Vestigios de Agny Duránt by vargas.ser.fepr

Agny Durรกnt

Vestigios estado Vargas

Vestigios

© Autor: Agny Durant © Fundación Editorial El perro y la rana, 2018 Centro Simón Bolívar, Torre Norte, piso 21, El Silencio, Caracas - Venezuela, 1010. Teléfonos: (0212) 768.8300 / 768.8399. comunicaciones@fepr.gob.ve editorialelperroylarana@fepr.gob.ve www.elperroylarana.gob.ve www.mincultura.gob.ve/mppc/

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Red Nacional de Escritores Socialistas de Venezuela / Vargas

Consejo Editorial Popular Marilyn Gutiérrez / Maritzol Patiño /Vanessa H Guía. Diagramación: Escarlú H Mata B Corrección: Marilyn Gutiérrez / Maritzol Patiño Edición: Sistema de Editoriales Regionales - Vargas Impresión y montaje: Carla J Hernández L

Depósito Legal: lf-DC2018001950 ISBN 978-980-14-4333-9

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

Vestigios Agny Durant

El Sistema Nacional de Imprentas Regionales es un proyecto editorial impulsado por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, a través de la Fundación Editorial El perro y la rana, en corresponsabilidad con la Red Nacional de Escritores Socialistas de Venezuela. Este sistema se ramiﬁca por todos los estados del país, donde funciona una imprenta que le da paso a la publicación de autoras y autores, principalmente inéditos. Cuenta con un Consejo Editorial integrado en su mayoría por promotoras y promotores de la cultura propia de cada región. Tiene como objetivo fundamental brindar una herramienta esencial en la difusión de ideas y saberes que contribuyan a la consolidación del Poder Popular: el libro, como documento y acervo del pensamiento colectivo.

Dedicatoria A Dios que me permitió existir. A mis padres que me concibieron, me reconocieron y me quisieron. A mi Abuelita Migia, que lleno de encantos mi infancia. A mis cuatro HIJOS que tengan la certeza de que los amo y perdonen por lo que no he podido hacer por ellos. A mis queridos y entrañables hermanos. A la vida misma, que me ha permitido erigirme ante las caídas a pesar de todos los avatares, siempre, al ﬁnal me sonríes. A mis pocos e inmejorables amigos, que han estado conmigo a pesar de toda circunstancia.

PRESENTACIÓN Escribir con sentimiento desgarrado es un privilegio de nacimiento. Es plasmar en el papel, con toda claridad, el caudal de amor y pasión que a simple vista no se detecta. “Vestigios” es la huella, el residuo, la señal de toda esa ingenua ternura apasionada, conmocionada por ese dolor que sólo un poeta verdadero logra plasmar en un papel, liberando esos profundos sentimientos, dando rienda suelta a ese pesar por amor desbocado que soñó con ser “Feliz para siempre”. Este libro, estos poemas, son la constancia de la existencia de su creadora, sus emociones nítidas y rebosantes, muchas veces, de un gran dolor, otras, de inmensas alegrías, de amores y desamores. Gracias a Dios existe el talento de la palabra escrita y en este poemario de Agny Durant, ni un solo sentimiento ha pasado por su vida sin dejar huella, vestigios de esos amores y que se convierten en la musa que alimenta el espíritu de una verdadera poeta. M

PRÓLOGO La amiga Agny Durant me ha solicitado el prólogo del presente intimismo poético, que más que un honor es un verdadero compromiso con los sentimientos encontrados hechos poesía, puesto que el pedimento llega en una etapa colmada de contradicciones, donde la energía creativa se reﬂeja a través de la pintura, y cuando me dedico a la creación pictórica no escribo, o lo hago muy poco. Sin embargo asumí el compromiso después de leer sus poemas y descargas, porque ellos mismos están arropados por un manto de contradicciones. Estas letras, frases y versos surgen en el momento de un rompimiento sentimental-amoroso de pareja, por lo tanto son composiciones muy íntimas de la autora, por eso, en un principio pensé que no debían ser compartidas con un público lector. ¿Por qué dar a conocer públicamente estos momentos de ira, de desasosiego, de impotencia, de frustración y en especial de tanta intimidad?... Una segunda lectura me hizo cambiar de opinión porque es importante reconocer la valentía de esta pequeña-buena creadora-expresiva mujer. De seguro muchas y muchos se identiﬁcarán con su manera de ver y expresar estos momentos difíciles de la separación.

...Y entonces comprenderás que te lo di todo sin medidas sin pedir nada! y tú solo me diste migajas de tu amor tal vez por compasión! Agny, ha entendido muy bien que la vida nuestra, en este plano terrenal es cíclica, por lo tanto, tomar caminos separados no debe convertirse en un trauma de vida o muerte, sino que es parte de las vivencias que irremediablemente debemos afrontar con naturalidad en algún espacio de nuestro respirar. Aunque a veces lo exprese con rabia, sus poemas nos pasean por una rica gama de matices y tonalidades rítmicas que van desde el amor más puro, sublime, hermoso e ideal hasta el sarcasmo más indecoroso. ...déjame decirte en este suave arrullo que tan solo un murmullo dejaste en mi ruedo y tu alevosa burla me causó fue un rasguño! Es decir, esta confesión hecha poesía, desde lo profundo del alma, Agny la convierte, con su verbo suave, libre y fuerte a la vez, en una pintura que engalana la vista del corazón. Por lo tanto, reaﬁrmo, orgulloso de rozar sus manos, el placer de haber asumido el compromiso, porque compartir estas destemplanzas de la existencia, de momentos difíciles servirá de estímulo a muchas almas golpeadas por el desamor, a sentir que de las experiencias no tan buenas pueden surgir sentimientos hermosos, o maneras hermosas de hacerlos ver.

Es así como deseo expresar mi admiración por esta mujer cargada de sensibilidad exquisita que hace de la vida una poesía, y de los momentos difíciles una lírica sutil. Con su lectura, estoy seguro, amiga lectora, amigo lector ustedes sentirán que los tragos amargos tienen algo de dulzura. A

No hay escuelas, hay poetas. El verdadero artista comprende todas las maneras y halla belleza bajo todas las formas. R

Nostalgia en el mar Aquí… En la inmensidad del mar donde las horas se hacen más placenteras y el recuerdo es infinito siento aquí la brisa húmeda del mar besar mi rostro y anhelo entonces su presencia. Al sentir las olas acariciar tiernamente mi frágil cuerpo añoro, melancólica tus caricias y tus besos que en aquel momento, embriagado de amor, tú me brindaste. Así, como allá en la inmensidad se siente al mar unirse con el cielo así sentí yo, fundirse tu cuerpo con el mío en aquella entrega de amor y de locura… El mar… Trae a mi mente tu recuerdo… Al ver al rabioso oleaje azotar con furia la delicada orilla… Semejante a ti cuando furioso de pasión y ardiente amor me diste de beber la savia de tu cuerpo y de tus besos que tan calmadamente yo esperaba…

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Así… Como al atardecer se ve al mar calmado y sereno cansado ya de llevar sus besos a la tranquila orilla Así eres tú… Así te siento… Sereno, calmado… Queriendo descansar sobre mi pecho la súbita erupción de tus deseos después de haber volcado en mí la furia de tu amor… Y de tus besos.

Conversando con mi almohada El corazón henchido de emoción lo siento palpitar cuando te veo en tu cara de niño me recreo y tu porte de hombría me apasiona. Más sé, que no debo ilusionarme con tus gestos y menos con tus besos sé que no debo enamorarme porque tú no compartes mi sentir y a la vez, es tan difícil evitarlo... De añorar esos momentos sufro tanto y el ansia de gozar me hace buscarte. más sé que debo, de tu vida, yo apartarme y tan sólo, al pensarlo de rubor me espanto. Tú no sabes que en mis noches solitarias busco tu imagen apenas en el sueño se hacen largas las horas del encuentro y siento que de mi amor, ya tú eres dueño. Sé que para ti no es más que una aventura el amor puro que te ofrezco. ¡Jamás sabrás que yo te quiero!... Y es mi almohada a la que digo todo, mi confidente… Mi inseparable compañera de toda mi desdicha y mis agravios.

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En el ala del ave A lo lejos… Un ave alzando el vuelo azotando sus alas, se desliza en el cielo. La veo perderse allá… Muy lejos juntarse con las nubes buscando no se qué, quizás un nuevo cielo. El cielo gris, un horizonte eterno. Y tu amor, en mis ojos, se pierde con el ave se contempla en el tiempo… Se lo está llevando el aire se me está muriendo adentro. Y mi esperanza infantil se pierde con mi mirada entre el inmenso infinito… Sobre el infinito mar. La siento despedazarse crudamente contra el viento sin emitir un gemido mi voz se volvió un silencio… Y el amor callado y triste que por ti yo había sembrado en sus alas, el ave se lo ha llevado y se perdió junto a ella y se llevó a mi esperanza y me quedé solitaria frente a frente con mi rabia y oí salir un lamento de mis labios que temblaban y sentí en mi absorto rostro dos lágrimas que rodaban porque a mi loca esperanza un ave se la llevaba… 20

Eclipse Si hubiese en tu mirar una luz que determine no sé qué lugar… Un paraíso… O quizás el eclipse de una eterna esperanza. Pudiera yo, tal vez, emprender el camino y fuese también certero mi destino. Una lágrima se esconde detrás de mi ilusión un poema desprende de mis sentidos... Y recuerdo los tuyos: “Memoria de la rama” “Te esperaré infinito” Camino entre las sombras y me pierdo en las calles semejante al susurro que se pierde en el viento. No sé si tú quisieras aliviar esta pena que se parece tanto a un ángel malo y sin embargo yo -Estoy confusaNo sé si me querrás y yo no sé si te amo…

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Trasfondo La candidez de tu rostro me embargó de ternuras en él tú traslucías al ser humano que siempre había soñado no fueron tus palabras… Fue tu mirada ¡Tan sincerona ella! ¡Qué desnudaba tu alma! Y conjugué en tu ser los verbos paradigmas en segunda persona: Sincero Buen amigo Honesto Solidario Leal Confiable Noble… Pero fue un espejismo el que yo vi en tus ojos detrás de tu mirada había un trasfondo el cual yo no advertí y sólo me entristezco por ti mismo… El impacto en mi mente, por tu absurda conducta me dejó una lección sé que de nada sirve, pero quiero que sepas que a ti mi alma abrí, tan limpia de mentiras. Y conjugué en tu ser, los dones parmoniosos que tú me distes a ver. Pero se me olvidó el por si acaso la buena fe y los sentimientos puros. Veo… ¡No sirvieron de nada! 22

Disculpa el pragmatismo pero era necesarioâ&#x20AC;Ś Sumar a mi vocablo entre tus dones Y en segunda persona al verbo ser me atrevo a conjugar entre tu vida en tiempo de pasado indefinidoâ&#x20AC;Ś Fuiste â&#x20AC;Ś

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Gitana Gitana, gitana dime que en las manos ves la vida. Di si por casualidad el muchacho que yo añoro ¡A mis brazos volverá! No me defraudes, gitana no hagas más hondo el pesar si acaso ya me ha olvidado ¡No me cuentes la verdad! Y si en su vida otro amor le brinda felicidad calla… -Gitana- calla… No dejes tú de tus labios una palabra escapar. Háblame -Gitana- dime que en las noches junto al mar él evoca mi recuerdo su añoranza crece más Dime en tus cartas gitanas que me es fiel, no me traiciona que en la lluvia, en el viento y en las flores él me busca obsesionado Y en sus sueños él me sueña, y en el agua él me toca y en mis noches solitarias el busca mi roja boca. 24

Hace mucho que él partió hacia inciertos senderos ni una esperanza dejó para éste amor que agoniza La ilusión se me envejece de tanto esperar callada que él me devuelva la risa. Por eso gitana, dime… Quiero seguir conservando para siempre la esperanza. Creer que su amor aún es mío y muy celoso él lo añora a pesar de la distancia. No me lo digas, gitana yo lo adivino en tus ojos… El amor que me tenía se ha marchado sigiloso el día de su partida. Pero lo sigo queriendo este amor no se termina no hagas más hondo el dolor no digas que me olvidó… Calla… Gitana… ¡No digas!!

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Reflexiones Una vida que comienza, otra termina es la ley de la vida y hay que aceptarla no podemos luchar contra el final no poseemos armas, no ejercemos control… Un amor que se va otro comienza todo en este mundo tiene un principio y un fin. Nacemos para morir ¡Y el amor también muere!... ¡Es hermoso el amar, sentirse enamorado! Es como el renacer de un botón en flor que despliega fragancia, que despliega hermosura… Pero el aroma se va, perdiendo entre la brisa el viento se lo lleva no sé hasta qué lugar y esa flor exquisita, dotada de belleza poco a poco se muere y se marchita. Y es como un niño triste, abandonado que carga en su interior una pena muy honda una inmensa nostalgia… Es como un niño triste… Sin sonrisa… Vivamos cada día con amor, con alegría porque la vida es nada y todo al mismo tiempo. Estamos aquí hoy, mañana no estaremos un buen día nos iremos sin poder retornar… 26

No somos esa flor, que muere y renace que vuelve a sonreír con el amanecer. Que le grita al alba con su cara sonriente ¡He vuelto a renacer! No somos como el sol que muere con la tarde pero que al otro día… ¡Se vuelve a despertar! y despierta a los campos besándoles la frente con sus cálidos labios, diciendo:¡Buenos días!... ¡Es hora de empezar!... Tratemos cada día de ser mejor que ayer borremos de la mente la maldad y la envidia y a ese chiquillo triste abrámosle las puertas de nuestro corazón brindémosle ternura, brindémosle sostén… Y a tanta gente junta que al garete deambula que llevan en la frente marcado su dolor que expresan en su rostro necesidad de amor y que piden a gritos, una palabra amiga, un gesto de ternura, una sonrisa... Pensar que hay tanta gente que camina a mi lado que llevan en su centro una herida sangrante, que arrastran una cruz… Que esconden en su alma una pena infinita… Y no las puedo ver… ¡No la puedo palpar! Pensar que yo podría aliviar esas penas con tan sólo un poquito de mi amor y pasan a mi lado, sin embargo, inadvertidas… 27

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¡Y yo me siento inútil, impotente! ante esos niños tristes, marginados… ante esos viejos solitarios qué platican al viento sus pesares… Ante toda esta vida, ante este mismo mundo ante mi propio fin... Y es entonces que quisiera traspasar las barreras del tiempo y flotar en el espacio por un tiempo indefinido… Y detener el tiempo en un momento… Y dejarme arrastrar por momentáneas ráfagas de vientos e ir al mismo son que él… Y perderme de vista en el horizonte sin tener un punto de llegada hasta no ser más que…Un diminuto punto inextinguible...

Agonía Ve… No te detengas a mirar mi agonía no quiero que tus ojos constaten mi derrumbe. Yo no quiero que nadie me comparta ésta pena pues ésta pena no es más, qué sólo mía… Cayendo sobre mí los días del almanaque como rocas golpeando mi trastada andadura. En mi cuarto el reloj continúa con sus horas ajeno a la existencia, insensible a la vida… Y un ave nocturnal atraviesa mi techo y su canto ancestral anunciando la muerte adivina que yo, me encuentro inerte… Tirada aquí, repasando mis días, oyendo una canción que viene desde lejos y no apacigua en nada éste dolor que quema ¡Mi más sensible fibra! Ve… Por mí no te detengas no es esta tu agonía… Le doy la bienvenida al ave anunciadora… Absorta aquí… La mirada vacía… Esperando insensible el final de mis días... 29

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Sueños Esperanza sin dueño que a mi alma llegaste ilusiones de vientos que tejí en el espacio un espacio de amor, de dudas, desencantos. Amarga es ésta pena que hoy yo descubrí. Descubrí tantas cosas que me dejan marcada una profunda herida, un triste sentimiento. Abrigaba en mí ser ilusiones calladas esperando que un día se pudieran cumplir. Tú boca almibarada la quería para mí y buscaba en el fondo de tus ojazos claros el amor que yo nunca puedo tener. Te tuve entre mis sueños ¡Te soñé tantas veces! ¡Qué hermosos sueños eran! ¡Y así se quedarán! son sólo sueños dolorosos… Quise tenerte cerca para darte mi amor y lo mejor de mí… Te lo quise ofrecer pero no fueron más que ilusiones vacías tiradas al espacio… ¡Por qué no pudo ser!

Perdida Quizás buscando mí camino camino entre las calles me pierdo con el viento… Buscando una razón en que apoyar mi aliento. Buscando… ¡Qué sé yo! me siento tan perdida. perdida en esta vida en este loco mundo sin razón. Mi ser se apoya en una esperanza que ni mi mente maltrecha consigue descifrar. Y mis sentidos se aferran a la vida a la lucha cotidiana por la sobrevivencia ¿Morir, será alivio a todo este pesar? Siento a veces la vida como una dura cruz que llevo a mis espaldas -y su peso me venceY he caído -es cierto- pero vuelvo a la lucha y porque todavía existo, no me doblegaré me anulará la muerte que será mi final. El peso de los días van cayendo sobre mi débil cuerpo como lanzas de hierro atraviesan mis pasos y llevo tras de mí un sin fin de añoranzas que pesan al andar… 31

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Y me duele el dolor Porque conmigo vienen pegado a mi existencia como hiedra a los muros, recuerdos imborrables. Comienza ya la lluvia… Y sus gotas golpean mi conciencia y cada gota hace aumentar mi dolor y aumentan mi tristeza y me habla de tu ausencia. Y me pesa la vida, y me duele vivir y vuelvo a sucumbir en este mar sin fondo y me vuelvo a hundir y las olas me arrastran de nuevo a la inconsciencia a la desesperanza, al recuerdo de ti… De nuevo está lloviendo... y la lluvia me cuenta lo que estoy padeciendo. Lluvia… Eterna confidente… Mi fiel amiga que nunca me delata… Mi amiga silenciosa… No me cuentes de él -¡Cuéntame de otras cosas!porque el recuerdo es largo y lo quiero apurar no me traigas su aliento, no me traigas su olor no me traigas su voz, ni traigas su calor. Quiero olvidar aquello que una vez nos unió ya no quiero volver a añorar su presencia porque sé que esta vez será para siempre su ausencia... 32

Huellas ¿Dónde está el camino que llevaba a tu cerca? Y también la conseja ha perdido su encanto la arboleda de Acanas ha quedado desierta y el perro fiel también, expiró de quebrantos... A dónde quedó el eco de tu risa canora en qué lugar alumbran las estrellas tus ojos y en quién despertarás arbóreos amoríos y quién se atreverá, a besar otra vez aquellos labios rojos. En quién enredarás de besos en su pelo qué mano te tendrá tomada de los sueños con quién caminarás por la plaza del pueblo y quién, de tu memoria, se ha llenado de celos... Qué voz te anunciará de nuevas alegrías qué pasos andarán llevándote a otra puerta sin saber que los míos no han borrado las huellas de las cenizas yertas… Y aún en su andaraje recuerdan el camino que los llevó a tu cerca. ¿Dónde quedó el camino que llevaba a tu cerca? Tu amor de mi memoria, no ha borrado las huellas.

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Tierra estéril Tierra estéril, espera, que mi llanto te riegue tu infinita tristeza que el incansable sol no se lamenta de tu agrietado rostro en su impotencia de no tener siquiera un pasto fardo para darle a las bestias. Espera… Mi llanto ya no cesa desde aquel triste día y yo te lo daré en mis manos vacías tendrás ríos cristalinos que saldrán de mis ojos calmándole la sed, a tus vanos enojos. Avísale a las flores que pueden ya brotar y recubre tu anchura de alegres coloridos que aquí me quedaré, tan cercana al olvido llorando mi nostalgia y ahogando mi gemido. Y mirándote a ti en campo florecido y oyéndote a la brisa cantar un solo canto ¡Que al menos para ti, ha servido mi llanto! Tierra estéril, espera… ¡Qué no falta ya tanto! qué de mis ojos tristes ¡Ya está saliendo el llanto!

Burla Puedes volver la cara y sonreírte también aumenta tu desdén, burlándote en mis ojos no, no causarás enojos. Y si acaso te asombra mi postura te diré que sé tanto de amargura que otro amargo dolor ya no me afecta pues ya mi corazón se ha vuelto piedra. No me verás llorar, las lágrimas no salen mis ojos secos me los secó la risa. Y ya te veo en tu antigua sonrisa -burlona ella- en rictus- ¡Estupefacto! Si hundiste con tu lanza la herida del orgullo y en la llaga del alma removiste tu dedo. Pues, déjame decirte en éste suave arrullo que tan sólo un murmullo dejaste en mi ruedo y tu alevosa burla me causó fue un rasguño...

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Melancolía Pasaba por la calle cabizbaja alcé mi frente y encontré tu mirada. Volvieron a mi mente los recuerdos de un tiempo ya lejano, triste y negro. Quedaste allí, mirándome a los ojos. Preguntando mil cosas… ¿Qué serían? Más a mi ser lo invadió la nostalgia de tiempos tan queridos… ¡Y tuve que apartar tu vista de la mía! ¡Qué no daría yo, por volver a tus brazos! Volver a unir tu boca con la mía ¡Pero a mi amor le fuiste tan ingrato! ¡Qué no puedo quitarme ésta melancolía! Recoge ya tus pasos y sigue tu sendero y… Aunque a veces te quiero no volveré al fracaso. Estuvo ya acertada tu amarga despedida que en ella te llevaste… La mitad de mi vida.

Letargo Vuelve la sombra a invadir mi sendero la luz de la sonrisa apagó su lumbrera ya no me quedan más que hirientes cicatrices después del torbellino de mi loca quimera. Envuelta en la vorágine del sueño misterioso advierto tu mirada penetrando en mis ojos y ansiosa ya mi mano, alargo presurosa antes que parta el sueño, para palpar tu rostro… La luz del nuevo día se cuela por mi almohada y aún en mi letargo la imagino tus ojos. Que iluminan las sombras que dejaste plantadas y aún en mi inconsciencia acaricio tu cara… Vuelven las sombras a invadir mi sendero. Despierta ya, del ensueño del sueño. Las horas cuento y angustia me provoca se acerca ya otra noche loca… Quizás en este sueño la suerte me acompañe que en esta noche pueda besarte yo en la boca.

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¿Qué me dirás ahora? ¿Qué me dirás ahora? Después que la noche cubrió su manto negro en mi espalda después que mi camino atravesó intrépido el final de mi muerte después que la alegría bañó su rostro de inmensa oscuridad. ¿Qué me dirás ahora? Libraste la batalla en tierra estremecida ¡Yo, salí vencida! Jugaste con la flor abriendo en su capullo y burlaste a la espina. ¿Qué me dirás ahora? después que de este árbol bebiste su savia calmándote la sed… Y dejaste la herida. No… Es mejor que calles… ¡No quiero que lo digas! Deja que el manto negro recubra mi espalda de todas las mentiras. deja que mi camino adivine los pasos al final de la vida. Deja que el llanto mudo encierre en su lamento la luz de la alegría…

Ah… !Por si no lo sabías!... La flor con que jugaste que entregó su rocío abriéndose a la vida… ¡Se convirtió en espina!

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La marcha del silencio Sola… En la penumbra de un cuarto cuatro paredes sostienen una vida un sentimiento se pierde con la brisa ¿Qué más da? -No es más que un sentir que no pesa en las espaldasY sin embargo… Extraña sensación en el lado izquierdo de mi cuerpo hay ese pesar tan hondo, profundo… Vacío y oscuro como un hueco sin fondo que a mi armazón derriba… Te vi… Y esa noche el peso se me hizo más liviano… O fueron tus palabras que aliviaron las penas ¡Pesar de andar y caminar sin huellas! ¿Y sabes? En el lado izquierdo de mi pecho el hueco encontró su fondo… El vacío no fue tal y la oscuridad que había la ahuyentó tu sonrisa… Antes de tu llegada… La máquina mortal de mi existencia había borrado en su memoria todo lo calificable a sentimientos… Actuaba, pensaba… Reía o lloraba… Pero no sentía… 40

Me habían maltratado el alma acabaron con mi fe, hirieron mi conciencia, pisotearon mi orgullo y burlaron mi sentir. Quedé vacía… Sólo un armazón me sostenía este cuerpo delgado, sin espíritu que arrastra tanto peso en su vivir. Y tú llegaste con cascadas de ilusiones derramando en mi alma la luz de una esperanza… Tu voz… Tu hermosa voz volvió a llenar ese vacío en mi pecho tu voz embriagadora… Que hacía volar mi pensamiento tan cercano a la ilusión… Y me hablabas… Hablabas de rosas sin espinas de senderos sin piedras de vidas compartidas y de muros sin hiedras. ¡Y yo! La máquina mortal que no sentía fue envueltas por tus palabras… -y te creíavolé, soñé y me transporté a ese mágico mundo que ofrecías. ¡Pobre niña que no aprendes! -volviste a entregar tu viday con ella tus sentidos y con ella tu alegría y también es cierto que… Te mataron ese día. 41

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Tú… Mi última ilusión el ser que logró sacarme de mi abismo pero sólo para volver a dejarme caer ¿Qué quieres que te diga? Que ya mi fe derrumbó mis cimientos que el tiempo se detuvo en el momento que te di mi sentir perdido en el silencio y que de nada sirve el arrepentimiento. Continúa tu camino, encantador ingrato camina por tu senda sin conciencia que yo me quedo aquí, en mi esencia maltratada quizás, en todo mi sentir. Pero no moriré, no tengas miedo por tu amarga traición… Y quedo… Con la herida sangrante ¡Más el dolor no mata!... Aleja ya tu miedo… No moriré por ti… ¡Y marcho en mi silencio!

Reencuentro Retornó la sonrisa a enmarcarse en mis labios y el alma se inundó de cándidos matices en el aire giraban ilusiones felices… Y la noche cargó con ella los agravios. Tu mano con mi mano se enlazaron contentas tu boca con mi boca en una misma voz gritaban a la brisa ¡Aquí estamos los dos! Aquí estamos los dos que somos la alegría de poder encontrarnos, después que nos perdimos. Y en las copas de un pino volaban las alondras testigos de este amor, que derribó a las sombras. Y un destello de luz danzante en nuestros ojos ¡Nos alumbró un camino feliz y sin abrojos!.

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A ti Qué puedo ya escribirte, que no se haya escrito qué puedo yo decirte, que ya no te haya dicho qué más puedo quererte, si por quererte vivo. Puedo inventar palabras que envanezcan tu alma puedo buscar mil formas de amarte en mil maneras puedo esperar mil años, si acaso lo quisieras puedo llorar contigo, si acaso tú sufrieras. También puedo reír, las veces que tú rieras podría traerte el sol, si tú me lo pidieras puedo morir contigo, si acaso tú murieras pero lo que no puedo, es dejar de amarte si tú no me quisieras. Puedes partir de mí, al sitio que tú quieras vivir las aventuras que tú sed te pidiera cansarte de andar caminos sin fronteras saborear otros labios, querer a otra… Cualquieras. Más dejarme de amar, lo sabes tú muy bien que no pudieras. Puedes querer volar a lugares no habidos. Arrancarte este amor que tu orgullo te ha herido. Olvidarte de mí… Sé que lo has intentado y en cada intento sabes… Lo que tú has fracasado y al final tú regresas mucho más convencido a buscar mi amor como pájaro al nido. Y aquí me encontrarás… Esperando por ti porque estando sin mí… He estado yo contigo. 44

Sobrevivencia Otro día más… Qué cargo a cuestas esta inmensa tristeza Más, sobrevivo… Teniéndote en mi mente, buscándote en la gente. Voy día a día queriéndote encontrar… Otro día más, que busco en lo posible queriéndome aturdir, no llegarte a pensar. Otro día más, dónde cuento las horas esperando que el tiempo responda a mis preguntas. Otro día más… Que pasa inclemente clavando en mis heridas sin descanso. Otro día más, como cualquiera que al viento le pregunto el porqué de tu acción. otro día más que pasa lentamente. Así como fue ayer, así como hoy es… Será también mañana, sólo otro día más que me convenzo… Y en que reacciono otro día más… Que soba mis heridas…

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¡Si pudieras, Señor! Si pudieras, Señor, borrar los sentimientos si pudieras, Señor, anular la memoria De no pensar… De no sentir… ¡Qué gloria! Si pudiera, Señor, despertar sin ayeres no recordar la suerte que me trajo a ésta cumbre y que esta oscuridad ya no me alumbre. Y en la risa que lloro despuntar los placeres. ¡Ay Señor! ¡Si tan sólo pudiera! Dormirme en un mañana y despertar con canas qué así, tal vez podría mirar en lejanía los ayes que me amañan.

Incertidumbre cruel Incertidumbre cruel que no abandonas mi vida vienes pegada a mí, gritando mis deslices. Tendré que soportarte hasta que yo decida arrancarte de mí, quitándome la vida Sólo así dejarás de ahogarme con tu sombra persiguiendo mí aliento para que yo no pueda respirar esa paz… Que jamás me hace ronda… Incertidumbre cruel ¿Por qué no me abandonas? Es qué tú no te cansas de destruir mis días es qué no te acongoja ésta melancolía de verme cada día, caer en el abismo. ¡Deja ya el fanatismo, de ensañarte conmigo! Que por Dios yo te pido, tú me dejes vivir y si vas a seguir clavando en mis heridas al mismo Dios le pido que me quite la vida.

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Escombros Habrá que remover escombros de sentimientos que se convirtieron en pedazos de cristales rotos. Habrá que unir hechos y evaluar la desesperación que comenzó con la tristeza… pero quedará la marca. Habrá que buscar la tristeza que se perdió en el instante mismo de la despedida para encontrarse con el adiós definitivo y conocer la soledad. Habrá que convivir con la soledad a cuestas día tras día hasta que el tiempo decida presentarme al olvido… Y cuando esto suceda habrá que cubrir el alma con un manto de acero y dejar allí los sentimientos de cristales rotos. Y llegarán sentimientos nuevos que no dañaran el alma nuevamente porque el manto de acero estará pegado a la piel, en carne viva. Y habrá que volver a buscar la ilusión para que pueda encontrar la alegría Y habrá que encontrar la alegría para buscar mi fé. Y habrá que encontrar mi fé para volver a la vida… Y quedarán los escombros entre los escombros del adiós… De la tristeza… Del olvido… Y habré encontrado la sonrisa que creía perdida en el instante que de mis ojos salieron blancas lágrimas. 48

En tu adiós definitivo y sin regreso… Y habrá un lapsus en mi mente que traerá al olvido. Y habra de comenzar con el olvido el despertar feliz de un nuevo día y entonces serás tú quien quedará perdido en el vacío de un sentimiento puro que alguna vez te fue ofrecido.

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En retirada Llegó la luz resplandeciente de una estrella alumbrando las sombras que habitaban el alma. Y era que me bastaba la luz de tu sonrisa. Y era que me embriagaba el sol de tu mirada. Y era que mi futuro lo leía en tu cara. Y era que me agradaba. Y era porque la vida hace sus falsas jugadas. Era que yo impedí que tu sol me quemara. Y era que yo emprendí… ¡Mi retirada! Y te dejé el más puro sentimiento entre tus labios. Y te entregué mi sonrisa más sincera. Y te dejé que el calor de mis manos cubrieran tu piel con vehemente ternura. Y te cubrí de besos en mi pecho. Y te miré con el alma desnuda en mi mirada. Y te adoré por un instante de locura. Y quise ser la compañera eterna de tu vida. Y te sentí en cada poro de mi piel. Y te dejé... Por el inmenso miedo a repetir la triste y dura historia de mi ayer.

Manantial Fuiste tú el manantial que lavó mis heridas fuiste también tú, la brisa alentadora el refugio de males fugitivos me diste sed y tomé de tu manantial hasta saciarme Corrió la tristeza al fondo del pantano. Me diste amor, ilusión, pero no esperanza no podía pedir más. me conformaba con lo que dar quisieras ¿Qué más daba? Si devolviste a mi vida los matices un poco de color diste a mis días grises un toque de ternura en mis palabras y mucho de locura en mi mirada. Fuiste tú el bálsamo a mis penas el hombro amigo donde apoyé mi mano y también fuiste tú, ¡Mi loco enamorado! El deseo ardiente que corrió en mis venas. El pecho amante donde enterré mis sombras. La risa franca que contagió a mi boca mi amante infiel… ¡Mi vida loca! Y ahora sólo serás el nombre que mi boca no nombra fuiste principio y fin de mi locura. A quien yo más amé… Mi amor secreto

Vestigios

pero el amor se muere con la ausencia. Mi loco enamorado, me marcho y no hay regreso. No regresan los besos a escondidas ¡Ni regresa el deseo de tenernos! Esta es mi despedida que te doy en mis versos recordaré por siempre nuestro idilio vencido por tus miedos. Tu miedo de quererme… Y ésta es mi despedida, mi loco enamorado y hermoso fue lo nuestro, para dejar de lado ese gran sentimiento que nació entre los dos. Sin antes darte gracias por haberte tenido aunque fueran muy pocos los momentos. Gracias te doy amor, por haberme querido aunque no más que yo… ¡Y te bendigo! Benditos sean los días que tengas por venir te acompañe la suerte en todos tus momentos que esta es mi despedida y marcho en mi silencio fuiste mi manantial… Y sólo eso...

Pensamientos Desde Hoy Comienzo A: Distinguir la maldad de lo verdadero, poniendo en la balanza de la justicia las actitudes de lo que me rodea. Comienzo casi a convencerme que la maldad gana por mayoría y la injusticia siempre se impone. Comienzo a darme cuenta el vuelco que me ha dado, mi sentido por la vida. Comienzo a ver con infinita tristeza en lo que ha llegado a transformarse el mundo. Comienzo a ver de cerca la mezquindad y el egoísmo. El yoismo que traiciona los más puros sentimientos y las más sinceras intenciones. Comencé a experimentar en mi ser, sensaciones de odio y de venganza por no admitir cómo pueden destruirse seres humanos, naciones ó países a través de una guerra por buscar un poder... Comenzó a írseme la fé y la esperanza, al ver al viejito mendigo y al niño pedilón y abandonado, buscando subsistir. Y comienzo también, desde hoy, a luchar por la vida y la esperanza, por buscar esa luz que ilumine éste mundo entre tanta oscurana, para morir en paz... 53

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Quebrantos Después de tanto tiempo de dolorosa ausencia has vuelto en tu mirar a inquietar mi presencia. Quisiera adivinar lo que dicen tus ojos y retorna el ayer, palpándose en tu rostro. Quisiera yo creer, que tú quieres volver a caminar de nuevo de mi mano a desandar lo antes desandado y a volver junto a mí, para no separarnos. No me mires ya más con tus ansiosos ojos y dime de una vez lo que quieres decir pues ya con tu mirada se alegran mis enojos esperando que digas la palabra esperada para poder vivir…

Ilusión ¿Qué pasa en tu mente loca? que al mirarme se denota un destello danzarín que a mi alma llega y toca? ¿Por qué tu risa provoca las cercanas celosías de darme un beso en la boca más no hoy, quizás un día? Más te miro y me retiro al percatar tu osadía de abrazarme en un suspiro más no hoy… ¡Quizás un día! Y si es tanto tu fervor de enredarte entre mi pelo que al dar la brisa en mi faz ¡Del viento tú sientes celos! ¿Qué pasa en tu mente loca? ¡Que con tan sólo mirarme me estás besando en la boca!...

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Tus ojos Adivino el camino y renuncio a tus ojos advierto la llegada de oscuros brumazones. Cabalga por la brisa tu risa invitadora queriéndose plasmar tu labio en la canora de mi estéril mejilla soñadora… Por esa callecita que recorro por tardes me encuentro con un guiño de tus azules ojos y una alondra que vuela se enreda por el aire y el celaje recuerda la bordada, que me lleno de abrojos! …Y por que no conoces mi cuitada andadura es mejor que tú apartes ¡Tus ojos de mis ojos!

Esperanza Rondando está, la vuelta del pasado. Tomados de la mano para un solo camino. Y un nuevo encuentro en el aire adivino. Cercano está, el día del suceso… ¡Dadme Dios mío, el milagro que imploro! ¡Volver allí, al pasado que añoro! Mi fe volvió a erigir sus cimientos segura estoy de lo que ya presiento… También yo sé sobre tus sentimientos… Se cumplirá el milagro que quiero y por eso aquí estoy por eso es que te espero… Y ven… No alargues más la espera yo sé que volverás y volverá tu risa Junto a la primavera.

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Quimera Si pudiera alcanzar con mi mirada los recónditos secretos de tu mente y saber que quizás, en algún lugar de ella ocupe yo, - tal vezuna muy débil luz de tus pensamientos… ¡Cuánta alegría en mi alma se vería forjada! ¡Cuál alborozo júbilo sentiría dentro! Ya la vida no me parecería más solitaria Recobraría los émulos perdidos las flores vestirían sus más limpios colores el sol lo sentiría en su más bello fulgor abrazando mi cuerpo con sus cálidos rayos besándome la frente con su tibio esplendor con sus labios dorados, con sabor a sudor. Las rosas abrirían sus delicados pétalos como débiles brazos que querrán arrullarme con su fragante voz… Y me regalarían su más sutil aroma en frascos de esperanzas con vidrios de ilusión. ¡Cuánto el amor dormido despertaría en mi pecho! El gigante dolor marcharía silencioso ¡Que ha estado acurrucado tanto tiempo en mi alma! Desprendiendo cruelmente, una a una mis fibras azotando mi alma, hiriéndome el amor…

Pero tú no comprendes este amor que se inicia no quieres compensar este clamor y mi alma navega en lontananza. Así como en mares sin bonanza quedará mi esperanza, vagando solitaria sin poder encontrar tu presumido amor. Y quedarán mis ilusiones rotas truncado el suelo de los sueños idos atorada la expresión alegre del suspiro herido el orgullo… Y tendré por eterno compañero a este amargo dolor que dejaste sembrado ¡Qué no pudiera dar por alcanzar tu amor! Ese amor que yo siento tan lejano que lo elevas tan alto… Y mis trémulas manos no lo pueden siquiera ni tan sólo rozar. Ya ves… El amor, poco a poco, se convirtió en obsesión ni tan solo el orgullo lo pude conservar ya la niña mimada es tan sólo un piltrafo y el orgullo de un día lo depuse a tus pies… ¡Cuánto te he dado! Y… Tú ¡No has correspondido! Ni tan siquiera el roce casual de una mirada ni siquiera migajas de tu nobel amor. Aunque quizás yo no, pudiera conformarme 59

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con tan sólo migajas… ¡Mendicidad de amor! Sólo te pido, en mi última agonía… Cuando la muerte, a mis puertas toque un día y el tiempo o el olvido cerraren mi dolor y encuentre a mi esperanza y expire mi ilusión: Guarda una lágrima para mi tumba fría y en susurro ¡Cántame una canción! Que será pues, mi última alegría ¡La sola recompensa en pago a tanto amor!

El viejo lucero Encontré yo el amor en un viejo lucero después de tantos días de vientos tormentosos y sentí tanto gozo de verlo sonreírme y con eso decirme que amaba mi presencia Su tenue luz estremeció mi alma ya dormida cansada de sentir el frío de esos vientos tormentosos que helaron la esperanza, sonriendo a la agonía. Encontré yo el amor en un viejo lucero… Después que ya vencida, desistí de mi lucha por buscar el amor… Descubrí con fervor, que había quién me quería y vi con alegría que era el viejo lucero… Lo vi tan candoroso, ofreciendo su amor y quise yo seguir a ese viejo lucero para decirle a gritos ¡Que también yo lo quiero!

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¡Yo, que ya no creía en el amor… ni en nadie! Destierra mi corazón ésta alma en pena éste dolor que mustia y me atosiga. Que no sé por qué cosas de la vida estoy puesta en ésta incertidumbre. Amores tuve tantos… ¿Quién lo niega? Una que otra vez… Felices fueron días más, el dolor ganó por mayoría que de tanto sufrir ya tengo el alma oscura. Más, ya estoy curada de toda esa cadena de deambular de risas y fracasos que otrora, un día, me hicieron tanto daño. …Y llegaste a mi vida con tu risa franca con tu alma limpia de mentiras como una flor muy débil, me tocaste y en el primer beso me entregaste tu vida. Ya mi llanto no estaba solitario mi dolor fue también tu dolor y enjugabas mi llanto con tus besos tiernos… Esos besos que sólo da el amor Y se me fue haciendo indispensable tu presencia. Se me hizo necesaria tu sonrisa tu cálido mirar, tu trato tierno. Y supe entonces que ya no podría soportar tu ausencia. 62

Tú me diste un amor que no esperaba me amaste de esa forma tan sublime ¡Qué lejos estaba ya de mi maltrecha mente ese sueño que todos tenemos cuando niños que nos amen con ese amor hermoso y puro! Y llegaste tú, cual ángel… Yo, que ya no creía en el amor… Ni en nadie te fui queriendo a ti…

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Y casi ya te quería Salieron de tu boca las palabras dulces, enmarcando un paraíso. Encantador amado, invitando a aventuras. La ilusión descorrió su cortina mohida por las decepciones. Despertaste inquietudes yacidas en la desesperanza. Serena estaba… Quizás tranquila, pero no contenta. Resignada a mi suerte es tal vez la palabra. Inquieto tú… Sonrisa abierta mirada juguetona. Tus manos al igual que tus labios no temían a las palabras. ¿Cuánto dijiste? ¿Qué prometiste? No te hice mucho caso. Pero sólo recuerdo que casi te quería aunque parezca extraño, sin antes conocerte. Sólo desde ese día, y casi ya te quería. Pero venció otra vez el temor al fracaso a la insinceridad, a ese futuro incierto el cual tú me ofrecías. No sé si mentirías… No quise comprobarlo. El ave aventurera cayó sin antes levantarse. La ilusión no pudo correr más su cortina oxidada. 64

Sólo recordaré que pudo ser hermoso. Y… Tal vez también triste Vivirás, muchachito travieso, como yo te recuerdo. No sabrás, encantador amado que en mí tú despertaste el amor ya dormido. Y puedo yo decir que casi te quería y tampoco sabrás que por ésta razón ¡Yo te dejé partir sin una despedida!

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Inquietud A ti… Que desde que mis ojos tristes contemplaron tu presencia quedé envuelta en la aureola mágica de tu persona. Entonces sentí despertar en mi dormido y sosegado pecho una extraña sensación semejante a una ilusión. Y cada vez que contemplaba tu belleza mi pobre corazón adolorido lo sentía henchirse de emoción tejiendo quizás, en mi mente trastornada los sutiles hilos de una ilusión. Y soñaba con tus besos. Y deseaba tu calor y en mis noches solitarias me acompañaba tu amor. Tu amor fugaz porque fugaz fue tu amor. Como el cometa es fugaz fugaz como es el amor. Igual que como las olas, como las olas del mar que jamás se quedan quietas, siempre vienen y se van. 66

Así es tu amor… Es así lo que me das. Un continuo viene y vá ¡Que nunca sé cuándo viene! ¡Pero sé cuándo se vá!...

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En mi ocaso Más allá del infinito… Cuando mi cuerpo yazca inerte quizás mi alma encuentre lo que siempre ha buscado cuando ya no pueda ver los colores ni distinguir la luz de la oscuridad ni sienta el aroma de las flores. Cuando ya mis oídos no puedan escuchar tu voz y mis ojos no puedan, contemplar tu belleza… Y no puedas sentir, el tacto de mis manos. Y no sientas ya, el calor de mi piel… Quizás entonces en tus ojos se dibuje una lágrima y llegaras, tal vez, a extrañar mi presencia. Y acaso añores con nostalgia los momentos de amor que te robaba. Y entonces tú comprendas que yo te lo dí todo. Sin medidas… Sin pedir nada… Y tú sólo me diste migajas de tu amor ¡Tal vez por compasión! Comprenderás entonces que mi amor fue algo grande sin límites… Sin horizontes… Sin esperanzas… Tan sin razón…

Es entonces que sabrás que te amé más que a la vida misma. Que mi amor fue celestial… Sublime… Y a la vez, una agonía. y quizás en ese instante cuando se cierren mis ojos y exhale mi último suspiro y quede dormida entre las negras tinieblas de mi fin. Se escapará una lágrima de tus bellos ojos y recordarás aquellas noches en que fuiste mío. Y sabrás también, en ese instante que nadie te querrá… ¡Como yo te he querido! Y así mi alma podrá morir tranquila porque esa lágrima que tú derrames será la prueba de que también me amaste y entonces podré morir contenta y ser feliz una eternidad...

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Ilesa El momento llegó tan esperado y los recuerdos quedaron enterrados. Y ya no queda en mi existencia, ni una pista de dolor, ni una añoranza… Ni siquiera la idea de venganza Olvidé la ternura, olvidé las palabras. Quedaron las promesas sólo en eso. Y se borró tu imagen en el deceso del transcurrir de días sin excusas. No se detuvo el tiempo por tu huida… ¡Y sigue estando el sol en su caída!

Agradecida Vida… Hay un misterio en tus palabras… Cuando la luz del amanecer besa mi rostro adormecido aún por el hermoso e inaudito sueño placentero. Siento su belleza… La belleza de los rayos del sol estelas doradas que van cayendo cuál débil pétalo a la tierra. Siento su luz dorada caer sobre mi piel dormida por la oscura y sombría noche abrazar mi cuerpo frío con sus frágiles y delicados brazos. Despierto de nuevo a la vida con la alegría de estar y sentirme viva. Cada amanecer, para mí, es algo hermoso veo la belleza de los árboles a través de mi ventana que, como gigantes guardianes, velan mis sueños cada noche. Y el susurro de su voz al besar el viento tiernamente su espeso y singular verde rostro me hacen sentir una calma semejante a la paz. Es hermoso vivir… ¡Yo así lo siento!

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Ver renacer las flores muertas en verano oír el canto melodioso de los pájaros sentir la lluvia que me besa el rostro con sus mojados labios. ¡Y es como sentir que el mismo Dios me besa! Amo a la vida, todo lo que en ella se manifiesta. La naturaleza, los astros, la luna, el sol, el cielo, el infinito… Doy gracias al Creador por legarme ésta existencia por hacerme conocer lo hermoso de la vida… De éste mundo infinito que Él nos regaló. Pero… Hay una incógnita… Un misterio. Que siempre habrá quién se pregunte ¿Por qué y para qué existimos? ¿Qué más encierra ésta vida, aparte de vivir y morir? Pues eleva tu mirada al infinito y trata de mirar detrás de Él y dentro de ti. Que acaso encuentres la repuesta…

Despedida Ahogarme en unas letras. hundirme en un lamento es esto lo que siento que no quiero sentir… Pero es, esa mi vivencia aunque tenga conciencia ésta amarga experiencia le dá un toque a mi vida por dejar de existir. Quisiera no pensar… Quisiera no sentir… Yo quisiera vivir envuelta en armonía. Pero es la vida mía un mar de sinsabores de inclementes dolores cercana a la agonía… ¡Pero tengo valor! ¡Claro que tengo valor! Superaré el dolor… encontraré el amor que me ha sido negado… Y al pasar de los años ésta experiencia infausta veré con ignorancia ¡Capítulo cerrado!... 73

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¡Ay!, ¡cómo te amé sin trampas! Limpio éste amor, incauto y es que yo me di tanto… Que de mí, sólo quedan estériles retazos… Pero queda un ocaso… Tranquilo y apacible que yo quiero vivir. Me alejaré de ti… Me causas muchas penas. Y si es ésta mi condena, asumo la sanción… Pero una cosa es cierta… Volveré a levantarme… De toda ésta andanada de golpes y pedradas que le diste a mi amor… Pudo más el dolor… Y porque no puedo más de ser la más malvada egoísta y errada según tu punto de vista… Es mejor que desista de querer que me quieras porque si tu pudieras tratarme con alivio no sería este martirio que marchitó mi vida. Y por eso es mejor que en este Verso yo… te dé mi despedida.

Torbellino El aire ya adivina mi triste sentimiento la noche carga a cuesta el dolor de mi aliento. ¿Qué palabras dirían lo que estoy padeciendo?... Mis sueños no se acaban sin dibujar tu cara mi rostro triste y tierno te habla de mis amores mi voz callada y muda te grita mis temores y una insolente lágrima se cuela hasta mi almohada. En éste torbellino de locas esperanzas me encuentro con tus ojos queriendo mis andanzas. Tu voz que no me dice lo que me éstas queriendo y tu risa que besa mi fibra más sensible por quien voy padeciendo… Se dibuja en tus ojos una luz que me anuncia de bellas ilusiones. Se trasluce en tu rostro un amor tan cargado de pureza… Pero tu voz lo ahoga… O quizás no sea hora del descubrir de días tan felices. Háblame de una vez no ves que con tu ausencia ¡La vida hiriente clava sobre mis cicatrices!

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Destellos ¡Y llegaste a mí como un ángel! Ahuyentando mis penas con la luz de tus ojos tu risa encantadora me devolvió mi risa y mil destellos de amor yo, derramé en tu camisa. Tu porte, tu trato tierno nuestras cómplices miradas hace que sueñe en las noches ser para siempre tu amada. Gira en el viento ilusión galopa en sueño encendido que no cabe más amor ¡Qué en el pecho me ha nacido!

INDICE Nostalgia en el mar Conversando con mi almohada En el ala del ave Eclipse Trasfondo Gitana Reﬂexiones Agonía Sueños Perdida Huellas Tierra estéril Burla Melancolía Letargo ¿Qué me dirás ahora? La marcha del silencio Reencuentro A ti Sobrevivencia ¡Si pudieras, Señor! Incertidumbre cruel Escombros En retirada

17 19 20 21 22 24 26 29 30 31 33 34 35 36 37 38 40 43 44 45 46 47 48 50

Manantial Pensamientos Quebrantos Ilusión Tus ojos Esperanza Quimera El viejo lucero ¡Yo, que ya no creía en el amor… Ni en nadie! Y casi ya te quería Inquietud En mi ocaso Ilesa Agradecida Despedida Torbellino Destellos

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Vestigios de Agny Durant Versiรณn digital, octubre de 2018 Vargas - Venezuela Sistema de Editoriales Regionales - Vargas de La Fundaciรณn Editorial El perro y la rana

Colección Literatura

Serie Poesía

Agny Duránt, nació en San Felipe Estado Yaracuy. Comienza a escribir sus poemas desde los 13 años. Autodidacta – Líder Sindical perteneciente a la Fuerza Bolivariana de Trabajadores (FBT). Es miembro de la Red de Escritores (as) Socialistas de Venezuela Capitulo Vargas, del colectivo La Caña Literaria, como también del colectivo Literario Juan Pírela. Han sido publicados sus poemas en diferentes antologías; “Antología de Letras Varguenses”, “Más que amor Frenesí”, “Léeme Especialmente para pensar” “Chávez en el X Festival de Poesía – Edo Vargas”, por esta casa editorial. Ha escrito “Poemas Rebeldes”, “Amor en dos Patrias” y “Vestigios” por la editorial Negro sobre Blanco 2014 y 2016 SER-Vargas al igual que otros textos inéditos “Vivencias y Gritos Desgarrados” y “Palabras Sueltas” también sus poemas han sido publicados en el Diario VEA y diarios regionales. Sistema de Editoriales Regionales

VARGAS

“Vestigios” fue su primer creación literaria, es la huella, el residuo, la señal de toda esa ingenua ternura apasionada, conmocionada por ese dolor que sólo un poeta verdadero logra plasmar en un papel, liberando esos profundos sentimientos, dando rienda suelta a ese pesar por amor desbocado que soñó con ser “Feliz para siempre”. Este libro, estos poemas, son la constancia de la existencia de su creadora, sus emociones nítidas y rebosantes, muchas veces, de un gran dolor, otras, de inmensas alegrías, de amores y desamores.