8ª ENTREGA Al igual que con la 6ª entrega no es necesaria ninguna introducción para esta 8ª, más fotos de aviones, personajes y otras misceláneas, que conforme abundamos en la búsqueda de datos van apareciendo. TEMBLEQUE Y LA AERONÁUTICA (VII) GALERÍA FOTOGRÁFICA (AVIONES Y OTROS) En esta ocasión comenzaremos con fotografías que recogen a los protagonistas de la época. Alguna de estas ya han aparecido en otras entregas, pero de esta forma y sumando la entrega 6ª tendremos recogidas todas las fotos de que, a día de hoy, disponemos NUTRIDO GRUPO DE PILOTOS FORMADO TANTO POR ESPAÑOLES COMO RUSOS Por su indumentaria con seguridad eran pilotos, pero además lo que está claro era que frio no pasaban.
A pesar de la baja calidad de la imagen, se puede apreciar y distinguir los diferentes componentes del Traje de Vuelo
Con el coche preparado, Âżpara ir a Tembleque?. Nuestros mayores quizĂĄs vieran, por nuestras calles, alguno de estos personajes y estos coches
Esta fotografía ya la reprodujimos en su día, pero hoy podemos aprovechar para ver algún detalle más: 1º.- La cara sonriente del cliente nos puede indicar que el barbero era de fiar, pero, por otro lado, también parece que aparta la cara, ¿sería que no se fiaba?. 2º.- Se puede apreciar como en el empenaje de cola está colocado el Traje de Vuelo, lo que nos puede indicar que el cliente era el piloto del avión.
Otra foto más ya recogida anteriormente. ¿Porqué no puede ser Tembleque?, dado que por ella sabemos que corresponde a Pilotos de la 4ª Escuadrilla de Katiuskas, estamos investigando para saber si ésta fue de las que pasaron por “casa”
Aunque no lo parezca también son pilotos de los de entonces, solo que esta vez parece que estaban listos para salir y no a la guerra precisamente
Por esta fotografía debemos pensar con total seguridad que el ambiente que reinaba en este grupo de pilotos era francamente bueno. Si no ¿de qué se reían?.
Fuera lo que fuera lo que estaban viendo, les estaba gustando y teniendo en cuenta hacia donde miran, si dejamos volar a la imaginación, podrían estar disfrutando de las evoluciones (acrobacias) de un avión. ¿Por qué no?
Reponiendo fuerzas junto al I-16. El I-16 fue el sucesor del I-15 (Chato) comparando fotos anteriores del Chato se aprecian las principales diferencias visibles: Avión monoplano en lugar de biplano, carenado del tren de aterrizaje y carenado del motor. Lo que no se puede apreciar es que este nuevo modelo tenía un motor más potente lo que le daba mayor velocidad y le permitía volar a mayor altura. Hablando de altura, si os fijáis en esta foto y en las anteriores de los Chatos se ve que la cabina no va cubierta, es decir el piloto iba al aire libre, por ello las indumentarias que hemos visto, debían protegerse del aire y del intenso frio que hace por ahí arriba.
Aquí podemos ver a un grupo de pilotos que debían estar preparando la siguiente misión, repasando el mapa de donde tuvieran que ir y concretando detalles.
No es que la foto saliera oscura, como reza a pié de foto es un grupo de pilotos de vuelo nocturno, que mejor manera de demostrarlo que haciendo la foto de noche. Sería porque de día estarían durmiendo, por aquello de los turnos.
Pilotos y mecánicos posando delante del Chato. Podemos apreciar como el Chato tiene acoplado el arrancador, que ya conocimos en entregas anteriores, lo que nos permite deducir que o bien era un avión de alarma (para salir a volar a petición en el menor tiempo posible) o bien su despegue ya estaba previsto y aprovecharon la ocasión para inmortalizar el momento.
En este caso está claro que solo pretendían dejar su imagen para la posteridad.
Impactante instantánea. Por muy bajito que fuera el piloto, y no lo aparenta, el Chato visto desde el frente y tan cerca debía ser espectacular. No sabemos donde fue sacada la fotografía, pero porqué no en Tembleque. Por la leyenda de la foto parece ser que, en aquellos años, tocar la hélice del avión daba mala suerte.
Piloto preparado para la puesta en marcha en su I-15 Chato
Otra imagen mĂĄs donde apreciamos el gran tamaĂąo de este pequeĂąo caza. Si nos fijamos bien en la foto podemos apreciar, en la parte frontal de la cabina (saliendo del cristal), el colimador (aparato para hacer punterĂa).
En la fotografía anterior apenas apreciábamos el colimador, en esta instantánea lo vemos con claridad. COLIMADOR GALILEO DEL I-15 CHATO
Grupo de mecánicos revisando y preparando el avión para su próxima misión
Una vez preparado el avión, porqué no por los mecánicos de la foto anterior, el piloto se dispone a subir e iniciar el vuelo. Podemos apreciar donde se colocaba el paracaídas, no es que fuera en la zona más noble del cuerpo, pero además de paracaídas en esa posición servía de “mullido” asiento.
Otra instantánea más donde vemos al piloto dispuesto en su cabina
Vista interior de la cabina del Chato, sencilla y con la imprescindible instrumentación, notar la “palanca de mando” tan singular y la pequeñez de la propia cabina.
Arrancador listo, preparados para puesta en marcha. ¿Esperando al Piloto?
Este I-16 no termino bien. A esta posición se la conoce con el nombre de “caballito”, esto ocurría debido a que el motor del avión era muy pesado y al aterrizar si había algún problema y había que frenar de manera brusca o más fuerte que lo habitual el avión tenía tendencia a hincar el morro.
La siguiente fotografía nada tiene que ver con la aeronáutica, tema principal de los artículos publicados hasta hoy, pero si tiene que ver con Tembleque. Porqué, pues quizás la siguiente fotografía nos aclare el motivo.
Esta formación corresponde a la Columna Fantasma presentada en la foto anterior. ¿No reconocemos el lugar?. Pues sí, muy probablemente sea el edificio aledaño a la Casa de las Torres, hoy desaparecido y que estaba en donde actualmente se encuentra el parque situado entre dicha casa y la Residencia de Mayores.
Ya para ir terminado esta, de momento, última entrega, otras cuantas fotos de aviones. Bombardero SB-2 Katiuska. A pesar de la poca calidad podemos observar, la torreta frontal del ametrallador y la regilla de los motores.
En esta otra apreciamos con mayor claridad lo que mencionábamos antes, nido de ametralladoras y regilla de los motores. Pero verdaderamente curioso es la escalerilla que está colocando el mecánico para acceder a la posición del artillero del morro.
Este modelo de SB-2, es como ya dijimos en su día, la versión A (SB-2A) del modelo anterior. Se aprecia la gran diferencia en sus motores, como podéis notar totalmente distintos al modelo SB-2 (hélice tripala y tobera de admisión de aire). Imaginamos que habría muchas más diferencias, pero a simple vista son las más llamativas
Para finalizar dos últimas instantáneas. La primera de nuestro amigo y vecino NATACHA
Y LA DE CIERRE UNA BONITA FORO AERÉA SI BIEN LOS PROTAGONISTAS NO CORRESPONDE A NINGUNO DE AQUELLOS AVIONES QUE SUPONEMOS ESTACIONARON EN NUESTRA CASA
Espero y deseo poder seguir aumentando los conocimientos sobre el mundillo aeronáutico de Tembleque, si así sucede reanudaremos la publicación que hoy, a falta de documentación, nos vemos en la obligación de concluir.
Gracias a todos por vuestra consideración y por el tiempo que habéis dedicado a seguir las diferentes Entregas publicadas.
Por último nuestro profundo
agradecimiento al
ARCHIVO HISTÓRICO DEL
EJÉRCITO DEL AIRE, piedra fundamental y casi única, en la aportación de la documentación gráfica y escrita que ha permitido la confección de la Historia Aeronáutica de Tembleque.