Las escarchas encontradas no eran tan frías como el frío que hizo cuando te fuiste tu amenaza fue un gong expandiéndose en el fondo torácico cayéndose a pedazos La vida se vio pesada sin sentido, un peso eterno. tanta falta allí donde duele, Como se lamenta el caracol de la pérdida de su casa la babosa al sol y sal La mente viajaba sin rumbo el corazón era una cascara crujiente desgajándose. La esperanza solo esperaba lo imposible, una vuelta atrás Pero lo dicho fue para decir adiós sin vuelta…