MARTIAL WORLD
Capítulo 671. ¿Eres Lin Ming? Estas mujeres jóvenes que habían sido capturadas para usarlas como quemadores de incienso eran todas de pequeñas sectas cercanas. De los países pequeños de los que se originaron, un talento de artes marciales de cuarto grado ya podría llamarse una orgullosa hija del cielo. Sin embargo, después de la erupción de la marea de la bestia y sus naciones fueron destruidas, estas jóvenes no tuvieron más remedio que esconderse en pasajes secretos subterráneos para escapar del desastre. Pero esconderse bajo tierra no era un plan a largo plazo. Eventualmente tendrían que salir a buscar ayuda o buscar comida. El resultado de esto fue que fueron capturados por los artistas marciales de la Región Demoníaca del Mar del Sur por sus obscenos propósitos. El camino sexual del reino demoníaco también se dividió en dos tipos diferentes. Uno era el Yin y el Yang complementarios, donde tanto el hombre como la mujer se beneficiarían mutuamente. El hombre beneficiaría a la mujer y la mujer beneficiaría al hombre. El otro era donde una persona saqueaba salvaje y bárbara a la otra, absorbiendo su vitalidad. La Región Demoníaca del Mar del Sur utilizó este segundo tipo. No estaban dispuestos a entrenarlos, sino que preferían absorber su fuerza vital y su fuerza, acelerando rápidamente su envejecimiento. "¡Jajá, pequeñas bellezas, después de que regresemos, este hermano mayor las amará bien!" El líder del escuadrón sonrió lascivamente mientras frotaba con avidez uno de los cuerpos de la chica. Pero en este momento, sus ojos se agrandaron. A solo varias millas de distancia, había las sombras de varias personas volando hacia ellos. Por su ropa, era obvio que estas personas no eran de la Región Demoníaca del Mar del Sur, sino que probablemente eran artistas marciales humanos. El capitán del escuadrón se sorprendió enormemente, “¿En realidad hay personas que se atreven a venir a una rama de la Región de los Demonios del Mar del Sur para morir? ¡Sus cerebros deben haberse agriado!” “De hecho, hay algunos idiotas enviándose a nuestra puerta. Señor Protector, puede que no sea malo si los matamos y decimos que son espías. También ganaremos algo de mérito por eso”. Justo cuando este pensamiento cruzó por su mente, de repente descubrió que la velocidad a la que se movían estas personas había superado con creces su imaginación. Las figuras de dos personas en realidad cruzaron instantáneamente varias millas hasta que estuvieron a solo unos cientos de pies de distancia. "Oh...?" El capitán del escuadrón se quedó helado. ¡Podía sentir que el poder del espacio a su alrededor se apretaba repentinamente, colapsando sobre él y encerrándolo completamente dentro! ¿¡¿¡Que está pasando!?!?
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