UN SUEÑO AMERICANO
“HECHO EN HONDURAS”
Leo Dan Euceda,
© VECOMA / Marco Vásquez
Cacaotero de Río Blanco, Olancho, Honduras. Luego de adentrarnos en la verde profundidad de
en eso vinieron unos ingenieros de la asociación
la Comunidad Guanacaste; encontramos a Leo Dan
APROSACAO, me dijeron que sembrara cacao, les hice
Euceda, sentado en el corredor de su casa. Crecido
caso, y ahora, cada 15 días estoy sacando mis dos mil
bajo la costumbre cafetalera, la enfermedad de la
pesitos, es un salario para mí. Ya no vendo mi mano de
Roya acabó esa tradición, sin embargo, algunos palos
obra por contrato”.
de cacao que su papá cultivaba, inculcaron en él, el amor por este cultivo.
En Honduras, muchos cultivan los mismos productos y cosechan al mismo tiempo, lo cual fue un inicio
Al igual que miles de hondureños, Leo Dan, migró a
difícil, como lo expresa Leo Dan: “Yo intenté volver a los
los Estados Unidos en busca del sueño americano.
Estados Unidos, todavía no tenía cacao, soñaba que si
Después de muchas dificultades, llegó, y durante seis
me quedaba más tiempo me compraba un carro o una
años, trabajó como obrero en la construcción: “Yo
tierrita. Regresar a Estados Unidos ahora es peligroso,
regresé por mi voluntad, con lo que ahorré, compré 10
están los –Zeta-, mucha gente de Olancho ha muerto en
manzanas de tierrita e hice la casita y luego me vine.
Tamaulipas, se quedaron sin su sueño americano”.
Tenía unas vaquitas y a sembrar zacate iba cuando