· PRESENTACIÓN DEL EXALTADOR DE LA II EXALTACIÓN A SAN JUAN EVANGELISTA ·
De guerras ganadas con solo mirar, dispuesto a avivar ilusiones atadas. De metas logradas de abrazos sin fin, de verte yo a ti soldado al amor lo mismo que en el dolor me conoces tú a mi.
Paz y bien a vosotros, mis hermanos, entre estas paredes que me hicieron sentir siempre como en casa. Cuando uno se siente así, como en casa, el tiempo marcha ligero y acabas haciendo de ese lugar un sitio donde creces y granas tu querer. Te dirige el madurar pero el alma no olvida nunca lo que en casa aprendió, vio y amó. * La persona que hoy presento, es de esas personas que Dios se sirve para hacernos sentir dichosos, completos. Es un hombre de Dios, que ostenta la suerte de ser cristiano y por llo el descanso de aprovechar este seguro de vida. Los valores de la humildad, la responsabilidad y la caridad son banderas de un legado que deja en aquello que toca. Sabe hacer, en su gratitud y prudencia, que una persona se sienta bien a su lado, porque a través de su sencillez aprueba un cimiento fuerte de una amistad segura.
Su amor a nuestra Hermandad de la Vera Cruz abarca gran parte de su interior, que viene avivado desde su inocencia y hasta el día de hoy, pleno en una realidad de muchos años e dedicación, tiempo y afán en pos de la cruz de Jesús. A la verdad de este presente acto me atengo, pues mientras llegábamos a hoy, han sido veinticinco las madrugadas que ha roto en vela; vistiendo hábito franciscano, arrastrando una cruz, tocando un tambor, portando la Santa Cruz, guiando a la trasera del paso de la Virgen, costalero de Ella, o hasta ahora del Señor. Porque para gloria del Señor es todo cuanto hace en el seno de su muy querida Cofradía. En su reloj no existen horas para el editar fotografías, redactar y maquetar publicaciones, organizar túnicas, el cuidado de la casa o mantener abierta Santa Cruz. Es acogedor, como ese abrazo a María en el paso de plata. Es el coraje de un Grupo Joven que cumple diez años de valentía. Por el que ha apostado a cada tiempo y por el que ha luchado incansablemente. Ama a la juventud, es atento con ellos y ha labrado un futuro del que respiran hoy muchas hermandades. * A crecer como cristiano tú me trajiste hasta aquí, al verme cuando me vi precisando una mano, tú me llamaste: “¡hermano! recuerda que tengo dos. Ven, descansa en pos, como San Juan el amado tu cansancio reposado, en el hombro del Señor.” Tiene la palabra, don Javier Ruiz Olivera, para la segunda exaltación a San Juan Evangelista con motivo del décimo aniversario fundacional del Grupo Joven.
A mi hermano y amigo Javi, Juan García Cuevas. Baeza, 16 de febrero de 2018.
ILUSTRE Y VENERABLE COFRADÍA DE LA SANTA VERA+CRUZ
II EXALTACIÓN A SAN JUAN EVANGELISTA
Baeza, 16 de febrero de 2018
“SI ALGUIEN QUIERE SER MI DISCÍPULO, QUE SE NIEGUE A SÍ MISMO, TOME SU CRUZ Y ME SIGA”. Me estoy imaginando la cara que tuvo que poner nuestro querido San Juan Evangelista, al escuchar estas palabras de Jesús, un joven apuesto, ilusionado, con vitalidad, muchas ambiciones y toda una vida por delante, que escucha dejar todo lo que tienes, dejar todo lo que eres, para seguir al que dicen es el Mesías. “Cierto es que ha hecho algunos milagros, que la gente habla maravillas de él, que sabe mucho y hasta cura a los enfermos, pero ¡yo paso!, ¡Yo prefiero no complicarme!, prefiero vivir mi vida, disfrutar del momento, alejarme de las complicaciones y vivir ntensamente mientras pueda, que la vida es muy corta, ¿yo me voy a complicar con este? ¿que yo no sea lo primero para mí?, ¿eso cómo va a ser?, yo a lo mío, yo soy lo más importante”. Estos pensamientos que dichos aquí puede resultar sorprenderte, por desgracia, son una realidad en muchos jóvenes de nuestra sociedad. Salvando las distancias de la época, yo me pregunto, qué es lo que impulsaría a San Juan a seguir a Jesús, Que es lo que le impulsaría a no seguir la vida de cualquier joven de su edad y seguir al hijo de un carpintero, que había nacido en Belén, en un pesebre, pobre, semidesnudo, que no era un fuerte guerrero, no tenía ningún ejército para liberar a su pueblo y se hacía llamar el Mesías. Lo normal es pensar que era un loco y ¿y Quién quiere seguir a un loco? Pues sin duda otro loco, otro loco como San Juan, ya que había algo que lo llamaba, que ardía fuertemente en su corazón, algo que lo empujaba a seguirlo, que no podía dejar ir, que le hacía abandonar ese camino fácil y cómodo, que le hacía complicarse la vida de verdad, y dejar a un lado la preocupación por sí mismo, en definitiva dejarlo todo para nacer a una vida nueva. Sin duda, tuvo que ser algo maravillo, para que no le importara acompañarlo en los momentos más importantes de la vida pública de Jesús. ¿Qué vería San Juan en ese Hombre? para para acompañarlo en su entrada triunfal en Jerusalén ¿Qué vería San Juan? para intentar defenderlo en el Huerto de los Olivos cuando intentaban apresarlo ¿Qué vería en el nazareno? para acompañarlo por el camino de la Amargura mientras lo insultaban y le escupían, sin miedo a ser herido ¿Qué vería en el Cristo? para estar bajo sus pies cuando muere en la cruz ¿Qué vería San Juan en Jesús? para correr desesperado para ver el sepulcro vacío ¿Qué es lo que vio? para negarse a sí mismo y seguir al Señor
Pensando un poco, me viene a mi memoria lo que ha cantado nuestro querido coro en algunas ocasiones para la Fiesta de su Patrón el 27 de diciembre ¿Será aquello lo que movió a San Juan a dejar su vida cómoda? ¿Será la razón por la que crecemos? ¿Será la razón de nuestra fortaleza? ¿Será la razón de nuestra alegría? ¿Será la razón por la que nos enamoramos? ¿Será la razón por la que perdonamos? ¿Será la razón por la que estamos hoy aquí? ¿Será la razón de todo lo que existe? ¿O simplemente será la razón que mueve al mundo? Si aún no sabes de lo que hablo, por aquello por lo que San Juan lo dejó todo para seguir a Jesús, no importa, no te preocupes, solo has de recordar que... la Biblia lo dice, San Pablo lo repite..., búscalo y verás..., en el capítulo cuarto..., Versículo ocho..., Primera de Juan
DIOS ES AMOR
Paz a los hombres que ama el Señor, hermanos en Cristo, buenas noches a todos, perdonadme si no comienzo con las presentaciones protocolarias típicas de este tipo de actos, pero como me conocéis sabéis que prefiero los saludos mucho más sencillos y cercanos. Espero que sepáis perdonarme mi escasa habilidad para escribir algo que esté a la altura y que tengan un mínimo de sentido, aun así intentaré poner todo mi corazón en las pocas palabras que saldrán de mí esta noche. Agradecer como no podía ser de otra manera a mi hermano Juan sus palabras de amistad, sobrevalorando mí persona por el cariño y admiración que nos profesamos mutuamente. Gracias de corazón Juan, mi hermano, como decía San Agustín... “si precisas de una mano, recuerda que yo tengo dos”. Después de la presentación de nuestro querido Juan, después de su magnífica exaltación del pasado 23 de noviembre de 2013 ¿yo ahora qué Digo? Más allá de todo esto, el motivo principal de estar esta noche aquí, no es otro que el de conmemorar los 10 años que han pasado desde la aprobación de los estatutos internos del Grupo Joven de nuestra cofradía y que mejor que hacerlo que con una exaltación de agradecimiento a quien ayuda a este grupo de jóvenes en su día a día dentro de la vida de la hermandad, que no es otro que nuestro titular SAN JUAN EVANGELISTA, su patrón y el de los jóvenes cofrades. Quién nos lo iba a decir Fernando, cuando nos metimos de lleno en esta aventura que llegaríamos donde estamos hoy. Recuerdo que cuando me propusiste ser el presidente yo al principio no quería serlo. mucha responsabilidad, sentía que no estaba preparado para llevar a cabo dicha labor, pero como a cabezorro no te gana nadie, y los caminos de Dios son inescrutables... conseguiste convencerme y seguimos adelante y de lo que pensábamos que sería algo de unos meses, se han convertido ya... en casi 10 años. Atrás queda esa junta de la mañana del sábado 7 de marzo del 2009 en el que 7 jóvenes de la cofradía nos reuníamos en el salón de actos de la casa de hermandad para elegir el primer presidente y la primera junta de un grupo Joven en nuestra cofradía, con un reglamento interno propio que explicase como funcionar en el día a día. Para nosotros fue todo un logro este comienzo, y la ilusión se disparó al ver como cada día que pasaba nuevos hermanos se sumaban a este ambicioso proyecto.
Atrás queda el batacazo que nos dimos con esa caseta de feria antes de que empezara todo, no se cómo después de eso, la Junta nos siguió apoyando, porque la verdad, era para que nos hubieran echado de la cofradía. Sin duda la confianza que nos otorgó la Junta de Oficiales de aquel momento fue crucial para que el Grupo Joven siguiera adelante. Atrás queda también el Primer Encuentro Local de Jóvenes Cofrades en nuestra Baeza, con más de 60 jóvenes de toda nuestra Semana Santa y el hermanamiento con el Grupo Joven de la Vera+Cruz de Alcalá del Río, fueron tres días inolvidables. También queda ya atrás, la consecución de nuestro guion, una anhelada y ansiada ilusión que al final se hizo realidad y cuyo reverso refleja el espíritu de este Grupo Joven “Que los Jóvenes alaben en Nombre del Señor”. De la misma manera, se ha conseguido una túnica de nuestro Patrón San Juan, que luce dignamente en cada Madrugada del Viernes Santo, la restauraciones de nuestras imágenes titulares costeadas algunas de ellas por el Grupo Joven, donativos a Cáritas, varias quedadas para realizar la Lectio divina ante nuestros sagrados titulares, adoraciones al Santísimo, charlas de adviento, encuentros de jóvenes cruceros con nuestros pequeños viajes por toda la geografía andaluza para representar a la cofradía en los encuentros nacionales, en el que hemos conocido otras formas de trabajar y vivir la Semana Santa, alfombras al Santísimo, montajes de altares para San Juan, montajes del Belén navideño y en especial haber compartido la fe de una manera tan especial en la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid en el año 2011. Todos los que vivimos esos dos días sabemos que marcó un antes y un después a la hora de vivir nuestra fe. Compartir el amor de Dios con cada uno de aquellos jóvenes quedará para siempre grabada en nuestra memoria, ya no solo por el calor sofocante a la llegada, la tormenta en la tarde noche que cortaba la respiración, sino porque se sentía muy cerca la presencia del Señor, las colas en las capillas con la presencia del Stmo. Sacramento, las confesiones rodeadas de la multitud, el silencio sepulcral en la adoración con 4 millones de personas, los ochios y las empanadillas de Toni, la sombrilla azul de Antonio Quel su carrera tras el camión de los bomberos, el amanecer con el sol en el horizonte, son imágenes que han quedado grabadas en nuestra memoria y que estoy seguro fueron claves para que hoy estemos aquí. ***
EL AMOR Y yo como toda esta noche me sigo preguntando, ¿Cuál es el motor qué nos mueve a conseguir con tantas insistencia todo esto? ¿No será lo mismo que movió a San Juan a seguir al Señor? ¿ No será el amor de Dios la gasolina que engrasa la maquinaria para que todo salga adelante? “Queridos hermanos, amémonos unos a otros, ya que el amor es de Dios y todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. Quien no ama no ha conocido a Dios, porque DIOS ES AMOR”. El amor del que nos habla san Juan en su textos, es el amor que todo lo puede y todo lo alcanza. El amor de Dios que no está en las grandes obras del hombre, sino en las cosas que no se ven a simple vista, ¡pero están ahí!, en las pequeñas cosas de la vida que provienen de Dios y que nos encontramos en el día a día, “Hijos, les escribo porque sus pecados han sido perdonados por el nombre de Jesús. Padres, les escribo porque ustedes conocen al que existe desde el principio. Jóvenes, les escribo porque ustedes han vencido al Maligno. Hijos, les he escrito porque ustedes conocen al Padre. Padres, les he escrito porque ustedes conocen al que existe desde el principio. Jóvenes, les he escrito porque son fuertes, y la Palabra de Dios permanece en ustedes, y ustedes han vencido al Maligno. No amen al mundo ni las cosas mundanas. Si alguien ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, la codicia de los ojos y la ostentación de la riqueza—no viene del Padre, sino del mundo. Pero el mundo pasa, y con él, sus deseos. En cambio, el que cumple la voluntad de Dios permanece eternamente”. Al escuchar estas palabras de la primera carta de San Juan, pienso…,y veo que el amor lo podemos encontrar donde menos los esperamos, como por ejemplo:
En la buenas noches que te da tu mujer antes de acostarse, En el beso que te da tu madre antes de irte de su casa, En el ‘¡Papa!’ con el que te llama tu hijo chico cuando juegas con él En la sonrisas de unos novios cuando se ven antes de que comience su boda, En los cincos euros que te da tu abuela cuando vas a verla a su casa, En el abrazo que te da tu amigo que vive fuera y viene a verte, En la alegría con la que te recibe tu perro cuando llegas a casa, En la mano que te da tu nieto para que lo lleves a ver al Señor, En el ramo de flores que te llevan cuando estás enfermo, En el “ya verás como todo se soluciona” cuando hay una situación difícil, En el “el yo creo en ti” cuando ni tú mismo crees que eres capaz, En el café y la manta que te calienta en una noche fría de nochebuena, En los buenos días de tu vecina por las mañana cuando barres la puerta de tu casa, En el despertar de un niño cuando se despierta en la mañana de reyes, En la flor que florece de la maceta que riegas, En perdón que le das a tu hermana cuando te quita tu ropa del armario, En el aceite obtenido de cada oliva recolectada en cada campaña de aceituna, En los churros con chocolate de los domingos por la mañana, En la colonia de tu cumpleaños que te regala tu hermana, En el donativo que das cada primer domingo de mes a cáritas, En el sol que te da en la cara y te calienta en una fría mañana, En la paz que te da tu párroco en el día del Señor …….. ¡Decidme si no es verdad que el amor de Dios está ahí!
Pero sin duda el más especial entre todos ellos, como no podía ser de otra manera es el amor entre una MADRE Y SU HIJO. Como será de bonito este amor, que hasta Dios quiso tener a su Madre. La madre que te ha amamantado, la madre que te cuida, la madre que te protege, la madre que te guía, la madre que te quiere y te ama, no hay amor del hombre más perfecto que el de María, y por eso María es perfecta, como no podía ser de otra manera, sin Mancha, Inmaculada, Pura, Humilde, Llena de Gracia, Generosa, Aurora Madre Dios, ¡La Obra Maestra de Dios! la obra maestra de la creación ES ELLA Y SOLO ELLA y Jesús antes de morir en la cruz nos la regaló, nos regaló a su Bendita Madre, y nos la entregó a través de su discípulo amado, JUAN, porque sabía que siendo ella la Estrella que nos Guía, y amando como María, No se puede llegar a otro lugar que no sea al mismísimo Corazón de Jesús.
LA ILUSIÓN Y siguiendo a María el Grupo Joven creció, creció con ilusión, con mucha ilusión, no perdáis nunca la ilusión, poned toda vuestra voluntad en lo que hacéis, todo el mundo aunque no lo parezca puede aportar mucho a nuestro Grupo Joven y a nuestra Cofradía, Solo debéis ser conscientes de que vosotros podéis cambiar y mejorar la hermandad, para que todo el que llegue sepa que esta es su casa, la casa de Dios, con las puertas abiertas de par en par. El valor de una hermandad no es su patrimonio, ni salir esplendorosa a la calle o que nos vea mucha gente, El gran valor de una hermandad son sus hermanos y las personas que las componen, es la vida cristiana y la convivencia que se realiza a lo largo del año y ver que los hermanos participan de ella con armonía y alegría. No hay mayor recompensa ni satisfacción que la de ver como esta familia de la Vera+Cruz crece año tras año, y eso se consigue abriendo nuestro corazón a todo aquel que quiera conocer al Señor dentro de nuestra hermandad, Sin tener en cuenta si lleva muchos años o pocos, si viene a ayudar mucho o poco, hay que dejar a un lado nuestros egoísmos, nuestras pretensiones, y caminar juntos, siempre juntos, con humildad y dispuestos a servir a los demás, dejando que el amor del Señor nos guíe. Como decía el Santo Padre Francisco: “prefiero a una familia que una y otra vez intenten volver a empezar a una familia y una sociedad obsesionada con el lujo y el confort” “Prefiero una familia con rostro cansado por la entrega a familias con rostros maquillados que no han sabido de ternura y compasión” POR TANTO, Si no somos capaces de servir a los demás, no tenemos nada que hacer aquí y de nada habrá servido todo lo que hayamos hecho hasta ahora. Así que, que nos falte nunca la ilusión, ilusión por ver a nuestros jóvenes ensayando con su tambor en las tardes de cuaresma por el barrio monumental, ilusión en los ensayos de nuestros costaleros, para que cuando llegue la Madrugada, sean los pies del Señor y la Virgen de la Aurora, caminando por las calles de Baeza como solo ellos saben. Tengamos ilusión de ver a nuestros pequeños cantarle al Señor con el corazón, en su ensayos del coro, ilusión por nuestros jóvenes cuando se ponen perdidos haciendo una alfombra para alabar al Señor el día del Corpus Christi, ilusión en nuestras bordadoras, que derrochan su amor en cada puntada de hilo fino de oro, ilusión en nuestros hermanos, para que sean felices y conozcan a Dios a través de la devoción de la Santa y Vera Cruz, ilusión por nuestra casa de hermandad para que sea el centro de nuestra convivencia y armonía entre todos los cruceros, ilusión por nuestros cultos a Dios, que sirvan de alabanza y para glorificar al Señor, ilusión por nuestra parroquia y en nuestro párroco para que sigamos fortaleciendo nuestra fe y nuestra comunidad cristiana. Ilusión por nuestro Grupo Joven para que siga siendo semillero de cruceros. Ilusión por nuestra Junta de Gobierno para
que seamos servidores del prójimo y de Dios, transmisores de la buena noticia y la alegría de ser cristianos, Ilusión en nuestros mayores, todo un ejemplo de esfuerzo y superación tras el legado que nos han dejado. En definitiva, tengamos ilusión en esta gran familia de la Vera+Cruz, en nuestra Cofradía, esa que nos ha visto crecer y que nos ha regalado tanto a lo largo de nuestra vida. EL SUEÑO Y de la ilusión al sueño, porque la ilusión es lo que nos permite soñar con ser mejores cada día, soñar con una vida mejor, soñar con lograr nuestras metas. La verdad es que a mí me gusta soñar, y en días como hoy, en noches de cuaresma, cuando me voy a casa, me meto en la cama, las luces se apagan, el silencio se hace presente y me quedo solo con el Señor, hago mi oración y comienzo a soñar. Sueño con el reloj de mi móvil marcando las tres de la madrugada poniendo fin a la espera ansiada, Sueño con ponerme mi camiseta de costalero, con lema “Toma tu Cruz y Sígueme” a la espalda, Sueño con colgarme la medalla de la cruz verde que cae sobre mi pecho y me acompaña, Sueño con mi faja negra que siempre me abraza, mi fiel amiga, mi cirinea, Sueño con las calles de Baeza que guardan silencio después de una tarde de sagrarios y Semana Santa, Sueño con la luz que se cuela por óculo de santa cruz y que nos guía hasta donde estás tú, Sueño con ver las primeras túnicas de sarga marrón y terciopelo negro que bailan al viento cuando huelen a incienso, Sueño con atravesar las maderas añejas de las puertas de Santa Cruz y encontrarme el pan de oro de tu trono que te sostiene abrazado a la cruz. Sueño con levantar mi cara y poder contemplar el amor de tu mirada, Sueño con los primeros sonidos de las espinaqueras, que me recuerdan tu dolor y tu pena, Sueño con mi amiga la trabajadera, esa pesada pero inseparable y dulce compañera. Sueño con la luz de esas velas que te acompañan en la fría y oscura madrugada, Sueño con tu corona de espinas, que te besan la frente cuando tu sangre se derrama,
Sueño con abrazar el madero de la cruz como el cirineo que sigue tus pisadas. Sueño con el terciopelo rojo bordado, que te da calor ante el frio de mi pecado, Sueño con esas mejillas rosadas que son dos flores donde ya no queda nada, Sueño con tus ángeles plateados que te miman y te perfuman esa cara inmaculada Sueño con tu corona de reina que resplandece más que la luna plateada Sueño con tu corazón traspasado, del que brota el más puro amor y es el fuego dorado, Sueño con el nombre sobre tu pecho, que brilla más que el sol cuando duerme en tu lecho. Sueño con el pañuelo chico en tu mano, donde la pena se ahoga y se acaba ‘to’ lo malo. Sueño con subirte al cielo y que los que está contigo puedan cumplir su anhelo. Sueño con los primeros rayos de sol que cuando amanece te van buscando para darte su amor. Sueño con ser San Juan, y así poder estar a tu vera en cada primavera PORQUE ME GUSTA SOÑAR, COMO SAN JUAN JUNTO LA AURORA, DONDE MI SUEÑO SEA SIEMPRE SER CRUCERO ANTES AHORA Y HASTA EL DÍA QUE ME MUERA. Viva la Vera+cruz y que los jóvenes alaben el nombre del Señor.