MARTIAL WORLD
Capítulo 867. El milagro de las leyes del tiempo “Así que eso es lo que es, la línea de sangre del Antiguo Demonio Gigante. Parece que el Emperador Divino Haotian ha obtenido muchas oportunidades afortunadas del reino dimensional del Demonio Gigante...” Al Viejo Buena Fortuna no le importaba. El Reino Divino Asura tenía un reino dimensional en sus fronteras que tenía muchos secretos de la raza del Demonio Gigante Antiguo sellados en su interior. No fue sorprendente para él haber obtenido algunas oportunidades de suerte. “Mayor no necesita preocuparse por las afortunadas oportunidades de este Emperador. En cambio, ¡piensa en cómo bloquearás el segundo ataque de este Emperador!” Situ Haotian gritó. Su voz llevaba consigo una energía metálica, haciendo que pareciera como si sus palabras resonaran en una gran campana, sonoras y ensordecedoras. Después de completar su transformación, ¡Situ Haotian tenía plena confianza en sí mismo! Viejo hombre buena fortuna sonrió débilmente, “Parece que el viejo yo realmente tiene que trabajar hoy. Realmente, que los jóvenes sigan siendo tan testarudos no siempre es bueno…” Mientras hablaba el Viejo Buena Fortuna, se levantó lentamente de su buey verde sin el menor indicio de consternación. Todos los artistas marciales de los alrededores sintieron de repente que algo andaba mal. "¿Eh? ¿Cambió la voz de Viejo hombre buena fortuna? “Sí… ha cambiado. No suena tan viejo como antes”. Como todos estaban confundidos, ocurrió una escena completamente inesperada y desconcertante. Cuando el Viejo Buena Fortuna descendió de su buey verde, su cuerpo de repente comenzó a crecer. Su espalda ya no estaba encorvada y su cabello blanco se volvió negro, colgando sobre sus hombros como una cascada de tinta. Su cuerpo se había convertido en el de un joven de 20 a 30 años. Sus ojos, una vez embarrados, se aclararon y sus cejas se enderezaron, apuntando hacia arriba e inclinadas hacia sus sienes. En solo unas pocas respiraciones de tiempo, Viejo hombre buena fortuna se había transformado de un anciano al final de su vida en un joven apuesto con rasgos de jade. Su larga ropa azul todavía le cubría holgadamente como antes, pero el bastón color melocotón ya no estaba en sus manos. Más bien, ese bastón de melocotón se había transformado en una espada. Esta espada medía cuatro pies de largo y brillaba como plata bruñida. La empuñadura de la espada estaba hecha de jade y la hoja estaba tallada con patrones tenues. ¡Este era un verdadero artefacto santo! Nadie vio cuando Viejo hombre buena fortuna había desenvainado esta espada. ¡Era como si nunca hubiera llevado un bastón de melocotón, sino que siempre hubiera estado llevando esta espada de plata en su lugar! ¡Este cambio repentino dejó a todos completamente conmocionados!
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