VII-VENGADOR
Capítulo 424. Horriblemente Feroz Cuando se abrió la Fuerza de Dios Hereje, Lin Ming era como un monstruo que saltó de un abismo sin fin; su impulso se liberó por completo. Cuando Lin Ming agarró la Lanza del cometa púrpura, el suelo debajo de él comenzó a temblar y las grietas comenzaron a extenderse desde donde estaba como una telaraña. Hizo florecer su lanza, e innumerables baldosas de mármol blanco se enrollaron como una estera, con innumerables piedras y rocas enviadas arremolinándose en un vórtice de alta velocidad. Si un artista marcial más débil fuera tocado por estos trozos de piedra, perforaría un agujero sangriento a través de su cuerpo. Después de que el aura de la segunda capa de la Fuerza de Dios Herético estalló, todos los artistas marciales presentes, incluidos los Ancianos de Xiantian, sintieron una gran presión represiva. No tuvieron más remedio que hacer girar su verdadera esencia para resistirla. La espada de amatista de Ouyang Shenxiu fue cortada. En la parte superior de la espada, la capa de amatista ya había crecido nueve pies de largo. ¡Esa espada de cuatro pies en realidad se había convertido en una gran espada de nueve pies de largo! "¡Rotura!" ¡La espada de Ouyang Shenxiu cortada! Kacha! La energía de la espada y la luz de la lanza se entrelazaron mientras chocaban entre sí, creando una tormenta fría y aterradora de verdadera esencia. La verdadera esencia destrozó la tierra, enviando enormes piedras trituradas volando alto en el aire. Olas gigantes aparecieron en el lago como si estuviera en medio de una tormenta marina. Bajo la fuerza de un impacto tan locamente fuerte, el cuerpo de Lin Ming fue lanzado hacia atrás como una hoja. ¡Puff, puff, puff! Lin Ming fue arrojado lejos de la isla principal y cayó sobre el lago. Justo cuando estaba a punto de aterrizar, Lin Ming agitó sus mangas y una brisa fresca lo rodeó, sosteniendo su cuerpo en el aire. Lin Ming se calmó lentamente, rebotando sobre las agitadas olas antes de estabilizarse. El fuerte impacto de hace un momento lo había hecho palidecer, y una delgada línea de sangre se filtró por las comisuras de sus labios. Su fuerza explosiva era fuerte, pero la diferencia entre sus cultivos era demasiado grande. Después de todo, su base era más débil. La verdadera esencia de la médula templada de Lin Ming estaba bien. Fue solo que los meridianos de su cuerpo no pudieron soportar un impacto tan cruel y recibió una herida.
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