ISSN: 1390-8944
11 POR QUÉ HAY ARTE EN VEZ DE NADA _ UNIVERSIDAD DE CUENCA _ FACULTAD DE ARTES _ Abril / 2015
En el contexto del reciente cambio de autoridades universitarias, consideramos importante conocer las opiniones de los nuevos decano y subdecano de la Facultad de Artes.
Jimena Peñaherrera DECANA DE LA FACULTAD DE ARTES EDICIÓN: COMITÉ EDITORIAL
DISEÑO: PORTADA: ISSN:
Mgst. Reynel Alvarado Mgst. Carlos Freire PhD. Misael Moya Mgst. Walter Novillo
DCA –DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN DE ARTES
DR. Julio Mosquera
1390-8944
Entrevista Walter Novillo
Editorial
Reportaje Reynel Alvarado
Carlos Freire
La Facultad de Artes de la Universidad de Cuenca es el escenario idóneo para la concreción de diversas manifestaciones creativas que enriquecen la vida de sus actores y de la ciudadanía en general. En este contexto se justifica, con creces, la publicación de diversos soportes editoriales, entre los que un periódico desempeña un papel fundamental. Por lo expuesto, consideramos pertinente dar un golpe de timón a la publicación mensual Por qué hay arte en vez de nada para convertirla en una suerte de híbrido editorial que cumpla con las funciones de acoger artículos especializados en arte, promover las actividades de la facultad y disponer de espacios periodísticos donde la entrevista, la caricatura y la opinión editorial informen y canalicen el quehacer administrativo, educacional y de divertimento de sus protagonistas. Este es un número de transición entre las dos etapas y, como tal, presenta un formato cuasi experimental en el que se mantienen espacios del concepto anterior y se incluyen entrevistas, caricaturas y un nuevo estilo de impresión. A partir de esta entrega, su periodicidad será bimensual y continuará publicándose en forma impresa y electrónica. Estamos seguros de que estas innovaciones colmarán las expectativas comunicacionales de la comunidad universitaria y de la ciudadanía toda, de que disfrutaremos de su lectura y estaremos a la espera de los números por venir.
Jimena Peñaherrera
decana de la Facultad de Artes ¿Qué representa para usted, Jimena, como ser humano, como mujer, como madre de familia, como profesional, asumir el decanato de la Facultad de Artes?
Cuenca Encantada Lo que comenzó como una tradición religiosa que recuerda la muerte de los Santos Inocentes —un episodio del cristianismo en el que el rey Herodes ordena el sacrificio de todos los recién nacidos en Belén, para evitar la llegada de quien se creía iba a ser el próximo rey de los judíos—, se ha convertido hoy día en un espectáculo masivo, conocido como las comparsas del 6 de Enero, que cada año atrae la atención de habitantes y turistas de la ciudad de Cuenca. Durante varias décadas, Amistad Club y la Unión de Periodistas del Azuay han convocado a este evento, en el que se otorgan premios a las mejores propuestas. Por doce años la Facultad de Artes ha participado en esta manifestación de la expresión popular, hasta que, por primera vez, nuestra comparsa ha ganado el primer premio.
Art-Ensamble: orgullo de la Facultad de Artes Walter Novillo Uno de los objetivos primordiales que la Universidad de Cuenca persigue en la actualidad es evidenciar los diferentes logros que sus docentes y estudiantes alcanzan dentro de la producción académica, científica, cultural y artística. Además, si se establece una conexión con la colectividad, se consigue un realce poderoso de inclusión social y se visibiliza mejor el compromiso con el quehacer educacional del país. Art-Ensamble tuvo sus inicios en el Conservatorio From-a, y gracias a la gestión de la anterior administración, liderada por el decano Carlos Rojas, actualmente forma parte de la Escuela de Música. Esta Orquesta de la Facultad de Artes cumple objetivos de desarrollo y crecimiento universitarios. Además de mostrar el trabajo académico y artístico de nuestros estudiantes y de su director, el Maestro William Vergara, vincula a aquellos músicos que, impulsados por la pasión y disciplina que conlleva la música, aun sin pertenecer al cuerpo discente de la Universidad de Cuenca, pueden participar en este maravilloso proyecto. “Las personas que se van sumando ya no son solo integrantes de alguna institución; viene gente que ha podido, digamos en sus tiempo juveniles, practicar algún instrumento musical y ahora son profesionales de la arquitectura, la bioquímica, etcétera; y esto también forma parte de los proyectos de vinculación con la colectividad”, menciona Vergara.
La orquesta pretende difundir su trabajo en espacios nacionales e internacionales, empezando por compartir sus logros con los estudiantes de la universidad. Al respecto, William Vergara comenta: “Queremos que los estudiantes de la Universidad de Cuenca sientan como suya la orquesta, pues poseer una agrupación musical de este tipo es un motivo de prestigio” y agrega que “La organización de sus conciertos, analizado desde el punto de vista económico, no es un gasto: es una inversión que visibiliza en la comunidad nuestro trabajo”. A principios de este año, Art-Ensamble compartió escenarios con artistas de varios géneros musicales, y su profesionalismo ha permitido llevar a cabo con absoluto éxito cada uno de los conciertos organizados. “Es increíble poder participar en estos eventos, pues se da el aprendizaje de ambos lados. La orquesta es un espacio formativo en el que se valoran los procesos de aprendizaje; entonces, el hecho de compartir con músicos profesionales como el caso de Dharma o de Juan Fernando Velasco, siempre deja su aporte e inquietudes en los chicos. De aquí nacen otras perspectivas artísticas para ellos, y esa experiencia enriquece enormemente a la orquesta porque crea versatilidad”, afirma Vergara con orgullo. Es importante apoyar de manera integral estas actividades que implican un gran sacrificio administrativo, económico, académico, pero que, sobre todo, dejan en alto nuestro nombre como institución, pues sus resultados evidencian el gran compromiso que posee la Universidad de Cuenca con el desarrollo social, académico, económico y artístico-cultural del Ecuador.
2
Por iniciativa de varios docentes, se propuso algo diferente: que el peso de la propuesta radicara en el aspecto conceptual. Luego de varias reflexiones, se prefirió interpretar una de las leyendas más hermosas de los cañaris: el origen de su cultura, donde la Guacamaya, como personaje mitológico, es el gran protagonista. Este proyecto fue avalado por el Departamento de Vinculación con la Colectividad. Fue una propuesta artística coherente con nuestro contexto, una obra que se identifica con Cuenca, y un regalo de la Facultad de Artes a nuestra ciudad. Esa quizá fue la más grande motivación. Para esta comparsa, la participación estudiantil fue multitudinaria. Diseñaron y confeccionaron sus propios trajes; trabajaron activamente en los acabados y la construcción de los carros alegóricos; musicalizaron los segmentos de la obra y dirigieron la puesta en escena de las coreografías presentadas. Emblemáticos íconos como El Puente Roto, la Catedral, los Sauces Llorones, la Guacamaya, la artesanía o la Chola Cuencana, con la música y representaciones teatrales de la leyenda cañari, conformaron la comparsa Cuenca Encantada. Se debe destacar el decidido apoyo de las autoridades universitarias. Se reconocieron horas de prácticas preprofesionales a los estudiantes por su participación; se dio un importante apoyo económico; se facilitaron los permisos respectivos a profesores y estudiantes; se facilitaron las herramientas, los materiales y los talleres; en fin, se sintió un compromiso integral por parte de todos, que convirtió la comparsa Cuenca Encantada en una manifestación artística de la universidad.
3
Previo al desfile, se entregó a los asistentes una hoja impresa que describía el tema y facilitaba la interpretación de la obra.
4
Cuenca Encantada, una comparsa que dio la primera Máscara Dorada a la Facultad de Artes, ratifica la pertinencia de la formación artística en el contexto de la sociedad actual.
1
5
1: Walter Novillo 2-5: Daniel Lopez
¿A qué se debe este importante reconocimiento? ¿Cuáles fueron las causas para que se otorgue el primer premio al trabajo creativo de profesores y estudiantes? Una de las razones pudo ser que en esta ocasión se dio un giro conceptual al tema de la comparsa. Tradicionalmente, se ha manejado un trasfondo irónico, jocoso o satírico acerca de temas de coyuntura nacional: la política, el espectáculo o el deporte. Lo que se buscó, esta vez, fue impresionar al público no con la ironía, sino con un manejo artístico de excelencia.
Ante todo, considero que el papel laboral de la mujer es de similar importancia al del hombre, pues la mujer puede desenvolverse en todas las áreas. En mi caso, puedo ahora desarrollarme como decana, tanto como antes lo hice en calidad de docente; pero, de igual manera, cada labor tiene una responsabilidad y exige cumplir con determinadas obligaciones. De hecho, tengo por principio cumplir con las obligaciones de las actividades que uno se propone, a las que uno accede o a las que pueda resultar asignado.
¿A qué tipo de dificultades actuales se tiene que enfrentar el decanato de la Facultad de Artes? Como todas las facultades, incluso como la Universidad Ecuatoriana, estamos asumiendo una serie de cambios que son positivos desde un punto de vista académico, pero que se han producido de manera muy rápida, y para los cuales se ha debido tener respuestas en corto tiempo. Este es el verdadero reto al cual el decanato se está enfrentando, especialmente en las artes. Además de estar inmersos en transformaciones universitarias, tenemos cambios muy específicos dentro de nuestra área. Poco a poco, hemos ido ganando terreno para que se entienda que las artes tienen particularidades. No es que seamos diferentes porque queremos ser diferentes, sino que las artes tienen otra naturaleza y se desarrollan con otras necesidades, si se les compara con otras disciplinas y áreas del desarrollo científico o tecnológico. Hemos ido mostrando nuestros productos y vemos que ya se considera de manera más positiva la producción artística, y en esa línea de trabajo deberemos mantenernos. Consecuentemente, hay que concienciar acerca de que el arte necesita otros procesos para ser evaluado, para ser medido; así también para observar los logros que tiene una Facultad de Artes, cuyos productos no siempre son físicos ni tienen un rubro económico, como en otras carreras, sino que muchas veces son producciones espirituales e intangibles como pueden serlo las composiciones musicales. Y, sin embargo, también somos ejes de producción dentro del país, ya que producimos bienes culturales.
¿Cómo visualiza a la Facultad de Artes de aquí a cinco años? ¿Cuáles son sus metas? Estamos en un proceso de desarrollo académico desde hace varios años, y este es, me parece, el momento clave en que nosotros nos consolidemos como facultad; es decir, el momento histórico en que las artes se consoliden como carreras, ya que, en buena medida, las estamos institucionalizando. Y entiendo que nos tenemos que insertar a la vez en el mundo académico y el profesional, de modo mucho más armónico. Entonces, en los próximos años la Facultad de Artes tendrá que ir nutriéndose, aprendiendo de una serie de procesos que le permitan dar una formación general y básica a los artistas. Obviamente, los artistas se desarrollan bajo diversos campos, pero nosotros como facultad nos sentimos obligados a contribuir a la apertura de nuevos espacios para el desarrollo artístico.
¿Qué mensaje le gustaría compartir con los docentes y estudiantes de la Facultad de Artes? El mensaje más importante que pudiera compartir es que para hacer un buen proyecto, este debe ser un proyecto de grupo, de equipo. Una sola persona no puede mover ni una facultad ni un proyecto ni un ideal. Mi mensaje sería un llamado a que trabajemos mancomunadamente, para llevar adelante esta Facultad de Artes. No olvidemos que, si no los únicos actores, al menos sí los actores más importantes a quienes interesa que las artes avancen somos nosotros: los estudiantes y docentes que estamos aquí. Entonces, será conveniente el trabajo en equipo. Estimo que cada persona tiene un potencial que no tiene otra, y conjugar ambos potenciales nos hará ricos y nos hará grandes. Pienso que solo así podremos ser y hacer Facultad.
Esteban Torres Díaz
subdecano de la Facultad de Artes ¿Qué significa para ti como persona y como artista asumir este cargo de subdecano? Siempre he contado a otras personas que acá llegué a una casa, más que a una institución, para trabajar, y eso sucedió más o menos hace unos doce años. Así como lo escribí en Facebook, para mí es un orgullo y bastante responsabilidad. Uno no estudió para ser subdecano o decano; sin embargo, la vida te pone unos retos que tienes que ir asumiendo, a veces errando un poquito —pero sin intención, obviamente—, siempre tratando de hacer las cosas bien para todos; en este caso, para las cuatro escuelas.
¿Cuál es el reto más importante que actualmente el subdecanato tiene que afrontar? Más que como subdecanato, como Universidad el más importante reto es el de las acreditaciones, que es un proceso primario en un ambiente político. A la vez, constituye una solicitud del Gobierno, y veo el proceso de acreditación con buenos ojos. No digo que antes estuvieran las cosas mal hechas, pero creo que sí estuvieron sin orden, sin disciplina, y la acreditación nos ha permitido evidenciar todo lo que se ha hecho bien, pero ya con parámetros, con pasos, con peldaños y evidencias palpables.
¿Cómo quisieras ver a la Facultad de Artes de aquí a cinco años? ¿Qué anhelos tienes? Como te dije, yo vine hace doce años acá y vi una facultad hermosa, y ahora es bellísima y va por ese camino. Yo quisiera ver una facultad madura, una facultad llena de gente joven, pero no solamente joven de edad sino de cerebro, que es diferente. Una facultad que tenga ya un espacio importante no solo en el contexto local sino internacional. Recordemos que estamos en una ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad, y nadie nos ha dado este título, pero yo creo que también somos los guardianes del patrimonio actual, no solo del patrimonio de hace años sino también del actual. Somos testigos, somos constructores y fabricantes del patrimonio que de aquí a cien años otros van a ver y a disfrutar. Esa es la gran responsabilidad; por lo tanto, yo quisiera ver una facultad superactiva en ese sentido. Creo que ya lo estamos haciendo; no es que esté pensando en hacer: tenemos exponentes de alta calidad en las cuatro escuelas, incluso con premios nacionales de gran prestigio. Quiero que nuestra actividad sea más palpable, que cuando vean nuestros productos sepan que es de la Universidad de Cuenca y de nuestra facultad. Y esta parte de nuestra visualización tendremos que fomentarla más.
¿Algún mensaje para los docentes y estudiantes de la Facultad de Artes? Tengo dos frases que he ido poco a poco acuñando. La primera dice que todo aquel que ama el arte es mi amigo. ¿Por qué digo esto yo? Porque cuando veo que alguien habla, por ejemplo, de música, y lo hace con pasión, yo me conecto de inmediato, y es que esa persona ya se está presentado hacia mí. Eso me pasó, por ejemplo, con Julio Mosquera; yo no era amigo de Julio Mosquera pero le escuché empezar a hablar del arte, y sin darnos cuenta terminamos en la misma mesa hablando del arte sin que nadie nos presentara; de modo que esto es muy real. Mi otra frase dice que existen muchas maneras de hacer historia, y hacer arte es una de ellas; y esto también es verdad, pues cuando tú visitas otro lugar, otro país, lo primero que “visitas” es el arte, su cultura, sus artistas, su música, su gastronomía… Definitivamente, hay muchas maneras de hacer historia: hacer guerras con armas es una forma de hacer historia, pero me gusta más hacer una guerra de arte, de música, de palabras, de pinceles, de teatro, de lenguaje corporal… Así pues, les dejo estas dos frases como mensaje final.