolar. 7. Evaluar su trabajo e informar constantemente del progreso del plan. A través de todo el libro nos referimos a los equipos de acción o a los comités de participación de padres, pues consideramos que son vitales en este trabajo. Por supuesto, a nivel individual, maestros, administradores, líderes de los padres y otro personal de la escuela, miembros del consejo escolar, líderes comunitarios, y otras personas puede tomar ideas del libro. El desarrollo de acción sistemática para transformar una escuela exige de un equipo dedicado que labora a largo plazo.
En los siguientes capítulos, daremos a su equipo estrategias para superar temores y crear prácticas efectivas que apoyen el aprendizaje de los estudiantes. En el siguiente capítulo se habla del asunto de la confianza, que está tras toda relación productiva y bosqueja el proceso por el cual se puede unir a todas las familias con el personal del plantel.