Guía para la prevención local hacia políticas de cohesión social y seguridad ciudadana

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA


GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

PRÓLOGO

La seguridad en la región de América Latina y el Caribe es reconocida como un elemento fundamental de la política pública y del desarrollo de las ciudades. El crimen urbano y la violencia continúan teniendo un impacto dramático en la habilidad de las ciudades y de las comunidades de la región para alcanzar logros sustentables en el desarrollo urbano y social. El crimen es uno de los síntomas de los fracasos de las políticas de desarrollo urbano, no solo de la región sino del mundo. Las tendencias y condiciones de vida en áreas urbanas varían considerablemente al igual que los niveles del crimen y la inseguridad. Sin embargo, la región en su conjunto muestra los más altos índices de violencia urbana del mundo y esto es particularmente cierto en las zonas precarias. En la mayoría de los países y las ciudades, la violencia urbana y el crimen limitan los esfuerzos del desarrollo, cuando los recursos VRQ GLYHUVLÀFDGRV D FRPEDWLU OD LQVHJXULGDG (O LPSDFWR GH OD inseguridad, el crimen y la violencia sobre la calidad de vida, el acceso a servicios y el acceso a las oportunidades para los moradores, es severo particularmente para las personas de bajos ingresos. Las experiencias regionales e internacionales indican que los esfuerzos para mejorar la seguridad y el sentimiento de seguridad entre los residentes y los comercios en una ciudad debería ser la responsabilidad de todos los niveles de gobierno. Las políticas y los marcos nacionales que enfatizan la justicia social y la inclusión, son esenciales. Estos deben ser complementados por gobiernos locales y políticas urbanas enfocadas a la prevención y la reducción de la vulnerabilidad. El reto es reducir el crimen y la violencia de forma sustentable sin dañar el SURFHVR GHPRFUiWLFR (VWR UHTXLHUH DUWLFXODU ÀUPHPHQWH ODV SROtWLFDV GH VHJXULGDG ORFDO FRQ OD planeación local del desarrollo, con el mejoramiento y reforzamiento de la ciudadanía, y con la gobernanza y la participación respaldada por políticas de seguridad de orden nacional. El objetivo de la presente publicación es generar una guía para las autoridades locales y sus actores asociados en el papel que desempeñan al enfrentar el tema de la inseguridad. Existen muchas prácticas y experiencias positivas y exitosas que se han consolidado en la región a nivel local en los últimos 20 años. El proceso de democratización, una sociedad civil bien establecida y la presencia de alcaldes decididos han llevado a prácticas y acercamientos innovadores en el combate a la prevención del crimen. Sin embargo falta mucho por hacer en la consolidación de logros, en el establecimiento de marcos nacionales que faciliten el trabajo de los gobiernos locales y en la diseminación sistematizada de acciones de prevención entre autoridades locales a través de la región.

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PRĂ“LOGO

/D SUHVHQWH JXtD GHÀQH DQiOLVLV GHWDOODGRV GH SURSXHVWDV HQ OD SUHYHQFLyQ GHO FULPHQ DGRSWDGD en diversas ciudades de la región y una serie de herramientas que incorporan la acción local. Estå dirigida a los líderes generadores de la política local, a los departamentos tÊcnicos de los gobiernos de las ciudades y a los líderes locales en general. Provee un acercamiento riguroso, paso a paso, en el anålisis de los problemas, en su traducción a opciones, políticas y en la implementación, monitoreo y evaluación de planes. Este acercamiento, llevado por una amplia estrategia basada en un entendimiento claro del contexto local, parece tener un mayor Êxito que las aplicaciones ad hoc de iniciativas individuales. Por lo anterior, y a causa de la importancia del contexto local se ha decidido editar un Segundo volumen para el Caribe Anglófono, que cuenta con diferentes tradiciones y modelos HQ JREHUQDQ]D TXH SUHVHQWDUi HMHPSORV PiV HVSHFtÀFRV HQ HO LGLRPD LQJOpV Las herramientas aquí presentadas surgen de la vasta experiencia de ONU-HABITAT en muchas ciudades del mundo y del diålogo regional e internacional que se ha llevado a cabo por mås de 20 aùos. Queremos agradecer a los expertos de la Universidad Alberto Hurtado en Santiago de Chile por el trabajo en traducir estas experiencias globales en forma relevante a ciudades de AmÊrica Latina. ONU-HABITAT continuarå trabajando con la Universidad así como con otros actores interesados en la región para complementar esta SULPHUD JXtD FRQ PyGXORV HVSHFtÀFRV \ FRPSRQHQWHV TXH WUDWHQ ORV WHPDV GH OD LQWHUYHQFLyQ GH jóvenes y comunidades. Un gran número de expertos en los temas de desarrollo urbano y prevención dieron su conocimiento y comentarios a la creación del presente documento. Estån mencionados en los agradecimientos. Yo particularmente quiero reconocer la valiosa contribución de la Agencia Sueca de Cooperación y Desarrollo (Swedish Agency for Development Cooperation, SIDA) en el apoyo a esta guía, así como a la Organización Canadiense para la Estrategia Nacional en la Prevención del Crimen (Canadian National Crime Prevention Strategy) que apoyó el desarrollo de la versión global original.

Anna Kajumulo Tibaijuka, Sub-Secretaria General de las Naciones Unidas Directora Ejecutiva, UN-HABITAT

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

INTRODUCCIĂ“N

Esta GuĂ­a ha sido realizada en colaboraciĂłn entre la Agencia de Naciones Unidas HABITAT y la Universidad Jesuita Alberto Hurtado (UAH) de Chile. Quiere ser una herramienta para todas las personas u organizaciones que implementan o deseen implementar, complementar o ajustar polĂ­ticas y programas relacionados con la prevenciĂłn de la delincuencia y la violencia en los paĂ­ses y ciudades de LatinoamĂŠrica, regiĂłn fuertemente golpeada y sensible a este tema. Esta GuĂ­a ha sido elaborada a partir del “Local Crime Prevention Toolkitâ€?, elaborado por el Programa “Ciudades mĂĄs Segurasâ€? (Safer Cities) y ha recogido el conocimiento y la experiencia acumulada que distintas ciudades del mundo han desarrollado durante aĂąos en materia de seguridad y prevenciĂłn de violencia y delincuencia. El texto se orienta en especial para su aplicaciĂłn desde los gobiernos locales, en particular desde HO PXQLFLSLR (Q HIHFWR OD HĂ€FDFLD \ OD VRVWHQLELOLGDG GH ODV SROtWLFDV GH SUHYHQFLyQ LQGHSHQGLHQWHPHQWH GH TXLHQHV OD GHĂ€QHQ GHSHQGH GH TXH VHDQ OOHYDGDV D FDER D QLYHO ORFDO (VWH SODQWHDmiento coincide con la demanda de la poblaciĂłn y con el hecho de que la experiencia internacional exitosa en materia de prevenciĂłn corresponde a diseĂąos e implementaciones efectuados por las alcaldĂ­as. Lo dicho es muy vĂĄlido en AmĂŠrica Latina donde los mejores y mĂĄs sustentables antecedentes emergen en ciudades como BogotĂĄ, MedellĂ­n, Monterrey, Diadema, Rosario, Quito, Guayaquil y muchas otras. Se propone, al igual que en el Manual original, que la implementaciĂłn de una polĂ­tica de prevenciĂłn es un proceso, que requiere una serie de etapas o pasos, lo cual ademĂĄs debe contar con ciertos apoyos o soportes como la evaluaciĂłn y monitoreo, la comunicaciĂłn e institucionalizaciĂłn. Se ha realizado un trabajo de adaptaciĂłn y adecuaciĂłn a la realidad y contexto latinoamericano, lo que ha sido reforzado por visitas realizadas a diversas experiencias de prevenciĂłn en seguridad, a distintas ciudades de AmĂŠrica Latina en Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, MĂŠxico y El Salvador. AsĂ­ tambiĂŠn este proceso de elaboraciĂłn de la presente GuĂ­a, ha sido acompaĂąado por un conjunto de actividades de formaciĂłn y capacitaciĂłn en prevenciĂłn de problemĂĄticas relacionadas a la seguridad, entre las cuales se pueden destacar cursos de mediaciĂłn comunitaria dirigidos a lĂ­deres sociales comunitarios y equipos tĂŠcnicos de nivel local, cursos de prevenciĂłn de violencia escolar a profesores, cursos de prevenciĂłn social del delito y la violencia a equipos locales, y cursos a agentes encargados de la prevenciĂłn del consumo de drogas dictados por el Programa de Seguridad Urbana (PSU) de la facultad de derecho de la UAH. La elaboraciĂłn de la GuĂ­a se ha nutrido del conocimiento y la experiencia de muchos profesionales y especialistas en el tema, y de innumerables grupos y personas en distintos lugares del mundo, VREUH WRGR HQ /DWLQRDPpULFD /RV HMHPSORV SUHVHQWDGRV UHĂ HMDQ OD GLYHUVLGDG GH ODV YLYHQFLDV y su creatividad. Sin embargo, aĂşn las mĂĄs exitosas iniciativas no pueden considerarse como recetas sino como orientaciones a contextualizar. Existen enfoques y principios que son esenciales pero no hay fĂłrmulas infalibles en la materia. Por eso, la publicaciĂłn, como instrumento, es una propuesta que requiere ajustes a la cultura, al momento histĂłrico y a la contingencia que se estĂŠ YLYLHQGR D ODV FDSDFLGDGHV D ORV UHFXUVRV D ORV SODQWHDPLHQWRV LGHROyJLFRV \ WpFQLFRV HVSHFtĂ€FRV GH

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INTRODUCCIĂ“N

los gestores de cada localidad. La realidad econĂłmica, social, polĂ­tica y cultural en LatinoamĂŠrica es muy diversa y cambiante. Incluso existen diferencias en el uso de muchas palabras relacionadas con la seguridad. La GuĂ­a no puede salvar todas esas diferencias, por lo que se agradece de DQWHPDQR D ORV OHFWRUHV HO HVIXHU]R GH WUDGXFLU R DGDSWDU OR SODQWHDGR D VX UHDOLGDG HVSHFtĂ€FD Los autores de esta obra, al igual que los expertos de Naciones Unidas que la pidieron y fueron interlocutores permanentes de su formulaciĂłn, estĂĄn convencidos, por su propia experiencia y por la observaciĂłn de las iniciativas internacionales, de la necesidad de coproducciĂłn de la seguridad. Es decir, si bien hay ĂĄmbitos, en particular la prevenciĂłn penal, que son de responsabilidad del estado central, existe un vasto campo de colaboraciĂłn necesaria con las autoridades locales y con los actores de la sociedad civil. Hoy el sistema de justicia criminal (policĂ­a, tribunales, cĂĄrceles) no puede por sĂ­ solo enfrentar las tareas de prevenir la delincuencia y la violencia. Es tarea de WRGRV $GHPiV ODV IURQWHUDV GH OD UHVSRQVDELOLGDG HVSHFtĂ€FD GH FDGD LQVWLWXFLyQ VRQ VLHPSUH PiV Ă XLGDV \ YDULDEOHV HQ IXQFLyQ GH ODV FRQGLFLRQHV ORFDOHV /DV SROLFtDV ´FRPXQLWDULDVÂľ X ´RULHQWDdas a la resoluciĂłn de problemasâ€? o de “proximidad estratĂŠgicaâ€? estĂĄn involucradas en tareas de prevenciĂłn social o situacional, mientras las acciones de control social son largamente compartidas entre policĂ­a y sistema privado de seguridad. La intervenciĂłn de la sociedad civil en materia de reintegraciĂłn de ex convictos y de justicia alternativa (mediaciĂłn, penas alternativas, justicia restaurativa) es siempre mayor y supera a veces a aquella de la justicia tradicional. En este nuevo universo de las prĂĄcticas de prevenciĂłn, el rol de las autoridades locales como guĂ­as, gestoras y educadoras no solo resulta imprescindible, sino tambiĂŠn central, garante de sustentabilidad y de gobernabilidad. Su rol fundamental implica, por una parte, la necesidad de proyectar una polĂ­tica de seguridad que constituya un aporte a la cohesiĂłn social, a la calidad de vida, y, por otra, una capacidad de articular dicha polĂ­tica con el conjunto de las estrategias socioeconĂłmicas. Supone tambiĂŠn una tarea pedagĂłgica para hacer comprensibles las polĂ­ticas de seguridad y en particular la necesaria responsabilizaciĂłn de los ciudadanos. Finalmente, exige una acciĂłn intersectorial, porque a un fenĂłmeno multicausal -como son las diversas modalidades de delincuencia y de conductas de riesgo- se responde a travĂŠs de iniciativas integrales, llevadas a cabo por equipos multidisciplinarios, con la participaciĂłn de una diversidad de actores sociales y polĂ­ticos. El presente texto ha sido construido para mostrar cĂłmo avanzar paso a paso en la elaboraciĂłn e implementaciĂłn de una estrategia local consensuada de seguridad urbana. /D *XtD HVWi GLVHxDGD SDUD VHU Ă H[LEOH \ DGDSWDEOH D ODV GLVWLQWDV UHDOLGDGHV \ FRQWH[WRV ORFDOHV Busca que el lector, ya sea a travĂŠs de la lectura de la GuĂ­a completa o de algunos de sus capĂ­tulos, encuentre herramientas Ăştiles para su trabajo preventivo en temas de seguridad. La primera parte apunta a contextualizar la problemĂĄtica de la seguridad en AmĂŠrica /DWLQD SUHVHQWDQGR XQD PLUDGD JHQHUDO VREUH OD FULPLQDOLGDG HQ OD UHJLyQ HO QDUFRWUiĂ€FR jĂłvenes y violencia de gĂŠnero, experiencias exitosas de prevenciĂłn, tipos y actores de prevenciĂłn y se enuncian los principales temas del debate regional sobre la seguridad ciudadana.

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Una segunda parte incluye las distintas etapas de una política local de prevención de violencia y delincuencia. Tres etapas se describen: En una primera etapa se seùalan las condiciones y los pasos necesarios para iniciar una política de prevención a nivel local. La segunda etapa aborda el tema de la realización de un diagnóstico: detalla los pasos a seguir, SUHVHQWD ODV WHPiWLFDV TXH SXHGHQ VHU DQDOL]DGDV LGHQWLÀFD ODV KHUUDPLHQWDV VHxDOD ORV DFWRUHV claves y subraya el proceso de participación de los equipos tÊcnicos, de las comunidades de interÊs y de la población en el proceso. La tercera etapa describe los principios y modalidades de elaboración de una estrategia consensuada y de su implementación. Ademås se ilustra a travÊs de ejemplos relacionados con los problemas habituales, los enfoques, objetivos y modalidades de abordaje de estas problemåticas. Se trata, de hecho, de aplicaciones de la estrategia, y de traducción en la pråctica de la visión que la inspira. Una tercera parte de la guía hace referencia a los apoyos necesarios de una política de prevención local: En primer lugar se aborda el monitoreo y la evaluación, dos procesos indispensables y complementarios que permiten asegurar la buena gestión y la validez de una estrategia local. Aun una buena política en la materia puede fracasar por errores en su manejo y por carencia de PRGLÀFDFLRQHV QHFHVDULDV TXH XQD HYDOXDFLyQ SXHGH HYLGHQFLDU En segundo tÊrmino se hace referencia a la institucionalización de la política de seguridad, la cual se materializa en la forma de un pacto urbano entre actores claves o de un libro blanco, pero tambiÊn a travÊs de colaboraciones que, al hacerse permanentes, le dan mayor fuerza y visibilidad. Este proceso refuerza y consolida una cultura de la prevención en la población. La institucionalización da a la progresiva construcción de una cultura de la prevención una referencia política, un instrumento esencial de conducción y una garantía de continuidad. En tercer lugar se trata la comunicación, problemåtica que en muchas iniciativas locales, por FDUHFHU GH XQD UHà H[LyQ \ SUHSDUDFLyQ VREUH HO WHPD GHELOLWDQ VX FDSDFLGDG GH GLIXVLyQ \ GH coordinación. Finalmente, en esta tercera parte se aborda la formación y capacitación de agentes locales, aspecto fundamental en una estrategia de prevención local y un factor de sostenibilidad y autonomía. Se seùalan algunas modalidades y contenidos que la formación y capacitación debiera considerar. 3DUD WHUPLQDU VH SUHVHQWDQ FRQFOXVLRQHV ÀQDOHV HQ ODV FXDOHV VH H[SRQH XQD VtQWHVLV GH OD *XtD \ una perspectiva de futuro en los temas de seguridad y cohesión social para AmÊrica Latína.

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ÍNDICE

PRÓLOGO INTRODUCCIÓN ÍNDICE SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN A- CONTEXTO DE LA SEGURIDAD REGIONAL B- LAS EXPERIENCIAS DE PREVENCIÓN EXITOSAS EN LA REGIÓN C- PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA Y CRIMINALIDAD

POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN PARA LA SEGURIDAD CIUDADANA Capítulo 2: ETAPA 1: EL INICIO DE UNA POLÍTICA 1.1 PROCESO PARA COMENZAR LA POLÍTICA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL

Capítulo 3: ETAPA 2: EL DIAGNÓSTICO 2.1. LOS TIPOS DE DIAGNÓSTICO 2.2. OBJETIVOS DE UN DIAGNÓSTICO PARTICIPATIVO 2.3. ¿QUÉ INFORMACIONES SE BUSCAN? 2.4. LOS PASOS DEL DIAGNÓSTICO 2.5. PASO 1: FORMAR Y ESTABLECER EL GRUPO GUÍA 2.6. PASO 2: DISEÑAR EL PROCESO 2.7. PASO 3: CONDUCIR EL DIAGNÓSTICO 2.8. PASO 4: ANÁLISIS, INFORME Y VALIDACIÓN

Capítulo 4: ETAPA 3: LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIÓN ESTRATEGIA 3.1. DEL DIAGNÓSTICO A LA ESTRATEGIA 3.2. BASES PARA UNA ESTRATEGIA 3.3. SOSTENIBILIDAD DE UNA ESTRATEGIA 3.4. LOS TIEMPOS FLEXIBLES DE LA ESTRATEGIA 3.5. PROCESO DE FORMULACIÓN DE LA ESTRATEGIA IMPLEMENTACIÓN 3.6. PLANIFICAR E IMPLEMENTAR LA ACCIÓN 3.7. EJEMPLOS DE ENFOQUES Y DISEÑOS DE PREVENCIÓN

APOYOS A LA POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN Capítulo 5: MONITOREO Y EVALUACIÓN DE LA ESTRATEGIA IMPLEMENTADA 4.1. MONITOREO 4.2. EVALUACIÓN

Capítulo 6: COMUNICACIÓN: MANTENER(SE) INFORMADO 5.1. COMUNICACIONES 5.2. LAS COMUNICACIONES INTERNAS 5.3. LAS COMUNICACIONES DEBEN ADECUARSE A CADA REALIDAD

Capítulo 7: INSTITUCIONALIZANDO LA POLÍTICA DE PREVENCIÓN LOCAL 6.1. LA IMPORTANCIA DE LA INSTITUCIONALIZACIÓN 6.2. INSTALAR EL TEMA EN LOS GOBIERNOS LOCALES Y LA COMUNIDAD 6.3. COMO HACER QUE LA INSTITUCIONALIZACIÓN OCURRA

Capítulo 8: FORMACIÓN Y CAPACITACIÓN DE AGENTES LOCALES 7.1. LA CAPACITACIÓN, FACTOR DE SOSTENIBILIDAD Y AUTONOMÍA LOCAL 7.2. FORMACIÓN Y CAPACITACIÓN 7.3. LAS MODALIDADES DE FORMACIÓN O CAPACITACIÓN

CONCLUSIONES FINALES GLOSARIO BIBLIOGRAFÍA

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12 12 26 28 36 36 42 42 44 46 47 47 50 56 66 70 70 71 72 73 74 78 84

106 106 107 112 113 118 119 120 120 121 121 126 126 127 130 131 132 136 7


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TABLAS

EJEMPLO DE RUTA CRÍTICA DE LA VIOLENCIA EN CENTRO AMÉRICA LA MULTICAUSALIDAD Y LA RESILIENCIA LOCAL CARACTERÍSTICAS-TIPO DE LA VICTIMIZACIÓN / VÍCTIMA Y CARACTERÍSTICASTIPO DEL VICTIMARIO-AUTOR O DELINCUENTE O POTENCIAL DELINCUENTE OBJETO DE OBSERVACIÓN - FUENTE O METODOLOGÍA ANÁLISIS DE ACTORES TIPOS DE MAPAS PRINCIPALES INSTRUMENTOS UTILIZADOS EN EL DIAGNÓSTICO BOGOTÁ, COLOMBIA: DEFINICIÓN DE OBJETIVOS A PARTIR DE LAS PRIORIDADES DEL DIAGNÓSTICO INSTRUMENTOS Y RECURSOS AJUSTADOS A LOS OBJETIVOS ESTRATÉGICOS, BOGOTÁ, COLOMBIA TABLA DE APOYO EN LA PLANIFICACIÓN DE ACTIVIDADES EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO TRÁFICO Y CONSUMO DE DROGAS EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO REINSERCIÓN DE EX CONVICTOS EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO BARRIOS CRÍTICOS EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO JÓVENES EN BARRIOS CRÍTICOS EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO NIÑOS DE LA CALLE EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO VIOLENCIA ESCOLAR EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN DESERTORES ESCOLARES EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN VIOLENCIA INTRAFAMILIAR EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO AUMENTO DE LOS ROBOS EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO DELITOS DE CUELLO BLANCO INDICADORES DE EVALUACIÓN: DEFINICIONES Y EJEMPLOS

15 51 52 53 55 57 69 76 79 81 85 87 88 90 94 96 97 100 102 104 111

GRÁFICOS

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¿HA SIDO VÍCTIMA DE UN DELITO? AMÉRICA LATINA- TASA DE MORTALIDAD POR HOMICIDIO 2000-2005 TASA DE HOMICIDIOS POR CADA 100.000 HABITANTES EN CIUDADES DE AMÉRICA 2006 TEMOR A SER VÍCTIMA AMÉRICA LATINA ¿CUÁL ES EL PROBLEMA MÁS IMPORTANTE EN EL PAÍS?, SERIE 1995 -2007 ¿LA FORMA DE ACTUAR DEL PRESIDENTE... CON RESPECTO A LA SEGURIDAD AMÉRICA LATINA-TASA DE MUERTES POR ARMA DE FUEGO - POBLACIÓN TOTAL Y JÓVENES (DIFERENTES AÑOS CADA PAÍS 2000-2002) AMÉRICA LATINA: (14 PAÍSES) ESTRUCTURA DE LA DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO POR DECILES, ALREDEDOR 2007 DISTRIBUCIÓN DE LAS INCAUTACIONES DE COCAÍNA A NIVEL MUNDIAL EN 2005 EL IMPACTO DE UNA POLÍTICA DE PREVENCIÓN LOCAL AMÉRICA LATINA- TASA DE POBLACIÓN PENAL RECLUIDA, SEGÚN PAÍS (2003-2006) TODOS TIENEN IGUALES OPORTUNIDADES DE ACCESO A LA JUSTICIA ESQUEMA POLÍTICA(S) MUNICIPAL(ES) ETAPAS DE UNA POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN ETAPAS Y ACTORES DE UNA POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN PARA LA SEGURIDAD CIUDADANA

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ÍNDICE

MODELO ECOLÓGICO DE FACTORES QUE INSIDEN EN LA RESILENCIA PROCESO PARA DEFINIR LOS EJES ESTRATÉGICOS CONSTITUCIÓN DE GRUPOS DE TRABAJO A PARTIR DE LOS EJES ESTRATÉGICOS EVALUACIÓN POR NIVELES DE VULNERABILIDAD: PROYECTO MUNICIPAL PARA BARRIOS MÁS SEGUROS (EJEMPLO FICTICIO) LAS COMUNICACIONES EN LAS DISTINTAS ETAPAS DE LA POLÍTICA

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RECUADROS

LA VIOLENCIA URBANA EN AMÉRICA LATINA JÓVENES: VÍCTIMAS Y VICTIMARIOS EN AMÉRICA LATINA DESERCIÓN ESCOLAR POBLACIÓN EN RIESGO: MÁS JÓVENES, MÁS POBRES PERTENECER A UNA PANDILLA PANDILLAS DE CONTEXTO DE GLOBALIZACIÓN MENORES, ADOLESCENTES Y JÓVENES EN CONFLICTO CON LA LEY DIPROFAM (CARABINEROS DE CHILE) VIOLENCIA INTRAFAMILIAR LA MANO DURA FRENTE A LA CRIMINALIDAD VERSUS LA ESTRATEGIA DE PREVENCIÓN FRENTE A LAS MARAS Y PANDILLAS EL CRIMEN ES UN HECHO SOCIAL LOS ACTORES DE LA PREVENCIÓN LOS PROYECTOS URBANOS INTEGRALES (PUI), EN MEDELLÍN, COLOMBIA GUARDIA URBANA MUNICIPAL (GUM) ROSARIO, ARGENTINA ¿QUÉ ES UNA VISIÓN? LA IMPORTANCIA DE LA VISIÓN EN EL LIDERAZGO LOCAL COMPETENCIAS PARA EL COORDINADOR EL ROL COORDINADOR DEL MUNICIPIO QUITO, ECUADOR – ORGANIGRAMA DE LA SEGURIDAD Y CONVIVENCIA CIUDADANA EN QUITO ESTADÍSTICAS POLICIALES CIFRA NEGRA CEASC, CENTRO DE ESTUDIOS DE SEGURIDAD Y CONVIVENCIA, ALCALDÍA MAYOR DE BOGOTÁ, COLOMBIA OBSERVATORIO URBANO DE SEGURIDAD VENTAJAS Y LÍMITES DE UNA ENCUESTA DE VICTIMIZACIÓN PERCEPCIONES DEL TEMOR MARCHA EXPLORATORIA SEGURIDAD DE LAS MUJERES EN DELHI PARTICIPACIÓN DE COMUNIDADES DE INTERÉS FAVORECER LA PARTICIPACIÓN JUVENIL RECURSOS DE LA COMUNIDAD TASAS, INDICADORES E ÍNDICES FAVELA CAVALÃO, EN NITERÓI, BRASIL LAS PRINCIPALES FUENTES DE DATOS SECUNDARIOS - PRINCIPALES INSTRUMENTOS PARA LA ELABORACIÓN DE DATOS PRIMARIOS. MAPA: HOT SPOTS DE ASALTOS A TAXI, BELO HORIZONTE (1995-2001), BRASIL INCLUSIÓN SOCIAL O REINSERCIÓN DE NIÑOS DE Y EN LA CALLE, MONTERREY, MÉXICO COLABORACIÓN ENTRE INSTITUCIONES EN CHILE EL CASO DE DIADEMA, BRASIL ESCUELA QUE PROTEGE RECIFE, BRASIL VIOLENCIA ESCOLAR EN CHILE EJEMPLO DE ESTUDIO DEL TEMOR EN CHILE PROPUESTA DE UN ESQUEMA DE INFORME ¿QUÉ ES UNA ESTRATEGIA COMUNITARIA DE PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA Y LA DELINCUENCIA? BUENA GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA

13 21 23 23 23 23 25 25 25 28 29 31 32 33 36 37 38 40 43 43 44 45 45 45 47 48 49 50 53 54 55 56 57 59 61 62 63 64 64 67 70 72

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EN LA “PROPUESTA (2008) HACIA UN SISTEMA INTEGRADO DE SEGURIDAD CIUDADANA, CONVIVENCIA Y JUSTICIA PARA UNA BOGOTÁ SIN INDIFERENCIA”, LA CAPITAL DE COLOMBIA SE HA PLANTEADO CINCO EJES ESTRATÉGICOS “GESTORES-MONITORES” ADAPTADOS AL CONTEXTO LOCAL PROMOCIÓN DE NORMAS Y COMPORTAMIENTOS EQUITATIVOS DE GÉNERO ENTRE HOMBRES JÓVENES, COMO ESTRATEGIA DE PREVENCIÓN DEL VIH “LA GENTE QUIERE MÁS POLICÍAS” CIUDAD DE LOS NIÑOS, ROSARIO, ARGENTINA GRUPO DE TRABAJO: TRÁFICO Y CONSUMO DE DROGAS REINSERCIÓN DE EX CONVICTOS BARRIOS CRÍTICOS MEDIACIÓN COMUNITARIA EN FAVELAS DE RÍO DE JANEIRO, BRASIL CONVIVENCIA PARA GUATEMALA JÓVENES CONVIVEN POR BOGOTÁ, COLOMBIA JÓVENES EN BARRIOS CRÍTICOS BIBLIOTECA POPULAR DE BELLA VISTA, CÓRDOBA, ARGENTINA INSTITUTO DE PROTECCIÓN PARA LA NIÑEZ Y JUVENTUD IDIPRON-BOGOTÁ, COLOMBIA NIÑOS DE LA CALLE “SE ESSA RUA FOSSE MINHA” (SER)*: CIRCO SOCIAL CON NIÑOS DE LA CALLE, RÍO DE JANEIRO, BRASIL VIOLENCIA ESCOLAR EL RESPETO DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES EN GUATEMALA DESERTORES ESCOLARES “CONOZCO MIS DERECHOS, LOS HAGO RESPETAR Y CONSTRUYO ESPACIOS DE NO VIOLENCIA PARA TODOS” SAN MIGUEL DE TUCUMAN, ARGENTINA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR AUMENTO DE LOS ROBOS DELITOS DE CUELLO BLANCO MONITOREO O SEGUIMIENTO APORTES DE UNA EVALUACIÓN EVALUACIÓN DE LA ESTRATEGIA COMO PROCESO PROMOVIENDO NORMAS Y COMPORTAMIENTOS EQUITATIVOS DE GÉNERO, RÍO DE JANEIRO, BRASIL EVALUACIÓN PROGRAMA PAZ Y RECONCILIACIÓN MEDELLÍN, COLOMBIA CONSIDERAR EN TODO MOMENTO A LA COMUNIDAD OBJETIVOS BÁSICOS DE LA COMUNICACIÓN CONSEJOS ÚTILES LLAMADOS ESPERANZADORES EL NOMBRE DE UNA POLÍTICA DE PREVENCIÓN Y SUS CAMPAÑAS SECRETARIADO DE SEGURIDAD COMUNITARIA, TORONTO, CANADÁ EL PODER DE LOS MEDIOS ELEMENTOS PARA CONSTRUIR UNA RELACIÓN POSITIVA CON LOS MEDIOS COMUNICADO DE PRENSA LA IMPORTANCIA DEL LENGUAJE PARA LA INSTITUCIONALIZACIÓN ES NECESARIO MARCHA BLANCA PACTO POR LA SEGURIDAD CIUDADANA DEL DISTRITO METROPOLITANO DE QUITO, ECUADOR CÓMO INSTITUCIONALIZAR LA EVALUACIÓN: EL CASO DEL LIBRO BLANCO DE BOGOTÁ, COLOMBIA JUVENTUD Y POLICÍA EMPODERAMIENTO CONTRA LA VIF CAPACITACIÓN DEL FORO EUROPERO PARA LA SEGURIDAD URBANA (FESU) FORMACIÓN Y CAPACITACIÓN EN CHILE PERFECCIONAMIENTO DE LA PRÁCTICA POLICIAL CIUDADANA, RÍO DE JANEIRO, BRASIL

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SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

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CapĂ­tulo 1:

SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN A. EL CONTEXTO DE LA SEGURIDAD REGIONAL

En este capĂ­tulo se describen las caracterĂ­sticas de la criminalidad, la violencia e inseguridad ciudadana en la regiĂłn, destacando las diferencias con otras partes del mundo. TambiĂŠn se abordan los problemas actuales y los retos que enfrentan actores locales en la prevenciĂłn.

Para poder evaluar la situación de seguridad en AmÊrica Latina y las políticas necesarias para trabajar adecuadamente, es necesario plantearse una discusión sobre la seguridad en cualquiera de las dimensiones que se le han catalogado en el último tiempo sea Êsta, pública, humana, urbana, ciudadana o privada. Actualmente las ideas mås comunes sobre la seguridad estån relacionadas con el respeto a la integridad física y el temor a que ella sea violentada, ya sea en la privacidad del hogar, en el barrio donde se vive, los lugares de trånsito o en la ciudad que se habita. Sin embargo, la seguridad no es la mera ausencia de agresión o temor, ya que el valor de la seguridad apunta a la certeza de ser respetado en tanto individuo, en la integridad física, psicológica y social. El enfoque de la seguridad que se propone va mås allå de las múltiples formas de violencia y delincuencia. De hecho, la seguridad es en primer lugar un fundamento para el despliegue de las capacidades humanas, la libertad, la solidaridad, la multiculturalidad y la creatividad. En la seguridad se juega no sólo la vida de la persona individual, sino igualmente la de la sociedad y de la ciudad. La seguridad tambiÊn es un derecho humano llamado de cuarta generación, tanto de los individuos como de las comunidades, para alcanzar una calidad de vida acorde a la dignidad de ciudadanos. En este sentido la seguridad no es sólo un valor jurídico, normativo o político sino tambiÊn social, pues es la base del bien común de las sociedades para su desarrollo equitativo y justo para todos sus integrantes. La seguridad es uno de los pilares del buen gobierno y estå en la base de la libertad y la igualdad para el desarrollo pleno y equitativo de las personas. En cuanto bien común la seguridad actualmente enfrenta una serie de desafíos en las sociedades actuales, debido a la complejidad social con la que deben lidiar instituciones públicas, sociedad civil y organismos privados e individuos. En AmÊrica Latina, uno de los desafíos mås importantes de la seguridad es la violencia de gÊnero, expresada no sólo en el åmbito de lo privado y lo domÊstico, sino tambiÊn en la vida pública y en la ciudad, atentando directamente contra la ciudadanía de las mujeres y la igualdad de oportunidades. Un segundo desafío muy relevante se relaciona con los y las jóvenes, donde es necesario considerar a OD MXYHQWXG FRPR XQD HWDSD GH PD\RU ULHVJR HVSHFtÀFR GHELGR D los desafíos que la falta de seguridad le impone al propio desarrollo de los y las jóvenes y sus posibilidades de desenvolvimiento actual y futuro. Un tercer desafío se relaciona con las minorías sociales, pWQLFDV UHOLJLRVDV R VH[XDOHV TXH JHQHUD D PHQXGR FRQà LFWRV HQ OD medida en que el grupo minoritario pone en tela de juicio intereses creados y pråcticas consideradas como naturales en el medio o reivindica la validez de normas y pråcticas culturales diversas. La capacidad de gestión de la dimensión de seguridad de los proble-

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Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

mas de las minorías en la vida urbana constituye un indicador de la voluntad político-social de construir una sociedad inclusiva y de respeto de los derechos humanos. Los desafíos planteados ponen en cuestión el derecho a la seguridad, entendida como la posibilidad de vivir en un ambiente donde los derechos humanos son respetados, tanto por parte de los individuos como del Estado. La seguridad debe ser experimentada en todos los espacios, desde el mås íntimo en el hogar, pasando por el entorno a la vivienda, el barrio, la comuna y la ciudad en su conjunto. En este contexto, el derecho a la seguridad es un bien público que estå estrechamente ligado a otras dimensiones sociales. No es una demanda ni una política aislada. El ciudadano que demanda seguridad pide paralelamente política urbana y política social de inclusión. La seguridad es un derecho que cristaliza un conjunto de demandas sociales frente al riesgo y al mismo tiempo es transversal a las demandas sociales. Quien quiere una política educacional, de vivienda o de transporte pide que la seguridad estÊ incorporada en ella. Cuando el derecho a la seguridad se ve vulnerado, como de hecho ocurre en muchas ciudades y barrios en America Latina y el Caribe, las ciudades se presentan como espacios donde la violencia se instala como una vivencia cotidiana, generåndose a veces una SHUFHSFLyQ S~EOLFD HUUyQHD TXH LGHQWLÀFD OD FLXGDG FRQ OD YLROHQcia, convirtiendo ambos tÊrminos en sinónimos. Hoy en día los índices de criminalidad y violencia en el continente muestran que la región es una de las mås inseguras en el mundo. Son muchas las formas a travÊs de las cuales la violencia amenaza el bienestar y afecta la calidad de vida, especialmente a la población mås pobre. Esto provoca que los gobiernos nacionales y locales hayan tenido que hacerse cargo de una demanda creciente por seguridad desde la sociedad civil, buscando contener la violencia y el delito y asumiendo esta tarea como una prioridad. En AmÊrica Latina la inseguridad y la gestión en este åmbito tienen atributos particulares que la diferencian del resto del mundo. Se puede decir que son transversales a la mayoría de los países. Algunas de estas características son: ‡ $OWRV tQGLFHV GH GHOLQFXHQFLD ‡ (OHYDGRV QLYHOHV GH WHPRU DO GHOLWR HQ OD VRFLHGDG ‡ ,Qà XHQFLD UHODWLYD GHO QDUFRWUiÀFR TXH VH KD HQUDL]DGR HQ FLXdades y barrios. ‡ 'HOLWRV UHODFLRQDGRV FRQ GURJDV FRPR URERV \ DVDOWRV VRQ mås frecuentes. ‡ 3HUFHSFLyQ GH YLROHQFLD \ YLFWLPL]DFLyQ MXYHQLO DFRPSDxDGD de un contexto de exclusión social. ‡ $YDQFHV \ FDUHQFLDV HQ SROtWLFDV RULHQWDGDV D OD YLROHQFLD GH gÊnero.

LA VIOLENCIA URBANA EN AMÉRICA LATINA Las denuncias y estadĂ­sticas de delincuencia y violencia aumentan sostenidamente desde ďŹ nales de los 70 en gran parte del mundo, en especial en las ciudades de los paĂ­ses desarrollados. Un fenĂłmeno similar se produce en muchas ciudades latinoamericanas desde los 80 hasta la fecha. Este aumento de la delincuencia ha implicado un mayor uso de la violencia al cometer los delitos y el aumento de las tasas de homicidio, convirtiendo a LatinoamĂŠrica en la regiĂłn mĂĄs afectada por la criminalidad en el mundo. La situaciĂłn de conictividad urbana que se vive actualmente en las ciudades latinoamericanas junto con aumentar en el Ăşltimo tiempo, es delictiva. La conictividad no ha sido ajena a los procesos de transformaciĂłn social de AmĂŠrica Latina y ciertamente la violencia polĂ­tica ha estado presente en la regiĂłn durante la segunda mitad del siglo XX. Sin embargo, cuando se compara las tasas de homicidios para todos estos paĂ­ses hasta comienzos de los aĂąos 70, la situaciĂłn no guarda relaciĂłn con las tasas de los aĂąos 90, cuando desaparecen las dictaduras, amainan las guerrillas en gran parte de los paĂ­ses de la regiĂłn, se inician los procesos de paz y asumen gobiernos democrĂĄticos la conducciĂłn de los paĂ­ses. Particularmente en los paĂ­ses de intensa violencia polĂ­tica, la actual conictividad urbana es parte de la agenda del post-conicto. Se trata hoy dĂ­a de una violencia distinta, donde una de sus caracterĂ­sticas mĂĄs sobresalientes es el crecimiento de la violencia interpersonal y fĂ­sica en relaciones cara a cara que se maniďŹ esta sobre todo en las zonas pobres, segregadas de las grandes ciudades. Esta conictividad urbana se relaciona con los procesos polĂ­ticos, econĂłmicos y culturales de exclusiĂłn, que cuestiona la estructura social establecida, abarcando un ĂĄmbito mayor que la violencia y la delincuencia. En Ăşltimo tĂŠrmino, la conictividad urbana actual en la regiĂłn desnuda la debilidad de las democracias latinoamericanas y la necesidad de ciudades mĂĄs inclusivas, con mayores oportunidades para todos y todas (Ruiz, 2008).

‡ 'HEDWH VREUH ODV HVWUDWHJLDV PiV HÀFDFHV SDUD FRQWHQHU HO DYDQce de la criminalidad. ‡ ([SHULHQFLDV VXVWHQWDEOHV H LQQRYDGRUDV GH JHVWLyQ GH OD VHJXridad urbana. A.1. La criminalidad

Diversas estadĂ­sticas muestran que AmĂŠrica Latina es la regiĂłn mĂĄs afectada por la criminalidad. Homicidios, robos con fuerza y robos con violencia se asocian y son mĂĄs frecuentes que en otras UHJLRQHV GHO PXQGR /DV WDVDV HQ DOJXQRV SDtVHV VRQ VLJQLĂ€FDWLYDPHQWH DOWDV <D HQ OD 236 DĂ€UPDED TXH ´OD YLROHQFLD HV una de las amenazas mĂĄs urgentes contra la salud y la seguridad pĂşblica de las AmĂŠricasâ€?. Un estudio reciente demuestra que hay una alta probabilidad de ser vĂ­ctima de algĂşn delito, particularmente en CentroamĂŠrica y,

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

¿HA SIDO V�CTIMA DE UN DELITO? AMÉRICA LATINA 2007 ¿Ha sido, Ud. o algún pariente, asaltado, agredido o víctima de un delito en los últimos doce meses? Venezuela

49

Argentina

47

Honduras

44 43

PerĂş Brasil

42

Bolivia

42

Paraguay

41

El Salvador

41 40

Chile

39

MĂŠxico Ecuador

38 35

Uruguay

34

Colombia

33

Guatemala

32

Costa Rica 28

Nicaragua

27

Rep. Dominicana 14

PanamĂĄ

38

AmĂŠrica Latina 10%

20%

30%

40%

50

60%

70%

Fuente: LatinobarĂłmetro, 2007.

HQ PHQRU PHGLGD HQ ORV SDtVHV GH $PpULFD GHO 6XU (QWUH HO DxR \ HO DxR HO SRUFHQWDMH GH SHUVRQDV TXH GHFODUDQ KDEHU VLGR YtFWLPDV GH XQ GHOLWR DXPHQWD VLJQLĂ€FDWLYDPHQWH 0LHQWUDV HQ HO DxR HO SRUFHQWDMH HQ OD UHJLyQ DVFHQGtD D HQ HO DxR HO SRUFHQWDMH GH SHUVRQDV TXH KD VLGR YtFWLPD GH DOJ~Q GHOLWR DXPHQWD D Con menos de una quinta parte de la poblaciĂłn mundial, esta regiĂłn presenta un cuadro dramĂĄtico de homicidios por armas de IXHJR DXQ HQ DXVHQFLD GH FRQĂ LFWRV DUPDGRV FRQFHQWUDQGR PiV GHO GHO TXH RFXUUH HQ WRGR HO PXQGR Los homicidios en la regiĂłn triplican a los de Europa y van en aumento. Las estadĂ­sticas de la OrganizaciĂłn Panamericana de la 6DOXG 236 H[KLEHQ XQD WDVD GH KRPLFLGLRV TXH VH KD GXSOLFDGR HQ HO ~OWLPR FXDUWR GH VLJOR 6HQ \ .OLNVEHUJ (Q HIHFWR PLHQWUDV TXH (XURSD SUHVHQWDED HQ HO DxR XQD WDVD GH KRPLFLGLRV FDGD PLO +EWV ORV SDtVHV GH $PpULFD /DWLQD FDVL WULSOLFDEDQ HVWH SRUFHQWDMH HQ HO PLVPR DxR \ DOFDQ]DEDQ OD PHGLD GH KRPLFLGLRV OHMRV GH OD WDVD PXQGLDO TXH VH VLW~D HQ

14

6L HVWD HVWDGtVWLFD VH HQIRFD HQ OD SREODFLyQ GH D DxRV HQWRQFHV OD WDVD VH HOHYD D FDGD PLO +EWV 6H SUHYp TXH HQ OD WDVD DOFDQFH ORV KRPLFLGLRV SRU FDGD PLO +EWV Pero ĂŠsta no es la Ăşnica forma de violencia. TambiĂŠn se observan otros tipos de violencia letal. En AmĂŠrica Latina, segĂşn la OPS OD WDVD GH PXHUWHV SRU DFFLGHQWHV GH WUiQVLWR VH HOHYD D FDGD PLO KDELWDQWHV \ OD WDVD GH VXLFLGLR HV GH FDGD PLO habitantes. 0XMHUHV \ MyYHQHV VRQ ORV JUXSRV PiV DIHFWDGRV SRU OD YLROHQFLD Si se analiza en relaciĂłn al gĂŠnero, existe una tendencia clara: las vĂ­ctimas de homicidios en AmĂŠrica Latina son fundamentalmente masculinas, ya que el nĂşmero de hombres asesinados es cerca de YHFHV VXSHULRU DO GH PXMHUHV YtFWLPDV GH KRPLFLGLR &DUULyQ $ VX YH] SDUD ODV PXMHUHV HO ULHVJR GH VHU KHULGD OHWDOmente se asocia a la violencia sexual. Respecto de los jĂłvenes, es el grupo etĂĄreo donde se concentra el mayor nĂşmero de vĂ­ctimas de homicidio, constituyĂŠndose los jĂłvenes en los principales victimarios y a la vez vĂ­ctimas de la violencia.


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

EJEMPLO DE RUTA CR�TICA DE LA VIOLENCIA EN CENTRO AMÉRICA. Dirección Primaria del TIPOS DE continuo de la VIOLENCIA violencia Político/institucional

TIPOS DE VIOLENCIA SEGĂšN VICTIMARIOS Y VĂ?CTIMAS

MANIFESTACIONES

Violencia del Estado y s de otras instituciones “informales� s Incluido sector privado s

Ejecuciones extrajudiciales por parte de las fuerzas de seguridad ´´Limpieza´´ social de parte del estado o comunidad, de gangs y niùos de la calle Linchamientos

EconĂłmico/institucio- Crimen organizado s nal ProtecciĂłn de intereses econĂłmicos s s s s s s

Uso de violencia e intimidaciĂłn para resolver conictos de negocios Secuestros Robo a mano armada TrĂĄďŹ co de drogas Robo de autos y contrabandos TrĂĄďŹ co de armas ligeras Trata de blancas

Pandillas (maras)

s

Robos, hurtos, violencia colectiva

NiĂąos de la calle

s

PequeĂąos robos

EconĂłmico

Delincuencia / robos

s

Robos en calle

Social

Violencia domĂŠstica

s

Abuso psicolĂłgico y ďŹ sico de las mujeres

Abuso infantil (niĂąos y niĂąas)

s

Abusos, en particular de parte de padrastros o tĂ­os

EconĂłmico/social

Violencia Intrafamiliar (VIF) lleva al abandono del hogar de jĂłvenes y a varias situaciones de riesgo en calles.

Conicto intergenera- s cional entre padres e hijos (adultos y jóvenes)

Abusos psicolĂłgicos y ďŹ sicos

Rutinas de violencia co- s tidiana gratuita

Peleas callejeras, confrontaciones

DirecciĂłn secundaria del continuo de la violencia

Violencia del Estado que lleva a falta de conďŹ anza en la policĂ­a y sistema de justicia

Fuente: MOSER y WINTON, 2002 (TraducciĂłn libre).

Las estadísticas comparadas revelan que la región lidera en robos. Según los registros policiales, SudamÊrica tiene las cifras mås altas, FRQ LQFLGHQWHV SRU PLO LQGLYLGXRV VHJXLGD GH ORV SDtVHV GHO VXU GH ÉIULFD FRQ FDVRV 218 +$%,7$7 0LHQWUDV TXH HO FUHFLPLHQWR HFRQyPLFR \ HO GHVDUUROOR HQ /DWLQRamÊrica ha sobrepasado a otras regiones en desarrollo durante las últimas dÊcadas, niveles extremadamente altos de violencia continúan amenazando la prosperidad económica y la consolidación de la democracia.

El crimen y la violencia generan altos costos econĂłmicos y afectan el crecimiento de la regiĂłn. Los efectos del crimen y la violencia sobre el crecimiento econĂłmico son mĂşltiples y variados. Entre los mĂĄs importantes destacan el perjuicio en capital humano, la reducciĂłn de la inversiĂłn y el deterioro del tejido social. Sin duda, HO FULPHQ \ OD YLROHQFLD GDxDQ VHULDPHQWH HO HQWUDPDGR VRFLDO HVpecialmente el de las comunidades mĂĄs pobres. Algunos paĂ­ses de la regiĂłn han llevado a cabo estudios de cuanWLĂ€FDFLyQ GH ORV FRVWRV HFRQyPLFRV TXH HO FULPHQ \ OD YLROHQFLD

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

AMÉRICA LATINA - TASA DE MORTALIDAD POR HOMICIDIO 2000-2005 100 Tasa de mortalidad por homicidio por país (2000-2005)

90

84,6 Tasa mortalidad por homicidio AL (2000-2005)

80

c/100 mil habitantes.

70 60 50 43,4

23,1

15,7

14

13,7

12,3

11,1

11,1

10

7

6,2

5,3

5,2

Uruguay

18,4

20

Chile

31

Costa Rica

32,4

30

Argentina

40

4,5

Perú

Rep. Dominicana

México

Nicaragua

Panamá

Bolivia

Ecuador

Paraguay

Guatemala

Brasil

Venezuela

El Salvador

Colombia

0

Fuente: Tudela, 2006.

TASA DE HOMICIDIOS POR CADA 100.000 HABITANTES EN CIUDADES DE AMÉRICA 2006 Datos PNUD Bogotá 120 99 87

90

92

Caracas

San Salvador

Recife

100 83 80

53

San Pablo

39

49

Río de Janeiro

36

Manizales

40

Medellín

60 44

Buenos Aires

Santiago

Montevideo

Miami

San José

Panamá

Santo Domingo

19

20

Cartagena

Asunción

18

Cautitlan Izacalli

9

18

Bogotá

8

12 14

5

6

11

4

9

3 Monterrey

20

México D.F

33 22

Fuente: Acero, 2008.

16

Guatemala

Cali

Tegucigalpa

Lima

Washington

Quito

0


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

DFDUUHDQ $Vt SRU HMHPSOR HO FRVWR GHO 3,% SDUD (O 6DOYDGRU HV HO \ SDUD *XDWHPDOD HV XQ (Q 0p[LFR HO FRVWR GH OD LQVHJXULGDG VH HVWLPD HQ XQ GHO 3,% R PLOORQHV GH SHVRV (Q %UDVLO HO FRVWR HV GH 5 ELOORQHV HTXLYDOHQWH DO GHO 3,% GHO SDtV Los elevados Ă­ndices de criminalidad en la regiĂłn han incidido en un aumento de la preocupaciĂłn social por la seguridad ciudadana. La violencia ha adquirido relevancia en la subjetividad de la ciudaGDQtD 6HJ~Q HO /DWLQREDUyPHWUR GH HO FULPHQ \ OD YLROHQFLD VRQ FDOLĂ€FDGRV FRPR ORV SUREOHPDV PiV LPSRUWDQWHV HQ FDGD SDtV \ SULQFLSDO IXHQWH GH LQVHJXULGDG HO GH ORV ODWLQRDPHULFDQRV GHFODUy TXH VLHQWH ´WHPRUÂľ GH VHU YtFWLPD GH XQ GHOLWR YLROHQWR PLHQWUDV TXH XQ GHFODUy TXH VX SDtV HV ´PX\ LQVHJXURÂľ (Q HO HO %DUyPHWUR GH *REHUQDELOLGDG &,0$ UHSRUWD que en Venezuela la inseguridad es el problema mĂĄs grave para el GH ORV YHQH]RODQRV /H VLJXHQ &RVWD 5LFD $UJHQWLQD

+RQGXUDV 8UXJXD\ \ 0p[LFR (Q OD mayorĂ­a de los paĂ­ses, hay importantes segmentos de la poblacion TXH FDOLĂ€FDQ QHJDWLYDPHQWH OD JHVWLRQ GH VHJXULGDG GH ORV JRELHUnos nacionales. Buena parte del problema tiene rasgos caracterĂ­sticos. La violencia y delincuencia a nivel urbano tiene un claro componente multicauVDO /RQGRxR \ $UULDJDGD \ *RGR\ $OOt VH LQWHUFRnecta una serie de factores sociales, urbanos, individuales, familiares y culturales. TambiĂŠn se suman graves problemas de cobertura y acceso de amplios sectores de la poblaciĂłn a servicios adecuados de salud pĂşblica, educaciĂłn, vivienda, justicia y seguridad, entre otros. Las cifras disponibles y estudios realizados por organismos internacionales permiten esclarecer ciertas asociaciones generales, que deben cotejarse en cada caso. La violencia y la criminalidad en la regiĂłn son esencialmente fenĂłmenos urbanos. Las grandes ciudades muestran tasas mĂĄs

TEMOR A SER VĂ?CTIMA AMÉRICA LATINA 2007 â€œÂżCuĂĄn frecuentemente se preocupa usted de que pueda llegar a ser vĂ­ctima de un delito con violencia? ÂżTodo o casi todo el tiempo, algunas veces, ocasionalmente, nunca?â€? AquĂ­ sĂłlo respuesta: todo o casi todo el tiempo mĂĄs algunas veces.. Paraguay

89

Argentina

79

Costa Rica Honduras

77 77

Ecuador

77

Rep. Dominicana

75

Venezuela

75

El Salvador

75

Bolivia

75

Nicaragua

74

PerĂş

74

Chile

73

Brasil

71

MĂŠxico

70

Uruguay

66

Colombia

66

Guatemala

64 61

PanamĂĄ AmĂŠrica Latina

73

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

80%

90%

100%

Fuente: LatinobarĂłmetro, 2007.

17


GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

(Q HIHFWR GLIHUHQFLDV VLJQLĂ€FDWLYDV HQWUH FLXGDGHV GH XQ PLVPR SDtV LQGHSHQGLHQWHPHQWH GH VX WDPDxR GHPRJUiĂ€FR FRPR ODV FLXGDGHV FRORPELDQDV GH &DOL 0HGHOOtQ \ %RJRWi GHPXHVWUDQ TXH OD YLROHQFLD GH OD FLXGDG QR HV UHĂ HMR GH VXV GLPHQVLRQHV VLQR GH su capacidad de gestiĂłn en los temas de seguridad y su capacidad GH UHJXODU ORV FRQĂ LFWRV HQWUH RWURV IDFWRUHV $ SHVDU GH VX WDPDxR %RJRWi SUHVHQWD PHQRUHV tQGLFHV GH FULPLQDOLGDG H LQVHJXULGDG que antes, habiendo reducido -por ejemplo- la tasa de homicidio. Estudios disponibles permiten constatar cĂłmo algunos compoQHQWHV GHO ´SURFHVR GH GHWHULRUR VRFLDOÂľ LQFLGHQ VREUH HO DXPHQWR de la criminalidad y la violencia. La falta de empleo y las oportunidades de educaciĂłn, la carencia de controles sociales, una dĂŠbil estructura familiar, la exclusiĂłn social y los altos niveles de la poEUH]D H LQGLJHQFLD ²HVWLPDGDV HQ HQ HO HQ $PpULFD /DWLQD &(3$/ VRQ IDFWRUHV FODYHV TXH FRQWULEX\HQ D ORV altos niveles de criminalidad y violencia en la regiĂłn. En el 2005 los paĂ­ses con mayor Ă­ndice de desarrollo humano (IDH) tienden a mostrar menores tasas de homicidio (Tudela, La relaciĂłn entre distribuciĂłn socioeconĂłmica y criminalidad violenta es fuerte. La concentraciĂłn del ingreso en LatinoDPpULFD VLJXH VLHQGR DOWD 9HU JUiĂ€FR SiJLQD DXQTXH SDUD HO SHUtRGR VH DSUHFLHQ DYDQFHV HVSHUDQ]DGRUHV HQ OD GLVWULEXFLyQ VRFLRHFRQyPLFD &(3$/ 6LQ HPEDUJR ODV FLXGDGHV latinoamericanas se encuentran entre las mĂĄs desiguales, algunas de ellas encabezando la lista a nivel mundial. A contrapelo del leve mejoramiento general de la distribuciĂłn socioeconĂłmica, las inequidades urbanas se han incrementado y endurecido en la Ăşltima dĂŠcada, aunque en algunos paĂ­ses disminuya la pobreza, lo que sugiere que la agudizaciĂłn de la desigualdad se debe a causas estrucWXUDOHV 3RUWHV 5REHUWV *ULPVRQ &RPR FRQVHFXHQFLD GH esta situaciĂłn, en ciudades altamente desiguales y con problemas GH SREUH]D HQGpPLFD VH FUHDQ FRQĂ LFWLYLGDGHV \ IUDFWXUDV XUEDQDV WHQVLyQ SROtWLFD H LQVHJXULGDG 218²+$%,7$7

18

2007

2006

2005

2004

2003

2002

2001

2000

1998

1997

1996

35 30 26 20 15 10 5 0 1995

Se observa una correlación entre concentración de población, violencia y delito. Las ciudades con mayor densidad de población muestran altos índices de criminalidad violenta (homicidios, lesioQHV YLRODFLyQ 3RU FLHUWR ´HO SUHGRPLQLR GH OD SREODFLyQ XUEDna, el incremento del número de ciudades y la generalización de la urbanización, no son causales o factores del incremento de la YLROHQFLD¾ &DUULyQ

AMÉRICA LATINA ¿CUà L ES EL PROBLEMA Mà S IMPORTANTE EN EL PA�S?, SERIE 1995 - 2007

Porcentaje

elevadas de criminalidad que las ĂĄreas rurales. Se sostiene, sin embargo, que esto podrĂ­a deberse a un problema de escasa capacidad de registro e infraestructura policial/judicial en ĂĄreas con menor desarrollo urbano.

Fuente LatinobarĂłmetro 1995 - 2007 Delincuencia

Desempleo

ÂżLA FORMA DE ACTUAR DEL PRESIDENTE...CON RESPECTO A LA SEGURIDAD, usted considera que ha sido muy buena, buena, ni buena ni mala, mala o muy mala? % muy buena, buena Panama Colombia Argentina MĂŠxico EE.UU (lĂĄtinos) EspaĂąa Salvador Nicaragua Pto.Rico Uruguay Rep. Dominicana Brasil Bolivia Venezuela Ecuador PerĂş Costa Rica Guatemala Chile Honduras Portugal Paraguay Total LatinoamĂŠrica

79 70 69 44 36 33 31 27 27 26 25 24 22 19 13 13 13 9 8 8 7

Mayor o igual 50% Entre el 30% y el 49% Menor o igual 30%

3 33

Fuente: Cima 2007

En la relaciĂłn entre distribuciĂłn socioeconĂłmica y criminalidad violenta, la pobreza no tiene un signo claro. En algunos paĂ­ses la indigencia y la pobreza son elevadas, como son los casos de +RQGXUDV 1LFDUDJXD %ROLYLD 3DUDJXD\ *XDWHPDOD &RORPELD \ %UDVLO Pero no todos los pobres son violentos, como tampoco todas las personas violentas son pobres. No es la pobreza Ăşnicamente lo que


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

AMÉRICA LATINA -TASA DE MUERTES POR ARMA DE FUEGO - POBLACIÓN TOTAL Y JÓVENES (DIFERENTES AÑOS CADA PAÍS 2000-2002) 90,0

79,8

Tasa de muertes por arma de fuego (2000-2002)

80,0

Tasa de muertes por arma de fuego (Pob. 15-24 años, 2000-2002) c/100 mil habitantes

70,0 60,0 50,0

40,9 40,0

34,3

30,0

20,7

20,6 14,9

12,9 8,6

8,3

8,0

10,0

6,7

6,8 4,5

4,6 5,7

5,5 3,0 Chile

13,9

Costa Rica

16,5

13,4

11,5

Nicaragua

21,7 20,0

1,8

2,4

Perú

México

Paraguay

Uruguay

Panamá

Ecuador

Argentina

Venezuela

Brasil

0,0

Fuente: Tudela, 2006.

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0

30 25 20 15 10

Colombia

Honduras

Brasil

Bolivia

Guatemala

R. Dominicana

Nicaragua

Paraguay

Chile

Panamá

Perú

Ecuador**

México

Argentina**

Costa Rica

El Salvador

Uruguay**

5

Relación de ingresos (veces)

35

Venezuela

Participación en el ingreso (porcentajes)

AMÉRICA LATINA (14 PAISES): ESTRUCTURA DE LA DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO POR DECILES, ALREDEDOR DE 2007*

0

40% más pobre

30% siguiente

20% anterior al 10% mas rico

10% más rico

D10/D(1 a 4)

Q5/Q1

* Hogares ordenados según su ingreso per cápita. ** Área urbana. Fuente: CEPAL, 2008.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

determina que una ciudad sea mĂĄs o menos violenta. Sin embargo, las condiciones de pobreza y de exclusiĂłn social hacen posible el desarrollo de formas de violencia o de identidades -individuales o grupales- con fuertes dosis de violencia en sus conductas sociales, afectando de manera distinta a un grupo u otro. En esta lĂ­nea, el &RHĂ€FLHQWH GH *,1, HVWDGtVWLFR HPSOHDGR SDUD PHGLU OD GHVLJXDOdad en la distribuciĂłn de la riqueza, se correlaciona positivamente con algunos tipos de criminalidad, particularmente con los delitos contra la propiedad. Un estudio en Argentina revelĂł que los grupos de menores ingresos sufren directamente el aumento del crimen, especialmente los robos en los hogares. Para los robos en la calle, en cambio, ricos y pobres muestran aumentos similares en la victimizaciĂłn. Los resultados son consistentes con la evidencia adicional que muestra que los ricos pueden proteger sus hogares de una manera mĂĄs efectiva que los pobres a travĂŠs de la contrataFLyQ GH VLVWHPDV GH VHJXULGDG SULYDGD 'L 7HOOD HW DO Uno de los principales factores de riesgo es el acceso a armas de fuego. En varios paĂ­ses las armas de fuego son la principal causa de muertes provocada por terceros, constituyĂŠndose en un factor importante de mortalidad. Las armas son los instrumentos privilegiados en la comisiĂłn de crĂ­menes violentos. Si bien las tasas de muertes por armas de fuego en algunos paĂ­ses de la regiĂłn son altas, las tasas de jĂłvenes muertos por la misma causa son mayores H LQFOXVR VH GXSOLFDQ :DLOVHOĂ€V] A.2. Redes de narcotrĂĄďŹ co

Hay diversos circuitos de criminalidad operando en la región. Uno muy relevante, que ha crecido fuertemente, es el de la droga. La FHQWUDOLGDG GH OD UHJLyQ HQ PDWHULD GH QDUFRWUiÀFR HVSHFLDOPHQWH coca, es indiscutible. La región andina (en especial Colombia, Perú \ %ROLYLD \ 0p[LFR VRQ ORV SULQFLSDOHV SURGXFWRUHV GH KRMD FRFD HQ HO PXQGR 218'' 2WURV SDtVHV VLUYHQ FRPR LPSRUWDQtes centros de blanqueo de dinero o como lugares de distribución KDFLD RWURV FRQWLQHQWHV FUHDQGR XQD FRPSOHMD UHG GH QDUFRWUiÀFR FRQ IXHUWHV QLYHOHV GH LQà XHQFLD DUPDPHQWR \ PLOLWDUL]DFLyQ HQ algunos casos. /DV UHGHV GH QDUFRWUiÀFR DEDVWHFHQ XQ FUHFLHQWH PHUFDGR PXQdial y un creciente mercado regional. La mayoría de los laboratorios clandestinos de elaboración de clorhidrato de cocaína se HQFXHQWUDQ HQ $PpULFD GHO 6XU \ OD SULQFLSDO UXWD GH WUiÀFR VLJXH discurriendo desde la región andina hacia AmÊrica del Norte. En HO HO iUHD DQGLQD SURGXMR WRQHODGDV GH FRFDtQD \ &RORPELD IXH HO PD\RU SURGXFWRU 218'' /RV SDtVHV YHFLQRV de los productores andinos se han vuelto importantes como zonas de trasbordo o trånsito a otros destinos. Un informe presentado HQ OD � 5HXQLyQ GH -HIHV GH 2UJDQLVPRV 1DFLRQDOHV (QFDUJDGRV GH &RPEDWLU HO 7UiÀFR GH 'URJDV HQ OD UHJLyQ 4XLWR RFWXEUH GH

20

UHYHOD TXH HO GHO WRWDO GH LQFDXWDFLRQHV GH FRFDtQD HQ HO PXQGR HV UHSRUWDGR HQ 6XGDPpULFD \ TXH HO GH ODV LQFDXWDFLRQHV UHDOL]DGDV HQ HO IXH HQ OD UXWD GHO 3DFtĂ€FR (O QDUFRWUiĂ€FR LPSDFWD HQ OD SREODFLyQ GH GLYHUVDV PDQHUDV 3RU un lado, un alto nĂşmero de delitos violentos en LatinoamĂŠrica estĂĄ DVRFLDGR DO WUiĂ€FR \ FRQVXPR GH GURJDV 3RU HO RWUR HQ DOJXQRV SDtVHV VH YDQ LQVWDODQGR JUXSRV GH QDUFRWUDĂ€FDQWHV FRQVWUX\HQdo redes y organizaciones criminales que se aprovechan de grupos socioeconĂłmicamente mĂĄs vulnerables, transformando territorios y barrios en centros de ventas de la droga y de reproducciĂłn de la HVWUXFWXUD GHO QDUFRWUiĂ€FR $FHUR Si bien los mercados de la cocaĂ­na estĂĄn principalmente en Estados Unidos y Europa, desde la dĂŠcada pasada se sabe que hay una progresiva homogeneizaciĂłn de las pautas de consumo de la droga en jĂłvenes de paĂ­ses industrializados y paĂ­ses en desarrollo. Los niveles de consumo de jĂłvenes de paĂ­ses en vĂ­a de desarrollo -inicialmente inferiores a los de paĂ­ses ricos- han tendido a imitar los de los paĂ­ses ricos y, por ende, a incrementar su nivel de consumo. 3RU RWUD SDUWH ´ORV HVWXGLRV FXDOLWDWLYRV PXHVWUDQ TXH ORV MyYHQHV de sectores urbanos de bajos ingresos son los mĂĄs vulnerables a ORV GDxRV FUHDGRV SRU HO FRQVXPR GH GURJDV GHWHULRUR IXHUWH GH OD autoestima, problema grave de sociabilidad, deterioro irreversible del rendimiento en la escuela y en el trabajo (con la deserciĂłn y HO DEDQGRQR GH HPSOHRV \ GHVLQWHJUDFLyQ IDPLOLDUÂľ $UULDJDGD \ +RSHQKD\Q (Q FXDQWR D OD FRFDtQD XQ UHFLHQWH LQIRUPH GH OD &RPLVLyQ ,QWHUDPHULFDQD SDUD HO &RQWURO GHO $EXVR GH 'URJDV UHYHOD TXH OD SUHYDOHQFLD GH FRQVXPR HQ HO ~OWLPR DxR HQ ORV VHLV SDtVHV GH $PpDISTRIBUCIĂ“N DE LAS INCAUTACIONES DE COCAĂ?NA A NIVEL MUNDIAL EN 2005 (N = 756TM)

AmĂŠrica del Norte 27,4% Europa 14,2%

AmĂŠrica Central 5,1%

Otros 0,4%

Caribe 2,2%

Ă frica 0,3% Asia 0,1%

AmĂŠrica del Sur 50,7% Fuente: ONUDD. Datos del cuestionario para informes anuales, DELTA (2008)

OceanĂ­a 0,013%


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

ULFD GHO 6XU HVWXGLDGRV HV $UJHQWLQD %ROLYLD &KLOH (FXDGRU 3HU~ \ 8UXJXD\ VXSHUDQGR DO GHO SURPHGLR PXQGLDO UHSRUWDGR SRU 1DFLRQHV 8QLGDV 6HJ~Q HVD SHVTXLVD FHUFD GH personas declararon haber consumido cocaína alguna vez durante ORV ~OWLPRV PHVHV SUHYLRV DO HVWXGLR HIHFWXDGR HO /D HGDG de inicio mås precoz entre las personas que han declarado consuPR GH FRFDtQD VH HQFXHQWUD HQ $UJHQWLQD GRQGH XQ GH HOORV FRQVXPLHURQ SRU SULPHUD YH] HVWD GURJD D ORV DxRV R PHQRV \ XQ OR KL]R D ORV DxRV R PHQRV (Q HO UHVWR GH ORV SDtVHV OD HGDG GH LQLFLR HV HQ SURPHGLR XQR R GRV DxRV SRVWHULRU /DV WDVDV de consumo presentan una importante variación entre los países, FRQ FLIUDV TXH YDQ GH DFXHUGR D OD SUHYDOHQFLD GH ~OWLPR DxR HQWUH XQ HQ HO FDVR GH (FXDGRU \ XQ HQ $UJHQWLQD La marihuana es la droga ilícita de mayor uso, principalmente enWUH MyYHQHV (Q HO JUXSR GH SDtVHV GH $PpULFD GHO 6XU HO SURPHGLR GHO FRQVXPR UHFLHQWH HV GH VXSHULRU DO SURPHGLR PXQGLDO (VWD FLIUD SDUD ORV VHLV SDtVHV HTXLYDOH D PLOORQHV GH SHUVRQDV GHO WRWDO GH PLOORQHV GH SHUVRQDV GH D DxRV representada en este estudio. Los mayores niveles de consumo reciente de marihuana se obserYDURQ HQ $UJHQWLQD &KLOH \ 8UXJXD\ FRQ FLIUDV FHUFDQDV D HQ ORV GRV SULPHURV SDtVHV \ HQ HO WHUFHU SDtV %ROLYLD SUHVHQWD XQD WDVD GH FRQVXPR GH PLHQWUDV TXH HQ (FXDGRU \ 3HU~ ORV SRUFHQWDMHV QR VXSHUDQ HO (Q WRGRV ORV SDtVHV HO FRQVXPR HV superior en hombres que en mujeres y principalmente se concenWUD HQ HO JUXSR GH D DxRV /D HGDG SURPHGLR GH LQLFLR YDUtD HQWUH ORV DxRV $UJHQWLQD \ &KLOH \ FDVL DxRV (FXDGRU 3HU~ \ 8UXJXD\ /D H[FHSFLyQ HV %ROLYLD GRQGH OD HGDG SURPHGLR GH LQLFLR HV DxRV 2WUR HIHFWR GHO QDUFRWUiÀFR HV TXH FRQ pO WDPELpQ SUROLIHUDQ ORV GHOLWRV FRQWUD OD SURSLHGDG $OJXQRV DGLFWRV D ODV GURJDV ÀQDQFLDQ VX DGLFFLyQ D WUDYpV GHO GHOLWR 3HUR HVWR QR VLHPSUH VLJQLÀFD TXH la droga lleve a delinquir a los jóvenes consumidores. Si bien diversos estudios han demostrado la relación entre alcohol y crímenes violentos y, al mismo tiempo, un porcentaje de infractores arrojan SRVLWLYR HQ ORV WHVW GH XVR GH GURJDV QR KD\ VXÀFLHQWH LQIRUPDFLyQ FRQÀDEOH TXH GHPXHVWUH SRU HMHPSOR TXH MyYHQHV TXH XVDQ GURgas incurran en ilícitos para pagar la droga. Se observa, por cierto, que aquellos que delinquen durante un largo período de sus vidas, D PHQXGR LQLFLDURQ VX FDUUHUD FULPLQDO FXDQGR HUDQ MyYHQHV GHVpuÊs de eso comenzaron a usar drogas ilícitas y, luego, ampliaron el espectro de sus actividades criminales. Existe un estilo de vida delictual asociado al consumo de drogas ilícitas. Sin embargo, el que alguien consuma drogas ilícitas no lo transforma en delincuente. (Q &KLOH XQ HVWXGLR GH OD )XQGDFLyQ 3D] &LXGDGDQD UHYHOD TXH HO GH ORV GHWHQLGRV SRU GHOLWRV GH PD\RU FRQQRWDFLyQ

VRFLDO HQ HO *UDQ 6DQWLDJR KDEtD FRQVXPLGR FRFDtQD \ SDVWD EDVH GHQWUR GH OD FiUFHO \ TXH XQ GH ORV GHWHQLGRV HQ HO VHFWRU GHO *UDQ 6DQWLDJR KDEtD FRQVXPLGR GURJDV KRUDV DQWHV GH OD GHWHQFLyQ FRFDtQD \ SDVWD EDVH A.3. JĂłvenes y violencia

Los delitos, conductas de riesgo y comportamientos incĂ­vicos de jĂłvenes constituyen elementos centrales en la percepciĂłn del temor de la poblaciĂłn y en las polĂ­ticas de prevenciĂłn y seguridad. /D YLROHQFLD HV XQ IHQyPHQR VLVWpPLFR HVWUXFWXUDO \ QR VyOR LQGLvidual. Es un fenĂłmeno multicausal y multidimensional, determiQDGR SRU OD HVSHFLĂ€FLGDG GH ODV UHDOLGDGHV VRFLR FXOWXUDOHV KLVWyULcas y polĂ­ticas de cada paĂ­s. La violencia sucede en los ĂĄmbitos rural y urbano, pero es en las ciudades donde adquiere mayor intensidad. Es por esto que se tiende a utilizar violencia urbana para designar a la violencia en las ciudades. Hablar sobre violencia es ir mĂĄs allĂĄ de las prĂĄcticas brutales, las estadĂ­sticas de homicidios, violaciones, R VHFXHVWURV LPSOLFD WDPELpQ FRQVLGHUDU OD FRQVWUXFFLyQ FRWLGLDQD de los miedos y la inseguridad en el imaginario de la poblaciĂłn.

JĂ“VENES: VĂ?CTIMAS Y VICTIMARIOS EN AMÉRICA LATINA En varios paĂ­ses el homicidio supera el 40% de las causas de muerte entre los jĂłvenes. Tomando como referencia SĂŁo Paulo, entre el 2001 y el 2005 tienen lugar allĂ­ el 21,5% de los CrĂ­menes Violentos Letales Intencionales registrados en el paĂ­s. Si bien la tasa de crĂ­menes violentos denunciados disminuye desde 951,2 a 797,1 casos cada 100 mil habitantes. (-16,2%), cerca del 70% de las muertes por agresiĂłn en el Estado de SĂŁo Paulo afecta a hombres de 15 a 34 aĂąos, con una tasa de mortalidad de 100 muertes c/ 100 mil habitantes en el aĂąo 2004. Ese aĂąo la tasa de mortalidad de jĂłvenes entre 15 y 24 aĂąos llega a 112 casos, mientras que la tasa entre 25 y 34 aĂąos es de 96 casos cada 100 mil habitantes (“Mortes por Atos Violentos em SĂŁo Pauloâ€?. SP DemogrĂĄďŹ co, AĂąo 5, N° 3, Noviembre de 2005). En Cali, por otra parte, se veriďŹ ca que el homicidio representa sĂłlo el 6,5% de las causas de muerte entre adultos (RodrĂ­guez, 2005), el mayor porcentaje afecta a jĂłvenes. Las violencias sexuales, de las cuales los jĂłvenes son generalmente mĂĄs vĂ­ctimas que autores, afectan en promedio al 22% de las mujeres y al 15 % de los hombres antes de los 17 aĂąos, segĂşn los estudios actuales (Instituto Interamericano del NiĂąo, 2003). AdemĂĄs de los delitos que constituyen atentados a la propiedad o a la persona, existe una forma particular de violencia colectiva propia de la juventud, que estĂĄ relacionada con algunas pandillas violentas, llamadas, segĂşn los lugares, ‘barras bravas’ (que se reďŹ eren a violencias esporĂĄdicas ligadas a sĂ­mbolos deportivos o culturales), pandillas (mayorĂ­a de los paĂ­ses), maras (Honduras, El Salvador, Guatemala).

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Un nĂşmero importante de homicidios, suicidios, comportamientos delictuales como robos, hurtos, asaltos, delitos sexuales y otros comportamientos incĂ­vicos se asocian a jĂłvenes en riesgo, es decir, a situaciones que afectan su desarrollo psicosocial, en particular de los adolescentes. A esto se suman las conductas de riesgo ligadas a las drogas ilĂ­citas, como el consumo problemĂĄtico y la inserciĂłn HQ HO WUiĂ€FR PLVPR DXQTXH HO URO GH ORV MyYHQHV HQ HO WUiĂ€FR HVWp subordinado al de los adultos. Este conjunto de comportamientos constituye uno de los mayores problemas de seguridad tanto para el control social y la prevenciĂłn como para las polĂ­ticas que enfrentan el problema del temor. En efecto, debido a la cantidad de delitos y de conductas de riesgo juveniles, por ende, a su visibilidad \ DO KHFKR GH TXH YDQ D YHFHV DFRPSDxDGDV GH YLROHQFLD FUHFLHQWH son percibidas como amenazas difĂ­cilmente tolerables desde una SHUVSHFWLYD DGXOWRFHQWULVWD TXH ROYLGD TXH HO SULQFLSDO GDxR GH HVtos comportamientos juveniles es su impacto sobre el desarrollo psicosocial de los jĂłvenes involucrados. La violencia juvenil es uno de los problemas de salud pĂşblica mĂĄs relevantes que afrontan los paĂ­ses de la regiĂłn. Un importante volumen de robos, hurtos y asaltos se relacionan con jĂłvenes. La mayorĂ­a de los infractores y la desproporcionada tasa de vĂ­ctimas masFXOLQDV VH UHODFLRQDQ FRQ PHQRUHV \ MyYHQHV HQWUH \ DxRV Esta situaciĂłn se presenta en un contexto caracterizado por facWRUHV HVWUXFWXUDOHV 3RU XQD SDUWH OD PD\RU SUHVHQFLD GHPRJUiĂ€FD GH MyYHQHV HQ OD KLVWRULD GH OD UHJLyQ HQWUH HO DxR \ HO 5RGUtJXH] &(/$'( 3RU RWUD OD H[FOXVLyQ VRFLDO \ segregaciĂłn urbana que afecta a segmentos importantes de la juventud en un ambiente de desigualdad, donde los mercados de la GURJD RIUHFHQ RSRUWXQLGDGHV .DW]PDQ \ UHSUHVHQWDQ XQ tipo de empleo informal e ilegal cercano al ĂĄrea de residencia, que RWRUJD DGHPiV ´SUHVWLJLRÂľ HQWUH ORV SDUHV HVSHFLDOPHQWH HQWUH MyYHnes con pocas expectativas. Finalmente, por falta de visiĂłn polĂ­tica \ SRU HO SUHGRPLQLR GHO ´DGXOWRFHQWULVPRÂľ HQ OD IRUPD GH HQIRFDU los problemas juveniles, particularmente en materia de seguridad .UDXVNRSI 5RGUtJXH] 9DQGHUVFKXHUHQ D VH produce una invisibilidad juvenil en las polĂ­ticas sociales, hecho que refuerza la exclusiĂłn. En efecto, cuando los problemas de una juventud protagonista de violencia son abordados en las polĂ­ticas pĂşblicas, a menudo son tratados como temas sectoriales -droga, pandillas, violencia escolar, etc.-, sin una visiĂłn integral. Son considerados como riesgo para la poblaciĂłn -entiĂŠndase los adultos- y, por lo tanto, hay que asumir medidas en el cuadro de polĂ­ticas de seguridad, las que son frecuentemente de carĂĄcter represivo. Las reformas penales focalizadas sobre la juventud, en particular la disminuciĂłn de la edad de UHVSRQVDELOLGDG SHQDO \ WDPELpQ OD SROtWLFD GH ´PDQR GXUDÂľ IUHQWH D ODV ´PDUDV \ SDQGLOODVÂľ VRQ FDUDFWHUtVWLFDV GH HVWD SHUVSHFWLYD adulto centrista. Siendo la juventud el segmento social que mayor-

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PHQWH GHEHUtD EHQHĂ€FLDUVH GH ODV DFFLRQHV GH SUHYHQFLyQ UHVXOWDQ evidentes las limitaciones y defectos de las estrategias vigentes. Por lo tanto, es necesario abrir el debate sobre los lineamientos a adoptar para una polĂ­tica que aborde la violencia juvenil (VandersFKXHUHQ D En cuanto a la exclusiĂłn de la juventud en el plano econĂłmico, PLHQWUDV OD WDVD GH GHVHPSOHR HQ OD UHJLyQ VH HOHYD D HQ HO HVH PLVPR DxR HQ PXFKRV SDtVHV OD GHVRFXSDFLyQ MXYHQLO D DxRV GXSOLFD OD WDVD GH GHVRFXSDFLyQ SURPHGLR $UJHQWLQD YV %UDVLO YV 3DQDPi YV 8UXJXD\ YV 8Q GH OD SREODFLyQ MXYHQLO XUEDQD GH OD UHJLyQ VH VLWXDED HQ OD SREUH]D \ XQ HQ OD LQGLJHQFLD (O GH ORV HPSOHRV GH ORV MyYHQHV GH D DxRV \ HO GH ORV GH D DxRV VRQ GH EDMD SURGXFWLYLGDG ´/RV FRQIRUPDQ trabajadores por cuenta propia, sin crĂŠdito ni apoyo tecnolĂłgico, sin inserciĂłn sĂłlida en el mercado, vendedores callejeros, empleadas domĂŠsticas y otras formas similares de economĂ­a informalâ€? 6HQ \ .OLNVEHUJ (VWD VLWXDFLyQ HV SDUWLFXODUPHQWH SUHocupante, pues diversos estudios han encontrado una correlaciĂłn robusta entre elevadas tasa de delincuencia y altas tasas de desocupaciĂłn juvenil. 'DGR TXH OD PD\RUtD GH ORV MyYHQHV GH D DxRV YLYH FRQ VX IDPLOLD QXFOHDU R H[WHQGLGD &(3$/ HO FOLPD IDPLOLDU WLHQH SDUD HOORV XQD JUDQ LPSRUWDQFLD \ VH YH DIHFWDGR SRU ´OD HOHYDGD pobreza que tensa y destruye a diario familias en la regiĂłn. El estrĂŠs VRFLRHFRQyPLFR TXH VLJQLĂ€FD OD GHVRFXSDFLyQ SHUPDQHQWH OD SUHcariedad, el hacinamiento, endurecen en extremo el clima familiarâ€? 6HQ \ .OLNVEHUJ El acceso y la calidad de los sistemas educativos acentĂşan la desLJXDOGDG \ OD H[FOXVLyQ VRFLDO (Q OD UHJLyQ ´OD PD\RUtD GH ORV MyYHQHV GH H[WUDFFLyQ KXPLOGH YD TXHGDQGR HQ HO FDPLQR 'HO PiV SREUH GH OD SREODFLyQ FRPSOHWD OD SULPDULD VROR HO /D PLWDG QR OD Ă€QDOL]DÂŤ /D VHFXQGDULD VROR HO Âľ 6HQ \ .OLNVEHUJ La precariedad del acceso al mercado de trabajo y al sistema educaWLYR H[SOLFD SRU TXp HO GH ORV MyYHQHV HQ $PpULFD /DWLQD HQWUH \ DxRV QR WUDEDMD QL HVWXGLD 6HQ \ .OLNVEHUJ La segregaciĂłn urbana es una dimensiĂłn espacial de este proceso de exclusiĂłn en segmentos importantes de jĂłvenes. En efecto, el acceso desigual a las infraestructuras, los equipamientos, los servicios colectivos urbanos, y la tendencia a la privatizaciĂłn de los espacios pĂşblicos, generan frustraciĂłn y fomentan la conquista de territorios alternativos. Es que la ciudad fragmentada no permite la generaciĂłn de identidades a travĂŠs de espacios y lugares que tengan sentido. No hay lugar de creaciĂłn de ciudadanĂ­a para


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

DESERCIĂ“N ESCOLAR “Las causas de deserciĂłn escolar responden a cuestiones muy concretas. Tienen que ver, entre otros factores, con la precariedad econĂłmica del marco familiar que obliga a muchos niĂąos y jĂłvenes a abandonar los estudios parcial o totalmente para poder aportar algĂşn ingreso a la familia, con la debilidad misma del nĂşcleo familiar para acompaĂąar al joven, y con el escaso capital educativo del mismo‌ La brecha educativa de la juventud latinoamericana no solo es cuantitativa, no se trata solo de mĂĄs aĂąos de escolaridad. Tiene tambiĂŠn importantes aspectos cualitativos. Es muy diferente el tratamiento educativo que reciben los diversos sectores, como lo han documentado mĂşltiples investigaciones. Entre otros aspectos, quienes asisten a escuelas privadas tienen mĂĄs horas de clase, docentes mejor pagados, mĂĄs recursos de apoyo, mejor infraestructura, que las que pueden ofrecer las escuelas pĂşblicas usuales.â€? (Sen y Kliskberg, 2007:202)

POBLACIĂ“N EN RIESGO: MĂ S JĂ“VENES, MĂ S POBRES La regiĂłn ostenta el magro honor de mostrar una directa correlaciĂłn entre pobreza y porcentaje de poblaciĂłn menor de 15 aĂąos (a mayor pobreza, mayor porcentaje de menores de 15 aĂąos). En AmĂŠrica Latina la correlaciĂłn entre paĂ­ses con un alto porcentaje de poblaciĂłn adolescente-menor y un elevado porcentaje de pobreza es directa y fuerte (0,9002), como ocurre tambiĂŠn con el Ă­ndice de Desarrollo Humano, siendo inversa e igualmente fuerte (0,9348). La tendencia demogrĂĄďŹ ca en la regiĂłn indica un aumento sostenido de la poblaciĂłn en alto riesgo (varones entre 15 y 29 aĂąos), representando casi un 40% de la poblaciĂłn en LatinoamĂŠrica menor a 30 aĂąos (Tudela, 2006).

ORV MyYHQHV H[FOXLGRV &RPR OR GHVFULEH - %RUMD ´OD GHVLJXDOGDG con pobreza genera por una parte ‘grupos vulnerables’ y por otra ‘grupos amenazados’. Entre los primeros (pobres y marginales, GHVRFXSDGRV \ SUHFDULRV GHVHVWUXFWXUDGRV \ DQyPLFRV QDFHQ comportamientos de violencia expresiva (por jĂłvenes frustrados DO FRQWHPSODU OR TXH OD FLXGDG RIUHFH \ TXH OHV UHVXOWD LQDFFHVLEOH \ HPHUJHQ ÂśFROHFWLYRV GH ULHVJR¡ SUHGHOLQFXHQWHV /DV PDĂ€DV GH OD HFRQRPtD GHOLFWLYD GURJD \ WUiĂ€FR GLYHUVR URER \ VHFXHVWURV VLFDULRV GH OD YLROHQFLD RUJDQL]DGD HQFXHQWUDQ HQ HVWRV PHGLRV XQ FDOGR GH FXOWLYR IDYRUDEOHÂľ %RUMD Esta situaciĂłn conduce a la apariciĂłn de grupos de jĂłvenes que viven la ciudad como territorio de exclusiĂłn y a conductas de riesgo que toman habitualmente tres formas, las que pueden ser simultĂĄneas: 1. La prĂĄctica (que puede coexistir con perĂ­odos de trabajo mĂĄs IRUPDO GHO GHOLWR ´DPDWHXUÂľ FRPR PHFDQLVPR OHJtWLPR GH REtenciĂłn de los medios que permiten acceder al mercado de FRQVXPR 6H VXEVWLWX\H HQ HVWH FDVR XQD ´OyJLFD GHO WUDEDMRÂľ

SRU XQD ´OyJLFD GH SURYLVLyQÂľ TXH KD GHVFULWR .HVVOHU HQ VX DQiOLVLV GHO ´GHOLWR DPDWHXUÂľ (Q XQD VRFLHGDG GH FRQVXPR OR TXH GHĂ€QH OD OHJLWLPLGDG GHO GLQHUR QR VHUtD VX RULJHQ VLQR VX Ă€QDOLGDG (Q HVWD SHUVSHFWLYD ORV PHGLRV VRQ OHJtWLPRV VL VRQ HĂ€FDFHV \ HO GHOLWR ´DPDWHXUÂľ HV XQ LQWHQWR GH HQWUDU HQ OD FDrrera delincuente que puede o no tener continuidad en funciĂłn de sus resultados o de la maduraciĂłn del individuo. /D SDQGLOOD YLROHQWD FX\R PRGHOR YDUtD HQ IXQFLyQ GH ORV WHMLdos barriales: maras, pandillas, barras bravas si hacen referencia a una actividad del deporte, o bandas. Aunque no todos los miembros de la pandilla estĂĄn necesariamente involucrados en la actividad delictual ni tampoco en la misma actividad (puede KDEHU DOJXQRV TXH VH GHGLFDQ DO WUiĂ€FR GH GURJDV \ RWURV DO URER OR TXH GLIHUHQFLD HVWH WLSR GHO DQWHULRU HV OD YROXQWDG GH controlar ciertos territorios, ya sea como espacios simbĂłlicos SURSLRV TXH SXHGH VLJQLĂ€FDU HQIUHQWDPLHQWRV FRQ RWUDV SDQGLOODV R FRPR iUHDV SDUD GHOLQTXLU 7DJV JUDIĂ€WL FRQ FDUDFWHUHV o sĂ­mbolos propios, control directo de sectores, destrucciĂłn de sĂ­mbolos diversos a aquellos de la propia pandilla son las

PERTENECER A UNA PANDILLA “La pertenencia a la pandilla opera como “inclusiĂłn en la exclusiĂłnâ€?. Bajo un sistema de recodiďŹ caciĂłn que va desde los tatuajes hasta un lenguaje propio, y que se extiende a la refundaciĂłn de la ley como forma de organizar el delito, no de abolirlo, muchas pandillas operan como sistemas de integraciĂłn social a nivel micro que reejan, compensan y a la vez refuerzan la desintegraciĂłn social en el nivel macro. Las bandas juveniles otorgan un espacio alternativo de socializaciĂłn a niĂąos y jĂłvenes excluidos, cuyo sentido de pertenencia se basa en acciones colectivas que van desde compartir el tiempo libre hasta acciones delictuales en un marco de paralegalidad constituido (Reguillo, 2008). La pandilla es para muchos jĂłvenes un espacio de participaciĂłn social, un sistema de valores donde se aďŹ rmarĂĄn identidades personales y grupales mediante nuevos cĂłdigos de comunicaciĂłn y nuevas formas de autoridad y comunicaciĂłn, distintos de aquellos que existen en el mundo de las instituciones formales.â€? (CEPAL/OIJ -2008, p.94)

PANDILLAS EN CONTEXTO DE GLOBALIZACIĂ“N “Mientras las pandillas empiezan como grupos de pares adolescentes sin supervisiĂłn y muchos conservan estas caracterĂ­sticas, algunos se institucionalizan en barrios, favelas, ghetos y en las cĂĄrceles. A menudo estas pandillas se transforman en empresas de negocios del sector informal y unos pocos se vinculan con los carteles del crimen organizado. Muchas pandillas comparten una identidad racial o ĂŠtnica y una cultura de oposiciĂłn difundidas por los medios. Las pandillas tienen conexiones variables con las instituciones convencionales y en ciertas circunstancias asumen roles social, econĂłmico, polĂ­tico, cultural, religioso o militarâ€? (Hagedorn 2007: 309).

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

manifestaciones de esta apropiaciĂłn en el primer caso. En el VHJXQGR VH DxDGHQ D HVWDV PDQLIHVWDFLRQHV ORV DVDOWRV D TXLHQHV penetran en los espacios apropiados. /D WHUFHUD IRUPD GH H[SUHVLyQ GH OD H[FOXVLyQ HV HO WUiĂ€FR GH droga: en forma individual, en grupo o pandilla, o en negocio IDPLOLDU 6L ELHQ HO PLFURWUiĂ€FR DO DOFDQFH GH ORV MyYHQHV H[FOXLdos y de sus familias no parece tan rentable en comparaciĂłn con los salarios de los trabajadores especializados o de los empleados de clase media, representa –sobre todo si se trata de un negocio familiar– un aporte considerable y estable a la familia. Ello les permite vivir como si fueran de clase media, integrados DO PXQGR GHO FRQVXPR \ OHMRV GH ODV GLĂ€FXOWDGHV GH VREUHYLYHQFLD FRWLGLDQD 3RU RWUD SDUWH HVWD DFWLYLGDG GH WUiĂ€FR RWRUJD HO HTXLYDOHQWH GH XQ ´HPSOHR GH SUR[LPLGDGÂľ 1R KD\ TXH FUX]DU la ciudad para encontrar fuentes de trabajo en un mundo con FyGLJRV GHVFRQRFLGRV VLQR TXH ODV ´RSRUWXQLGDGHVÂľ HVWiQ HQ el barrio o en las zonas colindantes. Esta actividad provee, a pesar de todas sus desventajas, un sentimiento de autoestima, la sensaciĂłn de ser alguien capaz de imponer sus normas sobre el territorio residencial. A.4. La violencia de gĂŠnero

La violencia contra las mujeres, incluida la violencia sexual, es una prĂĄctica extendida en muchas sociedades y forma parte de las violencias bĂĄsicas vividas en LatinoamĂŠrica. Las tasas de victimizaciĂłn son mĂĄs altas en paĂ­ses donde las mujeres reciben menor educaciĂłn formal y se vincula a altos niveles de SREUH]D H LQHTXLGDG GH ORV YDURQHV 218'' 81,&5, (Q $PpULFD /DWLQD OD FRUUHODFLyQ HQWUH WDVD GH YLRODFLyQ H ,'+ ĂŒQGLFH GH 'HVDUUROOR +XPDQR HV PRGHUDGD H LQYHUVD Es decir, a mayor desarrollo humano, menor tasa de delito sexual. Otros factores -tales como alcohol y tenencia de armas- tambiĂŠn juegan un rol importante. En AmĂŠrica Latina, Ă frica y Asia el porcentaje de mujeres vĂ­ctimas por este tipo de situaciones es casi PiV DOWR TXH ORV YDURQHV 9DQ 'LMN /D YLROHQFLD LQWUDIDPLOLDU GRPpVWLFD FRQWUD OD SDUHMD \ ORV QLxRV se produce en todos los paĂ­ses y en todos los estratos sociales, pero muchas veces es menos visible que otras manifestaciones de violencia. En la regiĂłn es mĂĄs probable que una mujer sea agredida en su casa por su pareja, que fuera de su hogar por un desconocido. (VWH FRQWH[WR LQĂ X\H WDPELpQ VREUH HO DOWR QLYHO GH LQVHJXULGDG que sienten las mujeres en tĂŠrminos comparativos a los hombres, y que tiene una mayor relaciĂłn con la violencia que vive al interior del hogar. A su vez, la informaciĂłn disponible indica que las agreVLRQHV KDFLD ORV QLxRV VRQ PiV IUHFXHQWHPHQWH FRPHWLGDV SRU VXV SDGUHV R TXLHQHV ORV FXLGDQ TXH SRU H[WUDxRV

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El gĂŠnero en la violencia Es importante reconocer el gĂŠnero en la violencia, entendiendo por gĂŠnero una construcciĂłn simbĂłlica que se reďŹ ere a un conjunto de caracterĂ­sticas socioculturales asignadas a las personas a partir del sexo y que convierten la diferencia de gĂŠnero en desigualdad social. La diferencia de gĂŠnero es una construcciĂłn mental y sociocultural que ha tenido un desarrollo histĂłrico. Es importante hacer la distinciĂłn entre violencia de gĂŠnero y violencia domĂŠstica. No toda la violencia contra las mujeres ocurre en el ĂĄmbito domĂŠstico, y no toda la violencia que ocurre en este ĂĄmbito es contra las mujeres.

Aunque hay pocos estudios, los datos de instituciones internacioQDOHV HVWLPDQ HQWUH \ HO VHJPHQWR GH PXMHUHV PDOWUDWDGDV D WUDYpV GH GLYHUVDV IRUPDV 'DPPHUW \ $ULDV /D PD\RU parte de quienes han sufrido agresiĂłn fĂ­sica han sido sometidas a mĂşltiples actos de violencia durante largos perĂ­odos de tiempo. Las encuestas en algunos paĂ­ses demuestran altos Ă­ndices de vicWLPL]DFLyQ \ ODV HVWDGtVWLFDV RĂ€FLDOHV KDEODQ GH HOHYDGDV WDVDV GH ´IHPLFLGLRÂľ HQ HO *XDWHPDOD FDGD PLO KDELWDQWHV \ (O 6DOYDGRU FDGD PLO KDELWDQWHV (VWD VLWXDFLyQ SRQH GH relieve el sesgo de gĂŠnero en el tratamiento de la violencia, pues a SHVDU GH FRQVWLWXLUVH HQ XQ KHFKR JUDYH \ PDVLĂ€FDGR HV LQYLVLELlizado frente a otros fenĂłmenos de violencia y delincuencia, aĂşn cuando afecta a una gran parte de la poblaciĂłn. /D YLROHQFLD HQ HO iPELWR GHO KRJDU DIHFWD D PXMHUHV QLxRV \ HQ DOJXQRV FDVRV D RWURV PLHPEURV GH OD IDPLOLD ´&RQVWLWX\H XQD violaciĂłn de los derechos humanos y las libertades fundamentaOHVÂľ TXH ´OLPLWD WRWDO R SDUFLDOPHQWH D OD PXMHU HO UHFRQRFLPLHQWR JRFH \ HMHUFLFLR GH WDOHV GHUHFKRV \ OLEHUWDGHVÂľ \ ´WUDVFLHQGH WRGRV los sectores de la sociedad independientemente de su clase, raza o grupo ĂŠtnico, nivel de ingresos, cultura, nivel educacional, edad o religiĂłn y afecta negativamente sus propias basesâ€? (ConvenciĂłn %HOpP GR 3DUi 'LVWLQWRV RUJDQLVPRV LQWHUQDFLRQDOHV GH GHrechos humanos paulatinamente fueron reconociendo la gravedad de este tipo de problemas. AsĂ­ surgieron propuestas que permitieURQ FUHDU LQVWUXPHQWRV LQWHUQDFLRQDOHV HVSHFtĂ€FRV GH SURWHFFLyQ como la ConvenciĂłn sobre la eliminaciĂłn de todas las formas de GLVFULPLQDFLyQ FRQWUD OD PXMHU OD &RQYHQFLyQ LQWHUQDFLRQDO GH ORV GHUHFKRV GHO QLxR R OD &RQYHQFLyQ LQWHUDPHULFDQD


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

MENORES, ADOLESCENTES Y JĂ“VENES EN CONFLICTO CON LA LEY Los paĂ­ses centroamericanos tienen mayores porcentajes de poblaciĂłn menor de 15 aĂąos y, al mismo tiempo, mĂĄs problemas de pandillismo (MĂŠxico 31%; El Salvador, 34,3%; Nicaragua, 39,5%; Honduras 39,7%; Guatemala 43,5%), que otros con mĂĄs bajos porcentajes de menores, adolescentes y jĂłvenes (Brasil 28,1%; Argentina, 26,7%; Chile, 25,5%; Uruguay, 24,4%). La combinaciĂłn de macro factores -como la urbanizaciĂłn y la estructura de edad- explica la mitad de las variaciones de la criminalidad observada en un paĂ­s u otro. En decir, si la poblaciĂłn mundial fuera similar -en cuanto a estructura de edad- y si el grado de urbanizaciĂłn fuese similar entre los paĂ­ses, las diferencias en los niveles de criminalidad se reducirĂ­an a la mitad (ONUDD & UNICRI, 2005).

DIPROFAM (Carabineros de Chile) La DirecciĂłn General de ProtecciĂłn a la Familia (DIPROFAM) es la instancia encargada de implementar la polĂ­tica pĂşblica de la instituciĂłn en materia de procedimientos, recolecciĂłn estadĂ­stica de VIF, como tambiĂŠn de orientar las acciones preventivas y la capacitaciĂłn del personal. Cuenta con 27 secciones especializadas para tratar la VIF, maltrato infantil y delitos sexuales. No obstante, todas las comisarĂ­as del paĂ­s disponen de una oďŹ cina para la atenciĂłn de vĂ­ctimas. Existe, ademĂĄs, una lĂ­nea telefĂłnica gratuita atendida por operadores capacitados para responder consultas, orientar y derivar a la poblaciĂłn. En 2007 dicha lĂ­nea se extendiĂł a todo el paĂ­s. A partir del 2001 Carabineros incorpora la temĂĄtica de VIF en la malla curricular de sus escuelas de formaciĂłn (FernĂĄndez I., 2007).

El marco orientador regional mĂĄs importante en materia de violencia FRQWUD OD PXMHU KD VLGR OD &RQYHQFLyQ %HOpP GR 3DUi TXH LGHQWLĂ€FD ODV REOLJDFLRQHV GH FDUiFWHU LQPHGLDWR \ DTXHOODV´SURJUHVLYDVÂľTXH debe adoptar el Estado para erradicarla.

namentales encargadas del tema. TambiÊn, en algunos casos, en pråcticas policiales (comisarías de familia en Colombia, comisarías de la mujer y la familia en Ecuador, y centros de atención de la YLROHQFLD IDPLOLDU &$9,)$0 HQ 3HU~ \ ',352)$0 HQ &KLOH en instalación de centros de acogida a mujeres víctimas, como asimismo en políticas de rehabilitación de agresores, en capacitación de monitoras, en educación en general y pråcticas de prevención primaria, secundaria y terciaria de violencia contra la mujer en el marco de la gestión de municipios, y sobre todo en iniciativas de la sociedad civil. Pero siendo la violencia de gÊnero un hecho cultural enraizado en las relaciones de poder históricamente desiguales entre mujeres y hombres, se hace imperceptible e invisible porque VH KD ´QDWXUDOL]DGR¾ 3RU HQGH ORV FDPELRV VRQ OHQWRV GHVLJXDOHV y progresivos.

Los avances desde entonces han sido notorios sobre todo en materia legislativa, en mayor visibilidad de la violencia domĂŠstica en OD VRFLHGDG D WUDYpV GH FDPSDxDV S~EOLFDV HQ OD GHĂ€QLFLyQ GH OD violencia como problema social y de polĂ­tica pĂşblica, en la incorporaciĂłn de la temĂĄtica en agencias gubernamentales (salud, MXVWLFLD HGXFDFLyQ VHJXULGDG \ HQ FUHDFLyQ GH DJHQFLDV JXEHU-

Es en el ĂĄmbito municipal donde han faltado polĂ­ticas generali]DGDV UHIHULGDV D OD YLROHQFLD GRPpVWLFD ,QLFLDWLYDV FRPXQDOHV KDQ H[LVWLGR \ DOJXQDV PX\ LQQRYDGRUDV 3*8 SHUR YDULRV JRELHUQRV ORFDOHV KDQ WHQGLGR D VDFULĂ€FDU HVWDV SROtWLFDV GHMDQGR D las organizaciones de la sociedad civil la responsabilidad de asumir este problema.

para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer, conocida como la ConvenciĂłn de Belem do ParĂĄ. La terminologĂ­a varĂ­a segĂşn los paĂ­ses, pero se distingue habitualmente entre YLROHQFLD FRQWUD OD PXMHU 9&0 \ YLROHQFLD LQWUDIDPLOLDU 9,) TXH SXHGH DIHFWDU WDPELpQ D RWURV PLHPEURV GH OD IDPLOLD QLxRV DQFLDQRV DGHPiV GH OD SDUHMD \ SXHGH LQYROXFUDU DVSHFWRV ItVLFRV psicolĂłgicos, econĂłmicos y sexuales.

VIOLENCIA INTRAFAMILIAR “Las relaciones familiares son la escuela primaria de la convivencia social. Cuando estas relaciones son de agresiĂłn, violencia o abandono, causan un impacto signiďŹ cativo a lo largo de la vida del niĂąo que la sufreâ€? (LarraĂ­n, 2007:157). AsĂ­ tambiĂŠn “las situaciones de violencia que tienen lugar en la familia, se originan y desarrollan bajo diversas y mĂşltiples formas, pero todas ellas tienen en comĂşn el sufrimiento y profundo deterioro de la calidad de vida de las numerosas personas que se ven afectadas por ella, asĂ­ como de aquellas que la rodean la violencia en la familia, el maltrato infantil y juvenil, y el abuso sexual son un ejemplo de elloâ€? (Barudy, 2000:17). La VIF es, en efecto, un factor de reproducciĂłn de la violencia porque “los niĂąos que crecen en un ambiente violento son mĂĄs susceptibles de convertirse en violentos cuando sean adultosâ€? (Smaoun, 2000:20). Aunque hayan sido solo testigos de la violencia fĂ­sica o psicolĂłgica, perciben e interiorizan que se trata de formas normales de resoluciĂłn de conictos (LarraĂ­n, 2007). “La evidencia en relaciĂłn a los costos e impactos que genera la violencia intrafamiliar, y la violencia contra las mujeres en particular, ha despertado una paulatina toma de conciencia acerca de la necesidad de enfrentarla a travĂŠs de diversas iniciativas y acciones. Hoy existe consenso a nivel regional y mundial que la violencia requiere ser abordada a travĂŠs de polĂ­ticas pĂşblicas integrales que incluyan la protecciĂłn y seguridad de las vĂ­ctimas, la provisiĂłn de diversos servicios directos a las mismas, la prevenciĂłn de la violencia en todos los niveles y la sanciĂłn a los agresores junto con su rehabilitaciĂłn y reeducaciĂłnâ€? (FernĂĄndez I., 2007).

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Es en el ĂĄmbito local donde mĂĄs faltan estructuras que aborden los temas de salud mental relacionados con la violencia contra la mujer, centros de atenciĂłn, programas de reeducaciĂłn de agresoUHV UHIXJLRV SDUD YtFWLPDV \ QLxRV \ FRRUGLQDFLyQ FRQ RUJDQL]DFLRQHV GH OD VRFLHGDG FLYLO ´$SDUHFHQ ODV PXQLFLSDOLGDGHV FRPR un espacio privilegiado para la implementaciĂłn de polĂ­ticas y programas en violencia domĂŠstica, tanto por su inserciĂłn territorial y la cercanĂ­a a los problemas cotidianos de las personas como por su carĂĄcter descentralizado que facilita la distribuciĂłn de recursosâ€? /DUUDtQ A.5. El amplio debate actual sobre la seguridad.

Entre los principales puntos del debate sobre la seguridad en AmĂŠrica Latina, destacan los de la gobernabilidad y la gobernanza. Ellos hacen referencia a los dispositivos de negociaciĂłn y de cooperaciĂłn entre la pluralidad de actores de la sociedad civil, del sector econĂłmico y del mercado, asĂ­ como del Estado, para facilitar y conducir procesos colectivos que determinan cĂłmo se toman decisiones en una sociedad y cĂłmo se elaboran normas sociales en UHODFLyQ FRQ OD VHJXULGDG FLXGDGDQD 9HOiVTXH] Un segundo debate concierne a la descentralizaciĂłn de la seguridad y en particular a las fuertes resistencias de las clases polĂ­ticas a la delegaciĂłn del control social y de la prevenciĂłn para que sean implementados por las autoridades locales. Lo anterior, a pesar del evidente y determinante protagonismo de los municipios en las H[SHULHQFLDV PiV H[LWRVDV GH OD UHJLyQ (V OD SULQFLSDO GLĂ€FXOWDG polĂ­tico-institucional para abordar la prevenciĂłn. 8Q WHUFHU GHEDWH VH IRFDOL]D VREUH ODV UHIRUPDV SROLFLDOHV 6H Ă XFtĂşa entre esbozos de policĂ­a comunitaria, de modelos de policĂ­a orientada a la resoluciĂłn de problemas, y formulas mĂĄs tradiFLRQDOHV )UÂ KOLQJ (VWH GHEDWH VH FRPSOLFD HQ QR SRFRV paĂ­ses por la escasa transparencia de algunas fuerzas policiales, los problemas de corrupciĂłn y de brutalidad o violencia en los procedimientos policiales. Una de las caracterĂ­sticas transversales \ UHFXUUHQWHV HV OD SRFD HĂ€FDFLD GH ODV DFWXDFLRQHV SROLFLDOHV TXH VH VXPD D OD IDOWD GH FRQĂ€DQ]D HQ ODV LQVWLWXFLRQHV GH VHJXULGDG \ justicia. La organizaciĂłn, el equipamiento, las estrategias y la preparaciĂłn de la policĂ­a tienen un importante rol en la prevenciĂłn y control GH OD FULPLQDOLGDG 1R KD\ HVWiQGDUHV GHĂ€QLGRV HQ HVWH VHQWLGR 7DPSRFR FRUUHODFLRQHV VLJQLĂ€FDWLYDV TXH SHUPLWDQ GHPRVWUDU XQD correlaciĂłn directa entre el nĂşmero de policĂ­as y los niveles de criminalidad en una sociedad. Entre 11 paĂ­ses estudiados, la tasa PHGLD GH $PpULFD /DWLQD HQ HO HV GH SROLFtDV F PLO KDELWDQWHV PLHQWUDV TXH HQ XQD PXHVWUD GH SDtVHV LQFOX\H D ORV SULQFLSDOHV SDtVHV GHVDUUROODGRV OD WDVD PHGLD HV GH SROLFtDV

26

F PLO +EWV /D H[SHULHQFLD LQWHUQDFLRQDO QR HV FRQFOX\HQWH no se puede sostener que hay una relaciĂłn permanente entre el nivel de recursos pĂşblicos, el nĂşmero de policĂ­as y las tasas de YLFWLPL]DFLyQ 1R KD\ GDWRV VXĂ€FLHQWHV SDUD VRVWHQHU OD KLSyWHVLV GH TXH ´PiV SROLFtDV PHQRV FULPHQÂľ /RV QLYHOHV GH FULPLQDlidad dependerĂ­an mĂĄs de la gestiĂłn y naturaleza de los servicios policiales que del nivel de recursos disponibles. (O /DWLQREDUyPHWUR UHYHOD TXH XQD FXDUWD GLVFXVLyQ HVWi marcada por el debate tradicional entre partidarios de una mayor UHSUHVLyQ OD WHVLV GH OD ´PDQR GXUDÂľ TXH SUHGRPLQD HQ PXFKRV SDtVHV GH OD UHJLyQ 6HQ \ .OLNVEHUJ \ HQ FRQWUDSRVLciĂłn, el ĂŠnfasis en la prevenciĂłn. La tesis de la mano dura es criticada por muchos observadores. 3RU HMHPSOR HO LQIRUPH GH 86$,' DQDOL]D OD DSOLFDFLyQ de mano dura a las maras y pandillas en Honduras y El Salvador. Critica este enfoque y lo compara con la polĂ­tica de prevenciĂłn adoptada en Nicaragua, para concluir que el enfoque de este Ăşltimo paĂ­s es exitoso y podrĂ­a aplicarse en otros. Finalmente, un tema de actualidad no resuelto es el rol de la juventud en la formulaciĂłn e implementaciĂłn de las polĂ­ticas de prevenFLyQ \ HQ JHQHUDO GH VHJXULGDG .UDXVNRSI 5RGUtJXH] 9DQGHUVFKXHUHQ E

B. LAS EXPERIENCIAS DE PREVENCIĂ“N EXITOSAS EN LA REGIĂ“N A raĂ­z del debate sobre la necesidad y las modalidades de abordar HO DXJH GH OD GHOLQFXHQFLD GHVGH HO LQLFLR GH ORV DxRV KDQ VXUJLdo en la regiĂłn iniciativas y polĂ­ticas destinadas a enfrentarla. Varias tendencias se destacan y pueden coincidir parcialmente. Por un lado, se encuentran los paĂ­ses que apuntan a reformas del sistema de justicia criminal -policĂ­a, tribunales y cĂĄrceles- a travĂŠs GH UHIRUPDV PRGHUQL]DGRUDV \ OD PRGLĂ€FDFLyQ GH OH\HV UHIHULGDV al delito juvenil. Por otro lado, se aprecian otros que apuntan a la PRGLĂ€FDFLyQ SRU OR PHQRV OHJDO GH ODV SHUVSHFWLYDV GH JpQHUR \ a la introducciĂłn de polĂ­ticas que apuntan a focalizar la violencia de gĂŠnero desde varios sectores (salud, educaciĂłn, justicia, seguriGDG HWF ([LVWH WDPELHQ XQ HVIXHU]R FRQVWDQWH HQ YDULRV SDtVHV dirigĂ­do a incluir una orientaciĂłn comunitaria y/o un enfoque de resoluciĂłn de problemas en la prĂĄctica policial. A pesar del esfuerzo reformista que expresan algunas polĂ­ticas, SRFRV SDtVHV KDQ SULYLOHJLDGR VXĂ€FLHQWHPHQWH \ HQ IRUPD HIHFWLYD y sustentable la prevenciĂłn social en sus diversas modalidades. Sigue habiendo mĂĄs preocupaciĂłn de la seguridad pĂşblica como


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

EL IMPACTO DE UNA POLĂ?TICA DE PREVENCIĂ“N LOCAL TASA DE HOMICIDIOS (1990-2007). MEDELLĂ?N, COLOMBIA. 390

381

360

352

330

c/100 mil habitantes

300

311

330

270 263

240

226

210

199

150

172

167

180 163

174

159

155

120 95

90

34

2006

2004

2003

2002

2001

2000

1999

1998

1997

1996

1995

1994

1993

1992

1991

0

1990

30

26

2007

36

2005

52

60

Fuente: Salazar, 2007.

monopolio estatal que de la seguridad ciudadana, entendiendo ĂŠsta como la coproducciĂłn de la seguridad con otros actores sociales. 9DULDV FLXGDGHV GH OD UHJLyQ FRPR %RJRWi 0HGHOOtQ 0RQWHUUH\ 4XLWR *XD\DTXLO 'LDGHPD 5RVDULR \ RWUDV KDQ LPSOHPHQWDGR polĂ­ticas de prevenciĂłn en el ĂĄmbito local que se han revelado exiWRVDV /RV UHVXOWDGRV GH %RJRWi 0HGHOOtQ \ 'LDGHPD HQ OD OXFKD contra el homicidio son conocidos y espectaculares. Estas expeULHQFLDV HVWiQ ELHQ GRFXPHQWDGDV $FHUR 'DPPHUW 'DPPHUW \ 3DXOVHQ 0RFNXV 'H /XFD 0LNL 6DOD]DU 9DQGHUVFKXHUHQ E 8Q DVSHFWR IXQGDPHQWDO en la estrategia es que se incluyĂł una serie de polĂ­ticas que abordan todos los campos de la prevenciĂłn relevantes en el contexto local: justicia alternativa, programas dirigidos a jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo, iniciativas en materia de violencia de gĂŠnero, empoderaPLHQWR GH FRPXQLGDGHV EDUULDOHV DFRPSDxDGR GH UHQRYDFLyQ GH barrios, reinserciĂłn de ex convictos, amplia gama de medidas dirigidas a quienes abusan de drogas, cortes de drogas, etc. Las caracterĂ­sticas comunes de estas experiencias exitosas son mĂşltiples. En primer lugar, su carĂĄcter local, es decir, el hecho de que las autoridades locales hayan asumido liderar un proceso pedagĂł-

Experiencias locales En AmÊrica Latina existen muchas experiencias innovadoras, creativas y exitosas que pueden servir y ser base para una política de prevención. Estudiar, intercambiar y discutir sobre estas experiencias es importante en una región cada vez mås interrelacionada. gico de coproducción de seguridad a partir de un diagnóstico de ODV QHFHVLGDGHV GH OD FLXGDGDQtD ´/RV JRELHUQRV ORFDOHV SXHGHQ estar mås cerca de las necesidades ciudadanas. Y la seguridad es claramente una necesidad muy sentida. La cercanía entre gobernante local y ciudadanía no se deriva exclusivamente del hecho que el primero sea elegido por esta última. TambiÊn se supone que el gobernante local conoce ya y, aún mås importante, estå dispuesto a conocer mejor su municipio y lo que pasa en Êl. La cercanía no HV VyOR SROtWLFD (V FRJQLWLYD < HV SHGDJyJLFD¾ 0RFNXV (Q HVWH VHQWLGR KD\ XQD FODUD GLYLVLyQ GHO WUDEDMR FRQ HO JRbierno nacional, que no excluye la colaboración pero que implica autonomía.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

LA MANO DURA FRENTE A LA CRIMINALIDAD “Las polĂ­ticas predominantes en muchos paĂ­ses de la regiĂłn han estado guiadas por esta visiĂłn bĂĄsica (mano dura). EstarĂ­amos frente a un tema de naturaleza bĂĄsicamente policial. La bĂşsqueda de respuestas debe darse en el marco del aďŹ anzamiento de los aparatos de seguridad. La falta de resultados se deberĂ­a principalmente a que no se ha aďŹ nado la estrategia ni multiplicado los programas de control policial. Por otro lado serĂ­a necesario dejar de lado las “sensiblerĂ­asâ€? y actuar sin miramientos para frenar a los potenciales y reales delincuentes. Ello puede abarcar desde amplias reorganizaciones de los aparatos policiales, que maximicen su presencia en los lugares pĂşblicos, su especial vigilancia de los sectores mĂĄs pobres de la poblaciĂłn, hasta incentivos por los resultados cuantitativos de la represiĂłn. Asimismo, incluye reformular la legislaciĂłn para facilitar la acciĂłn policial, suprimiendo garantĂ­as, y tener la posibilidad de detener, enjuiciar, encarcelar a los niĂąos desde edades muy tempranas.â€?

s El monitoreo del proceso con informaciĂłn pertinente, real y

creĂ­ble. s Un enfoque compartido por la comunidad y las instancias mu-

nicipales, coherente en todas las acciones, anĂĄlisis e interpretaciones, y promotor de la coproducciĂłn de seguridad. s $UWLFXODFLyQ HĂ€FD] FRQ OD SROLFtD \ HYHQWXDOPHQWH OD MXVWLFLD s RendiciĂłn de cuentas y transparencia. s Finalmente, la competencia de los equipos tĂŠcnicos ha sido esencial.

C. PREVENCIĂ“N DE LA VIOLENCIA Y CRIMINALIDAD Los tipos de prevenciĂłn

VERSUS LA ESTRATEGIA DE PREVENCIĂ“N FRENTE A LAS MARAS Y PANDILLAS “Nicaragua intentĂł un enfoque mucho mĂĄs basado en la prevenciĂłn y rehabilitaciĂłn que en la mano dura, y tuvo resultados mucho mejores‌ El nĂşmero y tamaĂąo de las maras y pandillas se ha reducido sensiblemente‌ Entre las estrategias utilizadas, en lugar de optar por endurecimientos legales, se intensiďŹ cĂł una relaciĂłn activa entre la policĂ­a y la comunidad, y la apertura de oportunidades de trabajo y de desarrollo artĂ­stico y vocacional en las cĂĄrceles. Entre otros programas, se crearon comitĂŠs de prevenciĂłn del delito entre el gobierno, los medios, el sector privado y miembros de las maras y pandillas, dirigidos a ofrecer oportunidades a quienes dejen a las maras y pandillas. El programa provee de asesoramientos, oportunidades educativas, entrenamiento y bĂşsqueda de trabajo. EjempliďŹ cador de su perďŹ l es que, para el DĂ­a de la Independencia de 2004, la policĂ­a utilizĂł 800 jĂłvenes que habĂ­an pertenecido a maras y pandillas para que la ayudaran a mantener el ordenâ€? (Sen y Kliksberg, 2007).

El segundo aspecto clave es el carĂĄcter multisectorial de esta coproducciĂłn. Los diversos sectores han sido llamados a cooperar y han sido coordinados. (Q WHUFHU OXJDU VH HQFXHQWUD OD FUHDFLyQ GH FRQĂ€DQ]D HQ OD FLXGDdanĂ­a a travĂŠs de procesos que crean sinergias y resonancias en HOOD ´/RV FLXGDGDQRV DSR\DQ SROtWLFDV S~EOLFDV QR WDQWR SRUTXH satisfagan sus intereses, sino por razones y emociones. Las apoyan simplemente porque las han entendido. Y entender da mĂĄs dereFKR D YLJLODU \ UHFODPDUÂľ 0RFNXV $ En cuarto lugar hallamos la coherencia entre polĂ­tica de seguridad y polĂ­tica urbana. La prevenciĂłn, en particular hacia los sectores PRGHVWRV KD VLGR DFRPSDxDGD GH SURFHVRV GH UHQRYDFLyQ XUEDQD y de creaciĂłn de espacios pĂşblicos. En quinto lugar se ha asumido los desafĂ­os de un proceso pedagĂłgico que contempla, como en BogotĂĄ:

28

El contexto descrito a grandes rasgos en las pĂĄginas anteriores lleva a reconocer la necesidad de polĂ­ticas que aborden los cambios estructurales, lentos pero necesarios, dirigidos a la inserciĂłn juvenil, a estrategias urbanas de inclusiĂłn, a polĂ­ticas de cohesiĂłn social y a reformas que apunten a erradicar la violencia de gĂŠnero \ OD YLROHQFLD FRQWUD QLxRV \ MyYHQHV 6LQ HPEDUJR OR LQGLFDGR no basta si no hay -es la lecciĂłn de los paĂ­ses y ciudades que han sido exitosos- polĂ­ticas preventivas masivas y focalizadas. Esto, por tres razones principales: /DV SROtWLFDV GH ´PDQR GXUDÂľ IUDFDVDQ SXHV ORJUDQ VyOR OOHQDU las cĂĄrceles, sin evitar las reincidencias. En el caso de una moGHUQL]DFLyQ GHO GHUHFKR SHQDO \ GH ODV FiUFHOHV ´DXQ FXDQGR el castigo cuenta con una legitimaciĂłn ĂŠtica y moral que pocos FXHVWLRQDQ GHVGH XQ SXQWR GH YLVWD FLHQWtĂ€FR HVWULFWDPHQWH empĂ­rico, no hay evidencia de efectividad preventiva general. No hay constancia de que el rigor de la pena o el aumento de las cuotas de encarcelamiento reduzcan las tasas de criminalidad y eviten el delito. La prevenciĂłn a travĂŠs del derecho penal cuenta FRQ XQDV OLPLWDFLRQHV HVWUXFWXUDOHV REYLDVÂľ *DUFtD 3DEORV GH 0ROLQD 'DGR TXH OD FULPLQDOLGDG HV PXOWLFDXVDO un conjunto de variables sin relaciĂłn con el sistema jurĂ­dicopenal -sociales, econĂłmicas, culturales, familiares, individuales \ VLWXDFLRQDOHV LQĂ X\HQ HQ VX DSDULFLyQ \ GHVDUUROOR /RV HVWXGLRV LQWHUQDFLRQDOHV KDQ PRVWUDGR TXH OD SUHYHQFLyQ es mĂĄs rentable que la sola represiĂłn. En la mayorĂ­a de los paĂ­ses los recursos pĂşblicos destinados a la seguridad son escasos, lo que obliga a desarrollar aĂşn mĂĄs XQ HQIRTXH FRVWR EHQHĂ€FLR \ GH UHQWDELOLGDG VRFLDO $ HOOR se agrega que mĂĄs cĂĄrceles y mĂĄs poblaciĂłn penitenciaria no demuestran tener resultados positivos en la contenciĂłn de la criminalidad. En AmĂŠrica Latina la poblaciĂłn penitenciaria y la escasa rehabilitaciĂłn son problemas fundamentales, pero la


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

AMÉRICA LATINA - TASA DE POBLACIÓN PENAL RECLUIDA, SEGÚN PA�S (2003-2006) 71

Guatemala (2003) Bolivia (2003)

El crimen y la violencia son una forma particular de relaciĂłn social que expresa un conicto entre actores y que desde el punto de vista de la racionalidad es una prĂĄctica que regula las relaciones entre las personas, es un mecanismo social de convivencia en un territorio. Desde esta perspectiva el crimen y la violencia son parte de una estructura social dada, de una comunidad o de un paĂ­s, de un territorio donde la violencia es una forma legĂ­tima de resoluciĂłn de conictos y el crimen una forma de desviaciĂłn social. Este acercamiento entiende ambos fenĂłmenos en su dimensiĂłn relacional, es decir, como un hecho social que expresa tanto una relaciĂłn como un conicto entre actores. Tal como lo plantea GarcĂ­a-Pablos de Molina: “El crimen no es un tumor, una epidemia, sino un doloroso problema interpersonal y comunitario. Una realidad prĂłxima, cotidiana, casi domĂŠstica: un problema de la comunidad que nace en la comunidad y ha de resolverse por ĂŠsta. Un problema social, en deďŹ nitiva, con todo lo que tal caracterizaciĂłn implica en orden a su diagnĂłstico y tratamientoâ€? (GarcĂ­a-Pablos de Molina A., 2003: 981).

72,5

Ecuador (2003)

74

Paraguay (1999)

75

Venezuela (2003)

Tasa Pob. Penal Recluida C/ 100 mil habitantes

83

Nicaragua (2004)

100 109

PerĂş (2004)

142,5

Argentina (2004) Colombia (2004)

152,5

Rep.Dom. (2004)

157

Honduras (2004)

158

Costa Rica (2004)

185,5

El Salvador (2004)

187

Brasil (2004)

187,4

MĂŠxico (2004)

real delincuente o autor de conductas de riesgo, sean individuos o grupos. La prevenciĂłn social es una intervenciĂłn dinĂĄmica de distintos actores y fuerzas comunitarias para abordar solidariamente la criminalidad, considerando sus raĂ­ces y causas.

195,5

Uruguay (2005)

211,9 251,3

Chile (2006 Jun.)

EL CRIMEN ES UN HECHO SOCIAL

380

PanamĂĄ (2004) 0

100

200

300

400

Fuente: Tudela, 2006.

WDVD GH SREODFLyQ UHFOXLGD DOFDQ]D D FDGD PLO KDELWDQWHV (Q HO &DULEH OOHJD D SRU FDGD PLO KDELWDQWHV :DOPVOH\ 3. Existen segmentos que estĂĄn ya en situaciĂłn de riesgo y podrĂĄn GLItFLOPHQWH EHQHĂ€FLDUVH GH ODV UHIRUPDV HVWUXFWXUDOHV Por ejemplo, segmentos importantes de poblaciĂłn declaran que HO DFFHVR D OD MXVWLFLD QR HV VXĂ€FLHQWH /DWLQREDUyPHWUR Las reformas estructurales son lentas y esperar su realizaciĂłn sigQLĂ€FD HQ OD SUiFWLFD GHFLU D ORV GHVIDYRUHFLGRV HVSHUHQ \ PLHQWUDV tanto el sistema de justicia criminal se preocuparĂĄ de sus problePDV GH LQVHJXULGDG 2IUHFHU DO GH ORV SREUHV GH OD UHJLyQ OD sola prevenciĂłn penal, es decir la represiĂłn como polĂ­tica, arriesga que se produzcan efectos contrarios a los buscados. Por ende la prevenciĂłn social -es decir aquella que apunta a las causas de la violencia y criminalidad- es necesaria para facilitar la inclusiĂłn y la cohesiĂłn social, como tambiĂŠn la reinserciĂłn de los victimarios y la protecciĂłn de las vĂ­ctimas. Esta prevenciĂłn no se limita a reducir los delitos a travĂŠs de cambios en el entorno urbano -como propone la prevenciĂłn situacional-, sino que apunta al potencial o

Esta prevenciĂłn social requiere inscribirse dentro de una polĂ­tica global e integral de mediano y largo plazo, en la cual se coordinen las distintas polĂ­ticas sociales. Dentro de ĂŠstas, la polĂ­tica urbana es fundamental en la implementaciĂłn de una polĂ­tica de seguridad, ya que permite construir ciudades fĂ­sica y socialmente mĂĄs integradas, con mejor calidad de vida. Las formas de prevenciĂłn social son varias y complementarias. La primaria, se dirige al conjunto de la poblaciĂłn con programas IRFDOL]DGRV SRU HGDG JpQHUR R JUXSRV VRFLDOHV TXH ´VH RULHQWDQ D ODV FDXVDV PLVPDV D OD UDt] GHO FRQĂ LFWR FULPLQDO SDUD QHXWUDOL]DU pVWH DQWHV GH TXH HO SURSLR SUREOHPD VH PDQLĂ€HVWH \ÂŤ D UHVROYHU las situaciones carenciales criminĂłgenas, procurando una sociali]DFLyQ SURYHFKRVD DFRUGH FRQ ORV REMHWLYRV VRFLDOHVÂľ *DUFtD 3DEORV GH 0ROLQD $ /DV HVWUDWHJLDV VRFLRHFRQyPLFDV \ culturales adoptadas apuntan a generar habilidades y capacitaciĂłn SDUD HQIUHQWDU SRVLEOHV FRQĂ LFWRV OR TXH UHTXLHUH GH XQ FRQRFLmiento sobre los mecanismos causales del problema a intervenir. Una de las formas de prevenciĂłn social es aquella llamada temprana, que se dirige en forma amplia -sin apuntar solo al problema de OD YLROHQFLD \ FULPLQDOLGDG D ORV QLxRV GHVGH HO QDFLPLHQWR KDVWD la pubertad, y a sus familias. Debe estar dirigida a los diversos tipos y estructuras de familias. /D SUHYHQFLyQ VHFXQGDULD QR DFW~D GRQGH VH JHQHUD HO FRQĂ LFWR FULPLQDO VLQR FXDQGR HO FRQĂ LFWR FULPLQDO VH PDQLĂ€HVWD \ H[WHrioriza. Focaliza a aquellos grupos que presentan mayor riesgo de

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

TODOS TIENEN IGUALES OPORTUNIDADES DE ACCESO A LA JUSTICIA TOTALES POR PAĂ?S 2007 Venezuela Rep. Dominicana Nicaragua Guatemala Costa Rica Honduras Uruguay MĂŠxico El Salvador PanamĂĄ Colombia Bolivia Ecuador Chile Paraguay Argentina Brasil PerĂş LatinoamĂŠrica

38 33 32 31 28 27 26 25 25 24 23 20 17 15 11 10 10 8 22 0%

10%

20%

30%

40%

50%

Fuente: LatinobarĂłmetro, 2007.

padecer o protagonizar situaciones de violencia y delincuencia. Es de corto y mediano plazo. Ejemplos son programas dirigidos a jóvenes en situación de riesgo, como los desertores escolares, los consumidores de drogas, los alumnos de escuelas con alto grado de violencia escolar o los jóvenes que viven en barrios críticos. La prevención terciaria constituye una intervención tardía que foFDOL]D D ODV SHUVRQDV HQ FRQà LFWR FRQ OD OH\ /D SREODFLyQ UHFOXVD los jóvenes detenidos por delitos, los autores habituales de microWUiÀFR VRQ VXV GHVWLQDWDULRV /RV REMHWLYRV EiVLFRV VRQ OD UHLQVHUción social, la rehabilitación y la prevención de reincidencias. Durante las últimas dÊcadas ha surgido una forma de prevención llamada situacional, complementaria a la prevención social. &RQVLVWH HQ OD PRGLÀFDFLyQ GHO HQWRUQR FULPLQyJHQR D WUDYpV GH PRGLÀFDFLRQHV XUEDQDV LOXPLQDFLyQ PHMRUDPLHQWR YLDO GH IDFWRUHV TXH GLÀFXOWHQ OD GHOLQFXHQFLD FRQWUROHV YLVXDOHV YLJLODQtes naturales, control de acceso, cierre de locales, control de arPDV HWF GHO DXPHQWR GHO ULHVJR DO GHOLQTXLU YLJLODQFLD DODUPDV JXDUGLD SHUUR DVt FRPR OD UHGXFFLyQ GH OD JDQDQFLD R GHO HIHFWR EXVFDGR &ODUNH &RKHQ \ )HOVRQ 5DX 0 La prevención situacional puede ser complementaria a la prevención social en la medida en que subraya las dimensiones temporal y espacial del delito. Contribuye a neutralizar las oportunidades del delito pero por sí sola no trata de llegar a sus raíces sociales y humanas, por lo que no sustituye a la prevención social ni es sinónimo del control social de los espacios, uno de los objetivos a los que apunta la prevención social. La prevención

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situacional logra ĂŠxitos de corto plazo desvinculados de las cauVDV GHO SUREOHPD \ Ă€QDOPHQWH FRUUH HO ULHVJR GH VROR GHVSOD]DU D OD GHOLQFXHQFLD VLQ GLVPLQXLUOD ´XQD SUHYHQFLyQ RULHQWDGD D criterios rigurosamente espaciales obstaculiza, aplaza o desplaza OD FRPLVLyQ GHO GHOLWR SHUR QR OR HYLWDÂľ *DUFtD 3DEORV GH 0ROLQD El enfoque de prevenciĂłn comunitaria, concepto no siempre preciso, es una forma integral de considerar el conjunto de formas de prevenciĂłn. Enfatiza el rol y participaciĂłn de los actores de la comunidad local. Puede asumir diversas formulaciones. Una es la defensa de la comunidad, de sus espacios defensivos, vale decir apuntar a la protecciĂłn de la comunidad a travĂŠs de tĂŠcnicas situacionales o de la presencia policial. Otra es la llamada perspectiva de desarrollo: enfatiza la presencia de la comunidad de vecinos en la prevenciĂłn, pero ligada a programas de infraestructura, equipamiento, etc., del barrio o de la comuna. TambiĂŠn estĂĄ el enfoque del empoderamiento, que privilegia dar a la comunidad la capacidad de administrar por sĂ­ misma, con sus energĂ­as propias, la prevenciĂłn \ OD JHVWLyQ SRU HQGH DSXQWD D OD DVRFLDFLyQ GH OD FRPXQLGDG FRQ otros sectores, le da un rol protagĂłnico y facilita la generaciĂłn de una cultura de la prevenciĂłn. Asumir que la colectividad interviene como coproductor de seJXULGDG VLJQLĂ€FD UHFRQRFHU LPSOtFLWDPHQWH TXH HO (VWDGR QR HV HO ~QLFR DFWRU HQ OD GHĂ€QLFLyQ H LPSOHPHQWDFLyQ GH OD SROtWLFD GH VHJXULGDG ,PSOLFD WDPELpQ DVXPLU OD GHVFHQWUDOL]DFLyQ (OOR VH


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

expresa en la diferencia entre dos conceptos bĂĄsicos: la seguridad ciudadana, que se distingue de la seguridad pĂşblica por la participaciĂłn de nuevos actores sociales en su producciĂłn. El ĂŠnfasis en la seguridad pĂşblica correspondiĂł a un monopolio del Estado en materia de seguridad y su capacidad de mantener el control de la vida social y urbana, concretizado en las fuerzas de policĂ­as y los tribunales. En cambio, la seguridad ciudadana asume que otras LQVWLWXFLRQHV ORFDOHV \ HVWDWDOHV VDOXG HGXFDFLyQ HWF \ VREUH WRGR la sociedad civil, es decir, los ciudadanos y sus organizaciones sociales o barriales, y el sector privado juegan un rol importante en la seguridad. La diferencia con la nociĂłn de seguridad pĂşblica se encuentra en la incorporaciĂłn del ciudadano. Ya no se plantea una producciĂłn de seguridad Ăşnicamente por parte de los agentes estatales, sino la necesidad de coproducir la seguridad entre todos los actores invoOXFUDGRV /D FRSURGXFFLyQ VH UHĂ€HUH DO SURFHVR TXH SHUPLWH TXH todas las agencias del Estado central y local, asĂ­ como las instituciones de la sociedad civil y del sector privado, junto a los habitantes involucrados, participen en forma responsable en la construcciĂłn GH VHJXULGDG \ HQIUHQWHQ HĂ€FD]PHQWH ORV SUREOHPDV GH LQVHJXULGDG de todo tipo. La coproducciĂłn se basa sobre la idea de que la seguridad es responsabilidad de todos y no solo del sistema de justicia penal. Este postulado deriva de la multicausalidad de la criminalidad y de los comportamientos antisociales, lo cual implica la necesidad de una respuesta multisectorial coordinada e integrada. La coproducciĂłn requiere, consecuentemente, que todas las instituciones y actores involucrados se consideren corresponsables de las soluciones a los problemas y tambiĂŠn elementos constitutivos de los problemas PLVPRV /R DQWHULRU FRQOOHYD OD DEHUWXUD D PRGLĂ€FDFLRQHV RUJDnizativas y sobre todo a cambios de mentalidades y prĂĄcticas al interior de las instituciones para enfrentar los problemas. La incorporaciĂłn de todas las personas a las polĂ­ticas de seguridad opera con cuatro supuestos: s Primero, la participaciĂłn que busca muchas veces mejorar la deteriorada relaciĂłn entre los habitantes y la policĂ­a. s En segundo lugar, apunta a fortalecer las redes sociales existentes bajo la presunciĂłn de que permitirĂĄn el desarrollo y consolidaciĂłn del capital social. s En tercer tĂŠrmino, la participaciĂłn tiende a consolidar el proceso de descentralizaciĂłn, que otorga a los gobiernos locales un rol cada vez mĂĄs activo en la formulaciĂłn e implementaciĂłn de polĂ­ticas y estrategias urbanas de seguridad. s Finalmente, la participaciĂłn de la colectividad apunta a desarrollar el derecho a la seguridad, que amplĂ­a el tradicional enfoque sobre la mejora de la calidad de vida de las personas, centrado en la vivienda y el barrio, hasta abarcar la calidad de vida a escala de ciudad.

LOS ACTORES DE LA PREVENCIĂ“N La colectividad es fundamental en la acciĂłn preventiva: “La colectividad estĂĄ al centro de toda acciĂłn eďŹ caz de prevenciĂłn de la criminalidad. Son las personas que viven, trabajan y juegan en la colectividad quienes comprenden mejor los recursos, los problemas, las necesidades especĂ­ďŹ cas y las capacidades de su regiĂłn‌ Las colectividades deben estar listas a invertir tiempo y experiencia, y los dirigentes locales deben contribuir a movilizar un abanico completo de socios locales para enfrentar los problemas de criminalidad y de victimizaciĂłn. El ĂŠxito de los proyectos de prevenciĂłn del crimen mediante el desarrollo social se apoya sobre la participaciĂłn activa de todos los socios en su concepciĂłn, ejecuciĂłn y evaluaciĂłnâ€? (Marcus, 2004).

La preocupación por pensar el espacio urbano como un åmbito TXH JDUDQWLFH GHUHFKRV \ QHFHVLGDGHV HVSHFtÀFDV SDUD WRGRV VXV KDELWDQWHV HV UHODWLYDPHQWH UHFLHQWH -XQWR DO QDFLPLHQWR GH XQ QXHYR siglo y la consolidación de la sociedad globalizada y en proceso de urbanización generalizada, tambiÊn se ha gestado una nueva generación de derechos, los llamados Derechos Humanos Emergentes, 'HUHFKRV &RPSOHMRV R GH &XDUWD *HQHUDFLyQ 6H KDEOD GH XQD cuarta generación de derechos humanos, haciendo la diferencia entre los derechos políticos y civiles –o de primera generación– que se discutieron con la Declaración Universal de Derechos del Hombre. Se plantea que una segunda generación fueron los deUHFKRV HFRQyPLFRV VRFLDOHV \ FXOWXUDOHV GH ORV DxRV \ XQD tercera generación de derechos llamados de solidaridad, como el derecho a la paz, a la calidad de vida entre otros. En este contexto DSDUHFH HO GHUHFKR D OD FLXGDG GH FXDUWD JHQHUDFLyQ TXH DPSOtD HO tradicional enfoque sobre la mejora de la calidad de vida de las personas centrado en la vivienda y el barrio hasta abarcar la calidad de vida a escala de ciudad y su entorno rural, como un mecanismo de protección de la población que vive en ciudades o regiones en acelerado proceso de urbanización. A su vez, aparece la demanda por seguridad como un derecho urbano exigible. En efecto, la ciudad a travÊs de su patrimonio colectivo y sus espacios públicos ofrece un escenario para el desarrollo de la actividad humana, y cuando este patrimonio y los espacios públicos se insegurizan se limita la posibilidad creadora y el desarrollo de sus habitantes, de sus asociaciones y de su capital social. Con ello se pone en tela de juicio la capacidad de la ciudad de promover un desarrollo integral de los individuos, por lo que el derecho a la seguridad estå íntimamente relacionado con servicios urbanos de seguridad iguales para todos 5XL] \ 9DQGHUVFKXHUHQ El derecho a la seguridad presupone la aceptación de la diversidad, de la alteridad, y exige la educación para la aceptación de las diferencias de generación, de gÊnero, de etnia, de comportamiento sexual o religioso, y al mismo tiempo modalidades de resolución GH SRVLEOHV FRQà LFWRV HQ HVWH HVSDFLR 3RU OR WDQWR OD VHJXULGDG XUEDQD VLJQLÀFD JHQHUDU ORV HVSDFLRV S~EOLFRV GH HQFXHQWUR DGHFXD-

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

LOS PROYECTOS URBANOS INTEGRALES (PUI), EN MEDELLĂ?N, COLOMBIA

Lo primero fue determinar, superponiendo mapas que graďŹ caban los problemas que se consideraron mĂĄs importantes (homicidios, robos, falta de servicios, etc.), considerando el Ă?ndice de Desarrollo Humano y la Encuesta de Calidad de Vida, los barrios mĂĄs conictivos y carenciados. DeďŹ nidos ĂŠstos, y antes de actuar, se contactaron los lĂ­deres locales, para que sirvieran de primer nexo con las comunidades. “No se puede entrar como profesionales en una zona en guerra‌ nosotros lo que estamos haciendo es la recuperaciĂłn de la institucionalidadâ€? (CĂŠsar HernĂĄndez, PUI). Para esto fue importante el Programa Paz y ReconciliaciĂłn, para saber quĂŠ grupos habĂ­a, quiĂŠnes eran sus jefes, cuĂĄles eran sus motivaciones, etc. Como ĂŠstos eran sectores abandonados por el Estado y los gobiernos, la desconďŹ anza que habĂ­a hacia las instituciones era muy grande. La estrategia fue pedir un aĂąo para ver los primeros resultados, es decir tener una obra de “logro inmediatoâ€? que generara las condiciones para seguir trabajando y poder llevar a cabo una intervenciĂłn integral a largo plazo. “Si nosotros logramos, primero, microterritorios de desarrollo, estamos plantando una semilla‌ estamos haciendo acupuntura urbana. El gobierno tiene que hacer la columna vertebral, la columna bĂĄsica sobre la cual se sigue haciendo el desarrolloâ€? (CĂŠsar HernĂĄndez).

GRV D ODV QHFHVLGDGHV OHJtWLPDV GH FDGD JUXSR HVSHFtÀFR \ JHQHUDU las condiciones de protección que permitan que los encuentros se den en forma civilizada. Esto implica formas de resolución de FRQà LFWRV TXH VH YDQ PRGLÀFDQGR FRQ HO WLHPSR SRUTXH ORV JUXSRV TXH FRPSRQHQ OD FLXGDG FDPELDQ FRPR WDPELpQ VH PRGLÀcan las demandas de los grupos y sus necesidades. Esta seguridad contempla la apropiación de la ciudad por todos y todas y abarca mucho mås que el derecho a la integridad física y a la protección GH OD SURSLHGDG SULYDGD ,PSOLFD OD FDSDFLGDG GH YLYLU HQ XQ DPbiente donde los derechos humanos son respetados. Por ejemplo, el derecho de los jóvenes de tener espacios y poder manifestarse de formas que les son propias o el derecho de minorías religiosas, Êtnicas o sexuales de tener sus lugares propios de reunión, de conPHPRUDFLyQ R GH ÀHVWDV /R GLFKR QR VLJQLÀFD OD DXVHQFLD GH FRQ-

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Uno de los barrios elegidos fue el de Santo Domingo Savio, ubicado en uno de los cerros que rodea la ciudad. En ĂŠl se ha construido el Metrocable (que permite conectar a esta poblaciĂłn con el metro de MedellĂ­n), un colegio de gran calidad, un Cedezo (Centro de Desarrollo Empresarial), una biblioteca (sĂ­mbolo del barrio), puentes, parques, mejoramiento de calles (arterias principales y secundarias, de continuidad urbana, de conexiĂłn barrial, vecinales y peatonales), un restaurĂĄn escolar (en un colegio), un gran plan habitacional de reasentamiento que permite liberar las quebradas creando ĂĄreas verdes y construir ediďŹ cios de departamentos eliminando viviendas de muy mala calidad. Entre el aĂąo 2004 y 2007 se realizaron en el sector alrededor de 290 acciones, con un valor aproximado de 328 millones de dĂłlares.

Š Universidad Alberto Hurtado

Ante la existencia de barrios dominados por la violencia y grupos armados, donde la presencia del estado era escasa y båsicamente era percibida en acciones represivas, algunas muy violentas, el municipio de Medellín se propuso actuar en forma focalizada en los lugares mås conictivos, de manera integral. Para ello fue fundamental que el alcalde creara al PUI, basado en antecedentes de la ciudad y casos latinoamericanos, haciendolo central de su gestión y que para ello se coordinaran los distintos servicios del municipio.

Estación Terminal del Metrocable y la nueva biblioteca en Santo Domingo Savio, que fuera uno de los barrios mås conictivos de Medellín.

Ă LFWRV D YHFHV YLROHQWRV VLQR PiV ELHQ OD FDSDFLGDG GH UHJXODUORV a travĂŠs de una educaciĂłn colectiva permanente, de control social y, sobre todo, a travĂŠs de formas de prevenciĂłn que permitan reducir las causas de la violencia y reeducar a quien estĂĄ en situaciĂłn de vulnerabilidad. El derecho a la seguridad corresponde a todos los espacios, pasando desde el mĂĄs Ă­ntimo en el hogar, al de la vivienda, el barrio, la comuna y la ciudad en su conjunto. Cuando la seguridad se ve vulnerada en el espacio pĂşblico, se instala el temor en las personas, lo que genera un doble proceso: de abandono por parte de sus ocupantes naturales y de apropiaciĂłn exclusiva de aquel espacio por parte de grupos localmente dominantes, como pueden ser GHOLQFXHQWHV R QDUFRWUDĂ€FDQWHV (VWD VLWXDFLyQ VH GD FRQ PD\RU


Capítulo 1: SEGURIDAD EN AMÉRICA LATINA Y ACTORES DE LA PREVENCIÓN

fuerza en espacios de exclusiĂłn social como los barrios marginados, los que a su vez sufren en mayor medida la violencia y la inseguridad. En estos contextos, la seguridad urbana debe volver a ser un bien pĂşblico que estĂĄ estrechamente ligado a otras dimensiones sociales. No solo la demanda de seguridad urbana es transversal a muchas polĂ­ticas sino que es una demanda colectiva y no solo individual. El ciudadano exige seguridad para ĂŠl y su familia, pero tambiĂŠn pide calidad de vida en los espacios pĂşblicos, sean ĂŠstos calles, plazas, transportes, escuelas, negocios, parques, cines, etc. Pide sobre todo que la ciudad, el espacio pĂşblico y su barrio estĂŠn seguros. En estos lugares el ciudadano quiere calidad de vida y no solo garantĂ­a contra ladrones o delincuentes comunes. Pide que el lugar sea agradable y funcional, pide que sea un lugar que tenga sentido en tĂŠrminos de vida ciudadana, demanda implĂ­cita de todos. (Q HVWH VHQWLGR OD UHFRPHQGDFLyQ GH - %RUMD HV PX\ SHUWLQHQWH ´(O XUEDQLVPR QR SXHGH UHQXQFLDU D FRQWULEXLU D KDFHU HIHFWLYR el derecho a la seguridad en la ciudad, es decir, el derecho a los espacios pĂşblicos protectores. Pero para todos. Sin exclusiones.â€? %RUMD Por otra parte, el derecho a la ciudad por parte de las mujeres se ve muchas veces obstaculizada por la sensaciĂłn de inseguridad y temor a ser agredidas, lo que tiene un impacto en su vida cotidiana, limitando en muchas ocasiones su autonomĂ­a, su movilidad, para el uso y apropiaciĂłn de los distintos lugares y espacios en una ciudad, y de manera particular en lugares y horarios considerados como riesgosos o peligrosos. La peligrosidad de estos lugares estarĂ­a asociado a las caracterĂ­sticas fĂ­sicas de ĂŠstos (por ejemplo, sitios urbanos sin mantenimienWR VLVWHPDV GH LOXPLQDFLyQ LQVXĂ€FLHQWH ]RQDV GHWHULRUDGDV \ VLQ FRQWURO VRFLDO D OD GLQiPLFD VRFLDO TXH RFXUUH \ VH H[SUHVD HQ estos espacios y a la percepciĂłn de inseguridad y temor. TambiĂŠn se asociarĂ­a esta peligrosidad a la no existencia de redes sociales de protecciĂłn entre vecinos y/o distintos grupos sociales, y en la PD\RU R PHQRU LGHQWLĂ€FDFLyQ FRQ HO OXJDU HQ TXH VH YLYH Los impactos sociales, econĂłmicos y psicolĂłgicos de las restricciones que las mujeres sufren ya sea por la experiencia de violencia o la percepciĂłn de inseguridad y por lo tanto el temor asociado a ĂŠsta, se transforma en una condicionante para transitar y apropiarse de los distintos espacios de una ciudad y para participar de distintas actividades como ciudadanas. Que una ciudad sea mĂĄs segura considera necesariamente la promociĂłn de los derechos ciudadanos y de las mujeres en particular, pero ademĂĄs es importante considerar otras herramientas que sin duda aportan a la creaciĂłn de ambientes mĂĄs seguros. Una de HVWDV KHUUDPLHQWDV HV OD SODQLĂ€FDFLyQ ItVLFD GHO WHUULWRULR 5DLQH-

GUARDIA URBANA MUNICIPAL (GUM) ROSARIO, ARGENTINA El municipio de Rosario, Argentina, ha creado una guardĂ­a uniformada municipal no armada, constituida de 170 personas, de ellas 130 guardias dedicados a 2 Ăł 3 zonas carenciadas y el centro de la ciudad. Rosario, una ciudad de mĂĄs de novecientos mil habitantes, se ha descentralizado en 6 distritos con sedes municipales, de muy buena calidad, donde funciona un coordinador y encargados de los principales servicios. Sin embargo, la GUM se ha ďŹ jado como objetivo ser un nexo entre la ciudadanĂ­a y el municipio (en muchos lugares donde la presencia del estado es muy baja y, generalmente, se expresa en la represiĂłn por parte de la policĂ­a), ademĂĄs de disuadir, mediar y dialogar con la gente para solucionar los problemas legales. Antes que reprimir o denunciar, se proponen evitar que se repitan hechos reĂąidos con las leyes y normas, y/o la buena convivencia. SĂłlo en situaciones en que se hace inevitable, por la gravedad de los hechos o frente a una situaciĂłn donde se requiera personal armado, se recurre a la policĂ­a. Los guardias “caminan la calleâ€?, son siempre los mismos, dialogan con los vecinos y se van ganando la conďŹ anza de la gente. Informan de los servicios y de los beneďŹ cios a los que ella puede acceder, cĂłmo denunciar ciertos delitos y quĂŠ necesita para ello; pero siempre tratan de mediar primero, de integrar, cohesionar. AsĂ­, con el diĂĄlogo, van descubriendo irregularidades, les van contando problemas de VIF, de violencia infantil, trĂĄďŹ co de drogas, venta de pegamento, etc. La GUM pone ĂŠnfasis en la prevenciĂłn: dirimir conictos, construir ciudadanĂ­a. Las GUM tambiĂŠn colaboran con la seguridad en eventos, con bomberos, en accidentes de trĂĄnsito, etc. (Entrevista a Claudio Canalis, Director General de la GUM, y cuatro guardias. Julio 2008).

UR (O HVSDFLR VX FRQIRUPDFLyQ \ DWULEXFLRQHV QR SXHGH resolver por sĂ­ mismo el problema de la violencia, pero puede contribuir a promover mayor seguridad o bien favorecer hechos delictuales. Un espacio pĂşblico que fortalece las redes sociales, TXH SURPXHYH OD LQWHUDFFLyQ VRFLDO TXH LGHQWLĂ€FD D ORV FLXGDGDQRV y ciudadanas con su barrio y ciudad, es un espacio cuya percepciĂłn de inseguridad serĂĄ menor. 9DULRV DXWRUHV VHxDODQ TXH OD FDOLGDG GH YLGD HQWUH RWUDV FRVDV HVWi en relaciĂłn al mayor o menor acceso a las actividades y servicios en general y que esto depende del acceso al transporte pĂşblico y la calidad de los traslados que posibilita. Esto supone reconocer que las mujeres en mayor proporciĂłn que los varones realizan simultaneidad de actividades complementando responsabilidades domĂŠsticas y laborales, lo que implica utilizaciĂłn de guarderĂ­as, luJDUHV GH DEDVWHFLPLHQWR FHQWURV GH VDOXG UHFUHDFLyQ GH QLxRV HWF

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Es decir, que los recorridos de varones y mujeres pueden diferir no solo espacialmente sino en los horarios de traslado. Por lo tanto, conocer cĂłmo y dĂłnde se trasladan ciudadanos y ciudadanas HV XQD FRQGLFLyQ LQGLVSHQVDEOH SDUD SODQLĂ€FDU HĂ€FLHQWHPHQWH ORV sistemas de transporte pĂşblico. La seguridad es un atributo importante del espacio y en el caso del transporte, implica tener en cuenta todos los componentes del sistema en su conjunto: los sitios de espera, la iluminaciĂłn de los mismos, las caracterĂ­sticas de los trayectos a los puntos de acceso, etc. Desde las polĂ­ticas urbanas, HO GLVHxR GH HVWRV DVSHFWRV VRQ FRQGLFLRQDQWHV GH OD SHUFHSFLyQ de seguridad-inseguridad y vitales para promover u obstaculizar la movilidad de las personas y de las mujeres en particular, las cuales se sienten particularmente expuestas a situaciones de agresiĂłn en espacios abandonados y sin control social. La violencia en las mujeres es una problemĂĄtica compleja y multidimensional, que implica aspectos socioculturales, donde la asistencia a las vĂ­ctimas, la prevenciĂłn de la violencia y la promociĂłn de los derechos es un proceso que tiene que ir necesariamente ligado. AsĂ­ mismo, es fundamental promover cada vez mĂĄs la participaciĂłn de la mujer en los distintos espacios y ĂĄmbitos en los cuales actĂşa: el espacio local, el territorio, el barrio y el entorno mĂĄs inmediato. Una mayor participaciĂłn social de la mujer en las polĂ­ticas de preYHQFLyQ \ XQ PD\RU JUDGR GH HPSRGHUDPLHQWR GH pVWDV VLJQLĂ€FD

34

un cambio en las relaciones de poder, orientado a que la mujer gane mayor poder y control sobre sus condiciones y situaciones de vida, lo que implica ademĂĄs toma de conciencia, mayor autoFRQĂ€DQ]D OD DPSOLDFLyQ GH RSFLRQHV UHYDORUL]DFLyQ GH VXV FDSDcidades, el mayor acceso a recursos y acciones para transformar situaciones que refuerzan y perpetĂşan la discriminaciĂłn de gĂŠnero y la desigualdad. 0HGLDQWH OD SDUWLFLSDFLyQ ODV PXMHUHV SXHGHQ JHVWLRQDU \ WRPDU decisiones, pudiendo asĂ­, desde nuevos roles, construir un poder distinto al establecido. Es necesario ademĂĄs incorporar los diferentes puntos de vista de los grupos sociales que habitan la ciudad y de varones y mujeres, SDUD HO GLVHxR GH HVWUDWHJLDV TXH DSRUWHQ D OD FRQVWUXFFLyQ GH FLXdades mĂĄs seguras. 'H DFXHUGR D WRGR OR VHxDODGR DQWHULRUPHQWH VH SXHGH DĂ€UPDU TXH es necesario que las polĂ­ticas pĂşblicas y en particular las polĂ­ticas urbanas, incluyan la perspectiva de gĂŠnero, para lo cual es fundamental contar con los medios y las metodologĂ­as para garantizar la participaciĂłn de las mujeres que posibilite incidir en el contenido GH SURJUDPDV \ SUR\HFWRV OD FDSDFLWDFLyQ D ORV WpFQLFRV DV TXH GLVHxDQ ODV SROtWLFDV H LPSOHPHQWDU PHFDQLVPRV GH HYDOXDFLyQ TXH monitoreen los cambios o los efectos de las acciones que se implementen, sobre la calidad de vida de las mujeres.


POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN PARA LA SEGURIDAD CIUDADANA


GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Capítulo 2:

ETAPA1. EL INICIO DE LA POLÍTICA

Este breve capítulo describe los pasos iniciales para enfrentar a

El líder político, capaz de difundir pedagógicamente una visión de la seguridad urbana, y el apoyo de un equipo técnico proactivo son los motores tras un esfuerzo concertado para empezar una política local de prevención para la seguridad ciudadana que sea adecuada y sustentable en el tiempo. Sin ellos la tarea será muy difícil.

nivel local la inseguridad en sus

tipo de liderazgo necesario, se su-

El objetivo central de una primera etapa es establecer las condiciones necesarias para el comienzo de los trabajos, a través del consenso entre los actores claves respecto de la visión a lograr con la política local de prevención.

braya la importancia de un equi-

Los pasos para alcanzar el objetivo de esta etapa son:

po técnico competente y de las

1. 3. 4.

diversas formas. Se evidencia el

alianzas imprescindibles. Se des-

Explicitar la visión inicial. ,GHQWLÀFDU XQ FRRUGLQDGRU \ IRUPDU XQ HTXLSR WpFQLFR Movilizar apoyo y establecer asociaciones. Comunicar la política local de prevención.

tacan también las exigencias de comunicación.

1.1. PROCESO PARA COMENZAR LA POLÍTICA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL Paso 1: Explicitar la visión inicial

La primera acción debiera ser, en la mayoría de los casos, la propuesta de una “Visión” que guiará el diseño e implementación de la “Política Local de Prevención para la Seguridad Ciudadana”. Esta explicitación es a menudo decisiva en la coproducción de seguridad, ya que la realiza la autoridad local, con mandato territorial preciso y cercano a los ciudadanos. A su vez, reviste un carácter político y social, pues involucra las visiones que tienen los distintos actores que participan en el tema de la prevención, por un lado, y recoge las demandas ciudadanas acerca de la seguridad,

¿QUÉ ES UNA VISIÓN? La visión de la seguridad urbana es un enfoque inicial sobre el cual se va construyendo y ajustando la política de prevención, y que se cristaliza frente a cada situación específica que enfrenta. Ella consiste en imaginar como crecer, vivir y trabajar en un lugar seguro donde las personas pueden librarse del miedo, de la violencia, de la victimización y de la intolerancia. Resulta muy importante tener una visión común pues esto permite unir a las personas y confirmar su compromiso con el trabajo conjunto. En muchas ocasiones, frente a los casos concretos de violencia y delincuencia, así como frente a los factores de riesgo asociados a dichos fenómenos, la visión se concretiza, se modifica e incluso se corrige, ya que ella no es un dogma a seguir que desde el inicio hasta el fin guía todo el proceso, sino una construcción colectiva donde la participación de todos los actores tiene un papel fundamental. Además incluye una dimensión pedagógica que ha resaltado Mockus (2007), porque sirve de intérprete de la comunidad frente al Estado y viceversa, como un acercamiento de las Políticas Públicas a la comunidad. En resumen, la visión es un enfoque cohesionador que inspira las políticas de prevención, que es construida con los ciudadanos de forma pedagógica, con el apoyo y voluntad del líder, quien es un inspirador y educador. Concretamente, un caso exitoso como el de Bogotá generó una visión de la seguridad desde el respeto y los derechos ciudadanos. Este proceso se realizó en conjunto con los habitantes y tuvo por objetivo construir una cultura ciudadana que modificara las conductas individuales y colectivas de las personas respecto de ellas mismas y de quienes les rodean. Este caso nos muestra que sin una visión compartida, la cual además sólo llega a ser plenamente compartida paso a paso a través de la implementación de la estrategia de prevención, es muy difícil promover la responsabilidad en la ciudadanía. Además es una visión que va más allá de la seguridad por la seguridad, centrándose en la calidad de vida de las personas.

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CapĂ­tulo 2: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA1. EL INICIO DE LA POLĂ?TICA

LA IMPORTANCIA DE LA VISIĂ“N EN EL LIDERAZGO LOCAL El caso de Diadema, en la periferia de SĂŁo Paulo, Brasil, muestra cĂłmo gran parte de la violencia emana del vacĂ­o de autoridad y la falta de presencia del Estado. En este tipo de escenarios hay ciertas capacidades que el liderazgo debe poseer para ser efectivo. Una de ellas es la generaciĂłn de conďŹ anza. El Foro de Seguridad PĂşblica de Diadema parece haber sido soportado en forma mĂĄs o menos constante y ďŹ able en el tiempo. Existen muchos ejemplos en que la percepciĂłn de los ciudadanos no ha acompaĂąado la opiniĂłn o las preferencias de quienes los conducen. Aun asĂ­, los han apoyado pues les resultan ďŹ ables y pueden percibir la orientaciĂłn valĂłrica de sus acciones. La larga tradiciĂłn de participaciĂłn popular ha permitido mantener las conďŹ anzas entre la comunidad y el poder local. El Foro de la Seguridad PĂşblica se mantiene sobre la base de una gran participaciĂłn de los distintos actores integrantes de la comunidad (Paulsen, 2006; De Luca Miki, 2007). El caso de BogotĂĄ, en Colombia, plantea otra capacidad de liderazgo. En sus dos perĂ­odos como alcalde, Antanas Mockus propuso un signiďŹ cativo programa de reformas. Su objeto era producir un cambio en las acciones pĂşblicas, pero, por sobre todo, en las conductas ciudadanas. En un muy amplio campo de alternativas, que iban desde el comportamiento de los automovilistas hasta el uso de los espacios pĂşblicos, pasando por el apoyo a ciertas minorĂ­as en conicto con la justicia y el trabajo respetuoso pero decidido con la estructura de la policĂ­a, Mockus iniciĂł una campaĂąa por cambiar los hĂĄbitos de la poblaciĂłn. TenĂ­a clara su visiĂłn, era muy competente en la gestiĂłn del signiďŹ cado que permitiera dar un contexto a la seguridad ciudadana y conectarla con un espectro mĂĄs amplio de necesidades. En el ejercicio de su cargo, Mockus estableciĂł un fuerte lazo por medio de una pedagogĂ­a cercana a los ciudadanos y, a travĂŠs de una eďŹ caz gestiĂłn de las comunicaciones, explicĂł de manera fĂĄcil y alegĂłrica los planteamientos de su polĂ­tica de seguridad. Mediante mecanismos reconocibles para todos, establece prioridades, seĂąala acciones e indicadores para ejecutarlas (Paulsen, 2006; Mockus 2007).

por otro. Sin esta primera acciĂłn de parte de la autoridad local, es difĂ­cil que se logre implementar una visiĂłn compartida entre los habitantes de la ciudad, asĂ­ como una polĂ­tica de prevenciĂłn exitosa y sustentable en el tiempo. La explicitaciĂłn por parte del lĂ­der puede traducirse en un lema, un documento, una campaĂąa u otra acciĂłn que permita visibilizar dicho proceso. El lĂ­der es un tomador de decisiones de alto nivel que apoya, da VRSRUWH SROtWLFR \ VLJQLĂ€FDGR D OD LQLFLDWLYD 'HEH WHQHU PDQGDWR en tĂŠrminos de entrega de servicio pĂşblico, seguridad, prevenciĂłn de la delincuencia u orden pĂşblico, con acceso a presupuestos, UHXQLRQHV HVWUDWpJLFDV \ RWUDV LQVWDQFLDV GH GHĂ€QLFLyQ GH DFFLRQHV particularmente las que involucran a otras instituciones socias. La visiĂłn que guiarĂĄ las actividades debiera ser coherente con el resto de la polĂ­tica local para que sea exitosa y apuntar a los siguientes objetivos: a. La cohesiĂłn social de la comunidad. b. El mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes. c. La formaciĂłn de una cultura de la prevenciĂłn en los ciudadanos. La visiĂłn proporcionada por el lĂ­der puede ser anterior incluso a VX HOHFFLyQ FRPR DXWRULGDG (Q DOJXQDV RFDVLRQHV VX GHĂ€QLFLyQ tambiĂŠn puede ser incentivada por el Gobierno central, a travĂŠs de la implementaciĂłn local de una PolĂ­tica Nacional de Seguridad.

En este caso el lĂ­der es un puente y un intĂŠrprete que adapta los contenidos a “la realidad, el lenguaje y el universo de preocupaciones de las comunidades “ (Mockus, 2007: 123). La visiĂłn tambiĂŠn puede ser construida por el lĂ­der a travĂŠs de la asesorĂ­a de un consejo de expertos. Finalmente la visiĂłn del lĂ­der debe ser negociada y contrastada con los habitantes y la sociedad civil, para lograr una visiĂłn adecuada y compartida sobre la seguridad. El lĂ­der debe conducir la aplicaciĂłn de la polĂ­tica de seguridad y prevenciĂłn, integrĂĄndola a su proyecto y priorizĂĄndola dentro de su agenda de acciĂłn. Para lograr este objetivo requiere tener claridad respecto de su papel en la implementaciĂłn de la misma. Una parte importante del ĂŠxito se encuentra en su voluntad de llevarla adelante, asumiendo los costos de corto plazo y capitalizando sus resultados de mediano y largo plazo. La autoridad tiene que ser capaz de aglutinar los recursos locales y la comunidad en torno a la polĂ­tica, y debe promover la integraciĂłn de los actores locales en redes. La constituciĂłn de coaliciones es la expresiĂłn habitual de estas redes, tales como el Foro de la SeguriGDG 3~EOLFD HQ 'LDGHPD %UDVLO R HO &RQVHMR 0HWURSROLWDQR GH OD Seguridad en Quito, Ecuador. AdemĂĄs necesita un conocimiento acabado del funcionamiento local (del municipio o entidad afĂ­n) y un saber bĂĄsico en polĂ­ticas y prĂĄcticas preventivas. TambiĂŠn deben poseer estas competencias los profesionales que constituyan

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

ESQUEMA POLĂ?TICA(S) MUNICIPAL(ES)

ETAPAS DE UNA POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N

VISIĂ“N DIAGNĂ“STICO PRIORIDADES

ESTRATEGIA

EJES/GRUPOS DE TRABAJO

EVALUACIĂ“N MONITOREO

PLANES DE ACCIĂ“N

GESTORES LOCALES

.O SOLO ES NECESARIO SABER CĂ˜MO SE COMPLEMENTAN COORDINAN Y POTENCIAN LAS POLĂ“TICAS LOCALES TAMBIĂ?N SE DEBE VER CĂ˜MO LO HACEN CON LAS POLĂ“TICAS FEDERALES Y O NACIONALES

el equipo tĂŠcnico, como lo veremos a continuaciĂłn. Un liderazgo sin cuadros profesionales y administrativos adecuados no podrĂĄ implementar de buena forma su estrategia. Paso 2: IdentiďŹ car un coordinador y formar un equipo tĂŠcnico

COMPETENCIAS PARA EL COORDINADOR s #OMPROMETIDO CON LA REALIDAD LOCAL MILITANTE DE LA COPRODUCCIĂ˜N DE LA SEGURIDAD s 'ESTOR DE LA COMPLEJIDAD URBANA CONOCEDOR DE SU DIVERSIDAD Y DE LOS ACTORES INTERVINIENTES QUE SEPA COORDINARSE CON ELLOS A TRAVĂ?S DE LA hCOOPERACIĂ˜N INTELIGENTEv

Dos actores claves.

El primero es un coordinador que inicie el proceso, reĂşna a las personas, motive, estimule las acciones y procure que sean ejecutadas de manera coherente. Esta funciĂłn, de carĂĄcter tĂŠcnico, GHEH FRQWDU FRQ OD FRQĂ€DQ]D SROtWLFD GH SDUWH GH OD DXWRULGDG D FDUJR (VWi RULHQWDGD D FRQGXFLU OD SROtWLFD \ VX LPSOHPHQWDFLyQ dinamizar y monitorear las actividades que se realizarĂĄn y evaluar sus resultados. Él o ella dirigirĂĄ el equipo y la iniciativa local de prevenciĂłn de la delincuencia y la guiarĂĄ a travĂŠs de las distintas etapas. Todas las evaluaciones coinciden en reconocer el carĂĄcter fundamental del rol de “manager de seguridadâ€? como condiciĂłn de ĂŠxito. El coordinador es una persona involucrada en la prevenciĂłn de la delincuencia. Debe ser dinĂĄmica, convincente, proDFWLYD FUHtEOH FRQRFLGD HQWUH ORV VRFLRV \ DFWRUHV FODYHV SDUD OD estrategia, y capaz de trabajar con todos los sectores de la ciudad. El segundo actor clave es el equipo tĂŠcnico que desarrolla e implementa las iniciativas, realiza los diagnĂłsticos y coordina los disWLQWRV DFWRUHV &RQVWLWX\H XQ HUURU LGHQWLĂ€FDU HVWH URO FRQ XQD VROD SHUVRQD TXH VHUtD XQ WLSR GH OtGHU ~QLFR R FDULVPiWLFR 0iV ELHQ conviene entenderlo como un grupo bien liderado por el coordinador, interdisciplinario, complementario en tĂŠrminos de gĂŠnero y

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s %NTENDIDO EN EL TEMA DE LA SEGURIDAD Y SUS DISTINTAS FORMAS DE PREVENCIĂ˜N UN GENERALISTA DE LA POLĂ“TICA CON ENFOQUE TRANSVERSAL Y HOLĂ“STICO s #APAZ DE LIDIAR CON LA COMPLEJIDAD DE LA INTERVENCIĂ˜N URBANA Y LA COPRODUCCIĂ˜N DE SEGURIDAD HÉBIL PARA EL TRABAJO EN EQUIPO Y EN REDES

de responsabilidad, con una comprensiĂłn integral de la ciudad. El equipo debe tener una visiĂłn global del proceso, estar compromeWLGR FRQ OD YLVLyQ \ VHU SDUWtFLSH GH ODV DFFLRQHV FRQFUHWDV TXH VH llevan a cabo. Si se dan estas condiciones, el equipo tĂŠcnico podrĂĄ monitorear de mejor forma las acciones que se realizan y evaluar el nivel de transversalidad que las acciones logran implementar. La formaciĂłn profesional de sus miembros debe orientarse en torno a diversos temas que sean coherentes con un enfoque integrado de seguridad. Esta formaciĂłn debe entenderse como un ideal al cual se llega a travĂŠs de un proceso permanente de actualizaciĂłn y debe ser apoyada por especialistas temĂĄticos para hacer frente a los diversos fenĂłmenos de la violencia y la delincuencia. Algunos temas fundamentales son:


CapĂ­tulo 2: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA1. EL INICIO DE LA POLĂ?TICA

‡ &RPSUHQVLyQ GH ORV GHVDItRV GH OD VHJXULGDG XUEDQD ‡ &RQRFLPLHQWR GH ORV FDPSRV GH OD SUHYHQFLyQ ‡ 9LVLyQ PXOWLGLVFLSOLQDULD GH OD VHJXULGDG XUEDQD ‡ 0DQHMR GH ORV GLVSRVLWLYRV ORFDOHV GH VHJXULGDG ‡ 'RPLQLR GH ORV WLSRV GH IRUPDFLyQ QHFHVDULRV SDUD ORV GLVWLQtos actores urbanos. ‡ $SOLFDFLyQ GH XQ HQIRTXH WHUULWRULDO LQWHJUDGR GH OD VHJXULGDG ‡ &RQRFLPLHQWR GH OD SUREOHPiWLFD GHO WHPRU FLXGDGDQR ‡ &DSDFLGDG GH SDUWLFLSDU DQLPDU \ FRQGXFLU RUJDQL]DFLRQHV FRmunitarias y asociaciones de cooperación. ‡ &DSDFLGDG GH WUDEDMDU FRQ HO VLVWHPD GH MXVWLFLD \ ODV SROLFtDV

La visiĂłn puede ser creada por el lĂ­der o por una persona creativa, ser el resultado de un trabajo colectivo o de la convergencia de ideas diversas. Sin embargo, ĂŠsta debe poder transmitirse de manera fĂĄcil y clara, ser comprensible por todos y en distintos niveles de complejidad, ser adaptable a las distintas realidades de una ciudad y ser adecuada para distintos actores.

Paso 3: Movilizar apoyo y establecer asociaciones

Es necesario conocer cuĂĄles son las asociaciones locales y su importancia polĂ­tica y social, aquellas que se ven afectadas por la delincuencia y la violencia, aquellas que trabajan en seguridad y SUHYHQFLyQ R TXH SXHGHQ LQĂ XLU VREUH HOODV Lograr el apoyo para la causa es uno de los trabajos del coordinador y del lĂ­der. Resulta aconsejable que se reĂşnan con representantes de organizaciones socias claves (instituciones indispensables, como la policĂ­a, departamentos del municipio, asociaciones con fuertes raĂ­ces en la comuna, etc.) para movilizar su respaldo y alentarlos a sumar sus esfuerzos. Las reuniones persiguen asegurar la coordinaciĂłn entre departamentos municipales, entidades gubernamentales y actores locales. Los encuentros descritos no implican una invasiĂłn de atribuciones y competencias, sino mĂĄs bien una dinamizaciĂłn de los roles de cada uno. Puede ser introducida la idea de un “consejo comunal de seguridadâ€?. Este paso se debiera realizar en varios niveles. La primera asociaciĂłn y bĂşsqueda de consensos se debe hacer al interior del muniFLSLR LGHQWLĂ€FDQGR ORV GHSDUWDPHQWRV R iUHDV DĂ€QHV D OD SROtWLFD de prevenciĂłn, asĂ­ como los que se verĂĄn afectados y deberĂĄn colaborar con ella. Esta etapa supone una evaluaciĂłn y decisiĂłn anterior acerca de cuĂĄl serĂĄ la ubicaciĂłn del coordinador y del equipo tĂŠcnico en el organigrama municipal, ya sea dependiendo directamente del alcalde, como cabeza de un departamento o bien subordinado a un departamento. Esta Ăşltima opciĂłn indicada minimiza el rol del equipo tĂŠcnico y su coordinador, por lo que no se recomienda. Completados los avances al interior del municipio, el trabajo se enfoca al exterior, en la bĂşsqueda de consensos y diĂĄlogo con los actores del sistema de justicia criminal (policĂ­a y jueces) de la ciudad. Luego se establecerĂĄ el diĂĄlogo y la bĂşsqueda de consensos entre los actores relevantes de la comunidad territorial en la que se ins-

cribe la iniciativa: sociales, comunitarios, culturales, econĂłmicos o polĂ­ticos. Finalmente, se genera la coordinaciĂłn con las autoridades del nivel central del gobierno respecto a las polĂ­ticas, programas y recursos en materia de prevenciĂłn de la violencia y la delincuencia, disponibles al servicio de la ciudad. Paso 4: Compartir la visiĂłn y lanzar la iniciativa local de prevenciĂłn

Para movilizar a los actores claves y dar inicio a la iniciativa local de prevenciĂłn, es adecuado crear consensos sobre la importancia del problema y la necesidad de actuar en conjunto. AquĂ­ se necesita promover la “VisiĂłnâ€? del lĂ­der, para que sea conocida y entre en diĂĄlogo con las visiones del resto de los actores, generando una visiĂłn compartida sobre la ciudad, de cualquier forma que sea deĂ€QLGD SDUD PRYLOL]DU D ORV DFWRUHV (VWH SURFHVR GHEH FRQVLGHUDU la complejidad de las ciudades: si es una metrĂłpoli, una ciudad intermedia, pequeĂąa o, incluso, si es una comuna dentro de una ciudad con el poder polĂ­tico fragmentado. Es muy posible que en este paso sea necesaria la negociaciĂłn para llegar a un consenso con distintos actores, a nivel nacional, regional, metropolitano, de la ciudad, de la comuna y de los barrios que la componen. Esta negociaciĂłn permitirĂĄ implementar una polĂ­tica de prevenciĂłn compartida y sustentable. Si las etapas anteriores fueron realizadas adecuadamente, serĂĄ posible, como resultado de esta fase, formar una asociaciĂłn local de prevenciĂłn de la violencia y la delincuenFLD FX\D LGHD VH LQWURGXMR HQ HO SDVR 'LFKD DVRFLDFLyQ KD GH estar orientada a la acciĂłn basada en una visiĂłn comĂşn. No es suĂ€FLHQWH DFRUGDU OD YLVLyQ TXH SXHGH VHU OD SDUWH IiFLO ORV DFWRUHV GHEHQ VDEHU GH XQD PDQHUD JHQHUDO SHUR FODUD TXp YD D VLJQLĂ€FDU su participaciĂłn en el proceso. Cuando los socios se han reunido en torno a prioridades claves y una visiĂłn, y la convicciĂłn es alta, resulta importante comenzar la institucionalizaciĂłn de la polĂ­tica de prevenciĂłn de la violencia y la delincuencia, a travĂŠs de una estructura formal. AsĂ­ se con-

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

sigue precisar el compromiso de los socios en la creación de la sociedad -si es posible, dentro de estructuras gubernamentales e institucionales existentes- y construir un equipo para implementar el trabajo futuro. La institucionalización es un proceso paulatino durante todas las HWDSDV SRVWHULRUHV 6X ÀQ HV FRQVWLWXLU XQ HTXLSR OHJLWLPDGR FDSD] de monitorear todo el proceso, tanto a nivel político como tÊcnico. A nivel político la experiencia muestra que puede ser útil tener el apoyo de quienes toman decisiones a un alto nivel de los socios claves, traduciendo la asociación local de prevención en la forma de comitÊs comunales de seguridad ciudadana, o comitÊs de asesores en seguridad ciudadana, los cuales establecen el marco de trabajo, diseùando y adoptando una visión o meta, seleccionando

prioridades y opciones de estrategias para la acciĂłn. A su vez el equipo tĂŠcnico debe irse construyendo en un proceso que implica entre otros elementos la formaciĂłn sistemĂĄtica, el conocimiento de la realidad local y el aprendizaje sobre los resultados de las polĂ­ticas implementadas. Finalmente, la iniciativa que inicia la ejecuciĂłn de la polĂ­tica de prevenciĂłn debiera ser lanzada de una manera pĂşblica, por ejemplo mediante un evento mediĂĄtico, tal como lo plantea el alcalGH SLRQHUR HQ PDWHULD GH VHJXULGDG HQ %RJRWi ´/RV FLXGDGDQRV apoyan polĂ­ticas pĂşblicas no tanto porque satisfagan sus intereses, sino por razones y emociones. Las apoyan simplemente porque las han entendido. Y entender da mĂĄs derecho a vigilar y reclamar.â€? (Mockus, 2007: 120)

EL ROL COORDINADOR DEL MUNICIPIO QUITO, ECUADOR Ante la inexistencia de una ley Nacional de Seguridad Ciudadana, y dada la voluntad polĂ­tica del alcalde para iniciar este proceso, se inicia en el aĂąo 2004 el denominado “Pacto por la Seguridad Ciudadana en el Municipio del Distrito Metropolitano de Quitoâ€?(MDMQ). La percepciĂłn colectiva del pacto es asumir que las partes que entran a formarlo tengan una condiciĂłn de iguales, tarea difĂ­cil de asumir, tomando en cuenta la estructura jerĂĄrquica legal de las instituciones que forman parte de este acuerdo. En este sentido, el papel de municipio ha sido el de coordinar y facilitar esta voluntad institucional para lograr un acuerdo y un objetivo comĂşn, partiendo de las herramientas existentes en cada una de las instituciones para generar, en base a sus competencias y fortalezas, acciones integradas para la mejora de la seguridad. Este Pacto lo conforman las siguientes instituciones: el Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, la PolicĂ­a Nacional del Ecuador, el Ministerio PĂşblico, la DirecciĂłn Nacional de RehabilitaciĂłn Social, la Corte Superior de Justicia de Pichincha, y la OrganizaciĂłn Ciudadana. Todas las instituciones que forman parte del pacto tienen que rendir cuentas al Consejo Metropolitano de Seguridad Ciudadana. AsĂ­ mismo, la DirecciĂłn Metropolitana de Seguridad Ciudadana tiene que presentar informes periĂłdicos sobre las actividades realizadas. Se han tomado acciones para lograr esta meta, partiendo del manejo de la seguridad desde una perspectiva integral. Para ello se creĂł la DirecciĂłn Metropolitana de Seguridad Ciudadana, cuya misiĂłn es la de deďŹ nir polĂ­ticas para la elaboraciĂłn de planes, monitoreos y evaluaCIĂ˜N 4AMBIĂ?N SE CREĂ˜ LA #OMISIĂ˜N DE 3EGURIDAD QUE ES PRESIDIDA POR UN CONCEJAL LA #OMISIĂ˜N DE %QUIDAD Y DE 'Ă?NERO Y LA #ORPORACIĂ˜N Metropolitana de Seguridad Ciudadana, que es la encargada de manejar la tasa de seguridad y ha trabajado en proyectos grandes que son difĂ­ciles de manejar por el municipio, como los sistemas de video-vigilancia, el equipamiento de la PolicĂ­a Nacional y la creaciĂłn de infraestructura fĂ­sica. Éste ha sido un proceso complejo, donde la clave ha estado en la voluntad de coordinaciĂłn de los distintos actores.

Consejo Metropolitano de Seguridad Ciudadana

ORGANIGRAMA DE LA SEGURIDAD Y CONVIVENCIA CIUDADANA EN QUITO Corposeguridad DirecciĂłn Metropolitana de Seguridad y Convivencia Ciudadana

ComisiĂłn de Seguridad Ciudadana

Policia Nacional del DMQ Cuerpo de Bomberos 911

PolicĂ­a Metropolitana Seguimiento y EvaluaciĂłn Centro de Equidad y Justicia - CEJS

ProspecciĂłn y Participacion Social

Junta de ProtecciĂłn de la NiĂąez y la Adolescencia

IntervenciĂłn en Riesgos

IntervenciĂłn en Seguridad y Convivencia

CoordinaciĂłn del Sistema Metropolitano

Fuente: Reglamento OrgĂĄnico MDMQ, aprobado por el Consejo Metropolitano de Quito, el 12 de diciembre de 2007.

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Capítulo 2: POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN: ETAPA1. EL INICIO DE LA POLÍTICA

Los gestores locales son motivadores del trabajo territorial e incentivadores de la creatividad 41


GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CapĂ­tulo 3:

ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO Aquellos que participan en el diagnĂłstico son mĂĄs propensos a usar sus resultados.

2.1. LOS TIPOS DE DIAGNĂ“STICO

En este capĂ­tulo se describen los pasos y componentes de un

Para intervenir en un problema es imprescindible tener un conocimiento fundado sobre ĂŠl. Es por ello que un diagnĂłstico implica recoger y analizar datos de diversa naturaleza para reconocer la problemĂĄtica, su envergadura y sus caracterĂ­sticas.

diagnĂłstico, la informaciĂłn que se requiere, las herramientas de recolecciĂłn y anĂĄlisis de datos, su diseĂąo, implementaciĂłn y uso. Se analizan tambiĂŠn los temas relevantes de un diagnĂłstico municipal y se propone un esquema de presentaciĂłn de informes asĂ­ como la necesidad de difundir los resultados en la comunidad.

DiseĂąo, planiďŹ caciĂłn y recursos El diagnĂłstico requiere de un buen diseĂąo y planiďŹ caciĂłn en base a la visiĂłn, a los objetivos de la intervenciĂłn, a los recursos y los tiempos disponibles y a lo que se cree son las prioridades locales de la polĂ­tica de prevenciĂłn. El diagnĂłstico debe entenderse como parte de una polĂ­tica de prevenciĂłn, por lo tanto es, ademĂĄs, participativo y generador de consenso.

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Con este propĂłsito en mente, se parte del supuesto de que el entorno es dinĂĄmico y rico en situaciones y que la aplicaciĂłn de ciertas directrices de actuaciĂłn y el uso de algunas tĂŠcnicas permitirĂĄn un acercamiento al complejo tejido social y sus problemas. Esto ayuda a comprender la repercusiĂłn de los fenĂłmenos que afectan a la comunidad e impactan en ella. Existen diversos tipos de diagnĂłstico segĂşn su propĂłsito, tĂŠcnicas asociadas y campo donde se realiza; ejemplo: exploratorio, institucional, de expertos, diagnĂłstico socio-educativo, o bien diagnĂłstico participativo, y cuya aplicaciĂłn puede darse en el ĂĄmbito municipal o local-comunitario. MĂĄs allĂĄ de las diferencias de instrumentos, objeto y propĂłsito, estas modalidades pueden diferenciarse por el grado de apertura o nivel de involucramiento que requieren o promueven de los diversos actores e interesados. AsĂ­, algunos precisan a veces un diagnĂłstico sin involucrarse en las actividades propias de este proceso, mientras que en otras ocasiones se asume que es una etapa que, bien orientada, pueden hacer los propios interesados en la soluciĂłn de los problemas que les afectan. Un “diagnĂłstico participativoâ€? ofrece la ventaja de que los lĂ­deres locales y la comunidad se apropian de OD GHĂ€QLFLyQ GH ODV PDQLIHVWDFLRQHV \ FDXVDV DVt FRPR GH ODV QHFHsidades y prioridades. En una modalidad de diagnĂłstico que busca generar consensos entre lĂ­deres, actores locales, instituciones pĂşblicas y organizaciones privadas y los miembros de una comunidad, no se parte de un problema, sino que se asume como desafĂ­o buscar en conjunto los problemas que subyacen al campo de sus intereses comunes. El proceso de diagnĂłstico ayuda a construir ese “interĂŠs comĂşnâ€?. Es por ello que esta modalidad invita a utilizar algunas tĂŠcnicas partiFLSDWLYDV SDUD UHVLJQLĂ€FDU OD GLQiPLFD GHO HQWRUQR 2.1.1. Fuentes oďŹ ciales de datos para el diagnĂłstico

Un diagnĂłstico puede parecer una actividad compleja, pero no lo es. Éste supone el empleo de algunas herramientas de recolecciĂłn de informaciĂłn, lo que puede ser muy Ăştil si estĂĄn disponibles. Cuando el interĂŠs es conocer la envergadura de la criminalidad y los delitos mĂĄs frecuentes en un territorio, es aconsejable revisar, por ejemplo, las estadĂ­sticas de la policĂ­a y, si estĂĄn disponibles, tambiĂŠn las cifras de juzgados y tribunales de justicia. En general, ODV HVWDGtVWLFDV UHĂ HMDQ XQD VLWXDFLyQ DSDUHQWH VRQ OD FDUD YLVLEOH X ´RĂ€FLDOÂľ GH ORV SUREOHPDV GH LQVHJXULGDG


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

En ambos tipos de estadĂ­sticas -policiales y judiciales- se nos presentan ventajas y desventajas. Generalmente, ni las cifras de la policĂ­a ni aquellas de los juzgados estĂĄn disponibles o son de acceso pĂşblico. En ocasiones es necesario un esfuerzo de las autoridades del municipio para establecer un diĂĄlogo que ayude a “abrirâ€? la informaciĂłn que poseen dichas instituciones al equipo responsable del diagnĂłstico. Un diagnĂłstico puede ser una buena oportunidad que ayuda a construir una polĂ­tica de gestiĂłn de informaciĂłn local que asegure que permanentemente exista producciĂłn de datos y retroalimentaciĂłn entre los distintos actores e interesados. Con frecuencia se deben superar las barreras que impiden compartir antecedentes y evaluaciones entre instituciones pĂşblicas. Si los registros de la policĂ­a y de tribunales recogen antecedentes VREUH ODV FLUFXQVWDQFLDV HQ TXH RFXUUHQ GHOLWRV HO SHUĂ€O GH YtFWLPDV de detenidos y de infractores, entonces se transforman en una rica fuente de informaciĂłn. Pero ĂŠstas tienen limitaciones para su interSUHWDFLyQ \ XVR /DV FLIUDV RĂ€FLDOHV GH GHQXQFLDV \ GHWHQFLRQHV SRU HMHPSOR FRQVWLWX\HQ XQ WLSR TXH PiV ELHQ UHĂ HMD OD DFWXDFLyQ GH OD policĂ­a en un territorio. Por otro lado, la estadĂ­stica de denuncia o reporte de un delito ante OD SROLFtD HV SDUFLDO \ QR UHĂ HMD OD YLFWLPL]DFLyQ WRWDO HQ UD]yQ GH la cifra negra (ver recuadro). En efecto, los robos de billetera o al interior de un auto a menudo no son denunciados, mientras el robo de auto -por la existencia de un seguro- es habitualmente denunFLDGR (VWRV UHJLVWURV WDPSRFR UHĂ HMDQ OD SHUFHSFLyQ GH WHPRU QL indican necesariamente los lugares mĂĄs inseguros, a menos que los delitos denunciados hayan sido registrados con mucha precisiĂłn y se lleven a mapas detallados. 'H HVWD IRUPD HQ DPERV FDVRV ODV FLIUDV UHĂ HMDQ PiV OD DFWXDFLyQ de la policĂ­a y de los tribunales que las caracterĂ­sticas de la criminalidad, pero ayudan a construir un panorama y la evoluciĂłn en el WLHPSR R VX GLVWULEXFLyQ HQ GLVWULWRV R iUHDV JHRJUiĂ€FDV

ESTADĂ?STICAS POLICIALES Las estadĂ­sticas policiales son una fuente de informaciĂłn indispensable, aunque no siempre son conďŹ ables o lo suďŹ cientemente exhaustivas para el diseĂąo y desarrollo de una estrategia efectiva de prevenciĂłn de criminalidad. Estos lĂ­mites se deben a la cifra negra ya que solo entre 25% y 55% de los delitos son reportados por la poblaciĂłn-, a la forma en que las policĂ­as interpretan algunos delitos, a la estrategia policial -en un perĂ­odo puede minimizar algunos delitos (ejemplo VIF) y maximizar otros (robos en los domicilios)-, a la competencia de la policĂ­a y a su grado de transparencia. El diagnĂłstico participativo no pretende entrar en disputa o desaďŹ ar la informaciĂłn policial, sino mĂĄs bien complementarla en funciĂłn de elaborar un plan de acciĂłn de prevenciĂłn que ayudarĂĄ tanto al trabajo de la policĂ­a como a la calidad de vida de la poblaciĂłn. Lo que se puede obtener normalmente de los datos policiales son la cantidad y el tipo de delitos registrados en ellos, la tasa de criminalidad, las tendencias en el tiempo, las diferencias zonales en la comuna y el porcentaje de asuntos elucidados por la policĂ­a (FESU, 2008).

Por otra parte, el nivel de focalizaciĂłn de un diagnĂłstico tambiĂŠn puede ser importante. No se puede “escudriĂąar en toda la realidadâ€?, eso -si bien puede ser interesante- es poco prĂĄctico. El diagnĂłstico tiene un valor instrumental, no es un objetivo en sĂ­ mismo. (V SRU HOOR TXH SXHGHQ GHĂ€QLUVH IRFRV WHUULWRULDOHV \ R WHPiWLFRV Un ejemplo de lo anterior son los diagnĂłsticos focalizados sobre un barrio crĂ­tico con una tasa excepcionalmente alta de delincuencia o sobre un tipo de victimizaciĂłn difĂ­cilmente comprensible sin XQ DQiOLVLV FLHQWtĂ€FR PiV SURIXQGR FRPR HO FDVR GHO DEXVR GH PHnores, que requiere estudios de especialistas. El diagnĂłstico barrial VH MXVWLĂ€FD GRQGH HO EDUULR SUHVHQWD XQ KLVWRULDO GH GHOLWRV JUDYHV que distorsionan la vida comunitaria al punto de institucionalizar un tipo de capital social perverso que impide la cohesiĂłn social positiva. AsĂ­ ocurre, por mencionar tres casos, en los barrios donde

(Q GHĂ€QLWLYD QRV LQIRUPDQ VREUH VX HQYHUJDGXUD SHUR VH WUDWD de una parte de la realidad que nos preocupa. A pesar de esto, son indispensables en un diagnĂłstico local. 2.1.2. DiagnĂłsticos especiďŹ cos focalizados

Las encuestas de victimizaciĂłn realizadas habitualmente a nivel nacional o en el ĂĄmbito de un ĂĄrea metropolitana, permiten evaluar las caracteristicas principales de las victimizaciones, los tipos de victimas y la frecuencia de estas situaciones segĂşn el testimonio de los habitantes. Dan cuenta de la criminalidad en forma mĂĄs comSOHWD TXH ORV GDWRV RĂ€FLDOHV SRUTXH QR VRQ DIHFWDGDV SRU OD FLIUD negra. Permiten ademĂĄs medir la evoluciĂłn de la criminalidad en el tiempo, si las muestras son comparables.

CIFRA NEGRA “La cifra negra alude a un cociente (concepto aritmĂŠtico) que expresa la relaciĂłn entre el nĂşmero de delitos efectivamente cometidos y el de delitos estadĂ­sticamente reejados‌ Si, como parece desprenderse de estimaciones recientes dignas de crĂŠdito, un elevadĂ­simo nĂşmero de delitos efectivamente cometidos ni siquiera llega al conocimiento de la policĂ­a, es obvio, entonces, que las estadĂ­sticas oďŹ ciales sĂłlo detectan la punta del iceberg, pero no su volumen real ‘sumergido’, pues no son un instrumento idĂłneo para informar sobre el volumen, estructura, dinĂĄmica y desarrollo del fenĂłmeno delictivo realâ€? (A. GarcĂ­a-Pablos de Molina, 2003:265).

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CEASC, CENTRO DE ESTUDIOS DE SEGURIDAD Y CONVIVENCIA, ALCALDĂ?A MAYOR DE BOGOTĂ , COLOMBIA El CEASC, Centro de Estudio y AnĂĄlisis en Convivencia y Seguridad Ciudadana de la ciudad de BogotĂĄ, recopila, analiza y divulga informaciĂłn de manera periĂłdica y sistematizada sobre violencias y delitos, hace un anĂĄlisis espacial a travĂŠs del Sistema de InformaciĂłn Georreferenciada (SIG), y tiene especial ĂŠnfasis en la investigaciĂłn de campo, que le permite hacer anĂĄlisis cuantitativos y cualitativos. Éstos sirven para proponer y desarrollar polĂ­ticas pĂşblicas, asĂ­ la administraciĂłn tiene un conocimiento objetivo acerca de las conictividades, violencias y delitos en la ciudad. Con esta informaciĂłn se adelantan los consejos distritales de seguridad para deďŹ nir las polĂ­ticas de control y prevenciĂłn pertinentes. En el aĂąo de 1995, se crea el Sistema de InformaciĂłn de Violencia y Delincuencia como parte del Observatorio de Cultura Urbana. Luego de muchos cambios y evoluciĂłn, el aĂąo 2006 pasa a ser el Observatorio de Convivencia y Seguridad Ciudadana, y en el aĂąo 2008 en un Centro de Estudio de alto nivel, que funciona como instancia asesora de la AlcaldĂ­a Mayor de BogotĂĄ y la SecretarĂ­a de Gobierno en materia de Seguridad y Convivencia, formuladora y evaluadora de polĂ­ticas pĂşblicas, estructurado de tal manera que pueda responder a los interrogantes que sobre la materia surjan en la ciudad. Para ello se utilizan diversas fuentes de informaciĂłn como: el Centro de Investigaciones CriminolĂłgicas de la PolicĂ­a Metropolitana de BogotĂĄ, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, la SecretarĂ­a Distrital de Salud y de Movilidad, la FiscalĂ­a General de la NaciĂłn y la Secretaria de IntegraciĂłn Social. El uso de diversas metodologĂ­as como encuestas de percepciĂłn y victimizaciĂłn, trabajos etnogrĂĄďŹ cos, anĂĄlisis espaciales y estadĂ­sticos, complementado con la coordinaciĂłn intra e interinstitucional, permiten tener un conocimiento integral sobre estas situaciones y asĂ­ proponer lĂ­neas de polĂ­ticas mĂĄs elaboradas y cercanas a la realidad. El trabajo desarrollado por el CEASC incluye el anĂĄlisis de indicadores sociales que inciden en la seguridad de las personas y en la evaluaciĂłn sistemĂĄtica y permanente de las intervenciones que se llevan a cabo. Por lo tanto se realiza un seguimiento a las conictividades urbanas, la situaciĂłn de violencia intrafamiliar, poblaciĂłn vulnerable, anĂĄlisis del conicto armado en la ciudad, y seguimiento a la situaciĂłn de los municipios de Cundinamarca y su incidencia en la seguridad de la capital. Finalmente, se han realizado investigaciones, como son: IdentiďŹ caciĂłn y caracterizaciĂłn de las zonas criticas de BogotĂĄ: modelo de intervenciĂłn; conictividad en el entorno de las plazas de mercado; el trĂĄnsito de la legalidad a la ilegalidad; evaluaciĂłn de la vigilancia privada en BogotĂĄ; experiencias de jĂłvenes excombatientes; la mujer como vĂ­ctima y victimaria de violencia y delitos en BogotĂĄ; jĂłvenes entre los 12 y 35 aĂąos como vĂ­ctimas y victimarios de la violencia y delincuencia en BogotĂĄ, entre otros. En el marco del Estado Social de Derecho, la perspectiva del CEASC consiste en formular polĂ­ticas pĂşblicas en materia de conictividad urbana y regional, convivencia y seguridad ciudadana, partiendo de la realizaciĂłn de estudios especializados y del seguimiento permanente a las diferentes manifestaciones de violencia y delincuencia (AlcaldĂ­a BogotĂĄ, 2008).

OD OH\ QR LPSHUD GDGD OD SUHVHQFLD GH QDUFRWUDĂ€FDQWHV R HQ EDUULRV de minorĂ­as ĂŠtnicas estigmatizadas, o en los barrios fuertemente deteriorados social y fĂ­sicamente. En tales circunstancias es difĂ­cil realizar un diagnĂłstico participativo. Conviene entonces apoyarse HQ SURIHVLRQDOHV TXH SXHGHQ D\XGDU D LGHQWLĂ€FDU FRQ SUHFLVLyQ ORV factores que permiten la reproducciĂłn del fenĂłmeno, y asĂ­ establecer el punto de partida de un plan de prevenciĂłn. Esta modalidad bien puede ser un complemento a veces necesario del diagnĂłstico participativo. 2.1.3. Observatorios urbanos

El observatorio urbano de la delincuencia constituye una forma de institucionalizar el diagnĂłstico permanente a travĂŠs de la recolecciĂłn regular de datos y su sistematizaciĂłn para aportar soluciones a las actividades de los servicios pĂşblicos y privados en materia de seguridad. Ofrece una gama de informaciones procesadas que facilitan la acciĂłn, pero se puede crear un observatorio solo en las grandes aglomeraciones que tienen los recursos para hacerlo. El HMHPSOR PiV VLJQLĂ€FDWLYR HQ OD UHJLyQ HV HO GH %RJRWi &($6&

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2.2. OBJETIVOS DE UN DIAGNÓSTICO PARTICIPATIVO El objetivo de esta fase es producir con actores sociales interesados de la misma municipalidad un diagnóstico de la delincuencia e inseguridad local. Es la base de informaciones FRQÀDEOHV DSURSLDGDV FRQVHQVXDGDV VREUH OD FXDO VH LGHQWLÀFDQ y formulan prioridades y estrategias para emprender planes de acción. Es importante subrayar que entre los actores locales interesados estån los jóvenes, porque son los principales victimarios \ YtFWLPDV GH OD GHOLQFXHQFLD \ SRU HQGH ORV SULQFLSDOHV EHQHÀFLDrios de la prevención. Los objetivos son varios: ‡ (Q SULPHU OXJDU LGHQWLÀFDU ORV SULQFLSDOHV GHOLWRV \ FRPportamientos que afectan a la comuna. Una base de información clara y reconocida por la población local es indispensable para favorecer su compromiso. ‡ Comprometer a los participantes en el diagnóstico a asu-


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

OBSERVATORIO URBANO DE SEGURIDAD El observatorio urbano de seguridad es un Ăłrgano de estudio, pĂşblico, privado o mixto, que se concentra en la investigaciĂłn operativa con el ďŹ n de dar soluciones concretas a los problemas de convivencia ciudadana en materia de seguridad en un territorio determinado. El objetivo prioritario de cualquier observatorio de seguridad no debe centrarse en la investigaciĂłn bĂĄsica, sino en la investigaciĂłn “operativaâ€?, o sea la que permite encontrar soluciones concretas a los problemas de convivencia ciudadana en materia de seguridad. En ningĂşn momento se ha de perder de vista que el propĂłsito de sus trabajos ha de ser la orientaciĂłn de las actividades de los servicios pĂşblicos. Los informes ďŹ nales de cualquier observatorio deben ser modelo de rigor cientĂ­ďŹ co y de sencillez en la exposiciĂłn. Es decir, deben ser a la vez rigurosos y operativos (HernĂĄndez Lores, 2006).

VENTAJAS Y LĂ?MITES DE UNA ENCUESTA DE VICTIMIZACIĂ“N Las encuestas permiten “objetivarâ€? y medir los problemas y percepciones de las personas. Generalmente, demandan mĂĄs tiempo y recursos, pero la cobertura y la focalizaciĂłn bien pueden compensar su uso en un diagnĂłstico y, posteriormente, a la hora de evaluar resultados e impactos. Éstas ayudan a responder a interrogantes fundamentales: ÂżquiĂŠnes son las vĂ­ctimas?, ÂżcuĂĄntas?, ÂżquĂŠ delitos?, ÂżquĂŠ opina? y ÂżquĂŠ valora la gente?, entre otras. Por cierto, tambiĂŠn tienen limitaciones: a veces la gente olvida cosas o simplemente no quiere contestar u opinar. Por otro lado, es difĂ­cil que los estudios sobre victimizaciĂłn identiďŹ quen crĂ­menes ocultos tales como la violencia domĂŠstica contra cĂłnyuges y niĂąos, y el maltrato a los ancianos. En el empleo de encuestas de victimizaciĂłn existen experiencias positivas en diversos paĂ­ses y hay un conjunto de recomendaciones a seguir. Es recomendable emplear un formulario comĂşn que permita una comparaciĂłn entre ciudades o municipios. En una entrevista “cara a caraâ€? se le pide a la persona suministrar informaciĂłn social y demogrĂĄďŹ ca personal y se le pregunta si ha sido vĂ­ctima y en quĂŠ circunstancias, quĂŠ hizo despuĂŠs de eso. TambiĂŠn se le interroga acerca de su miedo al delito y sobre sus actitudes hacia el sistema de justicia penal. Sus respuestas se registran en un formulario. No obstante, en la mayorĂ­a de los casos serĂĄ preciso adecuar las preguntas a las realidades locales, incluyendo otros tĂłpicos de percepciĂłn ciudadana. En Chile, la aplicaciĂłn sistemĂĄtica de la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana es una buena experiencia (www.seguridadpublica.gov.cl/enusc2003.html).

mir sus resultados: se trata de un proceso de sensibilizaciĂłn progresiva. Apunta a permitir que los principales actores involucrados en la comuna perciban sĂ­ntomas y causas de las situaciones de inseguridad, y asuman las tareas que deriven de las conclusiones del diagnĂłstico. Este objetivo implica un requisito: el diagnĂłstico es principalmente el asunto de los equipos y socios locales, en empatĂ­a con la poblaciĂłn, y no de los tĂŠcnicos exteriores a la comuna o “expertosâ€? de la seguridad. Cuando se precise de investigadores externos, su rol serĂĄ de socios acompaĂąantes que puedan contriEXLU D FODULĂ€FDU DOJXQRV WHPDV D VLVWHPDWL]DU GDWRV R D SURIXQGL]DU aspectos que el diagnĂłstico participativo no logre iluminar. ‡ ,GHQWLĂ€FDU ORV WHPDV \ iUHDV SULRULWDULDV de acuerdo a lo que valore la mayorĂ­a de la poblaciĂłn en materia de seguridad. Para FRQVWUXLU FRQĂ€DQ]D HODERUDU XQD HVWUDWHJLD LPSOLFD SDUWLU GH ODV prioridades locales y no de las de autoridades gubernamentales o municipales.

‡ 9HULÀFDU OD YDOLGH] \ ORV HIHFWRV GH ODV SROtWLFDV \ DFFLRnes vigentes de control y de prevención de la delincuencia que aplican el municipio y los organismos gubernamentales o privados. Las respuestas represivas o preventivas pueden ser equivocadas o generar efectos no deseados. Por otra parte, deben ser confrontadas con otras pråcticas usadas en lugares distintos: por ejemplo, la prevención contra el consumo de drogas gana al ser comparada con pråcticas de otras ciudades. ‡ ,GHQWLÀFDU ORV UHFXUVRV \ HQHUJtDV ORFDOHV sobre las cuales se construirå la política local de seguridad. ‡ ,GHQWLÀFDU ORV JUDQGHV UDVJRV GHO WLSR \ JUDGR GH WHmor que existe en la comuna o sus diferentes åreas y sus causas, si la percepción del temor constituye un problema. El temor constituye el grado de riesgo percibido subjetivamente por la población, y no estå ligado directamente al nivel de victimización (Hope and Sparks, 2000; Ewald, 2000). El temor es un factor que interviene mucho en el clima de FRQÀDQ]D HQWUH ORV KDELWDQWHV \ HQWUH SREODFLyQ H LQVWLWXFLRnes. Abordarlo lúcidamente, distinguiÊndolo de la victimización, evita confusiones y permite visualizar las prioridades de la gente. Como se seùaló, un diagnóstico participativo toma en cuenta daWRV RÀFLDOHV H LQIRUPDFLRQHV REWHQLGDV D WUDYpV GH KHUUDPLHQWDV FLHQWtÀFDV SHUR VH FDUDFWHUL]D IXQGDPHQWDOPHQWH SRU LQYROXFUDU

PERCEPCIONES DEL TEMOR Esta percepciĂłn varĂ­a segĂşn los sectores sociales: puede ser temor frente a la posibilidad real o imaginaria de ser vĂ­ctima de un asalto, temor a que los hijos estĂŠn atraĂ­dos por la droga, la delincuencia o la prostituciĂłn, temor a vivir en un barrio abandonado por las autoridades pĂşblicas, temor a la presencia de narcotraďŹ cantes por los conictos armados que generan, temor a ver su barrio (clase media o alta) desvalorizado por la cantidad de delitos que allĂ­ ocurren o por la proximidad de sectores sociales percibidos como delincuentes virtuales o personas juzgadas indeseables.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

en un autodiagnĂłstico colectivo a lĂ­deres interesados y motivados, a representantes de la comunidad y de las organizaciones locales, como asimismo a autoridades municipales. Esta modalidad asume, al menos, tres directrices que hacen referencia a la estrategia de conducciĂłn. Primero, la convicciĂłn de que las causas de la violencia y las de la delincuencia, y su complejidad, se reconocen mejor cuando comienza a ponerse en prĂĄctica que la poblaciĂłn es parte tanto del problema como de la soluciĂłn, y que su responsabilizaciĂłn es clave. Segundo, la coproducciĂłn de un diagnĂłstico es mĂĄs aconsejable, porque pone ĂŠnfasis en el protagonismo de los actores y de la comunidad afectada, por una parte, y en un ejercicio colectivo de ´FRQVWUXFFLyQÂľ HV GHFLU GH E~VTXHGD LGHQWLĂ€FDFLyQ YDORUDFLyQ \ priorizaciĂłn, por la otra. Un diagnĂłstico con esta perspectiva es un proceso de aprendizaje. La poblaciĂłn apoya y se apropia de una polĂ­tica cuando la entiende. Tercero, producir un diagnĂłstico de la inseguridad con actores sociales locales interesados es una modalidad que asegura repreVHQWDWLYLGDG \ FRQĂ€DELOLGDG HQ ODV LQIRUPDFLRQHV (VWR D\XGD D GHVDUUROODU YLVLRQHV YDULDGDV \ FRQVHQVXDGDV FXDQGR VH LGHQWLĂ€FDQ y formulan prioridades y estrategias para emprender planes de acFLyQ (Q GHĂ€QLWLYD HVWD PRGDOLGDG IDFLOLWD OD DSURSLDFLyQ GH ORV resultados del diagnĂłstico y el empoderamiento de los interesados con su realidad. La experiencia de intervenciones preventivas exitosas destaca, por ejemplo, lo fructĂ­fero que es involucrar a los actores locales en un proceso de construcciĂłn colectiva de un diagnĂłstico, especialmente a jĂłvenes, porque con frecuencia son los principales victimarios \ YtFWLPDV GH OD GHOLQFXHQFLD \ SRU HQGH ORV SULQFLSDOHV EHQHĂ€FLDrios de la prevenciĂłn.

2.3. ÂżQUE INFORMACIONES SE BUSCAN? Un diagnĂłstico implica recolectar datos, antecedentes y opiniones relevantes sobre la inseguridad en un territorio delimitado -un municipio o un ĂĄrea incluso menor-. Se trata de una fotografĂ­a en un momento. La informaciĂłn a reunir serĂĄ aquella que sirva al SURSyVLWR GH UHĂ HMDU DSURSLDGD \ RSRUWXQDPHQWH OD HQYHUJDGXUD \ caracterĂ­sticas de victimizaciĂłn a manos de la delincuencia y la violencia, los factores de protecciĂłn y de riesgo locales y los comportamientos que pueden acentuar estos factores. TambiĂŠn pretende LGHQWLĂ€FDU \ YHULĂ€FDU OD YDOLGH] GH ODV UHVSXHVWDV SDUD FRQWHQHU OD criminalidad, en particular de las polĂ­ticas de prevenciĂłn. AsĂ­ mismo, intenta entender los grados y el tipo de temor existente en los

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Recursos locales En el diagnĂłstico, ademĂĄs de identiďŹ car los problemas, se debe descubrir y destacar los recursos locales, los que deben ser parte fundamental de la polĂ­tica de prevenciĂłn. Algunos recursos locales pueden ser: historia y cultura local; organizaciones sociales existentes; iglesias y comunidades de base en el barrio; grupos sociales: niĂąos, jĂłvenes, mujeres, agrupaciones culturales, clubes deportivos, etc; lĂ­deres locales, artistas, deportistas, etc; proyectos, programas y experiencias locales exitosas.

diversos segmentos de la poblaciĂłn. La opciĂłn a favor de este tipo de diagnĂłstico deriva de la necesidad de recoger la experiencia de los habitantes. Al mismo tiempo, permite a los actores locales objetivar su situaciĂłn y percepciĂłn de seguridad y lograr un consenso al respecto. Es por ello que, en general, se precisa informaciones que ayudan a aproximarse al fenĂłmeno social de la inseguridad, entendiendo que ella se produce a partir de factores objetivos y subjetivos, se asocia a la criminalidad y la violencia y, en ocasiones, tambiĂŠn con OD DFWXDFLyQ H LQVXĂ€FLHQFLD GH ODV LQVWLWXFLRQHV S~EOLFDV HQ XQ WHrritorio. Por cierto, estos antecedentes no se encuentran consolidados y muchas veces habrĂĄ que producirlos. Esto tambiĂŠn implica XQD HYDOXDFLyQ GHO WLSR ´FRVWR EHQHĂ€FLRÂľ 'H HVWD IRUPD GHVWLQDU recursos y energĂ­a en un diagnĂłstico es tambiĂŠn invertir en la comunidad. Por lo anterior, las informaciones que se precisarĂĄn deben tener las siguientes caracterĂ­sticas: ‡ 6H FHQWUDQ HQ OD UHDOLGDG ORFDO \ VRQ UHOHYDQWHV SDUD ODV QHFHVLGDdes locales. ‡ 3URYLHQHQ GH YDULDV IXHQWHV SRU HMHPSOR GH OD SROLFtD \ MX]JDdos, de instituciones pĂşblicas del ĂĄrea social, salud y educaciĂłn, de la sociedad civil, de centros de investigaciĂłn, de compaùías de seguro, de empresas de seguridad privada y de los propios habitantes (se debe poner atenciĂłn a jĂłvenes, mujeres y niĂąos). ‡ 6H REWLHQHQ GH GLYHUVDV IRUPDV WDOHV FRPR DQiOLVLV GH HVWDGtVWLcas, encuestas, grupos focales (“focus groupâ€?) y entrevistas con actores claves, prensa, mapas perceptuales, marchas exploratorias, grupos de trabajo temĂĄticos, etc. ‡ 6RQ YDULDGDV HQ OD PHGLGD TXH DEDUFDQ ORV REMHWLYRV VHxDODGRV anteriormente, como datos sobre delincuencia, temor, respues-


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

vuelven sobre lo mismo (“nivel de saturaciĂłnâ€?) y no aportan nada nuevo, entonces se ha alcanzado el lĂ­mite de lo necesario y OR VXĂ€FLHQWH

MARCHA EXPLORATORIA Consiste en reunir un grupo de personas (alrededor de 10). Pueden ser heterogĂŠneos o seleccionar sus integrantes por edad, gĂŠnero, interĂŠs comĂşn, etc., de acuerdo a lo que se quiere analizar de una misma zona geogrĂĄďŹ ca, con quienes se analiza los lugares de mayor peligro y victimizaciĂłn o temor, segĂşn su percepciĂłn (a travĂŠs de entrevistas -grupales o individuales-, encuestas, dibujos, fotografĂ­as, collages, etc.). Una vez identiďŹ cadas estas zonas, son recorridas durante diversos momentos del dĂ­a o en jornadas distintas (jornadas laborales, ďŹ n de semana, etc.) y se veriďŹ ca con el grupo la validez de su percepciĂłn. DespuĂŠs se establece un mapa de los lugares efectivamente fuentes de peligro y victimizaciĂłn. Posteriormente se invita a las autoridades locales o nacionales involucradas a recorrer los mismos espacios con el grupo y ver quĂŠ soluciones pueden aportar a los problemas veriďŹ cados.

tas institucionales o de la sociedad civil, lugares peligrosos, grupos vulnerables y actores organizados de la delincuencia. ‡ ([SUHVDQ PHGLGDV \ WHQGHQFLDV DFHUFD GH XQD VLWXDFLyQ IUHcuente y su evolución, y no de hechos esporådicos. Por ejemplo, interesa la evolución de atentados a la propiedad o del FRQVXPR R PRGDOLGDGHV GHO WUiÀFR GH GURJDV \ QR XQ KHFKR inusitado o poco común aun cuando se vincule con el tema. ‡ 5Hà HMDQ OD RSLQLyQ GH GLYHUVRV VHJPHQWRV VRFLDOHV \ GH ORV DFtores: jóvenes, niùos, mujeres, comerciantes, tercera edad, sectores acomodados o pobres, trabajadores informales, etc. ‡ 5HSUHVHQWDQ FRQVHQVRV HQWUH ORV VRFLRV SDUWLFLSDQWHV \ YLVLRnes compartidas progresivamente por la mayoría de la población. Estas informaciones deben ser asumidas no sólo por el líder local y su equipo tÊcnico, sino tambiÊn por los socios que tendrån un rol clave en la estrategia. La búsqueda del acuerdo de los habitantes facilitarå considerablemente la implementación de la estrategia. Otras características son: ‡ /XHJR GH SURFHVDGRV ORV GDWRV VH SUHVHQWDQ HQ XQ IRUPDWR DFcesible y claro que evidencia las preocupaciones principales, los aspectos mås relevantes de la delincuencia local y del temor, los factores locales de protección y de riesgo relevantes. Se debe evitar elaborar informes extensos. Para ello se pueden emplear JUiÀFDV \ WDEODV ‡ 3XHGHQ DFWXDOL]DUVH UHJXODUPHQWH SDUD LQIRUPDU D ORV VRFLRV de nuevos desarrollos, desempeùos, progresos, evaluaciones de impacto, logros, y para ajustar estrategias y actividades cuando sea necesario. ‡ 6RQ VXÀFLHQWHV SDUD SHUPLWLU XQD HODERUDFLyQ GH HVWUDWHJLD ORFDO GH VHJXULGDG $TXt FRQYLHQH DSOLFDU XQ FULWHULR GH VXÀFLHQFLD que ayuda a delimitar hasta cuåndo buscar o profundizar sobre un tópico particular. Cuando los antecedentes que se reúnen

2.4. LOS PASOS DEL DIAGNÓSTICO Los pasos principales son: ‡ ‡ ‡ ‡

(VWDEOHFHU HO JUXSR JXtD SDUD HO GLDJQyVWLFR 'LVHxDU HO GLDJQyVWLFR VX DOFDQFH \ VXV LQGLFDGRUHV ,PSOHPHQWDU HO GLDJQyVWLFR $QDOL]DU ORV UHVXOWDGRV HVFULELU HO LQIRUPH \ GHYROYHU OD LQIRUPDFLyQ D OD FRPXQD

Realizar un diagnóstico implica tiempo, ademås de recursos humaQRV \ ÀQDQFLHURV /D SUHVHQFLD GH XQ HTXLSR WpFQLFR ORFDO FDSD] de coordinar el trabajo de los socios en el diagnóstico es impresFLQGLEOH 3RU HQGH VH UHTXLHUH XQ ÀQDQFLDPLHQWR TXH DVHJXUH OD disponibilidad de este equipo. Desde el inicio se debe asumir que un diagnóstico participativo serio requiere no menos de cuatro a seis meses, según la experiencia internacional, si se parte de cero (Shaw, 2001; FESU, 2008). El error a evitar es la delegación total del diagnóstico en un grupo GH H[SHUWRV 6L KD\ UHFXUVRV ÀQDQFLHURV XQR R GRV HVSHFLDOLVWDV pueden apoyar el proceso, profundizando ciertos aspectos, pero no sustituir el diagnóstico colectivo.

2.5. PASO 1: FORMAR Y ESTABLECER EL GRUPO GUĂ?A (O SULPHU SDVR HQ OD UHDOL]DFLyQ GHO GLDJQyVWLFR HV GLVHxDUOR 6H WUDWD GH XQD WDUHD GHO HTXLSR WpFQLFR TXH SDUD OOHYDUOD D FDER HOLJH XQ ´*UXSR *XtDÂľ ÂżQuienes componen este Grupo GuĂ­a? Actores comunales involucrados en la tarea de seguridad, es decir, los principales responsables del conjunto de programas y proyectos que apuntan a la prevenciĂłn en un municipio o en el ĂĄrea de estudio: encargados de la prevenciĂłn de consumo de drogas y alcohol, monitores o educadores de jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo, mujeres lĂ­deres de prevenciĂłn de la violencia intrafamiliar (VIF), mediadores recoQRFLGRV SROLFtDV DFWRUHV GH OD VRFLHGDG FLYLO \ R DOJXQRV UHSUHsentantes de la comunidad, en particular uno o dos representantes de la juventud. Este grupo guĂ­a, una vez terminado el diagnĂłstico, puede cumplir otras funciones, ya sea en los grupos de trabajo o grupos territoriales. ActuarĂĄn como facilitadores de este proceso buscando la legitimidad ante la comunidad. Su tarea va a ser guiar, monitorear y difundir los avances del diagnĂłstico de seguridad loFDO GHVGH HO SULQFLSLR KDVWD HO Ă€QDO

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

SEGURIDAD DE LAS MUJERES EN DELHI El desarrollo de Dehli ha causado que ĂŠsta sea una de las ciudades que mĂĄs rĂĄpido crece en el mundo. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos realizados, sigue siendo la ciudad mĂĄs insegura de India, con los mĂĄs altos Ă­ndices de crĂ­menes contra mujeres. Las mujeres en Delhi deben tomar medidas de precauciĂłn las que coartan de muchas maneras sus vidas. Por esto se ha implementado la campaĂąa de Delhi Segura (lanzada por JAGORI), centrando la atenciĂłn en la poblaciĂłn mĂĄs vulnerable: los pobres, mujeres y gente mayor. Las mujeres son las que se han visto mĂĄs afectadas por esta sociedad patriarcal y han sido amenazadas de ser atacadas por haber infringido ciertas normas sociales. Con esta situaciĂłn, se han visto violentadas y sus derechos han sido restringidos. La campaĂąa Delhi Segura se basa en tres consignas: s ,A VIOLENCIA Y AMENAZA EN LA VĂ“A PĂžBLICA CONSTITUYE UN PROBLEMA GRAVE s ,A VIOLENCIA Y FALTA DE SEGURIDAD NO ES SĂ˜LO UN vPROBLEMA DE MUJERESv sino una consecuencia de los modelos de urbanizaciĂłn dominantes, reejo de la cultura de la ciudad y violaciĂłn de los derechos de las mujeres s )NVOLUCRAR A LOS CIUDADANOS EN EL TEMA DE LA 3EGURIDAD 0ĂžBLICA La campaĂąa espera involucrar a todos los ciudadanos, que la mujer no SEA VISTA COMO EL hSEXO DĂ?BILv EN TEMA DE SEGURIDAD E INVOLUCRAR A LA policĂ­a con el apoyo correspondiente. Lo anterior se pretende lograr con programas como: trabajo cooperativo con la policĂ­a, con jĂłvenes en el TEMA DE SEGURIDAD EN ĂˆREAS PĂžBLICAS SENSIBILIZAR AL hCIUDADANO COMĂžNv dando informaciĂłn en los centros comerciales, autos, etc., organizando talleres, disponiendo de un sitio web para la campaĂąa. La campaĂąa utiliza las auditorĂ­as de seguridad (marchas exploratorias) como medio para explorar los factores de violencia y las posibles acciones PARA CAMBIARLOS Y CREAR UNA ALERTA PĂžBLICA Y COMPROMISO PARA IMPLEMENtar acciones a nivel local y de polĂ­ticas. Éstas se realizaron a la hora que COMENZABA A OSCURECER EN LOS SECTORES PĂžBLICOS Y SE CATEGORIZARON DE LA siguiente manera los temas identiďŹ cados en ellas:

s %L ESTADO DE AMBIENTE TALES COMO LA CONDICIĂ˜N Y UBICACIĂ˜N DE LA ILUminaciĂłn, pavimentos, paraderos, disponibilidad y condiciĂłn de baĂąos PĂžBLICOS MANTENCIĂ˜N DE PARQUES ĂˆRBOLES O ARBUSTOS QUE CRECEN DEmasiado y obstruyen, terrenos baldĂ­os, ediďŹ cios abandonados, ĂĄreas de estacionamiento s 5BICACIĂ˜N DE CABINAS TELEFĂ˜NICAS TIENDAS Y GARITAS DE POLICĂ“AS s ÂŤREAS QUE SON USADAS O NO POR HOMBRES O MUJERES s 0ERCEPCIĂ˜N DE LAS MUJERES ACERCA DE LA SEGURIDAD Y LOS MODELOS DE utilizaciĂłn del espacio Resultados: s )LUMINACIĂ˜N PĂžBLICA PROBLEMA GENERALIZADO ES ESCASA EN MUCHOS LUgares y las mujeres entrevistadas evitan dichos lugares s 0ARADEROS LUGARES DE ALTO RIESGO SIN ILUMINACIĂ˜N s #ALLES Y CAMINOS OSCUROS SE EVITAN A TODA COSTA SOBRE TODO DENTRO de las colonias, son lugares donde por lo general han sufrido acoso, agresiĂłn verbal y fĂ­sica s #ALLES EN MAL ESTADO U HOYOS EN EL PAVIMENTO DIlCULTAN A LA HORA DE escapar de un atacante s %STACIONAMIENTOS OTRA ZONA DE ALTO RIESGO %N ELLOS EXISTEN POCOS guardias, zonas oscuras y solitarias. TambiĂŠn es mayor el problema en los estacionamientos subterrĂĄneos donde un grito no se escucha desde afuera s %N LOS METROS TAMBIĂ?N EXISTEN PROBLEMAS PERO LAS TIENDAS QUE PERMAnecen abiertas junto con el metro dan cierta sensaciĂłn de seguridad s 4ERRENOS BALDĂ“OS EDIFICIOS DEMOLIDOS TODAS LAS MUJERES LOS RECOnocieron como lugares inseguros, que dificultan el paso de peatones s "AĂ—OS PĂžBLICOS LOS EXISTENTES SON OSCUROS Y SUCIOS SIN AUXILIAR QUE atienda. No se usan s %SPACIOS PREDOMINANTEMENTE DE HOMBRES SON GENERALMENTE EVITADAS por las mujeres y dudan al tener que acercarse a ellos s 0OLICĂ“AS Y GUARDIAS AUMENTAN EL SENTIMIENTO DE SEGURIDAD s ÂŤREAS COMERCIALES SE VE LA PRESENCIA DE MUJERES SEGĂžN LO QUE SE VENda en ellos

DTC Terminal To J.J. Colony

oad

la R Nare

To J.J. Colony

A Block

B Block

E Block

No se cierran las puertas de los baĂąos. Generalmente los varones se comportan inadecuadamente con las damas

B Block

E Block

D Block

E Block

D Block

E Block

D Block

D Block

SĂłlo se presentan en las calles mujeres que pertenecen a una comunidad de desempeĂąo tradicional Zonas de agua usadas por las mujeres. Mujeres acosadas por niĂąos de la villa cercana

B Block

E Block

B Block

A Block

Ă rea oscura y desierta Usada como baĂąo abierto cuando oscurece

E Block

E Block

Poca circulaciĂłn de personas a toda hora Muchos tiendas de licor sin patente en el ĂĄrea No hay barreras alrededor del ĂĄrea residencial

Gran ĂĄrea de pasto salvaje en el ĂĄrea del parque

Fuente: Jagory, 2007.

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ExcavaciĂłn en el camino con pilares tendidos sobre el suelo

Sin luminarias en carriles interiores

Grandes y extensas ĂĄreas agrĂ­colas adjuntas al ĂĄrea residencial. Zona usada como baĂąo abierto cuando oscurece

Todas las Baratghars en construcciĂłn.

Cabinas telefĂłnicas con seĂąales claras


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

2.5.1. ÂżCon quĂŠ criterios elegir los representantes de la comunidad para el Grupo GuĂ­a?

Territorio y formas de entrar en ĂŠl

La selecciĂłn de los participantes del grupo guĂ­a va a condicionar el acceso a personas o grupos a travĂŠs de las encuestas o entrevistas o consultas o diĂĄlogos comunitarios. Por lo tanto es fundamental HOHJLU ELHQ ORV UHSUHVHQWDQWHV FRPXQLWDULRV FODULĂ€FDQGR OD QRFLyQ de “comunidadâ€? cuando se habla de delincuencia. La comunidad HQ HVWH FDVR VH UHĂ€HUH QR WDQWR D JUXSRV TXH YLYHQ HQ XQD PLVPD iUHD JHRJUiĂ€FD VLQR D ´JUXSRV GH LQWHUHVHVÂľ FRQHFWDGRV FRQ ORV efectos de la criminalidad. Son “los grupos de personas que comSDUWHQ XQ LQWHUpV R XQD FDUDFWHUtVWLFD TXH OHV FRQĂ€HUH XQD RSLQLyQ particular en materia de criminalidad o de su prevenciĂłnâ€? (FESU, 2008: 30).

Una de las mayores diďŹ cultades son, muchas veces, las diferentes percepciones y deďŹ niciones sobre los lĂ­mites de un territorio o de un barrio: sean los administrativos o los establecidos por distintos servicios (educaciĂłn, salud, etc.) o aquellos de las organizaciones locales como la percepciĂłn de distintos grupos al interior como al exterior del sector seleccionado. Sin embargo, deďŹ nirlo en base a los objetivos como a los grupos con los que se trabaja es fundamental, ya que puede ser contra/D GHĂ€QLFLyQ VH DSOLFD D JUXSRV TXH VRQ YtFWLPDV KDELWXDOHV GH OD producente para las personas sentirse excluidas delincuencia -por ejemplo comerciantes o residentes de algunas del territorio que consideran como su barrio o ĂĄreas que son blanco habitual de la delincuencia-, a grupos que que les incluyan burocrĂĄticamente otras que los son a la vez vĂ­ctimas y victimarios- como los jĂłvenes- pero que habitantes perciben como ajenas. estĂĄn interesados en comprometerse en prevenir la delincuencia o la violencia, a grupos de mujeres interesadas en prevenir la VIF, a minorĂ­as estigmatizadas que buscan la inclusiĂłn, etc. Al inicio, con el equipo tĂŠcnico, el grupo guĂ­a diseĂąa el diagnĂłsWLFR OR GLQDPL]D OR PRQLWRUHD \ Ă€QDOPHQWH YDOLGD ORV UHVXOWDGRV por entregar al municipio y a la poblaciĂłn. El grupo guĂ­a serĂĄ compuesto, dependiendo de la dimensiĂłn de la comuna, de un mĂĄximo de 10 a 15 personas. 2.5.2. Los riesgos de la exclusiĂłn de los jĂłvenes

La exclusión de los jóvenes, bajo el pretexto de que no se interesan o son un grupo de difícil manejo es una pråctica a evitar. En ocasiones algunos delitos, conductas de riesgo y comportamientos incívicos de jóvenes constituyen elementos centrales en la percepción del temor de la población y son el foco de las políticas de prevención. En LatinoamÊrica la mayoría de los infractores y la desproporcionada tasa de víctimas varones se relaciona con menores y jóvenes entre 15 y 30 aùos, que representa casi 40% de la SREODFLyQ PHQRU D DxRV /D WHQGHQFLD GHPRJUiÀFD HQ OD UHJLyQ muestra un aumento sostenido de la población en alto riesgo (varones entre 15 y 29 aùos), amenazando el capital humano en las

comunidades. De esta forma, la presencia juvenil (adolescentes y jĂłvenes adultos) es un imperativo para entender su cultura, expectativas y comportamientos, los niveles de discriminaciĂłn hacia ellos y su percepciĂłn de la inseguridad, entre otras materias. AdemĂĄs, teniendo en cuenta que con frecuencia la mayorĂ­a de las acciones de prevenciĂłn van a dirigirse a jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo, hay que legitimarlas mediante una empatĂ­a mĂ­nima con el segmento juvenil. Es necesario promover la participaciĂłn de los jĂłvenes en consideraciĂłn a sus necesidades e intereses.

2.6. PASO 2: DISEĂ‘AR EL PROCESO 2.6.1. Los aspectos principales del proceso

El grupo guía diseùa el proceso de diagnóstico, lo que implica: ‡ 'HÀQLU HO HVSDFLR WHUULWRULDO GHO GLDJQyVWLFR. En una comuna urbana de gran tamaùo (mayor que un millón de habitantes), es pråcticamente imposible realizar el diagnóstico si-

PARTICIPACIĂ“N DE COMUNIDADES DE INTERÉS “La principal diďŹ cultad es identiďŹ car las comunidades en cuestiĂłn (de interĂŠs) y encontrar el mejor medio de asegurar su participaciĂłn. No es realista ni necesario hacer participar al mismo nivel a todas las comunidades en cada etapa, pero tampoco es posible tener reglas ďŹ jas sobre quiĂŠn debe participar y en quĂŠ momento. Las ciudades deben decidirlo individualmente, tomando en cuenta la estructura demogrĂĄďŹ ca, las especiďŹ cidades locales, asĂ­ como los problemas que surgen durante el diagnĂłstico. Un anĂĄlisis de las ‘partes involucradas’ puede ser muy Ăştil para identiďŹ car aquellas cuyo interĂŠs es importante y adquirir una comprensiĂłn de los papeles y contribuciones potencialesâ€?(FESU, 2008).

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

multรกneamente en todas las รกreas. En este caso se circunscribe el diagnรณstico inicial a los sectores juzgados prioritarios, dejando otras zonas para una fase posterior con equipos apropiados. Por ejemplo, se puede decidir que el centro de la comuna, por su valor estratรฉgico y simbรณlico, serรก privilegiado, o bien que las zonas de barrios deteriorados serรกn prioritarios. Lo importante HV ร MDU ELHQ ORV OtPLWHV UD]RQDEOHV GHO HVSDFLR HQ HO FXDO VH OOHYD a cabo el diagnรณstico. ,QFOXVLYH XQD YH] GHร QLGD HO iUHD VH SXHGH H[FOXLU DOJXQRV EDrrios juzgados demasiado crรญticos, y dejar su anรกlisis para un HVWXGLR HVSHFtร FR SRVWHULRU ย Elaborar el calendario de actividades 8QD SODQLร FDFLyQ apropiada y realista, a la luz de los medios disponibles y los FAVORECER LA PARTICIPACIร N JUVENIL La ciudad de Ottawa, en Canadรก, en la realizaciรณn de un diagnรณstico de seguridad, procediรณ a inducir la participaciรณn juvenil utilizando ONG especializadas en el trabajo con jรณvenes de varias comunidades de inmigrantes. A travรฉs de este mรฉtodo, logrรณ en 2005 la participaciรณn de los jรณvenes de grupos รฉtnicos representativos de toda la ciudad (City Council, Ottawa). En la regiรณn canadiense de Kitchener Waterloo, el Silicon Valley canadiense, para facilitar el diรกlogo intergeneracional, los responsables municipales lanzaron una campaรฑa de no discriminaciรณn juvenil que obligaba a la actitud โ adultocentristaโ a corregir sus prejuicios (City Council, Kitchener Waterloo).

ยฉ Prefectura de Recife, Proyecto Urbal Espacios Pรบblicos y Cohesiรณn Social 2007

En Recife algunos grupos municipales proceden a un diagnรณstico y un rediseรฑo de los espacios pรบblicos con jรณvenes adolescentes, incluidos aquellos de la calle, para reevaluar el uso del territorio de modo mรกs afรญn a los jรณvenes (Observaciรณn directa).

Recife: jรณvenes realizan mapa de su barrio.

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plazos requeridos, es clave para evitar que el diagnรณstico se transforme en un obstรกculo, postergando las etapas y pasos posteriores de diseรฑo de polรญticas o planes, la ejecuciรณn de los mismos y su evaluaciรณn. ย $FRUGDU ODV UHVSRQVDELOLGDGHV PRGDOLGDGHV GH WUDEDMR \ GHร QLFLyQ GH SDXWDV: si hay grupos de trabajo, encuestas, grupos focales, marchas exploratorias, โ mapas perceptualesโ , HWF R VL KD\ OR TXH HV GHVHDEOH JUXSRV HVSHFtร FRV TXH FRQVXOtar. Encuestas y grupos focales requieren de especialistas que pueden ser estudiantes si estรกn bien guiados. Un ejemplo de decisiรณn en esta etapa es cรณmo se va a recoger la opiniรณn de jรณvenes y quiรฉn lo va a hacer. ย 3UHSDUDU SURSRQHU \ SURPRYHU OD DSUREDFLyQ GHO SUHVXSXHVWR TXH DVHJXUD VX HMHFXFLyQ 6H GHEH JDUDQWL]DU HO VXHOGR GH ORV IXQFLRQDULRV \ SURIHVLRQDOHV YLQFXODGRV DO GLDJQyVWLFR \ KDFHU DSUREDU HO SUHVXSXHVWR si hay gastos que superan el simple pago de los salarios de funcionarios. ย 'HWHUPLQDU HO DOFDQFH WHPiWLFR. ร sta es una tarea estratรฉgicamente relevante que puede ayudar a ahorrar esfuerzos y PHGLRV \D TXH REOLJD D GHร QLU ORV HMHV VREUH ORV FXDOHV VH FRQVtruirรกn propuestas y cursos de acciรณn en el futuro. Es por esta razรณn que se describe en mรกs detalle a continuaciรณn. 2.6.2. El alcance temรกtico

El alcance temรกtico es fundamental, porque permite entender lo que el diagnรณstico va a medir y analizar. Hay temas que son imprescindibles, las principales formas y envergadura de la victimizaciรณn y la incidencia de los factores de riesgo mรกs frecuentes, mientras otros que pueden dejarse para una etapa ulterior o un estudio de profundizaciรณn en razรณn de su complejidad. La selecciรณn de los temas se hace antes del diagnรณstico, en funciรณn de la situaciรณn local y de las prioridades del gobierno de la ciudad. Los temas que pueden ser abordados y analizados se presentan reagrupados en torno a cuatro perspectivas: las prioridades locales, las victimizaciones y los victimarios, los factores de riesgo y SURWHFFLyQ \ ร QDOPHQWH FXDQGR VH MXVWLร FD HO WHPRU 2.6.2.1. Las prioridades locales

Las prioridades de la poblaciรณn o de los diversos sectores residenciales en el รกrea de estudio en materia de victimizaciรณn y situaciones de vulnerabilidad que los habitantes consideran como intolerables, exigiendo su reducciรณn o eliminaciรณn porque perciben que entorpecen la calidad de vida y generan miedo.


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

MODELO ECOLĂ“GICO DE FACTORES QUE INCIDEN EN LA RESILIENCIA Sociedad en general

ue Esc

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Influencias

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etc.

l , e es, tc.

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s

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AĂşn cuando ciertas formas de violencia -como la violencia domĂŠstica- no se encuentren consideradas en el CĂłdigo Penal en algunos

ore Val

2.6.2.2. Las victimizaciones y victimarios

al

o cia res persona s Facs, habilidadeos tores intern fa F s mi actore iv a s externo ctat l i a es res, e p io x normas, e ,e vic xis ser ten , ed s cia d a e ios e personas guĂ­ sg de ica m com Ăł unic con aciĂłn, condiciones e

,m ra ltu Cu

AdemĂĄs, teniendo en cuenta que con frecuencia la mayorĂ­a de las acciones de prevenciĂłn van a dirigirse a jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo, hay que legitimarlas mediante una empatĂ­a mĂ­nima con el segmento juvenil. Si los jĂłvenes no quieren participar (situaciĂłn frecuente), la inducciĂłn puede funcionar, por ejemplo, a travĂŠs de ONG que trabajan con ellos.

loc

Factores organicos

cas PolĂ­ti

Estas prioridades -a menudo heterogÊneas en función de las zonas JHRJUiÀFDV R GH ORV VHFWRUHV VRFLDOHV GHEHQ VHU LGHQWLÀFDGDV ELHQ delimitadas y priorizadas, según sectores sociales afectados y sus respuestas råpidamente elaboradas.

la y comunidad Familia

co

Entrar a trabajar en un barrio no siempre es fĂĄcil. Descubrir las “puertasâ€? y desarrollar estrategias para ingresar puede ser muy determinante para los resultados, en especial en sectores vulnerables donde hay larga historia de abandonos y fracasos que a menudo se repiten.

Fuente: ONU-Habitat, 2007.

SDtVHV R ELHQ QR VH WLSLĂ€TXHQ FRPR ´GHOLWRÂľ SHUR Vt FRPR ´IDOWDÂľ la unidad de anĂĄlisis bĂĄsica aquĂ­ es el “suceso criminalâ€? (que provoca daĂąo a la comunidad o las personas). De cualquiera forma, esto supone al menos tres categorĂ­as de anĂĄlisis: “circunstancias GHO VXFHVRÂľ ´DXWRU GHOLQFXHQWH R JUXSR YXOQHUDEOHÂľ \ ´YtFWLPDÂľ

LA MULTICAUSALIDAD Y LA RESILIENCIA LOCAL FACTORES DE RIESGO s %SPACIOS MAL PROTEGIDOS O DETERIORADOS s "ARRIOS DETERIORADOS SOCIALMENTE Y ESTIGMATIZADOS s ,A VIOLENCIA ESCOLAR Y LA BAJA CALIDAD DE ALGUNAS ESCUELAS s ,UGARES DE DISTRIBUCIĂ˜N O VENTA DE DROGAS LĂ“CITAS ALCOHOL O ilĂ­citas s %SPACIOS DE INSERCIĂ˜N EN LA PROSTITUCIĂ˜N DE MENORES s %SPACIOS DE VENTA O REDUCCION DE OBJETOS ROBADOS s $ISCRIMINACIĂ˜N HACIA JĂ˜VENES s $ISCRIMINACIĂ˜N HACIA OTRO SEGMENTO SOCIAL s #ARENCIA DE ESPACIOS DE ESPARCIMIENTO JUVENIL s 3ITUACIĂ˜N DE CESANTĂ“A DE LARGA DURACIĂ˜N DE JĂ˜VENES ADULtos s #ONDUCTAS DE RIESGO COMO JĂ˜VENES LIGADOS A ACTIVIDADES del trĂĄďŹ co de drogas, desertores escolares, individuos o grupos de alcohĂłlicos de calle, consumidores abusivos de drogas ilĂ­citas,microtraďŹ cantes adultos, pandillas violentas s &ALTA DE ACCESO A SISTEMA DE JUSTICIA s !USENCIA DE ESPACIOS LEGĂ“TIMOS DE RESOLUCIĂ˜N DE CONmICTOS a nivel comunitario s )DENTIDADES IMPUESTAS EN PARTICULAR DE ADULTOS A JĂ˜VENES s 6IOLENCIA INTRAFAMILIAR Y EN LAS RELACIONES ENTRE VECINOS

FACTORES DE PROTECCIĂ“N s ,OS ESPACIOS PĂžBLICOS FUENTES DE COHESIĂ˜N s 3ERVICIOS URBANOS SOCIALES O DE ESPARCIMIENTO ACCESIBLES Y equipados s ,AS POLICĂ“AS VERIlCACIĂ˜N DE LA DOTACIĂ˜N Y DE LA RELACIĂ˜N CON LA POBLAciĂłn s ,A JUSTICIA DOTACIĂ˜N IMAGEN ElCIENCIA JUSTICIA ALTERNATIVA s %L CONJUNTO DE PROGRAMAS Y PROYECTOS DE PREVENCIĂ˜N EFECTIVA s #ENTROS Y PRĂˆCTICAS DE APOYO Y CENTROS DE REFUGIO PARA MUJERES VĂ“CTImas de VIF s %VENTOS SIMBĂ˜LICOS CARNAVAL lESTAS LOCALES O RELIGIOSAS REGULARES que contribuyen a la cohesiĂłn social s ,A PRESENCIA DE OFERTA LABORAL INTERESANTE PARA JĂ˜VENES s 0RESENCIA DE GRUPOS ORGANIZADOS PARA LA PREVENCIĂ˜N MONITORAS DE VIF, por ejemplo) s 3ISTEMAS DE SEGURIDAD PRIVADOS ACTUANDO EFECTIVAMENTE SOBRE EL territorio comunal s %XISTENCIA DE JUNTAS DE VECINOS CLUBES DEPORTIVOS ORGANIZACIONES DE la tercera edad, grupos de artistas y artesanos, etc s !CTIVIDADES DE CAPACITACIĂ˜N PARA DISTINTOS GRUPOS DE LA COMUNIDAD s %SCUELAS QUE CUENTEN CON SISTEMAS DE APOYO PARA NIĂ—OS Y FAMILIAS EN riesgo s %SPACIOS DE RECREACIĂ˜N Y DIVERSIĂ˜N PARA NIĂ—OS Y JĂ˜VENES

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CARACTERĂ?STICAS-TIPO DE VICTIMIZACIĂ“N / VĂ?CTIMA s Sucesos criminales recu-

s s

s s s s s s

rrentes 6Ă“CTIMAS FRECUENTES SEGĂžN tipos de delitos $ELITOS VIOLENTOS CONTRA personas en espacios pĂşblicos $ELITOS CONTRA LA PROPIEDAD 6IOLENCIA DOMĂ?STICA 6IOLENCIA ESCOLAR 6IOLENCIA SEXUAL !BUSO DE MENORES &ORMAS DE EXPLOTACIĂ˜N Y discriminaciĂłn

CARACTERĂ?STICAS-TIPO DEL VICTIMARIO-AUTOR O DELINCUENTE O POTENCIAL DELINCUENTE s $ELINCUENTES FRECUENTES EN el ĂĄrea del diagnĂłstico s 0ERlL DE DELINCUENTES involucrados en delitos en espacios pĂşblicos s 0ERlL DE DELINCUENTES INVOLUcrados en delitos contra personas y contra la propiedad s -ENORES ADOLESCENTES Y jĂłvenes en conicto con la ley s !UTORES DE VIOLENCIA DOMĂ?Stica, sexual s .ARCOTRĂˆlCANTES s 0ERlL DE INVOLUCRADOS EN redes de explotaciĂłn sexual y de menores

CARACTERĂ?STICAS-TIPO DE HECHOS O VICTIMIZACIĂ“N EN EL Ă REA DE DIAGNĂ“STICO s ,UGARES HORARIOS DĂ“AS MANIFESTACIONES Y ATRIBUTOS 2.6.2.3. Factores de riesgo y protecciĂłn

Los factores de riesgo y de protecciĂłn, en una perspectiva que asume la multicausalidad de la delincuencia y de la violencia, son H[SUHVLRQHV \ UHĂ HMDQ DTXHOODV VLWXDFLRQHV DJHQWHV R HOHPHQWRV que propician, facilitan o precipitan la apariciĂłn de conductas, entornos o realidades indeseadas y que se asocian a grupos en riesgo o vulnerables. Frecuentemente se reconocen vinculadas a las causas de la criminalidad y de la resiliencia del entorno local que permite evitarla o prevenirla. En este caso, es importante tener en cuenta que esta modalidad de diagnĂłstico se orienta a LGHQWLĂ€FDU HVWRV IDFWRUHV D QLYHO ORFDO \ QR DTXHOORV TXH VRQ HVtructurales, frente a los cuales las personas y un gobierno local no SXHGH LQĂ XLU VLJQLĂ€FDWLYDPHQWH FRPR OD SREUH]D \ OD GHVLJXDOGDG socioeconĂłmica. Al adoptar esta perspectiva se acepta implĂ­citamente que no hay una causa que pueda explicar un tipo de delincuencia o violencia, sino TXH ORV FRPSRUWDPLHQWRV GH TXLHQ HVWi HQ FRQĂ LFWR FRQ OD OH\ VRQ el producto de varios factores que la criminologĂ­a llama factores de riesgo, por ello se orienta mĂĄs a un grupo que a un individuo. 2.6.2.4. El temor

Es normal que las personas sientan algĂşn grado de temor e incertidumbre, pero cuando ĂŠste alcanza niveles importantes, cuando aumenta a niveles no vistos anteriormente, cuando las personas

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llegan a evitar ciertos lugares o dejar de usar el espacio público y dejan de relacionarse por miedo a ser víctimas de la delincuencia, se recluyen y buscan protección, entonces el temor es un indicativo de la percepción de riesgo y vulnerabilidad. Aun cuando se trate de un sentimiento o evaluación subjetiva de la población y en ocasiones no estÊ ligado directamente al nivel de victimización, Êsta es una dimensión relevante en un diagnóstico. El temor es un factor que interviene mucho en el clima de conÀDQ]D HQWUH ORV SHUVRQDV \ HQWUH OD SREODFLyQ H LQVWLWXFLRQHV \ DXtoridades públicas. Abordarlo lúcidamente, distinguiÊndolo de la victimización, evita confusiones y permite visualizar las prioridades GH OD JHQWH /RV SULQFLSDOHV WHPDV TXH VH UHÀHUHQ DO WHPRU VRQ HO objeto del temor (de quÊ se tiene temor y por quÊ), los grupos mås temerosos, los espacios y lugares temidos (durante el día, en la tarde o de noche) y los actores clave en la expansión del temor (medios de comunicación, comerciantes locales, etc.). 2.6.3. Los instrumentos de trabajo

Tanto al aplicar las tĂŠcnicas como al momento del anĂĄlisis de los datos, es recomendable apoyarse en personas con formaciĂłn en ciencias sociales. Por ello, en un diagnĂłstico es importante contar con equipos interdisciplinarios que ayuden a explotar la baterĂ­a de instrumentos posibles. Por ejemplo: ‡ 6L H[LVWHQ SDQGLOODV YLROHQWDV HV FRQYHQLHQWH RUJDQL]DU XQ JUXpo formado por jĂłvenes, educadores, ONG o similares, servicios de prevenciĂłn y eventualmente policĂ­as que analicen estos hechos e inviten a entablar un diĂĄlogo con los pandilleros, sus familias y sus barrios. ‡ 6L VH FRQRFH OD SUHVHQFLD GH PLFURWUDĂ€FDQWHV FX\D YHQWD HVWp destinada al consumo de los habitantes del barrio, organizar XQ JUXSR GH GLVFXVLyQ FDSD] GH GLDORJDU FRQ HVWRV PLFURWUDĂ€cantes para entender el tipo de droga, el tipo de consumidor, la alternativa econĂłmica potencial. Monitores de centros de prevenciĂłn pueden conducir estos grupos. En algunos casos conviene utilizar, si los medios existen, grupos focales (“focus groupâ€?) o pequeĂąas encuestas de opiniĂłn focalizadas sobre un segmento o zona determinada con la asesorĂ­a de expertos en el tema y la ayuda de estudiantes. Las entrevistas en profundidad a vĂ­ctimas, para complementar las estadĂ­sticas policiales y llenar vacĂ­os de informaciĂłn consultando experiencias ciudadanas en tĂŠrminos de victimizaciĂłn constituyen un instrumento potente. Corresponden a entrevistas cara a cara utilizando un cuestionario estructurado. Consumen mucho tiempo, pero las encuestas a vĂ­ctimas, por ejemplo, entregan informaciĂłn clave.


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

Frente a la variedad de mĂŠtodos de diagnĂłstico que se usan, solos o combinados, para recavar y analizar la informaciĂłn, lo importante es saber quĂŠ instrumentos sirven y cuĂĄndo usarlos en funciĂłn de los objetivos buscados, es decir, de la importancia de la temĂĄtica analizada.

OBJETO DE OBSERVACIĂ“N Delitos Temor o inseguridad

2.6.4. El anĂĄlisis de actores

Casi en paralelo al empleo de las tĂŠcnicas de recolecciĂłn, el anĂĄlisis de los antecedentes es una actividad desde ya necesaria. Esta fase implica trabajar en una doble perspectiva. Por una parte, realizar un anĂĄlisis convencional, es decir, aplicar un conjunto de procedimientos dirigidos a revisar los datos para encontrar y destacar situaciones frecuentes, factores decisivos y causas recurrentes que explican las manifestaciones y problemas de inseguridad en una coPXQLGDG 3RU OD RWUD LGHQWLĂ€FDU FXiOHV VRQ ORV DFWRUHV FODYHV SDUD el desarrollo de un proyecto de prevenciĂłn del delito dentro de un territorio. Un error serĂ­a tener en cuenta tan solo a los representantes formales y olvidarse de aquellos informales que muchas veces viven en la misma comunidad. De igual forma, se debe considerar FRPR DFWRUHV YiOLGRV H LQĂ X\HQWHV WDQWR D LQVWLWXFLRQHV FRPR D personas particulares. 8QD YH] LGHQWLĂ€FDGRV ORV LQGLYLGXRV \ RUJDQL]DFLRQHV FODYHV \D VHD mediante observaciĂłn directa o conversaciones con gente de la comunidad, hay que analizar su grado de interĂŠs en la iniciativa y el rol que podrĂ­an cumplir dentro de ella. Esto permitirĂĄ tener una idea JHQHUDO GHO PDSD GH SDUWLFLSDQWHV GHO VHFWRU FRQ VXV LQĂ XHQFLDV \ sus futuras responsabilidades dentro de la iniciativa. Si se desea es posible profundizar mĂĄs en el anĂĄlisis de actores, determinando el nivel de “impactoâ€? que pueden tener para el proyecto, asignando a cada uno un valor de acuerdo a su grado de importancia y a su grado de poder real sobre la comunidad. 2.6.5. Indicadores

La elaboraciĂłn y uso de indicadores es necesario tanto en el diseĂąo como en la mediciĂłn u observaciĂłn de ciertas variables que ayudan a seguir la evoluciĂłn de los problemas de inseguridad en un muni-

Factores de riesgo

FUENTE O METODOLOG�A ‡ Denuncia de la población ‡ Encuestas de victimización ‡ Autoreporte ‡ Encuestas de percepción ‡ Estudios cualitativos ‡ Enfoque epidemiológico estadísticos con tÊcnicas cuantitativas o cualitativas

Victimarios

‡ Estadísticas de detenidos ‡ Estudios en población penal ‡ Autorreporte

Efectos en la Sociedad

‡ Estudios cualitativos o cuantitativos para medir gobernabilidad, costo del delito, magnitud de la violencia, zonas afectadas, etc

Programas y acción de las ‡ Estudios o evaluaciones para medir instituciones impacto de las intervenciones, indicadores de gestión, relación con la comunidad, etc Recursos en ‡ Diagnóstico participativos la comunidad ‡ Elaboración de historias locales ‡ Mapa de actores

cipio. Éstos tambiÊn serån útiles mås tarde, a la hora de monitorear las intervenciones que se diseùaron, los resultados y sus impactos. La construcción participativa de los indicadores garantiza una mayor apropiación y compromiso de los actores respecto de los cambios que se desea lograr, y su adecuación a las condiciones y al contexto particular de cada proyecto. La elaboración y el uso de indicadores son pasos necesarios en el diseùo de un diagnóstico y la medición u observación de ciertas variables que ayudan a seguir la evolución de los problemas de inseguridad en un municipio. Su uso en este momento es relevante, SRUTXH D\XGDQ D ÀMDU OD IRWRJUDItD GHO PRPHQWR SDUD SURSyVLWRV de comparación en el futuro (línea de base). Éstos tambiÊn serån requeridos mås tarde, a la hora de monitorear las intervenciones que se diseùaron, los resultados y sus impactos.

RECURSOS DE LA COMUNIDAD Es recomendable partir de las buenas pråcticas y experiencias existentes a nivel local, asociåndose o incorporando a las organizaciones, grupos y personas que son o pueden ser un aporte positivo. Para ello es muy importante descubrir, analizar y valorar los recursos locales. Éstos pueden ser desde las historias (incluido su origen) y experiencias locales, las instituciones (iglesias, bomberos, escuelas, etc.) y organizaciones existentes (catastro incluyendo integrantes activos y actividades desarrolladas), pråcticas solidarias, celebraciones y ritos, existencia de artistas y artesanos (organizados o no), formas locales positivas de resolución de conictos, etc. TambiÊn forman parte de los recursos la infraestructura y el equipamiento como sedes sociales, multicanchas y plazas, entre otros. Los recursos pueden determinar la estrategia al indicar posibles formas y socios locales para desarrollar nuestra política.

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

TASAS, INDICADORES E ÍNDICES La estadística proporciona herramientas para describir y evaluar la realidad. Con frecuencia se suelen emplear descriptores, tales como: frecuencias, tasas, porcentajes, indicadores e índices para abordar el análisis de variables vinculadas a la inseguridad. Por ejemplo, en el caso de los registros de delitos, la “frecuencia de denuncias” permite observar la cantidad de sucesos criminales de los que la policía tomó conocimiento y -si se llegan a ubicar en mapas- reconocer los lugares donde más ocurren delitos. La “tasa de denuncia” permite comparar, aislando la variable población, y ver la magnitud de la delincuencia en relación a la población que tiene la unidad de análisis. El “porcentaje de victimización por hogar”, por su parte, indica la proporción de hogares que ha sido víctima de algún delito en un determinado lapso de tiempo (generalmente un año) en relación al total de hogares encuestados, independientemente de dónde haya ocurrido el hecho. Un indicador, por su parte, es una medida cuantitativa que puede usarse como guía para que nos muestre la evolución a lo largo del tiempo de un objetivo predeterminado: “calidad de servicio” = “nivel de satisfacción de la persona que denuncia” v/s “número de personas que denuncian un suceso criminal ante la policía”. Otro ejemplo, es la estimación de la “cifra negra” o “tasa de subdeclaración” que equivale al “porcentaje de personas que fueron víctimas de un delito en un periodo determinado y que no concurrió a denunciar el hecho”. Vale la pena mencionar, por último, los indicadores de recursos, que miden el volumen y la composición de los recursos existentes. Éstos pueden servir además para la elaboración de indicadores de efectividad, al relacionar “objetivos alcanzados” v/s “cantidad de recursos empleados”. Un índice, finalmente, no es más que la combinación de varios indicadores en uno solo, con el fin de proporcionar una medición más rica o precisa del concepto que es objeto de estudio, por ejemplo, el temor. Para ello, los indicadores deben ser traducidos previamente a una escala de medición común (asignando números, en su caso, a las distintas categorías), para luego ser combinados mediante alguna operación matemática (desde una simple media aritmética, hasta elaboraciones ciertamente complejas). Al medir la inseguridad en un barrio se pueden considerar las respuestas a diversas preguntas; por ejemplo, las percepciones de riesgo (“grado de peligrosidad de un lugar”) y el temor que provocan determinadas situaciones (“salir solo en la noche”). La combinación de ambas variables puede dar origen a un “índice de temor”. También existen otros índices validados internacionalmente como el “índice de calidad de vida” y el “índice de desarrollo humano (IDH)” elaborada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que se basa en un indicador social

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estadístico compuesto por tres parámetros: - Vida larga y saludable (medida según la esperanza de vida al nacer), Educación (medida por la tasa de alfabetización de adultos y la tasa bruta combinada de matriculación en educación primaria, secundaria y superior, así como los años de duración de la educación obligatoria), Nivel de vida digno (medido por el PIB per cápita PPA en dólares). Porque no existe o porque las instituciones públicas no las comparten, en ocasiones será necesario “producir” información. Esto es también una oportunidad para desarrollar capacidades. El principal argumento para considerar distintas fuentes y técnicas no es la carencia de datos, sino el hecho de que algunas ayudan a reconocer el problema desde la perspectiva de los miembros de una comunidad. Atendido el hecho de que la inseguridad es un fenómeno social multifacético, es recomendable implementar un diagnóstico sobre la base de una combinación de éstas. Para ello es recomendable elegir técnicas de recolección que pueden ser de bajo costo, focalizadas y breves, u otras que requieren mayores recursos, tecnología o competencias profesionales. La clave en la elección radica en la oportunidad, la disponibilidad de medios y su representatividad. Generalmente se opta por realizar encuestas, entrevistas, discusión en grupos y el análisis de casos o de experiencias críticas. La tarea es elegir entre lo necesario y lo posible. Estas herramientas reflejan la perspectiva de las personas, de los interlocutores, de las víctimas y de los diversos actores:

Entrevistas individuales. Esta técnica se complementa con el cuestionario y permite recoger información que puede ser investigada hasta en sus mínimos detalles en una conversación personal con los miembros de una organización.

Discusión en grupos pequeños. Esta técnica selecciona un cierto número de miembros representativos de la comunidad o de una organización para ser entrevistados como grupo. La entrevista se suele centrar en aspectos críticos del funcionamiento de las acciones de prevención y en la forma en que la criminalidad y la violencia les afecta.

Examen de casos o de experiencias críticas. Sirve para conocer las experiencias positivas y negativas de personas u organizaciones y pueden ser útiles para evaluar la efectividad e impacto de ciertas actividades o intervenciones. Una práctica recomendable son las marchas exploratorias.

Encuesta. Permite recoger mayor cantidad de información de mayor cantidad de gente y de una manera más rápida y más económica que otros métodos, y facilita el análisis estadístico.


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

Los indicadores cuantitativos dan cuenta de la dimensión de un fenómeno, pero solo tienen sentido si son comparados con otros anålogos y en el tiempo. Los indicadores cualitativos, por su parte, permiten percibir las relaciones entre actores sociales (por ejemplo, relación entre jóvenes y policías), o la percepción positiva o negativa de algunos servicios, programas o proyectos, o los cambios en tÊrminos de calidad de vida. Los de tendencia permiten hacer inferencias sobre el comportamiento de cierto fenómeno a lo largo de un período de tiempo. Estos tres tipos de indicadores se pueden usar de forma combinada para abordar los distintos ejes del diagnóstico. 3RU HMHPSOR HO SDVDMH SURJUHVLYR GHO WUiÀFR GH GURJDV LOtFLWDV GHVGH un comercio individual, marginal y callejero a una actividad familiar desde los domicilios, indicaría un proceso de legitimación de HVWH WUiÀFR SRU HO HQWRUQR 2WUR HMHPSOR OD HYROXFLyQ GHO URER realizado por sectores juveniles hacia el robo con violencia o armado. Un tercer ejemplo: en materia de violencia intrafamiliar se puede recavar la cantidad de denuncias (indicador cuantitativo) o determinar la tendencia a mayor denuncia (indicador de tendencia) o establecer una mejor preparación de la policía para atender las denuncias de VIF (indicador cualitativo). Un cuarto ejemplo: en el caso de las pandillas juveniles violentas, mås que su número o el de VXV SDUWLFLSDQWHV OR TXH LPSRUWD HV LGHQWLÀFDU HO WLSR GH SDQGLOODV (maras, barras bravas, pandillas insertas en el negocio de la droga o en otro tipo de delitos, pandillas sobre base Êtnica, pandillas or-

ganizadas en torno a la escuela, pandillas manipuladas por adultos, etc.) y su inserciĂłn en el entorno. El tipo de pandilla y su ligazĂłn al territorio determinarĂĄn el tipo de prevenciĂłn. /D PHWD Ă€QDO GHEH VHU SURGXFLU LQGLFDGRUHV TXH LOXVWUHQ VDWLVIDFtoriamente un mĂĄximo de fenĂłmenos para un amplio margen de usuarios. Y que permitan conformar la “lĂ­nea de baseâ€?.

FAVELA CAVALĂƒO, EN NITERĂ“I, BRASIL Entre marzo y julio del 2007 se realizĂł una investigaciĂłn en la favela CavalĂŁo de NiterĂłi (RĂ­o de Janeiro), con el ďŹ n de identiďŹ car los factores que habĂ­an permitido la erradicaciĂłn de la violencia armada y el trĂĄďŹ co dentro de la comunidad. Se realizĂł un diagnĂłstico de la situaciĂłn de aquel entonces, donde se incluĂ­a, entre otras cosas, la identiďŹ caciĂłn de los actores claves. La tarea se realizĂł mediante la construcciĂłn de una tipologĂ­a de actores que estaba compuesta por dos ejes: 1. Origen del actor; 2. Inuencia del actor. En esta tipologĂ­a solo se incluyeron actores formales, lo que no quiere decir que el estudio excluyera a los actores informales o no institucionalizados. A partir de la tipologĂ­a se desprendiĂł que uno de los mayores problemas de la comunidad era que los actores con mayor grado de inuencia eran exĂłgenos. Como no habĂ­an surgido de la comunidad, podĂ­an abandonarla en cualquier momento, poniendo en juego la sustentabilidad de la iniciativa (CamiĂąas, L. y DĂ­az, G.).

ANĂ LISIS DE ACTORES NOMBRE DE ACTORES

EJE ORIGEN

EJE INFLUENCIA

TIPOLOGĂ?A

Agrupamiento policial en ĂĄreas especiales (GpaĂŠ)

ExĂłgeno

Muy alta

ExĂłgeno-muy alta

Telecentro EducaciĂłn e InclusiĂłn Digital

ExĂłgeno

Alta

ExĂłgeno-alta

EndĂłgeno

Alta

EndĂłgeno-alta

MĂŠdico de Familias Unidad Frank Pais

ExĂłgeno

Muy Alta

ExĂłgeno-alta

ONG Viva RĂ­o

ExĂłgeno

Alta

ExĂłgeno-alta

Prefectura de NiterĂłi

ExĂłgeno

Muy alta

ExĂłgeno-muy alta

Creche Hermana Catarina Mora Silva

Mixto

Alta

Mixto-alta

Creche Jorge Cavalier Filho

Mixto

Alta

Mixto-alta

ONG Gente do Brasil

Mixto

Alta

Mixto-alta

AsociaciĂłn de Moradores

Los niveles de inuencia de cada actor fueron determinados por los investigadores de acuerdo a lo observado en terreno y a conversaciones sostenidas con la comunidad. Grupo 1: “Internos o EndĂłgenosâ€?: Actores sociales que hayan surgido dentro de la misma comunidad Grupo 2: “Mixtosâ€?: Actores sociales que se componen por individuos endĂłgenos y por individuos exĂłgenos Grupo 3: “Externos o ExĂłgenosâ€?: Actores sociales que hayan surgido fuera de la comunidad y que en un determinado momento hayan ingresado a ella Fuente: CAMIĂ‘AS, L. y DĂ?AZ, G., 2007. 55


GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

2.6.6. Establecer una “lĂ­nea de baseâ€?

La lĂ­nea de base es entendida como el primer nivel de los indicadores contemplados en el diseĂąo de un proyecto de prevenciĂłn del delito. Por ende, establece el “punto de partidaâ€? de la intervenciĂłn. Se realiza cuando el proyecto se inicia, para hacer comparaciones posteriores e indagar los cambios ocurridos conforme las actividades se vayan ejecutando.

municipios grandes la tarea es inabordable para un solo especialista, pero en unidades territoriales mĂĄs pequeĂąas o medianas una SHUVRQD FDOLĂ€FDGD GHO JUXSR JXtD R GHO HTXLSR WpFQLFR SXHGH FXPplir el papel del investigador y hacerse ayudar por estudiantes o voluntarios de la comunidad.

El resultado de la línea de base se expresa en un informe que desFULEH OD VLWXDFLyQ GH ORV SUREOHPDV LGHQWLÀFDGRV DQWHV GH OD LQWHUvención del proyecto. La información elaborada se conoce como aùo base, punto de referencia o aùo cero. La línea de base puede ser ÀMDGD DO WpUPLQR GHO GLDJQyVWLFR R GXUDQWH HO LQLFLR GH OD HVWUDWHJLD

El “equipo recolector de datosâ€? juntarĂĄ los antecedentes a partir de las fuentes mĂĄs comunes de informaciĂłn de criminalidad y seguridad: los “datos secundariosâ€?, es decir aquellos ya recavados por otros. Luego complementarĂĄ su informaciĂłn por medio de la elaboraciĂłn de datos primarios, obtenidos por el propio equipo investigador del anĂĄlisis de los instrumentos de recolecciĂłn de informaciĂłn empleados (encuestas, focos grupales, entrevistas, observaciones de campo, etc.).

2.7. PASO 3: CONDUCIR EL DIAGNĂ“STICO

2.7.1.2. GeorreferenciaciĂłn del diagnĂłstico

2.7.1. RecolecciĂłn de datos

La recolección de datos de un determinado fenómeno debe ir DFRPSDxDGD GH VX GLVWULEXFLyQ JHRJUiÀFD 6DEHU TXH H[LVWH XQD alta cantidad de delitos en una comunidad es menos relevante que saber cuåles son esos delitos, dónde ocurren y en quÊ tiempo.

2.7.1.1. Recolectar los datos primarios y secundarios

&RQGXFLU HO GLDJQyVWLFR VLJQLĂ€FD HVWXGLDU OD FULPLQDOLGDG OD YLROHQcia y la inseguridad local. La investigaciĂłn se va a centrar, primero y principalmente, en la recolecciĂłn de datos e informaciĂłn. Luego se va a mover, en el siguiente paso, al anĂĄlisis (o diagnĂłstico propiamente tal) de la situaciĂłn. Miembros del grupo guĂ­a buscan las personas u organizaciones preparadas para apoyar la parte investigativa del diagnĂłstico. En Las principales fuentes de datos secundarios s 3ERVICIO POLICIAL s %L SISTEMA JUDICIAL PENAL CORTES JUZGADOS PROBATORIOS s 'OBIERNO LOCAL PROVINCIAL Y NACIONAL s #ENTROS DE INVESTIGACIĂ˜N s 3EGURIDAD PRIVADA Y COMPAĂ—Ă“AS DE SEGURO s /.' s %SCUELAS s 3ERVICIOS DE SALUD s %NCUESTAS COMUNITARIAS RELEVANTES s )NTERNET s %STUDIOS DE AGENCIAS DE COOPERACIĂ˜N INTERNACIONAL Principales instrumentos para la elaboraciĂłn de datos primarios. s %NCUESTA s %NTREVISTA s #UESTIONARIO s /BSERVACIĂ˜N PARTICIPANTE Y NO PARTICIPANTE s 4EST s %SCALAS

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Para incluir esta informaciĂłn, el diagnĂłstico debe contar con mecanismos que permitan distribuir los delitos dentro del espacio, es decir, la elaboraciĂłn de “mapasâ€? relacionados con los distintos efectos de la criminalidad. Una vez que se dibujan estos mapas, se pueden intercalar con otros que muestren variables de interĂŠs para la explicaciĂłn o anĂĄlisis de estos fenĂłmenos; por ejemplo, con mapas de sectores empobrecidos, de sitios abandonados, de viviendas sociales, de comisarĂ­as, de esFXHODV GH PHGLRV GH WUDQVSRUWH HWF $Vt HV SRVLEOH LGHQWLĂ€FDU FLHUWDV relaciones entre estas variables y algunos tipos de hechos delictuales. Los sitios donde se comete una mayor cantidad de delitos son puntos de alta densidad delictuales u “hot spotâ€?. Durante el diagnĂłstico es importante intentar develar las causas de una alta concentraciĂłn del delito por medio de preguntas a los miembros de la comunidad. Las consultas buscarĂĄn determinar factores claves para ser abordados posteriormente en la estrategia. Por ejemplo, VL VH LGHQWLĂ€FD HVWRV OXJDUHV FRQ VLWLRV DEDQGRQDGRV R YHUWHGHURV informales, se requerirĂĄ el diseĂąo de una polĂ­tica de prevenciĂłn situacional que reformule estos espacios. TambiĂŠn es posible realizar un anĂĄlisis de “hot spotâ€? de un delito GHWHUPLQDGR 3RU HMHPSOR HQ %HOR +RUL]RQWH %UDVLO VH LGHQWLĂ€Fy los lugares de mayor nĂşmero de asaltos a taxistas para luego elaborar una estrategia de reducciĂłn de dicho delito (ver recuadro). /RV VLVWHPDV GH LQIRUPDFLyQ JHRJUiĂ€FR 6,* corresponden a programas, no exclusivamente orientados a la seguridad, que perPLWHQ FRPSOHMRV PRGHODPLHQWRV GH PDSDV JHRJUiĂ€FRV HQ IXQFLyQ


Capítulo 3: POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN: ETAPA 2. EL DIAGNÓSTICO

MAPA: HOT SPOTS DE ASALTOS A TAXI, BELO HORIZONTE (1995-2001), BRASIL

Las zonas en verde representan los “hot spots” o puntos de mayor incidencia. A partir de su identificación, se elaboró una estrategia negociada junto al Sindicato de los Conductores de Taxi, para que se instalaran en estos lugares puntos de interceptación y revista de pasajeros para buscar y aprehender armas. Los taxistas y la policía sabían dónde se localizarían tales operaciones, de forma que sus vehículos siempre serían revisados en las avenidas y calles de acceso a estos hot spots. Como resultado los asaltos se redujeron en más de 34% entre los años 2000 y 2001 (citado por Beato: 2005).

TIPOS DE MAPAS TIPO DE MAPA

METODOLOGÍA

UTILIDAD

“Mapa de victimización”

Se puede construir a partir de los datos de una encuesta realizada recientemente en la población, o de manera participativa, pidiendo a un grupo de personas de la comunidad que señale los lugares específicos en donde ha sido víctima de un delito en los últimos 12 meses, por ejemplo.

Los mapas de victimización son una radiografía exacta de los lugares en que acontecieron ciertos delitos en un tiempo determinado. Son útiles en la medida que permiten ver las zonas en donde se concentran mayormente los delitos y cómo se distribuyen distintos tipos de éstos: violación, hurto, robo, tráfico, etc.

“Mapa de denuncias”

Se realiza en conjunto con la policía y se utilizan sus registros estadísticos. El objetivo es ubicar en el mapa el lugar de los delitos denunciados formalmente.

Son útiles porque muestran qué información directa maneja la policía. Además permiten identificar los lugares en donde se tiende a denunciar más. Sin embargo, son limitados en la medida que solo se basan en estadísticas oficiales, no considerando la “cifra negra”.

“Mapa de temor”

Se construyen de forma participativa con representantes de toda la comunidad. En ellos se busca ilustrar aquellos puntos en donde la población se siente más atemorizada o expuesta a ser víctima de un delito. Es recomendable realizar esto con grupos más proclives a ser víctimas como mujeres y adolescentes.

Son muy útiles en cuanto abarcan la dimensión subjetiva del delito, “el miedo”. Posibilitan localizar los puntos de temor e indagar por qué en ellos la gente se siente vulnerable. Ayudan a entender las percepciones de las personas y cómo ellas configuran su espacio en relación a la seguridad. Sin embargo, pueden ser muy variables de un tiempo a otro, puesto que la percepción subjetiva suele cambiar rápidamente cuando ocurre un delito de alta connotación social.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

de una serie de variables introducidas en ellos. Sus resultados son de gran valor para instituciones relacionadas con la seguridad, deELGR D VX DOWR JUDGR GH SUHFLVLyQ \ GH LGHQWLĂ€FDFLyQ GH QXHYRV fenĂłmenos. A nivel de diagnĂłstico, pueden contribuir a resolver interrogantes bĂĄsicas sobre el comportamiento y la evoluciĂłn de la criminalidad, tales como: ‡ ¢'yQGH HVWi GLVPLQX\HQGR R DXPHQWDQGR OD DFWLYLGDG FULPLnal? ‡ ¢'yQGH VH HVWiQ FRQFHQWUDQGR R H[WHQGLHQGR ORV LOtFLWRV" ‡ ¢/RV GHOLWRV HVWiQ DIHFWDQGR ODV PLVPDV iUHDV X RWUDV QXHYDV" ‡ ¢4Xp QXHYRV IRFRV GH LQVHJXULGDG \ YLFWLPL]DFLyQ HVWiQ HPHUgiendo? ‡ ¢+D\ HYLGHQFLDV GH GHVSOD]DPLHQWR R H[WHQVLyQ GH ORV UHVXOWDdos positivos a otras ĂĄreas adyacentes? En muchas ciudades o paĂ­ses de LatinoamĂŠrica, policĂ­as u otras instituciones gubernamentales ligadas a la seguridad cuentan con SIG. Se recomienda trabajar en conjunto con ellas sobre estos tePDV H LGHQWLĂ€FDU OD GLVWULEXFLyQ JHRJUiĂ€FD GH ORV GHOLWRV HQ OD ]RQD que se estĂĄ diagnosticando. Por Ăşltimo, se debe considerar que informaciones de este tipo son sumamente sensibles y pueden contribuir a la estigmatizaciĂłn de algunos barrios. No conviene difundirlas a la comunidad si no se tiene un plan elaborado de acciĂłn sobre las zonas involucradas. 2.7.1.3. Sistematizar los datos

Conviene sistematizar los datos por gĂŠnero y grupos de edades, distinguiendo jĂłvenes y poblaciĂłn adulta. Ello permite un mejor anĂĄlisis y un mejor enfoque de elaboraciĂłn posterior de estrategia, tanto de gĂŠnero como de actividades preventivas dirigidas a grupos juveniles. DespuĂŠs de recavar la informaciĂłn, el grupo investigador da cuenta de los resultados al grupo guĂ­a para su validaciĂłn y anĂĄlisis. 2.7.1.4. Complementar y profundizar los datos

(Q IXQFLyQ GHO DOFDQFH WHPiWLFR GHÀQLGR DQWHULRUPHQWH GH ORV UHFXUVRV KXPDQRV \ ÀQDQFLHURV GLVSRQLEOHV \ GH ODV SULRULGDGHV HO JUXSR JXtD YHULÀFD VL WLHQH ORV GDWRV QHFHVDULRV SDUD HODERUDU XQD estrategia dirigida a resolver o reducir los efectos de la criminalidad. (O FULWHULR TXH GHÀQH HO WpUPLQR GHO SULPHU GLDJQyVWLFR HV OD VXÀciencia de los datos para poder prepararla. Aunque algunos datos VHFWRULDOHV SDUH]FDQ LQVXÀFLHQWHV R OR VHDQ VDELHQGR TXH XQ GLDJQyVWLFR SXHGH VLHPSUH VHU PHMRUDGR KD\ TXH GHFLGLUVH D ÀQDOL]DU esta fase. Algunos temas quedarån para profundizar ulteriormente en estudios complementarios. Ademås, un diagnóstico debe ser actualizado regularmente.

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Si hay recursos, se pide al grupo investigador o a un grupo de trabajo de la comunidad, profundizar los temas juzgados esenciales en la estrategia. Por cierto no resulta adecuado profundizar todos los temas simultåneamente. Ejemplos: ‡ 6L HO WHPD UHTXLHUH XQ DQiOLVLV PX\ GHOLFDGR FRPR HQ HO FDVR GH barrios críticos, es preferible contratar una entidad especializada, por ejemplo una universidad o una ONG con experiencia. ‡ 6L VH SUHFLVD GH PD\RU DQiOLVLV VREUH OD 9,) VH SLGH D XQ LQYHVWLgador realizar una encuesta y se analizan estos datos. ‡ 6L VH QHFHVLWD XQ PHMRU FRQRFLPLHQWR GHO WLSR GH WHPRU SUHYDlente en las diferentes zonas o sectores sociales de la comuna, es EHQHÀFLRVR XWLOL]DU OD HQFXHVWD R HO HVWXGLR FXDOLWDWLYR SHUR HQ ambos casos con especialistas universitarios, estudiantes, ONG o consultores. 2.7.2. La investigación temåtica

&DGD WHPD VHOHFFLRQDGR GXUDQWH OD GHĂ€QLFLyQ GHO DOFDQFH GHO GLDJnĂłstico, requiere ser enfocado apropiadamente mediante preguntas bĂĄsicas esenciales. Las preguntas apuntan a conocer las principales manifestaciones de delitos o de conductas problemĂĄticas, a LGHQWLĂ€FDU HO FRQMXQWR GH IDFWRUHV GH ULHVJR R FDXVDV ORFDOHV \ D establecer los factores de protecciĂłn. Los cinco primeros temas analizados a continuaciĂłn (2.7.2.1 a 2.7.2.5) son imprescindibles. La importancia de aquellos que los siguen (2.7.2.6 a 2.7.2.12) depende de las caracterĂ­sticas y de las prioridades locales. 2.7.2.1. Las prioridades de la poblaciĂłn en tĂŠrminos de seguridad

Algunos temas son percibidos por la poblaciĂłn como disturbios, alteraciones o desĂłrdenes que entorpecen la vida cotidiana. VarĂ­an segĂşn las zonas de la comuna. Pueden ser, en algunos casos, la preVHQFLD GH XQ IXHUWH WUiĂ€FR GH GURJD XQD WDVD ]RQDO GH GHOLQFXHQFLD mĂĄs elevada, la proximidad de sectores sociales percibidos como virtuales delincuentes (las “clases peligrosasâ€?), la imagen estigmatizada de la comuna, etc. 2.7.2.2. Delitos contra la propiedad y factores que los favorecen

En muchas ciudades estos delitos constituyen la principal causa de molestia y de temor de la poblaciĂłn, sea acomodada o pobre. Los datos indispensables deberĂ­an responder a las preguntas: ‡ ¢4Xp WLSR GH DWHQWDGRV D OD SURSLHGDG HV PiV FRP~Q HQ ODV diversas zonas sociales de la comuna: robos en domicilio, robos con violencia, robos “hormigaâ€?, robos de autos, robos en autos?


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

‡ ¢&XiQGR VH UHDOL]DQ GXUDQWH HO GtD R OD QRFKH GXUDQWH OD VHPDQD R Ă€Q GH VHPDQD HWF " ‡ ¢&yPR VH UHDOL]DQ HQ OD FDOOH FRQ YLROHQFLD HQ ORV GRPLFLOLRV a transeĂşntes aislados, a mujeres aisladas, a comercios establecidos? ‡ ¢4XLpQHV VRQ ORV SULQFLSDOHV DXWRUHV DGXOWRV MyYHQHV EDQGDV organizadas, individuos aislados? ‡ ¢6RQ UHDOL]DGRV FRQ R VLQ YLROHQFLD" ‡ ¢4XLpQHV VRQ ODV SULQFLSDOHV YtFWLPDV SHUVRQDV GH HGDG MyYHnes, mujeres, ciertas ĂĄreas residenciales, comerciantes, estaciones de gasolina, farmacias, bares, etc.? ‡ ¢&XiO HV OD FDSDFLGDG GH UHVSXHVWD SROLFLDO WLHPSR GH UHVSXHVWDV y capacidad de elucidar estos delitos? ‡ ¢([LVWHQ VLVWHPDV FRPXQLWDULRV GH GHIHQVD FRPR DODUPD FROHFtiva organizada, acuerdos entre vecinos organizados? ‡ ¢+D\ SUHVHQFLD GH HPSUHVDV GH VHJXULGDG" ¢&XiO HV VX HĂ€FLHQcia? La realizaciĂłn de mapas donde se reĂşnen los datos principales ayuda considerablemente al anĂĄlisis. /D LGHQWLĂ€FDFLyQ GH OXJDUHV TXH IDYRUHFHQ HVWRV GHOLWRV \ OD FRPparaciĂłn con lugares de frecuentes asaltos o ataques a personas resulta muy Ăştil: por ejemplo, lugares fĂ­sicamente deteriorados, sin iluminaciĂłn, sin vigilancia natural, de trĂĄnsito peligroso. AdemĂĄs es necesario confrontar los lugares percibidos como peligrosos y la victimizaciĂłn real en ellos. La marcha exploratoria facilita esta comparaciĂłn. Los mapas perceptuales, las marchas exploratorias y algunas entrevistas rĂĄpidas a dirigentes de zonas son los principales instrumentos que permiten complementar los datos policiales y son una prĂĄctica GHVHDEOH SXHV UHĂ HMDQ ODV YLVLRQHV \ HO LQWHUpV GH ORV DFWRUHV DIHFtados. Los resultados de la aplicaciĂłn de los instrumentos mencionados deben ser confrontados con los datos policiales y discutidos si hay divergencia. 2.7.2.3. NiĂąos, adolescentes y jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo

En las líneas siguientes se entregan algunas indicaciones para la identiÀFDFLyQ GH ORV JUXSRV MXYHQLOHV HQ VLWXDFLyQ GH ULHVJR HQ OD FRPXQD s Niùos de la calle

Los niĂąos de la calle son aquellos que han roto los lazos normales con la familia, que duermen y sobreviven en la vĂ­a pĂşblica. Su nĂşmero resulta difĂ­cil de medir por su invisibilidad. Sin embargo, son los grupos mĂĄs expuestos. Para enfrentar el tema, hay preguntas esenciales por hacer a las instituciones encargadas, a las iglesias, ONG, a los servicios de policĂ­a y municipales: ‡ ¢&XiQWRV KD\" ¢+D\ XQD WHQGHQFLD DO DXPHQWR D OD EDMD R HV estable esta cantidad? ‡ ¢'yQGH YLYHQ FyPR VH DOLPHQWDQ" ¢&RQVXPHQ GURJD" ¢&XiO" ‡ ¢$ TXp DFWLYLGDGHV UHPXQHUDGDV VH GHGLFDQ" ‡ ¢&XiQGR UHFXUUHQ D OD YLROHQFLD SDUD VREUHYLYLU" En general los niĂąos de la calle no delinquen para ganar mĂĄs diQHUR VLQR VROR FRQ HO Ă€Q GH VREUHYLYLU R SDJDU VX GRVLV FRWLGLDQD de droga cuando son consumidores habituales. ‡ ¢4Xp LQVWLWXFLRQHV VH RFXSDQ GH HOORV UHVXOWDGRV" ¢4Xp VHUYLcios atienden sus demandas, en particular salud? ‡ ¢6RQ YtFWLPDV KDELWXDOHV GH OD YLROHQFLD SROLFLDO X RWUD" ‡ ¢4Xp DFFLRQHV SHUPLWLUtDQ XQ LQLFLR GH LQFOXVLyQ VRFLDO" ‡ (Q HO FDVR GH QLxDV ¢HVWiQ LQYROXFUDGDV HQ OD SURVWLWXFLyQ GH menores? ÂżRiesgo de SIDA? INCLUSIĂ“N SOCIAL O REINSERCIĂ“N DE NIĂ‘OS DE Y EN LA CALLE, MONTERREY, MÉXICO En Monterrey se realiza, a travĂŠs de monitores especializados y de los servicios de la DIF, un ďŹ chaje regular de los niĂąos de la calle que son reinsertados en familias o reenviados a su familia rural de origen. Por otra parte, cada seis meses se organiza una jornada de juegos para niĂąos y jĂłvenes en la calle, que evita su estigmatizaciĂłn, permite su ďŹ chaje sistemĂĄtico, facilita su acceso a servicios municipales o regionales de inserciĂłn y favorece su encuentro e inclusiĂłn (observaciĂłn directa).

s NiĂąos o adolescentes en la calle

Una pregunta clave de un diagnĂłstico que apunta a la formulaciĂłn GH XQD HVWUDWHJLD RULHQWDGD D MyYHQHV GHEHUtD YHULĂ€FDU VL H[LVWH XQD PHWRGRORJtD HĂ€FD] TXH SHUPLWD LGHQWLĂ€FDU D ORV MyYHQHV HQ VLWXDciĂłn de riesgo.

Corresponden a los que no han roto los lazos con la familia. Normalmente se albergan en la casa familiar, pero cumplen un trabajo por lo menos parcial en la calle: lustradores de botas, vendedores, malabaristas, ayudantes de padres mendigos, prostitutas menores de edad involucradas en comercio sexual.

‡ ¢4XLpQHV HVWiQ R HVWDUtDQ HQ FRQGLFLyQ GH KDFHUOR" ‡ ¢4Xp FRODERUDFLyQ H[LVWH HQWUH VRFLRV FRSURGXFWRUHV GH VHJXULdad para realizar esta tarea? ‡ ¢&yPR KD IXQFLRQDGR"

La información necesaria es: ‡ 3HUÀO GH HVWRV MyYHQHV /LJD]yQ UHDO FRQ OD IDPLOLD /XJDUHV GH encuentro. ‡ 5LHVJRV TXH FRUUHQ &RQVXPR GH GURJDV 3RU HMHPSOR QLxDV

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

TXH YHQGHQ à RUHV FHUFD GH ORV FHQWURV QRFWXUQRV GH HVSDUFLmiento (bares, cabaret, etc.) corren el riesgo de ser utilizadas en comercio sexual o de ser víctimas de abusos. ‡ 0RGDOLGDGHV GH LQFOXVLyQ VRFLDO s Desertores escolares

Éstos han sido expulsados de los colegios o se automarginaron. Generalmente vagabundean durante el día. De vez en cuando efectúan pequeùos trabajos, participan en bandas o actúan como pequeùos delincuentes. /DV SUHJXQWDV HVHQFLDOHV DSXQWDQ D GHVFULELU HO SHUÀO GH HVWRV MyYHQHV saber sus actividades, conocer las familias, barrios y colegios de origen. TambiÊn interesa saber si hay programas de educación que se dirijan a ellos y si existen en la ciudad programas exitosos en la materia. s Jóvenes que viven en barrios críticos

En barrios crĂ­ticos -donde la tasa de delincuencia y violencia es alta \ R VREUH WRGR GRQGH JUXSRV OLJDGRV DO QDUFRWUiĂ€FR LPSRQHQ sus normas-, la importancia de la socializaciĂłn radica en el hecho GH TXH ORV FRPSRUWDPLHQWRV \ HO WUiĂ€FR VH UHSURGXFHQ D WUDYpV GH los jĂłvenes (por ejemplo los “soldadosâ€? de los grupos de narcoWUDĂ€FDQWHV 3RU XQD SDUWH OD YLGD FRWLGLDQD HQ HVWRV EDUULRV WLHQGH a banalizar la violencia en la mente de los jĂłvenes, niĂąos y adolescentes. Por otra parte, el capital social perverso que predomina ofrece “oportunidadesâ€? que pueden ser atrayentes para jĂłvenes: roles de guardias o de vendedores de droga, entrega de armas y a menudo de remesas mensuales, implican la inserciĂłn directa en estos negocios.

Š Carmela Lanza

Las preguntas por hacer son: ‡ ¢&XiOHV VRQ ODV PDQLIHVWDFLRQHV GH YLROHQFLD GH ORV MyYHQHV adolescentes?

‡ ¢4Xp FDUDFWHUtVWLFDV GHO EDUULR FRQWULEX\HQ D IDYRUHFHU TXH ORV jĂłvenes reproduzcan actos de violencia? ‡ ¢4Xp FRPSRUWDPLHQWRV GH ORV MyYHQHV SRQHQ HQ ULHVJR VX SURpio desarrollo psicosocial? ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV HOHPHQWRV GH SURWHFFLyQ TXH SXHGHQ FRQWUDrrestar estos impactos (por ejemplo escuelas oasis de paz, rol de grupos ligados a iglesias, liderazgos alternativos, mediadores comunitarios, monitores de calles, etc.)? s JĂłvenes en conicto con la ley

Son los jĂłvenes detenidos por la policĂ­a o bien pasados a la justicia R D SURJUDPDV HVSHFtĂ€FRV GH SUHYHQFLyQ Preguntas por formular: ‡ ¢+D\ EDUULRV R ]RQDV HVSHFtĂ€FRV GH GRQGH SURYLHQHQ KDELWXDOmente estos jĂłvenes? ‡ ¢4Xp SURJUDPDV GH DFRJLGD H[LVWHQ SDUD DFRPSDxDUORV" ¢&XiOHV son los resultados? ‡ ¢'H TXp SURJUDPDV VH GLVSRQH SDUD DFRPSDxDU D ODV IDPLOLDV" ‡ 6L VRQ SDVDGRV D OD MXVWLFLD ¢KD\ MXHFHV SUHSDUDGRV SDUD WUDWDU HVWRV casos? ÂżExisten sistemas de penas alternativas? ÂżHan funcionado? s JĂłvenes consumidores habituales de drogas

Preguntas por formular: ‡ ¢4Xp HQIRTXH VH DGRSWD IUHQWH D HVWDV FRQGXFWDV GH ULHVJR" ¢6RQ consideradas como problema de salud o de orden pĂşblico? ‡ ¢4Xp WLSR GH GURJDV VRQ XVDGDV" ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV OXJDUHV \ PRGDOLGDGHV GH GLVWULEXFLyQ R YHQWD" ‡ ¢4Xp VLJQLĂ€FDGR WLHQH HO FRQVXPR GH GURJDV SDUD MyYHQHV GH diversas edades o sectores sociales? ‡ ¢4Xp SURJUDPDV GH WUDWDPLHQWR \ UHKDELOLWDFLyQ H[LVWHQ" ¢4Xp grupos o asociaciones de autocuidado existen? ‡ ¢4Xp D\XGD VH RIUHFH D ODV IDPLOLDV TXH TXLHUHQ DVXPLU HVWRV problemas? ÂżCuĂĄl es su accesibilidad para los diversos sectores sociales? ‡ (Q ODV HVFXHODV FHQWURV GH DWHQFLyQ EDUULRV HWF ¢H[LVWHQ SURyectos o programas orientados a desarrollar habilidades de autocuidado entre jĂłvenes consumidores habituales? ‡ ¢/DV LQVWLWXFLRQHV GH D\XGD S~EOLFDV SULYDGDV 21* KDQ DQDlizado sus resultados y confrontado sus metodologĂ­as? ‡ 3DUD ORV FDVRV GH OLJD]yQ HQWUH FRQVXPR GH GURJDV \ GHOLQFXHQcia, Âżexisten formas de tratamiento como, por ejemplo, cortes de drogas? s Pandillas juveniles violentas

JĂłvenes que viven en barrios crĂ­ticos de la ciudad de MedellĂ­n, Colombia, participan en grupos culturales insertos en su comunidad.

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Las pandillas son formas de organizaciĂłn juvenil, por lo general de adolescentes, que tĂ­picamente complementan o sustituyen, a menudo con tensiĂłn, la socializaciĂłn escolar, familiar o barrial a travĂŠs


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

del grupo de pares. El problema no radica en la pandilla sino en el modo de ser pandillero. La gama de pandillas va desde los grupos juveniles relativamente SDFtĂ€FRV FX\RV PLHPEURV QR VRQ QL YLROHQWRV QL FRPHWHQ DFWRV VHULRV HQ FRQĂ LFWR FRQ OD OH\ QR REVWDQWH SRVLEOHV FDVRV DLVODGRV pasando por las barras bravas que actĂşan a veces violentamente alrededor del fĂştbol, por las pandillas violentas que tienen parte de sus miembros en la delincuencia, hasta las maras y pandillas que se asemejan a formas de criminalidad organizada. Preguntas por formular: ‡ ¢'H TXp WLSR GH SDQGLOODV VH WUDWD" ¢&XiO KD VLGR VX GHVDUUROOR en los Ăşltimos aĂąos? ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV FRPSRUWDPLHQWRV GH VXV PLHPEURV TXH SRQHQ en riesgo su propio desarrollo psicosocial? ‡ ¢&yPR VRQ YLVWDV HQ ORV EDUULRV GH RULJHQ ODV SDQGLOODV YLROHQtas? ÂżCuĂĄles son las complicidades tĂĄcitas existentes? ‡ ¢([LVWHQ HVWUDWHJLDV SUHYHQWLYDV D QLYHO QDFLRQDO R ORFDO GH DERUdaje de las pandillas? ÂżSobre quĂŠ bases se apoyan estas estrategias? ÂżCĂłmo han resultado? ‡ ¢3DUWLFLSDQ ORV MyYHQHV HQ OD IRUPXODFLyQ GH HVWDV HVWUDWHJLDV" ‡ ¢+D\ SDUHV MXYHQLOHV R PRQLWRUHV HVSHFLDOL]DGRV SDUD WUDWDU HVWDV asociaciones? ‡ ¢([LVWHQ UHFXUVRV KXPDQRV \ Ă€QDQFLHURV SDUD WUDWDU HVWRV SURblemas? 2.7.2.4. Barrios crĂ­ticos

Se distinguen tres tipos bĂĄsicos de barrios crĂ­ticos desde el punto de vista de la seguridad: aquellos caracterizados por la presencia de una tasa de delincuencia muy alta; aquellos, generalmente estigmatizados, de donde provienen muchos delincuentes, y aquellos FRQWURODGRV SDUFLDO R WRWDOPHQWH SRU ORV QDUFRWUDĂ€FDQWHV

COLABORACIĂ“N ENTRE INSTITUCIONES EN CHILE En Chile, cuando un menor de edad ha sido arrestado, el “Programa 24 horas de Carabinerosâ€? se encarga de entregar sus datos al municipio al cual pertenece el joven, con la obligaciĂłn para el municipio de insertar a este joven en un programa de prevenciĂłn.

crĂ­tico), las manifestaciones internas de delincuencia y de temor, los fenĂłmenos de reproducciĂłn de la delincuencia, el nivel de desorganizaciĂłn social del barrio, las redes de capital social perverso, los elementos estratĂŠgicos que permitirĂ­an revertir la tendencia. 2.7.2.5. Las respuestas del sistema de justicia criminal a la delincuencia

a) /D SROLFtD juega un papel fundamental no sĂłlo en el control o represiĂłn, sino tambiĂŠn en la prevenciĂłn. El marco institucional en el cual se mueve varĂ­a de paĂ­s a paĂ­s y a veces entre ciudades del mismo paĂ­s. Existen policĂ­as dependientes del gobierno central SRU HMHPSOR HQ &KLOH UHJLRQDO %UDVLO \ PXQLFLSDOHV R EDMR OD DXWRULGDG GH OD FLXGDG %RJRWi $ YHFHV H[LVWH XQD FRPELQDFLyQ GH HVWDV IyUPXODV FRPR HQ DOJXQDV FLXGDGHV GH %UDVLO /D IyUPXOD GH policĂ­a centralizada limita a veces la colaboraciĂłn con las alcaldĂ­as. El aspecto institucional es clave: ‡ ¢&XiO HV OD UHODFLyQ KDELWXDO HQWUH SROLFtDV \ PXQLFLSDOLGDG \ ODV formas de colaboraciĂłn? ÂżCĂłmo mejorarla? ‡ ¢/D GRWDFLyQ SROLFLDO HV VXĂ€FLHQWH HQ OD FRPXQD \ VX GLVWULEXFLyQ JHRJUiĂ€FD HTXLWDWLYD" ‡ 6L KD\ YDULDV SROLFtDV SRU HMHPSOR SROLFtD PLOLWDU IHGHUDO \ JXDUGLD PXQLFLSDO FRPR HQ %UDVLO ¢FXiO HV VX JUDGR GH FRRUdinaciĂłn en el trabajo en la comuna? ‡ ¢&XiO HV OD FRRUGLQDFLyQ FRQ HO VHFWRU SULYDGR GH VHJXULGDG" Otro aspecto esencial concierne a los enfoques preventivos: ‡ ¢([LVWHQ IRUPDV GH SROLFtDV FRPXQLWDULDV GH UHVROXFLyQ GH SURblemas o de proximidad estratĂŠgica o bien se trata de una policĂ­a solamente reactiva? ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV UHVXOWDGRV GH HVWRV HQIRTXHV \ VX QLYHO GH LPplementaciĂłn en la comuna? ‡ ¢/DV IRUPDV GH SDWUXOODMH VRQ DGHFXDGDV" ¢$FRUGDGDV FRQ OD poblaciĂłn? ‡ ¢([LVWHQ IRUPDV GH UHQGLFLyQ GH FXHQWDV ´DFFRXQWDELOLW\Âľ SRlicial a la poblaciĂłn? ÂżCon quĂŠ criterios?

Para un primer diagnĂłstico se requiere saber, a partir de datos existentes: ‡ ¢4Xp WDQ FUtWLFD HV OD VLWXDFLyQ HQ HO EDUULR QLYHO R JUDGR \ SRU quĂŠ? ‡ ¢4Xp HVWUDWHJLD GH UHVSXHVWD H[LVWH \ FXiO HV VX LPSDFWR" ‡ ¢&XiO HV HO JUDGR GH HVWLJPDWL]DFLyQ GHO EDUULR HQ OD FLXGDG" ‡ /D FRPSRVLFLyQ VRFLDO JHQHUDO GHO EDUULR HQ WpUPLQRV GH HVWUXFWXUD GHPRJUiĂ€FD IDPLOLDU SRUFHQWDMH GH IDPLOLDV PRQRSDUHQWDles, familias compuestas, etc.). ‡ ¢&XiO HV HO PHUFDGR GHOLFWXDO GH ORV DXWRUHV GH GHOLWRV" ‡ ¢&yPR HV OD FDOLGDG GH ODV YLYLHQGDV GHO HQWRUQR \ GH ORV VHUYLcios? Un barrio crĂ­tico, por ejemplo dominado por los narcotraĂ€FDQWHV QR HV QHFHVDULDPHQWH XQ EDUULR SREUH

Si existen formas de organizaciĂłn policial territorializada: ‡ ¢&yPR VH SXHGH D QLYHO PXQLFLSDO DGHFXDU WHUULWRULRV GH DFciĂłn policial y territorios de acciĂłn preventiva de los programas municipales?

6L VH UHDOL]D XQ HVWXGLR HVSHFtÀFR FRPSOHPHQWDULR pVWH WHQGUi TXH HVSHFLÀFDU HO KLVWRULDO GHO EDUULR FyPR VH WUDQVIRUPy HQ XQ EDUULR

La relaciĂłn con la poblaciĂłn tambiĂŠn es central: ‡ ¢4Xp SHUFHSFLyQ WLHQH OD SREODFLyQ GH OD SROLFtD" ¢3ROLFtD HĂ€-

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

FD]" ¢3ROLFtD LQHĂ€FLHQWH" ¢3ROLFtD FRUUXSWD" ¢3ROLFtDV UHVSHWXRVRV R QR GH ORV GHUHFKRV KXPDQRV" ¢3ROLFtD FRQĂ€DEOH HQ FDVR de denuncias? ÂżPolicĂ­a discriminante? ‡ ÂżQuĂŠ relaciĂłn o articulaciĂłn tienen las policĂ­as con las organizaciones territoriales o sociales o de juventud de la comuna? ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV WLHPSRV SURPHGLR GH UHVSXHVWDV GH OD SROLFtD D llamadas de emergencia en la comuna? b) /D MXVWLFLD es a menudo criticada por su lejanĂ­a de la poblaciĂłn, VX LQDFFHVLELOLGDG VX OHQWLWXG VX FDUiFWHU GH FODVH VX LQHĂ€FLHQcia y prĂĄcticas obsoletas. Sin embargo, se han implementado reformas judiciales y han surgido formas de justicia alternativa (mediaciĂłn, justicia restaurativa, penas alternativas, cortes de drogas, justicia de proximidad, etc.). Las preguntas relevantes en esta materia son: ‡ ¢([LVWHQ IRUPDV GH MXVWLFLD GH SUR[LPLGDG" ¢&yPR IXQFLRQDQ" ¢6RQ DFFHVLEOHV" ¢6RQ HĂ€FLHQWHV" ¢(YLWDQ OD UHLQFLGHQFLD" ¢6RQ VXĂ€FLHQWHV" ‡ 6L H[LVWHQ SHQDV DOWHUQDWLYDV ¢HVWiQ VXĂ€FLHQWHPHQWH DSR\DGDV por las instituciones y la poblaciĂłn? ‡ (Q OR TXH VH UHĂ€HUH D OD UHLQVHUFLyQ GH H[ FRQYLFWRV ¢H[LVWHQ HVtructuras de vigilancia efectiva y de apoyo que tengan respaldo LQVWLWXFLRQDO SREODFLRQDO HPSUHVDULDO \ UHFXUVRV VXĂ€FLHQWHV" 2.7.2.6. TrĂĄďŹ co y consumo de drogas

(O WUiÀFR \ FRQVXPR GH GURJDV OtFLWDV DOFRKRO H LOtFLWDV FRQVWLWXyen problemas muy extendidos en la región. Las estadísticas muestran que los niveles de consumo llegan, para el canabis y la cocaína, a porcentajes de consumo superiores a aquellos de otras regiones (ONUDD, 2008). Ademås, como se seùaló en el primer capítulo, la región es la principal productora mundial de cocaína.

Los niveles de pobreza y la presencia de una oferta concentrada en QDUFRWUDĂ€FDQWHV QDFLRQDOHV TXH XVDQGR OD IXHU]D WLHQGHQ D FRQtrolar los mercados y los espacios de venta, agravan el problema haciendo que segmentos de la poblaciĂłn de bajos recursos sean extremamente vulnerables. En efecto, ellos corren un gran riesgo de involucrarse en el consumo, en el comercio de la droga y en la YLROHQFLD TXH YD DVRFLDGD D DPERV IHQyPHQRV (O WUiĂ€FR GH ODV sustancias ilĂ­citas se presenta hoy como una alternativa al mercado de trabajo para jĂłvenes y familias enteras que estĂĄn luchando para sobrevivir. Las preguntas para responder se relacionan, por una parte, con la existencia de una polĂ­tica de prevenciĂłn dirigida a los consumidoUHV GH GURJD \ SRU RWUD FRQ OD SUHVHQFLD GH WUiĂ€FR GH GURJDV ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV WLSRV GH FRQVXPR KDELWXDOHV" ¢&XiO KD VLGR VX evoluciĂłn? ÂżEn quĂŠ sectores sociales? ‡ ¢&yPR VH GD HO DEDVWHFLPLHQWR" ¢([LVWHQ EDUULRV ´HVSHFLDOL]Ddosâ€? en la venta? ÂżCĂłmo se da, si la hay, la presencia del narFRWUiĂ€FR FRPHUFLR IDPLOLDU" ¢4Xp DUWLFXODFLyQ WLHQH FRQ ORV jĂłvenes del barrio? ÂżCuĂĄles son los circuitos de venta (lugares, modalidades, actores)? ‡ ¢([LVWH XQD SROtWLFD GH DUWLFXODFLyQ HQWUH SROLFtD \ FHQWUR GH rehabilitaciĂłn o de prevenciĂłn? Si hay centros de prevenciĂłn o rehabilitaciĂłn: ‡ ¢([LVWH HQWUH HOORV XQ LQWHUFDPELR GH PpWRGRV \ UHVXOWDGRV" ‡ ¢&XiO HV OD UHODFLyQ HQWUH GURJD \ GHOLWRV YLROHQWRV HQ OD FRPXQD" ¢&XiOHV VRQ ORV HVSDFLRV FRQTXLVWDGRV SRU ORV WUDĂ€FDQWHV D travĂŠs de la violencia? ÂżQuĂŠ impacto negativo tienen sobre el uso colectivo de los espacios pĂşblicos? (ver foto). El abuso de alcohol constituye otro problema, a menudo mĂĄs directamente relacionado con la delincuencia violenta. En efecto, el alcohol genera comportamientos agresivos y riĂąas que suelen desembocar en lesiones, muertes o violencia intrafamiliar. /DV SUHJXQWDV EiVLFDV VH UHĂ€HUHQ DO LPSDFWR GHO DEXVR GH DOFRKRO en los comportamientos violentos y en los accidentes de trĂĄnsito. TambiĂŠn al conocimiento de los lugares de distribuciĂłn, el carĂĄcter legal de la actividad y la efectividad de las medidas de control en

Š Alejandro Sanhueza R.

EL CASO DE DIADEMA, BRASIL

Los zapatos colgados pertenecen a las victimas de un grupo de traďŹ cantes de droga que controla el espacio publico con grafďŹ tis signiďŹ cativos y con asaltos a transeuntes. Santiago Chile, zona sur.

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Un diagnĂłstico realizado en la comuna de Diadema (periferia de Sao Paulo) y la discusiĂłn en un foro abierto mostraron el impacto del alcohol y llevaron a la municipalidad a imponer progresivamente la “ley secaâ€? despuĂŠs de las 23:00 horas en los bares de la comuna. Esta medida, lograda a travĂŠs de un aĂąo de discusiones, esfuerzos y generaciĂłn de un clima de conďŹ anza, se logrĂł en 2003. Tuvo un efecto decisivo sobre la tasa de homicidios, que bajĂł en 47% en pocos meses sin que se veriďŹ cara un desplazamiento del consumo hacia otros lugares. (Manso, Faria, Gall, 2005).


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

2.7.2.7. Las distintas formas de violencias intrafamiliares (VIF)

ESCUELA QUE PROTEGE RECIFE, BRASIL El Programa Escuela que Protege atiende a niùos, niùas y adolescentes de la Región Político Administrativa (RPA) 6 de Recife, una de las zonas mås vulnerables y deprivadas de la ciudad. Los sujetos de intervención forman parte de la red de enseùanza municipal y son víctimas de violencia física, sexual y psicológica, son atendidos junto a sus familias, con el objeto de romper el ciclo de violencia y posibilitar una mejor calidad de vida actual y futura de las personas. Éste es un ejemplo destacable de la prevención en violencia escolar y violencia domÊstica por parte de las redes municipales (Salud y Educación).

Š Escuela que protege

La violencia en las personas tiene diversas caras, la mĂĄs frecuente y mĂĄs oculta es la violencia domĂŠstica o Violencia Intrafamiliar (VIF). Las VIF constituyen un problema central en la reproducciĂłn de la violencia en general. En efecto, no sĂłlo impide el desarrollo de las mujeres, que son las principales vĂ­ctimas, sino tambiĂŠn de los niĂąos, sean vĂ­ctimas o testigos, porque genera en ellos la idea de que la violencia constituye la forma normal de UHVROXFLyQ GH FRQĂ LFWRV /DV 9,) SXHGHQ VHU ItVLFDV SVLFROyJLFDV o econĂłmicas, pero como se dan en el ĂĄmbito privado, son muy difĂ­ciles de detectar sin denuncia o sin que se hagan pĂşblicas por SDUWH GH TXLHQHV ODV VXIUHQ (Q HOOR UHVLGH OD SULQFLSDO GLĂ€FXOWDG GH la prevenciĂłn.

Un primer nivel de trabajo del Programa es con los colegios de la red educacional, sensibilizando y capacitando a los profesores para que elaboren estrategias preventivas de la violencia y pesquisen casos de abuso para derivarlos a travÊs del programa. Una vez que un niùo víctima de violencia es detectado, es atendido junto a su familia por un equipo de psicólogos y especialistas. A su vez, en los colegios se desarrollan programas de sensibilización de la temåtica a los padres, a travÊs de la Escuela para Padres. En estas instancias, los padres reciben orientación y son invitados a reexionar para que cambien sus conductas y asuman su rol de proveedores, protectores y cuidadores de los niùos, niùas y adolescentes. El programa comenzó el aùo 2005 a travÊs de un proyecto piloto, con sede en la Red de Salud del RPA 6. Ese aùo se atendió a 204 niùos, niùas y jóvenes, trabajando en 64 escuelas, capacitando a 572 educadores y atendiendo a 120 padres (observación directa).

FRODERUDFLyQ FRQ OD SROLFtD $GHPiV HV LPSRUWDQWH YHULĂ€FDU VL OD poblaciĂłn estĂĄ consciente del problema. Medidas de prevenciĂłn pueden ser tomadas solo -como en Diadema- cuando la gente las aprueba, con frecuencia despuĂŠs de una etapa de debate. Relacionada con el consumo del alcohol se encuentra la prĂĄctica de consumo en espacios pĂşblicos. Grupos de personas se juntan regularmente en lugares abandonados o desordenados para beber. AdemĂĄs de crear una sensaciĂłn de mayor desorden, esta prĂĄctica incentiva el alcoholismo entre individuos que han abandonado (o han sido forzados a abandonar) el hogar. Sus efectos son los mismos que la venta de alcohol sin control en los bares.

Las VIF han sido tambiĂŠn legitimadas por la costumbre. En la actualidad hay cambios en la regiĂłn, por lo menos en el plano cultural y en parte en el plano jurĂ­dico, aunque estĂĄn solamente empezando a materializarse. Una municipalidad puede apoyar el cambio cultural, favorecer la denuncia, formar agentes portadores de habilidades \ FXDQGR ODV SUiFWLFDV GH 9,) VRQ PDQLĂ€HVWDV SUHYHQLUODV PHGLDQWH la protecciĂłn de las vĂ­ctimas. Como se seĂąalĂł, el problema involucra a los niĂąos. El maltrato infantil y el abuso sexual al interior del hogar son frecuentes. Una situaciĂłn a menudo invisibilizada es la violencia contra las personas discapacitadas o aquella contra las personas de la tercera edad, que ocurren en la familia misma. Las preguntas esenciales son: ‡ ¢([LVWHQ SURJUDPDV R SUR\HFWRV ORFDOHV GLULJLGRV D OD UHGXFciĂłn de las VIF? ÂżCĂłmo han funcionado? ÂżSon sustentables? ¢(VWiQ GLULJLGRV D WRGD OD SREODFLyQ LQWHUHVDGD" ¢4Xp UHĂ HMDQ las estadĂ­sticas de lesiones en los consultorios de salud y hospitales del municipio? ‡ ¢+D\ FRRUGLQDFLyQ HQWUH LQVWLWXFLRQHV GH DSR\R HQ OD PDWHULD (ONG, plan de gobierno, de la municipalidad)? ‡ ¢6H GLVSRQH HQ OD FRPXQD GH LQVWLWXFLRQHV FDSDFHV GH FUHDU habilidades (monitoras de VIF, por ejemplo) en los barrios? En el municipio, las vĂ­ctimas que denuncian: ‡ ¢&yPR VRQ DWHQGLGDV SRU OD SROLFtD \ SRU ORV FHQWURV GH SURWHFciĂłn? ‡ ¢([LVWHQ RUJDQL]DFLRQHV GH KRPEUHV UHVSDOGDQGR OD UHGXFFLyQ de las VIF? ‡ ¢([LVWHQ FHQWURV GH SURWHFFLyQ GH OD PXMHU YtFWLPD HQ OD FRPXna? ‡ ¢(Q ORV GLYHUVRV GHSDUWDPHQWRV GHO PXQLFLSLR KD\ FRQFLHQFLD de este problema y en general de la discriminaciĂłn hacia las mujeres?

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VIOLENCIA ESCOLAR EN CHILE En Chile una encuesta nacional sobre violencia escolar mostrĂł en 2006 que dos tercios de los alumnos de los 6 Ăşltimos aĂąos de escolaridad, justiďŹ can la violencia escolar como forma de defensa, para “no ser pasado a llevarâ€?. Estos porcentajes alcanzan el 80% en las escuelas de sectores mĂĄs modestos y 49% en los segmentos de mĂĄs altos ingresos. Alrededor de 30% del alumnado es vĂ­ctima de robo cada aĂąo en la escuela y 62% reconoce que la violencia se da principalmente en la sala de clase (Universidad A. Hurtado, 2006).

son directamente responsables de los centros educacionales, lo que ocurre con muchos municipios de la regiĂłn. Contrariamente a lo que se piensa, una gran parte de los alumnos violentos son tambiĂŠn vĂ­ctimas de la violencia. Si el problema ha aumentado en la mayorĂ­a de los paĂ­ses, se debe al hecho de que la escuela no puede asegurar, como en el pasado, una movilidad social, sobre todo cuando la cobertura escolar se generaliza. Por RWUD SDUWH LQĂ X\H HO TXH HQ HVWH FRQWH[WR ODV HVFXHODV VREUH WRGR las de menor calidad- son percibidas como “instituciones totalesâ€? (Goffman, E. 1970) que estresan y generan fuertes reacciones de los alumnos.

‡ ¢([LVWHQ LQVWLWXFLRQHV FDSDFHV GH WUDWDU ORV SUREOHPDV GH PDOtrato infantil? ÂżCĂłmo evalĂşan su funcionamiento? ‡ ¢([LVWHQ LQVWLWXFLRQHV FDSDFHV GH WUDWDU ORV SUREOHPDV GH YLRlencia contra las personas de la tercera edad? ÂżQuĂŠ resultados obtienen?

Entre otros efectos, la violencia escolar se reproduce como meFDQLVPR GH UHVROXFLyQ GH FRQĂ LFWRV EDMD ORV QLYHOHV GH FDOLGDG de las buenas escuelas y empeora las de menor calidad. En este sentido, si bien afecta todos los medios sociales, puede acentuar la desigualdad.

2.7.2.8. Violencia escolar

Preguntas a formular: ‡ ¢([LVWH HQ ODV HVFXHODV FRPXQDOHV XQD SUHSDUDFLyQ GH ORV SURfesores para comprender y abordar la violencia escolar? ‡ ¢6H GLVSRQH GH XQ SURJUDPD R SUR\HFWRV GH LQWURGXFFLyQ GH PRGDOLGDGHV GH UHVROXFLyQ GH FRQĂ LFWRV FRPR OD PHGLDFLyQ escolar bien preparada?

La violencia escolar es relevante como factor de legitimaciĂłn y, por tanto, de reproducciĂłn de la violencia. En general se da predominantemente en la sala de clase y es a menudo legitimada por los propios alumnos. Se expresa en forma verbal, psicolĂłgica, fĂ­sica, delictual y como hostigamiento permanente. Esta Ăşltima manifestaciĂłn, conocida por la palabra en inglĂŠs “bullyingâ€?, parece la mĂĄs impactante y los medios de comunicaciĂłn la ponen en evidencia al punto de confundirla con violencia escolar. Sin embargo las otras formas -en particular la psicolĂłgica -pueden ser mĂĄs daĂąinas y sobre todo mĂĄs frecuentes. Reducir la violencia escolar es ante todo una tarea que concierne a los profesores, los padres, los barrios donde estĂĄ inserta la escuela, y los alumnos. El rol de los municipios es limitado, salvo cuando EJEMPLO DE ESTUDIO DEL TEMOR EN CHILE En el aĂąo 2005, la Universidad Alberto Hurtado realizĂł un estudio de los espacios que constituyen fuentes de temor en un municipio del sur de Santiago de Chile, en el marco de un curso sobre seguridad. Profesores y estudiantes, en colaboraciĂłn con el encargada de seguridad de la comuna y con el apoyo gubernamental, analizaron este tema durante un dĂ­a junto a 40 dirigentes de consejos de seguridad de la comuna. Se logrĂł, con mapas digitalizados, identiďŹ car los lugares de mayor temor. A travĂŠs de encuestas a los dirigentes, divididos en grupos, se consiguiĂł determinar que se temĂ­a, sobre todo, por la generaciĂłn siguiente, mĂĄs que por la propia victimizaciĂłn. La inquietud se expresaba en “quĂŠ va a pasar con nuestros hijos si la droga ha llegado en mi barrioâ€?, o “quĂŠ va a suceder con nuestras hijas si la prostituciĂłn de menores ha logrado instalarse en la comunaâ€?. Se vio con los dirigentes cĂłmo hacer para que los consejos de seguridad se hicieran cargo de estos temas (observaciĂłn directa, 2005).

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2.7.2.9. Los temores de la poblaciĂłn

El temor es un componente inevitable de la lucha contra la criminalidad. Dada su importancia, algunos actores lo confunden con la victimizaciĂłn y miden los resultados de ĂŠsta a travĂŠs de aquĂŠl. Pero el temor es un fenĂłmeno social; en consecuencia, tiene una transformaciĂłn lenta, que sigue una lĂłgica diversa a la de la victimizaciĂłn. En algunos casos se observa que las personas pueden sentir alto temor, sin haber sido vĂ­ctimas de algĂşn suceso crimiQDO )XQGDPHQWDOPHQWH HO WHPRU VH UHODFLRQD FRQ OD FRQĂ€DQ]D GH un ciudadano en las instituciones para resolver la criminalidad, no FRQ VX FRPSHWHQFLD HIHFWLYD 6LHPSUH VH YHULĂ€FD XQ GHVIDVH HQ HO tiempo entre los cambios en el temor y las variaciones en la victiPL]DFLyQ (O FDVR HPEOHPiWLFR GH %RJRWi PRVWUy TXH ORV PHGLRV de comunicaciĂłn demoraron ocho aĂąos antes de reconocer que la situaciĂłn habĂ­a evolucionado. Solo despuĂŠs de ese lapso se eviGHQFLy XQD FRQĂ€DQ]D UHDO HQ ODV LQVWLWXFLRQHV PXQLFLSDOHV Por otra parte los tipos de temores varĂ­an segĂşn los segmentos VRFLDOHV (V GHFLU TXH PHGLU HO WHPRU HV LGHQWLĂ€FDU IHQyPHQRV distintos, y diferentes objetos del temor. Hay un punto comĂşn: OD GHVFRQĂ€DQ]D HQ ODV LQVWLWXFLRQHV SHUR HO REMHWR TXH OD GHVencadena es diverso. TambiĂŠn ocurre que los niveles de temor suelen ser mĂĄs elevados en sectores sociales de menores ingresos econĂłmicos.


Š Santiago Amable.

CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

Estudiantes de establecimientos educacionales de las cercanĂ­as de Avenida Matucana, Santiago de Chile, hacen un mosaico junto a conocidos artistas para recuperar una zona deteriorada. Unos aĂąos despuĂŠs, los que participaron en su confecciĂłn, reunieron ďŹ rmas y limpiaron el mosaico para que no fuera demolido.

En las clases altas se teme ser vĂ­ctima de asaltos, robos o secuestros. Los personajes que simbolizan estos riesgos son las “clases SHOLJURVDVÂľ LGHQWLĂ€FDGDV KDELWXDOPHQWH HQ OD UHJLyQ ODWLQRDPHULcana con la poblaciĂłn marginal de las ciudades (favelas, villas miserias, etc.). Se aĂąade el riesgo de ver su barrio, sĂ­mbolo de estatus y riqueza, desvalorizado si los delitos aumentan en ĂŠl. Riesgo y proximidad de poblaciones marginales acrecientan el miedo de los sectores de altos ingresos.

2.7.2.10. Los delitos de cuello blanco

En los sectores populares, mås que a ser víctimas, a menudo se WHPH OR TXH SRGUtD SDVDU D ORV KLMRV GDGD OD SUHVHQFLD GHO WUiÀFR GH drogas y de la prostitución que involucra a menores. El trasfondo cultural es la percepción de que las instituciones son impotentes frente a estos riesgos y no pueden proteger a la población.

Mercados de objetos reducidos que provienen del robo son a veces “toleradosâ€? por las autoridades locales y policiales: lugares de venta de especies robadas y de venta ilegal de mercaderĂ­as.

$ OD GHVFRQÀDQ]D FRP~Q D WRGDV ODV FODVHV VH VXPD OD IDOWD GH responsabilización individual o colectiva en la lucha contra la criminalidad. No se tiene fe en las capacidades de la sociedad civil frente a la delincuencia. Por consiguiente, la acción contra el temor, que es de largo plazo, debe asumir la doble tarea de construir XQD FRQÀDQ]D HQ ODV LQVWLWXFLRQHV \ ORJUDU OD UHVSRQVDELOL]DFLyQ GH la propia gente. Quien estå involucrado en acciones que lo responVDELOL]DQ DGTXLHUH FRQÀDQ]D HQ VX SURSLD IXHU]D Investigar el temor puede tomar dos caminos complementarios: ‡ ,GHQWLÀFDU ORV GLYHUVRV WHPRUHV SRU VHFWRUHV VRFLDOHV OR TXH requiere, si son múltiples, mÊtodos como los grupos focales o encuestas en profundidad con actores representativos. ‡ ,GHQWLÀFDU ORV HVSDFLRV OXJDUHV GH PD\RUHV DVDOWRV ]RQDV SHOLgrosas, etc.) y comportamientos (venta callejera de drogas, tiroteo) que generan mayor temor.

Tanto en el ĂĄmbito privado como pĂşblico, inclusive en los departamentos municipales, existen prĂĄcticas que son formas de corrupciĂłn o de complicidad con la criminalidad. Entre otras, HO RWRUJDPLHQWR GH FHUWLĂ€FDGRV IDOVRV R GH SDWHQWHV LOHJDOHV comprado para locales de venta de alcohol, construir sala de juegos prohibidos, etc.

A estos delitos o complicidad se suman los de fraude, malversaFLyQ GH IRQGRV DEXVRV GH FRQĂ€DQ]D HQJDxRV H[SORWDFLyQ TXH practican algunos empresarios o comerciantes, no siempre sin la complicidad de administradores pĂşblicos. Otros comportamientos que constituyen faltas serias contra el municipio mismo son los vertederos ilegales -que ensucian el entorno y generan la imagen de deterioro fĂ­sico-social- y los “negociosâ€? relacionados a la ocupaciĂłn ilegal de terrenos. La corrupciĂłn policial es la que mĂĄs afecta la lucha contra la criminalidad. En algunas ciudades alcanza niveles que hacen perder toda credibilidad a las instituciones. Los habitantes estĂĄn al corriente de las prĂĄcticas descritas, y en algunos casos las legitiman. Pero se trata de comportamientos invalidantes de cualquier acciĂłn contra la criminalidad.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Las fuentes de informaciĂłn para evaluar el nivel de tales conductas son generalmente la policĂ­a -si no es corrupta-, los funcionarios municipales, los propios habitantes, las cĂĄmaras de comercio e industria o la cĂĄmara de construcciĂłn.

2.7.2.12. Intersectorialidad del trabajo municipal y coherencia polĂ­tica

En materia de seguridad, la intersectorialidad es fundamental porque responde a un problema multicausal. De ahĂ­ la importancia de la coordinaciĂłn entre servicios municipales. Por ejemplo, el departamento, secretarĂ­a o unidad de la alcaldĂ­a que trabaja la prevenciĂłn del consumo de drogas ilĂ­citas y alcohol debe poder coordinarse con aquellos de salud y de educaciĂłn.

Las preguntas por hacerse: ‡ ¢([LVWHQ SUiFWLFDV LGHQWLĂ€FDGDV SRU OD SREODFLyQ FRPR FRUUXSciĂłn o delitos de cuello blanco en el territorio? ‡ ¢4Xp PHFDQLVPRV KD\ SDUD FRPEDWLU HVWDV SUiFWLFDV" ‡ ¢&yPR LQYROXFUDU D OD SREODFLyQ HQ OD OXFKD FRQWUD HVWDV SUiFWLFDV SDUD GDUOHV VXVWHQWDELOLGDG" ¢FXiO HV HO QLYHO GH FRQĂ€DQ]D La polĂ­tica de prevenciĂłn requiere un enfoque compartido y coy de credibilidad de las instituciones pĂşblicas locales? herente con las demĂĄs polĂ­ticas sociales. Por poner un caso, si la polĂ­tica general dirigida a la juventud prescinde totalmente de su participaciĂłn, serĂĄ difĂ­cil insertar modalidades que los integren acti2.7.2.11. El trĂĄďŹ co de personas vamente a la prevenciĂłn de delincuencia juvenil. (Q ODV ~OWLPDV GpFDGDV HO WUiĂ€FR GH SHUVRQDV KD DXPHQWDGR WDQWR a travĂŠs de las formas de promociĂłn de inmigraciones ilegales con Las preguntas a formular: Ă€QHV GH H[SORWDFLyQ HQ HO WUDEDMR VH[XDO FRPR GH XWLOL]DFLyQ GH ‡ ¢&XiOHV VRQ ORV GHSDUWDPHQWRV VHFUHWDUtDV R XQLGDGHV PXQLFLSDles involucrados en las diversas polĂ­ticas de prevenciĂłn y seguriniĂąos en el trabajo. En particular, un conocimiento de las redes de dad? ÂżCuĂĄl es el rol de cada uno? ÂżCuĂĄles son los obstĂĄculos a la prostituciĂłn organizada sobre el territorio, si existe, es importante. LQWHUVHFWRULDOLGDG" ¢4Xp HVWUXFWXUD R FRPSRUWDPLHQWRV PRGLĂ€car? ÂżCĂłmo hacerlo? 6H GDQ LJXDOPHQWH RWURV WLSRV GH WUiĂ€FR GH SHUVRQDV (V HO FDVR de la obligaciĂłn impuesta a niĂąos de pedir limosna en la calle e ‡ ¢&XiO HV HO JUDGR GH FRKHUHQFLD HQWUH OD SROtWLFD GH SUHYHQFLyQ \ aquella de polĂ­tica social dirigida a cada segmento social (juveninclusive el “prĂŠstamoâ€? de menores para facilitar la mendicidad catud, mujeres, niĂąos, etc.)? ÂżCĂłmo mejorar esta coherencia? ÂżQuĂŠ llejera de mujeres. Es el caso, asĂ­ mismo, de la incorporaciĂłn de recursos se destinan y cuĂĄles son las competencias tĂŠcnicas y los QLxRV R DGROHVFHQWHV FRPR ´VROGDGRVÂľ GH ORV QDUFRWUDĂ€FDQWHV 6H medios requeridos? les otorgan armas y remesas, pero con la amenaza de muerte en FDVR GH DEDQGRQR GH VXV ´WDUHDVÂľ YHU HO SXQWR VREUH WUiĂ€FR de drogas). 2.8. PASO 4: ANĂ LISIS, INFORME Y VALIDACIĂ“N Las poblaciones mĂĄs vulnerables son los inmigrantes de otros paĂ­ses, en especial si son ilegales; los inmigrantes del interior que llegan a las grandes ciudades; los niĂąos provenientes de zonas de extrema pobreza. Por tal motivo, el conocimiento de los segmentos poblacionales provenientes de la migraciĂłn puede ser de gran utilidad.

2.8.1. El anĂĄlisis ďŹ nal y el informe

A partir de los datos reunidos, analizados y ordenados en una perspectiva que focaliza factores de riesgo y factores de protecciĂłn, se abordan los temas que fueron juzgados esenciales para el municipio FXDQGR VH GHĂ€QLy HO DOFDQFH WHPiWLFR GHO GLDJQyVWLFR 3DUD FDGD PDteria se efectĂşa un resumen de la situaciĂłn, se describe el impacto Las preguntas a formular: ‡ ¢6H FRQRFH OD VLWXDFLyQ GH OD SREODFLyQ SURYHQLHQWH GH RWURV que los delitos o las conductas de riesgo pueden tener y se evidencia los factores de riesgo y de protecciĂłn. paĂ­ses? ‡ ¢+D\ SUiFWLFDV GH DEXVR FRQ HVWRV LQPLJUDQWHV" En el caso de los inmigrantes, sobre todo mujeres, provenien- A partir de la discusiĂłn de los resultados con los actores relevantes, se tes de otras zonas del paĂ­s, Âżhay prĂĄcticas de incitaciĂłn a la sugiere orientaciones por concretar cuando se elabore la estrategia. prostituciĂłn? ‡ ¢&yPR HVWi RUJDQL]DGD OD UHG GH SURVWLWXFLyQ HQ OD FRPXQD" Este anĂĄlisis se traduce en un informe, que debe ser claro y pedaÂżCĂłmo se involucra a las menores en este “negocioâ€?? gĂłgico, porque va dirigido a los agentes de prevenciĂłn y a toda la ‡ (Q ODV GLYHUVDV DFWLYLGDGHV GH FDOOH OLPRVQD YHQWD FDOOHMHUD poblaciĂłn. malabaristas, lustrador de zapatos, etc.), Âżquienes involucran a ORV QLxRV" ¢D GyQGH YDQ ORV EHQHĂ€FLRV ORJUDGRV" Se sugiere en el informe: ‡ ¢4Xp FDSDFLGDG WLHQH HO PXQLFLSLR SDUD FRQWURODU HVWRV IHQy- ‡ 6XEUD\DU ODV SULRULGDGHV HQ FDGD WHPD HV GHFLU HYLGHQFLDU HQ menos? cada problema analizado cuĂĄl es el aspecto mĂĄs relevante que se

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Capítulo 3: POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN: ETAPA 2. EL DIAGNÓSTICO

PROPUESTA DE UN ESQUEMA DE INFORME Este esquema no pretende ser exhaustivo porque en cada caso hay que introducir temas que son específicos para cada municipio. Tampoco pretende que todos los temas aquí presentados tengan que estar en el diagnóstico, la selección dependerá de los temas que se han identificado como relevantes en el territorio analizado. Tampoco pretende ser la única forma de presentar los resultados de un diagnóstico. Es simplemente una orientación que puede ser adaptable y modificable. 1.

Introducción: presentación de los equipos que contribuyeron al diagnóstico y del proceso y de la visión que sustenta este esfuerzo

2.

Breve presentación de datos generales: del entorno, demográficos, de empleo, de sectores sociales, de segregación y de espacios significativos que contextualizan la realidad y los problemas del municipio o de la ciudad

3.

Caracterización general de la delincuencia en el municipio: Tasa de denuncias, de homicidios, de principales manifestaciones de atentados a la propiedad, de otras formas de victimización y comparación con datos del país y de otros municipios similares; movimiento y desplazamiento de la delincuencia de un sector geográfico a otro o de una parte de la ciudad a otra

4.

Prioridades de los habitantes en materia de inseguridad, por sectores geográficos o sociales y orientaciones que derivan de la percepción de los habitantes. Medidas visualizadas como esenciales para satisfacer estas prioridades. Grado de consenso sobre estas medidas

5.

Los tipos de victimización y su prevención 5.1. Violencia contra las personas en el espacio público 5.1.1. Tipología, evolución, localización, tipo de víctimas (sectores sociales, geográficos, grupos de edad) 5.1.2. Programas de prevención y su evaluación, si existe, y percepción de su eficacia en la población 5.2. Los principales tipos y localización de los atentados a la propiedad 5.2.1. Tipología, evolución, localización, tipo de víctimas (sectores sociales, barrios, grupos de edad) 5.2.2. Percepción de la eficacia y rapidez de las intervenciones policiales 5.2.3. Programas y actores de la prevención y su evaluación, si existe, y percepción de su eficacia 5.3. Las violencias intrafamiliares 5.3.1. Tasa de denuncias y evolución 5.3.2. Programas de prevención, casas de acogida y evaluación 5.4. Las violencias escolares 5.4.1. Los establecimientos más afectados 5.4.2. Programas para enfrentar esta violencia y su evaluación

6. Barrios críticos 6.1. Caracterización y grado de estigmatización 6.2. Programas o proyectos vigentes para contrarrestar este fenómeno 7.

Delincuencia y conductas de riesgo juveniles 7.1. Extensión y tipos de delincuencia juvenil 7.2. Las conductas de riesgo

7.3. 7.4.

Los jóvenes en situación de riesgo: pandillas, desertores escolares, niños de la calle, jóvenes ligados al narcotráfico etc. Instituciones y programas de prevención y evaluación y/o percepción de su eficacia

8.

Problemas ligados al tráfico y consumo de drogas 8.1. Narcotráfico. Localización y tipo de manifestaciones. Grado de violencia ligado a este tráfico. Sistema de reproducción del tráfico. Evolución 8.2. Programas de control y prevención. Evaluación y percepción de su eficacia 8.3. Microtráfico, su extensión, características y eventual ligazón a la violencia. Modalidades de prevención y evaluación y percepción de su eficacia 8.4. Extensión del consumo de drogas (edad, barrios, género). Programas e instituciones de prevención, centros de rehabilitación y evaluación de su capacidad de acogida y resultados 8.5. Impacto del alcoholismo sobre la violencia en el municipio. Problemas de control y prevención. Localización de locales de distribución. Evaluación de prácticas o programas preventivos

9.

Los espacios públicos y el delito 9.1. “Hot spots”. Espacios deteriorados y peligrosos. Características. Prevención y control. Evaluación 9.2. Espacios de cohesión, su éxito y las razones del éxito

10. La reinserción de ex convictos Modalidades. Evaluación 11. Los delitos de cuello blanco Caracterización. Nivel de Corrupción. Percepción del nivel de impunidad. Indicaciones sobre medidas visualizadas como importantes por los habitantes 12. Presencia e imagen de la policía 12.1. Dotación policial. Demandas. Capacidad de respuesta. 12.2. Percepción de la eficiencia policial 12.3. Colaboración municipio – policía. Mejoramiento posible 12.4. Percepción de la policía por la población. Razones. Posibles mejoramientos 12.5. Rendición de cuenta a la población 13. Temor Percepción del temor. Qué temen la población y los diversos sectores. Confianza y desconfianza en los agentes de seguridad. 14. Buenas prácticas reconocidas Caracterización y lecciones 15. Mapa de actores de la prevención Las modalidades de coproducción de seguridad en el municipio y con agentes externos. Las coaliciones y su solidez. Orientaciones para mejoramiento 16. El proceso de aprendizaje del diagnóstico Los consensos logrados y las divergencias que quedan. Las profundizaciones necesarias 17. Síntesis de las recomendaciones

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© ONU-HABITAT

GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

El centro histórico de Bogotá, Colombia, es parte de la política de seguridad.

debe abordar. Por ejemplo, en materia de jóvenes en situación de riesgo en algunos lugares el problema prioritario podría ser las pandillas, mientras en otros el consumo de droga o bien la falta de oportunidades para desarrollar habilidades que les permitan desenvolverse en un trabajo, o bien la ausencia de programas focalizados en ellos. Estas prioridades van a servir para la elaboración de la estrategia. Los criterios de selección de las prioridades son la opinión de los habitantes (grado de tolerancia, fuente de miedo) y la posibilidad de una focalización inmediata en función de los recursos disponibles. (YLGHQFLDU ODV EXHQDV SUiFWLFDV H[LVWHQWHV HQ HO WHUULWRULR PXnicipal o que han sido reconocidas como acertadas en situaciones similares en otras ciudades. Su fortalecimiento y difusión FRQWULEX\H D FUHDU FRQÀDQ]D HQ OD FDSDFLGDG GH OD FRPXQLGDG Es recomendable en esta fase familiarizarse con programas o proyectos realizados o en ejecución en municipios similares. La asesoría de expertos puede ser de utilidad. ,GHQWLÀFDU ODV IRUPDV GH FRSURGXFFLyQ GH OD VHJXULGDG HQWUH VRFLRV PXQLFLSDOHV 3DUD SRGHU PRGLÀFDU R UHIRU]DU ODV IRUPDV de colaboraciones entre socios es útil conocerlas bien. En particular se debe distinguir las que son de igualdad o asimétricas (agentes municipales dependientes de los agentes estatales, por ejemplo); las que son permanentes o esporádicas (por ejemplo, relaciones municipio-policía que dependen exclusivamente de la buena voluntad del alcalde y del comisario); las que son burocratizadas (por ejemplo, departamentos muni-

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cipales o estatales que se vinculan solo por la vía jerárquica y administrativa, sin diálogo real ni trabajo en conjunto) o ágiles (establecimiento de mesas técnicas intersectoriales entre departamentos); las que son de total alianza para el logro de una meta común (asociación entre municipio y escuela para controlar la violencia escolar) o las que suponen la autonomía de cada socio en la elaboración e implementación (por ejemplo, la iniciativa GH XQD DVRFLDFLyQ GH HPSUHVDULRV SDUD OD UHVWDXUDFLyQ \ SDFLÀcación de un barrio comercial con fuerte tasa delictual, donde el grupo empresarial elige la meta, los medios, los participantes, y solo invita al municipio a colaborar). 2.8.2. Validación del diagnóstico participativo

El diagnóstico no está completo ni terminado en esta etapa, si no se “devuelve”, si no es presentado, expuesto y analizado junto a los distintos grupos, actores, instituciones y personas que participaron en él. El diagnóstico debe ser acordado entre los distintos actores involucrados, es decir: habitantes, organizaciones, instituciones del gobierno local, regional y nacional. Lo que se recoja en estas instancias debe formar también parte del diagnóstico, por ello le da aún más validez y representatividad. No hay que olvidar que el diagnóstico también ayuda a construir comunidad, organizándola y generando capacidades en ella, empoderándola en la solución de sus problemas. En resumen, también apunta a generar un consenso sobre necesidades y prioridades, especialmente entre comunidades de interés, equipos del gobierno local y los propios vecinos.


CapĂ­tulo 3: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 2. EL DIAGNĂ“STICO

Algunas recomendaciones: ‡ 3ODQLÀFDU FXLGDGRVDPHQWH OD IRUPD HQ TXH VH HQWUHJXHQ ORV resultados, así como las metodologías que se utilicen para analizar la información. Presentar partes del diagnóstico a travÊs de personas directamente involucradas, por ejemplo, conviene que sean jóvenes quienes lean, den a conocer o ilustren la parte de prevención dirigida a sus pares. ‡ (QIDWL]DU TXH HO GLDJQyVWLFR VH YD FRQVWUX\HQGR SHULyGLFDPHQWH \ SURIXQGL]DQGR HQ iUHDV PiV HVSHFtÀFDV ‡ 3UHYHQLU HO HIHFWR SDUDOL]DQWH TXH SXHGHQ SURYRFDU ORV UHVXOWD-

dos de un diagnóstico. Es necesario no perder de vista la visión, los recursos y capacidades existentes. Quienes lideran el proceso tienen un rol fundamental, pues permanentemente deben motivar, animar y orientar hacia delante. ‡ (YLGHQFLDU TXH HO GLDJQyVWLFR SHUPLWLy OD LGHQWLÀFDFLyQ GH ORV problemas de violencia e inseguridad claves a nivel local, de åreas y de grupos, pero que tambiÊn dio como resultado la incorporación de socios, recursos, voluntades y capacidades disponibles.

PRINCIPALES INSTRUMENTOS UTILIZADOS EN EL DIAGNĂ“STICO INSTRUMENTOS DE INVESTIGACIĂ“N

MAPAS

INDICADORES E Ă?NDICES

AnĂĄlisis de datos policiales

Mapa de participantes por sectores

LĂ­nea de base

AnĂĄlisis de estadĂ­sticas oďŹ ciales

Mapa de temor

Tasa de homicidios

AnĂĄlisis de prensa

Mapa de victimizaciĂłn

Tasa de victimizaciĂłn (por tipo de delito)

AnĂĄlisis de actores

Mapa de hot spot

Indicadores cuantitativos

AnĂĄlisis de buenas prĂĄcticas

Mapa de denuncias

Indicadores cualitativos

Encuesta

Indicadores de tendencia

Autorreporte

Frecuencia de denuncias

Encuesta de victimizaciĂłn

Cifra negra

Entrevistas en profundidad

Indicadores de gestiĂłn

Grupos focales

Indicador de respuesta policial

Grupos de discusiĂłn

Ă?ndice de conďŹ anza en la policĂ­a

Grupos de trabajo temĂĄtico

Ă?ndice de conďŹ anza en la justicia

Consulta comunitaria

Ă?ndice de temor

Marcha exploratoria Mapas perceptuales EvaluaciĂłn de impacto

RESUMEN El diagnĂłstico es un instrumento de conocimiento y de consenso. El conocimiento de la violencia, de la delincuencia, de los actores locales, de los temores y expectativas de la poblaciĂłn en materia de seguridad como de sus buenas prĂĄcticas permite avanzar hacia una estrategia consensuada y coproducir seguridad. El diagnĂłstico es tambiĂŠn la base de conocimiento que servirĂĄ para el monitoreo y para la actualizaciĂłn de los datos de la inseguridad como de la informaciĂłn sobre las prĂĄcticas de la poblaciĂłn. En este sentido el diagnĂłstico debe actualizarse permanentemente. El diagnĂłstico participativo pone el acento sobre el consenso, considerado como fundamental para construir una estrategia de seguridad que apunte a la calidad de vida y a una cultura de prevenciĂłn. No es contradictorio con la bĂşsqueda de una informaciĂłn ďŹ dedigna de la realidad, es simplemente una forma de investigaciĂłn –acciĂłn que al municipio y sus equipos tĂŠcnicos permite avanzar con los beneďŹ ciarios hacia una polĂ­tica de seguridad que va a necesitar de la participaciĂłn y responsabilizaciĂłn de los habitantes–. Por ende, una triple exigencia: primero, la del esfuerzo por involucrar desde el inicio a los beneďŹ ciarios y al menos a las comunidades de intereses y en particular a los jĂłvenes por su ubicaciĂłn estratĂŠgica en toda polĂ­tica de prevenciĂłn; segundo, la exigencia de transparencia y, tercero, la exigencia de devoluciĂłn de la informaciĂłn a la poblaciĂłn.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CapĂ­tulo 4:

ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

ESTRATEGIA En este capĂ­tulo se explica cĂłmo formular una estrategia de prevenciĂłn local para la seguridad ciudadana, los tiempos y pasos que ĂŠsta requiere. AsĂ­ tambiĂŠn se explica la

El diagnĂłstico ha evidenciado la situaciĂłn en la comuna, ha permitido generar algunos consensos respecto de las causas de la violencia y la delincuencia, y ha posibilitado acuerdos bĂĄsicos acerca de la visiĂłn que deberĂ­a prevalecer para abordar la prevenciĂłn. 6H WUDWD DKRUD GH GHĂ€QLU VREUH OD EDVH GH OD VLWXDFLyQ DFWXDO XQD estrategia de prevenciĂłn que, compartida, apunte a concretar los UHVXOWDGRV \ UHFRPHQGDFLRQHV REWHQLGRV (VWR TXLHUH GHFLU SODQLĂ€car y entrar en acciĂłn.

IDVH GH SODQLĂ€FDFLyQ H LPSOHPHQ3.1. DEL DIAGNĂ“STICO A LA ESTRATEGIA taciĂłn de la acciĂłn. Finalmente, se presentan un conjunto de ejemplos

Terminado el diagnĂłstico, el equipo tĂŠcnico que lo realizĂł y lo condujo inicia la fase de formulaciĂłn de una estrategia local consensuada de prevenciĂłn de la violencia y la delincuencia.

aplicados a las temĂĄticas propuestas en el diagnĂłstico, en las cuales se

AdemĂĄs de entregar informaciĂłn acerca de los principales problemas, el diagnĂłstico ha revelado los medios y capacidades existentes a nivel local para darles respuesta.

concreta operativamente una estrategia.

ÂżQUÉ ES UNA ESTRATEGIA COMUNITARIA DE PREVENCIĂ“N DE LA VIOLENCIA Y LA DELINCUENCIA? s 5N INSTRUMENTO PARA EVITAR LA VIOLENCIA Y LA DELINCUENCIA Y reducir el temor en la poblaciĂłn s 5NA HERRAMIENTA PARA JUNTAR DIVERSOS ACTORES INVOLUCRADOS EN LA prevenciĂłn de la criminalidad s 5N MEDIO PARA DESARROLLAR ASOCIACIONES Y COALICIONES LOCALES DE prevenciĂłn de la violencia y de la delincuencia s 5N MĂ?TODO PARA GARANTIZAR LA COORDINACIĂ˜N Y LA ADMINISTRACIĂ˜N de las iniciativas de prevenciĂłn de la criminalidad s 5NA MANERA DE IDENTIlCAR ĂˆREAS Y TAREAS PRIORITARIAS #3)2 2000)

El diseùo de la estrategia apunta a concretar, en un camino preciso SHUR à H[LEOH ODV SRVLEOHV VROXFLRQHV D ORV GHVDItRV HQFRQWUDGRV Incluye un programa y proyectos en función de los recursos huPDQRV \ ÀQDQFLHURV GLVSRQLEOHV GH ODV FRPSHWHQFLDV H[LVWHQWHV HQ los distintos actores y coaliciones. Ademås considera el contexto JOREDO HVSHFtÀFR HQ FDGD SDtV R UHJLyQ 7LHQH HQ FXHQWD HO FRQjunto de experiencias exitosas -en la ciudad misma y en otras- que pueden servir de referencia para la acción en situaciones similares, las lecciones aprendidas de ellas, como tambiÊn las perspectivas e iniciativas de la política nacional, si existe. Para un mismo diagnóstico y una misma visión, pueden existir múltiples estrategias. No todas lograrån involucrar de la misma forma a los distintos socios y actores ni tendrån iguales resultados. En consecuencia, vale la pena tomarse el tiempo para decidir la PHMRU RSFLyQ IUHQWH D XQD UHDOLGDG HVSHFtÀFD HQ XQ PRPHQWR GHterminado, analizando las implicancias de los diferentes enfoques posibles. /D HVWUDWHJLD ORFDO HV XQ FDPLQR HOHJLGR TXH SXHGH PRGLÀFDUVH D OD OX] GH ORV ORJURV GLÀFXOWDGHV FRQWLQJHQFLDV IUDFDVRV UHVXOWDGRV esperados y no esperados. Una estrategia necesita tener como horizonte la calidad de vida*

*Calidad de vida, segĂşn la OrganizaciĂłn Mundial de la Salud, es “la percepciĂłn que una persona tiene de su lugar en la existencia en el contexto de la cultura y del sistema de valores en los que vive y en relaciĂłn con sus expectativas, sus normas, sus inquietudes. Se trata de un concepto amplio que estĂĄ inuido de un modo complejo por la salud fĂ­sica de la persona, su estado psicolĂłgico, su nivel de independencia, sus relaciones sociales, asĂ­ como su relaciĂłn con los elementos esenciales de su entornoâ€?. Fuente: Grupo Whoqol, 1994. 70


CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

y la cohesión social. Si es puramente defensiva y socialmente excluyente, no unirå, sino que estigmatizarå, y se corre el riesgo de producir un efecto contrario a lo buscado. La estrategia local de prevención contempla acciones de una políWLFD HVSHFtÀFD TXH GHEH DUWLFXODUVH DO FRQMXQWR GH OD JHVWLyQ ORFDO porque la seguridad ciudadana es un tema transversal. Como se ha seùalado en capítulos anteriores, es necesario que sea intersectorial, incorporando, para problemas multicausales, energías y competencias múltiples, como las del sistema de justicia criminal (policía, justicia, sistema penitenciario), de los actores de los sistemas de salud y educación y de otros sistemas de apoyo social, de las organizaciones territoriales, de las comunidades de intereses en materia de seguridad, de las Iglesias, de las organizaciones juveniles, profesionales, deportivas o de mujeres. Esto es vålido para focalizar la coproducción de seguridad en los diversos sectores del territorio; por ejemplo, en el centro de la ciudad, en las åreas comerciales, en los espacios públicos y en los barrios residenciales, informales, perifÊricos, marginales. Es adecuado tambiÊn para fortalecer los factores de protección y disminuir los de riesgo en los distintos grupos sociales. Permite, así mismo, abordar distintos temas como, por ejemplo, la mediación, el empoderamiento comunitario, la participación ciudadana, la reinserción de convictos, etc.

3.2. BASES PARA UNA ESTRATEGIA La fase de formulación es compleja, porque se necesita establecer DFXHUGRV HQ DVSHFWRV WDOHV FRPR ÀMDU ORV WLHPSRV \ PRGDOLGDGHV GH DERUGDU ODV SULRULGDGHV GHÀQLGDV HQ HO GLDJQyVWLFR ,JXDOPHQWH se requiere consensuar las posibilidades de acción, mediante el ordenamiento de los recursos y del presupuesto en un plan de acción.

La estrategia debe: s !SEGURAR Y PROMOVER LA PARTICIPACIĂ˜N Y REPRESENTATIVIDAD DE DISTINTOS ACTORES EN PARTICULAR DE LOS JĂ˜VENES s !SEGURAR LA PERTINENCIA DE LAS POLĂ“TICAS A IMPLEMENTAR s #ENTRARSE EN EJES TEMĂˆTICOS REALIZABLES Y REALISTAS s !SEGURAR QUE LA CAPACIDAD DE LOS GRUPOS DE TRABAJO SEA ACORDE A LOS DESAFĂ“OS s 0ARTIR EN LO POSIBLE DE LO POSITIVO DE LOS RECURSOS QUE EXISTEN EN EL TERRITORIO La evaluaciĂłn de las respuestas locales a la delincuencia y violencia Se trata de potenciar lo que se ha revelado exitoso y aprender de los errores cometidos. La evaluaciĂłn del temor y la inseguridad Ya se indicĂł que la percepciĂłn de temor e inseguridad de la poblaciĂłn es subjetiva, relacionada con las vivencias de las personas. No necesariamente coincide con los hechos de la realidad. Por ejemplo, en algĂşn lugar la tasa de victimizaciĂłn puede ser baja, pero la sensaciĂłn de inseguridad en esa misma localidad puede ser alta. Ejemplos de este fenĂłmeno son BogotĂĄ y Santiago. Ambas son consideradas como ciudades peligrosas por sus habitantes, a pesar GH TXH ORV LQGLFDGRUHV GH YLROHQFLD GLĂ€HUHQ VXVWDQFLDOPHQWH HQWUH ellas (CarriĂłn, F. y Núùez-Vega, 2006).

A continuaciĂłn se sintetizan los resultados del diagnĂłstico participativo que no pueden dejar de ser considerados:

Las prioridades son distintas según los contextos, segmentos sociales y zonas geoJUiÀFDV 9DUtDQ HQ IXQFLyQ GHO QLYHO GH KHWHURJHQHLGDG VRFLDO OD cultura, la dimensión físico-espacial, la tipología de vivienda o la segregación urbana. Por ejemplo, las prioridades juveniles no serån las mismas que las de los adultos, las de las mujeres se diferenciarån de aquellas de los hombres, las de barrios acomodados no coincidirån con las de åreas pobres.

Las manifestaciones locales de la delincuencia y violencia Pueden ser distintas segĂşn las caracterĂ­sticas de cada lugar, barrio o ciudad.

Las prioridades, ademĂĄs, involucran distintos tiempos, de acuerdo a la urgencia que demanden y a la percepciĂłn subjetiva de la temporalidad por parte de los diversos grupos.

Las causas locales de esta delincuencia y violencia Las causas estructurales (por ejemplo, la desigualdad, la globalización, la política de precios, etc.) no son plenamente solucionables en el plano local. Lo que sí se puede enfrentar son las causas liJDGDV DO HQWRUQR ORFDO SRU HMHPSOR IRUPDV HVSHFtÀFDV GH GLVFULminación de segmentos sociales o de segregación de grupos de residentes.

Por ejemplo, tratar problemas de enfrentamiento armado entre QDUFRWUDĂ€FDQWHV \ VROXFLRQDU ODV GHĂ€FLHQFLDV GH LQIUDHVWUXFWXUD UHquieren perĂ­odos de distinta duraciĂłn. El contexto general a nivel nacional y a nivel local A nivel nacional o regional hay que tomar en cuenta la realidad de la violencia, inseguridad y delincuencia, asĂ­ como la polĂ­tica existen71


GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

,A COORDINACIĂ˜N ENTRE GOBIERNO CENTRAL REGIONAL Y LOCAL ES NECESARIA PARA ASEGURAR LA MAYOR COHERENCIA Y GOBERNABILIDAD A LA POLĂ“TICA DE SEGUridad. te en este ĂĄmbito, con sus respectivos programas y lĂ­neas de acciĂłn, la polĂ­tica social y sus programas en materia de pobreza, criminalidad, justicia, salud, educaciĂłn, vivienda, etc. En lugar de lanzarse en estrategias contradictorias con los lineamientos del paĂ­s, puede ser mejor insertarse en ellos, dialogar con el gobierno, utilizar sus recursos y redirigir localmente ciertas orientaciones. Experiencias de abordajes similares en otras ciudades AnĂĄlisis de las lecciones de experiencias exitosas frente a problemas similares en otras ciudades, asĂ­ como de las que no han tenido buenos resultados. Recursos humanos disponibles localmente Esto incluye personal de servicios pĂşblicos, socios que estĂĄn dispuestos a colaborar, pero tambiĂŠn empresas privadas, ONG, Iglesias y redes de ayuda nacional e internacional. La prensa y medios de comunicaciĂłn pueden ser una ayuda o un freno serio a la estrategia. Es necesario tener presentes los recursos comunitarios, las organizaciones sociales de base formales e informales, lĂ­deres naturales, etc. /RV UHFXUVRV Ă€QDQFLHURV GLVSRQLEOHV \ SRVLEOHV Esto implica considerar lo que estĂĄ disponible a nivel municipal o GH ORV VRFLRV ORFDOHV ODV IXHQWHV GH Ă€QDQFLDPLHQWR HVWDWDO H LQWHU-

QDFLRQDO 'HEH KDEHU DJHQWHV ORFDOHV HQFDUJDGRV GH LGHQWLĂ€FDU \ movilizar los medios utilizables.

3.3. SOSTENIBILIDAD DE UNA ESTRATEGIA La sostenibilidad se entiende como “la capacidad de satisfacer las necesidades actuales sin poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidadesâ€? (ONU, 1987). Tiene un rol central hoy en dĂ­a en el diseĂąo de cualquier programa innovador de prevenciĂłn local de la seguridad, puesto que garantiza una optimizaciĂłn de los recursos e insumos en el tiempo, y permite la continuidad necesaria para alcanzar los efectos de largo plazo. Programas sostenibles corresponden, entonces, a aquellos capaces de perdurar en el tiempo independientemente de la administraciĂłn de turno o de la continuidad de quienes lo hayan gestado. Por eso, antes de iniciar una estrategia es necesario velar, por lo menos, por VX VRVWHQLELOLGDG VRFLRSROtWLFD \ Ă€QDQFLHUD 3OSTENIBILIDAD SOCIOPOLĂ“TICA

Toda iniciativa de prevenciĂłn de la violencia y la delincuencia debe poder mantenerse en el tiempo. Es crucial que se desarrollen capacidades y compromisos con la comunidad, el gobierno local y nacional. Esto sĂłlo se lograrĂĄ si el gobierno local tiene ciertos estĂĄndares mĂ­nimos de buena gobernabilidad, en tĂŠrminos de transparencia, UHVSRQVDELOLGDG \ HĂ€FLHQFLD 6L QR VH GDQ GLFKDV FRQGLFLRQHV Ptnimas, habrĂĄ que trabajar para generarlas antes de formalizar la estrategia, puesto que son una condiciĂłn de su perdurabilidad.

BUENA GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA La buena gobernabilidad ES UN TĂ?RMINO QUE LOS ORGANISMOS MULTILATERALES USAN hPARA DESIGNAR UN MODELO DE BUENOS COMPORTAmientos de los GOBIERNOS FRENTE A LOS CUALES SE COMPARAN LOS DIFERENTES PAĂ“SES PARA LUEGO PRESCRIBIR O ACONSEJAR DESARROLLOS ESPECĂ“lCOSv 6ELĂˆSQUEZ h%L CONCEPTO DE GOBERNABILIDAD ESTĂˆ REFERIDO AL EJERCICIO DEL GOBIERNO Y A LAS CONDICIONES PARA QUE ESTA FUNCIĂ˜N SE PUEDA DESEMPEĂ—AR CON ElCIENCIA LEGITIMIDAD Y RESPALDO SOCIALv 2OJAS “Para estas visiones se han desarrollado sistemas de indicadores y de mediciĂłn que presuponen una situaciĂłn ‘modelo’ y tratan de establecer la ‘disTANCIA ENTRE ESTE @MODELO Y LA SITUACIĂ˜N MEDIDA EN UN SECTOR O EN UN TERRITORIO EN PARTICULAR 3UĂˆREZ PLANTEA CĂ˜MO ESTOS MODELOS PRESCRITOS ESTABLECEN UNA SERIE DE PREOCUPACIONES EN TORNO A LA BUENA GOBERNABILIDAD Y LA MATERIALIZAN EN MEDICIONES DE ElCIENCIA PREDICTIBILIDAD HONESTIDAD TRANSPARENCIA Y RESPONSABILIDAD DE LA MAQUINARIA GUBERNAMENTALv 6ELĂˆSQUEZ h3E TRATA TAMBIĂ?N DE PENSAR LA GOBERNABILIDAD COMO CUESTIĂ˜N RELATIVA A CĂ˜MO PRODUCIR PODERvx Y DE hCĂ˜MO PUEDE LA GENTE COMĂžN ACCEDER A LA producciĂłn de mecanismos y dispositivos de control de los gobiernos y de todo agente de representaciĂłn, y de regulaciĂłn cotidiana de su convivenCIAv -ENĂ?NDEZ #ARRIĂ˜N Gobernanza. 5N PROBLEMA DEL CONCEPTO DE LA "UENA 'OBERNABILIDAD ES QUE HACE REFERENCIA A MODELOS CULTURALES SOCIALES Y NIVELES DE DESARROLLO INSTITUCIONAL Y ECONĂ˜MICO DETERMINADOS 0OR ELLO MUCHOS PRElEREN USAR EL TĂ?RMINO DE 'OBERNANZA ENFOCADO A LAS FORMAS DE RELACIONARSE CONSENsuar, llegar a acuerdos e incorporar la mayor cantidad y los mĂĄs importantes actores que den sostenibilidad, respaldo y masa crĂ­tica a una polĂ­tica, sin un modelo predeterminado.

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

Se precisa, en sĂ­ntesis, del acompaĂąamiento de iniciativas de “buena gobernabilidadâ€?. La institucionalizaciĂłn necesita sumar las reformas institucionales, polĂ­ticas y legales a las capacidades y recursos, ademĂĄs de permanente capacitaciĂłn, actualizaciĂłn y sistematizaciĂłn de las experiencias. A menudo la prevenciĂłn de la violencia y la delincuencia lleva a otros aspectos mĂĄs difĂ­ciles de enfrentar, como la corrupciĂłn. El SURFHVR YD UHYHODQGR HQ IRUPD VLPXOWiQHD RWUDV GHĂ€FLHQFLDV TXH necesitan ser enfrentadas. Aunque la estrategia no va a poder hacer frente a todo, debe ser lo bastante amplia para asumir los elementos bĂĄsicos de una buena gobernabilidad. 3OSTENIBILIDAD lNANCIERA

La experiencia internacional ha mostrado que uno de los riesgos mayores de las buenas pråcticas es su abandono por falta de recurVRV ÀQDQFLHURV HQ WLHPSRV UHDOHV Aunque una buena estrategia se apoya sobre los recursos humaQRV \ HFRQyPLFRV ORFDOHV KDELWXDOPHQWH pVWRV VRQ LQVXÀFLHQWHV aun en países desarrollados. Los gobiernos centrales y el sector SULYDGR FRQVWLWX\HQ LPSRUWDQWHV IXHQWHV GH ÀQDQFLDPLHQWR FRPplementario. Dos consideraciones son relevantes. Primero, mantener en forma permanente agentes encargados de movilizar los fondos necesarios y una red de apoyo al trabajo municipal que contribuya a la gestión en su favor. En segundo lugar, prever que entre la REWHQFLyQ GH XQ ÀQDQFLDPLHQWR S~EOLFR GHO JRELHUQR FHQWUDO R regional y su renovación, a veces transcurren meses o aùos y hay una alta probabilidad de que los proyectos se debiliten por falta de medios. Por lo tanto, cuando se inicia un programa para el cual se espera un aporte continuo del gobierno, resulta esencial asegurar los presupuestos para las fases de transición entre un período y otro. En especial, garantizar que el personal asignado pueda continuar su trabajo. Generalmente los tiempos de la administración pública y los tiempos de los patrocinadores privados no son los mismos que los de las necesidades locales. 2WUR HMH IXQGDPHQWDO HV YHODU SRU HO GHVDUUROOR GH XQ SODQ GH Ànanciamiento coproducido. Es útil involucrar a diversos actores (sociedad civil, ONG, empresas, etc.), lo que generarå un mayor nivel de compromiso con la iniciativa, interdependencia y mejor control de los gastos. Por último, conviene asegurar que la renovación de los fondos resSRQGD D ORV QLYHOHV GH LPSDFWR 'HEHQ UHÀQDQFLDUVH VyOR DTXHOORV SUR\HFWRV TXH KD\DQ FRPSUREDGR VHU HÀFLHQWHV R TXH PXHVWUDQ

una posibilidad clara de resultados concretos. En la selecciĂłn hay que tener en cuenta la existencia de proyectos con logros inmediatos y otros cuyos frutos se verĂĄn a mediano y largo plazo; que algunos trabajan sobre problemĂĄticas mĂĄs simples y otros sobre desafĂ­os mĂĄs complejos; que se interviene sobre cosas tangibles y visibles, como la infraestructura, pero tambiĂŠn sobre variables inWDQJLEOHV GLItFLOPHQWH FXDQWLĂ€FDEOHV FRPR OD VHQVDFLyQ GH LQVHJXridad o las relaciones intergeneracionales. No se trata de un mero cĂĄlculo matemĂĄtico, sino de una ponderaciĂłn justa en relaciĂłn a los objetivos planteados. De ahĂ­ la importancia de usar indicadores tanto cualitativos como cuantitativos, y de presentarlos de manera adecuada para una buena comprensiĂłn de los socios, los medios de comunicaciĂłn y la ciudadanĂ­a (ver “Monitoreo y evaluaciĂłn, ComunicaciĂłn e InstitucionalizaciĂłnâ€?).

3.4. LOS TIEMPOS FLEXIBLES DE LA ESTRATEGIA Los diferentes socios, en comĂşn, determinan acciones de corto, mediano y largo plazo que, en forma complementaria, van a concretar la visiĂłn respondiendo al diagnĂłstico. Este desarrollo de la estrategia involucra los siguientes pasos (que se explican con mĂĄs detalle en los puntos 3.5; 3.6): Paso 1. Determinar y concordar un orden de las prioridades detectadas en el diagnĂłstico que serĂĄn asumidas, y consensuar “ejes estratĂŠgicosâ€?. Paso 2. Establecer grupos de trabajo que van a desarrollar los ejes estratĂŠgicos. Paso 3. Sellar el compromiso de los socios con la estrategia y hacer pĂşblica su formulaciĂłn.

Los tres primeros pasos, que llevan a sellar el compromiso de los socios y hacer pĂşblica su formulaciĂłn, se realizan a TRAVĂ?S DE UN PROCESO PARTICIPATIVO BASADO EN ACTIVIDADES como talleres, reuniones y consultas, teniendo presente en forma permanente el diagnĂłstico y una mirada global. %L EQUIPO TĂ?CNICO VA A LOGRAR SU META DE DESARROLLO ESTRATĂ?GICO A TRAVĂ?S DE UN PROCESO CONSTANTE Y SISTEMĂˆTICO DE conversaciĂłn, presentaciĂłn, discusiĂłn, convencimiento y acuerdo. Hay diferentes maneras de lograrlo, por lo tanto la exibilidad es indispensable. Normalmente, si el diagnĂłstico ha sido bien hecho, esta parte del proceso no dura mĂĄs de 2 a 3 meses. No obstante puede haber aspectos complejos de concordar, que vayan mĂĄs allĂĄ de este lapso de tiempo.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Tomadas las grandes decisiones, se continúa con los pasos para implementar la acción. 3DVR 3ODQLÀFDU GHÀQLU ORV HQIRTXHV R SHUVSHFWLYDV TXH VH XWLOL]DUiQ SDUD UHVROYHU ORV GHVDItRV ÀMDU ORV REMHWLvos, diseùar proyectos, actividades, responsabilidades, recursos y metas. Paso 5. Implementar los planes de acción. Algunos de los pasos anteriores son posibles de ejecutar en forma paralela. Por otro lado, el ritmo de elaboración e implementación de algunos aspectos de la estrategia pueden ser distintos. Se necesiWD à H[LELOLGDG HQ IXQFLyQ GH ORV ORJURV \ IUDFDVRV GH ORV DFXHUGRV que se obtengan, de los recursos disponibles, de las contingencias. Puede ser conveniente aprobar e iniciar la aplicación de la estraWHJLD SDUFLDO R VHFWRULDOPHQWH R SRU iUHDV JHRJUiÀFDV VHJ~Q ORV avances y consensos.

3.5. PROCESO DE FORMULACIĂ“N DE LA ESTRATEGIA Veamos ahora una explicaciĂłn mĂĄs completa de los tres primeros pasos reseĂąados en el punto anterior.

0ASO $ETERMINAR Y CONCORDAR UN ORDEN DE LAS PRIORIDADES DETECTADAS EN EL DIAGNĂ˜STICO PARA LA ESTRATEGIA Y CONSENSUAR LOS EJES ESTRATĂ?GICOS 2ATIlCAR Y JERARQUIZAR PRIORIDADES

(O HTXLSR WpFQLFR \ ORV VRFLRV UDWLÀFDQ \ MHUDUTXL]DQ ODV SULRULGDGHV a travÊs de reuniones, consultas y talleres de trabajo. Lo anterior, PXFKDV YHFHV VLJQLÀFD TXH JUXSRV GH DFWRUHV FODYHV HVWiQ FRQYHUsando por primera vez entre sí. De este contingente de personas surgirån los grupos de trabajo a los que haremos referencia mås adelante en el punto 3.5.2. Los participantes tienen por misión acordar cuåles son las prioridades mås importantes y adecuadas para su comunidad. Entre otros criterios de jerarquización se debe considerar que Êstas sean: ‡ 5HOHYDQWHV \ DSURSLDGDV HQ WpUPLQRV GH OD LQIRUPDFLyQ JHQHUDda en el diagnóstico. ‡ 5HDOLVWDV HVFRJHU SUREOHPDV HQ GRQGH ORV VRFLRV SXHGDQ WHQHU DOgún impacto o resultado, de acuerdo a sus recursos y capacidades. ‡ &RQVHQVXDGDV \ DSR\DGDV SRU OD PD\RUtD ‡ &RQ SUREDELOLGDG UD]RQDEOH GH p[LWR \ TXH VXJLHUDQ XQD EXHQD UHODFLyQ FRVWR EHQHÀFLR

PROCESO PARA DEFINIR LOS EJES ESTRATÉGICOS

Expresada por el lĂ­der DE creaciĂłn propia o no). Si bien se define en un comienzo del proceso, su coherencia o validez se verifica y perfecciona frente a cada situaciĂłn problemĂĄtica.

VISIĂ“N

DIAGNĂ“STICO

PRIORIDADES DEL DIAGNĂ“STICO Ejemplos: 6)& CONTRA NIĂ—OS ExclusiĂłn y marginalizaciĂłn de grupos minoritarios CorrupciĂłn, etc.

EJES ESTRATÉGICOS

%*% %342!4²')#/ 1 %J $ISMINUCIĂ˜N DE LA corrupciĂłn municipal y policial

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%*% %342!4²')#/ 2 Ej: 2ESTITUCIĂ˜N de derechos a grupos minoritarios

%*% %342!4²')#/ 3 Ej: 4rabajo integral con niùos maltratados en el hogar


CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

Llegar a decisiones compartidas sobre prioridades no es fĂĄcil, especialmente cuando se entiende de antemano que los recursos son limitados. Utilizando criterio selectivo y datos claros del diagnĂłstico, se puede evitar una personalizaciĂłn del proceso y lograr que los socios se concentren en el desarrollo de una estrategia balanceada TXH EHQHĂ€FLH DO Pi[LPR D OD FRPXQLGDG Cuando las prioridades compiten entre sĂ­ o el conjunto de todas ellas parece irrenunciable, los siguientes criterios adicionales son de utilidad: ‡ ¢6H YHULĂ€FD XQD FRKHUHQFLD GH OD MXVWLĂ€FDFLyQ GH ODV SULRULGDGHV con los resultados del diagnĂłstico? ‡ ¢/DV SULRULGDGHV HQIUHQWDQ ORV DVSHFWRV UHOHYDQWHV GH OD YLROHQcia y delincuencia? ‡ ¢5HFRJHQ XQ UDQJR DPSOLR GH LQWHUHVHV \ QHFHVLGDGHV" ‡ ¢6DWLVIDFHQ REMHWLYRV GH FRUWR PHGLDQR \ ODUJR SOD]R" ‡ ¢(O Q~PHUR GH SULRULGDGHV HV PDQHMDEOH HQ WpUPLQRV GH UHFXUsos y capacidades disponibles? ‡ ¢5HFRJHQ ORV LQWHUHVHV \ QHFHVLGDGHV GH ODV FRPXQLGDGHV GH LQWHUpV" ¢5HVSRQGHQ D ODV SHUFHSFLRQHV TXH pVWDV WLHQHQ GH ORV problemas? ‡ ¢/DV SULRULGDGHV IRUPXODGDV SRU XQ VHFWRU VRFLDO R SRU XQD ]RQD de la comuna atentan a la cohesiĂłn social o contribuyen a ella? Por ejemplo, entre zonas residenciales de niveles econĂłmicos disWLQWRV IUHFXHQWHPHQWH ODV SULRULGDGHV GLĂ€HUHQ R ELHQ HQ HO SHGLGR de aumentar la dotaciĂłn de policĂ­a puede haber discrepancia sobre dĂłnde ubicar las nuevas comisarĂ­as.

EN LA “PROPUESTA (2008) HACIA UN SISTEMA INTEGRADO DE SEGURIDAD CIUDADANA, CONVIVENCIA Y JUSTICIA PARA UNA BOGOTĂ SIN INDIFERENCIAâ€?, LA CAPITAL DE COLOMBIA SE HA PLANTEADO CINCO EJES ESTRATÉGICOS: $ISMINUCIĂ˜N DE LAS VULNERABILIDADES DESDE UNA PERSPECtiva amplia de los derechos humanos $ESARROLLO DE NUEVAS ESTRATEGIAS QUE INCLUYEN LA APLICACIĂ˜N DE todos los mecanismos de prevenciĂłn integral 3.- Fortalecimiento de los mecanismos de reconciliaciĂłn, mediante LA JUSTICIA COMUNITARIA Y LA RESOLUCIĂ˜N PACĂ“lCA DE CONmICTOS 4.- Mayor participaciĂłn de los ciudadanos, desde una Ăłptica terriTORIAL LOCALIDADES LOGRANDO INCREMENTAR LA CORRESPONSABILIDAD social 5.- Mayor efectividad de las competencias institucionales en la atenciĂłn proactiva de los factores de riesgo, la corrupciĂłn y la IMPUNIDAD !LCALDĂ“A DE "OGOTĂˆ

/RV REMHWLYRV HVWUDWpJLFRV R JHQHUDOHV HQXQFLDQ OD Ă€QDOLGDG GHO HMH estratĂŠgico, tiene que haber solo uno para cada eje. /RV REMHWLYRV HVSHFtĂ€FRV GHWDOODQ GHVJORVDQ \ GHĂ€QHQ FRQ PD\RU precisiĂłn las metas que se pretende conseguir. Permiten concreti]DU ORV HMHV HVWUDWpJLFRV RULHQWiQGRORV KDFLD DFFLRQHV HVSHFtĂ€FDV BogotĂĄ es un buen ejemplo de una intervenciĂłn bien diseĂąada a QLYHO GH HVWUDWHJLD (Q HOOD VH GHĂ€QLHURQ D SDUWLU GH ODV SULRULGDGHV cinco “objetivos estratĂŠgicosâ€? los cuales orientaron los planes de acciĂłn futuros (ver recuadro).

$ElNICIĂ˜N DE EJES ESTRATĂ?GICOS Y OPCIONES PARA LA ACCIĂ˜N

“Los ejes son temĂĄticos, las acciones se realizan en el territorio.â€? Las prioridades que se van seleccionando, se deben agrupar por WHPiWLFDV DĂ€QHV TXH FRQVWLWXLUiQ ORV JUDQGHV HMHV GH OD HVWUDWHJLD

Š 5NIVERSIDAD !LBERTO (URTADO

Para ayudar a sintetizar los ejes estratĂŠgicos, se recomienda el uso GH XQ HVTXHPD FRPR HO GH OD Ă€JXUD GH OD SiJLQD TXH SHUPLWD asociar las prioridades a cada uno de ellos. Cada eje estratĂŠgico se operacionaliza mediante la asignaciĂłn de REMHWLYRV HVWUDWpJLFRV \ HVSHFtĂ€FRV TXH SHUPLWDQ GHĂ€QLU ODV PHWDV a alcanzar. /RV REMHWLYRV VRQ SRU GHĂ€QLFLyQ GHVFULSFLRQHV REMHWLYDV \ FRQFLsas de lo que se pretende alcanzar con la intervenciĂłn que se estĂĄ planeando o ejecutando. EstĂĄn orientados a determinar la “metaâ€? que se quiere lograr en un perĂ­odo establecido. Por lo comĂşn, deEHQ LU DFRWDGRV D XQD UHDOLGDG \ Ă€MDU XQ WLHPSR SDUD VX FXPSOLmiento.

%N 2OSARIO LOS HUERTOS URBANOS SON UNA ESTRATEGIA DE INTEGRACIĂ˜N SOCIAL Y DE mejoramiento territorial, al incorporar a la vida productiva sectores marginados recuperando sitios abandonados, fuentes de deterioro.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

BOGOTĂ , COLOMBIA: DEFINICIĂ“N DE OBJETIVOS A PARTIR DE LAS PRIORIDADES DEL DIAGNĂ“STICO. EjempliďŹ caciĂłn de uno de los cinco objetivos estratĂŠgicos PRIORIDADES DEL DIAGNĂ“STICO (ASOCIADAS AL OBJETIVO ESTRATÉGICO)

OBJETIVO ESTRATÉGICO

OBJETIVOS ESPECĂ?FICOS

s $ESPROTECCIĂ˜N DE LA POBLACIĂ˜N EN CONDICIO- s 2EDUCIR LAS VULNERABILIDADES DESDE 1. #LARIlCAR Y PRIORIZAR LAS AMENAZAS Y FORMUnes de vulnerabilidad social la Ăłptica de los derechos humanos lar las estrategias de contenciĂłn 2. Construir una actitud preventiva, proactiva Y PROPOSITIVA EN EL HABITANTE DE "OGOTĂˆ s Problemas de recepciĂłn y asimilaciĂłn de la poblaciĂłn desplazada y desmovilizada 3. )NCORPORAR EL FACTOR SEGURIDAD EN EL DISEĂ—O URBANO ESPACIOS PĂžBLICOS RECREO TRANSporte, infraestructuras) 4. Crear el “nĂşmero Ăşnico de llamadasâ€? .53% &UENTE %LABORADO A PARTIR DEL DOCUMENTO h%XPERIENCIAS Y DESAFĂ“OS EN "OGOTĂˆ FORTALECIENDO LA SEGURIDAD DESDE LO LOCALv

Encuentros, conversaciones y debates pueden aclarar quĂŠ grupo o comunidad de interĂŠs estĂĄ interesado en quĂŠ eje. Es el momento adecuado para que propongan ideas y acciones innovadoras que ellos estarĂ­an interesados en realizar. Se aprovechan estas instancias para recolectar ideas de posibles actividades y compromisos futuros. Se facilita asĂ­ la formulaciĂłn de una estrategia que surja de deliberaciones participativas.

trabajo�, responsables de formular e implementar detallados planes de acción para alcanzarlos. &DGD JUXSR GH WUDEDMR UHVSRQGH D OD HVSHFLÀFLGDG GH FDGD HMH HVtratÊgico, y estå en relación directa, permanente, con el territorio en el cual desarrollarå su acción y con el equipo tÊcnico y con el coordinador (ver organigrama en la pågina 79). El funcionamiento de todos los grupos es complementario.

Consultas comunitarias, discusiones o grupos focales pueden ser XWLOL]DGDV SDUD YHULÀFDU HO FRPSURPLVR \ YLDELOLGDG GH ORV HMHV HVtratÊgicos. Al considerar opciones de acción, las siguientes características las hacen ser mås viables: ‡ 6HU DSR\DGDV SRU VRFLRV \ DFWRUHV FODYHV LQYROXFUDGRV ‡ +DEHU FRQVLGHUDGR ORV UHTXHULPLHQWRV HQ WpUPLQRV GH VRFLRV tecnologías, capacidades, recursos, necesidades institucionales, cambios legislativos y de políticas. ‡ 6HU UHDOLVWDV DSURSLDGDV \ SRVLEOHV HQ WpUPLQRV GHO FRQWH[WR presentado por el diagnóstico. ‡ 6HU DSWDV SDUD ORJUDU ORV REMHWLYRV \ VHU FRKHUHQWHV FRQ OD YLsión. ‡ 6HU EHQHÀFLRVDV SDUD ODV LQVWLWXFLRQHV VRFLDV ‡ 7RPDU HQ FXHQWD OHFFLRQHV GH H[SHULHQFLDV DQWHULRUHV UHDOL]DGDV en el mismo lugar y en otras ciudades. ‡ 1R VHU FRQWUDGLFWRULDV HQWUH Vt QL FRQ RWUDV DFFLRQHV X REMHWLYRV GH iUHDV DÀQHV ‡ (VWDU YLQFXODGDV FRQ LQLFLDWLYDV \ HVWUXFWXUDV H[LVWHQWHV ‡ )RUPDU SDUWH GH XQ PDUFR GH WUDEDMR SROtWLFR PiV DPSOLR

En los grupos de trabajo pueden participar representantes, encargados o lĂ­deres de organizaciones socias relevantes y de las comunidades de interĂŠs. Muchos actores e instituciones “lĂ­deresâ€? ya han emergido de las actividades y discusiones anteriores, por lo cual es muy probable que haya socios, organizaciones, instituciones, empresas o personas que se interesen por participar en aspectos HVSHFtĂ€FRV GH FDGD HMH HVWUDWpJLFR 3RU HMHPSOR HV SRVLEOH TXH KD\D actores disponibles para trabajar en algunos barrios -ONG locales o iglesias locales-, sin mostrar interĂŠs o capacidad de involucrarse en la estrategia completa. Grupos juveniles pueden querer involucrarse en actividades preventivas dirigidas al mejoramiento de una cancha de deportes y a su cuidado fĂ­sico o social, sin querer participar en iniciativas culturales tambiĂŠn relacionadas con la prevenciĂłn. Grupos de empresarios o comerciantes pueden optar por focalizarse en forma autĂłnoma sobre algunos espacios urbanos, sin sumarse a otras tareas. Lo importante en estos casos es que los actores se reconozcan mutuamente como vĂĄlidos e importantes, y acuerden una coordinaciĂłn de sus acciones a corto, mediano y largo plazo.

0ASO %STABLECER GRUPOS DE TRABAJO QUE VAN A DESARROLLAR LOS EJES ESTRATĂ?GICOS

0ASO 3ELLAR EL COMPROMISO DE LOS SOCIOS CON LA ESTRATEGIA Y HACER PĂžBLICA SU FORMULACIĂ˜N

+DELHQGR \D LGHQWLĂ€FDGR ORV REMHWLYRV HVWUDWpJLFRV \ VXV FRUUHVSRQGLHQWHV REMHWLYRV HVSHFtĂ€FRV VyOR IDOWD HVWDEOHFHU ´JUXSRV GH

A pesar del largo y profundo proceso que se ha llevado hasta acĂĄ, el paso 3 no se debe considerar simple ni tomar como dado.

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Capรญtulo 4: POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIร N

$GRSWDU OD HVWUDWHJLD VLJQLร FD TXH ODV SHUVRQDV FRQFXHUGDQ FRQ HO HQIRTXH FRQ ORV HMHV HVWUDWpJLFRV VXUJLGRV GH ODV SULRULGDGHV \ TXH VH FRPSURPHWHQ D HMHFXWDU DFFLRQHV SDUD VX PDWHULDOL]DFLyQ

(Q HVWD IDVH HO URO GHO OtGHU UHVXOWD PX\ YDOLRVR \ PRWLYDGRU SDUD ORV DFWRUHV HQ GRV PRPHQWRV FUXFLDOHV ย 3RU XQD SDUWH HO DOFDOGH SXHGH IDFLOLWDU XQ DFXHUGR TXH VH IRUPDOLFH SURJUHVLYDPHQWH \ GHVHPERTXH HQ XQ FRPSURPLVR FRQ OD PXQLFLSDOLGDG (VWH DFXHUGR FRQVWLWX\H OD EDVH VREUH OD FXDO HO HTXLSR WpFQLFR \ ORV JUXSRV GH WUDEDMR RUJDQL]DQ VXV IXWXURV SODQHV GH DFFLyQ ย 3RU RWUD SDUWH D WUDYpV GH XQ HYHQWR PHGLiWLFR GH DOWR SHUร O HO DOFDOGH SXHGH RWRUJDU D OD HVWUDWHJLD \ D ORV UROHV GH ORV YDULDGRV DFWRUHV XQD OHJLWLPLGDG S~EOLFD \ XQD EDVH VyOLGD SDUD VXV DFWLYLGDGHV VXEVLJXLHQWHV (Q HO HYHQWR ORV DFWRUHV DVXPHQ VXV FRPSURPLVRV IUHQWH D OD FRPXQLGDG (V WDPELpQ XQ EXHQ PRPHQWR SDUD OD ร UPD S~EOLFD GH XQ SULPHU GRFXPHQWR GH WUDEDMR GH ยด3ROtWLFD ORFDO GH SUHYHQFLyQ SDUD OD VHJXULGDG FLXGDGDQDยต

ยฉ Ezio Mosciatti

6H GHEH WHQHU SUHVHQWH OD SRVLELOLGDG GH TXH DOJXQR GH ORV HMHV VXIUD PRGLร FDFLRQHV HQ HO IXWXUR $XQ DVt HV QHFHVDULR JHQHUDU XQ PtQLPR GH FRQVHQVR \ FRPSURPLVR SRU SDUWH GH ORV DFWRUHV DXQTXH H[LVWDQ GLVSDULGDGHV HQ HO JUDGR GH HOOR

La recuperaciรณn de espacios pรบblicos, coordinando programas de distintos ministerios, permitiรณ a los vecinos de la poblaciรณn Herminda de la Victoria, Santiago de Chile, recuperar parte de su cultura popular, en este caso con murales-mosaico.

CONSTITUCIร N DE GRUPOS DE TRABAJO A PARTIR DE LOS EJES ESTRATร GICOS

VISIร N

DIAGNร STICO

EJES ESTRATร GICOS

EJE ESTRATร GICO 1 Ej: Disminuciรณn de la corrupciรณn municipal y policial

EJE ESTRATร GICO 2 Ej: Restituciรณn de derechos a grupos minoritarios

GRUPO DE TRABAJO Compuesto por: Alcalde, oficiales de policรญa, miembros de la sociedad civil, empresarios, representantes de las iglesias

GRUPO DE TRABAJO Compuesto por: Representantes de grupos minoritarios, policรญas, funcionarios municipales, ONG

EJE ESTRATร GICO 3 Ej: Trabajo integral con niรฑos maltratados en el hogar

GRUPO DE TRABAJO Compuesto por: Jueces de juzgados de menores, psicรณlogos, pedagogos, directores de escuelas municipales, padres, etc.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

IMPLEMENTACIĂ“N 3.6. PLANIFICAR E IMPLEMENTAR LA ACCIĂ“N Una vez sellado y publicitado el compromiso con los grandes lineamientos de la estrategia, se pasa al diseĂąo e implementaciĂłn de detallados planes, derivados de ella. AquĂ­ empieza la acciĂłn. Los planes se elaboran para llevarlos a cabo, con una asignaciĂłn GH UHFXUVRV VXĂ€FLHQWHV VHJXLGD GH OD HMHFXFLyQ HQ WHUUHQR \ Ă€QDOPHQWH OD YHULĂ€FDFLyQ GH ORV UHVXOWDGRV H LPSDFWRV GH GLFKDV intervenciones (ver Monitoreo y evaluaciĂłn). 'HVGH HO SXQWR GH YLVWD GH OD SODQLĂ€FDFLyQ HVWUDWpJLFD /HLYD 2005), la gestiĂłn es fundamental. En efecto, un mal manejo de una buena estrategia puede conducir a un fracaso. La consecuencia es un empeoramiento de la situaciĂłn inicial por el descrĂŠdito de los actores frente a la comunidad. Se produce una sensaciĂłn de incompetencia del lĂ­der, el coordinador y el equipo tĂŠcnico, se genera un sentimiento de desesperanza, y los habitantes terminan pensando que no existen soluciones ante los problemas de inseguridad. Suele ocurrir que a medida que esta fase evoluciona, el equipo tĂŠcnico y el coordinador comienzan a delegar parte del proceso, a medida que otros actores y socios comienzan a realizar acciones, lo que fortalece y amplĂ­a la base para ejecutar la implementaciĂłn. El equipo tĂŠcnico debiera servir como una “secretarĂ­aâ€? de estos trabajos, apoyĂĄndolos y monitoreĂĄndolos. /D LPSOHPHQWDFLyQ VH DUWLFXOD HQ GRV JUDQGHV iUHDV OD SODQLĂ€FDciĂłn de acciones y la entrega de recursos para llevarlas a cabo. 0ASO 0LANIlCAR DElNIR LOS ENFOQUES O PERSPECTIVAS QUE SE UTILIZARĂˆN PARA RESOLVER LOS DESAFĂ“OS lJAR LOS OBJETIVOS DISEĂ—AR PROYECTOS ACTIVIDADES RESPONSABILIDADES RECURSOS Y METAS %NFOQUE Y OBJETIVOS

Cada grupo de trabajo formado en el paso 2 (ver punto 3.5.2) aborda los problemas prioritarios de su eje estratĂŠgico. Se sugiere que los grupos analicen los escenarios posibles y propongan enfoques que no sean contradictorios con las perspectivas en aplicaciĂłn por la municipalidad.

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$ SDUWLU GH VXV DQiOLVLV \ HQIRTXHV ORV JUXSRV GHĂ€QHQ ORV REMHWLYRV por alcanzar y un plan de acciĂłn para cada uno de los objetivos propuestos, vinculando a ĂŠstos con proyectos, actividades, recursos y resultados esperados. AsĂ­ se concreta la operatividad de la estrategia de manera ordenada, con metas claras, buscando optimizar los recursos (ver tabla). Para abordar cada tema, se sugiere proceder en dos etapas, es decir, realizando un ejercicio de enfoque al interior del grupo de trabajo y teniendo en cuenta las lecciones o experiencias en otras ciudades. 3ULPHUR realizar un ejercicio de enfoque al interior del grupo de trabajo que trata cada eje estratĂŠgico, como lo propone la “guĂ­a de auditorĂ­as locales de seguridadâ€? del Foro Europeo de Seguridad Urbana, FESU. Se trata de “contribuir a inspirar sentimientos de orientaciĂłn colectiva, de apropiaciĂłn, de apoyo, pero tambiĂŠn puede revelar discrepancias de opiniones que deberĂĄn ser anali]DGDV \ FRQFLOLDGDVÂľ \ GH ´GHĂ€QLU ODV SULRULGDGHV SDUD ODV DFFLRnes venideras y enfocar medidas que podrĂĄn ser integradas en la estrategiaâ€? (FESU, 2008: 116). El equipo de trabajo efectĂşa este ejercicio con un miembro del equipo tĂŠcnico y, si es necesario, con un animador que facilite el intercambio de opiniones. Para WHPDV PX\ VHQVLEOHV \ FRQĂ LFWLYRV \ GRQGH OD FRPXQLGDG FDUHFH de experiencia de prevenciĂłn consolidada, puede ser conveniente presentar un conjunto de opciones -como lo hace el pĂĄrrafo sobre “escenarios posiblesâ€? en los ejemplos presentados mĂĄs adelanteque permitan mayor participaciĂłn de los actores y decidir en funciĂłn de un conocimiento real. Existe, en efecto, el riesgo de que las personas que ignoran las diversas alternativas de abordaje, no puedan emitir una opiniĂłn fundamentada y tiendan a optar por opciones que “suenan bienâ€? pero no abordan el fondo del problema como, por ejemplo, aumentar la dotaciĂłn policial frente a un nuevo delito. La presencia de uno o varios expertos puede facilitar la presentaciĂłn de los diversos enfoques. 6HJXQGR tener en cuenta el conjunto de experiencias realizadas en otras ciudades y las lecciones derivadas de ellas. El equipo tĂŠcnico deberĂ­a reunir la documentaciĂłn necesaria o, eventualmente, invitar a personas involucradas en prevenciĂłn sobre el mismo tema en otros municipios del paĂ­s o del extranjero, para mostrar cĂłmo se procediĂł, los resultados, los tiempos necesarios y el tipo de agente adecuado para poner en prĂĄctica la intervenciĂłn. La abundante documentaciĂłn ofrecida en artĂ­culos escritos o en Internet permite GLVSRQHU GH P~OWLSOHV HMHPSORV SDUD XQD UHĂ H[LyQ HQULTXHFHGRUD


CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

INSTRUMENTOS Y RECURSOS AJUSTADOS A LOS OBJETIVOS ESTRATÉGICOS, BOGOTà , COLOMBIA EJE OBJETIVO ESTRATÉGICO ESTRATÉGICO

OBJETIVOS ESPECĂ?FICOS

INSTRUMENTOS DE ACCIĂ“N

RECURSOS (PROGRAMAS)

RECURSOS (PROYECTOS)

#LARIlCAR Y PRIORIZAR LAS amenazas y formular las estrategias de contenciĂłn

35)6$ #OMITĂ? DE EVALUAciĂłn y seguimiento a la violencia y delincuencia de "OGOTĂˆ

!TENCIĂ˜N )NTEGRAL DE !MPLIACIĂ˜N DEL /BSERVATORIO DE violencia, delincuencia VIOLENCIA DE "OGOTĂˆ y orden pĂşblico )MPLEMENTACIĂ˜N Y DESARROLLO DE INFRAestructura militar para la seguridad DE "OGOTĂˆ OperaciĂłn, mantenimiento, sostenimiento de infraestructura para mantener la presencia de policĂ­a

ENTIDAD A CARGO Secretaria de Gobierno

Fondo de Vigilancia y Seguridad

Fortalecimiento del sistema de seguridad y vigilancia de las entidades del distrito

2EDUCIR LAS VULNERABILIDADES DESDE LA Ă˜PTICA DE LOS DERECHOS HUMANOS

0ERSPECTIVA DE $ERECHOS (UMANOS

Plan de vivienda para la policĂ­a !TENCIĂ˜N DE EMERGENCIAS DEL DISTRITO Consejo de 3EGURIDAD $ISTRITO #APITAL 2EGIĂ˜N

Secretaria de Gobierno

Construir una actitud -ISIĂ˜N "OGOTĂˆ preventiva, proactiva y progresiva en el habitante DE "OGOTĂˆ )NCORPORAR EL FACTOR SEGUridad en el diseĂąo urbano de espacios pĂşblicos, de reconciliaciĂłn, transporte e infraestructura

Coordinar con los municipios vecinos el anĂĄlisis de LOS BIENES ESTRATĂ?GICOS Y ESTABLECER MĂ?TODOS CONcertados de protecciĂłn

#AJA DE 6IVIENDA Popular &ONDO DE 6ENTAS Populares

"OGOTĂˆ MENOS VULnerable ante eventos crĂ­ticos

Fondo de Vigilancia

PromociĂłn de normas para la convivencia

SecretarĂ­a de Gobierno

Mejoramiento integral de barrios

Caja de Vivienda Popular

Fomento a la organizaciĂłn, formalizaciĂłn y reubicaciĂłn de vendedores ambulantes y estacionarios

DPAE Fondo de Ventas Populares

Consejo de 3EGURIDAD $ISTRITO #APITAL 2EGIĂ˜N #/%

Garantizar el ejercicio ple- 5NIDAD DE ATENno de los derechos de las ciĂłn a desplazados poblaciones vulnerables 5NIDAD DE ATENciĂłn a reincorporados 5NIDAD DE ATENciĂłn y orientaciĂłn ComisarĂ­as de familia )MPLEMENTAR PROGRAMAS sociales encaminados a mejorar la calidad de vida y estimular la inclusiĂłn social

HĂĄbitat desde los BARRIOS Y LAS 50: MITIGACIĂ˜N

-ISIĂ˜N "OGOTĂˆ PARA CONSTRUIR LA ciudadanĂ­a

-ISIĂ˜N "OGOTĂˆ

$ERECHOS (UMANOS para todos y todas

!TENCIĂ˜N A POBLACIĂ˜N en condiciones de desplazamiento forzado, desmovilizaciĂłn o vulnerabilidad frente a la violencia, con perspectiva de derechos HUMANOS Y $)( )NCLUSIĂ˜N ECONĂ˜MICA Y desarrollo empresarial

$ISEĂ—O E IMPLEMENTACIĂ˜N DE UNA POlĂ­tica integral de derechos humanos

Secretaria de Gobierno

ProtecciĂłn y promociĂłn de los derechos humanos

PersonerĂ­a

!TENCIĂ˜N COMPLEMENTARIA A POBLAciĂłn en situaciĂłn de desplazamiento forzado o vulnerabilidad frente a la violencia

SecretarĂ­a de Gobierno

!TENCIĂ˜N COMPLEMENTARIA A POBLAciĂłn reincorporada con presencia en "OGOTĂˆ Fortalecimiento del tejido local social para la gestiĂłn local

&UENTE !LCALDĂ“A DE "OGOTĂˆ

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

$ISEĂ—O DE PROYECTOS DETALLADOS

Muchos programas de prevención del delito actúan exitosamenWH VLQ XQD SODQLÀFDFLyQ H[KDXVWLYD GH VXV SUR\HFWRV \ VLQ OD IRUmalización de ellos por escrito. Su desarrollo va surgiendo de las situaciones reales de trabajo y de las grandes contingencias que ocurren a medida que se interviene. Llegar al nivel de detalle del diseùo de un proyecto no siempre es una obligación ni garantiza el Êxito de la iniciativa. Sin embargo, es recomendable ya que permite una coherencia interna de las actividades y una focalización en las åreas de mayor importancia. A la vez, SHUPLWH RSWDU D PXFKRV ÀQDQFLDPLHQWRV TXH GHPDQGDQ OD SUHVHQWDción por escrito de la estrategia y de su plan de acción. Aunque despuÊs se descubra, en terreno, que lo previsto no consideró muchos aspectos, de todas maneras va a ser de utilidad contar con un trazado de camino inicial que, aunque se corrija posteriormente a la luz de los avances y errores, es coherente con los objetivos propuestos y plausibles. 6L OD GHÀQLFLyQ GH REMHWLYRV H[SOLFDGD HQ HO SXQWR DQWHULRU HUD IXQGDPHQWDO DKRUD HV QHFHVDULD OD GHÀQLFLyQ GH EXHQRV SUR\HFWRV TXH permitan materializar dichos objetivos. Un proyecto puede ser enWHQGLGR FRPR XQD HPSUHVD SODQLÀFDGD TXH FRQVLVWH HQ XQ FRQMXQto de actividades interrelacionadas y coordinadas. La razón de un SUR\HFWR HV DOFDQ]DU REMHWLYRV HVSHFtÀFRV GHQWUR GH ORV OtPLWHV TXH LPSRQHQ XQ SUHVXSXHVWR \ XQ ODSVR GH WLHPSR SUHYLDPHQWH GHÀnidos. Un proyecto es, por tanto, temporal y único. Temporal, en OD PHGLGD TXH WLHQH XQ FRPLHQ]R GHÀQLGR \ IHFKD GH WpUPLQR HVWDEOHFLGD QR VLHQGR H[WHQVLEOH LQGHÀQLGDPHQWH HQ HO WLHPSR FRPR muchas veces sucede en la realidad, con lo cual deja de ser proyecto

,A IMPLEMENTACIĂ˜N DE UNA POLĂ“TICA DE PREVENCIĂ˜N PUEDE DINAMIZAR O REACTIVAR A LAS COMUNIDADES HACER SURGIR NUEVOS LIDERAZGOS ORGANIZACIONES Y redes. y pasa a ser un programa. Ăšnico, en la medida que cada proyecto es diferente, inclusive de otros similares. Existen varios tipos de proyectos, entre los cuales se distinguen los “productivosâ€? y los “socialesâ€?. Los “productivosâ€? se diseĂąan HQ IXQFLyQ GH OD UHODFLyQ HQWUH FRVWR \ EHQHĂ€FLR YLVWD GHVGH XQ SODQR Ă€QDQFLHUR HV GHFLU VyOR VH OOHYDQ D FDER VL DO WpUPLQR GH HOORV SURGXFHQ XQD UHQWDELOLGDG Ă€QDQFLHUD PD\RU DO JDVWR UHDOL]Ddo. Los “socialesâ€? se diseĂąan en funciĂłn de su impacto, es decir, de la incidencia que van a tener sobre un determinado problema o territorio. La viabilidad de estos proyectos no se calcula sĂłlo HQ EDVH D XQD UHODFLyQ FRVWR EHQHĂ€FLR GHVGH OD ySWLFD Ă€QDQFLHUD sino en una relaciĂłn entre costo e impacto, donde se mida cuĂĄnto impacto se obtuvo con determinada cantidad de recursos. 'ESTORES LOCALES Y GRUPOS TERRITORIALES

Para que los proyectos puedan materializarse, es fundamental integrar a quienes llevarĂĄn a cabo la polĂ­tica de prevenciĂłn en el territorio: los gestores locales y los grupos territoriales. Desde el punto de vista del ciudadano comĂşn, la cara visible, su “contacto directoâ€? serĂĄn quienes implementen los proyectos concretos en su barrio, su sitio de trabajo o lugar de estudio. Para ello se necesita una persona o un grupo, es decir, el gestor local o el

“GESTORES-MONITORESâ€? ADAPTADOS AL CONTEXTO LOCAL El educador intermediario de gangs %% 55 ,A ESTRATEGIA DE TRABAJO CON LAS PANDILLAS VIOLENTAS EN %% 55 INCLUYE COMO ACTOR VITAL EN TERRENO A MONITORES O EDUCADORES ESPECIALIZADOS hOUTREACH WORKERSv QUE TIENEN COMO MISIĂ˜N SER INTERMEDIARIOS ENTRE EL GANG Y EL PROYECTO INTEGRAL 3ON DE ORIGEN SOCIAL Y Ă?TNICO SIMILAR A LOS JĂ˜VENES A LOS CUALES SE DIRIGEN $EBEN MANEJAR CON DISCRECIĂ˜N LAS INFORMACIONES ENCONTRARSE DISPONIBLES PARA LOS PANDILLEROS EN VARIOS LUGARES SIN NECESIDAD DE PROTECCIĂ˜N POLICIAL .ECESITAN UNA FORMACIĂ˜N MĂ“NIMA EN CONTACTOS HUMANOS %SBENSEN & ! La unidad de convivencia de la policĂ­a de Badalona #ATALUĂ—A %SPAĂ—A ,A POLICĂ“A MUNICIPAL DE "ADALONA HA CREADO UNA UNIDAD ESPECIALIZADA EN LA RESOLUCIĂ˜N DE CONmICTOS ENTRE COMUNIDADES DE ORIGEN ISLĂˆMICO Y LOS HABITANTES DE "ADALONA 3U ROL ES AYUDAR A LA CONVIVENCIA RESOLVIENDO LOS CONmICTOS QUE SURGEN ENTRE LAS DOS COMUNIDADES Y ENTRE GRUPOS DE JĂ˜VENES Y ADULTOS 3UPONE POLICĂ“AS FORMADOS PARA ESTA TAREA Y QUE HAYAN ADOPTADO EL ENFOQUE DE hPROXIMIDAD ESTRATĂ?GICAv DONDE SE APUNTA A LA CALIDAD DE VIDA DE LOS HABITANTES MĂˆS QUE A LA DEFENSA DEL ORDEN &ERNANDEZ # El mediador de la favela Babilonia 2Ă“O DE *ANEIRO "RASIL ! 2 DESDE HACE DOCE AĂ—OS ACTĂžA EN LA FAVELA "ABILONIA RESOLVIENDO CONmICTOS QUE A VECES SON DE VIDA O MUERTE %N UNA POBLACIĂ˜N CON FUERTE PRESENCIA DE NARCOS ! 2 ES UN MEDIADOR DE CALLE QUE ENTIENDE LA MENTALIDAD DE LOS TRAlCANTES Y DEL RESTO DE LOS VECINOS (A ADQUIRIDO UNA AUTORIDAD que le permite dialogar con todos y proponer soluciones aceptadas por todos. Su enfoque es captar las energĂ­as positivas de los faveleros y construir JUSTICIA SOBRE ESTA BASE OBSERVACIĂ˜N DIRECTA

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

TABLA DE APOYO EN LA PLANIFICACIĂ“N DE ACTIVIDADES PROYECTO

ACTIVIDADES

PLAZOS Sem. 1

Proyecto 1

Sem. 2

Sem. 3

Sem. 4

EJECUTANTES Sem. 5

RESPONSABLE

Sem. 6

Actividad 1.1 Recursos EconĂłm. Otros Recursos Actividad 1.2 Recursos EconĂłm. Otros Recursos Actividad 1.3 Recursos EconĂłm. Otros Recursos

Proyecto 2

Actividad 2.1 Recursos EconĂłm. Otros Recursos Actividad 2.2 Recursos EconĂłm. Otros Recursos

grupo territorial. Un grupo o un gestor inadecuado -por falta de condiciones, por ser sectario o tener un historial negativo- pueden hacer fracasar la estrategia a nivel local. Los gestores locales y los grupos territoriales o monitores deben poseer conocimiento del årea, liderazgo y capacidad de convocatoria en el sector; ser capaces de conciliar miradas, posturas e intereses locales, y mediar en muchas ocasiones; saber traducir la política de prevención a la realidad inmediata, contar con experiencia en trabajo social en terreno, manejar información båsica en temas de seguridad, estar comprometidos; ser agentes de cambio y tener sentido común. 'HEHQ WDPELpQ DGDSWDUVH DO JUXSR GH EHQHÀFLDULRV DVSHFWR TXH se ha revelado decisivo en el caso de jóvenes en situación de riesgo. Por ejemplo, el trabajo con pandillas violentas requiere a menudo un tipo de monitor joven, cercano en tÊrminos de origen social a los pandilleros, porque el diålogo con adultos no resulta WDQ à XLGR /D HVWUDWHJLD GH UHLQVHUFLyQ GH SDQGLOOHURV HQ (( 88 se basa sobre este principio. En el caso de niùos de la calle, los o las monitoras que los acompaùan en los centros de acogida son a menudo jóvenes cercanos a ellos o ex niùos de la calle que asumen un rol de hermanos mayores. En barrios críticos, donde HO QDUFRWUiÀFR HV IXHUWH VH UHTXLHUH GH PHGLDGRUHV FRPXQLWDULRV con una gran capacidad y coraje, capaces de moverse en las zonas grises del årea donde ni la justicia ni la policía pueden intervenir (ver recuadro).

!CTIVIDADES INSUMOS PLAZOS Y EJECUTANTES

Para operacionalizar los proyectos, el equipo tĂŠcnico junto a los grupos de trabajo se deben abocar al desarrollo de un plan de traEDMR HQ GRQGH VH GHĂ€QDQ FODUDPHQWH ODV DFWLYLGDGHV ORV LQVXPRV los plazos y los ejecutantes. En funciĂłn de los resultados esperados, se hace una lista de activiGDGHV GHWHUPLQDQGR XQD VHFXHQFLD OyJLFD SDUD HOODV (VWR VLJQLĂ€FD ordenarlas en el tiempo, anteponiendo siempre aquellas que son prerrequisito para otras y las que van preparando el camino para hacer mĂĄs efectivo el impacto de las que las suceden. $ FDGD DFWLYLGDG VH OH DVLJQD XQ SOD]R GH HMHFXFLyQ UHDOLVWD +D\ que considerar los tiempos que deberĂĄn dedicarles el equipo tĂŠcnico, el grupo de trabajo y los gestores, al igual que los que no dependen de ellos, como aprobaciones, validaciones u otros. Es adecuado desagregar una actividad en tantas etapas como requiera. 3DUD FDGD DFWLYLGDG VH GHĂ€QH HO URO TXH YD D GHVHPSHxDU FDGD miembro del grupo de trabajo. AsĂ­ se precisan y organizan apropiadamente los recursos humanos disponibles. Se debe nombrar al responsable de cada actividad, persona a cargo de velar por que se ejecute correctamente y se llegue a resultado. ComĂşnmente se piensa que todo el equipo debe participar en todas las actividades, lo que deriva en descoordinaciones o falta de claridad acerca de quiĂŠnes son los encargados de tal o cual actividad. No necesaria-

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

mente es el responsable quien va a desempeĂąar las acciones; no se debe confundir a el o los ejecutantes con el responsable de las mismas.

PROMOCIÓN DE NORMAS Y COMPORTAMIENTOS EQUITATIVOS DE GÉNERO ENTRE HOMBRES JÓVENES, COMO ESTRATEGIA DE PREVENCIÓN DEL VIH

Š Pro Mundo

Otro punto relevante es establecer los insumos necesarios para el desarrollo de una actividad. Esto tiene una doble intenciĂłn; por un lado, programar las gestiones necesarias para obtener estos insumos y, por otro, establecer los costos asociados. De igual modo, al estimar la cantidad de ejecutantes de cada actividad, asĂ­ como el plazo requerido, es posible calcular los fondos para solventar los recursos humanos.

La ONG brasileĂąa Promundo, diseùó y coordinĂł el Programa H junto AL )NSTITUTO 0APAI %#/3 "RASIL Y 3ALUD GĂ?NERO -Ă?XICO ORIENTADO A MEJORAR LOS NIVELES DE EQUIDAD DE GĂ?NERO ENTRE LOS HOMBRES DE TRES COMUNIDADES DE BAJOS INGRESOS DE 2Ă“O DE *ANEIRO -ARĂ? "ANGU Y -Orro dos Macacos). La evaluaciĂłn del programa fue apoyada por las ORGANIZACIONES INTERNACIONALES 53!)$ 0OPULATION #OUNCIL

Sobre la base de una investigaciĂłn realizada para el diagnĂłstico, se deTERMINĂ˜ QUE LOS HOMBRES hEQUITATIVOS DE GĂ?NEROv SON AQUELLOS QUE 2ESPETAN A LAS MUJERES MOSTRANDO PREOCUPACIĂ˜N POR SUS SENTImientos y opiniones, y buscan relaciones basadas en la equidad y en la intimidad, no en la conquista sexual. 2. Creen que los hombres y las mujeres tienen los mismos derechos. !SUMEN Y COMPARTEN LA RESPONSABILIDAD POR LA SALUD REPRODUCTIva y por los problemas relativos a la prevenciĂłn de enfermedades sexuales. 4. Son, o procuran ser, responsables por lo menos de algunas tareas DOMĂ?STICAS Y PARTICIPAN EN EL CUIDADO DE LOS HIJOS 2EPRUEBAN LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER EN SUS RELACIONES DE PAREJA .O SON HOMOFĂ˜BICOS Sobre la base de estos criterios, se estableciĂł un plan de intervenciĂłn FUNDAMENTADO EN UN MODELO PARA ABORDAR ESTAS TEMĂˆTICAS DE GĂ?NERO en los ĂĄmbitos comunitario e individual. ,A INTERVENCIĂ˜N LLAMADA 0ROGRAMA ( h(v DE HOMBRE PRETENDIĂ˜ ESTImular una reexiĂłn en hombres jĂłvenes que fuesen capaces de cuestionar las normas tradicionales relacionadas con la masculinidad, y promover habilidades para la discusiĂłn y reexiĂłn sobre los “costosâ€? de la masculinidad tradicional y sobre las “ventajasâ€? de comportamientos MĂˆS EQUITATIVOS DE GĂ?NERO ,AS ACTIVIDADES DE INTERVENCIĂ˜N INCLUYERON DOS COMPONENTES PRINCIPALES 5N PROGRAMA EDUCATIVO PARA INCENTIVAR CAMBIOS DE ACTITUDES Y COMPORTAMIENTOS 5NA CAMPAĂ—A DE estilo de vida para incitar cambios en las normas sociales comunitarias RELACIONADAS A LO QUE SIGNIlCA SER HOMBRE ,AS ACTIVIDADES FUERON DIseĂąadas en 1999 por cuatro ONG latinoamericanas, coordinadas por Promundo. Finalmente se determinĂł ejecutar el programa en las siguientes etapas: s s s s

)MPLEMENTACIĂ˜N DE OlCINAS EDUCATIVAS )DENTIlCACIĂ˜N Y ENTRENAMIENTO DE LOS FACILITADORES 2ECLUTAMIENTO Y PARTICIPACIĂ˜N DE LOS JĂ˜VENES EvaluaciĂłn de la experiencia

WWW PROMUNDO ORG BR

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3DUD RUGHQDU HO WUDEDMR GH SODQLĂ€FDFLyQ VH VXJLHUH XWLOL]DU XQD WDEOD en donde se establezcan claramente las acciones, etapas, plazos, ejecutantes y responsables de cada actividad. Dar a las actividades XQD VHFXHQFLD WHPSRUDO D SDUWLU GH ORV REMHWLYRV SHUPLWLUi GHĂ€QLU OD UXWD FUtWLFD GHO SUR\HFWR DVLJQDU ORV SURIHVLRQDOHV QHFHVDULRV GHĂ€nir los insumos y estimar recursos asociados a cada evento. La tabla de esta pĂĄgina muestra un modelo que puede servir de apoyo a la hora de desarrollar los planes de acciĂłn y asignar los recursos. (V IXQGDPHQWDO SDUD ORV SODQHV GH DFFLyQ TXH VHDQ Ă H[LEOHV \ Iicilmente adaptables, de acuerdo a los resultados que se vayan obteniendo, a la contingencia y a imprevistos. Al considerar los recursos necesarios para los planes de acciĂłn y los momentos en que se precisan, hay que seĂąalar los puntos clave. AdemĂĄs, se deben incorporar e indicar evaluaciones periĂłdicas de ORV SODQHV GH DFFLyQ Ă€MDQGR FRQ DQWHULRULGDG H[SOtFLWDPHQWH ODV pautas y parĂĄmetros que se usarĂĄn. 0ASO )MPLEMENTAR LOS PLANES DE ACCIĂ˜N

CĂłmo se implementen los planes de acciĂłn va a depender mucho GH ODV UHDOLGDGHV ORFDOHV +D\ DOJXQDV OHFFLRQHV JHQHUDOHV TXH VH pueden derivar de experiencias exitosas en la materia. Por otra parte, existen ciertas orientaciones transversales a todas las experiencias que facilitan la implementaciĂłn de un plan de acciĂłn. Primero, puede ser muy Ăştil realizar actividades que son de “logro LQPHGLDWRÂľ R VHD TXH UiSLGD \ IiFLOPHQWH GHPXHVWUDQ ORV EHQHĂ€cios de la iniciativa. Eso ayuda a legitimar el trabajo de los actores y a involucrar a mĂĄs miembros de la comunidad. Muchas de estas DFWLYLGDGHV SXHGHQ SDUHFHU VXSHUĂ€FLDOHV H LQFOXVR RSXHVWDV HQ XQ FRPLHQ]R FRQ HO GLVHxR GHO SURJUDPD SHUR JHQHUDQ FRQĂ€DQ]D Segundo, mantener el trabajo del equipo tĂŠcnico y del lĂ­der, incluso si en este punto la tarea ha crecido y ha incluido muchos mĂĄs actores y socios. El lĂ­der tiene un rol clave en motivar la acciĂłn y promover el ĂŠxito, y el equipo tĂŠcnico continĂşa coordinando y manejando el proceso.


CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

“LA GENTE QUIERE MĂ S POLICĂ?ASâ€? Ya es conocido por muchos lĂ­deres de programas de seguridad ciudadana lo difĂ­cil que es crear conciencia de que la prevenciĂłn es mĂĄs efectiva que la represiĂłn. Muchas veces ha ocurrido que, cuando se da a conocer el inicio de un programa para la reducciĂłn de la delincuencia en una determinada comunidad, la gente espera saber en cuĂĄnto aumentarĂĄ el nĂşmero de policĂ­as o su proximidad. Muchas veces en sectores de gran COMPLEJIDAD SOCIAL SE HA CREADO LA IDEA DE QUE Ă?STA ES LA ĂžNICA SOLUCIĂ˜N VIABLE ANTE EL DELITO PORQUE SE LA CONSIDERA RĂˆPIDA CONlABLE Y PORQUE NO demanda esfuerzo por parte de la comunidad. Este hecho puede traer desazĂłn en un comienzo y nublar los esfuerzos realizados para crear una intervenciĂłn integral enfocada en la prevenciĂłn. No hay que desalentarse, e intentar hacer mĂĄs visible la presencia de policĂ­as en el sector, aunque la acciĂłn no constituya parte de su proyecto. 2ECUERDE QUE UNA MEDIDA DE hLOGRO INMEDIATOv GENERARĂˆ UN MEJOR AMBIENTE Y PERMITIRĂˆ A LA LARGA UNA MEJOR IMPLEMENTACIĂ˜N DE LAS ACTIVIDADES orientadas a la prevenciĂłn.

CIUDAD DE LOS NIĂ‘OS, ROSARIO, ARGENTINA "ASADA EN LOS POSTULADOS DE &RANCESCO 4ONUCCI 0EDAGOGO INVESTIGADOR $IRECTOR CIENTĂ“lCO DEL LABORATORIO h&ANO LA CIUDAD DE LOS NIĂ—OSv )TALIA ESTE PROYECTO PERTENECIENTE AL ÂŤREA DE LA .IĂ—EZ DE LA 3ECRETARĂ“A DE 0ROMOCIĂ˜N 3OCIAL DE LA MUNICIPALIDAD SURGE EN BASADA EN las siguientes premisas: una ciudad apta para los niĂąos es buena para todos, incluidas personas con discapacidades y la tercera edad; incorPORANDO LA VISIĂ˜N DE LOS NIĂ—OS Y LA CREATIVIDAD DE Ă?STOS SE ENRIQUECE LA CIUDAD Y LA COMPRENSIĂ˜N DE Ă?STA Y DE Ă?STOS EN SU COMPLEJIDAD %L ESCUchar e incorporar la mirada de los niĂąos, abandonando una exclusivaMENTE ADULTOCĂ?NTRICA TAMBIĂ?N DEBIERA LLEVAR A INTEGRAR MĂˆS FĂˆCILMENTE A GRUPOS ESPECĂ“lCOS COMO MIGRANTES POR EJEMPLO #OMO EL MUNICIPIO DE 2OSARIO SE HA DESCENTRALIZADO SE ELIGEN SEIS CONSEJOS DE INTEGRANTES CADA UNO UNO PARA CADA DISTRITO ²STO SE HACE A TRAVĂ?S DE UN SORTEO ENTRE LOS INTERESADOS CUANDO LOS ELEGĂ“A LA ESCUELA muchos iban “premiadosâ€? por tener los mejores resultados o “castigadosâ€? por ser los con peores resultados o los mĂĄs conictivos). Los consejeros duran dos aĂąos, y se van renovando de manera intercalada. ,A EDAD DE LOS NIĂ—OS ES ENTRE Y AĂ—OS EDAD EN QUE TIENEN CAPAcidad de abstracciĂłn y no tienen los conictos de la preadolescencia). Estos consejos proponen ideas, las que van desarrollando durante el AĂ—O PERIODO EN EL QUE SE VAN PRESENTANDO AL %QUIPO ,A #IUDAD DE LOS NiĂąos y NiĂąas -dos coordinadores por distrito mĂĄs un coordinador geNERAL Y A UNA #OMISIĂ˜N )NTERGUBERNAMENTAL PARA LLEGAR A PROPUESTAS CONCRETAS DE LAS MĂˆS DIVERSAS Ă“NDOLES %L lNANCIAMIENTO PARA LLEVARLAS a cabo surge de las reparticiones que, por el carĂĄcter de la propuesta, le corresponda.

INICIATIVAS COMO 5N SUEĂ—O EN COMĂžN CONVOCATORIA A SOĂ—AR UNA CIUDAD mejor- o MĂ­rame -carta a los adultos invitĂĄndolos a mirar a los ojos mĂĄs allĂĄ de las diferencias-. %NTRE ESTAS INICIATIVAS ESTĂˆ 3IĂ?NTESE SIĂ?NTASE PARTE DEL JUEGO QUE SURgiĂł de la necesidad de los niĂąos de sentirse seguros en los espacios pĂşBLICOS ESPECIALMENTE EN LOS QUE ELLOS JUEGAN O CIRCULAN !NTE LA PETICIĂ˜N PRIMERA DE TENER POLICĂ“AS RESGUARDANDO ESTOS ESPACIOS CON UNA CLARA inuencia de los adultos), desarrollaron la idea de instalar bancos de colores fuertes con los que invitan a los adultos a sentarse en ellos, prestar atenciĂłn en el espacio pĂşblico y asĂ­ generar condiciones de seguridad, en especial a los niĂąos y niĂąas. Este proyecto no sĂłlo desplaza la seguRIDAD DESDE LAS FUERZAS POLICIALES A LA CIUDADANĂ“A TAMBIĂ?N INVITA A USAR los espacios pĂşblicos, a recuperarlos, a integrar a los niĂąos y hacerlos VISIBLES EN EL MOBILIARIO CON EL PROYECTO CON SU PRESENCIA %NTREVISTAS A INTEGRANTES DEL EQUIPO DEL ÂŤREA DE LA .IĂ—EZ Y DE ,A #IUDAD de los NiĂąos)

El programa se ha consolidado al punto de estar varias de sus iniciativas INCORPORADAS EN LA DIFUSIĂ˜N TURĂ“STICA PRIVADA %S EL CASO DEL 4RĂ“PTICO DE LA )NFANCIA LA 'RANJA DE LA )NFANCIA LA )SLA DE LOS )NVENTOS Y EL *ARDĂ“N DE los NiĂąos. !DEMĂˆS SE REALIZA ANUALMENTE EL $Ă“A DE LA 2ADIO Y LA 4ELEVISIĂ˜N A FAVOR DE LOS .IĂ—OS SE HICIERON ,OS -ONSTRUOS DE LA "ASURA DE DENUNCIA POR la basura- y Nadie puede detenernos cuando pensamos -contra la violaciĂłn a los derechos humanos durante la Ăşltima dictadura-, ademĂĄs de

Los niĂąos, para su seguridad, quieren que los adultos se sienten en estos bancos para que los acompaĂąen.

Š ÂŤREA DE LA .IĂ—EZ

!SĂ“ 2OSARIO FUE LA PRIMERA CIUDAD EN DECLARAR UN $Ă“A DEL *UEGO Y LA #ONVIVENCIA EL PRIMER MIĂ?RCOLES DE OCTUBRE DESDE EN EL QUE participan reparticiones pĂşblicas, colegios, mundo privado, niĂąos y adultos en general.

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

La experiencia de Bogotรก constituye un ejemplo claro de la imSRUWDQFLD GH OD ร JXUD GHO OtGHU $OOt OD ร JXUD GH $QWDQDV 0RFNXV ha sido fundamental para la implementaciรณn del programa de reGXFFLyQ GHO FULPHQ \ OD YLROHQFLD 0RFNXV KD VLGR FDSD] GH SODQtear una polรญtica de seguridad, mediante mecanismos reconocibles para todos, estableciendo prioridades y seรฑalando acciones e indicadores para su ejecuciรณn (Paulsen, 2005). (O PpULWR GH %RJRWi HV TXH ORV VXFHVRUHV GH $ 0RFNXV \ GH VX predecesor J. Castro, han sabido continuar y profundizar su lรญnea de acciรณn como una forma de gobernanza no formalizada (Velรกsquez, 2008). Una situaciรณn similar se dio en Medellรญn, entre el alcalde Fajardo y su sucesor. Tercero, asegurar que el โ coordinadorโ entable una buena red de contacto entre los distintos niveles operativos del programa, los diversos actores y otras iniciativas que incidan sobre la seguridad. Si bien la red se tejerรก en la medida que el proyecto se institucionalice (ver secciรณn sobre Institucionalizaciรณn), generar canales de coordinaciรณn impedirรก malgastar esfuerzos y harรก que la acciรณn sea mรกs focalizada y acorde a los planes.

3.7. EJEMPLOS DE ENFOQUES Y DISEร OS DE PREVENCIร N En las pรกginas siguientes se presentan diversos ejemplos de abordaje de problemas de conductas de riesgo y de delitos que se mencionaron en la รบltima parte de la secciรณn referida a la etapa de GLDJQyVWLFR /RV HMHPSORV VRQ ร FWLFLRV SHUR FRUUHVSRQGHQ D OD realidad de muchas ciudades de la regiรณn.

GRUPO DE TRABAJO: TRร FICO Y CONSUMO DE DROGAS

Resultado del diagnรณstico: s 3E HAN IDENTIlCADO SECTORES DELIMITADOS GEOGRร lCAMENte, donde se han establecido redes de distribuciรณn de drogas. Estas redes involucran a distintos grupos etรกreos y, en algunos casos, incluyen a familias completas s %L TRร lCO SE ASOCIA A DEMANDA POR PARTE DE Jร VENES Y adultos jรณvenes, notรกndose un aumento progresivo de la participaciรณn de mujeres, especialmente de bajos ingresos, en la distribuciรณn de drogas

Causas s !LTOS NIVELES DE CESANTร A QUE FAVORECEN EL INVOLUCRAMIENto en redes de distribuciรณn s 0ATRONES CULTURALES DE CONSUMO DIFUNDIDOS A LO LARGO DE toda la sociedad s #ONDICIONES SOCIOECONร MICAS DESFAVORABLES EN UN IMportante segmento de la poblaciรณn s 6ALIDACIร N DEL TRร lCO DE DROGAS COMO UNA ALTERNATIVA A LA falta de oportunidades laborales s 6ALIDACIร N CULTURAL DE LA VIOLENCIA COMO FORMA DE RESOLUciรณn de con๏ฌ ictos en diversos barrios de la ciudad

%SCENARIOS POSIBLES s 7ROHUDQFLD FHUR DQWH HO WUiร FR \ FRQVXPR GH GURJDV s 3HUVHFXFLyQ SROLFLDO \ GH OD MXVWLFLD D ODV UHGHV GH WUiร FR s 5HGXFFLyQ GH OD GHPDQGD D WUDYpV GH SUHYHQFLyQ \ UHKDELOLWDciรณn. s 5HGXFFLyQ GH OD RIHUWD D WUDYpV GH RSRUWXQLGDGHV GH LQJUHVR DO mercado formal de trabajo. s โ Corte de drogasโ . s 5HGXFFLyQ GH GDxRV

El abordaje que se propone es coherente con una visiรณn que apunta a generar una cultura de la prevenciรณn a travรฉs de medidas focalizadas en una perspectiva de cohesiรณn social y de calidad de vida de los habitantes. Esta visiรณn puede ser distinta a la de algunas ciudades, y no pretende imponerse a todos sino presentarse como una manera de intervenir que debe ser consensuada entre el municipio, los socios y el equipo tรฉcnico que elaboran la estrategia. Por ende, los ejemplos son sugerencias e indicaciones, de manera que aun las ciudades que comparten la misma visiรณn no pueden ahorrarse la tarea de apropiarse de los enfoques propuestos y adaptarlos a la propia situaciรณn.

%NFOQUE (O WUiร FR \ HO FRQVXPR GH GURJDV JHQHUDQ XQD VHULH GH SURblemas que se van incrementando, asรญ como la tendencia al consumo problemรกtico de drogas y la violencia asociada al narcotrรกร FR 'HVGH HVWD SHUVSHFWLYD VH DERJDUi SRU ยดXQD VRFLHGDG OLEUH de drogasโ , pues con ello se acabarรญan los problemas de adicciรณn, delincuencia y violencia.

$ FRQWLQXDFLyQ VH SUHVHQWD XQ HMHPSOR ร FWLFLR EDVWDQWH DFRUGH con las realidades de muchas ciudades de Amรฉrica Latina: el caso GHO WUiร FR \ FRQVXPR GH GURJDV LOtFLWDV (Q pO VH GHVFULEH XQ FDmino a seguir por el grupo de trabajo responsable, que actรบa con el equipo tรฉcnico del municipio. Se presenta el proceso completo, incluyendo las fases de evaluaciรณn y consolidaciรณn, que serรกn analizadas en otras secciones. El tema presentado corresponde a un grupo de trabajo.

(O WUiร FR UHVSRQGH D XQ RUGHQ VRFLDO D XQ HVWLOR GH PHUFDGR donde, habiendo demanda, se provee de las drogas. Por eso adquiere relevancia disminuir la demanda con prevenciรณn y rehabilitaciรณn. Al mismo tiempo se torna necesario una coordinaciรณn entre los organismos de control, por una parte, y, por otra, de las instituciones que abordan variables tales como las oportunidades ODERUDOHV SUHVHQWHV HQ ORV VHFWRUHV GRQGH KD\ WUiร FR ODV FRQGLciones educacionales en esos sectores y la utilizaciรณn de espacios

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Capรญtulo 4: POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIร N

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIร N GRUPO DE TRABAJO TRร FICO Y CONSUMO DE DROGAS EQUIPO 1

EQUIPO 2

Rol

4RABAJO DE PREVENCIร N PROMOCIร N Y CONTROL

4RABAJO DE REHABILITACIร N Y REINSERCIร N

Objetivos

s #OMUNIDADES INFORMADAS SOBRE LOS EFECTOS DEL s 2EHABILITACIร N DE Jร VENES CONSUMIDORES ABUSIVOS DE consumo de drogas drogas s *ร VENES QUE INTERNALIZAN HERRAMIENTAS DE PRO- s 2ECONVERSIร N PRODUCTIVA DE Jร VENES INSERTOS EN REDES tecciรณn frente a las adicciones DE TRร lCO DE DROGAS

Mรฉtodo

s #AMPAร AS MASIVAS Y MEDIร TICAS EN SECTORES vulnerables s !CTIVIDADES MASIVAS DE ESTILOS DE VIDA SALUDABLE y herramientas de autocuidado s !CTIVIDADES ENFOCADAS A RETARDAR EL CONSUMO en los niรฑos y desincentivarlo en los consumidores habituales s !CTIVIDADES DE USO DE ESPACIOS Pร BLICOS ESPEcialmente aquellos considerados como ocupaDOS POR EL NARCOTRร lCO s #OORDINACIร N CON LA POLICร A EN SU TRABAJO DIRIGIdo a los principales abastecedores, y progresivo desmantelamiento de sus redes de apoyo y rePRODUCCIร N DEL TRร lCO

s $IAGNร STICO Y DERIVACIร N DE CONSUMIDORES ABUSIVOS DE drogas en la red local s 2EINSERCIร N Y SEGUIMIENTO A PERSONAS QUE HAN ESTADO INVOLUCRADAS EN EL TRร lCO Y O CONSUMO PROBLEMร TICO DE DROGAS DISTINGUIENDO ENTRE EL NEGOCIO FAMILIAR TRABAJO con la unidad familiar), las actividades de protecciรณn de LOS hSOLDADOSv DEL NARCOTRร lCO TRABAJO PERSONALIZADO Y LAS PANDILLAS VIOLENTAS INVOLUCRADAS EN ESTE TRร lCO s &OMENTO DE PLANES DE ABSORCIร N DE MANO DE OBRA QUE incluyen capacitaciรณn con perรญodo de pasantรญa remunerada s 2EDUCCIร N DEL DAร O EN CASOS ABSOLUTAMENTE NECESArios

Tiempo

A MESES

Continuo

Indicadores

s .ร MERO DE PARTICIPANTES EN LAS ACTIVIDADES s 4ASA DE PERSONAS REHABILITADAS s .ร MERO DE PARTICIPANTES EN ACTIVIDADES SALUDA- s 4ASA DE PERSONAS QUE LOGRAN REINSERTARSE EN TRABAJOS bles Lร CITOS Y ABANDONAR EL TRร lCO s 2EHABILITACIร N DE Jร VENES CONSUMIDORES ABUSI- s 4ASA DE CAPACITACIร N DE Jร VENES PARA EL TRABAJO EN ACTIvos de drogas vidades formales s 2ECONVERSIร N PRODUCTIVA DE Jร VENES INSERTOS EN REDES DE TRร lCO DE DROGAS s .ร MERO DE ESPACIOS RECUPERADOS PARA ACTIVIDAdes saludables s $ISMINUCIร N DE LOS PROBLEMAS ASOCIADOS AL NARCOTRร lCO COMO LAS BALACERAS O VIOLENCIA

Recursos humanos

s 0SICร LOGOS ASISTENTES SOCIALES EDUCADORES s -UNICIPIO monitores s 'OBIERNO 2EGIONAL s 0OLICร A s -INISTERIOS DE )NTERIOR 3EGURIDAD s -INISTERIO DE 3ALUD s -INISTERIO DE 4RABAJO s )NSTITUCIONES PRIVADAS

Evaluaciรณn

!NUAL

Consolidaciรณn e institucionalizaciรณn

Para la consolidaciรณn, se requiere de un equipo que coordine las dos lรญneas de trabajo: la prevenciรณn tanto del CONSUMO COMO DE LA INSERCIร N EN TRร lCO Y LA REHABILITACIร N Y REINSERCIร N DE QUIENES SE HAN INVOLUCRADO EN CONSUMO PROBLEMร TICO O TRร lCO /TRA ALTERNATIVA ES QUE COORDINE LA Lร NEA PREVENCIร N Y TRABAJE EN RED CON QUIENES hacen rehabilitaciรณn, propiciando condiciones para la reinserciรณn

"IANUAL

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

tanto fรญsicos como cognitivos que ayuden a disminuir las oportunidades de comercializaciรณn de drogas. Desde esta perspectiva, abordar el tema implica conocer las instituciones que trabajan en la prevenciรณn y focalizarse en rehabilitaciรณn, reinserciรณn y formaciรณn para la (re)inserciรณn de las personas que se han involucrado HQ HO WUiร FR \ FRQVXPR GH GURJDV -ODALIDADES DE INTERVENCIร N (O HTXLSR WpFQLFR PXQLFLSDO LGHQWLร FD ORV OXJDUHV GRQGH HO WUiร FR y consumo son habituales y problemรกticos, y coordina acciones focalizadas territorialmente de disminuciรณn de demanda: prevenciรณn, promociรณn de salud, rehabilitaciรณn, reinserciรณn. En la tabla de la pรกgina 85 se da un ejemplo de modalidad de intervenciรณn.

TEMA: REINSERCIร N DE EX CONVICTOS Resultado del diagnรณstico s 3E VERIlCA UNA ALTA TASA DE REINCIDENCIA DE EX CONVICTOS EN hechos delictivos s &AMILIAS AFECTADAS POR MIEMBRO EN LA Cร RCEL SIN NINGร N tipo de apoyo, especialmente para los niรฑos y niรฑas Causas s !USENCIA DE POLร TICAS QUE FACILITEN LA REINSERCIร N DE EX CONvictos s 4RABAJO DE REHABILITACIร N DE CONVICTOS REALIZADO Sร LO DESPUร S DEL EGRESO DE LA Cร RCEL s %STIGMATIZACIร N DE EX CONVICTOS s ,A Cร RCEL COMO UNA ESCUELA DE hESPECIALIZACIร Nv EN DELINcuencia

%SCENARIOS POSIBLES Las respuestas espontรกneas a estas situaciones son: ย $XPHQWR GH ODV SHQDV GH FiUFHO D UHLQFLGHQWHV ย ([LJHQFLD GH PD\RU Hร FLHQFLD GHO VLVWHPD SHQDO ย 7HQGHQFLD GH QR GDU RSRUWXQLGDGHV GH WUDEDMR D H[ FRQYLFWRV Otra respuesta posible para enfrentar esta problemรกtica se enfoca en realizar, con convictos, sus familias y la comunidad en la que se desenvuelven, un trabajo integral desde el perรญodo de encarcelamiento, apoyรกndolos psicolรณgica y materialmente.

sea un pilar de la reinserciรณn, ademรกs de otorgar una formaciรณn en Rร FLRV \ FRPSURPHWHU D HPSUHVDULRV HQ EULQGDUOHV XQD RSRUWXQLdad laboral dentro y fuera de la cรกrcel. 8Q VHJXQGR SLODU VH UHร HUH D OD QR GLVFULPLQDFLyQ GHO VXMHWR 3DUD esto se sugiere buscar en la comunidad a la que pertenece el ex convicto, alguna persona notable que asuma su apadrinamiento, GiQGROH XQ UHIHUHQWH GH FRQร DQ]D SDUD OD FRPXQLGDG \ VX IDPLOLD 8Q WHUFHU HOHPHQWR VH UHร HUH DO WUDEDMR FRQ ODV IDPLOLDV GH ORV DIHFtados, especialmente con los hijos e hijas, de manera de brindar un apoyo psicosocial, bajar el daรฑo de la estigmatizaciรณn de estos niรฑos y niรฑas y abrir oportunidades a sus hogares. Ademรกs, se busca realizar un trabajo integral, con un seguimiento a largo plazo y apoyo focalizado.

TEMA: BARRIOS CRร TICOS Resultados del diagnรณstico s %XISTEN EN LA CIUDAD BARRIOS CRร TICOS POR LA ALTA VIOLENCIA observable en el espacio pรบblico, el control territorial de reDES DE NARCOTRร lCO Y LA ALTA POSESIร N DE ARMAS ENTRE SUS habitantes Causas s (ISTORIA DE VIOLENCIA DESDE EL ORIGEN DEL BARRIO s %XCLUSIร N SOCIAL FUNCIONAL Y ECONร MICA DEL RESTO DE LA CIUDAD s &ALTA DE REDES DE ORGANIZACIร N VECINAL SOLIDARIAS Y DE PROYECtos en comรบn entre los vecinos y vecinas

%SCENARIOS POSIBLES ย )RFDOL]DU OD DFFLyQ SROLFLDO SUHVHQFLD HQ HO WHUULWRULR \ WUDEDMR GH LQWHOLJHQFLD SDUD GHVEDUDWDU UHGHV GH QDUFRWUiร FR ย ,QWHUYHQFLyQ PL[WD DFFLyQ SROLFLDO GH FRQWURO H LQWHOLJHQFLD MXQto a animaciรณn social para articular las redes sociales. ย ,QWHUYHQFLyQ GH ODUJR SOD]R DFFLyQ SROLFLDO GH GHVDUPH GH ODV UHGHV GH QDUFRWUiร FR MXQWR D PRYLOL]DFLyQ FRPXQLWDULD FDSDFLtaciรณn y acceso a mercado del trabajo y mejoramiento urbano, tanto de la infraestructura como de la conectividad con el resto de la ciudad.

%NFOQUE La perspectiva que guรญa el trabajo es la de entregar herramientas y dejar instaladas capacidades para que los ex convictos no reincidan y darles apoyo en un posible cambio de vida, cuando sea posible. Esto implica, por una parte, asumir el trabajo con convictos desde el momento de su reclusiรณn.

%NFOQUE El tema de los barrios crรญticos se aborda corrientemente como un SUREOHPD GH ยถH[SRUWDFLyQยท GH OD YLROHQFLD OD GHOLQFXHQFLD \ HO WUiร co de drogas hacia al resto de la ciudad. Esta perspectiva se enfoca en acabar con โ la delincuenciaโ , sin preocuparse del riesgo para los habitantes del barrio ni de la calidad de vida de la ciudad en su conjunto.

6LJQLร FD UHDOL]DU XQ DFRPSDxDPLHQWR SHUVRQDOL]DGR FRQ JUXSRV en el cual el apoyo mutuo, y de profesionales del รกrea psicolรณgica,

Pero la violencia en barrios crรญticos es un problema social y cultural complejo, relacionado con la exclusiรณn social y el estigma del

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Capรญtulo 4: POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIร N

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIร N GRUPO DE TRABAJO REINSERCIร N DE EX CONVICTOS COMITร MIXTO MUNICIPAL, POLICร A Y DIRIGENTES BARRIALES INTERESADOS

EQUIPO DE INTERVENCIร N CON CONVICTOS Y FAMILIAS

Rol

s $IRIGE EL EQUIPO DE INTERVENCIร N CON CONVICTOS Y FAMIlia s "USCA ESTABLECER ALIANZAS ESTRATร GICAS CON EMPRESARIOS serios para ofrecer alternativas a los convictos dentro y fuera de la cรกrcel s 'ENERA INSTANCIAS DE CAPACITACIร N PARA CONVICTOS Y SUS familias s -ONITOREA EL PROCESO

s "RINDA APOYO PSICOSOCIAL A CONVICTOS Y SUS FAMIlias s 6INCULA LAS FAMILIAS DE LOS CONVICTOS A LAS REDES DE servicios sociales disponibles s 6INCULA AL EX CONVICTO Y A SU FAMILIA CON UN VECINO hNOTABLEv CON EL lN DE QUE ร STE LO APADRINE SIRviendo de referente y apoyo ante su comunidad s &ORMA A LOS PADRINOS s #ANALIZA LAS OPORTUNIDADES DE CAPACITACIร N Y FORmaciรณn al interior de las cรกrceles y fuera de ellas

Objetivos

s 2EINSERCIร N LABORAL DE EX CONVICTOS Y REINSERCIร N SOCIAL s #ALIlCACIร N PROFESIONAL DE LOS EX CONVICTOS DESDE en el barrio la cรกrcel s -ANTENCIร N DE LAZO AFECTIVO CON LA FAMILIA DURANTE LA s 0ROTECCIร N DE LAS FAMILIAS DE LOS EX CONVICTOS DUreclusiรณn RANTE Y DESPUร S DE LA RECLUSIร N

Mรฉtodo

2EDISEร O DE LA POLร TICA DE TRABAJO CON EX CONVICTOS PARA s 2EALIZAR UN TRABAJO DESDE QUE EL SUJETO ENTRA EN LA realizar un trabajo desde las cรกrceles y con las familias Cร RCEL Y HASTA POR LO MENOS Aร OS DESPUร S DE SU salida, con retirada progresiva s 'ENERAR ALIANZAS ESTRATร GICAS CON EMPRESARIOS PARA QUE lNANCIEN CAPACITACIONES Y OPORTUNIDAdes laborales dentro y fuera de la cรกrcel s 4RABAJO CON LAS FAMILIAS DESDE QUE EL FAMILIAR INgresa al programa

Tiempo

Permanente

Indicadores

Cualitativos: Cualitativos: s .O DISCRIMINACIร N DE PARTE DEL ENTORNO BARRIAL NI DE LAS s #AMBIOS EN LA PERSPECTIVA DEL EX CONVICTO ASUME empresas responsabilidades

$ESDE LA ENTRADA A LA Cร RCEL HASTA POR LO MENOS Aร OS DESPUร S DE LA SALIDA

Cuantitativo: s $ISMINUCIร N DE LA TASA DE REINCIDENCIA

Cuantitativo: s 4ASA DE EMPLEO DE EX CONVICTOS s 4ASA DE INSERCIร N ESCOLAR EXITOSA DE LOS HIJOS DE EX convictos

Recursos humanos

Provienen de los servicios municipales involucrados

Provienen de los servicios municipales involucrados o de asociaciรณn especializada

Financiamiento

Presupuesto municipal con posibles aportes de empresas Presupuesto municipal con posibles aportes de emo instituciones presas o instituciones

Evaluaciรณn

$ESPUร S DEL MODELO PILOTO QUE DEBE DURAR A LO MENOS Por lo menos una vez al aรฑo, con el equipo de inaรฑos tervenciรณn Evaluaciรณn regular con empresarios y equipo de intervenciรณn

Consolidaciรณn e Consolidaciรณn de un grupo de apoyo a los convictos, compuesto de profesionales para el trabajo en cรกrceles. institucionalizaciรณn Este equipo realiza un trabajo de apoyo psicosocial personalizado con los convictos y hace llegar a las cรกrceles los recursos gestionados, tales como capacitaciones laborales y convenios con empresarios. Este equipo ademรกs realiza la labor de vincular a cada convicto con su familia, apoyรกndola y relacionรกndola con la red de servicios sociales disponibles. !SOCIACIร N LOCAL COMPUESTA DE EMPRESARIOS Y PADRINOS QUE TRABAJA EN ESTRECHA COLABORACIร N CON EL COMITร comunal de ex presos, capaz de conseguir convenios con empresarios para generar alternativas de trabajo, lNANCIAMIENTO Y CAPACITACIร N

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIร N GRUPO DE TRABAJO BARRIOS CRร TICOS EQUIPO 1

EQUIPO 2

EQUIPO 3

Rol

2ELACIร N Y COORDINACIร N CON LA PO- 4RABAJO DE MOVILIZACIร N COMUNITARIA licรญa

Objetivos

Control policial de la delincuencia y s 6ECINOS EMPODERADOS CON EL LIDE- Comunidad integrada al resto de la EL NARCOTRร lCO razgo de su barrio ciudad s 6ECINOS CON MENORES NIVELES DE temor

Mรฉtodo

$ESBARATAMIENTO DE REDES DE NAR- )NTERVENCIร N COMUNITARIA CON ACTIVI- )NTERVENCIร N COMUNITARIA MEJORACOTRร lCO A TRAVร S DE LA INTELIGENCIA dades sociales, organizaciรณn de veci- miento de los niveles de educaciรณn policial nos y capacitaciรณn y empleabilidad, desarrollo participativo de proyectos urbanos

Tiempo

MESES Aร O

Indicadores

MESES

2ECUPERACIร N INTEGRAL DEL BARRIO

Aร OS

s .ร MERO DE OPERATIVOS POLICIALES s .ร MERO DE ORGANIZACIONES ACTI- s .IVELES DE DESOCUPACIร N realizados vas s 0ORCENTAJE DE LOS HABITANTES QUE s .ร MERO DE REDES DE NARCOTRร lCO s .IVELES DE TEMOR EN EL BARRIO se quieren ir del barrio desbaratadas

Recursos humanos

s 0OLICร AS s #OORDINADORES EQUIPO Tร CNICO

s 0OLICร AS s 0OLICร AS s 3OCIร LOGOS PSICร LOGOS ASISTENTES s 3OCIร LOGOS PSICร LOGOS ASISTENTES sociales, educadores sociales, educadores, ingenieros, arquitectos, geรณgrafos

Financiamiento

s -UNICIPIO POLICร AS 'OBIERNO 2EGIONAL

s -UNICIPIO 'OBIERNO 2EGIONAL 0O- s -UNICIPIO 'OBIERNO 2EGIONAL LICร A -INISTERIO DEL )NTERIOR 3EGU-INISTERIO DEL )NTERIOR 3EGURIDAD ridad 6IVIENDA #IUDAD /BRAS 0ร BLICAS

Evaluaciรณn

$ESPUร S DE MESES

!L Tร RMINO DE LA INTERVENCIร N

$ESPUร S DE Aร OS

Consolidaciรณn e Para la detecciรณn de barrios crรญticos, constituciรณn de un consejo comunal de barrios que agrupe a los actores bainstitucionaliza- rriales de la ciudad. ciรณn )NSTITUCIONALIZACIร N DE UN EQUIPO INTERDISCIPLINARIO PERMANENTE DE TRABAJO E INTERVENCIร N EN BARRIOS CON PROFESIONALES PROVENIENTES DE DISTINTOS ร MBITOS -UNICIPIO 'OBIERNO 2EGIONAL -INISTERIOS Y SOCIEDAD CIVIL

MEDIACIร N COMUNITARIA EN FAVELAS DE Rร O DE JANEIRO, BRASIL ,A MEDIACIร N COMUNITARIA HA GANADO ESPACIO Y LEGITIMIDAD EN VARIAS FAVELAS DE 2ร O DE *ANEIRO DONDE NI LA JUSTICIA NI LA POLICร A PUEden realmente penetrar o realizar un trabajo efectivo y duradero. La mediaciรณn ha logrado en estos casos constituirse en un espacio de reapropiaciรณn de la justicia basada en las energรญas positivas de los moradores que sirve a la vez de instrumento de resoluciรณn de con๏ฌ ictos cotidianos y de intermediaciรณn entre FRACCIONES DE NARCOTRร lCO POLICร AS Y COMUNIDAD EVITANDO TENSIONES VIOLENTAS MUERTES AUMENTO DEL TEMOR Y DE LA DESCONlANZA AL INTERIOR DE LAS favelas. ! Y # MORADORES DE LAS FAVELAS "ABILONIA Y #ANTAGALO HAN TRABAJADO POR Mร S DE Aร OS LA MEDIACIร N COMUNITARIA TRANSFORMร NDOSE EN BUENOS REFERENTES DE AGENTES DE MEDIACIร N %N SUS INICIOS MEDIABAN CONmICTOS DE MANERA INFORMAL DESDE ESTA SITUACIร N CAMBIร CON LA CREACIร N DEL PROYECTO "ALCร O DE $IREITOS UNA INICIATIVA DEL )NSTITUTO DE %STUDIOS DE LA 2ELIGIร N )3%2 Y LA /.' 6IVA 2ร O QUIENES CREARON OlCINAS DE MEDIACIร N AL interior de las comunidades y capacitaron a agentes locales y comunitarios. Con el apoyo de este programa, el trabajo de los mediadores adquiriรณ un respaldo institucional y nuevas herramientas. En estos centros de Mediaciรณn se han atendido y resuelto miles de con๏ฌ ictos comunitarios: probleMAS ENTRE VECINOS DE VIOLENCIA DOMร STICA DE PENSIร N ALIMENTICIA DE BASURA EN LA CALLE SE RESUELVEN A DIARIO %N EL CENTRO DE MEDIACIร N COMUNITARIA #%-%#/ DE "ABILONIA SE ATIENDEN ENTRE Y DE ESTOS CASOS POR Dร A !DEMร S DE LA RESOLUCIร N DE CONmICTOS hMENORESv LOS MEDIADORES ARBITRAN LA NEGOCIACIร N COLECTIVA CON FRACCIONES DE NARCOTRAlCANTES O CON MILICIA POLICร AS CORRUPTOS QUE AMENAZAN LA PAZ EN EL TERRITORIO hMUCHAS VECES MEDIAMOS COSAS DE VIDA O MUERTEv SOSTIENE ! Para este trabajo, se requiere personas con legitimidad, creatividad, agilidad, liderazgo y la creencia y convicciรณn en la efectividad de esta herraMIENTA /BSERVACIร N DIRECTA

CONVIVENCIA PARA GUATEMALA h#UANDO SE HABLA DE CONVIVENCIA PARA 'UATEMALA LOS !CUERDOS DE PAZ APORTAN UNA SERIE DE HERRAMIENTAS DE DISEร O DE POLร TICAS SUMAMENTE ร TILES PARA DIFERENTES ร MBITOS DE LA VIDA SOCIAL GUATEMALTECA %N ESTE SENTIDO %L ACUERDO 'LOBAL SOBRE $ERECHOS (UMANOS CONSTITUYE UN PUNTO DE PARTIDA POR EXCELENCIA v 0.5$ 'UATEMALA

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Capรญtulo 4: POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIร N

Jร VENES CONVIVEN POR BOGOTร , COLOMBIA Es una estrategia de trabajo con grupos y organizaciones juveniles que pretende hacer visibles las acciones de los jรณvenes por la generaciรณn de espacios de convivencia en la ciudad y fortalecer sus ejercicios democrรกticos formales y no formales. ! TRAVร S DE h*ร VENES CONVIVEN POR "OGOTร v SE PROMUEVEN Y DESARROLLAN ESPACIOS DE PERTENENCIA EN LOS CUALES LOS Jร VENES COMPARTEN INTERESES COMUnes, afectos, identidad y reconocimiento de sus diferencias. #ONVOCA A ORGANIZACIONES Y GRUPOS JUVENILES DE LA CIUDAD QUE CON SUS TRABAJOS DE CUALQUIER INICIATIVA NATURALEZA MANIFESTACIร N ESTร TICA O POLร TICA promueven convivencia y reconocimiento. La poblaciรณn a la que se dirige este programa son las organizaciones o grupos juveniles que existen con o sin personerรญa jurรญdica y que estรกn constiTUร DOS POR HOMBRES Y MUJERES CUYAS EDADES ESTร N ENTRE LOS Y Aร OS *ร VENES CONVIVEN POR "OGOTร HA SIDO CONCEBIDA COMO UNA ESTRATEGIA QUE BUSCA PROMOVER A LAS ORGANIZACIONES JUVENILES COMO PROMOTORAS DE CONVIvencia en la ciudad, y cambiar los imaginarios que estigmatizan a los jรณvenes, de forma que se promueva mรกs fรกcilmente la participaciรณn juvenil. $ESDE LA 3ECRETARร A DE 'OBIERNO DE "OGOTร ESPERAN QUE LOS Jร VENES SEAN EL CAPITAL SOCIAL QUE APORTEN A LA PARTICIPACIร N Y CON BASES EN LA CONVIVENCIA ARMร NICA INCLUYENTE QUE RECONOZCA Y RESPETE LA DIVERSIDAD 5NA ORGANIZACIร N JUVENIL A LA QUE NO LE SEA INDIFERENTE EL FUTURO DE LA CIUDAD Y SUS HABITANTES QUE SEA PROTAGONISTA Y SIRVA DE REFERENTE POSITIVO A LAS GENERACIONES QUE VIENEN DETRร S DE ELLA OBSERVACIร N DIRECTA

resto de la ciudad sobre estos territorios. La violencia que se vive en ellos compromete la integraciรณn de los habitantes con el resto de la sociedad, tanto por su riesgo vital como por la forma en que son discriminados. Por tanto, una mirada que aborda la prevenciรณn como factor de cohesiรณn o de mejoramiento de calidad de vida, deberรญa asumir un enfoque que incorpore la movilizaciรณn del capital social comunitario presente en los barrios, asรญ como su conexiรณn efectiva al resto de la ciudad en una inclusiรณn urbana, funcional y por sobre todo econรณmica. &RQ HVH ร Q HV IXQGDPHQWDO OD LQWHUYHQFLyQ H[WHUQD SDUD SURYHHU XQ necesario trabajo de inteligencia policial al inicio y para enfrentar el debilitamiento del capital social y la vulnerabilidad de los recursos acumulados en la comunidad. Se forma una coaliciรณn comunal dinamizada por el equipo tรฉcnico, que formula y desarrolla una intervenciรณn llevada a cabo por un grupo especialista, dirigido a JHQHUDU ODV FRQร DQ]DV FRQ OD FRPXQLGDG PRYLOL]DU HO FDSLWDO VRcial y consensuar los proyectos e inversiones. La coaliciรณn reรบne a dirigentes sociales, asociaciones de jรณvenes, representantes de la sociedad civil interesados -iglesia, juntas de vecinos, ONG, etc.-. Su URO HV PRQLWRUHDU OD LQWHUYHQFLyQ DVt FRPR EXVFDU UHFXUVRV ร QDQcieros para asegurar la sustentabilidad de las actividades. -ODALIDADES DE INTERVENCIร N (O HTXLSR WpFQLFR PXQLFLSDO LGHQWLร FD FRQ VXV VRFLRV GH OD FRDOLciรณn los barrios donde se actuarรก y coordina la acciรณn de los grupos especializados.

TEMA: Jร VENES EN BARRIOS CRร TICOS (COMPLEMENTO A BARRIOS CRร TICOS) Resultados del diagnรณstico s %N UN BARRIO FAMILIAS CONSIDERADO COMO CRร TICO POR EL CONTROL DE NARCOTRร lCO Y EL USO HABITUAL DE ARMAS existe un porcentaje de jรณvenes que presentan conductas DE RIESGO VIOLENCIA CONSUMO DE DROGAS DESERCIร N ESCOlar), con algunos que estรกn insertos en la red de narcotralCANTES .O CUENTAN CON OPORTUNIDADES LABORALES NI CON espacios de encuentro en el รกmbito recreativo y cultural Causas s 6IOLENCIA DERIVADA DEL TRร lCO DE DROGAS ILร CITAS LEGITIMAda s &ALTA DE OPORTUNIDADES LABORALES ATRACTIVAS s &ALTA DE ADULTOS SIGNIlCATIVOS PARA LOS Y LAS Jร VENES Y problemas de violencia intrafamiliar

%SCENARIOS POSIBLES ย 'HVDUUROODU XQD SROtWLFD GH PDQR GXUD D WUDYpV GH OD DFFLyQ SROLcial y derivar a los jรณvenes a centros de rehabilitaciรณn cerrados. ย +DELOLWDU HVSDFLRV GH HQFXHQWUR SDUD ORV MyYHQHV TXH SURPXHvan la participaciรณn y el desarrollo de las tareas propias de la etapa juvenil, que favorezcan, por ejemplo, su identidad y sentido de pertenencia. Creaciรณn de un tipo de escuela protectora, capaz de asumir a jรณvenes en crisis y capacitarlos.

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

,A CREATIVIDAD Y EL ARTE SON RECURSOS QUE PUEDEN AYUDAR A ROMPER LØGICAS ESTABLECIDAS Y MIRAR DE NUEVAS FORMAS LOS PROBLEMAS LAS PERSONAS Y LA REALIDAD SON DINAMIZADORES DE LA VIDA SOCIAL Y COMUNITARIA %NFOQUE Los jóvenes que viven en barrios críticos pueden ser fácilmente estigmatizados y percibidos como una amenaza o riesgo para la sociedad. Desde una perspectiva de desarrollo de competencias y resiliencia, se asume como premisa la presencia de capacidades y recursos en los jóvenes que, al tener oportunidades de realizar tareas propias de su desarrollo psicosocial, les permitirán relacionarse de mejor forma con su entorno social, familiar y comunitario,

además de conseguir un control sobre sus vidas, y protegerse de los riesgos presentes en su medio. El abordaje se implementa desde las escuelas y los equipos que trabajan el grupo etáreo juvenil, para adaptar la escuela a la situación de estos jóvenes o bien para crear una escuela ad hoc, y para generar espacios reales de participación y de desarrollo de habilidades, basados en el capital social de los propios jóvenes.

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN GRUPO DE TRABAJO JÓVENES EN BARRIOS CRÍTICOS TRABAJO CON ESCUELA

TRABAJO BARRIAL

Responsabilidades

4RABAJAR CON EL SISTEMA ESCOLAR Y EN COORDINACIØN CON OTROS ACTORES FAMILIA ORGANIZACIONES SOCIALES COMUNITARIAS PARA la reinserción de los desertores escolares y la adaptación de la escuela

Crear espacios de encuentro para los jóvenes en su barrio, en los cuales se puedan generar procesos de participación y protagonismo como por ejemplo utilización de escuela de circo

Objetivos

$ESARROLLAR UNA EDUCACIØN ESCOLAR DE BUENA CALIDAD QUE SEA $ESARROLLAR CAPACIDADES DE UTILIZACIØN DE LOS PROPIOS RErespetuosa de los ritmos de aprendizaje de los alumnos de CURSOS PERSONALES Y SOCIALES DE LOS JØVENES EN BENElCIO estos barrios e involucre a sus familias de su desarrollo psicosocial

Método

s 'ENERAR UNA RED DE APOYO Y CONTENCIØN PARA LOS JØVENES s $ESARROLLO DE ACTIVIDADES QUE RESPONDAN A LAS NECESIDAque les permita desarrollar capacidades de reinserción esdes e intereses de los jóvenes colar e integración social s $ElNIR LOS PROGRAMAS CON ELLOS s #APACITAR PROFESORES EN ACOGER A ALUMNOS EN CRISIS s ²NFASIS EN LO LÞDICO ARTES MARCIALES Y AUTO CUIDADO

Tiempo

1 año de instalación, seguimiento permanente

Permanente

Indicadores

s .ÞMERO DE JØVENES REINSERTOS EN SISTEMA ESCOLAR s 2ESULTADOS ESCOLARES s 2ECONOCIMIENTO PÞBLICO DEL VALOR DE LA ESCUELA POR LAS familias y el entorno s !DQUISICIØN DE UN MODELO PEDAGØGICO PROPIO POR PARTE de los profesores s 3ATISFACCIØN DE LOS PROFESORES s 0ARTICIPACIØN DE LAS FAMILIAS

s !CTIVIDADES PROPUESTAS Y ORGANIZADAS POR LOS JØVENES s . DE JØVENES QUE PARTICIPAN EN TALLERES Y GRUPOS DE INTERÏS DEPORTE CULTURALES SOCIALES s %SPACIOS FÓSICOS E INFRAESTRUCTURA . Y TIPO ESPECIALmente habilitados para los jóvenes s . DE PROYECTOS Y O ACTIVIDADES GESTIONADOS POR JØVEnes

Recursos humanos

s %DUCADORES Y PSICØLOGOS

Monitores comunitarios, escuela de circo, musicoterapeutas, educadores en materia de arte, de autocuidado y de arte marcial

Financiamiento

s -UNICIPIO GOBIERNO REGIONAL O CENTRAL

s -UNICIPIO GOBIERNO REGIONAL O CENTRAL

Evaluación

s %VALUACIØN DE PROCESO AL A×O s %VALUACIØN RESULTADOS ESCOLARES DESPUÏS DE A×OS

s %VALUACIØN DE PROCESO s %VALUACIØN MÏTODO PEDAGØGICO EN FORMA COMPARATIva con otras experiencias

Consolidación e institucionalización

%SCUELAS QUE CUENTEN CON PROGRAMAS ESPECIALES DE REINSERCIØN Y APOYO ESCOLAR )NSTALACIØN DE UN SISTEMA CONSTANTE DE SENSIBILIZACIØN Y DISCUSIØN ACERCA DE LAS ESTRATEGIAS ESPECÓlCAS DE TRABAJO CON JØVENES EN SITUACIØN DE RIESGO EN LAS OlCINAS DE JUVENTUD A NIVEL LOCAL Y CON DISTINTOS PROGRAMAS CON ENFOQUE PREVENTIVO #APACIDAD DE SEGUIMIENTO DURANTE TODA LA FASE DE FORMACIØN HASTA LA ENTRADA EN EL TRABAJO DE LOS JØVENES CONSIDERADOS EN EL PROGRAMA $ESARROLLO DE UNA POLÓTICA LOCAL DE JUVENTUD QUE VELE POR UN ENFOQUE DE COMPETENCIAS Y DESARROLLO DE CAPACIDADES EN EL TRABAJO CON JØVENES TANTO EN LAS ACTIVIDADES QUE SE DESARROLLAN DIRECTAMENTE CON ÏSTOS COMO EN LA INSTALACIØN DE ESTE discurso en otras instancias municipales que trabajen indirectamente con este grupo.

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

BIBLIOTECA POPULAR DE BELLA VISTA, CĂ“RDOBA, ARGENTINA Antecedentes: ,A "IBLIOTECA 0OPULAR DE "ELLA 6ISTA COMENZĂ˜ EN COMO UN ESPACIO de lectura, reexiĂłn e intercambio de problemas para adultos, en un baRRIO CON FAMILIAS DE MUY BAJOS INGRESOS CREADO AĂ—OS ATRĂˆS Y HAbitado principalmente por artesanos, obreros industriales, pequeĂąos comerciantes y algunos empleados pĂşblicos. Pero, al poco tiempo, muchos niĂąos demandaron atenciĂłn, actividades y se apropiaron de ese espacio. %N LOS AĂ—OS YA TRANSCURRIDOS LA "IBLIOTECA QUE COMENZĂ˜ CON VOlĂşmenes, un salĂłn de 50 metros, una bibliotecaria y una docente, ha pasado a ser una instituciĂłn referente y motivadora del desarrollo comunitario del barrio. En sus instalaciones se realizan cursos, talleres y seminarios, funciones SEMANALES DE CINE CON DEBATE lESTAS FAMILIARES Y ACTIVIDADES MUSICALES actividades centradas en la narraciĂłn oral, funciones de teatro, murgas y comparsas. La edad de los participantes se extiende desde los 4 aĂąos hasta la ancianidad. Especialmente en el servicio bibliotecario, en la animaciĂłn a la lectura y en la huerta se organizan actividades colectivas con cursos complementarios de escuelas primarias de la zona. El servicio bibliotecario cuenta con 21.000 volĂşmenes actualmente. Modelo institucional 3E HA MANTENIDO LA "IBLIOTECA COMO EJE DEL PROYECTO Y LA LECTURA COMO herramienta del desarrollo humano y enriquecimiento cultural. Pero en LOS AĂ—OS TRANSCURRIDOS Y EN LA MEDIDA EN QUE LA "IBLIOTECA SE INSERTABA EN el barrio y los vecinos -adultos y niĂąos- se incorporaban a sus actividades, cambiĂł el rol social: pasĂł de receptora pasiva de demandas a motivadora activa del desarrollo comunitario.

s Concretar en respuestas y actividades la participaciĂłn intergeneracional, revalorizando el rol de la tercera edad, no meramente en el plano formal, sino como agente real en la reconstrucciĂłn de la historia social y el traspaso de capacidades y saberes. Esto incluye a la generaciĂłn adulta, que en el hogar tiene escasa comunicaciĂłn intelectual y afectiva con los hijos y a la que hay que OFRECER ESPACIO EN LA "IBLIOTECA ESPECIALMENTE EN LOS TALLERES DE LECTURA PARA QUE A TRAVĂ?S DE LA NARRACIĂ˜N DE SU COTIDIANEIDAD HOGAREĂąa y laboral, se autovaloren como miembros activos de la sociedad s Organizar de modo mĂĄs sistemĂĄtico la inclusiĂłn de la lectura colectiva, especialmente la narrativa, la poesĂ­a y la historia, como elemento CONSTITUYENTE EN TODAS LAS ACTIVIDADES SENSO PERCEPTIVAS ARTĂ“STICAS deportivas, de capacitaciĂłn laboral). Estimular ese hĂĄbito haciendo mĂĄs frecuentes y regulares los “fogonesâ€? y “calderosâ€?, para asociar la participaciĂłn emocional colectiva a esa prĂĄctica s )NTERRELACIONAR NO SĂ˜LO LOS CONTENIDOS DE CADA ACTIVIDAD GRUPAL SINO estimular en la prĂĄctica -y sobre temas y problemas concretos- el tratamiento colectivo entre dos o mĂĄs grupos para realizar acciones s )NCORPORAR LAS SALIDAS EXCURSIONES Y VIAJES REALES Y TAMBIĂ?N IMAGInarios, por ejemplo, a la selva amazĂłnica o a las Salinas Grandes), COMO PRĂˆCTICA SISTEMĂˆTICA PARA TODOS LOS GRUPOS ADULTOS JĂ˜VENES y niĂąos), como instrumento educativo y herramienta de desarrollo intelectual y emocional s Crear conciencia en todo el equipo docente y estimular en los vecinos la exploraciĂłn de todos los espacios y dimensiones no transitados cotidianamente, y su valorizaciĂłn s Sistematizar la evoluciĂłn de los procesos de aprendizaje, y reexionar sobre ellos para evaluar colectivamente -por grupo, por ĂĄrea, por edad, y luego en el conjunto- las metodologĂ­as y los resultaDOS EN RELACIĂ˜N CON LOS OBJETIVOS MĂˆS GLOBALES /BSERVACIĂ˜N DIRECTA

Los ejes del trabajo s 0RIVILEGIAR LAS ACCIONES PREVENTIVAS EN SĂ“ MISMA LA ACTIVIDAD DE LA "Iblioteca, educativa y cultural, es eminentemente preventiva). Pero, al mismo tiempo, existe conciencia de que, en el barrio, existen graVES PROBLEMAS SALUD NUTRICIĂ˜N ABUSO VIOLENCIA ADICCIONES DELITOS contra las personas y la propiedad), y que es necesario estimular reACCIONES PROTECTORAS Y QUE LA COMUNIDAD SE HAGA CARGO TAMBIĂ?N DE FUNCIONES DE REPARACIĂ˜N Y DEFENSA DE LOS MĂˆS DĂ?BILES

Š 5!( 2OSA -ARIA /LAVE

,A "IBLIOTECA ASPIRA A SER UNA COMUNIDAD DE APRENDIZAJE CARACTERIZADA por: s #ENTRALIDAD DE LA LECTURA TEXTO E IMAGEN s !CTIVIDADES DIRIGIDAS AL DESARROLLO CULTURAL PSICO FĂ“SICO SOCIAL Y CĂ“VICO s CombinaciĂłn de disciplinas s Espacio para todas las edades y para ambos sexos s ParticipaciĂłn de los vecinos s )NTEGRACIĂ˜N DE TRABAJO VOLUNTARIO Y DE TRABAJO RENTADO s )NVESTIGACIĂ˜N DOCENCIA INTERVENCIĂ˜N s !RTICULACIĂ˜N CON ESCUELAS PRIMARIA Y SECUNDARIA #ENTRO -UNICIPAL DE 3ALUD DISPENSARIO Y HOSPITAL PROVINCIAL

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

El enfoque es concebido como complementario a aquel propuesto en el ejemplo de barrios crĂ­ticos. -ODALIDADES DE TRATAMIENTO Se puede constituir un equipo profesional, que trabajarĂĄ transversalmente con los departamentos de educaciĂłn, de juventud y de salud, y con los equipos orientados a las intervenciones en el barrio crĂ­tico (ver ejemplo). Se focaliza las actividades en dos ĂĄreas: escuela y espacio de participaciĂłn barrial.

TEMA: NIĂ‘OS DE LA CALLE Resultados del diagnĂłstico s %N UNA CIUDAD DE APROXIMADAMENTE MILLĂ˜N DE HABITANtes, existen entre 500 y 1.500 niĂąos de la calle s ,A GRAN MAYORĂ“A DE ELLOS ES CONSUMIDORA DE DROGAS PASTA base), muchos viven en pareja, se observan situaciones de comercio y explotaciĂłn sexual s 4RES INSTITUCIONES REALIZAN ACCIONES CON LOS NIĂ—OS EN ESTA SItuaciĂłn, sin coordinaciĂłn entre ellas. La tasa de reinserciĂłn social es muy baja y la reinserciĂłn familiar casi nula Causas s %XCLUSIĂ˜N SOCIAL DE LAS FAMILIAS DE LOS MENORES s -ALTRATO INTRAFAMILIAR Y ABUSOS HACIA MENORES s -IGRACIĂ˜N CAMPO CIUDAD DE NIĂ—OS SOLOS

%SCENARIOS POSIBLES ‡ 3URPRYHU HO UHWLUR WRWDO GH ORV QLxRV GH OD FDOOH D WUDYpV GHO encierro y la represión. ‡ 0DQWHQHU D ORV QLxRV HQ OD FDOOH GiQGROHV GH IRUPD LQWHUPLWHQte alimentación, salud y otros servicios båsicos. ‡ 3URPRYHU HO UHWLUR SDXODWLQR \ YROXQWDULR GH ORV QLxRV GH OD calle, integråndolos progresivamente a actividades de tipo recreativo, socioeducativo, de rehabilitación, desintoxicación, actividades prelaborales. %NFOQUE Un niùo de la calle constituye una seùal del grave deterioro de una familia en situación de exclusión social, que no ha logrado darle protección y apoyo. TambiÊn revela un sistema social incapaz de asegurarle sus derechos. En otros casos, es la disfuncionalidad de la familia la que genera la situación. La vida de la calle, sin ningún soporte familiar ni social, expone a los niùos a situaciones de alta vulnerabilidad física, psicológica y social. Consumo abusivo de drogas, desescolarización, desvinculación de los sistemas de apoyo social, enfermedades no tratadas, delitos ocasionales, junto a otras conductas de alto riesgo, arriesgan un deterioro grave y progresivo de la vida de los niùos. Salvo, parcialmente, en el caso de niùos migrantes del campo, la hipótesis de reinserción en la familia de origen es por lo general utópica, siendo aquella una de las principales causas del problema, y la ruptura afectiva el equivalente a un divorcio.

INSTITUTO DE PROTECCIĂ“N PARA LA NIĂ‘EZ Y JUVENTUD IDIPRON-BOGOTĂ , COLOMBIA %S UNA )NSTITUCIĂ˜N QUE EXISTE HACE AĂ—OS DEPENDE DE LA !LCALDĂ“A MAYOR DE "OGOTĂˆ Y ATIENDE A NIĂ—OS Y JĂ˜VENES ENTRE Y AĂ—OS QUE HABITAN en las calles en condiciones de abandono e indigencia. Los rescata de la calle y los motiva a ingresar a un programa que promueve su formaciĂłn integral, es decir su desarrollo fĂ­sico, social y espiritual. 0ROMUEVE LA FORMACIĂ˜N INTEGRAL DEL NIĂ—O A Y DEL JOVEN HABITANTE DE CALLE EN EL MARCO DE UN PROFUNDO RESPETO POR SU LIBERTAD E INDIVIDUALIDAD PARA que logre avanzar gradualmente e integrarse a la sociedad, al trabajo y mantenerse como ciudadano. Se desarrollan acciones preventivas de la problemĂĄtica callejera que afecta a la poblaciĂłn en situaciĂłn de vulnerabilidad. El trabajo se organiza en distintas etapas, las cuales van avanzando en base a la voluntariedad. Las etapas son: 1.- La Calle. La meta es lograr que el niĂąo acepte la ayuda y entre al programa libremente #LUB 3E COMPLEMENTA CON LAS UNIDADES EDUCATIVAS DE ATENCIĂ˜N INTEGRAL %N Ă?STOS EL NIĂ—O ENCUENTRA ALIMENTO ATENCIĂ˜N EN SALUD RECREACIĂ˜N etc. 3.- Compromiso. Pretende catalizar en el niĂąo la voluntad de abandonar la calle y dedicarse a un proyecto de vida diferente, mĂĄs productivo, estimulante y humano 4.- PersonalizaciĂłn. El niĂąo inicia procesos formales de alfabetizaciĂłn, educaciĂłn bĂĄsica primaria 5.- SocializaciĂłn. Permite la formaciĂłn ciudadana y el autogobierno #OMPROMISO !L TERMINAR ESTA ETAPA SE APOYA EN LA BĂžSQUEDA DE EMPLEO VIVIENDA DElNICIĂ˜N DE SITUACIĂ˜N MILITAR CEDULACIĂ˜N Y VINCULACIĂ˜N A otras unidades educativas )$)02/. NO PERMITE QUE EXTERNOS ENTREVISTEN FOTOGRAFĂ“EN NI TOMEN A LOS NIĂ—OS Y JĂ˜VENES COMO SUJETOS DE ESTUDIO 2ESPETAN AL MĂˆXIMO LA PRIVACIDAD DE CADA NIĂ—O /BSERVACIĂ˜N DIRECTA

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

/.' 'ENTE DO "RASIL #ENTRO DE !TENCIĂ˜N A .IĂ—OS EN &AVELA #AVALĂ?O .ITERĂ˜I "RASIL

-ODALIDADES DE TRATAMIENTO Se constituye alrededor del equipo tĂŠcnico del municipio un grupo de apoyo compuesto de empresarios, personas de Iglesia o de ONG especializadas, si las hay. Su funciĂłn serĂĄ gestionar recursos para

la creaciĂłn y funcionamiento progresivo de un par de centros de acogida situados en lugares accesibles a los niĂąos. AdemĂĄs, se contrata un equipo profesional especializado y voluntarios, que trabaja directamente con los niĂąos.

Š 5!( 'ERMĂˆN $Ă“AZ 5RRUTIA

Las líneas de acción que se formulan a continuación consideran tres aspectos (entre otros) necesarios de abordar: ‡ &RQRFHU HQ SURIXQGLGDG OD UHDOLGDG GH ORV QLxRV GH OD FDOOH D WUDvÊs de una encuesta especializada: lugares donde se encuentran, sitios donde duermen en la noche, cómo se alimentan, formas de resolver sus problemas de salud, dinåmicas y rituales. Fundamental es saber cuåntos son, sexo, edad, situación de salud, educación, relación con la justicia, familias a las cuales pertenecen, redes de las que forman parte y, eventualmente, familias de niùos de la calle con hijos nacidos en la calle. ‡ 'HVDUUROODU HQ HVWUHFKD FRODERUDFLyQ FRQ HO HTXLSR PXQLFLSDO una sólida red de ayuda institucional y privada, la cual se encargue de mantener información actualizada sobre la situación de los niùos, movilizar recursos y gestionar un programa de apoyo. ‡ 'HVDUUROODU DGHFXDGDV FDSDFLGDGHV WpFQLFR SURIHVLRQDOHV TXH permitan otorgar una atención especializada y de calidad a los niùos en proceso de retiro paulatino, parcial o total, de la calle.

“SE ESSA RUA FOSSE MINHAâ€? (SER)*: CIRCO SOCIAL CON NIĂ‘OS DE LA CALLE, RĂ?O DE JANEIRO, BRASIL 3%2 SURGIĂ˜ EN LA DĂ?CADA DE LOS COMO UN PROYECTO SOCIAL DESTINADO A UNA ACCIĂ˜N EDUCATIVA DE INTEGRACIĂ˜N Y DE GARANTĂ“A DE LOS DERECHOS DE NIĂ—OS DE LA CALLE 3E COMENZĂ˜ A TRABAJAR EN CON NIĂ—OS DE LA CALLE EN DOS BARRIOS DE LA ZONA SUR DE 2Ă“O Y SE CREĂ˜ EL #ENTRO DE $ESARROLLO #REATIVO DE Laranjeiras, un lugar de acogida por el dĂ­a donde los niĂąos pueden participar de una serie de actividades orientadas al desarrollo de su autonomĂ­a Y AL INICIO DE UNA REmEXIĂ˜N SOBRE SU PROYECTO DE VIDA %N EL PROYECTO SE TRANSFORMA EN /.' Y CREA LA CASA DE ACOGIDA 6ILA )SABEL LUGAR DONDE LOS NIĂ—OS PUEDEN DORMIR Y TERMINAR SU PROCESO DElNITIVO DE INTEGRACIĂ˜N A LA SOCIEDAD ,A IMPLEMENTACIĂ˜N DE TĂ?CNICAS CIRCENSES BAJO EL CONCEPTO DE h#IRCO 3OCIALv CONSTITUYĂ˜ UN CAMBIO METODOLĂ˜GICO DONDE EL JUEGO LA ALEGRĂ“A Y LA CONlANZA LA RESPONSABILIDAD EL TRABAJO EN EQUIPO Y LA DISCIPLINA EL PROCESO DE CREACIĂ˜N EL HUMOR Y LA GRACIA DE LAS HABILIDADES CIRCENSES FUNCIONAN como “trampolinesâ€? pedagĂłgicos para un salto en la calidad de vida y participaciĂłn social. En esta metodologĂ­a se busca canalizar los lenguajes corporales de los niĂąos y niĂąas en desafĂ­os concretos donde ellos se sientan valorados y puedan canalizar sus ansias de desafĂ­o y riesgo. “Es necesario que se estimule la capacidad creadora, que saca de la vida el amargor de la sobrevivencia, y va adicionando el sabor de que la humanidad vale LA PENA Y LA CERTEZA DE QUE LA VIDA ES RE INVENTADA EN TODO MOMENTOv Esta metodologĂ­a es trabajada desde la calle, con nĂşcleos de hasta 40 niĂąos, por medio de diĂĄlogos en rondas de capoeira, artistas de calle, teatro de resistencia, foros educativos en plazas pĂşblicas, trabajo formativo con educadores sociales, etc. Luego se hace la invitaciĂłn a participar libremenTE DEL CENTRO DE $ESARROLLO #REATIVO DE ,ARANJEIRAS DONDE SE CUENTA CON UN GRUPO DE CIRCO UN GRUPO DE TEATRO UN GRUPO DE GRIOT CONTADORES DE historias orales en la tradiciĂłn africana) y un espacio educativo, con biblioteca y sala de informĂĄtica. En este centro participan alrededor de 20 A NIĂ—OS Y NIĂ—AS DIARIAMENTE CON LOS CUALES ADEMĂˆS DE ACTIVIDADES CORPORALES SE TRABAJAN LAS TEMĂˆTICAS DE LA VIOLENCIA EL CONSUMO Y TRĂˆlCO DE DROGAS LA PREVENCIĂ˜N DEL SIDA LAS RELACIONES DE GĂ?NERO ETC SIEMPRE DESDE UNA PERSPECTIVA Y LENGUAJE ARTĂ“STICO CULTURAL h%S NECESARIO QUE ELLOS SE DEN CUENTA QUE LA CALLE DA UNA SENSACIĂ˜N DE LIBERTAD FALSA QUE LA CALLE NO ES LUGAR DE VIDA PARA NADIEv AlRMA UNO DE LOS MONITORES DEL PROGRAMA /BSERVACIĂ˜N DIRECTA

4RADUCCIĂ˜N 3I ESTA CALLE FUESE MĂ“A TRADUCCIĂ˜N LIBRE

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIĂ“N GRUPO DE TRABAJO NIĂ‘OS DE LA CALLE RED DE APOYO

EQUIPO PROFESIONAL

Rol

s 2EALIZA Y ACTUALIZA A TRAVĂ?S DEL EQUIPO PROFE- s $ESARROLLA LAS ACCIONES DIRECTAS DE APOYO EN LA CALLE Y SIONAL O DE UNA INSTITUCIĂ˜N ESPECIALIZADA CONanima los centros de acogida SULTANDO 5.)#%& POR EJEMPLO UNA ENCUESTA s !YUDA A NIĂ—OS MIGRANTES A SU POSIBLE REINSERCIĂ˜N EN LA sobre la situaciĂłn de los niĂąos y la actualiza pefamilia de origen s #ON LA RED DE APOYO CAPACITA A LA POLICĂ“A EN CĂ˜MO TRATAR riĂłdicamente s $ESARROLLA LA COORDINACIĂ˜N DE LAS DISTINTAS INSTIa los niĂąos tuciones expertas en el tema s -OVILIZA FONDOS PARA PROGRAMAS Y MONITOREA SU implementaciĂłn

Objetivos

Crear una red estable, dinåmica y exible que Que los niùos dejen la calle, integråndose progresivamente apoye tanto a los niùos que se estån reintegrando a estos centros de acogida y a sus centros de formación. como a los que aún estån en la calle Para los niùos migrantes, posibilidad de reinserción familiar

MĂŠtodo

s #ONSULTA POR EJEMPLO A 5.)#%& O UN CENTRO s &ORMAR MONITORES CAPACITADOS PARA EL TRABAJO CON LOS NIĂąos en la calle universitario para la realizaciĂłn de una encuess /RGANIZAR CENTROS DE ACOGIDA DONDE LOS NIĂ—OS PUEDAN IR ta s #AMPAĂ—AS DE RECOLECCIĂ˜N DE FONDOS a almorzar y dormir solo cuando quieran, y en donde se sientan valorados y responsables de ciertas labores s &ORMACIĂ˜N DE UNA RED DE APOYO DE INSERCIĂ˜N LAs /RGANIZAR CENTROS DE FORMACIĂ˜N LABORAL AD HOC PARA NIboral con empresarios Ăąos reinsertos s #ONSTITUCIĂ˜N CON EL EQUIPO PROFESIONAL DE RED de familias que acogen a los niĂąos durante los lNES DE SEMANA

Tiempo

s &ORMACIĂ˜N Y CONSOLIDACIĂ˜N DE ESTA RED REQUIERE Permanente por lo menos un aĂąo s ,A RED PERMANECERĂˆ HASTA QUE EL NĂžMERO DE NIĂąos de la calle sea bastante bajo para permitir UNA ACCIĂ˜N AUTOSUlCIENTE DE LOS CENTROS DE ACOGIDA VARIOS AĂ—OS

Indicadores

s %STRUCTURA DE CONOCIMIENTO ACTUALIZADO DE LOS niĂąos de la calle s 3USTENTANBILIDAD lNANCIERA DE LOS PROGRAMAS s $IMENSIĂ˜N Y Ă?XITO DE LA 2ED DE &AMILIAS DE ACOGIDA DURANTE LOS lNES DE SEMANA s #OORDINACIĂ˜N DE LAS INSTITUCIONES DE APOYO

Recursos humanos

s ,Ă“DERES SOCIALES EJ EX DEPORTISTAS FAMOSOS O s 0SICĂ˜LOGOS Y EXPERTOS EN TRATAMIENTOS DE DESINTOXICArepresentantes de las distintas organizaciones ciĂłn, empresarios, pedagogos, monitores debidamente involucradas CAPACITADOS IDEALMENTE NIĂ—OS QUE HAYAN PASADO POR s %MPRESARIOS ESTOS CENTROS TĂ?CNICOS CAPACES DE FORMAR EN OlCIOS s %XPERTOS EN EL TEMA DE NIĂ—OS EN SITUACIĂ˜N DE calle

s #REACIĂ˜N Y BUEN FUNCIONAMIENTO DE CENTROS DE ACOGIda s 2EDUCCIĂ˜N DEL NĂžMERO DE NIĂ—OS EN LA CALLE s .ĂžMERO DE NIĂ—OS QUE ASISTEN AL CENTRO s 2EINSERCIĂ˜N DE NIĂ—OS DE LA MIGRACIĂ˜N s 4RATO POLICIAL CORRECTO A LOS NIĂ—OS

ConsolidaciĂłn e Se constituye una red de apoyo y acogida a los niĂąos de la calle, que moviliza la bĂşsqueda de recursos anualmeninstitucionalizaciĂłn TE Y QUE RECIBE EL RESPALDO TĂ?CNICO E INSTITUCIONAL DE ORGANIZACIONES EN PRO DE LA INFANCIA )NCORPORACIĂ˜N EN LA POLĂ“TICA LOCAL DE SALUD Y EDUCACIĂ˜N DE ACCIONES CON TIEMPO Y RECURSOS DESTINADAS A PRESTAR apoyo y atenciĂłn a niĂąos de la calle. Los centros de acogida de los niĂąos de la calle se insertan en una red de instituciones de apoyo a la infancia vulnerable. ,A POLICĂ“A INTEGRA EN EL CURRĂ“CULUM DE FORMACIĂ˜N EL TEMA NIĂ—OS DE LA CALLE !LGUNAS FAMILIAS DE POLICĂ“A ACOGEN A NIĂ—OS DURANTE LOS lNES DE SEMANA

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

TEMA: VIOLENCIA ESCOLAR Resultados del diagnĂłstico

Actualmente, la incorporaciĂłn de un modelo ecolĂłgico considera la escuela como un sistema. La intervenciĂłn por tanto debe ser multifacĂŠtica, asĂ­ como el propio problema.

En una escuela de 1.200 alumnos, ubicada en un sector de alta vulnerabilidad psicosocial, se ha detectado en el Ăşltimo aĂąo un aumento de problemas de violencia, en los cuales se ven AFECTADOS ALUMNOS PROFESORES Y TAMBIĂ?N LOS PADRES Y FAMILIAS Los malos tratos, los insultos, las agresiones fĂ­sicas, verbales y psicolĂłgicas, la intimidaciĂłn, son algunos de los problemas IDENTIlCADOS QUE AFECTAN EL CLIMA SOCIAL DE LA ESCUELA Y POR LO tanto, a toda la comunidad escolar. El ejercicio de la violencia es legitimado por los alumnos

La escuela tiene un papel muy importante en la convivencia. El microsistema que existe en cada centro educativo, con su propia cultura, contiene un potencial de cambio. La creaciĂłn de un entramado social que promueva y favorezca las conductas de respeto mutuo, la disciplina, la responsabilidad y corresponsabilidad, el autocontrol, son valores en sĂ­ mismos que toda escuela puede tener.

Causas !LGUNAS DE LAS CAUSAS DE ESTOS PROBLEMAS SE RELACIONAN CON EL contexto social, la inuencia de los medios de comunicación y DIlCULTADES EN LA VIDA FAMILIAR 4AMBI�N CON FACTORES INTERNOS DEL PROPIO SISTEMA ESCOLAR DETERIORO DEL CLIMA ESCOLAR RELACIOnes interpersonales problemåticas entre distintos estamentos y características individuales de las personas en conicto)

-ODALIDADES DE TRATAMIENTO El abordaje de los problemas de violencia escolar puede ser diverso. SerĂ­a posible constituir un equipo de trabajo encabezado por el director del establecimiento, cuyo rol es clave, para que “en conjunto los distintos estamentos promuevan una cultura de buena convivenciaâ€?, tanto al interior como fuera del establecimiento.

%NFOQUE ,QWHUYHQLU VREUH VLWXDFLRQHV GH FRQĂ LFWLYLGDG HQ HO iPELWR HVFRODU supone abordar la problemĂĄtica desde diferentes ĂĄmbitos. En los Ăşltimos aĂąos el enfoque para resolver los problemas de relaciones dentro del sistema escolar ha puesto mayor ĂŠnfasis en el desarrollo y enseĂąanza de habilidades sociales, estrategias para resolver conĂ LFWRV DXWRFRQWURO \ GHVDUUROOR GH DXWRLPDJHQ 6H KD WUDQVLWDGR GH un enfoque mĂĄs punitivo, personalizado e individual a un anĂĄlisis mĂĄs social-multicausal y de interacciĂłn de diferentes agentes. Tradicionalmente se interpretaba los problemas de disciplina de un alumno o grupos de alumnos como un sĂ­ntoma de algĂşn trastorno del desarrollo infantil.

Š !4%

%SCENARIOS POSIBLES ‡ $LVODU HO SUREOHPD HWLTXHWDUOR H LQWHQWDU VDQFLRQDU D ORV DOXPnos con mala conducta (expulsiones, sanciones). ‡ 3UHVWDU OD PHQRU DWHQFLyQ SRVLEOH D ORV FDVRV GH LQGLVFLSOLQD H intentar que cada profesor lo resuelva aisladamente con sus propios alumnos (laxitud). ‡ 7UDWDU ORV SUREOHPDV GH FRQYLYHQFLD HQ IRUPD SUHYHQWLYD \ UHcuperadora de las acciones antisociales, hasta donde sea posible evitando las sanciones. Esto requerirĂ­a acciones conjuntas, consenso entre miembros adultos de la comunidad educativa. ‡ 'HVDUUROODU XQ SURJUDPD GH UHĂ H[LyQ DFFLyQ GH ORV SURIHVRUHV alumnos y apoderados sobre los modos de actuar. Integrar el modelo de sanciones/derechos y deberes y realizar una tarea preventiva que estĂŠ orientada a mejorar la calidad de vida relacional del centro escolar. 0ROYECTO DE %SPACIOS 0ĂžBLICOS Y #OHESIĂ˜N 3OCIAL 5RBAL !TE ,IMA 0ERĂž

EL RESPETO DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES EN GUATEMALA “En virtud de que se estĂĄ hablando de convivencia y seguridad ciudadana, y ademĂĄs de fortalecimiento de redes y de capital social, el respeto y desarrollo de los derechos fundamentales adquiere un MATIZ DE PRIMERA IMPORTANCIA ! ESTE RESPECTO ES IMPORTANTE LA APLICACIĂ˜N DE PRECEPTOS COMO LOS CONTENIDOS EN LOS !CUERDOS DE 0AZv 0.5$ 'UATEMALA

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIร N GRUPO DE TRABAJO VIOLENCIA ESCOLAR EQUIPO DE TRABAJO Responsabilidades

)NICIAR Y DESARROLLAR UN PROGRAMA DE CONVIVENCIA ESCOLAR INTERESTAMENTAL ALUMNOS PROFESORES APODERADOS Y DE responsabilizaciรณn de los alumnos

Mรฉtodo

s 0ROYECTO EDUCATIVO INTEGRA ACCIONES DE PROMOCIร N DE CONDUCTAS DE BUENA CONVIVENCIA A NIVEL CURRICULAR Y extracurricular, y pedagogรญa focalizada a la no discriminaciรณn s $ElNICIร N DE UN REGLAMENTO CONSENSUADO CON LOS ALUMNOS QUE TODOS DEBERร N RESPETAR s #APACITACIร N DE PROFESORES EN EL TEMA VIOLENCIA ESCOLAR s #REACIร N DE ESPACIOS DE PAZ EN LA ESCUELA

Objetivos

La escuela promueve conductas prosociales y la resoluciรณn alternativa de los con๏ฌ ictos

Tiempo

1 aรฑo y medio a 2 aรฑos

Indicadores

s -EJORA DEL CLIMA SOCIAL ESCOLAR s ,OS ALUMNOS ENFRENTAN SUS CONmICTOS A TRAVร S DE FORMAS ALTERNATIVAS DE RESOLUCIร N DE CONmICTOS COMO POR ejemplo, negociaciรณn o mediaciรณn s )NSTALACIร N DE PROCEDIMIENTOS EN LA ESCUELA EN LOS CUALES SE CANALIZAN Y RESUELVEN CONmICTOS INTRA E INTERESTAmentos s %L CONJUNTO DE DOCENTES Y PARADOCENTES APLICA EN FORMA HOMOGร NEA LA REGLAMENTACIร N CONSENSUADA

Recursos humanos

s s s s

Financiamiento

s -UNICIPIO SI LE CORRESPONDE s -INISTERIO DE %DUCACIร N

Evaluaciรณn

s $ESPUร S DE Aร O

Consolidaciรณn e institucionalizaciรณn

s )NCORPORACIร N EN EL PROYECTO EDUCATIVO INSTITUCIONAL DEL PROGRAMA DE CONVIVENCIA Y DESARROLLO DE CONDUCTAS prosociales s ,A VIOLENCIA ES DESLEGITIMADA EN EL ESTABLECIMIENTO EL BULLYING NO ES ACEPTADO POR LOS ALUMNOS Y NINGร N ALUMno entra con armas en la escuela. La mediaciรณn es institucionalizada y aplicada por los alumnos formados en una prรกctica continua y sistemรกtica s ,A CONVIVENCIA ES TOMADA COMO UN OBJETIVO EN EL CURRร CULUM DEL DESARROLLO SOCIOPERSONAL DE LA ESCUELA Y LOS profesores son formados sobre el tema s %L REGLAMENTO CONSENSUADO HA SIDO CONSOLIDADO A TRAVร S DE UNA PRร CTICA GENERALIZADA Y HOMOGร NEA s %L SISTEMA DE PROMOCIร N DE CONDUCTAS POSITIVAS ES RECONOCIDO Y VALORIZADO POR LOS DISTINTOS ESTAMENTOS DE LA comunidad escolar

0ROFESORES 0SICร LOGOS 0ROFESIONALES FORMADORES DE MEDIADORES !LUMNOS MEDIADORES FORMADOS

TEMA: DESERTORES ESCOLARES Resultados del diagnรณstico !LREDEDOR DE ADOLESCENTES DESERTORES ESCOLARES EN EL SECtor de menores ingresos de la ciudad

%SCENARIOS POSIBLES ย )RFDOL]DU OD DFFLyQ SUHYHQWLYD VROR VREUH ORV GHVHUWRUHV PLVPRV ย )RFDOL]DU VREUH GHVHUWRUHV \ IDPLOLDV ย )RFDOL]DU VREUH GHVHUWRUHV IDPLOLDV \ HVFXHODV ย $ERUGDU HO WHPD FRQ IRFDOL]DFLyQ HQ GHVHUWRUHV IDPLOLDV HVFXHlas y articular con polรญtica preventiva dirigida a pandillas.

Causas - Problema de carencia de supervisiรณn familiar o familia disfuncional 0ROBLEMA DE LA S ESCUELA S EXCLUYENTES E INCAPACES DE PERcibir la demanda de ciertos alumnos !TRACCIร N DE PANDILLAS CALLEJERAS VIOLENTAS

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%NFOQUE La deserciรณn escolar puede ser vista como la entrada probable a la GHOLQFXHQFLD R DO WUiร FR GH GURJD \ HQ HVWH VHQWLGR FRPR XQ ULHVJR para la sociedad (punto de vista โ adultocentristaโ ). Esta perspectiva tenderรก a limitarse a neutralizar a los desertores escolares sin preocuparse de su desarrollo personal, o bien como una conducta


CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

Se forma una coalición comunal dinamizada por el equipo tÊcnico que formula y desarrolla un programa dirigido a la reinserción escolar y se articula con la política dirigida a las pandillas violentas. En esta coalición se integran educadores de las escuelas, asociaciones de jóvenes (incluidos dirigentes de alumnos de liceos), representantes de la sociedad civil interesados -iglesia, asociaciones de padres, ONG, etc.-. El rol de esta coalición es desarrollar un sistePD SHUPDQHQWH GH LGHQWLÀFDFLyQ GHO DEDQGRQR HVFRODU DSR\DU DO SURJUDPD EXVFDQGR UHFXUVRV KXPDQRV \ ÀQDQFLHURV SDUD DVHJXUDU su sostenibilidad, monitorearlo y difundir sus Êxitos.

-ODALIDADES DE TRATAMIENTO (O HTXLSR WpFQLFR PXQLFLSDO LGHQWLĂ€FD FRQ VXV VRFLRV GH OD FRDOLFLyQ a los desertores y coordina la acciĂłn de los equipos especializados.

Š #�SAR 3COTTI

de riesgo que pone en tela de juicio el desarrollo psicosocial del adolescente. Una visiĂłn que aborda la prevenciĂłn como factor de cohesiĂłn o de mejoramiento de calidad de vida deberĂ­a asumir este Ăşltimo enfoque. Por ende es indispensable no solo abordar la prevenciĂłn incluyendo a las familias (si existen) sino tambiĂŠn a la(s) escuela(s). De lo contrario el riesgo persistirĂĄ: aun despuĂŠs de un tratamiento adecuado y personalizado y el intento de reinsertar a los alumnos, ĂŠstos seran rechazados por la escuela.

.IĂ—OS Y JĂ˜VENES FAMILIARES DE DETENIDOS DESAPARECIDOS PARTICIPARON EN LA CONSTRUCCIĂ˜N DE UN MEMORIAL LO QUE AYUDĂ˜ A SUPERAR EL daĂąo sicolĂłgico generado por esos hechos traumĂĄticos. Paine, Chile.

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIĂ“N DESERTORES ESCOLARES EQUIPO 1

EQUIPO 2

EQUIPO 3

Responsabilidades

!BORDAJE Y APOYO PSICOLĂ˜GICO A LOS )NICIAR Y DESARROLLAR UNA ACCIĂ˜N DE Especializada en pandillas violendesertores y a sus familias concientizaciĂłn de los profesores tas, trabaja con jĂłvenes pares de las escuelas

MĂŠtodo

!POYO PSICOLĂ˜GICO

Objetivos

$ESERTORES EN CONDICIĂ˜N DE REINSER- Escuelas capaces de entender a los Progresiva transformaciĂłn en acciĂłn y mejoramiento de habilidades alumnos en crisis y de crear instru- tividades prosociales o disoluciĂłn parentales mentos adecuados para esto de la pandilla

Tiempo

MESES AĂ—OS

Indicadores

s .ĂžMERO DE DESERTORES REINSERTOS $ISEĂ—O DE INSTRUMENTO DE INSER- NĂşmero de pandilleros reinsertos s .ĂžMERO DE FAMILIAS CAPACES DE ciĂłn de alumnos en crisis en la escuela supervisiĂłn

Recursos humanos

s 0SICĂ˜LOGOS ASISTENTES SOCIALES 3OCIĂ˜LOGOS 0SICĂ˜LOGOS ASISTENTES Proyecto dirigido a pandillas, inestudiantes en prĂĄctica SOCIALES EDUCADORES cluyendo jĂłvenes pares capaces de dialogar con ellos

Financiamiento

s -UNICIPIO GOBIERNO REGIONAL O Ministerio de educaciĂłn central

Municipio + Gobierno central o regional + fundaciĂłn privada

EvaluaciĂłn

$ESPUĂ?S DE MESES

$ESPUĂ?S DE AĂ—OS

ConsolidaciĂłn e institucionalizaciĂłn

4ALLERES SOBRE VIOLENCIA ESCOLAR !COMPAĂ—AMIENTO DE PANDILLAS Y y preparaciĂłn para trabajar con desarrollo de actividades prosoalumnos en crisis ciales

MESES AĂ—O

4Ă?RMINO DE AĂ—O

2-3 aĂąos

Seguimiento por lo menos durante 2 aĂąos de los casos de reinserciĂłn. ConstituciĂłn de un sistema permanente de informaciĂłn sobre posible abandono escolar articulado con las DIVERSAS ESCUELAS Y LA POLICĂ“A MĂ“NIMO AĂ—O )NSTITUCIONALIZACIĂ˜N DE UN GRUPO PERMANENTE DE APOYO A ALUMNOS EN CRISIS FORMADO POR PROFESORES DE ESCUELAS COMUNALES Y APOYOS EXTERNOS VOLUNTARIOS O REMUNERADOS AĂ—OS ConsolidaciĂłn de una estrategia dirigida a pandillas violentas y acordada con las organizaciones juveniles COMUNALES AĂ—OS

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

โ CONOZCO MIS DERECHOS, LOS HAGO RESPETAR Y CONSTRUYO ESPACIOS DE NO VIOLENCIA PARA TODOSโ . SAN MIGUEL DE TUCUMร N. ARGENTINA. En respuesta a los problemas de fondo relacionados con la problemรกtica de la violencia familiar, detectados a partir de un primer contacto con LAS Vร CTIMAS SE CREร EN LA -UNICIPALIDAD DE 4UCUMร N EN EL $PTO DE 6IOLENCIA -UJER Y $ERECHOS (UMANOS DE LA -UNICIPALIDAD DE 3- DE 4UCUMร N EL h'RUPO DE !UTOAYUDA DE -UJERESv ACOMPAร ADO DE OTROS SERVICIOS DIRIGIDOS A ATENDER LAS NECESIDADES DE SUS HIJOS $E ESTE grupo inicial surgieron mujeres que dieron origen a una ONG capaz de nuclear a todas las mujeres vรญctimas de violencia familiar de la Provincia DE 4UCUMร N CONVIRTIร NDOSE EN EL CENTRO DE SUS LUCHAS SOCIALES 0ARA ESTE PROCESO SE CONTEMPLร EN TODO MOMENTO LA LEGISLACIร N EXISTENTE Y APLICABLE )NTERNACIONAL h#ONVENCIร N !MERICANA SOBRE LOS $ERECHOS (UMANOSv h#ONVENCIร N SOBRE LA %LIMINACIร N DE 4ODAS LAS &ORMAS DE $ISCRIMINACIร N CONTRA LA -UJERv h#ONVENCIร N DE "ELร N $O 0ARAv h#AMPAร A DE LAS .ACIONES 5NIDAS EN ,ATINOAMร RICA Y EL #ARIBE POR LOS $ERECHOS (UMANOS DE LA -UJERv h#ONVENCIร N )NTERNACIONAL SOBRE LOS $ERECHOS DEL .Iร Ov .ACIONAL #ONSTITUCIร N .ACIONAL #ร DIGO #IVIL Y 0ENAL ,EY DE 0ROTECCIร N )NTEGRAL DE .Iร OS .Iร AS Y !DOLESCENTES 0ROVINCIAL #ONSTITUCIร N 0ROVINCIAL ,EY DE 6IOLENCIA &AMILIAR h,EY DE 0REVENCIร N DEL -ALTRATO )NFANTILv ,EY DE 6IOLENCIA Laboral. !NTES DE QUE COMENZARA ร STA PRร CTICA MUCHAS MUJERES EN SITUACIร N DE VIOLENCIA FAMILIAR LLEGABAN AL $PTO DE 6IOLENCIA -UJER Y $ERECHOS (UMANOS DEL -UNICIPIO DE 3 - DE 4UCUMร N ARRASTRANDO COMPLICADOS PROBLEMAS DERIVADOS DE LA DIFร CIL REALIDAD EN LA QUE SE ENCONTRABAN O bien paralelos a la misma, tales como problemas de conducta y aprendizaje de los hijos, falta de recursos para cubrir las necesidades bรกsicas DEL GRUPO FAMILIAR FALTA DE VIVIENDA O DIlCULTADES CON LA MISMA ENFERMEDADES Fร SICAS Y PSร QUICAS TRASTORNOS EMOCIONALES ABANDONO PERSONAL TOTAL DESINTERร S POR LA VIDA E INTENTOS DE SUICIDIO REITERADOS .O HABร A HASTA EL Aร O NINGร N SERVICIO QUE ATENDIERA ESTA PROBLEMร TICA Y NO EXISTร A UN ESPACIO DONDE LAS MUJERES MALTRATADAS PUDIERAN REVISAR SU SITUACIร N Y APRENDIERAN A MODIlCARLA POR Sร MISMAS %N LA IDEA DE PROPORCIONAR ESTE ESPACIO ES QUE EN EL Aร O COMIENZร A FUNCIONAR EL h'RUPO DE !UTOAYUDA DE -UJERESv EL CUAL EN POCO TIEMPO RECIBIRร A a mujeres de los diferentes departamentos y localidades de la provincia. ! PARTIR DE UN PRIMER TRABAJO CON LAS MUJERES MALTRATADAS EN EL INTERIOR DEL GRUPO Y SIGUIENDO EL ENFOQUE DE h35*%4/3 #/. !54/./-ยถ!v SE DETECTร QUE LOS PRINCIPALES OBSTร CULOS RADICABAN EN LA BAJA AUTOESTIMA DE LAS Vร CTIMAS MUJERES Y SUS HIJOS EXTREMA DEPENDENCIA Y ABSOLUTO DESCONOCIMIENTO DE SUS DERECHOS POR LO QUE SE VIO LA NECESIDAD PRIORITARIA DE DESARROLLAR UN PROCESO DE $)'.)&)#!#)ยป. ).$%0%.$%.#)! Y %-0/$%2!-)%.4/ QUE LLEVARA A LAS MUJERES MALTRATADAS A SENTIRSE VALIOSAS PRODUCTIVAS Y DEFENSORAS DE SUS DERECHOS Y LOS DE SUS HIJOS !Sร ES COMO SE COMENZร A TRABAJAR CON CHARLAS TALLERES Y DEBATES PARTICIPATIVOS EN EL INTERIOR DEL h'RUPO DE !UTOAYUDA DE -UJERESv ORIENTADOS HACIA ESE lN 4IEMPO DESPUร S SE PUSO EN FUNCIONAMIENTO 0ROGRAMA h0OR .UESTROS (IJOSv DE ASISTENCIA A .Iร OS Y .Iร AS Aร O h'RUPO DE !UTOAYUDA DE !DOLESCENTES Y *ร VENES DE (OGARES EN #ONmICTOv Aร O h0ROGRAMA DE 0REVENCIร N !SISTENCIA Y 4RATAMIENTO DEL !BUSO 3EXUAL DE -ENORESv Aร O 2%35,4!$/3 !,#!.:!$/3 %STE PROCESO DIO LUGAR A QUE -UJERES DEL 'RUPO TUVIERAN UN 0ROGRAMA DE 2ADIO h.OS )MPORTA A 4ODOSv EN &- INTRODUCIENDO LENTAMENTE LA PROBLEMร TICA DE LA VIOLENCIA EN LA COMUNIDAD !NTE LOS OBSTร CULOS Y DIlCULTADES QUE ENCONTRARON CON ESTE PROGRAMA LOS CUALES LLEVARON A SACARLO DEL AIRE LAS MUJERES DIERON SURGIMIENTO A UNA AGRUPACIร N CON VIDA PROPIA !TENEA !SOCIACIร N #IVIL ร NICA EN SU TIPO EN EL PAร S QUE NUCLEA A MUJERES Vร CTIMAS DE VIOLENCIA FAMILIAR DE LA 0ROVINCIA DE 4UCUMร N Y A SUS HIJOS EN LA IDEA DE QUE JUNTAS PODRร AN SER Mร S FUERTES 3U #OMISIร N $IRECTIVA ESTร CONSTITUIDA ร NTEGRAMENTE POR MUJERES QUE HAN PARTICIPADO ACTIVAMENTE EN EL h'RUPO DE !UTOAYUDA DE -UJERESv DE LA -UNICIPALIDAD DE 3AN -IGUEL DE 4UCUMร N EN DIFERENTES PERร ODOS %L /BJETIVO DE !TENEA ES h-EJORAR la calidad de vida de mujeres en situaciรณn de violencia familiar y violencia de parejaโ . !TENEA SURGE DESPUร S DE QUE LAS MUJERES MALTRATADAS LLEGAN A COMPRENDER LA IMPORTANCIA Y LA NECESIDAD DE QUE LAS PERSONAS AFECTADAS PARTICIpen activamente en la bรบsqueda de soluciones a sus propios problemas y surja en ellas el deseo de ayudar a otras personas que se encuentran EN SITUACIONES SIMILARES A lN DE QUE NO TENGAN QUE PASAR POR LOS MISMOS OBSTร CULOS QUE ELLAS PASARON !TENEA LLEVA Aร OS DE VIDA PERO ES hLA VOZ DE LOS QUE NO TIENEN VOZv %N ELLA CONmUYE LA INFORMACIร N SOBRE LA REALIDAD DE LA VIOLENCIA FAMILIAR de toda la provincia, y desde allรญ se reclaman, movilizan y ejecutan los cambios necesarios para trasformar dicha realidad y asegurar el adecuado respeto a los derechos humanos.

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

TEMA: VIOLENCIA INTRAFAMILIAR Resultados del diagnĂłstico

Š *UAN &RANCISCO "ASCUĂ—AN

Los resultados de una encuesta de victimizaciĂłn indican una TASA DE 6)& EN LA COMUNA SUPERIOR A LA NACIONAL Y ALGUNAS ZONAS DE LA COMUNA HAN SIDO IDENTIlCADAS POR UNA MUY ALTA PRESENCIA DE 6)& DIRIGIDA A LAS MUJERES !L MISMO TIEMPO ES UNO DE los problemas que registra mĂĄs baja denuncia en la comuna Causas ! NIVEL LOCAL EXISTEN POCOS PROGRAMAS DIRIGIDOS AL TEMA LAS INSTITUCIONES ESTĂˆN INSUlCIENTEMENTE SENSIBILIZADAS FRENTE AL problema, y en la comunidad existe escasa red de apoyo social y escasa vinculaciĂłn con las redes de apoyo institucional

%SCENARIOS POSIBLES ‡ )RFDOL]DU OD DFFLyQ SUHYHQWLYD HQ OD VHQVLELOL]DFLyQ LQIRUPDción y difusión del problema de VIF en distintos actores locales. ‡ )RFDOL]DU OD SUHYHQFLyQ HQ OD IRUPDFLyQ \ FDSDFLWDFLyQ GH DJHQtes comunitarios en VIF. ‡ )RUWDOHFHU OD SUHYHQFLyQ GH 9,) D WUDYpV GH OD FDSDFLWDFLyQ GH equipos profesionales que trabajan en programas de VIF, existentes en sector salud. %NFOQUE Si se parte del supuesto de que la violencia es un problema psicosocial, tanto por su prevalencia e impacto social para las víctimas primarias y secundarias, como por el riesgo de repetición transgeneracional, una de las formas de abordar ese impacto social es intervenir sobre las distintas variables presentes en la generación y mantención del problema. En este sentido, considerar la violencia FRPR XQ SUREOHPD SVLFRVRFLDO VLJQLÀFD DERUGDUOR HQ WRGDV VXV manifestaciones, tanto en los procesos psicológicos involucrados como en la dinåmica social que los contiene. Un abordaje psicosocial incluye intervenir sobre los procesos psicológicos y sociales que reproducen la violencia y el temor, como sobre los patrones de interacción social de los distintos actores involucrados, y en los distintos contextos. Una consideración que se seùala como problemåtica es que al ser la violencia un fenómeno eminentemente relacional -aun pudiÊndose hacer las distinciones clåsicas entre quien la ejerce y quien la padece- es muy difícil la autodenuncia, tanto porque los OtPLWHV VRQ FRQIXVRV SDUD TXLHQHV OD YLYHQ FRPR SRU OD GLÀFXOWDG de salirse de la situación, esto pensando en todas las relaciones de violencia y particularmente entre cercanos. Lo anterior es importante seùalarlo, ya que plantea la complejidad del problema de la VIF, y en particular en comunidades altamente

%L #ARNAVAL DE 3AN !NTONIO DE 0ADUA EN 3ANTIAGO DE #HILE SE HA CONSTITUIdo en una actividad que toma meses en preparaciĂłn y es parte de la cultura local del barrio.

,A POLĂ“TICA LOCAL DE PREVENCIĂ˜N SUS PROGRAMAS Y ACCIONES SERĂˆN PARTE DE LA HISTORIA LOCAL Y RELACIONADA A Ă?STA PUEDE LLEGAR A INmUIR EN LA CULTURA LOCAL EN SUS EXPRESIONES PĂžBLICAS Y PRIVADAS INCIDIENDO EN SUS ASPECTOS POSITIVOS victimizadas, lo que requiere de intervenciones de distintos niveles de complejidad, y en las que necesariamente deben participar una diversidad de actores, tanto a nivel comunitario, como a nivel de las instituciones y gobiernos locales, regionales y nacionales. Las lĂ­neas de acciĂłn que se formulan a continuaciĂłn consideran tres aspectos (entre otros) del problema necesarios de abordar: ‡ /D QHFHVLGDG GH VHQVLELOL]DU DO FRQMXQWR GH OD VRFLHGDG VREUH HO problema de VIF, sus principales causas y manifestaciones, la magnitud del problema, y promover la responsabilidad colectiva en el abordaje de ĂŠste. ‡ (O GHVDUUROOR GH FDSDFLGDGHV ORFDOHV FRPXQLWDULDV D WUDYpV GH procesos de formaciĂłn, capacitaciĂłn y mayor empoderamiento de agentes comunitarios, quienes conocen de cerca las problemĂĄticas, por ejemplo referidas a VIF. ‡ (O IRUWDOHFLPLHQWR \ PHMRUDPLHQWR GH ODV FDSDFLGDGHV GH UHVpuestas de los servicios de apoyo existentes a nivel local, y que requieren por una parte mayor competencia tĂŠcnica en problemas de alta complejidad como la VIF, asĂ­ como la necesidad de que estas respuestas formen parte y se coordinen con un conjunto de otras acciones en relaciĂłn al mismo problema. -ODALIDADES DE INTERVENCIĂ˜N Por ejemplo, se constituyen tres equipos tĂŠcnicos especializados, que coordinadamente actuarĂĄn sobre las tres ĂĄreas seĂąaladas anteriormente.

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIÓN VIOLENCIA INTRAFAMILIAR EQUIPO 1

EQUIPO 2

EQUIPO 3

Responsabilidades

$ESARROLLAR UNA ACCIØN DE SENSIBILIZA- $ESARROLLAR UN PROCESO DE FORMA- $ESARROLLAR CAPACITACIØN A EQUIción, información y difusión sobre la ción y capacitación de monitoras pos profesionales de salud nivel PROBLEMÈTICA DE 6)& comunitarias en prevención de primario en pesquisa, detección 6)& PRECOZ Y PRIMER APOYO EN 6)&

Método

)NFORMACIØN COMUNICACIØN Y DIFUSIØN 4ALLERES DE FORMACIØN DE -ONITO- Programa de Capacitación en A TRAVÏS DEL USO DE DISTINTOS MEDIOS ras comunitarias en prevención pesquisa, detección precoz y priMER APOYO ACOGIDA EN 6)& de comunicación DE 6)&

Objetivos

$ESARROLLAR UN PROCESO DE SENSIBILIZAción, difusión e información, a distintos actores del nivel local, en relación A LA 6)& PARTICULARMENTE EN LAS ESCUElas y entre adolescentes

$ESARROLLAR HABILIDADES Y COMPETENCIAS EN MUJERES PARA QUE ÏStas puedan ser apoyo y faciliten el acceso a personas que padecen SITUACIONES DE 6)& A LOS SERVICIOS de apoyo existentes a nivel local

Capacitar a equipos profesionales en pesquisa, diagnóstico precoz y PRIMER APOYO ACOGIDA EN 6)& 4RABAJO CON ENCARGADAS OS DE LA policía de este tema

Tiempo

MESES A×O

1 año - 1año y medio

MESES

Indicadores

s -ATERIAL EDUCATIVO GRÈlCO Y AU- s . DE MUJERES DERIVADAS A SER- s 0ROFESIONALES CAPACITADOS CON diovisual por grupos de edad vicios de apoyo y primera acomayores competencias para s 0ROGRAMAS RADIALES SOBRE 6)& ABORDAR 6)& gida s #AMPA×AS DE SENSIBILIZACIØN A s -UJERES -ONITORAS PARTICIPAN s 0OLICÓAS PREPARADOS PARA RESadolescentes y a público en geneponder rápidamente a quejas ACTIVAMENTE EN LA 2ED DE 0REral VENCIØN LOCAL DE 6)& INSTITUCIO- s 0ROFESIONALES SE COORDINAN CON s 0ASAJE DE POR EJEMPLO DENUNCIA NALIZADA Y lNANCIADA -ONITORAS COMUNITARIAS EN 6)& Y PARTICIPAN DE 2ED DE 0REVENDE LAS MUJERES VÓCTIMAS DESPUÏS CIØN DE 6)& DE VICTIMIZACIONES A DESPUÏS DE PROMEDIO

Recursos humanos

s s s s

Financiamiento

s -UNICIPIO s /lCINA DE LA -UJER s 3ERVICIO .ACIONAL DE LA -UJER

s -UNICIPIO s -INISTERIO DE 3ALUD s /.' s 3ERVICIO .ACIONAL DE LA -UJER

s s s s

Evaluación

$ESPUÏS DE MESES Y A×O

$ESPUÏS DE A×O

$ESPUÏS DE MESES Y A×O

100

0ERIODISTAS 0SICØLOGOS 0UBLICISTAS !BOGADOS

s s s s

0SICØLOGOS !SISTENTES SOCIALES %DUCADORES !BOGADOS

s 0SICØLOGOS s 4ERAPEUTAS s !SISTENTES SOCIALES -UNICIPIO -INISTERIO DE 3ALUD 3ERVICIO .ACIONAL DE LA -UJER 5NIVERSIDAD


CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

‡ (O XVR GH FiPDUD GH VHJXULGDG \ GH JXDUGLDV SULYDGDV SRU ORV comerciantes.

TEMA: AUMENTO DE LOS ROBOS Resultados del diagnĂłstico

Otras respuestas posibles apuntan a crear sistemas de alarmas comunitarias, recuperar los espacios públicos deteriorados, deÀQLU HO SDWUXOODMH SROLFLDO FRQ ORV UHVLGHQWHV FUHDU XQ VHUYLFLR GH protección de estacionamiento y desarrollar medidas de prevención focalizadas a las bandas juveniles en una perspectiva de desarrollo y empoderamiento de la comunidad.

s 3E DETECTA UN AUMENTO DE LOS ROBOS EN DOMICILIOS DE noche y de dĂ­a, cometidos tanto por adultos como por jĂłvenes. La comuna supera la tasa promedio de robos de otras comunas socialmente similares s )DENTIlCACIĂ˜N DE HOT SPOTS DONDE LOS TRANSEĂžNTES SON asaltados s )NCREMENTO DE ROBOS AL INTERIOR DE AUTOS s !SALTOS MĂˆS FRECUENTES A COMERCIOS

%NFOQUE La perspectiva que guĂ­a el trabajo es el desarrollo y empoderamiento de las comunidades barriales. Esto implica asumir la protecciĂłn de los colectivos barriales, evitando el encierro (condominio cerrado y rejas mĂĄs altas) y creando sistemas de alarma con acciĂłn comunitaria, conectados con la policĂ­a, pero FRQ XQD HVWUDWHJLD GH DFFLyQ EDUULDO HĂ€FD] 3RU RWUD SDUWH VH busca un trabajo coordinado con la policĂ­a para mejorar el patrullaje y las acciones focalizadas y eventualmente aumentar la dotaciĂłn.

Causas s $ESPLAZAMIENTO DE DELINCUENTES QUE ACTUABAN EN OTRAS comunas s %XISTENCIA DE BANDAS ESPECIALIZADAS EN ROBOS EN CASAS s !UMENTO DE BANDAS JUVENILES QUE CONTROLAN TERRITORIOS DE TRĂˆlCO DE DROGA s 0ATRULLAJE POLICIAL INADECUADO

Š Subsecretaría de Carabineros de Chile

%SCENARIOS POSIBLES La respuestas espontåneas a estas situaciones son: ‡ (O DXPHQWR GH OD GRWDFLyQ SROLFLDO \ XQD H[LJHQFLD GH PD\RU HÀFLHQFLD ‡ /D WHQGHQFLD GH ORV KDELWDQWHV D FUHDU FRQGRPLQLRV FHUUDGRV R reforzar las rejas.

Carabineros de Chile, efectuando labores de prevenciĂłn en la comunidad.

El desarrollo de la comunidad se logra a travĂŠs de la recuperaciĂłn de espacios peligrosos o abandonados, mientras el empoderamiento se obtiene con la responsabilizaciĂłn de los barrios colindantes. Por ejemplo, se elimina un lugar de vertedero informal, fuente de miedo y relacionado con asaltos, pero son los vecinos quienes se hacen cargo de mantener la belleza, limpieza e iluminaciĂłn del lugar, transformado en plaza pĂşblica. El rediseĂąo de ĂĄreas pĂşblicas con los habitantes y con jĂłvenes, el uso de materiales nobles y embellecedores, facilitan la apropiaciĂłn por parte de los vecinos. La creaciĂłn de estacionamientos pagados en las calles para permitir que haya cuidadores (guardias) que aseguran la protecciĂłn de los vehĂ­culos, contribuye tambiĂŠn al desarrollo comunitario. Focalizar la prevenciĂłn sobre grupos juveniles que “controlanâ€? ODV iUHDV GH WUiĂ€FR GH GURJDV YHU WHPD WUiĂ€FR GH GURJD FRQWULbuye a la cohesiĂłn social de la comuna. -ODALIDADES DE INTERVENCIĂ˜N El equipo tĂŠcnico municipal crea un comitĂŠ de acciĂłn que incorpora la policĂ­a y los servicios municipales encargados de la mantenciĂłn o desarrollo de los espacios pĂşblicos, y otro que trabaja con los comerciantes e integra, si es posible, a los sistemas de seguridad privados.

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIร N GRUPO DE TRABAJO AUMENTO DE LOS ROBOS COMITร MIXTO MUNICIPAL, POLICร A Y DIRIGENTES BARRIALES INTERESADOS

COMITร COMERCIANTES-MUNICIPIO-POLICร ASISTEMA PRIVADO DE SEGURIDAD

Rol

s s s s

2ELACIร N Y COORDINACIร N CON LA POLICร A 4RABAJO DE MOVILIZACIร N COMUNITARIA )DENTIlCACIร N DE LOS LUGARES DE INTERVENCIร N -ONITOREO DEL PROCESO

s #OORDINAR ACCIร N Y PROTECCIร N s #OORDINAR TRABAJO POLICร A SISTEMA PRIVADO DE SEGURIdad s &ACILITAR EL CONTROL DEL MUNICIPIO SOBRE SEGURIDAD CALIDAD DE LOS EDIlCIOS HIGIENE ETC DE LOS LUGARES COmerciales

Objetivos

s s s s

!PROPIACIร N DE LOS ESPACIOS Pร BLICOS %MBELLECIMIENTO DE LOS ESPACIOS Pร BLICOS -AYOR SEGURIDAD EN ESPACIOS Pร BLICOS -AYOR CONlANZA HABITANTES POLICร A

s -AYOR SEGURIDAD EN COMERCIO s -EJORAMIENTO DE LA ElCIENCIA Y CONDICIONES DE TRABAJO del sistema privado de seguridad

Mรฉtodo

s 2EDISEร O CON LA POLICร A DE SU FORMA DE PATRULLAJE s 2EDISEร O DE LA SEGURIDAD EN LOS LOCALES COMERCIALES Y s $ISEร O EN UN BARRIO PILOTO DE UN SISTEMA DE ALARaplicaciรณn de normas de seguridad, higiene, calidad ma comunitario, preparaciรณn de vecinos y difude productos, etc. SIร N A TRAVร S DE LOS MEDIOS s )NSTAURACIร N DE UN SISTEMA DE ESTACIONAMIENTO pagado y formaciรณn de guardias

Tiempo

s 3ISTEMA DE ALARMA LOS TIEMPOS VARร AN EN FUNCIร N s #REACIร N DEL COMITร ALGUNOS MESES del aprendizaje de responsabilizaciรณn de los veci- s -EJORAMIENTO DEL SISTEMA DE DEFENSA DE LOS HABITANnos en el diseรฑo y aplicaciรณn de los sistemas de TES A REALIZAR DESPUร S DE UN Mร NIMO DE CONSOLIDACIร N alarma. Conviene tener rรกpidamente un modelo DEL COMITร ES DECIR PROBABLEMENTE DURANTE EL SEGUNpiloto do aรฑo s 3ISTEMA DE ESTACIONAMIENTO MESES SI HAY PREsupuesto s #OORDINACIร N CON POLICร A INMEDIATA SI LA POLICร A depende del municipio. Si no, 3 a 4 meses de negociaciรณn

Indicadores

Cualitativos: s !PROPIACIร N REAL DE LOS ESPACIOS POR LOS VECINOS s -EJORAMIENTO DE LA RELACIร N POLICร A MUNICIPIO Y policรญa-habitantes s $ISMINUCIร N DEL MIEDO EN ESPACIOS Pร BLICOS Cuantitativo: s $ISMINUCIร N DE ROBOS

Recursos humanos

Provienen de los servicios municipales involucrados 0ROVIENEN DE LOS SERVICIOS MUNICIPALES INVOLUCRADOS OTOR MANTENCIร N ESPACIOS CONSTRUCCIร N SEGURIDAD FOR- gamiento de patentes, seguridad, formaciรณn, control de maciรณn, etc.) CALIDAD OlCINA JURร DICA ETC

Financiamiento

Presupuesto municipal, con posibles aportes de em- No se requiere presas o instituciones

Evaluaciรณn

Sistema de alarma: $ESPUร S DEL MODELO PILOTO Y EVALUACIร N REGULAR CON los diversos barrios, a fecha acordada con ellos En caso de deterioro de un espacio ya recuperado, evaluaciรณn rรกpida del municipio y discusiรณn con los habitantes Estacionamientos: Evaluaciรณn regular con la policรญa y los guardias

! LOS MESES DESPUร S A FECHA ACORDADA POR LO MENOS 1 vez al aรฑo Con los comerciantes, la policรญa, las empresas de seguridad, al segundo aรฑo Creaciรณn de un sistema de evaluaciรณn permanente de la aplicaciรณn de estas propuestas

Consolidaciรณn e institucionalizaciรณn

La consolidaciรณn de una comisiรณn de trabajo permanente entre municipio y policรญa, que incluya ademรกs del equipo de seguridad a los diversos departamentos municipales involucrados, capaz de informar, monitorear y proponer mejorรญas en los espacios pรบblicos y supervisarlas

#REACIร N DE UN COMITร PERMANENTE QUE ASOCIA A COMERciantes, municipio, servicios de defensa del consumidor y empresas privadas de seguridad, e informa a los medios de comunicaciรณn

Cualitativos: s 3ATISFACCIร N DE COMERCIANTES s 3ATISFACCIร N DE LOS CLIENTES s -EJORAMIENTO DE LAS CONDICIONES DE TRABAJO DEL SISTEMA DE SEGURIDAD Y MAYOR ElCACIA Cuantitativo: s $ISMINUCIร N DE ROBOS EN LOCALES COMERCIALES

La presencia efectiva de los medios de comunicaciรณn y la difusiรณn de las nuevas iniciativas contribuye a la disminuciรณn del temor y a la legitimaciรณn en la opiniรณn pรบblica.

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CapĂ­tulo 4: POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: ETAPA 3. LA ESTRATEGIA Y SU IMPLEMENTACIĂ“N

TEMA: DELITOS DE CUELLO BLANCO Resultados del diagnĂłstico s 3E CONSTATAN PRĂˆCTICAS ABUSIVAS POR PARTE DE LOS COMERciantes, como alza irregular de precios, venta de mercancĂ­a en malas condiciones, engaĂąo en las unidades vendidas, etc. s 3E VERIlCAN CIERTAS PRĂˆCTICAS DE CORRUPCIĂ˜N AL INTERIOR DEL municipio s 3E ENTREGA A LA COMUNIDAD PROYECTOS DE BAJA CALIDAD Y CON escaso cumplimiento de los estĂĄndares acordados Causas s #ARENCIA DE CONTROL ADECUADO POR PARTE DE LA SOCIEDAD CIVIL Y LAS IDENTIDADES lSCALIZADORAS s &ALTA DE TRANSPARENCIA EN LAS LICITACIONES s 3ISTEMA JUDICIARIO INOPERANTE EN ESTOS DELITOS s #LIENTELISMO MUNICIPAL

%SCENARIOS POSIBLES ‡ )RUWDOHFHU ORV PHFDQLVPRV MXUtGLFRV GH FRQWURO VREUH HVWDV SUiFticas y promover un mayor control por parte de las entidades Ă€VFDOL]DGRUDV \D H[LVWHQWHV ‡ )RUWDOHFHU ORV PHFDQLVPRV MXUtGLFRV GH FRQWURO LQYROXFUDQGR D OD FRPXQLGDG \ SURPRYLHQGR LQVWDQFLDV Ă€VFDOL]DGRUDV TXH LQcentiven la transparencia, el desarrollo de “accountabilityâ€?, y la utilizaciĂłn de formas alternativas de resoluciĂłn de estos delitos (justicia restaurativa, mediaciĂłn, etc.). %NFOQUE Los delitos de “cuello blancoâ€? son aquellos ilĂ­citos penales cometidos por sujetos de sectores acomodados o de clase media, en relaciĂłn con su actividad profesional. Incluyen las prĂĄcticas ilegales cometidas por grandes instituciones (policĂ­as, empresas, municipios, gobiernos, etc.) que, utilizando procedimientos al margen de OR OHJDO REWLHQHQ EHQHĂ€FLRV DGLFLRQDOHV HQ GHVPHGUR GH OD FRPXQLGDG 6H FRQRFH HQ RWURV WpUPLQRV FRPR FRUUXSFLyQ WUiĂ€FR GH

LQĂ XHQFLD HQJDxRV HVWDIDV UHFLFODMH GH ELHQHV UREDGRV YHQWD GH productos ilĂ­citos, etc. La justicia tiene fama de indulgente frente a dichos delitos y sus impactos en la ciudad. Éstos pueden ser intangibles, como descrĂŠdito de las instituciones polĂ­ticas, baja participaciĂłn ciudadana, GHVFRQĂ€DQ]D HQ OD MXVWLFLD YDOLGDFLyQ GHO XVR GH FRQGXFWDV LOHJDOHV etc. Pero los efectos pueden ser claramente materiales: pĂŠrdidas PLOORQDULDV SRU REUDV QR WHUPLQDGDV DXPHQWR GH WUiĂ€FR GH GURJDV y de armas, comercio de objetos robados, aumento de la pobreza, e incluso lesiones y muertes por negligencias mĂŠdicas, sanitarias o habitacionales. $XQTXH OD PD\RU SDUWH GH ORV SDtVHV FXHQWD FRQ HQWLGDGHV Ă€VFDOL]DGRUDV VH VDEH TXH QR VRQ VXĂ€FLHQWHV VL QR VRQ DOHQWDGDV SRU OD ciudadanĂ­a y por reformas profundas. Se requiere, por tanto, el desarrollo de una polĂ­tica preventiva donde existan mayores espacios de participaciĂłn ciudadana, de transparencia, de descentralizaciĂłn del poder, de rendiciĂłn de cuentas. TambiĂŠn se necesitan formas GH UHVROXFLyQ DOWHUQDWLYD GH FRQĂ LFWRV TXH SHUPLWDQ FRQGHQDU GH PDQHUD UiSLGD \ HĂ€FLHQWH D TXLHQHV FRPHWHQ HVWRV GHOLWRV \ TXH ORV EHQHĂ€FLRV GH OD FRQGHQD YD\DQ GLUHFWDPHQWH D ODV FRPXQLGDGHV afectadas. El enfoque implica, por tanto, una alianza estrecha entre la socieGDG FLYLO LQVWDQFLDV Ă€VFDOL]DGRUDV H LQVWLWXFLRQHV S~EOLFDV $GHPiV precisa de la capacitaciĂłn de alguna de estas instituciones en materia de desarrollo de “accountabilityâ€? (transparencia, rendiciĂłn de cuentas y distribuciĂłn de poder) para hacer visible su trabajo y auPHQWDU OD FRQĂ€DQ]D GH OD FLXGDGDQtD -ODALIDADES DE INTERVENCIĂ˜N 5HSUHVHQWDQWHV GHO PXQLFLSLR GH OD FRPXQLGDG GH OD SROLFtD GH la justicia, de los consumidores, de los medios de comunicaciĂłn, FRQIRUPDQ XQD PHVD GH WUDEDMR TXH WHQJD FRPR REMHWLYR Ă€VFDOL]DU futuras licitaciones, exigir a las organizaciones una mayor transpaUHQFLD \ DFRJHU HĂ€FLHQWHQWH ODV GHPDQGDV GH OD FLXGDGDQtD HQ HVWD materia. Al mismo tiempo, una instituciĂłn competente proveniente del mundo civil, una ONG, por ejemplo, capacita a las instituciones pĂşblicas de la comunidad en habilidades de “accountabilityâ€?.

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EJEMPLO DE MODALIDAD DE INTERVENCIร N GRUPO DE TRABAJO DELITOS DE CUELLO BLANCO MESA DE TRANSPARENCIA MUNICIPIO, EMPRESARIOS, COMERCIANTES, CONSUMIDORES, MEDIADORES, ร RBITROS, PRENSA

EQUIPO DE CAPACITADORES

Rol

s !CORDAR ESTRATEGIAS COMUNES A LOS DISTINTOS ACTO- s #APACITAR A ORGANIZACIONES Pร BLICAS Y A ASOCIACIOres para el combate de estos delitos nes de consumidores en materia de accountability s &ISCALIZAR LICITACIONES E INSTITUCIONES QUE FUNCIOy desarrollo de otras habilidades que permitan una nen con dinero pรบblico mayor transparencia y rendiciรณn de cuentas hacia la comunidad

Objetivos

s 0ROMOVER UNA AGENDA DE TRABAJO PARA CREAR INSTI- s -EJORAMIENTO DE LA DEFENSA DEL CONSUMIDOR tuciones mรกs transparentes y una ciudadanรญa mรกs s )NSTITUCIONES Mร S TRANSPARENTES activa en la denuncia de estos delitos s !UMENTO DE LA CONlANZA DE LA CIUDADANร A EN ESTAS instituciones

Mรฉtodo

s )NTEGRAR A LA COMUNIDAD EN LA lSCALIZACIร N DE INS- s #REACIร N DE UN SERVICIO DE QUEJAS DE LOS CLIENTES CAnalizadas por el municipio a los servicios de defensa tituciones pรบblicas s #REAR UNA AGENDA DE TRABAJO PARA REDUCIR CONSIdel consumidor derablemente estos delitos s 0ROPONER MECANISMOS EFECTIVOS DE SANCIร N DE estos delitos, con sanciones retributivas para la comunidad

Tiempo

s MESES CREACIร N DE LA MESA s A Aร OS ,OS TIEMPOS DEPENDERร N DEL ESTABLECIs -ESA POR SECTORES CON REUNIONES CADA MESES Y MIENTO DE UN CLIMA DE CONlANZA encuentro anual de todas las mesas

Indicadores

s -ETAS SECTORIALES POR EJEMPLO DISMINUCIร N DE s %XISTENCIA DE INFORMES Y CUENTAS Pร BLICAS QUE DEN venta de drogas en lugares de esparcimiento noccuenta a la comunidad de lo realizado turno, eliminaciรณn de mercado de objetos roba- s 2EDUCCIร N DEL Nร MERO DE QUEJAS Y DENUNCIAS REALIZADOS RECICLADOS lN DE LICITACIONES BASADAS EN EL das por la comunidad compadrazgo s 0RESENCIA EFECTIVA DE ASOCIACIร N DE CONSUMIDORES s -ODALIDAD DE MEDIACIร N O ARBITRAJE EN CASO DE con๏ฌ ictos

Recursos humanos

Funcionarios municipales, representantes del comer- Expertos en capacitaciรณn sobre estas materias. cio, de la sociedad civil, de policรญas, de justicia, me- ONG y otras organizaciones que trabajen en esta madiadores y asociaciones de consumidores teria

Financiamiento

Se requiere poco: al inicio, fondos municipales o de Privado: por parte de ONG ASOCIACIONES DE CONSUMIDORES EMPRESAS ETC Pรบblico: por parte de las instituciones capacitadas Se utiliza los fondos de multas para actividades de difusiรณn

Evaluaciรณn

!NUAL POR MESA DE TRABAJO SECTORIAL Y DIFUSIร N DE !NUAL resultados

Consolidaciรณn e institucionalizaciรณn

La consolidaciรณn e institucionalizaciรณn de este trabajo puede re๏ฌ ejarse en instancias como la โ mesa de transpaRENCIAv INSTANCIA DE DIร LOGO ENTRE LOS DIVERSOS ACTORES Y COMO ENTE lSCALIZADOR 3EGUNDO EN LA INTERIORIZACIร N POR PARTE DE ORGANIZACIONES Pร BLICAS MUNICIPIO POLICร AS PROGRAMAS GUBERNAMENTALES ETC DE HERRAMIENTAS DE PROBIDAD DISTRIBUCIร N DEL PODER Y RENDICIร N DE CUENTAS HACIA LA COMUNIDAD 4ERCERO EN LA INSTAURACIร N DE prรกcticas de mediaciรณn.

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APOYOS A LA POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN


GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CapĂ­tulo 5:

EL MONITOREO Y LA EVALUACIĂ“N DE LA ESTRATEGIA IMPLEMENTADA

El capĂ­tulo explica el rol del monitoreo y la evaluaciĂłn en una PolĂ­tica de 3UHYHQFLyQ ORFDO 6H GHĂ€QHQ DPERV instrumentos seĂąalando sus objetivos, consideraciones para su implementaciĂłn y algunos ejemplos.

Monitoreo y evaluación juegan un rol fundamental en las iniciativas locales de prevención de la delincuencia. Son herramientas claves. Permiten detectar quÊ funciona (o quÊ no funciona), con quiÊn y por quÊ. Entregan información a los socios sobre el estado, progreso, impacto y resultados de las iniciativas, en relación al dinåmico contexto de la ciudad y a las metas y objetivos de la visión. Sin monitoreo, las acciones y actividades pueden alejarse de lo diseùado en la estrategia. Sin evaluación, el impacto del proyecto no puede ser medido, o sea hay un menor entendimiento sobre lo que estå ocurriendo. Ambos instrumentos estån tan relacionados entre sí que por lo general se tratan como una sola actividad. Sin embargo es necesario FRQVLGHUDU VXV GLIHUHQFLDV VXV ÀQDOLGDGHV \ VXV UHTXHULPLHQWRV GH implementación. En el presente capítulo nos enfocaremos sobre aspectos pråcticos que ayuden a implementarlos.

4.1. MONITOREO El monitoreo es el seguimiento sistemåtico y periódico de la ejecución de una actividad. Busca determinar el grado de coincidencia con OR SURJUDPDGR FRQ HO ÀQ GH GHWHFWDU RSRUWXQDPHQWH GHÀFLHQFLDV obståculos y necesidades de ajuste de la ejecución (UNICEF, 1991). En un plano concreto, consiste en un anålisis y recopilación sistemåticos de información a medida que avanza un proyecto. El diseùo de un sistema de seguimiento debe adoptar una perspectiva formativa, es decir, facilitar los espacios de aprendizaje y superaFLyQ GH ODV GLÀFXOWDGHV DVt FRPR OD FRUUHFFLyQ GH ORV PHFDQLVPRV para una óptima realización del proyecto.

MONITOREO O SEGUIMIENTO Su ďŹ nalidad es: s -EJORAR LA ElCIENCIA Y EFECTIVIDAD DE UN PROYECTO O INTERVENCIĂ˜N s 6ERIlCAR EL CUMPLIMIENTO DE LOS OBJETIVOS PLANTEADOS Y DE LAS ACCIONES PLANIlCADAS s %VALUAR SI LA CAPACIDAD DE TRABAJO ES SUlCIENTE Y ADECUADA s )DENTIlCAR LAS DIlCULTADES EXPERIMENTADAS DURANTE LA EJECUCIĂ˜N s !NALIZAR LA COORDINACIĂ˜N Y RELACIĂ˜N ENTRE LOS DIVERSOS ACTORES s %VALUAR LA SATISFACCIĂ˜N DE LOS ACTORES

El seguimiento implica: s %STABLECER INDICADORES DE ElCACIA EFECTIVIDAD Y RESULTADOS s #REAR SISTEMAS DE RECOPILACIĂ˜N DE INFORMACIĂ˜N RELACIONADOS CON ESTOS INDICADORES s 2ECOPILAR Y REGISTRAR INFORMACIĂ˜N s !NALIZAR LA INFORMACIĂ˜N s %MPLEAR LA INFORMACIĂ˜N PARA MANTENER AL COORDINADOR Y AL EQUIPO TĂ?CNICO AL DĂ“A

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Es fundamental que el monitoreo se desarrolle durante toda la implementaciĂłn de la polĂ­tica y que se asigne uno o mĂĄs responsables del equipo tĂŠcnico para dirigir su aplicaciĂłn, comĂşnmente realizada por miembros de los grupos de trabajo y grupos territoriales. Acorde con lo dicho, se debe preparar un plan de monitoreo en funciĂłn del plan de actividades que se haya detallado. SeĂąale cĂłmo, quiĂŠn y con quĂŠ frecuencia serĂĄn monitoreadas las actividades del proyecto, lo cual, si es necesario, se puede estipular en una carta Gantt u otro instrumento similar. 4.1.1. Instrumentos de monitoreo

Algunos instrumentos útiles para el monitoreo son los siguientes: ‡ 2EVHUYDFLRQHV SDUWLFLSDQWHV HO R ORV HQFDUJDGRV GHO PRQLWRUHR se involucran ocasionalmente como actores en ciertas actividades implementadas por el programa, registrando todo tipo de percepciones que puedan contribuir a mejorarlas. ‡ 2EVHUYDFLRQHV QR SDUWLFLSDQWHV HO R ORV HQFDUJDGRV GHO PRQLWR-


Capรญtulo 5: APOYOS A LA POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: EL MONITOREO Y LA EVALUACIร N DE LA ESTRATEGIA IMPLEMENTADA

El error es parte de la condiciรณn humana, pero debe ser corregido a partir del anรกlisis de sus causas y del estudio de las fallas. El error se transforma, asรญ, en escuela de aprendizaje para todos.

reo observan la implementaciรณn de ciertas actividades, aunque esta vez sin ser parte de ellas. ย /LEUR GH UHJLVWURV FDGD HQFDUJDGR GH DFWLYLGDG OOHYD FRQVLJR una libreta en donde anota impresiones relevantes referidas al desarrollo de la actividad. ย 5HJLVWURV DXGLRYLVXDOHV LQFOX\HQ WRGRV ORV PDWHULDOHV TXH SXHdan complementar lo observado por el monitor, como fotografรญas, grabaciones, material visual, etc. ย 2WURV UHJLVWURV HQWUH HOORV OLEURV GH DVLVWHQFLDV Q~PHUR GH SURductos y otro tipo de evidencias que permitan constatar que se llevรณ a cabo la actividad. 4.1.2. Difusiรณn de la informaciรณn obtenida en el monitoreo

Es importante crear instancias presenciales (reuniones, encuentros, FRQYHUVDFLRQHV GH HTXLSR ItVLFDV Dร FKHV PXUDOHV LQIRUPHV HVFULtos, etc.) o virtuales (Internet), para dar a conocer a la organizaciรณn los resultados del monitoreo. Deben ser periรณdicas y formales. 6H SXHGH LGHQWLร FDU GLVWLQWRV WLSRV GH GHVWLQDWDULRV D /RV DFWRUHV LQWHUQRV GH OD HVWUXFWXUD RUJDQL]DFLRQDO 6H VHOHFciona a los que toman las decisiones mรกs relevantes en los procesos. Utilizando los mapas de procesos y la estructura de la HVWUDWHJLD VH LGHQWLร FDQ ODV DFWLYLGDGHV FUtWLFDV R VHD ODV TXH HQ el caso de presentar desvรญos afectan fuertemente el resultado JHQHUDO /DV SHUVRQDV D FDUJR GH WDOHV DFWLYLGDGHV VRQ ORV GHVtinatarios internos naturales (ver โ comunicaciรณn internaโ en el capรญtulo Comunicaciones). E /RV DFWRUHV H[WHUQRV SHUWHQHFHQ D ODV LQVWLWXFLRQHV HQ ODV TXH estรก inserto el programa, a quienes se les debe rendir cuenta por UD]RQHV FRQWUDFWXDOHV ร QDQFLHUDV R GH GHSHQGHQFLD MHUiUTXLFD (ministerios, bancos, contralorรญa, fundaciones). El monitoreo es una herramienta estratรฉgica para la prevenciรณn, ya que permite mantener bien informada a la organizaciรณn de sus actividades. Si es sistemรกtico, no debiera tomar mucho tiempo ni recursos. Buenos encargados permiten interiorizar esta prรกctica como algo natural.

4.2. EVALUACIร N (YDOXDU WLHQH FRPR ร QDOLGDG GDU FXHQWD GH ORV FDPELRV SURGXFLGRV HQ XQD UHDOLGDG LQWHUYHQLGD SRU XQ SUR\HFWR HVSHFtร FR &R-

rresponde a un tipo de investigaciรณn que analiza la estructura, el IXQFLRQDPLHQWR \ ORV UHVXOWDGRV GH XQ SUR\HFWR FRQ HO ร Q GH SURporcionar informaciรณn รบtil para la toma de decisiones en relaciรณn con su administraciรณn y desarrollo. Evaluar es ordenar la realidad, organizarla en categorรญas o variables que luego son medidas, ya sea cuantitativa o cualitativamente. /D HYDOXDFLyQ QR HV VyOR XQD FXHVWLyQ GH VRร VWLFDFLRQHV PHWRGROygicas. A partir de sus datos se resuelven cuestiones prรกcticas, como la viabilidad e implementaciรณn de ciertas medidas, la renovaciรณn GHO ร QDQFLDPLHQWR R OD YDOLGDFLyQ GH GHWHUPLQDGR PRGHOR GH LQtervenciรณn. /D SUHYHQFLyQ FRPXQLWDULD GHO GHOLWR VXHOH WHQHU HIHFWRV GLYHUVRV \ sus logros se evidencian en รกmbitos distintos, desde la disminuciรณn de delitos o hechos violentos hasta el aumento de la asociatividad y organizaciรณn social. Ello plantea una serie de desafรญos en la construcciรณn de diseรฑos de evaluaciรณn coherentes con los objetivos del proyecto o programa, y factibles en relaciรณn a los recursos econรณmicos, el tiempo y la informaciรณn disponible. Antes de revisar modelos concretos de evaluaciรณn, es necesario entender que existen diferencias entre evaluaciones enfocadas a problemas perceptivos -como la percepciรณn del temor, de la estigmatizaciรณn, de la segregaciรณn, etc. -y evaluaciones enfocadas a proEOHPDV FXDQWLWDWLYRV WDVDV GH YLFWLPL]DFLyQ QLYHOHV GH QDUFRWUiร co, รญndice de denuncias, etc.-. El fenรณmeno de la delincuencia exige una comprensiรณn de las dos realidades y, por lo tanto, el desarrollo GH WpFQLFDV HVSHFtร FDV TXH SHUPLWDQ DERUGDUODV /D HOHFFLyQ HQWUH una evaluaciรณn u otra va depender mucho del tipo de proyecto que

APORTES DE UNA EVALUACIร N Evaluar signi๏ฌ ca s -EDIR LO QUE UNO HA HECHO s !VERIGUAR QUร FUE EFECTIVO Y QUร NO Y POR QUร s !PRENDER DE ERRORES s $ESCUBRIR NUEVOS RECURSOS ACTORES Y FACTORES CLAVES EN EL ร XITO DE LA INICIATIVA s 4RASPASAR LOS BENElCIOS DE LA EXPERIENCIA A OTROS s 2ESPONSABILIZARSE POR EL DINERO Y RECURSOS QUE SE HAN UTILIZADO s #ONVENCER A ESCร PTICOS DEL VALOR DE PROGRAMAS DE PREVENCIร N DE LA CRIMINALIDAD Una evaluaciรณn bien hecha asegura que: s ,AS INTERVENCIONES SEAN IMPLEMENTADAS EXITOSAMENTE s ,AS INTERVENCIONES HAYAN IDENTIlCADO EL PROBLEMA DE MANERA APROPIADA s ,AS INTERVENCIONES TENGAN EL IMPACTO DESEADO s 3URJAN NUEVAS INTERROGANTES Y VARIABLES QUE CONTRIBUYAN EN FORMA POSITIVA AL FUTURO DESARROLLO DEL PROYECTO s #UALQUIER IMPACTO NO DESEADO O IMPREVISTO NO PRODUZCA UN EFECTO CONTRAPRODUCENTE

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

se estรฉ evaluando y de los objetivos propuestos. Para evaluar serรก necesario: ย &UHDU VLVWHPDV GH UHFRSLODFLyQ GH LQIRUPDFLyQ UHODFLRQDGRV FRQ estos indicadores. ย 5HFRSLODU \ UHJLVWUDU LQIRUPDFLyQ ย $QDOL]DU OD LQIRUPDFLyQ ย (PSOHDU OD LQIRUPDFLyQ SDUD PDQWHQHU DO FRRUGLQDGRU \ DO HTXLpo tรฉcnico al dรญa.

luadores. Se puede, por ejemplo, determinar a uno o dos encargados que durante algรบn tiempo se dediquen exclusivamente a dicha IXQFLyQ /D LGHD HV TXH FRQYHUVHQ FRQ DFWRUHV GH WRGRV ORV QLYHOHV de la organizaciรณn sobre la forma en que se estรก llevando a cabo el trabajo y cuรกles son sus percepciones de la estrategia. Tambiรฉn VH GHEHQ LQFRUSRUDU FRQWDFWRV FRQ ORV SULPHURV EHQHร FLDULRV GH la iniciativa y con otros actores claves al interior de la comunidad SDUD UHFRJHU VXV DSUHFLDFLRQHV /D XWLOL]DFLyQ GH ORV UHJLVWURV GHO monitoreo tambiรฉn puede contribuir.

4.2.1. Evaluaciรณn de la estrategia como proceso 4.2.2. Evaluaciรณn de resultados e impactos

En todo proyecto de prevenciรณn de la delincuencia resulta pertinenWH HYDOXDU HO GLVHxR LQWHUQR HV GHFLU YHULร FDU OD FRKHUHQFLD HQWUH HO contexto de aplicaciรณn, los objetivos y metodologรญas, y la viabilidad de la estrategia en su conjunto. Hay que contar con un mecanismo de revisiรณn interna que entregue claridad a la unidad ejecutora sobre quรฉ es lo que debiera hacer, para quรฉ lo hace y cรณmo puede ir midiendo su avance. Una evaluaciรณn de este tipo puede aportar en la medida que: ย $\XGD D GHWHUPLQDU VL OD HVWUDWHJLD GLVHxDGD HV OD PHMRU IRUPD GH hacer las cosas, y si tiene sentido para los enfoques que se quieren utilizar. ย $\XGD D UHIRU]DU ORV DFXHUGRV WRPDGRV LPSLGLHQGR TXH FDGD miembro o equipo pueda hacer interpretaciones arbitrarias. ย )RUWDOHFH OD FRRUGLQDFLyQ HQWUH ORV HTXLSRV \ GD VHQWLGR GH XQLdad. ย 0RWLYD HO WUDEDMR GH WRGRV ORV PLHPEURV SXHVWR TXH KDFH YHU HO valor de cada acciรณn para el cumplimiento general de la estrategia. (VWD HYDOXDFLyQ GHEH VHU UHDOL]DGD XQD YH] ร QDOL]DGR HO GLVHxR GH la estrategia y comenzada la implementaciรณn de los proyectos. Una distancia de algunos meses con el inicio de las actividades es un buen tiempo para llevarla a cabo, ya que se verรก cรณmo estรกn funcionando las cosas y cรณmo se adapta la estrategia al contexto local. Dejar pasar mucho tiempo no es recomendable puesto que cada vez serรก mรกs difรญcil reajustar la estrategia sin arriesgar los consensos. No se trata todavรญa de evaluar los resultados e impacto que estรกn teniendo las actividades sino que determinar cรณmo estรก funcionando el proceso y cรณmo se estรกn adecuando y coordinando los distintos QLYHOHV GH OD LQLFLDWLYD 6H WUDWD GH LGHQWLร FDU VL KD\ SUREOHPDV FRPR falta de comunicaciรณn, errores de coordinaciรณn entre los equipos de trabajo, mala distribuciรณn de los recursos, carencia de campaรฑas GH GLIXVLyQ GLร FXOWDG HQ ORV SURFHVRV GH FDSDFLWDFLyQ H[FHVR GH burocratizaciรณn para las solicitudes no estipuladas, etc. Por lo general miembros de la propia iniciativa, que hayan participado o conozcan bien buena parte del proceso, actรบan como eva-

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Aparte de la evaluaciรณn de proceso analizada en el punto anterior, se pueden efectuar evaluaciones para determinar los resultados o impactos alcanzados por distintos ejes o proyectos de la iniciativa o por la iniciativa en su conjunto. ร stas contribuyen a establecer: ย &XiOHV DFFLRQHV KDQ GDGR PD\RUHV UHVXOWDGRV ย 4Xp WLSR GH PHWRGRORJtDV UHVXOWDQ PiV HIHFWLYDV ย (Q FXiQWR VH KD ORJUDGR GLVPLQXLU HO SUREOHPD DWDFDGR ย 4Xp FDPELRV SHUFLEH OD JHQWH HQ VX HQWRUQR ย &XiQ HIHFWLYRV KDQ VLGR ORV UHFXUVRV LQYHUWLGRV ย &XiQWR IDOWD SDUD DOFDQ]DU ORV REMHWLYRV SURSXHVWRV ย 4Xp XVXDULRV VRQ PiV UHFHSWLYRV HWF EVALUACIร N DE LA ESTRATEGIA COMO PROCESO ยฟQuiรฉn la realiza? 5NO O DOS MIEMBROS DE LA INICIATIVA IDEALMENTE QUE HAYAN PARTICIPADO EN SU DESARROLLO E IMPLEMENTACIร N ยฟCuรกndo y durante cuรกnto tiempo? #OMENZAR UNOS MESES A DESPUร S DE HABER PUESTO EN MARCHA LOS PLANES DE ACCIร N $EPENDIENDO DE LAS CONDICIONES Y TIEMPO DEDICADO ESTE TRABAJO NO DEBIERA TOMAR Mร S DE MESES ยฟPara quรฉ? 0ARA VERIlCAR LA COHERENCIA ENTRE EL CONTEXTO DE APLICACIร N LOS OBJETIVOS Y METODOLOGร AS Y LA VIABILIDAD DE LA ESTRATEGIA EN SU CONJUNTO 0ARA VERIlCAR SI LA IMPLEMENTACIร N ESTร SIENDO ElCIENTE ยฟCรณmo? %L O LOS ENCARGADOS SOSTIENEN CONVERSACIONES CON ACTORES DE TODOS LOS NIVELES DE LA INICIATIVA DESDE EL Lร DER Y COORDINADOR HASTA LOS EQUIPOS TERRITORIALES 3E RECOGEN SUS IMPRESIONES SOBRE EL PROCESO DE IMPLEMENTACIร N DE LA ESTRATEGIA 4AMBIร N SOSTIENEN CONVERSACIONES CON LOS PRIMEROS BENElCIARIOS EN TERRENO Y SE SISTEMATIZA LA INFORMACIร N DEL MONITOREO %NTREVISTAS REUNIONES GRUPOS FOCALES ENCUESTAS Y CUESTIONARIOS SON ALGUNOS INSTRUMENTOS ร TILES PARA ESTA EVALUACIร N ยฟCรณmo se formaliza? 5NA VEZ REALIZADA LA EVALUACIร N DEBE SER DIFUNDIDA A TODOS LOS MIEMBROS DE LA ORGANIZACIร N 0UEDE SER RECOMENDABLE LA ORGANIZACIร N DE UNA JORNADA DE ANร LISIS DE LOS RESULTADOS OBTENIDOS EN DONDE SE INTRODUZCAN LOS AJUSTES NECESARIOS Y SE REDISEร EN LOS PROCESOS QUE NO ESTร N DANDO FRUTO ,UEGO SE DEBE DAR CUENTA DE ESTOS CAMBIOS A LA COMUNIDAD


Capรญtulo 5: APOYOS A LA POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: EL MONITOREO Y LA EVALUACIร N DE LA ESTRATEGIA IMPLEMENTADA

Evaluaciรณn de resultados: Consiste en la evaluaciรณn de los efectos de los productos inmediatos del proyecto. Estos se concretan en el nรบmero de actividades realizadas, la calidad de las mismas, la recepciรณn obtenida, la satisfacciรณn y valoraciรณn tanto de los ejecutores como de los EHQHร FLDULRV UHVSHFWR GHO WUDEDMR UHDOL]DGR \ FXPSOLPLHQWR GH ORV objetivos. Evaluaciรณn de impacto: Consiste en la evaluaciรณn de los efectos deseados e indeseados (no SUHYLVWRV D PHGLDQR \ D ODUJR SOD]R \ SHUVLJXH YHULร FDU VL ORV FDPbios que el proyecto ha generado se condicen con los objetivos del mismo, permitiendo conocer si estos efectos son atribuibles a la intervenciรณn. Permite, ademรกs, observar consecuencias no previsWDV HQ ORV EHQHร FLDULRV \ GHWHUPLQDU HO QLYHO GH ORJURV REWHQLGRV HQ el desarrollo de la estrategia y de sus programas, asรญ como facilitar un aprendizaje respecto de la intervenciรณn que sirva para reorientar procesos y perfeccionar el diseรฑo de la estrategia. PROMOVIENDO NORMAS Y COMPORTAMIENTOS EQUITATIVOS DE Gร NERO, Rร O DE JANEIRO, BRASIL 0ROYECTO ENCABEZADO POR (ORIZONS 0ROGRAMAS Y 0ROMUNDO QUE ESTUDIร LA ElCACIA DE LAS INTERVENCIONES DESTINADAS A MODIlCAR LAS ACTITUDES DE LOS HOMBRES Jร VENES EN RELACIร N A LAS NORMAS DE Gร NERO Y A LA REDUCCIร N DEL RIESGO DE CONTAGIO DEL 6)( Y OTRAS ENFERMEDADES DE TRANSMISIร N SEXUAL %43 Caracterรญstica de la evaluaciรณn 3E REALIZร A LOS MESES DE INICIADAS LAS ACTIVIDADES Y Aร O DESPUร S 3E TRABAJร EN COMUNIDADES CON UN PROMEDIO DE ENCUESTADOS EN CADA UNA DE ELLAS ,A EVALUACIร N FUE DIRIGIDA POR MIEMBROS DE LA PROPIA ORGANIZACIร N PERO SUS INSTRUMENTOS FUERON VALIDADOS POR OTRAS ORGANIZACIONES PREVIAMENTE Metodologรญas #UANTITATIVA CREACIร N DE UNA ESCALA PARA MEDIR EL IMPACTO DE LA INTERVENCIร N EN ACTITUDES RELACIONADAS A NORMAS DE Gร NERO DENOMINADA ESCALA '%- $ICHA ESCALA ABORDA DOMINIOS DE LAS NORMAS DE Gร NERO VIOLENCIA RELACIONES SEXUALES SALUD REPRODUCTIVA TAREAS DOMร STICAS Y CUIDADO DE LOS HIJOS HOMOFOBIA Y RELACIร N CON OTROS HOMBRES #UALITATIVAS ENTREVISTAS Y GRUPOS FOCALES CON LA POBLACIร N RECEPTORA Principales resultados #UALITATIVAMENTE SE CONSTATร UN CAMBIO EN LAS PERCEPCIONES Y CREENCIAS SOBRE LA MASCULINIDAD -UCHOS SUJETOS DECLARARON HABER CONVERSADO POR PRIMERA VEZ CON SU PAREJA TEMAS RELATIVOS AL CUIDADO REPRODUCTIVO DISTRIBUCIร N DE TAREAS EN EL HOGAR lDELIDAD ETC #UANTITATIVAMENTE TAMBIร N SE OBSERVARON RESULTADOS SIGNIlCATIVOS 3E PRODUJO UNA DISMINUCIร N ENTRE UN Y UN EN EL ACUERDO CON AlRMACIONES RELATIVAS A NORMAS TRADICIONALES DE Gร NERO !L Tร RMINO DE UN Aร O DE INTERVENCIร N CASI EL DE LOS Jร VENES MOSTRABA ESTAR DE ACUERDO CON NORMAS ALTAMENTE EQUITATIVAS SEGร N LA ESCALA '%- 0UPERWITZ ET AL

EVALUACIร N PROGRAMA PAZ Y RECONCILIACIร N MEDELLร N, COLOMBIA. /RIENTADO A INTEGRAR A LOS Jร VENES PROVENIENTES DE PROCESOS DE DESMOVILIZACIร N EX COMBATIENTES DE LA SOCIEDAD CIVIL A LA SOCIEDAD GARANTIZร NDOLES SUS DERECHOS Y POTENCIANDO SUS HABILIDADES Caracterรญstica de la evaluaciรณn &UE REALIZADA POR LA /RGANIZACIร N )NTERNACIONAL PARA LAS -IGRACIONES 3!-% /)- Y POR LA /RGANIZACIร N DE %STADOS !MERICANOS /%! %N ESTE SENTIDO SE TRATA DE UNA EVALUACIร N EXTERNA CENTRADA EN LA MEDICIร N DE IMPACTOS Y RESULTADOS CUANTIlCABLES 3E REALIZร VARIOS Aร OS DESPUร S DE COMENZADO EL PROGRAMA Y PUSO ร NFASIS TANTO EN SU COBERTURA COMO EN SU IMPACTO Metodologรญas 3E UTILIZARON DISTINTOS TIPOS DE REGISTROS DE LOS Jร VENES QUE FUERON REINSERTADOS POR EL PROGRAMA ANTECEDENTES ESCOLARES LABORALES PENALES ETC !DEMร S EL 3!-% /)- MONITOREร EL COMPORTAMIENTO Y LA SATISFACCIร N DE CADA BENElCIARIO Y DE LA COMUNIDAD RECEPTORA MEDIANTE CONVERSACIONES CON LOS SUJETOS Y LA CREACIร N DE INSTANCIAS EN DONDE ELLOS PUDIESEN EXPRESAR SUS OPINIONES Y DEMANDAS Principales resultados ! NIVEL DE COBERTURA EL PROGRAMA HA SIDO TOTALMENTE EXITOSO EN TOTAL REINSERTADOS RECIBIERON APOYO PSICOSOCIAL Mร S DE SE REINCORPORARON AL SISTEMA LABORAL SOBRE BENElCIARIOS SE INCORPORARON A ALGร N SISTEMA DE ESTUDIO ES DECIR UN DEL TOTAL DE BENElCIARIOS DEL PROGRAMA %L IMPACTO TAMBIร N FUE ELOCUENTE DE UNOS Jร VENES QUE SE ENCONTRABAN EN EL CRIMEN EL Nร MERO SE REDUJO A LO QUE MEJORร LOS ร NDICES DE CALIDAD DE VIDA EN GRAN PARTE DE LAS COMUNIDADES DE LA CIUDAD !LCALDร A DE -EDELLร N

4XLpQ FXiQGR \ FyPR OOHYDU D FDER HVWH WLSR GH HYDOXDFLyQ SXHGH YDULDU VLJQLร FDWLYDPHQWH GHSHQGLHQGR GHO WDPDxR GHO SUR\HFWR del grado de formalidad, de la cantidad de recursos, del objeto, del tiempo con que se cuente, entre otros. Puede ser realizada por un equipo interno de la organizaciรณn o por un equipo externo, como comรบnmente se recomienda. Mรกs que recetas preexistentes se aconseja que sea el propio equipo tรฉcnico quien determine su fรณrmula, considerando lo siguiente: ย 8WLOL]DU LQVWUXPHQWRV PL[WRV FXDQWLWDWLYRV \ FXDOLWDWLYRV 'H HVWD forma habrรก mรกs herramientas para abordar las distintas aristas GH OD SUREOHPiWLFD \ YDOLGDU PHMRU ORV UHVXOWDGRV /RV LQVWUXPHQtos cualitativos (entrevistas, grupos focales, anรกlisis de discursos, REVHUYDFLRQHV HWQRJUiร FDV HWF D\XGDQ D FODULร FDU GLPHQVLRQHV VXEMHWLYDV \ WUDEDMDQ D QLYHO GH SHUFHSFLRQHV /RV LQVWUXPHQWRV cuantitativos (encuestas, anรกlisis estadรญsticos, censos, etc.) ayudan a medir los resultados e impactos en cifras, que pueden ser comparables con uno u otro periodo de tiempo y lugar. ย 9DOLGDU UHVXOWDGRV \ SURFHGLPLHQWRV FRQ XQD FRQWUDSDUWH (Q caso de que el evaluador sea un miembro del equipo tรฉcnico,

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CONSIDERAR EN TODO MOMENTO A LA COMUNIDAD ,OS AGENTES MĂˆS IMPORTANTES DENTRO DE UNA EVALUACIĂ˜N DE IMPACTO O DE RESULTADOS SON LOS MIEMBROS DE LA PROPIA COMUNIDAD 3OLO ELLOS PUEDEN DETERMINAR SI LOS CAMBIOS INTRODUCIDOS POR LA INICIATIVA CONTRIBUYEN A MODIlCACIONES SUSTANTIVAS EN SU CALIDAD DE VIDA 0OR ESO ES FUNDAMENTAL CONSIDERARLOS EN LA EVALUACIĂ˜N Y AHONDAR EN SUS PERCEPCIONES SOBRE EL PROCESO DE INTERVENCIĂ˜N Y O ENTREGARLES LOS INSTRUMENTOS PARA QUE LA COMUNIDAD HAGA EVALUACIONES PERIĂ˜DICAS COMPLEMENTARIAS A LAS PLANTEADAS

una contraparte externa que haga una revisión metodológica exhaustiva de sus resultados serå conveniente para evitar sesgos. De igual forma, si alguien externo se encarga del proceso, se GHEH YHULÀFDU TXH HQ OD HYDOXDFLyQ FRQVLGHUH HYHQWXDOHV LQFLGHQFLDV GH FRQWH[WR TXH SXHGHQ KDEHU LQà XLGR VREUH ORV LPSDFtos de la iniciativa. ‡ +DFHU XQD HYDOXDFLyQ SDUWLFLSDWLYD ,QFOXLU HQ OD HYDOXDFLyQ D la mayor cantidad posible de actores siempre es recomendable. Miembros del equipo de trabajo, socios, grupos de intereses, EHQHÀFLDULRV GHO SUR\HFWR PLHPEURV GH OD FRPXQLGDG HWF GHbiesen ser considerados, tanto en las mediciones cuantitativas o estadísticas como en sus relatos subjetivos respecto del problema de la delincuencia. ‡ &RQVLGHUDU YDULDEOHV HVWUDWLÀFDGRUDV /D UD]D HO JpQHUR HO QLvel socioeconómico, el nivel de escolaridad, son algunas de las variables que se pueden considerar a la hora de evaluar un proyecto. Muchas veces las características indicadas pueden tener incidencia sobre el impacto de tal o cual tipo de acción. Considerar las variables implica la preocupación de integrar a todos por igual. Indicadores

(Q XQD HYDOXDFLyQ SODQLĂ€FDGD ORV FULWHULRV GH HYDOXDFLyQ VRQ GHVglosados en categorĂ­as mĂĄs concretas que, a su vez, pueden ser observables y medibles, de tal manera generan indicadores para su WUDWDPLHQWR DQDOtWLFR /D IRUPXODFLyQ GH LQGLFDGRUHV HVWi SUHVHQWH en casi todo tipo de evaluaciĂłn; se utilizan para saber si se han alcanzado los objetivos del proyecto, los productos y resultados esperados, asĂ­ como para evaluar la gestiĂłn del mismo. Por lo tanto, buena parte del ĂŠxito de muchas evaluaciones en materias de seguridad dependerĂĄn de la calidad de los indicadores que se haya seleccionados para medir el problema. En esta materia se recomienda tratar en lo posible de crear indicadores propios o utilizar indicadores ya validados. Si se utilizan indicadores ya elaborados (tasas de delitos, de homicidios, etc.) se deben someter a una revisiĂłn metodolĂłgica rigurosa, que analice

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como ĂŠstos fueron construidos y en quĂŠ medida pueden ser traducidos a la realidad local. Por otra parte se debe considerar que una gran parte de los delitos de mayor connotaciĂłn social no son denunciados, por tanto, nunca se puede subestimar la magnitud de estos problemas. Crear buenos indicadores en materia de seguridad puede ser una tarea costosa y difĂ­cil. Por eso, en la pĂĄgina siguiente presentamos un cuadro con algunas nociones bĂĄsicas sobre cĂłmo se debe construir un indicador y cuĂĄles son sus propiedades. 6L VH YD D RSWDU SRU XQ WLSR GH HYDOXDFLyQ IRUPDO \ SODQLĂ€FDGD OD creaciĂłn o la elecciĂłn de cuĂĄles serĂĄn los indicadores que se utilizarĂĄn deberĂĄ ser hecha en conjunto con el diseĂąo de la estrategia, y en estrecha relaciĂłn con los objetivos que se propongan. En este sentido, es necesaria la elaboraciĂłn de un diseĂąo del plan de evaluaciĂłn que serĂĄ llevado a cabo a lo largo de la iniciativa. Una buena manera de realizar esto es asignar a cada objetivo un LQGLFDGRU \ D FDGD LQGLFDGRU XQD IXHQWH GH YHULĂ€FDFLyQ WDO FRPR lo indica la metodologĂ­a del “marco lĂłgicoâ€?. De esta manera el WUDEDMR VH KDUi FXDQWLĂ€FDEOH \ YHULĂ€FDEOH HQ WRGR PRPHQWR /D HODERUDFLyQ R GHWHUPLQDFLyQ GH HVWRV LQGLFDGRUHV GHEHUi VHU OD base formal de una evaluaciĂłn de este tipo. EvaluaciĂłn diferenciada por niveles de vulnerabilidad

Un hecho importante para el desarrollo de una buena evaluaciĂłn, aunque pocas veces considerado, es el reconocimiento de los distinWRV QLYHOHV GH YXOQHUDELOLGDG R GLĂ€FXOWDG TXH H[LVWHQ HQ XQ GHWHUPLnado objeto de intervenciĂłn (barrio, jĂłvenes, delincuentes, etc.). No es lo mismo reducir el nĂşmero de reincidencia entre personas que han cometido delitos graves que entre personas que tan solo han cometido un delito menor. Del mismo modo no es lo mismo reducir los asaltos en un determinado barrio de la comuna, histĂłricamente vulnerable, que en otro con tasas de victimizaciĂłn muy bajas. Aunque todo esto parezca evidente no son pocos los programas de prevenciĂłn que aĂşn no consideran este factor dentro de su evaluaciĂłn y que por tanto realizan evaluaciones no diferenciadas y/o poco precisas. Para llevar a cabo un plan de evaluaciĂłn diferenciado por niveles de YXOQHUDELOLGDG R GLĂ€FXOWDG VH UHFRPLHQGD VHJXLU VHFXHQFLDOPHQWH las siguientes indicaciones.: 'HĂ€QLU DOJXQRV LQGLFDGRUHV TXH SHUPLWDQ GLIHUHQFLDU D VX ´S~blico objetivoâ€? en distintos niveles de vulnerabilidad. Es decir, HVWDEOHFHU ORV FULWHULRV TXH YDQ D GHĂ€QLU HO JUDGR GH YXOQHUDELOLdad de un sujeto o lugar (Por ejemplo, antecedentes delictuales


Capรญtulo 5: APOYOS A LA POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: EL MONITOREO Y LA EVALUACIร N DE LA ESTRATEGIA IMPLEMENTADA

INDICADORES DE EVALUACIร N: DEFINICIONES Y EJEMPLOS Indicadores indirectos: #UANDO NO SE PUEDE MEDIR DE MANERA DIRECTA LA REALIDAD SE RECURRE A INDICADORES SUSTITUTIVOS O CONJUNTOS DE INDICADORES RELATIVOS AL FENร MENO QUE NOS INTERESA MEDIR O SISTEMATIZAR 0OR EJEMPLO EL Nร MERO DE MUJERES QUE PIDEN ATENCIร N CLร NICA POR LESIONES PUEDE INDICAR LA 6)& Fร SICA

Indicadores cualitativos: 3ON LOS QUE SE RElEREN A CUALIDADES 3E TRATA DE ASPECTOS QUE NO SON CUANTIlCADOS DIRECTAMENTE 3E TRATA DE OPINIONES PERCEPCIONES O JUICIO DE PARTE DE LA GENTE SOBRE ALGO 0OR EJEMPLO LA RELACIร N HABITANTES n POLICร A

Indicadores directos: 3ON AQUELLOS QUE PERMITEN UNA MEDICIร N DIRECTA DEL FENร MENO 0OR EJEMPLO EL Nร MERO DE DENUNCIAS DE 6)&

Indicadores cuantitativos: 3ON LOS QUE SE RElEREN DIRECTAMENTE A MEDIDAS EN Nร MEROS O CANTIDADES 0OR EJEMPLO LA TASA DE ROBO EN UN BARRIO O CIUDAD

Indicadores positivos: 3ON AQUELLOS EN LOS CUALES SI SE INCREMENTA SU VALOR ESTARร AN INDICANDO UN AVANCE 0OR EJEMPLO .ร MERO DE REINSERCIร N ESCOLAR EXITOSA

Indicador negativo: 3ON AQUELLOS EN LOS CUALES SI SU VALOR SE INCREMENTA ESTARร AN INDICANDO UN RETROCESO 0OR EJEMPLO )NCREMENTO DESERCIร N ESCOLAR

ยฟQUร ES UN INDICADOR?

ยฟCร MO CONSTRUIR BUENOS INDICADORES?

s 5NA HERRAMIENTA QUE NOS PERMITE MEDIR SIMPLIlCAR Y COMUNICAR INFORMACIร N s %S UNA SEร AL QUE ENTREGA INFORMACIร N A TIEMPO PARA TOMAR DECISIONES s %S UN MEDIO PARA CONOCER LA CALIDAD DE LAS ACCIONES Y LOS CAMBIOS QUE SE ESTร N LOGRANDO EN UN PROYECTO PERMITE REPRESENTAR DATOS EN EL TIEMPO Y ASร VISUALIZAR CAMBIOS s $ESCRIBE QUร SIGNIlCAN EXACTAMENTE LOS OBJETIVOS Y EN QUร SE PUEDE RECONOCER SI SE HAN ALCANZADO

!LGUNOS CRITERIOS PARA LA CONSTRUCCIร N DE BUENOS INDICADORES SON s -ENSURABILIDAD #APACIDAD DE MEDIR O SISTEMATIZAR LO QUE SE PRETENDE CONOCER s !Nร LISIS #APACIDAD DE CAPTAR ASPECTOS CUALITATIVOS O CUANTITATIVOS DE LAS REALIDADES QUE PRETENDE MEDIR O SISTEMATIZAR s 2ELEVANCIA #APACIDAD DE EXPRESAR LO QUE SE PRETENDE MEDIR s 0ARTICIPATIVO %STABLECER INDICADORES QUE PROVENGAN DE LAS COMUNIDADES DE INTERร S s /TROS !SPECTOS #OMPRENSIBLE #REร BLE #OMPARABLE /PORTUNO

anteriores, adicciรณn a una droga, situaciรณn escolar, antecedentes familiares, etc.). &ODVLร FDU DO FRPLHQ]R GH OD LQLFLDWLYD D ORV VXMHWRV R OXJDUHV HQ distintos niveles de vulnerabilidad. Por lo general se utilizan tres QLYHOHV $OWD 9XOQHUDELOLGDG 0HGLD 9XOQHUDELOLGDG %DMD 9XOnerabilidad. 3. Desarrollar metodologรญas diversas y distribuir los recursos en relaciรณn a los distintos niveles de vulnerabilidad, otorgando mรกs recursos para abordar los casos de alta vulnerabilidad. 4. Asignar una ponderaciรณn distinta a cada nivel de complejidad a la hora de evaluar. En la medida que un logro medio con un caso de alta vulnerabilidad puede ser mรกs valioso que un logro alto con caso de baja vulnerabilidad. 'Hร QLU FRQ TXp YXOQHUDELOLGDG GH XVXDULR YD D WUDEDMDU VX SURgrama y derivar aquellos usuarios que presenten una vulnerabilidad mayor a otros programas. Una evaluaciรณn de este tipo permite un mayor nivel de precisiรณn HQ ORV UHVXOWDGRV OR TXH KDUi YHU D VX SUR\HFWR PiV FRQร DEOH \ FRQ PD\RUHV SRVLELOLGDGHV GH REWHQHU PiV ร QDQFLDPLHQWR

4.2.3 Consideraciones ๏ฌ nales

/D HYDOXDFLyQ FRPR VH KD YLVWR HV XQD KHUUDPLHQWD TXH VH SXHGH utilizar durante toda la implementaciรณn de la estrategia y de cualquiera de sus proyectos. Para asegurar que se realice con seriedad, KD\ TXH DVLJQDUOH VXร FLHQWHV UHFXUVRV 3RU OR JHQHUDO VH HVWLPD TXH entre un 3 y un 6 por ciento del presupuesto bastarรญa, aunque va a depender mucho del tipo de mediciones que se quiera utilizar y la frecuencia con que se apliquen. Al tรฉrmino de la evaluaciรณn es recomendable formalizar los resultados de manera clara y precisa, en un informe, libro, sitio web, o cualquier medio de difusiรณn masivo. Este documento serรก la base SDUD OD SRVWXODFLyQ D QXHYRV ร QDQFLDPLHQWRV \ OD KHUUDPLHQWD TXH permitirรก publicitar los logros y corregir los errores o las carencias. Dar cuenta de los resultados a la comunidad con la cual se trabajรณ, no solamente seรฑalando los logros, sino tambiรฉn las equivocaciones y las cosas que aรบn quedan por mejorar, es parte de la educaFLyQ GH ORV KDELWDQWHV \ GH ORV VRFLRV \ JHQHUD PD\RU FRQร DQ]D \ credibilidad.

EVALUACIร N POR NIVELES DE VULNERABILIDAD: PROYECTO MUNICIPAL PARA BARRIOS Mร S SEGUROS (EJEMPLO FICTICIO)

ยฒXITO DE LA INICIATIVA #LASIlCACIร N BARRIOS EN TOTAL

ยฒXITO 6ULNERAB

"AJA VULNERABILIDAD

.ULO !UMENTO DEL PROBLEMA

"AJA

-EDIA VULNERABILIDAD

"AJO -ANTENCIร N DEL PROBLEMA

-EDIA

!LTA VULNERABILIDAD

-EDIO 2EDUCCIร N DEL PROBLEMA

!LTO ERRADICACIร N DEL PROBLEMA

!LTA

.ULO

"AJO

-EDIO

!LTO

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CapĂ­tulo 6:

COMUNICACIONES: MANTENER (SE) INFORMADO Con comunicaciones la prevenciĂłn puede ser efectiva

VisiĂłn y creatividad

En este capĂ­tulo se explica el papel de las comunicaciones en las distintas etapas de implementaciĂłn de una polĂ­tica local que apunte a la

Las comunicaciones, en la forma de pensarlas, crearlas, en sus contenidos como en su implementaciĂłn, se deben enmarcar en la visiĂłn. La contingencia, la urgencia o la efectividad inmediata no deben llevar a olvidar y menos contradecir la visiĂłn.

prevenciĂłn de la delincuencia y la

La comunicaciĂłn puede ser creaciĂłn, incluso arte. Planteada asĂ­, se obtendrĂĄn mejores lenguajes y mensajes y se llegarĂĄ en forma mĂĄs efectiva a los pĂşblicos deseados.

violencia, la que incluirĂĄ campaĂąas,

ComunicaciĂłn y transparencia

relaciĂłn con los medios de comu-

Las comunicaciones, internas y externas, son una herramienta para la transparencia de las políticas, programas y proyectos, uso de fondos y designación de personas, etc., tanto al interior de los equipos como frente a la comunidad. Este aspecto puede ser particularmente relevante en zonas donde la corrupción es preocupante o GRQGH HO GHOLWR RUJDQL]DGR FRPR HO QDUFRWUiÀFR PDQHMD PXFKR dinero.

nicaciĂłn y organizaciones e instiWXFLRQHV DĂ€QHV \ FRPXQLFDFLRQHV internas.

Lo que percibe y cree la gente

Muchas personas no creen en determinados logros a menos que se los relate alguien en quien ellas confĂ­an. AsĂ­ sucede con el tema de seguridad. 3RU OR JHQHUDO QR HV VXĂ€FLHQWH UHGXFLU OD GHOLQFXHQFLD OD JHQWH tiene que creer realmente que la delincuencia ha disminuido. Las percepciones de criminalidad, por lo general no estĂĄn vinculadas estrictamente a la realidad de la delincuencia. Lo que piensan las personas y su actitud hacia ella estĂĄn moldeados en el tiempo, por la informaciĂłn que corre de boca en boca y los reportajes de los medios de comunicaciĂłn, entre otros factores. Cambiar estas actitudes y percepciones es un proceso que requiere una estrategia de comunicaciones que apoye los cambios y los sustente en el tiempo. Las percepciones pĂşblicas sobre el ĂŠxito de medidas de prevenciĂłn de la delincuencia pueden ser mĂĄs efectivas para reducir el miedo hacia ciertos delitos y la violencia que cambios reales en los niveles de ĂŠsta. Sin embargo, es muy peligroso abusar de esto, forzando la percepciĂłn hacia una sensaciĂłn de seguridad que no calce con la realidad. OBJETIVOS BĂ SICOS DE LA COMUNICACIĂ“N s ,OGRAR QUE LA POLĂ“TICA DE PREVENCIĂ˜N nY SU ENFOQUEn SEA COMPRENDIDA COMPARTIDA POR LAS INSTITUCIONES ORGANIZACIONES Y LA COMUNIDAD s %STABLECER UN LENGUAJE COMĂžN DEL TEMA s $IFUNDIR LOS VALORES QUE LA SUSTENTAN Y LOS LOGROS QUE SE VAYA OBTENIENDO s 2ESPONDER EN FORMA RĂˆPIDA Y COHERENTE A LA CONTINGENCIA

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CapĂ­tulo 6: APOYOS A LA POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: COMUNICACIONES: MANTENER (SE) INFORMADO

COMUNICACIĂ“N EN LAS DISTINTAS ETAPAS DE IMPLEMENTACIĂ“N DE LA POLĂ?TICA DE PREVENCIĂ“N LOCAL

para evaluar si se estĂĄn produciendo los cambios que aquella se ha SURSXHVWR \ KDFHU ODV PRGLĂ€FDFLRQHV FRUUHVSRQGLHQWHV 5.1.2. Estrategia

5.1. COMUNICACIONES 5.1.1. DiagnĂłstico

Lo primero que se debe tener claro antes de comenzar a implementar un plan de comunicaciones son las principales percepciones que tienen las personas que serĂĄn receptoras de las campaĂąas sobre la prevenciĂłn. ÂżCuĂĄles son sus creencias al respecto?, Âża quĂŠ le temen?, ÂżcuĂĄles son sus esperanzas?, ÂżcĂłmo se informan sobre estos temas?, Âżen quiĂŠn confĂ­an?, son algunas de las preguntas cuyas respuestas se debe tener sobre la mesa antes de lanzar cualquier polĂ­tica de comunicaciĂłn -y las campaĂąas que la constituyan- que SUHWHQGD VHU HĂ€FD] /D PHMRU PDQHUD GH FRQRFHU HVDV SHUFHSFLRnes es a travĂŠs de diagnĂłsticos comunicacionales. Esto es, estudios cualitativos (que pueden hacerse a travĂŠs de entrevistas en profundidad a una muestra de potenciales receptores) que apunten a conocer las razones y las motivaciones de las creencias y expectativas de la gente. A medida que transcurre la polĂ­tica de comunicaciĂłn o una campaĂąa, es conveniente repetir el diagnĂłstico (sobre la misma muestra)

A partir de los antecedentes del diagnĂłstico, se puede diseĂąar la HVWUDWHJLD GH FRPXQLFDFLRQHV HV GHFLU GHĂ€QLU GH TXp PDQHUD VH obtendrĂĄn los resultados esperados. En otras palabras, ello supone tener claro quĂŠ se quiere lograr a travĂŠs de la campaĂąa, en cuĂĄnto tiempo, con cuĂĄntos recursos y a travĂŠs de quĂŠ canales. A. Objetivo

El objetivo comunicacional es el resultado que se busca a travÊs de cada campaùa. Las acciones que se emprendan deben apuntar hacia el logro del objetivo. Éste debe desprenderse y ser coherente con la visión de la política local para la prevención de la violencia y la delincuencia. El objetivo no apunta a disminuir las cifras de la delincuencia, sino a obtener, por ejemplo, que la gente perciba que las autoridades se estån haciendo cargo del tema y tomando el control, en el supuesto de que el estudio de diagnóstico arrojó GHVFRQÀDQ]D KDFLD ODV DXWRULGDGHV El objetivo debe contemplar un horizonte de tiempo para cumplirse. Es conveniente partir con objetivos modestos y lograrlos en un mediano plazo. El logro serå un aliciente para pasar a otras etapas de la política comunicacional o de la campaùa y para hacerla mås creíble entre los públicos receptores.

CONSEJOS ĂšTILES

B. Distintos pĂşblicos s 4ENGA CLARO CUĂˆLES SON SUS PĂžBLICOS OBJETIVOS O AUDIENCIAS Y CĂ˜MO VA A ADECUAR SUS MENSAJES A CADA UNO DE ELLOS s -IENTRAS MEJOR ENTIENDA A SU PĂžBLICO MEJOR VA A PODER COMUNICARSE CON Ă?L #ONSULTAS COMUNITARIAS PUEDEN AYUDAR EN ESTE PROCESO s %VALĂžE SI GRUPOS ESPECĂ“lCOS COMUNITARIOS ASOCIACIONES DE RESIDENTES Y COMITĂ?S DE VECINOS PUEDEN SER CONSULTADOS PARA SUGERIR LAS VĂ“AS MĂˆS ElCACES DE ALCANZAR AL PĂžBLICO s %N FORMA COMPLEMENTARIA SE PUEDE CONTAR CON ALGUIEN DE LA COMUNIDAD QUE SEA CONSIDERADO UN hAGENTE DE CAMBIOv ALGUIEN EN QUIEN LA GENTE CONFĂ“E Y ESCUCHE )NVOLUCRE A ESTA PERSONA EN LA 0OLĂ“TICA ,OCAL DE 0REVENCIĂ˜N PARA QUE LE AYUDE A TRANSMITIR LOS MENSAJES Y PLANIlCAR ACCIONES COMUNICACIONALES s ,OS MENSAJES DEBEN SER POCOS BREVES Y CLAROS $EBEN REPETIRSE EN TODAS LAS OPORTUNIDADES QUE SE PRESENTEN s 3OBRE TODO DEBEN APELAR A INTERESES DEL RECEPTOR 0OR ESO LOS ARGUMENTOS CAMBIAN DE ACUERDO A CADA AUDIENCIA Y CIRCUNSTANCIA s %L MENSAJE DEBE PROVEER INFORMACIĂ˜N QUE PUEDA SER PROCESADA POR LA CAPACIDAD DE COMPRENSIĂ˜N DE LA PERSONA A QUIEN Ă?STE APELA s %L MENSAJERO DEBE SER CREĂ“BLE ES DECIR SUS AlRMACIONES DEBEN SER RESPALDADAS POR HECHOS $E LO CONTRARIO EL IMPACTO DEL MENSAJE NO PERDURARĂˆ

/D GHĂ€QLFLyQ GH D TXp S~EOLFRV VH TXLHUH GLULJLU OD SROtWLFD GH FRmunicaciĂłn y sus campaĂąas, es fundamental. No se puede suponer que todos ellos son iguales, sino que se requiere diferenciarlos, porque habrĂĄ que dirigirse a ellos a travĂŠs de distintos canales y FRQ GLIHUHQWHV DUJXPHQWRV 3RU HMHPSOR VH SXHGHQ LGHQWLĂ€FDU DXtoridades polĂ­ticas y judiciales, parlamentarios, dirigentes sociales formales e informales, comunidad (y dentro de ella, trabajadores, estudiantes, dueĂąas de casa) y periodistas. /D LGHQWLĂ€FDFLyQ GH ORV S~EOLFRV \ VXV FDUDFWHUtVWLFDV QRV SHUPLWLUi elaborar mensajes que sean acordes a los intereses y objetivos de cada campaĂąa pero, sobre todo, que hagan sentido a cada una de las audiencias. Es inconducente transmitir ideas que la gente no entiende o que no tienen relaciĂłn con lo que les importa en su vida. De la misma manera, conocer a travĂŠs de quĂŠ medios se LQIRUPDQ ODV SHUVRQDV D\XGDUi D GHĂ€QLU ORV FDQDOHV R KHUUDPLHQWDV FRPXQLFDFLRQDOHV PiV HĂ€FDFHV D WUDYpV GH ORV FXDOHV VH SXHGH llegar a esos grupos. Por ejemplo, no serĂ­a apropiado gestionar publicaciones en los periĂłdicos si la gente no acostumbra leerlos.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

LLAMADOS ESPERANZADORES %N GENERAL SE DEBE TRATAR DE MOTIVAR MEDIANTE LLAMADOS AMPLIOS ESPERANZADORES QUE APELEN A ANHELOS COLECTIVOS Y NO REDUCIENDO EL TEMA A ALGO ĂžNICAMENTE REPRESIVO O POLICIAL EN LA ETERNA LĂ˜GICA DE hBUENOSv Y hMALOSv QUE TIENDE A MANTENER LAS DESIGUALDADES LAS PERSONAS GRUPOS Y SECTORES ESTIGMATIZADOS

C. Mensajes

Éstas son las ideas fuerza que la política de prevención quiere que penetren en la mente de los receptores. Deben ser pocas y muy simples, pero, por sobre todo, deben hacer sentido a los públicos. Vivimos en una verdadera jungla comunicativa donde muchos actores luchan por emitir sus mensajes publicitarios o políticos, por lo tanto, se deben seleccionar los mensajes teniendo en cuenta esa gran competencia. Ademås, los seres humanos tenemos una capacidad limitada para captar simultåneamente muchas ideas. Por eso, en la medida que esa idea se relacione con alguna experiencia previa es mås factible que la escuchemos. Los mensajes tienen que ser consistentes, de ahí la importancia de respaldarlos con argumentos. Éstos pueden contener datos duros, como tasas de homicidios, causa de la muerte, edad de víctimas y victimarios, etc.; datos intermedios, como las encuestas de victimización, y datos sobre percepción. La información debe ser FRQÀDEOH ~WLO FRPSDUDEOH \ WHQHU FRQWLQXLGDG 6LQ HPEDUJR ORV argumentos que se entregan para sustentarlas deben ser diferenciados de acuerdo a los intereses de cada grupo de públicos. Si el

mensaje es “cĂşidate, tu vida nos importaâ€?, por ejemplo, las razones que se les darĂĄn a los niĂąos para cuidarse serĂĄn diferentes de las que se les darĂĄn a las autoridades municipales. En general, para tener mayor impacto, mensajes relacionados con LQLFLDWLYDV HVSHFtĂ€FDV GHEHQ HVWDU GLULJLGRV D DXGLHQFLDV HVSHFtĂ€FDV mensajes que llegan al pĂşblico masivo deben ser genĂŠricos o generales, de lo contrario no tendrĂĄn mucho sentido al no relacionarse con las experiencias propias o marco de referencia de la gente. Hay exFHSFLRQHV SRU HMHPSOR D SDUWLU GH XQD H[SHULHQFLD HVSHFtĂ€FD VH SXHGH OOHJDU D KDEODU GH OR JHQHUDO SXHGH HMHPSOLĂ€FDU R VHUYLU GH PRGHOR a replicar, a adaptar, o de “llamadoâ€? a la acciĂłn, a participar, etc. El contexto

El contexto afecta cómo las personas escuchan los mensajes. Por ejemplo, el mismo mensaje sobre prevención de la delincuencia y violencia se percibirå de manera muy distinta despuÊs de una noticia sobre terrorismo que despúes de una publicidad de comida de gatos. El contexto incluye aspectos sociales, políticos y culturales del país, OD UHJLyQ OD FLXGDG HO EDUULR \ ORV JUXSRV HVSHFtÀFRV D ORV TXH VH quiere llegar. Lo importante -como ya se dijo- es saber a quiÊnes se desea llegar (por ejemplo, no son lo mismo los habitantes de una ciudad que los integrantes de clubes deportivos), a travÊs de quÊ medios y en quÊ momento (por ejemplo, verano o invierno, o en periodo electoral para elegir el gobierno local o nacional), para DGHFXDU ORV PHQVDMHV D ORV FRQWH[WRV JHQHUDOHV R HVSHFtÀFRV

EL NOMBRE DE UNA POLĂ?TICA DE PREVENCIĂ“N Y SUS CAMPAĂ‘AS 0ARA FACILITAR LA COMPRENSIĂ˜N Y RECORDACIĂ˜N DE LA 0OLĂ“TICA DE 0REVENCIĂ˜N Y DE SUS MENSAJES FRECUENTEMENTE SE UTILIZA UN NOMBRE Y SE AGREGA UN ESLOGAN QUE RESUME LA O LAS IDEAS FUERZA .OMBRAR DAR A CONOCER DIFUNDIR ES EN CIERTA MEDIDA DARLE VIDA A ALGUIEN O A ALGO %S INDIVIDUALIZARLO DARLE IDENTIDAD 0ASA CON UN RECIĂ?N NACIDO QUĂ? DISTINTO ES DECIRLE NIĂ—O O NIĂ—A QUE DECIRLE ,AURA O !NTONIO 0ERO zQUĂ? PASA CUANDO HAY MUCHAS ,AURAS .O BASTA CON EL NOMBRE ES NECESARIO AGREGARLE OTROS NOMBRES Y APELLIDOS Y O ASOCIARLE ATRIBUTOS !L NOMBRAR UNA POLĂ“TICA EN ESTE CASO UNA 0OLĂ“TICA PARA LA 0REVENCIĂ˜N DE LA 6IOLENCIA Y LA $ELINCUENCIA SU NOMBRE NO SĂ˜LO NO GENERA IDENTIlCACIĂ˜N CON ELLA SINO QUE DICE POCO %S EL NOMBRE DE MUCHAS POSIBLES POLĂ“TICAS DISTINTAS %NTONCES ES IMPORTANTE DARLE UNA NOMINACIĂ˜N PARTICULAR Y ASOCIARLA A UNO O MĂˆS CONCEPTOS CENTRALES DE LA POLĂ“TICA QUE LA EXPLICITEN QUE TENGAN SENTIDO PARA LAS PERSONAS 5NO DE LOS PRIMEROS PASOS SERĂˆ ENTONCES DElNIR UN NOMBRE Y ASOCIARLE UNA FRASE UN ESLOGAN QUE AYUDEN A CARACTERIZARLA %L NOMBRE UNA VEZ PUESTO ES MUY DIFĂ“CIL DE CAMBIAR EN CAMBIO EL ESLOGAN MARCA ETAPAS QUE DEBEN IR EN CONCORDANCIA CON EL LOGRO DEL OBJETIVO %L NOMBRE HARĂˆ REFERENCIA GENERALMENTE A LA VISIĂ˜N AL SUEĂ—O SERĂˆ POSITIVO AMPLIO UN GRAN hPARAGUASv BAJO EL CUAL SE PUEDEN COBIJAR MUCHOS PROGRAMAS Y PROYECTOS ,LEGAR A UN BUEN ESLOGAN NO ES FĂˆCIL 2EQUIERE TOMAR MUCHAS DECISIONES SOBRE QUĂ? SE QUIERE TRANSMITIR QUĂ? SE DESTACA QUĂ? CARĂˆCTER TENDRĂˆ CĂ˜MO SE APLICARĂˆ Y SE USARĂˆ QUIĂ?NES LO USARĂˆN 0ERO SI QUEREMOS APLICAR SOLAMENTE ESTA FRASE SI QUEREMOS QUE NUESTRA CAMPAĂ—A SE IDENTIlQUE FĂˆCIL Y RAPIDAMENTE EL NOMBRE EL ESLOGAN DEBE IR ACOMPAĂ—ADO DE UN ELEMENTO GRĂˆlCO PUEDE SER UN hPERSONAJEv UN ELEMENTO lGURATIVO O ABSTRACTO COLORES TENER DIVERSAS VERSIONES SER FĂˆCIL O DIFĂ“CIL DE APLICAR ESTAR PENSADO PARA QUE ALGUIEN SE APROPIE DE Ă?L O QUE TENGA ACCESO MUY RESTRINGIDO ETC !LGUNOS EJEMPLOS SON h-EDELLĂ“N LA MĂˆS EDUCADAv Y h,A VIDA ES SAGRADAv APLICADA EN "OGOTĂˆ

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CapĂ­tulo 6: APOYOS A LA POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: COMUNICACIONES: MANTENER (SE) INFORMADO

D. Canales

Los canales son los instrumentos comunicacionales que se usarĂĄn para transmitir los mensajes. Existe una variedad de canales -publicidad, marketing social, auspicios, relaciones pĂşblicas, lobbing, prensa, comunicaciones internas, etc.- para llegar a las personas. Mientras mĂĄs de ellos se utilicen y de manera mĂĄs intensa, es mĂĄs probable conseguir los resultados que se busca. Pero como generalmente las campaĂąas tienen recursos limitados, es recomendable HOHJLU DTXHOORV TXH HMHUFHQ PD\RU LQĂ XHQFLD HQ ORV S~EOLFRV VHOHFcionados como receptores. Algunos soportes de comunicaciones son: ‡ 0DWHULDOHV GH PDUNHWLQJ GLUHFWR DĂ€FKHV IROOHWRV OiSLFHV DGKHsivos, lienzos, etc. ‡ $Ă€FKH GH QRWLFLDV ‡ &DUWDV LQIRUPDWLYDV ‡ 3iJLQDV ZHE ‡ $YLVRV HQ SDUDGHURV GH EXVHV ‡ 3UHVHQWDFLRQHV HQ HYHQWRV FRPXQLWDULRV FRQFLHUWRV HWF ‡ 'H ERFD HQ ERFD XQD KHUUDPLHQWD GH PDUNHWLQJ PX\ SRGHURVD Para sacar el mĂĄximo provecho de esta herramienta provĂŠase de contactos comunitarios y redes. ‡ 7DOOHUHV GH WUDEDMR HVSHFtĂ€FRV \ UHXQLRQHV FRQ OtGHU HVWUDWpJLFR y polĂ­tico. ‡ 6HPLQDULRV FRQ SHULRGLVWDV HGLWRUHV \ FRPXQLFDGRUHV ‡ 'LYHUVDV H[SUHVLRQHV DUWtVWLFDV FRPR PXUDOHV UHYLVWD GH Fymics, musĂ­ca, etc. Sobre el uso de la publicidad y del marketing social no hay consensos. Depende de los contextos locales y de su manejo. Al respecto, “la experiencia de BogotĂĄ indica que mĂĄs que campaĂąas de corte publicitario conviene impulsar acciones colectivas enfatizando la corresponsabilidadâ€? (Antanas Mockus). Sin embargo, y asumiendo sus limitaciones, el marketing social que, a diferencia del comercial, comunica mensajes sociales, puede ayudar a generar un ambiente propicio, sensibilizar sobre determinados temas, romper la lĂłgica de los medios o del discurso pĂşblico imperante. En un contexto donde muchas veces es necesario usar distintos medios en forma simultĂĄnea y los espacios publicitarios en la prensa -mĂĄs allĂĄ de la noticia- tienen costos muy elevados, es necesario recurrir al marketing y sus distintos soportes. AdemĂĄs, pVWRV WLHQHQ OD YHQWDMD GH SRGHU DGDSWDUVH D UHDOLGDGHV HVSHFtĂ€FDV PHGLDQWH YRODQWHV DĂ€FKHV GH SRFRV HMHPSODUHV R VROXFLRQHV creativas. La prensa

Ésta es una de las herramientas mås comunes que se puede utilizar. La prensa incluye los medios de comunicación nacionales y

SECRETARIADO DE SEGURIDAD COMUNITARIA, TORONTO, CANADĂ %N 4ORONTO #ANADĂˆ UN EXPERTO EN COMUNICACIONES SE INTEGRA EN EL EQUIPO DEL #33 3ECRETARIADO DE 3EGURIDAD #OMUNITARIA PARA ANALIZAR Y CONTEXTUALIZAR CON ELLOS LOS HECHOS MĂˆS IMPORTANTES RELACIONADOS A SEGURIDAD ENTREGANDO DE ESTA FORMA UN MENSAJE COHERENTE A LOS MEDIOS DE COMUNICACIĂ˜N A LOS EQUIPOS DESCENTRALIZADOS EN LOS BARRIOS Y A LOS ENCARGADOS DE COMUNICACIONES DE LA POLICĂ“A Y LA JUSTICIA ,A INFORMACIĂ˜N INCLUYE UNA CONTEXTUALIZACIĂ˜N DE LA NOTICIA RESPUESTA INMEDIATA DE AYUDA A LAS PERSONAS AFECTADAS Y DE MEDIANO Y LARGO PLAZO AL PROBLEMA DANDO EL SENTIDO Y LA ORIENTACIĂ˜N DE LAS POLĂ“TICAS IMPLEMENTADAS Y EL ROL DE LA COMUNIDAD LOCAL $E ESTA FORMA SE RECONOCE LA NECESIDAD DE QUITAR ESPACIO A LOS MEDIOS PARA LA MANIPULACIĂ˜N Y EL SENSACIONALISMO Y AL MISMO TIEMPO DE ENTREGAR RĂˆPIDAMENTE INFORMACIĂ˜N DE CALIDAD A Ă?STOS QUE NO SIEMPRE CUENTAN CON LA CAPACIDAD DE ANĂˆLISIS PARA ENTREGAR DE BUENA FORMA LA NOTICIA 3E ASUME LA FORMA DE FUNCIONAMIENTO DE LOS MEDIOS PERO SE LE ENTREGAN LOS ELEMENTOS PARA SUPLIR SUS DElCIENCIAS EN LA INTERPRETACIĂ˜N DE LOS HECHOS -UNICIPALIDAD DE 4ORONTO

locales, asĂ­ como escritos, radios, audiovisuales y electrĂłnicos. La elecciĂłn de a quĂŠ medios enviar informaciĂłn periodĂ­stica susceptible de publicar o emitir debe hacerse tomando en cuenta cuĂĄles son los roles que cada uno de ĂŠstos desempeĂąa, cuales son los que mĂĄs y mejor llegan a la gente. Sin embargo, se debe evitar los favoritismos. Por un lado, todos tienen derecho a la informaciĂłn y es bueno llegar a todos. Por otro, no es bueno que algunos medios VH VLHQWDQ \ VHDQ GLVFULPLQDGRV R SRVWHUJDGRV GLĂ€FXOWDQGR OD relaciĂłn con ellos. Sensibilizar a los medios para que incorporen los planteamientos de la PolĂ­tica de PrevenciĂłn, dejando de lado miradas sensacionalistas o sĂłlo represivas, puede ser un proceso lento, que requiera mucho esfuerzo y un contacto directo y frecuente con muchos periodistas. Para esto es importante saber cuĂĄles son los profesionales mĂĄs sensibles o abiertos a lo planteado y cuĂĄles son los roles de los distintos medios, para llegar a aquellos que dan la pauta a los otros, a los que generan mayor aceptaciĂłn dentro del gremio. Para este punto, puede ser adecuado realizar seminarios, cursos u otras instancias para periodistas, comunicadores y medios de comunicaciĂłn en general. Se debe tener en cuenta que los medios de comunicaciĂłn muchas veces han sobredimensionado el crimen y la violencia, sin entregar el contexto en que se producen, ni las causas, ni las medidas y polĂ­ticas que hay respecto a estos hechos. En este sentido, han dejado de lado su poder de formaciĂłn y el aporte que podrĂ­an hacer en la prevenciĂłn y la promociĂłn de la convivencia democrĂĄtica. Se olvidan del impacto que tienen en la percepciĂłn y en el comportamiento de sus pĂşblicos.

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

EL PODER DE LOS MEDIOS -UCHAS VECES Y CON DEMASIADA FRECUENCIA LOS MEDIOS DECIDEN DAN IMPORTANCIA Y DElNEN LOS ENFOQUES DE ACUERDO A LA SINTONÓA Y A LAS VENTAS 3E RIGEN EN GENERAL POR LAS NORMAS DEL MERCADO SIN CONSIDERAR OTRAS VARIABLES Y ECONOMIZANDO ESFUERZOS Y RECURSOS SIN EMBARGO ALGUNOS MEDIOS RESPONDEN A DETERMINADOS INTERESES ECONØMICOS POLÓTICOS O RELIGIOSOS EXISTE EN MUCHOS PAÓSES LATINOAMERICANOS UNA FUERTE CONCENTRACIØN DE MEDIOS EN POCOS EMPRESARIOS O CONSORCIOS %NTONCES MUESTRAN LO MÈS SENSACIONALISTA SIN HACER ESFUERZOS POR CONTEXTUALIZAR ENTENDER LAS RAÓCES DEL PROBLEMA Y MENOS VER POSIBLES SOLUCIONES %N EL MEJOR DE LOS CASOS ENTREVISTAN A LOS MISMOS EXPERTOS O POLÓTICOS hESPECIALISTASv EN EL TEMA LOS QUE APARENTEMENTE TIENEN CREDIBILIDAD EN EL PÞBLICO Y NO NECESARIAMENTE SABEN DEL CASO ESPECÓlCO Y TIENDEN A REFORZAR LOS ERRORES COMETIDOS HASTA EL MOMENTO DICEN LO QUE EL PÞBLICO QUIERE ESCUCHAR SIN PLANTEAR NADA NUEVO %N ESTE SENTIDO CABE SE×ALAR QUE LOS MEDIOS UTILIZAN MUY POCA INFORMACIØN PROVENIENTE DE EXPERTOS ENTRE UN Y UN PERO ELLA LES DA CREDIBILIDAD SEGÞN "ERKOWITZ %S NECESARIO ENTONCES COMPRENDER EL FUNCIONAMIENTO ESPECÓlCO DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIØN !QUÓ HAY UN DESAFÓO CONCRETO CUAL ES QUE LOS MEDIOS INCORPOREN AL LÓDER Y A LOS ESPECIALISTAS DE LA POLÓTICA DE PREVENCIØN DE LA DELINCUENCIA Y LA VIOLENCIA COMO FUENTES IMPORTANTES Y CONlABLES 0OR OTRO LADO LA SEGURIDAD HA PASADO A SER UN GRAN NEGOCIO 'UARDIAS PRIVADOS SERVICIOS DE VIGILANCIA VENTA DE SISTEMAS DE SEGURIDAD REJAS MALLAS ELECTRIlCADAS ETC SE SUSTENTAN EN LA INSEGURIDAD 3IENDO ÏSTA ADEMÈS UNA DE LAS MAYORES PREOCUPACIONES DE LA CIUDADANÓA TAMBIÏN ES MANIPULADA POLÓTICAMENTE HACIENDO LECTURAS PARCIALES O INTERESADAS DE LA INFORMACIØN !MBAS SITUACIONES QUE MUCHAS VECES SE POTENCIAN SON DIFÓCILES DE ABORDAR Y DE ENFRENTAR PERO SON PARTE DE LA REALIDAD ! LO ANTES EXPUESTO SE AGREGA OTRO FACTOR MUCHAS VECES Y MUCHAS PERSONAS hCONSUMENv LOS MEDIOS DE COMUNICACIØN EN ESPECIAL LOS MÈS LIGADOS A LA ENTRETENCIØN DE MANERA IRREmEXIVA CUANDO PAULATINAMENTE SE ADQUIERE MÈS CONCIENCIA SOBRE CONSUMOS RESPONSABLES SOCIALMENTE QUE NO ATENTEN CONTRA LOS DERECHOS DE LAS PERSONAS EL MEDIO AMBIENTE ETC ,O ANTERIOR LLEVA A QUE SE ASUMAN COMO VERDADEROS nESPECIALMENTE CUANDO LO DA ALGÞN PERSONAJE CONOCIDOn PLANTEAMIENTOS Y hNOTICIASv QUE ESTÈN DESCONTEXTUALIZADOS SON INEXACTOS PARCIALES ESTIGMATIZADORES O QUE GENERALIZAN 0OR OTRO LADO LOS TIEMPOS SON CADA VEZ MÈS CORTOS LOS ESPACIOS MÈS PEQUE×OS %L TIEMPO SE ACELERA Y NO PERDER LA ATENCIØN DEL PÞBLICO HACE QUE TODO SEA BREVE RÈPIDO !SÓ SE HACE MÈS DIFÓCIL DAR UN CONTEXTO AMPLIO NO ESTEREOTIPAR AL VICTIMARIO Y A LA VÓCTIMA NO SIMPLIlCAR LAS CAUSAS NI LOS EFECTOS SOBRE LA VÓCTIMA Y SU ENTORNO ASÓ COMO EL DEL VICTIMARIO $E ESTA MANERA SE LLEGA FÈCILMENTE A PRESENTAR LOS HECHOS Y LAS OPINIONES EN hBLANCO Y NEGROv SIN ESPACIO PARA MATICES %N ESTE SENTIDO LOS ESFUERZOS Y DESAFÓOS SON MAYORES

ELEMENTOS PARA CONSTRUIR UNA RELACIÓN POSITIVA CON LOS MEDIOS s 3IEMPRE SE DEBE ESTAR DISPONIBLE PARA COMENTAR NOTICIAS Y ABORDAR TEMAS RELEVANTES TENER A MANO INFORMACIØN VITAL 3ER PROACTIVO Y ANTICIPARSE A LO QUE VAN A NECESITAR LOS MEDIOS s 0REGUNTAR A LOS CONTACTOS QUÏ QUIEREN Y TRATAR DE SATISFACER SUS DEMANDAS INFORMATIVAS s %NTREGAR INFORMES DE PRENSA QUE DEN A LOS PERIODISTAS TODA LA INFORMACIØN QUE NECESITAN REPARTIDA AL MISMO TIEMPO SOBRE LA POLÓTICA SU VISIØN ESTRATEGIA ACTIVIDADES Y LOGROS .O TENER FAVORITISMOS AUNQUE HAYA MOTIVOS PARA ELLO s ,OS COMUNICADOS PARA LOS MEDIOS DEBEN SER ENTREGADOS A LO LARGO DE VARIOS HITOS DE LA POLÓTICA Y SUS CAMPA×AS PARA APOYAR Y CONTROLAR LA EXPOSICIØN MEDIÈTICA s %S CONVENIENTE HACER SEGUIMIENTO DE TODOS LOS ENCUENTROS CON LA PRENSA -ANTENER REGISTRO DE LO DIFUNDIDO POR LOS MEDIOS DE COMUNICACIØN ANALIZAR LO QUE DIFUNDE CADA MEDIO Y QUIÏNES SON LOS RESPONSABLES DE ELLO s #ADA VEZ QUE UN MEDIO ENTREGUE UNA INFORMACIØN DE MANERA INCORRECTA ES RECOMENDABLE HACERLE LLEGAR LAS OBSERVACIONES PERTINENTES DE MANERA DIRECTA !SÓ SE DEMUESTRA QUE SE ESTÈ PENDIENTES DE ELLOS Y QUE SE DESEA CONSTRUIR UNA RELACIØN DE CONlANZA s %L ARTE PUEDE SER UN BUEN ALIADO MIRAR DE OTRAS MANERAS DESDE OTROS ÈNGULOS DESACTIVANDO PREJUICIOS GENERANDO EMPATÓA MOSTRANDO PROPUESTAS O ASPECTOS POSITIVOS

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Capรญtulo 6: APOYOS A LA POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: COMUNICACIONES: MANTENER (SE) INFORMADO

COMUNICADO DE PRENSA 5N COMUNICADO DE PRENSA DEBE SER CORTO Y PRECISO 3I QUIERE INCLUIR Mร S INFORMACIร N INCLUYA ANEXOS NOTAS O PIES DE Pร GINA $EBE SER EN LO POSIBLE UN RELATO ALGO ร NICO Y DIFERENTE CON ORACIONES CORTAS ORDENANDO LOS HECHOS DE ACUERDO A SU IMPORTANCIA 2ESPALDE CORRECTAMENTE TODOS LOS DATOS Y Nร MEROS )NCLUYA AL lNAL EL NOMBRE Y LOS DATOS DE CONTACTO $EBE SER ACTUALIZADO Y ENTREGADO Rร PIDAMENTE A LOS CONTACTOS DE LOS MEDIOS .O HAGA PREFERENCIAS NI DISCRIMINE 1UE LA hVENTAJAv LA TENGA EL MEDIO Mร S Rร PIDO EL QUE INFORMA MEJOR EL QUE ESTร Mร S INTERESADO NO EL QUE TIENE CONTACTOS PREFERENCIALES CON LA ORGANIZACIร N (AGA UN SEGUIMIENTO MEDIANTE LLAMADAS TELEFร NICAS

Una noticia negativa en el periรณdico, radio o televisiรณn local puede deshacer el trabajo de meses. Mรกs aรบn, la prensa puede estar tentada a destacar sรณlo las malas historias o hechos negativos. Construir una relaciรณn fuerte y de contacto regular con editores, periodistas y medios locales claves es esencial para asegurar un mensaje consistente sobre la Polรญtica de Prevenciรณn y sus actividades, y prevenir que la prensa sensacionalista aumente el miedo pรบblico y difunda informaciรณn incorrecta.

deben conocer en quรฉ consiste la Polรญtica de Prevenciรณn, cuรกles son OD YLVLyQ ORV YDORUHV \ OD ร ORVRItD TXH OD VXVWHQWDQ DVt FRPR FXiO HV la estrategia de comunicaciones que se va a implementar. 7RGR HO HTXLSR WLHQH TXH HVWDU GH DFXHUGR HQ TXp VH QHFHVLWD FRmunicar, cรณmo, cuรกndo, por quiรฉn y para quiรฉnes. Por esto, los socios deben colaborar con el lรญder, el coordinador y el equipo WpFQLFR HQ OD FRRUGLQDFLyQ \ PDQHMRV GH ร XMRV GH OD LQIRUPDFLyQ y comunicaciรณn, y la mantenciรณn y actualizaciรณn de las bases de datos y bases de conocimiento.

E. Equipo multiplicador F. Vocerรญas

El รฉxito de la polรญtica de comunicaciรณn y sus campaรฑas dependerรก en buena medida de sus ejecutores, el lรญder, el coordinador y cada uno de los integrantes del equipo tรฉcnico. Este pรบblico interno es clave, SXHVWR TXH HV HO SULPHU PXOWLSOLFDGRU R DPSOLร FDGRU GH ORV PHQVDjes. Quienes desarrollen las comunicaciones, en sus distintos niveles,

Los voceros son aquellas personas que en virtud de la autoridad de su cargo o de sus habilidades sociales se encargan de comunicarse con los diversos pรบblicos, entre ellos los periodistas. Generalmente, el principal vocero es el lรญder. ร ste, no obstante, puede compartir la

LA IMPORTANCIA DEL LENGUAJE 5N ASUNTO CENTRAL PARA LA CONFORMACIร N Y CONSOLIDACIร N DE LOS EQUIPOS DE TRABAJO Y DE LOS GESTORES LOCALES Y O GRUPOS TERRITORIALES ES COMPARTIR UN LENGUAJE %NTRE LOS MUCHOS ASPECTOS Y PROBLEMAS RELACIONADOS CON EL TEMA DE LA DELINCUENCIA Y LA VIOLENCIA ESTร N POR UN LADO la falta de un lenguaje que sea comรบn UN VOCABULARIO Y UNA CONCEPTUALIZACIร N Bร SICA QUE PERMITA COMUNICARSE Y DEBATIR DE BUENA MANERA POR OTRO LADO la necesidad de difundir permanentemente los logros obtenidos EN EL CONTEXTO EN QUE ELLOS SE OBTIENEN DENTRO DEL MARCO Y LOS VALORES EN LOS QUE SE FORMULร LA 0OLร TICA DE 0REVENCIร N lNALMENTE la dependencia INCLUSO hVULNERABILIDADv FRENTE A la contingencia, EN PARTICULAR FRENTE A HECHOS VIOLENTOS DE GRAN IMPACTO EN LA OPINIร N Pร BLICA QUE POR LO MISMO ES MUY Fร CIL QUE ESCAPEN AL CONTROL DE LA ORGANIZACIร N PERMITIENDO QUE MEDIOS DE COMUNICACIร N SENSACIONALISTAS Y DIRIGENTES OPORTUNISTAS SE APROPIEN DEL TEMA LLEVร NDOLO A TERRENOS AJENOS Y OPUESTOS A LOS OBJETIVOS BUSCADOS %L LENGUAJE COMร N SIRVE PARA QUE TODOS LOS INVOLUCRADOS ENTIENDAN LO QUE SE ESTร COMUNICANDO 0ARA TEMAS ESPECร lCOS EXISTEN Tร RMINOS ESPECร lCOS ROBO HURTO ASALTO ETC Y SU SIGNIlCADO A VECES ES DISTINTO ENTRE LOS PAร SES DE ,ATINOAMร RICA Y ร STOS DEBEN SER CONOCIDOS POR TODOS LOS INTERESADOS EN ESE TEMA 0ERO ADEMร S EL USO DEL LENGUAJE LLEVA IMPLร CITA UNA POSTURA UN ENFOQUE %N UN MOMENTO DADO EN "OGOTร DESPUร S DE SEIS Aร OS DISMINUYENDO LA CIFRA DE HOMICIDIOS EN VEZ DE DECIR QUE HUBO HOMICIDIOS MENOS SE HABLร DE VIDAS SALVADAS %N UN ร MBITO Mร S LEJANO EN -EDELLร N EL "ANCO DE LOS 0OBRES PASร A LLAMARSE "ANCO DE /PORTUNIDADES DOS FORMAS DE EXPRESAR LO MISMO PERO CON ENFOQUES MUY DIVERSOS CON VISIONES DISTINTAS ,A DElNICIร N DE UN ENFOQUE EN MATERIA DE SEGURIDAD CIUDADANA SE MANIlESTA COMO PLANTEA -OCKUS EN LA ADOPCIร N DE UN LENGUAJE EN EL CUAL SE DEJAN EXPRESAR BIEN UNOS ESQUEMAS DE INTERPRETACIร N DEL COMPORTAMIENTO VIOLENTO Y DELINCUENCIAL Y DE SU CONTRARIO EL COMPORTAMIENTO RESPETUOSO DE NORMAS Y ACUERDOS %L LENGUAJE Y LOS ESQUEMAS INTERPRETATIVOS EN ร L EXPRESABLE DEBEN FACILITAR LA CONSTRUCCIร N DE LAS ACCIONES O AL MENOS DEBEN PERMITIR REALIZAR UN ANร LISIS Y UNA PRIORIZACIร N DE ELLAS %N RESUMEN EL ENFOQUE DEBE AYUDAR A ORIENTAR LA ACCIร N Y A INTERPRETAR SUS ร XITOS Y SUS FRACASOS

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

LAS COMUNICACIONES EN LAS DISTINTAS ETĂ PAS DE LA POLĂ?TICA

vocerĂ­a con el coordinador y con algunos de los principales colaboradores del equipo tĂŠcnico. Ellos deberĂĄn distribuirse los distintos pĂşblicos, las materias sobre las cuales hablarĂĄn, las circunstancias en que se dirigirĂĄn a las audiencias y los medios a travĂŠs de los cuales lo harĂĄn. En el caso de dirigirse a la prensa, una interacciĂłn apropiada con los medios requiere que el lĂ­der, el coordinador y el equipo tĂŠcnico acuerden las lĂ­neas generales sobre lo que el vocero (o los voceros) va a comentar y sobre lo que no se pronunciarĂĄ, dejando mĂĄrgenes de libertad para responder de forma ĂĄgil a la contingencia y a las solicitudes de los periodistas. G. Plan de acciĂłn

La conducta constituye el sustento real sobre el cual se construye la comunicaciĂłn. Por eso, donde se pone a prueba realmente la estrategia de comunicaciĂłn es en los planes de acciĂłn de la PolĂ­tica de PrevenciĂłn, la polĂ­tica de comunicaciĂłn y sus campaĂąas. Estos deben contemplar todas las acciones o eventos, cronogramas y presupuestos con los recursos humanos y econĂłmicos que demandarĂĄn.

5.2. LAS COMUNICACIONES INTERNAS 7DO YH] HO SULPHU REMHWLYR HVSHFtÀFR GH OD HVWUDWHJLD GH FRPXQLFDciones sea lograr la adhesión y el compromiso del equipo interno. Para ello habrå que desarrollar las comunicaciones internas.

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Algunos objetivos de la comunicación interna son: ayudar a constituir y mantener el espíritu de la organización; que todos sus integrantes sepan lo que estån haciendo los otros a tiempo e intercamELHQ RSLQLRQHV \ VXJHUHQFLDV WUDQVPLWLU \ DFWXDOL]DU OD ÀORVRItD política, estrategias y posturas de la organización; informar de maQHUD UiSLGD \ HÀFD] VREUH OD FRQWLQJHQFLD \ ODV SRVWXUDV DVXPLGDV frente a ella; discutir y tener un espacio de debate interno sobre temas de largo plazo y la contingencia, profundizando en los temas y logrando una opinión sólida y coherente. Algunos soportes de comunicación interna son:

‡ ‡ ‡ ‡ ‡

3HULyGLFRV HOHFWUyQLFRV H LPSUHVRV 3iJLQDV ZHE H LQWUDQHW &RUUHRV HOHFWUyQLFRV 5HXQLRQHV UHJXODUHV 0RQLWRUHR HQ FXUVR \ HYDOXDFLRQHV SHULyGLFDV FRQ UHFRPHQGDFLRQHV HVSHFtÀFDV SDUD OD DFFLyQ ‡ 3DQHO GH QRWLFLDV ‡ /LEUR GH VXJHUHQFLDV \ UHFODPRV ‡ 3UHVHQWDFLRQHV \ GHEDWHV LQWHUQRV VREUH WHPDV JHQHUDOHV LQWHUvenciones puntuales, etc. Es necesario compartir la información en distintos niveles: el operacional (línea frontal y equipo de la calle) y el gerencial, el equipo mås elevado a nivel de la estrategia. Es muy importante que no se oculte información, que se entregue en forma oportuna y que haya un espíritu de lealtad organizacio-


Capรญtulo 6: APOYOS A LA POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: COMUNICACIONES: MANTENER (SE) INFORMADO

QDO TXH HYLWH ร OWUDFLRQHV TXH DIHFWHQ OD FRQร DQ]D LQWHUQD \ OD relaciรณn con los socios) y, posiblemente, la estrategia de comunicaciรณn y la relaciรณn con los medios de comunicaciรณn.

5.3. LAS COMUNICACIONES DEBEN ADECUARSE A CADA REALIDAD

En relaciรณn a la cultura local, todas las ciudades son distintas, tienen su propia forma de vida; pero ademรกs pueden coexistir varias โ ciudadesโ (varias culturas) al interior de ellas que pueden requerir HVWUDWHJLDV \ FRPXQLFDFLyQ HVSHFtร FDV (VWR WDPELpQ SXHGH SDVDU en las organizaciones.

ยฉ 5NIVERSIDAD !LBERTO (URTADO

Para que exista comunicaciรณn debe haber un emisor, un receptor y un mensaje. Pero, ademรกs, se debe considerar la cultura local, el contexto y el momento, todo esto en una dinรกmica de ida y vuelta, con una permanente retroalimentaciรณn, con realidades cambiantes a ritmos muy rรกpidos.

7DPELpQ VH GHEH FRQVLGHUDU HO WDPDxR OD HVFDOD 1R HV OR PLVPR una organizaciรณn, por ejemplo, de 15 personas a una de 200 personas, o una ciudad de 50.000 habitantes y una de un millรณn. No basta con agrandar o reducir de acuerdo al tamaรฑo, se requieren estructuras y estrategias distintas.

%N VILLA -ADRE 4ERESA ,A 0INTANA 3ANTIAGO DE #HILE NO Sร LO SE TRABAJร CON NIร OS INCORPORANDO SUS LENGUAJES TAMBIร N FUERON INCORPORADOS DE DISTINTAS FORMAS EN LAS ACTIVIDADES

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

Capรญtulo 7:

INSTITUCIONALIZAR LA POLร TICA DE PREVENCIร N LOCAL 6.1. LA IMPORTANCIA DE LA INSTITUCIONALIZACIร N (Q HVWH FDStWXOR VH H[SOLFD FyPR LQVWLWXFLRQDOL]DU XQD 3ROtWLFD /RFDO para la Seguridad Ciudadana, su relevancia en el proceso de construcciรณn de seguridad a nivel de los

Todos los esfuerzos realizados tras el objetivo de reducir las tasas de criminalidad, tales como generar diagnรณsticos, construir asociaFLRQHV GHVDUUROODU HVWUDWHJLDV R SODQLร FDU H LPSOHPHQWDU DFFLRQHV solo tienen sentido si sus impactos son duraderos y se logran instalar en la cotidianeidad. ร nicamente se puede asegurar que los resultados obtenidos serรกn capaces de generar cambios y que los SURJUDPDV DSOLFDGRV YDQ D VHU H[LWRVRV 1R HV VXร FLHQWH GDU YLVLbilidad a los impactos de los programas ante la comunidad, si sus efectos son de corto plazo.

gobiernos locales y se plantean algunos requerimientos para que esto

Para lograr la sostenibilidad se requiere institucionalizar los grupos de trabajo y las actividades, generados en el proceso de socializaciรณn de la prevenciรณn de la criminalidad.

ocurra. En la prรกctica, se trata de que, tanto en el actuar de la comunidad como en el de los gobiernos locales, los temas relativos a la prevenciรณn de la criminalidad y la seguridad se incorporen como prioridades en sus ejes de acciรณn, esquemas y prรกcticas organizacionales. La institucionalizaciรณn debe ser entendida como un eje transversal entre los distintos actores involucrados en el proceso de generaciรณn de seguridad y prevenciรณn de la violencia y la delincuencia. Tanto las autoridades locales como la comunidad organizada, los administradores de justicia, los encargados del orden y la seguridad, los comerciantes, los medios de comunicaciรณn y todos los actores relevantes, deben formar parte de las estructuras orgรกnicas y FRQFXUULU FRQ VX SDUWLFLSDFLyQ HQ OD GHร QLFLyQ GH ODV SROtWLFDV GH prevenciรณn.

PARA LA INSTITUCIONALIZACIร N ES NECESARIO s 1UE LAS AUTORIDADES Y LA COMUNIDAD INCORPOREN COMO PRIORIDADES EL DESARROLLO Y LA GESTIร N DE PREVENCIร N DE LA DELINCUENCIA Y LA VIOLENCIA 3E BUSCA INSTALAR EL TEMA DE LA PREVENCIร N EN LOS INTERESES Y LAS PREOCUPACIONES COTIDIANAS DEL ACCIONAR DE AMBOS %S NECESARIO QUE LAS PRร CTICAS TENDIENTES A GENERAR ACCIONES PREVENTIVAS SEAN SOCIALIZADAS ENTRE LA COMUNIDAD Y QUE TENGAN SU CORRELATO EN LAS ACTIVIDADES QUE EMPRENDEN AL RESPECTO LAS AUTORIDADES LOCALES CON EL OBJETO DE FACILITAR LA COORDINACIร N DE ESFUERZOS s $ISEร AR REESTRUCTURAR O ADECUAR LAS ACTUALES FORMAS DE FUNCIONAMIENTO EN EL ร MBITO DE LA SEGURIDAD GENERANDO LOS MARCOS NORMATIVOS QUE PERMITAN EL DESARROLLO DE PRร CTICAS DE PREVENCIร N %LLO FACILITA LA INTERACCIร N DE LOS ACTORES CLAVES YA QUE ACTร AN DESDE DISTINTOS ESPACIOS SOBRE EL TERRITORIO s ,OGRAR UN CAMBIO DE ACTITUD TANTO EN LA COMUNIDAD COMO EN LOS AGENTES QUE INTERVIENEN EN LA GENERACIร N DE PREVENCIร N Y SEGURIDAD %L PARADIGMA EN EL CUAL LA SEGURIDAD SE GENERA A TRAVร S DE PRร CTICAS REPRESIVAS DEBE DEJAR ESPACIO A AQUEL EN EL QUE UNA ACTITUD DE COPRODUCCIร N LOGRA LA GENERACIร N DE SEGURIDAD s %NTENDER QUE EL PROCESO ES DINร MICO POR LO TANTO SE PRODUCEN REVISIONES Y CAMBIOS PERMANENTES DE LA ACTITUD NECESARIA PARA ENFRENTAR LA DELINCUENCIA Y LA VIOLENCIA s 0OTENCIAR EL EMPODERAMIENTO DE LOS GOBIERNOS LOCALES AL INTERIOR DE LAS COMUNIDADES ASร COMO TAMBIร N EL DE LAS COMUNIDADES FRENTE A LOS GOBIERNOS LOCALES CON EL OBJETO DE MEJORAR LOS NIVELES DE GOBERNABILIDAD s 2EFORZAR PRร CTICAS TENDIENTES A LOGRAR EL APOYO Pร BLICO A LAS POLร TICAS DE COPRODUCCIร N DE SEGURIDAD Y PREVENCIร N $E ESTA MANERA SE INVOLUCRA A LA COMUNIDAD Y SE GENERA EN ELLA UNA MASA CRร TICA DESDE LA QUE SURGEN LOS RECURSOS HUMANOS PARA LA SOSTENIBILIDAD DE LAS POLร TICAS A APLICAR

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Capรญtulo 7: APOYOS A LA POLร TICA LOCAL DE PREVENCIร N: INSTITUCIONALIZAR LA POLร TICA DE PREVENCIร N LOCAL

Hay que incorporar e integrar, entonces, las iniciativas locales con los planes, proyectos y estructuras que se dan los gobiernos municipales en funciรณn de su actuar sobre estos temas. Al institucionalizar, la prevenciรณn de la delincuencia se transforma en una corriente prioritaria del trabajo municipal, el que, en conjunto con la comunidad, busca consensuar una actitud y un comportamiento unitarios ante el fenรณmeno de la criminalidad.

6.2. INSTALAR EL TEMA EN EL GOBIERNO LOCAL Y LA COMUNIDAD Convertir la prevenciรณn de la delincuencia y la violencia en una preocupaciรณn prioritaria, implica construirla desde dentro del trabajo permanente de todos los actores involucrados (gobierno local, organizaciones sociales, escuelas, iglesias, etc.). Para lograrlo es fundamental que se genere un cambio de actitud de los participantes, incorporando una nueva mirada en la cual la responsabilidad en la generaciรณn de seguridad y prevenciรณn es compartida. En todos los niveles, alcalde, equipo municipal de prevenciรณn, organizaciones de base y comunidad, se debe crear una orgรกnica que facilite el trรกnsito desde la lรณgica de las prรกcticas sรณlo represivas, en donde la responsabilidad se deslinda a terceros, a una lรณgica de coproducciรณn donde el Estado no es mรกs el รบnico actor. A continuaciรณn se proponen algunos pasos tendientes a instalar la priorizaciรณn de los temas de prevenciรณn y seguridad a nivel de los gobiernos locales. ย 6H VXJLHUH TXH ORV DVXQWRV UHODWLYRV D OD VHJXULGDG FRPXQLWDULD VH WUDEDMHQ HQ FRQMXQWR FRQ ODV WHPiWLFDV VRFLDOHV TXH GHร QHQ los principales ejes de acciรณn del gobierno local. Ellas, por lo general, implican largos procesos de desarrollo, tales como la reducciรณn de la pobreza, educaciรณn, salud, empleo, recuperaciรณn de barrios y todos los รกmbitos de acciรณn orientados a mejorar la calidad de vida de los habitantes. ย (V LPSRUWDQWH LQFOXLU HQ WRGDV ODV SROtWLFDV HVWUDWHJLDV \ SURgramas del municipio, los objetivos perseguidos en el รกmbito de la seguridad. Algunos programas deberรกn ser revisados y otros reformulados desde esta perspectiva para maximizar su impacto en la comunidad. ย (V SUHFLVR GHVDUUROODU SURJUDPDV H LQVWDQFLDV GH FDSDFLWDFLyQ HQ seguridad comunitaria para todos los miembros de los equipos en los distintos รกmbitos del quehacer municipal. Ellos deben tener un entendimiento de la vinculaciรณn del tema con sus รกreas de especialidad. ย /D PLUDGD GHVGH OD VHJXULGDG FLXGDGDQD WLHQH TXH IRUPDU SDUWH de las evaluaciones a la hora de medir el desempeรฑo y el progreso de los distintos planes y programas del municipio

ย 'HEH LQFRUSRUDUVH HQ ORV SUHVXSXHVWRV GH ORV GLVWLQWRV SURJUDPDV GHO JRELHUQR ORFDO ORV tWHPV FRUUHVSRQGLHQWHV DO iPELWR GH OD VHJXULGDG FRPXQLWDULD $Vt PLVPR GHVGH XQD SHUVSHFWLYD de participaciรณn comunitaria, los presupuestos de inversiรณn en seguridad han de surgir desde las preocupaciones de la comunidad organizada. Por รบltimo, es importante gestionar donaciones corporativas u otras formas de inyecciรณn de recursos adicionales para la prevenciรณn de la delincuencia y la violencia. ย (O HTXLSR WpFQLFR \ ORV JUXSRV GH WUDEDMR GHEHQ JDUDQWL]DU OD interdisciplinaridad de sus miembros y de las acciones que propicien, con el objeto de instalar una mirada amplia de la prevenciรณn. El tema de la seguridad comunitaria debe formar parte de la agenda en cada una de las instancias de reuniรณn entre los directores de los distintos departamentos o programas.

6.3. Cร MO HACER QUE LA INSTITUCIONALIZACIร N OCURRA ,QVWLWXFLRQDOL]DU ODV SUiFWLFDV \ SROtWLFDV GH SUHYHQFLyQ GH OD GHlincuencia y la violencia es un proceso de largo plazo. Se requiere JHQHUDU XQD PDVD FUtWLFD FRQIRUPDGD WDQWR SRU LQVWLWXFLRQHV FRPR SRU SHUVRQDOLGDGHV LQร X\HQWHV TXH PDQWHQJDQ HO WHPD SUHVHQWH HQWUH OD FLXGDGDQtD ,JXDOPHQWH VH SUHFLVD FDSDFLWDU D ORV UHFXUVRV KXPDQRV QHFHVDULRV SDUD OLGHUDU ORV SURJUDPDV DVt FRPR ORJUDU tanto en las autoridades como en la comunidad, el cambio de la manera de entender su rol en la coproducciรณn de seguridad. No GHEH HVSHUDUVH SDUD HVWR TXH VH FXPSODQ SDVR D SDVR HQ XQD OtQHD GHO WLHPSR ODV DFFLRQHV SUHGHร QLGDV \D TXH ODV UHDOLGDGHV HQ ODV cuales se actรบa pueden ser muy diversas. Sin embargo, a continuaciรณn se dan ciertas recomendaciones รบtiles. 6.3.1. Posicionar el equipo tรฉcnico de prevenciรณn de la delincuencia y la violencia

ร ste puede ser el paso mรกs simple de dar, y a su vez uno de los mรกs importantes, pues permite la instalaciรณn orgรกnica del tema en la HVWUXFWXUD GHO JRELHUQR ORFDO 5HVXOWD YLWDO TXH HO HTXLSR WpFQLFR VH aloje en la estructura municipal en una posiciรณn que le permita participar efectivamente en las decisiones que afectan a la seguridad en el municipio, cualquiera sea el departamento donde se originen estas decisiones. Solo de esta manera los demรกs planes y programas relaFLRQDGRV FRQFXUULUiQ HQ XQ FRPSURPLVR UHDO FRQ OD SODQLร FDFLyQ \ GLVHxR GH OD SUHYHQFLyQ \ VHJXULGDG &RQ HOOR WDPELpQ VHUi PiV IiFLO la incorporaciรณn de estos lineamientos a los niveles de resoluciรณn del gobierno local, y que se integren en el presupuesto municipal. +D\ TXH HYLWDU TXH HO HTXLSR WpFQLFR WHQJD TXH QHJRFLDU WRGDV ODV decisiones o mendigar apoyos a los departamentos sectoriales. Por HO FRQWUDULR pVWRV GHEHUtDQ DXWRPiWLFDPHQWH LQFRUSRUDU DO HTXLSR WpFQLFR HQ ODV UHVROXFLRQHV FODYHV GH VX iUHD TXH LQYROXFUDQ OD VHguridad. Por ejemplo, cuando construye una nueva escuela, el de121


GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

SDUWDPHQWR GH HGXFDFLyQ GHEHUtD FRQVXOWDU DO HTXLSR WpFQLFR VREUH PHGLGDV GH SUHYHQFLyQ VLWXDFLRQDO \ GLVFXWLU FRQ pO OD SUHSDUDFLyQ de los profesores para abordar el problema de la violencia escolar. 6.3.2. Lograr apoyo polรญtico

(O DSR\R SROtWLFR D ORV SODQHV \ DFFLRQHV TXH HPSUHQGH HO JRELHUQR local frente a la prevenciรณn de la violencia y delincuencia es un factor clave en la institucionalizaciรณn. Primero, porque al obtener este respaldo, las autoridades locales logran validarse a nivel del gobierno central o las instancias legislativas como actores participantes en las conversaciones tendientes a generar las reformas necesarias, DVt FRPR HQ HO GLVHxR GH ORV PDUFRV QRUPDWLYRV 6HJXQGR SRUTXH XQ DSR\R SROtWLFR GH DOWR QLYHO SXHGH IDFLOLWDU HO DFFHVR D QXHYDV IRUPDV GH ร QDQFLDPLHQWR

MARCHA BLANCA %N 1UITO A RAร Z DEL AUMENTO CRECIENTE DE LA SENSACIร N DE INSEGURIDAD Y MOTIVADA POR EL ASESINATO DE UNA JOVEN EN EL Aร O LA SOCIEDAD REACCIONร CON UNA MARCHA MULTITUDINARIA DONDE TODOS LOS PARTICIPANTES SE VISTIERON DE BLANCO ,A LLAMADA -ARCHA "LANCA HOY CONVERTIDA EN FUNDACIร N SE TRANSFORMร EN EL HITO DESDE EL CUAL LOS HABITANTES DE LA CIUDAD TOMARON CONCIENCIA DE LA IMPORTANCIA DE SU PARTICIPACIร N EN ESTOS TEMAS %LLO FACILITร A LAS AUTORIDADES ADOPTAR UNA SERIE DE INICIATIVAS TALES COMO LA CONFORMACIร N DE UN #ONSEJO DE 3EGURIDAD PARA EL $ISTRITO -ETROPOLITANO DE 1UITO O LA INCORPORACIร N DE UNA TASA DE SEGURIDAD QUE HOY PAGAN TODOS LOS CIUDADANOS A TRAVร S DE LOS IMPUESTOS AL BIEN RAร Z /BSERVACIร N DIRECTA

La sostenibilidad de las iniciativas de prevenciรณn de la delincuencia y la violencia, estรก directamente vinculada a la capacidad de las autoridades nacionales y locales de ejercer la gobernabilidad y entregar a la comunidad un adecuado nivel de servicios. ParticularPHQWH HQ ORV WHPDV GH VHJXULGDG FRPXQLWDULD OD FLXGDGDQtD HYDO~D los niveles de gobernabilidad por el desempeรฑo de los gobiernos municipales, la efectividad del accionar policial, y el correcto funcionamiento de las instituciones administradoras de la justicia peQDO $Vt PLVPR VH HYDO~DQ OD SHUWLQHQFLD GHO WUDEDMR OHJLVODWLYR HQ el รกrea, la destinaciรณn de recursos para la prevenciรณn y seguridad y OD YROXQWDG SROtWLFD GH ORV QLYHOHV GHFLVLRQDOHV

6.3.4. Invertir en informaciรณn y conocimiento del tema

Entonces, si al interior de los gobiernos locales se quiere movilizar XQ DSR\R SROtWLFR UHOHYDQWH KD\ TXH FRQVLGHUDU WDQWR ORV PDUFRV institucionales en los que estos niveles se desenvuelven, como el clima existente con relaciรณn a los temas de la delincuencia y problemas de seguridad.

+R\ HQ GtD HQWUH OD SREODFLyQ VH QRWD XQ LPSRUWDQWH QLYHO GH GHVFRQRFLPLHQWR \ HVFHSWLFLVPR DFHUFD GH OD Hร FDFLD GH ODV SUiFWLcas preventivas, lo que vuelve necesario invertir en el desarrollo y legitimaciรณn de la seguridad comunitaria. Hay que posicionar el conocimiento y la informaciรณn en este รกmbito, generando las DVRFLDWLYLGDGHV QHFHVDULDV SDUD FRQVWUXLU H LQVWDODU FDSDFLGDGHV DVt FRPR HQWUHJDU LQIRUPDFLyQ FRQร DEOH \ REMHWLYD TXH SHUPLWD WRPDU decisiones informadas.

6.3.3. Generar conciencia de la importancia del tema

La institucionalizaciรณn necesita un cambio de actitud de la comunidad y sus autoridades. Esto pasa por generar cambios de las percepciones respecto de la participaciรณn y de la responsabilidad que le cabe a cada uno. La experiencia internacional demuestra que en la medida que las personas comprenden los asuntos por los cuales VH PRYLOL]DQ VX DSR\R D pVWRV HV PD\RU Entonces es necesario generar conciencia en la poblaciรณn acerca de la importancia del tema de la seguridad comunitaria y prevenciรณn de la violencia y delincuencia. Lograr dicho objetivo exige un profundo esfuerzo de comunicaciรณn e informaciรณn, tendiente a socializar no solo las causas y consecuencias de la delincuencia, sino que WDPELpQ HO URO TXH FDGD XQR MXHJD HQ HOOD

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La propia naturaleza de la delincuencia y violencia es dinรกmica y VH DVRFLD D FDXVDV P~OWLSOHV 3RU HVR UHVXOWD GLItFLO PHGLU ORV EHQHร FLRV GH ORV SURJUDPDV GH SUHYHQFLyQ R SUREDU TXH OD UHGXFFLyQ de la criminalidad ha sido producida por la aplicaciรณn de un plan o SROtWLFD GHWHUPLQDGD 6LQ HPEDUJR HVWXGLRV UHDOL]DGRV HQ (XURSD \ 1RUWHDPpULFD KDQ GHPRVWUDGR TXH OD SUHYHQFLyQ GH OD FULPLQDOLGDG UHVXOWD PiV UHQWDEOH TXH OD DSOLFDFLyQ GH SROtWLFDV UHSUHVLYDV DGPLQLVWUDGDV D WUDYpV GH ORV VLVWHPDV GH MXVWLFLD SHQDO \ GH ODV SROLFtDV

6.3.5. Generar las asociatividades necesarias

'DU VRVWHQLELOLGDG H LQVWLWXFLRQDOL]DU OD SUHYHQFLyQ GH OD YLROHQFLD \ delincuencia obliga a movilizar esfuerzos para obtener importantes \ SHUPDQHQWHV JUDGRV GH DSR\R D ODV SUiFWLFDV \ SROtWLFDV HMHFXWDGDV entre la comunidad y el gobierno local. Es necesario que los logros obtenidos se vayan haciendo visibles y que puedan ser positivamente evaluados por los habitantes, de forma de generar una masa FUtWLFD GH DSR\R SHUPDQHQWH Generar asociatividades, tanto a nivel comunitario como a nivel SROtWLFR H LQVWLWXFLRQDO SHUPLWH TXH GHVGH HOODV VH FRQWULEX\D Hร -


Capítulo 7: APOYOS A LA POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN: INSTITUCIONALIZAR LA POLÍTICA DE PREVENCIÓN LOCAL

PACTO POR LA SEGURIDAD CIUDADANA DEL DISTRITO METROPOLITANO DE QUITO, ECUADOR %L 0ACTO POR LA 3EGURIDAD #IUDADANA DEL $ISTRITO -ETROPOLITANO DE 1UITO ES UN ACUERDO EN EL QUE CONCURREN DISTINTOS ACTORES REPRESENTATIVOS DE LA CIUDAD PARA COORDINAR Y GARANTIZAR LAS ACCIONES TENDIENTES A AUMENTAR LOS NIVELES DE SEGURIDAD DE SUS HABITANTES %STE 0ACTO CRISTALIZA SU ACCIONAR A TRAVÏS DE LA FORMACIØN DE UN #ONSEJO -ETROPOLITANO DE 3EGURIDAD #IUDADANA EL CUAL ES PRESIDIDO POR EL !LCALDE DE LA CIUDAD Y EN EL QUE PARTICIPA UN AMPLIO NÞMERO DE ACTORES INVOLUCRADOS EN EL PROCESO TALES COMO EL 'OBIERNO LOS ADMINISTRADORES DE JUSTICIA LAS lSCALÓAS LAS IGLESIAS LAS && !! LA #ÈMARA DE #OMERCIO LOS MEDIOS LA 0OLICÓA .ACIONAL Y LOS REPRESENTANTES DE LAS /RGANIZACIONES #OMUNITARIAS "ARRIALES %STE CONSEJO ESTÈ ENCARGADO DE DElNIR LAS POLÓTICAS Y ENTREGAR LOS LINEAMIENTOS GENERALES PARA LA IMPLEMENTACIØN DE LOS PLANES Y PROPUESTAS DE SEGURIDAD Y PREVENCIØN DE LA CIUDAD 0ARA HACER MÈS OPERATIVA ESTA INSTANCIA SE HA FORMADO UNA #OMISIØN -ETROPOLITANA DE 3EGURIDAD Y #ONVIVENCIA #IUDADANA LA QUE ESTÈ COMPUESTA POR TRES CONCEJALES DEL $ISTRITO DE 1UITO ,A LABOR DE ESTA COMISIØN ES LA DE GENERAR RECOMENDACIONES TANTO HACIA EL #ONSEJO -ETROPOLITANO DE 3EGURIDAD COMO HACIA LA $IRECCIØN DE 3EGURIDAD #IUDADANA LA QUE SE ALOJA EN EL -UNICIPIO DE 1UITO $E LA $IRECCIØN DE 3EGURIDAD #IUDADANA DEL -UNICIPIO DEPENDE LA #ORPORACIØN -UNICIPAL DE 3EGURIDAD Y #ONVIVENCIA #IUDADANA #ORPOSEGURIDAD CREADA EN MARZO DEL 3E TRATA DE UNA CORPORACIØN DE DERECHO PRIVADO QUE SE HACE CARGO DE ORGANIZAR EJECUTAR Y lNANCIAR LOS DIVERSOS PROYECTOS TANTO DE INFRAESTRUCTURA PARA SEGURIDAD COMO LOS PLANES DE PREVENCIØN Y LAS CAPACITACIONES ASOCIADAS A ÏSTOS %L lNANCIAMIENTO SE REALIZA A TRAVÏS DE LA ADMINISTRACIØN DE LOS FONDOS RECAUDADOS POR LA 4ASA DE 3EGURIDAD #ORPOSEGURIDAD TAMBIÏN REALIZA ASESORÓAS A NIVEL DEL GOBIERNO LOCAL ,A POLÓTICA DE SEGURIDAD IMPLEMENTADA INCORPORA UNA COMPONENTE TERRITORIAL QUE SE PLASMA EN LA CONFORMACIØN DE CONSEJOS ZONALES DE SEGURIDAD CONSEJOS SECTORIALES Y CONSEJOS BARRIALES $ESDE ESTE PUNTO DE VISTA LA EXISTENCIA DE MÈS DE CUARTELES POLICIALES PERMITE COORDINAR LAS POLÓTICAS DE SEGURIDAD DESDE LAS DEMANDAS LOCALES

© #RISTIÈN DEL #ANTO

0OR ÞLTIMO A TRAVÏS DE UN CONVENIO ENTRE #ORPOSEGURIDAD Y &LACSO SE HA IMPLEMENTADO UN /BSERVATORIO -ETROPOLITANO DE 3EGURIDAD #IUDADANA EN EL QUE SE RECOPILA LA INFORMACIØN SOBRE LOS HECHOS QUE AFECTAN LA SEGURIDAD CIUDADANA EN 1UITO %N ESTE OBSERVATORIO SE SISTEMATIZA LA INFORMACIØN EN UN SISTEMA UNIlCADO Y CONlABLE LO QUE PERMITE CONOCER LOS PROBLEMAS DISE×AR SOLUCIONES Y MEDIR LOS RESULTADOS /BSERVACIØN DIRECTA

-ÞSICOS EN ESCALINATAS DE LA #ATEDRAL EN 0LAZA 'RANDE 1UITO %CUADOR

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

cazmente a la realizaciรณn de los cambios estructurales en las formas de prevenciรณn local de la violencia y delincuencia. Se debe comprometer nuevos socios en los planes de acciรณn, lo que en muchas ocasiones pasa por realizar ajustes a las modalidades de trabajo actuales. 6.3.6. La institucionalizaciรณn jurรญdico-polรญtica

/RV DFXHUGRV SROtWLFRV \ MXUtGLFRV HQWUH VRFLRV SDUD DVXPLU FRPpromisos individuales y colectivos en las tareas de la estrategia y en su continuidad, tienen un carรกcter triple: 1) Concordar los objetivos centrales con el municipio, en materia de seguridad. 2) Compromiso de las organizaciones participantes de involucrarVH WpFQLFD \ ร QDQFLHUDPHQWH HQ HO SURFHVR GH ORJUR GH HVWRV objetivos con el municipio. 3) Garantizar la continuidad del proceso. /RV DFXHUGRV VHxDODGRV VH UHDOL]DQ GHVSXpV GH XQ SURFHVR GH FRproducciรณn ya consolidado, es decir el municipio y sus socios pรบbliFRV \ SULYDGRV ORV ร UPDQ DO YHULร FDU HO p[LWR GH VX FRODERUDFLyQ Para los socios involucrados con el municipio, la rรบbrica de un pacto urbano, es una forma de concretar su proceso de coproducciรณn de seguridad y de expresar su voluntad de profundizarlo. El acuerdo puede incluir, por ejemplo, el compromiso de los socios GH DVHVRUDU \ DSR\DU WpFQLFD \ ร QDQFLHUDPHQWH DO JRELHUQR PXQLFLSDO HQ PDWHULD GH FRSURGXFFLyQ GH VHJXULGDG 7DPELpQ GH FRQWULbuir a la profundizaciรณn del anรกlisis de los problemas evidenciados, a la elaboraciรณn de la visiรณn de futuro y, sobre todo, a las estrategias y a la ejecuciรณn de proyectos, a la socializaciรณn de la informaciรณn, a OD E~VTXHGD GH VROXFLRQHV DOWHUQDWLYDV D OD PRYLOL]DFLyQ GH ร QDQFLDPLHQWR D OD REWHQFLyQ GH RWURV UHFXUVRV DVt FRPR DO PRQLWRUHR de las acciones que se plantean. 2WUD IRUPD GH SDFWR VRFLDO \ SROtWLFR HV XQ /LEUR %ODQFR FRPR HO TXH VH DFRUGy HQ -RKDQQHVEXUJR HQ \ HQ %RJRWi HQ

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Cร MO INSTITUCIONALIZAR LA EVALUACIร N: EL CASO DEL LIBRO BLANCO DE BOGOTร , COLOMBIA %L ,IBRO "LANCO DE "OGOTร ES UN PROCESO EN LA CUAL PARTICIPAN LOS REPRESENTANTES DE LA !DMINISTRACIร N DE LA CIUDAD EN ORGANIZACIONES PRIVADAS Y DE LA SOCIEDAD CIVIL APOYADAS POR ORGANISMOS DE COOPERACIร N INTERNACIONAL %N CONJUNTO CON LA COMUNIDAD GENERAN UNA GUร A PARA LA CONSTRUCCIร N DE UN DIร LOGO PLURAL Y ALGUNOS CONSENSOS MULTIPARTIDARIOS EN TORNO A UNA VISIร N SOSTENIBLE .O PRETENDE REEMPLAZAR A LOS INSTRUMENTOS DE PLANEACIร N DE LA ADMINISTRACIร N DISTRITAL SINO Mร S BIEN ADECUAR LA INTERVENCIร N INSTITUCIONAL AL MODELO DESEADO DE SEGURIDAD URBANA %STE PROCESO TAMBIร N PERMITE QUE LA CIUDAD ABORDE LA DISCUSIร N Y RESOLUCIร N DE TEMร TICAS CUYO MANEJO O CUYAS HERRAMIENTAS NO DEPENDEN DE LAS AUTORIDADES DE LA CIUDAD SINO DE OTRAS RAMAS DEL PODER O DE OTROS NIVELES DE LA ADMINISTRACIร N DEL %STADO 6ELร SQUEZ ยฟQuรฉ bene๏ฌ cios genera a la ciudad un Libro Blanco de seguridad ciudadana y convivencia? s -AYOR VISIBILIDAD Y COMPRENSIร N DE LOS RETOS FUTUROS DE LA SEGURIDAD CIUDADANA s -AYOR APROPIACIร N DE LA SEGURIDAD URBANA COMO BIEN Pร BLICO POR CONSOLIDAR SOSTENER Y PROFUNDIZAR s !PROPIACIร N DE LA SEGURIDAD CIUDADANA Y LA CONVIVENCIA COMO ELEMENTO CLAVE DEL DESARROLLO URBANO INTEGRAL s $ESARROLLO DE LA CAPACIDAD DE ANTICIPACIร N DE FENร MENOS CAMBIANTES DE VIOLENCIA DELINCUENCIA INCIVILIDAD E INSEGURIDAD s &ORTALECIMIENTO DE HERRAMIENTAS DE SEGUIMIENTO A LA EVOLUCIร N DE LA SEGURIDAD CIUDADANA Y LA CONVIVENCIA DESDE LA SOCIEDAD CIVIL s &OMENTO DE RELACIONES DE CONlANZA SOLIDARIDAD COMPROMISO Y CORRESPONSABILIDAD ENTRE DIFERENTES ACTORES SOCIALES ECONร MICOS Y POLร TICOS DE LA CIUDAD s !PORTES A LA CONSTRUCCIร N DE UNA VISIร N COMPARTIDA DE CIUDAD s 0ROMOCIร N DE UN USO NO DEMAGร GICO DE LOS TEMAS DE SEGURIDAD URBANA WWW LIBROBLANCOSEGURIDAD ORG


Capítulo 7: APOYOS A LA POLÍTICA LOCAL DE PREVENCIÓN: INSTITUCIONALIZAR LA POLÍTICA DE PREVENCIÓN LOCAL

JUVENTUD Y POLICÍA %N "RASIL LOS JØVENES ESTÈN EN EL CENTRO DEL PROBLEMA DE LA VIOLENCIA YA SEA COMO VÓCTIMAS O VICTIMARIOS ,AS RELACIONES CON LA POLICÓA SON CONmICTIVAS AL IGUAL QUE EN TODO EL MUNDO %N 2ÓO DE *ANEIRO LA MAYORÓA DE LAS VÓCTIMAS MORTALES EN ENFRENTAMIENTOS CON LAS FUERZAS DE ORDEN TIENE ENTRE Y A×OS 4AMBIÏN LA MAYORÓA ES DE RAZA NEGRA ,OS JØVENES SON LOS QUE PEOR EVALÞAN A LA POLICÓA Y QUIENES MENOS CONlANZA TIENEN EN ELLA %N PARTICULAR LOS DE BARRIOS MARGINALES SIENTEN UNA GRAN PROBABILIDAD DE SER VÓCTIMAS DE VIOLENCIA POR PARTE DE LOS ENCARGADOS DE LA SEGURIDAD PÞBLICA %N GENERAL SE APRECIA UNA hSATANIZACIØNv MUTUA %L 'RUPO #ULTURAL !FRO 2EGGAE SE ACERCØ AL #ENTRO DE %STUDIOS DE 3EGURIDAD Y #IUDADANÓA #%3%# PARA PRODUCIR UN VIDEOCLIP DE LA CANCIØN h-UERTO DE MIEDOv SOBRE LA MATANZA DE RESIDENTES ILEGALES OCURRIDA EN EN EL BARRIO 6ICARIO 'ERAL A MANOS DE LA POLICÓA 3ORPRENDENTEMENTE LOS COORDINADORES DE !FRO 2EGGAE A lNES DE PIDIERON AL #%3%# PREPARAR UN PROYECTO DE ACERCAMIENTO A LA POLICÓA MILITAR #ON EL APOYO DE LA &UNDACIØN &ORD LUEGO DE MESES DE INTENTOS FALLIDOS EL PROGRAMA SE IMPLEMENTØ EN LOS "ATALLONES DE "ELO (ORIZONTE !SÓ COMENZARON TALLERES DE PERCUSIØN BALONCESTO TEATRO GRAFlTI BAILE Y ESPECTÈCULOS DENTRO DE LOS PROPIOS CUARTELES CON LA PARTICIPACIØN DIRECTA DE MIEMBROS DE CADA UNIDAD ,OS INSTRUCTORES FUERON LOS JØVENES DE LA !FRO 2EGGAE Y EL OBJETIVO FUE CREAR UN DIÈLOGO ENTRE LA CULTURA DE LOS JØVENES Y LA CULTURA POLICIAL %L ÏXITO DE LAS ACTIVIDADES LLEVØ A AMPLIARLAS NO SØLO A OTROS RECINTOS OlCIALES SINO TAMBIÏN A BARRIOS MARGINALES Y ESCUELAS 4ODO ESTO FUE ACOMPA×ADO DE UNA GRAN COBERTURA COMUNICACIONAL ,AS EVALUACIONES INDICAN QUE EL IMPACTO SOBRE LA IMAGEN DE LA POLICÓA ENTRE LOS JØVENES Y LA POBLACIØN EN GENERAL MEJORØ NOTABLEMENTE %NTRE LOS POLICÓAS EL IMPACTO RESULTØ MÈS MODERADO AUNQUE LA MAYORÓA APOYA CON ENTUSIASMO EL PROYECTO MANIlESTA SIN EMBARGO PREOCUPACIØN PRECISAMENTE POR EL IMPACTO QUE ÏSTE PODRÓA GENERAR EN SU IMAGEN

© 3ILVIA 2AMOS

%N EL A×O SE INICIØ UNA SEGUNDA FASE DE ACTIVIDADES TODAVÓA POR EVALUAR QUE PERMITIRÈ SABER HASTA QUÏ PUNTO SIRVE PARA CAMBIAR LA IMAGEN DE LOS JØVENES ENTRE LOS POLICÓAS ASÓ COMO LO HA HECHO CON LA IMAGEN DE LA POLICÓA ENTRE LOS JØVENES #%3%#

*ØVENES Y POLICÓA SE ACERCAN A TRAVÏS DE DIÈLOGOS ENTRE LA CULTURA JUVENIL Y LA CULTURA POLICIAL 2ÓO DE *ANEIRO "RASIL

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

CapĂ­tulo 8:

FORMACIĂ“N Y CAPACITACIĂ“N DE AGENTES LOCALES

Este capĂ­tulo aborda la formaciĂłn y capacitaciĂłn de agentes locales como parte de la estrategia de una polĂ­tica de prevenciĂłn a nivel local y como un factor de sostenibilidad y autonomĂ­a. Se explica el por quĂŠ la necesidad de capacitaciĂłn, las distintas modalidades de ĂŠsta, los actores a nivel local que son fundamentales en este proceso, asĂ­ como los

7.1. LA CAPACITACIĂ“N, FACTOR DE SOSTENIBILIDAD Y AUTONOMĂ?A LOCAL La continuidad y sostenibilidad del proceso de coproducciĂłn de prevenciĂłn, una vez lanzada la estrategia, dependerĂĄ no solo de las autoridades municipales y de los socios, sino que tambiĂŠn de la existencia de grupos de agentes de prevenciĂłn, de su habilidad y de sus conocimientos y capacidad de ponerlos en prĂĄctica. Es decir que este proceso local requiere, para consolidarse y profundizarse en la ciudad, de agentes locales capacitados para entender y abordar los diversos tipos de prevenciĂłn con un conocimiento apropiado. 3DUD ORJUDU HVWH REMHWLYR VH UHTXLHUH IRUPDU SHUVRQDV FDOLĂ€FDGDV que actualizen periĂłdicamente sus conocimientos en las diversas materias. Esta formaciĂłn no puede limitarse a unos pocos cuadros del gobierno central que dominan el tema, pero que estĂĄn alejados de la realidad urbana de cada municipio. Se trata de generar equipos locales capaces de dialogar con los expertos de gobierno y las autoridades locales y de implementar y guiar en los barrios y comunas las tareas de prevenciĂłn.

principales contenidos que debieran abordarse. Se seĂąalan ademĂĄs algunos ejemplos de experiencias en este ĂĄmbito.

EMPODERAMIENTO CONTRA LA VIF Organizar la prevenciĂłn de la violencia contra las mujeres es mĂĄs eďŹ caz si se tiene en los barrios monitoras de violencia intrafamiliar aptas para intervenir tanto en el apoyo, derivaciĂłn y/o protecciĂłn de vĂ­ctimas como en la rehabilitaciĂłn de autores de violencia o en la educaciĂłn de adolescentes. Si no se tiene estas expertas locales capacitadas, se arriesga depender completamente del sistema de justicia criminal, cuyo importante rol sigue siendo limitado en prevenciĂłn de la VIF, o tener que formar en cada caso un pequeĂąo equipo ad hoc con expertos externos. La presencia permanente de un equipo local con el cual los habitantes estĂŠn familiarizados otorga sustentabilidad a una prĂĄctica local tan importante como la prevenciĂłn de la VIF. Lo mismo podrĂ­a decirse de la mediaciĂłn comunitaria.

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Por otra parte la exigencia de formaciĂłn o capacitaciĂłn deriva de la necesidad de tener un lenguaje comĂşn y un modelo de trabajo compartido. El riesgo de que existan agentes que opten por una prevenciĂłn situacional mĂĄs que social, de actores locales que no visualizan las ventajas de hacer de los jĂłvenes protagonistas en la prevenciĂłn dirigida a aquellos que estĂĄn en situaciĂłn de riesgo, o grupos de mujeres que optan por depender exclusivamente del sistema de justicia para resolver los problemas de VIF se reduFH VLJQLĂ€FDWLYDPHQWH $GHPiV FLHUWDV SUiFWLFDV FRPR OD PHGLDciĂłn comunitaria, requieren de una perspectiva homogĂŠnea para evitar, por ejemplo, dirigentes locales que pretenden ejercer esta forma alternativa de justicia sin tener en cuenta la debida imparcialidad y neutralidad del mediador. La capacitaciĂłn constituye tambiĂŠn un espacio de discusiĂłn, reĂ H[LyQ LQWHUFDPELR DQiOLVLV \ WHRUL]DFLyQ D SDUWLU GH ODV SUiFWLcas, lo que permite revisar su validez, su adaptaciĂłn al contexto local y familiarizarse con la evoluciĂłn rĂĄpida de las prĂĄcticas frente a una delincuencia y violencia que cambian permanentemente. La actualizaciĂłn y sistematizaciĂłn de los conocimientos son necesarias, sobre todo en una regiĂłn que, en los Ăşltimos aĂąos, ha mostrado evidentes manifestaciones creativas en la materia, como es el caso de las ciudades de MedellĂ­n, BogotĂĄ y Diadema. Finalmente, la complejidad del problema de la violencia y delincuencia, en particular su multicausalidad, como la multiplicidad de actores que requiere su prevenciĂłn, exige niveles de forma-


CapĂ­tulo 8: APOYOS A LA POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: FORMACIĂ“N Y CAPACITACIĂ“N DE AGENTES LOCALES

ciĂłn de los agentes de prevenciĂłn sobre todo para permitirles ser proactivos y dinĂĄmicos. Por todas estas razones, la formaciĂłn y capacitaciĂłn son parte de una estrategia local de prevenciĂłn. Para realizar esta tarea se requiere uno o varios centros de formaciĂłn aptos para capacitar en su propia instituciĂłn y/o en terreno a estos agentes de prevenciĂłn. TambiĂŠn esta instituciĂłn podrĂ­a tener la funciĂłn de organizar pasantĂ­as entre agentes de prevenciĂłn de las diversas ciudades.

CAPACITACIĂ“N DEL FORO EUROPEO PARA LA SEGURIDAD URBANA (FESU) El Foro Europeo para la Seguridad Urbana (FESU), organiza regularmente encuentros sobre temĂĄticas diversas, a travĂŠs de jornadas focalizadas sobre un tema. Las mejores experiencias de prevenciĂłn de las ciudades de su amplĂ­a red son expuestas, analizadas y compartidas, lo que permite a las demĂĄs ciudades que se interesan en un tema aprender de ellas. El FESU publica sus resultados y construye asĂ­ alianzas nacionales e internacionales que permiten avanzar mucho mĂĄs rĂĄpidamente que si cada ciudad tuviera que asumir los costos de su aprendizaje en forma aislada.

7.2. FORMACIĂ“N Y CAPACITACIĂ“N Por formaciĂłn se entiende aquĂ­ como una especializaciĂłn tĂŠcnica o universitaria que se da a travĂŠs de cursos especializados de duraciĂłn mediana (seis meses, un aĂąo o mĂĄs) y que conduce generalPHQWH D XQ WLWXOR R FHUWLĂ€FDGR DFDGpPLFR Por ejemplo, formaciĂłn en prevenciĂłn juvenil otorgada a grupos de agentes que ya tienen un trabajo en instituciones gubernamentales, locales u ONG sobre la temĂĄtica y requieren un panorama amplio de conocimientos sobre las diversas prĂĄcticas existentes para poder conocer la gama de intervenciones posibles, los mĂŠtodos de evaluaciĂłn y en general el avance en la materia. Por capacitaciĂłn se entiende el otorgamiento de conocimientos prĂĄcticos, o su actualizaciĂłn, que permiten a un agente local traEDMDU HQ XQ iUHD GH OD SUHYHQFLyQ FRQ VXĂ€FLHQWHV LQVWUXPHQWRV SDUD DERUGDU ORV SUREOHPDV HQ IRUPD HĂ€FLHQWH (VWD FDSDFLWDFLyQ deberĂ­a incluir etapas de actualizaciĂłn de los conocimientos y de confrontaciĂłn de experiencias con otros agentes involucrados en similar prĂĄctica en otros lugares. Por ejemplo, los mediadores comunitarios que requieren de una capacitaciĂłn mĂ­nima, sin que esto implique una formaciĂłn tĂŠcnica o universitaria.

7.2.1. CapacitaciĂłn y formaciĂłn de los actores de la prevenciĂłn

¢$ TXLpQ IRUPDU" /RV WUHV WLSRV GH DJHQWHV FODYHV ORV DFWRUHV SRtenciales o reales de la prevención en los diversos campos de la prevención social son: los agentes de prevención de la sociedad civil, los policías y los equipos tÊcnicos de las alcaldías. 7.2.1.1. Los actores de la sociedad civil

Estos actores son, principalmente, los miembros de las comuniGDGHV GH LQWHUpV HQ XQD FLXGDG SRU VX URO HVSHFtĂ€FR HQ OD VHJXULdad. Entre ellos contamos con los miembros de los diversos comitĂŠs que surgen a medida que se va desarrollando una estrategia de prevenciĂłn local. En efecto, a medida que se implementa una estrategia local se forman en los diversos barrios de la ciudad, comitĂŠs de seguridad o de convivencia cuyos miembros requieren de una capacitaciĂłn HQ SUHYHQFLyQ $OJXQRV WHPDV SDUWLFXODUPHQWH LPSRUWDQWHV SDUD ellos son una mejor comprensiĂłn de la prevenciĂłn social dirigida a los jĂłvenes, del rol de la comunidad en la prevenciĂłn, de la prevenciĂłn situacional (sus potenciales y lĂ­mites), del alcance de la prevenciĂłn temprana; la construcciĂłn de redes locales destinadas a la prevenciĂłn y el trabajo regular con ellas; la articulaciĂłn con la actividad policial y, eventualmente, con la justicia. La empatĂ­a con el trabajo policial, cualquier sea el marco institucional, no se logra FORMACIĂ“N Y CAPACITACIĂ“N EN CHILE FormaciĂłn Existen en la regiĂłn varios centros universitarios que otorgan un diplomado sobre seguridad ciudadana: por ejemplo la Universidad Alberto Hurtado (UAH) ha ofrecido cursos vespertinos a profesionales de la seguridad sean estos policĂ­as de varias nacionalidades becados por Carabineros de Chile o agentes gubernamentales o de la sociedad civil. La ventaja de realizar cursos donde policĂ­as dialogan e intercambian con los agentes gubernamentales y de la sociedad civil es considerable en tĂŠrminos de aprendizaje y de conocimiento de diversas culturas. CapacitaciĂłn En comunas de la periferia de Santiago, la UAH ofrece cursos de capacitaciĂłn a mediadores comunitarios provenientes de los grupos locales. La ventaja de esta experiencia es que permite presentar iniciativas nacionales e internacionales como aquella de mediadores comunitarios de favelas brasileĂąas donde el narcotrĂĄďŹ co y la violencia son problemas cotidianos. El encuentro de culturas de mediaciĂłn muestra los horizontes y perspectivas de la mediaciĂłn y su rol en la resoluciĂłn de conictos y de construcciĂłn del tejido humano y social de un barrio. Fuente: UAH.

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

espontĂĄneamente ni sĂłlo por decisiĂłn de los alcaldes o de los jefes policiales. Hay etapas de aprendizaje que merecen ser sistematizadas y de las cuales los actores deben ser concientes. Otro grupo, a menudo de difĂ­cil selecciĂłn y abordaje, son los actores juveniles y, en especial, los lĂ­deres de la acciĂłn preventiva orientada a los jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo. Siendo ellos, a menudo, los puentes entre los grupos juveniles en crisis y la comunidad local, estos agentes juveniles cumplen una funciĂłn fundamental hacia las pandillas violentas, las barras bravas, los pre-delincuentes, los desertores escolares, los grupos insertos en el consumo de droga etc. Otro grupo relevante es aquel de los monitores de calle (que pueden tener varios nombres segĂşn las localidades) y que son la ligazĂłn habitual entre los habitantes y las diversas generaciones o grupos sociales o ĂŠtnicos de una zona urbana.

(O EHQHĂ€FLR GH FRQWDU FRQ HVWRV DJHQWHV FDSDFLWDGRV R IRUPDGRV radica en mejorar las prĂĄcticas de prevenciĂłn y su normalizaciĂłn en los barrios y entre los equipos tĂŠcnicos municipales y en la contribuciĂłn a la generaciĂłn de una cultura de la prevenciĂłn. 7.2.1.2. Los policĂ­as

La formaciĂłn o capacitaciĂłn de policĂ­as en prevenciĂłn es un aspecto fundamental para el ĂŠxito de una estrategia de prevenciĂłn local y para la acciĂłn policial misma. Por una parte porque los policĂ­as deben ser socios de la estrategia y, por otra, porque cualTXLHU HQIRTXH HĂ€FD] HQ PDWHULD GH VHJXULGDG VXSRQH OD FRPSOHmentaridad del eje “represiĂłnâ€? y control social y el eje preventivo. $PERV VRQ QHFHVDULRV \ FRPSOHPHQWDULRV DXQTXH VHDQ GLItFLOHV de equilibrar en prĂĄctica. 7.2.1.3. Los equipos tĂŠcnicos municipales

Los mediadores comunitarios, que por otra parte cumplen una IXQFLyQ HVHQFLDO HQ OD UHVROXFLyQ GH FRQà LFWRV \ HQ OD FRQVROLGDción del tejido social, constituyen tambiÊn un potencial grupo beQHÀFLDULR GH FDSDFLWDFLyQ /RV PHGLDGRUHV FRPXQLWDULRV QHFHVLWDQ conocimientos tÊcnicos adaptables a cada situación e intercambios con otros mediadores similares, porque su ejercicio pide mås habilidades comunitarias pråcticas y un sentido de la imparcialidad que FRQRFLPLHQWRV HVSHFLDOL]DGRV HQ XQD WHPiWLFD HVSHFtÀFD IDPLOLD escuela etc.). Los profesores, particularmente de los colegios donde la violencia VH PDQLÀHVWD HQ IRUPD PiV HYLGHQWH \ SUREOHPiWLFD GHEHUtDQ UHFLbir, mås que una capacitación, una formación sistemåtica en la materia que pueda asumir la forma de un reconocimiento acadÊmico. /RV DJHQWHV HQFDUJDGRV GH OD SUHYHQFLyQ DO FRQVXPR \ WUiÀFR GH droga requieren una formación que complemente su especialización tÊcnica que apunte al trabajo en comunidad barrial y al trabajo intersectorial con otros agentes que focalizan los temas de seguridad o de salud pública. Estos conocimientos, y su actualización HQ IXQFLyQ GH OD HYROXFLyQ GHO WUiÀFR \ FRQVXPR SUREOHPiWLFR permite la formación pluridisciplinaria. Las mujeres monitoras de VIF, cuyo desempeùo se da en el åmbito del barrio, necesitan una capacitación båsica que les permiten ejercer su rol. En la mayoría de los casos no necesitan una escolaridad alta sino una capacidad de desempeùarse en el medio donde viven y actúan. Los líderes comunitarios barriales, dado su rol de guía y orientador en sus respectivas zonas residenciales y el caråcter transversal de la seguridad requieren una capacitación mínima sobre las formas de prevención, el trabajo con policías y la constitución de redes locales.

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Los equipos que trabajan en el ĂĄmbito municipal son reclutados habitualmente a partir de su conocimiento, por lo menos bĂĄsico, en la materia. Sin embargo, estos conocimientos requieren ser actualizados y comparados con otras experiencias. La formaciĂłn permanente otorgada a estos cuadros tĂŠcnicos puede seguir el modelo adoptado por el FESU o el modelo del programa “CiuGDGHV PiV VHJXUDV´ GH ODV 1DFLRQHV 8QLGDV 218 +$%,7$7 ambos facilitan la participaciĂłn regular (por lo menos una vez al aĂąo) de estos cuadros en eventos internacionales que les permiten PERFECCIONAMIENTO DE LA PRĂ CTICA POLICIAL CIUDADANA, RIO DE JANEIRO, BRASIL El curso de Perfeccionamiento de la PrĂĄctica Policial Ciudadana (CAPPC) consiste en caliďŹ caciĂłn continua dirigida especialmente para el policĂ­a militar, que ha sido implementado en la PolicĂ­a Militar del Estado de RĂ­o de Janeiro (PMERJ), por la ONG Viva RĂ­o, desde el aĂąo 2002. Sus principales directrices son la humanizaciĂłn y la elevaciĂłn de la calidad del servicio policial militar, con prioridad en la prevenciĂłn del crimen y de la violencia, valorizando el papel comunitario de la actividad policial, la ĂŠtica profesional y el respeto de la ley. El curso estĂĄ compuesto esencialmente por estudios de casos obtenidos del cotidiano de los policĂ­as militares. Tales casos son presentados a los alumnos y trabajados en grupos por ellos, posibilitando el desarrollo de una comunicaciĂłn mĂĄs uida entre los participantes, en donde las experiencias de cada uno faciliten la comprensiĂłn, la asimilaciĂłn de los conceptos y la adquisiciĂłn de nuevos conocimientos y tĂŠcnicas. (Viva RĂ­o www.vivario.org.br. TraducciĂłn Libre)


CapĂ­tulo 8: APOYOS A LA POLĂ?TICA LOCAL DE PREVENCIĂ“N: FORMACIĂ“N Y CAPACITACIĂ“N DE AGENTES LOCALES

comparar sus experiencias con las de otros paĂ­ses, asegurando un intercambio regular (varias veces al aĂąo) con las otras municipalidades del paĂ­s en diferentes temĂĄticas de prevenciĂłn. Otro sistema de capacitaciĂłn para un funcionario municipal es la pasantĂ­a, quien teniendo una larga experiencia exitosa en una temĂĄtica se desplaza para participar en jornadas intensivas de talleres con uno o varios equipos tĂŠcnicos. Por otra parte, la formaciĂłn con reconocimiento acadĂŠmico puede ser importante para los equipos tĂŠcnicos porque les permite UHĂ H[LRQDU HQ XQ DPELHQWH DFDGpPLFR TXH IDFLOLWD HO FRQRFLPLHQWR y, ademĂĄs, constituye una forma de promociĂłn profesional. La capacitaciĂłn puede extenderse a equipos tĂŠcnicos municipales con competencia en materia de educaciĂłn, salud, obras pĂşblicas, comercio, esparcimiento etc. Este tipo de capacitaciĂłn contribuye D KDFHU HQWHQGHU ORV HQIRTXHV SUHYHQWLYRV \ HO VLJQLĂ€FDGR GH XQD cultura preventiva como tambiĂŠn la dimensiĂłn intersectorial del trabajo municipal. 7.2.2. Los contenidos de la formaciĂłn o capacitaciĂłn

Los principales contenidos de la formaciĂłn o capacitaciĂłn menFLRQDGRV VH UHĂ€HUHQ D OD FRPSUHQVLyQ GH ORV GHVDItRV GH OD SUHYHQciĂłn y seguridad tanto para la cohesiĂłn social, la calidad de vida de la gente y la disminuciĂłn del temor de la poblaciĂłn; al entender los temas de inseguridad pero tambiĂŠn los aspectos de la cohesiĂłn social como las relaciones entre generaciones, la inclusiĂłn social, los proyectos de ciudad inclusiva, la democratizaciĂłn de las relaciones intrafamiliares y el rol protagĂłnico de las mujeres, por ejemplo. El conocimiento de los enfoques de intervenciĂłn y sus respectivos supuestos en materia de prevenciĂłn es un tema relevante de cualquier capacitaciĂłn y formaciĂłn, en especial si predomina, en la mayorĂ­a de los habitantes, el supuesto del funcionamiento y la DXWRVXĂ€FLHQFLD GH OD SUHYHQFLyQ SHQDO \ QR OD SUHYHQFLyQ VRFLDO \ situacional, y la exigencia de la coproducciĂłn. Un tercer aspecto, complementario de lo anterior, es el conociPLHQWR HVSHFtĂ€FR GH ORV FDPSRV GH DFFLyQ TXH VH UHĂ€HUHQ D JUXpos a los cuales va dirigida la prevenciĂłn social. En primer lugar a los jĂłvenes, relevante grupo objetivo de la prevenciĂłn social. Es importante el conocimiento de los componentes culturales y las SUiFWLFDV GH ORV MyYHQHV FRPR WDPELpQ VXV FRQĂ LFWRV JHQHUDFLRnales, lo que permite evitar los numerosos prejuicios adultocentristas sobre la juventud, particularmente aquella en “situaciĂłn de riesgoâ€?. La toma de conciencia del aspecto creativo de la cultura ´XQGHUJURXQGÂľ GHO VLJQLĂ€FDGR GH XQD IRUPD GH H[SUHVLyQ FRPR HO JUDIĂ€WWL GH ODV SDQGLOODV GH ODV EDUUDV EUDYDV GHO FRQVXPR MXYH-

Es necesaria una formaciĂłn continua de actores, con un intercambio entre distintas ciudades y experiencias de AmĂŠrica Latina que rescate y discuta sobre ellas y permita asĂ­ enfrentar de mejor forma la seguridad en realidades cambiantes y dinĂĄmicas.

nil de drogas en las diversas etapas de la adolescencia, etc., ayuda a construir puentes indispensables a la coproducciĂłn de seguridad territorial. En segundo lugar, contribuir a hacer entender el rol ciudadano de las mujeres en todo lo que es la intervenciĂłn preventiva de la violencia hacia ellas, en los hogares y en la sociedad, permite DYDQ]DU HQ OD UHVROXFLyQ GH FRQĂ LFWRV OD HOLPLQDFLyQ GH OD YLRlencia y en la rehabilitaciĂłn de autores de violencia sin limitarse a mirar a las mujeres solo como vĂ­ctimas. Este aspecto de la formaciĂłn puede extenderse, cuando corresponde, a la comprensiĂłn de lo que es la prevenciĂłn de la violencia en el ĂĄmbito escolar para entender el rol de cada grupo de actores (docentes, padres, alumnos y entorno). Vale tambiĂŠn para el trabajo de reinserciĂłn de ex convictos, generalmente mal entendido y a menudo estigmatizante. Un cuarto punto importante en la capacitaciĂłn es la habilidad para analizar los problemas de seguridad y su inserciĂłn en el contexto de las polĂ­ticas sociales de una ciudad. La dimensiĂłn transversal de la seguridad obliga a una comprensiĂłn de sus diversos aspectos. En la perspectiva de la creaciĂłn progresiva de una cultura de la prevenciĂłn, la capacidad de anĂĄlisis de las situaciones de inseguridad y de todos sus aspectos es esencial. La prevenciĂłn debe transformarse progresivamente, como en BogotĂĄ, en un patrimonio de los habitantes. Un quinto componente concierne al trabajo mancomunado con las policĂ­as. Este aspecto es relevante, cualquiera sea el marco institucional de este trabajo, porque permite un encuentro entre actores bĂĄsicos de la prevenciĂłn. Es por ĂŠsto que conviene articular cursos donde policĂ­as y agentes locales participen. $XQTXH VHD JHQHUDOPHQWH PiV GLItFLO HO DSUHQGL]DMH GHO WUDEDjo con jueces puede ser Ăştil tanto para facilitar la acciĂłn judicial como permitir entender las ventajas y limitaciones del impacto preventivo de la justicia. El aprendizaje de trabajo intersectorial y en redes es un aspecto relevante de la capacitaciĂłn. Sin un aprendizaje mĂ­nino, la tendencia

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

predominante al egoĂ­smo institucional o al trabajo en relaciĂłn exclusivamente vertical permanecerĂĄ. Ejercicios de trabajo en redes son componentes de los cursos de capacitaciĂłn sobre todo en el iUHD GH SUHYHQFLyQ SRU GHĂ€QLFLyQ WUDQVYHUVDO Finalmente es evidente que para cada caso de capacitaciĂłn el aprendizaje de los instrumentos que corresponden es esencial. Por ejemplo, si se enseĂąa la realizaciĂłn de un diagnĂłstico participativo, ejercicios sobre el anĂĄlisis de datos, sobre las modalidades de realizar una breve encuesta, sobre las marchas exploratorias, los mapas perceptuales, las consultas comunitarias y las diversas herramientas presentadas en el capĂ­tulo sobre diagnĂłstico son necesarios.

7.3. LAS MODALIDADES DE FORMACIĂ“N O CAPACITACIĂ“N Las modalidades de formaciĂłn o capacitaciĂłn son mĂşltiples, pero todas requieren de una instituciĂłn sea regional o nacional que las otorgue. Una fĂłrmula de trabajo en redes a travĂŠs de centros regionales que se especializan en diversas ĂĄreas y que tienen cada uno un buen conocimiento del terreno nacional puede ser una fĂłrmula adecuada a condiciĂłn de tener acuerdos de colaboraciĂłn efectivos. Un centro de formaciĂłn debe tener la capacidad de ofrecer cursos R WDOOHUHV Ă H[LEOHV \ DGDSWDEOHV D GLYHUVRV S~EOLFRV HQ ODV P~OWLSOHV iUHDV GH OD SUHYHQFLyQ OR TXH QR VLJQLĂ€FD TXH GHEH WHQHU XQ personal que cubre todos los aspectos de la prevenciĂłn. Se trata, dado los costos de un personal especializado, de poder contar sobre temas especializados -como por ejemplo los aspectos de la formaciĂłn psicolĂłgica en materia de prevenciĂłn al consumo de drogas-, de poder contar con un personal especializado perteneciente a otras instituciones con las cuales hay acuerdo de colaboraciĂłn o con personas de instituciones universitarias o de ONG disponibles para cubrir estos aspectos. Sin embargo, el centro de formaciĂłn debe disponer de un equipo de formadores acostumbrados a diversos pĂşblicos y capaces de otorgar una formaciĂłn de base en todos los campos de la prevenciĂłn. Un centro de este tipo ligado a una universidad en la medida que dispone de equipos que mezclan la actividad formativa con la investigaciĂłn aplicada y la

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Mientras mĂĄs ciudades son seguras, menos difĂ­cil serĂĄ mantenerlas asĂ­. Traspasar la informaciĂłn y los conocimientos nos favorece a todos. Buenos vecinos (a nivel de ciudades, regiones y estados) mejoran los sectores y la regiĂłn.

docencia universitaria ayuda a mantener un nivel de calidad adecuado porque permite la actualizaciĂłn permanente de los conocimientos y dispone de los instrumentos de evaluaciĂłn tanto de los cursos como de las prĂĄcticas preventivas. La formaciĂłn puede ser presencial o virtual. 8Q FHQWUR FRQ HVWDV FDUDFWHUtVWLFDV VL ELHQ SXHGH VHU Ă€QDQFLDGR por un gobierno o por un municipio, mejora si es independiente y evita los problemas de los cambios polĂ­ticos y de las sucesivas dependencias. La prĂĄctica, comĂşn a varios estados, de un equipo centralizado que forma y guĂ­a, presenta mĂĄs inconvenientes que ventajas, porque crea dependencia de las sucesivas formas de concebir lo “polĂ­ticamente correctoâ€?. La segunda forma de capacitar es el intercambio segĂşn la fĂłrmula )(68 R ´&LXGDGHV PiV 6HJXUDVÂľ 218 +$%,7$7 OR TXH SXHde ser realizado por un centro de formaciĂłn, por lo menos en las temĂĄticas principales, no obstante la posibilidad frecuente en la regiĂłn de seminarios y conferencias. La ventaja de organizar estos encuentros a partir de un centro es su carĂĄcter mĂĄs sistemĂĄtico, porque permite abarcar, si el centro se mantiene al tanto de la evoluciĂłn de las prĂĄcticas vigentes, una gama amplia de experiencias vĂĄlidas. Por ende, un centro de formaciĂłn deberĂ­a no sĂłlo tener una caSDFLGDG Ă H[LEOH GH IRUPDU \ FDSDFLWDU VLQR WDPELpQ GH JXLDU HQcuentros en los cuales se comparen prĂĄcticas, sistematicen estas experiencias nacionales o internacionales y se disponga de una red de instituciones capaces de colaborar en la capacitaciĂłn y el intercambio temĂĄtico.


CONCLUSIONES FINALES

CONCLUSIONES FINALES

Una polĂ­tica de seguridad ciudadana a nivel local requiere instrumentos, metodologĂ­as y herramientas conceptuales y prĂĄcticas para su generaciĂłn, desarrollo y sostenibilidad. TambiĂŠn necesita de la participaciĂłn de distintos actores y sectores que puedan, en un trabajo coordinado y coproducido, desarrollar iniciativas que se orienten a construir ciudades con mejores niveles de bienestar y calidad de vida. Esta GuĂ­a pretende contribuir y responder a estas exigencias, y constituirse en una iniciativa que busca aportar a los gobiernos locales para que, recogiendo las experiencias y trayectorias prometedoras, puedan construir su camino propio para una ciudad mĂĄs cohesionada y mĂĄs segura. Esta GuĂ­a puede permitir revisar y analizar los problemas, enfoques, prĂĄcticas y desafĂ­os presentes, y hacerlo en forma sistemĂĄtica siguiendo un proceso riguroso pero que debe ser adaptado a cada caso. $ OR ODUJR GH HVWD *XtD VH KDQ IRUPXODGR XQ FRQMXQWR GH KHUUDPLHQWDV WHyricas y prĂĄcticas para el diseĂąo e implementaciĂłn de una polĂ­tica de prevenciĂłn a nivel local. En primer lugar, se han entregado elementos del contexto GH OD YLROHQFLD \ FULPLQDOLGDG HQ $PpULFD /DWLQD 8QD PLUDGD D OD UHDOLGDG de la regiĂłn, tanto en relaciĂłn a los problemas como a las experiencias de SUHYHQFLyQ H[LVWHQWHV HQ GLVWLQWDV FLXGDGHV \ SDtVHV GH $PpULFD /DWLQD \ TXH han contribuido al desarrollo de polĂ­ticas orientadas a la cohesiĂłn social y seguridad ciudadana. Se han propuesto algunos requerimientos para poder dar inicio a una polĂ­tica de prevenciĂłn local, como los necesarios liderazgos, coaliciones, presencia de distintos actores y la competencia de los equipos tĂŠcnicos. Se seĂąalan, por otra parte, los aspectos fundamentales de un diagnĂłstico local, tanto en su diseĂąo como implementaciĂłn y uso. Se han propuesto un conjunto de temas relevantes a considerar en un diagnĂłstico local en temas de seguridad. Para la formulaciĂłn de una estrategia de prevenciĂłn local, se han presentado KHUUDPLHQWDV SDUD HO GLVHxR H LPSOHPHQWDFLyQ GH pVWD $Vt WDPELpQ VH HVSHUD que los ejemplos presentados sean una contribuciĂłn para quienes implementen polĂ­ticas de prevenciĂłn. El monitoreo y evaluaciĂłn en una polĂ­tica de prevenciĂłn local es fundamental. Por ello se entregan ejemplos de instrumentos de monitoreo y de evaluaciĂłn., asĂ­ como enfoques y conceptos orientadores en esta temĂĄtica. El rol de las comunicaciones es otro aspecto clave en una polĂ­tica de prevenFLyQ ORFDO 6H KD H[SOLFDGR \ HMHPSOLĂ€FDGR HO SDSHO GH pVWDV HQ ODV GLVWLQWDV etapas de implementaciĂłn de una polĂ­tica. TambiĂŠn se ha explicado la importancia de la institucionalizaciĂłn de una polĂ­tica y cĂłmo llevarla a cabo en la gestiĂłn de ĂŠsta a nivel de un gobierno local. Finalmente, se han entregado algunas lĂ­neas para desarrollar acciones de formaciĂłn y capacitaciĂłn, que aporten al desarrollo de las polĂ­ticas de prevenciĂłn en seguridad ciudadana

Desde esta GuĂ­a surgen nuevos requerimientos. El primero, es la necesidad GH SUHSDUDU JXtDV SDUD OD SUHYHQFLyQ GLULJLGD D VHFWRUHV HVSHFtĂ€FRV FRPR por ejemplo jĂłvenes en situaciĂłn de riesgo, barrios crĂ­ticos, violencia escolar, etc. Esta GuĂ­a es la primera de una serie dirigida a ciudades en que ONU+$%,7$7 HQ FRODERUDFLzQ FRQ 8$+ \ RWUDV HQWLGDGHV LQWHQWD GHVDUUROODU para proporcionar instrumentos complementarios. Se requiere poner atenciĂłn y actuar sobre otros temas para apoyar y manteQHU HO SURJUHVR GH OD SUHYHQFLyQ ORFDO HQ ODV FLXGDGHV GH $PpULFD /DWLQD ‡ (V HVHQFLDO SURPRYHU HVSDFLRV GH IRUPDFLyQ \ FDSDFLWDFLyQ D QLYHO ORFDO dirigida a distintos actores de la prevenciĂłn, en lĂ­nea con las propuestas de esta GuĂ­a, que permitan garantizar a las comunas o ciudades la sustentabilidad de su proceso de coproducciĂłn permanente de seguridad. ‡ 5HVFDWDU OD GLYHUVLGDG GH H[SHULHQFLDV H[LVWHQWHV HQ $PpULFD /DWLQD \ promover intercambios entre ĂŠstas, generando nuevas prĂĄcticas y conocimiento, constituye otra exigencia que deriva de las lecciones de esta GuĂ­a. ‡ *HQHUDU VLVWHPDV GH REVHUYDFLyQ \ PRQLWRUHR VLVWHPiWLFR GH SROtWLFDV programas y proyectos de prevenciĂłn local y seguridad que se inserten en el conjunto de Observatorios que han surgido en la regiĂłn durante los Ăşltimos aĂąos, siguiendo el ejemplo de BogotĂĄ; serĂĄ necesario tanto para documentar tendencias y resultados como para evaluar prĂĄcticas y apoyar el debate en la regiĂłn. ‡ 3URPRYHU OD GHVFHQWUDOL]DFLyQ \ ODV SROtWLFDV XUEDQDV FRPR FRQWH[WRV necesarios de cualquier polĂ­tica de seguridad; es fundamental a nivel nacional para proporcionar un “ambiente posibilitadorâ€?, como lo es tambiĂŠn el apoyo de Instituciones como ONG y PolicĂ­a, necesario para una promociĂłn mĂĄs sustentable del enfoque que promueve esta guĂ­a. ‡ 6HUi LPSRUWDQWH SDUD OD FRPXQLGDG LQYHVWLJDGRUD GHVDUUROODU QXHYDV Otneas de investigaciĂłn en la temĂĄtica, vinculando experticias y diversidad de actores, particularmente en materia de articulaciĂłn de las polĂ­ticas de prevenciĂłn local de seguridad ciudadana con el conjunto de polĂ­ticas VRFLDOHV ORFDOHV \ FHQWUDOHV SURIXQGL]DQGR OD UHĂ H[LyQ VREUH JREHUQDbilidad. TambiĂŠn parece esencial el desarrollo de investigaciĂłn sobre la problemĂĄtica juvenil, central para la cohesiĂłn de las naciones de la regiĂłn. El surgimiento reciente de formas de investigaciĂłn donde los actores son los jĂłvenes, abre nuevas perspectivas en el esfuerzo para quebrar el PXUR GH LQYLVLELOLGDG GH OD MXYHQWXG HQ OD GHĂ€QLFLyQ H LPSOHPHQWDFLyQ de polĂ­ticas. ‡ $FUHFHQWDU OD SDUWLFLSDFLyQ \ UHVSRQVDELOLGDG FLXGDGDQD SURPRYHU XQ mayor protagonismo de los jĂłvenes, relevar la dimensiĂłn de gĂŠnero, incorporar cada vez con mayor ĂŠnfasis las particularidades de las comunas y localidades, en la comprensiĂłn y anĂĄlisis de los fenĂłmenos de seguridad y convivencia, son algunas de las tareas pendientes a las cuales esta GuĂ­a pretende contribuir y proporcionar impulso.

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GUร A PARA LA PREVENCIร N LOCAL - HACIA POLร TICAS DE COHESIร N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

GLOSARIO

Cifra Negra: Equivalente a tasa de subdeclaraciรณn, es una estimaciรณn del porcentaje de delitos que no son denunciados a la policรญa o que no OOHJD D VHU FRQRFLGRV Rร FLDOPHQWH SRU HO VLVWHPD GH MXVWLFLD

GH DPEDV 6X REMHWLYR HV HQWUHJDU ORV DQWHFHGHQWHV QHFHVDULRV SDUD GLseรฑar una estrategia de intervenciรณn pertinente capaz de solucionar o PLWLJDU HO SUREOHPD R QHFHVLGDG TXH PRWLYD OD DFFLyQ

2. Coaliciรณn: &RUUHODWLYR DO FRQFHSWR GH ยดSDUWQHUVKLSยต HQ LQJOpV 2UJDnizaciรณn de individuos representantes de diversas instituciones, grupos o sectores que estรกn de acuerdo en trabajar juntos para lograr una meta FRP~Q 8QD FRDOLFLyQ LGyQHD GHELHUD WHQHU XQ WUDEDMR PXOWLVHFWRULDO FRRSHUDWLYR \ VLQpUJLFR

10. Diagnรณstico de seguridad: (V HO SURFHGLPLHQWR SRU HO FXDO VH LGHQWLร FD XQD SUREOHPiWLFD HQ XQ WHUULWRULR (VWH LPSOLFD XQ DQiOLVLV VLVWHPiWLFR cuyo objetivo es adquirir una comprensiรณn de la situaciรณn de la inseguridad, sus causas, manifestaciones y sus consecuencias en la poblaciรณn; LPSOLFD WDPELpQ LGHQWLร FDU ORV DFWLYRV \ ORV UHFXUVRV SDUD OD SUHYHQFLyQ (V XQD KHUUDPLHQWD TXH SHUPLWH LGHQWLร FDU SULRULGDGHV \ D\XGD D GHWHUPLQDU XQD HVWUDWHJLD TXH SHUPLWLUi OOHYDU GLFKDV SULRULGDGHV D FDER

1.

3. Conducta desviada: &RQGXFWD TXH YLROD R WUDQVJUHGH XQD QRUPD VRFLDO Bajo este rรณtulo no solo se encierran conductas criminales tales como matar, robar, violar, agredir; sino tambiรฉn otras acciones socialmente no GHVHDGDV FRPR HO VXLFLGLR HO DOFRKROLVPR HO H[KLELFLRQLVPR HWF &DEH seรฑalar que estas conductas son relativas, es decir, de contenido cambiante y variable segรบn el tiempo y el lugar, pues dependen de la sociedad y la FXOWXUD GRPLQDQWH 4. Coproducciรณn: Proceso que permite que todas las agencias del Estado central y local, las instituciones de la sociedad civil, el sector privado y los habitantes involucrados, participen en forma responsable en la construcFLyQ GH XQD FLXGDG SDUD HQIUHQWDU Hร FD] \ FRRUGLQDGDPHQWH ORV SUREOHPDV GH LQVHJXULGDG 0DUFXV 0 9DQGHUVFKXHUHQ ) 5. Creatividad: 6H UHร HUH D GRV FRQFHSWRV 3RU XQD SDUWH D OD PDQLIHVWDciรณn de grupos sociales que expresan en forma novedosa su situaciรณn social en particular a travรฉs de formas artรญsticas y por otra parte a la dimensiรณn creativa sociocultural, es decir, a la capacidad de generaciรณn de sentidos e ideas que no estaban presentes a travรฉs de manifestaciones DUWtVWLFDV 6. Cultura Local: Cultura local o vernรกcula es un tรฉrmino utilizado por ORV HVWXGLRV PRGHUQRV GH JHRJUDItD DQWURSRORJtD KLVWRULD \ VRFLRORJtD Hace referencia a formas de cultura hechas y organizadas en los conWH[WRV ORFDOHV FRPR HO EDUULR OD YLOOD HO SDVDMH HO FOXE HWF (O XVR GHO WpUPLQR LPSOLFD JHQHUDOPHQWH XQD IRUPD FXOWXUDO TXH GLร HUH GH OD FXOWXUD tradicional de hondas raรญces y tambiรฉn de comunidades y/o subculturas IXHUWHPHQWH RUJDQL]DGDV \ R UHOLJLRVDV 7. Delito: 'HO ODWLQR GHOLQTXHUH TXH VLJQLร FD DEDQGRQDU DSDUWDUVH GHO EXHQ FDPLQR DOHMDUVH GHO VHQGHUR VHxDODGR SRU OD OH\ (O GHOLWR HV OD YLRlaciรณn de la ley penal o, para ser mรกs exactos, la infracciรณn de una orden o prohibiciรณn impuesta por la ley; en consecuencia, delito serรก todo hecho al cual el ordenamiento jurรญdico penal le adscribe como consecuencia una SHQD LPSXHVWD SRU OD DXWRULGDG MXGLFLDO SRU PHGLR GH XQ SURFHVR 8. Denunciar: Ejercicio y derecho ciudadano de dejar constancia ante la autoridad policial o judicial, de algรบn acto ilรญcito o falta que atenta contra OR HVWDEOHFLGR HQ HO FyGLJR SHQDO (Q OD PD\RUtD GH ORV FDVRV OD SROLFtD \ los tribunales sรณlo actuarรกn en la medida que un ciudadano formaliza una GHQXQFLD 9. Diagnรณstico: En el contexto de una intervenciรณn social, es el proceso de recolecciรณn, anรกlisis e interpretaciรณn de informaciรณn sobre una realidad VRFLDO HQ HO PDUFR GH XQ SUREOHPD TXH VH GHร QH FRPR IRFR GH LQWHUpV Para ello se utilizan tรฉcnicas cualitativas, cuantitativas o la combinaciรณn

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11. Dimensiรณn objetiva de la seguridad: La existencia de factores de riesgo reales y medibles, como la criminalidad y la violencia; o bien la inexistencia de mecanismos de protecciรณn, o la ausencia de mecanismos UHSDUDGRUHV OD LQHร FLHQFLD GHO VLVWHPD GH DGPLQLVWUDFLyQ GH MXVWLFLD SHQDO constituyen variables fundamentales que generan objetivamente seguriGDG 7XGHOD 12. Dimensiรณn subjetiva de la seguridad: Existe un sesgo social y cultuUDO TXH LQร X\H HQ OD SHUFHSFLyQ GH ORV SHOLJURV /D VHJXULGDG HV WDPELpQ XQD FRQVWUXFFLyQ LPDJLQDULD GH XQ PHGLR VRFLDO SDUWLFXODU 9DULDEOHV como โ riesgoโ y โ probabilidad de ser vรญctimaโ son relativas y dependen del sujeto que vive el daรฑo, del actor social inserto en una medio VRFLRFXOWXUDO HVSHFtร FR /DV QRFLRQHV GH ULHVJR QR HVWiQ EDVDGDV ~QLcamente en razones prรกcticas o en juicios empรญricos y objetivos; son nociones construidas social y culturalmente, que enfatizan algunos asSHFWRV GHO SHOLJUR H LJQRUDQ RWURV 'H HVWD IRUPD HV OD HYDOXDFLyQ TXH ODV SHUVRQDV KDFHQ UHVSHFWR GH VX SURSLD H[LVWHQFLD \ GH OD Hร FDFLD GH los mecanismos de seguridad de que disponen y que sedimenta en un SDUWLFXODU HVWDGR SVLFROyJLFR FRPR VRQ HO WHPRU OD LQVHJXULGDG HWF 7XGHOD 13. Disuasiรณn: Intento de desincentivar el delito a travรฉs de la amenaza de FDVWLJR 14. Drogas ilรญcitas: /D 206 GHร QH GURJDV FRPR ยดFXDOTXLHU VXVWDQFLD TXH DO LQWHULRU GH XQ RUJDQLVPR YLYLHQWH SXHGH PRGLร FDU VX SHUFHSFLyQ HVWDGR GH iQLPR FRJQLFLyQ FRQGXFWD R IXQFLRQHV PRWRUDVยต /D 2UJDQL]DFLyQ GH ODV 1DFLRQHV 8QLGDV 218 SDUD HO FRQWURO GH GURJDV QR HVWDEOHce una distinciรณn entre drogas legales o ilegales; sรณlo seรฑalan el uso como OtFLWR R LOtFLWR 3HUR HQ JHQHUDO VH HPSOHD HO WpUPLQR GURJD LOHJDO R LOtFLWD al hablar de aquellas que estรกn bajo un control internacional, que pueden R QR WHQHU XQ XVR PpGLFR OHJtWLPR SHUR TXH VRQ SURGXFLGDV WUDร FDGDV \ R FRQVXPLGDV IXHUD GHO PDUFR OHJDO 15. Encuesta: Tรฉcnica de recolecciรณn de datos, conformada por un conjunto de preguntas normalizadas dirigidas a una muestra representativa de OD SREODFLyQ R LQVWLWXFLRQHV FRQ HO ร Q GH FRQRFHU HVWDGRV GH RSLQLyQ R KHFKRV HVSHFtร FRV 16. Enfoque integral de seguridad: Perspectiva que incluye el reconoFLPLHQWR GH ORV GLVWLQWRV iPELWRV WUDQVYHUVDOHV GH OD VHJXULGDG /D comprensiรณn de la inseguridad, la violencia y la delincuencia como un fenรณmeno multidimensional -estructural, psicosocial, econรณmico, legal, judicial, polรญtico y cultural- exige desarrollar un enfoque holรญstico que, a


GLOSARIO

su vez, obliga al diseรฑo de una estrategia y acciones intersectoriales para HQIUHQWDU HO SUREOHPD HQ WRGDV VXV H[SUHVLRQHV 7XGHOD

ciudadanos y los grupos expresan sus intereses, ejercen sus legรญtimos deUHFKRV FXPSOHQ VXV REOLJDFLRQHV \ PHGLDQ VXV GLIHUHQFLDV

17. Estrategia: Ruta a seguir por las grandes lรญneas de acciรณn contenidas en las polรญticas de una organizaciรณn para alcanzar los propรณsitos, objetivos y PHWDV SODQWHDGRV HQ HO FRUWR PHGLDQR \ ODUJR SOD]R

24. Gobernanza: Arte o manera de gobernar que se propone como objetivo el logro de un desarrollo econรณmico, social e institucional duradero, promoviendo un sano equilibrio entre el Estado, la sociedad civil y el PHUFDGR GH OD HFRQRPtD 5$( (O FRQFHSWR VH XWLOL]D SRU WDQWR SDUD GHVLJQDU OD Hร FDFLD FDOLGDG \ EXHQD RULHQWDFLyQ GH OD LQWHUYHQFLyQ del Estado, que proporciona a รฉste buena parte de su legitimidad (Bar &HQGyQ $

18. Evaluaciรณn: Proceso que procura determinar periรณdicamente y de maneUD VLVWHPiWLFD \ REMHWLYD OD SHUWLQHQFLD Hร FDFLD Hร FLHQFLD H LPSDFWR GH XQ SUR\HFWR R SURJUDPD D OD OX] GH VXV REMHWLYRV ยต 81,&() 7LHQH FRPR REMHWLYR GHWHFWDU RSRUWXQDPHQWH ODV IRUWDOH]DV \ GHร FLHQFLDV GH ORV procesos de ejecuciรณn, para hacer ajustes conducentes a una gestiรณn รณptima de las iniciativas, โ para optimizar los resultados esperados y responder D ODV H[SHFWDWLYDV GH OD FLXGDGDQtDยต 2(&' 19. Factores de protecciรณn: Asociados a delincuencia, violencia e inseguridad, son aquellas situaciones que impiden, inhiben o disminuyen la comiVLyQ GH XQ GHOLWR R VXFHVR YLROHQWR &RPR IDFWRUHV GH SURWHFFLyQ SXHGHQ LGHQWLร FDUVH ODV VLWXDFLRQHV FRQWUDULDV D ODV GHร QLGDV FRPR IDFWRUHV GH ULHVJR )RUR GH ([SHUWRV HQ 6HJXULGDG &LXGDGDQD

25. Historia Local: Nivel de aproximaciรณn de la ciencia histรณrica situada enWUH HO QLYHO IDPLOLDU \ HO UHJLRQDO R QDFLRQDO /D +LVWRULD /RFDO VH YH FRPR parte del continuo que representa el devenir del hombre por el itinerario del tiempo, por tanto tiene como objeto de estudio relatos acerca de viYHQFLDV H[SOLFDGDV SRU VXV SURSLRV SURWDJRQLVWDV Esta aproximaciรณn histรณrica contribuye a reforzar la identidad y a revitalizar la ciencia histรณrica, explicando la realidad con las contradicciones econรณmico-sociales, que permanentemente potencian el movimiento de ORV VXMHWRV HQ SRV GHO FDPELR RWRUJiQGROHV XQD PDUFDGD KLVWRULFLGDG

20. Factores de riesgo: Asociados a delincuencia, violencia e inseguridad, VH LGHQWLร FDQ XQ FRQMXQWR GH VLWXDFLRQHV R FDUDFWHUtVWLFDV TXH DXPHQWDQ el riesgo tanto de que una persona infrinja la ley como que resulte ser YtFWLPD GH XQ GHOLWR (QWUH ORV IDFWRUHV GH ULHVJR LGHQWLร FDGRV TXH WLHQHQ relaciรณn con aspectos individuales, familiares, sociales, econรณmicos, culturales y de contexto- se encuentran variables como pobreza y desempleo, deserciรณn escolar, exclusiรณn social (especialmente en el caso de los jรณvenes), familias disfuncionales, padres negligentes, violencia intrafamiliar, discriminaciรณn y exclusiรณn, degradaciรณn del medio urbano y de los lazos sociales, vigilancia inadecuada de lugares y disponibilidad de bienes fรกciOHV GH WUDQVSRUWDU \ UHGXFLU )RUR GH ([SHUWRV HQ 6HJXULGDG &LXGDGDQD

26. Institucionalizar: Incorporaciรณn de prรกcticas, costumbres y valores a una estructura pรบblica, que permite la internalizaciรณn de รฉstas en sus acFLRQHV FRWLGLDQDV \ FXOWXUD RUJDQL]DFLRQDO

21. Focalizaciรณn: Proceso mediante el cual se concentran los esfuerzos y recursos en un determinado objeto o poblaciรณn, dada la existencia de factores socio-ambientales -como la pobreza, la cesantรญa, la marginalidady la desigual cobertura de servicios de justicia y policรญa, se debe procurar la intervenciรณn y concentraciรณn de los esfuerzos preventivos, atendiendo D YDULDEOHV WDQWR VRFLRGHPRJUiร FDV \ HVSDFLDOHV FRPR HQ VHJPHQWRV HQ mayor riesgo, por ejemplo, en sectores sociales con un menor acceso a la justicia o mรกs vulnerables a la acciรณn criminal e inseguridad -como ocurre en el caso de las mujeres, las personas de mรกs edad, los jรณvenes, entre RWURV 7XGHOD

28. Maras: Tรฉrmino que proviene de marabunta, un tipo de hormigas que YLYH HQ FRORQLDV \ FRQVWUX\H JUDQGHV QLGRV 1RPEUH SRSXODU GH ODV SDQdillas de jรณvenes centroamericanos que tuvieron su origen en la ciudad estadounidense de Los ร ngeles (LA) como defensa contra otras pandillas GH RULJHQ pWQLFD GLIHUHQWH (VWDV SDQGLOODV GHULYDGDV LQLFLDOPHQWH GH ODV SDQGLOODV FRQRFLGDV FRPR 6DOYDWUXFKD \ &DOOH DO VHU GHSRUWDGDV GHVGH ((88 D VXV SDtVHV GH RULJHQ KDQ FRQWURODGR XQ FRQMXQWR GH SDQGLOODV juveniles locales centroamericanas organizรกndolas en โ clickasโ (cรฉlulas de la pandilla) que operan principalmente en los paรญses del Triangulo del 1RUWH *XDWHPDOD (O 6DOYDGRU \ +RQGXUDV Tres caracterรญsticas de las maras las diferencian de las pandillas juveniles WUDGLFLRQDOHV 3RU XQD SDUWH VX RULJHQ GH OD PLJUDFLyQ \ GHSRUWDFLyQ IRU]DGD GHVGH /$ 6PXWW 0 &UX] - 0 En segundo lugar su expansiรณn mรกs allรก del barrio a nivel regional o nacional e internacional y con ella la extensiรณn de su red de actividades delicWLYDV $ SDUWLU GH HVWD H[SDQVLyQ 7ULiQJXOR GHO 1RUWH \ HQ IRUPD PHQRU VXU GH 0p[LFR \ 1LFDUDJXD VH WUDQVร HUH OD SHUWHQHQFLD H LGHQWLGDG EDUULDO TXH WUDGLFLRQDOPHQWH GHร QHQ ODV SDQGLOODV D XQ UHIHUHQWH pWQLFR \ D RWURV VLPEyOLFRV FRPR HO WDWXDMH OD YHVWLPHQWD R ORV WDJV R JUDIร WL En tercer lugar, el nivel organizacional mรกs vertical que aquel de la pandiOOD WUDGLFLRQDO \ IXQFLRQDO D OD DFWLYLGDG GHOLFWLYD TXH DVXPHQ QDUFRWUiร FR

22. Gestores locales: Actores que llevan a cabo la polรญtica de prevenciรณn en HO WHUULWRULR 'HEHQ SRVHHU FRQRFLPLHQWR GHO iUHD OLGHUD]JR \ FDSDFLGDG de convocatoria en el sector; ser capaces de conciliar miradas, posturas e intereses locales y saber traducir la polรญtica de prevenciรณn a la realidad LQPHGLDWD 23. Gobernabilidad: Este concepto se enmarca en el รกmbito de la โ capaciGDG GH JRELHUQRยต GH SURFHVDU Hร FD]PHQWH GHPDQGDV UHDOL]DGDV DO VLVWHPD polรญtico por parte de la ciudadanรญa, de una manera considerada como OHJtWLPD HQ HO PDUFR GH XQ HVWDGR GH GHUHFKR \ GHPRFUiWLFR &RPSUHQGH los mecanismos, los procesos y las instituciones, mediante los cuales los

27. Mapeo del Crimen: Tรฉcnica de anรกlisis que se basa en el examen de la distribuciรณn de los delitos en un territorio, en funciรณn de variables criminolรณgicas, reconociendo รกreas de mayor incidencia de delito o focos delicWXDOHV OODPDGDV ยดKRW VSRWVยต R ยด]RQDV FDOLHQWHVยต (Q OD DFWXDOLGDG H[LVWHQ programas informรกticos, conocidos como SIG (sistema de informaciรณn JHRJUiร FR TXH IDFLOLWDQ OD JHRUUHIHUHQFLDFLyQ GH VXFHVRV YLQFXODGRV D OD inseguridad y que se emplean en la elaboraciรณn de diagnรณstico, el diseรฑo \ OD HYDOXDFLyQ GH SROtWLFDV GH SUHYHQFLyQ

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GUĂ?A PARA LA PREVENCIĂ“N LOCAL - HACIA POLĂ?TICAS DE COHESIĂ“N SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

GHOLQFXHQFLD XUEDQD (VWD ~OWLPD FDUDFWHUtVWLFD KD LGR UHIRU]iQGRVH D UDt] GH OD HVWLJPDWL]DFLyQ \ UHSUHVLyQ SROLFLDO H[WUHPD GHVGH ´PDQR GXUDÂľ ´VXSHUPDQRÂľ GXUD WROHUDQFLD FHUR HWF \ HO SDVDMH GH PXFKRV “marerosâ€? por la cĂĄrcel, lo que radicaliza la dimensiĂłn “criminalâ€? de estas SDQGLOODV \ OHV FRQĂ€JXUD FDUDFWHUtVWLFDV GH RUJDQL]DFLyQ FDVL FODQGHVWLQD SDUD HYLWDU OD UHSUHVLyQ SROLFLDO &UX] - 0 29. Monitoreo: “Seguimiento sistemĂĄtico y periĂłdico de la ejecuciĂłn de una actividad, que busca determinar el grado en que su desenlace coincida FRQ OR SURJUDPDGR FRQ HO Ă€Q GH GHWHFWDU RSRUWXQDPHQWH GHĂ€FLHQFLDV REVWiFXORV \ R QHFHVLGDGHV GH DMXVWH GH OD HMHFXFLyQÂľ 81,&() 30. Objetivo: Descripciones objetivas y concisas de que se pretende alcanzar FRQ OD LQWHUYHQFLyQ TXH VH HVWi SODQHDQGR R HMHFXWDQGR /RV REMHWLYRV estĂĄn orientados a determinar la “metaâ€? que se quiere lograr en un determinado tiempo, por tanto, deben ir acotados a una realidad y tiempo GHWHUPLQDGRV 31. Observatorio municipal de seguridad: InstituciĂłn que se dedica a la investigaciĂłn operativa que permita soluciones concretas a los problemas de convivencia ciudadana en materia de seguridad al interior del territorio GHO PXQLFLSLR \ HQ FRODERUDFLyQ FRQ pO 32. Pandilla o gang de jĂłvenes: “Es una asociaciĂłn voluntaria de pares, XQLGRV SRU LQWHUHVHV FRPXQHV FRQ XQ OLGHUD]JR LGHQWLĂ€FDEOH \ XQD RUJDnizaciĂłn interna, que actĂşa colectivamente o como individuos para lograr algunos objetivos inclusive actividades ilegales y el control de un territoULR HTXLSDPLHQWR R QHJRFLRÂľ 0LOOHU Las pandillas suelen agrupar a jĂłvenes que se reĂşnen para defender el barrio contra la pandilla contraria, participar en actividades delictivas que reditĂşan en ganancias para la pandilla (generalmente usadas para el consumo de drogas o para entretenimiento) o simplemente para “pasarla bienâ€? y ser parte de un colectivo que, para muchos de ellos, representa su YHUGDGHUD IDPLOLD 7RGR HOOR WLHQH OXJDU HQ XQ HVSDFLR TXH VH FLUFXQVFULEH al barrio, la colonia o la comunidad en la que habitan los jĂłvenes de las FLXGDGHV PRGHUQDV 3ODQLĂ€FDFLyQ “Proceso consciente de selecciĂłn y desarrollo del meMRU FXUVR GH DFFLyQ SDUD ORJUDU HO REMHWLYR ,PSOLFD FRQRFHU HO REMHWLYR evaluar la situaciĂłn, considerar diferentes acciones que puedan realizarse y escoger la mejor, teniendo en cuenta la situaciĂłn actual y los factoUHV LQWHUQRV \ H[WHUQRV TXH SXHGHQ LQĂ XLU HQ HO ORJUR GH ORV REMHWLYRVÂľ -LPpQH] 34. Presupuesto participativo: Instrumento de decisiĂłn y gestiĂłn democrĂĄWLFD GHO XVR GH ORV UHFXUVRV S~EOLFRV R HVWDWDOHV (Q OD SUiFWLFD VH HPSOHD como un trabajo orientado hacia y para la comunidad, mediante el cual los vecinos deciden, con su propia iniciativa o voto, en quĂŠ invertir una SDUWH GH ORV UHFXUVRV PXQLFLSDOHV 5HSUHVHQWD SRU WDQWR XQ PHFDQLVPR de fortalecimiento de las relaciones Municipalidad - Comunidad, para la FR SURGXFFLyQ GH OD VHJXULGDG \ RWUDV SUREOHPiWLFDV 35. PolĂ­tica: DeclaraciĂłn verbal, escrita o implĂ­cita que orienta la toma de decisiones, permitiendo que distintas personas (empleados, funcionarios, HWF DGRSWHQ FXUVRV GH DFFLyQ VHPHMDQWHV FXDQGR DIURQWDQ HQ IRUPD LQdependiente situaciones parecidas (Diccionario de AdministraciĂłn PĂşbliFD &KLOHQD

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36. PolĂ­tica, DiseĂąo de: *HQHUDOPHQWH VH LGHQWLĂ€FDQ HWDSDV HQ OD IRUPXODFLyQ \ HMHFXFLyQ GH XQD SROtWLFD /D GHĂ€QLFLyQ GHO SUREOHPD /D IRUPXODFLyQ GH ODV DOWHUQDWLYDV GH VROXFLyQ /D HOHFFLyQ GH XQD DOWHUQDWLYD /D LPSODQWDFLyQ GH OD DOWHUQDWLYD HOHJLGD \ Ă€QDOPHQWH /D HYDOXDFLyQ GH ORV UHVXOWDGRV REWHQLGRV 7XGHOD 37. PolĂ­tica de prevenciĂłn: Lineamientos generales para el desarrollo de programas orientados al combate de los factores, causas y efectos que LQFLGHQ HQ HO DXPHQWR \ GHVDUUROOR GH OD GHOLQFXHQFLD \ OD YLROHQFLD 38. PolĂ­tica PĂşblica: La(s) polĂ­tica(s) puede(n) entenderse como un conjunto de cursos de acciĂłn, programas o proyectos que se ejecutan a travĂŠs de organismos pĂşblicos -del Estado que buscan intervenir en un ĂĄrea o HVSDFLR VRFLDO HQ EHQHĂ€FLR GH XQ Q~PHUR VLJQLĂ€FDWLYR GH SHUVRQDV HVWDbleciendo incentivos para acciĂłn colectiva entre aquellos que comparten PHWDV JRELHUQR \ FLXGDGDQtD (Q HVHQFLD HO FDUiFWHU ´S~EOLFRÂľ GH XQD polĂ­tica radica en su capacidad de abrir espacios de participaciĂłn que ayudan al empoderamiento (empowerment de la sociedad civil organizada), mĂĄs que en su publicitaciĂłn y su capacidad de responder a un problema R GHPDQGD VRFLDO H[WHQGLGD 7XGHOD 39. PolĂ­tica de seguridad: Conjunto articulado de criterios generales que establecen el marco de referencia para el desarrollo de una estrategia de reducciĂłn de la delincuencia y en la cual se establecen las herramientas y UHFXUVRV SDUD HO FXPSOLPLHQWR GH ORV REMHWLYRV SURSXHVWRV 40. PolĂ­tica de seguridad pĂşblica: Lineamientos generales del gobierno para lucha contra la delincuencia, generalmente centrada en el monopolio de la fuerza y el poder de las instituciones competentes para estas funcioQHV IXHU]DV SROLFLDOHV GH HQMXLFLDPLHQWR FULPLQDO \ HMHFXFLyQ SHQDO 41. PolĂ­tica de seguridad ciudadana: Nace como complemento a la visiĂłn estatista de la seguridad pĂşblica, que supone que el estado es el Ăşnico DJHQWH TXH GHEH YHODU SRU OD VHJXULGDG /D SROtWLFD GH FRSURGXFFLyQ LPplica la participaciĂłn de mĂşltiples actores, una aproximaciĂłn multicausal a la problemĂĄtica, y la construcciĂłn conjunta (gobierno-sociedad) de la VHJXULGDG VREUH XQ GHWHUPLQDGR WHUULWRULR 42. Presupuesto: (VWLPDFLyQ Ă€QDQFLHUD DQWLFLSDGD JHQHUDOPHQWH DQXDO de los egresos e ingresos necesarios para cumplir con las metas de los SURJUDPDV HVWDEOHFLGRV $VLPLVPR FRQVWLWX\H HO LQVWUXPHQWR RSHUDWLYR bĂĄsico que expresa las decisiones en materia de polĂ­tica econĂłmica y de SODQHDFLyQ 0LQLVWHULR GH (FRQRPtD GH &KLOH 43. PrevenciĂłn: Por prevenciĂłn del delito se entiende toda medida para atacar los factores causales del delito, incluidas las oportunidades para la FRPLVLyQ GH pVWRV 218 0iV DOOi GH ODV GLVWLQWDV IRUPDV GH FODVLĂ€FDFLyQ FRQVLGHUD XQD VLJQLĂ€FDWLYD YDULHGDG GH DFFLRQHV RULHQWDGDV D HYLWDU que el delito ocurra ya sea a travĂŠs del sistema formal de justicia criminal VLVWHPD RĂ€FLDO R ELHQ SRU PHGLR GH OD SURPRFLyQ H LPSOHPHQWDFLyQ GH estrategias que involucran a los diferentes sistemas informales (sistemas RĂ€FLRVRV (Q OD ~OWLPD GpFDGD KD DGTXLULGR WDQWD UHOHYDQFLD FRPR HO FRQtrol formal, por cuanto abre un espacio de actuaciĂłn a diferentes actores, a la luz de la necesidad de enfoques mĂĄs integrales y la aplicaciĂłn de estrategias e iniciativas en diferentes frentes, y la promociĂłn de la participaciĂłn activa de diversas instituciones del Estado, junto a organizaciones QR JXEHUQDPHQWDOHV \ OD FLXGDGDQtD PLVPD 7XGHOD


GLOSARIO

44. Prevenciรณn comunitaria: Enfoque que postula que la comunidad tamELpQ HV UHVSRQVDEOH GH VX VHJXULGDG 'H PRGR TXH ODV DFFLRQHV GHEHQ fortalecer los mecanismos de control informal y โ empoderarโ a la comuQLGDG SDUD FRQVHJXLU VROXFLRQHV Hร FDFHV GH VXV SUREOHPDV GH VHJXULGDG Experiencias de policรญa comunitaria, creaciรณn de comitรฉs de vigilancia, asรญ como el involucramiento de la comunidad en proyectos de corto alcance enfocados a la prevenciรณn social o situacional, son algunos ejemplos de HVWH WLSR GH SUHYHQFLyQ 7RFRUQDO ; 45. Prevenciรณn Situacional: Es aquella aproximaciรณn que involucra un amplio conjunto de medidas no penales tendientes a impedir el acto criPLQDO PHGLDQWH OD PRGLร FDFLyQ GH ODV FLUFXQVWDQFLDV SDUWLFXODUHV HQ ODV FXDOHV XQD VHULH GH GHOLWRV VLPLODUHV VH FRPHWHQ R SXHGHQ FRPHWHUVH Este enfoque asume que el delito existe porque existen factores ambientales, hรกbitos y conductas que crean oportunidades para que รฉste RFXUUD /DV SUHPLVDV IXQGDPHQWDOHV GH HVWD HVWUDWHJLD VRQ 5HGXFLU OD oportunidad para el crimen; incrementar el riesgo de detecciรณn y reducir ORV EHQHร FLRV GHO FULPHQ *HQHUDOPHQWH LQYROXFUD DFFLRQHV GLULJLGDV D disminuir oportunidades principalmente mediante prรกcticas disuasivas R GH UHGLVHxR GH HVSDFLRV ItVLFRV 7RUUHQWH 3UR\HFWRV GH UHFXperaciรณn de espacios pรบblicos, mejor iluminaciรณn, espacios deportivos, puntos de vigilancia natural o programas de patrullaje y vigilancia son DOJXQRV HMHPSORV

LQYROXFUDGDV LQVWDQFLDV GH FRRUGLQDFLyQ IXHQWHV GH ร QDQFLDPLHQWR \ HWDSDV GH HMHFXFLyQ 6RPV ( E 51. Proyecto: Conjunto de actividades interrelacionadas y coordinadas con HO ร Q GH DOFDQ]DU REMHWLYRV HVSHFtร FRV GHQWUR GH ORV OtPLWHV GH XQ GHWHUPLQDGR SUHVXSXHVWR \ GH XQ SHUtRGR GDGR 9DOOHVStQ 52. Recursos: Se puede entender como todo aquel insumo o bien que se disponga en un determinado momento y que pueda utilizarse en la conFUHFLyQ GH XQ GHWHUPLQDGR REMHWLYR SODQ R SUR\HFWR (VWRV SXHGHQ VHU humanos (personas, grupos de personas), materiales (infraestructurales, JHRJUiร FRV XUEDQRV ร QDQFLHURV WpFQLFRV SURIHVLRQDOHV Rร FLRV H[SHriencias), sociales (soportes o apoyos que se logran en los vรญnculos signiร FDWLYRV FRQ RWUDV SHUVRQDV RUJDQL]DFLRQHV R LQVWLWXFLRQHV VLPEyOLFRV KLVWyULFRV YDOyULFRV FXOWXUDOHV LGHQWLWDULRV 53. Rendiciรณn de cuenta: Traducciรณn mรกs plausible del concepto angloVDMyQ ยดDFFRXQWDELOLW\ยต 6H UHODFLRQD D OD SUHRFXSDFLyQ FRQWLQXD SRU FRQWUROHV \ FRQWUDSHVRV SRU OD VXSHUYLVLyQ \ OD UHVWULFFLyQ GHO SRGHU Contiene dos dimensiones bรกsicas: A) la obligaciรณn de polรญticos y funcioQDULRV GH LQIRUPDU VREUH VXV GHFLVLRQHV \ GH MXVWLร FDUODV HQ S~EOLFR % la capacidad de sancionar a polรญticos y funcionarios en caso de que hayan YLRODGR VXV GHEHUHV S~EOLFRV 6FKHGOHU $

46. Prevenciรณn Social: Estrategia dirigida a reducir las causas sociales del GHOLWR \ OD YLROHQFLD $VXPH TXH OD FULPLQDOLGDG SRVHH XQD HWLRORJtD FRPpleja que se enraรญza en profundos factores como las condiciones de vida o de trabajo, en los cambios en la organizaciรณn de la vida familiar, en OD SREUH]D \ HQ OD H[FOXVLyQ VRFLDO *HQHUDOPHQWH VH RULHQWD D IDFWRUHV estructurales relacionados con la pรฉrdida de los mecanismos de control VRFLDO \ VREUH JUXSRV GH ULHVJR 3URJUDPDV GH SUHYHQFLyQ WHPSUDQD GH OD YLROHQFLD LQWUDIDPLOLDU PHGLDFLyQ GH FRQร LFWRV HQ OD HVFXHOD R SURJUDPDV de nutriciรณn infantil, pueden ser algunos ejemplos de este tipo de prevenFLyQ &(6&

54. Sensaciรณn de inseguridad / temor a la delincuencia: Sentimiento de vulnerabilidad y desprotecciรณn ante la posibilidad de ser vรญctima de algรบn GHOLWR /D VHQVDFLyQ GH LQVHJXULGDG HVWi FRPSXHVWD WDQWR SRU XQ IDFWRU afectivo o emocional, el que podrรญa denominarse temor, y otro mรกs cognitivo y relacionado a la probabilidad de ser vรญctima que las personas perFLEHQ (QWUH ORV IDFWRUHV TXH LQร X\HQ VREUH OD SHUFHSFLyQ GH LQVHJXULGDG o delincuencia se puede citar: la experiencia directa, indirecta (vicaria), ORV PHGLRV GH FRPXQLFDFLyQ \ ODV FDUDFWHUtVWLFDV VRFLR GHPRJUiร FDV \ econรณmicas de la poblaciรณn y la percepciรณn de protecciรณn por parte de ODV DXWRULGDGHV ORFDOHV

47. Prevenciรณn primaria: Estรก dirigida a grupos de la poblaciรณn en general FRQ HO ร Q GH UHGXFLU IDFWRUHV GH ULHVJR \ DXPHQWDU GH ORV IDFWRUHV TXH SURWHJHQ D ODV SHUVRQDV GH VHU YtFWLPDV R YLFWLPDULRV )RUR GH ([SHUWRV HQ 6HJXULGDG &LXGDGDQD

55. Sustentabilidad: Capacidad de satisfacer las necesidades actuales sin poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer VXV SURSLDV QHFHVLGDGHV 218 ([LVWHQ GLVWLQWRV WLSR GH VXVWHQWDELOLGDG HQWUH ODV PiV FRQRFLGDV HVWD OD DPELHQWDO ร QDQFLHUD SROtWLFDV \ RUJDQL]DFLRQDO

48. Prevenciรณn secundaria: Es una estrategia de prevenciรณn destinada a evitar el desarrollo de conductas precursoras de la delincuencia y la violencia en grupos de alto riesgo de exhibir o desarrollar este tipo de conductas )RUR GH ([SHUWRV HQ 6HJXULGDG &LXGDGDQD 49. Prevenciรณn terciaria: Consiste en las acciones orientadas a manejar los hechos criminales y violentos luego de sucedidos para tratar al delincuente, reinsertarlo socialmente, disminuir los daรฑos producidos y evitar su UHLQFLGHQFLD (VWH WLSR GH SUHYHQFLyQ VH UHDOL]D FXDQGR HO VXMHWR \D KD desarrollado una carrera delictiva, y es por ello sinรณnimo de โ tratamienWRยต /D SUHYHQFLyQ WHUFLDULD WDPELpQ SXHGH WHQHU SRU REMHWLYR SULQFLSDO XQD RULHQWDFLyQ D OD YtFWLPD )RUR GH ([SHUWRV HQ 6HJXULGDG &LXGDGDQD

56. Tasa de victimizaciรณn: Porcentaje de la poblaciรณn que declara haber VLGR YtFWLPD GH XQ GHOLWR HQ XQ ODSVR GHWHUPLQDGR GH WLHPSR 6H OOHJD D conocer a travรฉs de una encuesta cara a cara y su cรกlculo da un conocimiento estimado de la envergadura de delitos que afectan a un nรบmero GH KRJDUHV FLUFXQVFULWRV D XQD SREODFLyQ HQ XQ WHUULWRULR 57. Violencia: Acciรณn deliberada que atenta contra la integridad tanto fรญsica FRPR SVLFROyJLFD \ PRUDO GH FXDOTXLHU SHUVRQD R JUXSR GH SHUVRQDV /D violencia comporta mรบltiples dimensiones como la fรญsica, la institucional, VLPEyOLFD HQWUH RWUDV < HVWD QR HV VLHPSUH SHQDOL]DGD MXUtGLFDPHQWH

50. Programa: Diseรฑo que expresa secuencias correlacionadas de proyectos \ DFFLRQHV TXH UHVSRQGHQ D REMHWLYRV GH GHVDUUROOR SUHHVWDEOHFLGRV 'LFKDV VHFXHQFLDV GHEHQ HVSHFLร FDU PHWDV SURFHGLPLHQWRV LQVWLWXFLRQHV

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BIBLIOGRAFÍA

$&(52 + /D VHJXULGDG FLXGDGDQD XQD UHVSRQVDELOLGDG GH ORV JRELHUQRV ORFDOHV HQ &RORPELD (Q '$00(57 / \ 3$8/6(1 * (G &LXGDG \ 6HJXULGDG HQ $PpULFD /DWLQD 85% ² $O S $&(52 + 8QD HVWUDWHJLD QDFLRQDO GH FRQYLYHQFLD \ VHJXULGDG FLXGDGDQD 3RQHQFLD HQ 6DQWLDJR GH &KLOH VREUH VHJXULGDG \ SROLFtD 1R SXEOLFDGR $/&$/'Ì$ '( 0('(//Ì1 'HO PLHGR D OD HVSHUDQ]D $OFDOGtD GH 0HGHOOtQ &RORPELD $/'$ ( \ %(/,= * ¢&XiO HV OD VDOLGD" /D DJHQGD LQFRQFOXVD GH OD VHJXULGDG FLXGDGDQD %DQFR ,QWHUDPHULFDQR GH 'HVD UUROOR :DVKLQJWRQ ' & $55,$*$'$ , \ +23(1+$<1 0 2FWXEUH 3URGXFFLyQ WUiÀFR \ FRQVXPR GH GURJDV HQ $PpULFD /DWLQD &(3$/ 6HULH 3ROtWLFDV 6RFLDOHV 1 $55,$*$'$ , \ *2'2< / 6HJXULGDG FLXGDGDQD \ YLROHQFLD HQ $PpULFD /DWLQD GLDJQyVWLFR \ SROtWLFD HQ ORV DxRV QR YHQWD 6HULH GH SROtWLFDV VRFLDOHV 1 6DQWLDJR GH &KLOH &(3$/ %$5 &(1'Ð1 $ (O OLEUR %ODQFR OD *REHUQDQ]D (XURSHD \ OD UHIRUPD GH OD 8QLyQ 0DGULG %$58'< - 0DOWUDWR ,QIDQWLO (FRORJtD 6RFLDO 3UHYHQFLyQ \ 5HSDUDFLyQ (G *DOGRF &KLOH %($72 & 3URGXFFLyQ \ XVR GH LQIRUPDFLRQHV \ GLDJQyVWLFRV HQ VHJXULGDG XUEDQD 'HSDUWDPHQWR GH )LQDQ]DV 6HFWRU 3ULYDGR H ,QIUDHVWUXFWXUD SDUD $PpULFD /DWLQD GHO %DQFR 0XQGLDO :DVKLQJWRQ ' & %,' 2ÀFLQD GH (YDOXDFLyQ ´+DFLD OD WUDQVIRUPDFLyQ GHO VLVWHPD GH HYDOXDFLyQµ GRFXPHQWR GH WUDEDMR %DQFR ,QWHUDPH ULFDQR GH 'HVDUUROOR :DVKLQJWRQ ' & %,' 2ÀFLQD GH (YDOXDFLyQ (YDOXDFLyQ XQD KHUUDPLHQWD GH JHVWLyQ SDUD PHMRUDU HO GHVHPSHxR GH ORV SUR\HFWRV %DQFR ,QWHUDPHULFDQR GH 'HVDUUROOR :DVKLQJWRQ ' & %25-$ - (VSDFLR S~EOLFR \ HVSDFLR SROtWLFR (Q '$00(57 / (G 6HJXULGDG FLXGDGDQD H[SHULHQFLDV \ GHVDItRV 85% ² $O S &$0,f$6 / \ 'Ì$= * (VWXGLR GH ODV FRQGLFLRQHV VRFLR HVWUXFWXUDOHV SDUD OD FRSURGXFFLyQ H[LWRVD GH OD VHJXULGDG HQ WHUULWRULRV PDUJLQDOHV HO FDVR GH OD IDYHOD &DYDOmR 0LPHR 8QLYHUVLGDG $OEHUWR +XUWDGR \ 218 +$%,7$7 52/$& 5tR GH -DQHLUR &$55,Ð1 ) /D LQVHJXULGDG FLXGDGDQD HQ OD FRPXQLGDG DQGLQD (Q '$00(57 / (G 6HJXULGDG FLXGDGDQD H[SHULHQ FLDV \ GHVDItRV 85% ² $O S &$55,Ð1 ) \ 18f(= 9(*$ - /D LQVHJXULGDG HQ OD FLXGDG +DFLD XQD FRPSUHQVLyQ GH OD SURGXFFLyQ VRFLDO GHO PLHGR (Q 5HYLVWD (85( 6DQWLDJR GH &KLOH 9RO ;;;,, 1 S &(-$ ² (VWXGLR %,' ² 3 7XGHOD &(/$'( %ROHWtQ 'HPRJUiÀFR 1 6DQWLDJR GH &KLOH &(3$/ /D MXYHQWXG HQ ,EHURDPpULFD 7HQGHQFLDV \ XUJHQFLDV 6DQWLDJR GH &KLOH &(3$/ $QXDULR HVWDGtVWLFR GH $PpULFD /DWLQD \ HO &DULEH 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZHEVLH HFODF FO DQXD ULRBHVWDGLVWLFR DQXDULRB HVS LQGH[ DVSµ KWWS ZHEVLH HFODF FO DQXDULRBHVWDGLVWLFR DQXDULRB HVS LQGH[ DVS &(3$/ 3DQRUDPD 6RFLDO GH $PHULFD /DWLQD 6DQWLDJR &(3$/ \ 25*$1,=$&,Ð1 ,%(52$0(5,&$1$ '( -89(178' 2,- -XYHQWXG \ FRKHVLyQ VRFLDO HQ ,EHURDPpULFD 8Q PRGHOR SDUD DUPDU &(3$/ 2,- &(6& &HQWUR GH HVWXGLRV HQ 6HJXULGDG &LXGDGDQD &RPXQLWDULD 3UHYHQFLyQ %ROHWtQ 1 &(6& 6DQWLDJR GH &KLOH &/$5.( 5 6LWXDWLRQDO FULPH SUHYHQWLRQ +DUURZ DQG +HVWRQ 1HZ <RUN &,0$ %$5Ð0(752 ,%(52$0(5,&$12 %DUyPHWUR GH *REHUQDELOLGDG /DWLQRDPHULFDQR \ GH OD 3HQtQVXOD ,EpULFD 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ FLPDLEHURDPHULFD FRP µ KWWS ZZZ FLPDLEHURDPHULFD FRP &2+(1 \ )(/621 6RFLDO FKDQJH DQG FULPH UDWH WUHQGV $ URXWLQH DFWLYLW\ DSSURDFK (Q :DVKLQJWRQ ' & $PHULFDQ 6RFLRORJLFDO $VVRFLDWLRQ $PHULFDQ 6RFLRORJLFDO 5HYLHZ 1 S &2+(1 ( \ 0$57Ì1(= 5 )RUPXODFLyQ HYDOXDFLyQ \ PRQLWRUHR GH SUR\HFWRV VRFLDOHV 'LYLVLyQ GH 'HVDUUROOR 6RFLDO &(3$/ &20,7e '( $6,67(1&,$ 3$5$ (/ '(6$552//2 2(&' 3ULQFLSLRV GH (YDOXDFLyQ GH $VLVWHQFLD SDUD HO 'HVD UUROOR 2(&' 3DULV

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&25325$&,Ð1 /$7,12%$5Ð0(752 ,QIRUPH /DWLQREDUyPHWUR %DQFR GH 'DWRV HQ /tQHD +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ ODWLQREDURPHWUR RUJµ ZZZ ODWLQREDURPHWUR RUJ 6DQWLDJR GH &KLOH &58= - 0 HGLW 0DUDV \ SDQGLOODV HQ &HQWURDPpULFD ODV UHVSXHVWDV GH OD VRFLHGDG FLYLO RUJDQL]DGD 9ROXPHQ ,9 8&$ (GLWRUHV (O 6DOYDGRU &6,5 1$7,21$/ &5,0( 35(9(17,21 &(175( $ PDQXDO IRU &RPPXQLW\ %DVHG &ULPH 3UHYHQWLRQ 3UHWRULD ÉIULFD GHO 6XU 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ FVLU FR ]Dµ ZZZ FVLU FR ]D '$00(57 / (G 6HJXULGDG FLXGDGDQD H[SHULHQFLDV \ GHVDItRV 85% ² $O '$00(57 / \ 3$8/6(1 * (GV &LXGDG \ VHJXULGDG HQ $PpULFD /DWLQD 85% ² $O '$00(57 / \ $5,$6 3 (O GHVDItR GH OD GHOLQFXHQFLD HQ $PpULFD ODWLQD GLDJQyVWLFR \ UHVSXHVWDV GH SROtWLFDV (Q '$ 00(57 / \ =Óf,*$ / (GV 6HJXULGDG \ YLROHQFLD GHVDItRV SDUD OD FLXGDGDQtD )/$&62 S '( /8&$ 0,., 5 'LDGHPD SURPRYLHQGR OD FXOWXUD GH OD SD] (Q &LXGDGHV VHJXUDV SDUD FRQYLYLU 318' 6DQ 6DOYDGRU S ', 7(//$ 5 *$/,$12 6 \ 6&+$5*52'6.< ( ´&ULPHQ SURWHFFLyQ \ GLVWULEXFLyQ GHO LQJUHVR ¢4XLpQHV VRQ ODV SULQFLSDOHV YtFWLPDV GHO DXPHQWR GH OD FULPLQDOLGDG"µ (Q &DQDYHVH $ &RUQEOLW 2 \ 6FKDUJURGVN\ ( HGV &RUUXSFLyQ &ULPHQ \ 9LROHQFLD (GLFLRQHV /D &UXMtD (5,& ,'(62 ,',(6 ,8'23 0DUDV \ SDQGLOODV HQ &HQWURDPpULFD SDQGLOODV \ FDSLWDO VRFLDO 9ROXPHQ ,, 8&$ (GLWRUHV (O 6DOYDGRU (6%(16(1 ) $ 3UHYHQWLQJ $GROHVFHQW *DQJ ,QYROYHPHQW -XYHQLOH -XVWLFH %XOOHWLQ 2IÀ FH RI -XYHQLOH -XVWLFH DQG 'H OLQTXHQF\ 3UHYHQWLRQ 2--'3 86 'HSDUWPHQW RI -XVWLFH (:$/' 8 &ULPLQDO YLFWLPL]DWLRQ DQG VRFLDO DGDSWDWLRQ LQ PRGHUQLW\ IHDU RI FULPH DQG ULVN SHUFHSWLRQ LQ WKH QHZ *HU PDQ\ (Q +23( 7 DQG 63$5.6 5 (GV &ULPH ULVN DQG LQVHFXULW\ 5RXWOHGJH /RQGRQ S )(51É1'(= & ´$FWRUHV HQ OD FRQVWUXFFLyQ GH HVSDFLR S~EOLFRVµ :RUN LQ SURJUHVV 3UR\HFWR 85% ² $O ´(VSDFLRV S~EOLFRV \ FRKHVLyQ VRFLDO µ )(51É1'(= , ,QIRUPH VREUH YLROHQFLD FRQWUD ODV PXMHUHV HQ ODV UHODFLRQHV GH SDUHMD &,3& \ 8QLYHUVLGDG $ +XUWDGR 0LPHR )(51É1'(= 9,//$=$/$ 7 /D PHGLFLyQ GHO GHOLWR HQ OD VHJXULGDG S~EOLFD '\NLQVRQ 0DGULG )252 '( (;3(5726 (1 6(*85,'$' &,8'$'$1$ 'LDJQyVWLFR GH OD 6HJXULGDG &LXGDGDQD HQ &KLOH 0LQLVWHULR GHO ,QWHULRU 6DQWLDJR GH &KLOH )252 (8523(2 3$5$ /$ 6(*85,'$' 85%$1$ )(68 *XtD VREUH ODV DXGLWRUtDV ORFDOHV GH VHJXULGDG 6pFXULWp 3XEOLTXH &DQDGi )5h+/,1* + ´'RV GpFDGDV GH UHIRUPD SROLFLDO HQ $PpULFD /DWLQD IDFWRUHV SDUD VX p[LWR R IUDFDVRµ (Q $OGD ( \ %HOL] * (GLW ¢&XiO HV OD VDOLGD" 1HZ <RUN %,' SS )81'$&,Ð1 3$= &,8'$'$1$ &RQVXPR GH GURJDV HQ GHWHQLGRV 6DQWLDJR )XQGDFLyQ 3D] &LXGDGDQD *$5&Ì$ 3$%/26 '( 02/,1$ $ 7UDWDGR GH FULPLQRORJtD 7LUDQW /R %ODQFK 9DOHQFLD *2))0$1 ( ,QWHUQDGRV (QVD\RV VREUH OD VLWXDFLyQ VRFLDO GH ORV HQIHUPRV PHQWDOHV $PRUURUWX %XHQRV $LUHV *28%$8' ( 0DUDV \ SDQGLOODV HQ &HQWURDPpULFD 859,2 5HYLVWD /DWLQRDPHULFDQD GH 6HJXULGDG &LXGDGDQD 1 0D\R SS ² *5832 :+242/ ´¢3RU TXp FDOLGDG GH YLGD"µ (Q )RUR PXQGLDO GH OD VDOXG *LQHEUD 206 +$*('251 - 0 *DQJV LQ ODWH 0RGHUQLW\ LQ +DJHGRUQ HG *DQJV LQ 7KH *OREDO &LW\ $OWHUQDWLYHV WR 7UDGLWLRQDO &UL PLQRORJ\ 8QLYHUVLW\ RI ,OOLQRLV 3UHVV S +(51É1'(= /25(6 0 /RV REVHUYDWRULRV GH OD VHJXULGDG HQ ORV PXQLFLSLRV \ ODV SROtWLFDV GH VHJXULGDG (Q $51$8 '2 \ 0$57Ì1 (GV &RQVROLGDFLyQ GH ORV JRELHUQRV ORFDOHV HQ VHJXULGDG FLXGDGDQD )RUPDFLyQ \ SUiFWLFD 85% ² $O \ 5HJLyQ 7RVFDQD S +23( 7 DQG 63$5.6 5 &ULPH ULVN DQG LQVHFXULW\ 5RXWOHGJH /RQGRQ ,167,7872 ,17(5$0(5,&$12 '(/ 1,f2 ,,1 /D SURWHFFLyQ GH ORV GHUHFKRV GH ORV QLxRV QLxDV \ DGROHVFHQWHV IUHQWH D OD YLROHQFLD VH[XDO 0RQWHYLGHR 8UXJXD\ -$*25< ¢,V WKLV RXU FLW\" PDSSLQJ VDIHW\ IRU ZRPHQ LQ 'HOKL 1HZ 'HOKL

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BIBLIOGRAFÍA

218 +$%,7$7 E /RFDO &ULPH 3UHYHQWLRQ 7ROONLW 1DLUREL .HQLD 218 +$%,7$7 6WDWH RI WKH :RUOG·V &LWLHV +DUPRQLRXV &LWLHV /RQGRQ (DUWKVFDQ 25*$1,=$&,Ð1 3$1$0(5,&$1$ '( /$ 6$/8' 236 /D YLROHQFLD MXYHQLO HQ ODV $PpULFDV :DVKLQJWRQ ' & 25*$1,=$&,Ð1 3$1$0(5,&$1$ '( /$ 6$/8' 236 6LWXDFLyQ GH VDOXG HQ ODV $PpULFDV LQGLFDGRUHV EiVLFRV :DVKLQJWRQ ' & 3$8/6(1 * &ODYHV SDUD HO EXHQ JRELHUQR GH OD VHJXULGDG (Q '$00(57 / \ 3$8/6(1 * (GV &LXGDG \ VHJXULGDG HQ $PpULFD /DWLQD 9DOSDUDtVR 5HG 85% ² $O , 0XQLFLSDOLGDG GH 9DOSDUDtVR )/$&62 S 3(5($ & 0 3DQGLOODV PXHUWH \ VHQWLGR 859,2 5HYLVWD /DWLQRDPHULFDQD GH 6HJXULGDG &LXGDGDQD 1 0D\R SS ² 318' (O FRVWR HFRQyPLFR GH OD YLROHQFLD HQ *XDWHPDOD 3URJUDPD GH ODV 1DFLRQHV 8QLGDV SDUD HO 'HVDUUROOR *XDWHPD OD 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ XQGS RUJ JW GDWD SXEOLFDFLRQ &RVWRV (FRQ & % PLFRV GH OD 9LROHQFLD SGI µ KWWS ZZZ XQGS RUJ JW GDWD SXEOLFDFLRQ &RVWRV (FRQ & % PLFRV GH OD 9LROHQFLD SGI 3257Ð1 ' 3ROtWLFDV S~EOLFDV HQ VHJXULGDG FLXGDGDQD HO FDVR GH 4XLWR (Q '$00(57 / (G 6HJXULGDG FLXGDGDQD H[SHULHQFLDV \ GHVDItRV 9DOSDUDtVR 5HG 85% ² $O , 0XQLFLSDOLGDG GH 9DOSDUDtVR S 352*5$0$ '( *(67,Ð1 85%$1$ 3*8 0XQLFLSLRV HQIUHQWDQGR OD YLROHQFLD FRQWUD ODV PXMHUHV 4XLWR (FXDGRU 3257(6 $ 52%(576 % \ *5,0621 $ &LXGDGHV ODWLQRDPHULFDQDV 8Q DQiOLVLV FRPSDUDWLYR HQ HO XPEUDO GHO QXHYR VLJOR 3URPHWHR %XHQRV $LUHV 38/(5:,7= - %$5.(5 * 6(*81'2 0 1$6&,0(172 0 3URPRYHQGR QRUPDV H FRPSRUWDPHQWRV HTXLWDWLYRV GH JrQHUR HQWUH KRPHQV MRYHQV FRPR HVWUDWpJLD GH SUHYHQomR GR +,9 $,'6 +RUL]RQV )LQDO 5HSRUW 3RSXODWLRQ &RXQFLO :DV KLQJWRQ ' & 5$( 5HDO $FDGHPLD (VSDxROD 'LFFLRQDULR GH OD OHQJXD HVSDxROD 9LJpVLPD VHJXQGD HGLFLyQ 'LVSRQLEOH HQ +<3(5 /,1. ´KWWS ZZZ UDH HV µ KWWS ZZZ UDH HV 7RPDGR HO GH HQHUR GH 5$,1(52 / +HUUDPLHQWDV SDUD OD SURPRFLyQ GH FLXGDGHV VHJXUDV GHVGH OD SHUVSHFWLYD GH JpQHUR &HQWUR GH LQWHUFDPELRV \ VHUYLFLRV FRQR VXU $UJHQWLQD &,6&6$ 5$026 6 -XYHQWXG \ OD SROLFtD %ROHWtQ GH VHJXULGDG \ FLXGDGDQtD &HQWUR GH (VWXGLR HQ 6HJXULGDG 3~EOLFD \ &LXGDGDQtD &(6H& 8QLYHUVLGDGH &DQGLGR 0HQGHV 5LR GH -DQHLUR 5$8 0 3UHYHQFLyQ VLWXDFLRQDO HQ $PpULFD ODWLQD \ HO &DULEH (Q $/'$ ( \ %(/,= * (GV ¢&XDO HV OD VDOLGD" /D DJHQGD LQFRQFOXVD GH OD VHJXULGDG FLXGDGDQD %,' S 5(*8,//2 5 /DV PXWLOHV IURQWHUDV GH OD YLROHQFLD MyYHQHV ODWLQRDPHULFDQRV HQWUH OD SUHFDUL]DFLyQ \ HO GHVHQFDQWR 3HQ VDPLHQWR LEHURDPHULFDQR QR 0DGULG &H$OFL )XQGDFLyQ &DUROLQD 52'5Ì*8(= ( 3ROtWLFDV S~EOLFDV \ PDUFRV OHJDOHV SDUD OD SUHYHQFLyQ GH OD YLROHQFLD UHODFLRQDGD FRQ DGROHVFHQWHV \ My YHQHV HVWDGR GHO DUWH HQ $PpULFD ODWLQD 7H[WR SUHSDUDGR HQ HO PDUFR GHO SUR\HFWR ´)RPHQWR GHO 'HVDUUROOR -XYHQLO \ 3UHYHQFLyQ GH OD 9LROHQFLDµ LPSOHPHQWDGR SRU OD 236 \ OD *7= HQ 6HLV 3DtVHV GH $PpULFD /DWLQD 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ SDKR RUJ VSDQLVK DG IFK FD VD SROLWLFDV SGI µ KWWS ZZZ SDKR RUJ VSDQLVK DG IFK FD VD SROLWLFDV SGI 52-$6 ) 1RWDV VREUH *REHUQDELOLGDG H ,QVWLWXFLRQDOLGDG 'HPRFUiWLFD (Q 720$6,1, (G ¢4Xp HVSHUD OD VRFLHGDG GHO JRELHUQR" &HQWUR GH $QiOLVLV GH 3ROtWLFDV 3~EOLFDV $VRFLDFLyQ FKLOHQD GH &LHQFLD 3ROtWLFD 6DQWLDJR GH &KLOH 58,= - & 9LROHQFLDV HQ EDUULRV FUtWLFRV HQ 6DQWLDJR 7HVLV SDUD RSWDU DO *UDGR GH 0DJtVWHU HQ 'HVDUUROOR 8UEDQR 3RQWLÀFLD 8QLYHUVLGDG &DWyOLFD GH &KLOH 6DQWLDJR GH &KLOH 58,= - & \ 9$1'(56&+8(5(1 ) %DVH FRQFHSWXDO GH OD VHJXULGDG (Q $51$8/'2 5 \ 0$57,1 / (GV &RQ VROLGDFLyQ GH ORV JRELHUQRV ORFDOHV HQ VHJXULGDG FLXGDGDQD 5HG 85% ² $O 5HJLyQ 7RVFDQD S 6$/$=$5 $ /D VHJXULGDG \ FRQYLYHQFLD HQ HO HVFHQDULR PXQLFLSDO HO FDVR GH 0HGHOOtQ (Q &LXGDGHV VHJXUDV SDUD FRQYLYLU 318' 6DQ 6DOYDGRU S 6(&5(7$5Ì$ '( *2%,(512 68%6(&5(7$5Ì$ '( $681726 3$5$ /$ &219,9(1&,$ < 6(*85,'$' &,8'$ '$1$ ',5(&&,Ð1 '( 6(*85,'$' ([SHULHQFLDV \ GHVDItRV HQ %RJRWi )RUWDOHFLHQGR OD VHJXULGDG GHVGH OR ORFDO %RJRWi &RORPELD 6(1 $ \ ./,.6%(5* % 3ULPHUR OD JHQWH 'HXVWR %DUFHORQD 6+$: 0$5*$5(7 7KH UROH RI ORFDO JRYHUQPHQW LQ FRPPXQLW\ VDIHW\ 86 'HSDUWPHQW RI -XVWLFH %XUHDX RI -XVWLFH $VVLVWDQFH DQG &,3&

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GUÍA PARA LA PREVENCIÓN LOCAL - HACIA POLÍTICAS DE COHESIÓN SOCIAL Y SEGURIDAD CIUDADANA

60$281 6 9LROHQFLD XUEDQD FRQWUD OD PXMHU DQiOLVLV GHO SUREOHPD GHVGH OD SHUVSHFWLYD GH JpQHUR 3URJUDPD GH *HVWLyQ 8UEDQD 218 +$%,7$7 60877 0 \ 0,5$1'$ - (O IHQyPHQR GH ODV SDQGLOODV HQ (O 6DOYDGRU 81,&() )/$&62 68É5(= $ ´*REHUQDELOLGDG DOJXQRV HQIRTXHV DSUR[LPDFLRQHV \ GHEDWHV DFWXDOHVµ 3DSHU 9,, &RQJUHVR ,QWHUQDFLRQDO GHO &/$' VREUH OD 5HIRUPD GHO (VWDGR \ GH OD $GPLQLVWUDFLyQ 3~EOLFD /LVERD 3RUWXJDO 7,//(< 1 (G (YDOXDWLRQ IRU WKH &ULPH 3UHYHQWLRQ &ULPLQDO -XVWLFH 3UHVV 0RQVH\ 1< 7255(17( ' 'HVYLDFLyQ \ 'HOLWR (GLWRULDO $OLDQ]D &LHQFLDV 6RFLDOHV 0DGULG 78'(/$ 3 /(1= $ \ &$0326 - 7DOOHU VREUH XVRV \ DSOLFDFLRQHV GH VLVWHPDV GH LQIRUPDFLyQ JHRUUHIHUHQFLDGR 6,* HQ &KLOH \ %UDVLO %DQFR ,QWHUDPHULFDQR GH 'HVDUUROOR :DVKLQJWRQ ' & 78'(/$ 3 3URSXHVWD GH 0DUFR &RQFHSWXDO SDUD HO (VWXGLR GH 3ROtWLFDV 3~EOLFDV GH 6HJXULGDG &LXGDGDQD /RV FD VRV GH $UJHQWLQD &KLOH \ 8UXJXD\ 5* 3 %DQFR ,QWHUDPHULFDQR GHO 'HVDUUROOR :DVKLQJWRQ 'LVSRQLEOH HQ +<3(5 /,1. ´KWWS LGEGRVF LDGE RUJ ZVGRFV JHWGRFXPHQW DVS["GRFQXP µ KWWS LGEGRVF LDGE RUJ ZVGRFV JHWGRFXPHQW DVS["GRFQXP 78'(/$ 3 1DWXUDOH]D \ PDJQLWXG GH ORV SUREOHPDV GH YLROHQFLD GHOLFWXDO H LQVHJXULGDG HQ $PpULFD /DWLQD \ HO &DULEH 7DOOHU ´/D 9LROHQFLD HQ $PpULFD /DWLQD \ HO &DULEH /HFFLRQHV \ 3HUVSHFWLYDVµ %DQFR ,QWHUDPHULFDQR GH 'HVDUUROOR :DVKLQJWRQ VHSWLHPEUH GH 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ LDGE RUJ ,'%'RFV FIP"GRFQXP µ KWWS ZZZ LDGE RUJ ,'%'RFV FIP"GRFQXP 78'(/$ 3 &RPSRQHQWHV SDUD HO GLVHxR H LPSOHPHQWDFLyQ GH SROtWLFDV GH VHJXULGDG 9DORUL]DFLyQ GH OD H[SHULHQFLD LQ WHUQDFLRQDO (VWXGLRV 3ROLFLDOHV 5HYLVWD GH OD $FDGHPLD 6XSHULRU GH (VWXGLRV 3ROLFLDOHV 1 3ROLFtD GH ,QYHVWLJDFLRQHV GH &KLOH 6DQWLDJR GH &KLOH S 81,&() *XtD GH 81,&() SDUD 0RQLWRUHR \ (YDOXDFLyQ ¢PDUFDQGR XQD GLIHUHQFLD" 81,&() 2ÀFLQD GH (YDOXDFLyQ 1HZ <RUN 81,9(56,'$' $/%(572 +857$'2 3ULPHU LQIRUPH QDFLRQDO GH YLROHQFLD HQ HO iPELWR HVFRODU 0LQLVWHULR GHO ,QWH ULRU 8$+ ,QpGLWR 86$,' &HQWUDO $PHULFD DQG 0H[LFR *DQJ $VVHVVPHQW 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ XVDLG JRY ORFDWLRQV ODWLQBDPHULFDBFDULEEHDQ GHPRFUDF\ JDQJV KWPOµ KWWS ZZZ XVDLG JRY ORFDWLRQV ODWLQBDPHULFDBFDULEEHDQ GHPRFUDF\ JDQJV KWPO 9$1'(56&+8(5(1 ) D /HFFLRQHV FDQDGLHQVHV GH SUHYHQFLyQ GH OD FULPLQDOLGDG (Q 5HYLVWD 3HUVRQD \ 6RFLHGDG 9RO ;;, 1 DJRVWR 8QLYHUVLGDG $ +XUWDGR 6DQWLDJR GH &KLOH S 9$1'(56&+8(5(1 ) E -XYHQWXG \ YLROHQFLD HQ $PpULFD ODWLQD (Q $/'$ ( \ %(/,= * (GV ¢&XiO HV OD VDOLGD" /D DJHQGD LQFRQFOXVD GH OD VHJXULGDG FLXGDGDQD %,' S 9$1'(56&+8(5(1 ) /81(&.( $ \ (,660$1 , F 0RGHORV GHPRFUiWLFRV GH SUHYHQFLyQ GHO GHOLWR $QiOLVLV GH H[SHULHQFLDV H[LWRVDV &ROHFFLyQ 'HUHFKR \ 3ROtWLFDV 3~EOLFDV 8QLYHUVLGDG $OEHUWR +XUWDGR 6DQWLDJR GH &KLOH 9$1 ',-. - 7KH ,&96 DQG %H\RQG 'HYHORSLQJ D FRPSUHKHQVLYH VHW RI &ULPH ,QGLFDWRUV 'LVSRQLEOH HQ +<3(5/,1. ´KWWS ZZZ WLOEXUJXQLYHUVLW\ QO LQWHUYLFW QHZV VSHHFK SGI µ KWWS ZZZ WLOEXUJXQLYHUVLW\ QO LQWHUYLFW QHZV VSHHFK SGI 9(/É648(= ( /D JRYHUQDQFH GH OD VHJXULGDG FLXGDGDQD (Q $51$8/'2 5 \ 0$57,1 / (GV &RQVROLGDFLyQ GH ORV JRELHUQRV ORFDOHV HQ VHJXULGDG FLXGDGDQD 85% ² $O 5HJLyQ 7RVFDQD S :$,/6(/),6= - 0RUWHV PDWDGDV SRU DUPDV GH IRJR 81(6&2 %UDVLOLD ') :$/06/(< 5 :RUOG 3ULVRQ 3RSXODWLRQ /LVW VL[WK HGLWLRQ /RQGUHV ,QWHUQDWLRQDO &HQWUH IRU 3ULVRQ 6WXGLHV .LQJ·V &R OOHJH /RQGRQ ² 6FKRRO RI /DZ

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