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Impreso en Estados Unidos de América. 2018.
CARO Y ANDRÉS
Nos pidieron compartir en este día tan especial lo que pensamos sobre el matrimonio. Creemos que el matrimonio no es una receta única que todos debemos seguir, pues lo interesante será siempre hacer una propia receta deliciosa y perfecta para cada pareja siguiendo los gustos de cada quien. Nosotros nos casamos y nos unimos con un único fin: ser felices y crear una familia basada en el amor. La vida es solo una y estamos aquí para disfrutarla y ser felices, esa es nuestra meta. Hemos construido nuestra familia cada día que nos levantamos juntos y nos damos un besito de buenos días. Hacer el desayuno juntos, exprimir naranjas para el jugo, poner música y sentarnos a disfrutar esos momentos en la mañanas, han hecho que nuestros días comiencen alegres y unidos para enfrentar lo que viene. Cada día nos damos momentos para conversar cosas sencillas, importantes, grandes o chiquitas; chismes y noticias, tomar un vino... Ser honestos y sinceros entre nosotros y con los demás ha hecho que la relación crezca y madure. Dejar fluir la vida, amarse, pelear y reconciliarse con un beso al final. Nos amarramos siempre al amor que nos une, ese es el principio o la fundación como decimos los arquitectos. La relación de pareja debe construirse sólida y firme para enfrentar todo lo que vendrá. Ámense como son cada uno, sin pretensiones ni exigencias pero con compromiso, así será siempre fácil, bueno casi siempre jajajaja Los queremos mucho y estamos seguros que tendrán una vida llena de amor y felicidad!
ANDRÉS Y CARO
Dar consejos de pareja es bastante difícil, pues no existen modelos, ni prototipos y mucho menos fórmulas mágicas. Para nosotros el matrimonio es como el arte, y en arte todo se vale. Piccaso polifacético, Miró surealista y soñador, Da Vinci Renacentista y todo un paradigma. ¿Distintos? sí… pero todos con algo en común: pasión, creatividad, dedicación y convencimiento; también tuvieron pausas, críticas y frustraciones. Así es el matrimonio, pues al final la diferenciación nos complementa y el respeto a la individualidad nos fortalece y nos lleva a la armonía, la base de una buena relación. Andrés y Caro, su historia no comienza hoy, esta comenzó hace 3 años cuando pasaron de una amistad a un gusto por compartir momentos que poco a poco los fueron acercando a soñar juntos con pasión, creatividad, dedicación y convencimiento de lo que cada uno de ustedes es como persona y como pareja. Solo les pedimos que nunca renuncien a seguir compartiendo como novios y que la armonía que los ha traído hasta acá la conserven por siempre Canés y Eli.
CARO Y PATO
Cuando dos personas deciden compartir su proyecto de vida, vivir juntos y apoyarse, cuando declaran públicamente que se aman y lo demuestran ante familiares, amigos y compañeros de vida, eso es un matrimonio. No será la pasión, no será la aparente felicidad, no será el romance, será el compromiso de hacerse compañía lo que los hará crecer como matrimonio. Porque un matrimonio se construye constantemente, así como cada uno se construye constantemente. La vida matrimonial… es una invención de ese colectivo de dos, de esos cómplices y compinches, de ese colectivo creativo que tiene la vida matrimonial como empresa. Una empresa que requiere esfuerzos para que sobreviva a la caída de la motivación, a las frustraciones, a la enfermedad y a las pérdidas. Sean creativos porque ese es un poder en el matrimonio: ser creativos para los dos. En esa unión hay fuerza y vale la pena, vale todos los esfuerzos. Invéntense el matrimonio que quieran, sean artistas e improvisen porque pasarán momentos que los van a fortalecer, momentos cuando las ganas de seguir se acabarán y empujarán a la desunión ¿Qué hay que fortalecer? La base del amor, de la compañía mutua, de recogerse y cuidarse, de disfrutarse desde la diferencia. Nos acompañamos, y acompaño al otro a hacer sus búsquedas… a encontrarse. No me pongo como su sentido de vida. No me pone como su sentido de vida. Pero celebramos juntos la vida. No nos condicionamos la felicidad… pero compartimos las alegrías y las tristezas de lo que vamos encontrando. Casarse es volverse responsable de esa compañía, uno se cuida para el otro y cuida al otro para uno; pero, dejando espacios generosos para SER. Apunten al SER. Arriesguen todo por el SER. Mírense a los ojos sabiendo que a pesar de todo y después de todo ahí tienen a un amigo. Maestros mutuos. Humildes compañeros. Amantes parceros.
Los hijos se van, hay que aceptarlos con esa condición, hay que criarlos con esa idea, hay que asumir esa realidad. No es que se van; es que la vida se los lleva, y es que los padres no somos propietarios, somos consejeros, no dirigimos: aceptamos, no mandamos: acompañamos, no proyectamos: respetamos. Ya necesitan otro amor, otro nido y otras perspectivas. Ya les crecieron alas y quieren volar. Ya les crecieron las raíces y maduraron por dentro. Ya encontraron un amor que los respete, que quiera compartir sin temores ni angustias las altas y bajas del camino, un amor que les endulce el recorrido y los ayude en el fín que quieren conseguir. Quieren crecer en otra dimensión, desarrollar su personalidad, enfrentar el viento de la vida a la sombra del amor. El amor es alegría, libertad, fuerza, es generosidad, entrega e intercambio. Tienen un camino y quieren explorarlo, lo importante es que sepan desandarlo, tienen alas y quieren abrirlas. Lo importante es el corazón sensible, la libertad asumida y la pasión a flor de piel. Que la rienda sea con responsabilidad y la formación llena de luz.
Buscando unas palabras para referirme a esta pareja tan especial que se une en matrimonio por mutuo acuerdo...pensé, que es...Un acuerdo. Un acuerdo es aceptación de una situación. Y al hacer esa aceptación se está haciendo un acto de amor, porque aceptándose como son para conformar una familia se está amando. Hay que vivir en amor y esa vivencia en amor es respetar la individualidad cada uno, sabiendo que el mayor tiempo de entrega los dos, son uno; pero recordando que se es la mejor independiente y que no se pierde la individualidad con ese acuerdo. A veces se hace ese acuerdo entre las dos partes para tomar una sola determinación para el bien de los dos, para crecer los dos y otras veces se hace una acción individual como persona independiente ...En dos palabras ese acuerdo es : respeto y amor. Por esta razón me uno a las palabras de Pablo de Tarso cuando habla a los de Corinto: «El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor... no pasará ... JAMAS «
Yo honro ese lugar en tí donde habita el universo entero. Yo honro ese lugar en tí de amor, de verdad, de luz. Y sé que cuando tú estás en ese lugar dentro de tí, y yo estoy en ese lugar dentro de mí, Tu y Yo Somos Uno... CAROLINA Y ANDRES 01.07.17