Tiempos Modernos #19 by Tiempos Modernos Villa Mercedes

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MODern s DISTRIBUCIÓN GRATUITA - VILLA MERCEDES (S.L.) - ARGENTINA

ENTREVISTA

CINE

Guada Mediavilla

Leonardo Favio

MÚSICA

SOCIEDAD

Calle Angosta Rock

El levante en taxi

TEXTO

VISUALES

Jenno Amor

Lucía Ferreyra

ESPECIAL

Bowie

Centro de Aprendizaje Universitario (CAU) Fundaci贸n Puntana "Eva Per贸n" Av. Mitre 630. Villa Mercedes (San Luis)

sumario

Tiempos Modernos Revista Cultural A単o 4 Villa Mercedes San Luis, Argentina tiemposmodernosweb.com.ar

Tiempos Modernos Revista

# 19

TAPA: DAVID BOWIE

ENTREVISTA: GUADA MEDIAVILLA

TRES ANOS SIN LEONARDO FAVIO

CALLE ANGOSTA ROCK 2016

SOCIEDAD: LEVANTAR EN TAXI

VISUALES: LUCIA FERREYRA

balcarce 560

Cool & Art

buenos aires 62

CINE

FAVIO, LA ESTÉTICA DE LA TERNURA A TRES AÑOS DE SU MUERTE, RECORDAMOS AL GRAN GENIO ARGENTINO.

ay directores que hacen películas para Cannes o Hollywood, otros para Mar del Plata, algunos para los circuitos más alternativos del país y otros para Berlín. Y estaba Leonardo Favio. Considerado como uno de los cineastas más importantes del país, supo dejar su sello hipersensible y de adolescente eterno en todo lo que hizo, lo que generó un fenómeno de culto en torno a sus películas. "Deﬁnir a Favio sería maniatarlo, y él quería ser libre", decía Alfredo Alcón, protagonista de una de sus películas, Nazareno Cruz y el lobo. Los que saben juran que Crónica de un niño solo y El romance del Aniceto y la Francisca, bien podrían ser las mejores obras de la historia del cine nacional. La crítica nunca se cansó de recomendar Gatica, El mono; Juan Moreira; Soñar, soñar; Nazareno Cruz y el lobo; y Perón, sinfonía del sentimiento, con una duración de 6 horas. Esta última obtuvo los Premios Goya y el de la Asociación de Críticos Cinematográﬁcos.

FUERON LO S L A R G O METRAJES QUE DIRIGIÓ.

DISCOS GRABÓ EN SU CARRERA COMO CANTAUTOR.

Fue cantante y compositor, uno de los grandes precursores de la balada romántica argentina, que hacía furor en las décadas del 60 y 70. Grandes hits como "Fuiste mía un verano" y "Ella ya me olvidó", nacieron con su voz de hombre que hacía lo que quería. Y, en ese momento de rock y pelo largo, tuvo ganas de cantarles suave a las señoritas. Reﬂexivo y verborrágico, decía que no le gustaba mirar sus trabajos una vez estrenados. "Uno tiene que hacer las

cosas y dejarlas ir. No hay que quedarse pegado. Eso te empequeñece. Siento envidia por los realizadores que tienen en su casa los aﬁches de sus películas", dijo en una de sus últimas entrevistas. Fue un ferviente defensor del peronismo. Lo demostró un poco en toda su obra, pero principalmente en su película Perón, sinfonía de un sentimiento (1999). "Favio vivía desprendido de la materia: era esencia pura", solía decir Rodolfo Mórtola, uno de los colaboradores más cercanos. A lo largo de sus 74 años, su precaria salud lo acorraló siempre, al mismo tiempo que crecían los éxitos producidos por su enorme talento. "La vida es muy hermosa para ir dando lástima. Por eso no se me verá quejarme. Sería jodido que me doliera el alma. Por suerte, todavía está intacta", declaró Favio poco antes de su muerte. Hoy, a poco más de tres años de su muerte y con una obra más que vigente, es un gran momento para repasar con atención su ﬁlmografía. 5

MÚSICA BERSUIT, DALTÓNICOS, BLACK AMAYA Y DECENAS DE BANDAS LOCALES BAJO EL MISMO TECHO

CALLE ANGOSTA ROCK 2016, el festival que pide pista como el más rockero de Cuyo

n Villa Mercedes una vez al año el folclore le presta su casa (el escenario Alfonso y Zavala) para que el rock haga una ﬁesta. El rock no desaprovecha la oportunidad y más que ﬁesta hace un festival: el Calle Angosta Rock. Y parece que cada año las cosas salen mejor. En esta tercera edición, miles de personas vivieron tres días de música en vivo al módico precio de 20 pesos por jornada. Bersuit, Daltónicos, Black Amaya y decenas de bandas locales tocaron al mejor estilo de los clásicos festivales nacionales del verano. Pero en realidad las noches del 14, 15 y 16 de enero fueron la frutilla de un postre que empezó varios meses atrás, con el Pre Calle Angosta Rock, un concurso de bandas que sirvió para elegir a los grupos que compartirían escenario en el evento central. Hubo momentos emotivos, como el reconocimiento al bueno de Black Amaya. Al ex Pescado Rabioso le sobran credenciales para ser reconocido por su aporte al rock nacional. 6

El momento de hervor fue durante la segunda noche, cuando toco Bersuit. No entraba nadie en el anﬁteatro del predio. Con un repertorio que combinó con inteligencia sus éxitos noventosos, de la época ’Cordera’, con las canciones que más rodaron en los últimos cinco años. Del cierre del festival se encargaron los Daltónicos. Los locales conocen muy bien al público de la ciudad y saben sacar lo mejor de ellos. Ellos

tocaron el sábado para varios miles de personas que desﬁlaron por el predio durante la última noche. Además de la calidad de las performances de los shows, todas las bandas estuvieron de acuerdo en lo puntilloso y bien preparado de la organización. En el escenario, unos técnicos preguntaban a cada miembro de las bandas qué necesitaban y cómo. Luego, al bajar de tocar, los hacían pasar al VIP, donde los entrevistaban y demás.

MÚSICA

▲ La Comisión reconoció a Black Amaya por su trayectoria.

◄ No entraba nadie en el anﬁteatro la noche en que cerró Bersuit.

Gracias a un preciso operativo de seguridad, la violencia no dio la nota este año. A pesar de que la venta de alcohol estaba permitida dentro del festival. Señal de que la sociedad argentina vive el rock de una manera madura, alejada del clásico reviente porque sí. También hubo espectáculos en las calles del predio y todo tipo de puesto de comidas y bebidas para saciar sedes. En total fueron 35 bandas las que le dieron forma a este Calle Angosta Rock. Con una fuerte impronta local, el festival ha

sabido instalar una sana costumbre en la ciudad: el concurso de bandas. El pre no solo selecciona a los grupos que subirán al escenario en la próxima edición, sino que genera un tránsito de tocadas y shows como hacía tiempo la ciudad no veía. La gente se moviliza para apoyar a la banda amiga, de paso conocen a otras que tocan esa misma noche, los locales de rock mueven la barra, el jurado elige a sus favoritos, los músicos se aﬁlan e intercambian públicos. Todos ganan.

Los ganadores del Pre Calle Angosta Rock El Clan Rock Rust Genesys Los EX Lo Artesanal (San Luis) Después T Digo Starosta (San Luis) Veneno de Ángel Antisoxial Muerto el Perro Loud Minority Púlsar Inmortality Evolution Nafta de Avión Alissia Franka Perro de Sótano Impulsos Ave Negra Requiem Mundo Real Asagods Joker Tía Mecha Bagabundo Ormigas La descarga Singulars 50 amperes

◄ Los Daltónicos cerraron el festival ante una verdadera multitud.

VISUALES

Vidrio y cerámica: vivir la materia como una experiencia LUCÍA FERREYRA CUENTA CÓMO TRABAJA EN SUS TALLERES DE VITROFUSIÓN Y CERÁMICA. CON MÁS DE 8 AÑOS DE TRABAJO, CONTÓ POR QUÉ ABORDA MUCHO MÁS QUE LA DESTREZA TÉCNICA Y CÓMO ES QUE LOS ALUMNOS LA SIGUEN ELIGIENDO.

i usted vive en Villa Mercedes y le genera curiosidad trabajar artísticamente el vidrio o la cerámica, lo más probable es que termine en lo de Lucía Ferreyra. Tiene más de 8 años con el asunto de los talleres y nos cuenta por qué es que sus alumnos preﬁeren su manera de trabajar y de posicionarse ante la técnica y su aprendizaje. EL VIDRIO “Lo que me interesa es que trasciendan la técnica y experimenten el material. Para mí el vidrio tiene la particularidad de que, al ser transparente, los errores se notan más. Entonces hay personas a las que les gustan los polos: o sale bien o sale mal. Y se llevan bien con eso. Por eso, si sale opaco, lo tiran. Es una manera de trabajar procesos propios de la personalidad de otra manera”, comentó. Desde hace tiempo mantiene una modalidad de curso que le ha dado buenos resultados. Cada grupo tiene dos clases semanales que no superan las dos horas de duración. Además, tienen instancias en las que hornean las piezas que van quedando concluidas. “Hay gente que viene sólo a experimentar la técnica y luego siguen en su casa. Pero hay otras que les gusta el ritual del taller, hay alumnas que hace cuatro años que vienen. La mayoría de las alumnas que he tenido se han comprado sus propios hornos”. “Cada uno inicia cuando desea y se va cuando desea. Es un taller procesual, porque al ﬁnal resulta siendo

bastante terapéutico. Enseño la técnica y después dejo que cada uno empiece a laburar solo y hago una asistencia muy pequeño. A no ser que vengan con un proyecto más concreto”. Lucía hace énfasis en el clima ritual que se genera durante las clases: “Por lo general me sale un poco la bruja (risas) y terminamos hablando de los dramas de cada una”. LA CERÁMICA Otra de las áreas que explora en sus talleres es la cerámica. “La cerámica es más sensorial. Tiene esta cosa matérica de ir dándole suavidad con las manos y eso lo convierte en algo totalmente distinto y más abierto a otro tipo de experiencias”. Según contó Lucía, abrió una nueva opción para conectar con la cerámica: a través del vino. “El taller se llama ’Cerámica con vino’ y consiste en trabajar el material de una manera más relajada. La idea es que descubran qué tiene la cerámica para darles, que vean el intercambio con la materia. Y saciar

esa necesidad de venir a encontrarse con un ejercicio artístico también”. Este taller funciona los miércoles de 20 a 22. Y puede tomar todo el vino que se le ocurra. “Yo siento que el ser se transforma cuando trabaja la cerámica. Empece a comprender que uno puede construir un montón de cosas a partir de la humedad. Y en los talleres se lleva ese concepto a la experiencia de cada uno y surgen cosas muy interesantes”. Para este año también prepara dos cursos intensivos: de Mosaiquismo y de Armado de Esmaltes. “La propuesta es trabajar a partir de vidrios fusionados. Hablamos mucho de Gaudí, que es parte del abordaje más artístico que hacemos. Lo que tiene de interesante el mosaiquismo es que uno aborda desde el detalle hacia lo macro. Al contrario de lo que sucede con el vidrio”. En Facebook, sus trabajos se pueden encontrar como Artes de Fuegos. A ella como Lu Ciernaga. 9

Un ejército de taxistas y remiseros listo para el coqueteo. Mientras muchos preﬁeren indignarse en sus casas por lo que sea, ellos salen a la calle a trabajar y apalabrar señoritas. Conocé cómo operan estos cirujanos del levante en lo que dura un viaje promedio, unos 20 minutos. Hablamos con taxistas jóvenes y de la ’vieja escuela’. Cuentan los tips que no fallan y cómo han desarrollado un tacto divino para armar una cita de la nada. ROMÁN “No puedo creer que todavía haya hombres que elijan andar de mal humor en lugar de descabezar una siesta o salir a apalabrar señoritas”, dice Román (eligió ese pseudónimo por el crack de Boca) apenas empieza la charla. Son las 11 pm de un jueves mitad de mes y hace calor, señal de que ésta noche algo va a suceder. Él es como los pandas, que sienten el terremoto tres días antes. Se prepara. Tiene 41 años y hace 15 que maneja un taxi con base en la terminal de ómnibus. Entre miles de otras máximas de vida, dice que a “a las chicas, cuando les decís que comés muy mal, les sale un instinto maternal”. “Trabajar de noche no es para cualquiera. A la noche surgen las peores 10

miserias de la ciudad y de la gente, y hay que saber trabajar ahí sin mancharse. En la noche, el sexo es lo más común que hay. No quiero exagerar, pero te aseguro que nueve de cada diez taxistas que trabajan de noche están separados. Por lo menos de los que yo conozco”, desliza Román. El procedimiento tiene leves variantes, pero por lo general se repite: “Si por el retrovisor notás que la mujer te mira a los ojos cuando te habla (más de tres veces) y saca algún tema de conversación que no tiene que ver con el clima, es buen momento para hacer alguna pregunta para sacar información”. Ahí es cuando, un poco canchero pero siempre respetuoso, el taxista pregunta por 'los chicos', lo que deriva en la piedra

de toque de esa hipotética conquista: el papá de los nenes. Román cuenta que es crucial el tratamiento sobre el tema 'marido' (o novio). “Hay que sacar los datos más importantes, nada más, y hablar como quien no quiere la cosa, porque la señorita puede sentirse invadida y el viaje no dura demasiado, así que tenés poco tiempo para hacerla bien”. Antes de que la pasajera descienda, el pícaro le anota su número (capo de la vida si tiene una tarjeta personal) y le dice que él trabaja de noche, “para que no reniegue con las remiserías, ¿vió?”. El anzuelo está ﬂotando, sólo resta que llegue el llamado de ella. “Cuando te pide que vayas a buscarla un par de veces, tenés luz verde para mandar un

SOCIEDAD

ORNELA GUILLAUMIN

“no sabés cómo ganás con las minas hablando del Papa francisco” Cristian mensaje. Siempre con respeto. Si vuelve un whatsapp, está todo dicho”, dice Román, sonriente, casi viendo unas piernas al ﬁnal del túnel. “No te imaginás la cantidad de mujeres que no soportan a sus parejas y no saben cómo decírselos. Los hombres están muy violentos. Pero no hablo solo de golpear a la mujer, eso es de cobarde, sino de hacerlas sentir menos que uno o no prestarles atención. A la mujer le gusta que la hagan sentir una reina de vez en cuando. Y bueno…a mi juego me han llamado”, cuenta el hombre, al tiempo que el teléfono suena en su bolsillo. EL PENDEJO En esto de los amores livianos que viajan en remis también están los pichones, los que recién empiezan. Los

que entran a ese mundo con el toque de otro remisero, como sucede con los mozos. Es el caso de 'El pendejo', como le dicen en la agencia, una de las más populares de Villa Mercedes. El pendejo tiene 24 años y unos 200 (sí, leyó bien, 200) números de teléfono de muchachas en su celular. Su teléfono después de las 20 es el Inﬁerno. Por supuesto, el joven elige no tener novia. “Es el trabajo más divertido que he tenido. Todas las semanas te pasa algo nuevo”, comenta mientras el dedo arrastra contacto tras contacto en WhatsApp. Como en la vida, cuando no se es el dueño del auto que se maneja, hay que trabajar más para hacer una diferencia. El pibe se rompe por la tarde. Va y viene, lleva y trae. Ya entrada la noche puede relajar y ponerse las espuelas de salir buscar el ganado. Eran las 10 de la noche, piloteaba su nave. Estaciona 20 minutos para poder charlar. “Lo más común es que, si las chicas van en grupo, empiecen a cancherearte y decirte cosas. Yo me hago el profesional y el tímido. No digo nada y miro para adelante. ¿Para qué? (risas) Insisten y uno termina diciendo un chiste, o algo, y ahí empieza todo. Eso me ha pasado miles de veces. La verdad es que me han ofrecido trabajar en fábrica pero ni en pedo me meto ahí adentro diez horas por día rodeado de hombres que hablan de futbol y autos. Por ahora preﬁero este laburo”, comenta. El Pendejo es un pendejo caballero. Pasea con sus conquistas en el auto (siempre sentadas en la punta del asiento, para que no se active el sensor que botonea todo al jefe), invita helados, propone cervezas en la costanera. Es pillo pero respeta mucho. Cuenta sus historias como si eso de besar gente nueva todo el tiempo fuera una gimnasia: “Las salidas de los boliches son la muerte. Si no levantás algo ahí es porque estás meado por un elefante grande. Muchas veces me han pagado el viaje sin plata (guiño). Y bueno, uno tiene que aceptar. Es eso o nada”. “Otra cosa muy común es darle charla a las señoras de treinta y pico, cuarenta. Ahí tenés que ser como un

alumno, preguntarles cosas todo el tiempo y nunca hablar de vos. A eso me lo enseñó un compañero más grande. No sé bien qué les pasa por la cabeza, pero les gusta que les prestés mucha atención cuando hablan. Y si la hiciste bien, te terminan invitando a sus casas. Igual, las peores son las que tienen marido, no las que están separadas o divorciadas. Si supieran…”, concluye. CRISTIAN, EL TAXISTA MACRISTA Cristian en realidad no es Cristian. Pero sí es macrista. Antiperonista desde que tiene uso de razón, el hombre profesa un amor verdadero por la mujer en todas sus formas. Más que nada en el mundo, a él le gusta hablar de señoritas. Y si es con señoritas, mejor. “Son lo mejor que hay en la vida, viejo. Todas son diferentes, todas tiene algo especial. Los hombres tenemos una suerte increíble”, dice. “Para mí la mujer maneja siempre la situación. Como que te hace creer que vos controlás todo, pero ella te enrosca, en el buen sentido lo digo, y vos no te das cuenta”, reﬂexiona Cristian. Y agrega: “A veces la situación es complicada, si está casada, por ejemplo. Pero bueno, se pueden tener salidas a lugares donde no haya mucha gente: un picnic en alguna plaza de las afueras de la ciudad, un trago en Justo Daract o en Fraga, no sé. Lo importante es que ella sepa que uno quiere hacerla sentir bien un rato”. “Otra cosa: no sabés cómo ganás con las minas hablando del Papa. Sí, cagate de risa, pero es así. No con todas, obviamente, pero creo que Francisco genera algo muy lindo en la gente, como que se pone contenta”, reveló Cristian, con tono de broma pero hablando en serio. El trabajo arriba de un auto tiene sus buenas y malas épocas, pero los tres entrevistados coinciden en que el tema 'mujeres' es una inversión que siempre está en alza. Son víctimas del trabajo informal, de la explotación laboral y se fuman el mal humor de la ciudad de una sola pitada. Eso sí, hay un momento en la noche en que juegan a ser reyes por un rato. Y lo son. 11

TAPA

La generación “redes sociales” ha cuestionado todo, hasta los Beatles. Pero rara vez se ha cuestionado a David Bowie. Si una historia sobre morir completamente solo en el espacio o el piano inicial de 'Life on Mars?' no emocionan a una persona a la que le guste la música, quizás no haya nada que lo haga. Pero hay diversas formas de emocionarse, una de las mejores es de felicidad. Y Bowie lo ha logrado muchas veces a lo largo de su carrera con un repertorio completamente vibrante. Pudo entusiasmar a varias generaciones: a los que tuvieron la suerte de ver durante los 70 cómo una obra maestra sucedía a otra, desde las más directas

como “Ziggy Stardust” o 'Hunky Dory' a las más experimentales, como 'Station to Station', dejando un tendal de clásicos que han alimentado compilados, películas, ﬁestas y los mejores bares del mundo; también a los que lo conocieron con los singles de 'Let's Dance' en los 80; a los que celebraron como adolescentes su 'The Buddha of Suburbia' en la última década del siglo XX; y a los que hoy rondan los 30 pero gracias a esa máquina del tiempo que es internet se 'bien-fumaron' toda su discografía. Los maravillosos 70's. 'The Man who Sold the World' supone la decidida entrada por la puerta grande

de Bowie en el rock y, por ende, en su gran década. Pero ya nos anunciaba su instinto mutante cuando, apenas un año después, se desmarcó del hard rock cuadrado, lanzando 'Hunky Dory', todo un mosaico de rock, pop y folk que se convirtió en su primera obra maestra. Desde entonces ya nadie va a olvidar cómo sus canciones cambiaron el mundo. Por sus conceptos, por sus melodías, por sus estructuras, por lo maravillosamente g rabadas que estaban aquellas composiciones con Ken Scott, Brian Eno, y Tony Visconti, en contraste con las precipitadas y ya nada meticulosas producciones que circulaban. 13

TAPA duda, uno de esos álbumes básicos para hablar de la evolución de la música moderna y uno de los más grandes logros del genio británico. Su histórico aporte musical está fuertemente cimentado sobre el poder de su obra visual, que ha contribuido tanto como sus canciones a convertir a Bowie en el ícono de la cultura popular de las últimas cuatro décadas que es y seguirá siendo. La melena ensortijada de aquella primera aparición televisiva (si aún hoy impacta, no podemos Basado en el concepto de una estrella de rock bisexual llegada de Marte para salvar a la Humanidad de una próxima extinción, Bowie lanza el mítico 'The Rise and Fall of Ziggy Stardust and The Spiders from Mars' (1972), volviendo a desmentir toda previsión razonable, para llegar así al álbum más compacto y concreto de su carrera. “Un gran éxito c o n l l e va u n a g r a n responsabilidad”, eso decía Spiderman, ¿no? En esa estaba Bowie en 1973. ¿Cómo matar a 'Ziggy Stardust'? ¿Cómo no quedar convertido en un cliché? ¿Cómo superar esa obra monumental? La respuesta sería 'Aladdin Sane', uno de sus discos más controvertidos pero, sin duda, una absoluta obra maestra. Fue una lectura futurista de la temperatura social en EEUU y Europa. A mediados de los 70 coqueteó fuerte con el soul, ganándose el apodo de Duque Blanco. 'Station to Station', de 1976, es la máxima expresión de ese período. Pero con ese disco moriría un Bowie y nacería otro: llegaba la 'Trilogía berlinesa'. En 1977 ocurre el primer salto verdaderamente sin red del músico: su disco 'Low'. El contacto con el 'kraut rock' de Can y Neu!! (esa vanguardia alemana que por primera vez tomaba las máquinas, y el recién inventado sintetizador, para crear música), las grabaciones en Berlín y la inﬂuencia y colaboración del ex Roxy Music Brian Eno, fueron cruciales. 'Low' es, sin 14

imaginar lo que debió suponer en 1970), la dorada etapa glam (el juego transgénero, la androginia y el maquillaje circense han sido desde entonces un símbolo) y la no menos teatral época berlinesa, conforman uno de los episodios más brillantes de la Historia del Pop. Cuando los treintañeros abrimos los ojos al mundo, en los 80, David ya era un ícono y, aunque aún no lo sabían sus contemporáneos, ya había entregado sus álbumes más legendarios. De hecho, esa década, pese a ser nada menos que la era de 'Modern Love', 'Blue Jean', 'Ashes To Ashes', 'Let's Dance'…, se llevaría unos cuantos palos por parte de la crítica por discos como 'Tonight' o 'Never Let Me Down'. Sin embargo, el tiempo ha convertido a aquellos años en otro nu e vo h i t o d e s u siempre mutante carrera. Su talento y su instinto le permitieron perpetuarse en la mente de nuevos jovencitos y jovencitas y, otra vez, lo logró en buena medida gracias a su faceta visual. Como si fuera sabedor de que había quemado una fase creativa inigualable, Bowie apostó sobre todo por la imagen como plataforma para trascender y calar a través de un formato en imparable pujanza en la industria: el videoclip. En los 80 Bowie leyó perfectamente el potencial narrativo y la capacidad del clip para dejar una nueva impronta a toda una generación. Y lo usó como pocos lo habían hecho hasta entonces, y de forma magistral: el clown postnuclear de 'Ashes To Ashes'; el músico ambulante tocando en un sudoroso antro con guantes blancos de 'Let's Dance'; las escenas de sexo interracial en la playa de 'China Girl'; los desatados movimientos junto a Mick Jagger en 'Dancing In The Streets'… Una colección de imágenes que logró perpetuar su inﬂuencia y que aún hoy se percibe con fuerza en el imaginario popular.

TAPA

También en los 80 David apostó fuertemente por su carrera como actor. Tuvo papeles importantes en 'Feliz Navidad, Mr. Lawrence', 'El ansia' (ﬁlm de Tony Scott en el que formaba un mítico y vampírico trío sexual con Susan Sarandon y Catherine Deneuve), 'Cuando llegue la noche' (de John Landis), 'Absolute Beginners' (un musical con canciones compuestas por él) y 'La última tentación de Cristo' (donde interpretaba a Poncio Pilatos). Sin embargo, su papel más icónico, por diversos motivos, fue el de Jareth, el rey duende, interpretado en 'Dentro del Laberinto', de Jim Henson. La película, una superproducción que resultó ser un fracaso de taquilla en su momento de estreno, se fue convirtiendo poco a poco en una película de culto en las repisas de los videoclubes. Los 90's, como no podía ser de otra manera, fue la década del coqueteo electrónico. No le fue nada difícil, ya en los 70 lo había hecho, cuando muchas de las incipientes estrellas de la electrónica aún no habían nacido. Bowie exploró nuevas direcciones con The Buddha of Suburbia (1993), la banda sonora de la adaptación para una serie televisiva basada en la novela de Hanif Kureishi. Contenía algunos de los nuevos elementos presentes en Black Tie White Noise y signiﬁcó un cambio hacia el rock alternativo. Un año después se reencontraría con Brian Eno, para fabricar el industrial Outside (1995), que fue inicialmente concebido como el primer volumen de una narración no lineal sobre arte y asesinatos. Luego vendría los 2000. Un disco, canciones sueltas y varios años de silencio. Pero Bowie siempre ha mirado hacia el

futuro, y eso nunca fue una cuestión meramente estética. Hasta hizo de su muerte una obra de arte. Será imposible hablar del recientemente publicado 'Blackstar' (tres días antes de morir) sin hablar de la muerte de David Bowie. Lo ha explicado el propio productor, Tony Visconti, que era uno de los pocos que sabía que iba a morir desde hace un año: “su muerte no ha sido diferente de su vida: una obra de arte. Hizo 'Blackstar' para nosotros, es su regalo de partida”, declaró. El vídeo de 'Lazarus' anticipaba de alguna manera su muerte, aunque no lo sabíamos (el cantante aparece por un lado agonizando, por otro escribiendo, mientras suenan frases como “look up here, I'm in heaven / I've got scars that can't be seen”). Que Bowie haya sabido crear belleza a partir de su propia muerte, anticiparla y retratarla con la cabeza completamente amueblada, logrando que lo que escuchemos obsesivamente, da una idea del tamaño de su inagotable talento y de su inimitable visión artística. Luego de esa muestra no hay nada que decir. Más claro, agua.

TEXTO

CANDIDATA AL BALDÍO por JENNO AMOR Aterradoramente vulnerable, de tersura juvenil, picante. Mostra en un mundo post transgénico. Seducida por la plenitud de una toallita que compró en el supermercado chino con un itinerario sórdido. La pizza le chorrea del bolsillo en el club con nombre de reptil. Aterciopela las manos con crema sin sentido del espacio, bailando de arquitectura y brillantina. Supersalvador el Jhonny Bravo cuyano, invita a ser modernos y perecederos, promete ser liviano, antisudoral. Recibe órganos hechos en macramé por correo como un adefesio dispuesto en forma sombría y chic. Luce cómoda en el taxi con olor a ojotas, contemplando publicidad camino a la dársena. Centro desexista Aprendizaje Universitario (CAU) Sin que las mejillas se le paspen,"Eva Perón" Fundación Puntana vuela remotamente para humanizarse Av. Mitre 630. Villa Mercedes (San Luis) y se quita los breteles confeccionados en tul de industria nacional.

ENTREVISTA

SOBRE LA LLEGADA A MÉXICO “Lo de venir a México surgió por el hecho de pulsar un viaje a través de la música. Estábamos tocando con un amigo por el sur de Argentina y Chile, nos escribió un argentino que vive en acá, nos vinimos y armamos el trío “Pachamamushka”. Estuvimos una semana en el DF y nos vinimos a Nayarit. Tocábamos mucho en la calle y algunos lugares que nos contrataban, era temporada baja lo que lo puso desaﬁante. Cada uno siguió su rumbo, yo me quedé porque buscaban una cantante en un grupo, de ahí surgió “Panta Rei”, una agrupación con músicos de distintos países. Con el tiempo fui mostrando mis canciones, vendiendo mi disco “El viaje lento”. Armamos el proyecto con músicos del norte del país y viajé hasta allá, a Hermosillo, Sonora. Realizamos varias presentaciones, grabamos un video que está en proceso. Luego nos llamaron de un estudio de Cuernavaca, “Soga Recording”, para tocar en la inauguración del espacio, la gente de ahí se copó con nuestra música y nos ofrecieron grabar un disco con mis composiciones, disco que está en proceso. Y como por ahora es un laburo independiente no paramos de chambear, como le dicen acá, a los toquines 20

para costearnos los viajes. De ahí surgió la posibilidad de sacar un video, elegimos una de mis canciones, “Bailar”. Se ﬁlmó cuando estábamos grabando. Ahora regresamos a San Francisco, Nayarit para tocar durante la temporada, fusionamos los dos proyectos “Panta Rei” y “Guadalupe Mediavilla”. Trabajamos colectivamente y sobre todo aprendemos mucho unos de otros, conviviendo, compartiendo viajes, conocimientos musicales, creaciones, arreglando canciones propias e interpretando música de diferentes partes del mundo. La música no tiene límites cuando uno se sensibiliza con ella y navega en ese mar de los sonidos y las palabras, estés donde estés, que te sea el medio para liberar todo tipo de angustia o animarte a decir lo que sentís o pensás a tu manera.

ACTUALIDAD MUSICAL Las vivencias de este viaje me han inspirado mucho. Continúo componiendo, últimamente más en guitarra. Encontré el acordeón que soñaba hace tiempo y estoy cantando mucho. Con los músicos con los que estoy tocando experimento con total libertad la

“¿por qué no atreverse a vivir de lo que uno sabe internamente es para lo que vino al mundo y entregarse con plena confianza a lo que se presenta y darlo todo? Apagar la tele y vivir tu propia película”. improvisación, les hacen arreglos a mis canciones, los estilos que manejamos son diversos (Latinoamericanos, Klezmer, Gypsy…).

SOBRE EL PAÍS México es un país que llamaba mi atención hace tiempo. Por su diversidad, su cultura, la música, los tejidos, las comidas, las cantinas y la picante forma de manifestarse. Estuve en ceremonias de conocimiento ancestral Huichol y del Amazonas. Digo que la vida es un viaje que hay que experimentar día a día, llena de realizaciones como de fracasos, un aprendizaje intenso y ¿por qué no atreverse a vivir de lo que uno sabe internamente porque vino al mundo y entregarse con plena conﬁanza a lo que se presenta y darlo todo? Apagar la tele y vivir tu propia película.

ENTREVISTA

PANTA REI La banda está compuesta por músicos de México, Estados Unidos, Argentina y, hasta hace poco, Canadá. Saxo, guitarras, percusión y canto forman esta mini orquesta internacional. O cuando me invitan a tocar otros músicos, me dicen que aprendo rápido sus canciones. Hay gente que me dice que mi voz les recuerda a otras cantantes, me piden que saque canciones, me dicen que canto con el alma o que la música que hago es medicina. A veces la bailan, otras veces solo la escuchan, me dicen que se imaginan lo que dicen las

letras y las interpretan a su manera. A la gente le llama la atención que como argentina me llame Guadalupe, porque aquí hasta las taquerías llevan de nombre “lupita” (risas). Hay un documental que se llama “Hecho en México” y explica muy bien la relación espiritual que tienen los mexicanos con la virgen de Guadalupe. Seas o no seas católico, va mas allá de la religión, que genera divisiones.

lugar en un lugar, no tengo un lugar propio. Mi casa es una mochila, el acordeón, una guitarra, un par de hilos, libros. A veces me toca dejar cosas que les sirven a otros y viceversa, el desapego es un gran maestro y el miedo es un pinche tirano que a veces te juega unas malas pasadas. El viaje tiene sus vaivenes, sus momentos mágicos y sus momentos 'depre', sus encuentros y sus despedidas. Y uno sigue sacando letra y música dándolo todo.

APOSTARle A UNO MISMO El viaje se extendió porque hay mucho para dar y para recibir. Imaginé vivir de la música y lo estoy haciendo. Vivo austeramente, me muevo mucho de

RELATOS

PIENSA EN RATA BLANCA Wascapp Cuando creas que tu trabajo es una mierda, piensa en Rata Blanca. Ellos tienen que tocar ’Mujer amante’, la leyenda esa del hada y cerrar con ’Guerrero del arcoiris’ todos los días de su vida hasta que llegue la muerte o la jubilación o lo que mierda sea primero. En centros vecinales y clubes de bochas; en ocasión del cumpleaños del hijo del intendente de Despeñaderos, en los carnavales de Serrazuela o en la Fiesta del Queso Rallado de Oncativo. Y sacarse fotos con clase tras clase de metaleros feos FEOS con buzos polares, que te abrazan, te tocan el pelo y te pasan un porrón hirviendo chupado por las 150 personas que fueron a verte. Todo mientras se te hierven los huevos tocando ’Preludio obsesivo’, que rebota mágicamente en la chapa de l tinglado de una fábrica recuperada. Y cerrás los ojos recordando ese día en que tu padre te dejó en la puerta del conservatorio, y de pronto una brisa fresca te acaricia la cara hasta que ese orco agarrado a una valla, gritando “CHICO CALLEJERO! TOCÁ CHICO CALLJERO!” te devuelve a esa realidad en donde La Beriso, que terminaron el secundario a distancia, llena un Estadio Único de La Plata.

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