La Gruta
Abril de 2014
nº
448
BOLETÍN del SANTUARIO NACIONAL de La Gruta de Lourdes Avda. de las Instrucciones 2223. MONTEVIDEO - Uruguay. Tel.: 2222 3532
2014
Sínodo familia de los obispos sobre la
Jesús en la boda de Caná: padres e hijos Al tercer día hubo una boda en Caná, un pueblo de Galilea. La madre de Jesús estaba allí, y Jesús y sus discípulos fueron también invitados a la boda. Se acabó el vino, y la madre de Jesús le dijo: Ya no tienen vino. Jesús le contestó: Mujer, ¿por qué me dices esto? Mi hora no ha llegado todavía. Ella dijo a los que estaban sirviendo: Hagan todo lo que él les diga. Había allí seis tinajas... que contenían unos cien litros cada una. Jesús dijo a los sirvientes: Llenen de agua estas tinajas... y Jesús les dijo: Ahora saquen un poco y llévenselo al encargado de la fiesta. Así lo hicieron... Juan 2,1-12 La Gruta n.448
1
Actualidad
Dehoniano premiado Pino Puglisi: mártir de la mafia por ONU Es un sacerdote dehoniano, misionero en Mozambique (África) desde hace 40 años y es un médico cirujano que por atender todo tipo de enfermos se contagió de sida. Se llama Aldo Marchesini, de 72 años.
El 24 de marzo pasado el p. Aldo recibió un importante premio por parte de la ONU. La ONU premia con un premio especial a personas e instituciones que se han destacado por mejorar la salud de la población mundial. Junto al p. Aldo ha sido premiada una institución presente en 160 países para combatir la mortandad en el parto. Los premios serán entregados en New York el 11 de junio. El p. Aldo llegó a Mozambique en 1974 siendo sacerdote y médico cirujano; trabajó en varios hospitales, hasta que desde 1981 se asentó en el hospital de Quelimane, donde sigue atendiendo como cirujano y sacerdote a los enfermos. Durante la guerra civil en Mozambique se mantuvo en su trabajo y fue secuestrado y encarcelado. Llegó a ser uno de los médicos más apreciados en Mozambique por su profesionalismo, sus obras, su constante disponibilidad. En marzo de 2003, después de un control médico en Italia, descubrió ser seropositivo y haberse contagiado el virus del sida, probablemente en contacto con sangre infectada. Escribió él mismo: “De primera, quedé sin palabras; pero no sentí turbaciones, ni rebelión ni miedo. En mi calidad de médico muchas veces había tenido que comunicar esta noticia a los pacientes. Ahora era yo el paciente. Lentamente sin embargo un cambio se dio dentro de mí. Me parecía estar en un tren en el que había viajado hasta ahora sobre los mismos rieles que los demás, pero del cual se había desenganchado improvisamente un vagón en 2
el que me encontraba yo solo, embocando otros rieles. Todo seguía igual pero todo cambiaba, y para siempre”. En aquel tiempo en África, hablar de sida era hablar de una muerte inevitable. “Veía que mi viaje se acercaba a la terminal. Acepté con paz la idea de la muerte y me sentí espiritualmente libre como nunca. Igual que san Pablo me sentía feliz de vivir y también feliz de morir, siempre en el Señor”. Marchesini sabía que en Europa había remedios contra el sida, inaccesibles para los africanos por sus precios, pero sintió como una injusticia que él solo pudiera tener acceso a los remedios en Europa, mientras sus enfermos no tenían ninguna posibilidad. Enterándose del programa “Dream” (=sueño) para África con remedios a precios accesibles para el sida, voló enseguida a Roma y consiguió los remedios para sus hospitales. No se quedó en Italia para curarse a si mismo. “Opté por no esconder a nadie mi condición y la revelé públicamente. Pensé que mi experiencia podía ser útil para dar ánimo a muchas personas y que por los menos podría servir para romper la espiral del silencio, el estigma y el ostracismo que rodean a esta enfermedad. Agradezco al Señor que me ayudó a aceptar con serenidad mi condición y sobre todo por haberme dado la oportunidad de sembrar una semilla de esperanza que floreció en muy breve tiempo”. Padre Aldo se define como médico de los cuerpos y de las almas, como se deduce de sus numerosos libros de espiritualidad.
2014 Sínodo de los obispos sobre la familia Jesús en la boda de Caná: padres e hijos Al tercer día hubo una boda en Caná, un pueblo de Galilea. La madre de Jesús estaba allí, y Jesús y sus discípulos fueron también invitados a la boda. Se acabó el vino, y la madre de Jesús le dijo: Ya no tienen vino. Jesús le contestó: Mujer, ¿por qué me dices esto? Mi hora no ha llegado todavía. Ella dijo a los que estaban sirviendo: Hagan todo lo que él les diga. Había allí seis tinajas de piedra destinadas a los ritos de purificación de los judíos, que contenían unos cien litros cada una. Jesús dijo a los sirvientes: "Llenen de agua estas tinajas". Y las llenaron hasta el borde. Ahora saquen un poco y llévenselo al encargado de la fiesta. Así lo hicieron. El encargado probó el agua cambiada en vino y como ignoraba su origen, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo y le dijo: "Siempre se sirve primero el buen vino y cuando todos han bebido bien, se trae el de inferior calidad. Tú, en cambio, has guardado el buen vino hasta este momento". Este fue el primero de los signos de Jesús, y lo hizo en Caná de Galilea. Así manifestó su gloria, y sus discípulos creyeron en él. Después de esto, descendió a Cafarnaún con su madre, sus hermanos y sus discípulos, y permanecieron allí unos pocos días. Juan 2,1-12
La Gruta n.448
Jesús participa de una fiesta de boda, al co* mienzo de su ministerio público. De vuelta el evangelio nos presenta el tema de la Iglesia (Jesús con los discípulos que creen en Él y su Madre) en un acontecimiento familiar. Son muchas los motivos de reflexión que nos propone este texto, pero es de destacar el diálogo entre Jesús y su Madre, donde Él establece una nueva relación, adulta, entre la madre y Él. La Iglesia es también una comunidad de adultos, signo de una sana relación que debe existir entre padres e hijos, que no puede ser la misma cuando los hijos son niños, adolescentes o adultos.
Preguntas ¿Cómo crees que María llegó a decir “hagan lo que Él les diga”? ¿Qué significa para ti pedir la intercesión de María por tus problemas? ¿María tenía confianza en su Hijo porque era Hijo de Dios o por haber estado atenta a cómo crecía su corazón y lo conocía como persona responsable y amoroso con quien lo necesitaba? 3
La reacción de Jesús es muy fuerte ha* cia su madre: pone distancia en su relación filial y le dice: “mujer”. ¿Por qué Jesús reacciona en una manera tan fuerte? Si consideramos la experiencia de los padres de hijos adultos, se entiende esta situación: Jesús le indica a la madre que su decisión no depende del pedido de la madre, aunque ella le comunique la urgencia en la que viven esos novios con la falta del vino en su fiesta. En realidad Jesús invita a María a ponerse en el lugar de discípula suya, no ya de madre suya. María está atenta a la necesidad de los * novios y lo comunica a su hijo. La Familia de Nazaret ya está acostumbrada a que el centro de sus preocupaciones es el que más necesita: ellos están al servicio de la persona. Pero ahora, la misión de María de orientar como formadora de la vida a su hijo, ya terminó. Jesús le propone una nueva relación en la que ella deberá adaptarse y continuar siendo madre pero avanzando hacia otra etapa: ser madre de otros.
Salmo 22 (23) El Señor es mi pastor, Nada me faltará. En lugares de verdes pastos me hace descansar; Junto a aguas de reposo me conduce. El restaura mi alma; Me guía por senderos de justicia Por amor de Su nombre. Aunque pase por el valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque Tú estás conmigo; Tu vara y Tu cayado me infunden aliento. 4
En la misión de ser padre y * de ser hijo, encontramos algo común que nos define como seres adultos: dejar crecer al otro, acompañarlo sin tomar decisiones por el otro. María acepta con mucho amor y confianza la decisión de Jesús: sea cual sea, estará bien porque Él siempre procuró el bien a los demás. Por eso en su frase: “hagan lo que Él les diga” invita a los que están atentos al servicio de otros a considerar que lo decido por Jesús es para darnos vida y en abundancia. Los padres suelen tener miedo en la toma * de decisiones de sus hijos; tratan de orientarlos; no quieren que sufran lo mismo que ellos, si pueden no golpearse, mejor. María estaba advertida que una espada atravesaría su corazón y ¿quién puede negar ese dolor de madre ante el sufrimiento de su hijo cuando fue llevado a la muerte? No dejó de ser madre por dejarlo vivir su misión.
Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos; Has ungido mi cabeza con aceite; Mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa del Señor moraré por largos días. Amén.
Miércoles 16 de abril a las 17:30 hs. en el despacho parroquial: reflexión bíblica preparando el próximo boletín.
2014 Sínodo de los obispos sobre la familia Padres e hijos La relación entre padres e hijos ya no es tan definida y clara como en otros tiempos cuando los niños y los adolescentes acataban las indicaciones de sus padres y los jóvenes llegaban rápidamente a formar otra familia. Es evidente que en el día de hoy hay niños y adolescentes que deciden como adultos y jóvenes que se parecen a adolescentes. A menudo con la complicidad de los padres.
Los adultos pueden estar sufriendo un desequilibrio en los valores, cuando buscan permanecer siempre actualizados en la moda, la apariencia, distracciones, es decir estancados en la adolescencia. Claro que los padres no pueden mantener el mismo nivel de comunicación si sus hijos son niños, adolescentes, jóvenes o adultos. La diferencia de edades, marca una manera de dirigirse al otro, según su capacidad de respuesta. Habría que tener en cuenta con mucha atención, los signos que vayan apareciendo en los hijos, otorgándose pasos de crecimiento y de independencia de ambas partes. En el momento actual al joven le cuesta retirarse del hogar de sus padres: ¿por qué? Se tiende a crear en la familia un vínculo “tan fuerte” que se provoca una dependencia del hijo hacia los padres. La experiencia, los años, el haber cometido errores en la vida, hace que los adultos quieran decidir en lugar de los hijos pues “ya la vivieron” sin ponerse a pensar que el entorno cambió: los más jóvenes tienen más cintura en ciertos temas, tienen otra facilidad para ver las coLa Gruta n.448
sas de “otra manera”; por otro lado, los adultos olvidan el proceso que ellos mismos vivieron con sus padres. Entre padres e hijos es frecuente el choque de ideas llenas de “verdad”: cada cual con la suya, sin flexibilidad, sin entender las motivaciones del otro y de ahí en más ¡qué difícil es el camino para entenderse! En realidad sería posible que uno enseñara al otro y con paciencia se podría hacer el esfuerzo por entender al otro solo porque se lo ama: lo más importante no es tener la razón sino compartir razones. ¡Qué el chico no sufra como nosotros! Es la motivación de los padres. Los padres que alguna vez vivieron el pedido de un hijo de ir sólo a la escuela, siendo que siempre tuvo la compañía del adulto para eso, seguro se ponen a pensar en todos los peligros súper-avisados en los informativos. ¿Cuándo es ese tiempo para que no esté bajo la mirada y protección del adulto? ¿Se le capacita al niño para ese momento como algo natural, como algo terrorífico, o se posterga hasta los 18? Hay casos y casos... Los hijos dan las señales de que se acerca el momento de su independencia: si los padres aprecian éstas señales, decidirán con sabiduría cuándo será el tiempo para obtenerla. En el camino de responsabilidad influye no solo el ejemplo de los padres, sino también el de los hermanos, amigos y conocidos, y lo que ellos viven en su relación con sus padres. En este ambiente familiar se proponen errores y aciertos 5
como parte del proceso de crecimiento. María supo acomodarse al criterio de Jesús: “hagan lo que Él les diga”. ¿Sabía lo que iba a decidir Jesús? Ni se le ocurría. ¿Tenía miedo que no cumpliera con esos amigos? Si Jesús fue educado en preocuparse por el otro, cuando el otro lo necesitaba ya se convertía en su centro de atención: esta era la tranquilidad de María, pero ¿de qué depende este resultado maravilloso? Todos tenemos nuestra propia vida como resultado de la formación de otros, llamemos padres, abuelos, instituciones, sociedad... Y también del tiempo que ellos nos dedicaron. Y si estamos desconformes con lo que recibimos pues nos marcó de una manera negativa, ¿hacemos algo por ayudar a la siguiente generación, para que se sientan escuchados y entendidos? Parece que eso es lo que reclaman… María supo a partir de ese momento aceptar ser la discípula de su propio hijo. ¿Cabe esta actitud en los padres con respecto a sus hijos adultos? Cuando el hijo es adulto ¿qué hacen los padres? Tratan de vivir su nueva etapa independientemente de sus hijos, o ¿siguen atados a la cuerdita jardinera para no “perder vínculos familiares”? Existe la tentación de olvidarse que los hijos no son propiedad de los padres: pensemos en el chantaje sentimental de quien dice “después de todo lo que te dimos… ¿te olvidas de nosotros?” Y ahí viene el reclamo a tantos años de entrega. El ejemplo de María es tan lleno de vida, ejemplo y gracia de Dios, que alegra el alma tenerlo presente en este Evangelio. ¡Qué poco aparece y qué perfume delicado regala al que aprecia su enseñanza! No es posible evitar los problemas: pero cuando los padres entran en conflicto con sus hi6
jos, cuando se quiebra el diálogo ¿se busca ayuda? ¿Hay comunicación con una comunidad cristiana, para ayudar a discernir nuestras actitudes? Puede que no se quiera ver una realidad dolorosa: efectos de drogas, alcohol, falta de amigos, malhumor, falta de “viento por dentro” que es para los cristianos dejar actuar al Espíritu Santo para que mueva la persona a caminar con ánimo, esperanza, amor por los demás. Como buen principio de discernimiento familiar podríamos decir que cuanto más complejos se hacen los problemas, tanto más es determinante no detenerse en lo accesorio, sino buscar lo esencial.
¿Pueden entorpecer los padres la formación adulta de los hijos? ¿Es sano para una familia que los padres tengan expectativas de vida para sus hijos, siguiendo un modelo que pretendían para ellos mismos? ¿Los padres aceptan que su responsabilidad en la formación del niño es muy fuerte y elemental y que disminuye progresivamente a medida que el hijo acepta responsabilidades y desafíos, riesgos y frustraciones? ¿A quién se dirigen los padres cuándo se sienten que ya no dialogan con sus hijos, porque no se entienden? ¿cuánto hace la familia para que los hijos adquieran una capacidad para discernir, construir sus propias ideas, para saber decidir qué es lo mejor para sí mismo y para los que lo rodean?
Parábolas de HO Y ¿Modelos? ¿Para? HOY Solemnidad de la Anunciación y de la Encarnación del Verbo en el seno de María Santísima por Obra y Gracia del Espíritu Santo y el Sí de María. Todos los niños y el personal del Colegio Santa Bernardita fueron al templo para una Misa Solemne. Justo comienza la S. Misa. El templo lleno. ¡Sorpresa! Una niña de preescolar sentada en el suelo con todos los compañeritos, levanta la mirada. ¡Queda con los ojos fijos en un punto. Se inmoviliza. Se endereza un poquito. Junta sus dos manitas, se acomoda un poquito y yo observándola entre la multitud de niños y padres… Miro el objeto que la atrapó: la imagen de la Virgen de los Treinta y tres. Miro con atención a la niña y la veo imitar a la pose de la Virgen. ¡Igualita! Tal cual. La Virgen paradita. La niña sentadita en el suelo, un poco erguida. Un segundo y la pequeña mira sus manos juntitas después mira a las manos de la Virgen vestida de celeste y Blanco. Un suspiro de satisfacción. Copia perfecta. Misión cumplida. Seguidamente me acomodo cerca de la puerta de entrada. Una pareja de padres llega con un pequeño de la mano. Amagan a entrar. El nene se para asustado. Desconoce totalmente el ambiente. Muy diferente de la escuela de todos los días. La escuela es ya una prolongación de la casa. La entrada, el mástil, la galería el pasillo, al salón una breve oración y al aula, con una maestra conocida y compañeritos. En cambio el Templo… Edificio alto, semi oscuro, una cantidad de niños, vistos todos de espaldas y…todo diferente, nada que ver. El niño se retira unos dos metros afuera del templo arrastrando a la mami de la mano. Ella lo sigue. Queda afuera. Allí 4, 5 personas adultas tranquilamente tomando mate. El papá quedó en la puerta, la mamá fuera con el nene y “los materos”. Pensé si los hijos deben ser como los padres o si los padres tienen que ser como los hijos… También pensé si tenemos La Gruta n.448
que bajar la edad de imputabilidad de los hijos o aumentar la imputabilidad de los padres. Me propuse de analizar la diferencia entre “educación” y “amagues”. Lo mismo, si queremos a los padres como colaboradores en la educación y en la seguridad o si nos conformamos con mencionarlos para después despacharlos. ¡Tienen que laburar! Si no ¿Quién paga las jubilaciones?... ¿Uds. vieron o no cómo los hijos imitan a los padres? ¿Vieron el poder de seducción que tienen? El narcotraficante es el que trafica narcóticos. ¿Se podrá traficar educación, buenos modales, dominio de los propios instintos? ¿Y los que trafican violencia doméstica y callejera, malos ejemplos, injusticia, usura? En el día del niño por nacer, me quedaron tres imágenes de niños. La que quería “imitar a la Virgen”, el que “no quería nada” y se ganó a la madre, y los que “siguen al grupo”. Queda mucho por hacer. La educación es la más linda, y arriesgada aventura: proponer modelos y caminar por las “altas cumbres” sin miedos, creyendo que el ser humano sigue dejándose seducir por las bellezas, noblezas y grandezas de la vida humana. Otros, chatos como invertebrados, dejándose arrastrar por las últimas modas; otros, vegetando. Dios nos mandó a su Hijo para que fuera no solo modelo de santidad, sino recurso, fuerza y tesoro atrayente: Jesús. Si en dos mil años no lo hemos entendido, algo falló. Yo estoy seguro que los adultos, los padres, los dirigentes, los curas, estamos con lagunas notables. Jesús no solo trajo ejemplos para la mejor educación, sino para mucho más: la salvación. La Pascua nos llama a reflexionar y a la conversión. Rodolfo Bonci. 7
Oración a los pies de La Gruta Oh María, a los pies de la Cruz aprendiste de Jesús el perdón generoso y así ante las dudas sobre tí respondiste con el perdón.
Miércoles 16 de abril a las 17:30 hs. en el despacho parroquial: reflexión bíblica preparando el próximo boletín. Viernes 9 de mayo a las 18 hs. en el despacho parroquial: formación de los voluntarios del día 11.
Ante la persecución y las muchas murmuraciones respondiste con el perdón. Ante Ia infamia de Ia conspiración contra el Justo, respondiste con el perdón. Ante la traición y el dolor que conlleva, respondiste con el perdón. Madre de Ia Misericordia, tu corazón bondadoso rebosa de clemencia, por ello te imploramos que intercedas para el perdón de nuestros pecados. Oh Madre, enséñanos a perdonar. Así llegaremos, recorriendo contigo la Semana Santa, a celebrar con gozo la alegría de la Resurrección de tu Hijo Jesús. Amén.
Tiempo de Pascua:
8
Abarca los 50 días que van desde la Solemnidad de la Pascua (20 de abril) a Pentecostés (8 de junio). Es seguramente el tiempo más largo e importante del año litúrgico. En el transcurso de este tiempo, la liturgia invita a los cristianos a alegrarse por la Resurrección de Jesús, a encontrarlo en las celebraciones, sobre todo dominicales, a afirmar la esperanza de nuestra resurrección después de la muerte. Es un tiempo oportuno para recordar a nuestros difuntos que ya viven con Dios. Y para vivir, movidos por el Espíritu, como criaturas nuevas, discípulos y misioneros del Señor Resucitado.