XIII-CAZA DEL REINO DIVINO ASURA II
Capítulo 847. Una Lanza Impresionante Mundial El terror de un títere de matanza no era solo su falta de miedo ante la muerte, sino también su poderoso poder defensivo físico. Habían pasado por todo tipo de transformaciones para eliminar su capacidad de sentir el dolor y podían quemar su potencial de vida en cualquier momento, dándoles una gran resistencia. En cierto sentido, se parecían a los demonios cadáveres que no sentían dolor ni conocían el agotamiento. Incluso si uno fuera más fuerte que ellos, se requeriría una gran cantidad de energía para matarlos, posiblemente lesionado en el proceso. "¡Rey Yaksha, ve y diviértete con esa pequeña bestia!" Situ Bonan sonrió sin piedad. Aunque no esperaba que Rey Yaksha derrotara a Lin Ming, aún fue suficiente para consumir su fuerza y borrar esa sonrisa mocosa e insufriblemente arrogante de su rostro. Este tipo de marioneta de matanza no necesitaría bloquear los ataques, solo intercambiar ataques de frente de la manera más cruel posible. Si Lin Ming se enfrentara a esta marioneta de la matanza, entonces su destino podría ser imaginado. Aunque Rey Yaksha era un títere, todavía tenía su propia mente y pensamientos. Miró hacia Lin Ming como una bestia hacia su presa, sus ojos se llenaron de una luz codiciosa y brutal. Había estado sellado hasta ahora, por lo que no tenía idea de qué tipo de persona era Lin Ming o cuán fuerte era. Rey Yaksha solo sabía que este joven frente a él era su oponente. Aunque Situ Bonan le había advertido sobre lo feroz que era Lin Ming, era imposible para él tomar en serio a un joven de Destrucción de la vida en la primera etapa. “Jeje, mocoso, tu suerte es una mierda. Estás solo en la primera etapa de Destrucción de Vida. Matarte sería tan fácil como romper papel. En cuanto a mí, esta vez realmente me llevé el premio gordo. ¿Sabes lo valiosa que es tu vida? Mientras pueda matarte, seré recompensado con una médula de melocotón de 10,000 años. ¡Eso es suficiente para alimentar los fuegos de mi vida y poder vivir otros 200 años!” La vitalidad vital de estos títeres de matanza ya había llegado a su fin. Incluso una médula de durazno de 10,000 años no podría devolverlos a la vida. Pero, continuar con su existencia durante otros 200 años, donde podían jugar imprudentemente y disfrutar de su gloria, fue más que suficiente. Esta vez fue igual a tres vidas mortales. Fue una tentación extremadamente grande para ellos. Rey Yaksha agitó su tridente y subió al escenario. Esta área no fue construida con piedra. Había sido un pico de montaña de varias decenas de miles de pies de altura que había sido cortado por la fuerza por los grandes poderes del Reino Divino Asura, dejando atrás nada más que una base plana que era tan suave como si fuera mantequilla cortada con un sable. Por supuesto, se construyó una formación de matriz para respaldarlo.
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