especial de cultura Periodismo de Investigación
www.semanariocoahuila.com
No.137 | SEP.15.2008
Precio al público $10.00 pesos
saltillo bajo el reinado de
carpentier La ciudad entera podrá ingresar a partir de hoy al mundo maravilloso de Alejo Carpentier. El escritor cubano tendrá en la Feria del Libro una cátedra que llevará su nombre. Semanario viajó a Cuba para buscar los rastros del artista y ofrecer un perfil más íntimo
esenciales |
Si quieres tener una conversación inteligente en la reunión con tu familia o con tus amigos, tienes que conocer estos temas…
| Frase ‘La madurez del hombre consiste en encontrar de nuevo la seriedad con la que jugaba cuando era niño’: Friedrich Wilhelm Nietzsche
La mejor policía del norte ¿Dónde se había visto semejante escena —35 policías municipales disparando contra el Ejército para rescatar a cinco narcotraficantes—: en un spaghetti western, en una película de Juan Orol o en una de los hermanos Almada? ¿Dónde semejante desfiguro: en un municipio perredista, en uno priísta o en uno panista? El mayor damnificado de este operativo surrealista fue el alcalde José Ángel Pérez, quien tanto presumía de su cuerpo policíaco, quien ya no tiene posibilidades de ser Gobernador de Coahuila.
Murió la Flor
¿Se convertirán Sergio Humberto Ortiz Juárez y Lorena González en la nueva versión de Mario Bezares y Paola Durante? Señalados como responsables del plagio del niño Fernando Martí, pueden ir a la cárcel por tres, cinco o siete años. La Procuraduría de Justicia del De Efe, que tan sospechosamente actuó en los casos de las discoteques Lobohombo y New’s Divine, bien podría cometer otra pifia en este caso...
Caen secuestradores en Torreón
Alejandro Nuñez Martínez, de 23 años de edad, y Luis Jaime Ruiz Fernández, ambos integrantes de una banda de secuestradores que operaba en La Laguna, fueron capturados este viernes por la Procuraduría de Justicia del Estado de Coahuila. Se presume que con esta detención caerán otros nombres. Los delincuentes confesaron haber participado al menos en seis secuestros los últimos dos meses. Esta es una prueba de cómo esta región se ha convertido en un paraíso para el crimen organizado.
semanariocoahuila.com
Venustiano Carranza No. 1918 Col. República Oriente Saltillo, Coahuila. Impreso por el Grupo Editorial de Coahuila, S.A. de C.V. Distribuido por Repartovan Internacional, S.A de C.V. Ventas Tel. 450 1000, ext. 1500/1501 Semanario | El contenido de los artículos es responsabilidad exclusiva de los autores y no refleja necesariamente el punto de vista de esta publicación, se aceptan colaboraciones sujetas a revisión. Dirección General Diana Galindo Dirección Editorial Armando Castilla
Edición Kowanin Silva Coedición Alfredo García
Humberto Vázquez Diseño Victor González Kim Dewey
Oscar De la Rosa Arte en portada Juan David Reporteros
Jesús Peña, Jesús Castro, Quitzé Fernández, Francisco Rodríguez,
Karla Garza, Esteban Cárdenas Producción Andrés Cruz
SEPTIEMBRE 15.2008 |
| la fauna
Hojea la edición en internet a partir de las 10:30 am, búscala en
Ilustración: Edwin Garza
semanariocoahuila.com
La patria ametrallada por alfredo garcía Ya no sabemos quién pronunciará esta noche el clásico grito: “¡Viva México, hijos de la chingada!”. ¿Las huestes de López Obrador? ¿Los empleados municipales de Marcelo Ebrard? ¿Los grupos yunquistas y antiaborto que apoyan a Felipe Calderón? ¿El Ejército que patrulla las principales ciudades del país? ¿El cártel del Golfo? ¿Los Beltrán Leyva? ¿La Familia? Sólo una cosa sabemos: que el PAN de Coahuila no tendrá nada que festejar este día 15, ni tampoco el 20 de octubre.
Otra vez, como el 15 de septiembre de 1847, cuando la bandera de barras y estrellas ondeó en Palacio Nacional, México está dividido en facciones políticas que no se distinguen mucho de los demás fascinerosos. En aquel año, liberales y conservadores se disputaban el poder, sin darse cuenta todavía de que habían perdido la mitad del territorio nacional. Hoy por hoy, el Ejército combate al narco en la mitad del país, mientras los ebrardistas, los obradoristas, los yunquistas y los antiaborto se desgañitan en el zócalo.
En aquel tiempo también, mientras las facciones políticas se disputaban el poder, los contrabandistas, los asaltantes de caminos y los secuestradores de hacendados dominaban de facto el territorio nacional. El crimen organizado del siglo XIX, así pues, trabajaba de una manera más ordenada, más eficaz y más “productiva” que los desorganizados partidos políticos. Muchas cosas han cambiado desde entonces, muchas siguen iguales. No decimos que los partidos puedan y aun deban tomar lecciones de los cárteles del narcotráfico, pues ya sería el colmo, pero...
al día Celebrando la cátedra de Alejo Carpentier, que se inaugura hoy con motivo de la Feria del Libro de Saltillo, decidimos dedicar esta edición a las letras reales y maravillosas | semanariocoahuila.com
de este cubano de corazón. Lectura obligada para periodistas, escritores, músicos, historiadores y todo aquel que quiera volar por el universo de las letras. Buen viaje.
| reportaje
el nuevo
patrono Aunque no se le conoce ningĂşn milagro, el escritor cubano extiende sus territorios y llega a Saltillo a estrenar el templo que se ha construido en su memoria: la CĂĄtedra Alejo Carpentier; Semanario estuvo en La Habana para retratar el rostro humano del narrador
| semanariocoahuila.com
Por Humberto Vázquez / Enviado
P
or los pasillos del Hotel Nacional llegan puntuales a su cita los “carpenterianos” de La Habana, listos para tirar las redes de la memoria y hablar sobre un escritor al que han convertido en el motor de su vida y en la materia prima de sus investigaciones. Desde su llegada, Araceli García-Carranza, Ana Cairo, José Antonio Baujín y Julio Domínguez dejan claro que el lugar en donde se encuentran se había convertido en el sitio favorito de quien es el motivo principal de este viaje: Alejo Carpentier, quien al asistir a la inauguración del hotel, en 1930, lo describió como un castillo encantado. Ahí, en ese majestuoso lugar, fue donde Armando Sánchez Quintanilla, Coordinador General de Bibliotecas, Publicaciones y Librerías del Estado, puso a girar, meses antes, los engranes para crear una cátedra en honor de un narrador que logró poner a Latinoamérica en boca del mundo. Y ellos, los expertos en la vida, obra y milagros del escritor, serán los que hoy en esta ciudad, en el marco de la Feria del Libro de Saltillo, colocarán la primera piedra de una catedral en donde se rendirá tributo a un santo laico, al
patrono de los barrocos. La función de la Cátedra será celebrar al escritor año con año. En Cuba, Carpentier es un nombre que se pronuncia con orgullo, y no es para menos, es el lugar donde el escritor decidió tomar la pluma para poner por escrito la realidad que le salía al paso y lo seducía. Pero la isla sólo sería el punto de partida, Carpentier realizaría un viaje iniciático hacia Haití, el lugar que con su magia, mitos, rituales, tradición oral y su sincretismo religioso y cultural, le regalarían al escritor una visión de América, la cual lo llevó a pronunciar por primera vez un término que se convertiría en el milagro que invadiría su obra literaria: lo real maravilloso. Hay quienes afirman que sin Carpentier no hubiera existido Gabriel García Márquez, lo cierto es que su obra fue fundamental para el Boom latinoamericano. A Carpentier le queda corto el título de escritor, pues antes que eso dejó ver al apasionado de la música, al culturólogo, periodista, crítico de arte, guionista de cine, locutor, editor y diplomático. Sin duda, un hombre de talla universal que dejó rastro en el mundo, pero sobre todo en Cuba, la nación a la que aseguraba, le debía todo. Hasta ahí, Semanario acudió en su búsqueda y a través de un ritual, provocado por los recuerdos y el sonido enigmático de los tambores, se encontraría de frente con un Carpentier distinto: el amigo entrañable, el periodista que usaba el seudónimo de Jackeline, el ciudadano del mundo, el que escogió ser cubano, aquel conversador desenfadado, el que pedía chistes subidos de tono, el que sentía una fascinación por México y finalmente el amigo al que se invoca en las siguientes páginas, las cuales quedarán como una constancia de cuánto se le extraña.
SEPTIEMBRE 15.2008 |
| semanariocoahuila.com
‘Entre él y yo hubo un amor a primera vista’ El primer encuentro con el escritor fue a través de sus libros, luego, un vuelco caprichoso del destino lo puso en la puerta de su casa, se trataba de Carpentier. Lo de ellos, dice el periodista Julio Domínguez, fue amor a primera vista
A
l periodista Julio Domínguez García se le llenan los ojos de lágrimas al recordar no al erudito, al narrador, al culturólogo, Julio extraña a ‘Calpentiel’ el amigo, ese que le rodeaba la espalda con su brazo, él que le llamaba por las noches y le preguntaba “¿Tienes algo mejor que hacer?”, luego se aparecía en menos de un parpadeo y tocaba la puerta de un hombre afortunado, que por cosas extrañas de la vida tenía en su casa al escritor que, con sus libros, llenó de imaginación sus años de estudiante. “Es imposible para un cubano no saber de Carpentier, no leerlo. Desde que era un niño siempre me fascinó porque era un hombre increíble para la narración, tenía el don de meterte dentro del libro, no podías dejarlo; eso como escritor, cuando lo conocí me pareció fantástico que yo pudiera estar hablando con ese hombre extraordinario, imagínate Carpentier visitándome a mí, yo decía ‘Dios mío, que cosa es esto’”, esos son los primeros recuerdos que llegan a la memoria de un hombre nostálgico que hace música cuando habla. En una ciudad que no tiene prisa, Julio pasaba las noches en vela devorando las páginas y el mundo mágico y misterioso creado por ese hombre que de nuevo le espantaba el sueño, pero ahora, sentado en la sala, de su casa “echando relajo y siempre sonriente”, esa es la imagen con la que lo recuerda: “En las fotos lo he visto muy serio y no era así, él era un hom-
bre con cara de ‘usted’, pero en realidad era de ‘tú’. Era un hombre formidable, entre él y yo en seguida hubo un amor a primera vista”. Con dos atentos escuchas, Julio y su esposa Aracely, quien se convertiría en su bibliógrafa, Carpentier no se cansaba de hacer literatura, de contar y componer el mundo. El escritor lanzaba sus redes y pescaba la mirada de quienes, absortos, seguían el hilo narrativo de sus anécdotas. Una noche les contó que había cruzado el río Orinoco en Venezuela en una endeble canoa que se tambaleaba ante el acecho de las pirañas y que a punto de llegar a tierra lo esperaban un tribu de antropófagos, hasta que de pronto... Carpentier paraba de contar ante la gran expectativa de Julio, quien esperaba el final de la historia; el desenlace era una sonora carcajada: “Chico, todo lo que te dije es mentira”, le decía ante la cara de asombro del escucha: “Mi mujer no se sorprendía porque él le guiñaba el ojo a escondidas. Siempre me hacía lo mismo, era un tipo fascinante, yo lo echo mucho de menos”.
Su obra te subyuga, te fascina
Y fue en el cubículo de su mujer, en la Biblioteca Nacional José Martí, el lugar en donde se encontraron por primera vez. Ahí Julio escuchó las primeras palabras de un escritor que dominó con maestría una lengua que jamás escucharía en casa: “Me habló con su acento francés. Ese fue
su primer idioma, en su casa lo hablaban todo el tiempo, después aprendió español en la escuela, pero nunca se pudo quitar el acento. Él me decía ‘a estas alturas yo no voy a tratar de perfeccionar mi pronunciación’, lo curioso es que su obra es en español, y se convirtió en un déspota del idioma, hacía con él lo que le daba la gana”. De madre rusa y padre francés, Alejo adoptó el idioma de su progenitor, uno de los vínculos más importante con un hombre que, Julio asegura, muy rápido desapareció: “Su padre, Jorge Julián Carpentier, los abandonó cuando él tenía 14 años. Él se pasó años buscándolo, incluso pagó a investigadores privados para tratar de encontrarlo, y hubo una vez un indicio que lo llenó de esperanza, pero se perdió el rastro y nunca supo más de él. Su madre, Lina Valmont, se dedicó a dar clases de ruso, él la quiso mucho”. El también historiador asegura que el escritor era un gran observador que no paraba de investigar, de hurgar en las cosas que regala la vida: “A veces sacaba una libreta y anotaba, nunca supe en realidad qué”. La curiosidad sería uno de los rasgos principales para quien no se cansaba de repetir que nada humano le era ajeno: “Cuando hablábamos de la función del periodista él decía que tenía que ser la persona mejor informada, que tenías que ser periodista 25 horas al día”. Para un hombre que antes de dormir leía a Carpentier como muchos leen la Biblia, su devoción por el patrono de los SEPTIEMBRE 15.2008 |
barrocos le trajo algunos inconvenientes: “Mi esposa me decía ‘¿a que hora vas a apagar la luz?’, el problema era que no podía soltarlo, Dios le dio la habilidad extraordinaria de escribir de una manera tal que te subyuga, te fascina”.
Un optimista incorregible
“Él tenía un sentido del humor extraordinario, era un optimista incorregible, decía que la vida se iba a encaminar. Le gustaban mucho los chistes y me decía ‘¿cuál es el último chiste?, quiero uno
JULIO DOMíNGUEZ GARCíA (1935).
Nació en La Habana el 14 de julio de 1935. Estudió la carrera Diplomática en 1960, también se graduó de Bibliotecario Auxiliar en 1961 y de Periodismo en 1985. Ha recibido 23 premios por su actividad profesional dentro y fuera del país. Doctor en teología. Recibió la medalla Félix Elmuza que se les otorga en Cuba a los periodistas destacados. Recibió un premio de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), por el éxito obtenido por la publicación de su libro “Noticias de la República”. Acaba de terminar el segundo tomo de esta obra. Actualmente preside la Unión de Historiadores en la Biblioteca Nacional de Cuba.
10 | semanariocoahuila.com
verde claro’, nos divertíamos mucho”. Domínguez cuenta los chistes que le contaba a Carpentier, de pronto suelta una carcajada y cierra los ojos por un instante, quizá enfrente lo tenga a él, riéndose de las ocurrencias de su amigo, de su ingenio, de una risa franca con la que el amanecer lo sorprendió muchas veces. La risa sólo se borra cuando narra lo inevitable: la partida del entrañable camarada. Julio Domínguez García por primera vez se pone serio: “Alejo murió del cáncer en la garganta que le causó el cigarrillo, sin embargo era un hombre con una esperanza tremenda en que se iba a curar en poco tiempo. La noche de su muerte, las últimas personas con las que habló fueron Cintio Vitier y Fina García, intelectuales cubanos. “Cuando Lilia, su mujer, regresó de ir a dejar a los invitados, Carpentier estaba recogiendo unas revistas en la sala de la casa y de pronto se cayó, y cuando ella preguntó ‘que te pasa’, un chorro de sangre salió de su garganta como un iceberg, él abrió los ojos, le tendió las manos a su mujer y de pronto cayó muerto”. Mientras relata, a Julio se le nublan los ojos y con voz entrecortada continúa con su duelo: “Fue una gran pérdida no sólo para Cuba sino para el mundo. Yo personalmente perdí un gran amigo. Cuando murió fue como si hubiéramos perdido un familiar porque era un hombre exquisito, el cual me ponía el brazo sobre el hombro. Lo he echado mucho de menos, él llegaba a mi casa a las nueve de la noche y se iba a las 5 de la mañana, y daba la impresión de que había estado dos horas porque era un conversador te arropaba, una persona tan especial que
siempre llevaba puesta una sonrisa”.
Que falta hace Alejo
Julio también fue testigo del amor que Carpentier le profesaba a Lilia Esteban, su mujer, con la cual se casó en 1941 y quien crearía en 1993 la Fundación Alejo Carpentier: “Lilia fue su amor, él la miraba y la trataba con una ternura especial, ella era su remanso, la tenía en un pedestal. El día del velorio del Alejo, ella me dijo: ‘Yo también he muerto por dentro’. El periodista recuerda que ella tenía una foto de él en su cama, la cual besaba religiosamente antes de ir a dormir: “No tuvieron hijos pero era una pareja tremenda, ella por los ojos de él, y él por los ojos de ella”. Hoy, sin la presencia de aquél que le contaba de viva voz los tejidos ocultos de su obra, Julio ha vuelto a un placer que descubrió en la niñez: la lectura: “Él murió físicamente pero su obra está ahí y debemos sentirnos orgullosos que un latinoamericano haya escrito lo que él ha escrito. Él todavía tiene mucho que decir, es un hombre imprescindible para los que quieran conocer Latinoamérica, además es muy amigo de México, como también lo somos todos los cubanos. “Yo le platicaba a Aracely, mi esposa, una noche que estábamos muy aburridos, ‘qué falta hace aquí Alejo para que me cuente esas mentiras maravillosas que me contaba”, dice Julio para culminar con la charla con un dejo de nostalgia y luego perderse en el hermoso silencio de una isla arrullada por el mar, la cual más tarde será testigo del mismo diálogo nocturno: “¿A qué hora vas a apagar la luz?” La culpa, como todas las noches, es de Alejo.
América está muy lejos de haber agotado su caudal de mitologías. ¿Pero qué es la historia de América sino una crónica de lo real maravilloso?’
Alejo Carpentier SEPTIEMBRE 15.2008 | 11
Una mirada real y maravillosa Seguir la vida, obra y milagros del escritor por más de cuarenta años le ha dado a Ana Cairo la autoridad para revelar que el artista no nació en Cuba y usaba el seudónimo de Jackeline cuando se veía en la necesidad de escribir artículos sobre moda
E
l rostro de Ana Cairo es muy conocido en Cuba. No es una casualidad que su imagen esté colgada en una librería del corazón de La Habana en donde los libros se mueven al ritmo del son cubano y su dependienta, al escuchar el nombre de Carpentier, acuda bailando por un par de ejemplares, los cuales abre con familiaridad e incluso recita pasajes que le parecen maravillosos. Al encender el televisor del hotel ahí está ella de nuevo, hablando de literatura, citando a Martí y por supuesto impartiendo cátedra sobre un hombre que 12 | semanariocoahuila.com
la cautivó y del cual, en unos minutos, como acto de magia y recién salida de la pantalla, está hablando con Semanario sobre él, a quien dibuja como un ser camaleónico que la atrapó por su capacidad de sorpresa: “Carpentier es uno de los grandes novelistas del siglo 20 en lengua española, pero también es un pensador cultural, para mí es muy estimulante ver como interactúa entre la teoría y su trabajo literario, es un vanguardista”. Y aunque la investigadora asegura que nunca fue una estudiosa de tiempo completo de Carpentier, al escritor llegó por un camino distinto al de su obra literaria
cuando estudiaba al grupo Minorista Cubano, un colectivo de artistas que estaban instalados en un movimiento que se convirtió en una revelación para la investigadora: la vanguardia.
Un escritor solidario
Cairo, quien también es especialista en la obra de los poetas José Martí o Nicolás Guillén, se pronuncia como una estudiosa de los problemas de los intelectuales cubanos. Fue así como llegó a interesarse en cómo el grupo Minorista asimiló un movimiento de ruptura y renovación del arte: “Lo primero que me ancló no fue Carpentier, sino el movimiento cultural que él representa y que marca, define y da sentido al siglo 20. Esa pluralidad de experimentación cultural, artística y científica de las vanguardias es lo que puede hermanar a Picasso con Carpentier o con Diego Rivera. Lo que les da sentido a todos es el compromiso con la problemática social, porque todos vivieron dos guerras mundiales”. Cuando Carpentier llegó a París fue ungido por André Bretón, el padre de los surrealistas, quien lo invitó a escribir en la revista “Révolution Surréaliste”, en donde reseñó la obra de quienes formaban parte de este colectivo, entre ellos Luis Buñuel, Salvador Dalí y Man Ray. Carpentier fungiría como uno de los cronistas favoritos de un grupo excéntrico que convertiría al arte en una genial pro-
vocación: “Lo primero que demostraron las vanguardias es que son artistas interdisciplinarios, para ellos el problema era crear y no importaba el soporte ni el lugar, eso es lo que me fascina de todos ellos. Sin duda redefinieron el humanismo del siglo 20. Carpentier se vuelve un neohumanista, por eso se sentía bien trabajando en México o París, o ayudaba a la guerra civil española; aunque él tiene a Cuba como su patria por adopción, se siente ciudadano del mundo, se siente muy comprometido con la realidad de cualquier lado”.
Para comer escribía sobre moda
“Carpentier es una de las figuras que yo he venido siguiendo desde hace más de 40 años”, asegura con orgullo Ana Cairo, quien en esa búsqueda se encontró no sólo con un narrador, sino también con un profesor de música, periodista, guionista de cine, promotor cultural, funcionario, relacionista público e incluso comentarista de moda: “Él era un periodista que no tenía sueldo, entonces comía de los artículos que hacía y si de pronto hacía falta una sección de moda y él estaba cojo ese mes, pues la escribía con otro nombre; cuando él realizaba artículos de moda y calzado se hacía llamar Jackeline, lo hacía porque tenía que comer”. Pero Cairo no se conformó con ser una lectora más del cubano, sino también se transformó en una especie de puente
para acceder a sus piezas más difíciles. “Espero no morirme sin antes hacer la edición anotada de ‘El Siglo de las Luces’ para que la gente la disfrute porque es una novela muy difícil, para la que hay que tener muchos saberes y para que no haya personas que le cojan miedo al texto, yo quisiera hacer “El Siglo de las Luces” con los grabados de Goya y con esto abrirle puertas a los lectores”. Con el paso del tiempo y el grupo Minorista disperso, la investigadora entró de lleno en el estudio de Carpentier, pero el que sería su objeto de estudio ya no sería el mismo: “Era muy difícil entrevistarlo porque no vivía en Cuba, él estaba en París, además era tan famoso que era muy difícil hablar con él. Cuando cumplió 70 años dio una conferencia en la Biblioteca Nacional y fui a verlo, me pude haber acercado, pero en esas condiciones era muy complicado el contacto. Yo sabía tantas cosas de él que si hubiéramos conversado, se hubiera muerto de la risa. Cuando yo lo veía hablando, me acordaba de todas las cosas que me habían dicho de él, porque a lo largo de los años acumulé mucha información por vías indirectas”.
Retrató lo insólito de la realidad
Y es que Carpentier estaría rumbo a la canonización con un trabajo que acuñaría un término, de lo que para muchos sería la semilla del realismo mágico y el trampolín desde donde despegaría el SEPTIEMBRE 15.2008 | 13
llamado Boom de la literatura latinoamericana. Sin embargo, la investigadora lo tiene muy claro, Carpentier ofreció un cambio de perspectiva y puso la mirada en algo que ya existía: “Lo real maravilloso no es más que un modo de ver, es eso que enseñaron las vanguardias, que es cambiar los puntos de vista para mirar. Lo real maravilloso no es nada más que ver la historia, la naturaleza, los acontecimientos de la vida desde una perspectiva distinta, un cambio de mirada que te muestra cosas que nunca habías visto, lo insólito en la realidad. El hecho de que en la obra de Carpentier nazca una niña con cabeza de jabalí tiene que ver mucho con la oralidad, la cultura popular y las creencias”. Para Ana Cairo lo que convierte a Carpentier en un escritor universal es que, a través de su pluma, mostró una radiografía fiel de la condición humana, lo cual, en palabras de la investigadora, lo coloca a la altura de las grandes figuras de la literatura: “Carpentier es un pensador que dejó ideas centrales de los seres humanos a través de su literatura, él hizo lo mismo que en su época hicieron Dante, Shakespeare, Picasso o Luis Buñuel. Carpentier te deja lo mismo que te deja Bertold Bretch, Rulfo, Octavio Paz o Alfonso Reyes; te deja una visión del mundo, no son intelectuales provincianos, son pensadores que utilizaron la literatura para dar un sentido de la vida y del tiempo”. Antes de finalizar la charla, la investigadora hace énfasis en que antes de ser universal el escritor decidió ser cubano, y con esto da luz sobre un tema polémico:
14 | semanariocoahuila.com
“Hoy día no hay duda de que Carpentier no nació en Cuba sino en Lausanne, Suiza, eso está documentado. Él es uno de esas familias de inmigrantes que vinieron de Europa a principios de siglo y se quedaron, por lo tanto él tenía la ciudadanía francesa por su padre, pero él quiso ser cubano y eso es lo que lo define, a mí me llena de orgullo una cátedra Carpentier dedicada a Cuba porque él es un hombre que eligió ser cubano, él no es cubano porque no le quedó mas remedio”. ANA CAIRO Doctora en Ciencias Filosóficas y Profesora Titular de la Universidad de La Habana. Pertenece a la Unión de Escritores y Artistas de Cuba. Dirige el colectivo profesoral encargado de la docencia de Literatura Cubana en la facultad de Artes y Letras. Ha impartido Cursos en Universidades en México, Panamá, Francia y España. Es secretaria ejecutiva de la Cátedra Alejo Carpentier. Forma parte de los consejos editoriales de las revistas “Temas”, “Universidad de La Habana”, “Debates Americanos” y “Revista de la Biblioteca Nacional José Martí. Coordina la colección Letras y Cultura en Cuba. Es la autora de treinta artículos y cuatro libros: “El Movimiento de Veteranos y Patriotas” (1976), “El Grupo Minorista” (1978), “Historia de la Universidad de La Habana” (1983, coautora) y “La Revolución del Treinta en la Narrativa y Testimonio Cubano” (1993)
CRONOLOGÍA
1904
Hijo de padre francés y madre rusa. Nace el 26 de diciembre en La Habana. Hay investigadores que afirman que nació en en Lausanne, Suiza.
1921
Comienza su labor como periodista con un artículo: “Pasión y Muerte de Miguel Server, por Pompeyo Gener”.
1928
Se fuga de La Habana con un pasaporte falso a nombre del poeta surrealista Robert Desnos. André Breton lo invita a colaborar en la revista La Revolución Surrealista. Conoce entonces a Louis Aragón, Tristan Tzara, Paul Eluard, Georges Sadoul, Benjamín Péret, y a los pintores Giorgio de Chirico, Ives Tanguy y Pablo Picasso. Se hace amigo también de Ernest Heminway.
1948
1957
Se proyecta la filmación de “Los Pasos Perdidos”. Este actor Tyrone Power deseaba reproducir y protagonizar la novela, pero fue sorprendido por la muerte trabajando en este proyecto.
1975
Visita México y es merecedor del Premio Internacional Alfonso Reyes en Ciencias y Literatura.
1917
1923
1927
A los siete años ingresa al Colegio Mimó de La Habana. Toca en el piano preludios de Chopin.
1922
Inicia sus estudios de Arquitectura en la Universidad de La Habana, mismos que abandona después.
1911
1937
Aunque no se consideraba músico escribió la música para la pieza de Cervantes, Numancia.
Se integra al Grupo Minorista.
Es invitado por el novelista Juan de Dios Bojórquez a México. Hace amistad inmediata con Diego Rivera y José Clemente Orozco.
El 9 de julio es encarcelado por siete meses acusado de comunista, por haber firmado, junto con otros escritores, el Manifiesto Minorista. Es en prisión donde escribe la primera versión de ‘ÉcueYamba-O’
1941
1943
1924
Regresa a Cuba y contrae matrimonio en Santa María del Rosario con Lilia Esteban.
Aunque no fue terminada, comienza a escribir una novela: “El Clan Disperso”, relacionada con el Grupo Minorista. Viaja a Haití con su esposa Lilia y con Louis Jouvet. Ahí comienza lo real maravilloso.
1953
Se edita en México “Los pasos perdidos”.ticas, mitos, cine, entre otros.
1956
Con “Los Pasos Perdidos” gana el premio al mejor libro extranjero, otorgado por once de los mejores críticos literarios de París.
1955
Termina en Caracas “El Reino de este Mundo”.
Viaja a París y antes hace estancia en Guadalupe, donde comienza su idea de escribir “El Siglo de las Luces”.
1962
1966
1974
1978
1979
“El Siglo de las Luces” es publicado en México. Lo nombran director ejecutivo de la Editorial Nacional de Cuba, cargo que ocupará hasta 1966.
Realiza sus primeros trabajos en prosa y cuento.
Homenaje de la Biblioteca Nacional José Martí por sus cuarenta y cinco años de trabajo intelectual. Lo nombran embajador de Cuba en París.
Recibe el premio Miguel de Cervantes y Saavedra de manos del Rey Juan Carlos I. Ese año también se filma ‘El Recurso del Método’ por el cineasta chileno Miguel Littín.
“Concierto Barroco” y “El Recurso del Método” son publicados en México. Los poemas de Pablo Picasso llevan el prólogo de Carpentier.
Se publica ‘El Arpa y la Sombra’. La Biblioteca Nacional José Martí expone su obra , contando con los fondos que el mismo Carpentier donara a la prestigiosa institución.
1980
Fallece en París el 24 de abril, después de trabajar intensamente ese día. Le rinden homenaje en el monumento a José Martí.
SEPTIEMBRE 15.2008 | 15
La biógrafa del erudito desenfadado Araceli García-Carranza Basseti es la cubana que se ganó la confianza de Alejo Carpentier. En sus manos no sólo los originales de su obra, sino también dos libros inéditos que la harían cómplice de su vida
16 | semanariocoahuila.com
D
esde 1962 Aracely García pasa sus días en el interior del paraíso soñado por Borges: una enorme biblioteca. Desde ahí salió una carta con su firma que fue suficiente para que recibiera un tesoro que jamás imaginó tener en sus manos: los documentos personales de Alejo Carpentier, los cuales se disputaban varias universidades extranjeras que estaban dispuesta a pagar grandes sumas de dinero. Lo mejor que había creado su pluma se quedaría en casa y la depositaria sería la Biblioteca Nacional José Martí, dirigida por Carranza, quien desde 1971 se había entregado de tiempo completo a recopilar la bibliografía del escritor. “En 1966 se había publicado un catálogo, pero no era suficiente, entonces se me ocurrió escribirle a París, pensé que no me contestaría, pero no, enseguida me escribió muy entusiasmado y a partir de esa fecha todos los veranos, cuando ve-
nía a Cuba, se hospedaba en el Hotel Nacional y se aparecía en la biblioteca lleno de documentos para donarlos”, comenta Aracely sentada en el lobby del tradicional hotel. El mundo de la investigadora de pronto tomó un giro insospechado: bajo su resguardo no sólo tenía la obra y milagros de un célebre personaje nacional, sino también cosecharía una estrecha amistad que la llevaría luego a convertirse en la biógrafa de un hombre “conversador, desenfadado, diáfano, sencillo y espontáneo”, como lo define Aracely mientras desvía la mirada por uno de los pasillos por los que transitó su héroe al que primero conoció, como la mayoría de los cubanos, a través de su obra creativa.
Lo inédito
La mujer que se había sumergido en los paisajes barrocos de la selva latinoamericana y el enriquecedor mundo primiti-
La sorpresa de su vida
Para la académica, el mayor premio que pudo tener en la vida se empezó a cocinar cuando Alejo le pedía regularmente bibliografía de distintos temas. En cierta ocasión le solicitó los acontecimientos más significativos en Cuba de 1952 a 1959: “Fue el tiempo de una tiranía sangrienta que padecimos acá. Él me pidió que le buscara los titulares de la prensa de esos años, le busqué muchísimas cosas, y cuando publica ‘La Consagración de la Primavera’ y la empecé a leer, la alegría más grande de mi vida fue cuando me encontré intertextualizadas la bibliografía que yo le había dado. Por lo menos ese capítulo fue hecho a dos manos. Esa fue la experiencia más preciosa que tuve en mi vida, el haber podido colaborar con un cubano universal como lo fue y lo es Carpentier”. La biógrafa del escritor asegura que el mundo creado por Carpentier se convirtió en la semilla de un árbol que daría sombra
a mucha de la literatura que se gestaba en esos tiempos en Latinoamérica: “Los grandes que le sucedieron le deben mucho, no quiero decir nombres, pero lo veo como padre de una etapa muy importante de la literatura y la realidad latinoamericana. América recorre su obra desde los años treinta, cuando él publica en París para dar a conocer a América”. Está claro porqué Carpentier se ganó el título de latinoamericanista y, aunque mucha de su obra se editó fuera de la isla, en Cuba se enamoraron de Alejo. Pero a García-Carranza no sólo la ha marcado la obra de Carpentier que todos conocen, ella es testigo presencial de la obra que no está publicada, es una lectora privilegiada que ha tenido acceso a ella, como en el caso de “El Clan Disperso”, novela inédita que representó su segunda sorpresa al internarse en la inmensidad de documentos que le entregó el escritor: “En su papelería encontré esta otra novela que es sobre el grupo Minorista, un colectivo de intelectuales que se reunían en el año 1927 en La Habana y que abogaban por el arte nuevo y todo eso lo puso en una novela que está sin publicar y ya he leído”.
Caricaturas: Juan David
vo que mostraba Carpentier, de pronto se topó con un texto inédito: “El Libro de la Gran Sabana”, una obra que nunca se llegó a publicar y que significa el antecedente de la novela “Los Pasos Perdidos”: “Ese fue mi primer descubrimiento al empezar a procesar toda su colección. Entre esos documentos estaban también los manuscritos de sus grandes novelas de las que tengo hasta tres versiones”, comenta aún entusiasmada. Los borradores y el material inédito serían un aliciente para entrar de lleno al trabajo bibliográfico. En 1984, la investigadora publicó un volumen bastante grueso que incluía más de 4 mil descripciones bibliográficas, después publicaría dos suplementos más. Con modestia, Aracely asegura que pudo reconstruir el itinerario periodístico del escritor, la biblioteca se enriqueció con una donación en la que se encontraba la columna “Letra y Sol Fa” que Carpentier publicaba en el periódico Nacional de Caracas. Mil 800 crónicas que se publicaron en nueve volúmenes. Lo cierto es que su trabajo bibliográfico colocó a García-Carranza como una referencia obligada para quienes estudian la trayectoria del cubano. No es casualidad que “El Siglo de las Luces”, una de las obras más representativas de Carpentier, contenga una cronología que ella realizó, la cual va acompañada de un prólogo escrito por un autor abiertamente ‘carpenteriano’: Carlos Fuentes.
Lo que falta por descubrir
La viuda de Carpentier, Lilia Esteban, siempre rechazó que se publicaran estas obras inéditas, pero a unos meses de su muerte, Aracely está preocupada por el paradero de otros documentos inéditos que se encuentran en la que fuera la casa del escritor. “Yo participé en el inventario y al parecer el estado cubano va decidir que la papelería, sino la reclama ninguna familiar, va a pasar a la Biblioteca Nacional. Seguramente habrá cosas escondidas con las que me voy a topar, tengo grandes expectativas con la correspondencia”. Sólo hace falta escuchar a Aracely para darse cuenta de las pasiones que despierta Carpentier en su tierra: “Su trabajo me marcó muchísimo, Alejo era un hombre extraordinario, un hombre de muy fácil acceso, muy natural, no era pedante”, comenta la investigadora, quien hace una pausa para tomar aire y seguir hablando de otra de las facetas de Carpentier: “Además de ser un excelente novelista, un ensayista maravilloso y un gran cronista, Alejo es un periodista tan grande como lo fue como narrador. Yo les recomendaría que antes de leer su novelística lean su obra periodística, porque él intertextualiza el periodismo en su narrativa”.
ARACELI GARCÍACARRANZA BASSETTI
Es Doctora en Filosofía y Letras y es investigadora en la Biblioteca Nacional José Martí desde 1962. Ha publicado más de 20 libros. Ha realizado la Bibliografia de José Lezama Lima, Lisandro Otero y José Martí, además de la Biobibliografía de Eusebio Leal Spengler y Alejo Carpentier y la cronología de Fernando Ortiz y Alejo Carpentier para una edición de “El Siglo de las Luces”. Es curadora de la Colección Alejo Carpentier desde 1971 y además asesora de la Fundación Alejo Carpentier y jefa de Redacción de la Revista de la Biblioteca Nacional “José Martí”.
SEPTIEMBRE 15.2008 | 17
‘Carpentier no es la regla, es la excepción’ Alejo Carpentier no sólo transformó la vida de José Antonio Baujín, sino invadió también su casa, tanto que hasta su hijo lo reconoció como un miembro más de la familia
L
a obsesión de José Antonio Baujín por Carpentier se puede resumir en un hecho sencillo, pero revelador: dos de las primeras palabras que su hijo pronunció fue “abuelo carpentiero”, resultado de tanto escuchar el nombre del escritor en boca de su padre. A Baujín, decano de la Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana, no le resulta extraño que su obsesión sea compartida en un desierto que se erige al norte de un país que, dice, Alejo amaba profundamente. “Alejo por naturaleza fue un hombre puente y México es el lugar que en 1926 le descubre una dimensión no aislada, y subrayó esa idea de aislamiento que le produce el haberse formado en una isla, porque México le da una dimensión continental”. Gracias a esa cercanía, este país se convertiría en un privilegiado testigo que vio cómo Carpentier fue el cronista oficial de la magia que transitaba libre por las calles de un continente majestuoso que encontró en su pluma a un aliado con una 18 | semanariocoahuila.com
enorme capacidad creativa: “No es posible pensar en la gigantesca obra de Carpentier sin ‘Concierto Barroco’, que tiene como centro medular la cultura, el arte y el barroco mexicano”.
La influencia mexicana
Según José Antonio, México se insertó rápidamente como un punto de referencia vital para Carpentier y eso es rastreable no sólo en su producción literaria, sino también en su obra ensayística y su trabajo periodístico: “En el continente no hay una figura a la que él le haya dotado de una dimensión mayor como lo hizo con Diego Rivera, al pintor le da la posibilidad de asimilar la vanguardia de la estética y el pensamiento contemporáneo y darle una expresión autóctona. Eso lo encuentra por primera vez en la obra de los muralistas”. Cuba sería un punto de partida, mientras que México, el país que editó su obra, sería la pista desde donde alzaría el vuelo para recorrer el mundo y asentarse por una larga temporada en París. Quizá ese
vínculo con Europa llevaría a uno de los forjadores de la identidad Latinoamérica a ser acusado de ser un escritor eurocentrista, a pesar de que lo real maravilloso nacería como una visión opuesta al surrealismo y al realismo mágico europeo.
ficción está cimentada con base en investigaciones históricas profundas, lo cual no implica que sea de difícil acceso, es una obra que permite lecturas diversas. Las obras de Carpentier son disfrutables para todo tipo de público”.
Una obra fundacional
Un hombre adelantado
Al pedirle que enuncie cuáles son las obras del escritor que le parezcan fundamentales, el especialista entra en aprietos: “Es una pregunta difícil de contestar, y va más allá del problema del gusto literario, es muy difícil por que desde su primer novela ‘Ecue Yamba O’, –la cual quiso desaparecer–, realizó una novela fundacional por la utilización que hace de los mitos afrocubanos y afrocaribeños como ejes estructurales de la novela; desde esa perspectiva ya resulta una obra que funda por lo tanto un derrotero en el ámbito más circunscrito de la novela caribeña”. A Baujín le sudan las manos cuando se adentra en las obras de Carpentier, lo hace con cuidado, habla como si se tratara de sus hijos y le resultara imposible pronunciarse por un favorito: “En ‘El Reino de Este Mundo’ Carpentier se va a situar a la vanguardia de la narrativa lationoamericana, la cual cambia a partir de esta obra, ahí hay un hito, un punto de partida, pero, cuando llegamos a ‘Los Pasos Perdidos’ el escritor ha dado un giro nuevo a su propia literatura y al antecedente que tenía; eso mismo sucederá con ‘El Siglo de las Luces’ con la que va a marcar otros derroteros, y dando un salto hasta ‘Concierto Barroco’ y ‘El Arpa y la Sombra’ Carpentier ya está marcando el post-boom de la literatura latinoamericana, de manera que es una figura que no sólo se supera a sí mismo, sino que funda en cada momento una manera de hacer un arte de vanguardia dentro de la literatura latinomericana”. Como lector, Baujín no se cansa de enumerar los poderes curativos de cada uno de los títulos del brujo mayor, y a pesar de que en principio “Concierto Barroco” lo decepcionó y le fue difícil acceder a esta obra, asegura que sumergirse a la narrativa barroca de Carpentier no es nada difícil: “La originalidad del texto, la cita, el pastiche y la parodia hacen muy rica la lectura de su obra. Como se trata de un hombre erudito, toda su obra de
Como un gran clásico al que se disfruta leyéndolo es como José Antonio Baujín recomienda ingresar al mundo de un autor que enciende la luz sobre una realidad que va más allá de los maravilloso: “Hay que conocerlo como un fundador adelantado, adelantado con mayúsculas, como los adelantados históricos. En primer lugar como un autor que desde un conocimiento absoluto de la historia del mundo, y particularmente de América Latina, es una figura que lleva a la ficción la historia latinoamericana desde la más absoluta amenidad. “Lo presentaría como un fundador del nivel de Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez, que son figuras que no podemos desconocer de ninguna manera. Leer a Carpentier vale por varios cursos intensivos y tomos de la historia de nuestra región. Cuando hablamos de Carpentier hablamos de una figura verdaderamente excepcional, pero insisto en la idea de excepcionalidad porque en el caso suyo podemos ir directamente a la confirmación etimológica del término, se trata de la excepción, Carpentier no es la regla de los grandes nombres de la literatura latinoamericana, es una figura de excepción”. Finalmente, para ilustrar lo que Carpentier significa en su vida, Baujín hace una revelación que logra poner sobre la mesa una pasión que significa un motor importante de su mundo: “Sólo hace falta contar que mi hijo, quien ahora tiene 8 años, una de las primeras cosas que aprendió a decir fue ‘abuelo carpentiero’ que fue su traducción de un nombre que tanto escuchaba decir. Carpentier ha marcado mucho la concepción sobre el mundo en que vivo, sobre mi realidad cubana, latinoamericana, caribeña; mi historia personal está marcada por la obra de Alejo, me gusta decirlo de esa manera, porque creo que es la mejor forma de rendirle tributo a un escritor que te transforma la vida y te la transforma para bien”.
Es menester que los jóvenes en América conozcan a fondo los valores representativos del arte y la literatura moderna de Europa’. | ALEJO CARPENTIER
JOSÉ ANTONIO BAUJÍN. Doctor en Ciencias Filológicas de la Universidad de La Habana, coautor de “A Puertas Abiertas: Textos Críticos Sobre Arte Español”, editado por la Cátedra de Cultura Cubana Alejo Carpentier de la Universidad de Santiago de Compostela. Decano de la Facultad de Artes y Letras. Dentro de sus obras se encuentran: “Otro Visitador del Griffón”, “Del Donoso y Grande Escrutinio del Cervantismo en Cuba”, “Alejo Carpentier y España”.
SEPTIEMBRE 15.2008 | 19
Mar del descubrimiento, mar de la conquista, mar de la independencia, mar de la derrota y mar de la esperanza, el Caribe nace bajo el signo del barroco. Alejo Carpentier fue el primer novelista nuestro que entendió esto y por ello es el fundador de la etapa mås nueva y vigorosa de nuestra narrativa�. Carlos Fuentes, escritor.
especulaciones |
Carpentier Revisitado Para los privilegiados que todavía no leen a Don Alejo.
por Armando Sánchez Quintanilla
A
lejo Carpentier (1904-1980), es otro de los grandes escritores latinoamericanos que se quedó en la orilla del Premio Nobel de Literatura. Pasó un octubre tras otro sin recibir la llamada de la Academia Sueca de las Letras que lo consagrara y lo colocara en la lista de los habitantes del Olimpo. Alguna vez, en la Biblioteca Nacional José Martí de La Habana, comentó con Araceli García-Carranza, su biobibliógrafa: “nunca me darán el Nobel por mi filiación socialista y mi apoyo a la Revolución Cubana, me conformaría con el Cervantes”. Y sin embargo, Alejo sobrevive al decreto tácito de la Academia Sueca de las Letras, como el primer narrador de Cuba, como el maestro de toda una generación de escritores latinoamericanos, y como el precursor indiscutible del realismo mágico. En 1977, en efecto, le fue entregado el Premio Cervantes, para reconocerlo así como uno de los grandes exponentes de la lengua castellana, siendo el primer latinoamericano en recibirlo. Montado, quizá, en esa alfombra mágica del surrealismo que lo formó como intelectual en sus años tempranos descubrió, por exclusión, la verdadera magia de América Latina; lo real maravilloso está en su cotidianidad exuberante: “… qué es la historia de Amé-
rica Latina sino la historia de lo real maravilloso.” El barroco es lo suyo. Para muchos su mayor virtud, para otros su mayor defecto. Maestro del detalle, orfebre de la descripción, cronista de la precisión, Alejo subyuga al lector hasta la desesperación, con el encanto de un castellano casi virgen, inusual, incógnito, inaudito, castizo, florido, magistral. Dueño de una prosa fascinante, Alejo Carpentier es ante todo un culturólogo. Lo mismo diserta sobre música, poesía, que sobre arquitectura, pintura, danza, cine; sobre ópera, zarzuela y sainete. Ningún terreno de las bellas artes le es ajeno. El tema es lo de menos, él lo sabe todo. Es un monstruo de cultura. Usted aventure el tema, él ofrece el ensayo. Éstos son innumerables y son también el testimonio más fiel de su enorme erudición. El cineasta cubano Héctor Veitía, considera la ensayística de Alejo como lo mejor de su obra. La cultura caribe, la negritud, las calles, columnas y costumbres de La Habana, ocupan un lugar de privilegio en su narrativa más destacada, son su pasión recurrente. Hay que ver cómo ama este hombre a la isla, y cómo le puede su lejanía. Amigo entrañable de Diego Rivera,
amaba a México con pasión caribe. México está presente en una gran parte de su obra. Digamos que no se le cae de la boca, o mejor dicho de la pluma. A la menor provocación y siempre con el mejor adjetivo a la mano, se refiere a nuestro país con una admiración sin límites. La grandeza mexicana lo cautivó, le llenaba los ojos, el alma, la vida y la pluma. Él mismo cuenta cómo aprendió a entender el idioma maya, para jugar con los niños yucatecos cuyos padres habían huído de la península a la caía de Felipe Carrillo Puerto y su utopía socialista en el sureste mexicano. Sus dominios son vastos pero, para empezar, recomendamos la lectura de Los pasos perdidos, El reino de este mundo y por supuesto, El siglo de las luces. Sería por decirlo de algún modo, el Carpentier básico. A más de 100 años de su nacimiento y a casi 30 de su desaparición física, es tiempo de que el mensaje sea escuchado de nuevo, en el reino de este mundo. En el marco de la décima primera feria del libro, como un homenaje a Don Alejo Carpentier, instauramos la Cátedra de Cultura Latinoamericana que llevará su nombre, como un programa permanente para el fomento del libro y la lectura. Que ustedes lo disfruten. SEPTIEMBRE 15.2008 | 21
| retrato hablado
HÉctor Bonilla ‘Se acabó la función, no estén chingando, el que me vió, me vió, no queda nada’.
Revolucionario de corazón, actor por pasión y reconocido director y promotor del teatro, cine y hasta telenovelas de calidad. No es ni de izquierda ni de derecha, se considera apartidista, pero se declara luchador social desde su trinchera actoral. ‘Si no he agarrado un rifle es nomás porque no se contra quien disparar”, declara con desenfado. texto y foto: jesús castro
Retrato Hablado consta de una serie de preguntas en apariencia ingenuas, a veces triviales o hasta indiscretas. En realidad se trata de pequeñas instantáneas que de pronto desnudan, trazan un perfil y muestran los resortes íntimos de nuestro entrevistado. 22 | semanariocoahuila.com
Si usted fuera un libro, ¿qué libro le gustaría ser? El Quijote. ¿La obra de teatro en la que se rehusó actuar? En muchas que no valían la pena, no te podría decir una. ¿Qué diría su epitafio? Una vez les escribía a mis hijos: Y el epitafio que estarán pensando, por favor, que no sea una frase almibarada, escriban, ‘Se acabó la función, no estén chingando, el que me vió, me vió, no queda nada’. ¿Su posesión más preciada? Mi corazón y mi cabeza. ¿En cuál escenario se ha sentido más feliz? El teatro Juan Ruiz de Alarcón de la UNAM.
¿Cuál sería la escenografía para una obra de teatro sobre su vida? Un páramo pelón. ¿Qué está leyendo en este momento? Estoy leyendo muchas cosas de historia, no quiero ser pretencioso, pero es por una necesidad, estoy desarrollando un espectáculo de corte histórico. Ahorita sobre todo, libros sobre revolución, independencia y la reforma. ¿Dónde está su corazón: en el cine, teatro o televisión? En lo que esté bien hecho, hago teatro no porque no me guste la televisión. Quiero hacer mejor televisión, pero esa es otra cosa. Pero las tres cosas son apasionantes cuando se hacen bien hechas. ¿Dónde está el infierno? En la cabeza de la gente que lo necesita.
La vida vivida Ella: Disculpe, ¿usted es sacerdote? Él: Eh… No, ¿por qué? Ella: ¿Por qué se sonríe? Él: Porque no es la primera vez que me preguntan eso. Ella: ¿No? Pues es que, como lo vi leyendo… Él: Ya. ¿Por qué me preguntas que si soy sacerdote? Ella: Es que… Se parece al padre que nos casó a mi novio y a mí. Pensé que era usted. Él: Ah. ¿Y querías decirle algo? Ella: La verdad sí… Él: Si yo te sirvo… Ella: Pues… no tengo tiempo. Es que hay mucho trabajo. Él: No llevo mucha prisa. Voy a seguir leyendo un poco. Si tú/ Ella: No, no. El gerente del restaurante me puede regañar si me ve platicando. Él: Como quieras… Ella: Le agradezco mucho y disculpe… Él: No, no hay problema, no tienes que disculparte. Pero ¿estás llorando? Ella: Es que… Él: ¿Sí? Ella: No sé cómo decirlo… Él: … Ella: Y no sé si debo… Él: ¿Cómo te llamas? Ella: Lucía. Él: ¿Lloras por él, Lucía? Ella: Eh… no. Bueno, sí. ¿De veras usted no es sacerdote? Él: No. Ni se me antoja serlo. Ella: Yo nunca lo quise… Él: ¿A…? Ella: A mi marido. Al que era mi marido, creo. Él: No entiendo. ¿Ya no es tu marido? Ella: No. Él… se fue de la casa. Con otra… Él: Ah, ya entiendo. Y… Ella: Y me quedé sola, con mi hija. Tuvimos una hija. Por eso tuvimos que casarnos. Él: Pasa con frecuencia, ¿no? Ella: Sí, pero cuando le pasa a una es como si pasara por primera vez. Él: Es verdad. Perdona.
Más acá de la muerte Ella: No, no. No importa. La que debe pedir disculpas soy yo. Pero es que… necesitaba decírselo a alguien. Él: ¿Qué cosa? Ella: Que nunca lo quise, que agradezco que se haya ido, no me importa con quién. En realidad yo sigo enamorada, pero de… un muerto. Él: Enamorada de un muerto… Ella: Sí, de un muerto. En la casa de mi abuela hay muchas fotografías, ¿sabe? Son fotos muy viejas, como de la época de la revolución. En una de ellas hay un muchacho vestido como de militar, un muchacho que fue primo de mi bisabuelo o algo así. Eso me dice mi abuela. Me enamoré de él desde que lo vi por primera vez, siendo yo una niña. Él: Oye, qué interesante, Lucía. Eso quiere decir que estás no sólo enamorada de un muerto sino que… estás enamorada de un, no sé si decirlo… de un fantasma o algo así. Ella: Pues sí. Algo así. Él se llama, perdón, se llamaba Emilio. Por eso le puse Emilia a mi niña. Él: Precioso nombre. Ella: Sí, ¿verdad? Emilia… ¿Usted cree que sea un pecado? Él: ¿Enamorarte más acá de la muerte? Ella: ¿Más acá de la muerte? Qué padre se oye eso. Él: Amor constante más allá de la muerte… Ella: ¿Cómo? Él: Es un verso. Ella: Ah, un verso. Pues qué bonito verso. Amor constante más allá de la muerte… O sea que yo me enamoré de alguien que está más allá de la muerte… Él: Él sí. Tú estarías más acá, ¿no? Ella: ¿Y usted cree que mi amor lo alcance? Él: Eh… Me parece que sí, si lo amas tanto. Ella: Más que eso. Él: Entonces, definitivamente sí. Ella: Perdone. Tengo que irme. Ya me están llamando. Muchas gracias, ¿eh? Ah, y usted ¿cómo se llama? Él: Emilio precisamente, para servirte, Lucía.
Javier Treviño Castro. Poeta, dramaturgo, crítico de arte, director de teatro, prófugo de las artes plásticas e infatigable viajero. Autor de dos o tres libros de ingrata memoria, cruzó por una licenciatura en Letras y emprendió una maestría en una disciplina hermética. Por lo demás, su vida es inconfesable por escabrosa. Su correo: deprofundis2@yahoo.com.mx
SEPTIEMBRE 15.2008 | 23
| radar
por ESTEBAN CÁRDENAS escardenas@vanguardia.com.mx
Harvey Milk / Life... The Best Game In Town (Hydrahead, 2008)
E
n vista del lanzamiento del último disco de Metallica, que suena a un reciclado de su mejor material, pero más señorial, he decidido reseñar un disco de música pesada bastante más innovador e interesante. Harvey Milk es un grupo “metal” de culto, originario de Athens, Georgia. Escribo metal entre comillas por que esta categorización estigmatiza a la música pesada como algo bobo, y la verdad, su último disco Life...The Best Game In Town es todo lo contrario; si bien no es fácil de escuchar, sí es interesante e inteligente. Este es metal denso y espeso como melaza, angustiante y efec-
tivo, pero sin mayores triquiñuelas; es metal para ‘adultos’ ,técnicamente impecable y ambicioso, lleno de subidas, bajadas y atmósferas pesadas que se deconstruyen para revelar momentos frágiles. Mientras Metallica grababa baladas para MTV, el metal auténtico maduró y se convirtió en un monstruo inteligente, propositivo y vanguardista, completamente diferente al que conocía Metallica, que ahora regresa (demasiado tarde) para pedir perdón. Con influencias que van desde Stoner Rock hasta Motorhead, Life... The Best Game In Town definitivamente es uno de los mejores lanzamientos de metal que se vaya a escuchar este año.
Suena a...
Paranoia / Black Sabbath
Boris / Pink
Antes de que Ozzy Ozzbourne convirtiera en un circo mediático, el famoso rockero, más conocido por las nuevas generaciones por su idiota programa de televisión que por su música, lidereaba una de las bandas de rock más importantes de la historia. Este señor, con Black Sabbath, prácticamente inventó el metal. Es un poco redundante reseñarlo, pero Paranoid, su segundo disco, con su sonido nubloso y textural, ha inlfuenciado ha grupos como Harvey Milk a hacer una variante metalera denominada ‘stoner’, típicamente más lenta y densa que el metal rápido al que estamos acostumbrados. Paranoid es un disco de leyenda, una obra maestra en todos los sentidos y uno de los mejores discos de metal de la historia.
Los japoneses tienden a tomar algo anglosajón, obsesionarse con él y llevarlo al extremo. A veces lo mejoran, a veces no, pero el resultado casi siempre es interesante. Pink, de Boris, es el décimo LP de este grupo de metal oriental, que con este album se ganó un público más amplio. Es un disco de variados estilos, que van desde Stoner, hasta doomy trash, con una estética de improvisación punk muy interesante. Menos alucinado, experimental y profundo que sus trabajos previos, Pink conserva las texturas y las múltiples capas de distorsión de su obra anterior, pero con una actitud más pop. Este disco vale mucho la pena, tanto como introducción a esta banda, como a la vasta escena de música experimental japonesa.
24 | semanariocoahuila.com
(2005)
Om / Pilgrimage
(2007) Om está formado por la sección rítmica de Sleep, una banda que a principios de los noventa, junto con Kyuss, revivió el ‘stoner rock’ clásico originado por Black Sabbath. Pilgrimage, producido por Steve Albini, es su tercer disco y el mejor en su carrera. Pilgrimage (cuyo estilo es similar a los cantos de monjes tibetanos) está compuesto por cuatro canciones, tres de ellas son piezas densas y meditativas que duran más de 10 minutos y que a pesar de su espiritualidad, nunca olvidan sus raíces metaleras. Junto con grupos como Boris, Harvey Milk, y Sunn, Pilgrimage es un claro ejemplo de la evolución del metal hacia territorios más experimentales y un argumento sólido contra el estereotipo de superficialidad que se le adjudica a la música pesada.
videódromo Arrancame la Vida Roberto Sneider 2008
La cinta más cara en la historia del cine mexicano gastó bastante bien su presupuesto de 6.5 mdd, ya que la adaptación de la popular novela de Ángeles Mastretta resulta ser, a pesar de algunas fallas menores, una buena película. La historia cubre quince años en la vida de Catalina (Ana Claudia Talancón), una joven hermosa que a temprana edad se enamora y se casa con el general Andrés Asencio (Daniel Jiménez Cacho), un político de la vieja escuela mexicana. Catalina vive su despertar sexual con el general y ve en él la oportunidad de conocer el mundo. Sin embargo, entre más crece Catalina -o entre más despierta-, y más corrupto y poderoso se vuelve su marido, el amor se convierte en odio. Desde la perspectiva de una mujer, quien poco a poco descubre su independencia, ‘Arrancame la Vida’ hace un estudio crítico de la sociedad machista mexicana y de la política podrida post-revolucionaria de los treintas, que plantó la semilla para setenta años de unipartidismo descompuesto. Se trata de una radiografía al corazón de la corrupción mexicana y un estudio interesante sobre las políticas sexuales del país. Roberto Sneider hace el buen trabajo de mantener una perspectiva neutra y natural, que sólo es opacada por una voz en off innecesaria y cursi, y una serie de diálogos bastante teatrales y melosos, que ocurren sobre todo durante las escenas de amor. Los treintas son muy bien representados. Junto con la actuación de Jiménez Cacho, la dirección de arte es lo que más destaca ya que con un presupuesto modesto logra maravillas. Como él general Asencio, el veterano actor es un espectáculo bastante entretenido, y se nota su dedicación a un papel que cualquier actor mexicano envidiaría. Ana Claudia Talancón es adecuada, aunque es mejor como ama de casa sumisa que como una mujer independiente. A esta actriz le falta crecer, pero con esta cinta, ella y la industria fílmica mexicana han dado pasos agigantados. Aunque tiene fallas, este es cine constante y seguro de sí mismo, pero sobre todo, es cine que no exotiza nuestro país para ojos extranjeros, sino que voltea hacia adentro para criticar y estudiar nuestros orígenes.
tutubo | A falta de un video interesante esta semana, nos vemos obligados a compartir con ustedes este clip, que es de lo más fundamental, simple y vulgar. Un predicador de televisión gringo con problemas de gases. Lo sentimos, no encontramos nada más inteligente. Eso no quiere decir que no esté chistoso, pero bueno.
Video en
semanariocoahuila.com
isla desierta |
Pablo Serrano cree que más allá de los conocimientos históricos es necesario reflexionar sobre el pasado. El director de Investigación y Documentación del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México dijo a Semanario cuáles son sus historiadores de cabecera. 1. 2. 3. .
Enrique Florescano Alan Knight Luis González y González Carlos Martínez Asaad
SEPTIEMBRE 15.2008 | 25
Yo,
la peor de todas
CORPORATIVIZACIÓN DEL OFICIO
S
iempre se conoce gente nefasta, y más en este negocio. Los ejemplares de la miseria humana se arrastran por todo Saltillo, se esconden en las esquinas, en los Palacios de Gobierno, en las escuelas y callejones. Pero bien dicen que el enemigo está en casa, y así me pasó a mí. No me refiero a mi familia, sino a un tipo de esos horribles, que Dios creó con los residuos del barro de Adán. Hay quienes ven en esto toda una corporación o hasta una empresa establecida. Así era este sujeto, quien trataba de alimentar mi ego, mientras buscaba que yo alimentara su nariz; trataba de venderme ingenuidad y no pecados. A muchas de este negocio les pasa, se encuentran a algún fulano que las protege y administra a cambio de la mitad de sus ganancias, que sirve para patrocinarle a él una que otra cosa rara. Justo de esa medida era El Patrón de quien hablo: adicto, sabelotodo y sucio, se tomaba la libertad de pedir que te quitaras la ropa para ver que tal estaba la mercancía, como si hicieras casting para el negocio de tu vida. Aún y con mi habilidad para no caer en trampas, pero sí ser bastante tramposa, comencé a laborar en horarios nocturnos en el negocio del Patrón (me encantaría decirles el nombre, pero no se emocionen, no lo haré, no daré publicidad gratis a un montón de cabrones). Mi experiencia con él fue casi tan explotadora como la que tuve en el trabajo que perdí y que me llevó a laborar de acompañante.
Odio a esos tipos que ven Discovery Channel cinco minutos y creen saberlo todo’ El del Patrón, es todo un negocio establecido: cartera de clientes, página de Internet, tarjetas de presentación, pago por nómina, ajá, increíble ¿no? “Más que un servicio, una compañía” era su lema. Él jamás se movía, para eso existía Ella, quien secundaba sus órdenes. En Ella veía ese cliché de las relaciones con los proxenetas: les hace falta, sienten que no van a vivir sin ellos. Cualquier semejanza con un kilo de cois debajo de la cama es mera coincidencia. Odio a esos tipos que ven Discovery Channel cinco minutos y creen saberlo todo en el mundo. De verdad, así se las creía éste, un genio, el Carlos Slim de lentejuelas… Decidí dejar mi acta de renuncia. Siempre he tenido éxito, y me ha bastado con mis propias mañas. No necesitaba a ese Patrón que parecía caminar siempre con un letrero que decía: “Se vende hijo de puta con buenos modales, aproveche oferta por tiempo limitado” Saltillo es un ombligo, te enteras de todo, conoces a todos. Me enteré del quiebre en la bolsa de valores de este corporativo de putas. No les voy a decir quién me lo contó. Ni quién quebró, ni cómo… ellos saben bien, y como todo termina mezclándose con todo, el que esté libre de coca que tire la primera piedra.
Violetta Hetaira, ente incorpóreo que sirve para contar las hazañas de otro ente muy, muy corpóreo. Cronista descarada de las epopeyas íntimas; ejemplo de belleza vernácula y desolación nicotínica. Se considera una cortesana semi culta, con aspiraciones literarias, pictóricas y artesanales. La verdad es que ama la salsa y toda clase de ritmos tropicosos. Se mantiene del oficio, y vende menudo los domingos. Escríbele a: lapeordetodas@vanguardia.com.mx SEPTIEMBRE 15.2008 | 27
Claro que Ud. lo sabe Por Miguel Agustín Perales 1. Para refutar a quienes consideraban apóstatas a los partidarios de la Independencia, ... sostuvo en un sermón que el cristianismo había sido traído a México por Quetzalcóatl, quien era en realidad el apóstol Santo Tomás. o A) Fray Servando Teresa de Mier;; o B) Fray Marcos de Niza; o C) Manuel Omaña; o D) Fray Melchor de Talamantes.
2. La Constitución sancionada en Apatzingán, en ..., es nuestra primera Constitución independiente. o A) 1821; o B) 1810; o C) 1814; o D) 1824. 3. De las deliberaciones de los constituyentes, reunidos en ... surgió el Acta de Independencia. o A) Guanajuato; o B) Chilpancingo; o C) Guadalajara; o D) Querétaro. 4. A los numerosos títulos con que se le quiso honrar, Morelos prefirió el de ... o A) Continuador de Hidalgo; o B) Siervo de México; o C) Humilde Hijo de la Patria; o D) Siervo de la Nación. 5. Hasta donde se sabe, el de ... fue el primer complot independentista descubierto y abortado. o A) Querétaro; o B) Guanajuato; o C) Atotonilco; o D) Valladolid.
6. Según los historiadores, ... es el autor del proyecto de la Constitución de 1824. o A) Fray Servando Teresa de Mier; o B) Miguel Ramos Arizpe; o C) Andrés Quintana Roo; o D) Fray Melchor de Talamantes.
7. Al iniciarse la Guerra de Independencia, ... era el gobernador de la provincia de Coahuila. o A) Gaspar C. de Sosa; o B) Manuel Santa María; o C) Antonio Cordero; o D) Manuel Royuela.
8. ... es el nombre de el Niño Artillero.
o A) Narciso Mendoza; o B) Juan Nepomuceno; o C) Hermenegildo Galeana; o D) Joaquín Arias. Respuestas: 1) a, 2) c, 3) b; 4) d; 5) d; 6) b; 7) c; 8) a.
28 | semanariocoahuila.com
superméndez | El único superhéroe de Saltillo y la región (Incluyendo Ramos) Por J. Latapí
la lic ad ra |
Nadie es homogéneo, análogo, todos son una mezcla de… Una pizquita genética de fulanito, otra de menganito y una cucharadita de perenganito. Si no lo crees, ve cómo metes en una licuadora un tantito de éste, más del otro y un puñito de aquel, y luego verás quién sale:
Pedro Vargas
Gavilondo Soler
Marlon Brandon Alejo Carpentier
Poncho Aurelio
Benito
Gargamel
Cuauhtémoc Blanco
Ilustración: Graciela Monsivais
| escaparate
SEPTIEMBRE 1.2008 | 29
| el elevador
el viborón
¡Suben! Quien subió al escaparate nacional otra vez fue el Gobernador. Supuestamente se fue al Distrito Electoral para no interferir en la contienda pero cuál fue la sorpresa, que ya tiene agendadas una serie de entrevistas en medios nacionales.
¿Como en feria?
Y ahí va, como diría el hijo predilecto de Piedras Negras, Pedro Ferriz Santa Cruz, la pregunta de los 64 mil ¿Ya sabe usted a qué personaje de la vida y la historia local de la ciudad no incluyeron en el programa de la Xl Feria del Libro Saltillo 2008? Nada más y nada menos que al célebre y nunca bien ponderado Armando Fuentes Aguirre “Catón”. Sin duda, dicen los que saben, representa este hecho un error garrafal que sienta un precedente en la organización de la llamada ¡Fiesta de los libros!, fiesta a la cual el cronista de una y mil batallas no fue invitado. De inmediato, y no es para menos, la indignación ha corrido como reguero de pólvora entre la comunidad de artistas, funcionarios y políticos locales, que ven en este desaire una frenta a quien consideran una institución de las letras y el pensamiento coahuilense. En fin que de humanos es equivocarse, y como reza un sabio dicho popular, cada quien habla como le fue en la feria. Sólo habría que preguntarles a los escritores coahuilenses si esto es un error como muchos dicen, o un valiente acierto.
¡Bajan! Quien se cayó al abismo y nadie lo encuentra es el ex jefe de la Dirección de Seguridad Pública de Torreón, Alfredo Castellanos. Lo que no sabemos es si en el infierno hay teibolfiestas. Tampoco sabemos si hay caja chica... ¿cómo la estará pasando?
CINISMO
Lamentablemente los jóvenes del Icojuve nomás no escarmentaron con los trapitos al sol que les sacaron en las últimas dos semanas. Ahora resulta que los pupilos de Jorge Nuñez fueron repartidos entre las huestes de los cinco contendientes a diputados del PRI, para apoyar en y si antes ni se les veía en las instalaciones del flamante edificio de la juventud coahuilense, pues ahora menos. Lástima de tanta dizque remodelada, que no ha servido más que para que los muebles de oficina se estén echando a perder y las instalaciones solo las aprovechen las moscas.
| diccionario del diablo Venganza, s. Roca natural sobre la que se alza el Templo de la Ley.
30 | semanariocoahuila.com