A N T O L O G Í A DE LA MATERIA
TEORÍA MONETARIA INTERNACIONAL.
TEORIA MONETARIA DEL COMERCIO EXTERIOR Índice 2.1. LA BALANZA DE PAGOS 2.1.1. Concepto 2.1.2. Composición de la balanza de pagos 2.1.3. Cuentas balanza de pagos 2.1.4. Superávit y déficit 2.1.5. Los pagos internacionales 2.1.6. La balanza de pagos y los flujos de capital 2.2. EL MERCADO DE DIVISAS 2.2.1. El sistema de determinación del tipo de cambio 2.2.2. Tipos de cambio múltiples 2.2.3. Mercado negro y mercados paralelos 2.2.4. Tamaño del mercado 2.2.5. Participantes en el mercado 2.2.6. La mecánica del mercado de divisas 2.2.7. Segmentos del mercado de divisas 2.3. EL SISTEMA MONETARIO INTERNACIONAL 2.3.1. Fondo Monetario Internacional 2.3.2. Banco Mundial 2.3.3. Banco Interamericano de Desarrollo 2.3.4. Organización Mundial de Comercio
2.1. LA BALANZA DE PAGOS 2.1.1. CONCEPTO La relación entre la cantidad de dinero que un país gasta en el extranjero y la cantidad que ingresa de otras naciones. El concepto de balanza de pagos no sólo incluye el comercio de bienes y servicios, sino también el movimiento de otros capitales, como la ayuda al desarrollo, las inversiones extranjeras, los gastos militares y la amortización de la deuda pública. Las naciones tienen que equilibrar sus ingresos y gastos a largo plazo con el fin de mantener una economía estable, pues, al igual que los individuos, un país no puede estar eternamente en deuda. Una forma de corregir un déficit de balanza de pagos es mediante el aumento de las exportaciones y la disminución de las importaciones, y para lograr este objetivo suele ser necesario el control gubernamental. Por ejemplo, un gobierno puede devaluar su moneda para lograr que los bienes nacionales sean más baratos fuera y de este modo hacer que las importaciones se encarezcan El término balanza de pagos puede también aludir al registro contable de todas las transacciones económicas internacionales realizadas por un país en un periodo de tiempo determinado (normalmente un año) 2.1.2. COMPOSICION DE LA BALANZA DE PAGOS Cuenta corriente Balanza Comercial
Balanza de Servicios Balanza de Transferencias Cuenta capitales Inversión Extranjera directa Inversión Extranjera Indirecta Cuenta saldo reserva monetaria internacional
2.1.3. CUENTAS BALANZA DE PAGOS La balanza de pagos es el registro de las transacciones de los residentes de un país con el resto del mundo. Hay dos cuentas principales en la balanza de pagos: la cuenta corriente y la cuenta capital. La cuenta corriente registra el intercambio de bienes y servicio, así como las transferencias. Los servicios son los fletes, los pagos de royalties y los pagos de intereses. Las transferencias consisten en las remesas, las donaciones y las ayudas. Hablamos de superávit por cuenta corriente si las exportaciones son mayores que las importaciones más las transferencias netas a los extranjeros, es decir, si los ingresos procedentes del comercio de bienes y servicios y de las transferencias son mayores que los pagos por estos conceptos. La balanza comercial registra simplemente el comercio de bienes. Si se añade el comercio de servicios y las transferencias, llegamos a la balanza por cuenta corriente. La cuenta de capital registra las compras y ventas de activos, como las acciones, los bonos y la tierra. Hay un superávit por cuenta de capital, o una entrada neta de capitales, cuando nuestros ingresos procedentes de la venta de acciones, bonos, tierra, depósitos bancarios y otros activos, son mayores que nuestros pagos debidos a nuestras compras de activos extranjeros. 2.1.4. SUPERAVIT Y DEFICIT La regla básica para la elaboración de las cuentas de la balanza de pagos es que cualquier transacción que dé lugar a un pago por parte de los residentes de un país es una rúbrica de déficit. Así pues, las importaciones de automóviles, la utilización de barcos extranjeros, los regalos a extranjeros o los depósitos en un banco en Suiza, son todas rúbricas de déficit. Serían rúbricas de superávit, por el contrario, las ventas de aviones americanos al extranjero, los pagos hechos por extranjeros para adquirir licencias de los EEUU con objeto de utilizar tecnología americana, las pensiones procedentes del exterior recibidas por los residentes de un país. RELACIONES ECONOMICAS INTERNACIONALES Página 4 La balanza de pagos global es la suma de las cuentas corrientes y de capital. Si tanto la cuenta corriente como la de capital tienen un déficit, entonces la balanza de pagos global también lo tiene. Cuando una cuenta tiene un superávit y la otra tiene un déficit de exactamente la misma cuantía, el saldo de la balanza de pagos global es cero, es decir, no hay ni superávit ni déficit. Recogemos estas relaciones en la Ecuación: Superávit de la balanza de pagos = Superávit por cuenta corriente + superávit por cuenta de capital.
2.1.5. LOS PAGOS INTERNACIONALES Cualquier transacción que origine un pago hecho por residentes de un país a residentes en el exterior es una rúbrica de déficit. Un déficit global de la balanza de pagos – la suma de la cuanta corriente y la capital- significa, que los pagos hechos por los residentes de dicho país a los extranjeros son mayores que los residentes reciben de los extranjeros. Puesto que los extranjeros quieren que se les pague en sus propias monedas, se plantea la cuestión de la forma en que se deben hacer esos pagos. Cuando la balanza de pagos tiene un déficit – cuando la suma de la cuantas corriente y de capital es negativa’ los residentes tienen que pagar a los extranjeros una cantidad de moneda extranjera mayor que la reciben, Los bancos centrales extranjeros proporcionan la moneda extranjera necesaria para hacer pagos al exterior, la cantidad neta ofrecida es las transacciones oficiales de reservas. Cuando la balanza de pagos de un país tiene un superávit, los extranjeros tienen que conseguir los dólares con los que pagarán el exceso de sus pagos a dicho país sobre sus ingresos procedentes de las ventas al país. El dinero es proporcionado por los bancos centrales. 2.1.6. LA BALANZA DE PAGOS Y LOS FLUJOS DE CAPITAL Introduciendo el papel desempeñando por los flujos de capital en un contexto en que suponemos que nuestro país se enfrenta a unos precios establecidos de las importaciones y a una demanda de las exportaciones. Suponemos que el tipo de interés mundial está dado y que entra capital en el país a una tasa que es mayor cuanto mayor es el tipo de interés interior. Es decir, los inversores extranjeros compran un cantidad de nuestros activos que será mayor cuanto más elevado sea el tipo de interés que nuestros activos pagan en relación con el tipo de interés mundial. La tasa de entrada de capital o superávit de la cuenta de capital, es una función creciente del tipo de interés. Cuando el tipo de interés es igual al mundial, i = i, ni hay flujos de capital. Si es más elevado, habrá una entrada de capital e, inversamente, si es más bajo, habrá una salida. Un incremento de la renta empeora la balanza comercial, y un incremento del tipo de interés aumenta las entradas de capital y mejora, de esta forma, la cuenta de capital. De ello se deduce que cuando aumenta la renta, un incremento de los tipos de interés podría mantener la balanza de pagos global en equilibrio. El déficit comercial se financiaría con una entrada de capitales. Esta idea es extraordinariamente importante. Los países se enfrentan frecuentemente al siguiente dilema: la producción interior es baja y quieren aumentarla, pero la balanza de pagos tiene dificultades y no creen estar en condiciones de soportar un déficit aún mayor. Si aumenta el nivel de renta, las exportaciones netas disminuirán a medida que se eleva la demanda interior, tendiendo así a empeorar la balanza de pagos que es algo que el país quiere evitar. La existencia de flujos de capital sensibles al tipo de interés sugiere que podemos llevar a cabo una política económica interior expansiva sin incurrir necesariamente en problemas de balanza de pagos. Un país puede soportar un incremento de la renta interior y del gasto en importaciones siempre que lo acompañemos de un incremento de los tipos de interés, capaz de provocar una entrada de capital, ¿Pero cómo podemos conseguir una expansión de la renta interior al mismo tiempo que se incrementan los tipos de interés. Utilizando la política fiscal para incrementar la demanda agregada hasta el nivel de pleno empleo y la política monetaria para conseguir la cantidad adecuada de flujos de capital
2.2. EL MERCADO DE DIVISAS Las relaciones económicas y financieras internacionales se manifiestan, según la naturaleza de las mismas, en el comercio de bienes y servicios (exportaciones e importaciones), en las inversiones (directas, en inmuebles), en los préstamos y créditos y en las transferencias unilaterales (sin contrapartida). El nivel de interdependencia e integración internacional ha sido posible, sin ninguna duda, por la eficacia lograda en el intercambio organizado de unas monedas por otras por un precio (tipo de cambio), es decir, por la existencia de un sistema monetario internacional y, dentro de este, por el desarrollo alcanzado por el mercado de divisas. A través del mercado de divisas se transfiere poder adquisitivo de unos agentes a otros tanto a nivel internacional como en los mercados domésticos, se facilita el comercio y la financiación internacional y es posible realizar cobertura del riesgo cambiario derivado de la variación que los precios (tipos de cambio) pueden sufrir entre el momento de realizar un contrato y, posteriormente, cuando este tiene efectos de cobros y pagos. En un sistema monetario es determinante la forma en que los agentes económicos pueden utilizar el sistema de pagos. El papel del banco central y el buen funcionamiento de las instituciones financieras son cruciales. En el ámbito internacional no existe una moneda (dinero) de general aceptación y empleo por todos los países y emitida por una autoridad mundial. Por ello, para facilitar las relaciones económicas y financieras a nivel mundial es conveniente crear mecanismos que faciliten las relaciones monetarias entre los países que realicen intercambios entre sí. El establecimiento y organización de estos mecanismos constituye un sistema monetario internacional. Se entiende por divisa los depósitos bancarios a la vista denominados en moneda extranjera. El tipo e cambio es el precio de una divisa en términos de otra. Se dice que una divisa en convertible cuando su precio viene determinado por la oferta y la demanda, es decir, por el mercado, y no existen restricciones para la realización de transacciones (pagos y transferencias) con ella ni discriminación geográfica. Es decir, una moneda es convertible cuando puede ser libremente intercambiada por otra.
2.2.1. EL SISTEMA DE DETERMINACION DEL TIPO DE CAMBIO En general existen dos sistemas o regímenes de determinación del tipo de cambio. Uno determinado por las fuerzas del mercado (oferta y demanda). Otro establecido por las autoridades de un país (y aceptado por el sistema), que se mantiene fijo y únicamente se puede alterar de acuerdo a determinadas reglas. En un mercado libre y transparente el tipo de cambio viene determinado por la oferta y la demanda de divisas. La demanda de divisas viene condicionada en general por las importaciones y por las salidas de capital de la economía, mientras que la oferta de divisas la constituyen las exportaciones y la entrada de capital (inversiones extranjeras, préstamos, etc.). En otras palabras, la oferta y la demanda de divisas vienen dadas por los factores determinantes del comercio internacional y de los flujos internacionales de capitales (niveles de renta nacional y extranjera, precios relativos, diferenciales de interés, competitividad de la economía y situación de la balanza de pagos). Sin embargo, en los mercados de cambio los bancos centrales pueden operar comprando divisas cuando su cotización baja más de lo que se estima conveniente y
vendiéndolas cuando su precio sube más de lo que se considera oportuno. Dinero emitido por las autoridades competentes y aceptadas por la sociedad. El dinero ha de cumplir las tres funciones tradicionales siguientes: a. Unidad de cuenta: permite medir el valor de los bienes y servicios susceptibles de ser intercambiados. Facilita el registro y contabilización de las transacciones derivadas de la actividad económica y la cuantificación de la riqueza de los agentes económicos. b. Medio de pago: facilita la compraventa de bienes y servicios. c. Depósito de valor: el dinero representa un valor en reserva. Puede conservarse y ser utilizado convenientemente a lo largo del tiempo. Normalmente los billetes y monedas emitidas por los bancos centrales cumplen las características anteriores. Ahora bien, los depósitos bancarios no permiten automáticamente la cancelación de deudas, ya que ellos en sí mismo son deudas de los bancos con sus clientes. Sin embargo, pueden ser sustitutos casi perfectos del dinero, siempre que los depositantes confíen plenamente en que los bancos los convertirán en liquidez cuando el cliente lo solicite. Es decir, si se tienen dudas sobre la liquidez o solvencia de los bancos, se tratará de convertirlos o trasladarlos a otras instituciones locales o extranjeras. La estabilidad del sistema financiero es determinante de un buen funcionamiento del sistema de pagos. El papel del banco central y el buen funcionamiento de las instituciones financieras es crucial. En el ámbito internacional no existe una moneda (dinero) de general aceptación y empleo por todos los países y emitida por una autoridad mundial. Por ello, para facilitar las relaciones económicas y financieras a nivel mundial es conveniente crear mecanismos que faciliten las relaciones monetarias entre los países que realicen intercambios entre sí. El establecimiento y organización de estos mecanismos constituye un sistema monetario internacional. Se entiende por divisa los depósitos bancarios a la vista denominados en moneda extranjera. El tipo e cambio es el precio de una divisa en términos de otra. Se dice que una divisa en convertible cuando su precio viene determinado por la oferta y la demanda, es decir, por el mercado, y no existen restricciones para la realización de transacciones (pagos y transferencias) con ella ni discriminación geográfica. Es decir, una moneda es convertible cuando puede ser libremente intercambiada por otra. 2.2.1. EL SISTEMA DE DETERMINACION DEL TIPO DE CAMBIO En general existen dos sistemas o regímenes de determinación del tipo de cambio. Uno determinado por las fuerzas del mercado (oferta y demanda). Otro establecido por las autoridades de un país (y aceptado por el sistema), que se mantiene fijo y únicamente se puede alterar de acuerdo a determinadas reglas. En un mercado libre y transparente el tipo de cambio viene determinado por la oferta y la demanda de divisas. La demanda de divisas viene condicionada en general por las importaciones y por las salidas de capital de la economía, mientras que la oferta de divisas la constituyen las exportaciones y la entrada de capital (inversiones extranjeras, préstamos, etc.). En otras palabras, la oferta y la demanda de divisas vienen dadas por los factores determinantes del comercio internacional y de los flujos internacionales de capitales (niveles de renta nacional y extranjera, precios relativos, diferenciales de interés, competitividad de la economía y situación de la balanza de pagos). Sin embargo, en los mercados de cambio los bancos centrales pueden operar comprando divisas cuando su cotización baja más de lo que se estima conveniente y vendiéndolas cuando su precio sube más de lo que se considera oportuno. Cuando formalmente se adopta un tipo de cambio central al que se le suma y resta un margen, dentro de los cuales el tipo de cambio fluctúa libremente, teniendo obligación de intervenir cuando
se alcanza el límite superior o inferior de las bandas, se dice que se está en un sistema de tipos de cambio fijos. También es posible (y a menudo conveniente) intervenir intra-marginalmente, es decir, antes de que el tipo de cambio llegue a las bandas superior o inferior. Pare frenar subidas del tipo de cambio el banco central vende divisas de sus reservas, mientras que si el tipo de cambio baja, la función del banco central sería comprar divisas. 2.2.2. TIPOS DE CAMBIO MULTIPLES En la mayoría de los países su moneda se intercambia por otras a un único tipo de cambio. Sin embargo algunos países han mantenido de forma simultánea múltiples tipos de cambio para su moneda respondiendo determinados objetivos y circunstancias. Un ejemplo típico es la adopción de un doble tipo de cambio: uno flexible para operaciones financieras (de capital), determinado por el mercado, y otro fijo para transacciones corrientes (comerciales) procurando favorecer la corriente exportadora. En realidad constituyen mecanismos proteccionistas. Estos sistemas van desapareciendo, y ese ha sido el objetivo del Fondo Monetario Internacional, ya que distorsiona los precios relativos en el ámbito internacional y, en realidad, no es positivo para el país que adopta el sistema dual o múltiple ni para los que intercambian con él. 2.2.3. MERCADO NEGRO Y MERCADOS PARALELOS A lo largo de la historia muchos países, especialmente los menos desarrollados, han impuesto múltiples restricciones a las transacciones en moneda extranjera. Las restricciones más comunes comprenden desde la exigencia de licencias de importación y la limitación de la cantidad de moneda extranjera que es posible adquirir hasta la prohibición del uso privado de divisas y la obligación de vender al Estado las divisas que se posean en un plazo máximo de tiempo. En estas condiciones es el gobierno el que fija el precio de las divisas. Como resultado de estas situaciones surgen los mercados ilegales para atender a la demanda de divisas necesarias para la realización de transacciones exteriores, influyendo al mismo tiempo en las transacciones internas. A estos mercados ilegales se les denomina “mercado negro”. En muchas ocasiones, estos mercados han desarrollado su actividad con cierta permisividad de las autoridades del país, mientras que en otros el riesgo a que se exponían los operadores era elevado, si se les descubría operando en estos mercados informales. Desde el punto de vista terminológico cuando el gobierno tolera la existencia de un mercado alternativo al mercado oficial se habla de mercados paralelos. 2.2.4. TAMAÑO DEL MERCADO El término de mercado de divisas medido en función del volumen de transacciones diarias se encuentra por término medio en torno a un billón de dólares diarios (1996). Esta cifra supera suficientemente el comercio mundial anual y varias veces el producto bruto mundial. Asimismo, es una cifra que también en términos diarios supera más de cien veces el valor medio diario de las acciones en el mercado de Nueva York. El mercado de divisas es el mayor mercado del mundo. La plaza más importante sigue siendo Londres, seguida de Estados Unidos, Japón y Singapur. Atendiendo a las divisas intercambiadas, el dólar estadounidense sigue siendo el líder, aunque continúa perdiendo importancia relativa a favor de otras divisas, especialmente el marco alemán y el yen japonés, que ocupan, respectivamente la segunda y tercera plaza, seguidos a cierta
distancia por la libra esterlina. Las opciones de futuro y opciones en divisas han ganado algo de peso aunque no muy significativo. Se estima que aproximadamente un tercio del mercado es intermedio u opera a través de bancos, siendo más de 3.500 las entidades bancarias participantes. En Londres, con cerca de 550 bancos autorizados, más de dos tercios son extranjeros. 2.2.5. PARTICIPANTES DEL MERCADO Los participantes del mercado de divisas se pueden agrupar de la siguiente manera: 1. Individuos, que acuden a los bancos a solicitar la compraventa de divisas. Poseen escaso poder de negociación. 2. Empresas, que actúan en el mercado para solicitar u ofrecer divisas derivadas de sus operaciones o transacciones internacionales o para colocar excedentes de tesorería o buscar financiación internacional. 3. Cuasi-bancos, a los efectos del mercado de divisas. Bajo esta denominación se pretende hacer referencia a las grandes empresas, generalmente multinacionales, que tiene un gran movimiento en divisas y consecuentemente son determinantes de la conformación del mercado. 4. Bancos, que actúan por cuenta de sus clientes y por cuenta propia. En realidad la mayoría tiene una actividad limitada en el mercado y suelen procurar equilibrar sus compras y ventas de divisas, evitando mantener posiciones abiertas. Sin embargo muy pocos bancos, generalmente los de gran tamaño, son activos en el mercado. Estos son creadores de mercado informando de los precios de compraventa a que están dispuestos a operar. 5. Bróker, su función es la de poner en contacto a los oferentes con los demandantes, cobrando por ello una comisión. Su misión es cazar las operaciones e los creadores e mercado. Por lo tanto, no toman posiciones ni influyen en el tipo de cambio, la discrepancia de precios entre los bancos hace que el margen del mercado sea más amplio que el de cualquier banco. 6. Bancos centrales. Interviene en los mercados comprando y vendiendo divisas como cualquier otro agente, si bien la finalidad que persigue en sus operaciones puede ser bien distinta. Los bancos centrales operan en el mercado de divisas prácticamente todos los días. Las operaciones que realizan pueden ser de la siguiente naturaleza: De clientela: actúan para prestar servicio a su clientela, por ejemplo las transacciones en moneda extranjera correspondientes al sector público, con los bancos centrales de otros países, o con organismos internacionales; Propias: referentes a la gestión de sus reservas: comprar y vender divisas; De intervención: realizadas para influir en el tipo de cambio de su moneda. Pueden ser propias o concertadas. 7. Inversiones institucionales. Los inversores institucionales, como los fondos de inversión, compañías de seguros y los bancos de inversión desempeñan un papel muy importante en los mercados de divisas. Toman posiciones para generar dinero y mueven grandes cantidades. No tienen presencia continua en el mercado sino que más bien responden a situaciones puntuales que les pueden facilitar la obtención de beneficios y la diversificación de sus carteras. Dentro delos grandes fondos se pueden mencionar los denominados Hedge Funds, localizados en paraísos fiscales y que operan de manera importante en los mercados de divisas a menudo en operaciones fuera de balance, es decir, en los mercados de derivados, haciendo uso de la gran capacidad de apalancamiento que proporcionan. Al final, el sistema bancario mundial es la contraparte de este tipo de fondos. 2.2.6. LA MECANICA DEL MERCADO DE DIVISAS
Desde el punto de vista de la localización geográfica del mercado, tradicionalmente se ha venido distinguiendo entre el sistema continental y el sistema angloamericano. El primero consiste en la ubicación específica del lugar en donde se transan las divisas: Bolsas de valores, banco central. En el sistema anglosajón, en cambio, no existe un sitio o lugar específico sino que funcionan mediante sistema electrónico y telefónico. Las transferencias y compensación se realizan vía ordenador. El sistema anglosajón es el que realmente se ha impuesto a nivel mundial, a lo que han contribuido obviamente los avances tecnológicos y la mayor integración financiera y económica internacional. Sin embargo en algunos países como España, Bélgica y otros europeos se establece un fixing, tipo de referencia de mercado a una hora determinada del día que se obtiene de la interacción entre representantes de bancos comerciales y del banco central. En términos generales es un proceso similar del subastador walrasiano. Este subastador (representante del banco central) señala el precio. Si a este precio existe exceso de oferta o de demanda se anuncia otro hasta que se limpie el mercado (se iguala la oferta y la demanda). A este precio se realizan las transacciones entre los participantes en la subasta. El mercado de divisas es un mercado OTC (over-the-counter), no organizado. Los agentes operadores están realmente en las oficinas de los principales bancos comerciales del mundo, que se comunican entre sí informáticamente, mediante teléfonos, télex y otros canales de información. Se ponen de acuerdo sobre cantidades y precios y posteriormente se confirman las transacciones y sus detalles y se materializa la operación. A título ilustrativo se viene señalando que un tercio del mercado aproximadamente responde a operaciones canalizadas por una quincena de bancos, entre los que se encuentran los más conocidos del sistema bancario internacional (Chase Maniatan, Chemical, Citibank, Barclays...). El número de entidades bancarias supera los 3.500, aunque se estima que la cifra de bancos creadores de mercados está en torno a los 200. La plaza más importante del mercado sigue siendo Londres. La mayoría de los bancos autorizados en esta plaza son extranjeros. Concretamente en 1991 de los 531 bancos autorizados 346 eran extranjeros, lo que equivalía a un 65% del total. Los principales operadores y participantes en el mercado de divisas poseen sala de contratación o de expertos (front offices), en la que se realiza la contratación, el seguimiento de las operaciones, la ejecución de las órdenes de los clientes y la gestión de posiciones de riesgo. La denominada back-office o servicio administrativo complementa la sala de operaciones, ya que se ocupa de la confirmación de las operaciones, la contabilización, la emisión de pagos y la recepción (control) de cobros, así como del seguimiento y control de las posiciones de riesgo (riesgo de contrapartida). Los medios de contratación son el teléfono, los intermediarios y los brokers y el sistema Reuters Dealing. El sistema de emisión de pagos comprende principalmente el teléfono, el correo, el télex y el sistema SWIFT. En 1995 el 83% del comercio de divisas convertibles se realizó en relación al dólar y en 1989 era el 90%, es decir, el resto de monedas se intercambian en gran medida por dólares estadounidenses.
El hecho de que la mayoría de las operaciones en divisas coticen en relación a una moneda común reduce por un lado la complejidad informativa. Efectivamente, si pensamos en un comercio de divisas fundamentalmente multilateral existirá un número considerable de mercados y precios. Así, por ejemplo, un mercado multilateral entre 10 monedas implica comerciar con 45
precios. Es decir, la primera moneda cotiza con las nueve restantes, la segunda, con las ocho siguientes, y así sucesivamente. En general el número de tipos de cambio bilaterales entre n monedas será n(n-1)/2. Por otro lado, se reducen las posibilidades de arbitrajes triangulares en función de diferencias de precios. Es decir, si los tipos de cambio cruzados de todas las monedas se obtienen respecto del dólar estadounidense, entonces solamente existirá un tipo de cambio cruzado posible. Fundamentalmente multilateral existirá un número considerable de mercados y precios. Así, por ejemplo, un mercado multilateral entre 10 monedas implica comerciar con 45 precios. Es decir, la primera moneda cotiza con las nueve restantes, la segunda, con las ocho siguientes, y así sucesivamente. En general el número de tipos de cambio bilaterales entre n monedas será n(n-1)/2. Por otro lado, se reducen las posibilidades de arbitrajes triangulares en función de diferencias de precios. Es decir, si los tipos de cambio cruzados de todas las monedas se obtienen respecto del dólar estadounidense, entonces solamente existirá un tipo de cambio cruzado posible. La mayoría de las operaciones del mercado de divisas son de carácter interbancario. Así, según datos del BIS (1990), el 85% tiene lugar entre creadores del mercado, por lo que el 15% restante puede responder a operaciones comerciales. 2.3. EL SISTEMA MONETARIO INTERNACIONAL El presente trabajo se hace con la finalidad de conocer acerca de las instituciones que están trabajando en el mundo, para tratar de solventar la crisis que algunos gobiernos están atravesando, estas instituciones entre otras son: La Organización Mundial del Comercio, El Banco Mundial, El Banco Interamericano de Desarrollo, de estas conoceremos su función, objetivo y sobre todo los países integrantes, a los cuales va el beneficio final, la inversión a través de los créditos entre los gobiernos interesados y estas instituciones, además hablaremos de la teoría del desarrollo y subdesarrollo, la cual nos permitirá visualizar los elementos que permiten determinar cuáles son los países desarrollado y su diferencia con los no desarrollados. Otro punto interesante dentro de este trabajo es el hecho de poder establecer las diferencias que hay entre una organización y otra, cuáles son sus principales fuentes de financiamiento y además poder establecer un criterio de comparación con respecto a la situación real de los países en los cuales están operando estas grandes organizaciones. 2.3.1. El Fondo Monetario Internacional (FMI) La misión del FMI Los fines del FMI, según su Convenio Constitutivo, incluyen el fomento de la expansión y el crecimiento del comercio mundial, la estabilidad de los tipos de cambio, la evitación de evaluaciones cambiarias competitivas y la corrección ordenada de los problemas de balanza de pagos de un país. Con estos fines, el FMI: Efectúa el seguimiento de la evolución y las medidas de política económica y financiera, en los países miembros y en el mundo, y ofrece asesoramiento de política a los países miembros fundados en los más de cincuenta años de experiencia acumulada. Concede préstamos a los países miembros que enfrentan problemas de balanza de pagos, no sólo con fines de financiamiento temporal sino también en respaldo de las medidas de ajuste y de reforma que contribuyan a corregir los problemas fundamentales. Facilita a los gobiernos y bancos centrales de los países miembros asistencia técnica y capacitación en el área de especialidad de la institución.
Fines del FMI Fomentar la cooperación monetaria internacional por medio de una institución permanente que sirva de mecanismo de consulta y colaboración en cuestiones monetarias internacionales. Facilitar la expansión y el crecimiento equilibrado del comercio internacional, contribuyendo así a alcanzar y mantener altos niveles de ocupación y de ingresos reales y a desarrollar los recursos productivos de todos los países miembros como objetivos primordiales de política económica. Fomentar la estabilidad cambiaria, procurar que los países miembros mantengan regímenes de cambios ordenados y evitar depreciaciones cambiarias competitivas. Coadyuvar a establecer un sistema multilateral de pagos para las transacciones corrientes que se realicen entre los países miembros, y eliminar las restricciones cambiarias que dificulten la expansión del comercio mundial. Infundir confianza a los países miembros poniendo a su disposición temporalmente y con las garantías adecuadas los recursos generales del Fondo, dándoles así oportunidad de que corrijan los desequilibrios de sus balanzas de pagos sin recurrir a medidas perniciosas para la prosperidad nacional o internacional. De acuerdo con lo que antecede, acortar la duración y aminorar el grado de desequilibrio de las balanzas de pagos de los países miembros. 2.3.2. BANCO MUNDIAL (BM) ¿Qué es el Banco Mundial? El Banco Mundial procura reducir esa diferencia en los ingresos y convertir los recursos de los países ricos en crecimiento para los países pobres. El Banco Mundial, que es una de las principales fuentes de asistencia para el desarrollo del mundo, apoya los esfuerzos de los gobiernos de los países en desarrollo por construir escuelas y centros de salud, suministrar agua y electricidad, luchar contra las enfermedades y proteger el medio ambiente. El Banco Mundial no es un banco; es más bien un organismo especializado. El Banco Mundial no es un "banco" en el sentido ordinario del término. Es uno de los organismos especializados de las Naciones Unidas y está integrado por 184 países miembros. Estos países son conjuntamente responsables de la manera en que se financia la institución y del destino que se da a los fondos. El Banco Mundial, igual que el resto de la comunidad dedicada a la tarea del desarrollo, centra sus iniciativas en lograr que se alcancen los objetivos de desarrollo del milenio, que fueron acordados en 2000 por los miembros de las Naciones Unidas para lograr una reducción sostenible de la pobreza. "Banco Mundial" es la denominación que se ha adoptado para designar al Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) y a la Asociación Internacional de Fomento (AIF) . Estas dos organizaciones otorgan préstamos con intereses bajos, créditos sin intereses y donaciones a los países en desarrollo. 2.3.3. BANCO INTERAMERICANO DE DESARROLLO (BID) ¿Qué es el Banco Interamericano de Desarrollo? El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) es la principal fuente de financiamiento multilateral para programas y proyectos de desarrollo económico, social e institucional de América Latina y el Caribe, incluidas las reformas de políticas y sectores y la promoción de inversiones públicas y privadas. En esa labor da préstamos y asistencia técnica usando los recursos aportados por
todos sus países miembros y los que obtiene en los mercados mundiales mediante la emisión de bonos. El banco también promueve y participa en importantes acuerdos de cofinanciamiento multilaterales, bilaterales y privados. 2.3.4. ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE COMERCIO (OMC) ¿Qué es la OMC? La Organización Mundial del Comercio (OMC) es la única organización internacional que se ocupa de las normas que rigen el comercio entre los países. Los pilares sobre los que descansa son los Acuerdos de la OMC, que han sido negociados y firmados por la gran mayoría de los países que participan en el comercio mundial y ratificados por sus respectivos parlamentos. El objetivo es ayudar a los productores de bienes y servicios, los exportadores y los importadores a llevar adelante sus actividades.