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Diseño editorial para niños con debilidad visual
Tesis de Fernando Bustos Zavaleta
Texto: Alejandra Palmeros Montúfar
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El sentido por excelencia para los diseñadores es la vista. Las propuestas de ilustración, arquitectura, animaciones, instalaciones y diversidad de objetos llegan primero a través de la vista. Incluso la comida entra a través de los ojos y nuestra música está fuertemente influenciada por imágenes.
Estamos tan habituados a la fuerza de este canal perceptivo que difícilmente podríamos considerar cómo es que se diseña para otros sentidos o considerando una limitación en este poderoso canal. La discapacidad visual afecta a casi 300 millones de personas en el mundo y se presenta en diferentes grados, siendo las más generales los ciegos y la baja visión. El compromiso social es que esta población tenga acceso a los mismos servicios que quienes no presentan limitaciones. En el área editorial, el reto consiste en encontrar estrategias para los lectores.
Como proyecto de tesis de la Maestría en Diseño Editorial, Fernando Zavaleta Bustos decidió hacer una revisión de los materiales que se han creado para los niños que presenten debilidad visual. Su interés se concentraba en los recursos que las editoriales y las asociaciones proponen para poder acercar a los niños a la fantasía.
Si bien el diseño desde lo general presenta una interesante cantidad de propuestas para sensibilizarnos a través de los libros sensoriales, el pop-up y los libros interactivos, aún hay mucho trabajo que atender. Tras la revisión de cómo sucede el proceso neurológico de la visión y de la historia general de la didáctica para quienes tienen discapacidad visual, Fernando identifica los recursos que se han propuesto para esta población.
El sistema Braille con la codificación de los seis puntos permite la generación de libros de contenido textual, lo cierto es que la producción de estos materiales es mínima y carece de recursos de diseño, concentrándose sólo en la producción. El catálogo de libros Braille, siempre es reducido y presenta limitaciones debido a la diversidad de usuarios. Del mismo modo, la aparición de las opciones novedosas de la tecnología abrió el acceso a muchos materiales, pero no todos los usuarios pueden tener acceso a estos dispositivos.
Finalmente, la oferta de las editoriales y agrupaciones requiere consideraciones importantes para garantizar su buen uso.
En este panorama, los niños que presentan discapacidad visual deben encontrar piezas para poder acercarse a la literatura de ficción y no ficción, opciones que sean seguras y acordes a sus medidas. Aquí es donde entra la labor del Diseñador Editorial.
Fernando Zavaleta presenta una serie de sugerencias para lograr que los materiales despierten el interés, y además, logren desarrollar la imaginación y el conocimiento en los niños. Todo ello, en un marco de seguridad y funcionalidad eficiente para los infantes.
“La magia del libro difuminado” es la tesis con la cual Fernando Zavaleta Bustos obtuvo su Grado como Maestro en Diseño Editorial el pasado 29 de junio de 2019.