Suplemento COMERCIAL abril de 2011
La boda del siglo
Guillermo y Kate
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staff director GENERAL Armando Castilla Galindo edición Laura Luz Morales DISEÑO Saray Colin producción Andrés Cruz FOTO: vanguardia-Dpa
PUBLICIDAD Jorge González 450 10 00 ext. 1500/1501 LA BODA DEL SIGLO es un suplemento especial del periódico Vanguardia. Oficinas: Bulevar Venustiano Carranza No. 1918-B colonia República Oriente, Saltillo, Coahuila. Impreso por el Grupo Editorial de Coahuila, S.A., de C.V. Distribuido por Repartovan Internacional, S.A de C.V. http://www.vanguardia.com.mx/ Saltillo, Coahuila
CIAL SUPLEMENTO COMER ABRIL DE 2011
La boda del siglo
FOTO: vanguardia-Ap
Guillermo y Kate Portada: Foto oficial del Príncipe Guillermo y Kate Middleton, tomada por Mario Testino
La boda
Familia real. La reina Isabel II, el príncipe Guillermo, el príncipe Felipe, duque de Edimburgo, y el príncipe Carlos.
del hijo de Diana MADRID.- Los príncipes ya no se casan con jóvenes de sangre azul, no se unen por conveniencia y sí por amor. Ya no importa que sus parejas tengan hijos o estén divorciadas. Y sólo dan el paso cuando están convencidos de que están preparados para afrontar el reto de la convivencia y la exposición pública. Si ha habido un príncipe que ha tenido en cuenta todas estas circunstancias ha sido Guillermo de Inglaterra, que huye del guión que tristemente escribieron sus padres. La noche antes de su boda, Diana descubrió que Carlos lucía unos gemelos que tenían grabadas dos “ces” entrelazadas. Eran el regalo de Camila, su amor escondido. Así supo que su novio se casaba con ella por conveniencia, no por amor. El tiempo demostró que en su matrimonio eran multitud. Diana fue la elegida porque pertenecía a una rancia familia de la aristocracia británica. Antecedente que no se da en la biografía de Kate Middleton. Por eso, aunque muchos intenten buscar parecidos entre ambas, de momento no los hay. Kate es una joven universitaria, hija de un piloto y una azafata que ahora regentan una empresa de fiestas infantiles. Sale desde hace
Guillermo y Kate están preparados para ser reyes en el siglo 21. Su matrimonio suavizará a la rígida monarquía de los Windsor ocho años con Guillermo, con el que lleva viviendo cinco. Su unión es todo menos precipitada, de ahí que la novia del príncipe se haya ganado el apelativo de “la paciente Kate”. Al preguntarle por su largo noviazgo, Guillermo bromeó: “Le he dado tiempo para arrepentirse”. Esos ocho años juntos, tuvieron una breve interrupción. Ellos mismos reconocieron que la separación fue determinante para decidir que estaban dispuestos a afrontar el reto de ser reyes en el siglo 21. Este largo noviazgo le ha permitido a Kate familiarizarse con las arcaicas costumbres de la
familia real británica y formarse para su papel de princesa. Quizá ésta es la clave de su, por ahora, éxito. Desde que se hizo público su compromiso sólo ha cosechado alabanzas. A los británicos les gusta cómo se viste, cómo sonríe, cómo amadrina barcos y estrecha manos. Porque ése ha sido su único papel como princesa en prácticas. Los británicos ven en ella a la perfecta sucesora de Diana, quien acercó la fría Monarquía al pueblo. Valor que Guillermo ha querido mantener vivo y que lo ha convertido en el preferido para suceder a Isabel II, desbancando a su padre, quien lleva más de 59 años esperando. Por eso el enlace reunió todos los ingredientes para ser la boda del siglo. Se casó uno de los miembros de la monarquía más importante del mundo, y lo que es más relevante para muchos: se casó el hijo de Diana. Guillermo y Kate saben que se tienen que ganar el puesto de reyes. La espera puede ser larga o corta. Todo depende de que Carlos y Camila les dejen paso o decidan seguir su camino al trono. En esta decisión pesará el recuerdo de Diana, que sigue vivo en muchos británicos. (© EL PAÍS, SL. Todos los derechos reservados)
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¿Un recuerdito? Los rostros del príncipe Guillermo y su ahora esposa, Kate Middleton, adornan todo tipo de recuerdos para los turistas que en estos días visitan Londres. ¿Qué puede llevarse para la posteridad? Hay desde las típicas tazas, hasta artículos que desbordan creatividad, como máscaras, muñecas tipo Barbie y hasta condones.
Vendedor. Fotos de la Realeza se venden en las calles londinenses.
FOTOS: vanguardia-Ap / efe
Pareja real. Máscaras para los que quieren ponerse un rato en los zapatos de los novios.
Edición especial. El transporte de Londres sacó esta tarjeta conmemorativa.
Juguete. La muñeca de Kate lleva puesto el vestido del anuncio oficial del compromiso.
Sexo seguro. Los condo los futuros esposos han sidnes con la imagen de o un éxito en ventas.
Se armaron las apuestas
¿En dónde besará
Guillermo a Kate?
LONDRES.- ¿Cuánto tiempo dejaría Kate esperando a Guillermo en el altar? ¿Qué color vestiría la reina el día de la boda? ¿Enrique estaría lo suficientemente sobrio para dar su discurso como padrino? Mientras los británicos, que aman apostar, desembolsaban dinero por sus temas favoritos relacionados con la boda real, los corredores de apuestas esperaban sacar provecho. “En términos de apuestas por la Realeza, la boda superó las expectativas”, dijo Rupert Adams, portavoz de la corredora de apuestas William Hill. “Pienso que alcanzaremos la misma cantidad de apuestas que se han hecho sobre la Realeza en los últimos 30 años”. En esta industria es difícil predecir, en parte porque la mayoría de los jugadores colocaban sus apuestas en las 24 horas anteriores al evento, pero los corredores británicos decían que las apuestas vinculadas a la boda real podrían superar el millón de libras (1.6 millones de dólares). Sólo unas monedas comparado con lo que se apuesta en deportes, pero una fuerte suma para los estándares de cualquier otra cosa en la industria del juego en Gran Bretaña. William Hill tenía apuestas sobre si Middleton iba a recibir un beso en la mejilla o en los labios cuando la pareja saliera al balcón del Palacio de Buckingham, si su padre lloraría cuando ella caminara hacia el altar y si el príncipe Enrique atraparía el ramo.
Entre las apuestas menos probables: que el vehículo de los novios se iba a descomponer afuera de la Abadía de Westminster; que Kate dejaría plantado a Guillermo en el altar o que el príncipe Enrique estaría demasiado ebrio como para concluir su discurso. La última opción pagaba 25 libras por cada libra apostada. Además, William Hill ofrecía 8 contra uno a que las cámaras de televisión que grabaron la boda recogerían al príncipe Felipe, marido de la reina Isabel II de Inglaterra, de casi 90 años, mientras se echaba una cabezadita durante el servicio. Otras de las apuestas a las que dio pie el evento real, fue la especulación con la posibilidad de que Victoria Beckham acudiría al acto vestida con uno de sus propios trajes, con gafas de sol negras dentro de la iglesia, o que su marido, David Beckham, llevaría un frac. Más improbable parecía que la ex Spice Girl fuera la misteriosa diseñadora del vestido que llevó la novia y que, hasta el último momento fue el secreto mejor guardado de los preparativos. En cuanto a las apuestas que escogieron como blanco a los protagonistas del enlace o a la familia real, los británicos se jugaron su dinero a adivinar si Kate firmaría un contrato prematrimonial, y si se pondría la tiara de la familia Spencer, o si su madre, Carole Middleton, mascaría chicle durante el servicio religioso. (AP y EFE)
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Apuesta. Algunos apostaron a que al príncipe Enrique se le pasarían las copas durante su discurso como padrino.
pie largo
extravagante. Apostado llevaría gafas de sol negras res afirmaron que Victoria dentro de la iglesia.
Sueñito.También estuvo en juego si el príncipe Felipe se mantendría despierto durante el servicio.
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El hijo del príncipe Carlos se ha ganado el corazón de los ingleses. El 59 por ciento de los británicos preferiría que él y no su padre heredara el trono de la reina Isabel II, pero eso suena difícil en el Reino Unido
Príncipe azul... Guillermo
con los pies en la tierra
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Infancia. Las primeras imágenes del príncipe Guillermo enternecieron al mundo. Desde pequeño conquistó a los británicos por su inteligencia y simpatía. LONDRES.- De su madre, la princesa Diana, heredó los ojos y el carisma, mientras que de su padre, el príncipe Carlos, tiene la amplia frente. Es deportista, culto y mide 1,91 metros. Es inteligente, tiene buenos modales y sentido del humor. En cuanto a temas de dinero, aunque no pueda seguir el ritmo a soberanos petroleros o herederos de grandes empresas, su dote asciende a millones. En resumen: Kate Middleton se casó hace unas horas con quien algunos consideran el perfecto yerno, y otros lo llaman un príncipe azul.
Infancia y universidad
Popularidad
Los británicos no quieren a Guillermo: lo adoran. También, o quizá debido a que se alejó conscientemente del revuelo público que rodeó a su madre. Todo un ejército de asesores cuida cada detalle para que la
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Sin embargo, el joven de 28 años no lo ha tenido siempre fácil. Las crisis matrimoniales de sus padres ya desde muy pequeño, su separación, las posteriores especulaciones de la prensa rosa y la temprana muerte de Diana, le afectaron notablemente. Resultan inolvidables las imágenes de 1997, cuando Guillermo, con la cabeza agachada, caminaba tras el féretro de su madre. En
aquel entonces, toda la nación se preocupaba por Guillermo y su hermano pequeño, el príncipe Harry. ¿Se desmoronaría el número dos en la línea de sucesión al trono o resistiría la tragedia? ¿Explotaría ante la presión de la opinión pública, por no decir el voyeurismo? Guillermo aguantó, hizo su prueba de acceso a la universidad y estudió Historia del Arte y luego Geografía en la prestigiosa universidad de St. Andrews. Allí conoció a su esposa, Kate. Entre tanto, terminó su formación como piloto de rescate de la Royal Air Force. “Tengo un trabajo que me gusta, el apoyo de mi familia y amigos y tengo a Catherine”, dijo feliz, recientemente en entrevista.
Funeral Inolvidable. En 1997, Guillermo y Enrique perdieron a su mamá.
opinión pública no discuta demasiado sobre la vida del joven príncipe. Sus amigos y colegas parecen haber sellado una especie de pacto de honor: ¡ni una palabra equivocada a la prensa! Junto a su hermano Harry, burló a los paparazzis el día de su despedida de soltero. “Fue una operación militar”, bromearon ambos más tarde. Al contrario que su padre, Guillermo sí conoce bien y desde hace años a su futura esposa. Kate debía conocer la casa real antes de decidirse si quería ser princesa e incluso, un día, Reina.
Un hombre normal
Incluso quienes critican la monarquía británica, que, encabezada por una Reina de casi 85 años, tildan de algo obsoleta, no pueden oponerse del todo a las relajadas maneras del príncipe. Guillermo no puede tomarse en serio mucha de la pompa y las estrictas reglas de palacio, se dice que ha comentado alguna vez. Y por eso, el príncipe es muy popular especialmente entre los británicos más jóvenes.
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Galante. El príncipe mide 1.91 metros, desde muy jovencito destacó por su porte.
Querido. Los británicos admiran su sencillez, que heredó de Diana, su madre.
Deportista. Guillermo practica varios deportes, entre ellos el tiro con arco.
Guillermo pasó incluso una noche al raso, en el centro de Londres, para entender mejor la vida de las personas sin hogar. Vive en un “cottage” (una casa en el campo) en Gales en lugar de en un palacio en la capital y comenzó a convivir con Kate en un piso de estudiantes durante la universidad. Amigos y compañeros siempre describen al príncipe como “totalmente normal” y “con los pies en la tierra”. Compra pizza congelada en el supermercado y cuando envía mensajes de texto con el teléfono móvil a su hermano Harry puede ser incluso un poco vulgar.
¿El HOMBRE PERFECTO?
Sucesión
Alguien común. Amigos y compañeros siempre describen al príncipe como “totalmente normal” y “con los pies en la tierra”.
Según una nueva encuesta, el 59 por ciento de los británicos preferiría que Guillermo, y no su padre, Carlos, heredara el trono de la reina Isabel II. Sin embargo, en el tradicional Reino Unido es difícil que este deseo popular se haga realidad. Con todo, Guillermo encarna la monarquía que los británicos quieren para el futuro: cercana al pueblo, joven y nada vanidosa. (DPA)
Pasatiempo. Otra de sus pasiones son las motocicletas de carreras.
Experiencias. El príncipe vivió la crisis matrimonial de sus padres desde pequeño, así como la temprana muerte de Diana. Multifacético. Es deportista, culto y mide 1.91 metros. También es inteligente, tiene buenos modales y sentido del humor. Hombre ideal. Por las cualidades de Guillermo, Kate Middleton se casó con un hombre perfecto y un verdadero “príncipe azul”. Humano. Pasó una noche al raso, en el centro de Londres, para entender mejor la vida de las personas sin hogar.
Piloto. El hijo del príncipe Carlos ha tenido una intensa preparación militar.
¿Quién no? Cuando envía mensajes de texto con el teléfono móvil a su hermano Harry, puede ser incluso un poco vulgar. El indicado. Guillermo encarna la monarquía que los británicos quieren para el futuro: cercana al pueblo, joven y nada vanidosa.
Al fin príncipe. El hijo de Diana practica desde muy pequeño el polo.
Responsable. Sus amigos lo describen como un hombre con los pies en la tierra.
Abierto. Guillermo destaca por su forma moderna de adoptar su papel en la realeza.
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La desde hoy princesa, de 29 años, se ha ganado la simpatía de la familia real y del pueblo británico
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LONDRES.- Cuando dijo “sí” a la petición de matrimonio del príncipe Guillermo, Catherine Elizabeth Middleton ya tenía bien claro lo que esto suponía. Ambos llevaban juntos más de siete años, aunque no hay datos oficiales. En ese tiempo, Kate tuvo que hacer frente a la persecución de los paparazzi y a los ataques de la prensa. Pero ahora, los medios y la opinión pública la adoran. La desde hoy princesa, de 29 años, ha sabido proteger tan bien su privacidad, que la casa real alaba su discreción.
Los orígenes
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Kate nació el 9 de enero de 1982. Es hija del piloto y empresario Michael y la ex azafata Carole. Sus parientes maternos eran trabajadores del carbón y barrenderos. Michael proviene de una familia de clase media, su padre era piloto y entre sus antepasados también hay juristas. Según los historiadores, por las venas de Kate incluso circulan restos de sangre azul: sus antepasados
‘Se está casa LONDRES.- Hubo un tiempo en el que los súbditos británicos veían a sus soberanos desde lejos. Pero eso es cosa del pasado. Los integrantes de la familia real ahora son mega celebridades al estilo de Hollywood: desde su celulitis, hasta su calvicie y sus noches de parranda, son seguidas con la misma intensidad con la que se persigue a los más famosos. Los monarcas se posicionan cada vez más en la categoría de estrellas desde que la madre de Guillermo, la princesa Diana de Gales, entró a la familia real con su carisma, alterándola para siempre. La imagen de Kate Middleton aparecía al lado de la de Catherine Zeta-Jones, la cantante Cheryl Cole y la modelo Katie Price, en las portadas de las revistas de celebridades. Las publicaciones
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ate Middleton
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va vida en
realeza
atlética. Desde niña, Kate se inclinó por los deportes, pasión que la mantiene en forma.
de Kate fundaron en 1987 un negocio de artículos de fiesta con el que se hicieron millonarios. Kate fue a caras escuelas privadas. Tras finalizar el instituto, viajó por el mundo durante un año y trabajó en proyectos humanitarios. En 2001 se matriculó en Historia del Arte en la prestigiosa universidad de St. Andrews, en Escocia.
El noviazgo los papás. Michael y Carole tuvieron a Kate el 9 de enero de 1982. del siglo 16 estaban emparentados ligeramente con los de Guillermo.
Infancia y adolescencia
Kate afirma tener una relación muy estrecha con sus padres y sus hermanos pequeños, Philippa y James. Creció en el condado inglés de Berkshire. Cuando tenía dos años, la familia se trasladó a Jordania, donde el padre de Kate trabajó durante dos años y medio. A su regreso, los padres
Kate y Guillermo se conocieron en la universidad. Primero se hicieron amigos y se mudaron, junto a otros estudiantes, a un piso compartido. Se cree que la relación comenzó en torno a las Navidades de 2003. En marzo de 2004 se habló por primera vez de Kate como la novia del príncipe, cuando ambos fueron vistos juntos durante unas vacaciones de esquí. Al terminar la universidad, Kate comenzó a trabajar a tiempo parcial en la cadena de moda Jigsaw. Sin embargo, las malas lenguas la tildaban de vaga y decían que su vida consistía en esperar a Guillermo, ir de compras y hacer deporte. En la primavera de 2007, Kate y Guillermo
se separaron temporalmente, pero pronto volvieron a estar juntos.
La personalidad de Kate
Se sabe poco sobre la “verdadera” Kate. A lo largo de los años y pese al gigantesco interés de los medios, la joven se las ha arreglado para mantener su privacidad. Antes de la entrevista oficial que dieron en televisión tras el anuncio de su boda, muchos no habían escuchado nunca su voz. Se la considera madura y de naturaleza simpática y cariñosa. En los cuatro actos oficiales que hasta la fecha ha realizado junto a Guillermo se alabó su apertura, simpatía y naturalidad.
Su futuro
Además del enorme interés público en todo lo que se pone, hace o dice, de momento no podrá librarse de las comparaciones con la madre de Guillermo, Diana. Se espera, sin embargo, que haya pocos paralelismos entre ambas mujeres. Mientras que Diana era jovencísima e inexperta cuando se casó con Carlos, Kate sabe perfectamente lo que le espera. (DPA)
estrenó su casa. La familia Middleton s. ado pas s escudo en día
ando con la fama’ también prometían chismes sobre los momentos más caóticos de la boda real, y presentaban titulares como “Amigos preocupados por delgadez de Kate’’. La pareja real estuvo incluso en la portada de TV Times, pues la unión fue el evento televisivo del año.
La ‘magia’ de Lady Di
Pero no siempre ha sido así. Lady Di introdujo el elemento “celebridad” a la realeza. “Cuando era pequeña pensaba que la familia real era inocua, pero un poco aburrida”, señaló la novelista Mónica Ali, cuya obra “Untold Story” (La historia no contada), imagina un futuro alternativo en el que la princesa Diana sigue con vida. “Fue realmente cuando Diana entró en el panorama que las cosas empezaron a cambiar. Ella dividió a
la opinión pública. Mucha gente la adoró, algunos no la querían, pero todos tenían una opinión sobre ella. “Ella introdujo el elemento de celebridad, para bien o para mal”, sentenció Ali. “Untold Story”, que ya está a la venta en Gran Bretaña y llegará a Estados Unidos en junio, narra un futuro en el que Diana no muere en el accidente automovilístico de 1997. La novela, que reflexiona sobre el peso de la fama, cuenta que la princesa fingió su muerte, cambió su nombre y empezó una nueva vida en un pequeño pueblo estadounidense. “Kate no solamente está entrando en la familia real”, dijo Ali. “Ella se está casando con la fama. Está entrando en el escenario de las primeras damas. Competirá con Michelle Obama y Carla Bruni”. (AP)
orteros la persiguen, discreta. Aunque los repner su privacidad. nte ma o la joven ha lograd
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Impecable. La ahora esposa del príncipe Guillermo luce perfecta en los eventos oficiales de la familia real. Su sello: faldas por encima de la rodilla y vistosos sombreros.
La moda según Kate
Casual. En el día a día, Kate es de lo más normal. La mezclilla y las botas altas son sus mejores amigas.
Middleton ha sido alabada por tener un estilo propio, elegante y a la vez más moderno. A diferencia de otras mujeres de la realeza, ella tiene un genuino gusto por la moda.
Gala. Siempre con el cabello suelto, Middleton opta por los vestidos de un solo tono, pero en colores llamativos.
La boda del siglo Su historia de amor
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De compañeros de piso a recién casados: Kate Middleton, al lado del príncipe Guillermo, ha vivido el romance soñado por millones de jovencitas en el mundo LONDRES.- El príncipe Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono británico, y su ahora esposa, Kate Middleton, se conocieron hace nueve años. Éstas son las etapas de su relación: 2001: El príncipe Guillermo y Kate se conocen en la universidad escocesa de Saint Andrews. Sus habitaciones en la residencia de estudiantes se encontraban muy cerca la una de la otra. Los dos estudiaban Historia del Arte.
n Junio
de 2003: La casa real británica desmiente los rumores sobre una relación entre Guillermo y su amiga Jecca Craig. Ese mes, Kate acude al Palacio de Windsor para celebrar el cumpleaños 21 de Guillermo.
n Septiembre
n Abril
de 2002: Guillermo y Kate buscan piso para compartir con otros amigos en su segundo año universitario. Se mudan en septiembre.
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Mayo de 2003. Una de las primeras fotografías publicadas muestra a la pareja sumida en una conversación durante un partido de rugby.
FOTOS: vanguardia-Ap / archivo
¿Un cuento de hadas? n Diciembre
de 2003: Después de la separación de Kate y su novio, se da por hecho que ella y el príncipe son pareja.
n
Marzo de 2004: Los dos son fotografiados esquiando juntos. La casa real no desmiente que sean pareja. Guillermo declara que no quiere casarse hasta que “tenga al menos 28 o 30 años”.
n Junio
de 2005: Kate y Guillermo se licencian en la Universidad de St. Andrews y lo celebran el mismo día, junto con sus familias.
Enamorados. La pareja lleva siete años de relación.
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n Marzo
de 2007. Guillermo inicia su formación militar en Camp Bovington (Dorset), en el sur de Inglaterra.
n Abril
de 2007: Los medios británicos informan de la separación entre Kate y Guillermo. Entre los motivos se menciona que el príncipe se siente demasiado joven para casarse.
n Junio
de 2007: Vuelta a los titulares: hay rumores de que Guillermo quiere empezar de nuevo. Son vistos juntos besándose y bailando en una fiesta del ejército.
n Julio
n Enero
de 2006: Se fotografía a la pareja besándose. Poco después, el príncipe comienza su formación en la academia militar de élite de Sandhurst.
n Diciembre
de 2006: Kate aparece por primera vez como invitada en un acto de Estado con la Reina. Se trata de la jura de Guillermo como oficial en Sandhurst. Aumentan las especulaciones sobre un posible compromiso.
de 2007: Kate y Guillermo acuden juntos a la fiesta de gala por el cumpleaños 60 de Camila, la esposa del príncipe Carlos.
n Enero
de 2008: La pareja congela sus planes de boda, según los medios. La carrera militar de Guillermo se antepone.
n Enero
de 2010: La pareja pasa Año Nuevo en Birkhall, la residencia del príncipe de Gales en Escocia. Dos semanas después, Kate asiste a la graduación de Guillermo como piloto de helicóptero. n Noviembre
de 2010: Clarence House, residencia del príncipe, anuncia su compromiso. Una semana más tarde, ¿la fecha?: el 29 de abril. (DPA)
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La fecha. Una semana más tarde del anuncio oficial del compromiso, se dio a conocer también la fecha de la boda: el 29 de abril de 2011.
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Anillo. Guillermo le entregó a Kate el anillo que perteneció a su madre, la princesa Diana. Es una joya de zafiro y diamantes.
FOTOS: vanguardia-Ap / efe
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Laura Luz Morales
El príncipe Guillermo y Kate Middleton unieron sus vidas en Londres. Aunque hubo cientos de últimos detalles que desde México no se percibieron, la Abadía de Westminster y millones de espectadores fueron testigos del enlace matrimonial más importante de la monarquía en los últimos años. Paso a paso, aquí la historia del compromiso que marca el rumbo de la realeza mundial.
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Pareja. El príncipe Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono británico, conoció a su novia Kate Middleton en la universidad escocesa de Saint Andrews, hace nueve años. Se dice que como pareja tienen más
de siete años juntos, pero formalmente se destapó su romance en 2006.
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Compromiso. En 2007, Kate y Guillermo se separaron un corto tiempo, uno de los motivos
que se mencionó era que el príncipe no estaba listo para casarse. Dos meses después se les volvió a ver juntos. En noviembre de 2010, Clarence House, residencia del príncipe Carlos, anunció formalmente el compromiso.
Réplicas. Decenas de fábricas situadas en la ciudad china de Yiwu se apresuraron a producir copias del anillo para responder a la demanda mundial. El joyero Zhou Mingwang dijo que aprovechó la oportunidad de hacer las réplicas del anillo en cuanto se anunció el compromiso real.
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Ajuar. La tiara y el vestido fueron un misterio hasta el último momento. En medio de múltiples rumores, todo apuntaba a que la elegida sería una diseñadora desconocida, Sophie Cranston, británica de 34 años.
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Peinado. Pero no sólo el diseño del vestido estuvo bajo total secreto. El peinado fue otro componente que la novia lució ante el mundo entero. De hecho, el peinado de la futura princesa acaparó los portales de moda de todo el mundo.
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Tiara. En cuanto a la tiara, todas las apuestas rondaron sobre la colección de la Corona Británica, en la que se incluyen la tiara de la Duquesa de TeckDiamon, la Rosa de Strathmore y el Durbar de Delhi.
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razones que la convirteron en
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Audiencia. El despliegue televisivo fue impresionante, se preveía que 2 mil millones de personas a nivel mundial vieran en vivo la transmisión de la boda.
Realeza. Dentro de los invitados destacaron 46 miembros de la realeza extranjera, entre ellos la reina Sofía de España y los príncipes de Asturias; el rey Constantino de Grecia y su esposa, la reina Ana María, así como los príncipes de Orange, Guillermo y Máxima de Holanda. También figuraban el príncipe Alberto de Mónaco y su prometida, Charlene Wittstock, y el príncipe Felipe y la princesa Matilde de Bélgica.
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Recinto. El enlace se realizó en la Abadía de Westminster, que cerró sus puertas al público 48 horas antes de la ceremonia para instalar las cámaras de televisión y establecer una zona de seguridad.
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Bajo perfil. La pequeña abadía frente al Parlamento, uno de los lugares más visitados por los turistas en Londres, fue elegida por la pareja con el objetivo de que la ceremonia tuviera un perfil más bajo que la celebrada hace 30 años entre el príncipe Carlos y la fallecida Diana Spencer, los padres del novio, en la catedral de St. Paul.
Corresponsales. Para lograr que una de cada cuatro personas en el mundo fuera testigo del enlace entre Kate y Guillermo, se acreditaron a 8 mil reporteros.
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Transmisión en México. Televisa y TV Azteca trasmitieron en vivo desde Londres la boda real. La televisora de San Ángel envió a Adela Micha, Leonardo Kourchenko y Monserrat Olivier, mientas que la abanderada de la televisora del Ajusco fue Ana María Lomelí. La mayoría de las cadenas de televisión de paga también cubrieron el evento.
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Invitados. La lista oficial incluyó a mil 900 invitados, quienes asistieron al servicio religioso. Ésta fue dada a conocer el 23 de abril por Clarence House, residencia oficial del príncipe Carlos.
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Padrinos. Enrique, el hermano más joven del príncipe Guillermo, fue su padrino, mientras que la hermana de Kate, Philippa, fue su madrina.
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Famosos. Entre las celebridades invitadas, se encontraban el futbolista David Beckham y su esposa Victoria; el actor Rowan Atkinson (“Mr. Bean”), el cantante Elton John junto a su marido, David Furnish, así como el cineasta británico Guy Ritchie, que estuvo casado con la cantante Madonna.
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Ningún jefe de Estado. Al tratarse del heredero del heredero, no se invitaron a jefes de Estado, por eso no estuvieron ni Barack Obama, presidente de Estados Unidos, ni Nicolas Sarkozy, de Francia.
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Polémica. La ausencia de los dos últimos primeros ministros de Gran Bretaña, los laboristas Tony Blair y Gordon Brown, de la lista de invitados, contrastó con la presencia de dirigentes conservadores y representantes de familias reales de varios países de dudosa reputación democrática, y en especial la
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del príncipe heredero de Bahréin, Salman bin Hamad al Khalifa, que anunció que no acudiría a la ceremonia. Al menos 30 personas han muerto en ese emirato del golfo Pérsico en las revueltas para exigir más democracia, que comenzaron en febrero.
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Visión. En la Abadía de Westminster, que en realidad está formada por dos iglesias unidas, la familia real británica y la familia de Kate Middleton vieron bien de cerca la ceremonia, mientras que el resto de los invitados la siguieron a través de unas pantallas de video instaladas en el templo.
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Flores. Los adornos florales que engalanaron la Abadía de Westminster procedían, en su mayoría, de los jardines de la reina Isabel II, concretamente de los que rodean el castillo de Windsor, así lo anunció el florista Shane Connolly, famoso por sus creaciones, muy naturales, y quien asumió la decoración en la boda del padre de Guillermo, el príncipe Carlos, y Camila.
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Ensayos. El miércoles se realizó un ensayo general de la música, y ayer hubo un ensayo para los religiosos que oficiarían la ceremonia.
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Oficio religioso. El deán de la abadía de Westminster, John Hall, dirigió el oficio religioso; el arzobispo de Canterbury, el obispo de Londres, Richard Carew, leyó la homilía, y el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, los convirtió en marido y mujer.
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Amistad. El obispo de Londres, que en las últimas semanas confirmó a la novia en la fe anglicana, es amigo personal del príncipe Carlos y conoce desde hace muchos años al príncipe Guillermo. Fue el encargado de oficiar el funeral de Diana de Gales en 1997.
Altar. Se anticipaba una “avenida arbórea” a lo largo del camino que conducía al altar, anunció Connolly. En total, hubo seis aceres campestres ingleses y dos hayas blancas, que se colocaron en tiestos pintados en consonancia con los colores del templo. Al parecer, algunos de los árboles medían hasta seis metros de alto. Tras la boda, serán trasplantados en los jardines reales.
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Turismo. La abadía reabrirá sus puertas al día siguiente de la boda y los visitantes podrán disfrutar de un nuevo tour especial relacionado con la boda, sólo 24 horas después del esperado evento.
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Desayuno. Sólo 650 invitados asistieron a la recepción que la reina Isabel II ofreció después de la boda en el Palacio de Buckingham. Los convidados almorzaron de pie y a base de canapés. Los cocineros prepararon 15 para cada persona.
Incógnita. La gran pregunta era con relación al saludo final que haría la pareja desde el balcón del Palacio de Buckingham, ya que no fue posible construir una marquesina, por lo que no se descartaba (siempre y cuando las lluvias fueran torrenciales) que los recién casados abrieran los paraguas.
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Menú. El palacio ofrece normalmente ocho tipos de canapés fríos y cinco calientes. Las especialidades incluyen salmón ahumado, crepes de hierbas, empanadas de Cornualles y rollos de salchicha.
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Vinos y postre. Para acompañar las viandas hubo champán, vino espumoso y una limonada hecha con sales de Epsom, una especialidad del palacio. También hubo diversas tartas, diseñadas por la repostera británica Fiona Cairns.
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Recepción. A este almuerzo le siguió una recepción por la noche, ofrecida por el príncipe Carlos en su residencia de Clarence House, para unos 300 invitados. Después de la comida, se preparó un baile.
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Noche previa. Kate Middleton pasó su última noche como soltera en el hotel londinense de lujo Goring. La ahora princesa ocupó la mejor suite del edificio, acompañada de su familia.
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Lluvia. El Servicio Meteorológico de Londres pronosticaba fuertes lluvias e incluso tormentas eléctricas para hoy, por lo que se debieron hacer algunos cambios de última hora.
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Carroza. Estaba previsto que Guillermo y Kate, una vez casados, hicieran el recorrido desde la Abadía de Westminster al Palacio de Buckingham en la carroza descubierta State Landau, construida para el rey Eduardo VII en 1902, pero de llover, se utilizaría la Glass Coach, una carroza hecha en 1881 para el alcalde de la City de Londres (centro financiero), pero que en 1911 pasó a ser utilizada por la familia real.
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Seguridad. La policía prometió levantar un “cordón de acero” a lo largo de la ruta que seguirían los recién casados desde la Abadía de Westminster hasta el Palacio de Buckingham. “Pondremos zonas estériles, utilizaremos fuerzas anti terroristas, cerraremos carreteras y utilizaremos dispositivos de búsqueda y detención”, dijo una fuente de la Policía británica.
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Disturbios. Sin embargo, el peligro más concreto provenía de las filas anarquistas. Fue una de las operaciones de seguridad más caras y de más alto nivel vistas en Londres, con francotiradores posicionados en los tejados y agentes vestidos de civiles que se mezclaron con la multitud de curiosos.
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Cierre de lujo. Según los organizadores, el saludo del balcón no sería modificado, porque como broche final del evento se preparó el vuelo rasante de varios aviones de la Real Fuerza Aérea británica sobre la residencia oficial de la reina Isabel II. Se incluyó a los siguientes aviones de guerra: un Lancaster, un Hurricane, un Spitfire, dos Tornado GR4 y dos Typhoons.
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‘Bodamanía’. A unas horas del evento, la “bodamanía” invadió las calles británicas, con banderas colgadas en tiendas, bares y restaurantes, además de carteles con las fotos de Guillermo y Kate y felicitaciones para la pareja.
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Campismo. Como era de esperarse, un británico vestido con un traje de la “Union Jack” y un gorro se instaló muchas horas antes frente a la abadía para tener la mejor vista del enlace. Era John Loughrey, de 56 años, quien se convirtó en el primer espectador en ocupar un espacio.
La boda del siglo 40
Puntualidad. Para que los curiosos no perdieran un detalle, la casa real publicó el horario oficial. Entre las 8:15 y las 9:45 horas de Londres (De las 02:15 a las 03:45 horas de México) los invitados, excepto la familia directa de los novios, tomaron asiento en la Abadía de Westminster.
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Llegada del novio. A las 10:10 horas de Londres (04:10 en México) el príncipe Guillermo y su testigo, el príncipe Harry, partieron desde Clarence House.
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Llegada de los primeros miembros de la realeza. A las 10:20 horas (04:20 en México) los miembros de las casas reales extranjeras llegaron al templo, procedentes del palacio de Buckingham; a las 10:35 horas (04:35 en México) miembros de la familia real británica (foto) como la princesa Ana y su esposo, Timothy Laurence; el príncipe Andrés y su hija, la princesa Eugenia; el príncipe Eduardo y su esposa, Sophie, partieron desde el Palacio de Buckingham a la abadía.
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Llegada de la familia real. A las 10:38 horas (04:38 en México) el príncipe Carlos y Camila salieron de Clarence House hacia la abadía, mientras que a las 10:40 horas (04:40 horas de México), la reina Isabel II y el príncipe Felipe partieron desde el Palacio de Buckingham.
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Llegada de la novia. A las 10:51 horas (04:51 en México) Kate y su padre salieron del hotel con rumbo a la abadía.
| vanguardia | Abril de 2011
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Boda real. A las 11:00 horas de Londres (05:00 en México) comenzó la ceremonia, retransmitida en directo a través de los altavoces colocados a lo largo de la ruta, que luego siguieron a los novios.
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Recorrido. En punto de las 12:15 horas (06:15 en México) comenzaron el recorrido de los recién casados con carruajes y caballería, en dirección al Palacio de Buckingham.
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Saludo. A las 13:25 horas (07:25 en México), la reina, los novios y los miembros más allegados de la familia real salieron al balcón del palacio a saludar. Se esperaba el beso de los novios, ya convertidos en marido y mujer.
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Noche de bodas. Tras el “sí quiero”, la pareja pasará la noche de bodas en el Palacio de Buckingham y mañana, muy probablemente, irá a la residencia real de Balmoral para preparar el gran viaje matrimonial.
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Luna de miel. Aunque no se ha revelado de manera oficial el destino al que viajarán los recién casados, se ha especulado que podría ser Australia, donde la pareja pasará dos semanas.
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Trabajo. Estarán ahí menos de lo que esperaban, pues él tiene que volver al trabajo como piloto de rescate. El viaje empezará unos tres días después del enlace. (Con información de © EL PAIS, SL. Todos los derechos reservados, EFE y DPA)
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