FAUNA VENEZOLANA
Manatíes
CUNAGUARO
PERRO DE MONTE
Pato de torrentes
Cabezón del Zulia
Sardinita del Aroa y Yaracuy Bagre guitarrita andino
Caimán de la Costa
Tierrera del Turimiquire
Pato de monte
Sapito amarillo de La Carbonera Ranita de cristal del Ávila
Águila arpía
Sapito rojo del Yapacana
Aguja de los Andes
Autor: Wilmary Rodríguez Emely Rodríguez 8-6-2014 Galileo Galilei
Manatíes Una de las criaturas de vida acuática más singulares que existen es el manatí, también conocido en algunas zonas con el nombre vaca de mar, debido a su gran parecido con este animal terrestre. Los manatíes son animales de vida solitaria, solo se les ve acompañados cuando están apareándose o en el caso de las hembras cuando cuidan a sus crías. Son animales herbívoros, razón por la cual no constituyen una preocupación para cualquier otra criatura en el agua, sin embargo ellos sí tienen varios enemigos naturales como el cocodrilo, el caimán, el tiburón y la ballena, dependiendo del lugar donde habite el manatí. Aquellos que son jóvenes y débiles son más vulnerables ante el acecho de tales depredadores. obstante, el hombre representa la mayor amenaza que pueden enfrentar, ya que los seres humanos continúan destruyendo su medio ambiente natural con la contaminación de las aguas, provocando un número significativo de muertes en las últimas décadas.
Aunque existen evidencias de que el manatí evolucionó hace más de 60 millones de años para sobrevivir en el agua, hoy su supervivencia puede estar en peligro, ya que son considerados como una especie vulnerable a la extinción. Esto se debe a una combinación de factores, como la contaminación de las aguas, la pesca, los depredadores naturales, e incluso el calentamiento global. Lamentablemente, existen ciertos inconvenientes que afectan los esfuerzos de conservación para salvar a estos animales. En primer lugar, debido a que no se puede dar una cifra exacta del número de individuos que quedan, no se puede saber si la situación ha mejorado o empeorado hasta que se produzca un cambio significativo de alguna forma. El segundo problema es que el número de manatíes alrededor del área de la Florida parece aumentar, lo que da una falsa idea de que el número total de manatíes en el mundo ha aumentado, cuando realmente lo que sucede es que en el resto de las poblaciones, los números estimados disminuyen.
CUNAGUARO Es el más grande de los pequeños felinos manchados de América. Mide de 70 a 90 cm de longitud, exceptuando la cola que oscila entre 28 y 41 cm. Los machos adultos pesan entre 10 y 12 kg, y las hembras entre 8 y 9,4 kg. De coloración dorsal parda amarillenta, el pelaje es corto y liso con manchas y líneas irregulares muy oscuras bordeadas de negro. La cabeza es similar en coloración al dorso. El vientre es blanco con manchas negras. De hábitos nocturnos, crepusculares, solitarios y territoriales, sus principales presas son vertebrados pequeños posee una distribución amplia en tierras bajas, incluyendo la Isla de
Margarita, estando ausente en los Andes y zonas altas de Bolívar y Amazonas. La cacería comercial por su piel y la cacería deportiva fueron actividades muy generalizadas hasta principios de 1970. No obstante, en 1977 el Gobierno venezolano adoptó medidas de protección para la especie y Venezuela fue ratificada como miembro del CITES.
Actualmente, aunque no existe una cacería comercial sistemática, es perseguida ilegalmente por ser considerada una especie dañina y de mucho valor como trofeo de caza o mascota. Sin embargo, la principal amenaza actual y futura para la especie es la destrucción del hábitat, causa principal de la disminución de sus poblaciones,
PERRO DE MONTE Cánido de tamaño mediano. De alto mide entre 23 y 30 cm, y de longitud entre 60 y 75 cm desde la cabeza hasta la base de la cola. Pesa de 5 a 7 kg. La coloración dorsal del pelaje es desde parda pálida a amarilla ocre, cabeza parda amarillenta dorada, rostro del mismo color, y vientre pardo oscuro o negro. Posee una cola muy corta de apenas 12 cm de longitud. Difiere notablemente de otros cánidos por su aspecto similar al de un mustélido o un vivérrido. Aunque es de hábitos solitarios, es la especie más social entre los cánidos pequeños, formando grupos de hasta diez individuos. Es básicamente carnívoro, y su dieta está compuesta de vertebrados pequeños y medianos. Es miembro de un género monotípico que se distribuye en Centro y Suramérica, desde el este de Panamá hasta el norte de Argentina. En Venezuela se le reporta en bosques húmedos de la Sierra de Perijá, en la Cordillera de la Costa, en San Esteban en el estado Carabobo, y en El Guapo en el estado Miranda; en Río Negro y el alto Orinoco al sur del estado Amazonas, en la Gran Sabana al este del estado Bolívar,
y en la cuenca del río Caura al norte y suroeste del mismo estado. Información proveniente de cazadores sugiere que la distribución de la especie podría ser más amplia, abarcando bosques del piedemonte andino. Se localiza en altitudes inferiores a 1.500 m donde habita zonas boscosas y sabanas húmedas. Es una especie extremadamente escasa en toda su área de distribución, por lo cual se dispone de poca información sobre su historia natural en vida silvestre, aunque ha sido bastante estudiada en cautiverio. Es muy sensible a la intervención del hábitat, estando ausente en zonas pobladas por humanos y en áreas deforestadas. En Venezuela sus poblaciones al norte del río Orinoco se encuentran muy reducidas y su distribución actual es prácticamente relicta, siendo probable que estén extintas o cercanas a la extinción.
Al sur del río Orinoco se presume que sus poblaciones se han mantenido relativamente estables durante las últimas décadas, dado que aún existen áreas boscosas extensas con bajo grado de intervención humana. A nivel internacional la IUCN la clasifica en la categoría Vulnerable. En Argentina se considera En Peligro, en Paraguay En Peligro Crítico, en Brasil Amenazada, mientras que es señalada como una especie Rara en Perú, y reportada Vulnerable para Ecuador y Colombia.
Pato de torrentes Anátido de aspecto muy llamativo conmarcado dimorfismo sexual. La cabeza y el pecho del macho son blancos con rayas negras, mientras que en la hembra son de color rojo naranja. En ambos sexos, el pico y las patas son rojizos. Mide entre 38 y 43 cm de alto. Es una especie monógama que ocupa territorios longitudinales fijos de aproximadamente 1 km a lo largo de los torrentes y riachuelos, donde construye sus nidos entre rocas o en barrancos. Es una especie endémica de Suramérica de amplia distribución a todo lo largo de los Andes, desde Venezuela hasta Tierra del Fuego (Argentina). Restringida a tierras altas entre 2.000 a 2.800 m de altitud, aunque información reciente indica que puede llegar a menores
Altitudes de hasta 650 m, su distribución está determinada por las condiciones del agua y la presencia de cursos de agua pedregosos y accidentados. En Venezuela está presente la subespecie Merganetta armata colombiana, la cual ha sido reportada desde el norte de Mérida hasta el suroeste de Táchira. Sin embargo, investigaciones muy recientes demuestran que se localiza en al menos cuatro estados Venezolanos
(Táchira,Mérida, Barinas y Lara) ymuy probablemente en el estado Trujillo, ocupando una distribución y un rango altitudinal mayor al conocido hasta hace poco. No se han realizado estudios precisos para Venezuela y sus avistamientos son poco frecuentes. Es probable que su situación sea bastante diferente a la situación global. Para la raza presente en Venezuela se cuenta con estimados conservadores que proponen entre 1.000 a 2.000 individuos, entre 10-20% de su población global calculada en 10.000 individuos aproximadamente. Estimados menos conservadores sugieren un mínimo de 100 y un máximo de 1.500 individuos, por lo que a nivel nacional se le considera un ave con alta prioridad de conservación [
Pato de monte Anátido de gran tamaño quemide hasta 76 cmde alto y que se caracteriza por un copete carnoso de color gris sobre el pico. Su cabeza, cuello, pecho y parte ventral son de color blanco; y la cabeza y cuello, también blancos, poseen manchas negras pequeñas. El dorso, las alas y los costados poseen visos oscuros verdes y marrones, al igual que la parte posterior de la cabeza y el cuello. La hembra es similar pero mucho más pequeña, de plumaje más claro con costados grisáceos, y no posee el copete. La especie presenta una amplia distribución pantropical que incluye Asia (India, Myanmar, Sri Lanka, Tailandia, China), África (Mozambique, Zimbabwe, Sudáfrica, Madagascar) y América, desde México y Centroamérica hasta los países andinos (Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú), y con un gran núcleo que se extiende por Brasil, Bolivia, Uruguay, Paraguay y Argentina, además de poblaciones aisladas en Guyana. En Venezuela habita hasta 300 m de altitud en lagunas de los llanos, sembradíos de arroz y bosques adyacentes, principalmente en los llanos del sur de Guárico, Barinas, Portuguesa y Apure; en los llanos orientales de Anzoátegui y Monagas, costa de Falcón, y sur del Lago de Maracaibo
En Venezuela su situación es poco clara y no se cuenta con información precisa, aunque en general se le considera poco abundante. Probablemente sus poblaciones más afectadas sean las ubicadas en los llanos orientales, Falcón y sur del Lago de Maracaibo. En Suramérica se estima una población total para la especie cercana a 80.000 individuos, de los cuales entre 8.000 a 40.000 podrían habitar en Venezuela, aunque algunos investigadores consideran que esta cifra podría estar sobrestimada. A nivel global no se le considera amenazada, por lo que la IUCN la clasifica en la categoría de Preocupación Menor, de hecho, las poblaciones africanas alcanzan decenas de miles de individuos [3]. Sin embargo, para el resto de los países suramericanos, especialmente los andinos, la situación es diferente.
Águila arpía
Una de las águilas más poderosas y en Venezuela es la especie de mayor tamaño de los accipítridos. Su cuerpo puede medir hasta 1 m de alto y sus alas abiertas hasta 2 m de envergadura. La cabeza, de color blanco, posee una cresta muy característica y llamativa, cuyo plumaje grisáceo, eréctil a su voluntad, semeja la forma de cuernos. El dorso del cuerpo y las alas son negros. El plumaje debajo de las alas y del torso es blanco, y sólo el pecho en su parte superior está cruzado por una banda ancha negra. La cola es negra con tres bandas grisáceas. El pico es curvo y muy fuerte; el tarso es grueso, sin plumas y de color amarillo claro. Las garras son muy desarrolladas, de hasta 7 cm en el dedo posterior. Aunque más ágil y rápido, el macho es más pequeño que la hembra.
Su aguda visión y audición, y el pico fuerte, le hacen un excelente depredador que alcanza velocidades de hasta 200 km/h. Se distribuye en forma disjunta y escasa desde el sur de México, Guatemala, Belice, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Venezuela, Guyana, Surinam, Guyana Francesa, Ecuador, Perú, Bolivia, Brasil, Paraguay y noreste de Argentina en Misiones, aunque anteriormente se le reportaba en Formosa, Salta y Jujuy. En Venezuela se encuentra al norte del Orinoco en la Cordillera de la Costa Central (Carabobo, Aragua, Miranda), Monagas (río Guarapiche), Sierra de Perijá y sur del Lago de Maracaibo (Zulia), y al sur del Orinoco en Delta Amacuro, Amazonas y Bolívar (alto río Caura, Gran Sabana, Sierra de Lema, Imataca).
Esta especie es el único representante de un género monoespecífico, de biología frágil y que requiere, por cada individuo, más de 30 km2 de bosque para sobrevivir. En Venezuela las poblaciones de la Cordillera de la Costa podrían considerarse muy amenazadas y extremadamente reducidas. Su distribución actual al norte del río Orinoco se estima mucho menor que la distribución pasada, ocupando entre 20% y 50% de ésta. Sin embargo, al sur del Orinoco aún es relativamente común y existen grandes áreas no perturbadas, con hábitat adecuado para la especie. A nivel internacional la IUCN la reporta como una especie Casi Amenazada, en Argentina se le clasifica En Peligro con varias extinciones locales, en Colombia como Casi Amenazada.
Tortuga dulceacuícola de talla mediana. Posee un dimorfismo sexual marcado, siendo los machos de menor tamaño que las hembras. Los machos miden entre 19 y 21 cm y las hembras de 25 a 28 cm de longitud.
Cabezón del Zulia
Es fácilmente distinguible por el gran tamaño de su cabeza de hasta 10 cm de ancho, y por su peculiar modo de plegarla hacia un lado del cuerpo en lugar de retraerla hacia el interior del caparazón [1]. Dorsalmente muestra una coloración grisácea, la garganta y el pecho son blanquecinos y una barra negra se
extiende desde la nariz y a través del ojo hasta terminar sobre el tímpano. Es una especie endémica de la cuenca del Lago de Maracaibo que forma parte de los numerosos endemismos de reptiles de agua dulce de la región, posiblemente resultantes de su aislamiento de otros ambientes dulceacuícolas al estar rodeada por la Sierra de Perijá, Cordillera de los Andes, zonas áridas de Falcón y Zulia y el mar Caribe. Es probable que su distribución se restrinja a la región suroccidental, específicamente a los ambientes pantanosos de las Ciénagas de Juan Manuel de Aguas Blancas y Aguas Negras De hábitos acuáticos, prefiere ambientes de sabanas anegadizas, madreviejas, pequeños caños y cuerpos de agua estacionales. Esta especie fue descritaoriginalmente como Phrynops zuliae, y luego
se elevó el subgénero Batrachemys a género. Recientemente se reasignaron las especies de Batrachemys a Messoclemmys, aunque todavía se requieren evaluaciones genéticas para aclarar el género apropiado para esta especie. Es una especie de distribución extremadamente restringida y de hábitos ecológicos especializados. Sólo es conocida de una pequeña área caracterizada por la presencia de un hábitat único, aislado y distinto de todos los ambientes que le rodean Es poco conocida por los habitantesde la región, quienes además comentan que sus poblaciones han decrecido e incluso han desaparecido de algunas localidades
Caimán de la Costa Es una de las especies de cocodrilo más grandes del Neotrópico. El macho mide de 5 a 7 m de longitud, mientras que la hembra alcanza su madurez sexual cuando mide entre 1,8 y 2,5 m. Su color es desde gris pálido, algo amarillento y con cierto tinte verdoso, hasta un gris oscuro o negruzco en los individuos más viejos. La hembra pone de 15 a 47 huevos, los cuales son incubados durante 70 a 90 días. Es una especie carnívora muy generalista, capaz de consumir gran variedad de presas como insectos, cangrejos, peces, tortugas, babas y aves acuáticas. Su distribución se extiende desde el sur de la Península de Florida en los Estados Unidos, hasta México y a lo largo de las costas atlántica y pacífica de Centroamérica, islas del Caribe (Cuba, Jamaica, Haití y República Dominicana)
y norte de Suramérica (Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela). Hasta principios del siglo XIX era abundante en las costas venezolanas desde la boca del río San Juan y el Golfo de Paria en Sucre, hasta la cuenca del Lago de Maracaibo. Su distribución actual está reducida a una veintena de subpoblaciones pequeñas y aisladas en la costa de los estados Zulia, Falcón, Aragua y Miranda. Se ha señalado su presencia en la Isla de Margarita, pero se considera localmente extinto. Habita entre el nivel del mar y los 400 m de altitud, en gran variedad de cuerpos de agua. Su presencia en mar abierto es ocasional.
En Venezuela sus poblaciones están severamente reducidas y su distribución actual es sólo un relicto de la pasada, estimada en menos de 20% de su extensión original. Persiste en pequeñas poblaciones aisladas y dispersas. La presión sobre los ejemplares más grandes ha modificado la estructura de edades de sus poblaciones, por lo que rara vez se observan ejemplares mayores a 3 m de longitud. Algunas poblaciones pueden considerarse relativamente saludables, como las que se encuentran en la represa Játira-Tacarigua (Falcón), en el río Yaracuy, en la represa de Pueblo Viejo (Zulia) y en el Parque Nacional Laguna de Tacarigua (Miranda). En 1997, se estimó poco más de 500 ejemplares adultos, cantidad similar a lo considerado diez años atrás, incluyendo algunas recuperaciones poblacionales, principalmente en áreas como los parques nacionales Morrocoy y Laguna de Tacarigua. La presión humana sobre la especie parece haberse estabilizado y es posible que esté disminuyendo, pero no ha cesado. A nivel internacional la IUCN la clasifica Vulnerable de extinción. En Colombia se le considera En Peligro Crítico, y virtualmente Extinto en el norte de Perú y Ecuador. La población de Florida (EEUU) es de aproximadamente 20 hembras reproductivas.
Tierrera del Turimiquire Serpiente minadora de talla pequeña (menos de 40 cm) y cola corta, su coloración dorsal es marrón sin manchas, bandas u otro diseño característico. Diseñoventral con bandas transversales oscuras y claras en cada escama central, y pequeñas manchas negras sobre el ápice de las escamas de los costados. El vientre muestra bandas transversales color crema, alternadas con bandas de color marrón oscuro, en tanto que la cola se muestra moteada de marrón oscuro y crema. Sus características diagnósticas son 17 escamas dorsales, 7 supralabiales e infralabiales, 160 a 168 ventrales, y 23 a 28 caudales. Anteriormente, confusiones con Atractus fuliginosus y Atractus lasallei (especie colombiana) habían ocultado la existencia de esta nueva especie. Estudios recientes aseguran que Atractus matthewi es coespecífica con Atractus nororientalis, y que esta última debe ser considerada como un sinónimo “junior” de la primera. La descripción de ambas especies (la primera realizada en base a seis ejemplares y la segunda basada en dos individuos), ocurrió prácticamente en forma simultánea, y asociada a algunas polémicas. Sin embargo, los estudios morfológicos y de coloración no evidencian ninguna diferencia, aunque se expone y justifica algunas variaciones en el numero de dientes maxilares (de 6 a 7 en Atractus nororientalis y de 8 a 9 en Atractus matthewi). Ambas supuestas especies son reportadas para la misma localidad. Especie endémica del Macizo del Turimiquire, aparentemente restringida a los bosques ombrófilos montanos sub-siempreverdes y siempreverdes de la región. Ha sido reportada en los estados Sucre y Anzoátegui en varias localidades cercanas de la Serranía de Turimiquire, en las localidades de Carápas y cerca de La Piedra (Sucre), y en Anzoátegui en el Cerro La Laguna (sectores las antenas, y la carretera La Piedra). Su distribución
altitudinal conocida se ubica entre 1.660 y 2.130 m. Es conocida sólo por los seis ejemplares con los que fue descrita en el año 2004, aunque es probable que los individuos reportados para Atractus nororientalis sean atribuibles a esta especie. En cualquier caso, más allá de las confusiones y polémicas, se concluye que es una especie endémica de un área muy amenazada, y probablemente de distribución restringida, que requiere atención. Son inexistentes datos adicionales sobre su ecología, distribución y estado de conservación. La especie no ha sido considerada anteriormente bajo ninguna categoría de amenaza. No se han tomado medidas para su conservación. Su área de distribución está protegida por la Zona Protectora del Macizo Montañoso del Turimiquire, la cual posee una superficie de 540.000 ha y se extiende entre 400 y 2.600 m de altitud [5]. Se recomienda evaluar su área de distribución para tratar de localizar más individuos y determinar igualmente su ecología, biología y estatus poblacional, además de sus pertinentes medidas de conservación.
Sapito amarillo de La Carbonera Sapito pequeño de coloración amarilla uniforme con manchas marrones alrededor de las narinas, y ocasionalmente en otras áreas del cuerpo. La parte posterior es desde rojiza hasta escarlata. Posee un dimorfismo sexual marcado, siendo los machos más pequeños (3,9 a 4,6 cm) que las hembras (4,3 a 5,4 cm). Los machos ocupan un área de poco más de 56 m2, mientras que las hembras casi 33 m2 en promedio. Su tasa de crecimiento es relativamente lenta. Se alimenta de insectos (Coleóptera, Colémbola, Díptera, Homóptera, Himenóptera) y arácnidos. Es de hábitos diurnos y terrestres. Se estima que su longevidad mínima es de 10 años. Especie endémica de Venezuela cuya distribución es muy restringida en la Cordillerade Mérida. Sólo es conocida del bosque nublado de La Carbonera y alrededores, además de las quebradas de San Eusebio,
en la vía entre Jají y La Azulita, a elevaciones entre 2.300 y 2.600 m de altitud. En los últimos 30 años la especie ha sufrido una drástica disminución de su tamaño poblacional [5]. Para 1972, era considerada una especie abundante y se podía capturar hasta un centenar de ejemplares en una hora, siendo común ver docenas de individuos arrollados por vehículos en la carretera que conecta la ciudad de Mérida con La Azulita. A principios de la década de los 70, la especie fue estudiada y se logra marcar y liberar a 750 individuos, de los cuales dos fueron recapturados ocho y diez años más tarde [1]. A principios de los años 90 se inició un estudio de monitoreo y sólo fueron observados dos ejemplares entre enero y octubre de 1990. Un avistamiento posterior ocurrió en enero de 1995. Aparentemente el último registro se obtuvo en 1998, por un ejemplar fotografiado en el Páramo El Tambor, cerca de la localidad tipo. En los últimos años se han realizado varias expediciones y búsquedas exhaustivas sin ningún resultado positivo. Su situación es en extremo crítica, hasta el punto que muchas de sus poblaciones podrían estar extintas en la actualidad. A nivel internacional laespecie ha sido clasificada En Peligro Crítico
Ranita de cristal del Ávila El género Hyalinobatrachium es parte de la Familia de los centrolénidos, conocidas comúnmente bajo el nombre de “ranas de cristal”, por su piel extremadamente clara, casi traslucida, a través de la cual se pueden apreciar los órganos internos y huesos. Se han reportado treinta y dos especies para este género. Hyalinobatrachium guairarepanensis es una rana relativamente pequeña que alcanza entre 2 y 3 cm de longitud, siendo los machos más pequeños que las hembras. Tiene un cuerpo relativamente aplanado, amplia cabeza, hocico redondo y ojos casi frontales. Su piel dorsal es verde pálida con puntos verdes-amarillos o amarillentos, mientras que el vientre es parcialmente transparente. Las yemas de los dedos son amarillas y sus ojos son color dorado con pupilas horizontalmente elípticas. Recientemente redescrita, Hyalinobatrachium guairarepanensis es una especie endémica de Venezuela que se encuentra restringida al sector
central de la Cordillera de la Costa, limitada a los bosques de galería adyacentes a las quebradas de montaña. entre 720 y 1.000 m de altitud, siendo la localidad tipo la Quebrada de Chacaíto. Se trata de una rana arborícola de hábitos nocturnos, de la cual se han estudiado algunos aspectos ecológicos como sitio de reproducción, descripción morfológica y vocalización. Se encuentra principalmente en árboles a lo largo de corrientes de agua en bosques semicaducifolios estacionales, donde pone sus huevos en las hojas que
cubren las quebradas, y cuando los renacuajos emergen caen en la corriente, donde continúan su desarrollo. Se desconoce su estatus poblacional actual. En la década de los 90 y principios de 2000, durante exploraciones a varias quebradas en la vertiente sur del Parque Nacional El Ávila, fue encontrado sólo un ejemplar.
Sapito rojo del Yapacana
El género Minyobates incluye a las especies más pequeñas de los dendróbatidos. Particularmente, Minyobates steyermarki es la única especie del género reportada para Venezuela, y se trata de un sapito pequeño muy llamativo de intensa coloración roja, que vive en bromelias terrestres (dentro de las cuales es posible que se reproduzca) en ambientes de bosque montano. Los estudios originales revelaban densidades poblaciones altas, tanto que en algunas oportunidades se veían cientos de ejemplares en pocas horas, sin embargo, su situación actual se considera alarmante y con alta prioridad de conservación. Es una especie endémica de Venezuela y se encuentra restringida a la base y laderas del Cerro Yapacana, en el estado Amazonas, entre 600 y 1.200 m de altitud. Frecuentemente se le ha clasificado como Dendrobates steyermarki debido a que estudios morfológicos y de toxinas, indican que los géneros Minyobates y Dendrobates son grupos hermanos y cercanos, aunque recientes investigaciones sobre genética molecular revelan que es un linaje que ha evolucionado independientemente y paralelo a Dendrobates y que se conecta en la raíz del árbol filogenético.
Fue considerada originalmente como una especie relativamente común, aunque se desconocen mayores detalles sobre su estatus poblacional actual. Su limitada área de distribución está sujeta a intensa explotación minera ilegal. Para 1995 La Marca la señalaba como una especie amenazada. Las evaluaciones internacionales, tanto de la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN siglas en inglés), como la EvaluaciónGlobal de los Anfibios (GAA por sus siglas en inglés), coinciden en clasificarla En Peligro Crítico, debido a que su área de ocupación es probablemente menor a 10 km²; a que todos
los individuos se encuentran en una sola población, y a que la cantidad y la calidad de los hábitats boscosos del Cerro Yapacana está declinando. La principal amenaza que enfrenta la especie está relacionada con la fuerte alteración de su hábitat debido a la minería ilegal, la cual ha generado deforestación, erosión del suelo y contaminación por mercurio. Los incendios en las sabanas adyacentes también se cuentan entre las amenazas que la afectan. Por otra parte, y a pesar de que las actividades en el Cerro Yapacana están restringidas únicamente a la investigación científica, se cuenta con un registro de comercio ilegal en 1999, conformado por 150 ejemplares con destino a Alemania para el estudio de toxinas dérmicas y de su comportamiento en cautiverio.
Sardinita del Aroa y Yaracuy Sardinita de tamaño pequeño que mide hasta 5 cm de longitud estándar. Se diferencia del resto de las especies del género por una serie de caracteres en su morfología interna. Particularmente, por el maxilar que presenta tres dientes con cinco cúspides de igual tamaño; por una serie de escamas que cubren la base de la aleta anal; por presentar a los lados del cuerpo una mancha humeral; por una banda oscura que se extiende desde el nivel de la aleta adiposa hasta los radios medios de la aleta caudal, y por una banda plateada que va desde la mancha humeral hasta el nivel medio de la aleta dorsal. Esta especie es muy parecida a Hemibrycon jabonero (cuenca del Lago de Maracaibo), pero además de ser más pequeña, tiene los ojos proporcionalmente más grandes y la aleta anal menos colorida. Especie endémica de Venezuela. Únicamente se ha colectado en la quebrada El Charal, un pequeño curso de agua que nace en las estribaciones surorientales de la Sierra de Bobare (Sistema Coriano) y que fluye al río Aroa, cuenca del Caribe, en el estado Yaracuy. Adicionalmente existe un registro para el estado Yaracuy, específicamente de la quebrada Agua Negra, pequeño afluente del río Yaracuy.
Se trata de una especie descrita recientemente para la ciencia, y de la cual no existe información precisa en cuanto a distribución geográfica y estado de conservación. Se conoce solamente de 142 ejemplares colectados en la quebrada El Charal en 1985 y 1987, y de dos ejemplares provenientes de la quebrada Agua Negra colectados en 1971. De acuerdo con los muestreos realizados en El Charal, fue la especie más abundante de la comunidad con un promedio de 40% de abundancia relativa. Su distribución tan restringida, las amenazas que enfrentan las cuencas de los ríos Aroa y Yaracuy, su condición de especie endémica, así como el desconocimiento sobre sus aspectos bioecológicos más elementales, apoyan considerarla como Vulnerable. En las cuencas de los ríos Aroa y Yaracuy, desde hace varias décadas se ha desarrollado una gran actividad agrícola (cereales, caña de azúcar, tubérculos, frutas, hortalizas, algodón, plátano, café, cacao, tabaco), pecuaria (ganado bovino, porcino, caprino, ovino, aves), industrial y minera. Esto ha ocasionado una gran deforestación, intervención, alteración y contaminación de los cursos de agua. Adicionalmente, en las cuencas de los ríos Aroa y Yaracuy se han introducido 11 especies de peces procedentes de otras cuencas del país (especies transferidas), cuyo efecto sobre las especies nativas aún no ha sido evaluado. Existen poblaciones reproductivas de dos especies transferidas en la cuenca del río Aroa, el coporo y la cachama . Dado que es una especie atractiva y de talla pequeña, es probable que tenga potencial valor ornamental.
Bagre guitarrita andino Bagrecito acorazado de tamaño muy pequeño, que alcanza entre 3 y 4 cm de longitud total. Su cuerpo tiene forma de hexágono hacia la parte posterior y se caracteriza por poseer un sólo sistema de placas apareadas en la aleta preanal, y una ornamentación ósea en el cráneo, más desarrollada que en sus familiares cercanos. La cabeza es deprimida, con los ojos en posición dorsal y boca en la parte inferior. La coloración del dorso es castaña clara, con cuatro bandas negras transversales, la primera sobre la aleta dorsal y la última sobre la aleta caudal. Tiene bandas negras sobre las aletas pectorales y pélvicas. Es el único representante del genero Dupouyichthys. También es conocido con el nombre de “sapito”. Esta especie se encuentra restringida a las cuencas del río Magdalena en Colombia y del Lago de Maracaibo en Venezuela. En Colombia está presente en el río Lebrija, afluente del río Magdalena (Departamento de Santander), Quebrada la Fiebre (Departamento de Boyacá) y un nuevo registro para la desembocadura del río Amoyá en el río Saldaña (Departamento de Tolima). En Venezuela se le reporta para los ríos que drenan hacia la cuenca del Lago de Maracaibo, entre 100 y 800 m de altitud. Ha sido colectada en el estado Zulia, en la región suroriental del Lago de Maracaibo, específicamente en el río San Juan y en Río Negro; en el estado Trujillo, en el río Motatán (650 m), en Las Palmeras y en la quebrada de Cuevas (800 m); en el estado Mérida ha sido capturada en el río Chama (150 m) y en el río Tucaní (160 m). Prefiere fondos con grava y
areno-limosos, en ríos de pendiente fuerte y corriente rápida. Aunque se desconoce la situación actual de esta especie, los escasos reportes sugieren que es poco abundante en todo su rango de distribución. Su presencia en Colombia no disminuye su riesgo a nivel de Venezuela, por el limitado movimiento de la especie entre cuencas. En Colombia no es reportada en sus listas rojas, pese a que recién en 2001 fue redescubierta, luego de 50 años sin haber sido capturada. Con base en los criterios de distribución altitudinal restringida, con un pronunciado endemismo en las cuencas intervenidas, alto riesgo de catástrofes naturales y una bajísima representación en las comunidades estudiadas, se sugiere clasificar esta especie en la categoría En Peligro. Sus principales amenazas están relacionadas con la intervención de los recursos hídricos en toda su área de distribución, que incluye desde la disminución de la calidad de los cursos de agua por derrames petroleros y el uso de agroquímicos, hasta la deforestación intensa en las márgenes de los ríos para los cuales se le reporta. Esta situación es similar en Colombia. Su reducido tamaño poblacional la hace vulnerable a los frecuentes cambios de sustrato y de calidad de las aguas, particularmente en los ríos de la región del piedemonte andino venezolano.
Aguja de los Andes Pez loricárido pequeño cuya apariencia es bastante característica y compartida, a grandes rasgos, con las otras especies del mismo género. Su cuerpo muy delgado, alargado y cilíndrico, semejante a una rama o a un palito, le ha valido los nombres comunes de aguja, agujeta, palito, lapicero o corroncho agujita. Puede medir hasta 15 cm de longitud estándar, aunque algunos especialistas señalan que no sobrepasa los 10 cm de longitud total. Las superficies ventral y superior están cubiertas de placas óseas que se superponen, la aleta dorsal está situada muy atrás y el lóbulo superior de la aleta caudal termina en una extensión en forma de látigo. Lo más particular de este pez es su cabeza, que se alarga hasta formar un pico con el extremo redondeado y bordeado por pequeñas espinitas, que son más desarrolladas en los machos. La coloración en general es marrón parda, más oscura en el dorso y mucho más clara en el vientre, separadas ambas partes por una conspicua banda negra lateral que va desde el hocico, pasando sobre los ojos, hasta la aleta anal. Este pez presenta hábitos muy particulares, como fijarse a las ramas de las hierbas que se encuentran en las riberas de los ríos. Especie endémica de la región andina de Venezuela. Habita en ríos que drenan hacia el Lago de Maracaibo, entre 150 y 850 m de altitud. En el estado Mérida se encuentra en el río Mocotíes, en
sectores alrededor de 700 m, en el río Chama entre 150 y 850 m de altitud, y en los ríos El Rodeo y Guayabones, aproximadamente a 150 m En Táchira ha sido observada en el río Escalante entre 150 y 180 m y en la quebrada El Loro, afluente de ese río, a 550 m. En Trujillo se le encuentra en el río Motatán y sus afluentes como los ríos San Pedro, San Juan y en la quebrada Tabor, así como en Las Palmeras (650 m) y en Miraflores (800 m). Se trata de una especie con una distribución bastante restringida cuyo tamaño poblacional es pequeño. Se considera Vulnerable por haber sido registrada en muy pocas localidades y debido a que su hábitat enfrenta un continuo proceso de degradación, por lo que se infiere que las condiciones actuales podrían agravarse en el futuro cercano. Las amenazas que enfrenta la especie están relacionadas con la alteración de la calidad de las aguas y suelos, tanto altoandinos como del piedemonte, atribuida principalmente a la contaminación por pesticidas y fertilizantes utilizados en labores agrícolas y pecuarias. Su presencia en el río Mocotíes requiere de especial atención, pues se trata de una población que subsiste en el río andino más contaminado.