XIX- GENIOS DEL REINO DIVINO PRIMERA REUNIÓN MARCIAL II
Capítulo 1312. De Samsara a Samsara “¡Esa es la Rueda de Samsara! ¡Incluso Xiao Moxian perdió con ese movimiento!” Toda la audiencia tuvo una impresión extremadamente profunda del fantasma de la Rueda de Samsara que apareció detrás de Hang Chi. La Rueda de Samsara era demasiado fuerte. Incluso Xiao Moxian con su verdadera forma de fénix no pudo superarlo. "¡Me pregunto cómo Lin Ming bloqueará esto!" ¡Retumba, Retumba, Retumba! La rueda dorada del Samsara descendió presionando. Hang Chi estaba de pie en el centro de la Rueda del Samsara, con su túnica de monje quieta y sencilla, como un Buda piadoso. Antes de que llegara la Rueda de Samsara, Lin Ming ya podía sentir la aterradora presión contenida dentro de ella. Aunque este era claramente un método de cultivo budista dorado y sagrado, la verdad era que esta Rueda de Samsara contenía una energía helada y afilada, que parecía como si las agujas se clavaran en el cuerpo de Lin Ming, haciéndolo sentir un dolor incomparable. Esta energía fría era el poder del samsara contenido dentro de la Rueda del Samsara. Aunque los métodos de cultivo budistas estaban llenos de un brillo suave, a menudo centrándose en la misericordia y la compasión, tampoco carecían del camino de la matanza, las garras de los rencores, los hechizos de resentimiento, los infiernos de estanques de sangre, los campos de batalla de asura y todo otro tipo de métodos malvados. Donde había luz, había sombra. Donde había bien, había mal. El bien y el mal dependían el uno del otro; eran conceptos indivisibles. Sin maldad, sin asesinato, sin sufrimiento, sin enfermedad, envejecimiento y muerte, sin infiernos asura, si toda la sociedad viviera en felicidad perpetua y felicidad ciega, ¿cómo podría existir el camino budista? Si es así, nadie creería en el budismo en este mundo. Los pecados de la humanidad eran una parte esencial del budismo. En los seis caminos del samsara dentro de los preceptos del budismo, solo los caminos de la divinidad y la humanidad eran los caminos morales puros. El camino de asura no era ni bueno ni malo, y en cuanto a los últimos tres caminos, ¡cada uno era peor que el anterior! Frente a la Rueda de Samsara, era imposible que Lin Ming se contuviera, de lo contrario sufriría una derrota instantánea aquí. No dudaba de que las técnicas de Hang Chi fueran mucho más formidables que las de Xiao Moxian.
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