XV- EL CLAN DEL ANTIGUO FÉNIX I
Capítulo 995. Infiernos de las llamas, segundo nivel Habían penetrado 8000 millas de profundidad en los Infiernos de la Llama. Esta fue una profundidad aterradora. Aquí, no solo la temperatura y la energía del origen del fuego eran los vientos celestiales aterradores, sino que la inmensa presión de la espesa niebla de fuego los presionaba. Mientras molía contra la verdadera esencia protectora de los artistas marciales, emitía sonidos crepitantes como una piedra de molino. “Cuida tu mente y no uses la fuerza ciegamente para resistirla. Debe utilizar su comprensión de las leyes para resistirlo; ¡esto será muy beneficioso para entrenar y templar tu verdadera esencia!” Sun Cyprestar dijo mientras continuaba volando hacia abajo. Una profundidad de 8000 millas era una distancia que incluso los discípulos de Salón del Fénix encontraban difícil de resistir. 9000 millas! Los varios discípulos que habían entrado en el Salón Fénix solo en virtud de sus conexiones finalmente tuvieron su verdadera esencia protectora estallando. Debido a que un joven vestido con túnica había agotado toda su energía, se desmayó directamente en el acto. En el momento siguiente, fue envuelto por la energía de la llama azul-verde del Ruby Sovereign y fue enviado a una dimensión menor segura. En las últimas 1000 millas, la dificultad se disparó rápidamente. Más y más discípulos del Salón Fénix descubrieron que no podían continuar. Además de Salón del Fénix, los discípulos de los otros tres pasillos no pudieron continuar. Solo quedaba una persona, y esa era Zhou Fei. En este momento, Zhou Fei todavía seguía bajando con bastante facilidad. Pero sabía que esta relajación no duraría mucho más. No pudo evitar mirar a Lin Ming. Lin Ming estaba bien dentro de sus expectativas; de lo contrario, no habría sido considerado el objetivo que tenía que superar en el futuro. "Huo Yanguang, Lin Ming, quiero ver hasta qué paso ustedes dos podrán durar". Zhou Fei aceleró el paso mientras pensaba esto. El segundo nivel de Infiernos de llamas estaba cerca. En ese momento, entre el vasto polvo rojo y la niebla, todos vieron a un grupo de mujeres. La hermosa mujer que los lideraba era Chu Redcloud. Ella había estado esperando allí a los discípulos del Palacio del llanto del fénix.
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