Numero 5 NUMERO 7
29 Septiembre 02 2014 ABRIL 2015
Revista de cultura, arte, historia y tradición
de los pueblos del Bajo Tietar en Avila
Guisando - Arenas de San Pedro - Candeleda - El Hornillo - El Arenal - Poyales del Hoyo Mombeltran - Cuevas del Valle - San Esteban del Valle - Santa Cruz del Valle - Villarejo del Valle El Raso - La Parra - Hontanares - Ramacastañas Dirección: San Nicolás, 10 28912 Leganés (Madrid)
Revista no dependiente ni adscrita a ninguna organización ni entidad privada o pública Revista de divulgación cultural y sin ánimo de lucro. Libre de publicidad o patrocinio. Director y Editor: Miguel Camacho Camacho Redacción: Jesús Jara García, Julio Fernando Palacios García, Daniel Peces Ayuso, Cristina Nogal Blázquez, Fidel Jara Tiemblo, Miguel Camacho Camacho, Juan Manuel Jara Garro. Colaboradores: está abierta a todo tipo de colaboración y se tendrán en cuenta todos los artículos y aportaciones que se realicen dentro del ámbito de la temática de la revista. DEPOSITO LEGAL: Solicitado
Remitid colaboraciones a la siguiente dirección:
ABC-07.08.1968
F. nacimiento: 28 de marzo de 1515, Gotarrendura F. muerte: 4 de octubre de 1582, Alba de Tormes
ABC-14.09.1979
Daniel Peces Ayuso. Folclorista Se forma en el seno de una familia que durante varias generaciones viene manteniendo la transmisión de la tradición oral y musical castellana y extremeña. Dedicando toda su vida y esfuerzos a esta labor. Herencia inestimable recibida directamente de manos de los mayores. Su familia ha sido y es referencia obligada para musicólogos, folcloristas e investigadores. Gracias a las grabaciones y trabajos de campo realizados por los primeros investigadores: García Matos, o Kurt Schindler entre otros. En cuyas labores de recogida de información musical y coreográfica, participaron e intervinieron su padre Daniel Peces Gutiérrez, y sus tías Teresa Peces Gutiérrez y Amalia Pecci. Entre miembros de esta reconocida familia arenense. A lo largo de los años compagina el aprendizaje de la cultura tradicional de su comarca (Vertiente sur de la Sierra de Gredos o Valle del Tiétar) con el de las comarcas limítrofes. Siempre dentro del ámbito geográfico y cultural de las dos Castillas y Extremadura. Recogiendo, investigando, restaurando y retransmitiendo los más diversos aspectos de su cultura tradicional: danzas, instrumentos, ritmos, trajes, canciones, fiestas, ritos, costumbres, ceremonias, creencias, simbología, juegos, gastronomía, cuentos, dichos, leyendas, historia, arqueología, clima, recursos naturales, literatura, cancionero…. Trabajando todos los aspectos de las manifestaciones tradicionales, de la tradición oral. Sin olvidar; el origen, contexto, sentido o función de las mismas.
En este año 2015 Daniel Peces recorre nuestra geografía regional mostrando lo que queda de la vieja música tradicional y el trabajo de los que están en la tarea de recopilar, tratar y difundir nuestra herencia musical presentando el programa “Con la música a todas partes” en la televisión autonómica de Castilla y León. Como no podía ser de otra forma, por su historia, su tradición y la importancia de su folclore le ha tocado el momento de grabar en Guisando. Dicha grabación se produce el 7 de marzo y se graban varios bailes mostrando jotas, rondeñas, y rondones. También se graban varias escenas para sus presentaciones y entrevistas a los componentes de los bailes y músicos. Se resaltó la autenticidad de su folclore y se hizo el programa con las mujeres que en su juventud habían sido alumnas de quien también fue un buen folclorista, el Tío Eugenio Jara Garro.
El Deporte, la Cultura y los Guisanderos… Nos empezamos a mover en esto de “la cultura”, despacio pero seguros, deporte, música, arte, premios, etc. nos están devolviendo parte del protagonismo perdido. Me gustaría empezar por el grito de guerra: “Yo soy del C.D. Guisando”, ¿y tú?, en estos tiempos tan globalizados, palabra de moda, me produce una especial satisfacción tener un equipo de futbol, pero de futbol de verdad, donde luchamos por sobrevivir y por hacernos un hueco en la historia. La promoción del pueblo es impresionante, cada semana estamos en boca de todos, además de en los medios; resultaba extraño no contar con un equipo y vamos camino de un lustro con un equipo en la provincial, se trata de sobrevivir que no es poco como en todos los pueblos (grandes y pequeños) a lo que sumamos la aceptación entre los aficionados, que está siendo muy buena. No trato de destacar a nadie, todos son protagonistas tanto los que lo iniciaron como los que siguen, es muy complicado gestionar cualquier cosa y equipos de futbol más todavía, sobre todo en un pueblo pequeño, gracias a todos por dejaros parte de vuestra vida por GUISANDO, merece la pena intentarlo. Los comienzos fueron difíciles, adecuación de instalaciones, búsqueda de patrocinios, socios, colaboradores, voluntarios, y el apoyo del Ayuntamiento que siempre dentro de sus posibilidades ha apoyado al equipo, la inversión merece la pena, todos sin distinción son grandes y les ha unido el amor en mayúsculas por su pueblo, GUISANDO. Además desde los inicios son pioneros en actividades solidarias, recogida de juguetes y comida para los más necesitados (que luego aportan a caritas), partidos con niños del pueblo contra otras localidades y defensa de un espacio limpio y con valores. También han surgido grupos musicales como “Los Jerretes”, que ¡cómo me gusta verlos rondar por las calles!, Grupo de baile de Jotas, la Asociación de Jubilados no para de ofrecer actividades, Miguel Camacho “Joyanco”, Fernando Palacios y Jesús Jara Chuito con sus inigualables apuestas por la cultura y la historia además de intentar recuperar nuestra memoria pasada a golpe de foto y genealogía, nuestros queridos José Miguel y Eduardo Blazquez Mateos luchando por hacer un hueco en la historia de nuestro pueblo, tanto con los impresionantes galardonados en los “Premios Gredos” como la transmisión cultural de Eduardo con su MicroMuseo, trayendo además cursos de la Universidad Complutense al pueblo. Parece que hay vida más allá y despertamos por transmitir valores culturales, cualquiera que sea el medio, todo esto no es fruto de un día, ni de un capricho, el caso es empezar y dejar plantada la semilla para que todos los que vengan se sumen al proyecto. Me siento orgulloso de ser GUISANDERO, de sentir el pueblo, de ver como poco a poco vamos saliendo del letargo y las cosas se van cuajando no siendo fruto de una ilusión. Todos debemos apoyar estas iniciativas para que el pueblo no muera en nuestra memoria y tengamos algo que contar a nuestros hijos además de los cuentos populares. Fidel Jara Tiemblo
LA DIÁSPORA DE LOS CABREROS AL OESTE por D. Fernando Palacios Hacia 1860 Juan Blázquez-Gabriel junto a su esposa Juana Retamal e hijos recogen sus avíos y ganado y se instalan en una enramada arrendada en el término de Candeleda. En Guisando no hay suficientes pastos para todas las cabras de la villa. Las leyes de protección y fomento de montes y bosques de la época para conservarlos y evitar la falta de combustible y maderas para la construcción civil y naval hacen que muchas zonas de pastos se repueblen por pinos. Por otro lado los procesos desamortizadores de las autoridades ponen en peligro vías pecuarias y acaban con muchos pastos gratuitos desde tiempos remotos en la Campana de Arenas (a la que pertenecía Guisando) y “obligan” al pueblo a arrendar sus pastos comunes, a exagerar el tamaño de su monte comunal y a la reconversión económica forestal del mismo para evitar que sea vendido gran parte de su término. Por lo tanto el ganado empieza a ser incompatible con el monte pinar porque las cabras se comen las nuevas plantaciones y los pastores queman el terreno para regenerar sus pastos. Desde tiempos inmemoriales los guisanderos han tenido ganado, caprino fundamentalmente. Un tercio de ellos son propietarios de rebaños, pastores o zagales. En los pastos comunes del término de Guisando solo se pueden meter ya 500 cabras, cuando existe un número de cabezas que multiplica por diez o veinte esa cantidad. En los antiguos pastos comunes de la Campana de Arenas solo hay conflictos entre administraciones locales por los derechos de su propiedad y por el cobro del arrendamiento de los mismos. Otros ganaderos continúan la emigración hacia el oeste como Pedro Galán y su mujer Dorotea Grande, Tomás Delgado y su esposa Rosario Delgado o Pedro Garro y Natalia Fraile. Candeleda ha visto la oportunidad de tener nuevos ingresos con el arriendo de sus pastos para cabras. En tan solo 10 años hay una quincena de cabreros de Guisando asentados en la villa candeledana. Entre ellos está Deogracias Garro y su mujer Marcela Jiménez que tuvieron más de 60 nietos y de ahí el cantar: Los Garros son muchos Garros que vinieron de Guisando a cuidar bien su ganado entre Candeleda y el Raso Solo en el año 1880 se instalaron 7 cabreros en el Raso y Candeleda y ese mismo año Cirilo Fraile fue el primero que se afincó en Madrigal de la Vera. En 1890 Isidoro Blázquez Garro “Siorete” marcha con sus cabras también hacia Madrigal, y luego se asienta entre otros sitios en la Garganta Tejea o en El Enebral de Candeleda. También se habían ido con su ganado sus hermanos Antolín, Pedro y Serapio. Por su conocimiento de la sierra y caza y control de machos monteses Isidoro fue nombrado en 1905 guarda mayor del Coto Real de Gredos. Como no sabía ni leer ni escribir, para suplir estas carencias fue nombrado también guarda su cuñado Jacinto González Jiménez “Jacintón” que sí sabía. También fueron designados guardas su hermano Antolín Blázquez, Román Retamal Blázquez y Andrés Retamal Garro. Todos ellos cabreros naturales de Guisando y pastando con su ganado en los términos de Candeleda y Madrigal. Aunque ellos eran vigilantes de las monteses, también hubo problemas de caza furtiva de las mismas precisamente con otros cabreros guisanderos. Otros grupos de hermanos también se marcharon cada uno con sus rebaños como Benito, Gregorio y Valeriano Carrera Delgado; Amalio, Melchor y Tomás Delgado Blázquez; Casildo, Mariano, Saturnino y Vicente Fraile Delgado; Aquilino, Dimas y Martín García Garro; Juan, Vicente, Tomás y Petronilo Garro Garro; o Francisco, Juan y Mariano Retamal Mateos. En 1900 unas 75 familias guisanderas estaban la mayoría con su ganado en Candeleda y el Raso (el 90% de ellas), Madrigal y Villanueva de la Vera (Cáceres). El primero que se aposentó en este último pueblo fue el matrimonio compuesto por Pablo de Segovia Grande y Santa Serrano. En los primeros 20 años del siglo XX otra veintena de familias también emigró con su ganado hacia los pastos del oeste y ya un tercio de ellas se establecía en Madrigal y Villanueva. Hacia 1910 Juan Jara y su cuñado José Nogal se quedaban con sus cabras en Castañar de Ibor (Cáceres) buscando comida para ellas más al sur de la Vera. Así sucesivamente hasta la década de los 80 del siglo anterior en la que otra docena de ganaderos marcharon con sus animales para ganarse el sustento.
Probablemente el último cabrero que se asentó en esas tierras fue Daniel Blázquez y su mujer Carmen. En 100 años, desde el último tercio del siglo XIX, se puede decir que se marcharon un centenar largo de familias, el equivalente a unas 500 personas de origen guisandero, mayoritariamente ganaderas del caprino, el 80% a Candeleda, muchas en el Raso, donde participaron en la fundación de éste como núcleo urbano y donde se dieron matrimonios mixtos sobre todo con gente de El Arenal y el Barranco de las Cinco Villas. El 15% se estableció en Madrigal de la Vera y el resto a Villanueva de la Vera y Castañar de Ibor. No hay que olvidar que también cabreros de Guisando se quedaron en la parte norte de la sierra y otros sitios como Hontanares, Poyales del Hoyo, Navalcán y comarca de la Jara (Toledo) o Talayuela (Cáceres), pero masivamente fue hacia las zonas anteriormente citadas y objeto de este artículo. En el censo a 31 de diciembre de 1910 facilitado por Arcadio Blázquez Sánchez, de residentes en Candeleda nacidos en Guisando hay unas 300 personas de origen guisandero de los que apenas la cuarta parte sabía leer y escribir, y suponían entre un 7% y un 8% de la población candeledana. Los guisanderos que se iban marchando con sus cabras, no siempre permanecían en el mismo sitio. De hecho podían estar unos años con sus enramadas en el Raso, luego en Madrigal, volver al Raso, estar en la garganta Lóbrega o “Lóbriga” del término de Candeleda, en majadas y puestos de verano como el Cimorro, Hocino, Cereceda, el Covachito, Carcajón, Las Palas o la majada del Castaño, donde por cierto los cabreros guisanderos accedían a la Lóbrega directamente por la sierra de Guisando; Algunos regresaban a Guisando con toda su familia, otros retornaban pero todos o algunos de sus hijos se quedaban. Debido al alejamiento de sus majadas de los núcleos urbanos, formaron una sociedad “semicerrada”, en la que mantenían estrechamente sus lazos familiares con su localidad de origen y en la que los propios hijos de los cabreros, aunque ya se habían criado o habían nacido fuera de Guisando, se casaban con gente de su pueblo oriundo incluso varias generaciones después o con hijos de otros cabreros sin mezclarse demasiado al principio con las poblaciones de acogida. En la actualidad todavía se dan casos de candeledanos que tienen todos sus ascendientes con origen biológico guisandero, a pesar de llevar en Candeleda cinco generaciones. Es decir, todos sus 16 tatarabuelos eran de Guisando. Además era frecuente que una pareja de hermanos se casara con otra pareja de hermanos y se dieran muchas bodas entre primos hermanos, que aparte de preservar la herencia y los apaños domésticos, eran consecuencia de relaciones sociales muy estrechas en aquellas majadas apartadas. No todos los emigrados fueron cabreros, otros se dedicaron también al ganado de vacas o de ovejas, pero los había también labradores y jornaleros. Como caso curioso comentar el de Quiterio Blázquez Galán que a sus 17 años fue llamado por los cabreros guisanderos establecidos en El Raso para que diera clase a sus hijos a pesar de no tener titulación oficial de maestro, por lo que El Raso le dedicó años más tarde una calle. Para terminar se expone un gráfico con la emigración de familias por años y zonas, y una tabla cronológica con datos más concretos, que han sido elaborados a partir del censo de población en Candeleda a 31 de diciembre de 1910, de la Enciclopedia Arbillas de la web www.joyanco.com de Miguel Camacho y del archivo municipal del Ayuntamiento de Guisando en el que los libros de actas de la época recogían la renuncia de la vecindad de muchos de estos cabreros por llevar residiendo en otra localidad con casa abierta más de 6 meses. A veces no se les aceptaba dicha renuncia porque tenían cargas que solucionar con el ayuntamiento de Guisando. La tabla seguro que contiene errores, pero se ha tratado de que fuera lo más exhaustiva posible.
AÑO 1860 1860 1860 1863 1865 1865 1867 1867 1869 1870 1870 1870 1870 1870 1870 1870 1870 1872 1880 1880 1880 1880 1880 1880 1880 1880 1880 1882 1883 1884 1884 1885 1886 1886 1888 1888 1888 1890 1890 1890 1890 1890 1890 1890 1890 1890 1890 1890 1892 1894 1895 1897 1897 1898 1898 1898 1898 1898
CABRERO/A Juan Blázquez-Gabriel Pedro Galán Jara Eugenio Jiménez Delgado Cesárea Carrera Delgado Tomás Delgado Blázquez Eladio Rodríguez Blázquez Juan Carreras Delgado Antonio Sánchez García Pedro Garro Fraile Amalio Delgado Blázquez Mariano Fraile Blázquez Vicente Fraile Delgado Domingo Galán Hernández Deogracias Garro Fraile Álvaro Retamal García Anselmo Retamal García Luis Serrano García Francisco Jara Tiemblo Alejandro Blázquez Barrero Luis Blázquez Jara Benito Carrera Delgado Gregorio Carrera Delgado Valeriano Carrera Delgado María Delgado García Benito Fraile Blázquez Cirilo Fraile de la Riva Blas Galán Serrano Nicolás Delgado Delgado Pedro Blázquez Serrano Casildo Fraile Delgado Felipe Jara Galán Jacinto González Jiménez Cecilio Blázquez Nieto Anselmo Vaquero Fraile Remigio Barrero Retamal Melchor Delgado Blázquez Román Retamal Blázquez Quiterio Blázquez Galán Isidoro Blázquez Garro Serapio Blázquez Garro Guillermo Delgado Fraile Mariano Fraile Delgado Aquilino García Garro Julián Garro Blázquez Tomás Garro Garro Casiano González Blázquez Román Jara Jara Magdaleno Suárez Tomás Inocente González Jara Bernardo Blázquez Jara Francisco Blázquez Blázquez Lucio Blázquez Fraile Andrés Hernández Delgado Pablo Fraile Jara Tomás Garro Jara Juan Hernández Delgado Manuela Hernández Delgado Alfonso Nogal Alameda
CONYUGE
Juana Retamal García Dorotea Grande González María Tiemblo Retamal Mª Rosario Delgado Fraile
Natalia Fraile Blázquez Juliana García Jara Martina Blázquez Blázquez Marcela Jiménez Delgado
Ángela Garro Fraile Valentina Jara Galán Eusebia Blázquez Hdez Francisca Fraile Blázquez
Marcela Sánchez Blázquez Anselma Tomás Garro Catalina Fraile Jara Anastasia González Jara Segunda Blázquez Garro Francisca Tomás Garro Primitiva Fraile Delgado Nicasia Blázquez García Catalina Blázquez García Nicolasa Garro Blázquez Eugenia González Fraile Casimira Rodríguez Serrano María Garro Garro María Jara García Romana González Fraile Isabel García Fraile Paula Carrera Delgado María Serrano García Eugenia Blázquez Blázquez Juana Blázquez Jara Remigia González Galán
Rosa Blázquez Blázquez
LUGAR Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Madrigal Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda -Madrigal
Madrigal Candeleda-Raso Candeleda-Raso Madrigal Candeleda-Raso Madrigal Madrigal-Candeleda
Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Madrigal Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso
AÑO 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1900 1904 1905 1906 1906 1906 1907 1909 1909 1909 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1910 1920 1920 1920 1920 1920 1920 1920 1930 1930 1930 1940 1940 1940 1950 1950 1950 1950 1950 1950 1960 1970
CABRERO/A Pedro Blázquez Garro Magdaleno Blázquez Vadillo Saturnino Fraile García Dimas García Garro Martín García Garro Lucio García Jara Juan Garro Garro Vicente Garro Garro Petronilo Garro Garro Joaquín Jara Jara Dionisio Pinar Garro Francisco Retamal Mateos Mariano Retamal Mateos Tomás de Segovia Grande Pablo de Segovia Grande Francisco de Segovia Grande Gregorio Blázquez Jara Natalio Jara Chico Marcelino Arbós González Antolín Blázquez Garro Camilo Serrano Garro José Garro Grande Nicasio Blázquez Garro Francisco González Rodríguez Lorenzo Jara Galán Juana Carvajal Fraile Dionisio Delgado González Eleuterio García González Marcos García Jara Víctor González Vaquero Basilio Jara González Juan Jara González Lorenzo Jara Jara José Nogal Alameda Francisco Pérez García Juan de Mata Retamal Mateos Andrés Serrano de Fernando Fermín García Blázquez Apolinar González Jiménez Vicente González Serrano Isidro Jara García Julián Jara Garro Justo Palacios Garro Pedro Retamal Garro Fermín Grande González José Nogal Fraile Julián Retamal Blázquez Roque Carvajal Carrera Baldomero García González Félix Nogal Fraile Francisco Fernández García Felipe García González Leandro García González Magdaleno Retamal Blázquez Pablo Retamal Blázquez Simplicio Retamal Blázquez Martín Jara García Daniel Blázquez Fraile
CONYUGE
LUGAR Candeleda-Madrigal
Ramona Blázquez Barrero Agustina Carvajal Carrera María Fraile Jara Casimira Blázquez Jara Micaela Retamal Mateos Blasa Jara Jara Leandra Blázquez Rodríguez Nemesia Retamal Mateos Gertrudis González Fraile Antonia Retamal Garro Santa Serrano Blázquez Simona Blázquez de Fernando Juliana Blázquez Jara Josefa González Jara
Candeleda-Raso Candeleda-Madrigal-Villanueva
Madrigal Madrigal Madrigal-Candeleda
Madrigal Madrigal Raso-Madrigal Madrigal Madrigal Madrigal Candeleda-Raso Candeleda-Raso Villanueva Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda -Madrigal
Candeleda-Raso Dorotea Delgado Fraile Francisca Garro Retamal Petra Jara García Luisa García González Hipólita Blázquez González María Garro Pinar Bruna Blázquez Blázquez Ángela González Blázquez Isabel Grande Jara Vicenta Serrano Carvajal Paula Jara González María Garro Grande Claudia Jara Jara
Felisa Fraile Blázquez Marciana Blázquez González Nicolasa Jara Grande Justa Serrano de Fernando Margarita Nogal Retamal Emiliana García González
Justina Delgado González Valeriana Blázquez Grande Petra González Blázquez Fidela Delgado Blázquez Valeriana Garro Fraile
Carmen Blázquez Gómez
Candeleda-Villanueva
Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Madrigal Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Madrigal
Castañar de Ibor Candeleda-Madrigal-Villanueva
Castañar de Ibor Candeleda-Raso Madrigal-Villanueva
Candeleda-Raso Candeleda-Raso Madrigal Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Villanueva
Villanueva Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso Candeleda-Raso
Comenzamos una serie sobre la vida y tradiciones de nuestros cabreros de la Sierra de Gredos. Gracias a la colaboración de nuestro paisano arénense Daniel Peces Ayuso.
EN LA MAJADA DE UN CABRERILLO… Por Daniel Peces Ayuso CAPITULO I Había una vez una familia que vivía en una choza al pie de la sierra. Cuidaban un pico de cabras guisanderas y dos vacas avileñas que uncían al carro o a la yunta del arado según se precisara. Pues en unos helechales que había en una alto collado, todos años los araba y abonaba para sembrar de forma alternativa, un año patatas y al otro centeno. De hecho tenía dos helechales cercados con un muro de piedras, ya que si algo hay en la sierra, es precisamente eso, piedras… así cada año sacaba para tener patatas en excedente, y centeno más que de sobra para sobre alimentar a las vacas, los terneros que pudieran darles (y les daban cada año una de ellas) incluso podían recebar los cabritos que se vendían muy bien siempre para estas fechas de la Navidad, ya que era y es el plato fuerte de la cena de Nochebuena o de la comida de Navidad. Los rebaños entre nuestros cabreros no eran solo de los padres o de los abuelos. Ya que era costumbre o mejor dicho ley entre ellos, que nada más nacer recibieran de sus padres al menos una chivata. Animal que como propietario de él, el niño o niña tenía que cuidar de él de forma especial desde apenas tener uso de conciencia. A partir de ese momento todos los chivos y chivas que pariera su cabra, serían propiedad de él, teniendo a muy temprana edad un pequeño reFamilia de cabreros en una majada en la Covacha baño con el que empezar a ganar hasta convertirlo en un buen pico…. Estas cabras que regalaban los cabreros a sus hijos, pastaban y triscaban junto al rebaño de sus padres hasta independizarse e irse no muy lejos a fundar una majada nueva con su yunta. De hecho ya se le habían casado tres hijos uno varón y dos muchachas preciosas que vivían a una legua la que más lejos, en los alto de un cerro orientado al medio día. La vida no era sencilla, había que ser además serrana hija y nieta de caberos para aceptar una vida. por lo general solas en medio de las montañas, entre los altos y desolados riscos de Gredos, y las dilatadas dehesas encantadas. Mientras sus maridos caminan todos los días sierra arriba, sierra abajo con sus cabras, mientras los días señalados preparan las tierras para sembrar y recoger luego. Pocos días del año bajaban a las aldeas, pueblos y villas de estas tierras, pero si bajaban sobre todo para las fiestas patronales, los mercados principales y las Navidades… y cuando las cabreras bajaban a los pueblos no había mujeres más hermosamente engalanadas, luciendo grandes pendientes de oro, collares y aderezos… con buenos pañuelos de me-
rino bordados con flores y ramos con pavas… y guardapies de buen pañodama adornados con tiranas o picaos… Pues aunque las cabreras vivían en chozas iguales a las que utilizaron los primitivos Vettones, con ellas no faltaba el o los arcas en los que bien doblada y tableada guardaban sus mejores galas, jotas o zapatos bordados. Y en una cajita de enebro labrada a punta de navaja por un cabrero, las horquillas, los alfileres, el broche y la botonadura de rica filigrana en plata. Y entre seda y seda hojas de tabaco y papel de seda, que solo se desdoblaba dos veces al año, una cuando se iba a lucir y la otra para el mes de marzo como venía siendo costumbre. Por fortuna esta familia no trabajaba para ningún amo o patrón. Un abuelo suyo si que hizo de gañán o criado trabajando con las cabras de otro y las suyas… Pero antes tenían que ajustar el trato que se hacía entre San Juan Bautista y San Pedro Apóstol, en junio, con el amo. Esto era saber cuánta comida le iba a dar, especialmente pan, vino, aceite, carne y el dinero a ajustar. Librar un día a la semana, poder llevar con el ganado del amo su propio ganado sin pagar nada a nadie, ya que los pastos si no se tenían se tenían que comprar… también tenían derecho a una parte de los cabritos paridos por el rebaño y a las asaduras cuando se sacrificaban, etc. Pero como os decía este no era el caso de nuestra familia de cabreros. Ya que eran los dueños no solo de sus ganados, sino de la tierra que ocupaban, más de diez hectáreas llenas de montes con robles, castaños, encinas, quejigos, madroños, jaras, brezos, orégano, tomillo, poleo, nogales, avellanos, higueras, cerezos, guindos, albérchigos, perahigos, cermeños, perales, caquis, camuesos, achufaifos, pinos, enebros, olivos… ya que el cabeza de familia era hijo y nieto único, por lo que herredó todas las tierras de sus padres y abuelos. Y al otro lado de la sierra en las navas de finas y frescas hiervas estivales, tenían otro tanto ocupando casi todo el tamo de un arroyo, tierras que recibió como dote la matriarca el día de su boda. De este modo, mientras el invierno y la nieve cae con fuerza al otro lado de la sierra, se desplazaban con todo lo que precisaban. Incluyendo el o los cerdos y las gallinas. Ya que en estos valles húmedos y templados, no faltan prados para triscar las cabras, ni el más duro de los inviernos. Regresando a la majada del otro lado de la sierra una vez derretidas las nieves, para aprovechar el pasto de estío insuperable en la vertiente del Tormes. Las majadas de ambos lados eran básicamente lo mismo. En el lugar dominante la gran choza con amplia estanza al la que no la faltaba un impermeable solombrajo de piorno. A un lado adosada la cuadra para las vacas y la caballería de tenerla. Y por detrás la enramada con el berengón en el que cerrar los cabritos cada noche. Al otro lado, cobijada del viento de poniente, el horno y bajo él, el gallinero todo cercado por un muro de piedra. No muy lejos la zahúrda, construcción que aún siendo para los cerdos, tenía la misma apariencia que los chozos con sus estanzas, solo que en tamaños más reducidos… tampoco faltaba sobre la corriente de un arroyo o sobrante de abundante manantial, la quesera. Construcción que era igual que la choza principal y que la zahúrda, solo que de tamaño intermedio. Las Majadillas - Pintor Martinez Vazquez
Nuestra familia además tenía unas sesenta colmenas de las que sacaban no pocos y dulces kilos de buena miel y cera de primera. Estas estaban un tanto retiradas, a unos doscientos metros del chozo y demás construcciones, primero se clavaban unas estacas de enebro en el suelo, para posteriormente fijarlas a estas “guíasbejeras”. Todos los abejales se protegían con un muro alto, ya que no son pocos los animales del monte que entrarían a las colmenas dando buena cuenta de la miel y de las abejas. Además antes hace no muchos años, aún había osos en estas sierras salvajes y hermosas. Una mañana de esas que precedían a la mudanza a la majada de invierno aquí e nuestro valle del Tiétar, el más pequeño de la ristra hijos que los cabreros tenían salió corriendo trocha arriba en busca de las cabras que solían enriscarse en una barrera a la que ni zorra ni loba podían hacer nada para llevarse una buena y de no ser por aquella risquera, una fácil cena. Nada más Cabreros de Guisando en el Puente de Abajo - Fotografía Ortiz Echague dejar atrás los últimos pinos y enebros, cargó la honda y la talega con guijos de afilado cuarzo blanco como la nieve que en el mismo camino había amontonado por las aguas torrenciales, esas que usan los caminos como lechos por los que deslizarse cuesta abajo en avalancha. Pero aquella mañana el agua estaba retenida entre los cristales de hielo azul como el cielo de la mañana. Hielo que parecía vivo, al estar cubierto por un terciopelo cristalino de escarcha afilada. Y a el sol le costaba asomar tras las montañas de Cabeza Aguda, pues un denso mar de nubes cubría por completo la hermosura del Valle. Tan solo los picos altos de las más gallardas montañas, aparecían como islas misteriosas al brillar resplandecientes, bajo la luz del poderoso sol. Islas como la barrera en la que el rebaño de cabras de aquellos cabrerillos, encontraba seguro refugio cada noche sobre todo un grupo de viejas cabras a las que costaba Dios y ayuda siquiera para ordeñar. De todos modos con ellas siempre quedaban a los pies del torreón pétreo Calcetines y Mediasnegras, dos de los seis mastines que guardaban sus cabras. Y lo hacían porque creían que las cabras eran una más de ellos. Para lograr este extraño y antinatural comportamiento, lo que se hacía era meter a los mastines cuando siendo cachorrillos, en el mismo corral que los cabritillos, de este modo y a base de mordiscos y topetadas se hermanan de tal manera que no dudan en dar la vida defendiendo a los que consideran sus hermanos… Continuará...
Relación de apellidos y nombres mas comunes de la base de datos de la Enciclopedia correspondientes a los datos de Poyales del Hoyo. Nombres usados y habituales antes de 1700 en la Enciclopedia Genealógica Arbillas, con indicación del año utilizado por primera vez. Miguel Camacho
Cuando alguien nos habla de un museo todavía muchos tienen la visión de un espacio descomunal, con salas y salas enormes de las que cuelgan cuadros, donde hay vitrinas con esculturas y nadie puede tocar nada. Pero el arte, y por tanto, los lugares donde se exponen las piezas artísticas pueden ser muy variados; y es que el entorno también confiere cierto significado a las obras. Eduardo Blázquez ha decidido “buscar” entre las obras de sus amigos y dar una visión diferente de la mujer. La concepción del “Museo de Diosas y Ninfas” parte de la base primigenia de que “la mujer es la protagonista de la historia, es el camino y la ventana de toda la humanidad”. Pero quiere huir de esa visión únicamente sacramental y fijarse en el humanismo pagano, que han utilizado muchos de nuestros artistas a lo largo de la historia, pero que se ha infravalorado “no teniendo en cuenta que muchas de las iconografías religiosas parten de una cultura anterior que era la griega o la romana, y que daban una visión más carnal a la mujer”. Esto no está reñido con las tradiciones y la cultura, sino que “las mujeres tienen que sentir que son lo más importantes”, y con el museo Eduardo quiere hacer un homenaje a todas las mujeres. Desde su creación, el Museo ha tomado el relevo de la Asociación Alero Añil y es quien organiza y hace entrega de los afamados y conocidos PREMIOS GREDOS que tanta promoción hacen del Pueblo y por extensión de Gredos. Y además el año pasado organizó un Curso de Verano de la Universidad Complutense de Madrid “LA MUJER EN LAS ARTES ESCENICAS” que deseamos y esperamos pueda repetirse en años sucesivos.
El micro-museo de Diosas y de Ninfas es un espacio dedicado a la mujer. El inicio de su creación está en la realización de un panegírico a mi abuela Felisa Jara Blázquez, cada imagen del lugar está dedicada a mi abuela y a mi madre. Lugar de lugares, morada de soledad, para construir los paraísos. El museo se divide en tres partes, tres actos que, a su vez, se relacionan con los cuatro elementos y con la actividad de coser-narrar; la visión de las aguas se impone para unirse a la cultura popular de Guisando, del Valle del Tiétar. En este sentido, el ensamblaje entre el arte culto y popular establece un pensamiento para poder unir la actividad de tejer de las antepasadas con la mitología, con personajes como Penélope y Ariadna, resultando analogías poderosas para el mensaje de empoderamiento de las Damas; por tanto, estamos ante un museo de género, museo de autor también, que tiene como finalidad encumbrar el universo femenino, se trata de una lucha contra el maltrato, para ensalzar los relatos de la Mujer entre objetos tradicionales, entre espacios simbólicos. La mujer se convierte en Heroína. Una parte destacada de las ochenta obras expuestas, han sido realizadas por creadoras. Elena González y Rosa Peces son dos protagonistas en el recorrido, sus obras, totémicas con Damas-alares, revelan las fuertes emociones de los personajes femeninos, su gran proyección para trazar esculturas figurativas y abstractas canalizan la dimensión antropológica del imaginario de las damas. Al tiempo, destacan dos pintores muy especiales, Ricardo Montesinos y Manuel Aznar, vinculados a la zona, paisanos; entre las obras de ambos, la historia del museo amplia contenidos e intensifica la mágica construcción de los retablos y polípticos, definiendo las iconografías de lugar y de tiempo con senderos de piedras y estrellas, constelaciones que simulan coreografías para despertar y encontrarse con el Sueño, el gran sueño. Las mágicas acuarelas, obras maestras, los dibujos y carboncillos nutren la mirada del espectador, amplían poder visual. Ante las historias de Ceres y Proserpina, el visitante penetra en la gruta bañada en Esmeralda, color relacionado con la obra de Julia Barella, poeta ilustre que, al igual que Begoña Valle, ambas Categorías y Conceptos, generan mensajes comprometidos en las narraciones visuales, ventanas metafóricas para hablar de libertad y de expansión desde el prisma femenino. La visita supone una reflexión sobre las relaciones de la mujer con el paisaje y el jardín. La Madre Naturaleza se presenta como tema para transformarse en alegoría, nutriendo de conceptos los retablos dedicados a las diosas del amor y a la mítica Ofelia; desde la visualización de las Náyades y Sirenas, la floración va ampliando la mirada sobre la historia visual de un museo modesto repleto de mensajes regeneradores. Eduardo Blázquez Mateos Eduardo y Jose Miguel Blazquez Mateos con su madre, su abuela y su bisabuela. El Museo es un cariñoso y leal homenaje a todas ellas.
(Universidad Rey Juan Carlos I)
Aร O
VILLA
NOMBRE
1ยบ APELLIDO
2ยบ APELLIDO
PADRES
REGISTRO
15/01/1915 GUISANDO
BENITO
GARCIA
BLAZQUEZ
SEGUNDO - JUANA
13 145 145
15/01/1915 GUISANDO
PABLO
NOGAL
GONZALEZ
GREGORIO - MARCELINA
13 144 144
20/01/1915 GUISANDO
FABIAN - SEBASTIAN
PALACIOS
FRAILE
JULIAN - EUSEBIA
13 146 146
25/01/1915 GUISANDO
PAULA
JARA
GONZALEZ
FRUCTUOSO - VICENTA
13 147 147
17/02/1915 GUISANDO
JULIANA FIRMA
TOMAS
GONZALEZ
JUSTO - JULIANA
13 148 148
09/03/1915 GUISANDO
FRANCISCO
GARRO
DELGADO
JOSE - DOROTEA
13 149 149
20/03/1915 GUISANDO
EUFEMIA
FUENTE, DE LA
FRAILE
FELIX - EUSEBIA
13 150 150
27/03/1915 GUISANDO SAGRARIO - PASTORA MARIA
GARCIA
JARA
JOSE - MARIA
13 151 151
21/05/1915 GUISANDO
SAG. VICTORIO
GARRO
GARCIA
ANDRES - MARIA
13 152 152
07/06/1915 GUISANDO
PEDRO
DELGADO
TOMAS
JUAN - MARIA
13 153 153
27/06/1915 GUISANDO
JUAN
BLAZQUEZ
PEREZ
BONIFACIO - BENJAMINA
13 154 154
28/06/1915 GUISANDO
BENIGNO
NOGAL
BLAZQUEZ
CASIMIRO ADRIAN - VIRGILIA
13 156 156
29/06/1915 GUISANDO
PEDRO
GARCIA
CARRERA
ANTONIO - BRIGIDA
13 155 155
09/07/1915 GUISANDO
ALEJANDRO
JARA
SERRANO
LORENZO - VICENTA
13 160 160
09/07/1915 GUISANDO
CIRILA
FRAILE
SERRANO
PABLO - CEFERINA
13 159 159
10/07/1915 GUISANDO
RUFINO
MATEOS
GONZALEZ
LUCIO - EUGENIA
14/07/1915 GUISANDO 16/07/1915 GUISANDO
MARCELINA CARMEN - MARIA CARMEN
RETAMAL JARA
GARCIA GARCIA
PEDRO - FRANCISCA JUAN - TOMASA
13 158 158 13 157 157
16/07/1915 GUISANDO
MARIA CARMEN
MARTIN
SERRANO
ISIDORO - ANASTASIA
13 161 161
27/07/1915 GUISANDO
PASTORA
GARCIA
TOMAS
MAXIMINO - ELENA
13 162 162
30/07/1915 GUISANDO
CARMEN
ARBOS
GARCIA
JUAN - MODESTA
13 163 163
08/08/1915 GUISANDO
EMILIO - EMILIO JOSE
LOPEZ
GARCIA
EMILIO - EMILIA
13 164 164
25/08/1915 GUISANDO 04/09/1915 GUISANDO
LUIS CANDIDO
JARA JARA
SERRANO GONZALEZ
FELIX - PAULA BASILIO - ANGELA
13 165 165 13 166 166
15/09/1915 GUISANDO
VALERIANA
ESQUILAS
DELGADO
GREGORIO - NICASIA
13 167 167
20/09/1915 GUISANDO
FELICIDAD
Fernando, De
NOGAL
21/09/1915 GUISANDO
ISAAC
FRAILE
GARCIA
PEDRO - JACINTA
13 168 168
SERRANO
JARA
JUAN - MARIA
13 170 170
26/09/1915 GUISANDO JULIA ROSA - JUSTINA FELISA ROSA FRANCISCA 04/10/1915 GUISANDO
RAFAEL MARIA - AURELIA 13 169 169
GARCIA
FRAILE
JULIAN - ALFONSA
13 171 171
07/10/1915 GUISANDO
JUSTINO
GALAN
DELGADO
VALENTIN - MARIA
13 173 173
09/10/1915 GUISANDO
DIONISIO
SERRANO
GARCIA
FELIPE - MARIA
13/10/1915 GUISANDO
PILAR - MARIA PILAR
RETAMAL
PEREZ
TOMAS - JUSTA
13 172 172
08/11/1915 GUISANDO
VICTORINA
RETAMAL
BLAZQUEZ
JULIAN - JOSEFA
13 174 174
16/11/1915 GUISANDO
RUFINA
SERRANO
RETAMAL
MARCELO - EUSEBIA
13 175 175
28/11/1915 GUISANDO
GREGORIO
Cifuentes, De
TIEMBLO
JOSE PEDRO - MACARIA
13 176 176
02/12/1915 GUISANDO
MARCELINA
DELGADO
GARCIA
BARTOLOME - PIA
13 177 177
11/12/1915 GUISANDO
DANIELA
PEREZ
FRAILE
VICTOR LORETO - TEODOSIA
13 178 178
25/12/1915 GUISANDO
JUAN
GALAN
GONZALEZ
PEDRO - JESUSA
13 179 179
29/12/1915 GUISANDO
TOMAS DAVID
GARCIA
RETAMAL
BLAS - PASCUALA
13 180 180
FALLECIMIENTO
FFALLCIM 25/01/1915
NOMBRE
1ยบ APELLIDO
2ยบ APELLIDO
PADRES
NACIMTO
REGISTRO
NOMBRE ANDREA
APELLIDO1 APELLIDO2 serrano GARCIA
PADRES PD - CECILIA
FNACTO 01/02/1910
LF FF 11 006
PF 006
19/02/1915
JUANA - J ROSA
JARA
SERRANO
FELIX - PAULA
29/08/1913
11 007
007
09/03/1915 21/03/1915
ROSALIA FIDELA
ARROYO JARA
JARA BLAZQUEZ
MANUEL - MARIA FEDERICO - GENARA
01/01/1844 16/10/1914
11 009 11 010
009 010
19/04/1915
MARCELINO
JIMENEZ
MARINA
JUAN MANUEL - ROSA
11 011
011
02/05/1915
DOMINGA
SERRANO
DELGADO
ANICETO - VALENTINA 01/01/1871
11 008
008
08/06/1915
MARIA
RETAMAL
FERNANDO, DE AGUSTIN - ROSA
01/01/1853
11 012
012
15/06/1915
PAULINA
BLAZQUEZ
HERNANDEZ
DEMETRIO - LUCIA
31/12/1914
11 013
013
17/06/1915
SEVERIANO
GONZALEZ
GONZALEZ
RUFINO - MARIA
08/11/1914
11 014
014
27/06/1915
FRANCISCO
GONZALEZ
RODRIGUEZ
FRANCISCO - MARIA
01/01/1849
11 015
015
15/09/1915
CANDIDO
JARA
GONZALEZ
BASILIO - ANGELA
04/09/1915
11 016
016
16/09/1915
PRUDENCIA
BLAZQUEZ
TIEMBLO
CANDIDO - CATALINA
01/01/1841
11 017
017
25/09/1915
CARMEN
ARBOS
GARCIA
JUAN - MODESTA
30/07/1915
11 018
018
03/10/1915
JUAN
GONZALEZ
DIAZ
FERMIN - JACOBA
01/01/1850
11 019
019
19/10/1915
HILARIO
DELGADO
GARCIA
MAXIMO - JUANA
01/01/1853
11 020
020
22/10/1915
DIONISIO
SERRANO
GARCIA
FELIPE - MARIA
09/10/1915
11 021
021
05/11/1915
TOMASA
GONZALEZ
11 022
022
25/12/1915
FRANCISCO
SERRANO
FERNANDO, DE SILVESTRE - ROSA FRANCISCO - EUGENIA- 01/01/1865 GONZALEZ Juana
11 023
023
Rincón típico de Guisando. Fotografía anónima años 40. Blanco y Negro y parcialmente coloreada por Miguel Camacho