OLLA DE NÚRIA

Estamos en el aire

OLLA DE NÚRIA

RÉCORD TELEVISIVO

Texto y fotografía: Quim Farrero

Poco hay que decir que no se sepa de la Olla de Núria. Una carrera por encima de los 2.000 metros en su totalidad, sin ni un metro de asfalto, con un 70% por encima de los 2.700 metros, un recorrido que se dibuja solo en el mapa… Pero esta vez el nivel ha subido, gracias a la intervención del marketing y la difusión.

Está claro que, por ahora, en el momento de darle un impulso mediático a una carrera, es más efectivo un circuito privado, con medios, ganas y saber hacer, que cualquier circuito oficial de la federación que sea. Y si a eso le sumamos una apuesta clara por la difusión mediática de la mano de la todopoderosa televisión, el plato está servido. Y está muy bueno. La décimo cuarta edición de la Olla de Núria, la ya histórica carrera organizada por el Centre Excursionista de Vic, pudo combinar todos los ingredientes en un entorno de ensueño para una carrera de montaña. Tras la suspensión de la edición de este 2021 de Zegama, la “Olla” se vio favorecida con un puesto de honor en las Golden Trail Series, el circuito internacional auspiciado por Salomon, una marca que siempre ha sido puntera a la hora de promocionarse de forma digna en el mundo del trail, sin medias tintas, sin “quieros y no puedo” y con patrocinios que van más allá de camisetas y unas banderolas. Es difícil para una federación, la que sea, com-

Ohiana Kortazar se hizo con una impresionante tercera posición.

Volando por encima de los 2.700 metros.

petir, con más ganas que medios y saber hacer, contra un circuito privado bien planteado, de forma que cuando varios campeonatos, premios, circuitos o como se les quiera llamar, coinciden en una prueba, siempre alguno quedará eclipsado por el otro: en este caso, los Campeonatos de Catalunya quedaron totalmente eclipsados por el espectacular despliegue de las Golden Trail Series. Alguien debería tomar nota.

Salimos en la tele. Pero el hecho diferencial de esta edición fue la excelente retransmisión en directo que Televisió de Catalunya hizo de la carrera. No era la primera vez: ya en 2019 se retransmitió esta misma carrera, del mismo modo que se hizo con la Skypirineu en Ultra Pirineu. Por razones obvias, la retransmisión prevista el año pasado no vio la luz, pero esta vez, Televisió de Catalunya y Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya mediante, que se hicieron cargo de los costes reproducción, los que tenían una pantalla a mano pudieron disfrutar de 3 horas de carrera en directo. Un equipo de 35 profesionales, dirigidos por Xavi Casillanis, alma mater de las emisiones en directo de carreras por montaña en la televisión catalana, se puso como meta superar la audiencia media de 100.000 espectadores con un “share” del 15% de la emisión de 2019. Unos datos impresionantes para la emisión de una carrera de un deporte minoritario. Horas de helicóptero (con cámara “de verdad”), tres operadores de altura, con experiencia en montaña y en carreras y equipados con cámaras especiales de radio frecuencia (que emiten en su propia señal), instalación de una antena en altura para garantizar la calidad de esa señal en el estudio de realización, instalado en el Santuario de Núria, un dron para la zona de salida y llega-

Cuando todo viene de cara.

da en el santuario, más cámaras a pie de meta y comentaristas… Poca broma. ¿El resultado? Una exhibición técnica que permitió a todo el que quiso (o pudo) recorrer el itinerario con los mejores corredores del mundo de media distancia por montaña, en un día histórico en el que el récord de la prueba ostentado, como no, por Kilian Jornet desde hace más de una década, fue superado ¡por todos los corredores del Top10!, en directo para el mundo en una emisión que sólo se vio ensombrecida por un sistema de cronometraje al que le venía grande la carrera y que no pudo servir información fiable y en directo, algo que puso muy difícil el trabajo a los comentaristas de la carrera y a los que la siguieron. El cronometraje (y la gestión de la carrera) es un punto al que, por cuestiones habitualmente presupuestarias, no se le da la importancia que tiene y que hay que revisar en muchas carreras, sobre todo cuando se les quiere dar la proyección que pruebas como l’Olla de Núria (y muchas otras) se merecen.

Kv, Olla y ReOlla. A lo que añadiremos la “Olla Junior” para tener el programa completo del fin de semana, que empezó el sábado con el kilómetro vertical que, desde el santuario (2.000 metros) hasta la cima del Puigmal (2.913 metros) puso a prueba los cuadriceps de los participantes, algunos de los cuales repitieron al dia siguiente en los 22 kilómetros de la Olla entrando así en la clasificación de la “Reolla”, que se llevó David Sinclair - segundo el sábado por detrás de Pere Rullan - y que entró en meta el domingo en octava posición. El domingo más de seiscientos participantes salieron desde los respectivos cajones para lidiar con los 22 kilómetros del recorrido, que se inician con el ascenso de nuevo al Puigmal. Un ascenso en el que los diez corredores de cabeza mejoraron los 42 minutos del vencedor del Kv el día anterior, para después seguir el resto del recorrido a un ritmo infernal que reafirmó a Stian Angermund-Vik como uno de los mejores corredores de distancias medias por montaña del mundo.

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