1 minute read
Canadá, el dominio de la naturaleza
Con casi 10 millones de km2, Canadá es el segundo país más grande del mundo, sólo por detrás de Rusia, si bien es cierto que casi una décima parte está cubierta de agua. Esta inmensidad de superficie se revela también en su diversidad paisajística, natural, arquitectónica, gastronómica y cultural, lo que le convierte en uno de los países más polifacéticos y diversos del mundo.
En Canadá se pueden contemplar algunos de los paisajes más bellos del mundo, como las espectaculares cataratas del Niágara -que no precisan explicación alguna- o el Parque de las Montañas Rocosas, un impresionante paraje natural compuesto de montañas, ríos, lagos, cascadas, bosques, glaciares y una fascinante fauna autóctona constituida por osos polares, alces, orcas y ballenas. Esa rebosante riqueza paisajística y natural le ha hecho merecedora de entrar en el selecto club de lugares declarados Patrimonio de la Humanidad.
Pero no es el único. Canadá cuenta con 19 lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, once naturales y el resto culturales.
Si sus paisajes son inolvidables, no lo son menos sus ciudades. Franceses e ingleses se disputaron durante décadas la hegemonía de estas tierras fértiles en naturaleza y parte de su legado perdura hoy en día no solo en la convivencia de sus dos lenguas oficiales -el inglés y el fran- cés-, sino también en su cultura, en el carácter de sus gentes y en la gran riqueza artística.
Desde la maravillosa Vancouver, rodeada de mar y montaña, a la cosmopolita Toronto, la colonial Quebec, la excitante Montreal o la vibrante Ottawa. Estas cinco metrópolis conforman el quinteto arquitectónico y cultural de Canadá y son reflejo de tolerancia, multiculturalidad y progreso.
Su vasto territorio lo hace inabarcable, por eso en Politours 360 queremos ponértelo fácil. Para ello, hemos confeccionado cinco completos programas en los que podrás elegir entre la costa este, la costa oeste, dos completos Transcanadienses de 14 y 15 días en los que podrás recorrer el país desde Quebec hasta la Columbia Británica y, por último, un fantástico Crucero que parte de Vancouver hacia el sudeste de Alaska.