Capítulo 1594. Entrenamiento Silencioso

La noticia de que Lin Ming estableció su propia sala de artes rúnicas divinas y una sala de alquimia pronto se extendió por toda la Secta Luna Azul.

Esta fue una noticia extremadamente fresca y novedosa. En Camino Asura, los alquimistas no eran raros, pero la ocupación de maestro rúnico divino se consideraba una carrera noble en todo Camino Asura. Los maestros rúnicos divinos solo reunirían en el pico grandes influencias, así como grandes ciudades dedicadas a las artes rúnicas divinas como Ciudad Runa Divina.

Pero para la Secta Luna Azul, estas grandes influencias máximas eran simplemente leyendas entre leyendas; era imposible para ellos entrar en contacto con ellos. En cuanto a Ciudad Runa Divina, solo las élites más asombrosas de la Secta Blue Moon pudieron ingresar; los discípulos ordinarios ni siquiera podrían pasar las puertas de la ciudad.

Por lo tanto, la ocupación del maestro rúnico divino era algo de lo que los discípulos de la Secta Luna Azul solo habían oído hablar, pero nunca antes habían visto. Cuando de repente escucharon que un maestro rúnico divino había aparecido en su secta, todos corrieron a la residencia de Lin Ming para echar un vistazo y ver cómo se veía un maestro rúnico divino y qué tipo de trabajo hacían.

Sin embargo, este discípulo llamado Lin Ming no parecía dispuesto a comunicarse con los demás. Cuando la persona promedio ingresaba a su residencia, en realidad permanecía en su sala de alquimia o sala de artes rúnicas divinas, jugando con algo, sin ninguna intención de salir a saludar a los invitados.

Incluso si no estaba refinando píldoras o practicando artes rúnicas divinas, a menudo meditaba en silencio en su habitación. O bien, a veces sostenía un deslizamiento de jade rojo sangre. Este deslizamiento de jade fue extremadamente extraño. Era mucho más grande que un deslizamiento de jade común y tenía una apariencia muy pesada y solemne. Se desconocía exactamente lo que estaba grabado en su interior.

Este joven llamado Lin Ming miraría este deslizamiento de jade todos los días. Sus cejas rectas a menudo se levantaban y se arrugaban como si estuviera desconcertado. Pero a veces tenía una apariencia extremadamente feliz como si de repente estuviera iluminado.

Estas acciones hicieron que sus invitados se sintieran incómodos y avergonzados. Otros le preguntaron a Lin Ming cómo había entrado en contacto con las artes rúnicas divinas, cuál era su nivel de artes rúnicas divinas o si tenía un verdadero maestro de artes rúnicas divinas como maestro. Pero, Lin Ming permaneció en silencio o sumergido en su deslizamiento de jade rojo sangre, sin parecer haber escuchado nada en absoluto. Esto hizo que aquellos discípulos que estaban extremadamente interesados en las artes rúnicas divinas se sintieran desairados, como si no se sintieran bienvenidos.

Había muchas discípulas dentro de la Secta Luna Azul. Muchas de estas jóvenes eran bien conocidas por su belleza en varios cientos de miles o incluso millones de millas. Sin embargo, no importa cuán sobresaliente fuera su apariencia o cuán asombroso fuera su talento, Lin Ming los negó a todos.

Lentamente, nadie vino más a visitar a Lin Ming.

Y Lin Ming también comenzó sus tranquilos días de entrenamiento.

Después de practicar artes marciales durante tantos años, Lin Ming nunca había sido como era hoy, realmente asentó su mente y corazón, sin necesidad de pensar en asuntos o preocuparse todos los días. En cambio, entrenó tranquila y pacíficamente.

Con Xiao Moxian, eran como una pareja mortal ordinaria. Cada día estaba lleno de tranquilidad y disfrute.

Aquí no había batallas, ni peligros, ni reinos místicos en los que tuviera que arriesgar su vida, ni gente con oscuras intenciones que codiciaran sus tesoros.

Los peligros de vida o muerte y las batallas de masacre fueron sin duda útiles para lograr avances en el cultivo.

Pero para practicar las artes rúnicas divinas y acumular cultivo, un ambiente pacífico era mucho más adecuado. Muchas élites jóvenes heroicas a menudo pasaron varios miles de años o incluso más de 10,000 años para irrumpir en el reino del Señor Divino.

De estos miles y miles de años, solo se dedicaría un período menor a buscar oportunidades de suerte y aventurarse a través de peligros. La mayor parte del tiempo se dedicaría a moderar el estado mental y acumular el cultivo y consolidar los cimientos. Esta era la vida que Lin Ming estaba viviendo ahora.

Aunque su cultivo progresó extremadamente lento durante este tiempo, este fue un proceso esencial para caminar por el camino de las artes marciales. Todos los artistas marciales tenían que experimentarlo y Lin Ming no fue la excepción.

La primavera se convirtió en otoño y luego de vuelta. En un abrir y cerrar de ojos, había pasado un año.

Si Lin Ming no estuviera practicando las artes rúnicas divinas o la alquimia, podría encontrarse con ese deslizamiento de jade rojo sangre en sus manos.

Este deslizamiento de jade era la sección de las Nueve Estrellas del Palacio Dao del Manual del Tirano Celestial.

Mientras Lin Ming estaba leyendo este deslizamiento de jade, no ocultó nada. Esto se debió a que, para empezar, nadie podría reconocer nada sobre este deslizamiento de jade.

Después de meditar diligentemente durante un año, Lin Ming gradualmente encontró pistas sobre cómo refinar la píldora Celestial de lobo voraz.

De las Nueve Estrellas del Palacio Dao, el segundo Palacio Dao correspondía a la Estrella del Lobo Voraz.

Las Nueve Estrellas del Palacio Dao, siete brillantes y dos oscuras. Eran: Lobo voraz, Puerta del Titán, Kismet apreciado, Canción misericordiosa, Virtud ardiente, Canción Marcial, Rompedor de Ejercito, Asistente izquierdo y Apoyo Derecho.

El primer Palacio Dao que abrió Lin Ming fue el Palacio Dao del Templo Púrpura, correspondiente a la Estrella Rompedor del Ejército.

La función del Palacio Dao del Templo Púrpura era reunir el poder de las nueve estrellas y aumentar enormemente la fuerza de la esencia astral de Lin Ming. Este tipo de aumento podría mejorar la fuerza corporal de Lin Ming de tres o cuatro veces a ocho o nueve veces. Todo esto dependía de la propia fundación de un artista marcial y del grado en que habían abierto las Nueve Estrellas del Palacio Dao.

En cuanto al segundo Palacio del Dao, se llamó Palacio del Dao de la Retribución Celestial y correspondía a la Estrella del Lobo Voraz.

Lin Ming hizo girar su esencia astral todos los días de acuerdo con el Manual del Tirano Celestial. Además del cultivo dual con Xiao Moxian, Lin Ming estimó que en otros 20-30 años, finalmente alcanzaría el nivel en el que podría intentar ingresar al Palacio del Dao de la Retribución Celestial.

Y en estos 20-30 años, Lin Ming tuvo que llevar sus artes rúnicas divinas y su alquimia al nivel en el que pudo refinar la Píldora Celestial del Lobo Voraz.

De lo contrario, si gastó una cantidad inimaginable de riqueza y tiempo para recolectar los materiales para la píldora del cielo del lobo voraz pero no pudo refinarla, eso sería realmente una desesperación más allá del llanto.

Aunque parecía haber mucho tiempo con la apertura del juicio final dentro de 50 años, la verdad era que el tiempo era esencial. Había demasiados asuntos para que Lin Ming los procesara.

Así pasaron algunos años más. Lin Ming practicó continuamente la alquimia y las artes rúnicas divinas. La enorme cantidad de materiales que había comprado en Ciudad Runa Divina se agotó lentamente.

Su habilidad en las artes rúnicas divinas y la alquimia también aumentó constantemente.

Durante este tiempo, Lin Ming refinó una cantidad alucinante de píldoras de bajo nivel y símbolos rúnicos divinos.

La fuerza del alma de Lin Ming superó con creces la de otros en su nivel. Además de su comprensión del Dao Celestial Asura, ya sea refinando píldoras o dibujando símbolos rúnicos divinos, era mucho más rápido que la persona promedio.

Sin embargo, aunque Lin Ming había heredado los recuerdos de tres alquimistas y maestros rúnicos divinos, esto no significaba que su técnica de alquimia y su técnica de artes rúnicas divinas fueran perfectas.

En este día, cuando Lin Ming estaba a la mitad de refinar un horno lleno de píldoras, hubo una gran explosión cuando explotó todo el horno de píldoras.

Aunque Lin Ming reaccionó extremadamente rápido, la mitad de la habitación aún se derrumbó. La sala de alquimia cuidadosamente arreglada también quedó en un completo desorden.

Cuando un anciano del patio exterior de Transformación Divina de la Secta Luna Azul escuchó esta noticia, rápidamente fue a verificarlo personalmente.

Inspeccionó el cuerpo de Lin Ming. Luego, después de asegurarse de que Lin Ming no estaba herido, le dio varios consejos. En resumen, insinuó que Lin Ming no necesita preocuparse por cosas tan inútiles y solo necesita practicar artes marciales; ese era el verdadero camino ortodoxo.

A los ojos de estos numerosos Ancianos, experimentar con la alquimia y las artes rúnicas divinas era simplemente una ocupación inútil en la que uno perdía el tiempo. Esto se debió a que, con las condiciones actuales de Lin Ming, le sería imposible progresar.

Además, las artes rúnicas divinas tenían un requisito demasiado alto para el talento de un artista marcial. Casi solo los artistas marciales de los Spiritas pudieron ser maestros rúnicos divinos. Para un artista marcial humano convertirse en un maestro rúnico divino, eso era demasiado difícil.

Para decirlo groseramente, eran los sueños de un tonto.

Pero Lin Ming no prestó atención al consejo del Anciano y el Anciano no pudo obligarlo. Después de todo, si Lin Ming se uniera a la Secta Luna Azul, también podría irse.

Si querían retener la mente y el corazón de las personas, necesitaban darles más libertad.

El Anciano de la Secta Luna Azul envió a un discípulo de bajo nivel para limpiar la habitación. Pronto, tres discípulos del patio exterior llegaron a la residencia de Lin Ming para limpiar su habitación.

Estos discípulos del patio exterior eran adolescentes y su cultivo estaba en el reino de Condensación de pulso. Acababan de unirse a la Secta Luna Azul y habían sido elegidos del mundo mortal.

En la Secta Luna Azul, su estado era bajo. Aunque se les llamaba discípulos del atrio exterior, la verdad era que no eran muy diferentes de las doncellas.

Lin Ming miró a estas tres discípulas. Todos ellos se veían ingenuos y adorables, como niñas encantadoras.

Lin Ming también sabía que, aunque estas jóvenes discípulas parecían estar pasando por muchas dificultades, la verdad era que sus familias estaban orgullosas de tener hijas que lograron pasar los estándares para unirse a una gran secta de artes marciales. La familia y los amigos de estas jóvenes estaban llenos de orgullo y alegría, e incluso la realeza del mundo mortal tuvo que mostrar cortesía a sus padres.

¡Esta fue la disuasión provocada por una secta de artes marciales!

Sin embargo, el camino de las artes marciales era bien conocido por ser extremadamente áspero y lleno de baches. Aunque las familias de estas jóvenes vivían vidas brillantes y gloriosas, ¿quién sabía lo que les sucedería a sus hijas al final? Tal vez podrían ser secuestrados por otros para convertirse en hornos vivientes, o tal vez después de un poco de éxito perecerían en un reino místico, o tal vez incluso podrían ser asesinados por sus posesiones...

Pensando en esto, Lin Ming suspiró ligeramente. En el pasado, cuando pisó por primera vez el camino de las artes marciales, también sufrió muchas dificultades.

Al ver a las tres jóvenes dando lo mejor de sí para limpiar la habitación, los pensamientos de Lin Ming se agitaron. Hizo un gesto con la mano, haciéndoles señas para que se acercaran.

Estas jóvenes se congelaron. Lin Ming era un discípulo central y su cultivo había llegado al último reino del Mar Divino. Para ellos, era un personaje increíblemente elevado. Su diferencia de estatus ni siquiera podría describirse como nubes y barro.

Además, la actitud de Lin Ming era indiferente, e incluso cuando los discípulos de la corte interna vinieron a visitarlo, él todavía no les respondió. Incluso esas hermanas aprendices mayores increíblemente talentosas y hermosas tuvieron que comer a puerta cerrada cuando intentaron acercarse a Lin Ming.

Pero Lin Ming en realidad los estaba llamando. Esto hizo que todos se sintieran extremadamente nerviosos y halagados.

Se acercaron, un poco tímidos, un poco nerviosos. Lin Ming sacó algunas botellas. El contenido de estas botellas eran algunas de las píldoras que Lin Ming había refinado en los últimos años.

Mientras Lin Ming practicaba las artes rúnicas divinas y la alquimia, había producido demasiadas píldoras y símbolos rúnicos divinos. Para Lin Ming, estas cosas no tenían ningún valor en absoluto. Ni siquiera valía la pena su tiempo o esfuerzo para venderlos.

Sin embargo, tirarlos también fue una pena. Por lo tanto, Lin Ming de repente tuvo la idea de dar estas cosas a los demás.

Esto también fue en beneficio de la Secta Luna Azul.

Después de todo, durante los últimos años, la Secta Luna Azul lo había tratado considerablemente bien. Después de determinar que los antecedentes de Lin Ming no tenían problemas, los Ancianos de la Secta de la Luna Azul enviarían a alguien para entregar píldoras, runas de energía de origen y otros recursos similares. Para la Secta Luna Azul que podría llamarse pobre, estas cosas valían una buena cantidad de riqueza.

Estas cosas eran para beneficio de los discípulos del atrio interior. Y debido a que Lin Ming y Xiao Moxian tenían niveles extremadamente altos de talento, los beneficios que recibieron fueron más altos que los de otros. Pero, Lin Ming también sabía que eventualmente tendría que dejar la Secta Luna Azul. Si la Secta

de la Luna Azul dependiera de él para abrirse paso hacia el reino del Señor Divino y convertirse en un pilar de la secta, estarían decepcionados.

Por lo tanto, Lin Ming decidió regalar todas estas píldoras y símbolos rúnicos divinos que no tenían mucho valor para él a los discípulos de la Secta de la Luna Azul.

Para empezar, la Secta Luna Azul era una secta pequeña y no temía despertar sospechas o causar olas al sacar estos artículos.

No sería una exageración decir que Lin Ming podría arrasar una secta de este nivel con una sola mano.

"Estos son para ti." Lin Ming colocó las botellas de píldoras en una caja de jade y se la pasó a los tres discípulos de la corte exterior del reino de Condensación de Pulso. Estos discípulos estaban aturdidos, sin saber qué había en la caja de jade.

Y en ese momento, Lin Ming dijo: “Ve y llama a tus hermanas aquí, así como a los discípulos varones que conoces. Llámalos a todos aquí juntos.