PUBLICACIONES
VIOLENTAS Tercera ediciรณn, 25 de noviembre 2020
QUIร N SOY / QUIEN SOY
QUIร N SOY / QUIEN SOY Relatos de mujeres comunes y corrientes que colaboran con la revista. Ediciones violentas. Ediciรณn y diagramaciรณn digital: Vivian Violenta. Gracias por leernos.
Este obra estรก bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Foto portada: Photo by I.am_nah on Unsplash Foto contraportada Photo by How-Soon Ngu on Unsplash
¿Y si nos presentamos? Esta tercera publicación será como leer la primera parte del diario de vida que llenábamos de forma solemne cuando niñas, con un lápiz y una caligrafía que estuvieran a la altura, donde exponiamos para nosotras (y quizás para alguna madre intrusa) quiénes éramos. Nuestros nombres, nuestros gustos, deseos y pesadillas. También pienso en la hoja del anuario del colegio, donde a otres les tocaba definirnos y luego llega a mi cabeza el impoluto currículo; una tradicional y políticamente correcta descripción de quienes somos, en un ámbito de nuestras vidas. ¿Has tenido la posibilidad de decirte quién eres? Tal vez en alguna rueda entre amigas, cuando estás conociendo a una mujer que te deja hablar de tu vida sin interrupciones, porque ella sabe lo importante de ese momento. Pero pensarlo con tiempo, para luego escribirlo… Hebe Uhart dice que no hay escritoras, hay personas que escriben y en este tercera revista de Publicaciones Violentas así lo creemos. Diversas mujeres de distintas áreas han retratado en palabras la pregunta QUIÉN SOY. Desde nuestras individualidades hasta lo colectivo. Carmen Mantilla expone
que “detrás de cada una de nosotras existe un crisol de posibilidades” y hoy tenemos la fortuna de expresarlo. “Quienes somos” es una invitación a reflexionar sobre nosotras mismas, a ponernos frente a un espejo y preguntarnos, a hablar con nuestra consciencia, criticarla y amarla. Desde la honestidad y con humor, ojalá con cero pudor, podamos tejer los textos que nos presentan de una vez por todas en el contexto actual. Muchas de nuestras ancestras jamás tuvieron esta oportunidad así que esto también reivindica su obligado silencio. Esta revista colaborativa será una pequeña muestra de quiénes éramos hoy, 2020, pandemia incluida. Imagínense leernos en diez años más y volver a hacer este mismo ejercicio.
YO EN ESTE GRAN PROCESO FEMINISTA:
REDESCUBRIENDO LA HISTORIA DE LAS MUJERES EN LA HISTORIA
Jessabel Leticia Guamán Flores
La primera vez que oí la palabra o mejor dicho el concepto feminismo, tenía 19 años, fue en la clase de Mundo Clásico, a cargo de la Dra Marcela Cubillos Poblete, que venía de haber estudiado en Europa su doctorado, me llamó mucho la atención sus fotos de viajes y la edad que se fue a vivir al extranjero y la admire por su gran inteligencia y dije” cuando sea profe me encantaría ser así de seca que la profe Cubillos”, ella nos mostraba la historia del mundo antiguo desde la historia de las mentalidades, social y del arte, muy diferente a esa visión escolarizante donde solo se nombraba Grecia y Roma, desde las instituciones, mitología (Zeus: dios principal) y la sociedad en estamentos, ese era mi primer año en la carrera de pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena. Mi reacción fue buscar qué era, ¿a qué llamaban feminismo? encontré la típica definición : “1. m. Principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre.2. m. Movimiento que lucha por la realización efectiva en todos los órdenes del feminismo.” de la RAE. Estas definiciones me dejaron con las mismas dudas, entonces en la biblioteca de la universidad, busqué en el catálogo de libros, feminismo y habían varias copias del Libro el Segundo Sexo de Simone de Beauvoir, lo pedí y comencé a leer, me sorprendió la cantidad de hojas cuando me lo entregó la bibliotecaria, pero a su vez un gran desafío. Mientras iba en la micro, comencé a leer y entre páginas
la autora señaló :”No se nace mujer, se llega a serlo”, esta frase, fue gatillante para continuar leyendo y descubriendo que el ser mujer, siempre ha sido una figura histórica invisibilizada que a su vez ha estado observada y categorizada por mandatos del patriarcado, dentro de la construcción histórica otros han hablado por ellas, porque quienes escribieron la historia hasta el siglo XX, los hombres de élite, visualizados como grandes héroes que han sido los únicos en lograr cambios trascendentales para la historia de la humanidad, y las mujeres en estos procesos los acompañaron solamente, me recuerdo a Micaela Bastidas, Janequeo, Javiera Carrera, Paula Jaraquemada, Octavia y Justiniana entre tantas más; con excepciones como Juana de Arco e Isabel I (la llamada Reina Virgen en Inglaterra), su biografía está marcada por los prejuicios de la época y la decisión imperiosa de que debía dejar heredero, y casarse, acto que no realizó, en el caso chileno la Quintrala, “mujer malvada, que según contaban, mató a su padre, esposo y cientos de esclavos, acusada hasta de hechicería” durante la colonia, esta visión negativa la hizo el historiador Benjamín Vicuña Mackena, que tomó las leyendas y escribió un libro sobre la
Fotografía desde Twitter @todoslosdiasson8
Familia Lisperguer y la Quintrala, identificando a esta mujer de forma negativa, es más en plena dictadura se expusó la historia de la Quintrala en una teleserie que fue un éxito del momento, y basándose en estas investigaciones. Hoy sabemos que la Quintrala se comportaba igual que cualquier otro hacendado hombre, solo que en los siglos coloniales, las mujeres debían obediencia a sus padres, esposos y si quedaban viudas a su hermano, hasta hijos y no era independiente en ninguna esfera. Dentro de las primeras proclamas de la primera ola del movimiento feminista en plena revolución francesa, las mujeres burguesas exigían la independencia social, economica y cultural en la viudez, pasaron varios siglos para conseguirla, pero podemos leer el gran manifiesto de Olympe de Gouges, autora de la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana donde estaba esta y otras exigencias como la educación. En la historia de Chile, como olvidar al MEMCH (El Movimiento Pro-Emancipación de las Mujeres de Chile) que nació entre 1935-1953, su objetivo: “La lucha por la igualdad jurídica y política y por el acceso paritario al mercado laboral entre hombres y mujeres” su historia y estudio recién han sido profundizados a mediados del siglo XXI, y cómo provocó un cambio en todo Chile y en sus colaboradoras como Elena Caffarena, Olga Poblete y Amanda Labarca. Hoy en el 2020, no podemos dejar atrás los siglos de luchas, cambios y sobre todo violencias que vivimos las mujeres a cotidiano, aún nos matan, invisibilizan y nos caricaturizan desde estas construcciones sociales que se han creado desde la colonialidad, la idea de progreso, modernidad, amor romántico y cultura de la violación, donde no existe les otres sino solo uno, es por ello que las
mujeres debemos combatir unidas en sororidad y destruir todas las imposiciones e historias de nuestras antepasadas como accesorio o negativamente sino revalorar lo que hicieron, también por las que fueron calladas y asesinadas en el presente, por ejemplo los casos de: Antonia Barra, Ambar Cornejo, Norma, Anaís y más. Por todes ellas y las niñas del hoy y futuro reconozcamonos en este proceso, auto eduquemonos, escuchemos, participemos y abracémonos. Para que nuestras voces sean miles porque el territorio es y será feminista si nos unimos todas. Bibliografía “MEMCH.” Memoria Chilena, http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-3611.html. (*)Magíster en Historia, Diplomada en educación, memoria y ddhh y en Lingüística y Culturas Indígenas. Universidad de Chile. Profesora de Estado en Historia y Geografía. Universidad de La Serena.
SOY
Andrea Hoces Maldonado
Soy mis ancestros, mi madre y mi padre, la magia y la estructura honesta. Soy rural, soy Peumo, Pichilemu, el campo y la playa, soy un pequeño bosque. Soy el matriarcado Maldonado, soy inmigrante Hoces. Soy Andrea, una mujer valiente; soy Andrea Carolina, un sueño de mi hermana. Soy mis amigas y amigos. Soy siempre acción. Si fuese un tiempo verbal, presente. Soy, estoy, no le soy indiferente a la gente. Soy vegetariana, soy persona, soy humana, soy naturaleza, soy actriz, soy teatrera, soy sensible, soy hipersensible, soy pequeña, soy risueña, soy buena pal shiste, soy buena pal drama, soy de abrazos significativos, soy de manos y pies helados, soy de cuerpo pequeño y corazón de ballena, soy intensa, soy de piernas de botero, soy la cintura de avispa, soy llorona, a veces punky, soy generalmente educada, soy flaite cuando tengo que serlo, soy estudiosa, soy pegada, soy el universo y su conexión, soy como las estrellas y todas las metáforas que puedas sacar de ellas. Soy los 90, soy los 2000, Soy Meredith Brooks y su I'm a bitch, I'm a lover, I'm a child, I'm a mother, I'm a sinner, I'm a saint, I do not feel ashamed, I'm your hell, I'm your dream, I'm nothing in between. You know you wouldn't want it any other way, y también soy Marla Singer entrando a diferentes reuniones -virtuales espirituales- para sanar el alma, soy Laura Pausini en el festival tirando el currículo, pues no solo es cantante, sino artista, ceramista, pinto-
ra, etc. A veces soy Marie Kondo, pero no tan obsesiva por el orden y nunca de ojos chinos, soy de ojos grandes significativos. Soy pachamámica, siempre cerca de la naturaleza, soy un sol que nació en invierno, soy de asoleos, pero también soy luna en piscis, soy de llantos, sentimientos, soy de poco maquillaje, soy de bototos, chalas planas y bananos, nunca tacos ni carteras. Soy retro, análoga, soy la que llega tarde a la tecnología. Soy paranoid andreoid, soy insegura y soy compañía, soy apañe, soy viajera, de aventuras, soy improvisadora, soy la locura, a veces veneno. Soy fuego, agua y tierra como mi carta natal, y espero ser aire con mis ideas. Soy hija, hermana, tía, amikia, soy la shiga, soy rapera, soy rockera, soy cuequera, soy yoga, soy amorosa, soy atenta, soy mi amiga interna, soy mi cuerpo, soy mi alma, soy expansiva, soy lophophora, soy las flores, soy clavel, soy peonía, soy un jazmín español, soy animal, soy como una suricata león, soy pensante, soy elegante, soy misteriosa, soy chistosa, soy poderosa, soy mágica, soy sutil, grande, diminuta. Soy la Andre. Soy una pequeña mujer, soy una pequeña gran mujer. Soy mujerisima po.
Soy yo Cristina Lavín
Mujer, lesbiana, resistencia. Soy mis ancestras, aunque nos las conocí. Soy mi mamá, mi papá y hermanes. Un ser diferente y el mismo a la vez. Depende de quien lo diga. Diferencias que me conectan conmigo y mi alrededor. No me separan. Colecciono amor. Aprendo, y cada enseñanza sigue moldeando este ser. Cambio, me expando, me contraigo, me amoldo, muto y vuelvo a ser lo que siempre he sido, me muevo. Soy movimiento, avanzo, retrocedo, me quedo, me estanco, hay veces que me he quedado más de lo que debí, pero siempre vuelvo a avanzar, Me voy. Siempre me voy. Me interpelo, me exijo, me corrijo, y me permito bajar la guardia, me relajo. Me cuesta empezar las cosas… y también terminarlas, diagnosticada con déficit atencional, desordenada en ideas y en espacios, improviso la vida, espontaneidad que incomoda, soy la procrastinación. Soy optimista, pero puta que cuesta en Chile… A veces me gana el odio, pero se me pasa rápido. Soy caos, soy olvidos, soy mentiras, soy verdades, soy llanto y mucha risa. Observo. Soy violetas, cordillera y mar. Tengo miedo a olvidar y que me olviden. Siento mucho, me lleno de sentimientos propios y ajenos, que me hacen sentir rebalsada pero satisfecha. Soy amiga de mis amigues, intento cultivar los vínculos y mantenerlos vivos. Cultivo el vínculo conmigo misma día a día. Soy música , baile, soy colores, soy brillos. Agua y madera. Soy todo… eso lo sé bien, soy y siempre seré todo.
Los hechos Vivian Díaz Lobos
Un día pillé a un gato chico en la calle y aunque sabía que mis papás me habían advertido que nada más de animales, fui al baño corriendo y me devolví a buscarlo. Hoy lo volvería hacer. Esa soy yo.
Un día llevé a mi abuela al doctor, dos hombres le gritaron en la cara que era cáncer y ella entre lágrimas me miró con terror. Salimos de la consulta y con mi mejor actuación di vuelta el diagnóstico diciéndole que no era cáncer, que era un grano que se iba a extirpar y listo. Hoy creo que fue una excelente decisión.
Un día tenía mucho miedo de ir a cagar al baño porque ese retrete estaba a metros de la casa de mi abuela y el camino no tenía luz, así que decidí cagar en una bolsa de supermercado. Hoy no podría porque ya no dan bolsas.
Un día, después de ver una serie de terror, me dio un dolor de estómago que se prolongó por seis meses. Cuando no aguanté más dejé de comer por seis días, solo bebí agua con limón y jengibre. El último día expulsé dos bolas duras de caca. Hoy ayuno 8/16.
Un día iba caminando y se me cayó el protector higiénico del calzón. Lo recogí del pavimento, lo enrollé, me lo guardé en el bolsillo y seguí caminando. Hoy no uso protectores...a veces ni calzones. Un día, sentada en la puerta de la casa junto a mi hermano, en una noche primaveral, le inventé una historia acerca de un punto que se veía cerca de la luna. La historia resultó ser tan espeluznante que lloró de miedo. Al otro día cobró venganza, entró a mi pieza de noche y me tocó los pies, me puse a llorar pero entendí que estabamos a mano. Hoy lo volvería hacer. Un día llevé a una amiga en silla de ruedas al doctor. Nunca había tenido que empujar una de esas sillas por las calles de Santiago, tampoco tomar taxi y subir escaleras. Sentí una adrenalina especial, era como estar en una película. Hoy escribí un guion.
Un día fui CM y escribí un tweet que se hizo viral negativamente. Me echaron de ese trabajo pero cuatro años después volví con otro cargo a cerrar un ciclo. Hoy no dejo nada abierto.
Fragmentos en La Florida Un día entendí que por falta del elemento tierra en mis signos zodiacales, soy terrible para afrontar cambios, sobretodo si son de territorio, pero aquí estoy, en menos de un año viviendo en dos continentes. Un día en el colegio un compañero me dijo que yo era fea. Otro día, diez años después, el mismo compañero me estaba invitando a un motel y sin ánimos de venganza, lo dejé en visto. Hoy le avisaría a la esposa. Un día me gusta mucho el fútbol, hoy no. Un día pienso que siempre votaré por la concertación, hoy nunca más. Esa soy yo. Un día creo que Dios no existe, hoy no sé. Un día pienso en volver a Chile, adoptar muchos perros y vivir de mentiras, hoy puede ser. Un día quiero ser lesbiana, hacer un trio y compartir mi vida amorosa con más gente. Hoy, ¿por qué no? Un día creo que tengo el síndrome de la impostora. Hoy, por supuesto. Esa soy yo. Un día quiero dibujar, hacer una historieta gráfica, hacer un blog de cine, ver películas de europa del este, escribir un guion y enviarlo a la productora Deseo a ver si Almodovar se enamora de mi como yo de él, hacer pulseras para vender a un precio justo, terminar de escribir todos los word de drive que tengo abiertos y subirlos a mi blog, ir y limpiar la cocina con cloro por todos sus recovecos, hacer ejercicio como en Auckland y dejar de comer papas fritas. Un día me miro al espejo y veo que soy la mujer más hermosa. Otro día me miro y no me reconozco, Esa soy yo y también sé que eres tú.
- Mamá ¿Quién soy? - Eres mi hija - Pero mírame como a una humana más, ¿quién soy? - Déjame ver. Eres alta y hermosa. Grande y pareciera que cada vez que pasan los años te expandes más, tu voz se hace más presente, tus movimientos son más ondeantes, tu forma de ver el mundo es una guia, a veces eres más madre que hija. Pero también eres hiriente y dueles cuando te vas sin dar respuestas, eres destrucción, eres una tormenta. Cuando te fuiste de la casa sin dar un abrazo, cuando me golpeas con tus palabras racionales acerca del amor y la belleza. A ver date una vuelta. Eres una mujer admirable, todas mis amigas quieren una hija como tú. Te llevo como un prendedor en mi corazón y siento los halagos por tu delicadeza e inteligencia. ¿Quién eres? una humana sensible, amorosa, que cuenta sus historias con gracia y nos hace reír en la sobremesa. Eres una parte de mí, de tu hermana, de tu sobrina. Eres un conjunto de atributos que te hacen alguien especial y una pieza fundamental para nuestras vidas. No me importa que no seas lo que otros quieren que seas, a mi me ha bastado con quien eres hasta hoy.